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FONDOS ABISALES MUNDO MARINO Alumno: Lorenzo Paz Ortega Asignatura: Biología Pesquera Profesor: Juan Socorro
CFGS. Actividades Marítimo‐pesqueras Curso 2009/2010
LORENZO PAZ ORTEGA FONDOS ABISALES – MUNDO MARINO
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ÍNDICE
Introducción pág. 3 Dominio bentónico pág. 3 Dominio pelágico pág. 4 Fondos abisales pág. 7 Valoración personal pág. 12 Bibliografía/ webliografía pág.113
LORENZO PAZ ORTEGA FONDOS ABISALES – MUNDO MARINO
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INTRODUCCIÓN
Los océanos contienen alrededor 1.322.000.000 km3 agua y cubren 71 % de la
superficie terrestre. El 71 % de los océanos se divide en 18 % de aguas de menor
profundidad y 53% de sectores de mayor profundidad. La profundidad promedia de los
océanos es de 3.800 metros y la profundidad máxima alrededor de 11.520 metros. En el
medio oceánico la luz solar penetra en el mar tan solo unos 200 metros, a mayor
profundidad, las aguas se encuentran en oscuridad absoluta. A la zona iluminada del
mar se le denomina región fótica. A la zona oscura región afótica.
Hay que tener en cuenta que el océano es un sector muy heterogéneo y depende
de un gran número de factores, como pueden ser la profundidad o la distancia de la
costa. El agua tiene un diferente comportamiento químico en distintas profundidades.
Especialmente por el aumento de la presión y por la disminución de energía solar. Es
por ello por lo que en el ecosistema marino podemos llevar a cabo la distinción de dos
grandes dominios: dominio bentónico y dominio pelágico.
1. Dominio bentónico o de fondo acuático.
Hablamos del substrato, el fondo marino (rocoso, pedregoso, arenoso, fangoso).
Está poblado por organismos bentónicos.
a) La región fótica:
- Zona supralitoral: región de salpicaduras, parte costera, sin vegetación terrestre,
ó sólo de tipo desértico.
- Zona mesolitoral: región de inter-mareas, alterna zonas expuestas al aire y zonas
sumergidas por el mar, con algas.
- Zona sublitoral: región permanentemente sumergida, se encuentra sobre la
plataforma continental interna, se extiende hasta donde hay vegetación
bentónica, con algas.
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b) La región afótica:
- Zona circalitoral: región extrerna de la plataforma continental externa, no hay
vegetación bentónica.
- Zona batial: región del talud continental de 200-3.000 metros.
- Zona abisal: región del piso oceánico o de llanuras oceánicas con 3.000-6.000
metros.
- Zona hadal: Zonas de subducción o de trincheras oceánicas de 6.000 a más de
10.000 metros.
Dentro del dominio bentónico, también nos encontramos la zona litoral. Se
divide de forma general en base a su substrato: blando o duro. La costa de substrato
blando, es conocida como playa, tanto el oleaje como las corrientes, mueven
constantemente el substrato. La costa de substrato duro, generalmente se conoce como
costa rocosa, ya sea un acantilado (sobre el agua) ó un cantil sumergido (debajo del
agua), donde el substrato tiende de forma general a estar al fondo.
2. Dominio pelágico o de columna de agua:
Está poblado por organismos pelágicos: planctónicos, nectónicos y neustónicos.
El neuston, es el organismo que flota a la deriva, en la superficie oceánica o cerca de
ésta, si está sobre la superficie es epineustón, mientras que si está por debajo de la
superficie es hiponeustón. El plancton, es el organismo que deriva a media agua, al ser
arrastrado por las corrientes marinas. El necton, es el organismo nadador, nada más
rápido que las corrientes marinas. Teniendo en cuenta las diferentes características,
según aumente la profundidad y la distancia de la costa, el dominio pelágico se clasifica
de la siguiente manera:
a) Según la distancia de la costa se puede diferenciar:
- Región nerítica: zona que va desde la línea media entre la marea baja y la marea
alta, hasta el borde de la plataforma continental. La energía solar en estas
profundidades disminuye pero todavía no llega a niveles críticos. La presión en
esta zona tampoco es un factor importante para la mayoría de los seres marinos,
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pero el aumento ya es notable. El oleaje casi no existe ya que el movimiento de
agua es muy reducido.
