JOSÉ MONTERO PADILLA LUIS FELIPE DE PEÑALOSA EN SU …

_JOSÉ MONTERO PADILLA

LUIS FELIPE DE PEÑALOSA EN SU LITERATURA

Conferencia dada en la Academia deHistoria y Arte de San Quirce, el 3 1de mayo de 1991


Fue don Francisco de Quevedo, el escritor español que má sy mejor se ha enfrentado con la muerte, quien lo dijo en un ode sus sonetos, que a su cabecera lleva esta anotación : "Cono -ce la diligencia con que se acerca la muerte, y procura conoce rtambién la conveniencia de su venida, y aprovecharse de es econocimiento" .

Y, tras de estas estoicas advertencias, dice en el poema :

"Ya formidable y espantoso suena ,dentro del corazón, el postrer día ;y la última hora, negra y fría ,se acerca, de temor y sombras llena .

Si agradable descanso, paz seren ala muerte, en traje de dolor, envía ,señas da su desdén de cortesía :más tiene de caricia que de pena .

¿Qué pretende el temor desacordad ode la que a rescatar, piadosa, vieneespíritu en miserias anudado?

Llegue rogada, pues mi bien previene ;hálleme agradecido, no asustado ;mi vida acabe, y mi vivir ordene" .

" . . . más tiene de caricia -acabamos de leerlo- que de pe-na . . ." Es posible, y acaso sea verdad, pero la pena permanece ,también como una forma de recuerdo .

165

]OSÉ MONTERO PADILLA

Luis Felipe de Peñalosa se nos fue en la primavera de 1990 ,en la madrugada del día 3 de abril . Ha transcurrido ya, pues ,un año largo desde entonces. Numerosos artículos -muy bello salgunos- se publicaron a su fallecimiento . En ellos se da, meparece, una coincidencia : la de considerar a Luís Felipe de Pe-ñalosa como el último representante de un tiempo definitiva -mente ido con él, de una manera de estar, de comportarse y d eser en la vida .

Jaime Delgado, por ejemplo, escribió entonces, certera -mente ("Tres hachazos a un mismo tronco", artículo publicad oen El Adelantado de Segovia del día 3 de mayo) :

`Segovia acaba de perder al vigilante más fiel y sabio de s upureza arquitectónica, al mejor y más sensible especialist a-aprendiz con su tío el marqués de Lozoya- en el Alcázar sego-viano y al director prudente de la Academia de Historia y Art ede San Quirce. ¡Menuda papeleta -que diría Luis de Tabique -su sustitución! Cuando se hayan encontrado ; allá en su cielo ,mi tío Luis le habrá dicho : "Pero, Felipe, hijo, ¿se puede saber aqué has venido? . . . ¡Si es allí donde haces falta!" . Para entonces ,Luis-Felipe le habrá expuesto a Dios sus méritos : Yo, Señor,soy de Segovia" . Lo suficiente, porque a fuer de buen segovía-no, tuvo buen tino -como dijo Jorge Manrique- "para andar estajornada 1 sin errar" .

Y Luis Martínez Drake, con muy hermosas palabras, dijo("Luis-Felipe Peñalosa (In Memoriam)", artículo en El Adelan-tado de Segovia del 8 de mayo) :

"Con Luis Felipe Peñalosa desaparece un mundo que v asiendo difícil explicar en los manuales, en los pequeños cate-cismos de cultura española que abrevian selectivamente nues-tra memoria . Un mundo en el que había una casa, una fuente ,una torre, con más sentido que el quehacer diario, que la ruti -

166


na forzada. Era la casa llena de acordes y sonatas, el árbol lle-no de frutos, la parra y sus racimos en la que había penetrad oel valor de lo lárico, el ensimismamiento del pasado, la espe-ranza del restablecimiento de lo que empezaba a ser invisible ,la invención de lo antiguo libre de culpas, como el sueño d euna humanidad liberada, contra las indiferentes, vulgares pseu -docosas cargadas de culpabilidad ; contra la trampa del triunfohuero y mezquino ; transformando lo invisible, lo que iba desa-pareciendo, en lo único existente, pero con una existencia te-rrenal, hondamente terrenal, como los ángeles de las elegía srilkeanas" .

