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Me di cuenta que éramos pobres... Tes5monio de Gaspar Ruiz Mar9nez. El día 15 de mayo de 2015 a las 15:30 Hrs., recibí una llamada telefónica de mi sob- rina Julietita Hernández; me avisó del fallecimiento de mi tío Gaspar Ruiz. Mi tío Gaspar fue un hombre lleno de vitalidad, muy unido a su hermana, mi madre, la señora Florencia Ruiz Pineda y a sus otros hermanos. Mi tío Gaspar fue uno de los hombres de mi familia de quien, además de mi abuelo Feliciano Ruiz Olivera, recibí ejemplo y educación zapoteca. El 22 de septiembre de 2003 lo entrevisté en el marco de una investigación que re- alizaba sobre la vida cotidiana en el Juchitán de los años cincuenta. El texto que sigue es la transcripción de dicha entrevista, misma que deja el testimonio de mi tío Gaspar sobre el Juchitán que le tocó vivir. Con el testimonio de Gaspar Ruiz, inicio una serie de publicaciones sobre el Ju- chitán de los años cincuenta, donde la voz de los protagonistas nos permitirá perfilar la vida diaria de una comunidad que hoy vive ahogada por la violencia, cuyas causas quizás se encuentren en las rupturas de su historia. La publicación completa, junto con los resultados de la investigación, las publicará BISIÁ EDITORES, esperamos que en unos meses. Samael Hernández Ruiz. Septiembre de 2015. Parte (1) Es lunes 22 de septiembre de 2003, son las 12:00 del día y vamos a entrevistar al señor... Mi nombre es Gaspar Ruiz Martínez, nací el 6 de enero de 1924 a las cinco de la tarde. A la edad de dos ó tres años quedé huérfano de madre, la señora Teresa Martínez. Mi padre fue carpintero, se llamó Feliciano Ruiz Olivera, quedó viudo a la edad de veinticuatro años, yo tenía tres años y como él estaba sólo conmigo, tuvo que buscar a otra persona para cuidarme y se encontró con una señora de nombre Feliciana Pineda Luis, entonces esa señora me dio vida y ser y la respeté como - 1 -

Gaspar ruiz martinez, un texto de Samael Hernández Ruiz

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Me  di  cuenta  que  éramos  pobres...

Tes5monio  de    Gaspar  Ruiz  Mar9nez.

El día 15 de mayo de 2015 a las 15:30 Hrs., recibí una llamada telefónica de mi sob-rina Julietita Hernández; me avisó del fallecimiento de mi tío Gaspar Ruiz. Mi tío Gaspar fue un hombre lleno de vitalidad, muy unido a su hermana, mi madre,la señora Florencia Ruiz Pineda y a sus otros hermanos. Mi tío Gaspar fue uno delos hombres de mi familia de quien, además de mi abuelo Feliciano Ruiz Olivera,recibí ejemplo y educación zapoteca.El 22 de septiembre de 2003 lo entrevisté en el marco de una investigación que re-alizaba sobre la vida cotidiana en el Juchitán de los años cincuenta. El texto quesigue es la transcripción de dicha entrevista, misma que deja el testimonio de mi tíoGaspar sobre el Juchitán que le tocó vivir.Con el testimonio de Gaspar Ruiz, inicio una serie de publicaciones sobre el Ju-chitán de los años cincuenta, donde la voz de los protagonistas nos permitirá perfilarla vida diaria de una comunidad que hoy vive ahogada por la violencia, cuyascausas quizás se encuentren en las rupturas de su historia.La publicación completa, junto con los resultados de la investigación, las publicaráBISIÁ EDITORES, esperamos que en unos meses.Samael Hernández Ruiz. Septiembre de 2015.

Parte (1)

Es lunes 22 de septiembre de 2003, son las 12:00 del día y vamos a entrevistar alseñor...

Mi nombre es Gaspar Ruiz Martínez, nací el 6 de enero de 1924 a las cinco de latarde.

A la edad de dos ó tres años quedé huérfano de madre, la señora Teresa Martínez.Mi padre fue carpintero, se llamó Feliciano Ruiz Olivera, quedó viudo a la edad deveinticuatro años, yo tenía tres años y como él estaba sólo conmigo, tuvo quebuscar a otra persona para cuidarme y se encontró con una señora de nombreFeliciana Pineda Luis, entonces esa señora me dio vida y ser y la respeté como

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madre.

Ya hombre, trabajé con mi padre la carpintería. Cuando tenía veintitrés años mecasé. Doy gracias a la señora Feliciana Pineda, ya finada, que fue mi madre, misegunda madre, me hizo todas las obligaciones del matrimonio: enramada, fiesta,comida, lo que es una fiesta de boda estilo de aquí, de Juchitán.

Bueno, entonces ya empecé a trabajar como carpintero con mi padre en el año de1942, a los dieciocho años. Tenía muchas ganas de ser profesionista, nocarpintero, quería estudiar, quería ir a una secundaria, quería ir a una escuelasuperior; pero desgraciadamente mis padres fueron muy pobres y no pudieronayudarme.

