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Asociacin Latinoamericana de Estudios de Asia y frica
XIII Congreso Internacional de ALADAA
La nueva poltica exterior
japonesa
La poltica exterior japonesa y su estrategia hedging para con China
Lluc Lpez I Vidal
Sobre el autor: Lluc Lpez i Vidal es politlogo y doctorando de Relaciones
Internacionales (UAB), es profesor asociado de la UPF, donde imparte la asignatura
"Sistema poltico y sociedad en Japn" y profesor de relaciones internacionales de la UOC
en el Programa de Asia Oriental. Ha complementado sus estudios en la Universidad
Humboldt de Berln, y en el Instituto Pushkin de Mosc. Aparte de la tareas acadmicas,
ha estado realizando investigaciones sobre los procesos de cooperacin y de integracin
interregional entre Asia Oriental, Amrica Latina y la UE y forma parte de un grupo de
estudios sobre Asia Central.
Resumen:Cul es la estrategia de seguridad adoptada por Japn ante el ascenso
imparable de China, de equilibrio, bandwagoning, u otra opcin an no apuntada por los
tericos?
A pesar de la vasta literatura sobre el ascenso de potencias, ninguna de las respuestas
esgrimidas por realistas o liberales nos resulta satisfactoria para el caso japons. La opcin
que aqu proponemos es que Japn, an en el proceso de definicin de una nueva poltica
exterior para el siglo XXI, ha decidido seguir una "estrategia hedging"; una suerte de
estrategia dual que por una parte pretende optimizar los beneficios de la interdependencia
econmica entre ambos pases pero que al mismo tiempo tambin se muestra consternado
ante los peligros que el ascenso de China entraan. Aunque Beijing es probablemente la
amenaza militar ms preocupante para Japn, no ha sido reconocido como tal para evitar
tensiones entre ambos pases. Japn no est mostrando sus dientes ante China, no est
llevando a cabo una estrategia de bandwagoning, ni se mantiene neutral ante el ascenso de
China.
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La nueva poltica exterior
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La poltica exterior japonesa y su estrategia hedging para con China1
Lluc Lpez I Vidal
1. Introduccin
Con el inicio de la Guerra del Golfo en 1990, Japn empezaba a constatar que la
Doctrina Yoshida, piedra angular de la estrategia de seguridad desde 1955, empezaba a
no ser til para luchar contra los desafos del sistema internacional de posguerra fra.
Desde entonces, hemos asistido a una mutacin del orden internacional que ha tenido
hondas consecuencias para la poltica exterior japonesa y de seguridad. En la ltima
dcada hemos pasado de un posible ataque por parte de los Soviticos, al miedo del
abandono o del entrapment por parte de Estados Unidos, la proliferacin de armas de
destruccin masiva, la constante amenaza que supone el rgimen nuclear en Corea del
Norte, y por ltimo el incierto ascenso de China como potencia de primer orden del
sistema. Es precisamente esta ltima cuestin, el ascenso imparable de China en el
sistema internacional, la que ms preocupacin ha desatado en los ltimos aos en los
pases de la zona, especialmente en el seno del gobierno japons.
Como apuntbamos en un estudio reciente2, en la historia de la humanidad, China
como poder ascendente y Japn como poder descendente, nunca antes haban sido tan
poderosas al mismo tiempo, y como dos carpas en un diminuto estanque, tratan de
sobrevivir en un mundo cada vez ms incierto. Empero, cules son las diferentes
estrategias de las que Japn dispone para enfrentarse a tan magno reto? En ese sentido,
qu respuestas han ofrecido tradicionalmente los tericos de las Relaciones
1 Borrador. No citar sin la autorizacin del autor. 2 Ll. LPEZ i VIDAL, La poltica exterior y de seguridad japonesa, Barcelona, Editorial UOC, 2010.
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Internacionales acerca de cmo los pases se comportan contra los poderes ascendentes?
Muestra la teora coherencia con el caso japons, habida cuenta de la relacin con la
Repblica Popular de la China desde la dcada de los noventa? Por ltimo, es de
menester la construccin de un nuevo modelo terico que explique el comportamiento
de Japn ante el ascenso de China?
En el presente artculo vamos a analizar en primer lugar cmo se comportan los
estados ante el ascenso de nuevas potencias segn la teora de las Relaciones
Internacionales3. Seguidamente, tras identificar las opciones que los tericos han
apuntado tras la llegada de nuevas potencias, vamos a analizar someramente cules son
los elementos ms importantes de las relaciones tanto polticas, econmicas como de
seguridad entre la Repblica Popular de la China y Japn desde la cada del bloque
comunista. Con ello pretendemos explicar cul ha sido la evolucin de unas relaciones
que durante la guerra fra pasaron de ser inexistentes a otras que los analistas han
calificado como diplomacia de la amistad. Por ltimo, propondremos, dada la
limitacin de la teora de las Relaciones Internacionales para resolver dicha cuestin, un
marco terico posible para analizar la estrategia de Japn ante China. Ello nos permitir
reflexionar sobre la ltima de las cuestiones: es dicha estrategia ante China coherente
con la diplomacia japonesa del nuevo siglo XXI?
