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8/16/2019 Gedeón (Madrid). 15-3-1899
1/8
F R O N T Ó N N E O J A I
• 70r
Polavieja saca todo lo que puede) y Siivela resta más cada vez. ¿Qué se apuestan ustedes á
que acaba muy mal este partido?
8/16/2019 Gedeón (Madrid). 15-3-1899
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8/16/2019 Gedeón (Madrid). 15-3-1899
3/8
QEDEON
¡se le pone la oarne de gallina
Pero el quiere urrejílnr esas cuestionea
qufi Biirgea con honnres de problemas;
jJHrH íau varios temas
d» como el C)l[4>iidorf las traducciones.
Los repa t r iadcs queea tan duro t r ance
han puesto a l Gabine te ,
verán pronto «us cuentas a l jonadas
con los sellos de silcanee
qutí se exige
á
las car tas r e t rneadas .
Mfida, pues, del Tesoro compromete. . .
l*iiesto que psííSi por 8 Hr de i paso,
cuentas de atrás eoo sellos de
reíraso.
¿Y de los prisioneros?
l 'is grave la cuestión, la cuenta vieja,
y loH proy ectos , aun los má s sin cero s
s« ea t rnl ían con un nom bre : Polavie ja . . .
¡y HBÍ D. Paco tiene el alma en vilo ,
y se is m¡ [ desgrac iados en Camilo •
LoB pueblos inundados
pronto estarán íífciíííoj, ; j-^.f • -
pues se lia hecho una remíÉiiL':(Jft't){irpgU8»^.
y los gobernadores .
j - - - . , . - - .-. '\-'
á pesar del diuero y los híi 'uores,
.es fácil que no dejen ni las aífuaS.-,
Y la f amosa hue lga de cocheroi ,
conflicto superior que 88 avecina,
y que es . según Durán^ cuest ión de íuerop,
y, según Vi l laverde . de propina ,
espera resolver la en un ins tante
con auxi l io de Dato,
ofreciéndole á caHa candidato
minis te r ia l , un ac ta y
vn
pescante
..
I^adie ba de protes ta r .ní a rmará gresca :
un distr ito. . . un pescsuite. . . ; todo es pesca
Quiera Dios que resue lva esos asuntos
de la pa t r ia en se rvic io. . .
Y ya qu« gobernar es un oficio,
¡no resulte un oücío de difuntos
G E D E Ó N _ M 0 R E N O - |
Don Valen t ín Gó mez, ant iguo di rec tor de l aa t í -
g u o .
Momm ento Católico;
y aplaudido,autor deyiPa-
mas y melod i am as V a orí gins lee, ya vertido s del fran
c é s ,
nos ha of rec ido én la Pr incesa un nuevo a r reglo .
Titúlafle
Miércohs de Ceniza, y
aunque todos los
'c r í t icos di je ran,quH es unn obra ant icuada , ámi me
par f lce de ¿btua l idad, profundamente mora l y. l lena
de enseñnnzaB aprovechab les .
Se t r a ta de
un
calnvera
ya
entrado
en años
í muy
bien ínteFfüretado por Valles, el cual no serácalave-,
ra . .„ ¡pQrff entrado .en años ) , que anda por el m ond o
buscando- á
xw i
mujef con quien tuVo ita momento
de
• delirio. I jo la conoce, ni snbe como se^Mama, auaqae
pare zca me ntir S; pero al f inía enoiífiotra, sabe qne
CB
casada
j
conoce
á
su bija, fruto de aquella falta, 6
como si dijéi'amoB biJA del
momenio.
Como etí natural,
no puede gozar
de
las diíljupífs de la paternidad y
esto, unido
á
c ie r tos disgustos or iginados por su le
yenda da Tenorio, le hace que
sis .
convier ta a l ' pola -
viejigmo. Eotona el yo pecadoi;, recita el credo y de
c ide pasar el res to de sus días í i 'bordo de un b^ co
propiedad suya .
Enseñanza que se desprende de
M iércoles de Oeniza:
todo hoinbre que t iene un desl io con uña señora cu
yo poTnbre ignora , y q ue , además t iene un barco, ha
de acabar su vida en la inmensidad de los inferes.