Cuando ya tenía mis papeles listos, un tío mío que era supervisor escolar desecundaria, desde Puebla y todo el sureste, un día pasó por aquí, mi padre y yoestábamos ayudando a otro tío finado, matando unos marranitos para sacar lacomida de mis hermanos, allí me dijo el tío:

-¿Qué estudiaste?, - Estudié hasta sexto año nada más, quiero estudiar más; pero mis padres noquieren ayudarme, no pueden. - Bueno -dijo el señor - no hay problema, el gobierno construyó una escuela paragente pobre allí en Zaragoza, Puebla.

Era en el año de 1940, yo le dije a mi papá quiero ir a estudiar, bueno dijo,inmediatamente arreglé mis papeles, saqué acta de buena conducta, una carta derecomendación con el ayuntamiento, ya que todos mis papeles estaban listos, se loinformé al señor, el tío, él me dijo:

-En esa escuela no necesitamos cooperación y no hay inscripciones, tú te vasderechito a la escuela, entras a estudiar y cuando termines, buscas cualquierprofesión para que tengas, para que estudies.

Yo tenía ganas de ser maestro, un profesor, de lo que se gana más en la vida,porque yo tuve un tío que fue profesor, un tío que se llamó Zenobio Ruiz Olivera, fueprofesor. Entonces arreglé mis papeles, guardé mi ropita y ya cuando el señor pasó:

- ¿Ya estás listo?,

- Si, y les dije a mis padres que me iba; entonces me dijo mi padre:

- ¿Pero cómo?, preguntó mi padre.

- Sí -le dije - quiero estudiar, voy a ir a Puebla, entonces él me dijo. -Mira hijo pregúntale al señor cómo va a ser la cosa, entonces el señor le dijo: -Lo que te vamos a pedir de ayuda son 20 pesos mensuales.

- ¡Ah!, -dijo mi padre - No tengo dinero para mantener a mi hijo, y además es un hijomayor que me está ayudando para mantener a sus hermanos menores, ya trabaja lacarpintería, ya hace los ataúdes, ya me ayuda, así es que no puedo y no se va a ir.

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- Correcto -le dije- está bien.

Me di cuenta que éramos pobres, la pobreza de todas esas gentes de la familiapues, mis hermanos estaban pequeños. En esa época de la juventud de uno, meencontré a otros amigos de la misma edad, que fuimos a la escuela, cursamos laprimaria, terminamos sexto año; pero no había secundaria aquí en Juchitán, nada,nada, bueno nos soltamos.

Ese año hubo Servicio Militar obligatorio, todos los jóvenes que ya tenían 18 añosdebían dar servicio militar obligatorio, hubo sorteo, sin embargo otros doscompañeros y yo nos arriesgamos a irnos voluntariamente sin sortearnos, .Inscríbenos, le dijimos al señor presidente nos vamos a ir, - ¿se van a ir?, - sí,voluntariamente, sí, con la idea que terminando los tres años, nos quedaríamos enMéxico a buscar escuela para estudiar. 1 Bueno sí, dimos nuestro servicio militar unsolo año; pero desgraciadamente ya no fuimos a la ciudad de México, nosquedamos aquí.

En un punto entre Juchitán y Tehuantepec hay un campo aéreo, y entonces allíhasta ahorita existe un cuartel donde están los soldados y ahora es un campo deaterrizaje, allí nos tuvieron un año. Cuando salimos nos dieron documentos y lasgracias. Mis hermanos estaban pequeños y a mi papá ya le gustó un poquito eltrago, la copa, llegué y le dije, ya regresé.

Solicité trabajo en el cine Lux de Juchitán y en 1946 empecé a trabajar comomanipulador2, pasando las cintas.3 Tenía 19 años, cuando inicié con mi padre.Trabajaba la carpintería de día y de noche en el cine.

Llegó el tiempo de casarme, y me casé en el año de 1947, tenía 23 años y seguíatrabajando en el cine. En mi taller tenía unos operarios, haciamos: muebles,roperos, vitrinas, tocadores, baúles, hasta ataúdes para gente pobre, por esoactualmente tengo mi negocio se llama “Ataúdes económicos” y los sigofabricando, hacemos muebles también.

Bueno, de allí ya me casé con una bella señora que era de la familia GallegosLópez originaria de aquí. Mi señora se llamó Julieta Gallegos, ella tenía 18 añoscuando nos casamos, yo tenía 23; vuelvo a decir otra vez la gran ayuda que medio mi segunda madre, me hizo la fiesta.

Ahora como cualquier hombre, uno tiene que sufrir en la vida, se sufre en la vida;pero portándose bien yo creo que uno sigue adelante, y yo no me encontré conmalos amigos, malas personas, no. Me encontré con bellas personas, personasmayores de edad, y así en 1948 nació mi primera hija, se llama Teresa VictoriaRuiz Gallegos, la primera hija, y su educación fue muy buena, muy inteligente.

