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Galileo Galilei y el sol de Gabaon Ariel Álvarez Valdés' El matematico, astronomo y fisico, Galileo Galilei (1564-1643, es considerado el creador del metodo cientifico experimental y con su obra comienza la ciencia moderna, Defendio la teoria heliocentrica del univer- so elaborada por Copernico, aunque la condena de la Iglesia lo oblig6 a abjurar publicamente de ella. Trescientos cincuenta aiios despues de su muerte, el actual ponti- rice reconocio el error de la Iglesia al con- denarlo, pidio perdon y reivindico la figura de Galileo. Este articulo comenta el texto biblico que la Inquisicion interpret6 literal- mente y que la Ilevo a condenar a1 sabio florentino. L a tarde del 22 de junio de 1633 entraba en el convent0 de Santa Mar de la Minerva, en Roma, un venerable anciano, de cara grave y rnacilenta, y con la barba y los t o s blan- cos. Estaba casi ciego y ava por los pasi- 110s con paw cansino, agob por el peso de los aRos, el trabajo y las enfennedades. Loacorn- ñ a n , , d d , g Q ü acababa de entrar a la sede de la lnquisicibn y profesor de Sagradas Escritoras. Este texto fi* publicado en I, rmsta argentina Criterio, del 11 de mayo de 1909 Romana. Al llegar a la sala principal, se encon- tró frente a los cardenales y prelados integrante;» del Santo Tribunal que lo estaban aguardando. Se puso entonces de rodillas temblorosamente, y en silencio escuchó la sentencia que lo conde- naba a prisión domiciliaria. ¿Cuál era el pecado cometido por aquel des- dichado anciano? Haber escrito dos libros con- siderados peligrosos. Uno, llamado El mensaje- lo CEfe

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¿Se detuvo el sol en gabaón?

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  • Galileo Galileiy el sol de Gabaon

    Ariel lvarez Valds'

    El matematico, astronomo y fisico, GalileoGalilei (1564-1643, es considerado elcreador del metodo cientifico experimentaly con su obra comienza la ciencia moderna,Defendio la teoria heliocentrica del univer-so elaborada por Copernico, aunque lacondena de la Iglesia lo oblig6 a abjurarpublicamente de ella. Trescientos cincuentaaiios despues de su muerte, el actual ponti-rice reconocio el error de la Iglesia al con-denarlo, pidio perdon y reivindico la figurade Galileo. Este articulo comenta el textobiblico que la Inquisicion interpret6 literal-mente y que la Ilevo a condenar a1 sabioflorentino.

    La tarde del 22 de junio de 1633 entrabaen el convent0 de Santa Mar de la Minerva, enRoma, un venerable anciano, de cara grave yrnacilenta, y con la barba y los t o s blan-cos. Estaba casi ciego y ava por los pasi-110s con paw cansino, agob por el peso delos aRos, el trabajo y las enfennedades. Loacorn-

    a n , , d d , g Q

    acababa de entrar a la sede de la lnquisicibn

    y profesor deSagradas Escritoras. Este textof i * publicado en I, rmstaargentina Criterio, del 11 demayo de 1909

    Romana. Al llegar a la sala principal, se encon-tr frente a los cardenales y prelados integrante;del Santo Tribunal que lo estaban aguardando.Se puso entonces de rodillas temblorosamente,y en silencio escuch la sentencia que lo conde-naba a prisin domiciliaria.

    Cul era el pecado cometido por aquel des-dichado anciano? Haber escrito dos libros con-siderados peligrosos. Uno, llamado El mensaje-

    lo CEfe

  • i n t e r p r e t a c S b n 6 1 b l i c a -

    Calileo presenta envenwia ou telescopio.(Cuadro de LuigiSabatelli)

    ro de las estrellas (Stderus nuncius, 76 / I), y el otro,Dilogo sobre los dos sistemas ms grandes de!mundo {Dialogo su i massini sistemi, 16321 en loscuales explicara que la tierra nn ora H centro deluniverso (como se crea hasta entneos), y que elsol no giraba alrededor re ella, sino que ora la tierrala que giraba alrededor de sol, que estaba quietoen el centro del universo.

    Una vez ledo el castigo im-puesto por el Santo Oficio, lepresentaron al condenado unescrito para que pusiera su fir-ma y lo obligaron luego a leerloen vo alta.

