Corbalán.Asistencia técnica y disciplinamiento.-1

5/11/2018 Corbal n.Asistencia t cnica y disciplinamiento.-1 - slidepdf.com

http://slidepdf.com/reader/full/corbalanasistencia-tecnica-y-disciplinamiento-1 1/35



LJlJANA MARTIGNONI

Ministerio de Cultura y Educaci6n, Bases para la transfor-macion. educativa, Buenos Aires, 1991.

PAVIGUANITI, N., Diagnostico de la Administracioti Central

de la Educacion, Serie Estudios y .Dccumentos, num. 1,

Buenos Aires, MEJ, 1988.

PEREZ GOMEZ, A, La cultura escolar en la sociedad neolibe-ral, Madrid, Morata, 1998.

PUIGGROS, A, America Latina: crisis y prospectiva de la

educacion, Buenos Aires, Aique, 1990.

SABSAY,P., "La organizaci6n del tercer ciclo: alertas para

compartir", en Novedades Educativas, afio 8, num, 66

Buenos Aires, 1996.

TlRAMONTI,G., "Elnivel medio del sistema educativo argen-

tino", Serie de Documenioe e Informes de Inueetigacion.

num. 153, FLACSo/Argentina, 1993.

--....." "Las escuelas medias argentinas: entre el cambio y

la resistencia", Serie de Documentos e Informes de Inues-tigacion, num, 189, FLACSO/Argentina, 1993.

TOFFLER,A, El cambio del poder. Conocimientos, bienestar

y violencia en el umbral del siglo XXI, Barcelona, Plaza y

Janes, 1990.

TOURAINE,A, La sociedad postindustrial, Barcelona, Ariel,

1973.

40 6

LA PROFESION ACADEMICA

COMO OBJETO DE ESTUDIO.

UNA REVISION DEL PENSAMIENTO SOCIOLOGICO

Lucia B. Garcia"

La intenci6n principal de este ensayo es rastrear en los

estudios sociologicos contemporaneos las principales contri-buciones que han forjado 1anoci6n de "profesi6n academical)

y que actualmente nutren el debate y la reflexi6n en e1campo

de la educaci6n superior en America Latina. Para tal prop6-

site realizamos una exploraci6n bibliografica en torno a los

origenes y situacion actual de tres objetos de conocimiento

subsecuentes: universidad, profesi6n y profesi6n academica

universitaria.La revisi6n de la literatura no pretende ser exhaustiva;

mas bien nos centramos en aquellos autores que considera-

mos han tenido y tienen mayor trascendencia en los circulos

academicos par la influencia de sus ideas. A partir de estebalance, recuperamos enfoques sociol6gicos que a nuestro

juicio constituyen esfuerzos fertiles para aproximarnos a la

tematica de la profesi6n y al trabajo academico en el contexto

de las universidades latinoamericanas, problematica que

estamos abordando en nuestra linea de investigaci6n.

* Faculta d de Cie ncias Humanas, Unive rsidad del Ce nt ro de la P rovincia deBuenos Aires, Argentina.



LUciA B. GARCiA

EL PENSAMIENTO SOCIOL6GICO CLASICO Y LA IDEA

DE PROFESr6N EN LA UNIVERSIDAD MODERNA

Sabemos que la universidad, en tanto institucion con una

estructura organizativa, tiene su origen en la Europa occi-

dental medieval; precisamente las universidades de Boloniay Paris constituyeron los modelos organizacionales de mayor

trayectoria e impacto en el mundo occidental, sin desconocer

formas de educacion superior existentes en otras sociedades

tradicionales como India y China. En ese contexto de la uni-

versidad medieval se considera que nace "el maestro univer-

sitario profesional", cuando los circulos aislados de maestros

rodeados de alumnos dan paso a dispositivos de asociacion

conformados como cuerpos colectivos (Ben-David, J., 1974).

En contraste con esta larga historia -que se remontaal siglo

XII - respecto a la inclusion de la docencia en tanto actividadcentral para la formacion academico-profesional en la insti-

tucion universitaria; el fenomeno de las profesiones, en el

sentido que seguidamente resefiaremos, es mas reciente yse

vincula con la modernidad y el protestantismo.

EI estudio de las profesiones -su origen, naturalezay

multiplicidad- ha sido abordado desde diferentes perspecti-

vas disciplinarias; precisamente esta multiplicidad de enfo-

quesy alcances la tornan un area de interes complejo. EI

conocimiento de modelos profesionales entraiia la considera-

cion de las circunstancias historicas y sociales que llevan "al

predominio de un determinado ejercicio de la practica profe-sional". En este sentido, el analisis de las profesiones en

general ha sido realizado examinando tanto el momento de

su institucionalizaci6n como el de su profesionalizaci6n yel de la tendencia a la especializaci6n del conocimiento en el

contexto de sociedad moderna (Pacheco Mendez, 1997a, pp.17-35).

Esta perspectiva sociohistorica nos llevo a interrogarnos

sobre la genesis del concepto de "profesion", para 10 cual

recurrimos al pensamiento sociologico clasico, esencialmen-

te Max Weber y, complementariamente, Emile Durkheim.

408

L A P R OF ES IO N A C A DEM IC A C OMO OBJ ET O D E E ST U DI O

Profesi6n deriva del termino aleman berufI-que no tiene

en castellano un vocablo equivalente- y surge a partir de

las traducciones luteranas de la Biblia. Alude a un doble

significado de 'vocacion' y 'profesion', En La etica protestante

y el espiriui del capitalismo (escrita en 1904-1905), Weberexplica que el vocablo beruf, y quizas con mas claridad el

terrnino Ingles calling (vocacion) tiene "por 10 menos una

remembranza religiosa: la creencia de una mision impuestapor Dios" (1981, p. 48). Y agrega que al realizar la genesis

historic a de esta voz no ha encontrado una expresion con

dicho matiz religioso ni en los pueblos catolicos ni en la

antigiiedad clasica, a diferencia de la mayoria de los pueblos

protestantes. Aiios mas tarde (1922), en Economic y Socie-

dad, reitera que

profesi6n: constituye un concepto que en todos los paises

protestantes precede de las traducciones deIa Biblia y que enlos calvinistas abarca, asimismo, de un modo expreso las

ganancias legitimas obtenidas mediante las empresas capi-

talistas. A traves de la evoluci6n consecuente del calvinismo

-que no es identico a la actitud adoptada por e1 propio

Calvino- esta ganancia y los medias racionales para conse-

guirla recibenuna significaci6n cada vez mas clara. [.. .] Como

se trataba de averiguar si la personalidad era admitida 0

rechazada, como ninguna confesion y ninguna absolucion Ie

liberaban de sus pecados y podian modificar su situaci6n

frente a Dios, como ninguna "buena" acci6n podia, como en e1

catolicismo, compensar los pecados cometidos, e1 individuo

estaba seguro de su estado de gracia cuando poseia concienciade que en su modo de comportarse, en el principia "metodico"

de su manera de vivir, seguia el unico camino recto: el

trabajar para la gloria de Dios. La vida "metodica", 1aforma

racional del ascetismo pasa de este modo del claustra al

mundo" (pp. 342-343).

En la obra de Weber existe una idea implicita sabre las

relaciones entre el primitivo protestantismo ascetico y el

capitalismo, vertiente de Ia Reforma que contribuiria a pro-

porcionar moviles y canalizar las actividades de los hombres

1Vease nota del traductor e n 1a p. 23 de "La c ienc ia como profe sicn", en M.Weber, Cienciay polttica, 1991.

409



LuciA B.GARCiA

en una direccion propieia a la ciencia experimental. Esto seexplicaria en la medida en que.esta movimiento de radical],

zacion religiosa Ilevo a sus seguidores a romper con las

mediaciones institucionales que Ia Iglesia habia construido

para establecer lazos entre Dios y los hombres, buscando asi

nuevos referentes para su salvaeion. Dichas formas terrena-Ies de glorificar aDios -el trabajo metodico, el individualis-

mo, el escepticismo- iran conformando un nuevo espiritu

d?minado por el calculo, la disciplina y la dedicacion profe-

sional, contexto en el cual la ciencia cobra nuevos brios(Bartolucci, J., 1997).

En la extensa produccion intelectual del sociologo econo-mista e historiador aleman, encontramos refereneias espe-

cificas ala profesion academica en La ciencia como profesi6n

(1991). Este ensayo, publicado en 1919,2es producto de una

serie de conferencias sobre el trabajo intelectual pronuncia-

das en 1918 en la Universidad de Munich en el marco de laprimera Guerra Mundial. Situacion que lleva a Weber a

reforzar "en los jovenes el valor de Ia ciencia y de la profesion

intelectualy docente" (Bonvecchio, C., 1997, p. 236), asi eomo

tambienel sentido etico de Ia catedra, al afirmar que docen-

tes y estudiantes no deben hacer politica en el aula. La

n~utralidad ideologies que debe caracterizar el comporta-

mlento.de los profesores universitarios se comprende por el

complejo momento historico que vive Weber y, segun Bon-vecchio, se atribuyo erroneamonn, a toda su producci6nin telectual.

.~n referencia al otro significado de beruf, es d~cir voca-cion, Weber expresa que el "ejercicio de Ia ciencia como

profesion depende en principio de que la ciencia ha entrado

a un stadium de especializaci6n desconocido anteriormente

yen el cual ha de permanecer en elfuturo" (1991, p. 31). Esto

exige un convencimiento intimo en los individuos que se

dedican al trabajo cientifico, los que deben sentir "dentro de

si 10 que puede ser Ilamado la 'experiencia' de la ciencia" (p.32),10 cual supone una verdadera pasion.

2picho tex~o,junto a "La politica como profesi6n", integra el volumen Cienciay poliiica que citamos en la bibliografia.

410

L A P R OF ES r6 N A C A DEM IC A C OMO OB JE T O D E E S TU D IO

Los analisis de Weber sobre la vida acadernica estan

tefiidos de una perspectiva comparativa respecto al sistema

estadounidense de principios del siglo xx , al que consideraantitetico del aleman en cuanto a las caracteristicas de Ia

carrera academica, Al respecto, plantea que en Estados

Unidos "rige el sistema burocratico", en virtud del eual quienrecien ingresa a la carrera (assistant) percibe una remune-

racion fija" aunque "la mayoria de las veces el sueldo corres-

ponde apenas ala remuneracion de un obrero no calificado"

(1991, p. 24). Comparativamente, encuentra una mayor dife-

rencia respecto a Ia cantidad de elases que imparte un joven

ayudante en el sistema estadounidense, pues "esta sobrecar-

gada de trabajo", precisamente por ser remunerado. En

Alemania, durante la juventud es cuando el docente (dozent)

esta mas libre de clases debiendose conformar con el dietado

de curses accesorios ya que los "importantes" son responsa-

bilidad del profesor (dozen ten), con la {mica ventaj a -a juiciodeWeber- de contar "involuntariamente, sus afios dejuven-

tud libres para dedicarlos al trabajo cientifico" (p. 25). Las

condiciones del trabajo academico en el sistema universita-

rio aleman 10 llevaran a afirmar que en Ia practica

la carrera de un hombre de ciencia esta fundada totalmente

sobre supuestos plutocraticos [...] [tornandose] extraordina-

riamente: arriesgado para un joven estudioso sin fortuna

personal exponerse a las exigencias de la carrera universita-

ria. Tendra que estar en condiciones de mantenerse a S 1

mismo por 10 menos una cierta cantidad de aiios, sin saber de

ningun modo si podra tener mas tarde la oportunidad de

ocupar un puesto que alcance a subvenir a sus necesidades

(1991, p. 24).

Los historiadores de Ia ciencia (Ben-David, 1974) coinci-

den en afirmar que en Ia Alemania de mediados del siglo X IX

la investigaci6n no se reconocia como profesion, con una

3 En e ls is tema a leman, qu ien ingresa a la car re ra (normalmente comoprivat.dozent) percibe unicatnente las contr ibuciones de los estudiantes, l!na diferencia-aunque noIa pr inc ipal - con e l s istema estadounidense que menc iona Web~r e sque en este los a sistentes pueden se r de sped idos s in conside raciones, en cambio e lprivatdozent a leman t iene e l convenc imien to de posee r una "e spec ie de de recho

moral a ciertas consideraciones dado que durante afios ha ocupado el puesto".

411



L U Cr A R G A RC tA

escala de posiciones constitutivas de una carrera; era mas

bien una "vocacion sagrada para unas cuantas personas, que

no necesitaban un adiestramiento formal que se encontrara

por encima del ofrecido en los cursos normales" (p. 173). Pese

a "todo el crecimiento de las investigaciones, dentro y fuera

de las universidades, el reconocimiento oficial y las disposi-

ciones relativas al papel de los cientificos no habian cambia-

do en todo el siglo XIX" (p. 190).

Es interesante notar el dilema que ya sefialaba Weber a

principios del siglo XX respecto a 10 que hoy todavia consti-

tuyen problemas centrales en la carrera academica y Ia

conformacion de los planteles docentes en nuestro contexto

universitario latinoamericano. Aquel consistia en las deci-

siones que debieran tomarse para habilitar como docente"a todo cientifico Iegitimamente capacitado, 0 si se toman

en consideracion las necesidades de enseiianza, dando a los

dozenten ya existentes el monopolio de Ia ensefianza" (1991,p. 25), dilema que el autor liga al doble significado del propio

termino "profesion academics" y cuya resolucion general-

mente se produce en la segunda opcion,

Otra caracteristica que le adjudica a la carrera academica

es su arbitrariedad, a tal punto que llega a afirmar "no

conozco carrera sobre la tierra en la que ella juegue un pape1

mas destacado", EI hecho que el azar -y no la capacidad=-

desempefie un importante papel en el destine academico no

10 atribuye exclusivamente a las naturales debilidades hu-

manas sino mas bien a las "leyes de la cooperacion humana,

especialmente de Ia cooperacion entre varies organismos;entre la facultad que propone los candidatos y.el ministerio"

(1991, p. 27). En este sentido, Weber cuestiona la intromi-

sion del poder politico en la resolucion de los asuntos acade-

micos de la universidad, apoyandose en algunos casos

sucedidos en Alemania. Ese marco de tension entre el poder

de la universidad para resolver sus temas internos y la

injerencia del poder externo (monarquico, gubernamental,

eclesiastico, etc.) constituye otro de los problemas del medio

ambiente academico sefialados por el sociologo aleman que

ha mantenido su vigencia a 10 largo de la historia de la

universidad,

41 2

L A P R OF ES IO N A C A DEM IC A C OMOOB J ET O D E E ST U DI O

Finalmente, otra de las "condiciones externas de la profe-.

sion cientifica" que analiza Weber es la doble faz de la tarea

del hombre de ciencia: el componente de docencia e investiga-

cion es decir que quien se "siente llamado por la ciencia [... ]

debe calificarse no solo como investigador sino tambien como

profesor" (1991, p. 29); dos aptitudes que no encuentran nec~-sariamente reunidas en un mismo profesor. Esta problema-

tica de la profesion la observa en las universidades alemanas

de su epoca y generalmente es resuelta a favor de la docencia

-por el peso que ostentan las "aulas llenas"- en desmedro

de la evaluacion de la ealidad cientifica de un dacente.

Vale precisar que desde "comienzos del siglo X IX ha~ta.el

advenimiento del nazismo, las universidades alemanas SU'Vle-

ron como modelo de instituciones academicas": fue en elias

"donde las principales ramas de la investigacion ~ientifica

cristalizaron en disciplinas" y se definieron las funciones del

profesor universitario (Ben-David: J: y Zloczower: 196.6,p.13). Esta idea del quehacer academico nace par influjo de

Wilhelm von Humboldt y otros representantes del idealismo

aleman, tales como Fichte, von Schelling, Schleiermacher,

con la apertura de la Universidad de Berlin.y,se propa~a ~otras universidades alemanas que se convertiran en las pn-

meras universidades de investigacion", asi comoa otros paises,

a tal punta que el "compromiso academico con la investiga-

cion" pasara a set con el tiempo una verdadera "fuerza

institucional" (Clark, 1997, p. 35).EI modelo humboldtiano supuso (Ben-David, J. y Zloczo-

wer, A, 1966; Clark, B., 1997; Gonzalez Cuevas, 1997; O~~izGutierrez, P., 1997) un cambio importante en la concep~lO?-

misma de la universidad. Los tres pilares fueron la prmci-

palidad de la investigacion -que hasta ese memento regis-

traba destacados antecedentes institucionales fuera de los

muros universitarios-y otros dos conceptos asociados: liber-

tad de ensenanza y aprendizaje. Ello se tradujo en u~ curric~-lum definido por profesores y alumnos: ambos deblan parti-

cipar en la investigacion, aquellos ~nsefiaban lo.s temas .de

sus propias pesquisas y e~tos eran hbr;s ,de elegir ~aten~sy universidades. La vortiente humanistica de la ideologia

humboldtiana propiciaba la "busqueda de la verdad" -que

41 3



LucIA B.GARCIA

necesitaba verse liberada de Ia supervision estataI- 4 en

combinacion "conIa ambicion deprocurar una vida correcta"

"una variante de 1 0 que ahora se llama educacion liberal; '

~Clark, 1997, p. 37). A estas caracteristicas se anadian el

Ideal de unidad institucional de todaslas ciencias empiricas

por medio del saber filosofico y Ia promocion del profesor

como figura de prestigio dentro y fuera de la universidad.