2. La teora de las Relaciones Internacionales ante el ascenso de potencias
Muchos han sido los tericos que se han cuestionado sobre cmo reaccionan los estados
3 El presente artculo est basado en una presentacin del autor en la British Association of Japanese
Studies en la School of Oriental and African Studies el 9 y 10 de setiembre de 2010 en Londres bajo el
ttulo: Is Hedging against China Possible for Japan? Hedging as a Strategy in Current Japanese Security
Relations with China.
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ante la aparicin de nuevas potencias en el sistema, tanto por lo que se refiere a la reaccin
de las potencias existente, como sobre el efecto que dicho ascenso provoca en el sistema
internacional. Si analizamos con atencin la discusin que dicho problema ha planteado en
el seno de la disciplina de las Relaciones Internacionales, es posible diferenciar dos grandes
paradigmas4 en los cuales los autores de forma consciente o inconsciente se ubican
5, a saber
realismo y liberalismo.
Por lo que se refiere a la primera de las perspectivas, el realismo se ha caracterizado por
entender el sistema internacional como esencialmente anrquico, es decir sin una autoridad
central que la gobierne. Ahora bien, como han insistido la mayora de los realistas, afirmar
que se trata de un sistema anrquico, no significa que sea catico; ms bien el contrario, la
competicin por la supervivencia se convierte en el principio ordenador del sistema. Como
atestigua Sainz6, para los realistas si existe algn orden en el sistema internacional, ste es
el producto del equilibro de poder7, que acta como mecanismo regulador del mundo que
nos rodea. Es aqu cuando aparece el dilema de seguridad8, que el mismo Jervis delimita
como una situacin en la que un estado trata de incrementar su seguridad para asegurar su
propia supervivencia y con ello produce un aumento de la inseguridad en los otros estados.
Conviene mencionar la aportacin que algunos autores nos han brindado en los ltimos
aos desde las filas del neorrealismo como consecuencia con la revolucin behaviourista
4 En estas lneas seguimos la concepcin paradigmtica kuhniana, segn la cual el vocablo hace referencia a principios metafsicos, leyes generales y mtodos de anlisis. 5 Aunque ste no es el espacio para ahondar en el tema, baste recordar que el marco de investigacin general de esta investigacin es el llamado anlisis eclctico apuntado por los autores Katzenstein y Sil. En palabras de los autores, los anlisis eclcticos consciously extricates, translates and selectively integrates components concepts, observations, mechanism, logical principles and interpretative moves- from theories or narratives developed within competing research traditions. Ello implica que este tipo de anlisis permite investigar diferentes mecanismos que operan a diferentes niveles y dimensiones de la realidad social Katzenstein y Sil, 2007. 6 N. Sainz, 1997. 7 El equilibrio de poder o balance of power es uno de los conceptos bsicos del lenguaje realista pero tambin de la disciplina de las Relaciones Internacionales. La utilidad del equilibrio de poder para el sistema internacional segn los autores realistas es doble; por una parte evitar que ningn estado se convierta en el actor que domine el sistema, y por otra asegurar la preservacin de los mismos. 8 Aunque fue acuado por Herbert Butterfield y John Herz, fueron Robert Jervis y Charles Glaser quienes lo popularizaron.
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que irrumpi en la disciplina9. Precisamente la voz cantante del realismo en los ltimos
aos ha sido la de John Mearsheimer , cuyo pensamiento puede encontrarse en su obra The
Tragedy of Geat Power Politics (2001). En dicha obra Mearsheimer explica como los
estados, tratando de asegurar su supervivencia, terminan siempre por desarrollar
intenciones expansivas o hegemnicas, por lo que en palabras del autor the world is
condemned to perpetual great-power competition10
. Adems, siguiendo el argumento del
dilema de seguridad de Jervis, los estados adquieren capacidad militar como mecanismo de
defensa, para atacar o para destruir el enemigo. Ahora bien, cuando los costes de alterar
dicho orden son demasiado elevados, los estados tienden a esperar hasta que los riesgos
disminuyan. Como veremos, dicha afirmacin es especialmente importante en el caso
japons.
Con la intencin de responder a nuestro interrogante inicial de cmo reaccionan los
estados ante la presencia de un nuevo hegemon del sistema, Mearsheimer nos propone
cuatro posibilidades interesantes que conviene explicar: bandwagoning, appeasement,
balancing o buck-passing. Por lo que se refiere a la primera de ellas, cuando los estados
juntan fuerzas con un oponente ms poderoso con la intencin de beneficiarse de los
rendimientos producidos por la potencia ascendente, decimos en teora de las Relaciones
Internacionales que estn adoptando un comportamiento bandwagoning. En este sentido, la
actitud bandwagoning puede entenderse tanto desde el punto de vista de subirse al caballo
ganador11
, como de alinearse con el pas ms poderoso para evitar ser atacado12
.
