República Bolivariana De Venezuela.

Universidad Pedagógica Experimental Libertador.

Instituto Pedagógico De Maturín.

Maturín- Edo- Monagas.

Cátedra: Metodología de la enseñanza de la Informática.

Profesora: Bachilleres:

Germaina Briceño. Mary C. Córdova.

Xiomelkis Domínguez.

Maturín, noviembre del 2010.

Dentro del “qué son las estrategias didácticas” se ha de incluir su origen; en el

“cómo han sido implementadas” se incluirá su incursión a lo largo de la historia por

diferentes grupos sociales así como su ingreso dentro de las escuelas normales desde

distintas perspectivas, en parte por las diversas concepciones que se ha tenido del proceso

de enseñanza y aprendizaje que debe implementarse dentro del aula.

Actualmente las estrategias continúan siendo una herramienta para este proceso, y son conocidas como una serie de técnicas previamente planificadas ya sean para la enseñanza o el aprendizaje en donde la primera está íntimamente ligada al quehacer laboral del maestro y de los elementos que hará uso para apoyar su práctica docente mientras que las segundas están relacionadas al alumno y los elementos que han de incluirse en la clase para generar en él un aprendizaje significativo. (Barriga, 1998)

Debido a esto, entendemos que las estrategias didácticas son esfuerzos planificados, sostenidos y coherentes que buscan que un contenido educativo o un conjunto de ellos sean de acceso a los estudiantes que mediante un esfuerzo de aprendizaje también estratégico logren acceder a este contenido y construir sobre lo dado, adaptarlo, desecharlo o simplemente agregarlo a sus acervos cognitivos, entendiendo entonces que los alumnos obtendrán un aprendizaje significativo.

Ahora bien, nuestro elemento clave dentro de la tesis son las estrategias didácticas mismas que renglones atrás hemos conceptualizado, sin embargo a estas las estudiaremos dentro del ámbito superior específicamente en las escuelas normales por lo tanto es de suma importancia contextualizar al lector sobre la transición que han vivido las estrategias didácticas dentro de las normales a lo largo de los años.

Iniciándose las escuelas normales a principio de los años 80’s su plan y programas proponía aun bajo la corriente conductista, misma que se encontraba en auge, un proceso de enseñanza y aprendizaje centrado en el profesor lo que derivaba en estrategias únicamente de enseñanza. Posteriormente y tras el “bum” del constructivismo las escuelas normales a mediados de los años 90’s comenzó a trabajar en nuevos planes y programas para sus diversas licenciaturas saliendo a la luz primero el de primaria (SEP, 1998) y a principios del 2000 los de preescolar y educación física.

Los tres planes y programas que aun siguen vigentes plantean de acuerdo al constructivismo una nueva educación, proponen al docente dejar ese protagonismo legendario y centrar su proceso de enseñanza y aprendizaje a los alumnos y aunque se entendería entonces que se aplican estrategias de aprendizaje, los mismos planes y programas de estudio proponen a su vez que el maestro reconsidere su práctica docente, el

esmero que en este proyecta y que de su actuar educativo se reconociera como un facilitador, promotor y conductor del aprendizaje, mismo que como objetivo principal ha de tener generar alumnos analíticos, reflexivos y críticos. Por tal motivo se puede observar que lo que se busca implementar son las estrategias didácticas para mantener este dinamismo en el proceso de enseñanza y aprendizaje que se genere dentro del aula.

Lo anterior presupone que se estén aplicando dentro de las escuelas normales pero sin intención de sonar radical, la práctica dentro de las escuelas normales hablando por la experiencia de pertenecer al nivel nos muestra una cara distinta reconociendo que no es generalizado, en su mayoría, se puede observar la falta de aplicación de estrategias didácticas dentro del aula (Rendón, 2004), en algunas ocasiones el mal entendido de su significado considerándolas sinónimo de dinámicas grupales y en otras ocasiones se puede observar como los maestros retoman su protagonismo de antaño.

Retomando lo dicho previamente, bajo las escuelas normales recae, como en toda institución de educación superior, la responsabilidad de otorgar a la sociedad profesionales que satisfagan las necesidades que para su desarrollo han de ser pertinentes.

Ser formado dentro de las escuelas normales, desde hace varios años es sinónimo de diversos movimientos magisteriales que en lo personal tiene que ver con el doble manejo académico-sindical que dentro de las mismas sobreabunda, lo que lleva a muchos docentes a hacer uso de sus horas clase como horas para “manipular” al estudiantado.

Algunos otros, quizá por la estructura en la que fueron educados, se niegan a perder ese protagonismo dentro del aula y las estrategias que en ella realizan se ven enfocadas a ellos mismos y algunos otros, en su deseo por mostrarse constructivistas pierden el control del grupo durante sus “dinámicas” lo que los hace recaer en el conductismo, siendo sólo una minoría docente la que refleja el conocimiento de una verdadera estrategia didáctica y a su vez del uso adecuado que estás requieren.

Es importante considerar que dichas estrategias didácticas no en todas las ocasiones han de permitir al docente aplicarlas con uno y otro grupo clase puesto que deben ser estructuradas de acuerdo a las características específicas del grupo y el momento histórico-social en que serán aplicadas. Por lo cual, los formadores de docentes habrían de reconsiderar su práctica en busca del beneficio del alumnado que a su vez tendrá la responsabilidad de formar a la sociedad del mañana.