1. El señor Gaspar Ruiz, cunplió 18 años en 1942.

2. Expresión local para referirse a quien proyecta la película en un cine.

3. Si hacemos caso del testimonio de la Sra. Florencia Ruiz Pineda, al regreso del servicio militar,Gaspar, de 19 años, además de trabajar con su padre en la carpintería, ofrecía su srvicio comobarrendero en el cine Lux, era el año de 1943 o 1944.

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Ahora ella ya es una profesora jubilada. Fue Directora de la Escuela Justo Sierra, ytrabajó en la Escuela Secundaria como 15 años. Vive en la Ciudad de Oaxaca.

La segunda nació en 1951 y se llama Blanca Cruz Ruiz Gallegos, estudió en laCiudad de México, Contadora Auxiliar, se recibió, allí se juntó con otro paisano deIxhuatán que es un Ingeniero Civil se casaron, se les hizo su fiesta, viven enVillahermosa, Tabasco, es profesora catedrática.

Con la tercera hija, hice que fuera a la escuela a prepararse para no quedarse delavandera; pero no, la metí a teléfonos de México cuando recién estaba teléfonosde México; trabajó pero no le gustó, se salió, bueno, se casó con otro muchachoque es Contador, ella se llama María Elena Ruiz Gallegos.

Nació otro hijo que lleva mi nombre, se llama Gaspar Ruiz Gallegos, es IngenieroCivil, luego de allí vino su hermanita que se llama Edith Ruiz Gallegos, actualmenteestá trabajando en la escuela Justo Sierra, es profesora. El último de mis hijostambién es profesor, se llama Octavio Ruiz Gallegos, esos son mis hijos.

En el 1951, llegó el cine Juárez4 y formamos un Sindicato, el que fue el Sindicato deTrabajadores de la Industria Cinematográfica de la Ciudad de México5. Trabajétreinta años en el cine Juárez, y diez años en el cine Lux. Fueron cuarenta años demi trabajo como manipulador, a razón de eso me dieron unos centavitos, con esedinero construí mi casita y compré herramientas, equipo, cierras eléctricas, unacaladora; en fin, modernicé mi taller para trabajar.

En 1972, fue el año de Juárez y estaba como Presidente Municipal un amigo míoque le llamamos muy cariñosamente “Tarú”, porque su verdadero nombre es,este… no me acuerdo, es piloto aviador y aún vive. Entonces yo le dije, estaCalle Efraín R. Gómez no tiene alumbrado, nada de alumbrado, pura tierra, lodo,carretas, marranos que andan en la calle, todos los niños encuerados, sinpantalones, yo le dije:

-Señor, mira, ya se aproxima el Domingo de Ramos, vamos a formar un grupo depersonas, para poner alumbrado público en toda esa calle; y si nosotrostrabajamos más, le metemos luz mercurial. Inmediatamente me extendió unacredencial como Presidente del Patronato pro luz mercurial. Así formamos ungrupo y empezamos a trabajar, trabajar, trabajar. Compramos varias lámparas deesas sencillas y las colocamos en esta calle Efraín R. Gómez llegando hasta elpanteón, para el Domingo de Ramos ya estaba bien iluminada bonita y seguimostrabajando, trabajando. Mandé oficios a la Secretaría de Patrimonio Nacional,Secretaría de Gobierno, todo lo que era del Gobierno, pidiendo una ayuda delámparas mercuriales para Juchitán; llegaron, me escucharon ¡sÍ llegaron laslámparas! al Seguro Social me las mandaron. Entonces ya empezamos a poner las

4. El cine Lux se ubicaba sobre las calles de Avenida Juárez esquina con Independencia;posteriormente se trasladó a la calle 5 de septiembre donde estuvo hasta que fue cerrado por susdueños.

5. Sindicato de Trabajadores de la industria Cinematográfica (STIC). Fundado el 4 de octubre de1939. Ver: www.adabi.org.mx/content/descargas/inventarios/Inv256.pdf Consultado el 23 de mayode 2015.

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lámparas; toda esta calle de Efraín R. Gómez, parte de la calle de Independencia,parte de la calle de 2 de abril, parte de la calle de 16 de septiembre, allí trabajamospor nuestras lámparas mercuriales.

Uno va avanzando de edad, pero trabajando. Ya mis hijos se casaron, todos tienensus profesiones, me quedé con mi esposa, pero desgraciadamente la perdí, esteaño cumplió 17 años de fallecida, murió un 7 de Abril de 1986. Me quedé sólo, yatengo 17 años de viudez. Sigo trabajando en la carpintería, hago muebles, misataúdes. Viene la gente aquí a platicar conmigo, mis familiares, mis amigos. Mishijas vienen a verme, me dan de comer, me mandan gente para limpiarme la casa,lavar mi ropa, me tienen bien atendido, pues yo no tengo vicios, no fumo, por esome ven así, no estoy tan machucado, arrugado sí; de tanto reír, a la persona quese ríe mucho, rápido se le pone arrugada la cara.