Como se ve , la mora l y la navegac ión es tán más re
lacionadas de lo que Be cree eene^'almente.
La nota de ac tua l idad de Miér-cotet rfe Ceniza corre
á cargo de un bizar ro corone l , per sonnje s impát ico
que de l iende á E spaH a e n l á r goa ^ pa r la me n t os mu y
parec idos
á/otidos
de periódico; oyéndole hablar se
creería leer un artícültj del propio D. Valentín.
La obra, como era lógico esperar de¿8u autor, hom
bre avezado á las l ides tea t ra les y pol í t icas , t iene
much o m ovimiento escénico v naucho
Molimiento Ca
tólico; está ademiís bien escrita. Así y todo, duró lo
que duranl f tS rnans .
l esp ce d wt matin,
como dijo el otro. Ó, como dir ía D. Arsenio, el fspa-
ciodeun batin... P a r a sus t i t u i r l a seest renó Hotel
Sffterini, oXvn a r regl i to debido áSantero y áPedro
G i l , a u n q u e áéste es fácil que no se le deba, por ser
e l ínt imo de Ceíer ino Pakncia .
Hotel Severini e^ \mÁ cosa
\ h.vTL
lüivüü uno loa in
tes t inos , que no s iempre se ha de dec i r las t r ipas . . .
C u m p l e
su
misión, pues no se puede p edi r ^ esas
Comedias
lo
que
á
otras, ni se pueden ser con ellas
de ma s i a do
setcrini.
La misma noche de l Hotel hubo tam bién en La ra
BU poquito de efetreno. Kstas coiijieidencias han alar
ma do
á
los críticos dp las tres clases de circulación
(mayor , mediana y pequeña) , con sobrado mot ivo. , .
S i cua lquier c r í t ico
se
vn negro, para hablar de un
est reno , ¿cómo p uede hab lar
de
tres acaecidos en
Una misma noche? Hay
un
solo mádio, ya 'puesto
en prác t ica por per iódicos como e l Éeraldo: disponer
de c r í t icos que , como Juanita Pedal, t e nga n ub i c u i
dad
y
bic ic le ta , condic iones indispensables para
ejercer el
sagrado ministerio.
Bueno, pues en Lara es t renaron
El gran ífrano,
es -
Í
iecie de cinematóg rafo electora l, donde sale n
r e -
uc i r las malas a r tes de que se va len los Gobiernos
para ganar las e lecc ionaa . La c i rcunstanc ia de
ser
autor de
El gran tirano
e l Sr . Sánchez Pastor , ha he
cho c reer á muchos que dicho ho mbre públ ico ae
separaba de Sagasta , puesto que r idicul izaba la po
lítica de su amigo y jefe. Por su parte La Época, que
no perdona m edio de pr opa gan da , hizo no ta r e lo
cuentemente que las e lecc iones
deBl gran tirano
son fuBionietas, pues Silvela piensa hacerlas con
frBnqueza y sinceridad.
Nadie ha hecho caso
de
esas dec la rac iones tea
t ra les de l ex-órgano de l ex-par t ido e i -conservador ,
ni lia creído que J/.iyrfflu
tirano
fuera una dis iden
c ia . &ino s implemente una gr i ta .
Se me olvi falia d^cir que pofos días ant es tuv o
l uga r
H I
beneficio
de la
P i no ,
y
que la futura pr i
mera ac t r iz de l tea t ro de la Come di a e s t r e nó un
monólogo regular y un jugue te m^mos que regular .
Kn cambio, loa rega los que rec ibió no fueron re
gulares , s ino soberbios . C asi tan soberbios como
D .
Franc isco Si lve la .
Otro tanto pudiera dec i r se de loa que enviaron
á
Carmen Cobeña sus amigos y admiradores .
En su benef ic io es t renó dos obras escr i tas expre
samente para e l la , según rezaban car te les y progra
m a s ,
excediéndose s in duda , porque una de las ooras
ea de Shakespeare y la ot ra de Lope de Rueda , yn o
creo que D. Gui l le rmo ni D. Lop e pensaran ea la
señor i ta Cobeña a l escr ibi r sus respec t iva s produc
ciones. No dico esto en son
de
censura
ni
muc ho
men os, s ino para de ja r las cosas en su pu nt o; por
que e l a r reglo de Shakespeare , hecho por Benavente
Con el t í tulo de
Cuento de amor,
es de verdad pr imo-
-.
roso y encantador , ye l ent remés El chiquillo, ba sa
do en e l de Rueda , t iene grac ia .