    A M A R G A LECTURA

    Con el terror en el corazny la vergenza en el alma, elhombre comenz a leertr@mulanente: "Yo, GaCalHei, hijo del fallecido Vicen-te Galilei, florentino, de 70aos de edad, habiendo sido ci-tado personalmente a juicio yarrodillado ante vosotros,eminentsimos y reveren-dsimos Cardenales, teniendoante m los Sagrados Evangeliosque toco con mis manos, juroque siempre cre, creo ahora, ycreer en el futuro, cuanto en-sea la Sania Iglesia CatlicaApostlica Romana.

    Pero... yo me he, cenuerri-do en altiFmente sospechaso dehereja por ensear la doctrinade que e! so! est inmvil y enel centro del mundo, y que noes /a tierra ta que est ffja m e!centro. Queriendo borrar de lamente de vuestras Eminenciasy de todos los cristianos catli-cos estl fwte sosgecha, jus&-

    mente lanzada contra m, con el corazn sincero yautntica fe, yo abjuro, maldigo y renuncio a todoslos errores y herejas mencionados, y a cualquierotro error contrario a la Santa Madre Iglesia, y jurono ensearlos oralmente ni por escrito. Que as meayude Dios, y los Sagrados Evangelios que tengo enlas manos".

    Cuenta la leyenda que cuando Gdileo se retira-ba agobiado y vencido de aquella majestuosa cere-

    m n i a , luego de haber jutado solemnernente que latierra no se via, al llegar a la puerta de la sala sedio media vuelta, mir a los asistentes y murmur:"Eppur, si muovei" i Y sin embargo se mueve').

    BIBLIA O ASTRONOMA?

    Sea o no verdad esto ltimo, lo cierto es que lafrase atribuida al cientfico italiano se convirti en dsmbolo de la resistencia interior, en la figura de aque-llos que bajo presin son obligados a abjurar de suscreencias, pero que interiormente no pueden rene-gar mii s ms intimas convicciones.

    @uk argument0 esgrirnieron 10s cardenales del%#to Oficio pasa candenar a Galileo? k f a n quesus enseanzas sobre el heliocenlrismo contradecana la Biblia, y concretamente al libro de JosuP 16,1-15, donde se relata la famosa batalla de Caban.

    En efecto, cuenta la Biblia que cuando los israe-litas entraron en la tierra prometida guiados por Josuse W a r o n en la localidad de Guikal. v d e & alliemprendieron poco a poco la lucha por la conquistade los nuevos territorios, Libraron as en primer lu-gar la batalla de Jericcon un xito rotundo (Jos 6.1-25). Sigui luego ef triunfo de Ay, en d que motarona 1 2.090 c a n a ~ .

    Este avance arrollador de Jos israelitas preocupenormemente a una ciudad vecina, llamada Gaban.Sus habitantes se dieron cuenta de que tarde o tem-prano les llegara a ellos el momento de ser destrui-dos, y decidieron salvar sus vidas proponiendo a losnuevos invasores Lina alianza. Josu acept esta alian-za, y se comprometi a ayudarlos en caso de peligroflus 9,3-18).

    Enterados del W Q , cinco reyes cananeos delswr de la regr6n reunieron PUS e/t5wcitos y rnarcharonh j f a n, con el fin de astigarla per la alian-za realizada con los hebreos.

    L a atemorizadw gabaonitas recurrieron a josue.V & e , en atencitln a la alianza, acudib sin demora.March6 toda la t w h e con sus hombses hasta lasmontafras vecims a la ciudad, se escondi6 alK, y demadwgada alacb psu soapresa al qercito de las cin-co reyes. Desconcertados al ver aparecer a losu ysus hombres, los sitiadores emprendieron la retira-da: pero gracias a una eficaz embestida, los israeli-tas lograron exterminar un gran nmero de fugiti-vos. Estos sufrieron mayores prdidas aun porque unrepentino granizo empez caer sobre los que huan,hirindolos e impidindoles escapar.

    Combatieron durante lodo el da; y la victoria deIsrael ya casi estaba llegando a su fin, cuando el solde la tarde empez a ocultarse por el oeste, losu com-

  • i n t e r p r e t a c i n h b1 i c a

    Galilea Galilei

    prendi que si la oscuridad caa sobre el campo debatalla, los enemigos sobrevivientes podran ocultarsefcilmente en la? grutas de las montaas y escapar,con lo cual su victoria no sera completa. Qu hacer?

