El Diario de Jeshua

8/19/2019 El Diario de Jeshua

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El diario de Jhasua

Cuando Jhasua entró en sus 19 años, algo muy interno, cambió en él.

Pienso que para conocer a fondo su gran personalidad, es necesarioestudiarlo, al par que en su ida e!terna, también en su mundo interno. "para esto nos serir# de espe$o que lo refle$a muy claramente,un diario que al entrar en sus 19 años, sintió la necesidad de llear minuciosamente.

%a separación de &ebai, la dulce y discreta confidente dé sus primerosaños de $oen, lo de$ó como sumergido en una gran soledad de esp'ritu.Jhosuel'n y el t'o Jaime se hallaban en &a(areth ayudando a Joseph alfrente de su taller de carpinter'a, que cada e( se engrandec'a ycomplicaba por el aumento de obras y de operarios.

)us maestros *senios, buscaban también de de$arle m#s tiempo con+sigo mismo, para que su esp'ritu pesara bien las responsabilidades queten'a sobre s', y m#s que nada para que entregado m#s de lleno a suspropios pensamientos, se orientase hacia su erdadero camino.

Jhasua le di$eron un d'a. -e hemos enseñado cuanto sabemosen la ciencia dé ios y de las almas. Creemos llegado el momento de quepor ti mismo pongas en pr#ctica cuanto has aprendido, y que seas $ue( deti mismo en lo que concierne a tus facultades superiores y a todos losactos de tu ida.

/*ntonces me abandon#is0 les preguntó alarmado.

&o hi$o m'o le contestó -holemi, que era el de m#s edad de losdie( instructores. &os tienes a tu disposición ahora y mañana, ysiempre. Pero as' como la madre, cuando es hora de que su niño sepaandar solo, no le llea en bra(os, sino que le de$a en tierra y, le impulsa aandar, as' hacemos tus maestros contigo, hi$o m'o, que has llegado antesque otros, no sólo a andar en tierra sino a olar como esas #guilas que enlos d'as de hermoso sol se remontan hasta perderse en el inmenso a(ul.

2hora ya eres libre de estudiar lo que quieras, de hacer concentracio+nes, transportes, desdoblamientos de tu "o 'ntimo, irradiaciones de fuer(amagnética a distancia, o en presencia, sobre los seres, o los elementosseg3n tu criterio lo ea ra(onable y $usto. *so s', en cualquier duda otropie(o, ya sabes lo que hacemos todos4 en la concentración mental dela noche y todos en con$unto hacemos una hora de consulta ycomentarios. 5a(te de cuenta que eres unos de nosotros, el m#s $oen enedad f'sica, es erdad, pero el m#s anciano como esp'ritu.

Con esto me queréis decir di$o Jhasua que ya me consider#isun hombre que en las cosas del alma debe gobernarse solo.

/)olo has dicho0 &o hi$o m'o respondió el )eridor. 6n *senionunca est# solo puesto que camina guiado por la %ey. *n su io resplan+dor est#n todos nuestros grandes 7aestros4 8sa'as, *l'as, *l'seo,*(equiel,

Jerem'as, 7iqueas aniel y tantos otros que t3 conoces y has le'docomo yo " como nuestra %ey nos enseña la forma de eocarles y recibir


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sus mensa$es cuando es necesario, el *senio debe tener elconencimiento de que $am#s est# solo.

e esta conersación tenida con sus 7aestros, surgió en Jhasua laidea de llear un diario en su carpetita de bolsillo. Para sentirse menossolo, all' escribir'a d'a por d'a sus impresiones, sus luchas, sus

ansiedades y anhelos m#s 'ntimos.)u diario comen(aba as'4

)eñor ios de los grandes y de los pequeños: %os hombres mede$an solo porque $u(gan que soy ya un #rbol fuerte que puedo afrontar sin apoyo ni postes, las sacudidas del endaal.

Para -i )eñor soy siempre el niño que comien(a a andar.

Padre m'o que est#s en los cielos y en cuanto ibra en tu creaciónuniersal... que est#s dentro de m' mismo:. -u no me de$es en soledadcomo las criaturas me de$an, porque -3 sabes lo que ellas olidan4 que micora(ón de hombre es de carne, y necesita el calor de los afectos de

familia, la ternura de la amistad, la dul(ura inefable de los amores puros ysantos:

-3 sabes Padre m'o cómo soy, cómo estoy formado con esenciatuya, con fibras tuyas, con #tomos tuyos:... " mi alma, burbu$a de tueterna lu(, encerrada est# en una materia densa que camina por la tierradonde hay (ar(ales que se prenden al estido, y lodo que mancha lospies:...

Padre m'o eterno: 2mor m'o infinito: %u( m'a ine!tinguible: ;erdadm'a )uprema:... %lena -3 mis ac'os insondables y que desborden tusmanantiales en m' en forma que lo tenga todo sin tener nada:


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5e comprendido que a3n no me e, pero que ha sentido la ibraciónde mi presencia espiritual, porque i correr dos l#grimas por su rostroque ocultó entre sus manos y apoyó la cabe(a en el hombro de su madre.

%e di tanto amor, consuelo y esperan(a, que se animó r#pidamente ybuscando su carpeta escribió estas palabras4

5oy he sentido a Jhasua como si me hablara diciéndome que meacompaña a distancia, y que en la primera caraana me eniar# unaep'stola.

=h Jhasua:... qué bueno es tu pensamiento que as' ahuyenta delalma la triste(a y desaliento.

Pronto podré comprobar si esto es realidad. %a caraana pasa por >ibla mañana domingo. 2 mitad de semana estar# frente al camino del)antuario. /;endr# ep'stola de &ebai que me hablar# de esto0 *spe+remos.