Inút i l me parece adver t i r que con ocasión de
su
beneficio llenaron de adjetivo» á Carmen Cobeña
todos los per iódicos . Adje t ivos de loa más ha lagüe
ñ o s ,
que por es ta vez es taban bien apl icado s.
C LLEJE NDO
—¿Dónde va usted con tauta pr isa - amigo Pérez?
—No me detenga usted, Gsdei5ií- . .^yoy á t r a ns i g i r
de c ua l qu i e r ma ne r a un p l e i t o que t e ^ o c on t r a L ó-
pe z y c on t r a F e r ná nde z .
•̂•
—¿Le han dado áusted malas nót íc íaa de l t r i
buna l?
— N o .
Gedeón; pero me def iende Gamazo
y
ha re
nunciado
á
la cesantía da míQÍstro.
jCorra usted, Pérez
—Por poco me a t repe l la us ted, amigo López .
—Ah , Gedeón, llevo mui ha p r isa ; es toy medio
loco. Voy á t r ane igi r de cua lquiera manera ún ple i
to que tengo cont ra Pérez y cont ra Fernán dez .
—¿Teme usted perder lo, s in duda?
— Ñ o ,
Gedeón; pero me def iende Maura yha r e
nunciado á1H cesant ía de minis t ro.
—¡Cor ra usted, López
*
- ¡Bruto
— [ A ni ma l
—¡Fernández -
—¡Ge león
—Me ha deshecho usted un pie .
—Venga e l ot ro, y ¡adiós L levo mucha pr isa .
—Ya lo sé ; va usted
á
t r ansigi r de cua lquiera ma
ne r a
un
ple i to que t iene cont ra Pérez
y
contra
López .
—¡Eso es
—Y le defiende
á
usted Canale jas , que ha renu n
ciado
á
la cesant ía de m inis t ro . ¡Cor ra us t ed , Fer
nández
Gedeón solo.—¡Oh admirable desprendimiento de
Si lve la , que haconcluido con las cesant ías de los
mi n i s t r os . . . ycon los pleitos
E L G U A N T E D E S I L V E L A
Señor presidente del Consejo ¡chóquflla V. El
Kso de renunciar álas cesant ías ug es ningúa re
curso maravi l loso ni una panacea para nuest ros ma
l e s ,
pero convengamos en que ha s ido un buen gol
p e ,
'digan cuanto quie ran los te rmó met ros de Fer r e -
ras y los exminís t roa enemigos de V, E , yde sol ta r
la mosca .
•El decreto en cuestión es, sobre todo , un retr ato
de V. E . de cuerpo ante ro.
No es la medida de un gran gobe rnante , pero es
la estocada segura é impensada del político f loren
tino ; se ve que conoce V. E. el corazón y el bolsillo
humanos y es to, s i no basta para la sa t i sfacc ión de
la pa t r ia , sobra para regoc i jo de
GEDEÓN.
Lo mism o Sagasta que Ca ste la r , desempolvan do
el pr imero su vie jo mor r ión y aubiéndoae e i segun
do sobre el tr iclinio desvencijado y cojo de las I jber-
tades sacrosantas , a r roja ron áV. E . e l guan te ;oh
el guante de Etiego, de Torrijos, de loa doceañistasi
de los mi l ic ianos nac iona les .
Y. ,V ,E . , en vez de recoger lo para que e l dram a
románt í t» cont inuase , ape la á un resor te cómico que
le envidia rán de seguro muchos cur r ioches yecha
otro guante enmedio de la r eunión: e l guante de las
cesant ías .
Repi to que la choque V. fí. Sr. Silvela.