    UNA ORACIN PODEROSA

    Aqu es donde ocurre el increble suceso que vol-vi famossima a la batalla, y que servir despus parala condena de Calileo, Josu con los brazos extendi-dos or a Yahv para que el sol se detuviera en elcielo y la luna no apareciera en el horizonte. La Bi-blia lo relata as: "Josu se dirigi a Yahv delante dek>S israelitas y dju; Detente, oh sol, en Gaban: y t,luna, en el valle de Ayyaln. Y el sol se detuvo y laluna se par hasta que el pueblo se veng de susenemigos. No est eso escrito acaso en el libro delJusto? El sol se par en medio del rielo y dej decorrer un da entero hacia su ocaso. No hubo dasemejante ni antes ni despus, en que obedecieraYahvla voz dp un hombre" (los TO, f 2-14).

    De este modo, el ejrcito de Israel tuvo luz natu-ral durante todo el tiempo que dur la batalla, e infli-gi una total derrota a los cinco reyes cananeos.

    L A TEORA DEL SANTO OFICIO

    En [os tiempos de Gal leo se interpretaba la Bi-blia literalmente, es decir, se entenda que las cosashabfan sucedido tal como dice la letra del texto b-blico. Por eso, cuando Calileo comenz a ensearque el sol est quieto y es la tierra la que se mueve, HSanto Oficio esgrimi el argumento de la batalla deGaban para refutar sus enseanzas, diciendo: "Si elsol se detuvo en Gaban, es porque se mueve. Cmo,entonces, puede afirmar Gal i leo que el sol est quie-to y que la tierra se mueve? Quin tiene razn: laPalabra de Dios o Galileo?".

    Pero, qu pas realmente en la batalla deGaban I Pudo haberse detenido el sol? Existen cua-tro teoras propuestas por lo.s biblistas para explicareste episodio.

    La primera, llamada teora "astronmica", es laquedefenda el Santo Oficio y toda la Iglesia hasta el sigloXVI. Segn sta, el sol se detuvo realmente en el cielogracias a una intervencin especial de Dios, y all per-maneci un da entero iluminando l batalla, por locual aquel da dur mucho ms de 24 horas.

    Pero esij teora hoy resulta insostenible, porques el sol, la luna o cualquier otro planeta detuviera porun inMante su andar, se producira un cataclismo detales proporciones en el sistema solar, que ste saltarahecho trizas. Adems, si el sol se hubiera detenido en

    el cielo brillando durante tantas horas, como afirmaesta teora, tendran que haberlu notado los otros pue-blos que en aquel momento eran iluminados por esemismo sol. Y ninguno ha conservado jams el registrode semejante fenmeno.

    No VEAN LA HORA DE TERMINAR

    La segunda teora es la llamada "potica", v sos-tiene que IJ oracin de Josu para detener el sol esun simple poema que emplea el autor, pidiendo alsol y a la luna que se paren para contemplar el ma-ravilloso xito que estaba teniendo el general israe-lita en la batalla. Pero no significa que se hubieradetenido realmente.

    El inconveniente de esta teora es que niega quehubiera habido algn hecho extraordinario en elcombate, cuando del relato bblico parece deducir-se que "algo raro" pas ciertamente aquel da, yaque trrr m e + y de elistintas maneras# repite que elsol se detuvo en el cielo.

    La tercera teora es la "psicolgica". Afirma queel relato slo pretende reflejar el impacto psicolgi-co de lentitud que los hebreos sintieron durante labatalla. Quiere decir simplemente que ese da estu-vo tan lleno de acontecimientos, y que el triunfo ni!1tan costoso, que el da pareca interminable. En cir-cunstancias as (tambin decimos nosotros) el tirm-po se hace eterno.

    Pero debemos rechazar tambin esta hiptesisporque, al igwl que la segu$umla, niega que hubierahabido "algo" ese da.

    U N DA N U B L A D O

    Queda, flnal'mente, la teoria "atmosft5rica". Se-gtln esta, lo gue wcedi6 en la batalla de Cabab~i nofue que el sd brill6 maS horas de lil acostumbradosino, por el contraria, qua no, hubo sol.