?racias Padre m'o *terno, por el don diino del pensamiento hecho

a uestras criaturas:

)on las alas para olar que les habéis dado, y que ellas no quieren ono saben usar:

os d'as después Jhasua escrib'a en su carpeta4

5a llegado a m' como un grito de angustia, el pensamiento de &icol#sde amasco. 6na concentración mental profunda me ha dado la clae deeste asunto. 2unque quise transportarme espiritualmente a su residenciade Jerusalén, me i impedido de entrar.

)iendo en su casa las asambleas de la *scuela )ecreta, presientoque ha sido descubierto por un disc'pulo traidor, y los esbirros del Pon+t'fice han inadido el recinto y aprisionado a algunos.

)e empeñan en hablar de la aparición del 7es'as en esta tierra y el)anhedr'n que ie temeroso de que la lu( rompa las tinieblas que ocul+tan su ida delictuosa, la emprendan a sangre y fuego contra los quepueden serir de instrumento de la erdad.

7e inquieta sobremanera el impedimento de penetrar espiritualmenteen la residencia de &icol#s. 6na fuerte intuición me dice que hay all' serescontrarios que forman una espesa barrera de odios que no puedo romper,sin e!ponerme a un trastorno nerioso o mental que a nada conducir'a.

Padre m'o $usto y bueno:... @ortalece a tus elegidos para que

ensanchen como el mar su cora(ón, y perdonen a los per$uros, a lostraidores, a los ingratos, que habiéndolo recibido todo de tus santos, lestraicionan, les olidan, les arrastran por el polo para engrandecerse ygo(ar $unto al dolor y el llanto de quienes les dieron ida, lu(, ternura ycalor:

2l siguiente d'a continuaba de este modo4

7i bueno y querido &icodemus me ha isitado en mi concentraciónespiritual de esta noche.

e su mensa$e mental e!traigo este resumen4 &uestra *scuela deJerusalén ha sido descubierta, porque un $oen %eita ha ca'do 'ctima de

la sugestión que e$erce el deseo de grande(a en ciertos seres.


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*l Conse$o de ;igilancia del )anhedr'n, ha ofrecido grandes pre+bendas en el -emplo a todo %eita que dé aiso de sitios de reunionescabalistas, donde se hable de reisión de los %ibros de 7oisés, o de laaparición del 7es'as %ibertador de 8srael.

&icol#s como dueño de casa ha sido llamado a responder al alto

-ribunal.*speran que saldr# bien en sus respuestas y que habr# beneolencia

con él, porque forma parte de ese tribunal, el t'o de ?amaliel y un amigode José de 2rimathea.


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7e parece que todos estos interrogantes golpean en las mentes sa+cerdotales y pontificiales, y de ah' la inquietud y alarma cuando se co+menta que el 7es'as ha llegado para poner todo en su debido lugar.

7#s adelante estaba escrito enB la carpeta de Jhasua4

5oy llegaron al )antuario los -erapeutas que peregrinaban por el )ur.;ienen desde el )antuario del 7onte


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*ran éstas sus citas espirituales de amor, de tierna amistad, dehermandad ideológica, que ser'an de est'mulo al amante cora(ón delCristo encarnado.

5abiendo enido a la tierra para amar hasta morir, sent'a m#shondamente que nadie, la necesidad de amar y ser amado con esa noble

lealtad de las almas $ustas, para quienes es un delito grae la traición a laamistad, al amor, a la unión de almas destinadas a caminar $untas en laida a traés de la eternidad.

Continuemos, amigo lector, leyendo en el cora(ón puro del 5ombre+%u(, refle$ado en las brees escrituras de su carpetita de bolsillo.

)entado al borde dé la fuente en la cabaña de piedra, poco antesbulliciosa y alegre con las risas de &ebai, Jhasua escuchaba embelesadoel arrullo de las palomas, sus aleteos bañ#ndose en la fuente, y el gor$eode los mirlos a(ules, que se sent'an dueños del huerto solitario.

)u mirada se posó en algo que el ientecillo de la tarde agitaba entre

un $a(minero cercano, y io pendiente de él una cestilla de $uncos dedonde ca'a el delantal a(ul de &ebai, olidado sin duda por ella misma ensus correr'as por el huerto, cuando $ugaba a la escondida con su gacelafaorita.

*l alma delicada y sensitia de Jhasua a los 19 años de ida f'sica,encontró como un poema mudo en aquellos ob$etos olidados all' por sudueña, que hac'a dos semanas se encontraba ya en >ibla.

*n su imaginación ardiente y genial, se dibu$ó la imagen de la niñacon su delantal a(ul y su cestilla al bra(o recogiendo $a(mines y rosaspara el altar hogareño, donde seg3n el uso esenio, se guardaba el libro de

la %ey y los libros de los Profetas.)u esp'ritu se sumergió profundamente en s' mismo, con esa facilidad

maraillosa que tienen los contemplatios por naturale(a y por h#bito dehacerlo.

" pasada una hora, olió a la realidad de ese momento y ació ensu Diario su sentir m#s 'ntimo y m#s tierno4

&ebai escrib'a emocionado tu cestilla de recoger flores y tudelantal a(ul, han sido los hilos m#gicos que esta tarde me han lleadohacia ti. " te he isto, dulce niña de mi adolescencia, no ya corriendocomo entonces detr#s de tu gacela, sino tal como est#s ahora, grae,

meditatia, cantando ersos de 5ornero acompañada por tu la3d.Cantabas el salmo en que el poeta se que$a, de que ninguna alma

humana comprende el gemido de su cora(ón en la soledad del destierro.=h &ebai:... he comprendido que tu alma lloraba en ese salmo como elpoeta inmortal, de cuyo cora(ón est#s bebiendo t3, con aide( sedienta:

" al acercarme en esp'ritu a ti te he o'do decir4 Jhasua:... me sientoen un destierro porque he comprendido que para m', la patria eres t3, elamigo erdadero eres t3... el aire benéfico y el astro protector eres t3: %abelle(a de la fuente de las palomas, de los $a(mineros en flor, de todoaquel huerto que me parec'a encantado, eras t3 Jhasua que lo llenabastodo con ese algo de cielo que t3 tienes, y que no se encuentra en

ninguna parte sino en ti:


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5ice un esfuer(o mental, y me sent' ayudado con fuer(as astrales ymagnéticas, y mi isión ante &ebai adquirió alguna densidad. Comprend' que llegó a erme por un momento, porque soltó el la3d y abrió losbra(os como para abra(arse de algo que e'a. %a misma ibración fuertede sus emociones diluyó la isión, y ella comprendió que mi promesa

empe(aba a cumplirse porque la o' decir4 ?racias Jhasua por tu primera isita: Perdóname si hab'a llegado

a dudar de ti por la triste(a de la larga espera: Cre'a que la pobre &ebaiausente, hab'a sido olidada. -3 no olidas Jhasua como los dem#sseres, porque eres diferente de los dem#s.

&ebai sólo tiene 1E años, demasiado pocos para pensar tan pro+fundamente. "a es capa( de anali(ar la diferencia que hay de unos seres aotros. *n 1E años no ha podido conocer otras amistades. /Cómo sabe

que soy yo diferente de los dem#s seres0 5e ah' una prueba de que elalma iene desde muy le$os y llea andadas miles de $ornadas en eleterno ia$e. =h &ebai:... pequeña &ebai, &ubia de los Fobdas, *sther dominadora de 2suero, Judit encedora de 5olofernes... /qué ser#s eneste y en los siglos futuros0,...

ios te bendiga mu$er sublime, alma de lu( y de fuego que en estahora te has cru(ado en mi camino como una alondra blanca, paracantarme la estrofa inmortal del amor, que ibra en los planos sutiles ypuros donde es eterno, ine!tinguible, sin sombras, seme$ante a ios delcual emana:

?racias criatura de ios, por el don diino de tu amor que me dascomo se da una flor, un aso de agua, una redoma de esencias:...?racias, &ebai:.

6na noche, durante una concentración mental en medio de los2ncianos 7aestros, y cuando irradiaba su pensamiento sobre todos losque su cora(ón amaba como un incendio de lu( desplegado en la inmen+sidad, sintió la triste(a 'ntima de su madre que en ese momento pensabaen él.

Prestó atención, la eocó, la llamó con su alma ibrando de emoción yde amor, y percibió que ella creyéndolo presente a su lado, seincorporaba prontamente en su lecho diciéndole4 Jhasua, hi$o m'o:

/Cómo ienes a esta hora0-an intenso hab'a sido el llamado, que la ansiosa madre lo confundió

con la o( f'sica de su hi$o... el amado hi$o que siempre estaba en sumente como una estrella silenciosa que le alumbraba:...

Cuando ella se conenció que era un ensueño de su amor seg3n ellacre'a, rompió a llorar silenciosamente para no ser sentida de losfamiliares que dorm'an en alcobas inmediatas.

Pero cada sollo(o de la madre ibraba en el alma del hi$o, como laeleg'a triste de un la3d que lloraba en las tinieblas.

Jhasua se concentró m#s hondamente a3n, mientras oraba al 2utor

)upremo de toda lu(.

Padre m'o:.. . ha( que yo ea: )e transportó a su hogar y io.


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7#s sigamos lector, ho$eando su carpetita donde él escrib'a esamisma noche ya uelto a su alcoba solitaria4

*n la concentración de esta noche he isitado a mi madre, cuyatriste(a recog' al irradiar mi pensamiento sobre todos los que ama micora(ón. ebido a esto, pasó la hora de concentración sin darme tiempo a

irradiar el pensamiento sobre todos los seres de la tierra seg3n lo ordenala %ey:

BPadre m'o que eres 2mor *terno, inconmensurable:... Perdón por midebilidad y pequeñe(: 2un soy ego'sta Padre m'o, y mi cora(ón de carnelleno con el amor de los m'os... mi madre, me hi(o olidar de las dem#scriaturas... todas tuyas... nacidas de -i mismo, como mi cuerpo nació demi madre:

-ranquili(ada su conciencia por esta confidencia a :a iinidad,Jhasua escrib'a nueamente4

5ay honda triste(a en mi hogar. 5e isto a mi padre enfermo. ebe

haber tenido alg3n grae disgusto y su cora(ón se afecta profundamente.Jhosuel'n no consigue, con todos sus esfuer(os igori(ar su organismoque responde a su ley, que le marca poca ida f'sica en esta hora de sucamino eterno.

2na, mi hermana, entristecida también porque 7arcos, pertenecientea la *scuela )ecreta ha sido detenido, contribuye a3n m#s a formar elpesado ambiente de angustia que encuentro en mi hogar.

2l amanecer me pondré en camino hacia &a(areth.

2horraré el ia$e que los -erapeutas pensaban hacer pasado mañana.%o que ellos deb'an hacer, lo haré yo.

?racias Padre m'o por los dones diinos de que habéis llenado elalma humana:

-us poderes, tus magnificencias, tu fuer(a de amor, todo nos lohabéis dado sin me(quinarnos nada...

" la infeli( criatura humana pegada como un molusco al pantano,olida su noble condición de hi$a de ios, para continuar indefinidamentesu ida let#rgica de gusano:...

-al como lo emos escrito en su Diario, as' lo hi(o. " dos horasdespués de salir el sol, Jhasua abra(aba a sus padres que tuieron la m#s

hermosa sorpresa. *ra la primera e( que llegaba sin aiso preio.=rando al )eñor por osotros les dec'a os i tristes por muchas

ra(ones y he enido a consolaros.

&inguna de las cosas que os afligen son irremediables.