P?r ot~ola~o, eIl~bor~:orio de investigacion-docencia yel

Semll~arIOde investigacion-docencia constituyeron las "he-

rr~~llentas operativas" del modelo humboldtiano que per-

mitieron poner en marcha los nuevos intereses academicos

-"no los ideales de Humboldt" - surgidos "alrededor del

imperativo de la investigacion", los que se convertiran en "el

motor impulsor dela ciencia y la academia alemanas del siglo

XIX"(Clark, B., 1997, p. 40).

EI proceso de transformacion de la ciencia mediante la

especializaci?n, sucedido a 10 largo del siglo X IX en Europa,

con Alemania en la punta, impacto en una division del

trabajo academieo. Como afirman Ben-David y Zloczower

(~966) el desarrollo del laboratorio de investigaci6n (institut)

vmc~lado a ~na catedra universitaria -aunque sin estar

p.r,opIame~te.mtegrado a la universidad- produjo una divi-

SIOnaca~emlCa del trabajo que desemboc6 en una ruptura

de la umdad enseiianza-investigacion, puesto que

e1cientificoacademicose vioobligadoa especializarse en el

'Institut' en una investigacion que tendia a aislarsedela disci-

plina quedebia ensefiar si queria convertirseen catedratico

5

,4 Desde.una perspective de analisis critico de la universidad burguesa, Bonvec-chic enuncia que en el p.royecto deVon Humboldt e l Estado es quien useadjudica la

tar~~ de su~remo organizador y garante de Ia vida espir itual y socia l de la universi-dad , es de?ITq.uesus ternores por una excesiva intervention estatal que coarte laliber-tad de la clencl~ son aparentes. Segun este autor 1 0 que "cuenta para Von Humboldte s que la prac tice del saber salvaguarde los intere se s y las nece sidades del Es tado .

Consecuenternente, l a a u to no m ia y la independencia del docente deben coincidir y

ad~curu:se ~este proposito, Nosorprende entonees a Von Humboldt que los profesoresUntVe~sltanos sean nombrados exclusivamente por el Estado, que es llamado a dir igiren ~nmera persona todo 1 0 concerniente ala universidad" (1997, pp. 37-38). .

En loscomienzos de l modele, e ada d iscipl ina e staba repre sentada por un soloprofesor. De este m?do, solo con la creacion de nuevas catedras se podia aumentarelpers~nal aca~emlco ..Aldesarrollarse los institutes de invostigacion -timeo Iugar

donde ;sta p~dla reahzarse-;- se estrangulo el crecimiento del plantel academico,pues solo el director dellnstaut podia convertirse en profesor.

414

LA PROFESr6N ACADEMICA COMO OBJETO DE ESTUDIO

..••.•......•••..' .

' . I

[ . .. J y una parte cada vezmayor del trabajo deinvestigaci6n.

cientifica e inte1ectualfue quedandoexcluidade las univer-

sidades (pp. 16-17).

AI estudiar las condiciones que condujeron ala profesio-

nalizaeion de la ciencia en los siglos X IX y XX , desde unaperspectiva de analisis hist6rica y comparativa, Ben-David

(1974) encuentra que en Alemania, a diferencia de Francia

y Gran Bretafia, apenas en la segunda mitad del siglo X IX

comienzan a aparecer en las nacientes ciencias sociales los

intereses practices, pues hasta ese entonces primaron los

desarrollos "a partir de intereses puramente academicos".

Esto explica que "para comprender las caracteristicas pecu-

liares de la sociedad moderna [Weber] trat6 de penetrar en

el espiritu del puritanismo del siglo XVII, que consideraba

comola raiz del capitalismo", mientras contemporaneamen-

te Durkheim 10 hizo "por medio de debates teoricos sobre

diferentes tipos de divisiones del trabajo y el analisis de los

indices de suicidios en las diversas sociedades de su epoca"

(Ben David, 1974, p. 158).Durkheim, uno de los principales fundadores del pensa-

miento sociologico positivista yde la moderna sociologia

empirica, se ocupo del tema de las profesiones -con una

perspectiva de la "etica profesional" - en tres conferencias

pronunciadas entre fines del siglo X IX y comienzos del XX.6

En ellas plantea la necesidad de alcanzar un estado de orden

y de paz acometiendo una autentica tarea moral a partir de

dos dimensiones principales: Ia moral civica, ligada comple-

tamente al Estado, secompone por elconjunto de deberes de

lealtad y servicio al Estado que tiene que cumplir todo

ciudadano. Por otro lado, la dimensi6n profesional supone

que ninguna actividad social puede hacerse sin disciplina

moral, siendo necesario .precisar reglas en cada una de las

profesiones para alcanzar sus metas, puesto que ningun

poder central puede precisarlas. EI Estado debe promulgar

leyes "juridicas, pero los propios profesionales son quienes

6 Las tres confe rencias fueron publiea das por primera ve z en la Revue deMetaphysique etMorale en 1937. E.Durkheim, Professional ethics and civic morals,Londres, Routledge & Regan Paul , Ltd. , 1957, caps . I, II y I II , c itado en A . Cortina

y J, Conill, 10palabras clave en la etica de las profesiones, 2000, p. 20.

415



L U ci A B . G A R Ci A

deben diseiiar las reglas morales de la profesion (Cortina,

A., 2000). En opinion de esta autora, el concepto de moral

civica durkheimiana es restringuido, pues implica una etica

estatalista que no condice con las sociedades pluralistas, en

las cuales se la debe entender

mas bien [como]el conjunto de valores compartidos por losdistintos grupos, que les permite construir su vida juntos. Lamoral civicaseria una etica de minimos compartidos por lasdiversas eticas de maximos, no un conjunto de deberes rela-cionados con e1Estado" (p. 21).

A partir de las propuestas de Durkheim, Cortina extrae

ciertas sugerencias que considera positivas. En principio

plante a que los distintos ambitos sociales exigen generar las

reglas morales mas adecuadas para alcanzar las metas y, en

segundo lugar, que ello debe hacerse tanto para "elevar la

moral" de la sociedad en su conjunto como para integrar alas personas en grupos profesionales, como ayuda para su-.

perar el egoismo y rebasar el individualismo no solidario.

Finalmente, recupera de Durkheim la idea de las "corpora-

ciones profesionales [como] fuente de solidaridad y morali-

dad", ante "la anomia en las sociedades avanzadas y la no

identificaci6n de los individuos con las leyes" (p. 22). . .

AIrespecto, es interesante hacer una acotaci6n siguiendo los

analisis de Giddens, A. (1993) sobre los escritos de sociologia yfilosofiasocial deDurkheim. Desde su punto devista, en las obras

sobre el Estado y la politica es donde el sociologo frances '.

documentaconalgun detalle loscambiosque presupone hi . tran-sidon a la solidaridad organica y losideales concomitantes deindividualismo moral [... La necesidad del desarrollo de lasasociaciones ocupacionales se halla logicamente implicitaenla teoria de la solidaridad organica (Giddens, 1993, p. 25).

Durkheim no desarrolla suficientemente las ideas sobre la

naturaleza y elpapel de las asociaciones ocupacionales hasta

en el pre facio a Ia segunda edici6n de La division del trabajo.En este expresa que "las corporaciones deben ser entidades

legalmente definidas, afiliadas unas con las otras y operar

41 6

LA PROFE SION ACADEM ICA COMO OB JE TO DE E STUD IO

bajo el paraguas general del Estado" (Giddens,1993, p. 26).

Valga recordar que al Estado 1 0 concibe como "un organo moral

[...] un cuerpo de funcionarios cuyo rol consiste en articular

y enfocar las representaciones colectivas que son el producto

de la sociedad a la que sirve" (p, 27).

LA UNIVERSIDAD CONTEMPORANEA

Y EL IDEAL DE LA PROFESI6N ACADEMICA.

Los APORTES DE LA SOCIOLOGiA ESTADOUNIDENSE

Es importante tener en cuenta que los procesos de profesio-

nalizacion que se van consolidando desde el siglo XIX,pese a

las connctaciones meritocraticas de su ideologia, suponen un

"paradigma estamentario de sociedad", tipico de las forma-

ciones sociales europeas predecimon6nicas. De ahi que

Brunner y Flisfisch (1983) los interpretan

comouna aspiracion a constituir una aristocracia del merito.ElMse muestra cabalmente en la funcion central que se asig-na a la distribucion delprestigio, y enla centralidad que poseeelproblema del prestigio -su adquisicion, su conservacion y

su perdida=- para los miembros de una profesion" (p. 171).

Durante el sigloxX se ha ido manifestando una progresi-

va fragmentacion de la profesion academica, quebrandose aSI

aquel ideal todavia vigente en el siglo XIX de una cultura uni-versitaria comun y la pretension de una profesion academica

unificada. Como deciamos anteriormente, esta evolucion no

esta desligada del proceso de diferenciacion-especializacion

del conocimiento cientifico a partir de finales del siglo XIX ,

recorrido que desemboca en los cambios cuanti-cualitativos

de la ciencia durante la segunda posguerra, cuando un pro-

gresivo proceso de diferenciacion de los objetos de investi-

gacion convierten al trabajo del investigador en una profe-

sion, con codigos accesibles solo a un restringido numero. de

personas. En dicho transcurso interviene tambien el fenomeno

de latransformacion de las universidades en centres de produc-

41 7



Luc1A B.GARClA

cion institucionalizada del conocimiento. Tan estrecho es el

vinculo entre la institucionalizacion de especialidades cienti-

ficas y las universidades, que aquellas no adquieren el carac-

ter de tales hastaen tantoestasnolesreconocenlaimportancia

y Ie asignan puestos estables a los cientificos. AI punto que

Parsons define como un rasgo tipico de la universidad mo-derna, su tendencia por abarcar toda la gama de .disciplinas

inteleetuales (Olvera Serrano, M. y Vidal de la Rosa, G.,

1993).

En Estados Unidos se considera que surge a comienzos del

siglo xx el "concepto de investigador profesionalmente cali-

ficado", en virtud de 1 0 cual quienes se doctoraban en filosofia,

humanidades, ciencias, Be consideraban igualmente competen-

tes para la investigacion (Ben-David, J., 1974).Acorde con estos sueesos; la sociologia academics estadou-

nidense en sus diferentes especialidades, particularmente

soeiologia de la ciencia y de la educaci6n superior, ha desa-rrollado extensamente la reflexion y el estudio empirico

sobre profesiones. Nos cefiiremos ahora a T. Parsons -cuyos

analisis se entroncan con los esquemas de Durkheim y

Weber- y R. Merton." Estos autores constituyen.Ios mas

conspicuos representantes de 1 0 que se ha dado en llamar

enfoque estruetural-funcional, el eual retoma el analisis

general durkheimiano sobre la funeion de los grupos ocupa-

cionales dentro de la soeiedad, centrandose en las ocupacio-

nes profesionales, a las cuales eonsidera en eierta manera

grupos separados dentro de la sociedad (Elliott, P., i975).

Parsons eonstituye una referencia insoslayable para unanalisis sociologico contemporaneo de las profesiones. Les

otorga un papel especifico en la "esencia de la modernidad"

porque las considera portadoras del principio de racionali-

dad, "en tanto que se apoyan y aplican las ciencias, una de

cuyas caracteristicas dominantes seria su racionalidad, en

el sentido que se opone a tradicionalismo". Ademas dan Ingar

a un nuevo tipo de autoridad en la sociedad: la autoridad

7 Por razones de espac io , dejamos fuera los desar rol los deA. Gouldner, quiendentro de la tradicion webe riana incorporo e lementos del analiais marxista al

conceptuar a los intelectuales como una "nueva clase". Vease Brunner y Fllsf isch,

Los inielectuales y las iltstituciones de fa cultura, 1983, pp. 62-66,

418

LA PROFESI6N ACADEM I CA COMO OBJETO DE ESTUDlO

basada en la competencia tecnica especifica, que se liga ala

especialidad funcional, otra de las pautas institucio~,ales

modernas. A partir de 1 0 eual Parsons deduce .que en u~a

estructura ocupacional donde priman las relaelO~es funCl~-

nales cede la importancia de las relaciones primaI'~as 0 tradi-

cionales [...] Y se omplearan criterios universahstas parajuzgar SUd logros" (Brunner y Flis~sch, 1983, pp. 86-87) ..

Elliott (1975) menciona que en un influyente ensayo publica-

do en 1939, Parsons cambia 10afirmado dos afios atras, al ~u-

gerir que "las similitudes entre las p~ofesio~es"y los negocios

no eran mas importantes que sus diferencias (p. 21). Este

autor explica que el nuevo razonamiento del sociologo esta-

dounidense se justifica porque en sus desarrollos eonceptualee

(pattern variables) para el analisis de los papeles sociales, n~-

gocios yprofesionales compartian las mis~as carac~erlstI-

cas' eran racionales, funcionalmente especlficos y umversa-

1es.'Si bien ambos grupos mantenian diferencias importanteeen su organizacion, no sucedia 1 0 mismo e~ su ~otlVa?lon. "Parsons propone tres criterios para defimr 1 0 profeslOnal

como categoria universal:-:

primero e1requisito de una formacion tecnica en regia ~com-

pafiada de un procedimiento i~stitucion~liz.a~o que certifiqu~

tal formaci6n y la competencIa de los md,l;tduos form~d.~s,

segundo, ademas del dominie y comprenslOn de .1atradicion

cultural, se exige la habilidad para utilizar~a bajo alguna de

sus formas, y, por Ultimo, el contar con algun medic :nst1;u-

cional para garantizar que tal competencla se aphcara a

actividades socialmente responsables.

8

Esta matriz te6rica de origen funcionalista, desde e1punto

de vista de Tenti Fanfani (1989) se ha hecho eviden~e en

diversas definiciones y estudios empiricos sobre profesionee

realizados en Estados Unidos. Su proposito es "constrUlr una

teoria del funcionamiento Y la genesis de los grupos profe-

sionaies [.. .] Ysu racionalidad consiste en identificar cuales

son las funciones que cumplen en 1a sociedad" (p. 27). En

8 Talcott Parsons, "Profesiones liberales". enEnciclopedia International de !as

Ciencias Saciales, t. 8,Madrid, ~~?ilar, ,1979:p. ?38;.citado en T. Pacheco y A.Dtaz

Barriga, Laprofesi6n. Su cond!cwn sociai e institucional, 1997b, p. 151.

419



L U cf A B . G A R C iA

clicha concepcion, las profesiones constituyen mecliaciones

entre las necesidades individuales y las necesidades funcio-

nales de Ia sociedad, contribuyendo asi a la regulacion y

control del buen funcionamiento social. '

Un concepto clave de esta tradicion sociologica empleado

para el estudio de las profesiones es e1de autonomia, y cons-

tituye el principal indicador para meclir e1grado de profesio-

nalizaci6n existente en un ambito particular. En este sentido,

la constitucion de 'comunidades profesionales se liga con Ia

reivindicacion de la autonomia. En 1a medida en que las

profesiones van desarrollando niveles crecientes de autonomia

se transforman en asociaciones corporativas, esto es, "se cons,

tituyen en un circulo de gente privilegiada que monopoliza

1a disposicion sobre bienes ide ales, sociales y economicos, y

sobre obligaciones y posiciones de vida" (Tenti Fanfani, E.,1989, p. 26). Ello supone un proceso de Iucha por-adquirir

una "situacion estamental", en el sentido weberiano de po-sesion de privilegios en la consideracion social.

Las contribuciones de Merton sobre las comunidades cien-

tificas resultan un aporte relevante para el conocimiento de

las caracteristicas del trabajo academico-cientffico.Mertcn,

R. (1964), en sus escritos de fines de Ia decada de los cuarenta,

considera a Ia sociologia de Ia ciencia como una subdivision de

la sociologia del conocimiento que se oeupa de investigar las .

relaciones reciprocas entre la ciencia y Ia soeiedad, es deeir

la "interdependencia d i n a mica entre la eieneia, como actividad

social en mareha que da nacimiento a productos culturales

y de la civilizacion, y la estructura social que la envuelve" (p.525). Para el sociologo estadounidense, si bien el cultivo de

Ia ciencia no se limit a unicamente a las sociedades democra-

ticas, reconoce como supuesto provisional que "a la ciencia

se Ie ofrece oportunidad de desarrollo en un orden democra-

tico integrado con el ethoe' de la ciencia" (p. 543).

9 Define al ethos de la oiencia como "un complejo de valores y normas afectiva-

mente templados que se conside ran obl iga to rios pa ra e l hombre de c ienc ia . Lasnorm~s s? expresan ?~ forma de p1:' escripc iones, p rosc ripc iones , p re fe renc ia s ya.utonzaclOne~. Se ~e~ltiman en relacion con valores institucionales. Estos impera-tivos [. .,J son inter ior iz ados en grados variables por e l c ient ifico , formando asi suconciencia cientifica" (R. Merton, Teoria y estructura social, 1964, p. 543).

