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Contextualización
¿La producción que genera un país es igual a su oferta
agregada?
La producción que se genera dentro de un país la
consideramos como producto interno bruto o PIB y es
considerada como la oferta de mercancías, bienes o
servicios que producen los empresarios para vender, aunque
no necesariamente en el mismo país.
Existen dos maneras de medir la producción mediante la
obtención de la variable económica antes mencionada
PIB; una tiene un enfoque de la demanda es decir si
sumaramos todo lo que los ciudadaos de un país
consumieramos podríamos determinar cuánto se produjo
o por otro lado todo lo que se ha gastado en la
producción, en esta sesión analizaremos las dos formas
que existen para obtener la cantidad de producción y los
criterios que se usan para determinarla, por lo que
identificaremos las características de la oferta, y los
componentes y el cálculo del PIB, explicando ademas la
paradoja del bienestar.
Introducción
Para determinar el nivel de producción que se genera en un país,
la economía ha creado una variable que se encarga de su
medición el Producto Interno Bruto (PIB) es el valor total de la
producción corriente de bienes y servicios finales dentro del
territorio nacional durante un cierto período de tiempo, que por lo
común es un trimestre o año; esos bienes pueden ser
automóviles, lavadoras, hamburguesas, elotes, cortes de pelo,
viajes en autobús, en avión, etcétera (Sachs, 1994.)
Aunque los bienes y servicios son diferentes entre sí,
para poder sumarlos, es necesario contabilizarlos en
una misma unidad; en este caso, es una unidad
monetaria, que para el caso de México, son pesos.
Contar con esta variable permite a los países medir su
crecimiento con respecto a distintos períodos de tiempo
o con respecto a otros países, dicha comparación
permite identificar los resultados de las políticas
impuestas por el gobiernos y la situación en la que se
encuentra el país, dado que una baja producción tiene
como consecuencias bajas en el empleo y en la
satisfacción de las necesidades de los consumidores o
ciudadanos.
Enfoques de medición
Uno de los temas más interesantes cuando hablamos del
PIB es la manera en la que se obtiene, dado que resulta
que se puede obtener de dos maneras independientes,
pero con un resultado exactamente igual.
Conclusión
¿Entonces por qué debo conocer los conceptos y características de
la oferta y la demanda?
La oferta y la demanda son los conceptos fundamentales en el estudio
de la economía porque de ambos depende el nivel de desarrollo y
bienestar de un país, dado que si los precios son los justos las
personas podrán adquirir los bienes que se produzcan y no habrá
desperdicio.
En esta lección hemos presentado las características generales de
la oferta y demanda y los factores que influyen en su
comportamiento, y que son factores externos, es decir que no los
puede controlar ni el productor ni el consumidor, pero a pesar de ello
esos factores alteran el comportamiento de las curvas de oferta y
demanda. Conocer cómo se comportan dichos curvas ante tales
cambios sirve para prever y organizar un plan de contingencia que
nos permita sufrir el menor daño posible en nuestra economía ya
sea como consumidor o como gobierno o empresa.
Enfoque del Gasto
También llamado enfoque del flujo de productos. Cada año,
el público consume una gran variedad de bienes y servicios.
Sólo se incluyen bienes finales o de consumo final, que
terminan por ser comprados y usados por los consumidores.
Las familias gastan sus ingresos en esos bienes. Se suma
todo el dinero gastado en consumir estos bienes de
consumo final para obtener el PIB total de la economía
simplificada. Por lo tanto, se puede calcular con facilidad el
ingreso o el producto nacional como la suma del flujo anual
de los bienes y servicios finales (precio x cantidad.)
Enfoque del ingreso
Este es el enfoque también llamado de costo, ya que influyen
todos los costos de las empresas que lo comprenden, los
salarios que se pagan al trabajo, los alquileres que se pagan
a la tierra, los beneficios que se pagan al capital, etc. Pero los
costos de las empresas también son los ingresos que
perciben los hogares de las empresas. Midiendo el flujo anual
de estos ingresos o rentas, las estadísticas llegan del nuevo
al PIB.
La respuesta se sustenta en el hecho de que se incluye
el beneficio, es decir, lo que queda de la venta del
producto una vez pagados los costos de los demás
factores (los salarios, los intereses y los alquileres.)
¿Por qué el resultado es igual bajo
los dos enfoques?
PIB nominal, real (deflactor del
PIB) y potencial
Cuando utilizamos los precios de mercado reales de ese
año para poder medir el PIB, estamos hablando del PIB
nominal, o lo que es igual al PIB a precios corrientes. Sin
embargo, a veces es más interesante analizar el PIB real
que es un índice de volumen o cantidad de bienes y
servicios producidos. El PIB real se obtiene multiplicando
las cantidades de bienes por un conjunto fijo de precios,
es decir, se utilizan precios constantes.
Si nosotros dividimos el PIB nominal entre el PIB real obtenemos el
deflactor del PIB, que es un indicador del nivel general de los precios.
Veamos el siguiente ejemplo: suponga que existe un país en donde
sólo se producen dos bienes: pan y vino; los precios y la producción
en los últimos años han sido los siguientes:
VINO PAN
Precio Cantidad Precio Cantidad
2011 21 20 10 10
2012 20 22 9 12
2013 22 21 10 11
Podemos calcular el PIB nominal multiplicando el precio (P) por la cantidad (Q) PQ de la siguiente
manera: 2011 vino (21*20) + PAN (10*10)= Total de la producción para el 2011 es de 520 unidades
monetarias.