Es fácil la emoción ante el recuerdo del amigo que ya nun-ca más estará, físicamente, con nosotros, es fácil la emoción, sí ,y quizá, aunque pueda parecer contradictorio, también melan-cólicamente gustosa . Pero, de modo deliberado, yo quiero evi-tarla -o tratar de evitarla- al trazar, en esta tarde-noche, alguna sbreve y leves consideraciones sobre la obra literaria de Peña-losa. Aunque la procesión -reconozcámoslo- vaya por dentro .

La labor, el quehacer cotidianos de Luis Felipe Peñalosafueron tan amplios como diversos, pero esa múltiple actividadsuya adquirió unidad y singularidad en su fiel, apasionado yconstante carácter segovianista . Sabido es cómo, muy enfermoya, supo encontrar fuerzas, a impulsos de su vocación y dedi-cación segovianistas, para dictar desde el lecho un trabajo -e lúltimo suyo- sobre historia de Segovia, aparecido póstuma -mente . Sin embargo, y aunque se haya afirmado incluso porescrito, que publicó mucho, no fue así . Lo cual es tanto más delamentar ante la riqueza de sus conocimientos -saberes hon-dos, auténticos, plenamente madurados- y la elegancia literari ade su pluma .

Testimonio de la brevedad de su creación publicada en e lámbito más estrictamente literario es que, en esencia, se limita

167

JOSÉ MONTERO PADILLA

a un libro de versos, aunque otros poemas, en número consi-derable, se hallan inéditos o dispersos en páginas de revista sde escasa divulgación, poemas estos últimos que habrá que ve rde reunir y estudiar .

El libro de versos al que me refiero es éste que he traíd oconmigo y sostengo ahora en mis manos . En la cabecera de suportada leo el nombre del autor : Luis Felipe de Peñalosa yContreras, y, a continuación, el título del volumen : Poemas pa-ra cuando sea domingo; por último, al pie, el lugar y el año deimpresión : "Segovia MCMXXXV" .

Y después, en la segunda página en blanco del interior, e nletra autógrafa del autor, esta dedicatoria, que me permito leer :"A Pepe Montero, glosador de los poetas segovianos, recuerd odel último de todos ellos, con un abrazo . Luis Felipe de Peña -losa . Domingo 8 de septiembre de 1968" .

En la última página impresa un colofón indica que "Este li-bro, "Poemas para cuando sea domingo", de Luis Felipe de Pe-ñalosa y Contreras, se terminó de imprimir el Sábado de Gloriade 1935 en los establecimientos tipográficos de El Adelanta-dode Segovia . Cuidó su impresión el poeta Dionisio Ridruejo .Francisco de Cáceres dibujó su portada" .

1935 -el año de impresión del libro, según acabamos de re-cordar- iba a ser, en su conjunto, una fecha importante para lavida literaria española . Comprobémoslo, a través de alguno sdatos y acontecimientos . En ese año, Vicente Aleixandre publi-ca La destrucción o el amor, uno de sus libros de poesía mássignificativos; aparece impreso el Llanto por Ignacio SánchezMejías, de Federico García Lorca ; ve la luz, asimismo, Abril,primer libro de versos de Luis Rosales ; Emilio Carrere publicasu lírica Ruta emocional de Madrid; se cumple y conmemorael tercer centenario de la muerte de Lope de Vega, lo cual da

168


ocasión para que se abra al público la casa, recién restaurada ,que fue vivienda del "Fénix de los ingenios" en sus último saños, en la calle madrileña ahora -y ya entonces- llamada deCervantes, y también al hilo del centenario lopesco "Azorín" daa conocer un nuevo libro suyo : Lope en silueta ; Pío Baroja in-gresa -el 12 de mayo- en la Real Academia Española de l aLengua; y cuando el año se aproxima a su final, el 17 de no-viembre, Antonio Machado comienza a publicar, en el diario ElSol, sus notas sobre Juan de Mairena ; y Juan Ramón Jiméne zdefine lo que, a su juicio, significó el Modernismo literario, e ndeclaraciones efectuadas al diario La Voz y que suscitarán nu-merosos y diversos comentarios . . . Sí, no cabe duda de qu e1935 fue un año importante y afortunado para la literatura y ,en especial, para la poesía .