¿Cómo eran los cines antes? los cines anteriormente eran al aire libre, todoalrededor había tiendas y al centro un patio, no había luz eléctrica, los cines teníansu planta de luz. Llegó el Cine Lux, allí donde estaba el cine Juárez y como mipapá era carpintero, nosotros hicimos unas bancas rústicas para que la gente sesentara; si era de luneta, unas bancas con respaldo, y ahora que si eran de galería,un vil banco sin respaldo. La entrada costaba 40 centavos en galería, y en luneta,60 centavos. Se pasaba la película, si estaba lloviendo nada de paraguas, bajo elagua tenías que verla.

Un año, no me acuerdo bien en que fecha, el cine Juárez mandó a traer unapelícula que se llamó Kalimán, se llenó el cine de gente, dos personas en un sololugar. Controlamos la entrada con una tranca en la mano, al abrir el paso, fuecomo si en un corral entrara una manada de borregos, de verdad, y a la hora decomprar un boleto, se empujaban para que le dieran su boleto. Se metió la gente yse llenó hasta la azotea. Le dije a mi compañero que fue Álvaro Martínez, en pazdescanse: Ésta película no trae el final, y el cine estaba bien lleno, vamos a ver el resultadoque va a dar, mandamos traer al representante del dueño del cine y le dije:

- Señor mire, esta película no trae su fin, ¿qué hacemos?, - bueno yo lo arregloahorita –dijo.

Fue y cortó la cola de otra película que tenía fin y se la pegó. Aquí está -dijo- y a lamera hora de la acción de Kalimán, apareció el fin. Se levantó la gente, agarraronlas sillas, las rompieron, tiraron la caseta donde estábamos y se salió la gente,robaron la caja del dinero; corrieron todos los que estaban vendiendo dulces en lacalle, agarraron a un pobre taquero con todo y cabeza de res y lo corrieron,robaron y se llevaron un carro lo empujaron y lo fueron a tirar, después de eso yallegaron los soldados; pero en esa época estaba recién naciendo la COCEI6,entonces uno de los representantes del dueño del cine, llamó a los soldados ypreguntaron ¿Quienes fueron? A los COCEISTAS les echaron la culpa, pero ellosno fueron, fue el público, así fue la vida del cine Juárez.

La vida del cine Lux, se concluyó en el año 40, entonces no había luz eléctrica y

6. Se refiere a la Coalición Obrera Campesina Estudiantil del Istmo. (COCEI).

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yo estaba trabajando como manipulador allí llegaban los señores, los empresariosy traían un camión de redilas con un motor, le quitaban las ruedas traseras y loponían en el suelo con un generador, y con eso pasaban la luz para trabajar.Idearon eso porque no había luz eléctrica para proyectar las películas; pero cuandose reventaba la película, en galerías echaban muchas gracias, ¡que viva México !que viva el otro, y mentadas de madres se estaban dando ahí, y cuidado con lasque estaban vendiendo. A mi hermana le quitaron sus dulces, se los llevaron se losquitaron, también sufrió ella, esa era la vida de los cines.

Parte (2)

En la regada de frutas, las mujeres desfilaban con sus trajes regionalesbordados y sin zapatos o con zapatos, con la pintura de San Vicente en suestandarte, luego venían otras muchachas con tapetes llenos de frutas: manzanasnaranjas, ciruelas, atrás el capitán en su caballo, con traje de charro, tirando frutas,más atrás, los pescadores simulando que estaban pescando7, de ahí las fiesta vapara arriba silenciosamente, llegaba al palacio municipal y las carretas se iban a laiglesia a dejar las flores, nada de jalar personas, las muchachas hacían su regada(de frutas) a la puerta del palacio municipal. Nada de groserías.

La oficina de correos fue mudo testigo de los bailes en Juchitán en los añostreinta, cuarenta y cincuenta, tenía un salón muy adornado con una lámpara degasolina. Las muchachas bien adornadas con su huipil, sus enaguas, puro oro. Loshombres vestidos de riguroso traje con saco, unos con sombrero otros sinsombrero, todos respetaban a las personas.

Las muchachas a bailar con la marimba. Entraban a bailar a las nueve de lanoche y terminaban a las tres de la mañana, la hora en que entraban los queestaban organizando la vela, los socios terminaban hasta las seis de la mañana.Así fue en aquella época. Los hombres como sabían que había otro baile al díasiguiente, se retiraban a las tres de la mañana. Se quedaban los mayordomos y lossocios hasta el amanecer

Enfrente del palacio hacían pan, estaban las taberneras con sus cervezas; perono tanta cerveza como ahora, antes se consumía más mezcal. Las mujeres queiban a la vela llevaban su banquito, ese banco se usaba para cama, luego leexplico porqué, y ahí se subía la gente para disfrutar de la música, luego losmayordomos y la sociedad empezaban a repartir dulces para comer, jícarasgrandes de horchata. Así fue esa época no como ahora.