    En efecto, lost& con su ejhrcito, despubs de mar-char tada la noche, cay& pop, sorpresa sobre bassitiadores a la rnadrugada, en el mismo mornefltao enque una fuerte tormenta de granizo se &atfa sobreel terreno 00s 10,111. AI ver aparecer imprevis-tamente a las t r m de Josue por ell este, el ejbrcitode Ios cinco reyes se desbandb y emprendi6 la reti-rada en direccibn al oeste, hacia el valIe de Ayyal 6n.Y alii le dio alcance el ejercito israelita.

    Cuando la batalla promediaba, la tormenta quehabia nublado el cido ese dla habfa cesada, y el soli amnazaba aparecer con toda su fue por entre

    las nubes que ya se iban abrienda. Entonces Josuere26 para n el sol nn 4 ie ra en GabaXln, es decir,

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    para que el da continuara nublado, a fin de evitarel fuerte calor y hacer que sus hombres pudirr.incombatir mejor ton el fresco de la jornada.

    EL POEMA PERDIDO

    Como recuerdo de esu heroica batalla en la quelos israelitas haban combatido en un inslito danublado, se elabor un poema con las palabras deJosu, que deca: "Detente, oh sol, en Gabatr, y t,luna, en el valle de Ayyaln". ste fue ms tarderecogido en una coleccin de poemas titulado Ellibro del lusto. Sabemos por la Biblia que ese librocontena tambin el canto fnebre pronunciado porDavid cuando muri el rey Sal y su hijo lonatn [2Sam 1,17-27), la oracin que pronunci Salomnal inaugurar el templo do lerusaln (1 Re 8,22-53), ymuchos otros poemas atribuid a distintos hroesde Israel.

    Ahora bien, El libro del usto no contena losdetalles de la batalla sino slo el poema, por lo quecon el paso del tiempo se olvid el contexto en elque haba surgido. Y cuando en el siglo VI, seiscien-tos aos despus del hecho histrico, se escribi ellibro de Josu y la batalla de Gaban, como el poe-ma deca slo "Detente, oh sol, en Gaban", se pen-s que lo que Josu peda era que el sol se detuvieraen el cielo y siguiera brillando, cuando en realidadlo que peda era que no saliera,

    Por haberlo credo as, e autor del libro de Josuagrega luego: "Y el sol se par en medio del celo ydej de correr un '\a entero hacia su ocaso. Y nohubo da semejante ni antes ni despus" (10,13-14).Porque el haba entendido, errneamente, que eseda el sol se detuvo, brillando en medio del cielo.

    Que el poema citado est sacado de otra parle,

    se advierte por el hecho de que est uera de contex-to y no encaja en el relato, En efecto, en el v. 12leemos: "Josu se dirigi a Yahv diciendo". Pero acontinuacin no se dirige a Yahv. sino al sol, paradecir: "Detente, oh sol". O sea que el poema al prin-cipio no formaba parte del relato.

    L A RAZN DE G A L I L E O

    Galileo tena razn. E) sol nunca se detuvo, ni laSagrada Escritura haba querido decir tal cosa. Peroen aquellos tiempos la nica manera de entender laBiblia era tomndola literalmente, que fue lo que hi-cieron los representantes del Santo Oficio. Por eso locondenaron.

    Galileo estaba en locierto. Y por eso el papa JunnPablo II, en un valiente discurso pronunciado el 31de octubre de 1992 ante la Pontificia Academia delas Ciencias, reconoci que la Iglesia se haba equi-vocado al condenarlo, pidi perdn y reivindic p-blicamente la figura del genial florentino, con lo cualse pudo cerrar finalmente una vieja herida que habapermanecido abierta durante iSO aos.

    Pero el sol de Gaban sigue brillando para todos,desde el fondo de la historia, como querindonosrecordar d sufrimiento que una lectura litera! de laBiblia puede ocasionar en el alma. Por eso, para quie-nes tori.ivfn hoy, despus de acallados los ecos deaquel doloroso enfrenlamiento, continan buscandoen la Biblia frmulas cientficas secretas, revelacio-nes misteriosas y profecas cifradas, conviene recor-dar la l< ida frase pronunciada por Galileo trente alos miembros del Santo Oficio, antes de su condena;"No busquen astronoma en la Biblia. Porque ella nopretende decirnos cmo marchan los celos, sinocmo marchamos nosotros hacia el cielo".