Por lo que se refiere a la segunda de las estrategias, con la poltica de appeasement o
apaciguamiento se trata de evitar ser atacado por una potencia en ascenso a travs de
polticas conciliadoras que impelen al agresor en una direccin ms pacfica y que lo
9 Con la llegada de la revolucin behaviorista de los aos sesenta y el uso de teoras macro-econmicas, el realismo afianz la idea que los actores eran racionales y unitarios. Ello implica esencialmente dos cosas: por una parte que se comportan en trminos de coste y beneficio y por la otra que se asemejan a bolas de billar duras y compactas, que no se ven influenciadas por los distintos grupos en el seno de una sociedad o estado. 10 J. Mearsheimer, 2001: 3. 11 R. Schweller, 1994. 12 S. Walt, 1987.
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conviertan en una potencia status quo13
. Sin embargo, la estrategia ms utilizada en el
mundo real, segn Mearsheimer, es la de balancing o equilibrio, segn la cual los estados
tratan de incrementar sus capacidades militares para contener a la potencia ascendente.
Dicho equilibrio puede adoptar una doble forma: interno, cuando se aumentan las
capacidades militares propias; o externo, cuando se consigue firmar una alianza de
seguridad con otra potencia. Sin embargo, como apunta Snyder14
el equilibrio externo
(external balance) plantea el dilema de las alianzas: verse o bien inmiscuido o bien
abandonado por la otra potencia. Como veremos, este dilema ha sido especialmente
relevante para la diplomacia japonesa de posguerra fra.
Por ltimo, el autor realista ofensivo arguye que la ltima opcin para las potencias ante
el ascenso de otro actor es la estrategia de buck-passing o estrategia de traspasar las
responsabilidades militares a otro estado o actor. En este escenario el buck-passer es
especialmente consciente de la necesidad urgente de limitar el poder del agresor; ahora
bien, mira hacia otro lado para tratar de evitar el problema. A pesar de que el mismo
Mearsheimer apunta que esta estrategia es mucho ms probable en sistemas multipolares
que en bipolares, lo cierto es que fue la opcin que el Japn de la posguerra escogi para
superar los retos del sistema.
Tabla 1. Explicaciones de Mearsheimer sobre las potencies ascendentes
Balancing
(internamente, a travs de sus
propias capacidades militares o
externamente, formando una
Buck-passing
(hace que otro estado asuma las
responsabilidades del ascenso de la
potencia)
13 J. Mearsheimer, 2001:163. 14 G. Snyder, The security dilemma in alliance politics, World Politics, Vol. 36, n4, 1984, pp. 461-495.
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alianza)
Bandwagoning
(unir fuerzas con un oponente
ms poderoso)
Appeasement
(hacer concesiones a un estado
agresivo para hacerlo virar hacia una
posicin ms pacfica y convertirlo en
una potencia status quo)
Fuente: Mearsheimer, 2001
Una respuesta matizada por parte de los realistas defensivos nos la proporciona Stephan
M. Walt y su obra The Origins of Alliance (1990). Para el profesor Walt los estados tratan
de sobrevivir en un sistema internacional anrquico pero lo que buscan no es el poder, sino
su propia seguridad. Esta afirmacin dista de la consideracin de los realistas ofensivos que
los estados siempre buscaban maximizar el poder y convertirse en una potencia
hegemnica. Walt, adems de entender que los estados buscan su propia seguridad, parte
de una concepcin menos materialista de las Relaciones internacionales que le lleva a
afirmar que las potencias tratan de equilibrar no tanto las capacidades militares, sino la
percepcin que sobre ellas se tiene. De esta forma, si los estados calculan que la potencia en
ascenso tiene intensiones agresivas (lo que Walt califica de malign intentions), la reaccin
ser agresiva; en cambio, si se percibe que tienen intenciones buenas (benign intentions en
lenguaje waltiano), se evitar poner en peligro el equilibrio de poder.
Por ltimo, la aportacin que uno de los grupos de liberales los llamados
institucionalistas- ha dado a la respuesta que nos planteamos resulta interesante por cuanto
afirman que los estados, que son actores racionales, van a escoger la estrategia cooperativa
por encima de la conflictiva con la intencin que las potencias en ascenso se comporten de
forma no beligerante ante el sistema internacional. Para ello, van a promover las relaciones
econmicas, los intercambios comerciales o van a forzar un compromiso con las
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instituciones de cooperacin. Con ello no se est afirmando que los actores tengan intereses
altruistas; ms bien se atestigua que a pesar de que los estados persiguen interesentes
egostas, finalmente la funcin coste/beneficio siempre los lleva a cooperar. Ahora bien,
como afirma Mochizuki15
el riesgo de adoptar una estrategia cooperativa para mitigar los
riesgos es que una potencia ascendente siempre puede en ltima instancia cambiar sus
intenciones y tornarse maligna.