Antes no había cama matrimonial, sólo hamacas, camas de pencas de palma dedos metros de largo por dos metros de ancho, cuadradas, se enrollaban. La gentemandaba hacer sus dos banquitos bajos, sobre ellos se ponía la cama para dormir,no había colchón sólo hamaca. Los niños se acostaban a dormir en el suelo,encuerados y amanecían con la sal del sudor pegada al cuerpo.

Las sillas no eran como las que usamos ahora, un banquito rústico nada más,

7. En esos festejos, los pescadores lanzaban sus redes a quienes veían pasar la procesión paraque la buena suerte los atrapara.

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una mesita chaparrita con cuatro sillitas, no había tazas, el café se tomaba en unasjicaritas que se ponían a la mesa con tres piedritas para que no se tirara.

Antes se comían pollos, gallinas; el mercado ya tiene muchos años. Según mecontó mi padre, el palacio que está ahí lo construyó Pancho León, del año no meacuerdo, entonces allí vivían las familias Ruiz y López que fueron de dinero,tuvieron ranchos, ganado; donde está el Parque Benito Juárez allí vivieron. Al ladonorte los López al lado oriente los Ruiz y al lado sur los Jaime.

Pancho León8 construyó ese palacio y tienen una ermita que se está cayendo.Se llama capilla del Señor de la Misericordia, está en el centro, también fue de losantepasados Ruiz, familiares de nosotros.

Juchitán anteriormente no se encontraba aquí, estaba por allá abajo a orilla delmar por un punto que le dicen Loma Pobre, cuando ya habitaba bastante gente,dio la vuelta al río de los perros se fue a un barrio que le dicen ahora Cheguigo sur,allí vivieron ellos, como prueba se hallaron algunos objetos enterrados en la tierra.Yo vi uno en el Museo de Oaxaca hace poco; dicen, que fue encontrado enJuchitán, Oaxaca.

Poco a poco ya se vinieron para acá, a lo que ahora es el centro y se agrandóJuchitán. Las costumbres han cambiado, como de ir a cenar al centro: garnachas,pollo, ponche, tlayudas y otras cosas que están de moda. Antes se comía: totopos,queso, camarón. Hubo bastante comida, ahora ya no hay, anteriormente sobraba,la gente la echaba al marranito para engordarlo.

No se metían las tortillas al refrigerador como ahora. Cada quien tenía su hornopara cocer las tortillas. Las mujeres compraban el maíz y hacían sus tortillas. Almedio día te daban una tacita de pozole9, con un pedazo de panela ycamaroncitos, ahora si tomas el pozole te dicen que te va a dar diabetes.

No teníamos en Juchitán agua potable, drenaje, hospitales, escuelas, sólo graciasal general Charis se gestionó introducir el agua potable, el drenaje, la construcciónde hospitales. En 1937 se inauguró El Centro Escolar Juchitán, llegó el generalLázaro Cárdenas a inaugurar la escuela, el general Charis le hizo una comida ensu casa y ese mismo año terminé mis estudios de sexto año.

Los maestros normalistas llegaron primero de Oaxaca; después de Puebla,Oaxaca y México. Y se fundó la primera escuela secundaria, estaba a un lado dela iglesia de San Vicente Ferrer, ahora en ese lugar se encuentra la Casa de laCultura, fue allí donde terminé mi sexto año. Yo quería estudiar en esa escuela,tenía los talleres de carpintería, talabartería, herrería, mecánica, electricidad,plomería, y para las mujereres elaboración de dulces, y costura. Yo le dije a mipapá:

8. Coronel Francisco León Hernández (n. 4 de octubre de 1846, murió en la ciudad de Oaxaca el 8de octubre de 1916). Sirvió en las filas del ejército liberal y fue designado presidente municipal deJuchitán, Oaxaca en 1876.

9. Una bebida a base de masa de maíz disuelta en agua.

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- Quiero ir a la escuela para aprender carpintería, porque hay máquinas, sierraseléctricas, para saber más.

¡No! -me contestó- nosotros somos manuales, me lo negó; pero yo iba a la escuelaa ver cómo trabajaban con las máquinas, esa escuela se llamó Escuela SecundariaTécnica Número 34, ahí estudió mi primera hija, Teresa, después se cerró y ahoraes la escuela No. 50.

Las primeras taberneras10 fueron: mi tía Rosa Ruíz, la señora Lola López,Sebastiana Martínez, Berta Vásquez, ya las nuevas taberneras: Dona Pérez, Rosa,Victoria; nunca me fui a tomar con ellas.

Juchitán empezó a despertar, cuando pasó la carretera Panamericana aquí enJuchitán en el año de 1946.

Para la pavimentación general de todo el pueblo, me acuerdo muy bien el día quellegó Carlos Salinas de Gortari a visitar Juchitán. Estaba como PresidenteMunicipal Héctor Sánchez López, fue al Palacio Municipal, y habló con él y le dijode Gortari : -Por favor cuando vayan a visitarme, quítense el moño rojo que tienen, veo aJuchitán muy atrasado, voy a mandar dinero para que usted señor Presidente,veaque se pavimenten todas las calles: material, dinero, máquinaria, todo lo voy amandar; pero quiero que lo hagas para Juchitán, y me haces una carretera en lacolonia Zapata, si no puedo venir, voy a mandar a un representante, a la semanaentrante que venga van a empezar los trabajos.