/Cómo lo sabes t3, hi$o m'o0 le preguntaba su padre.

%a oración, padre m'o, es la comunicación 'ntima de nuestra almacon ios. " como *l lo sabe, lo e y lo siente todo, el alma que se une aios en la oración puede saber, sentir y er mucho de lo que *l e, sabe ysiente.

*n mi oración de anoche comprend' uestra triste(a y aqu' estoy. )al'

al amanecer, me ine por el caminito de los -erapeutas que aunque es


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m#s #spero, es m#s corto que el de las caraanas. Con 19 años, bienpuedo saltar por entre los peñascos.

Para aquellos felices padres, ning3n galardón pod'a igualar al amor detal hi$o. 5ab'a saltado riscos y piedras entre arroyuelos que cortaban elpaso, en la semi oscuridad del amanecer, para llegarse hasta su triste(a

como un rayo de sol en la tiniebla de un calabo(o.Joseph olidaba su afección del cora(ón, 7yriam no lloraba m#s,

Jhosuel'n sent'a nueas energ'as en su organismo agotado. 2na e'a yalibre a 7arcos, y el t'o Jaime preisor en todo, tra'a un gran fardo deharina, miel y manteca del mercado porque adiinaba que en tal d'a, deb'ahaber grandes actiidades en la cocina de 7yriam.

6na luna permaneció Jhasua en el hogar llen#ndolo todo de pa( y deamor.

2l e!plicarles detalladamente cómo en la oración hab'a percibido susangustias, surgió en todos ellos el deseo de cultiarse m#s esmera+

damente en la transmisión y percepción del pensamiento, ese mensa $erodiino dado por ios a toda criatura humana.

" en el gran cen#culo que sólo se usaba cuando hab'a numerososhuéspedes, formaron un compartimiento diidido por espesas cortinas dete$idos de amasco, que era lo m#s suntuoso que pod'a permitirse unartesano de posición media.

2quel ser'a el recinto de oración donde los familiares se reunir'an alas mismas horas en que Jhasua hac'a las concentraciones diarias, con elfin de que sus almas se encontrasen unidas en el seno de ios en losmomentos de eleación espiritual.

)i as' nos encontramos tres eces cada d'a /a qué queda reducidala ausencia0 dec'a él.

;osotros me hablaréis en el silencio del Pensamiento y yo oscontestaré.

-al lo hicieron siempre nuestros maestros los Profetas, que debido asu gran unión con la iinidad se conert'an en mensa$eros de *lla paracon los hombres. " de all' ha surgido la equiocada idea de que el )eñor tiene hi$os priilegiados a los cuales manifiesta su oluntad con lucesespeciales.

*n realidad lo que hay, es que unos hi$os piensan en unirse al Padre

Celestial por la oración, y otros no lo piensan $am#s.%os que se acercan a *l con el cora(ón limpio de toda maldad, son

iluminados y de su perseerancia en este acercamiento, ienen necesa+riamente las eleadas percepciones del alma que sumergida en ios por la oración, adquiere gran lucide( en todo y para todo.

urante los 3ltimos d'as de su isita al hogar, Jhasua hi(o susconcentraciones espirituales $untamente con sus familiares, a los cualesrecomendó el colocarse siempre en el mismo lugar en torno a la pequeñamesa, sobre la cual colocó él mismo la %ey y los libros de los Profetas.

8déntico traba$o reali(ó en las casas familiares de )imón y de Gebedeo,

sus amigos del lago, de donde deb'an salir un d'a dos de sus disc'pulos'ntimos4 Pedro y Juan. " les di$o4 Como lo hice yo con osotros, hacedlo


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con uestros amigos 'ntimos y as' me ayudaréis a e!tender sobre la tierrael elo blanco del amor y de la pa(.

/&o dec's que soy un Profeta0 Cooperad conmigo en acercar a iosesta humanidad, es la misión de los Profetas.

2 la madrugada del trigésimo d'a emprendió el regreso al )antuarioacompañado del t'o Jaime, hasta mitad del camino.

*scuchemos su conersación.

Jhasua le di$o su t'o debes saber que tu padre quiso que fuerayo el administrador de tus bienes, y como ya est#s en los 19 años creoque debo darte ra(ón de ellos.

/ienes0... /pero, tengo yo bienes, t'o Jaime0 preguntó e!+trañado.

Cómo: /&o lo sabes0 )on los aportes acumulados desde tu na+cimiento, de aquellos tres hombres $ustos y sabios enidos del oriente,tra'dos a este pa's por el aiso de los astros.

?aspar, 7elchor y altasar no han fallado ni un solo año de eniar eloro que prometieron para cooperar a tu educación y bienestar de tufamilia.

-u padre, delicado en e!tremo, sólo se permitió tomar una pequeñasuma cuando ten'as creo 1H meses. e$ó el taller a mi cuidado para huir contigo y 7yriam al 5ermon, a ocultarte de la persecución de >absaces,el mago de 5erodes.

)i de esto me hubieses hablado, t'o Jaime, antes de salir, yo habr'aconencido a mi padre de que esos bienes son suyos y puede disponer de ellos como le pla(ca.

%os hi$os de Joseph añadió Jaime ignoran por completo estosaportes de los astrólogos orientales. &o quiere Joseph que lo sepa, ae!cepción de 2na y Jhosuel'n, que son alma y cora(ón contigo.

ien, t'o Jaime, ya que mi padre te nombró administrador de ese orodonado a m', te diré mi oluntad acerca de él.

5e isto que el taller necesita reparaciones indispensables parapreserar de las lluias y del sol las maderas para las obras. *sos co+berti(os de caña y $unco est#n cayéndose. -ambién el muro que rodea elhuerto est# ruinoso. *s l#stima de$ar que se destruya todo mientras eloro est# en la bolsa:

/Para qué sire el oro si no ha de emplearse en tener un poco m#s decomodidad y de bienestar0

" t3, Jhasua, /nada quieres para ti0 /&o necesitas nada0 lepreguntó Jaime.

