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"El rol de las políticas del conocimiento en las estrategias de desarrollo: las políticas de recursos humanos en ciencia y tecnología (RHCT) en Argentina y Colombia" Ariel Gordon - Centro Redes-CONICET [email protected] [email protected] Prepared for delivery at the 2007 Meeting of the Latin American Studies Association, Montreal, Canada September 5-8, 2007

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"El rol de las políticas del conocimiento en las estrategias de desarrollo: las políticas de recursos humanos en ciencia y tecnología (RHCT) en Argentina y Colombia" Ariel Gordon - Centro Redes-CONICET [email protected] [email protected] Prepared for delivery at the 2007 Meeting of the Latin American Studies Association, Montreal, Canada September 5-8, 2007

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Introducción La transición hacia una economía basada en el conocimiento ha puesto a los recursos humanos en ciencia y tecnología (RHCT) en el centro del debate académico y político, no sólo en las áreas de educación y de mercados laborales, sino también en las áreas de política científica, tecnológica y de innovación (CTi) (OCDE 2000). Dentro del amplio campo de los RHCT, la cuestión de la movilidad ha adquirido creciente interés, tanto en el ámbito académico como en el ámbito de las políticas públicas para el desarrollo de los sistemas regionales y nacionales de innovación. Las transformaciones de las últimas décadas ligadas a la intensificación de la circulación global del capital, la integración a escala mundial de las actividades productivas, la creciente presión por la búsqueda de la competitividad y la innovación tecnológica, han sido acompañadas por un cambio cuantitativo y cualitativo en la dinámica de las migraciones de recursos humanos altamente calificados. La década de 1990 ha experimentado un resurgimiento de la migración de recursos humanos altamente calificados, o recursos humanos en ciencia y tecnología (RHCT) que podemos resumir en los siguientes puntos:

• Incremento cuantitativo de las migraciones de personal altamente calificado. Impacto del desmembramiento de la URSS en la migración internacional de científicos y tecnólogos.

• Intensificación de la dinámica policéntrica de la migración del personal altamente calificado, según países y según disciplinas y líneas de investigación. Caso de la UE: presenta un saldo de migración altamente calificada positivo frente al resto del mundo, pero un saldo negativo frente a los EEUU, en particular en líneas de investigación consideradas clave por la UE.

• Cambio cualitativo en la dinámica de las migraciones. Ascenso de la movilidad como categoría analítica que convive y se superpone con la categoría de migración.

• Impacto de las TICs en la construcción de una nueva dinámica de trabajo en red y del trabajo en línea. Situación caracterizada como una migración de habilidades pero no de personas, que ha sido denominada como una “migración virtual” por algunos autores (Aneesh, 2000, citado en Pellegrino y Martínez Pizarro, 2001).

• Resurgimiento del interés por la migración y la movilidad de RHCT tanto en la agenda internacional de políticas públicas, como en la agenda académica.

América Latina no es ajena a esta tendencia mundial. Muy por el contrario, la región ha sido uno de los principales protagonistas de los debates tanto políticos como académicos sobre la fuga de cerebros en las décadas del sesenta y setenta del siglo pasado, y es también un protagonista destacado de los renovados debates y propuestas en torno al tema. Este trabajo busca abordar el estudio de los enfoques teóricos que orientan la discusión académica sobre migración y movilidad de científicos y su impacto en las políticas públicas en la materia en Argentina y Colombia. Se analizará la literatura reciente sobre las redes de vinculación con las diásporas científicas y su impacto en el desarrollo. Se revisa parte de la experiencia internacional en la materia, y se focaliza en el estudio de las políticas de recursos humanos en ciencia y tecnología en Argentina y Colombia.

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El presente documento está organizado en cuatro partes. La primera hace un repaso de los principales enfoques teóricos en la discusión sobre movilidad y migración de RHCT. En particular, se abordan los enfoques teóricos sobre Brain Drain ó Transferencia Inversa de Tecnología (TIT) y Brain Gain, brain network ó diaspora option. Esta revisión busca establecer el marco en el que se está desarrollando la discusión sobre la migración y la movilidad internacional de recursos humanos en CyT. La segunda parte hace referencia al papel que juegan las diásporas en las estrategias de desarrollo de los sistemas nacionales y regionales de ciencia, tecnología e innovación. En esta sección del documento se pone de relieve la importancia cada vez mayor que tiene el desarrollo de estrategias de revinculación de RHCT emigrados, en particular para regiones emergentes y en transición. La tercera parte del documento destaca la relevancia de la problemática de la movilidad de RHCT en la arena internacional. La cuestión de la movilidad de científicos y tecnólogos ha adquirido un lugar preponderante en la agenda de trabajo de los Departamentos Ciencia, Tecnología e Innovación de los principales organismos multilaterales; en el marco de la elaboración de políticas para una economía global cada vez más basada en el conocimiento. La cuarta parte está dedicada al análisis del caso argentino y colombiano. Se hace una presentación del sistema de ciencia, tecnología e innovación argentino y colombiano, y se analizan las políticas públicas en recursos humanos en ciencia y tecnología en los dos países. Por último, se focaliza en los programas de captación de la diáspora científica de ambos países: la Red Caldas de Colombia y el Programa Raíces de la Argentina.

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- PRIMERA PARTE -

La Discusión Teórica: las Perspectivas del “Brain Drain” y “Brain Gain”

A pesar del reciente auge que ha tenido el estudio de la movilidad internacional de RHCT, en el contexto de un creciente interés por la captación de personal altamente calificado para las industrias intensivas en conocimiento, su origen no es nuevo. La literatura identifica el origen del debate por la movilidad internacional de científicos y tecnólogos en Gran Bretaña en la década de 1960, en el debate suscitado en ámbitos académicos y políticos en torno a la “fuga de cerebros” (brain drain). Este término fue utilizado por primera vez en 1963 en un reporte de la Royal Society de Londres para describir la emigración de científicos e intelectuales británicos hacia los EEUU. A mediados de la década de los `60 surgían también en América Latina estudios sobre la “fuga de cerebros”, pudiendo citarse, por ejemplo, los trabajos pioneros de Enrique Oteiza y Francisco Suarez para el caso argentino. La denominada “fuga de cerebros” ocupaba un lugar central en la agenda de la política científica y tecnológica de los países en desarrollo (PED) en la década de los sesenta, ya que era considerada como un drenaje de recursos fundamentales para las estrategias desarrollistas por entonces implementadas, de construcción de capacidades en ciencia y tecnología ligadas al desarrollo industrial endógeno. Consideramos, sin embargo, que el origen de la discusión por la migración internacional de los RHCT1, y más importante aún, de las políticas públicas al respecto, puede rastrearse aún una década más atrás. La importancia del intercambio internacional de información científica, vinculada a la creciente especialización de la investigación, ya había sido señalada por Vannevar Bush (1945) en su mítico informe al Presidente de los Estados Unidos de América F. D. Roosvelt. En este sentido, el Director de la Oficina de Investigación Científica y Desarrollo de los EEUU aconsejaba al gobierno norteamericano estimular el establecimiento de investigadores extranjeros, a través, por ejemplo, del otorgamiento de becas de investigación internacionales. La atracción de investigadores extranjeros –y la formación de RRHH nacionales- era considerada una estrategia fundamental para que los EEUU pudieran mantener el liderazgo en investigación científica y tecnológica que habían alcanzado durante el gran esfuerzo de la Guerra. Podemos apreciar como la tendencia hacia la globalización de la actividad científica y tecnológica, que ha visto una importante profundización en las últimas décadas, tiene arraigados orígenes en la política norteamericana de posguerra. Brain Drain ó Transferencia inversa de tecnología (TIT) Siguiendo a Meyer (Meyer et al., 1997), consideramos que las distintas aproximaciones teóricas al estudio de la movilidad de RHCT pueden ser clasificadas en dos grandes perspectivas. La primera es la denominada “fuga de cerebros” o brain drain, y es también la que primero se ha desarrollado cronológicamente. Como señalamos precedentemente, esta perspectiva surgió como concepto para el análisis de la emigración de científicos y tecnólogos británicos a los EEUU en la década de 1 Utilizamos el término Recursos Humanos en Ciencia y Tecnología (RHCT) en su definición más amplia, siguiendo la definición del Manual de Canberra de la OCDE ( OCDE: Human Resources in Science & Technology (Canberra Manual) OCDE/GD(95)77 ), según la cual constituyen RHCT aquellas “personas que completaron la educación postsecundaria o estén trabajando en una ocupación asociada a la ciencia y la tecnología” (OCDE, Manual de Canberra, 1995: 8).

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1960. El termino brain drain o fuga de cerebros se ha popularizado universalmente y se ha utilizado para referir a la emigración de recursos humanos altamente calificados de un país a otro. El concepto del brain drain se basa en un enfoque individualista-metodológico, y asume una mirada macro sobre la problemática de la migración. Por otra parte, se basa en el supuesto del traslado permanente de los emigrados (Mármora, 1996). El enfoque del brain drain a su vez puede ser clasificado en dos perspectivas diferentes en cuanto a sus diagnósticos, prospectivas y recomendaciones. Pellegrino y Martínez Pizarro (2001) en un estudio preparado para la CEPAL, clasifican a las corrientes hegemónicas durante las décadas de 1960 y 1970 en “nacionalistas” e “internacionalistas”. Los internacionalistas asumían a una mirada liberal, basado en los supuestos neo-clásicos de la economía, según la cual el capital humano emula a los movimientos del capital físico en su movimiento hacia las regiones donde su productividad y su retribución es más alta. Esta perspectiva asume que el sujeto que migra y el país receptor se benefician de la migración, a la vez que el país emisor no se ve necesariamente afectado. La política pública que se deriva de este enfoque es la no interferencia en la movilidad de las personas (Adams, 1971, citado por Pelegrino y Martínez Pizarro, 2001), de manera de no interferir en la óptima asignación de recursos por parte de los incentivos del mercado. Por su parte, la perspectiva “nacionalista”, asumía que el capital humano es un elemento indispensable para el desarrollo económico de cada país y que la emigración de recursos calificados es un factor negativo porque erosiona la productividad marginal del capital humano remanente y se convierte en una pérdida neta para los países de origen, que en la medida en que realizan inversiones de dineros públicos en dicha capacitación profesional, resultarán perdedores netos en beneficio de los países más ricos (Adams, 1971, citado por Pellegrino y Martínez Pizarro, 2001). La problemática del brain drain ocupó un lugar importante en la agenda de los organismos del sistema de Naciones Unidas, en particular en la UNCTAD y en la CEPAL. En el año 1972, con motivo de la tercera reunión de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD, por sus siglas en inglés) celebrada en Santiago de Chile, se acuñó un nuevo concepto que intentaba quitar el contenido emotivo ligado al término “fuga de cerebros”, la transferencia inversa de tecnología (TIT). La TIT incluye la movilidad de todos los recursos humanos calificados, y no sólo la de los científicos y técnicos. El enfoque de la TIT ayudó a institucionalizar una perspectiva explicativa de centro-periferia ya presente en los estudios sobre el brain drain de teóricos provenientes del tercer mundo (por ejemplo en los trabajos de Oteiza, 1971). La transferencia inversa de tecnología sería la terminología adoptada por los organismos internacionales a partir de entonces. El enfoque de la TIT de la UNCTAD dio lugar a numerosos estudios, conferencias y propuestas orientadas a combatir los efectos negativos de la emigración para los países de origen. La propuesta más famosa surgida del seno de la TIT fue la realizada por el economista de origen hindú Jagdish Bhagwati, en el marco de la UNCTAD . Bhagwati (1977) propuso extender el impuesto a las ganancias de los países de origen a los emigrados altamente calificados viviendo en países desarrollados, de manera que éstos tuvieran que hacer frente a los impuestos del país receptor y del país de origen. Esta propuesta tuvo amplio eco en los círculos académicos y políticos, como en los medios de comunicación en general. La propuesta del denominado “impuesto Bhagwati” fue discutida largamente en la UNCTAD y hubo reiterados intentos para su implementación. Contó con el apoyo de reconocidos figuras, como la del economista ganador del premio nobel Jan Tinbergen, aunque nunca logró implementarse. Actualmente el “impuesto Bhagwati” ha vuelto a la escena de la discusión académica y política, en el marco del resurgimiento del interés por la problemática de la migración y movilidad de recursos humanos altamente calificados.

