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5/28/2018 HISTORIA DE LA IGLESIA ADVENTISTA DEL SEPTIMO DIA.docx
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Michael Czechowski, un exsacerdote catlico originario de Polonia,haba solicitado que lo enviaran a su continente nativo para compartir sunueva fe que hablaba del pronto regreso de Cristo. Los lderesadventistas, que no estaban seguros de cun confiable y honesto era,rechazaron el pedido. A pesar de ello, Czechowski lleg a ser el primermisionero adventista en el extranjero, irnicamente, al validar lassospechas de los lderes.
Czechowski, que haba abandonado a su esposa e hijos, fue entonces patrocinado por la denominacin
cristiana del advenimiento, el principal grupo de adventistas que guardaban el domingo. Despus que le
pagaron el viaje, ignor las enseanzas de sus patrocinadores al llegar a Europa en 1864, y se puso a
ensear el mensaje adventista, ganando conversos en el continente, incluida Suiza, Hungra, Italia yRumania.
Con una estructura eclesistica recin creada, as comenz la expansin del mensaje adventista fuera de
los Estados Unidos. Pero pasaran muchos aos antes de que la Iglesia Adventista se comprometiera de
todo corazn con las misiones en el extranjero.
En la iglesia, que tena su sede en Mchigan (Estados Unidos), comenzaron los debates sobre el
significado del llamado de Cristo en el evangelio de Marcos cuando dijo: Id a todo el mundo. La
mayora de los 3500 miembros de 1863 pensaban que era suficiente llegar a la poblacin tan diversa de
inmigrantes de los Estados Unidos, dado que pensaban que esos inmigrantes podran convertir a sus
amigos y parientes de sus pases de origen.
El Congreso de la Asociacin General 1871 aprob la resolucin de enviar al hermano Matteson como
misionero a los daneses y noruegos en el estado cercano de Wisconsin.
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No fue la mejor hora de nuestra iglesia, dice el
historiador adventista David Trim, director de la Oficina de Archivos, Estadsticas e Investigaciones de
la iglesia mundial.
Mientras tanto, en Europa, algunos de los seguidores de Czechowski descubrieron accidentalmente una
revista adventista entre sus documentos que les informaba que, para su sorpresa, no eran los nicos
adventistas del mundo. Los adventistas de los Estados Unidos, que an discutan sobre la factibilidad de
llevar sus enseanzas ms all de sus fronteras, tambin se vieron sorprendidos.
Los adventistas estadounidenses en realidad se sintieron un poco avergonzados al saber que ya haba
adventistas en Europa, dice Trim.
El descubrimiento mutuo llev a que los adventistas estadounidenses invitaron a un representante de
Suiza al Congreso de la Asociacin General 1869. Esa persona lleg demasiado tarde, pero pas el
siguiente ao en los Estados Unidos aprendiendo ms de las creencias adventistas antes de regresar a su
hogar como ministro ordenado.
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En ese congreso de 1869, sin embargo, el
establecimiento de una sociedad misionera fue un paso clave para comenzar un proceso de dos dcadas
que revirti la mentalidad de la iglesia respecto de la misin. La transformacin fue ayudada por el
arrojo del pequeo grupo de fieles, que creyeron que de hecho podan alcanzar al mundo y, lo que es
ms importante, por los lderes que cada vez ms eran exmisioneros.
Elena White, la profetisa y cofundadora de la denominacin, escribi tiempo despus sus llamados ms
decididos a favor de las misiones en el extranjero, despus de pasar ella misma un tiempo en Europa en
la dcada de 1880 y en Australia en la dcada siguiente.
En 1901, declar en el Congreso de la Asociacin General: La via abarca a todo el mundo, y debe
trabajarse en cada rincn de l.
Ese mismo ao, Arturo G. Daniells lleg a ser el primer misionero elegido como presidente de la Iglesia
Adventista, despus de haber trabajado en Nueva Zelandia y Australia durante quince aos.