En Poemas para cuando sea domingo, su joven auto r-veintitres años- daba testimonio de la delicadeza de su líricainspiración, de su estar al tanto de las corrientes y vaivenes d ela poesía de su tiempo, de la ternura de su mirada para el vivi rde Segovia -su ciudad-, de su carácter de poeta "provinciano" .Digámoslo en su elogio, de una vez por todas, al igual que po-etas "provincianos" fueron -son-, en muchas de sus creaciones ,Antonio Machado, y Gerardo Diego, y Agustín de Foxá . . .

Poeta "provinciano" también Luis Felipe, en poemas tan be-llos como el siguiente :

¿Te acuerdas, hermano ?Era una mañanade Abril, como ésta .Los mirlos dictaba nun cantar de amore sal chorro del agua .Salió de la iglesia ,cruzó por la plaza,

169

_JOSÉ MONTERO PADILLA

¡aún llevo en los ojossu mirada clara !¿Te acuerdas, hermano?Era una mañanade abril, como ésta .Los mirlos dictabanun cantar de amore sal chorro del agua .¿Te acuerdas, hermano ,de cómo cantaban?"

O como este otro, titulado Convalecencia :

"Mañana, si hace buen día ,te sentarás en la camay vendrá a verte tu prima ,a jugar a la baraja .Verás el cielo qué azul ,verás la nubes qué blanca sy en sus ojos violetaqué tierno temblar de agua .Agridulce sol de octubreentrará por la ventan ay florecerán las rosasde tu colcha rameada .Mañana, si hace buen día ,te sentarás en la cama .Y luego cuando te acuestes ,al tocar de las campanas ,la luna vendrá voland oa mullirte las almohadas" .

O como el que lleva el número VII del libro, delicioso poe-ma infantil :

170


Estaba el cielo, colegio ,con sus alumnas estrellas ,y la luna, rosa y blanca ,era la monja maestra .Estaba el cielo, domingo ,todo vestido de fiesta ,como si fuera a veni rel obispo de Plasencia .¡"Mambrú"!, se oía cantar,¡"Mambrú, que se va a la guerra" !Bailaban, jugando al corro ,miles y miles de estrellas .

O cuando canta la melancolía de los palacios silenciosos yabandonados :

Una plaza de provinciay, en un rincón, un palacio .En el palacio, una salacon cortinas de damasco .En la sala, las butacas,tapizadas de oro claro ,esperan en la tertuliadesvaída de los años .En la tertulia no hay nadie ,porque todos se marcharon .En sus retratos, el so lpone un reflejo dorado .

Años después -en 1956, en su libro Segovia, el navío depiedra- Luis Felipe Peñalosa se acercará de nuevo, con ajusta -das y hermosas palabras, al tema de los viejos palacios :

171

JOSÉ MON I LRO PADILLA

"Cuando el que esto escribe era niño -dijo entonces-, cas itodos los palacios segovianos estaban ocupados por sus anti-guos dueños . Si se ha dicho que los franceses llaman castillo atoda vivienda campestre que no sea una cabaña, podemo sigualmente decir que, en los pueblos de la llanura castellana ,el nombre de palacio indica más bien la calidad del propietari oque la suntuosidad de la construcción . Palacios hay en pueblo ssegovianos que no son en verdad sino paneras del señor" .Magnifica prosa en verdad la del autor de este texto .

Poeta provinciano, decía antes . Poeta avizor, también, delos rumbos, gustos y juegos de la lírica más próxima . Así cabepercibir las preferencias, rasgos estilísticos y voces de alguno sde los poetas maestros del Veintisiete, en composiciones comolas que llevan los números XI, XIII y XV :

XI

¡Madre!, regálame un arcoiris de siete reflejos ,que quiero poner un laz osobre mi sombrero nuevo .¡Madre! ¿los arcos son dulces ?¡Ángeles de caramelo !Yo quiero colgar mi vidapara columpiarme de ellos .¡Yo quiero pinchar la lunacon la vara del vaquero !Yo quiero, yo quiero, madre ,querer. Yo quiero y no puedo .¡Madre!, regálame un arcoiris de siete reflejos ,que quiero hacer la mortaj apara mi amor, que se ha muerto .