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De acuerdo con Brown (2000), la perspectiva del brain drain aquí presentada es subsidiaria del enfoque del capital humano elaborado por Gary Becker en la década de 1960. Según este enfoque, la formación educacional, las habilidades, las destrezas y las competencias que un individuo posee son su capital humano individual. Por lo que de acuerdo con esta perspectiva, la migración de recursos humanos altamente cualificados supone una pérdida neta para el país emisor, ya que pierde el capital humano incorporado en el emigrante. Y lo que torna aún más grave a esta situación, desde la perspectiva de los gestores públicos, es que se trata de capital humano financiado con fondos públicos. En síntesis, la evaluación de la “fuga de cerebros” desde esta perspectiva supone un simple cálculo de contabilidad, basándose en el cálculo de saldos migratorios de recursos humanos altamente cualificados entre países. Las políticas públicas diseñadas según esta perspectiva tienen por objetivo contrarrestar la pérdida que supone la fuga de cerebros. De acuerdo con (Brown, 2000), éstas incluyen tres tipos de estrategias, a las que nosotros agregamos una cuarta: - Políticas Restrictivas: Su objetivo es volver a la emigración más dificultosa. Un ejemplo de este tipo de políticas es el servicio militar obligatorio. - Políticas de Incentivos: Su objetivo es tornar a la emigración menos atractiva. Por ejemplo, la oferta de incentivos para los recursos humanos altamente cualificados para que permanezcan en el país. - Políticas Compensatorias: Brown (2000) cita a Bhagwati (1977), a quien referimos precedentemente, como un ejemplo de políticas compensatorias a través del cobro de impuestos. Las formas de implementación de las políticas impositivas sobre la migración van tanto desde el cobro de impuestos al país receptor, como la imposición de impuestos del país de origen y del país receptor al propio migrante (el denominado “impuesto Bhagwati”), hasta la implantación de políticas de compensación para el país emisor en el marco de los organismos multilaterales de comercio. Sin embargo, Brown sostiene que este tipo de iniciativas son ineficaces por ser una disuasión temporal y no permanente. Consideramos que esta crítica no es válida para iniciativas como la del “impuesto Bhagwati”, ya que no se trata de una disuasión temporal, sino de una forma de compensación permanente, que intenta retribuir al país de origen por la inversión hecha en la educación del emigrante. Otro tipo de iniciativas impositivas respecto a la emigración, como el cobro de tasas por la emigración, la co-participación del país de origen y de destino en el cobro de visas a los emigrantes, y las iniciativas para la devolución del costo de la educación del emigrante o de las becas de apoyo a la educación y a la investigación al momento de la partida del país, sí son una disuasión temporal y no permanente a la decisión de emigrar. - Políticas de repatriación: Su objetivo es la repatriación física de los emigrados. La estrategia de repatriación física de los emigrados –también informada por la perspectiva del brain drain- ha sido implementada con éxito en algunos países. La literatura presenta a los casos de Corea del Sur, India, y Taiwán como los ejemplos más exitosos de este tipo de iniciativas. Sin embargo, de acuerdo con varios autores (Meyer et al., 1997) esta estrategia pudo ser exitosa debido a que previamente –o paralelamente- estos países habían hecho una fuerte inversión en recursos e infraestructura con el objetivo de consolidar sus sistemas nacionales de ciencia, tecnología e innovación (CTI), y así posibilitar una exitosa absorción de los RHCT repatriados. Resulta evidente que ésta es una situación que no es posible replicar en todos los casos, ya que el éxito estuvo asociado a las particulares condiciones

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económicas y políticas de estos países, que se encontraban en estadios avanzados de desarrollo2. Resulta importante destacar que estos cuatro tipos de políticas públicas de contención de la migración de recursos humanos altamente calificados informadas por el enfoque del brain drain, se enfrentan con el riesgo de incurrir en situaciones de subutilización de los recursos humanos altamente calificados, situación que la literatura ha denominado como “brain waste” o “derroche de cerebros”. La repatriación o la imposición de barreras a la emigración de científicos y tecnólogos acarrea el riesgo de que muchas veces, quizás incluso en la mayoría de los casos, los países en desarrollo no cuentan con la infraestructura en ciencia y tecnologías, las remuneraciones, y el entramado de articulación entre universidades, centros de investigación, gobierno e industria que posibilita que esos mismos científicos sean exitosos en los países más avanzados tecnológicamente. Brain Gain, brain network ó diaspora option El fracaso del tipo de iniciativas antes reseñadas, y principalmente los cambios en la propia dinámica de la producción y distribución del conocimiento científico, dieron lugar al surgimiento de un nuevo paradigma -o perspectiva- en el campo de la migración y movilidad internacional de RHCT. Esta nueva perspectiva ha sido denominada brain gain, brain mobility o diaspora option por la literatura especializada. El enfoque del brain gain asume el diagnóstico de que los científicos y tecnólogos producen conocimiento a escala global en el marco de redes de cooperación presenciales y virtuales. Esta organización del trabajo ha sido posible gracias al uso intensivo de las tecnologías de la información y comunicación (TICs). De esta manera, equipos de investigadores, centros de investigación públicos y privados, universitarios e industriales, funcionan en sistemas de relaciones dinámicas basadas en el intercambio de conocimiento. El concepto de brain network -red de cerebros- surge entonces como la matriz desde la que abordar la problemática de la migración y movilidad de RHCT. En un célebre trabajo frecuentemente citado3, Meyer y Brown (1999) presentan un panorama sobre los desarrollos teóricos en torno al brain gain y analizan distintas experiencias internacionales de revinculación de diasporas intelectuales a través de redes virtuales. Meyer y Brown sostienen que la nueva perspectiva del brain gain no se debe tanto a las transformaciones en la propia práctica científica, como a nuevos desarrollos teóricos que permitieron una mejor comprensión de la forma en que se produce, transmite y aplica el conocimiento, y de la inherente movilidad de la práctica científica y tecnológica. Siguiendo a esta lectura, la principal diferencia entre la perspectiva del brain drain y la del brain gain radica en su concepción acerca del conocimiento presente en los recursos humanos. Mientras que la primera, basada en la teoría del capital humano de Gary Becker, concibe a la formación y las destrezas como un capital incorporado en el sujeto, la segunda, por el contrario, concibe a estas destrezas como un factor más entre muchos otros, que funcionan en relación a una red de vínculos con otros agentes, humanos y no humanos4, que les dan sentido y permiten su funcionamiento. 2 Corea del Sur y Taiwán experimentaron un desarrollo acelerado a partir de la década de 1970, y la India ha tenido un enorme desarrollo en el área de las TICs y la ingeniería informática desde la década de 1990. 3 Consideramos que se trata de un trabajo que, en términos de Pierre Bourdieu (1984), ha constituido el campo de estudios sobre la movilidad de RHCT y las estrategias de revinculación de diásporas a través de redes virtuales. 4 En este punto se hace referencia a la teoría del actor-red de Callon y Latour.

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A partir de estos postulados del enfoque del brain gain llegamos a la tesis central de esta perspectiva: los recursos humanos cualificados emigrados no deben ser considerados como una pérdida neta y definitiva, sino por el contrario, deben ser considerados como un patrimonio potencial a ser explotado por el país emisor. Esta perspectiva asume que los científicos y tecnólogos emigrados son recursos educados, empleados, y entrenados en la práctica de investigación en los países de destino en condiciones mucho mejores que las que podría ofrecerles el país emisor. Consecuentemente, si el país de origen logra utilizar a su favor a estos recursos, entrenados principalmente con financiación externa, habrá logrado una enorme capitalización (Meyer y Brown, 1999: 5). Existen, asimismo, estudios empíricos (Galliard, 1991) que presentan evidencia de situaciones de brain waste (desperdicio de cerebros) cuando científicos y tecnólogos talentosos vuelven a su país de origen y son subutilizados, al no encontrar puestos adecuados para sus calificaciones. Desde una perspectiva que puede ser incluida dentro de la amplio enfoque del brain gain, autores como Charum (2001), Kaplan y Meyer (Charum, Kaplan, y Meyer: 2001) han abordado al nuevo tipo de movilidad de RHCT que caracteriza a la transición a la Sociedad del Conocimiento, caracterizándolo como un nuevo tipo de nomadismo. Estos autores destacan las líneas de continuidad entre el nuevo tipo de movilidad y las características particulares de la labor científica. Recuperando a la tradicional sociología de la ciencia de Merton (1973) y Kuhn (1962) destacan el carácter colectivo de la práctica científica, que no puede separarse de la aculturación que produce el complejo social y organizativo en el que se desarrolla. Asimismo, señalan el carácter universal, y abierto de la práctica científica. Siguiendo a Galliard y Galliard (1997), subrayan el hecho que “la ciencia se basa por naturaleza en la circulación de hombres e ideas” (Charum, Kaplan, y Meyer, 2001: 5). No obstante, reconocen en las transformaciones recientes de la práctica científica, ligada a la transición a lo que se denomina como Sociedad del Conocimiento, el surgimiento de un nuevo tipo de movilidad específica. Esta es calificada como un “nuevo nomadismo científico” caracterizado por la mayor fluidez del conocimiento, en tanto primer factor de producción de la nueva economía. Destacan el surgimiento de una nueva geopolítica del conocimiento según la cual “las migraciones de competencias han pasado a ser multilaterales y policéntricas, aunque no completamente multidireccionales, pues los flujos parecen tener como puntos de llegada los sitios más competitivos de la economía mundial del conocimiento y partir de los lugares menos desarrollados” (Charum, 2001: 15). Charum, Kaplan y Meyer destacan el hecho que la perspectiva del brain gain supone una aproximación teórica superadora del enfoque del capital humano asumido en el brain drain, ya que se basa en el análisis del carácter social, dinámico, e iterativo de la práctica científica y tecnológica: “Es este enfoque de la movilidad, que abarca la inculturación, el aprendizaje, los procesos iterativos y los vínculos colectivos, el que resume la noción de nomadismo, lejos del enfoque que considera a los elementos del género humano como individualidades post-sociales, sin cohesión, fragmentados, que actúan gobernados por las fuerzas del mercado mundial” (Charum, Kaplan, y Meyer, 2001: 2-3). Desde esta perspectiva, al igual que en Meyer y Brown (1999), la posibilidad de constituir redes virtuales de cooperación científica y tecnológica, y en particular aquellas que integran a las diásporas de emigrados, es una consecuencia de las nuevas prácticas en la producción, gestión y difusión del conocimiento, a la vez que debido al nuevo marco teórico con el que éstas tareas se abordan.