Es una historia digna de destacar sobre la manera en que nuestros pioneros cambiaron su forma de
pensar, porque era un grupo tan pequeo, dice Trim. La confianza de ese pequeo grupo, que pens
que poda alcanzar a todo el mundo, es asombrosa.
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El patrn de las misiones en el extranjero puede ser
rastreado al tiempo cuando la iglesia se expandi a la costa occidental de los Estados Unidos. Era 1868,
un ao antes del congreso de 1869, cuando los lderes respondieron a una solicitud de un ministro en el
lejano estado de California. John N. Loughborough y D. T. Bordeau aceptaron el llamado y trabajaron
para desarrollar lo que llegara a ser una receta para ingresar en nuevas regiones: reunir los suficientes
seguidores y entonces establecer una imprenta, una revista y una institucin de salud.
En ao 1874 fue otro ao clave para la misin: el viudo Andrews, expresidente de la Iglesia Adventista,
se embarc con sus dos hijos a Europa como el primer misionero oficial de la iglesia, y la denominacin
estableci su primer peridico misionero, Misin verdadera. Ese ao tambin se estableci el Colegio
Superior Battle Creek en Mchigan para preparar ministros para los Estados Unidos y el extranjero.
Para 1910, un flujo constante de misioneros estaba saliendo a trabajar en el mundo. Los campos
misioneros antes de la dcada de 1880 se unieron a los Estados Unidos como nuevos pases para la
misin adventista. Los alemanes asumieron responsabilidad por Egipto, el Imperio Otomano y Rusia, los
suecos por Etiopa, los britnicos por frica Oriental y Occidental, y los australianos por el sudeste
asitico y el Pacfico Sur. Jamaica tambin envi misioneros: uno de ellos, C. E. F. Thompson, se dirigi
a Ghana.
En 1912 se estableci una nueva publicacin, el Misionero trimestral, donde se comenzaron a contar
historias de las familias misioneras, entre ellos, los Stahl en Sudamrica, Gustav Perk en Rusia, los
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Robinson en Sudfrica, y otros que haban dejado los Estados Unidos sabiendo que acaso jams
regresaran.
William A. Spicer, quien fue designado presidente de la Iglesia Adventista despus de Daniells y que
haba trabajado como misionero en la India, public sus pensamientos sobre la misin en un libro de1921 titulado Nuestra historia de las misiones en los colegios superiores y secundarios. All expres:
La misinno es algo adicional al trabajo regular de la iglesia. La obra de Dios es una sola obra, que
abarca a todo el mundo []. Llevar el mensaje de salvacin a todas las personas [] es el objetivo de
cada asociacin, de cada iglesia, de cada creyente.
LA DENOMINACIN ADVENTISTA SURGI EN MEDIODEL DEBATE SOBRE LA ESTRUCTURA DE LA IGLESIA.
James White
Jaime White rechaz la nominacin de ser el primer presidente de la Iglesia Adventista del Sptimo Da, temiendo que algunos lovieran como una excusa para quedarse con el poder, despus de que l tanto haba abogado por una estructura eclesistica formal.[fotografas por cortesa de la Secretara de Archivos, Estadsticas e Investigacin]
Elizabeth Lechleitner
Una dcada despus del Gran Chasco, el naciente movimiento adventistase encontraba en otra encrucijada. Pero mientras 1844 haba sacudido elcentro doctrinal del movimiento, esta crisis hizo que los lderesdebatieran cuestiones ms tangibles.
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Alrededor de 1854, el movimiento casi se desintegra porque no poda pagar a sus ministros. All estaba
[John Norton] Loughborough, que peda algo que comer, dijo el historiador adventista David Trim.
Lleg a un punto que l ni siquiera poda mantener a su familia.
Profundamente desanimados, en 1856 Loughborough, John Nevins Andrews y otros de los primerosobreros se retiraron a Waukon (Iowa, Estados Unidos), donde planearon trabajar en sus campos y ser
misioneros. Pero el ambiente rural les brindaba pocas oportunidades de testificar, y el clima inclemente
forz a
Loughborough a dedicarse a la carpintera en lugar de la agricultura.