420

L A P R OF E sr ON A C A DEM IC A C OMO OB JE T O D E E ST U DI O

Este "ethos cientifico" (1964, pp. 544-552) se expresa en

cuatro principioe. EI 'universalismo' es decir, el "canon de

que los titulos a la verdad, cualquiera que sea su fuente,

tienen que ser sometidos a eriterios impersonales preesta-

blecidos". No obstante, reconoce que el "ethos de la ciencia es

sometido a fuertes tensiones cuando la cultura general seopone a1 ,universalism·o". El "eomunismo", puesto que ~?s

"resultados de la ciencia son producto de la colaboraclOn

social y sstan destinados a la comunidad". Este imperativo

de la comunicaci6n de los resultados "se refleja tambien en

el reconocimiento por parte de los cientificos, de que depen-

den de una herencia cultural a la cual no tienen derechos

diferenciales". EI "desinteres". como tercer elemento deriva-

do del caracter publico y comprobable de la ciencia, se apoya

en la practica en "la rendicion de cuentas definitiva de los

cientificos ante sus compaiieros", pues los resultados de la

investigaci6n cientifica so~ ~scrutados ~or lo~ colegas exper-tos. Por ultimo, el "esceptlClsmo orgamzado ~onstltuye"un

principio que se interrelaciona con los anteriores. Es un

mandato ala vez metodo16gico e institucional", por el cual la

veracidad delos resultados es sometida a permanente cues-

tionamiento.En Ia literatura de la educaci6n superior, los trabajos com-

parativos sobre la organizacion academica, generalment~ de

paises industrializados, constitu~~n tambien a_portes ~e ~m~portancia para analizar la profeslOn y el trab~J~ ,academl~o,

y de alguna manera son tributarios de la tradic.lOn ,,: ,ebena-

na del analisis socio16gico y el estructural-funclOnahsmo.

Clark.B. (1992) encuentra que trabajo, conocimiento, cree~-

cias ya~toridad son cuatro elementos basic~~ de la o~galll-

zaci6n aeademica de los sistemas de oducacion superior en

el mundo. La cultura de la disciplina y del estab1ecimiento,

como forrnas primordiales de organizacion, junto a las cul-

turas de la profesion academica y el sistema nacior:al~ en

tantO"agrupamientos mas amplios, son las fuentes prmcipa-

les de las ideologias de la vida aeademica y producen un

coniunto especifico de creencias que la guia~. Creen~ias queno conforman rasgos de una disciplina particular m corres-

ponden a una universidad determinada.

42 1



L Uc iA B . G A RC tA

De acuerdo con Clark, la modalidad disciplinal de organi-

zaci6n es la que transform6 ala educaci6n superior -en el

tiempo yen e1espacio- en un "sistema basicamente meta-

nacional e internacional", La culturade-la disciplina consti-

tuye la primera fuente de la cultura academica: "ladisciplina

-no la instituci6n- tiende a ser la fuerza dominante de lavida laboral de los academicos" (1992, p. 58). I.

Becher, T. (1993) ha desarroUado ampliamente esta pers-

pectiva, mostrando las formas en que diferentes especialida-

des y subespecialidades disciplinarias contribuyen a formar

la profesi6n, sugiriendo que al entender las partes y recono-

cer sus particularidades puede entenderse mejor el todo. AI

indagar en la naturaleza especifica del conocimiento en cada

campo y en las caracteristicas culturales de los academicos

asociados, elabor6 una tipologia basadaen las "disciplinas

centrales 0 predominantes" que resulta de los contrastes

entre "10duro y 10blando, 10 puro y 10 aplicado" (p. 61); .Desde la noci6n de "culturas disciplinarias", Becher des-

cribe las diferentes form as de organizar el trabajo academico

tipicas en cada una de las agrupaciones disciplinarias men-

cionadas; formas que devienen no s610 del tipo de.conoci-

miento que es materia de estudio, sino tam bien de la historia

de las disciplinas. Utilizando categorias tales como los pro-

cedimientos de iniciacion; los patrones de interacci6n social;

la especializaci6n y los procesos de movilidad y cambio entre

y dentro de las especialidades, el autor examina el modo

como las disciplinas dan forma a las vidas profesiona1es.

Mas alla de los patrones diferenciales segun disciplina einstituci6n, Clark (1992, pp. 138·143) reconoce que existe

una identidad del "hombre academico". Estos "hombres y

mujeres forman parte de una 'comunidad de sabios' con

intereses en comun que los separan de los demas"; en esta

"cultura de la profesi6n" se enfatiza "la autonomia personal

y el autogobierno colegiado" asi como la exigencia de mini-

mos controles externos. Dicha cultura proyecta ademas un

compromise de altruismo -al crear y transmitir conocimien-

to- y afirma abiertamente los derechos del profesorado al

poder y al estatus.

422

L A PR OFESI6N A CA DE MIC A C OM O O BJET O D E ESTU DIO

En el marco de sus estudios comparativos encuentra que

a pesar del caracter inherentemente fragmentado de la

profesi6n academica existen una serie de "~itos i~te~~amen-te compartidos", tales como 1alibertad de mvestlgaclOn Y de

enseiianza la libertad academics y cientifica, que tienden a

cohesionar 'alos academicos. A menu doesta unificaci6n se pro-duce en torno a las "loyendaa de la resistencia a los abusos

de la libertad". Por otra parte, como producto de la "obsesi6n

por la libertad individual y grupal, se forta1ece la afirmaci6n

normativa de los derechos individuales". En sintesis, la cultu-

ra de Ia profesi6n es en S 1 una fuerza, que esta enraizada en

condiciones e intereses de orden material.AI astudiar la profesi6n acadernica en Europa, Teichler,

U. (1996) expresa que

El debate publico y la reflexi6n academica en la profesi6n

academica no estan caracterizados por contentamiento y 8e-

renidad. Notamos constantes quejas en cuanto a que e1con-

cepto de una simple profesi6n academica podria ser ~a ilu-

si6n, que la profesi6n academica apenas puede arreglarselae

con las tensiones academicas con las que tiene que VIVll', que,. , li t 't (p 1) 10Ia profesi6n academlCa esta en pe gro, e ce era . .

Los resultados de la encuesta comparativa de 1992 dise-

fiada por Ia Fundaci6n Carnegie para el Avance de la Ense-

fianza arrojan tres nucleos de problemas que suma. esta

profesi6n. Uno alude ala homogeneidad y heterogeneldad,

en el cual intervienen cinco dimensiones: el campo de cono-

oimiento.Ja constituci6n profesional de las funciones (inves-tigaci6n,' docencia 0 ambas); el "sector" 0 tipo in~titucional

dentrode Ia educaci6n superior; el rango ocupacional y sus

tareas vinculadas y el pais en el cuallos academicos estan

profesionalmente activos. El segundo se refie~e a las vi.r~u-des y crisis de Ia profesi6n academica, que Telchle: califica

como una de las mas ambivalentes entre las ooupaciones con

alta educaci6n. Estas tensiones 0 ambivalencias surgen de-

bido a que, si bien las funciones de la profesi6n a~ade~ica

son crecientemente importantes por el desarrollo cientifico-

HI La traducc i6n es de la autora .

423



LUC iA B. GARC iA

tecno16gico, parad6jicamente se observa una tendencia a su

desvalorizaci6n desde hace un largo tiempo. Otra tensi6n

tipica e~ producto de las complejas formas en que se asigna

el trabaio: el esperado balance entre'Ia:s Iabores de enseiian-

za, investigaci6n y servictos, en la practica resulta en una

dinamica que rinde honores y evalua la calidad de la inves-tigacion y presiona a la enseiianza. Se aiiade a todo esto la

vulnerabilidad, por las extraordinariamente altas ambicio-

nes ~e Ia profesi6n academica y la moderada percepci6n de

su exito. La tercera tension se vincula con cam bios recientes

y nuevos desafios para la profesi6n academica: enfrenta una

perdida de estatus mas rapida que en el pasado los recursos

s? aj~stan cada ve~ ~as, se incrementa e1pOder de geren-Ciamiento y las actividadss de control con respecto a1rendi-

miento de los academieos, y ademas la profesi6n academiea

es publicamente culpada por no proveer servicios a-la socie-dad como se espera que 10 haga.

Desde una perspectiva de analisis compartida con el an-

terior autor, Boyer, E. (1997) p1antea e1panorama del tra-

bajo academieo en EUA con base en la misma encuesta. A

partir ~e 1a identificacion de los mandatos intra ,y extra

academia a los que han debido responder los profesores a 10

largo de la historia, propone cuatro grandes modalidades

para el desarrollo del trabajo academieo: el de descubrimiento

(investigacion); el de integracion; el de aplicacion del conoci-

miento, y la enseiianza. Cuatro categorias del trabajo acade-

mico que deben interactuar de manera dinamica. En

sintesis, Ia idea central del autor es superar 1a tradiciona1

tension entre docencia e investigaci6n en la labor del profe-sor de enseiianza superior -ylos datos de Ia Encuesta

Nacional de Profesores evidencian la propia insatisfacci6nde los miembros del claustro docente con Iapugna entre esas

dos funciones-, concluyendo con Ia urgente necesidad de

adoptar "una visi6n mas inclusiva de 10 que significa ser

academieo", reconociendo la gran diver sidad de talentos conque cuenta el profesorado.

424

L A P R OF ES I6 N A C A DEM IC A C OMO OB JE TO D E E ST U DI O

LAs PERSPECTIVAS CRiTICAS A LAS CONCEPCIONES

SOCIOL6GICAS DOMINANTES EN LA PROFESI6N ACADEMICA.

Los APORTES LATINOAMERICANOS

Tenti Fanfani (1989) opina que la corriente socio16gica fun-

cionalista si bien ha generado una base de estudios empiricos

necesarios para la conformaci6n de un area de indagaci6n

estructurada, constituye un modelo limitado "para capturar

todos los elementos consti tut ivos reales de los campos profe-

sionales" pues el "elemento lucha tiene tanto 0 mas peso que

el elemento consenso en los espacios profesionales concretes"

(p.29). Con esta perspectiva, abreva en la noci6n d~ campo y

su logica de funcionamiento, recuperando a Bourdieu.

Bourdieu (1994) define los campos, ~e produccion simb?~ca

-Que se especi£ican como campo politico, econo~lco, religio-

so, cultural, cientifico, entre otros- como espacios ~e Ju.egohist6ricamente constituidos, con intereses, agentes, institu-

ciones especificas y leyes de funcionamiento propio. En par-

ticular el campo cientifico, es entendido como

sistema de relaciones objetivas entre posiciones adquiridas

(en las luchas anteriores), es ellugar (es decir, el espacio d;

juego) de una lucha competi tiva que tiene por desafio especi-

ficoe1monopolio de la autoridad cientifica, inseparablemente

definida como capacidad tecnica y como poder social (p. 131).

La idea de campo como lugar de luchas constituye un

cuestionamiento a la vision durkheimiana a menudo visibleen la sociologia de la ciencia de la escuela americana. Esto

significa, segun Bourdieu (1994, pp. 132-138), "romper con

la imagen pacifica deIa comunidad cientifica" en tanto grupo

indiferenciado que impone e inculca un sistema de normae

y valores a todos sus miembros, y donde la "anom~a ~evo!~-cionaria s610 se imputa a los fracasos de la socializacion

cientifica", Para e1 sociologo frances, esta filosofia de la

ciencia "tiende a reducir las relaciones de competencia entre

dominantes y dominados a las relaciones entre un centro y

una periferia". Ademas olvida que

425



L U ci A B . G A R C iA

e1funcionamiento mismo del campo cientifico produce y supo-

ne una forma especifica de intereses (las practicas cientificas

no aparecen como desinteresadas mas que por referenda a

intereses diferentes, producidos y exigidos por otros campos).

De alli que invalida la distinci6n y oposici6n entre interesintrinseco y extrinseco en la ciencia, puesto que en el campo

cientifico como espacio de juego objetivo entre posiciones

cient:ificas no pueden aislarse determinaciones propiamente

cientificas y propiarnente sociales respecto de practicas que

son esencialmente sobredeterminadas.

La hegemonia mertoniana de las decadas de 1940-1960

comienza a cuestionarse a partir de programas de investiga-

ci6n que encontraban una "disociaci6n exagerada de los aspec-

tos sociales de la actividad cientifica respecto de los aspectos

cognitivos" (Vessuri, H., 1991, p. 60). En esta linea de anali-

sis, las profesiones "no constituyen espacios homogeneos

sino espaeios estructurados", en los cuales existen posiciones

de prestigio y poder y posiciones desprestigiadas como produc-

to de las luchas y las relaciones de fuerza en un momento

hist6rico determinado de su evoluci6n. Ademas, en Ia medida

en que Ia profesion se considera un campo, delimita las fron-

teras entre profesionales y no profesionales mediante e1

control del ingreso y ascenso profesional por parte de quienes

ocupan las posiciones dominantes.

Uno de los aportes mas relevantes -a nuestro juicio- al

conocimiento socio16gico contemporaneo sobre la profesi6n

academics y 1a universidad latinoamericana esta constitui-

do por los trabajos de Flisfisch, A . (1982); Brunner, J. J., yFlisfisch, A . (1983);11Brunner, J. J. (1985) ..Brunner y Flis-

fisch analizan al academico profesional como un tipo especificode intelectual, indagando sobre el conocimiento de las condi-

ciones concretas que enmarcan el desarrollo de la actividad

intelectual. En este sentido, consideran que al estudiar al

intelectual y sus actividades no se puede prescindir de estu-

diarlo inserto en una determinada divisi6n social del trabajo

y sus relaciones con determinados complejos institucionales

y organizacionales, es decir, la organizaci6n de la cultura,

11 Originado en reflexiones sobre intelectuales y univers idad en e lperiodo de la

ultima dictadura chilena.

42 6

LA PROFESI6N ACADEMICA COMO OBJETO DE ESTT)DIO

r1)'

ya que los intelectua1es, sus activida.des Y los se~tidos de

ellas son inseparables de las modahdades especlficas de

organizaci6n de 1a cultura. , .Partiendo de una revisi6n de la literatura con propositoe

analiticos, los autores identifican dos tradiciones pri.nci~ales

en los estudios sobre intelectuales. La primera, adJu?icadaoriginalmente a Weber,· realza la posici6n dife,rencl~l,del

intelectual en la cultura y usa como referentes sistematicos

la escolaridad y Ia ocupaci6n. Weber

entiende por intelectua1es un grupo de hom~res q,:e, en virtud

de su poculiaridad, poseen un acceso especial a ciertos Iogros

considerados como "valores de la cu1tura" y quienes usurpan2en consecuencia, elliderazgo de una comunidad de eultura.'

En cambio, la tradicion gramsciana hace mas signi~cati-

va la posici6n diferencial del intelectual con, :elaclO~ al

poder, Usa como referentes sisteni~ticos la ~unclO~,del inte-lectual como productor de idsologiaa y su msercion en las

luchas de hegernonia que se libran en la sociedad. En con-

traste con la posicion weberiana, Gramsci afirma que

todo grupo social que surge sobre la base o~i,ginal d~ u_na

funci6n esencial en el mundo de 1a produccion eco,nomlCa

establece junto a el, organicamente, uno 0 mas tipos de

intelectuales que Ie dan homogeneidad no s610en e1campo'1· lit' 13econ6mico, sino tambien en el SOCIaYpo ICO.

Una tercera tradici6n es la que analiza a los intelectuales

como elite modernizadora, y entre otros, incluye a Parsons.Desde la perspectiva deestos autores, generalmente cuan-

do quienes se identifican a S 1 mi~:nos co~o. intelectualesintentan reflexionar sabre su funcion y actIvldad, 1 0 . hacen

apelando a elementos de la tradici6n weberiana. P~ro ~uan-

do la relaci6n con el poder comienza a ocupar la~ pr,mclpales

reflexiones sobre si mismos, por 1 0 general es indicador de

12M Weber (Gerth y Mills,eds.), From Max Weber.:Enseos« inSo~iology, Nueva

York O~ford University Press, 1965, p. 176 (citado en Br~nner Y . Elisfisch, p. 28).1 'i A. Grameci, La [armacicn. de los inteleciuales, Mexicc, Grija lbo, 1967, p. 21

(citado en Brunner y Flisf isch, p. 28) ,

42 7



L U ctA B . G A R Ci A

situaciones problematicas, Ajuicio de ellos, el analisis socio-

logico tiende a pasar por alto (illhecho de que las visiones de

los intelectuales sobre S 1 mismos, ala vez que enfatizan esa

posici6n diferencial en la cultura, la justifican apelando al

contenido propio 0 intrinseco de La actividad que realizan;

imageries que al ser presentadas socialmente intentan darlelegitirnidad a la situaci6n especifica del intelectual, 0 a cier-

tas reivindicaciones frente a la sociedad y el poder politico.

De esta manera abordan el analisis de la universidad

como una de las instituciones mas importantes en la confer-

maci6n del campo cultural, y de los academicos profesionales,en tanto sector intelectual vincula do con ella. Dos dimen-

siones intervienen para tal cometido: la certificaci6n eduea-

cional (relaciones universidad-medio social) y la profesiona-

lizaci6n academica (la universidad como medio interno).