3. Evolucin de las relaciones entre la Repblica Popular de la China y
Japn.
El punto de partida de nuestro anlisis de las relaciones entre la China comunista y
Japn en el perodo de la posguerra fra conviene ser avanzado unas dcadas por motivos
de contextualizacin. Tras el inicio de la diplomacia triangular de Nixon16
y la firma del
tratado conjunto de 1972, por fin llega en 1978 el Tratado de Paz y Amistad que
normalizara las reacciones diplomticas entre ambos pases. A partir de entonces,
asistiremos al nacimiento de una diplomacia amistosa que solo se ver enturbiada por el
primer episodio del problema de la historia de 1982 y por la masacre de Tiananmen de
1989, tras la cual la comunidad internacional pedir sanciones para el rgimen comunista.
Con todo, con el fin del rgimen comunista y del sistema bipolar que divida el mundo
en dos esferas irreconciliables, empieza un perodo que vendr marcado por la creciente y
mutua desconfianza por parte de dos potencias cuyo papel en el sistema internacional sigue
sin estar del todo claro. En el mbito de lo poltico, el fin de la guerra fra empezaba de la
mejor de las maneras para ambos pases. Despus de una visita histrica del Emperador
Akihito a Beijing y de la declaracin del primero ministro Hosokawa sobre el
15 M. Mochizuki, 2007. 16 El presidente de los Estados Unidos, Richard Nixon, empez a gestar a principios de los aos setenta
lo que se conocera como Diplomacia triangular. El objetivo de dicha estrategia era aprovechar las
malas relaciones de uno de los vrtices China y la URSS- para reforzar el otro vrtice China y los
Estados Unidos- y cambiar el equilibrio de poder en la regin de Asia Pacfico.
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remordimiento del gobierno japons por la guerra de agresin que tanto dao caus en
Asia, todo haca prever unas relaciones marcadas por el buen entendimiento. Sin embargo,
es a partir de 1996 cuando empieza elperodo marcado por el empeoramiento de las
relaciones entre ambos pases. Una de las variables explicativas de dicho empeoramiento
es el recrudecimiento del llamado problema de la historia (, rekishi no
mondai), un asunto que se haba iniciado en la dcada de los ochenta, pero que se repetir
como consecuencia de la llamada tercera ola de revisionismo17
. Una parte de la derecha
ms nacionalista japonesa liderada tanto por polticos de la talla del alcalde de Tokio
Ishihara18
como acadmicos, periodistas o ilustradores de manga19
, empez a entender que
se deba evitar la visin masoquista presente en todos los libros de texto de estudiantes.
Ello, entendan dicho grupo, produca que los japoneses no sintiesen orgullo de amor por su
pas, por lo que la solucin que planteaban era omitir de los libros de texto aquellos pasajes
menos agradables de la historia reciente japonesa. A pesar de que el nmero de escuelas
que utilizan estos libros de texto es de aproximadamente 0.039 del total, lo cierto es que
este maquillaje por parte de los libros revisionistas de la historia japonesa con eufemismos
como avance incidente o guerra de liberacin produjo una autentica guerra
diplomtica entre ambos pases.
Adems de la ola revisionista, los ex primer ministros Hashimoto y especialmente
Koizumi enfriaron an ms unas relaciones de por si ya deterioradas tras su visita privada
al santuario sintosta de Yasukuni. El santuario, enclavo en el corazn de Tokio, venera las
17 Para un estudio ms detallado ver A. Saito, La polmica sobre los libros de texto de Historia en
Japn, Revista Espaola del Pacfico, 2004, n17, pp. 123-125. 18 Ishihara Shintar, gobernador de Tokio, ha sido uno de los ms acrrimos defensores de un Japn
autnomo en el escenario internacional. Conocido por sus tesis prximas al ultranacionalismo, Ishihara
escribi junto con Morita Akio, presidente de la multinacional Sony, el libro Un Japn que puede decir no,
(NO "No" to ieru Nippon?), en el que hablaba sobre los Estados Unidos en trminos
muy hostiles, y reafirmaba la superioridad racial japonesa. 19 Bajo el pseudnomio de Yobayashi Yoshinori, este autor de mangas japoneses es el autor de la serie
, unos comics revisionistas que niegan algunos de los hechos ocurridos en la
Segunda Guerra Mundial por parte de las tropas japonesas Masacre de Nanking-, expresa un gran
anti-americanismo, y idolatra la figura de los kamikaze.
http://es.wikipedia.org/wiki/Ayuda:Idioma_japons
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almas de los cados en las diferentes guerras del Estado japons, y entre los ms de dos
millones de soldados se encuentran catorce criminales de guerra del tipo A como el primer
ministro Hideki Tj. La promesa de Koizumi de visitar el santuario cada ao mientras
fuese primer ministro produjo una serie de manifestaciones anti japonesas, cuyo cenit
fueron los ataques a las delegaciones diplomticas de dicho pas en China y la quema de
varios comercios que vendan artculos japoneses. Estos episodios nos recuerdan, desde una
concepcin constructivista de las Relaciones Internacionales, que el la cuestin de la
historia en sus diferentes episodios los libros de texto, Yasukuni, el reconocimiento del
pasado imperial- es un problema derivado de las diferentes percepciones sobre los hechos
ocurridos hace ms de cincuenta aos que si no impide, s complica el buen encauzamiento
de sus relaciones.