Poco despus, Elena y Jaime White, cofundadores de la iglesia, llegaron sin aviso para visitar a los
obreros aparentemente en falta.
[Elena] encuentra a Loughborough y le dice en tres ocasiones: Qu haces aqu, Elas? y de alguna
manera la vergenza lo hace regresar al trabajo, dijo Trim. White se refera al profeta del Antiguo
Testamento, que desconfi de Dios y se escondi en una cueva.
No obstante, ese es el momento en que se dan cuenta de que tienen que hallar una manera de apoyar a
sus ministros, y eso significa que la iglesia necesitaba un tesorero, dijo Trim.
Esta historia enfatiza el malabarismo que enfrentaron los primeros adventistas: an se rehusaban a
adoptar una estructura eclesistica formal, pero estaba cada vez ms claro que con solo el entusiasmo no
alcanzaba para esparcir con efectividad el mensaje del evangelio.
Sin embargo, los pasos que tena que dar la iglesia segua siendo un tema que provocaba tensiones.
Para la dcada de 1840, el movimiento adventista consista de grupos esparcidos apenas conectados
mediante peridicos tales como la Revista Adventista y por espordicas Conferencias Sabatistas, en la
que los creyentes se reunan a analizar y, la mayora de las veces, a discutir los puntos ms detallados dela doctrina. Difcilmente dos estaban de acuerdo, dijo Elena White al referirse a la segunda de esas
conferencias, que se llev a cabo en 1848.
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En 1863, veinte delegados se reunieron en un
edificio de Battle Creek (Mchigan, Estados Unidos), para organizar la Asociacin General de los
Adventistas del Sptimo Da, creando as una estructura formal para el movimiento adventista. En
efecto, segn el historiador adventista George Knight, se necesitara un liderazgo enrgico, orientado a
los objetivos, para formar un cuerpo de creyentes dentro de las condiciones caticas del adventismoposterior al Gran Chasco.
A pesar de los temores persistentes de que la estructura eclesistica era equivalente a Babilonia (es
decir, que favoreca la religin organizada sobre la simpleza del evangelio), lderes como los White y
Jos Bates estaban cada vez ms resueltos a hacer un llamado para formar una estructura.
La organizacin formal, sostenan, le dara a la iglesia los fundamentos financieros y legales que
necesitaba para ser dueos de propiedades, pagar y enviar pastores, y determinar la manera en que las
congregaciones locales deban relacionarse entre s y con el liderazgo de la iglesia.
Jaime White fue ms all, y sugiri que la estructura era una medida de la buena mayordoma. En 1860,
en un nmero de la Review, dijo que era peligroso dejar con el Seor lo que l nos ha dejado a
nosotros, y quedarnos en el asiento de hacer poco y nada. Le preocupaba especialmente el ministerio de
publicaciones de la iglesia, que quera que estuviera asegurado de manera legal.
El impulso para la causa surgi en los meses que precedieron a lo que sera una reunin administrativa
definitoria en Battle Creek (Mchigan) en octubre de 1860. All, White desafi a sus rivales a quehallaran un pasaje bblico contra la organizacin. Cuando no lograron hacerlo, el grupo decidi avanzar.
Adopt una constitucin para incorporar legalmente la asociacin publicadora de la iglesia, amonest a
las iglesias locales a tener las propiedades de la iglesia o templos en forma legal y escogi un nombre
para los creyentes esparcidos: adventistas del sptimo da.
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A comienzos de 1861, en otra reunin administrativa en Battle Creek, los lderes de la iglesia del Oeste
Medio de los Estados Unidos hicieron otras tres recomendaciones, aadiendo al fundamento que haban
desarrollado el ao anterior. Incorporaron oficialmente la Asociacin Publicadora Adventista del
Sptimo Da, apoyaron la formacin de asociaciones por estado o distrito, e instaron a las iglesias locales
a que mantuvieran registros precisos de la feligresa y las finanzas.