Bien sé yo que en punto á r e ge ne r a c i ón nohe mos
de,salir del género chícp, pero uste^i cuando menoii
^(apearemos e l t r a tamie nto ¿no es verdad?) nos hace
. .reír .
r
:; Risa caus a, en efecto, saber que ex.ipte por ahí u n
¿señor Ladico que ba s ido minis t ro
y
otro señor Pó-
•irez Cos talfs qu e ha sido consejero de la Co ron a, eit
ídecir de la Corona no, pero cobra cesantía, que squJÉ
íea lo impor tante ; r i sa causa saber que losSres .Con*
«cha Castañeda y Garc ía Barzana l lana . que yancr
^eatán para nada ni para nadie, hacen del habilitadojí
>''Una honro sa excepció n y en
fin
ha sido cosa d^ des-fi
te rni l la r se contemplar las ac t i tudes de asombro, d^
í i r a , de cómica indignac ión con que lo» exminis t roi t
monárquicos y republ icanos han acogido e l decre to^
.:de Silvela; fuera de Gamazo, de Maura y de Cácale- '
jas que , como hom bres l i s toa que son, han sabido^
se gu i r l a b r oma .
j
Los demás han ca ído en la l iga como ca landr ín*
. . inocentes y cuanto más se munven, más se enfraa-]
c a n .
—Eso no es economizar—dicen,—porque enr e -
.eume n todo ello es una insigDÍficancia, una bicoc a.
, Pues si es una bicoca, ¿quién es el cursi que que-
" da en r idículo por tan poco?
•
Nada, nada , Sr . S i lve la , es grac iosís imo. Escr ibe :
us t e d pa r a
la Gaceta y
debía usted escr ibi r para-
Apolo.
Y ya que es tán en bog a loa chascar ri l loB de a lma - '
naqu e para esmal ta r con e l los las nuevas produ C'
ciones del género, ahí va uno de aquéllos, con obje
to de que lo tenga usted en cuenta
al
pone r le motde la J.n
á
este sa íne te de las cesant ías :
Acaba de ocur r i r un acc idente en medio de la ca
l l e .
E l me nd i go
6
mendiga , víc t ima de l a t rope l lo ó.
de la propia miser ia , yace en e l a r royo, mient ras un
grupo de t r anse únte s , que va e ngrosand o por m o
men tos , le contempla , pero no la socor re .
IiO de s iempre : La malsana cur iosidad re inand o
al a i re l ibre ; la car idad br i l lando por su ausenc ia ,
En esto un caballero, un f ilántropo, cree interpre
ta r loa deseos de todos proponiendo un a suscr ipc ió n .
r e pe n t i na , un gu a n t e ábenef ic io de l prógimo mal-
avp.nturado.
Y qui tándose e l sombrero de copa , lo hace c i rcu
la r de mano en ,man o por todo e l grupo .
M ome nt os de spué s ,
el
sombrero de copa vue lv e
comple tamente vac ío
á
manos da su propie ta r io,
—Grac ias , señores—exclama és te ,
—¿Gracias? ¿Por qué?
—Por haberme devuel to e l sombrero.
d h e s io n e s á la b a e l g a d e l o s c o c h e r o s
Yo no engancho mient ras
no
me den por In me
nos e l mism o sue ldo q ue disf ruta mi am o. No sé
por qué c iento de nueces had e co brar él los se is mi l
duros cuando quien l leva las r iendas soy yo.
E L C O C H E R O D E S IL V B L A .
Yo no me d ec la ro en hu e lga
sí no
me qui tan la
obl igac ión
de
l impiar , r emojar
y
c ha r o l a r
el
ca
rrua je. ¿No es mi seño r académ ico d
8/16/2019 Gedeón (Madrid). 15-3-1899
4/8
E L C O N V E N T O
E
B U E N V I S T
A N T I G U O M I N I S T E R I O D E L A G U E R R A )
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L A P R I M E R A A G A R R A D A
y ..̂ ̂̂ ^
...-̂ -̂
[Eli
¡que se ya á salir el estoquel
L QUESTION DE LOS REP TRI DOS
• •• X i i t pa i i i . , . , . . 7 . . , I . .
s v. .. .
^ ^ s f - - -
Un goMerno aüi alcances.
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6/8
GEDEON
C O N F U S I O N E S ü l l i M i S T E R I L E S
—Por Dios. Dato, sobre todo no te acalores.