Por lo que refiere a las relaciones econmicas, ambos pases vienen disfrutando desde el
inicio de la posguerra fra unas relaciones que podran ser consideradas de excelentes. Una
vez iniciada la poltica de puertas abiertas y tras el compromiso chino de aceptar las
reglas establecidas por la mayora de instituciones econmicas internacionales, hizo que la
interdependencia entre ambos pases lleg a su punto ms alto en el ao 2002, cuando
China se convirti en el principal socio comercial de Japn, por delante incluso de Estados
Unidos. Como apuntbamos en un estudio anterior20
, el incremento en nmeros absolutos
del comercio entre ambos pases desde la dcada de los noventa es el resultado de cuatro
variables: la ventaja comparativa de los productos chinos en el mercado japons; la
atraccin de las importaciones de productos japoneses en China; la abundante y barata
mano de obra china, y por ltimo los flujos de inversiones hacia China. Ciertamente, la
inversin directa extranjera y la Ayuda Oficial al Desarrollo han sido especialmente
importantes en la estrategia de compromiso econmico que lleva aplicando Japn desde el
restablecimiento de las relaciones diplomticas con la Repblica Popular de la China.
Finalmente, las relaciones de seguridad entre ambos pases requieren un mirada especial
20 Ll. LPEZ I VIDAL, La poltica exterior y de seguridad japonesa, Barcelona, Editorial UOC, 2010.
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para comprender el cambio de poltica de compromiso a otra de equilibrio moderado.
Tenemos que recordar que en la dcada de los noventa se iniciaba an con la resaca de la
masacre de Tiananmen como trasfondo; una accin que le vali la condena de la comunidad
internacional. Ahora bien, una vez China era readmitida en el sistema internacional, una
de las primeras medidas que tom el gobierno chino fue aprobar la Ley del Mar Territorial
(1992) segn la cual la China empleara el uso de la fuerza para reivindicar sus
reclamaciones territoriales, una ley pensada especialmente para la disputa por las Islas
Senkaku.
Ms tarde, el mismo ao en que se firmaba la Declaracin Conjunta entre los Estados
Unidos y Japn sobre el fortalecimiento de la alianza de seguridad, el gobierno chino ante
la inmediatez de elecciones pro-independentistas de Taipei realizaba una serie de ejercicios
militares en el estrecho de Taiwan cuya consecuencia ms directa fue el envo por parte de
los Estados Unidos de su Sptima Flota hacia las aguas del estrecho21
. Aunque el incidente
no fue a ms, pona de manifiesto la desconfianza mutua que se haba iniciado tras el fin de
la guerra fra y la desaparicin de la amenaza comn que representaba de la URSS. Para
China el apoyo japons a Taiwn era un alegato a su independencia; para Japn la tan
siquiera eventualidad de un ataque a Taiwan pona de manifiesto el temor a ser atacados a
su vez por la China, dado que la isla se encuentra a menos de 100 kilmetros de Japn.
Al ao siguiente del incidente al Estrecho, son aprobadas las Lneas Generales de
Cooperacin en Materia de Defensa entre ambos pases gracias a las cuales se acuerda crear
un a comisin conjunto de investigacin sobre la defensa de misiles balsticos. Aunque
dicho sistema estaba pensado para contrarrestar los lanzamientos de misiles Taepodong
realizados por Corea del Norte, todos en Tokio entendieron que tal vez era necesario pensar
tambin en la eventualidad de un ataque por parte de China. Desde entonces, y tal como
muestra el siguiente grfico, una serie de incidentes han puesto de manifiesto las tensas
relaciones en materia de seguridad.
21Un misil chino impact a 60 kilmetros de la isla de Yonaguni, en la prefectura de Okinawa.
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Tabla 2. Principales hechos destacados en material de seguridad (1997-2009)
19
97
Declaracin Conjunta entre los Estados Unidos y Japn.
Nuevas Guas Generales de Cooperacin en Defensa.
19
98
Lanzamiento de un misil Taepodong por parte de Corea del Norte en tierra de Japn.
Jiang Zemin visita Japn.
19
99
Incidentes entre barcos chinos y la Guardia Costera Japonesa.