John Byington fue el primer presidente de la
Iglesia Adventista del Sptimo Da. Los adventistas del este de los Estados Unidos, dijo Knight,
reaccionaron con contundencia, rechazando las recomendaciones y acusando a White y sus partidariosdel Medio Oeste de apostasa.
White afirm que la paralizacin era culpa del silencio de destacados lderes de iglesia sobre el tema de
la organizacin, dijo Knight. Elena White estuvo de acuerdo, deplorando una falta de coraje moral
entre los lderes silenciosos. Ella haba recibido una visin donde se le indicaba que la real Babilonia
era la confusin y el conflicto que acompaaban la falta de organizacin.
En lugar de ser un pueblo unido, cada vez ms fuerte, estamos en muchos lugares pero somos poco ms
que fragmentos quebrados, an diseminados y cada vez ms dbiles. Hasta cundo esperaremos?,
escribi Jaime White en la Review en agosto de 1861.
Poco despus, comenzaron a llover apoyos para la organizacin. En octubre, los adventistas de Mchigan
fueron los primeros en organizar una asociacin estatal. En los siguientes doce meses, los adventistas de
otros seis estados de los Estados Unidos siguieron su ejemplo. Con excepcin de algunos pocos focos de
resistencia en el Este, para 1862 el avance hacia la organizacin pareca imparable.
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Aun as, sin un organismo principal de gobierno, los lderes como Jaime White, Joseph Harvey
Waggoner y Andrews estaban preocupados porque la iglesia perdera los beneficios plenos de la
organizacin. Propusieron entonces que cada asociacin estatal enviara un ministro, o delegado, a una
asamblea general, o asociacin general. El factor motivador era la necesidad de contar con unministerio pastoral confiable. Si los pastores tenan derecho a recibir contribuciones sistemticas,
razonaba White, entonces la iglesia tena derecho a un trabajo sistemtico.
Fue as que en mayo de 1863, veinte delegados, diez de los cuales representaban a la Asociacin de
Mchigan, se reunieron en Battle Creek para organizar la Asociacin General de los Adventistas del
Sptimo Da con el propsito de garantizar la unidad y la eficiencia en el trabajo, y promover los
intereses generales de la causa de la verdad presente, y de perfeccionar la organizacin de los adventistas
del sptimo da.
Los delegados tambin adoptaron un acta constitutiva, una constitucin modelo para las asociaciones
estatales, y eligieron los tres administradores principales de la administracin: el presidente, el secretario
y el tesorero. Aunque fue electo por unanimidad, Jaime White rechaz la presidencia, temiendo que el
cargo empaara su campaa en favor de la organizacin como una apropiacin calculada de poder
personal, dice Knight. En su lugar, John Byington fue elegido como el primer presidente de la
organizacin.
No obstante, el hombre que estuvo detrs del establecimiento de un marco de toma de decisiones para la
iglesia ya era una de sus influencias ms poderosas. White haba introducido la nocin de que si las
acciones y las prcticas no estaban prohibidas por la Biblia y no constituan una violacin del sentido
comn, eran legtimas, dijo Knight. Esto desafiaba la interpretacin estrictamente literal que favorecan
los primeros adventistas.
El apego a esa comprensin ms estrecha habra paralizado en gran medida a la iglesia al avanzar a
travs del tiempo y las culturas, dijo Knight.
Con una comprensin y una aceptacin ms generalizada de la estructura, la iglesia llegara a estar mejor
equipada para refinar su identidad doctrinal y organizarse para la misin.
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LAS PUBLICACIONES OCUPARON UN LUGAR CENTRALEN LOS COMIENZOS DE LA IGLESIA ADVENTISTA
Publishing
Uras Smith (derecha), y otros lderes adventistas de las publicaciones reconstruyen en la dcada de 1890 los primeros tiemposdel ministerio de publicaciones de la iglesia. [fotografas por cortesa de la Secretara de Archivos, Estadsticas e Investigacin]
Elizabeth Lechleitner
En julio de 1849, Jaime White empac ejemplares de La verdad presenteen un maletn prestado y camin trece kilmetros hasta la oficina decorreos de Middletown (Connecticut, Estados Unidos). Estaba dando all
los primeros pasos de lo que llegara a ser un ministerio mundial depublicaciones.