/


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8gualmente, no permitas que mi padre sufra inquietudes en el pago desus deudas con los proeedores y con los $ornaleros. %a prolongación desu ida depende de su mayor tranquilidad.

*ntre t3 y Jhosuel'n, bien pueden arreglarse para descargarle de todopeso.

i =h Jhasua: &o conoces a tu padre: *s tan escrupuloso encuestión de pagos que quiere saberlo todo.

ien, que sepa que yo te autori(o para cubrir cualquier déficit quepueda traerle a él inquietudes.

-3 habr#s de acompañarme, t'o Jaime, a isitar un d'a a esos treshombres de ios que elan por mi bien desde que nac' añadió Jhasuadespués de unos momentos de silencio.

I /Cu#ndo ser# ese ia$e0 >ecuerda que hay uno en proyecto paracuando tengas A1 años.

I )', el de *gipto, a reunimos con @ilón en 2le$andr'a.

*ntonces podré isitar a 7elchor en 2rabia. -iene su *scuela cercanaal )ina'.

2 altasar en )usan, le isitaremos el año pró!imoD es el m#sanciano y temo que la muerte me gane la delantera.


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%os mensa$es llegaban por las caraanas al )antuario del 7onte5ermón en el %'bano, con los en'os anuales de treinta monedas de oro,die( por cada uno de tus tres protectores.

*s una pobre casita del suburbio de >ibla, hospeda$e habitual denuestros -erapeutas peregrinos, eran recibidos, los mensa$es y el

donatio, que en'a a nosotros y pasaba a tus padres lleado siempre por nuestros -erapeutas.

/Por qué no me di$isteis de esa casita refugio en >ibla, paraisitarla como se isita un templo0 preguntó Jhasua.

Por las ra(ones antedichas hi$o m'o. *l silencio, cuando se prometeguardarlo, es sagrado para todo esenio. )e esperaba que entrases en lamadure( de tu $uentud, a la cual has llegado con toda la plenitud de tuesp'ritu que hemos procurado para ti entre todos.

Jhasua... *res el *niado del 2lt'simo para remedio dé lahumanidad en esta hora de su eolución, y todo cuanto hiciéramos por tu

personalidad espiritual, nunca ser'a demasiado.*n la primera e( que ayas a >ibla, podr#s isitar el >efugio.

*l don de tus protectores est# como ya lo sabes en manos de tuspadres. Pero los mensa$es de orden espiritual y las ep'stolas cru(adasentre los astrólogos orientales y nosotros, est#n en nuestras crónicas, yson copias de los originales que se encuentran en el ?ran )antuario de7oab, seg3n manda nuestra ley.

*l hermano cronista, queda autori(ado para enseñarte todo cuantohemos recibido referente a ti, de tus sabios protectores y amigos.

?racias )eridor: e!clamó el $oen 7aestro. ;eo que soy

deudor de todos y por todo, y que no me bastar# una ida para pagaros atodos.

&o te preocupes, ya est# todo pagado con tenerte entre nosotros yhaber sido designados por la *terna %ey para formar tu nido espiritual enesta hora de tu carrera mesi#nica.

Jhasua, en una e!plosión de amor de las que solo él era capa(, searrodilló sobre el paimento en plena reunión y leantando al cielo suso$os y sus bra(os e!clamó4

Padre m'o que eres amor eterno:... )eas t3, dueño de cuanto e!iste,el que pague por m' a todos cuantos me han hecho bien en la -ierra.

*l )eridor lo leantó de su postración y le abra(ó tiernamente.

*ste abra(o y este momento le di$o se ha anticipado en nueelunas que faltan para entrar a tus A años. *l ios del 2mor lo quiso as'.

%os otros 2ncianos le abra(aron igualmente, diciéndole todos, frasesllenas de ternura y de esperan(a para que le sirieran de aliento y est'+mulo, al entrar en la segunda etapa de su misión como 8nstructor y *n+iado iino4

6no de ellos, originario de Pasagardo en Persia, que por mayor co+nocimiento de aquella lengua era el que hab'a sostenido lacorrespondencia con el sabio astrólogo altasar, di$o a Jhasua4

*n una de sus ep'stolas dec'a, que un momento de grandes doloresque hubo en su ida por la ignorancia humana, tuo la debilidad de pedir


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la muerte por falta de alor para continuar la ida en la posición espiritualen que estaba. " t3 Jhasua en el sueño le isitaste cuando ten'as treceaños de ida f'sica. 23n perduraba en ti la impresión sufrida en tu isita al-emplo de Jerusalén y para consolar a altasar de las miserias humanasque le atormentaban, le referiste tu dolor por igual causa a tan corta edad.

*l pidió aqu' la comprobación de que t3 le hab'as isitado durante tusueño. Por el -erapeuta que te isitaba cada luna, sab'amos bien tusimpresiones en el -emplo de Jerusalén.

-e refiero esto para que sepas hasta qué punto est#s ligadoespiritualmente con ese noble y sabio protector tuyo, altasar.

-u isita a él ser'a oportuna en abilonia donde pasa los meses deerano.

*l )eridor anunció que era llegada la hora de la concentración mentaly un silencio profundo se hi(o de inmediato.

;elada la lu( del recinto, en la suae penumbra ioleta, impregnada de

esencias que se quemaban en los pebeteros, con las melod'as de un la3dibrando delicadamente, las almas contemplatias de los solitarios confacilidad se desprend'an de la tierra para buscar en planos superiores, lalu(, la sabidur'a y el amor.

Por la hipnosis de uno de los maestros, fue anunciado que algunasinteligencias encarnadas iban a manifestarse mientras su cuerpo f'sicodescansaba en el sueño.