—Pero D. Fran cisco de mi alma , ¡si estoy hecho
un lio Esto de las fechas electo rales es capaz de
volver loco á cualquiera . Es senci l lamente un calen
dario electoral lo que yo tengo que arreglar para los
meses próximos , y , f rancamente , para eso me hu
biera s ido mucho más ú t i l en la subsecretar ía Ya-
güe , Castillo ó quien sea ahora el verdadero z arago
zano, que es te m arqué s de L ema tan escueto que
parece una cifra ma s y viene á dest ruir todos mis
cálculos.
—Calma, Dato ; un poco de calm a. Hazte cuenta
que se trata de un pleito: el día tantos van los pa
peles á la Audiencia, el día cuantos pasan á la rela-
toría , pasado un plazo va n al pone nte, unos días
más y se celebra la vist a. . . Pues lo mism o: el día
tantos convocatoria de Cortes, el día cuantos elec-
cióa de interv entor es para c oncejales, otra fecha
para las e leccienes de Ayuntamie ntos , o tra para
elección de in terventores para d iputados á Cor tes . . .
—B ueno; pero todas esas fechas las sabe al dedi
llo 1 procu rndor. ¿Por qué no ha pue sto usted en
Gobernación un procurador en vez de un subse
cretario?
—Tienes razón; pero ya no hay ríunsdio. Ea, coge
el a lmana que, coge con la o tra mano la Ley electo
ral y con eso, un poco de paciencia y otro poco de
saliva, verás tú como todo sale á pedir de boca.
—Si el caso es que la combinación la tengo ya es
tudiada, pero me fa l ta un d ía .
—Bueno, hombre, tómate los que quieras ; la
cues t ión es -que lo ar regles .
—No;
si lo que quiero decir es que m e falta ún
día del mes que v iene.
—¡Diantrel ¿se lo habrá llevado Capdepón?
—No me expl ico b ien , D Francisco; lo que quiero
decir es que tengo estudiados plazos y todo; pero lo
que más me resultaba era que fuesen las elecciones
el 31 de Abril.
—Pues que sean .
—Pero D. Francisco, ¡si Abril no trae má,s que 30
—Desengáñate , Abr i l t raerá todo lo que nosotros
queram os , y además , la fecha me parece per fecta
mente , porque ve rás : l lega e l mes de Abr i l , t rabaja
mos nosotros, trabajan las oposiciones, viene flnde
mes y todo el mun do al ver 30 se planta; pero nos
o tros seguimos y hacemos 3 1 , ¿no es esa tu idea?
—Justamente; en ese día hacemos las elecciones
y las gan amo s, porque el 31 de Abril será un día
del Gobierno y nada más que del Gobierno.
—Una áüda ijie asalta. Dato, ¿y la sinceridad?
—Ptfés.si cojo el cero , de fin de Abril y lo con
vierto en URO ¿me que rrán má s sin-cero tod avía?
• «
—No les quepa á us tedes dud a; A zcárraga es tá
enfiidado.
—Pero ¿por qué?
—Y además tiene razón, porque al fin y al cabo
él fué qúi«n embarcó al. Direc torio pa ra ía Unión
Conservadora .
—El ha embarcado gente para eso y para todo,
porque era su manía; de modo que por ah í no tene
mos que agradecer le nada.
—Pero ¿y si se enoja?
—Tal día hará un año.
—No hay que echar las cosas por la t reme nda, de
bemos sumar v oluntades , ¿verdad , Vil laverde?
—Eso creo yo: sum ar á todas ho ras y por todos
los medios para continuar en el poder. Ya lo dijo el
cláaico: «Suma... y sigue.»
— Pero ¡cómo sabe de cuenta s es te R aimund o
;—^Procedamos coQ orden y sepamos en primer lu
gar: ¿por qué está enfadado Azcárraga?
—Porque D. Camilo le ha mirado con malos ojos.
—Porque Duran y Bas le habla sin apear el dia
lecto,—No puede ser ,
vo
pu ede ser; lo mejor es que
consul temoBá Gedeón.
—Amigo G edeón, veniínos á que nos saque us te d
de una duda. ,
—^Venga de ahí.
" —Á.j;cárraga,está enfadado con nosotros.
—Alguna cajisa ha,brá.
—N inguna; nosotros no le hemos hecho n ada .