172


XIII

Y la mar parió la lunay las nubes la mecieron ;su madrina fue la playay su padrino fue el puerto .Cuando seas mayor, Luna ,tu luz nos dará sosiego ;te mirarás en el aguadesde lo alto del cielo ,y las olas, verde espuma ,soñarán delfines negro sal sentir en sus espaldastus ojos color de hielo .Como la luna es pequeña ,no comprende nada de esto .El puerto, por que no llore ,la ha regalado un velero .

xv

El mar, y en él un camin ode plata, la cuchilladade una vela de navíoblanca .El mar siempre ,el mar y nad afuera de él .El mar y el ciel obordado de estrellas mansas .El mar, y en él un camin ode plata .

173

JosÉ MONTERO PADILLA.

Tampoco resulta difícil hallar algún eco juanramoniano, ytambién la anticipación de algún motivo de poema de GerardoDiego, en la composición que lleva el número XX en el libr ode Peñalosa :

Se bañaba en el río mi nostalgia ,la nostalgia de sus manos, tan lánguidas .El río, glauco espejo isabelino ,se adormecía en la quietud templada .Todo era ritmo en el ambiente ters oal borde de la noche luniclara .La tardeiba cayendo lentamente al agua . . .Cuando la luna tras la sierradesenvainaba su navaja ,yo otra vez, como siempre ,echaba a cuestas mi nostalgia .La nostalgia de sus manos tan lánguidas ;lirios blancos plantados en el fil odivinamente blanco de su alma .

Apoyada en un sauce de la orill auna mirla cantaba .

Según ya recordábamos antes, el colofón del libro Poemaspara cuando sea domingo indica que "cuidó su impresión e lpoeta Dionisio Ridruejo" . Y unos versos suyos inician el volu-men, precedidos de la indicación siguiente :

"En el libro"Poemas para cuando sea domingo", de LuisFelipe de Peñalosa "

El lirio está moradoy la azucena blanca ,el álamo verdeajunto al metal del agua .

174

LUIS FELIPE DE PEÑALOSA EN SU LITERATUR A

¡Mira los almendros blancos !-¡Qué blanco tirón del alma! -¡Vamos prontoque están saliendo de mis alas novias que nos aguardan !

Manos del sol de domingovoltean a las campanas .

Aquí la plazuelita ,aquí las cuatro acacias ,el traje de las noviasy de las colegialas :en su cielo el surtido rbordando estrellas de plata .

Aquí tu corazó n-¡Que ya es domingo en el alma! -aquí tu corazóndesborda voces blanca sy va de brisa en bris acon el ritmo del agua .

Y fuera del horizontela noche y el mar te llaman .

Fraterna la amistad entre ambos poetas, tiempo despué sRidruejo dedicará a Peñalosa uno de los más hermosos de su sSonetos a la piedra, el titulado A Segovia, aparecido también ,con algunas variantes, en "El Adelantado de Segovia" :

Entre arboledas la pesada quill ay hacia el llano sin sombra aventuradadesgajas de la sierra, ágil, dorada ,la tenue primavera de Castilla .

¡Oh, dulce nave en soledad armada ,ramo que encumbra la cansada arcilla,

175

José MONTERO PADILLA

múltiple triunfo, milagrosa orill apor la sed de los hombres conquistada !

Oigo mí sangre en el Eresma fríoque en fronda paga el oro del reflejo ,y en la ribera espadas y ganados .

Y en mezcla firme de vejez y brío ,muros rendidos al fugaz espejo ,¡y tan soberbiamente levantados! "

Fraterna amistad, sí, entre los dos poetas, y afinidades ycoincidencias . Así, también en 1935, y en Segovia, se publica e lprimer libro de poemas, titulado Plural, de Dionisio Ridruejo .