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Otro de los elementos que caracterizan al nuevo tipo de movilidad que se acentúa durante la década de 1990 y que es caracterizado por el nuevo enfoque del brain gain es el carácter multidireccional de las migraciones y la movilidad internacional de científicos. Si bien se sigue conservando el patrón según el cual las migraciones suelen ser de países de menor desarrollo científico y tecnológico hacia países de mayor desarrollo, se evidencian corrientes múltiples, donde un mismo país puede ser origen y destino de migración de recursos humanos altamente calificado. Por ejemplo, Canadá es un país de destino de científicos y tecnólogos provenientes de países en desarrollo de América Latina, África y Asia, a la vez que sufre una situación de fuga de cerebros hacia los EEUU, presentando un saldo total positivo de migración de científicos y tecnólogos pero con un saldo negativo en su intercambio de científicos con los EEUU. Una situación similar sucede en la Unión Europea, la que si bien es uno de los principales destinos de los recursos humanos altamente calificados –tanto en forma de migración permanente como también como destino de estancias cortas de investigación-, sufre una fuga de cerebros de científicos europeos hacia los EEUU en determinadas áreas de investigación consideradas clave (nanotecnologías, biotecnología, ingeniería informática, entre otros). No sólo la UE experimente un saldo negativo en relación a los EEUU en estas áreas clave, sino que fracasa en su competencia con los EEUU en la captación de los mejores científicos y tecnólogos especializados en estas áreas claves provenientes de terceros países, quienes en su mayoría se dirigen a los EEUU. Uno de los objetivos del lanzamiento de los programas ERA-Link y ERA-More de la UE fue atender a esta situación, según veremos más adelante.

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- SEGUNDA PARTE - El Rol de las Diásporas en las Estrategias de Desarrollo de Sistemas Nacionales de Ciencia, Tecnología e Innovación (CTI)

“La migración de competencias ha pasado a ser multilateral y policéntrica, aunque no del todo multidireccional, pues los flujos parecen ir siempre de los lugares menos desarrollados a los sitios más competitivos de la economía mundial del conocimiento.” (Charum, Jorge; Kaplan, David; Meyer, Jean Baptiste, 2001) La importancia de integrar a las diásporas intelectuales en las estrategias de desarrollo de los sistemas de ciencia tecnología e innovación (CTI) ha sido ampliamente señalada por la literatura (Özden y Schiff, 2006, en un informe del Banco Mundial) (PNUD, 2005) (OCDE, 2002b) (OCDE, 2000) (Meyer y Brown, 1999, en un informe preparado para la UNESCO). La estrategia de revinculación de recursos humanos altamente cualificados emigrados asume el hecho de que es probable que muchos de ellos no estén dispuestos a retornar a su país de origen, debido principalmente a sus vínculos profesionales y personales con su país de acogida. No obstante, éstos pueden estar muy interesados en colaborar con el desarrollo de su país de origen debido a vínculos identitarios, culturales, sociales, familiares y políticos, entre otros. De hecho, los vínculos entre los emigrados altamente cualificados y su país de origen han existido siempre. La novedad se produce a partir de la posibilidad de establecer redes virtuales de colaboración en CTI a través del uso intensivo de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TICs). Este tipo de iniciativas permiten establecer redes con vínculos sistemáticos, densos y múltiples, en comparación a las iniciativas esporádicas y voluntaristas que caracterizaban a los vínculos de las diásporas con sus países de origen en el pasado. Un elemento central destacado por el nuevo enfoque, señalado por varios autores (Özden y Schiff, 2006) (Lowell y Gerova, 2004) (Meyer y Brown, 1999), es el hecho que a través de las redes de revinculación el país accede no sólo al conocimiento de los emigrados, sino también a sus redes de contactos socio-profesionales en sus respectivos países de acogida. Y gracias a estas redes de vínculos, las diásporas transmiten conocimientos acerca de cómo exportar e insertarse eficazmente en esos mercados, que son, justamente, los mercados más importantes y competitivos del comercio mundial. En un reciente estudio realizado por el Banco Mundial (Özden y Schiff, 2006), se subraya la relación existente entre las redes de revinculación y la promoción de la inversión extranjera directa (IED) en el país de origen. Este es otro beneficio derivado de la explotación de los vínculos a los que otorgan acceso las diásporas. Asimismo, las remesas enviadas anualmente por las diásporas de emigrados –no sólo las diásporas de recursos humanos altamente calificados- a sus países de origen superan a la ayuda para el desarrollo otorgada por los países desarrollados a los países en desarrollo. Pero los beneficios de la diáspora van mucho más allá de las remesas de dinero enviadas anualmente, las que, sin dudas, contribuyen a aumentar el nivel de ingresos de sus familiares directos. Las diásporas de emigrados contribuyen simultáneamente con una fuente de capital financiero fundamental, pero asimismo contribuyen con el know how técnico, la capacidad de gestión, el espíritu entrepreneur y el capital social y cultural que constituyen las redes de contactos socio-profesionales en sus países de acogida. Un estudio reciente

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elaborado por Wei y Balasubramanyam (2006) analiza el potencial de las diásporas como agentes del desarrollo en sus países de origen. El trabajo de Wei y Balasubramanyam sostiene que el retorno social por unidad de inversión de la diáspora supera al retorno social por unidad de inversión de la inversión extranjera directa (IED) proveniente de fuentes no ligadas a la diáspora. En un informe elaborado para el Banco Mundial, Lowell y Gerova (2004) realizan un análisis sistemático de los distintos estudios efectuados sobre movilidad internacional de RHCT, y de la experiencia internacional en estrategias de revinculación. Lowell y Gerova identifican en la literatura distintos mecanismos de articulación entre las diásporas y sus países de origen. Citan a Orozco (2003), quien señala que el impacto de las diásporas en el desarrollo económico puede ser caracterizado por efectos sobre 5 “Ts”: turismo, transporte, telecomunicaciones, transferencias monetarias a través de remesas, y comercio (trade). Citan a Kapur y Mc Hale (2004) en su distinción entre los efectos directos e indirectos de las diásporas (distinción que nosotros ya señalamos en el caso de las redes de vínculos socio-profesionales a las que otorgan acceso las diásporas). Encuentran en Lucas (2004) al autor que probablemente más importancia haya otorgado al mecanismo de las redes sociales transnacionales como efecto de las diásporas. Y por último identifican a Barré, Meyer et al (2003), aunque nosotros agregamos aquí a (Meyer y Brown, 1999), (Meyer et al, 1997), (Gaillard, J.; Gaillard, A, 1997), (Charum, 2001) entre las muchas otras investigaciones reseñadas en este informe, como uno los exponentes de la corriente que estudia los efectos de las diásporas de RHCT en el desarrollo de los sistemas de CTI. En un trabajo al que ya hicimos mención, Meyer y Brown (1999) analizan la experiencia internacional en redes de revinculación de diásporas de RHCT. Los autores identificaron en 1999, 41 redes de RHCT expatriados, vinculadas a 30 países, algunos de los cuales presentaban más de una red. Dos de estas 41 redes estaban vinculadas a regiones y no a países. Se trataba del caso de la red Arab Scientists and Technologists Abroad (ASTA) y la Latin American Association of Scientists (ALAS). El criterio de selección era que las redes tuvieran el objetivo explícito de vincular a expatriados con el país de origen, y a éstos entre sí, a la vez que promovieran el intercambio de conocimiento. El origen de estas iniciativas se ubicaba hacia fines de la década del ochenta y principios de los noventa. Los autores destacaban, asimismo, el surgimiento espontáneo, paralelo, e independiente entre sí de este tipo de redes. Estas redes presentan, a su vez, estructuras y grados de desarrollo muy diverso. Para atender a esta diversidad, Meyer y Brown (1999) clasificaron a las redes de RHCT expatriados en 5 categorías: - Redes de Estudiantes/Investigadores: ofrecen asistencia para el estudio en el exterior. Promueven el intercambio de información y el diálogo entre investigadores. Tienen un alcance limitado en cuanto al rango de actividades y a su contribución al país de origen. Según Mayer y Brown, esta categoría de redes es el único tipo en el que se encuentran iniciativas de países altamente desarrollados. Esta afirmación se encuentra desactualizada, ya que actualmente existen importantes iniciativas de redes de revinculación de RHCT emigrados, que responden a la tipología de “Redes de la diáspora científica/intelectual”, llevadas a cabo por países desarrollados. El programa ERA-LINK de la UE es un ejemplo de este tipo de nuevas iniciativas. - Asociaciones locales de expatriados altamente cualificados: son grupos de profesionales expatriados altamente cualificados que se reúnen con una frecuencia regular en base a vínculos profesionales y/o sociales. Su objetivo es promover los objetivos profesionales de los miembros. Se mencionan los casos de CESASC para China, y SIPA para India, como dos ejemplos exitosos de este tipo de iniciativas. En el caso de la última, promueva además la cooperación entre los EEUU e India en áreas

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de alta tecnología, por lo que este tipo de red se asemeja más a las redes de revinculación de RHCT. Los autores destacan el hecho que este tipo de redes muchas veces constituyen el núcleo sobre el que se montan redes de revinculación más sistemáticas, como son el caso de la RED Caldas en Colombia, y la Red SANSA en Sudáfrica. - Programas TOTKEN del PNUD: éstas son redes promovidas por el PNUD para vincular emigrados altamente cualificados con su país de origen en base a visitas y estancias cortas de consultoría. Esta iniciativa conjuga la consultoría con la acción de voluntariado por parte de los emigrados altamente cualificados. Presentaremos más información sobre los programas TOTKEN en el apartado sobre la agenda internacional en movilidad de RHCT. - Redes de la diáspora científica/intelectual: el objetivo de este tipo de redes es la revinculación de los RHCT emigrados con su país de origen para ponerlos al servicio del desarrollo de los respectivos sistemas nacionales de Ciencia, Tecnología e Innovación. - Redes de la diáspora científica/intelectual en desarrollo: este tipo de redes presentan las mismas características que en el caso anterior pero por algún tipo de restricción no se desarrollaron completamente. Las restricciones pueden estar relacionadas a la falta de recursos (materiales, humanos, financieros) que generalmente aquejan a las iniciativas que no cuentan con apoyo oficial, situación que las reduce a emprendimientos voluntaristas que no logran mantenerse en el tiempo. Lowell y Gerova (2004) realizaron una catalogación de las redes de revinculación de RHCT que continúa trabajado el realizado por Meyer y Brown en 1999. Como señalamos anteriormente, éstos habían identificado 41 redes de RHCT. Lowell y Gerova agregan 20 casos más para 2004. El grado de inactividad de esta nueva muestra de 61 casos es de 34% (21 redes sobre 61) (Lowell y Gerova, 2004: 2). Las autoras señalan que de las redes y organizaciones establecidas con apoyo gubernamental (4) ya no están disponibles, o no fueron actualizadas por varios años, resultando en un tasa de fracaso del 27% (4 sobre 15 casos). En un informe preparado para el Institute for Research on Development (IRD) de Francia (Turner, W.A.; Henry, C.; Gueye, M., 2002) se analiza la experiencia internacional de redes de revinculación de RHCT en países en desarrollo. Si bien este trabajo tiene el interés particular de promover estrategias para su implementación en la Zone de Solidarité Prioritaire (ZSP) francesa, constituye un antecedente interesante en cuanto al análisis de los factores a abordar en el diseño e implementación de redes de RHCT. Turner, Henry y Gueye asumen que las diásporas constituyen un instrumento nuevo y potencialmente útil para implementar políticas de cooperación con los países en desarrollo. Sostienen, asimismo, que el uso apropiado de las TICs permite mejorar tanto la eficiencia como la eficacia de la diáspora como instrumento de política pública. Para abordar esta relación directa que se establece en el campo de la cooperación internacional entre las diásporas, el desarrollo y las TICs, los autores utilizan el concepto de co-desarrollo. Este concepto hace referencia a los emigrados altamente cualificados no como una pérdida sino como un capital potencial a ser explotado. Los autores agregan la dimensión de cooperación internacional, en tanto se trata de RRHH formados y empleados en los países del norte, cuyo desafío radica en poner al servicio de los países del sur a través de programas de cooperación –diseñados por los países receptores, en este caso Francia-.