*ste aiso indicaba que deb'an e!tremarse las medidas para unamayor quietud y serenidad de mente, a fin de no causar daño alguno a losdurmientes cuyo esp'ritu desprendido moment#neamente de la materia,

llegar'a hasta el recinto.*l hilo m#gico de la telepat'a tan cultiada por los maestros espiritua+

les de todos los tiempos, hab'a captado la ibración del pensamiento deJhasua hacia sus tres protectores y amigos a larga distancia, y despuésde un suae silencio en la sombra, la hipnosis se produ$o en el maestro2san, persa, luego en ad 2ba el cronista, después en el m#s $oen de los-erapeutas peregrinos, que estaba en un descanso de sus continuadosia$es. )e llamaba )omed y era de origen #rabe.

%as 8nteligencias superiores, gu'as de la 3ltima encarnación 7esi#nicade Jhasua, hab'an sin duda recogido los hilos inisibles de los

pensamientos, los hab'an unido como cables de oro en la inmensidadinfinita, y la unión de las almas se efectuaba natural y suaemente ba$o lamirada eterna de la )uprema 8nteligencia, que hi(o a la criatura humanalos dones diinos del pensamiento y del amor.

%os tres sabios astrólogos que hac'a 19 años se unieron sin buscarseen el plano f'sico para isitar el ;erbo recién encarnado, acababan deunirse en el espacio infinito para acudir al llamado de su amorosagratitud, inquieta ya por desbordarse en ternura hacia aquellos que alarga distancia tanto le hab'an amado.

*l mago diino del 2mor es siempre inencible cuando busca el amor.

" en la penumbra ioleta de aquel santuario de rocas, se oyeron estostres nombres pronunciados por los tres su$etos en hipnosis4


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altasar. ?aspar. 7elchor.

-u amor Jhasua nos trae enla(ados, con hilos de seda di$o altasar que habló el primero. endigo al 2lt'simo que me ha permitido erteentrar en la segunda etapa de esta $ornada tuya para la salación espiri+tual de esta humanidad. &o eré tu apostolado de 7es'as desde este

plano f'sico, sino desde el mundo espiritual al que tornar#s triunfador aentrar en la apoteosis de una gloria conquistada con heroicos sacrificiosde muchos siglos.

-u amor lleno de gratitud hacia tus amigos de la cuna, proyecta, ya loeo, una isita personal, y aunque ella no entraba en nuestro programa, sila %ey lo permite, bendita sea.

*n el abra(o supremo de dos soles radiantes en el infinito, llegaste ala ida %u( de ios, que en ti desbordó su amor eterno para laar la leprade esta humanidad.

?aspar de )hrinagar se acerca a ti en esp'ritu en el segundo portal

de tu ida f'sicaD has terminado tu educación espiritual a3n antes de quetu "o se haya despertado a la conciencia de tu misión. %a lu( que traesencendida en ti, te deslumbra a ti mismo, y se dir'a que la elas para nocegar con sus ios resplandores. Pero la hora llega ineludiblemente dela suprema clariidencia de tu "o )uperior. Para entonces estaremoscontigo como en tu cuna, pero acaso desde el espacio infinito, a dondeentrar#s en gloriosa apoteosis, mientras tus magos del oriente desintegrar#n en #tomos imperceptibles, la materia que te siriópara tu 3ltima $ornada en la -ierra.

%a *terna %ey que nos mandó cooperar con ella desde tu nacimiento,nos manda también deste$er como un elo sutil tu enoltura de carne, yque sus #tomos enuelan el planeta que fue el ara santa de tusholocaustos de >edentor. Pa( de ios, 2atar diino en tu segunda etapade ida terrestre:

7elchor, el humilde 7elchor, el pr'ncipe moreno que i'a llorandoaquel pecado de su $uentud, no osó hablar de pie, sino que arrodillado elsensitio en el centro de la reunión, dirigió al ;erbo encarnado estasbrees palabras4

%a suprema dicha de mi esp'ritu me la dio la *terna %ey al permi+tirme, 5i$o de ios, besarte en la cuna, ampararte en tu ida, y acompa+ñarte en tu salida triunfal del plano terrestre.

*sta gloria, esa felicidad suprema basta a mi esp'ritu para su eter+nidad de pa(, de lu( y de ida.

5i$o de ios:... bendice a tu siero que no pide otra gloria, ni otracompensación que la de tu amor inmortal:

Jhasua no pudo contenerse m#s y llorando silenciosamente se acercóal sensitio que tend'a sus bra(os hacia él con ia ansiedad, yponiéndole sus manos sobre la cabe(a le bendi$o en nombre de ios.

*ntre los bra(os de Jhasua, el alma de 7elchor se desprendió de lamateria que por la hipnosis hab'a ocupado brees momentos.

%os tres sensitios olieron al mismo tiempo a su estado normal, yJhasua se encontró de pie, solo al centro de la reunión. Con su cabe(a in+


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clinada sobre el pecho, parec'a como agobiado por un gran peso quefuera superior a sus fuer(as.

)us maestros lo comprendieron de inmediato.• Libros

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*l )eridor se leantó y fue el primero hacia él.

%a lu( se a haciendo en tu camino y te embarga el asombro que casillega al espanto le di$o a media o(.

%e tomó la diestra y le sentó a su lado.

2nte las palabras del )eridor, todos prestaron su fuer(a mental paraque aquel estado ibratorio demasiado intenso se tranquili(ara poco apoco.

2quella poderosa corriente durmió a Jhasua durante todo el tiempo dela concentración mental.

Cuando se despertó estaba tranquilo y pudo desarrollar l3cidamenteel tema de la disertación espiritual acostumbrada, y que esa noche le co+rrespond'a por turno. *l asunto se hubiera dicho que fue elegido e!profeso, y hab'a sido sacada por suerte la cedulilla que dec'a4

%a (ar(a ardiendo que io 7oisés. " al escuchar su comentario deese pasa$e, todos comprendieron que Jhasua acababa de er también ensu camino como una llamarada ia, la encruci$ada primera que decidir'asu senda final.