Desde Ia perspectiva de Brunner (1985) "la transforma-

ci6n mas importante que experimenta la universidad moder-na -yque es un momenta constitutivo de esa modernidad-

es la conformaci6n de un mercado academico" (p. 6). Pero

junto al surgimiento dela profesi6n academics, otras dina-

micas han contribuido a otorgarle su peculiar identidad a la

universidad moderna, tales como la burocratizaci6n anar-

quica, la masificaci6n y la politizaci6n; si bien hay que tener

en cuenta las diferentes y desiguales formas en que la

universidad en America Latina fue enfrentando la evoluci6n

de su modernizacion. Para este autor, entre otros, entender

el debate de la universidad en el contexto de America Latina

supone necesariamente un doble esfuerzo de comprensi6n; porun lado, analizar las visiones ideo16gico-normativas y politi-

cas del cambio social y del futuro que se busca construir para

Launiversidad, es decir, los modelos de universidad-desarrollo,

AI respecto distingue dos matrices -la de la modernizaci6n

y la que se constituye como matriz critica para superar la

dependencia- que han presentado sus correlatos de proyec-

tos de universidad acorde con las circunstancias nacionales

y el estilo de desarrollo prevaleciente en cada pais. Por otro

lado, se requiere atender a la correspondencia entre los

modelos de cambio postulados y las transformaciones socia-

les efectivas.

42 8

LA PROFEsr6N ACADEMICA COMO OBJETO DE ESTUDIO

La sociologia de la universidad que de,sarrol1~n ~runner

yFlisfisch (1983) en 10 tocante a la pr~f~s~on academics parte

de recuperar un nivel general del ~~a~sls de.las profeslOn~sen el marco de un sistema de division social del trabajo,

atendiendo a la dualidad entre hombres y estructuras. Este

fen6meno de doble cara implica que, por un lado, la

profesi6n es un conjunto de posiciones ~~finidas formalmente

en la sconomia. La peculiar de estas posicumes, ex:~1caso de las

profesiones, es que ellas gozan de una gran estabilidad, p~;ma-

nencia y especificidad [... ]. Por otra parte, una profesion es

tambien el conjunto de hombres y mujeres que en un momen~o

determinado son reconocidos comomiembros de ella, a traves

de los mecanismos de acreditaci6n vigentes (pp. 171-172).

AI eonjunto de posiciones 10 denominan "mercado profesio-

naY', aunque reconocen que la creac.i6n de ~u~vas y el ~roceso

de ocupaci6n y vacancia suele seguir una logica muy diferen-te a la del mercado clasico. Hablar de mercado en el caso de

las profesiones supone que, a) las posiciones pueden ser e~.

casas en relaci6n con el total de los profesionalee; .b)la prol?laprofesi6n astablece una jerarquia entre las posiciones, asig-

nando diferenciales de prestigio, 1 0 eual ~~nera consecuen-

cias respecto a la deseabilidad ~e las posiciones, y.c! la ocu-

paci6n de posiciones vacantes tiende a ser eompetitiva.

AI conjunto de hombres y mujeres que son mleI?bros de

una profesi6n 1 0 designan con la noci6n de "~omumdad pro-

fesional". Los rasgos que la definen son, en pr:mer lugar, ~na

"creciente independencia respecto a las autondades pohtl~~Sy administrativas". En segundo, los miembros de la profes~o?-

controlan tanto el personal que la conforma. como las pOh~l.

cas de promoei6n y ascenso que les son aplicables. Ade~as

existe "autonomia respecto a las normas que rigen el adies-

tramiento y desempefio de sus miembros, sea resp.e~t? a las

exigencias de certificaci6n formal co~o en las poslb.ihd.ad~sque las normas 0criterios de svaluacion otorgan al dlstnbUlr

t· . "A todo esto se agrega la existencia de un "ethospres IglOS . .' , dprofesional a control social sobre la mcorporaclOn e nuevos

miembros que posibilita una horoogeneidad de val?.res e?trelos integrantes de una profesi6n". Y se suma tam bien Ia Idea

429



LUcIA B. GARCiA

del deber profesional, es decir, una "ideologia elitista del

deber de actuar en bien de otros" que no pertenecen a la

profesi6n, en 10 cual se basa la reivindicaci6n de Ia autono-

mia e independencia de las profesioneg, Es de notar que en

esta delimitaci6n de la profesi6n los autores recuperan la

tradici6n weberiana.lC6mo caracterizan entonces la profesi6n academics? Lo

caracteristico de ella -yhacen expreso que esto seobserva

en las sociedades industriales maduras- es que "se estruc-

tura en terminos de una interrelaci6n peculiar entre merca-

do academico y comunidad academica", La describen comosigue:

a) [...Jconstituye un sistema de competencia por prestigio

entre academicos, y de distribuci6n de prestigio entre acade-

micos realizada por la propia comunidad. b) EI mercado

academieo se compons de posiciones academicas, definidas

formalmente al interior de universidades y jerarquizadas

s~gun pres.tigios diferenciales asignados tambien por la pro-pia comunidad, c) Los procesos de vacancia y ocupaci6n devacantes se regulan por la competencia por posiciones entreacademicos ypor la competencia por academicos entre unive-sidades''" (1983, pp. 172-173).

A su vez, definen al academico profesional con estas pala-bras:

t:n academieo profesional es simplemente una persona que~ve d~ha~;r docenc~aen Ia :nsefianza superior, 0 de hacer

mvestigacion en sentido amplio [...]0deambas cosas a la vez.[...] e1empleador por excelencia del academico profesional hallegado a ser la universidad. Contemporaneamente son lasuniversidades quienes estructuran y de quienes de~ende Iademanda de trabajo en el mercado de trabajo academico. [...JEsa es la regIa general en America Latina, sin perjuicio deque el problema del mercado ocupacional para el academicosea un asunto relativamente mas complejo (1983, p. 330),

. 14 Los autore~ raconocen que en esta de sc ripc i6n c la siea s iguen a Caplow y Me

Ge, The Acadenuc Marketplace, Nueva York, Science Edi tions. 1961. .

430

L A P R OF ES I6 N A C AD EM IC A C OMO OBJ ET O D E E ST UD IO

Brunner y Flisfisch sostienen que la profesionalizaci6nacademica en los paises capitalistas perifericos constituye

un fen6meno implantado, a diferencia del capitalismo cen-

tral donde la profesi6n academics es un producto aut6ctono

(que denominan "modelo clasico"). La tesis de la implanta-

ci6n supone que existe un esfuerzo sistematico -politicas,estrategias, metas-por transformer Ia profesi6n academica

tomando como modele el de las sociedades centrales; en

consecuencia califican de "tardios" a dichos procesos, tal el

caso de America Latina. Las circunstancias hist6ricas que

los circundaron se vinculan con la ideologia desarrollista, el

enfasis en la planificacion nacional y educativay la necesi-

dad de un desarrollo cientifico-tecno16gico aut6nomo.

Sin embargo, esos procesos no operaron en el vacio, puesto

que entraron en contradiccion con los sistemas tradicionales

de educaci6n superior existentes, generandose una dinamica

particular y nueva, cuyos resultados =segun hipotesis deFlisfisch (1982)- difieren en forma censiderable tanto del

modelo primitivo de referenda tradicional, como del modelo

a implantar, que cumple una funci6n paradigmatica, sea

porque se 10 rechace 0 porque define un patr6n deseable.

No obstante el clima ideo16gico"antidependentista" impe-

rante en ese entonces, Flisfisch encuentra algunos rasgos

positivos respecto a Ia "implantacion" en las humanidades y

ciencias sociales, en las que se producen los "primeros encla-

ves de profesionalizaci6n academica emergentes dentro del

sistema tradicional", a partir de los cuales se originaran

"reales tradiciones de producci6n de saber '"" (1982, p. 34).Otro de los rasgos favorecedores de dicha implantaci6n pro-

viene de la "ideologia deautonomia universitaria", uno decuyos

principales portadores ha sido hist6ricamente el movimientoestudiantil. .

No resulta sorprendente que si bien la profesi6n academi-ca en America Latina como objeto de indagaci6n cientifica

presenta un desarrollo que todavia nos atrevemos a caracte-

rizar de incipiente, en estos ultimos afios comienza a cobrar

una presencia mayor. Garcia Guadilla, C. (1997) observa que

15 Como ejemplos se mencionan la historia en Chile y la filosofla en Colombia.

431

-t



LuciA B.GARCiA

la agenda de transformaci6n que desde finales de los ochenta

se ha difundido en la regi6n =con sus t6picos de evaluaci6n

de la calidad academica y de 1a produccion y transferencia

cientffico-tecnologica=- consti tuye unode los cambios mas

visibles en las tematicas de investigaci6n sobre educacion

superior de los ochenta a los noventa.En este sentido, hemos revisado una serie de trabajos

desarrollados en la decada de los noventa, algunos de los

cuales se sustentan en avances empiricos de investigacion,

que van construyendo una interesante masa critic a en el

tema. Recuperaremos s610 tres estudios -por cuesti6n de

espacio=- referidos al caso de Mexico y que estimamos re-

presentativos de los ultimos aportes al campo.

Gil Ant6n, et al. (1994), al investigar de manera compara-

tiva los procesos de conformaci6n del cuerpo academico

nacional en Mexico y su situaci6n en 1992, hallan que solo

una proporci6n de los academicos cumple con las condicionesde profesionalizaci6n que se ajusten con la noci6n de merca-

dO.16 De ahi que manifiestan que, sin desconocer la Impor-

tancia analitica de las nociones de profesi6n y mercado

academico, han "dirigido el estudio a la reconstrucci6n de los

procesos de genesis y' evoluci6n del cuerpo academico del

nivel superior en Mexico y a las modalidades de su situacion

actual" (p. 41), sin recortar el universe de estudio a priori,

dado la falta de antecedentes descriptivos elaros y confiables.

En el ensayo elaborado por Pacheco Mendez (1997a) acer-

ca de las modalidades que adquiere la estructura profesional

insti tucionalizada en la sociedad actual, la autora planteala

necesidad de superar el analisis clasificatorio meramenteideo16gico 0 polit ico de los estudios realizados, adoptando

una perspectiva sociocultural de analisis de las profesiones,

10cual supone identificar elementos, condiciones y procesos

que hist6ricamente Ie dan sentido. Su propuesta metodolo-

gica sobre la constituci6n de los campos profesionales con-

templa identificar Ia presencia y confrontaci6n de intereses

16 Una situac i6n similar se da en Brasil, pues s61030 % de los encuestadoscumple con dos de los requisites del modelo tradicional 0 clasico: empleo de tiempocomplete y grado doctoral. Vease S. Schwartzman yE. Balbachevsky, "The Acade-mic Profession in Brazil" , en P. Altbach (1996).

432

LA PROFESr6N A CA DEM IC A C OM O OBJETO DE ESTUDIO

(acercandose a Bourdieu) a 10largo del tiempo. El campo de

conocimiento cientifico, e1campo profesionaldemarcado por Ia

coyuntura sociohist6rica e insti tuciona1, e1campo social y el

laboral constituyen los componentes implicados para definir

el profesional, su ejercicio y su practica. Con este encuadre,

analiza en otro ensayo la profesionalizaci6n de la actividadde investigacion en Mexico (pacheco Mendez, 1997b), anali-

zando la perspectiva de los valores sociales y cientificos que

se ponen en juego en su evaluaci6n.

Desde un punto de vista socioantrop16gico con base en

trabajos empiricos de indagaci6n sobre comunidades aca-

demicas de la UNAM, Garcia Salord (1996 y 1999) aporta

un enfoque novedoso y sustentado teoricamente sobre la

carrera academica y su evaluaci6n. Estudiando los tiem-

pos academicos a traves de las diferencias entre los tiempos

estatutarios y los reales, 1a autora pone en evidencia que,

en e1registro de la his tori a y su significacion sociol6gica,1a carrera academics no·se estructura como una trayecto-

ria -un principio, un recorrido posible y un fin estableci-

do-, sino que en la logica de la historia Ia carrera

academics responde mas a un itinerario biografico, al cua1

pudo arribar reconstruyendo historias de vida.

Algunas consideraciones acerca de los estudios

de la profesi6n academica en el contexto

de la universidad latinoamericana

A partir de las decadas de 1970y 1980comienza unarevisioncritic a a los paradigmas de las ciencias sociales -tanto del

positivismo funcionalista como del marxismo y elinteraccio-

nismo=- con el proposito de encontrar nuevas maneras de

teorizar. En este sentido, las contribuciones de la historia

oral, una de las "herramientas del trabajo antropo16gico

clasico", irrumpen con nueva fuerza pero quiza con mayor

autoconciencia de sus posibilidades y limites (Santamarina,

C., y Marinas, J.M., 1993).

433



LUC iA B. GARC iA

Bertaux (1993a) propone recoger historias de vidas no s61.0

como una nueva practica empirica, sino como una redefini-

ci6n paso a paso de la totalidad de las. aproxim~ciones a l~practica sociologica. Esto supone cuestionar no solo la tradi-

ci6n positivista de la sociologia empirica, sino tambien ~as

provenientes de otras corrientes filos6ficas que ?an sidohegem6nicas, como el marxismo y el estructurali~mo. La

perspectiva cualitativa que propone este autor sostlen~ q,ue

existe otra via para la practice sociologica: un camino distin-

to para hacer observaciones, otra forma d~ analizarlas, ot.ra

manera de escribir; un acceso directo al myel de las relacio-

nes sociales que constituyen 1a verdadera sustancia del

conocimiento sociologico. En suma, otra forma de definir la

relaci6n entre sociologia y sociedad. Desde su punto de vista,

la sociologia en la actualidad estaria atravesando un periodo

pluralista donde ninguna noci6n, teoria, ,~etod.o, .pueden

pretender la hegemonia, 10cual favorece el fl.o~eclmlento ~ela imaginacion socio16gica"y revela que la CriSIS de la SOCIO-

logia no fue mas que Ia de sus paradigmas hegem6nico~.

Pensamos que el sentido de modestia intelectual manifes-

tado por Weber un siglo atras, ante la realidad a .la. cual

suponia infinita e inconmensurable para el entendimiento

humano, debiera constituir un principio orientador respecto

de 10 que hoy podriamos entender como "el papel de 1a

realidad y de la teoria en la construcci6n del objeto de

estudio" (Bravo, V., 1997, p. 26).Bertaux introduce la expresi6n "perspectiva biografica"

(1993a) en lugar del metodo delos relatos devida, y en ~al,sen~i-

do realiza una apuesta al futuro que expresa una hipotesis:

el investigador que comienza a recoger relatos de vida, ere-

yendo tal vez que utiliza una nueva tecnica de observaci6n

dentro de unos marcos conceptuales y epistemo16gicos inmu-

tables, se vera paulatinamente llevado a cuestionar, uno tras

otro, dichos marcos (p.152).

Se trata entonces no de la mera adopci6n de una nueva tee-

nica, sino de la construeei6n progresiva de una nueva prac-

tica sociol6gica, una nueva perspectiva que, entre otras cosas,

permita reconciliar la observaci6n y la reflexi6n.

434

L A P R O FE SI6 N A C AD EM fC A C OM O O BJE TO D E E ST UD IO

En una linea similar, Bartolucci (1997) adopta en su

investigaci6n un enfoque cualitativo, entendiendolo como

una propuesta analitica que -ideada por Weber y recreada

por Shutz- constituye "un modo especifico de encarar el

mundo empirico; este tiene Ia virtud de extraer las tonalida-

des cualitativas del dato, aun usando fuentes cuantitativas".Y afiade que "para un conocimiento cualitativo de los hechos

sociales, Ia interpretacion de la acci6n y su encuadre desde

el punto de vista del actor debe ser mantenido, como dice

Shutz, con todo su vigor" (pp. 46-52).

En sintesis, en este trabajo hernos tratado decontextuar que

el funcionalismo estructural ha ocupado un lugar de impor-

tancia en e1pensamiento socio16gico al intentar c1arificar el

papel de las profesiones en la estructura social. De ahi que

desarrollamos con mayor extensi6n las ideas de los principa-

1es representantes de esta corriente soeio16gica y tratamos

de dar cuenta de que sus orientaciones analiticas se han hecho-yestan=- presentes en la literatura que aborda la preble-

matica deIa profesi6nyel trabajo academico en la educaci6n

superior. En los estudios contemporaneos sobre laprofesi6n

acadernica, pareciera predominar un enfoque descriptivo de

las condiciones estructurales en que surge, se desarrolla y

entra en crisis la profesi6n academics (sesgo que comparte

con el analisis de otros grupos profesionales especificos).

A nuestro entender, un espacio vacio -0scasamente abor-

dado- en la investigaci6n y reflexi6n es Ia dimensi6n subie-

tiva y la recuperaci6n de la 16gica de las practicas, sin caer

por ella en la clasica dicotomia objetivo-subjetivo. Otra li-mitaci6n es e1 insuficiente examen de los procesos por los

cuales los acadernicos llegan a convertirse en tales, es decir,

e1estudio de sus trayectorias, En este sentido, ha side poco

frecuentada en la investigacion sobre academicos la noci6n

de campo, que permite recuperar la historicidad de las accio-

nes humanas individuales y subjetivas en la medida en que

estas se constituyen preiiadas por 10 colectivo y social. No

obstante, en la actualidad parece que asistimos a una multi-

plicidad promisoria de abordajes con nuevas aproximaciones

cualitativas que han ido abriendose paso lentamente en un

area de indagaci6n proclive al survey research.