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Del estudio realizado por Turner, Henry y Gueye consideramos interesante su énfasis en el equilibrio necesario entre las iniciativas bottom up (desde abajo) top down (desde arriba): “Co-development essentially depends upon establishing coherence between bottom-up, grassroots initiatives on the one hand, "top-down", national and/or international initiatives on the other hand. Our main argument in this chapter will consequently be the following: ICTs contribution to co-development will depend upon how they are used to implement procedures for articulating and coordinating the vast range of grassroots and institutional actions implied by the co-development concept. (Turner, W.A.; Henry, C.; Gueye, M., 2002: 2) La necesidad de un equilibrio entre las iniciativas diseñadas, implementadas, y –más importante aún- sostenidas desde abajo, y aquellas iniciativas diseñadas e implementadas desde arriba es señalada en numerosos estudios. Los esfuerzos llevados a cabo hasta la fecha en materia de redes de revinculación han sido, en su mayor parte, del primer tipo. Estos han presentado serias dificultades para mantenerse en el tiempo y lograr el tiempo de maduración necesario para que las políticas de revinculación sean eficaces. Iniciativas voluntaristas, aisladas, superpuestas, e inconexas han sido sus características. Sin embargo, en el último tiempo han surgido iniciativas de redes de revinculación diseñadas e implementadas por los gobiernos u organismos multilaterales, o auspiciadas por éstos. Estos agentes muchas veces ignoran las particularidades de las diásporas, en cuanto a las características de cada situación nacional y de las distintas situaciones en los países de acogida. Se generan situaciones en las que no se atienden a las especificidades de cada situación para el diseño de las estrategias de revinculación y movilidad. Lowell y Gerova (2004) siguiendo a (Johnson y Sedaca, 2004) sostiene que mientras que las diásporas pueden ofrecer ventajas sustanciales en cuanto al desarrollo de su país de origen, éstas como alternativa de desarrollo también presentan importantes limitaciones. Se señala a la capacidad institucional como uno de los más importantes de ellas, ya que los mecanismos para la transferencia de conocimiento y capacidades requieren de importantes recursos técnicos y financieros, situación que torna inviable a muchos de los proyectos surgidos desde abajo. Las iniciativas gubernamentales surgidas desde arriba, el South African Network of Skills Abroad (SANSA), también han sido criticadas ya que se afirma que son ajenas a las necesidades de las diásporas, por lo que no están en posición de hacer buen uso de sus recursos (Goodman, 2003). Mientras que otras iniciativas surgidas desde abajo, como el Moroccan Association of Researchers and Scholars Abroad (MARS), encuentran serias dificultades en materializar su potencialidad al no contar con apoyo institucional o gubernamental (Goodman, 2003). Lowell y Gerova (2004) citan el caso del High Level Committee on the Indian Diaspora (2001) que ha recomendado establecer un único punto de contacto institucional para facilitar la comunicación entre la diáspora y el país de origen, como un intento de política gubernamental de acercarse a las necesidades de las diásporas. A fin de atender a este equilibrio entre iniciativas surgidas desde los propios RHCT emigrados y desde las agencias gubernamentales, distintos modelos teóricos han sido delineados. Turner, Henry y Gueye (2002) elaboraron el siguiente modelo de relación entre las diásporas, el desarrollo y las TICs. Este modelo pretende ilustrar acerca de la importancia de articular tanto la dimensión tecnológica de las redes de revinculación (la infraestructura en TICs), como la interacción basada en una dinámica socio-cognitiva (que capitalice las iniciativas surgidas desde los propios actores), como así también que atienda a la participación de las diásporas en el proceso de co-desarrollo:

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Figura 1: Modelo de la relación entre Diásporas, Desarrollo y TICs de Turner, Henry y Gueye.

Fuente: (Turner, W.A.; Henry, C.; Gueye, M., 2002: 5) Sally Davenport (2004) también ha desarrollado un modelo de interacción en la revinculación de RHCT al que ha denominado “estimulación sistémica de políticas de RHCT”. Este modelo se propone encarar las políticas de RHCT de forma integral, abordando tanto las políticas de repatriación de científicos y tecnólogos emigrados (aproximación desde el brain drain), como así también a las políticas de brain gain orientadas hacia las diásporas. Figura 2: Modelo estimulación sistémica de políticas de Recursos Humanos en Ciencia y Tecnología de Davenport.

Fuente: (Davenport, Sally, 2004: 628) Consideramos, sin embargo, que estos modelos adolecen de un enfoque verdaderamente integral. La revinculación de las diásporas de RHCT emigrados y la movilidad internacional de la comunidad de científicos y tecnólogos radicados en el país son abordados como problemáticas separadas. No se integra a la movilidad internacional de los RHCT presentes en el país en las políticas hacia los RHCT emigrados, como tampoco se integra en esta política a la estimulación de la movilidad de RHCT extranjeros hacia el propio país.

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- TERCERA PARTE - La Agenda Internacional en movilidad de RHCT A continuación se presenta un análisis de las iniciativas en redes de revinculación y movilidad de RHCT desarrolladas por distintos organismos multilaterales. Se analizan los casos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), el Banco Mundial, la UNESCO, el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), y la Unión Europea (UE) OCDE En cuanto a los organismos multilaterales, destaca la importancia que la OCDE ha otorgado al estudio de la temática y la formulación de políticas al respecto. Este organismo ha organizado el seminario “International Mobility of Highly Skilled Workers: From Statistical Analisys to Policy Formulation”, celebrado en París en junio de 2001, organizado conjuntamente por el Directorate for Science, Technology and Industry (DSTI) y el Directorate for Education, Employment, Labour and Social Affairs (DEELSA). Asimismo numerosos documentos fueron publicados tanto institucionalmente (OCDE 2000, 2002a, 2002b), como por sus grupos de trabajo (Mahroum, 1999), (Khadria, 2004), (Barrere, Luchilo, y Raffo: 2004). De acuerdo con la OCDE (2002), la movilidad de RHCT tiene efectos diferenciales según se trate de países emisores o receptores. Los principales efectos positivos en los países receptores son el estímulo de la capacidad de innovación, el incremento en el stock disponible de capital humano, y la internacionalización de la difusión del conocimiento. Mientras que se constata que la pérdida de capital humano puede ser perjudicial para los países emisores, se sostiene que ésta puede ser al menos parcialmente contrarrestada por el retorno de los emigrantes y por el desarrollo de redes de circulación de RHCT entre los países receptores y emisores. Se sostiene, asimismo, desde una perspectiva financiera –marginal respecto al argumento central- que la movilidad de los RHCT puede ser beneficiosa debido al aumento de la entrada de divisas originadas por las remesas de los emigrados: “Mobility among S&T personnel is an important channel for diffusing knowledge through the economy. From a labour market perspective, mobility is also important for an efficient allocation of labour across sectors, enhancing the economic flexibility of a country.” (OCDE, 2000: 21) Desde la perspectiva del diseño de políticas públicas que promuevan la movilidad de los RHCT, la OCDE (2002) señala 3 objetivos principales: - Responder a la escasez cíclica del mercado laboral. - Incrementar el stock de capital humano. - Favorecer la circulación del conocimiento encarnado en los RHCT, lo que a su vez supone una herramienta muy eficaz para la promoción de la innovación. La OCDE ha otorgado una importancia central tanto al desarrollo de redes de revinculación de RHCT establecidos en el extranjero, como también a la promoción de la movilidad de los RHCT en el propio país a través de redes virtuales de colaboración “Finally, policies directed at encouraging HRST based overseas to remain in contact with the home country may also be expected to promote the diffusion of the knowledge and the experience gained.” (OCDE, 2002)

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“The policy implication is that while internal and external mobility should be encouraged through the removal of regulatory and non-regulatory barriers, alternatives to physical mobility, such as networking and collaboration, should also be encouraged.” (OCDE, 2000: 23) En una economía basada cada vez más en el conocimiento, los RHCT adquieren creciente importancia. La promoción de la movilidad de científicos y tecnólogos, tanto interna como externa, se constituye así en una política indispensable para dotar a la economía del conocimiento presente en el capital humano necesario para competir en el mercado global. BANCO MUNDIAL El Banco Mundial también ha incluido en su agenda el estudio de la movilidad de RHCT, a través de su programa de investigación “International Migration and Development”. Este programa acaba de publicar el libro “International Migration, Remittances and the Brain Drain” editado por Çaglar Özden y Maurice Schiff (2006). Este trabajo constituye el estudio econométrico más sistemático realizado sobre “brain drain” hasta la fecha. Los autores no abordan aquí específicamente la temática de la movilidad de RHCT, sino el efecto de la migración de sujetos con distintos niveles de formación sobre el mercado de trabajo y los flujos financieros entre países. No obstante, la investigación destaca la importancia del “brain gain” sobre el mercado de trabajo, como incentivo positivo para la mayor inversión en educación y CTI. UNESCO La UNESCO, por su parte, también ha abordado el estudio de la movilidad de RHCT. En el caso de esta institución, el interés se centra en el efecto potencialmente beneficioso que las diásporas de emigrados pueden tener en el en el desarrollo de los países en desarrollo (PED). En particular, se aborda el estudio de la revinculación de las diásporas de emigrados altamente cualificados a través del uso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TICs) en redes virtuales de cooperación. Los programas “Diaspora Knowledge Networks”5 y Management of Social Transformations (MOST) Programme6 han llevado a cabo investigaciones en esta línea. Asimismo, el programa MOST llevó a cabo el “World Conference on Science”7 en Budapest en 1999, donde se presentaron algunas investigaciones (Meyer y Brown, 1999) que han sido frecuentemente citadas y que han articulado el campo de estudios sobre la movilidad de RHCT. PNUD El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) también ha desarrollado su propia iniciativa en materia de movilidad de RHCT. El programa TOKTEN (Transfer of Knowledge Through Expatriate Nationals Programme) (Programa de Transferencia de Conocimiento a través de Ciudadanos Expatriados) tiene una larga trayectoria en la revinculación de recursos humanos cualificados con sus países de origen a través de acciones de cooperación y asistencia. En el documento “Brain Drain is not Irreversible: Turning Drain to Gain through Incentives” el PNUD (2005) diagnostica un serio acrecentamiento de la fuga de cerebros Sur-Norte en los últimos años, situación que agrava aún más las posibilidades de desarrollo

5 URL: www.unesco.org/shs/migration/diaspora 6URL:http://portal.unesco.org/shs/en/ev.php-URL_ID=7239&URL_DO=DO_TOPIC&URL_SECTION=201.html 7 URL: http://www.unesco.org/most/wssr2.htm