2unque en el fondo de su esp'ritu hab'a gran serenidad, no pudodormir esa noche y muy de madrugada salió de su alcoba al allecitosobre el cual se abr'an las grutas.

Caminando sin rumbo fi$o por entre el laberinto de montañas ybosquecillos, se encontró sin pensar, en la pobre cabaña de -ob'as dondesus cuatro moradores estaban ya dedicados a sus faenas de cada d'a.

%os dos muchachos 2arón y )eth curados que fueron de su par#lisisen las e!tremidades inferiores, ordeñaban actiamente las cabras,mientras el padre, -ob'as, las iba haciendo salir de los establos yencamin#ndolas a los sitios de pastoreo.

eila, la buena madre, re$uenecida por la alegr'a de sus dos hi$osfuertes y sanos, adornada de su blanco delantal, soberana en la cocina,sacaba del rescoldo los panes dorados con que la familia tomar'a el de+sayuno.

*stos hermosos cuadros hogareños llearon una nuea alegr'a deiir al meditabundo Jhasua.


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-ob'as le acercaba el cabritillo m#s pequeño que lleaba en bra(os.2arón le ofrec'a un canterillo de leche espumosa y calentita, y eila sal'ade la cocina lleando en su delantal panecillos calientes para elniñosanto como ella le llamaba.

2quel amor tierno y sencillo como una égloga pastoril, llenó de emo+

ción el alma sensible de Jhasua que les sonre'a a todos con miradas deindefinible sentimiento de gratitud.

" en el dulce amor de los humildes, se esfumó suaemente la penosapreocupación que los acontecimientos de la noche anterior le hab'an pro+ducido.

*n aquella cocina de piedra r3stica, alrededor de la hoguera en la queard'an gruesos troncos de leña, Jhasua se sintió de nueo adolescente,casi niño, y compartió el desayuno familiar con gran alegr'a.

%a familia no cab'a en s' de go(o con la inesperada sorpresa, pueshacia ya tiempo que Jhasua no les isitaba.

%os amigos de Jerusalén, las copias, el archio, el ia$e a &a(areth, lehab'an ocupado todo su tiempo.

)ólo os e'amos de le$os dec'ale -ob'as y con eso nos bastaba.

*l escultor antes de marcharse a >ibla nos di$o que estabais muyocupados con gentes enidas de Jerusalén añadió )eth.

)', es erdad respondió Jhasua pero hay otro motio y me culpode ello grandemente. Como ya os sab'a tranquilos y dichosos, $u(gué sinduda que no precisabais de mi, y qui(# por eso se me pasó m#s tiemposin enir.

/


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-odo bien nos ino a esta casa con os niño santo dec'a encan+tada la buena mu$er y a3n nos dec's que nos qued#is deudor.

"o sé lo que me digo madre eila. )al' de mi alcoba entristecido yahora me siento feli(.

;uestro amor me ha sabido tan bien como uestra miel con castañas.


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sodio que acabo de relatar. %o ser'a, si no estuiera él relacionado conacontecimientos que m#s adelante fueron piedras firmes en los cimientosdel Cristianismo. %a *terna %ey se ale de seres humildes y pequeños,ignorados de la sociedad para leantar sus obras grandiosas de sabidur'ay de amor.

%a colocación como porteros del )antuario del -abor de la familia de-ob'as, tra$o el acercamiento de un niño huérfano de madre, de 1 añosde edad, hi$o de padre griego, radicado en )ethópolis de )amar'a, cuyonombre era @elipe. )u madre fue hermana de eila esposa de -ob'as lacual tomó al niño a su cuidado, y los maestros del -abor cultiaron suesp'ritu. Como era muy turbulento y traieso, diert'a grandemente aJhasua, que acaso no pensó que aquel parulito de die( años, ser'a unferiente predicador de su doctrina años después, con el nombre muyconocido del Diácono Felipe, fundador de la primera Congregación Cris+tiana de )amar'a.

;olamos nueamente a la intimidad de Jhasua, santuario secreto diino al cual entramos en silencio y mediante su Diario que es el espe$oen que se refle$aba.

%os nuee meses que faltaban para llegar a los einte años, los pasódialogando consigo mismo en la profundidad de su esp'ritu que buscabasu ley con una ansia indescriptible.

urante ese tiempo, iió tan intensamente su ida interna, queasombra er el alto grado a que llegaron sus facultades espirituales.

%os 2ncianos afirmaban que desde los tiempos de 7oisés no se hab'aisto nada seme$ante, ni a3n en las *scuelas m#s consagradas a lase!periencias supra+normales.

urante este tiempo ocurrió también un hecho que amos a conocer atraés del iario de Jhasua.

*n mis tres concentraciones espirituales de este d'a escribe en sucarpeta he sentido, isto y o'do algo muy singular. esde el fondo deunas grutas muy seme$antes a éstas, me llamaban por mi nombre,añadiendo los calificatios mesi#nicos que algunos go(an en darme.

*s un llamado espiritual sin oces y sin sonidos que sólo el almapercibe en los silencios hondos de la meditación.

%os que llaman son encarnados y las grutas que habitan est#n en

)amar'a, entre las escarpadas montañas que quedan a la ista de laciudad de )ethópolis, punto de con$unción de todas las caraanas.

*sas oces clamorosas y dolientes me piden que les consiga el per+dón de la @raternidad *senia. )omos *senios me dicen del tercero ycuarto grado. %a soberbia hi(o presa en nosotros que quisimos erigir aqu' un templo como el de Jerusalén con su deslumbrante pontificado. Comoeso era salimos de nuestra ley, la protección diina se ale$ó de nosotros yen e( de un templo, nuestro )antuario se conirtió en madriguera defora$idos que nos amarraron con cadenas reduciéndonos a las m#s tristescondiciones. &o quedamos ya sino tres de los einticinco que éramos.Casi todos han perecido de hambre y de fr'o, y otros han huido.