20
01
Las Fuerzas de Autodefensa (FAD) Martimas son enviadas al Ocano ndico para apoyar a las
fuerzas de los Estados Unidos desplegadas en Afganistn.
Revisin de la Ley de Operaciones de Mantenimiento de la Paz.
Aprobada la Ley de Medidas Anti-terroristas.
20
02
Koizumi empieza a visitar el santuario sintosta de Yasukuni.
20
03
Corea del Norte Abandona el Tratado de No Proliferacin
Encuentro entre Japn y Estados Unidos (Koizumi y Bush) y charlas sobre la Defensa de
Msiles.
Empiezan las conversaciones a seis bandas para discutir sobre el problema nuclear de Corea del
Norte.
El gobierno decide introducir el costoso sistema de defensa BMD.
Asistencia Humanitaria y Reconstruccin en Iraq.
20
04
Envo de las FAD para asistir a la reconstruccin de Iraq.
Dos nacionales japoneses son asesinados en Iraq.
Incursin de un submarino chino en aguas territoriales japonesas en las islas Ryukyu
Revisin del NDPG.
20
05
Corea del Norte reinicia las pruebas de lanzamientos de misiles.
La Dieta Nacional aprueba una serie de leyes sobre los misiles balsticos.
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20
06
Corea del Norte admite haber reiniciado las pruebas de lanzamientos de misiles.
Se despliega un batalln PAC-3 batalln en la Base Area de Kadena, Okinawa.
20
07
La Agencia de Defensa Japonesa es elevada al rango de Ministerio.
Desplegados Patriot PAC-3 en la Base Area de Iruma Air.
El barco JS Kongo lleva a cabo la primera prueba de vuelo del SM-3.
20
09
FAD Martimas llevan a cabo operaciones en contra de la piratera en la costa de Somalia y el
Golfo de Adn.
La Ley Anti-Piratera es aprobada por la Dieta Nacional.
Fuente: Autor
La otra cuestin que preocupa a ambos pases es el incremento del gasto de defensa.
Por una parte Japn posee uno de las fuerzas ms desarrolladas tecnolgicamente del
planeta y la marina ms poderosa de la zona de Asia Pacfico, amn de una Guardia Costera
que se ha convertido en el cuatro pilar defensivo de las fuerzas de autodefensa. Aunque su
gasto en defensa est autolimitado al 1 por ciento desde que el primer ministro Miki
introdujo este tope en la dcada de los setenta, lo cierto es que la mayora de expertos
consultados22
afirman que Japn tiene la capacidad para ser una de las tres potencias
militares del planeta en tan solo pocos aos. Por la otra parte, Japn teme que el incremento
del gasto en defensa china, la falta de transparencia de la misma y la veloz modernizacin
en el sector naval pueda representar una amenaza al medio y corto plazo. En este sentido, la
incursin constante de buques de guerra chinos en Zonas Econmicas Exclusivas (ZEE)
cerca de las islas en disputa Senkaku/Diayou y del campo de gas de Chunziao son
interpretadas por el gobierno japons como desafiantes y poco claras.
Sin embargo, como trataremos de explicar en el siguiente apartado, las reacciones
japonesas ante el rearme chino, la falta de transparencia de su presupuesto militar adems
de la constante actividad china en las aguas prximas a la ZEE, han hecho actuar a Japn
22 Segn entrevistas realizadas en Tokio entre agosto de 2009 y marzo de 2010.
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con cierta cautela. De hecho, el National Defense Programme Guidelines (NDPG)
aprobado en 2004 no se refiere en ningn momento a China como amenaza sino como un
desafo. Tal y como reza el mencionado Programa, Japn necesita estar atento a las
futuras acciones chinas. Sin embargo, cul es la verdadera estrategia japonesa en
relacin a China? Vemoslo con un poco ms de detalle en el siguiente apartado.
4. Aplicacin del modelo Hedging
En este apartado vamos a responder a la pregunta que ha guiado todo nuestro anlisis y
que no es otra que la estrategia que Japn ha seguido en relacin a China durante el perodo
de la posguerra fra. Como acabamos de explicar, dicha estrategia ha pasado de una
diplomacia amistosa en la dcada de los setenta y ochenta, a un paradigma de relacin que
an est en formacin. Lo que est fuera de toda duda es que ninguna de las teoras de los
realistas ofensivos y defensivos- y los neoliberales nos resultan plausibles para el caso
japons. Como la evidencia nos muestra, las potencias medianas no optan por el equilibrio
o el bandwagoning; ms bien toman una posicin intermedia que algunos autores han
etiquetado con el nombre de estrategia hedging23
. Sin embargo qu significa esta
expresin? Resulta el trmino apropiado para explicar las tendencias recientes en la
estrategia japonesa en relacin a China? En definitiva, es posible para una nacin como
Japn un comportamiento hedging?