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futuro de las naciones más pobres. Como parte de su estrategia de asistencia hacia los países en desarrollo (PED), el PNUD destaca la importancia que tiene el establecimiento de redes de revinculación de las diásporas con sus países de origen como medios para la transmisión de conocimientos, acceso a los mercados centrales, transferencia de recursos financieros, y promoción de la Inversión Extranjera Directa (IED), entre otros: “People respond to incentives. Brain drain — or the flight of highly skilled human capital from developing to developed countries — is driven by aspirations for a better quality of life. It is further fuelled by the growing demand for skilled personnel in developed countries. In recent years, the movement of human capital has reached unprecedented levels and unless managed rationally, it will continue to rob the future of poorer countries. However, banning and legal restrictions are not the sole solution. UNDP believes in assisting countries, not only to address the underlying incentive issues to manage emigration, but also to develop creative strategies for collaborating with their diasporas by promoting knowledge networks, market access, remittances, facilitating direct investment and supporting return migration.” (PNUD, 2005) No obstante, resulta importante destacar que este programa no responde específicamente al perfil de los programas de revinculación de científicos y tecnólogos, ya que no está orientado propiamente a la revinculación de RHCT con sus países de origen como parte de una estrategia de desarrollo de los sistemas nacionales de ciencia, tecnología e innovación. Por el contrario, el programa TOTKEN es parte de una iniciativa del PNUD de asistencia a los países en desarrollo gracias a la acción de voluntariado de emigrados cualificados en distintas disciplinas, no específicamente en ciencia y tecnología. De acuerdo a lo informado por el Programa de Voluntariado de las Naciones Unidas (UN Volunteers8) actualmente se están llevando a cabo programas TOTKEN en Líbano, Pakistán, Vietnam y Palestina. Creemos, sin embargo, que es un interesante ejemplo de la centralidad que la revinculación de los RRHH tiene actualmente, no sólo en el campo de la ciencia, la tecnología y la innovación. UNIÓN EUROPEA La Unión Europea ha dado alta prioridad a la movilidad de RHCT. La UE ha definido a la investigación como un elemento esencial del desarrollo sustentable, el que a su vez constituye uno de los pilares de la Estrategia de Lisboa (Potočnik, 2005). La Agenda de Lisboa9, establecida en marzo de 2000 por los jefes de estado y de gobierno de los países de la Unión, fijó para 2010 el objetivo de constituir a la Unión Europea en la economía más competitiva y dinámica del mundo, basada en la sociedad del conocimiento (ERA-NET Article 169, 2005). El Área Europea de Investigación tiene por objetivo fomentar la movilidad de investigadores entre centros de investigación y desarrollo públicos y privados de la Unión Europea, con el fin de crear sinergias a través de redes de investigación. En este sentido, ERA es presentada como el equivalente en cuanto a política científico-tecnológica para la transición a la Sociedad del Conocimiento en el siglo XXI, a lo que el Mercado Común significó como política económica y comercial para el desarrollo económico europeo en la segunda mitad del siglo XX. El logro del objetivo de Lisboa supone el desafío de un aumento extraordinario en los RHCT. Para esto, Europa debe atender a dos frentes: ERA no sólo debe ser atractiva para los investigadores europeos que actualmente emigran hacia los EEUU, sino también para los mejores investigadores de terceros países, quienes en su mayoría se dirigen también hacia los EEUU. En una comunicación hecha en 2000, la Comisión Europea señalaba a propósito del lanzamiento de ERA: “The European research area should be an area where the scientific capacity and material resources in Member States can be put to best use, where national and

8 URL: http://www.unvolunteers.org/volunteers/options/abroad/tokten.htm 9 URL: http://europa.eu.int/growthandjobs/index_en.htm

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European policies can be implemented more coherently, and where people and knowledge can circulate more freely; an area attractive both to European researchers and to the best researchers from third countries and built on respect for the common social and ethical values of Europeans and their diversity.” (UE – Comisión Europea -, COM(2000) 6 Final, 18/01/2000) En particular, en los puntos 1.1 y 1.3 del Anexo 1 de la citada comunicación, la Comisión establecía las siguientes líneas de acción:

El establecimiento de redes entre los centros de excelencia y la creación de centros de virtuales.

La creación “Centros de Excelencia Virtuales”. La maximización del potencial ofrecido por las redes electrónicas de

investigación

ERA-MORE y ERA-Link En el marco de la política estratégica del establecimiento de ERA, la UE desarrolló dos políticas específicas destinadas a abordar la movilidad de RHCT y el problema de la “fuga de cerebros” europeos hacia los EEUU. ERA-MORE (European Network of Mobility Centre) y ERA-Link son dos programas independientes que abordan dimensiones distintas de la misma problemática. La Red Europea de Centro de Movilidad ERA-MORE es una iniciativa de la Comisión Europea y de 33 países participantes del VI Programa Marco. Fue creada a partir de la propuesta de la Comisión Europea “A Mobility Strategy for the European Research Area” (COM(2001) 331 final, 20/06/2001), que recogía las sugerencias de un informe presentado en 2001 por el Grupo de Expertos de Alto Nivel (HLG) sobre “Mejoramiento de la Movilidad de Investigadores”. ERA-MORE es un portal de Internet diseñado para estimular la movilidad de investigadores europeos –y extranjeros- dentro de Europa. Su objetivo es crear un entorno más favorable para el desarrollo de la carrera de investigador en el Área Europea de Investigación, a través de la provisión de información estructurada sobre:

o Ofrecimientos de puestos trabajo (en universidades, industria, centros de investigación, fundación, entre otros);

o Fuentes de financiación y becas para la investigación; o Información práctica sobre asuntos administrativos y legales

relacionados con la migración de un país a otro; o Información general sobre la política de CTI relevante para el desarrollo

de la carrera de investigador en Europa. (ERA-MORE Web Page10)

La Comisión Europea señalaba en su comunicación “A Mobility Strategy for the European Research Area” (COM(2001) 331 final, 20/06/2001) que el objetivo específico de ERA-MORE es desarrollar, atraer y retener a los recursos humanos apropiados en ciencia y tecnología. ERA-Link constituye una extensión de la estrategia implementada en ERA-MORE. Numerosos estudios han señalado la existencia de una fuga de cerebros europeos hacia los Estados Unidos. El informe “Brain Drain – Emigration Flows for Qualified Scientists” (2003) elaborado por MERIT para la Comisión Europea constataba la existencia de una fuga de cerebros de la Unión Europea hacia los Estados Unidos, a la

10URL: http://europa.eu.int/eracareers/index_en.cfm?l1=6&CFID=2812928&CFTOKEN=7d8409a9993fd4f5-3B21BA33-D79E-9624-B40A907A2A9DFE28

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vez que señalaba la existencia de situaciones diferenciales entre los países de la Unión respecto a su capacidad para atraer investigadores de terceros países. Basándose en estos diagnósticos, y en las estimaciones que señalan que existen actualmente 100.000 investigadores europeos residentes en los EEUU (Página Web ERA-Link11), la Comisión Europea creó el programa ERA-Link. Su objetivo es crear una red de investigadores, científicos y académicos europeos residentes en los Estados Unidos. De manera similar a ERA-MORE, ERA-Link provee los siguientes servicios a través de un portal de Internet:

o Información sobre oportunidades para desarrollar la carrera de investigador en la UE.

o Información sobre fuentes de financiación para la investigación, becas, y particularmente, fuentes de financiación para el establecimiento de proyectos de colaboración conjunta con grupos y centros europeos;

o Información sobre conferencias y cursos. o Información sobre Conferencias y Encuentros que involucran a los

miembros de ERA-Link.

11 URL: http://www.eurunion.org/legislat/ste/eralink.htm

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- CUARTA PARTE -

Caracterización del sistema de ciencia, tecnología e innovación argentino y colombiano

El sistema científico y tecnológico argentino Argentina y Colombia cuentan con sistemas nacionales de innovación con perfiles muy distintos. Argentina cuenta con un sistema nacional de innovación con un perfil muy particular dentro del escenario latinoamericano, caracterizado por una alta cantidad de investigadores (1,91 investigadores equivalentes a jornada completa (EJC) por cada 1000 integrantes de la población económicamente activa (PEA)), y un bajo gasto en I+D como porcentaje del PIB (0,44%)12. Nuestra apreciación de la cantidad de investigadores como alta, y del gasto en I+D como bajo, hace referencia a la comparación con el resto de países de Latinoamérica, teniendo en cuenta que los valores son muy bajos si se los compara con los obtenidos por los países de la OCDE. Como referencia, la cantidad de investigadores EJC por cada 1000 integrantes de la PEA es de 4,92 para España, 3,71 para Portugal, 6,77 para Canadá y 8,32 para EEUU. Mientras que el gasto en I+D como porcentaje del PIB es de 1,07% para España, 0,74% para Portugal, 1,96% para Canadá, y 2,66% para EEUU13. Estas características del sistema de innovación argentino resultan en un bajo gasto en I+D por investigador (U$S 22.540), que mejora si consideramos al gasto en I+D por investigador según la paridad del poder de compra (PPC) (U$S 72.950), debido al tipo de cambio retrasado que presenta la Argentina luego de la devaluación de 2002. Las características del sistema de innovación argentino están configuradas del derrotero histórico seguido por las instituciones de ciencia y tecnología en este país. La Argentina ha sido frecuentemente caracterizada como un país que experimentó una modernización social temprana, que no fue suficientemente acompañada por una modernización de la economía, lo que derivó en una crisis por la incapacidad del sistema de responder a las demandas sociales que había generado. La estrategia de desarrollo a través de la industrialización por sustitución de importaciones (ISI) entró en un cuello de botella por la incapacidad del sector agropecuario exportador de generar los recursos que la industrialización demandaba. Lo que derivó en recurrentes pujas distributivas entre los sectores, que tenían como corolario fuertes devaluaciones y ajustes. No obstante, el grado de desarrollo industrial alcanzado por la Argentina demandó la construcción de un importante sistema científico y tecnológico nacional, con el objetivo de generar localmente la tecnología necesaria para el objetivo del desarrollo endógeno. Este hecho, ligado a una fuerte expansión de la educación superior, que por entonces era la más extensa del subcontinente, configuró un importante sistema científico y tecnológico que se encontraba entre los primeros de Latinoamérica. Los resultados de este temprano desarrollo científico argentino se materializaron en la obtención de 3 premios nobeles científicos14, entre muchos otros logros. Asimismo, hacia 1960 Argentina concentraba la mayor masa estudiantil de toda 12 Datos de la Red de Indicadores de Ciencia y Tecnología (RICYT) –Iberoamericana e Interamericana), para el año 2004. URL: www.ricyt.org 13 Datos de la RICYT. Los datos de cantidad de investigadores EJC por cada 1000 integrantes de la PEA fueron del año 2004 para España, 2003 para Portugal, 2002 para Canadá y del año 2001 para EEUU. Los datos sobre gasto de I+D/PIB fueron del año 2004 para España, Canadá y EEUU y del año 2003 para Portugal. En todos los casos se trató de los datos del último año publicado. URL: www.ricyt.org 14 Bernardo Houssay, Premio Nobel de Fisiología y Medicina en 1947; Luis Leloir, Premio Nobel de Química en 1970; y César Milstein, Premio Nobel de Fisiología y Medicina en 1984.

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Latinoamérica: más de 180.000 estudiantes15. La inestable situación política del país y la persecución política, primero, y la crisis económica, después, fueron minando al sistema científico argentino. La universidad nacional se convirtió en uno de los campos de batalla privilegiados de los conflictos políticos que atravesaban al país. La dinámica centrífuga de la política nacional se instaló también en los claustros académicos, en donde la orientación hacia la excelencia en la investigación y el saber crítico fue desplazada por la agenda de conflictos de la escena nacional (Gordon, 2007). El golpe de estado de 1966, primero, y el de 1976, después, terminaron de ahondar aún más el proceso de degradación y destrucción. Una vez recuperada la Democracia, no fueron ya las persecuciones políticas las que socavaron a la ciencia argentina, sino la crisis económica y el cambio en la estrategia de desarrollo, que llevaron al desfinanciamiento del sistema científico y tecnológico y de la educación superior. Esta trayectoria, de un fuerte y expandido sistema científico en la década del 60, seguido por un derrotero de persecución política y falta de financiamiento, configuró un sistema caracterizado por una alta cantidad de investigadores, con una baja dedicación a la investigación (representada por la importante brecha entre la cantidad de investigadores y la cantidad de investigadores equivalente a jornada completa (EJC)), y una baja inversión en I+D por investigador. Gasto en I+D como porcentaje del PIB, Cantidad de investigadores cada 1000 integrantes de la PEA, y Gasto en I+D por investigador en USD según paridad del poder de compra, para Argentina, Brasil, Chile, Colombia y México.