Semanas antes, el joven y pobre pionero adventista haba convencido a un editor local que le imprimiera
mil ejemplares delprimer nmero de lo que hoy se conoce como la Revista Adventista. White
convenci al editor de que las donaciones de los adventistas diseminados en el noreste de Estados
Unidos llegaran a cubrir los 64.50 que costaba la impresin. Y tena razn.
Cuando Dios est detrs de algo, lo que parece imposible es en realidad una oportunidad para que el
Espritu Santo obre un milagro, dijo Wilmar Hirle, actual director asociado de Ministerios de
Publicaciones de la Iglesia Adventista mundial.
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Esa revista con el tiempo lleg a ser lo que el historiador adventista George Knight denomin
probablemente el instrumento ms efectivo en la tarea de reunir y unir el cuerpo de creyentes que en la
dcada de 1860 llegaran a ser los adventistas del sptimo da.
En la dcada de 1840, solo haba unos pocos cientos de adventistas sabatistas, pero ese nmero lleg a3500 en 1863 cuando se estableci oficialmente la Iglesia Adventista del Sptimo Da. Las primeras
publicaciones peridicas de la iglesia no solo estimularon el evangelismo, sino que tambin brindaron un
sentido de comunidad espiritual entre los primeros creyentes. Ms tarde, las publicaciones se
extendieron para incluir oportunidades de ministerio laico que tradicionalmente estaban limitadas a los
pastores.
Para 1844, cuando los milleritas esperaron errneamente la segunda venida de Cristo, los primeros
creyentes ya haban distribuido asombrosamente ocho millones de impresos, dijo Hirle. El editor
Joshua Himes, de Boston (Massachusetts), imprima folletos sobre el sbado y grficos que ilustrabanlas profecas de Daniel y Apocalipsis que acompaaban los sermones de Miller en las iglesias pequeas
de todo el noreste de los Estados Unidos.
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No obstante, no fue sino hasta 1848, cuando la
pionera y profetisa Elena White vio en visin que su esposo Jaime deba lanzar una revista, querealmente se dio inicio al ministerio de las publicaciones.
En la visin, White dijo que Dios le peda a Jaime que imprimiera un pequeo peridico y que lo
repartiera entre la gente. A pesar de los desafos financieros del matrimonio, White dijo que se le haba
asegurado que, con fe, de esa publicacin brotaran rayos de luz que [habran] de circundar el globo
(Notas biogrficas, p. 137).
Los primeros nmeros de La verdad presente fueron una plataforma para que los lderes de iglesia
clarificaran lo que haba sucedido en 1844, analizaran doctrinas emergentes tales como los mensajes de
los tres ngeles y, por sobre todo, explicaran la verdad del sbado. En efecto, fue el sbado como da de
reposo lo que llev a la iglesia a iniciar su primera casa publicadora.
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Jaime y Elena White, entre otros fundadores de la iglesia, comenzaron a preocuparse porque una revista
que proclamaba el sbado estaba siendo publicada por alguien que a menudo trabajaba en sbado, dijo
Hirle.
Fue as que en 1853, los primeros adventistas votaron establecer una casa editora en el estado de NuevaYork. Era una casa en el sentido ms estricto de la palabra: los primeros lderes de las publicaciones
vivan y trabajan juntos en una casa alquilada de la ciudad de Rochester. El pionero adventista Hiram
Edson, que poco tiempo antes haba vendido su granja, prest el producto de la venta para adquirir una
prensa manual Washington. A la mquina le llevaba tres das producir un ejemplar de lo que entonces se
llam The Second Advent Review and Sabbath Herald.