2012 = (20*22) + (9*12) =548
2013= (22*21) + (10*11)=572
El PIB real de un año se calcula como las producciones del año valoradas a precios de un año base. En
el ejercicio, el año base es 2012 y, por tanto, debemos considerar siempre los precios del 2012, tenemos
que:
PIB real 2011 = (20*20) + (9*10)= 490
PIB real 2012 = (20*22) + (9*12)= 548
PIB real 2013 = (20*21) + (9*11)= 519
En el año base, el PIB nominal y el PIB real coinciden,
ahora podemos analizar que mientras que con el PIB
nominal se podría pensar en un crecimiento del PIB de
un año con respecto a otro, en el PIB real vemos como
se ha dado una disminución del año 2012 al 2013.
Tasas de crecimiento
El crecimiento económico se mide por el aumento en el
Producto Interno Bruto (PIB), entonces cuando el PIB
aumenta, significa que se produce más en el país en
cuestión. Para medir este crecimiento se utiliza la tasa de
crecimiento del PIB, que mide la variación porcentual del
PIB entre dos años consecutivos (interanual). La tasa
muestra la tendencia del valor monetario de todos los
bienes y servicios finales de un año a otro; es decir, mide
el ritmo de su crecimiento aunque podemos decir que no
expresa ningún argumento que considere su calidad.
La paradoja del bienestar
¿El dinero te da la felicidad?
En 1974 el economista Richard Easterlin público un artículo denominado
¨Does Economic Growth improve the Human Lot? Some empirical
evidence¨ en el que refutaba la idea de que a mayores ingresos, mayor
felicidad. Easterlin hizo la comparativa entre varios países y la tendencia
de sus ciudadanos a afirmar que son felices. Los resultados
evidenciaban que, en los países que tenían cubiertas las necesidades
básicas, el índice de felicidad medio no variaba, independientemente de
la capacidad de ingresos. Muchos han sido los detractores de esta
teoría, el problema reside en basarse exclusivamente en estadísticas
económicas.
Aunque pueda parecer evidente que “el dinero da la felicidad”, una
vez superado un cierto estatus económico, la calidad de vida y la
felicidad, dependen de múltiples factores:
- El tiempo libre, el tiempo que dedicamos al ocio es un elemento
cada vez más necesario y demandado en los países desarrollados.
La gente está dispuesta a sacrificar parte de sus ingresos y a
rechazar puestos laborales de mayor entidad a cambio de tener
tiempo para sus familias y para sus actividades de ocio.
- La felicidad es un estado personal, fisiológico, difícil de medir con
una simple estadística. Lo que a uno le hace feliz no tiene por qué
hacérselo a otro. Otro dato llamativo es que la depresión es una
enfermedad prácticamente exclusiva de los países desarrollados.
Easterlin habla también de la “felicidad social”, algo que
poco tiene que ver con la capacidad económica y que,
en cualquier caso, será más tangible en entornos
solidarios o ciudades con una escala relativamente
abarcable por el hombre que en impersonales
megalópolis.
La lista de países más ricos según su PIB la encabezan
Estados Unidos, China y Japón, ocupando España el
puesto número 13, México el 14 y Colombia el 30.
¿Es equiparable esta lista a los niveles de felicidad de los
habitantes de cada país? ¿Se puede medir realmente la
felicidad?
Es un hecho empírico que, una vez satisfechas las
necesidades básicas, el dinero adicional no incrementa el
grado de felicidad de forma proporcional, puesto que como
decía Rockefeller cuando sus trabajadores le reprochaban que
era muy rico: Tengo mucho dinero pero a la hora de comer no
me como 4 emparedados sino uno, respecto a lo cual
Rockefeller pudo tener mucha razón, puesto que luego de
tanto dinero no hay forma de gastarlo o disfrutarlo, bien porque
no hay tiempo, o bien porque todo lo deseado ya se adquirió.
En ese punto, el dinero adicional ya no representa felicidad o
satisfacción, por lo menos en un grado importante (Economía y
Finanzas, 2014.)
Conclusiones
¿Todo lo que se produce se vende?
Partiendo del supuesto económico donde la oferta debe ser igual a la
demanda, se establece que bajo un precio de equilibrio todo lo que se
produce se vende en el mercado cuando algo así no sucede en un
mercado de competencia perfecta se precionan los precios a la alta o
la baja según se requiera para volver al equilibrio, se debe considerar
que el equilibrio está determinado por la oferta y la demanda pero
puede haber elementos externos que intervengan.
La medición de la producción le permite a los gobiernos tener un
panorama de la situación económica del país y establecer estrategías
que ayuden a lograr una eficiencia económica con la finalidad de que
se logre una mayor crecimiento, aunque lo ideal sería obtener el
maximo bienestar posible.
Para aprender más
El desarrollo no es sólo crecimiento del PIB
Stiglitz, J. (2002). El desarrollo no es sólo crecimiento del
PIB. Iconos. Revista de Ciencias Sociales, marzo, 72-86.
Bibliografía
Parkin, M. (2009). Economía. México: Pearson Educación.
Samuelson, P. (2010). Macroeconomía con aplicaciones a
Latinoamérica. México: McGraw-Hill.
Sachs J. Y F. Larraim. (1994). Macroeconomía en la Economía
Global. España: Pretence Hall.
Cibergrafía
Economía y Finanzas (2014). La paradoja de Easterlin.
Consultado el 13 de octubre de 2015:
http://www.gerencie.com/la-paradoja-de-easterlin.html