Datos: RICYT URL: www.ricyt.org Acceso: 16/07/07. Datos de 2004, y datos de 2001 para Colombia en Gasto en I+D.

15 Hacia 1960 Brasil contaba con 95.700 estudiantes universitarios, mientras que México contaba sólo con 77.000. El orden de posiciones se invertiría una década después con Brasil con 430.000 estudiantes, Argentina con 274.000 y México con 247.600. Fuente: Sigal, Silvia (2002).

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El sistema científico y tecnológico colombiano El sistema de innovación colombiano se caracteriza por una baja cantidad de investigadores (0,28 investigadores EJC por cada 1000 integrantes de la PEA) 16, y un bajo gasto en I+D como porcentaje del PIB (0,17%). A pesar de los bajos resultados tanto en cantidad de investigadores como en gasto en I+D, Colombia presenta casi el doble de gasto en I+D por investigador (U$S43.500) que la Argentina (U$S22.540). Proporción que se mantiene si consideramos el gasto en I+D por investigador según la paridad del poder de compra (PPC) (U$S 144.590 de Colombia contra U$S72.950 de Argentina). El sistema científico y tecnológico colombiano siguió un derrotero histórico distinto al Argentino, si bien sus estrategias de desarrollo siguieron el patrón asumido por la mayoría de países del subcontinente en cada período. Desde la década de 1950 Colombia adoptó una estrategia de industrialización por sustitución de importaciones (ISI), de manera análoga a lo que ocurría en el resto de Latinoamérica. A partir del programa de modernización implementado por la administración de Lleras Restrepo (1966-1970), y continuado por la administración Pastrana (1970-1974), comenzó lo que se denominó el período del modelo mixto de desarrollo. Este fue un período de fuerte crecimiento del PIB (crecimiento promedio anual de 6,19% entre 1966-1974) y del sector manufacturero (7,8%) (Garay, 1998: 21). Asimismo, durante este período se creó el Fondo Colombiano de Investigaciones Científicas y Proyectos Especiales (Conciencias) (1968), institución clave del sistema colombiano de ciencia, tecnología e innovación. La década siguiente estuvo marcada por los shocks externos de la crisis del petróleo, primero, y la crisis de la deuda, después. No se registró crecimiento económico neto e incluso el sector manufacturero tuvo un resultado negativo entre los años 1981 y 1982 (Garay, 1998:22). Luego del período de ajuste y estabilización (1985-1989), comenzó el período de apertura económica (1990-1996), siguiendo las tendencias de todo el subcontinente en cuanto a la aplicación de las reformas estructurales, apertura económica, liberalización de la economía, y privatizaciones, ligadas a lo que se denominó como el Consenso de Washington (Wiliamson, 1990). Las reformas estructurales alcanzaron también al sistema científico y tecnológico. Ya que en el año 1990 se sancionó la Ley de Ciencia y Tecnología (Ley 29 de 1990), y en el año 1991 se estipuló en la reforma constuticional la inclusión explícita de la política científica y tecnológica en los planes de desarrollo económico y social (Garay, 1998: 202). El exhaustivo trabajo dirigido por Garay (1998) periodiza la historia del sistema colombiano de ciencia y tecnología en tres períodos: hasta 1968, de 1968 a 1990 y a partir de 1990. Mencionamos recién que a partir de 1990 se introducen reformas que configuran el sistema de ciencia y tecnología contemporáneo de Colombia. Entre las modificaciones implementadas podemos mencionar17:

La creación del Sistema Nacional de Ciencia y Tecnología –SNCT- (Decreto 1767 de 1990). El SNCT cuenta con una estructura triangular Estado-investigadores-productores.

La adscripción de Colciencias al Departamento Nacional de Planeación, como señal de que en adelante la CyT deberían considerarse como una fuerza

16 Datos de la RICYT. Los datos de Gasto en I+D/PIB, Gasto en I+D por investigador y Gasto en I+D PPC por investigador son para el año 2001. Los datos de cantidad de investigadores EJC por cada 1000 integrantes de la PEA son para el año 2004. URL: www.ricyt.org 17 La información reseñada fue obtenida de Garay (1998).

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productiva articulada de manera estrecha con la plneación del desarrollo nacional, y que su promoción y regulación serían tareas pertinentes al Estado (Garay, 1998: 204).

La creación del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología en 1991, con la función de dirigir y coordinar el SNCT.

La instalación de cinco misiones regionales de ciencia y tecnología por parte del Consejo Nacional de Ciencia y tecnología en 1992, con el objetivo de implementar la estrategia de regionalización del sistema.

La –segunda- reestructuración de Conciencias hacia fines de 1994, con el objetivo prioritario de promover un acercamiento entre esta entidad y el sector productivo.

La creación del Sistema Nacional de Innovación en 1995, con el objetivo de contribuir al fortalecimiento de la actividad competitiva del sector productivo.

La creación de la Estrategia Nacional de Competitividad por parte del Consejo Nacional de Competitividad en 1996, con el objetivo de fortalecer la innovación, el desarrollo y la transferencia tecnológica.

Políticas de Recursos Humanos en Ciencia y Tecnología en Argentina La Argentina es uno de los países de América Latina en donde la problemática de la fuga de cerebros cuenta con más trayectoria. La problemática del brain drain se encuentra muy arraigada en la Argentina tanto en cuanto a su estudio académico (recordemos los pioneros estudios de Oteiza y Suarez que mencionamos en la primer parte de este trabajo), como en cuanto a las políticas públicas al respecto. Recientemente la Secretería de Ciencia, Tecnlogía e Innovación Productiva (SECYT) de la Argentina ha elaborado las Bases para un plan estratégico de mediano plazo de ciencia, tecnología e innovación18. El mismo es un documento muy valioso para poder analizar las políticas de ciencia, tecnología e innovación que se propone el Estado Argentino, puesto que se hace una propuesta integral de políticas para la ciencia, la tecnología y la innovación de mediano y largo plazo. El documento realiza un análisis de la trayectoria de la Argentina en cuanto a su perfil de especialización productiva, su inserción en el mercado mundial, y la articulación entre este perfil de especialización y las capacidades en ciencia, tecnología e innovación. Se presentan análisis sectoriales a través de paneles con consultas a expertos y stake-holders vinculados a los distintos sectores, a la vez que se trazan posibles escenarios futuros en relación al perfil productivo de la Argentina y su relación con la investigación científica y tecnológica y la innovación. El Plan cuenta con un apartado referido a los recursos humanos en ciencia y tecnología, en donde se fija el objetivo básico en recursos humanos que es alcanzar el porcentaje de 3 investigadores (EJC) por cada mil integrantes de la población económicamente activa (PEA) para el año 2015. Este objetivo se encuentra articulado con el objetivo de alcanzar una inversión del 1% del PIB en ciencia y tecnología para el mismo año. Puesto que la velocidad en el aumento de la inversión favorece el crecimiento de la cantidad de investigadores y, recíprocamente, la disponibilidad de investigadores formados facilita la aplicación del aumetno de la inversión (Bases para un Plan Estratégico de Mediano Plazo en Ciencia, Tecnología e Innovación - SECYT, 2005: 82). No obstante, se afirma que la relación entre ambos objetivos no es lineal, en tanto ambos procesos dependen de decisiones diferentes y tienen tiempos de maduración distintos. 18 El documento completo de las Bases para un plan estratégico de mediano plazo de ciencia, tecnología e innovación se encuentra en la siguiente dirección: http://www.secyt.gov.ar/bases_plan_estrategico_05_15/intro_bases_plan_estrategico.htm

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Resulta importante destacar la importancia que el Plan otorga al aumento de la base científica y tecnológica del país, entendida como el número de personas con alto nivel de formación que se dedican a la I+D, a la educación superior, a la difusión de la cultura científica, a la utilización de los conocimientos y a la innovación. Si bien el Plan tiene por objetivo el aumento tanto de la inversión en I+D como de la cantidad de investigadores, se privilegia a este último objetivo por sobre el primero, en el entendimiento de que la falta de investigadores es una limitación aún más severa al desarrollo de una economía y una sociedad del conocimiento que la falta de financiamiento.

“El déficit de recursos humanos en áreas críticas para el desarrollo constituye un cuello de botella más severo y más difícil de superar que el insuficiente nivel actual de la inversión en ciencia y tecnología, aunque ambos fenómenos estén estrechamente vinculados” (Bases para un Plan Estratégico de Mediano Plazo en Ciencia, Tecnología e Innovación - SECYT, 2005: 76).

El Plan se propone alcanzar la meta de 3 investigadores EJC/ 1000 PEA para el año 2015, lo que implicará no sólo un aumento de la cantidad de investigadores, sino también una redistribución institucional de la cantidad de investigadores, debido al aumento del porcentaje de investigadores que se desempeñan en el sector privado. El objetivo del Plan de aumentar la inversión en I+D hasta alcanzar el 1% del PIB supone también realizar una redistribución de la carga correspondiente al sector público y al sector privado. Para el año 2003, la inversión en I+D de la Argentina era realizada en un 69% por el sector público y en un 26% por el sector privado19. El plan se propone alcanzar la meta del 1% del PIB en inversión en I+D, en base a un aumento de la inversión privada en I+D hasta igualar la inversión pública. Por lo tanto, el aumento de en la cantidad de investigadores supondrá también un aumento del porcentaje de investigadores que se desempeñan en el sector privado. En el Plan se señala, asimismo, que el objetivo de alcanzar 3 investigadores EJC por cada 1000 integrantes de la PEA no se logrará solamente con el aumento de la cantidad de investigadores, sino también fundamentalmente en base a un cambio en la dinámica del sistema científico argentino a partir de un aumento de las dedicaciones de los investigadores en las universidades y en los organismos de investigación. Se trata de reducir la importante brecha existente actualmente entre la cantidad de investigadores y la cantidad de investigadores equivalentes a jornadas completa (EJC).

Políticas de Movilidad y Migración de RHCT en Argentina – El Programa Raíces Dentro de la estrategia general de las Bases para un plan estratégico de mediano plazo de ciencia, tecnología e innovación se defina la estrategia en cuanto a movilidad y migración de recursos humanos altamente calificados. En dicha estrategia se reconoce la compleja naturaleza de la política en materia de movilidad y migración de científicos, puesto que el objetivo a alcanzar implica simultáneamente promover y desalentar la migración. El plan plantea como objetivo promover la movilidad internacional, en el marco de la estrategia de promoción de la internacionalización de la ciencia argentina, y desalentar la emigración, para contrarrestar la fuga de cerebros.

“La estrecha vinculación de las comunidades científicas y tecnológicas nacionales con las de otros países es una condición necesaria para llevar

19 Datos de la RICYT (2004), citados en el las Bases para un plan estratégico de mediano plazo de ciencia, tecnología e innovación-Secy (2005).