435



L U ci A B . G A R C iA

Pero en definitiva, creemos que aun tiene vigencia aquello

que Weber denomin6 "relacion co n los valores", es decir, quesiempre que se opta por un tema de investigaeion y se cons-

truye un objeto de estudio, se hace "enfuncion de un sistema

personal de elementos referenciales, que si bien puede cons-

tituirse en una teoria, no dejan de representar un punta devista inieial valorativo" (Bravo, V., 1997, p. 27). Apostamos

a que las nuevas miradas socioculturales contribuyan a

recrear la importancia de un sujeto que 'todavia considera-

mos central en la configuraci6n del campo de la cultura: los

profesores universitarios como intelectuales con una trayec-

toria par conocer.

436

BIBLIOGRAFlA

ALTBACH,P., The International Academic Profession, Por-

traits offourteen countries, Princeton, The Carnegie Foun-

dation for the Advancement of Teaching, 1996.

BARTOLUCCI,J., "La modernizaci6n de Ia ciencia en Mexico.

EI caso de los astr6nomos", tesis de doctorado en Sociolo-

gia, Mexico, UNAM·FCPYS,1997.BECHER,T., "Las disciplinas y la identidad de los academi-

cos", enPensamiento Universitario, ana 1,num, 1,Buenos

Aires, 1993.

BEN-DAVID,J. y A . Zloczower, "Universidades y 'sistemas

academicos en las sociedades modernas", en M.VV., La

universidad en traneformacion, Barcelona, Seix Barral,

"1966.

--~, El papelde los cientificos en la sociedad. Un estudio

comparativo, Mexico, Trillas, 1974.

BERTA(JX,D., "De la perspectiva de la historia de vida ala

transformaci6n de la practica socioI6gica", en Marinas, J.M. yC. Santamarina, La historia oral. Metodoe y experien-

cias, Madrid, Debate, 1993a.

---,. "La perspectiva biografica: validez metodol6gica y

potencialidades", en Marinas, J. M. y C. Santamarina, La

historia oral. Metodos y experiencias, Madrid, Debate,

1993b ..BONVECCH10,C.,El mito de la universidad. Introducci6n,

selecci6n y notas, Mexico, Sigle XXI, (7aed.), 1997.

BOURDIEU,P." "EI campo cientifico", en Redes, num, 2, vol.1, Buenos Aires, CElfUNQll, 1994.

437



LUCiA B.GARCiA

BOYER, E., Una propuesta para la educaci6n superior del

futuro, Mexico, UniversidadFutura, UAM-Azcapotzalco y

FCE, 1997.BRAVO,V., "La construcci6n del objeto de estudio en Marx,

Durkheim y Weber", en V. Bravo, H.Diaz-Polanco, y M.

Michel, Teoria y realidad en Marx, Durhheim y Weber,Mexico, Juan Pablos Editor, 1997.

BRUNNER,J. J., Universidad y sociedad en America Latina:

un esquema de interpretaci6n, Caracas, CRESALC-UNESCO,

1985.BRUNNER,J. J. y A Flisfisch, A, Los intelectuales y las

instituciones de la cultura, Santiago de Chile, FLACSO,

1983.CLARK, B., El Sistema de Educaci6n Superior. Una visi6n

comparativa de la organizaci6n academica, Mexico, Nue-

va Imagen-Universidad Futura-UAM-A, 1992..

--...." Las universidades modernas: espacios de investiga-

ci6n y docencia, Mexico, UNAM-M.A . Porrua, 1997.

CORTINA,A, "Presentaci6n: El sentido de las profesiones",

en Cortina, A . y J. Conill, 10palabras clave en etica de las

profesiones, Navarra,Verbo Divino, 2000.

ELLIOTT,P., Sociologic de las profesiones, Madrid, Tecnos,

1975.FLISFISCH,A, "La profesionalizaci6n academica tardia: con-

ceptos para el estudio de casos", Documento de trabajo,

num, 170, FLACSO-Santiago de Chile, 1982.

GARCiAGUADILLA,C., "Integraci6n y contextualizaci6n en el

ambito de la globalizaci6n", en Perfiles Educativos, vol.

XIX,nums. 76-77, Mexico, 1997.GARciASALORD,S., "Los tiempos academicos: tiempos esta-

tutarios y tiempos reales", en Revista Mexicana de Inoes-

tigaci6n Educativa, vol. 1, num. 1, 1996.

---., "Evaluaci6n academica: recuento curricular y balan-

ce hist6rico", en M. Rueda y M. Landesmann (coords.),

i,Hacia una nueva culture de la evaluaci6n de los acade-

micos?, Pensamiento Universitario num. 88, Mexico,

CESU-UNAM,1999.

438

LA PROFESI6N ACADEMICA COMO OBJETO DE ES1'UDIO

GIL ANT6N, M., et al., Los rasgos de la diversidad.· Un

estudio sobre los academicos mexicanos, Mexico, UAM-Az-

capotzalco, 1994.GONzALEZCUEVAS, 0., "El concepto de universidad", en

Revista de la Educaci6n Superior, Mexico, ANUlES, vol.

XXVI(2), num. 102, abril-junio, 1997.GIDDENS, A, Emile· Durkheim. Escritos selectee, Buenos

Aires, Nueva Vision, 1993.

MERTON, R., "Estudios sobre Sociologia de la Ciencia", en

Teoria y estructura social, Mexico, Fondo de Cultura Eco-

nomica, 1964.

OLVERASERRANO,M. y G.Vidal de la Rosa, "La especializa-

cion del conocimiento", en Sociologica, afio 8, num. 23,

Mexico, UAM,1993.

ORTIZGUTIERREZ,P., "La formacion academico-profesional

en las instituciones universitarias. Origen y naturaleza",

enA.Diaz Barriga

y

T. Pacheco Mendez (coords.), Unioer-sitarioe: institucionalizaci6n academica y evaluaci6n,

Pensamiento Universitario, num. 86, Mexico, CESU-UNAM,

1997.PACHECOMENDEZ,T., "La institucionalizacion del mundo

profesional", en T. Pacheco Mendez y A Diaz Barriga

(coords.), La profesi6n. Su condici6n social e institucional,

Mexico, CESulMiguel Angel Porrua, 1997a.

---., "La investigacion universitaria como profesion (valo-

res sociales y cientificos en su evaluacion)", en T. Pacheco

Mendez y A Diaz Barriga (coords.), La profesi6n. Su

condici6n social e institucional, Mexico, CEsu/M. A . Po-

rrua, 1997b.SANTAMARINA,C. y J. M. Marinas, "Introduccion", en Pen-

samiento Unioersitario, afio 1, num. 1, Buenos Aires,

1993.TEICHLER,D., "New Challenges to the Academic Profession.

The Academic Profession in Europe", Rotterdam, Acade-

mia Europea Workshop, mimeo., 1996. ...

TENTIFANFANI,E., "Primer a Parte", en V. Gomez Campo y

E. Tenti Fanfani, Universidad y Profesiones. Crisis y

alternativas, Buenos Aires, Mifio y Davila, 1989.

439



L U ciA B . G A RC iA

VESSURI, H., "Perspectivas recientes en el estudio social de

la ciencia", en Interciencia, vol. 16, num, 2, Caracas, 1991.

WEBER, M., "Tipos de dominaci6n", en Econamia y Sociedad,

t. IV, Mexico, Fondo de Cultura Economica, 1944.

---;, La etica protestante y el espirita del capitalismo,

Mexico, Premia, 1981.--...." "La ciencia como profesi6n", en Ciencia y politico,

Buenos Aires, Centro Editor de America Latina, 1991.

440

ASISTENCIA TECNICA Y DISCIPLINAMIENTO.

EL BANCO MUNDIAL EN ARGENTINA

Alejandra Corbalaa *

INTRODUCCION

Este trabajo analiza 1arelaci6n entre el Banco Mundial (BM)l

y el gobierno argentino en el periodo 1990·1996. La intenci6n

de este analisis fue considerar el grado de protagonismo de

esta instituci6n en los Estados prestatarios y en el reordena-

miento del sistema capitalista. El mayor impulso -en elcampo

de la economia y de las relaciones internacionales-- a la amplia-

ci6n de procesos de concertaci6n y articulaci6n, tendientes a

gestar cierta coherencia en las reglas dejuego a nivel mundial,

nos condujo a intentar identificar algunas de las estrategias

mediante las cuales se fueron concretando dichos prop6sitos.Estimamos que el analisis de la actuaci6n del BM en Ar-

gentina podia facilitar la comprensi6n del papel de las ins-

tituciones financieras. Para ella tomamos como punto de

partida las propuestas emanadas del seno de la Comisi6n

* Fac ul tad de Cienc ias Humanas, Unive rsida d del Ce nt ro de la Provincia de

Buenos Aires, Argentina.1En realidad 10que hoy se conoce como Banco Mundial (EM) e s un conjunto de

d is tintas agendas e ins ti tuciones : e l Banco In te rnac ional de Recons truccion y

Fomento (BmF); la Corporaci6n Financiera Internacional (OFI); el Centro Interna-cional de Desarrollo (OlD); l a Agenda de Garant ia de Invers iones Mul ti la te ra le s

(AGIM); e l Fondo Mundial para e l Medio Ambien ts (FMMA), las cuales desempeiian

distintas funciones.



ALEJANDRA CORBALAN

Trilateral.s pues consideramos que esta Comision desempeii6

un importante papel comopropulsora e ideologa de los procesos

tendientes a la gestaci6n de dicha coherencia en las reglas de

juego. Los elementos que nos llevaron aprestar atenci6n a

dicha Comisi6n fueron por un lade la composici6n de sus miem-

bros y por otro los intereses por ellos representados. Mas tam-

bien sus trabajos expresan una sene de propuestas que no se

limitaban al reordenamiento de la economia, sino asimismo al

problema de la gobernabilidad, la cual ademas de tener una fuer-

te connotaci6n politica, se asocia con las formas devinculaci6n

y relaci6n, desnudando los procesos de dominacion y control.

La busqueda de coherencia, reconocida en el discurso tri-

lateral, en gran medida se apoyaba en la gestacion de nuevas

formas de relacion. No solo con aquellos agentes entre los

que existian ciertos consensos, sino con los que no se habian

dado consensos ni concertaciones previas. Los trilateralistas

reconocian la dificultad de los procesos cooperativos y con-

certativos aun entre aquellos actores entre los que existia

una base de intereses comunes, situacion que se complejiza-

ria cuando las relaciones a estab1ecer fueran de nuevo cufio

y con actores cuyos intereses fueran demasiado antagonicos,

al exigir el ejercicio de otras practicas.

Los intereses representados por los trilateralistas -en la

medida en que agrupaban a miembros de los grandes bancos

y corporaciones- corresponden a la esfera de los asuntos

privados. La fuerte evidencia de que dichos intereses estu-

viesen corporizados en instituciones como el BM nos indujo

a pres tar atencion a la "penetracion" y/o asuncion de dichos

intereses en organismos de esta natura1eza. Asimismo, los

2 Grupo que nac e e n los final es de los sesenta bajo el fue rte impulso de David

Rocke fe ller , f inanciero e stadounidense y pre sidente de l Chase Manhat tan Bankquien, entre otros, manif iesta lapreocupaci6n por el incremento de la competencia ,

especial mente entre EVA , Japon y Europa del Este. Parte de e stas inqu ie tudes dan

origen a d icha Comis i6n , c reada formalmente en jul io de 1973 . Ala misma se vanintegrando figuras importantes del mundo empresarial, academioo, editorialistas

y l ideres po li ticos de los paise s t ri la te ra li stas que repre sentan los sec tores de e li tede e stos paise s. En sus inicios part ic iparon los gobie rnos de Belgica , Dinamarca ,

I rlanda , Franc ia , Alemania Occidental , I ta lia, Luxemburgo, Holanda, Noruega yGran Bretaiia, ademas de Japan YEVA . Tambien se integran o tr as comis iones,

consejos y organizaciones de existencia previa como el Consejo de Relaciones Exte-riore s, e l Circulo Bilderbe rg, que nac e del Consejo en 1954 e inciuye a repre -sen tantes de importan te s t ra snac ionales : IT!', AT!', Gene ra l Motors , Gene ra l

Electric, Alben Chemical, Fia t, Exxon, Shell, Mobil.

44 2

ASISTENCIA TECNICA Y DISCIPLINAMIENTO. EL BM EN ARGENTINA

asuntos privados que habian penetrado en la esfera publica

como asuntos de Estado, especialmente durante el apogeo del

Estado de bienestar, tienden a desplazarse hacia una esfera

regida por "gobiernos y liderazgos colectivos", Este cambio se

sustenta en propuestas que privilegian, en los escenarios inter-

nacionales, acciones cooperativas en gran parte basadas en la

teoria de los juegos y eli la interdependencia econ6mica. Tam-

bien estaba presente la preocupacion por el problema de la go-

bernabilidad, la cual si bien continuaba siendo un asunto de

Estado requeria que fuese asumido por y en estas otras esfe-

ras. De modo que tal cooperacion y concertaci6n ponia en rela-

cion a agentes de naturaleza diversa y presuponia 1apuesta

en marcha de nuevos mecanismos en dicha vinculaci6n.

El papel desempeiiado por el BM,especialmente desde los

ochenta, puede ser interpretado como parte de este despla-

zamiento y como una alteracion de las estrategias de vincu-

laci6n. Los procesos de dominacion directa de un Estado sobre

otro al perder hegemonia, van cediendo lugar a instituciones

decaracter colectivo, de modo que, por una lado, pierde fuerza

el Estado como actor decisorio importante en e1escenario

internacional, y por otro, aparecen muchas otras instancias

de intermediacion que reconfiguran los modos de relacion,

Ello sin embargo no impide 1apersis- tencia del predominio de

ciertos estados sobre la gran mayoria de los restantes. Aun-

que tal dominio se asienta mas en la capacidad de imponer

ciertas reglas de juego que en la imposici6n absoluta. Los

procesos politicos se manifiestan mediante una serie de

mecanismos de negociacion que ponen en escena rupturas,

avances, retrocesos, concesiones, chantajes, coerciones. Escasi un juego permanente de presiones y contrapresiones

ejercidas en diversos dominios y campos.En 1a medida en que -mediados por organismos como el

BM- se incrementa la influencia de intereses corporativos

en las esferas estatales de cualquier pais, se produciria una

intensificaci6n de la subsunci6n de los intereses estatales (de

cualquier tamaiio y grado de desarrollo) a intereses colecti-

vos/corporativos. Independientemente de que luego ciertos

estados -como es el caso del estadounidense-sean especial-

mente hegem6nicos sobre los restantes.

44 3



ALEJANDRA CORBALAN

Los programas de ajuste estructural, promovidos y finan-

ciados por el Banco Mundial desde los ochenta y concretados

en Argentina en la forma de shock -sobre todo en 1a decada

de los noventa-son parte de los mecanismos a partir de los

cuales los intereses del Estado argentino quedan subsumi-

dos a intereses corporativos. Tal subsuncion puede ser expli-cada recurriendo a ciertos argumentos trilateralistas. Entre

estos, la noci6n de interdependencia, la cual fue un argumen-to importante para incentivar los procesos cooperativos.

Promoviendo en primer termino una cooperacion entre las

regiones trilateralistas para que sobre el consenso construi-

do a este nivel, estuvieran en mejores condiciones de gestar

la deseada cooperaci6n con los paises subdesarrollados y los

socialistas. Independientements de que el interes prioritario

tuviera como referente la concreci6n de una mayor integra-

cion a nivel de mercado, reconocian que ello debia ser fuer-

temente acompafiado de un aumento en 1a coordinacion anivel politico." De alli que el primer paso deberia ser orien-

tado abuscar dicha coordinacion entre intereses similares.

En el analisis que realizamos, prestamos particular aten-

cion a las practicas que se ejercian y en otros casos se

sugerian, pues en la medida en que una estrategia es

modes constantes y persistentes de organizar las practicas[...] lineas de acci6n objetivamente orientadas que obedecena regularidades y forman patrones coherentes y socialmenteinteligibles, a pesar de no seguir reglas conscientes 0 estardirigidas a fines premeditados fijados por un estratega"

nos ofrece 1aposibilidad de observar nuevas reconfiguracio-

nes en las acciones de los sujetos y en las instituciones de

que forman parte.

Otro aspecto por el cual las propuestas trilateralistas nos

resu1taron significativas, fue su similitud con muchas de las

3 "Hacia un Sis tema Mone ta rio In te rnac iona l renovado", In forme del Grupo

Monetario Tr ilatera l a l Comite Ejecu tivo de la Comis i6n Tr ilatera l. Redactore s:Motoo Kaji, .catedratico de la Universidad de Tokio; Richard N. Cooper, proboste,

Univer sidad de Yale; Claud io Segre , banque ro , Par is . Cuadernos del ClDE, num,2.3, Mexico, mayo de 1978, 498 pp.

4 P . Bourdieu y L. Wacquant, Respuestas. Por una antropologia reflexiva,

Mexico, Grija lbo, 1995, p. 36.