Como no tenan dinero para comprar una cortadora
de papel, se cuenta que el pionero adventista Uras Smith recortaba los bordes de las revistas con su
navaja. Aos despus, Smith escribi: Al hacerlo nos salan ampollas en las manos, y a menudo la
forma de los folletos no estaban ni por cerca de la perfeccin de las doctrinas que enseaban.
Para 1855, el ministerio de las publicaciones de la iglesia se haba trasladado a Battle Creek (Mchigan),y Smith, de solo 23 aos, era el editor, una funcin que de una u otra forma mantendra durante toda su
vida.
A medida que el ministerio de publicaciones de la iglesia sigui creciendo a mediados del siglo XIX, el
joven inmigrante canadiense George King desarroll la idea de ventas por suscripciones para las
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publicaciones adventistas. Estaba buscando una nueva salida despus de que Jaime White lo inst a
explorar una carrera que fuera ms all de la funcin tradicional de pastor.
Jaime le pidi que predicara, pero le fue muy mal, dijo Hirle. Y as fue que comenz el evangelismo
por impresos.
Los esfuerzos de George King de predicar en Estados Unidos y Canad de casa en casa, en lugar de
hacerlo desde el plpito, ayudaron a transformar el adventismo en una denominacin mundial. Para fines
de la dcada de 1870, King estaba vendiendo libros y suscripciones a revistas tales como Seales de los
tiempos.
Para 1903, la Iglesia Adventista haba alcanzado a setenta pases. En muchos de esos lugares, [la
iglesia] estableci una presencia gracias a la obra de la evangelizacin por impresos, dijo Hirle.
A comienzos del siglo XX, el ministerio de
evangelismo por impresos de la iglesia se extendi e incluy a los primeros estudiantes colportores. Hoy
da, ms de veinte mil estudiantes adventistas en el mundo an dedican sus recesos escolares para vender
libros que los ayudan a cubrir los costos de estudio y a compartir el mensaje adventista de esperanza.
As como el evangelismo por impresos ha crecido, as lo ha hecho tambin el ministerio de las
publicaciones, que an sigue siendo el centro del adventismo, dijo Hirle.
Hace poco, la Iglesia Adventista se embarc en una distribucin mundial masiva de una adaptacin
moderna de El conflicto de los siglos, un libro escrito por Elena White que destaca la historia de
pequeos grupos de personas que preservaron una forma autntica del cristianismo a lo largo de la
historia.
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Hirle dijo que Jaime White, el editor pionero de la Iglesia Adventista, quien durante treinta aos de
escribir, imprimir y establecer casas editoras en diversos pases a menudo luch para encontrar apoyo y
sobreponerse a desafos financieros, seguramente se sorprendera a ver el amplio apoyo que hoy da
reciben las publicaciones en la iglesia.
Si pudiera ver las casas editoras que en un da imprimen lo que a l le llevaba un ao, creo que se
sentira sumamente feliz, dijo.
LA IGLESIA ADVENTISTA DEL SPTIMO DA SURGI DELFERVOR RELIGIOSO DEL SIGLO XIX
Reunin en el campamento millerita
La Iglesia Adventista temprana emergi de un clima de reavivamiento religioso en el noreste de los Estados Unidos. Losencuentros en tiendas de evangelizacin, como esta reunin de milleritas, fueron un sello distintivo del Segundo Gran Despertar.[fotografas por cortesa de la Secretara de Archivos, Estadsticas e Investigacin]
Elizabeth Lechleitner
Cuando el predicador bautista Guillermo Miller dijo que Jess regresarael 22 de octubre de 1844, muchos estadounidenses no solo sesorprendieron de que hubiera fijado una fecha. La idea de que Cristoregresara literalmente era en s misma una propuesta radical.
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Para el siglo XIX, la mayora de las iglesias establecidas estaban predicando que la Segunda Venida era
ms un mito que una realidad, y ms humana que divina. Los lderes religiosos enseaban que una
segunda venida metafrica simbolizaba el surgimiento de una nueva generacin con responsabilidad
social.