Lo ofreció y llegaron camiones de cemento, materiales, máquinaria pesada, todonuevecito; luego empezaron a trabajar y los señores ayudantes decían:

-Aquí la salida, veinticuatro metros de ancho para allá y usted va a cooperar conalgo, porque le toca para la salida, sino toda esta cosa está parada.

La gente no dio nada, porque ya venía el presupuesto y ellos querían ganar más.Así poco a poco entró el teléfono, la luz. Antes no había teléfono no habíatelevisión, nada.

En el cine pasamos la película “La Quinceañera”, antes no se sabía como sefestejaba a una joven cuando cumplía quince años; pero conforme pasó esapelícula ya se vio cómo se hacía todo, lo copiaron y desde entonces a unaquinceañera, como en el cine, la llevaban a la iglesia con música. En el año 55empezaron a hacer fiestas de quince años que anteriormente no se hacían aquí.

Las dos bandas de música de aquella época eran: Banda Ada lado norte, quegrabó muchos sones con Saúl Martínez. Era la más solicitada y la Banda ManuelMartínez lado sur. Ahora hay muchas, tenemos la del paisano Carlos Robles.

10. En Juchitán, algunas mujeres se dedican a la venta de cerveza (antes de taberna), en pequeñospuestos en la vía pública, por lo regular en el perímetro de algún festejo, a quienes llaman"taberneras".

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Cuando empezaron los trajes con hilos de oro, las mujeres usaban collares,anillos, pulseras y no se ponían zapatos, descalzas, pero bien vestidas. Loshombres, los ganaderos los que ya tenían dinero, todos con camisas de mangalarga con mancuernillas de oro y con botones de dos pesos oro, usaban charros,no sombreros, charros de 24, unos charros grandotes rojos con el forro lleno deplata, y no usaban pañuelo rojo. Las mujeres colocaban en su cinto un pañuelo, yyo le pregunté a una muchacha -para qué quieres el pañuelo que tienes colgadoallí- y me dijo -yo lo uso para la hora que vaya a bailar y se quitó el pañuelo, lopuso en la palma de la mano -ahora ponga usted su mano allí- dijo- para no tocarlela mano. Fíjate qué delicadas eran, por eso lo usaban anteriormente, ahora ya nolo usan, ya se perdió la costumbre.

Cuando se pretendía a una dama, a una señorita ¿Qué era lo que hacían ustedescomo jóvenes para hablarle a ella, para convencerla? ¿Se hacía en los bailes o endónde?

Pues sí yo tuve muchas novias, muchas, ahorita tengo una, yo tuve muchasnovias, bailaba mucho el danzón, hasta ahorita lo bailo, danzón, bolero, lo que esel vals, no como ahora que la mano para acá.

Por ejemplo, para enamorar a una mujer, había que verla primero, conocer cómoera ella, si era trabajadora, si sabía hacer comida, si sabía lavar. Entoncesplaticaba uno:

- ¿Cómo has estado? -bien, bien, bueno como amiga y de allí ya empezaba uno ahablarle:

- Quiero tener relaciones contigo, quiero que seas mi novia, pero para matrimonio;pero ellas contestaban: solamente te voy a dar un tiempo de cuatro meses parapoder tener relaciones contigo, cuatro meses y ¿esos cuatro meses para qué?,para conocerte, investigar si no eres paseador, si no tienes vicios, si trabajas,dónde trabajas, qué oficio tienes, tus familiares cómo son, si son buenas gentes,en fin, hacían preguntas las muchachas, y así iba uno platicando y de plática enplática se llegaba a los cuatro meses y uno ya la estaba besando.

¿Para qué tanto cuatro meses? Si iba al cine, la llevaba al cine y ya después lallevaba a su casa y ya la encariña. Le daba un beso y se iba contenta; pero no sebesaban los labios, puro cachete, cachete nada más, no que ahora hasta muerdenlos labios. Y así se iba investigando a la familia. Si eran buenas gentes, si erantrabajadores. Yo también la investigaba a ella: si sus padres tenían ganado, si eranricos. Como me dijo un tío que en paz descanse:

-Hijo, cuando ya estés grande y pienses en casarte, busca a una persona quetenga dinero, - ¿para qué?- le dije, para que no tengas mala vida después.

Una persona que su papá sea ranchero, que tenga ganado, que tenga muchodinero, pero vale más el amor, el cariño, la amistad y la pobreza es lo que vale másen la persona. Si la mujer es pobre y yo soy pobre, vamos a estudiar nuestroscaminos, somos pobres, pero si la mujer tiene dinero, como su mozo me va atener, no me va a tener como esposo, porque, tiene dinero. Ahora ya no, si tienedinero o no tiene dinero ya se casan, dos tres días y se van, y la mujer ya está ahícon su pancita, con su domingo siete, total, ya. No, todo eso no. Así fue en aquella

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época muy delicado.