44 4

A S IS TE N Cl A T EC N IC A Y D IS C IP L IN AM IE N TO . E L BM EN A R G EN T IN A

acciones y concepciones sustentadas por los organismos in-

ternacionales de credito en los procesos de ajuste estructural

iniciados desde los ochenta, 10 que nos induce a sostener que

el proyecto tri1ateralista fue el sustento principal del discur-

so neolibera1 de fuerte peso entre 1980-1990.

Para los procesos cooperativos, los trilateralistas consi-deraban que era sustancial que las decisiones partie ran de

nucleos concentrados =nucleos en los que supuestamente

existian consensos previos-, hacia nucleos mas amplios. Tal

proposicion, considerada en nuestro analisis, nos condujo a

prestar atencion a las formas de realizaci6n de la misma,

mas alla de que naciera de las preocupaciones de algunos

miembros aislados del establishment estadounidense.5

La propuesta trilateralista sobre la interdependencia tie-

ne como factor dinamico las presiones, orientadas a la incor-

poracion de manera mas totalizadora y sistematica de las

empresas trasnacionales y la banca financiers privada en el

sistema internacional y en los estados. Estos intereses, para

sustentar su expansion global, requerian contar con estruc-

turas estatales mas vinculadas a los intereses corporativos

privados que a los que habian sido mas favorecidos por las

concepciones de soberania estata1 y de la razon de Estado.

En este punto radicaria la complementariedad de la funci6n

y quehacer de los organismos internacionales de credito en e1

disciplinamiento de los estados y en 1al6gica de Ia expansiontrasnacional De modo que la mentada interdependencia se-

guiria manteniendo los niveles de asimetria y grados de

dependencia, aunque con otras modalidades y otras formas

de manifestacion, y permaneciendo vigente el prop6sito dis-ciplinador aunque este tienda a valerse mas de estrategias

asentadas en la violencia simbolica" y en 10 que Foucault

(1978) sostenia respecto de 1a gubernamentalidad.7

5 En dive rsos documentos se hace mend6n a David Rocke fe ller como uno de~os

prime ros preocupados por 1aneces idad de estab lece r nuevas f?rmas de relac ionentre los paises industrializados, 1 0 que 1 0 l leva a promover reumones y encuentros

que posteriormente daran origen a la Comisi6n Trila tera l.

6 P. Bourdieu, yL. Wacquant, op. cit. .7 M. Foucault, "La gubernamentalidad.", axposic ion realizada en el colegio ~e

Franc ia en 1978 , publ ic ada en R . Castel, J. Donzelot, M. Foucault et al., Espacws

de poder, Madrid, La Piqueta , 1981.

44 5



A } ,E JANDRA CORBALAN

En otras palabras, la capaeidad de "gobernar las mentali-

dades" que se autogobernaran a partir de recibir la "ense-

fianza" de una disciplina que se ensefia para que cada uno

se autodiscipline. Seria la formaei6n para: la autodisciplina,

que se asemeja mas a un recurso tecnicc, ya que entre sus

atributos destacan alta capacidad de adaptaei6n, una apa-rente autonomia -en la medida del alto eomponente meca-

nico que Ie confiere esa teenologia-, 10 que aproxima alaidea de disciplinamiento.

DISCIPLINARlZACION,OOPERAcroNE INTERDEPENDENCIA

En el discurso trilaterilatista el vocablo disciplinarizaci6n

es utilizado en el marco de los procesos cooperativos e inter-

dependientes. La referencia heeha en relaci6n can una dis-ciplinarizaci6n de la burocracia de los Estados-nacion,"

especialmente la de los paises subdesarrollados, nos indujo

a que prestaramos atenci6n hacia cuales serian los posibles

eaminos que se recomendaban para concretar mas adecua-damente estos prop6sitos.

El funcionalismo por partes les serviria de marco te6rico

referencial desde el cual irian sugiriendo aspectos mas opera-

tivos para la consolidaci6n de la interdependencia. Tal linea de

pensamiento les llevaba a decir que todos los asuntos nopueden

adquirir un principia de validez universal a nivel internacio-

nal, fundamentalmente por la diversidad de asuntos e intere-ses. Desde elreconocimiento de esta diversidad elios esbozaban

algunas pautas, que denominan "primeras aproximaciones",

"reglas empiricas", que serian puestas a prueba a fin de veri-

fiear su idoneidad para los procesos cooperatives.

Entre las "reglas empiricas" enunciadas para eoncretar la

disciplinarizacion de las burocracias estatales, se mencionaque este proceso

8 Ver siguientes documentos trila tera listas: ' 'Hacia un Sistema InternacionalRenovado", informe del Grupo de Trabajo Trilateral. Informantss: Cooper, Richard,Kaiser, Karl, Kosaka, Masataka. Consultor especia l: RobertRBowie. "La crisis dela cooperaci6n internacional". Informantes: Duchene, Mushakoji, Owen.

44 6

ASISTENCIA TECNICA Y DISCIPLINAMIENTO. EL BM EN ARGENTINA

debia ir acompaiiado de una voluntad politica para concretar-

10 junto can un disefio para instrumentarlo, la implementa-

cion de mecanismos para controlar dicha politica y ejecutarla

y ejercer represalias sobre aquellos paises que no se ajustaran

a los procesos de concertacion.

La concentracion en el funcionalismo y en la elaboracion

dereglas nos parecela mejor manera de alcanzar un progresotangible en un manejo mutuamente ventajoso de la interde-

pendencia internaciona1.9

Mas ella requiere confianza y buena voluntad entre las

naciones, dos ingredientes incipientes en los setenta, cuando

se efectuan los diagn6sticos trilateralistas.

Reconocian desinteligencias y desconfianza aun entre pai-

ses del mundo trilateral, 10 que les llevaba a presuponer que

"la confianza y la cooperaci6n con paises no trilateralistas

seria un camino poco sencillo. En este sentido sostenian que

la confianza podia lograrse si los asuntos se desagregaban

mediante estrategias descentralizadoras, si a la par eran

tratados por expertos, si se cambiaban los terminos de la

participaci6n y si existia voluntad politica para concretar los

acuerdos y establecer reglas para ser cumplidas",

En este marco, sostenian que "la cooperaci6n puede ser

realizada con la maxima efectividad a traves de instituciones

internacionales y regionales", en este sentido concluian que

"si bien puede necesitarse de nuevas institueiones en algu-

nas areas, el €mfasis general deberia centrarse en la adapta-

cion y en la reforma de las existentes tales como el Fonda

Monetario Internacional (FMI), el Acuerdo General sobre

Aranceles de Aduanas y Comercio (GATT por sus siglas eningles), la Organizaci6n de Cooperaci6n y Desarrollo Econ6-

micos (OCDE),El Banco Mundial y sus afiliados, y otras";'?

Argumentos que reforzaron nuestro interes pOI'e l BM y las

estrategias ejercidas pOI'dicha instituci6n para alcanzar los

anteriores cometidos. .

9 "Hacia un Sis tema In te rnac iona l Renovado". In forms del Grupo de Traba joTrila tera l. Informantes: Cooper, Richard, Kaiser, Karl, Kosaka, Masataka. Consul-

tor especial: Robert R . Bowie, en Cuadernos del CIDE, num, 2-3, Mexico, mayo de

1978, pp. 127-128.10 Ibid., p. 131.

44 7



ALEJANDRA CORBALAN

Algunos precisiones sobre el concepto

de disciplinamiento ,

Disciplinamiento, en su sentido mas lat9, supone domina-

cion, por tanto, sometimiento.

Para Foucault, el poder tiene una eficacia productiva en

la medida en que al ser humane y mas propiamente a sucuerpo se 10 puede adiestrar para determinados fines. No es

solo reprimiendo sus funciones y potencialidades como se

ejerce el poder. El control opera sobre los sujetos de modo

que puedan producir 0ser utilizados para otros fines. En este

sentido el objetivo es tanto politico como economico (Fou-

cault, 1993).

Foucault sostenia que, en el transcurso de los siglos XVI I

y XVII I , emerge una nueva tecnologia politica en torno a

cuestiones vinculadas al poder.

De un lade existe la tecnologia de 1adisciplina, Disciplina es,en el fondo, el mecanisme del poder por elcual alcanzamos a

controlar en el cuerpo social hasta los elementos mas tenues

por los cuales llegamos a tocar los propios atom as socia les,

eso es los individuos, Tecnicas de individuacion del poder.

Como vigilar a alguien, como controlar su conducta, su com-

portamiento, sus aptitudes, como intensificar su rendimien-

to, como multiplicar sus capacidades, como colocarlo en el

lugar donde sera mas util, esto es 10 que es a mi modo de ver,

1 d· inli 11a ISC1P mao

La capacidad de disciplinarizacicn que puede ejercer el

Estado sobre sus burocracias esta fuertemente vinculadacon los niveles de autonomia yautoridad deque dispone para

formular y concretar las estrategias disciplinadoras. La dis-

ciplinarizacion de la burocracia estatal, si bien forma parte

de las funeiones reconocidas del Estado, no necesariamente

supone que este tenga capacidad para disefiar y ejercer esta

funci6n con autonomia de intereses que podrian llamarse

"extraestata1es".La deserci6n del Estado, en el caso argen-

tino, para la satisfaccion de algunos derechos ciudadanos y

para e1ejercicio de sus acciones de gobierno, previsiblemente

11M. Foucault, Las redes del poder, Buenos Aires, Almagesto, 1993, pp. 58·59.

44 8

A S IS TE NC IA T EC N IC A Y D IS C IP L IN AMI EN TO . E L BM EN A R G EN TI NA

encubre una forma de disciplinarniento cuyas estrategias

pertenecen a aquellas "reglas empiricas" gestadas en "otros

espacios de poder". En definitiva 10 que subyace es el inte-

rrogante sobre la forma y medida en que elEstado argentino

pudo 0 no definir por sf mismo las estrategias para ejercer

procesos disciplinadores sobre su burocracia.

Las transformaciones de los aspectos administrativos,

organizativos y procedimentales de los organismos del Esta-

do argentino fueron producto de un proceso concretado con

una fuerte intervenci6n por parte de los organismos finan-

cieros, entre los que destaca el BM. Algunas estrategias se

sustentan en mecanismos que se apoyan en el alto poder

simb6lico de dominaci6n ejercido desde este, pero que no se

gestan desde el Estado, sino desde un espacio "supraestatal",

tornando de ese modo a este en el destinatario directo del

diseiplinamiento. Una de las manifestaciones es por medio

de acciones coactivas, la falta. de acuerdo tiene como contra-

cara la amenaza de la represalia, la cual asume distintos

modos de manifestaci6n.

Cooperacioti y voluntad politica

Los trilateralistas planteaban que una condici6n necesaria

para la implementaci6n de procesos cooperativos era la

existencia de una voluntad politica. Tal vo1untad politica se

restringiria a la de ciertos "hombres clave" dentro de la

estructura de gobierno de un Estado-nacion, 10 que supone

una fuerte centralizaci6n en el ejereicio de 1a misma, almenos en las etapas iniciales.

En los programas de ajuste estructura1, ejecutados en

Argentina, se observa una fuerte centralizaci6n,prevale-

ciendo una concepcion de disciplina que se ejerce desde un

nucleo, visi6n similar al proceso disciplinador de las prime-

ras etapas del capitalismo descritas por Foucault, a traves

de un modele panoptico. Adosado a este modelo, que fue

declinando, se incorporan funciones y mecanismos discipli-

nadores, en una serie de otras instituciones (escuelas, hos-

44 9



ALEJANDRA CORBALAN ASISTENCIA TECNICA Y DISCIPLINAMIENTO. EL BM EN ARGENTINA

pita1es, ejercitos, etc.) puestas al servicio de tal proceso

(Gaudemar, 1991; Foucault, 1981).

EI proceso de disciplina propuestopor los trilateralistas

y asumido por 1avision neoliberal, mas alia de que pueda in-

corporar rasgos de cada uno de los dos ciclos, puede mostrar

1a aparici6n de nuevos mecanismos y tambien acoples dife-renciales. En parte porque en principio no se trata s610de una

disciplina a imponer sobre la fuerza de trabajo, sino de una dis-

ciplina a ejercer sobre los Estados-naci6n que no involucra

necesaria ni directamente la disciplinarizaci6n de la fuerza

de trabajo. Las acciones gestadas por el Estado argentino

para elaborar una nueva ley lab oral no resultan ajenas a

estos procesos disciplinadores del Estados-naci6n, mas

dicha ley se enmarca dentro de las tecnicas disciplinarias

orientadas ala producci6n de bienes 0 servicios. La disci-

plinarizaci6n del Estado parece ser de otra naturaleza.·

Marglin (1978) establece una distinci6n entre tecnicas

disciplinarias y tecnicas productivas, en los procesos de

disciplinarizacion. En este sentido advierte sobre la multi-

plicidad de articulaciones posibles entre ambas; las primeras

mas sustentadas en practicas politicas (gobernabilidad y

gubernamentalidad), y las segundas en practicas economi-

cas (tecnicas de trabajo). De modo que podria afirmarse que

las tecnieas disciplinarias se asocian con los procesos de

legitimaci6n de la dominaci6n. En este sentido cabr.ia pre-

guntarse en que condiciones se producen los procesos de

legitimacion 0 de imposicion de ciertas reglas de juego.

Al respecto Gorz sosten.ia que

De heche, algunos de los aspectos y mecanismos seiia1ados

por Gorz han sido retomados en el proyecto de disciplina-

miento sugerido por los trilateralistas, pues se evidencia

cierta coexistencia de distintas tecnicas de dominacion, en

los que el BM -como instrumento de intermediaci6n- contri-

buye a concretar procesos disciplinadores, derivados de losprop6sitos esbozados por los trilateralistas y expresi6n delproyecto neoliberaL .

Estructuras estructurantes para losprocesosde disciplinamiento

El disciplinamiento de los estados en gran medida se asienta

en la transformaci6n de los aspectos administrativos/orga-

nizativos y procedimentales de sus 6rganos de gobierno. La

disciplinarizacion tendria por finalidad producir estas ade-

cuaciones y transformaciones de acuerdo con ciertos princi-

pios; mas el Estado continua desempefiando un papel activo

y fundamental en el disciplinamiento de la fuerza de trabajo

que se desenvue1ve dentro de sus fronteras, preservando su

capacidad de control y dominaci6n.

En el proceso de disciplinarizaci6n estatal estan implica-

dos procesos coactivos, algunos de forma mas explicita como

la represalia y otros ejercidos por caminos mas persuasivos.

En esta presentaci6n nos interesa trabajar mas sobre los

segundos, los cua1es apelan a estrategias de dominaci6n mas

simbolicas que directas. Por esto es que comenzamos por

preguntarnos c6mo intereses privados de un grupo (intere-ses trilateralistas) son incorporados a instancias de gobierno

(Estados-nacion, organismos e instituciones internaciona-

les). ;,Que circunstancias se implican con "la disponibilidad"

para aceptar estos principios provenientes de intereses par-

ticulares como principios generales para un co1ectivo social?

En otras palabras, lc6mo se producirian sobre ese colectivo

social procesos de aceptaci6n y/o imposici6n de principios de

visi6n y clasificaci6n?

La parcelacion y especializacion de las tareas, la escision

entre trabajo intelectual y trabajo manual, la monopolizaci6n

de la ciencia por las elites, el gigantismo de las instalaciones

y la centralizaci6n de los poderes que de ella se deriva, nada

de todo esto es necesario para una reproducci6n eficaz. Es

necesario, ala inversa, para la perpetuacion de la dominacionit li 12capi a ista.

12 Jean P. de Gaudemar, "Pa ra una genea logia de las fo rmas de d iscipl ina" , enCastel, Donzelot, Foucault etal., op. c a . , p. 110.

45 150



ALE JANDRA CORBALAN

Mas alla de que Bourdieu sostenga que las estrategias nosiguen reglas conscientes y no estarian. dirigidas a finespremeditados f i iodoe por un estratega, el proyecto trilatera-

lista se baso en "reglas ernpiricas" aser experimentadas y

ejecutadas.

La capacidad que Bourdieu lereconoce al Estado de ser una

estructura estructurante," ;,podr:ia, por homologacion, ser

valida para los organismos financieros internacionales? ;,En

que medida estos organismos internacionales, a los cuales los

trilateralistas Ie asignaban un papel destacado en la conere-

cion de los procesos cooperativos entre intereses diversos, se

convertiran tambien en estructuras estructurantes, es decir

en instancias capaces de construir principios de vision?

Los principios de vision y clasificacion eonfiguran verdade-

ros sistemas simb6licos, que aunque se instituyan social y cuI-

turalmente -es decir, no devienen de una sumision mecanica

a una fuerza, ni son producto de un consentimiento consciente

a un orden-,presuponen la existencia de intereses que esten

dispuestos a invertir esfuerzos. En el caso de los trilateralis-

tas pareceria haber existido una voluntad para probar y

poner en march a las mencionadas "reglas empiricas".