A pesar de ello, la creencia millerita en una segunda venida literal de Cristo junto con nuevas
comprensiones profticas, el sbado y el estado de los muertosmostraran ser fundamentales. Estas
doctrinas clave llegaran a ser el ancla del movimiento adventista temprano en medio de un clima de
agitacin religiosa.
A comienzos del siglo XIX, el noreste de los Estados Unidos era una fuente de reavivamientos. El as
llamado Segundo Gran Despertar inici movimientos como el de la Sociedad Unida de Creyentes en la
Segunda Aparicin de Cristo, los primeros mormones, los precursores de los Testigos de Jehov, los
milleritas y una hueste de grupos excntricos. En efecto, el norte del estado de Nueva York fuedenominado el distrito quemado, para referirse al hecho de que los evangelistas haban agotado el
nmero de incrdulos en la regin.
En ese marco, los milleritas soportaron el Gran Chasco, ese momento en que el grupo, con gran
expectativa pero sin xito, aguard el regreso de Cristo. Con lo que el historiador adventista George
Knight denomina la certeza matemtica de la fe hecha aicos, muchos milleritas abandonaron el
movimiento.
Los que permanecieron quedaron divididos por el significado del 22 de octubre. Algunos afirmaron que
la fecha era totalmente incorrecta. Otros dijeron que Cristo haba regresado, pero solo en un sentido
espiritual e ilusorio. Un tercer grupolos futuros lderes de los primeros adventistas del sptimo da
llegaron a convencerse de que la fecha era la correcta, pero el evento no.
Reanimados por esta posibilidad, se reagruparon y regresaron a las Escrituras, determinados a descubrir
la verdad. As llegaron a la conclusin de que en lugar de regresar a la Tierra el 22 de octubre, Jess
haba comenzado la ltima fase de su ministerio expiatorio en el santuario celestial.
Una joven metodista llamada Elena Harmon (ms tarde White) brind credibilidad proftica a esta
interpretacin. La visin que tuvo en diciembre de 1844, en la que vio una senda recta y estrecha hacia
el cielo confirm que esa profeca se haba cumplido en efecto el 22 de octubre, y motiv el enfoque
central en Cristo que tiene la denominacin.
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El historiador adventista se siente asombrado por la capacidad de los milleritas de trascender un mensaje
inicial espectacularmente equivocado. Aunque afirma que es verdad que los movimientos
apocalpticos a menudo suelen conservar algunos de sus seguidores aun cuando sus ideas son refutadas
abiertamente, estos no constituyen la clase de persona que llegan a fundar una iglesia demasiado
exitosa. Los adventistas as lo hicieron: eso no prueba que Dios est de nuestro lado, pero prueba que
contamos con lderes inteligentes y racionales.
Acaso ms revelador resulta la creencia de la Iglesia Adventista de que Dios estaba detrs de los
eventos, dice Trim. Creo que los primeros adventistas tenan un slido llamado del Espritu Santo. Es
un pensamiento terriblemente pasado de moda, pero yo creo que nuestra iglesia fue llamada a la
existencia en ese momento con un propsito, dice.
Tambin demostr un sincero deseo de conocer la verdad bblica, dice. Esto es lo que los sostuvo
cuando todos los dems milleritas fueron por caminos excntricos o por sendas comunes y sumamente
cautelosas, dice Trim.
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Para los primeros creyentes adventistas, la as llamada verdad presente era dinmica. Y en efecto, los
pocos cientos de adventistas sabatistas de la dcada de 1840 llegaron a ser unos tres mil en 1863 cuando
se organiz oficialmente la Iglesia Adventista, y en esos aos, sus comprensiones profticas pasaron por
cambios no menos asombrosos.
En un comienzo, pioneros tales como Jaime White se mostraron fervientes en su llamado a salir de
Babilonia. En un primer momento, este era un mensaje para dejar la religin organizada y regresar a la
simplicidad del evangelio.
Esto no sorprende a los historiadores religiosos, que han observado que cada pocas generaciones, la
gente se siente impulsada a regresar a los fundamentos de su fe. En efecto, esta tendencia fue la que
impuls el Segundo Gran Despertar.