— P u es e so t i en e . ' . , ' . , • „ / - - : / * ' •
• - • " -• . • " i . •
«
¡
—Urge el nombra miento de a lcalde p ara Barce-
loDa. . '
—Ya estamos en ello; pero ¿á quien noiii])ramos?
—Pues si tropieza usted en la priíüera vaira ¿qué
hará us ted cuando l leve muchos k i lómetros de mal
camino? ,
—Es que me temo que eSo no sea una vara.
—Será un marronazo, ¿verdad us ted?
—Sí,
amigo mío; e l asunto mé preocupa, ine en
cocora, m« pone nervioso.• —Eche usted por la calle de en medio.
—;Si no sé cuál es Es toy desor ieo tado comp leta
mente .
—Reflexione us ted , consul te precedente s . , .
—¡Ah, qué idea Tiene us ted razón. ¿No resolv í
mi prim«r conflicto quedándome con la cartera de
Estado? Pues justo, ¡el alcalde de Barcelona soy yo
Zos Ministros {al
paño cata lán) .—Este h om bre es
una riera. Cualquiera le hace cargos, ¡se queda con
todos
REGENER C IÓN TE TR L
Conocidas las ideas del Gobie rno, s us propósito s
y su prog ram a, no es ex traño que haya pensado en
regenera r e l teatro , hoy tan a l icaído y an t icua do.
Es te pensamie nto no puede ser más opor tuno por
que si el teatro es el espejo de las costumbres, como
pensará seguram ente e l marqu és de P ida l , ahora
que vamo s á reform ar las costu mb res forzoso será
reformar el espejo.
Ya se han dado las opor tunas ins trucciones , y en
cumplimiento de e l las e l señor gobernador de Ma-
'drid redacta el nuipvo Reglamento de teatros, del cual
tomamos los s iguientes capí tu los :
1 .'
Se crea una ju nt i ó c if radía, encarg ada de
examinar las obras que hayan de representarse .
2 .° Respetando la cos tumbre es tab lecida se per
mit i rán funciones po r horas en A polo , Zarzuela ,
Romea, Lara y Mar t ín . En los o tros teatros tendrán
que ser forzosamente completas.
3." Dá las obras nue vas resp onde rá la cofradía;
del reper tor io só lo s s au tor izan las s iguien tes : *
"En los teatros donde se cultiva el género grande:
Za devoción de la cruz j otroB dramas re l ig iosos de '
los au tores c lás icos y los au tos sacramentales : Za
campana de la A lmudaina, Za capilla de Zanuza, El
cura de Zongueval,
U n,
milagro en Egipto, Za cruz del
tiínel. La cruz del matrimonio, e tc . , e tc .
En los teatr os donde se cultiv a el gén ero chico:
El monaguillo, Za leyenda del monje, Za m isa a grande
orquesta, Misa mayor. El cura del repimiento. Cam
panero y sacristán. Despacho parroquial, Za monja
descalza, e tc . , e tc .
4 ."
QuHdan supri mid os en absoluto los coros de
señoras . Serán sus t i tu idos por t ip les de capi l la .
5 ."
Se introdu ce el fagot en todas las orqu esta s;
los mús icos darán la mayor impor tanc ia á es te ins
t r u men to .
6.° Cualq uiera que sea el éxito de una obra no
podrá pasar de la representación novena
1. Para los monólogos se av isará opor tunamen
te ,
á fin de ver á qué padre le corresponde.
8." Los críticos teat rales no pod rán nun ca su
b irse a l pulp i to .
y o tros var ios que no queremos reproducir para
no quit ar interé s á la p ublicació n de dicho regla
mento .
• ••
y
rm s l h ombro
Dicen q u e e l d i r ec to r g en e r a l d e Ag r i c u l tu r a ,
I n d u s t r i a y C o mer c io e s t& e s tu d ian d o l a man e r a
d e a r r eg l a r l a B o l s a .
¡ Ay Des g r ac i ad a men te n o h ay e s p añ o l q u e n o
8 6 s i en t e ah o r a u n p o co d i r ec to r g en e r a l d e Ag r i
cu l tu r a , I n d u s t r i a y C o mer c io .
Dice un per iódico '
«El señoi; presi dent e del Consejo e stavo anoche
en Gobernación conferenciando con el Sr. Dato.»