7es'as, )alador de 8srael ten piedad de nosotros:


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Jam#s o' decir continuaba escribiendo Jhasua que en )amar'ahubiera un santuario *senio entre las montañas al igual que los dem#s.

=' hablar y cono(co el del 7onte 5ermón, donde estue oculto en miniñe(D el del Carmelo donde me curé de mis alucinaciones de niñoD el del7onte


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ebe ser llegada la hora en que seas de erdad la lu( de ios sobretodas las tinieblas.

-inieblas del esp'ritu son las que enolieron a esos hermanosnuestros, que cansados de la ida ignorada y sin aparato e!terior, qui+sieron brillar en el mundo con los esplendores del -emplo de Jerusalén.

%as donaciones que los hermanos hac'an para el sostenimiento denuestro refugio de enfermos y de ancianos, las emplearon en adquirir maderas del %'bano y m#rmoles y plata para el templo que se propon'anleantar en )ebaste, entre las hermosas construcciones hechas por 5erodes el ?rande, con los tesoros que fueron sudor y sangre del pueblohebreo. *l )anhedr'n de Jerusalén que est# alerta siempre, llegó asaberlo, y por medio de sus h#biles aduladores para con el >ey, los quedirig'an los traba$os fueron detenidos, los materiales acaparados por orden del >ey, el )antuario inadido y robado, hasta que bandas demalhechores de los que tanto abundan en las montañas de )amar'a,

tomaron las inaccesibles grutas como antro de ocultamiento para suscr'menes.

Cre'amos que ning3n esenio quedaba y que todos hab'an huido. %osque no estuieron de acuerdo con la idea que los perdió, fueron cuatro yesos se retiraron al )antuario del Carmelo, donde t3 les has conocido ydonde a3n permanecen.

&osotros les aisamos que se sal'an de su ley que mandaba paraesta hora una obra puramente espiritual y de aliio a los que sufren.

&uestra misión era preparar los caminos al *niado iino desdenuestro retiro, pues que siendo ignorados del mundo, go(#bamos de lasanta libertad que nos era necesaria. *n toda la Palestina y )iria est#ndiseminados nuestros hermanos, y son pocos los hogares donde no hayaun esenio con una lucecita ine!tinguible dando claridad sin que nadie seaperciba.

y ahora /qué hacemos0 Preguntó Jhasua. /Cómo comprobar quetres seres est#n amarrados en las grutas y que piden perdón y socorro0

5ace tres d'as llegó uno de nuestros -erapeutas peregrinos queconoce mucho las montañas de )amar'a., porque es natural de )ichen que estuo m#s de una e( en aquel santuario.

%lamado que fue el -erapeuta, di$o que en )ethópolis hab'a granalboroto entre el pueblo, porque hab'an sido capturados los malhechoresque habitaban en las montañas y que pronto ser'an e$ecutados.

I )i aun hay *senios en las grutas añadió deben ser los que o' decir que los bandidos ten'an secuestrados para eitar que dieran aiso ala $usticia. Por otros *senios que huyeron antes y dieron aiso, es que la $usticia empe(ó a buscarles y por fin los han encontrado.

/*ntonces las grutas estar#n solas0 preguntó Jhasua.

Probablemente, con los tres amarrados en ellas seg3n el aisoespiritual contestó el )eridor.

)i osotros me lo permit's, yo desear'a ir all# para salar a esosinfelices hermanos que tan terriblemente pagan su culpa di$o Jhasua al)eridor.


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-u anhelo es digno de ti, hi$o m'o le contestó el )eridor, perodebemos usar de mucha cautela y prudencia.

*n la concentración mental de mediod'a consultaremos el caso connuestros hermanos. " lo que entre todos resolamos ser# lo que m#sconiene.


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)alarles y reconstruir un santuario de adoración al )eñor y detraba$os mentales en ayuda de la humanidad, es una obra grandiosa anteios, y merece cualquier sacrificio.

%a conersación siguió con estos temas, y las preguntas de todosdaban motio al $oen 7aestro para que él mismo y sin pretenderlo, fuera

delineando cada e( m#s grande y m#s hermosa su silueta moral yespiritual de apóstol infatigable de la fraternidad y el amor en medio de lahumanidad.

Cuando terminó la comida, el t'o Jaime hi(o un aparte con Joseph.

2compañaré a tu hi$o en este corto ia$e le di$o porque temo susentusiasmos $ueniles y quiero cuidarle de cerca.

ien, Jaime, bien. &o pod'as haber pensado nada me$or. Cu#nto teagradecemos tus solicitudes para con él le contestó Joseph.

2 m#s añadió Jaime para cualquier eentualidad, si est#s deacuerdo daré a Jhasua algo de sus dineros. *l acaso lo necesita y lo

merece. 2quel santuario habr# sido despo$ado de todo.

5ace tantos años que fue asaltada por los bandidos:

5abla esto con Jhasua y él lo resoler# di$o el anciano al propiotiempo que Jhasua doblaba cuidadosamente una t3nica un mantonueos que su hermana le hab'a te$ido. %a madre le acomodaba en unacestilla cerrada, una porción de golosinas y frutas. ulce escena hoga+reña, repetida cien eces en todo hogar donde hay madres y hermanasconscientes de su misión suai(adora de todas las aspere(as en la idadel hombre:

-oda la familia le acompañó hasta el camino donde se e'a desde el

huerto la caraana detenida. 2l erles llegar, @elipe corrió hacia Jhasuadiciéndole4

Cre' que no ol'as m#s.

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