Y ambos son rigurosamente coetáneos, nacidos los dos en1912, uno de los últimos años en que Europa es y se siente to-davía feliz -o, al menos, así lo cree-, y, por eso mismo acaso ,manifiesta su enfado, a veces a través de muy altas representa-ciones, por causas que hoy nos hacen sonreír . . . Como la llega -da del tango, cada vez más oído y bailado y más de moda e nmuchos salones . Pero se juzga por muchos que el nuevo bail ees terriblemente atrevido y se alzan en su contra voces irrita -das . En Inglaterra, el propio monarca, Jorge V, indica a la Cort ey a los aristócratas que proscriban de sus fiestas el tango . Y e lKaiser de Alemania Guillermo II prohibe a sus ofíciales que l obailen. En varias ciudades españolas surgen también las protes -tas y ataques . . . En un periódico madrileño una dama escrib eindignadamente :

"No hay tal tango argentino . Ninguna señora de este paí sbaila una danza que cultivan sólo los atorrantes o golfos bona-erenses. El tango no es siquiera el que baila la gente maleant edel puerto de Buenos Aires. Es una mixtificación -concluye -cultivada en París" .

Pero de nada valen las protestas, porque los tangos, con s uritmo peculiarísimo, van extendiéndose, por estos años en tor -

176


no al de 1912, cada vez más, en el gusto de las gentes . Se creeapreciar en ellos, además, un cierto sentido galante, erótico ca -si y aun pecaminoso que encandila los ánimos . . . A ello alude l aletra de una conocida canción de estas fechas :

Desde hace poco en los salones elegantesnuestras damitas, con los pollos más chispeantes ,hacen locuras, casi diabluras ,bailando el tango, que más bien parece un fandango .En un rincón las cuarentonas cuchichean ,y las parejas, arrullándose, tanguean .Es una cosa muy linda y curiosaentrar en los salones sorprendiendo un tango-té .Dicen que el tango es de una gran languidezy que por eso lo ha prohibido Pío X .

Y un joven escritor, que ha de llegar a ser una de las má sinsignes figuras intelectuales españolas de este siglo, Eugeni od'Ors, escribe entonces -¡quién lo iba a suponer!- una nueva ybienhumorada letra para la música de un tango que se ha he -cho popular :

Con una palanca y un punto,-Arquímedes dijo un día -que a mí me dieran, yo, al punto ,un mundo descubriría .Y Sócrates, que era este punto ,le dijo, sín más ni más . . .Pues toma la palanca ,toma la palancay haz .

Claro es que, en 1912, ocurren también otras cosas . Así lapublicación de dos importantes libros, próximos también en

177 .

JOSÉ MONTERO PADILL A

sus títulos : Castilla, de Azorín, y Campos de Castilla, deAntonio Machado .

Y acontecimientos adversos, como el asesinato del Presi-dente del Gobierno, don José Canalejas, cuando el político s ehabía detenido ante el escaparate de la librería San Martín, e nla Puerta de Sol de Madrid .

Y la muerte de Menéndez Pelayo (cuentan que dijo cuandotuvo certeza de su próximo fin : "¡Qué lastima, morir cuandome quedaba tanto por leer!") .

Y los fallecimientos, aunque estos no alcancen resonancia ,de dos mujeres que pasarán más tarde a la historia literaria : e lde Leonor Izquierdo Cuevas, la esposa de Antonio Machado einspiradora de algunos de los más bellos y conocidos verso sdel poeta; y el de Ana Cecilia Luisa Dailliez, el gran amor deAmado Nervo y que dará título -La amada inmóvil- a una delas más conocidas obras del escritor mejicano .

Pero no es noticia, como resulta lógico -fuera del ámbito fa-miliar-, el nacimiento de un niño. Sí constituye una esperanza ,y también un interrogante, porque ¿quién se atreve ahora a ha -cer pronósticos sobre lo que el futuro reserva para unos niños ,nacidos, uno en la provincia de Soria, en Burgo de Osma, a lque han puesto el nombre de Dionisio -su primer apellido e sRidruejo-, y el otro en la ciudad de Segovia, al que han dad olos nombres de Luis Felipe y que se apellida -primero y segun -da apellidos- Peñalosa y Contreras? .

Andando el tiempo, el segundo -aquí todos lo sabemo sbien- ha de llegar a ser uno de los más insignes ciudadanos d eSegovia, a la que se entregó con una conducta y una dedica-ción orientadas únicamente por el amor a la tierra segoviana .