¡Ah! Y el banco de cama. Ese se mandaba a hacer, lo manda a hacer el noviopara robar a una mujer, no pedirla, no, a poco va uno a pedir a una mujer, ¡no sepide! aquí no se pide.

Anteriormente se ponían de acuerdo. Para tal día, ya la muchacha se iba a vivir acasa del novio y entonces el novio ya tenía listo el banquito, su almohada, supetate. Cuando llegaba la novia, las mujeres de su familia le ponían una división detela. Se acostaba la novia para ver si era virgen o no, hasta eso. Cuando uno secasaba con una persona virgen pero si no era virgen: ¡Órale mamá te vas! tencincuenta pesos y te vas a tu casa.

Uno como hombre sabe si sale señorita, entonces los familiares veían lavirginidad de ella, se mostraba un pañuelo blanco, allí estaba la virginidad. Esanovia era señorita y empezaba la fiesta: cuetes, comida; pero si no era señorita,esa misma noche, se le daban cincuenta pesos. Agarraba su camino y se acabó,así era la costumbre de aquella época. Ahora, salen embarazadas, te casas con mihija, porque ya está embarazada. Antes el novio compraba el banco ahora ya nohay de esos, ya no se usan; lúuna se le dice a esa cama de pencas.

Parte (3)

A la que salía virgen, le hacían una fiesta muy bonita; pero ponían plazo, a fin demes, cuatro meses, para poder trabajar, sacar dinero, entonces ya mandabanavisar a la familia, para tal día se va a casar. Se iban a casar al Palacio (Municipal)por lo civil, se vestían de traje regional, llevaban a la muchacha y al novio, el Juezlos casaba. Saliendo de su casa iban a su comida; comían gallina, caldo, y lehacían una enramada, verde, fresca, color de palma, en todas las orillas habíabancos largos, con adornos de ramas de palma de coco, ramas de plátano. Elsábado velaban a los pollos muertos, mataban unas gallinas para hacer comida aldía siguiente, y comer a salud de la novia, ponían un mecate para colgar a lospollos, y allí en la mesa su mezcalito, cigarros, y dos cantantes con sus guitarras.

Al día siguiente la novia se bañaba a las cinco de la mañana, para que se fueraa la iglesia a casarse. En la misa de obligación, la madrina y todos iban de tequio.La madrina llevaba sus tortas compuestas, refrescos, horchata y al centro de lamesa le ponían una agüita de este tipo, pero bien adornada y si tenían sed yestaban bailando, tomaban agua. Si la muchacha tenía sed, se le llevaba agua. Noahora que les llevan Coca Cola.

Empezaba la ceremonia del matrimonio a las diez de la mañana, iban a traer a lamadrina, a las tres se terminaba la fiesta, y cada quien para su casa. Al díasiguiente, lunes, a desbaratar las enramadas; toda la familia y los vecinosllegaban a preparar la comida para los que estaban levantando la enramada.Ellunes por la noche llegaba el baúl de la novia, todos abrían el baúl para ver quécosas traía la novia, ropa, un par de aretes, anillos, collares, todo de oro, aquí está,aquí está, y vasijas para la cocina, platos, sartenes, bueno así le dieron a mi

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esposa por eso yo lo cuento.

Cuando ya salimos a un lado de mi familia paterna, no había luz eléctrica.Compré una linterna, hasta ahorita la estoy conservando, pero se la regalé a minieta Julieta, la tiene allá en Oaxaca. Esa linterna fue mudo testigo de nuestrosamores, que alumbraba todo, ahora ya no hay linternas, esa es la vida de unmatrimonio y una sola madrina. Ahora no, hay madrinas de: orquesta, de cerveza,de comida, de cojín, de anillos, de arras, de música. Ya no es matrimonio legal.

Los hombres se reunían en algún club o se reunían en bares, con sus amigos ,no se acostumbraba a reunirse con los amigos un domingo o un sábado; era entresemana en algún bar, un club. Bueno, solamente fueron mis grandes compañerosdel sindicato del cine y claro que éramos familiares. el Secretario General era micuñado, otros familiares, otros cuñados, puros familiares, entonces hacíamosreuniones en nuestro sindicato, teníamos una oficina en la avenida Hidalgo, allí nosreuníamos.