- Región oceánica: está alejada de la costa, en alta mar, fuera del límite de la
plataforma continental.
b) Según la profundidad se puede distinguir:
- Región fótica, sobre el límite de profundidad, de la termoclina.
o Zona epipelágica: hasta el límite de la plataforma continental (unos 200
metros de profundidad). La única iluminada, siendo, por tanto, donde se
desarrolla el fitoplancton.
- Región afótica, por debajo del límite de profundidad de la termoclina.
o Zona mesopelágica: de los 200 a los 1.000 metros. Muy rica en
zooplancton. Donde se localiza la termoclina permanente (descenso
marcado y gradual de la temperatura del agua).
o Zona batipelágica: de los 1.000 a los 3.000 metros.
o Zona abisopelágica o abisal: de los 3.000 a los 6.000 metros.
o Zona hadopelágica o hadal: más de 6.000 metros; es donde están las
grandes fosas oceánicas.
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Ilustración I: Ecosistemas según profundidades
A‐D: Dominio bentónico: A. Plataforma continental; B. Talud continental (B1. Talud continental superior; B2. Talud continental inferior); C. Llanura abisal; D. Fosa hadal. 1‐6: Dominio pelágico: 1. Región nerítica; 2. Región oceánica; 3. Zona Epipelágica. 4. Zona Batial (4a. Zona Mesopelágica; 4b. Zona Batipelágica); 5. Zona Abisopelágica o Abisal; 6. Zona Hadalopelágica o Hadal; (t: termoclina permanente)
Ilustración II: Dominio pelágico, profundidades.
1. Epipelágica: menor de 200 metros. 2. Mesopelágica: de 200 a 100 metros. 3. Batipelágica: de 1000 a 4000 metros. 4. Abisopelágica: de 4000 a 6000 metros. 5. Halopelágica: más de 6000 metros.
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FONDOS ABISALES
Descripción del hábitat
La palabra abisal procede de abismo, lugar profundo y oscuro. Esta región se
caracteriza por un ambiente frío, presión hidrostática extremadamente elevada, escasez
de nutrientes y ausencia total de luz. Una fosa abisal se forma cuando la corteza
oceánica subduce bajo la corteza continental con un leve ángulo de inclinación, lo que
produce ruptura de la litosfera y la formación de una fosa.
Se denomina abisal o zona abisopelágica a uno de los niveles en los que está
dividido el océano según su profundidad, está por debajo de la zona batipelágica y por
encima de la hadopelágica y corresponde al espacio oceánico que se encuentra entre los
4.000 y 6.000 metros de profundidad. Es una zona oscura donde la luz solar no llega.
La vida en estas zonas del océano está representada únicamente por animales, ya
que los vegetales, al no contar con luz, no pueden habitarlas. En el fondo del océano no
existe vegetación que realice la fotosíntesis, no existen algas verdes, esta zona depende
en gran parte del particulado de detritos que cae desde la superficie, excepto en las
zonas donde se presentan las chimeneas hidrotermales, que depende de la energía
volcánica, en donde la producción primaria, depende de la quimiosíntesis que es
desarrollada por especies bacterianas, presentes sobre el sustrato o los organismos
presentes. Esta zona morfológica de la geografía del fondo marino ocupa más del 70%
del área total de los océanos.
La temperatura alcanza en los fondos valores mínimos: nunca supera los 4°C y,
en las zonas más profundas, se acerca a los cero grados. Finalmente, la presión adquiere
un extraordinario aumento al descender en la masa de agua: por cada 10 metros de
profundidad se incrementa en una atmósfera, lo que supone valores cercanos a las 1.100
atmósferas en las zonas más profundos. Para superar la gran presión, la mayoría de los
peces abisales tiene el cuerpo lleno de agua. Los líquidos son casi incompresibles y, por
lo tanto, los peces pueden aguantar el peso de la columna de agua simplemente
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manteniendo igualadas las presiones externa e interna. El oxígeno, por otra parte,
decrece con la profundidad y, si en las zonas intermedias se encuentra disuelto en el
agua en suficiente cantidad para soportar la vida animal, en algunas fosas abisales puede
desaparecer por completo y originar regiones abióticas en las que únicamente es posible
la existencia de bacterias anaerobias.
Fauna abisal vertebrada
La fauna abisopelágica está caracterizada por un conjunto variado de especies
con unas particularidades determinadas debido al hábitat tan peculiar en el que habitan.
El rigor de las condiciones ambientales determinará, por tanto, una comunidad viviente
no muy numerosa, pero provista de adaptaciones para prosperar en un medio que
presenta condiciones tan adversas para la vida.