En estas lneas creemos firmemente que en el escenario internacional los riesgos y las
amenazas inminentes son los factores determinantes cuando un estado debe decidir sobre si
aceptar, acomodar, o rehusar una determinada potencia en ascendencia. Dicho en otras
palabras, cuando los estados perciben una amenaza inminente, como afirma Mearsheimer,
su respuesta pasa por tratar de equilibrar, apostar por el caballo ganador (bandwagoning) o
bien otras formas intermedias como el appeasement o buck-passing. Sin embargo, qu
23
Cheng, Goh, 2005, Roy, 2005; Samuels, 2002.
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pasa cuando la amenaza no es tan inminente u obvia? En tal caso, las potencias desarrollan
una tendencia al actuar de forma hedging24
.
Precisamente una de las mejores aproximaciones tericas sobre la estrategia hedging es
la propuesta por Kuik Cheng, quien la define como un comportamiento segn el cual un
pas busca contrarrestar los riesgos siguiendo una estrategia multiopcional cuyo objetivo es
producir efectos compensadores mutuos, en una situacin de grandes incertidumbres y
grandes apuestas. Esta explicacin viene complementada por la siguiente matriz en la que
la estrategia hedging se encuentra en un continuum entre equilibrio (balancing) y
bandwagoning. Segn Kuik la estrategia conlleva, a la vez, una serie de polticas
compensatorias o lo que el autor denomina return-maximising y risk-contingency, es
decir conseguir beneficios econmicos y diplomticos cuando las potencia en ascendencia
tiene intenciones benvolas, y limitar las prdidas cuando se comporta de manera hostil.
En definitiva, se trata de una estrategia cuyo objetivo es conseguir lo mejor y prepararse
para lo peor25
.
A pesar de que Kuik utiliza dicho modelo para explicar el compartimiento de pequeos
estados, creemos que se puede aplicar dicho concepto para describir la poltica japonesa en
relacin a China, aunque en nuestro caso entendemos que la poltica hedging est
determinada no por una cuestin de legitimacin del rgimen como en el caso estudiado por
el autor, sino por cuatro variables: la poltica domstica, los choques externos, la beiatsu
(presin estadounidense) y el papel de los lderes. Ciertamente una combinacin de factores
domsticos e internacionales ha provocado un cambio de la poltica de la amistad de los
aos 70 y 80 hacia un nuevo paradigma que puede ser entendido a travs de la explicacin
hedging. Aunque otros autores describen dicho perodo como competitive engagement
24
25
Kuik, 2008.
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with a hard balance26
, se trata de hedging con elementos de pragmatismo econmico,
compromiso vinculante, rechazo del predominio y equilibrio indirecto. Vemoslo con ms
detalle.
En primer lugar, Japn ha tratado de maximizar su interdependencia econmica con
China a travs de su comercio y su inversin a pesar del clima poltico y de seguridad.
Dicho en otras palabras, Tokio ha seguido una poltica pragmtica para con China en el
mbito econmico. Como afirma Wan27
, Japn quiere que China crezca, y China quiere
ver a Japn recuperado econmicamente; cualquier otra alternativa daara a sus
respectivos intereses nacionales.
En segundo lugar, aunque de forma tmida y an insuficiente, Japn y China han
establecido canales de comunicacin y os han institucionalizado de diferentes maneras. La
idea apuntada por Ciarciari28
es que durante la posguerra fra, tanto la reduccin de las
divisiones ideolgicas, como la liberalizacin del orden econmico internacional, amn de
la aparicin de un sinfn de foros multinacionales, han permitido fomentar este tipo de
canales de comunicacin. Dejando aparte la consideracin de si son meros talk shops, lo
cierto es que han aparecido algunos foros regionales e interregionales como ASEAN
Regional Forum (ARF), ASEAN Plus Three, Asian Summit, Asia Pacific Economic
Cooperation (APEC), Asia Europe Meeting (ASEM) y el Forum of East Asia-Latin
America (FEALAC)29
. En la mayora de ellos, Japn trata de desarrollar la idea que estos
foros son un buen mecanismo de comunicacin con su vecino.
Siguiendo con el cuadro, podemos afirmar que es indudable que Japn est tratando por
todos los medios de evitar la emergencia de una China demasiado poderosa, involucrando
otros poderes en los asuntos regionales. No solamente los Estados Unidos sino tambin
26 Ver Mochizuki, 2007. 27 Wan, 2006. 28 Ciarciari, 2009. 29 Para un estudio ms detallado del fenmeno del regionalismo y el interregionalismo, consultar Y. Lay Hwee y Ll. Lpez i Vidal, Regionalism and Interregionalism in The ASEM Context. Current Dynamics and Theoretical Approaches. Documentos Asia CIDOB, n23, diciembre 2008.
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otros pases que Japn considera en el arco de libertad y prosperidad30
como Australia,
Nueva Zelanda o la India ayudan a Japn a evitar la dominacin por parte de China. De tal
forma, la estrategia en relacin a los foros regionales y interregionales se vislumbra clara;
Japn sigue una actitud de involucrar a los Estados Unidos y a Australia para inducir a
China a comportarse de forma benvola y comprometida con el sistema internacional.