Después de la reunión del sindicato donde tratábamos qué cosas íbamos ahacer, entonces pensábamos en ir a un bar, al Bar Taurino que estuvo allí muchotiempo. Ahora ya está cerrado, pues ahí, convivíamos, tomábamos una copa, unacerveza ya había cerveza, y así íbamos a otra cantina, y un día a un señor le gustómucho ir al cine. Entonces inauguró su bar, su cantina, y nos dijo:

-Miiren señores, invito a todos ustedes tanto al personal del cine Juárez como delcine Lux, les voy a dar una comida, bueno pues. Fuimos y cooperamos,compramos la bebida, la cerveza, y el señor dio la comida en su casa, en su bar.Entonces estábamos comiendo y me dieron ganas de ir al baño, le pregunté dóndeestaba el baño, para allá -me dijo-, me fui al baño. Allí tenía un criadero de pollos,de esos que les dan alimento, y había unas lamparitas; cuando me fijé en lospollos, estaban tan grandes los pollos, estaban grandotes, fornidos, fuertes; peropara eso ya habiamos comido la botana, cuando vi esos pollos, dije serán esospollos que nos dio de comer este hombre. Por no tirar los pollos hizo barbacoa depollo, por no tirarlos. Ya cuando puso cantidad de carne, nos dijo coman, pero nosabíamos qué tipo de pollo eran. Les dije:

-Ya no lo coman, vayan a ver por dónde está el baño y los fueron a ver. ¡Hijo!dijeron, ya lo comimos, pues ya nos chingó el viejito.

Hay muchos lugares, no como ése que les conté, donde hubo un crimen.Lugares malos no había. Estaba la casa de mi tía Rosa, con Aurelia; pero yo nollegaba allí, porque llegaba pura gente mayor de edad para tomar una cerveza.

Para andar así,se tenía que ser mayor; se tomaba una cerveza con gente mayorde edad, a los pequeños no los dejaban entrar, a la edad de dieciocho años yadejaban entrar a la cantina, pero de joven nadie, fumar tampoco. Y las taberneraspara ir a un lugar así, pagaban una carreta, jalado por un par de yuntas, entoncesallí montaban su banquita, ponían su banca, su mesita y lo que llevaban, ya seinstalan allí y llegabas a tomar mezcalito, y la música tocando.

Cuando pasó la carretera llegaron el agua, luz, teléfono, televisión. Antes nadade eso, todo estaba triste, pasaba la fiesta de mayo, Juchitán se ponía triste; atrabajar, se trabajaba, había campesinos, había maíz, había todo, ahora ya no hay,

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los campesinos piden préstamos para ellos nada más para su bolsa, ya no paraque trabajen, ahora ya no, ya el campo nadie lo trabaja por eso yo les digo a mishijos hay que trabajar, trabajen, aprendan a trabajar porque yo he sufrido bastante,sufrí mucho, ahora trabajen ustedes, así es la vida.

¿Los prostíbulos? Como las casas rojas o qué. En ese punto cuando estaba deconscripto en 1944, entonces ahí por donde es ahora la terminal de la CristobalColón, hubo una casa de citas. Salíamos del campamento caminando con miscompañeros soldados que eran de: Puebla, de Veracruz, Juchitán. Había dosmujeres nada más para tanto batallón, y las apodamos el "1002", hasta que laseñora murió. Cuando llegaba yo allí me decía la señora:

-No vas a entrar, yo conozco a tu familia, bueno pues, le decía yo y me salía.Después se salió de allí, vendió el lugar y fue a comprar otro lugar por la calle deIndependencia, antes de llegar a la esquina Hidalgo hay una panadería que dicePambazo, enfrente estuvo ella, compró una casa, allí tuvo su prostíbulo. Así hubomuchas mujeres, muchas. Íbamos los sábados a tomar cerveza, había una rocola, ycon veinte centavos bailábamos con las muchachas, pero así se llamó siempre:"1002".

Ahora ya no, la vida es moderna va uno a la “Quebrada” va uno a la casa “LaCopa del Olvido”, y te sientas allí, luego se suben en la mesa esas chamacas, pocoa poco, se encueran en la banquita. Antes no, sí se veían, su pies, sus brazos, seveía todo, en aquella época las mujeres de huipil, lo que es huipil y sus faldas,rabonas les decían. Cuando iban al baile, cuando decían "gran baile, con traje degala", entonces las mujeres que eran de vestido, llevaban su vestido y apenasveías sus pies en el zapato y hasta aquí la manga, y si bailabas con ellas no laspodías abrazar, no las podías apretar, arrímarte un poquito, no ahora no. Ya paracasarme me encontré a una muchacha en el Espinal, muy guapa, gordita, teníaunos bucles aquí, hacía calor fue en el mes de mayo, era una noche de baile ahíen el Espinal, estabamos bailando, de repente me fijé y venía ¡un piojo, pero súperpiojo bajando por su oreja ! y le dije:

-A ver, voy a quitarte una hormiga que viene aquí; pero cual hormiga, era un piojo.

Antes todos los tenían porque no se bañaban, no había agua para bañarse, antesse bañaba el hombre en la calle, parado, encuerado, la mujer ponía un banquito yse sentaba a bañar; ahora ya es de lujo el baño, de lujo.

Otros tenían niguas que ponía sus huevos y daba mucha comezón en los pies, note dejaban dormir. Al rascarse los pies con el animal ese, pedazos se hacían lassábanas, se rompían las sábanas, las almohadas, bueno pero todo esodesapareció, ya se fue todo eso, ya terminó verdad, si les agradezco mucho,muchísimo, estuvo muy bonito recordar todo eso.

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