Debido a las condiciones extremas en las que viven, crecen muy lentamente, por
lo tanto, su metabolismo es también muy lento y viven muchos años. Aunque estos
seres pueden diferir en algunas características como por ejemplo en el tamaño o en la
forma, comparten rasgos comunes como pueden ser, piel fina, falta de pigmentación, es
decir, son blancos o transparentes, o la carencia de ojos, inútiles en plena oscuridad.
Son seres que a pesar de todo nadan libremente y que habitan y se alimentan en
aguas abiertas a unas profundidades de entre 4.000 y 6.000 metros de profundidad, y
nunca se aproximan a la superficie. Sólo el cinco por ciento de la energía que se
produce en la zona iluminada llega hasta su hábitat, de modo que estos predadores
esperan inmóviles a que sus detectores de movimiento les comuniquen la llegada de
algo comestible. Además de esto, para salvar la falta de alimento, presentan cambios
evolutivos tales como grandes bocas, estómagos deformables, órganos
bioluminiscentes, dientes desproporcionados,…
La fauna abisal está formada por peces bien diferenciados y singulares como
Caulophryne, Argyropelecus, Idiacanthus, Melanocetus, Saccopharynx, Chauliodus,
Cryptosaras.
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Melanocetus Chauliodus
Caulophryne Argyropelecus
Cryptosaras
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Saccopharynx
Fauna abisal invertebrada
Entre la fauna de invertebrados encontramos la presencia del fenómeno del
gigantismo abisal, ya que hay picnogónidos (arañas de mar) de más de 1,50 metros,
existen hidrozoario, con pólipo de más de 50 cm de altura y también isópodos de más de
40 cm de tamaño, así como especies muy diferentes a las presentes en la superficie,
como son los lirios de mar pedunculados, sésiles de forma primitiva y grandes esponjas
vítreas. Las esponjas representan los organismos menos evolucionados, y como están
completamente abiertas al agua, debido a que su cuerpo está recorrido por gran número
de canales, no tienen problema de presión a cualquier profundidad (siempre están llenas
de agua a la misma presión de la que las rodea). Son organismos resistentes y elásticos
que sólo sirven de alimento a muy pocos animales, por lo que son menos atacados.
Esponjas vítreas Picnogónidos
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Hidrozoario Lirio de mar
Sésiles
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VALORACIÓN PERSONAL
Teniendo en cuenta las diferentes fuentes de información de las que se han
extraido los datos para elaborar este trabajo podemos decir, que los fondos abisales son
zonas inhóspitas de las que practicamente la información y los datos de los que se
disponen son mínimos en comparación con el resto de los hábitats mencionados.
Obviamente el problema para recabar toda información reside en la dificultad y en el
peligro de adentrarse a tantas profundidades sin saber ciertamente las situaciones que se
podrían presentar.
A pesar de todo, y haciendo una valoración en líneas generales podemos
concluir añadiendo que las zonas abisales son regiones salvajes, con poca fauna, débido
a la ausencia de factores que contribuyan a la formación de un ecosistema favorable
para la vida, como puede ser entre otros el sol, la luz solar. Además los seres que
habitan estas aguas son seres bastante primitivos, poco evolucionados, de proporciones
considerables, que probablemente debido a su gran tamaño carecen de agilidad, por lo
que no podemos hablar de hábiles y veloces nadadores. A pesar de todo esto, han
desarrollado una serie de adaptaciones al medio sorprendentes, como puede ser la
ausencia de pigmentación en la dermis u órganos bioluminiscentes que les ayudan tanto
en el camuflaje en el medio como para atraer presas para poder alimentarse. Así mismo
también se caracterizan por tener un tamaño desproporcionado en relación a los
estándares de otros peces de menor profundidad
Es por ello que podemos afirmar que aunque la vida en los fondos abisales es
escasa y poco evolucionada, es sorprendente e incomparable a la de cualquier otro
ecosistema.
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BIBILIOGRAFÍA/ WEBLIOGRAFÍA
- Enciclopedia Larousse, Editorial Planeta.
- Enciclopedia Visual de los Seres Vivos, Editorial: El País-Altaya
- http://www.geovirtual.cl/geologiageneral/ggcap05c.htm
- http://omega.ilce.edu.mx:3000/sites/ciencia/volumen1/ciencia2/46/htm/sec_18.h
tml
- http://es.wikipedia.org