AI respecto Bourdieu sostiene que

El mundo social esta sembrado de llamadas al orden quefuncionan comotales y para quienes esten dispuestos a per-cibirlas, despertando disposiciones corporales profundamen-te escondidas que no pasan por la via de la conciencia y elcalculo. Esta sumision a un orden social se concreta a partir

deestructuras estructurantes que sesinian en elorden delascreencias, 10 que las distingue del plano de la conciencia.

en la medida en que

Lasumision a un orden establecido es elproducto del aeuerdoentre las estructuras cognitivas que la historia colectiva(filogenesis)e individual (ontogenesis)ha inseritoen loscuerposyen las estructuras objetivas del mundo al eual se aplican.

13 P. Bourdieu, "Espi ri tus de Es tado", en Sociedad, Reoieta de! la Facul tad deCiencios Sociales, Universidad de Buenos Aires, 1996.

452

A S IS T EN C IA T EC N IC A Y D IS C IP L IN AM IE N TO . E L BM EN A R G EN T IN A

En el caso del Estado la

evidencia de las injerencias del mismo se imponen tan pode-rosamente porque ha impuesto las estructuras eognitivassegun las euales es percibido.l"

De alli que vale preguntarse cual ha sido la capacidad delBM para imponer estructuras cognitivas.

Estos principios de vision y clasificacion en gran medida

deben su eficacia al hecho de que se les asocia con un grado

de "coherencia y sistematizacion", el cualle es otorgado por

el mismo mundo social del cual provienen y que a veces solo

es aparente. De alli que los procesos de legitimaci6n y acep-

taeion de "principios de vision" no sean actos libres y reali-

zados con plena conciencia, "tienen sus raices en el acuerdo

inmediato entre las estructuras incorporadas, devenidas

inconscientes, y las estructuras objetivas", 15 10 que presupo-

ne unacuerdo prerreflexivo.Por otra parte el intento de "efecto de universal" que

desean adoptar estos "principios de visi6n" esta ligado con el

papel desempeiiado por sus agentes y el interes de estos por

dar forma universal a sus intereses particulares, 10 que en

cierto modo equivale a preguntarse, ;,por que se imponen

como principios hegem6nicos de vision?

En gran medida la respuesta estaria dada porque ocupan

posiciones destacadas, dominantes 0 hegemonicas en esas

"estructuras estructurantes" que pueden llamarse Estado 0

instancias de poder de intereses particulares configurados

como "universales", como 10 pueden ser los organismos finan-cieros internacionales.De alli que hemos seleccionado algunos mecanismos que

como "reglas empiricas" fueron utilizadas por el BM y otras

instituciones internacionales como formas que facilitan que

intereses particulares se fueran imponiendo como principios

de vision "universales" y hegemonicos en los asuntos de

Estado y como reglas de juego en el orden internacionaL

14 Op. cit., p. 68.15

Ibid" p . 71.

453



ALEJANDRA CORBALAN ASISTENCIA TECNICA Y DISCIPLINAMIENTO, EL BM EN ARGENTINA

Los procesos de enseiianza-aprendizaje

como estrategia disciplinadora

tico, permiten presuponer que las estrategias de control y

dominaci6n no se desplieguen apelando a1uso deIa violencia

ejercida por los aparatos tradicionales (policia y fuerzas

armadas). Las estrategias tan visiblemente coactivas fueron

dando paso a otras mas vinculadas al plano de una violencia

simbolica, mas embozada pero muy eficaz en terminos de la

adopci6n y/o imposicion de principios de vision, las cuales '

corresponden especialmente al periodo analiza do.

Nuestra intenci6n es destacar la graoitacion. de procesos

de enseiianea-aprendizaje en los proyectos de ajuste estrue-

tural que fueron implementandose en Argentina entre 1990

y 1996. En estos puede advertirse una fuerte presencia de

procesos de ensefianza-aprendizaje, no circunscritos a los

ambitos escolarizados y formalizados de educaci6n, que con-

virti6 a los agentes e instituciones del aparato burocratico

de Estado en aprendices potenciales y reales,

A fines de los sesenta, como parte de la guerra fria, las

estrategias basadas en el control militar y circunscritas a losespacios demarcados por 10 territorial van decreciendo y se

activan procesos de control ejercidos por otros caminos. AI

respecto se sefialaba:

En este punto vale la pena retomar la- idea de Foucault,

quien otorgaba a los procesos de aprendizaje un efecto disci-

plinador, asi, decia "el otro Iugar en el cual vemos aparecer

esta nueva tecnologia disciplinar es la educacion"." De he-cho, todo proceso disciplinador promueve nuevas practicas,

requiere la puesta en marcha de procesos de aprendizajes.

Si bien el BMotorga ala educaci6n un papel importante como

factor para el nuevo padr6n de acumulaci6n capitalista," y

recupera la noci6n de "capital humane", pareciera haber re-

currido a procesos de enseiianza en otrasinstancias alterna-

tivas a los sistemas de educaci6n formal. IS

En el caso argentino, cabe recordar que un elemento

crucial que produjo enormes transformaciones en los com-

portamientos politicos y sociales, tanto a nivel individual

como colectivo/institucional fueron las politicas de seguridadnacional y hemisferica fuertemente anc1adas en el terroris-

mo de Estado experimentado durante Ia ultima dicta dura

militar (1976-1983); politicas sustentadas centralmente en

el uso de la violencia fisica por parte del aparato del Estado.

De modo que partimos de la base de que los procesos de este

periodo constituyen un sustrato fuertemente instalado en la

sociedad argentina y operaron como un fuerte facilitador de

los procesos ejercidos por mecanismos mas persuasivos y

utilizados en Argentina durante los procesos de reforma del

Estado, los cuaIes, al instaurarse bajo un regimen dernocra-

Los mecanismos de control descansan cada vez menos sobre

1aposesi6n de un area territorial 0 incluso sobre e1monopolio

de una penetraci6n en una zona determinada, sino sabre el

monopolio de funciones (de gesti6n y de comunicacion), as!

como sobre un acceso privilegiado a los recursos seleccionados

en funci6n de su importancia estrategica.i"

16 M, Foucault, op. cit., p . 59.17 EI BM en uno de sus documentos de fine la educaci6n del s iguien te modo: "La

educaci6n es la piedra angular del erecimiento econ6mico y del desenvolvimiento

soc ia l y uno de los princ ipales media s para me jora r e1bienes ta r de los individuos .El la aumenta la capac idad product iva de las soc iedades y sus instituciones politi-c as, e con6micas y c ient if ic as y con tribuye para reduc ir la pobreza acrecen tando e lvalor y la e ficiencia del t raba jo de los pobre s y mit igando las consecuencias de la

pobreza en las cuestiones vinculadas a la poblaei6n, salud y nutrici6n [.. .] la

enseftanza de primer nivel es la base y su finalidad fundamental es dobIe: produciruna poblacion alfabetizada y que posea conoc imientos bas icos de a ri tmet ic a . .. "

(Banco Mundial, 1992).18 Convie ne re cordar que gra n part e de la a ctual polit ica de lBM en materia

educativa seorienta a Iareforma delossistemas educativos, por tanto ala educaci6nescolar izada. Ello no es casual ya que la instituci6n escolar como Iugar de aprendi-

zaje puede concretarse sobre un numero importante de personas,

La apelaci6n a la "reconversion", capacitaci6n y actualiza-

ci6nde los recursos humanos de las estructuras burocraticas de

gobierno pudo ser una estrategia que garantizara el desem-

pefio de funciones mas acordes con ciertos lineamientos de

politica. En estos procesos estaba implicita la idea de corre-

gir y transformar; suprimir viejas y producir nuevas conduc-

tas, estructuras y formas de organizaci6n, y una busqueda

de gobernabilidad con menor apelaci6n a una violencia rna-

19 F. Debuyst , "La interna lizacion de las r elac iones soc ia le s y las e st ra tegias

del centro hegem6nico", en Cuadernos Semeetralee, num, 2-3, Mexico, eros, 1978,

p.30L

454 455



ALE JANDRA CORBALAN

nifiestamente directa. La educaci6n en su sentido mas com-

prensible pudo haber sido valorada como un instrumento

adecuado a estos propositos,

Expertos y especialistas: nuevas enseiianies y otros saberes

El €mfasis puesto par los trilateralistas en los expertos y

especialistas en detrimento de los funcionarios politicos en

los procesos reguladores en el ambito internaciona1, comoel

interes manifiesto sobre la necesidad de reconversion de los

recursos humanos existentes en 1areforma del Estado, reva-

loriza el saber, mas un determinado saber y un tipo de perfil

de funcionario, que implicitamente autoriza y coloca en un

lugar de "ensefiantes" legitimados a sus portadores.

La capacidad de ensefiante se apoyaria en una sabiduria

tecnica cuya eficacia se sustenta fuertemente en la pericia y

la especializacion, adquirida por medio de una formaci6n

academica cuya matriz se localiza en ciertas instituciones y

universidades, y tambien construida por via de la experien-

cia y la practica: estas ultimas adquiridas por Ia participa-

ci6n en programas, proyectos y acciones ejercidos con el

financiamiento de organismos multilaterales 0 dentro de

ellos.

La importante fusi6n de la matriz formativa de este saber

especializado y tecnico facilito Ia existencia de marcos cornu-

nes de conocimientos, de similares "procesos de vision" y que

se condice, en gran medida, can las ideas trilateralistas

expresadas a prop6sito de aquellas nuevas "reglas practices"a experimentar para concretar los procesos cooperativos.

La especializacion crea cuerpos de conocimientos y marcos

intelectuales comunes entre los expertos de muchas naciones.

Se pueden construir coaliciones de especialistas a traves de

las fronteras nacionales en areas funcionales especificas,

mitigando el nacionalismo que, de otra manera, podria obs-

taculizar e1acuerdo internacional. 20

20 "El problema de las consultas internadonales", ibid., p. 428.

456

A S IS TE NC IA T EC N IC A Y D IS C IP L IN AMI EN TO . E L BM EN A R G EN T IN A

El experto, de este modo, es valorado comoeslab6n impor-

tante en la homologacion de principios de visi6n.

Gramsci, a1analizar 1anoci6n de hegemonia -concebida

como la primacia de la sociedad civil sobre la politica-,

sefialaba e1monopolio intelectual de la clase dirigente, y la

atracci6n que sus propios representantes suscitan en lasdemas camadas de intelectuales (Portelli, 1990). Otorgaba a

estos un importante papel en el control ideol6gico y como

medio para atemperar el pape1 de la sociedad politica, es

decir el de 1acoerci6n. La generacion de consenso, de algun

modo, se asentaba en el hacer de los intelectua1es.

Para organizar el Estado, para organizar el comercio, la clase

dominante desenvolvio un tipo particular de intelectuaL La

industria introdujo un nuevo tipo de intelectual: el cuadro

tecnico, 0especialista de la ciencia aplicada. En las soeiedades

en que las fuerzas econ6micas desenvolvieronse en un sentido

capitalista, al punto de absorber la mayor parte de la activi-d d . 1 I' , d . 21a nacionai, preva ecio ese segun 0 tipo.

Estos cuadros de intelectuales son para Gramsci

las celulas vivas de la sociedad civil y de la sociedad politica:

son los que elaboran la ideologia de la clase dominante,

dandole asi conciencia de su papel, y la transforman en

"concepcion delmundo" que impregna todo el cuerpo social.

En el nivel de la difusion de la ideologia, los intelectuales son

los encargados de animar y dirigir la "estructura ideologica"

de la clase dominante en el seno de las organizaciones de la

sociedad civil (iglesias, sistema escolar, sindicatos, partidos,etc.) y de su material de difusion, Funcionarios dela sociedad

civil , los intelectuales son igualmente los agentes de la socie-

dad politica, encargados de la gesti6n del aparato del Estado

y de las fuerzas armadas (hombres politicos, funcionarios,.,. t) 22ejercrto, e c..

En los criterios y pautas del Consenso de Washington

gestado en 1980, estan plasmadas gran parte delas propues-

21 A. Gramsci , "La cos truzione del Par ti te Comunista", p. 151 , tornado de H.Portelli, Gl 'am se i e 0Bl oeo His to r ic o , Paz e Te rra , 1990 .

22 Portelli, op. cit., p. 87.

457

A S IS TE N CI A T EC N IC A Y D IS C IP L IN AMI EN TO. E L BM EN A R G EN T IN A



ALE JANDRA CORBALAN

tas trilateralistas, las cuales fueron parte del aporte brinda-

do por destacados academicos de instituciones academicas

reconocidas.f como tambien una alta participaci6n de miem-

bros pertenecientes a influyentes medics de comunicaci6n

que seguramente contribuyeron a la configuracion y difusion

de estos "principios de visi6n".24 En este sentido, dicho con-

senso ser.ia una decisiva base de homologaci6n de principios

de vision, que direccionaran la mayor.ia de las reformas

estructurales desde los afios ochenta, entre las que se incluye

la reforma del Estado argentino. Mas tambien la identifiea-

ci6n, en cargos importantes de los gobiernos de los paises

trilateralistas y en organismos internacionales en las deca-

das de los ochenta y noventa, de figuras que formaron parte

de esta comisi6n, creemos fueron elementos importantes en

la concreci6n de las "reglas practicas" que habian sido dise-

fiadas por estos.25

La preocupacion por la recepcion, la absorci6n y una

adecuada transferencia, son aspectos asociados a la educa-

ci6n y a una concepci6n de la misma en la que los procesos

de ensefianza-aprendizaje se asientan en un caracter mas

pasivo y receptivo del aprendiz y en una clara asimetr.ia

entre el que recibe y el que brinda. En este caso tal asimetr.ia

es atribuible a la posesion por parte del ensefiante de un saber

que goza de cierta Iegitimidad, Mas tambien es un saber que

debera ser aceptado en la medida en que esta "atado" al

otorgamiento de creditos. Las precondiciones de los creditos

tienen la impronta de la incorporaci6n de un conjunto de

reglas practicas por parte del Estado que los solicita.Los ejes principales de la asistencia tecnica, para la refer-

rna del Estado argentino, quedaron definidos en un sinnu-

mero de objetivos, los que sugerian no s610transformaciones

en los marcos institucionales y legales sino una especial

transformaci6n en los perfiles y practicas de sus agentes.

Objetivos:a) desarrollar, adecuar y difundir los instrumentos analiticos

necesarios para e1disefio y seguimiento de la politica econo-

mica;b) mejorar y ampliar las bases de informacion necesarias para

el analisis economico con sistemas de procesamiento y difu-

si6n de informaci6n adecuados y oportunos para 1a toma de

decisiones y la promoci6n de la actividad econ6mica;

c) fortalecer los mecanismos de planificacion, programaci6n

y presupuesto de manera de aumentar la eficacia y control de

la inversi6n del sector publico en un marco de desarrollo de

mediano plazo;d) contr ibuir a mejorar e1 financiamiento genuine del gasto

publico de acuerdo con la politica de crecimiento adoptada:

e) mejorar la gesti6n y el funcionamiento de las empresas

publicae y desarrollar mecanismos adecuados para su coordi-

nacion y control; yf) disefiar pol iticas e instrumentos para el desarrollo indus-

trial y del comercio exterior considerando las ventajas com-. dins d 1 ,26parativas marmcas e pais,

LA REFORMA EN ARGENTINA

La reforma en Argentina tiene una etapa inicial, identifica-

da a partir de 1984, en la cual se realiza una aproximaci6n

del nuevo gobierno democratico (presidencia de Alfonsin

1983-1989) a los organismos financierosde credito. Esta

etapa -fuertemente marcada por la asistencia tecnica=- se

inicio con la identificaci6n de necesidades en la que se

privilegiaba la capacidad institucional del pais para la re-cepci6n y absorci6n de asistencia tecnica y para garantizar

una adecuada transferencia tecnol6gica.

23 Brookings Ins ti tut ion ; The New York Univer si ty Pre sss: World Bus ines;Universidad de Sussex; Universidad de Tokio; Universidad de Yale: Universidadde Harvard, etcetera.

24 Time, Kyodo News Service, Washington Post, Los Angeles Times, The Econo-mist, La Stampa, Japan Times, Columbia Broadcasting, Financial Times, Die Zeit

(fuente: Cuadernos Semestrales del eIDE, Mexico, 1978, p, 21.25 Barber Conable , presidente del BM ent re 1986·1991 y Alden Clausen ent re

1982·1986, fueron miembros fundadores de la Comisi6n Trilateral. Aestos nombrespueden agregarse la gran mayoria de los funcionarioa que acompafiaron la gestiondel pre sidente Carter, todos e llos tambien miembros de d icha Comis ion duran te ladecada de los setenta .

45 845 9

26 Informs final. Prestamo BIRF 2712·AR, tomo 12, Buenos Aires, Programa de

las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) , Banco Internacional de Reconstruc-

cion y Fomento (BIRF) , gobierno de Argentina , 1992.



ALEJANDRACORBALAN

El camino emprendido para la reconfiguraci6n de las

practicas y perfiles de los agentes de la burocracia estatal

argentina se apoy6 en diferentes estrategias.

Racionalizaci6n y recambio de agentes estatales

La disminucion de los agentes del sector publico se fue

concretando a partir de distintos procedimientos: congela-

miento de vacantes, jubilaciones de oficio, jubilaciones anti-

cipadas, retiros voluntarios, eliminaci6n de comisiones deservicio, disponibilidad y despido,

Este accionar perseguia ademas un segundo prop6sito, que

era el de sustituir algunos de los lugares y funciones vacantes

con agentes con perfiles mas acordes con los lineamientos de

la reforma.