178


Testimonios de tal dedicación dan sus publicaciones -li-bros, monografías, . . . - El arte gótico en España, Juan Bravo yla familia Coronel, Un linaje segoviano en Flandes, Segovia ,el navío de piedra; Segovia, motivo pictórico, su breve HistoriaModerna y Contemporánea de Segovia -aparecida póstuma- ,que concluye con estas palabras -acaso las últimas que escribió :

"Entonces -dice refiriéndose al siglo XIX- llega un moment oen que la dirección de la ciudad cae en manos de funcionarios ,en manos de políticos, de personas, en fin, que no ostentan l arepresentación de lo que ha sido Segovia durante los mucho ssiglos de su existencia . Vendrá el régimen de partidos políti-cos, el cambio total en la estructura de los gobiernos locales .Es entonces cuando acaba realmente Castilla . Castilla no acabacon la derrota de Villalar, acaba cuando las Cortes Generale sadmitan que los nombramiento de procuradores no han de se ren la forma en que se hacían tradicionalmente" .

Fue autor también de numerosísimos prólogos, que le pedí-an con reiteración y que él, generosamente, nunca negaba .

Además de Poemas para cuando sea domingo, Peñalosaescribió un número considerable de otras composiciones suel-tas. No sé si la última acaso, pero sí desde luego una de las úl-timas, fue la que ahora leeré, un breve apunte a la manera ma-chadiana, fechado el 22 de febrero de 1990 y destinado a s ulectura en el acto que cada año, en la fecha indicada, se cele-bra en la Casa Museo de Antonio Machado en Segovia, en re -cuerdo y homenaje al autor de Campos de Castilla :

"Tu celda solitaria aquí Antonio viajer ocenizas de tu sombra, junto a la sombra mí atus huellas silenciosas me muestran el sender oque conduce a la patria de la melancolía .De las calles en sombra surge la algarabía

179

JOSÉ MONTERO PADILL A

de los niños que juegan, y en la torre de enfrent etraspasando el confín de la noche y el díabrilla el último rayo de la luz del presente" .

A continuación del original autógrafo figura una dedicato-ria: `"Para Paco Marfagón", que es quien me ha facilitado, gene-rosamente, fotocopia del texto ; y una indicación: "homenaje aAntonio Machado el 22-1I-90" .

Tuve la suerte, la dicha, de conocerle y de tratarle mucho, ypuedo afirmar que en él encontré siempre uno de los mejores ymás leales amigos. Su recuerdo se me une, afectivamente, al deotros amigos a los que también tuve la suerte de tratar en unaSegovia que, para algunos, entre los que me encuentro, co-mienza a ser ya ausencia, nostálgica ausencia ; una Segovia de l aque eran habitantes, Luis Martín Marcos, Juan de Contreras, Án-gel Revilla, Eugenio Torreagero, Mariano Quintanilla, Juan deVera, Mariano Grau . . . Una Segovia gentil, abierta a la palabraamable, al ingenio y a la ironía, al paseo lento, al vivir gustoso . . .Y los ojos miran atrás, y se entornan hacia dentro del corazón .

Suele decirse que nadie es insustituible . No es verdad. Alcontrario : nadie es sustituible. Y ante la ausencia de Luís Felipesiento una sensación de extrañeza . Y cada vez que retorno aSegovia pienso que puedo encontrarle en cualquier momento ,en esta misma calle quizá, o en aquella plaza, o . . . ; que no escierto que su ausencia sea definitiva . Que se trata, únicamente ,de un mal sueño, del que aún no he despertado .

Y me digo, una vez más, sus versos :

¡Las estrellas y yo solo sen el Mundo! Claro ma ren que los peces son luzy saben mirar" .

180


Creo sincera, convencidamente, que Luis Felipe Peñalos apudo haber sido un gran escritor. Su obra publicada nos d aelementos suficientes para afirmarlo . Pero renunció a ello -¿re-nunció o lo prefirió acaso?- para entregarse a su tarea de de-fensa de Segovia . De esta tarea -su mejor obra- nos queda, pa-ra siempre, un bien inestimable : el ejemplo .

181

Documents

JOSÉ MONTERO PADILLA LUIS FELIPE DE PEÑALOSA EN SU …