Finalmente, podemos afirmar como hemos demostrado en el tercer apartado, que Japn
persigue una actitud de equilibrio indirecto hacia China en el mbito de la seguridad. Dadas
las incertidumbres acerca de las intenciones reales de China, Japn se est preparando para
el peor de los escenarios: una China hegemnica y hostil. Su estrategia pasa por aumentar
sus propias capacidades militares (equilibrio interno) y fortalecer su alianza de seguridad
con los Estados Unidos (equilibrio externo). Aunque ninguno de los documentos analizados
sobre poltica exterior NDPG, Araki Report, SCC- lo describe en trminos hostiles,
Japn es consciente del momento crtico por el que pasa su relacin con China,
especialmente tras los incidentes en las Islas Senkaku, incursin de barcos chinos en la
ZEE, el tema de Taiwan, submarinos nucleares chinos en Okinawa o el problema de la
historia.
Para finalizar con dicha modelo, nos queda responder a los factores que determinarn las
acciones futuras en relacin a China. Como hemos apuntado recientemente, los factores
son tanto nacionales reestructuracin domstica y actitud del lder- como internacionales
choque externo y beiatsu-. Ahora bien, lo que determina si una tendencia hedging se
convierte en una poltica real depende de tres factores, como apunta Kuik: a) la inmediatez
de la amenaza, b) la existencia de fracturas ideolgicas y la existencia de una clara rivalidad
entre el poder en ascendencia China- y el poder dominante los Estados Unidos. Tan
pronto como a), b) o c) ocurren, hedging deja de ser una opcin sostenible.
5. Conclusin
El presente anlisis ha explicado cmo la respuesta al ascenso de China no puede ser
30 Aso Taro, discurso al Japan Institute of International Affairs, Tokio, 30 de noviembre de 2006.
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contestada plausiblemente por los realistas ofensivas, defensivos o liberales por si solos. En
primer lugar, los realistas ofensivos no tienen en consideracin el gran nmero de
estrategias que una nacin puede escoger cuando debe tratar el ascenso de una potencia.
Los principios neorrealistas resultan a todas luces demasiado simplistas cuando afirman que
los estados reaccionan equilibrando interna o externamente ante una potencia emergente. Si
dicha premisa fuese certera, Japn debera convertirse en una potencia con capacidad
nuclear e incrementara sus fuerzas convencionales de forma considerable, algo que la
evidencia emprica no demuestra.
En segundo lugar los realistas defensivos asuman que Japn persigue una estrategia de
cooperacin para provocar intenciones benvolas por parte de China y a la vez de
fortalecimiento del tratado de seguridad entre los Estados Unidos y Japn para protegerse
de cualquier amenaza venidera por parte de China. Como parte de esta estrategia de
fortalecimiento de la alianza de seguridad, Japn dejara de ser un back-passer para
disminuir el peligro de ser abandonado por Washington. De todas formas, como apunta
Mochizuki, con esta estrategia China podra sentirse cercada e intensificar el dilema de
seguridad entre ambos pases. En otras palabras, tratando de resolver el problema del
abandono derivado de la pertenencia a una alianza de seguridad, podramos estar
incrementado el dilema de seguridad clsico en Relaciones Internacionales.
Consecuentemente la estrategia cooperativa propuesta por los realistas defensivos resulta
muy difcil de poner en prctica por parte del gobierno japons sin asumir unos grandes
riesgos e incertidumbres.
Contrariamente a lo afirmado por los postulados tradicionales de la disciplina, el
argumento central de este artculo ha sido que las potencias medias y potencias medianas
adoptan polticas diferentes al puro equilibrio y bandwagoning. Ms bien dichos pases
implementan una posicin intermedia que Kuik ha categorizado como estrategia hedging y
Mochizuki estrategia mixta. En cualquier caso, como ha demostrado el artculo, es
posible seguir una estrategia cooperativa en relacin a China para fomentar las intenciones
benvolas, al mismo tiempo que se cubra las espaldas con la alianza con los Estados Unidos
ante cualquier potencial fallo de la poltica de cooperacin. En resumidas palabras, Japn
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est tratando de tomar ventaja de su estrategia de compromiso con China a travs de
cooperacin econmica y de la creciente interdependencia pero tambin cubrindose las
espaldas ante cualquier amenaza que China suponga en un futuro a travs de el equilibrio
interno (aumentando el podero de sus fuerzas de autodefensa) y del equilibrio externo
(ampliando su alianza de seguridad con los Estados Unidos). Tokio est proporcionando
ayuda a sus aliados los Estados Unidos-, mostrando su poder a sus enemigos Corea del
Norte- y ofreciendo neutralidad a sus enemigos potenciales China.
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