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a cabo investigaciones de calidad. Por lo tanto, es preciso fomentar los contactos entre investigadores en formación y formados del país con grupos e instituciones de investigación de primer nivel internacional. Por otro lado, es imprescindible evitar que se mantengan o intensifiquen los niveles recientes de emigración de personal calificado. Complementariamente, resulta conveniente aprovechar las capacidades de los investigadores argentinos residentes en el exterior, a través de actividades sistemáticas de vinculación”. (Bases para un plan estratégico de mediano plazo de ciencia, tecnología e innovación – SECYT, 2005: 123)

Asimismo, también en el marco de las Bases para un Plan Estratégico, se advierte del problema de la emigración de científicos. El documento cifra en 7000 la cantidad estimada de científicos y tecnólogos argentinos emigrados, lo que equivale a una cuarta parte de la base de científicos actuales EJC. Se señala, sin embargo, que la emigración no ha afectado tanto al sistema en cuanto a la pérdida de científicos, como al recambio generacional del mismo, por la emigración de investigadores y estudiantes jóvenes que iban a entrar al sistema en el futuro. Esta situación amenaza la reproducción del sistema en el futuro y plantea desafíos al objetivo de aumentar la base de científicos y tecnólogos. En el último lustro la Argentina ha implementado un ambicioso programa de políticas públicas destinado a abordar la migración y la movilidad de recursos humanos altamente calificados residentes en el exterior. El Programa RAICES (Red de Argentinos Investigadores y Científicos en el exterior) fue creado en el año 2000, y relanzado en 2003. Según indica su presentación institucional20 el propósito del Programa RAICES es fortalecer las capacidades científicas y tecnológicas del país por medio del desarrollo de políticas de vinculación con investigadores argentinos residentes en el exterior, así como de acciones destinadas a promover la permanencia de investigadores en el país y el retorno de aquellos interesados en desarrollar sus actividades en la Argentina. Pretende ser un ámbito abierto a las inquietudes e iniciativas de los investigadores argentinos residentes en el país y en el exterior, mediante la implementación de políticas de retención, de promoción del retorno y de vinculación. Los objetivos del Programa son:

• Difundir las actividades científicas y tecnológicas del país en el exterior. • Incrementar la vinculación entre investigadores argentinos residentes en el país

y en el extranjero. • Mejorar la calidad y disponibilidad de la información acerca de los

investigadores y profesionales argentinos altamente capacitados que residen en el exterior.

• Desarrollar redes de vinculación con investigadores argentinos residentes en el exterior.

• Integrar a investigadores argentinos residentes en el exterior a las actividades del Programa de Atención a Áreas de Vacancia (PAV).

• Involucrar al sector productivo del país, Fundaciones y otras ONG´s en las acciones del programa.

Un elemento destacable del programa es que se propone como objetivo tanto incrementar la vinculación con los investigadores argentinos residentes en el exterior, a través de la conformación de redes virtuales de vinculación y de proyectos de investigación entre miembros del programa raíces residentes en el exterior e instituciones argentinas, entre otros, como también promover el retorno de los investigadores emigrados a través de acciones como el sub-programa de subsidios de

20 URL: http://www.raices.secyt.gov.ar/. Acceso: 19 de Junio de 2007.

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retorno, que se complementa con las nuevas becas de reinserción del CONICET. Estas líneas de acciones del programa muestra que su enfoque se informa tanto por las perspectivas teóricas de la fuga de cerebros, como por los nuevos enfoques revisionistas denominados bajo el rótulo del brain gain, que postulan la integración de la diáspora de investigadores con el sistema científico y tecnológico nacional, en vez de promover la migración de retorno. Consideramos muy interesante la combinación de acciones en ambos sentidos del Programa, ya que no cae en la adopción acrítica de las recomendaciones de los enfoque en boga, sino que incorpora la estrategia de vinculación con la diáspora de científicos, a la vez que la articula con políticas para favorecer el retorno de los científicos interesados en hacerlo. Durante el año 2005 el programa realizó una Convocatoria para la presentación de "Redes en Ciencias Sociales, Exactas y Naturales, Biológicas y de la Salud e Ingeniería" y de proyectos para los "Fondos Semilla para la vinculación internacional y la generación de empleo en empresas de base tecnológica (EBT)". La convocatoria contó con una buena participación ya que se presentaron 43 redes y proyectos, de los cuales el programa aprobó 5. Asimismo, en la convocatoria del año 2004 a ingreso a la carrera de investigador del CONICET, se incorporaron 65 investigadores residentes en el exterior. Esta cifra es importante, ya que como se señala en las Bases para un Plan Estratégico de Mediano Plazo en Ciencia, Tecnología e Innovación (Secyt, 2005: 124), esta cifra representa aproximadamente la cantidad de argentinos que se doctoran anualmente en los Estados Unidos. Las políticas de movilidad y migración implementadas por la Argentina suponen una iniciativa interesante que requieren de continuidad en el tiempo para poder ver su maduración.

Políticas de Recursos Humanos en Ciencia y Tecnología en Colombia Colombia ha planteado su política de formación de recursos humanos en correspondencia con los programas de fomento a las actividades científicas y tecnológicas –financiamiento de programas, proyectos y actividades- y con los programas de fortalecimiento institucional de apoyo a grupos y centros de investigación y desarrollo tecnológico en el contexto de ciencia, tecnología e innovación (Jaramillo et al., 2006: 26). Asimismo, desde 1992 se viene llevando a cabo un programa específicamente en el área de recursos humanos: el Programa de Formación de Recursos Humanos. Este programa cuenta con subprogramas en las áreas de formación a nivel de maestrías y doctorados, formación continua, apoyo a programas institucionales de doctorado, y el programa de jóvenes investigadores. Este último programa fue creado en 1995 con el objetivo de contribuir a los otros subprogramas con la construcción de una masa crítica de investigadores jóvenes. De acuerdo con Jaramillo y otros (2006: 28) las externalidades que está generando este programa son a) el inicio, sobre bases sólidas, de creación de sentido de pertenencia a comunidades científicas; b) la reproducción, y por tanto una forma de consolidación, de los grupos de investigación; c) la permanencia en los grupos de líneas de investigación sostenibles en el tiempo; d) construcción de escuelas de pensamiento; y e) la creación de masas críticas para la continuación de los estudios de maestría y doctorado. Otro de los programas centrales de la política colombiana en la formación de recursos humanos en ciencia y tecnología es el “Programa de Jóvenes Investigadores”, llevado a cabo por Colciencias. De acuerdo a la información institucional del programa21: 21 Información institucional de Colciencias. URL: http://zulia.colciencias.gov.co:8098/portalcol/index.jsp?ct5=257&ct=105&cargaHome=3&codIdioma=es&m

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“El programa busca acercar a jóvenes profesionales del país, al quehacer científico y a la innovación tecnológica, mediante su vinculación a grupos de investigación y centros de desarrollo tecnológico de alto nivel, a través de becas - pasantía para formarse mediante la metodología "aprender haciendo con criterio". Para lograr este propósito, y teniendo en cuenta las diferencias existentes en las regiones del país y la necesidad de vincular el sector académico con el sector investigativo, el Programa de Jóvenes Talentos para la Investigación y la Innovación se ha diseñado con cuatro modalidades que son: Tradicional, Regional, Temática y Empresarial.”

El programa se organiza en cuatro modalidades22. La modalidad tradicional fue creada en 1995 y tiene por objetivo formar a jóvenes investigadores en grupos de investigación nacionales consolidados. La modalidad regional busca eliminar a la brecha existente entre las regiones de menor desarrollo relativo y las regiones más desarrolladas del país, por medio del otorgamiento de subsidios específicos para jóvenes investigadores provenientes de las regiones más desfavorecidas. La modalidad temática busca fortalecer a los grupos de investigación incipientes, a través de su vinculación con grupos consolidados de Colciencias. Por último, la modalidad empresarial tiene por objetivo la integración del sector productivo con el sector científico/académico. Este programa está orientado a empresas colombianas, Centros de Desarrollo Tecnológico (CDT’s), Incubadoras de Empresas de Base Tecnológica (IEBT´s), y Centros Regionales de Productividad (CRP´s), con el objetivo de vincularlos con instituciones de educación superior, y grupos y centros de investigación. El objetivo de esta modalidad es otorgar una formación a los recursos humanos en ciencia y tecnología que contribuya a dar soluciones a los problemas transversales que afectan a la industria colombiana.

Políticas de Movilidad y Migración de RHCT en Colombia – La Red CALDAS La Red Caldas constituyó una de los programas más importantes y más renombrados de un país en desarrollo en cuanto a la creación de “un instrumento de comunicación para el intercambio de conocimientos científicos y tecnológicos entre los investigadores colombianos que se encuentran fuera del país y la comunidad científica nacional, con el fin de vincularlos a las actividades de ciencia y tecnología del país”23. La Red Caldas tuvo por objetivo aprovechar la diáspora como medio para facilitar la integración de Colombia en las redes globales de conocimiento. Considerando que Colombia (17,2%) es, después de Ecuador (29,8%), el país que más contribuye al flujo migratorio desde América Latina y el Caribe hacia el resto del Mundo, y que el 46,2% de los emigrantes colombianos son de nivel universitario (Chaparró, Jaramillo y Quintero, 2005), la importancia que reviste la diáspora colombiana para las estrategias de desarrollo en ciencia, tecnología e innovación de este país es central. La Red Caldas estuvo activa durante toda la década de 1990 y comienzos del siglo XXI, y se

s=1 Acceso: 18/07/2007.

22 Colciencias. “Programa de Jóvenes Talentos para la Investigación y la Innovación”. URL:http://zulia.colciencias.gov.co:8098/portalcol/index.jsp?ct5=180&cargaHome=3&ms=1 Acceso: 18/07/07. 23 Presentación institucional de la “Red Caldas”. La Red Caldas ha dejado de funcionar, por lo que ya no es posible acceder a la que fuera su página web ( http://www.colciencias.gov.co/redcaldas/info.html ). No obstante, es posible acceder a la página de presentación institucional de la Red Caldas a través de las páginas web de organismos internacionales que refieren a la Red Caldas. Por ejemplo, es posible acceder a la información institucional de la Red Caldas a través de la página web de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) URL: http://www.ilo.org/public/spanish/employment/skills/hrdr/init/col_16.htm Acceso: 20/07/07

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constituyó en uno de los ejemplos mundiales a seguir en cuanto a las políticas públicas para la constitución de una red de vinculación con la diáspora científica. La Red Caldas fue pionera no sólo a nivel latinoamericano, sino que se constituyó en uno de los ejemplos propagados por los organismos multilaterales (OIT, UNESCO, entre otros) para países en desarrollo de otras regiones. Asimismo, al tratarse de un caso pionero en el uso de las TICs para implementar un nuevo tipo de articulación con la diáspora científica, la Red Caldas fue frecuentemente estudiada por la literatura especializada en migración y movilidad internacional. De acuerdo con Chaparro, Jaramillo y Quintero (2005), quienes hicieron un importante trabajo sobre las lecciones de la Red Caldas acerca del papel de las diásporas en facilitar la participación en las redes globales de conocimiento, la Red Caldas estaba integrada por los siguientes actores:

• Miembros de los Nodos: investigadores colombianos en el exterior. • Embajadas y Consulados colombianos. • COLCIENCIAS y el Sistema Nacional de Ciencia y Tecnología. • Grupos y Asociaciones de Profesionales Colombianos. • “Líderes científicos articuladores” de áreas temáticas específicas.