Sin embargo, lo asombroso, dice Trim, es el giro que tuvo White a medida que se expanda el
movimiento. Para 1859, Jaime haba llegado a creer que el llamado a salir de Babilonia significaba en
realidad abandonar la desorganizacin y aceptar la estructura eclesistica.
Estopor supuesto se adapta muy bien al hecho de que Babilonia deriva de Babel (o confusin) y que
White dice que el llamado a salir de Babilonia en realidad busca abandonar toda esa corriente de fervor
religioso catica e increblemente entusiasta y terminar en algo un poco ms organizado. De manera que
el significado de salirde Babiloniasufre un gran giro y cambia por completo,dice Trim.
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No obstante, al pasar a la estructura de la iglesia, los primeros adventistas no perdieron su celo inicial.
Por el contrario, lograron encontrar un equilibrio entre el radicalismo que invada gran parte de las
expresiones religiosas de mediados del siglo XIX y el conservadurismo que le sigui. Es un equilibrio
que la Iglesia Adventista mantiene an hoy, dice Trim, y dice que tiene sus races en la vieja tensin
entre el espritu y el orden, que se remonta a la iglesia medieval primitiva.Necesitamosel espritu porque el orden se vuelve formal y osificado y jerrquico, pero tambin es
necesario el orden porque el espritu se vuelve catico y se destruye a s mismo,dice.
La pionera adventista Elena White fue esencial a la hora de preservar este equilibrio. Mediante el don
proftico, Trim dice que White estuvo en un lugar ideal para temperar las inevitables rias entre los
primeros lderes adventistas, como por ejemplo su esposo Jaime, Jos Bates, Uras Smith, John N.
Andrews, George Butler y otros. Todos ellos eran individuosde increble poder y motivacin
individual,personalidades que son necesarias para impulsar un movimiento localizado hasta convertirlo
en una iglesia global, dice.
Si bien a algunos estudiantes de la historia de la iglesia les podra resultar desconcertante la tensin
entre los principales lderes, Trim dice que el movimiento adventista temprano es nico porque
permaneci unido en un clima en el que la mayora de los grupos religiosos mostraban la tendencia a
dividirse, a seguir a un lder carismtico, o a directamente disolverse. A pesar de los desacuerdos, los
adventistas se agruparon en ltimo trmino detrs de la verdad bblica, lo que fue logrado por medio de
la oracin y el estudio de la Biblia o revelado mediante la profeca.
Estos hombres estn completamente convencidos
de que [Elena White] es la mensajera de Dios. Si ella dice: Se me ha mostrado esto, ellos lo aceptan
aun cuando en un comienzo no les guste lo revelado, dice Trim.
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Estn muy listos a debatir, y lo hacen en trminos muy directos, pero tambin se muestran muy rpidos
para perdonar y no guardan rencores, dice Trim. Muestran una apertura que haramos bien en imitar.
Puede que para los adventistas del sptimo da modernos, los pioneros adventistas resulten peculiares.
Algunos no crean en la Trinidad o en la persona del Espritu Santo, y pensaban que Cristo era un sercreado. Muchos observaban el sbado de las 18.00 del viernes hasta las 18.00 del sbado, sin fijarse en
los horarios de la puesta de sol. Tampoco tenan problema alguno en consumir carnes de animales
impuros. Todo esto, sin embargo, habra de cambiar en las siguientes dcadas.
Lo que los adventistas actuales podran reconocer probablemente en sus antepasados es la conviccin.
En el sbado, la segunda venida, el santuario y otras creencias fundamentales, los primeros adventistas
crean que haban descubierto lo que Trim denomina una clave para desatar todo el conjunto de
verdades bblicas.
Se dan cuenta de que todas estas doctrinas estn diciendo lo mismo sobre Dios. Todas estn apuntando
en la misma direccin, y es por ello que los primeros adventistas se sienten impulsados a ponerse de su
lado.
Esta preocupacin por la verdad resulta inspiradora, dice.