Pues no es f lo ja moles t ia .
Es tá d iver t ido e l S r . S i lv ela s i cad a vez que
t ien e que consu l tar un dato se ve obl igado á de
jar la pres idencia del Consejo .
Lo s r ev i s t e r o s t e a t r a l e s s e q u e jan d e q u e h ay a
v a r io s e s t r en o s en u n a n o ch e .
Y cier tamente , lo del sábado fuA tremendo.
A una misma hora es t reno eu la Comedia , en
l a P r in ces a y en La r a .
El don de la ubicuidad no lo t iene nadie más
que Dios .
Verdad es que aquí todo d ios es cr í t ico de tea
t r os .
Leo:
lUg j i
«Dice un periódico que hace pocos días tuvo
lugar en e l Cabo un asal to verdaderamente or ig inal
entre un inglés y un cafre. El arma elegida, el puño.
«De los dos boxeadores quedó muerto el cafre,
quedando, como es natural, reconocida la supremas-
cía de la raza anglosajona.»
N o. Qu ed ó reco n o c id a l a s u p r em ac ía d e lo s ca
fres,
au n q u e s ean in g le s e s .
Cayó el cafre en sangre tinto;
pero sabe su r ival
que e l país será d is t in to ,
mas la caf rer ia , igual .
La id ea d e l d e s a r me eu r o p eo g an a t e r r en o .
Es p añ a v a á n o mb r a r u n a co mis ió n , y á e ll a ,
s eg ú n d i ce n , s e ag r eg a r á e l S r . F e r n á n d ez Vi
l l av e r d e .
R as g o s d e e s t a n a tu r a l eza u o n eces i t a co men -
tariof
Do n P r áx ed es , mu y f r e s co :
«La verdad es que el Gobierno hasta ahora no ha
hecho nada.»
N o sea us ted m odes to : s iga us ted*
— Y o en e s e t i emp o y a h u b ie r a p e r d id o med ia
docena de colonias .
Dice e l fondista d e La Correspondencia:
«Así van las cosas á su término, ni más ni menos
ahora que en los tiempos de Jorge Manr ique, y en
tonces como en los d ías pr imeros de la v ida uni ver
sal.»
J o r g e Man r iq u e .
¿N o l e s u en a e s e n o mb r e a l g o b e r n ad o r y aca
démico Sr . Lin iers?
Jorge Rlanr ir iue .
S i acier ta quién es , le damos la oreja .
L a g u ^ ^ r a e n F i l i p i n a s :
«El a lmírái j te ' Dewev ha pedido m ás mater ia l de
cables a l Gobierno de Washington .»
Se comprende;
Hay q u e amar r a r e l a r ch ip i é l ag o .
Porque parece que no es tá , muy seguro .
ww
El car te l de la Comedia:
• ;• ' Cuentoide amor.-rEl cíiiguillo.
^ ¡Vaya una m aner a de aeaj íar e l cuento de
amo r • ' • ,
En e l C í r cu lo d e B e l l a s A r t e s s e h a c r ead o
una Sección fo tográf ica .
Es o s e r á co s a d e l n u ev o p r e s id en te .
Qu e d es ea r á r ev e l a r a lg o .
-
MSi
Los vecinos de \a cal le del Espejo se han que
j ad o d e lo s p i an o s d e man u b r io .
¡Qué poca paciencia
Los vecinos de la cal le del T a r o t ienen un ór
gano miais te i^ia l dale que le darás todo el d ía , y
n o d i cen u ñ a p a l ab r a . . ,
Dio ^n por telégrc^f î -que ao8,ba de iu uu gu ra rs e
e l p n én te d e l S a j | | i o -
-
] Vay a . u n j^x ^c^^^f r e s ca
Ya lo i n an i tLcó ' d í a s h a ce e l S r . R o mer o R o
bled o. , *• ' ^
¿Quéí jnás "pue nte del Salado, , , que e l que le
s i r v ió p a r a p a s a r s e d e s d e l a o r to d o x ia can o v i s t a
á, la conc entración l iberal?
En Or ih u e la s e h an in u n d ad o v a r i a s ca l l ea .