La Red Caldas fue creada en el año 1992 por Colciencias. De acuerdo con Chaparro, Jaramillo y Quintero (2005) su período de esplendor fue entre 1995 y 1998. Fue reestructurada por Colciencias en el año 2001 con el objetivo de “darle mayor contenido temático a la Red, con el objeto de consolidar los vínculos entre la comunidad científica colombiana en el exterior y los problemas del país y permitirle evolucionar en una red de aprendizaje y transferencia de conocimiento que a su vez reproduzca conocimiento” (Presentación institucional de la Red Caldas24). Chaparro, Jaramillo y Quintero (2005) señalan su desarticulación para el año 2002, y catalogan al período que se abre a partir de 2003 como de “resurgimiento”. En su balance de los resultados de la red Caldas Chaparro, Jaramillo y Quintero (2005b) señalan que las redes de investigación, las redes de innovación y el aprovechamiento de las diásporas, brindan acceso “al conocimiento protegido que tienen ciertas comunidades especializadas relacionadas con redes científicas y redes de innovación. Este valor agregado es mucho más importante que la realización de un proyecto cooperativo o un partenariado (“research partnership”) en particular. Si bien estos últimos son muy importantes porque constituyen la principal forma a través de la cual efectivamente se desarrolla la cooperación científica y tecnológica, es el acceso al conocimiento protegido que una red tiene lo que puede generar el mayor valor agregado. Esto es aun más cierto en las redes de innovación. Este es un enfoque diferente al que hasta ahora ha predominado, donde el énfasis casi exclusivo es en los proyectos cooperativos específicos” (2005b: 28). Un elemento muy interesante del balance hecho por los autores sobre la experiencia de la Red Caldas, que no se limita a la experiencia de esta, es la acentuación de la importancia de integrar a otros actores sociales además de los científicos, para aprovechar la potencialidad de la diáspora colombiana (Chaparro, Jaramillo y Quintero, 2005b: 30). Los autores señalan que la Red Caldas se limitó a la diáspora científica, cuando otras experiencias internacionales exitosas señalan la importancia de integrar también a la diáspora tecnológica (ingenieros) y empresaria. Este es un elemento importante a ser tenido en cuanto de cara no solamente a la experiencia colombiana, sino también a la experiencia Argentina en la materia. Ya que ambas iniciativas de políticas públicas sobre movilidad y migración de científicos y tecnólogos (La Red Caldas y el Programa

24 Información institucional de Red Caldas obtenida en la página web de la OIT URL: http://www.ilo.org/public/spanish/employment/skills/hrdr/init/col_16.htm Acceso: 20/07/07

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RAICES) han omitido integrar a la diáspora de empresarios y entrepreneurs en sus redes, lo que, como señalan los autores mencionados, supone desaprovechar una de las potencialidades más importantes de las redes de emigrados en cuanto a la posibilidad de acceder a conocimiento restringido de las redes globales de conocimiento. Esta inteligencia tecno-económica de la “otra” diáspora de emigrados, es importante de cara a subir en la cadena de valor de las redes de investigación, y más específicamente, en las redes de innovación y producción de las empresas globales.

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Conclusiones La transición hacia una economía basada en el conocimiento ha puesto a los recursos humanos en ciencia y tecnología (RHCT) en el centro del debate académico y político, no sólo en las áreas de educación y de mercados laborales, sino también como parte de las políticas públicas en las áreas de política científica, tecnológica y de innovación (CTi). Asimismo, se observa un resurgimiento por el interés en la migración y la movilidad de científicos en el contexto de la intensificación de los flujos migratorios y de personal altamente calificado, que presentan una dinámica policéntrica, según países e incluso según disciplinas y temas. Se observa el incremento de la competencia entre las economías más avanzadas por atraer a los mejores investigadores provenientes de países en desarrollo, lo que aumenta la presión sobre los sistemas científicos y tecnológicos de los países en desarrollo. Observamos que esta situación afecta también a países altamente desarrollados científica y tecnológicamente, los que si bien tienen saldos migratorios positivos de personal altamente capacitado frente al resto del mundo, presentan una fuga de cerebros en líneas de investigación estratégicas. Tal es el caso de la migración de investigadores europeos a los EEUU en áreas clave de investigación, situación que motivó la implantación del programa ERA-Link por parte de la UE. Por otra parte, asistimos al incremento de la movilidad internacional de los científicos y tecnólogos, en el marco de la intensificación de la internacionalización de la ciencia. Las redes de investigación conformados por múltiples nodos, que integran a grupos y centros de investigación de distintos países son desde hace ya varios años una realidad corriente. En este marco, surge también un nuevo tipo de movilidad ligado al trabajo en línea, gracias al uso intensivo de las TICs, que permiten una migración de habilidades pero no de personas, situación que ha sido caracterizada como una “migración virtual” por algunos autores (Aneesh, 2000, citado en Pellegrino y Martínez Pizarro, 2001). La posibilidad abierta por el uso intensivo de las TICs de conseguir trabajo y desarrollo profesional en el exterior sin requerir el desplazamiento de los sujetos ha sido catalogada también como brain exchange por la literatura (Aneesh, 2000 y Williams, 2000, citados en Pellegrino y Martínez Pizarro, 2001). La revolución de las TICs ha permitido el surgimiento de redes virtuales de investigación, donde se produce este nuevo tipo de movilidad. Asistimos, asimismo, a un renovado interés por las redes como modelo organizacional para las actividades de investigación, evidenciado por la importante presencia de las redes en los programas de investigación públicos y privados, y en segundo lugar, por la presencia de las redes como objeto de estudio dentro del campo denominado de ciencia, tecnología y sociedad25. Las TICs y las redes virtuales de investigación han sido utilizados también para el aprovechamiento de las diásporas científicas por parte de los países de origen, generalmente países en desarrollo. Este nuevo tipo de cooperación telemática en red con los investigadores emigrados ha propiciado el surgimiento de una oleada de literatura acerca de los beneficios del brain gain, entendido éste como la captación de los cerebros que un país tiene trabajando en otro. El enfoque del brain gain postula la

25 Entre los numerosos trabajos acerca de las potencialidades de las redes como modelo organizacional para las actividades de investigación en ciencia, tecnología e innovación, podemos mencionar, en el ámbito latinoamericano, al trabajo de Hernán Jaramillo “Las redes de cooperación: un modelo organizacional de articulación para la ciencia y la tecnología”, en: Revista Colombia Ciencia & Tecnología, Instituto Colombiano para el Desarrollo de la Ciencia y la Tecnología/COLCIENCIAS, Vol. 19, nº 2, Abril-Junio, pp. 26-40.

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vinculación con la diáspora de científicos como estrategia para enfrentar la emigración de investigadores. Este enfoque se opone al clásico enfoque del brain drain, que advierte sobre las pérdidas para el país emisor que entraña la emigración de científicos, y por lo tanto promueve desalentar la emigración y fomentar la migración de retorno de los científicos expatriados. Dentro del amplio campo de los RHCT, la cuestión de la movilidad ha adquirido creciente interés, tanto en el ámbito académico como en el ámbito de las políticas públicas para el desarrollo de los sistemas regionales y nacionales de innovación. En el contexto latinoamericano, hemos analizado las particularidades del sistema de ciencia, tecnología e innovación de Argentina y Colombia, comparándolos con países miembro de la OCDE y con otros países de la región. Ambos países se caracterizan por una relativamente baja inversión en I+D como porcentaje del PIB –incluso comparándolos con otros países latinoamericanos, como Brasil y Chile- y, en el caso Argentino, por una alta cantidad de investigadores –comparando con el contexto latinoamericano-. A pesar de que ambos países presentan una baja inversión en I+D como porcentaje del PIB, Colombia presenta una mayor inversión en I+D por investigador que la Argentina, debido a la relativamente alta cantidad de investigadores de este último en relación con su gasto. Tanto la Argentina y Colombia otorgan gran importancia a la formación de recursos humanos altamente calificados en ciencia y tecnología en sus respectivas políticas de ciencia tecnología e innovación. Como se señala en las Bases para un Plan Estratégico de Mediano Plazo en Ciencia, Tecnología e Innovación de la SECyT de Argentina:

“El déficit de recursos humanos en áreas críticas para el desarrollo constituye un cuello de botella más severo y más difícil de superar que el insuficiente nivel actual de la inversión en ciencia y tecnología, aunque ambos fenómenos estén estrechamente vinculados” (Bases para un Plan Estratégico de Mediano Plazo en Ciencia, Tecnología e Innovación - SECYT, 2005: 76).

Los países latinoamericanos, frecuentemente enfrentados a cíclicas crisis económicas que obligan a restringir el gasto público, presentan una muy baja inversión en I+D como porcentaje del PIB (0.64%). Brasil (0.91%), la única excepción de la región, aún se encuentra muy lejos de lo invertido por la media de los países de América del Norte (2.6%), Europa (1.73%) o Asia (1.71%)26. En este escenario, la inversión en recursos humanos altamente calificados no solamente es esencial para el logro de los objetivos de desarrollo en cuanto a las políticas de ciencia, tecnología e innovación, sino que también, comparativamente, es una política mucho más accesible que la inversión en equipos o infraestructura. Asimismo, como señala el Plan Estratégico de CTI de la Argentina, la inversión en RHCT constituye una necesidad aún más imperiosa que el aumento en la inversión en CyT, puesto que requiere de tiempos de maduración mucho más largos, y contribuye al consumo, la producción y la difusión de la ciencia y la tecnología en la sociedad. En el contexto de sus políticas de recursos humanos altamente calificados, ambos países han impulsado políticas públicas sobre la migración y la movilidad de científicos. Colombia creó la Red Caldas, que se mantuvo activa durante toda la década de 1990 y comienzos de este siglo. La Red Caldas ha sido un referente internacional en cuanto a redes para la vinculación con la diáspora científica. Varios organismos internacionales han presentado a la Red Caldas como un modelo para

26 Datos de la RICYT para el año 2005 para Brasil, fuente RICYT (www.ricyt.org). Datos de la RICYT para el año 2002 para la media de América Latina, América del Norte, Europa y Asia, citados en (Bases para un Plan Estratégico de Mediano Plazo en Ciencia, Tecnología e Innovación - SECYT, 2005: 45).

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otros países en desarrollo. Asimismo, ha sido objeto de estudio de numerosos trabajos sobre las redes de vinculación con la diáspora científico, puesto que este programa es un exponente de los lineamientos sugeridos por el enfoque del brain gain. Según uno de estos trabajos, actualmente la red se encuentra en una fase de renacimiento. Por su parte, la Argentina ha desarrollado el Programa RAICES (Red de Argentinos Investigadores y Científicos en el Exterior), que fue creado en el año 2000 y relanzado en 2003. El Programa RAICES, a diferencia de la Red Caldas, promueve líneas de acción que responden tanto a las recomendaciones del enfoque del brain gain, como del brain drain. Es así que este programa promueve tanto la revinculación de científicos emigrados a través de la conformación de redes y proyectos de investigación con centros y grupos de investigación en Argentina, y subsidios para que investigadores argentinos residentes en el exterior realicen estancias cortas de investigación en la Argentina, hasta el otorgamiento de subsidios de retorno para investigadores emigrados y el ofrecimiento de información sobre posibilidades de trabajo en la Argentina. Se trata de una iniciativa interesante, en tanto conjuga elementos de ambos enfoques y no desestima la importancia que todavía tienen las políticas para favorecer el retorno de los científicos interesados en hacerlo. Las diferentes líneas de acción abordan distintas expresiones de la movilidad y la migración de científicos que conviven en la realidad, más allá de los enfoques teóricos con los cuales se las analiza.

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