En A l i can te h a h ech o g r an d es e s t r ag o s e l t em
poral .
En Murcia I jay pel igro dp q ue se os^balse e l
p an tan o .
Bien d i jo e l S r . S i lvela que un d ía de l luvia
hac e más por e l p aís que u n año de bue n Go
b ie r n o .
La co mb in ac ió n d e l p e r s o n a l n o e s t á a r r eg l ad a
n i mu ch o men o s .
Al l á v an a lg u n o s d a to s p a r a e l S r . D . Ed u a r d o
í d e m .
Ha r en u n c iad o s u ca r g o e l g o b e r n ad o r e l ec to
d e B ad a jo z S r . B r ag ad o .
Y eso que por el nom bre pa recí a un gobe rna
dor-modelo contra e l caciquismo.
Tamp o co acep ta e l g o b e r n ad o r d e Va i l ad o l id ,
Sr . Bes ada . •
¡Y aún d i jeron que no hacían más qn o l legar y
b es a r e l s an to
E R R A T A i n P O R T A I V T t i
(No se asus ten us tedes ; no se t ra ta de n ing una
barbar idad . )
Ahí á la vuelta, eti el mono primero, se nos ha co
lado una er ra ta que no es grano de anís . . . del mono
susodicho.
Donde d ice:
Sobre lodo que no voten los hombres ilustres.
Deben us tedes leer ( s i buenam ente quiere n , na
tu r a lmen te ) :
Sobre todo que no voten los muertos ilustres.
N o sabemos quién será e l g uasón que nos ha, le-
vxntado esos muer tos en la impre nta , con la in ten
ción , s in duda, de enemis tarnos con el S r . Lin iers .
C O L E C C I O N E S D E G E D E Ó N
Se hallan de venta en la Administración de'
este periódico, Colmenares, 7, bajo izquierda.
P r e c i o s , s i n reba ja
ASos 1895
Y
1896, unidos en un tomó; en
rústica, 8 pesetas; en pasta, 9 pesetas.
AÑO
1897; en rústica, 7 pesetas; en pasta,
8 pesetas.
AÑO 1898: en rústica, 7 pesetas; en pasta,
8 pesetas.
Imp. de EL ENANO, Arco de Santa Mari*, 8
8/16/2019 Gedeón (Madrid). 15-3-1899
7/8
GEDEON
S O C I E D D F O N O G R Á F I C E S P Ñ O L
B a r q u i l l o , 3 d n p t i c a d o T e l é f o n o l . f 5 1 . — l l A D l i l L »
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DE R. m m m i m m m
C a j » , d i e z r e a l e s
N o c o n t i e n e
calmantes;
s u s c o m p o n e n t e s c o m b a t e n d i r e c t a m e n t e l a
causa
d e l a e n f e r m e d a d , ypor su acc ión , los
efectos
( d o l o r e s yd e m á s m o l e s t i a s ) d e s a p a r e c e n á l a s p o c a s d o s i s . N o h a y q u e u s a r 1 0 ,
\ i>,
20 n i 25
ejem plares:
con
d o s c a j a s c u r a n r a d i c a l m e n t e l o s q u e p a d e z c a n a c e d í a s , - v ó m i to s , d i a r r e a s , d i s p e p s i a s , g a s t r a l g i a s , c a t a r r o s c r ó n i
co s yc u a n t o r e v e l e m a l a s d i g e s t i o n e s . Abre el apetito
nutre al débil.
S e r e m i t e át o d o s p u n t o s f r a n c a d e p o r t e . D e p ó s i t o : Madrid, Sacramento, 2 , Farmacia, yde ven ta en las de
A r e n a l , 2 ; T r a f a l g a r , 2 9 yp r i n c i p a l e s d e E s p a ñ a . — P o r m a y o r , C a p e l l a n e s , 1 .
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J
8/16/2019 Gedeón (Madrid). 15-3-1899
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L OS T R E S M O D E L O S 0 E_ G O B E R N A D O R E S
—Sobre todo, que no voten los hombres ilustres.
I
EL
¡Rompan fik al ¡votog á discreción ¡marcli
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PIDAUNO
—Y a sab en «istedes que ol sufragio olectoríil ae pagai-á como los suiragio s -ií» prúafirn.