La racionalizaci6n depersonal se concreta en la totalidad de

los organismos gubernamentales, los cuales en el ana 1990 es-taban constituidos por ocho ministerios, nueve secretarias de

presidencia y sus respectivos organismos descentralizados.

Mas este comportamiento no afect6 a todas las reparticionespor igual, por el contrario, algunas reparticiones aumentaron

el numero de agentes, en algunos casos explicable, porque sus

funciones estuvieron mas ligadas a los procesos de reforma,

pero tambien porque en algunos 6rganos de gobierno se con-

centraba la "vo1untad politica" dispuesta a efectivizar tales

cambios.

Asi por ejemplo, la presidencia de 1anaci6n, que registraba

3 342 agentes en abril de 1990, tenia en marzo de 1994, 4 710.Un comportamiento similar se da en e1Ministerio del Interior,

en 10 que corresponde a la administraci6n central: de 1167

agentes en abril de 1990 pasa a tener 1708 en marzo de 1994.

E1 incremento de personal en otras reparticiones obedece a

razones vinculadas a las reformasemprendidas, comoes e1caso

de 1aPolicia Federal, que se eleva de 35 777 agentes en abril

de 1990 a 39 792 para marzo de 1994,2710 que presumible-

27 Fuente: Evoluc ion de las Plantas de Per sona l de la Administ ra ci6n Publ ic aNacional, 1994. Documento interne, Ministerio de Economia, Argentina.

46 0

A SISTE NC IA TEC NIC A Y D ISC IPL INA MIEN TO . EL B M EN A RG EN TIN A

mente se requeria para contro1ar las posibles manifestacio-

nes de descontento, producto de las reformas emprendidas.P

Como parte de este recambio se realiza, a posteriori de la

modificacion de las estructuras de la Administraci6n Publica

Nacional, un program a de convocatoria a concursos para

cubrir cargos con funciones ejecutivas en los diferentes mi-nisterics.-" Los perfiles exigidos se ajustaban a los linea-

mientos de reforma y los agentes que integraban los comites

de selecci6n se conformaron con funcionarios del gobierno y

con figuras locales reconocidas en ciertos medics academicos,

De este modo los nuevos cargos ejecutivos se esperaba que

podrian garantizar una cierta coherencia en 1a politica a

implernentar desde 1aposicion ocupada que, previsiblemen-

te, concretaria un proceso multiplicador de "principios de. .~ "

VISIOn.

Consultores a termino

Simultaneamente, los procesos de reforma del Estado fueronconcretados mediante program as con financiamiento de los

organismos internaciona1es de credito, disefiados para ser

rea1izados en plazos determinados. La ejecuci6n de los mis-

mos qued6 a cargo de consultores que eran contratados para

ejecutar las funciones y tareas que establecian los terminos

de referencia. De modo que no pertenecian a 1a planta

estable de los organos de gobierno, evitando la configuraci6n

de una burocracia remozada,

28 La creaci6n de nuevos organismos vinculados a las privatizaciones incremen-taron las p lantas de persona l en este pe riodo ; nos refe rimos espec ia lmente a losEntes Reguladores de los Servicios Privatizados (agua, e lectricidad, ¥PF Yotros).' I'ambien al Institute Nacional de la Administracion Publica , de importante parti-c ipacion en los proce sos de reforma del Es tado a rgen tino. Un comportamien tosimi la r se regist ra en e l Ministerio de Defense, en auAdminist ra cicn Cent ra l quede 1 552 a gentes en abri l de 1990 pasa a 2 103 en marzo de 1994 y e n la Dire~ci6nNacional del Servic io Pe nite ncia rio Federal, que de 7 842 agentes para abril de1990 asciende a 8 385 agentes en marzo de 1994. La Direcci6n General Impositiva(DGI) dupl ic a su personal en e l pe riodo de 1990·1994, de 10 445 agentes a 20 136.

29 Asi, con fecha septiembre de 1991 se lanza la convocatoria para la coberturade 22cargos de d irectore s nacionales y generales para las dist in ta s sec re ta rias delMinisterio de Economia y Obras y Servicios Publicos. Fuente: Comite de Selecci6n.Regimen de cargos con funciones Ejecutivas. MEOSP, 1991. Documento de Convoca-

toria, Proceso que se concreta tambien en otros ministeriosnacionales.

46 1

ALE JANDRA CORBALAN A S IS TE NC IA T EC N IC A Y D I S CI PL IN AMI EN TO . E L BM EN A R G EN TI NA



As! que puede pensarse que las nuevas "reglas practicas"

se fueron instaurando fundamentalmente por via de la in-

troducci6n de nuevos procedimientos y normas, yen menor

medida por la incorporaci6n de sujetos ..portadores de un

"haber nuevo" yen consonancia con estos nuevos patrones.

La gran mayoria de los objetivos de los programas con

financiamiento del BM tenian el prop6sito de tornar maseficientes y operativos las estructuras y procedimientos de

los 6rganos de gobierno.s? De este modo se iban introducien-

do las bases programaticas y operativas, durante el proceso

de ejecuci6n del programa, pero no permanecfan como agen-

tes del Estado aquellos consultores que las concretaban. De

manera que la instancia de asistencia tecnica no necesaria-

mente daba lugar ala configuraci6n de una nueva estructura

estable de funcionarios.

informe del programa de reforma, mencionaba que los resul-

tados alcanzados se concretaron gracias a

la fuer te convicci6n y compromise de los niveles politicos;

apoyo del sector privado, a traves del aporte recibido de la

Fundacion para la Modernizaci6n del Estado y L a participa-

cion de lo s organismos multilaterales de credito -Banco Mun-dial y BID.31 y 32

El asesoramiento tecnico ofrecido por los organismos inter-

nacionales de credito es otra modalidad mediante la que se

concretan los procesos de ensefianza. En los procesos de

reforma del Estado, el gobierno argentino cont6 con una

fuerte asistencia de consultores del BM, la cual tambien se

orientaba a un proceso de sustituci6n de practicas vigentes

y ala incorporaci6n de nuevas, mediante un acompafiamien-

to que ademas de "capacitar en los hechos" ejercia un estre-

cho control.

El proceso de reforma del Estado argentino parti6 de unnucleo acotado de agentes vinculados al staff politico del go-

bierno y de un acompafiamiento tecnico de consultores del

BM y de otras instituciones internacionales como el Banco In-

teramericano de Desarrollo (BID) y e1Programa de las Nacio-

nes Unidas para e1 Desarrollo (PNUD), al cual se le fueron

adosando algunos otros aditamentos para concretarlo. Un

Como otro aditamento el "acuerdo politico", se tornaba un

ingrediente necesario, y requeria de agentes afines con la

propuesta. En este sentido los "hombres clave", compenetra-

dos con la iniciativa de reforma, y ocupando posiciones

estrategicas, se constituirian en los elementos conductores

para la concreci6n de procesos y acciones en contextos insti-

tucionales. Sin embargo, mas alla de la alta concentraci6n

de las decisiones, en pocos agentes y en ciertos 6rganos del

gobierno argentino, la misma se fue plasmando por efecto deun proceso multiplicador, e1 cual se asentaba fuertemente

en la ensefianza-aprendizaje.

El Comite Ejecutivo de Contralor de la Reforma Adminis-

trativa (CECRA) encargado de la reforma de la administra-

cion publica central en el ambito nacional, promovi6 cambios

de manera horizontal para todos los 6rganos de la adminis-

tracion publica (ocho ministerios, nueve secretarias y orga-

nismos descentralizados). Dicho Comite, creado con este fin,

se constituy6 en un 6rgano que operaba por encima de las

instancias de las secretarias de Estado y los ministerios, al

tiempo que promovia y monitoreaba los procesos de reform a

procurando la concreci6n de las transformaciones en todas

las instancias.

Un proceso similar se verific6 con relaci6n a las reformas

de los estados provinciales, las cuales fueron promovidas

por programas controlados por 6rganos del gobierno nacio-

El asesoramiento tecnico

30 Los proyectos de re forma est ructura l aprobados y en e jecucion en e l periodo

1990-1996 reunieron un paque te de 11programas que se or ientaron a la re formade dife re nt es estructura s gubernamental es y a reforma s para OtrOB ambitos:mercado de capitales; privatizacion de los bancos provincia les; reformas provincia-

le s; re formas en el sec tor sal ud; re formas en el sector e duc ative ; e n el Sist ema

Previsional, etcetera.

31 Comite Ejecut ivo de Contra lor de la Reforma Administ ra tiva , Programa de

Reforrna, Informe, agosto de 1991.32 El CECRA , organo responsable de dicha reforma, conto con el apoyo de

aproximadamente 100 pe rsonas , ent re func iona rios del gob ie rno, expertos del

Banco Mundial y f irmas consu ltor as internacionales , Ent re los funcionarios degobierno solofiguraban elpresidente de la nacion yel ministro deEconomia y Obrasy Servicios publicos.

462 463

ALE JANDRA CORBALAN A S IS TE NC IA T EC N IC A Y D IS C IP L IN AMI EN TO . E L BM EN A R G EN TI NA



na1.33 A su vez, ciertos organismos de los gobiernos provin-

dales y nacional, controlaron -y monitorearon las reformas

en los municipios. De este modo, e1 proceso de reforma del

Estado, gestado desde nucleos centralizados, fue adquirien-

do una autonomia respecto de quienes 10 impulsaran. Los

agentes encargados de su aplicacion eran portadores de una

practica, un "saber", que como un "haber", un capital 0 unadisposici6n se fue haciendo extensiva en la medida en que

ese "haber" era deseable que pasara y fuese incorporado por

los sujetos e instituciones donde enos ejereian sus funciones.

Este efecto multiplicador no se circunscribi6 a los funcio-

narios del gobierno argentino, tambien funcionaba para el

staff central del BM , en la medida en que otras experiencias

de reforma emprendidas por otros paises y con financiamien-

to del BM , operaban como ' 'lecciones aprendidas" y tambien

incorporadas como un haber de 1apropia instituci6n, dando

lugar a un proceso de construcci6n permanente.

Aprendizajes y estrategias en los cicloe de uti proyecto

En las formas cooperativas utilizadas por e1BM , los distintos

programas y/o proyectos atraviesan distintas instancias, cada

una de las cuales recibe la denominaci6n de cielos. Asi, el deno-

minado primer ciclo, es aquel destinado a identificar necesi-

dades en un pais prestatario; este deberia dar como resultadoproyectos potenciales. En general, la potencialidad de un pro-

yecto estuvo impregnada por una fuerte orientaci6n por parte

de los miembros del staff del BM . Pues si bien fue el pais el

que plante6la necesidad y formul6 elproyecto, en la practice

la fuerte asesoria ejercida por el Banco en laetapa de diagn6s-

tico, y su preferencia por inclinarse a reformas estructurales

fueron orient an do a la formulaci6n de determinados tipos de

proyectos, sobre los que el pais, al menos en los inicios, tenia

escasa experiencia. Este cambio obedeci6 tambien ala apa-

rici6n de los denominados creditos debase politica, los cuales

exigian un compromiso por parte del pais prestatario con laejecuci6n de reformas de caracter estructural. Mas tambien

el cambio de proyectos puntuales a proyectos sectoriales y

de mayor envergadura, fue una politica adoptada por Argen-

tina a instancias de las nuevas modalidades operativas del

BM . La mayoria de las reformas se implementaron por medio

de programas que se caracterizaron por su amplitud, en la

medida en que abarcaban casi de manera extensiva a un

sector y por la integraci6n de sus distintas metas. .

En la segunda fase de un proyecto -la de preparaci6n-

el proceso de incorporaci6n de "nuevos saberes" prosigue,

especialmente por la asistencia tecnica recibida, que estuvofuertemente sustentada en un considerable "acompafia-

mien to" de miembros del staff del BM y de consultoras inter-

nacionales 0 nacionaies reconocidas.P'

34 La asistenc ia tecnica y financ ie ra para la prepa raci6n de proyectos fue una

practica habitual en los inicios de los programas de ajuste y adopt6 distintas modalida-

des.Una deelias fue elotorgamiento deprestamos especia les por parte del Banco paraPreparaci6n de Proyectos, 10 que ademas de implicar la adquisicion de prestamos adi-cionales deotros organismos [La Organizacion para laAlimentacion y la Agricultura(FAO por sus s ig la s en ing le s), la Organizacion Mundial de la Salud (OMS), la Orga-

nizacion de las Naciones Unidas para laBducacion, la Ciencia y la Cultura (UNESCO

por sus siglae en ingles) , Ia Organizaeion de Naciones Unidas (OND)], recibian unaasistencia tecnica mas vinculada al sector para la preparacion de nuevas solic itudes.

Con los af ios se ha puesto de manifiesto otro objetivo funda-

mental de la supervision, la acum ulacion de experiencia para

volcar la al disefio y preparacion de futuros proyectos y en la

mejora de politicas y procedimientos (Baum, W., 1982).

La forma de concretar los procesos de ense:fianza, ademas

de adoptar una jerga similar a la de los espacios escolariza-

dos, se vale de una metodologia en la que la tarea evaluativa,

al formar parte del seguimiento de las actividades -a ejecutar

y realizadas- , se constituye en Ia principal estrategia de

ensefianza, mas alia de que el proceso de aprendizaje se va

concretando en gran medida a traves de los ciclos de un

proyecto.

33 EI Ministe rio del Interior, de sde la Se cretaria de Asuntos Provinci ales,fo rmula t re s importan te s proyec tos f inanciados con c redi tos de l BM y del BlD,

denominados Provinc ia s I , I I YIII , que son la base de las r eformas provinc ia le s. AIre specto e l p royecto Provinc ia s I , apun t6 a fortaleeer las a reas de ren ta ; defini r

politicas impoaitivas y medidas para evi ta r la evasion mea l; medidas de desregu-laci6n minera y radicacion de capitales de riesgo. EIProvincias II propone similaresmedida s pa ra los ambitos munici pa les. El Provincia s III se re fie re a l a venta de

inmuebles fi scales , a si stencia para priva tizacionee , re fo rma previsional y de losbancos privados regionales y provincia les, Este ultimo proyecto replica dealgtinmodo simila re s procesos re gistra dos sobre l as empresa s e stata les de c aracte rnacional, 10que pone en evidencia la replica en eontextos provincia les de procesospreviamente concretados en el ambito nacional.

46 4 46 5

ALE JANDRA CORBALAN ASISTENCIA TECNICA YDISCIPLINAMIENTO. EL BM EN ARGENTINA



Las tare as a realizar por parte del pais prestatario son pau-

tadas en forma explicita, surgen-de las reuniones de negocia-

ci6n entre miembros de una misi6n del staff del BM y funcio-

narios y tecnicos del gobierno argentina, incorporados al sector

del Estado en el que seconcretara elprograma. La s tareas a cum-

plimentar -asi denominadas y resultado de este proceso dene-

gociaci6n y trabajo conjunto- son revisadas en una 0varias

misiones, y registradas como progresos alcaneados.» Si bien

en generalla tarea de supervision se concreta mediante misio-

nes de observaci6n conformadas por consultores del BM , se ha

dado tambien por medic de la presentaci6n de informes anua-

les que se examinan en la sede del mismo en Washington.

El grado de incumplimiento de las tareas deja abierta la

posibilidad y concreci6n de una punici6n, que puede tradu-

cirse en la no autorizaci6n de nuevos desembolsos de dinero

hasta no concretar las tareas programadas, 0 a nuevas nego-

ciaciones que tambien prorrogan el desembolso. De este modo

la eoaluacion. queda a cargo de funcionarios del B M , quienesen su calidad de consultores e integrando 10 que se denomina

una misi6n, se concreta en el pais prestatario. La evaluaci6n

atraviesa y esta presente en todos los ciclos de un proyecto,

se realiza tanto en el momenta de finalizar la preparaci6n,

durante y antes de su ejecuci6n, como tambien una vez

terminado se concreta la evaluaci6n expost.

La tarea de evaluaciOn expost cierra el cicIode un proyecto y

es responsabilidad del Departamento de Evaluaci6n y Ope-

raciones (DEO), el cual esta separado del personal de opera-

ciones del Banco e informa directamente a los directores

ejecutivos. Tambien cierra este ciclo un informe final a cargodel prestatario, que puede ser considerado como un proceso

de autoevaluaci6n que tambien es sometido al DEO, en algu-

nos casos la evaluaci6n expost incluye un examen in situ.

Finalizado el proyecto y luego de un plazo posterior a los cinco

afios, el DEO puede realizar informes sobre las repercusiones

e impactos de algunode los proyectos concluidos.

Aspectos evaluados

En 10 evaluado se incluyen aspectos tecnicos, institucionales,econ6micos y financieros.

Los aspectos tecnicos recorren una gam a diversa segtin el

tipo de proyectos, pero estan centrados fundamentalmente en

la tecnologia a utilizar, tanto de equipos como procedimien-tos, en las estimaciones de costos y benefieios y en los impactos

humanos, fisicos y ambientales. La importancia de 10 proce-

dimental esta fuertemente articulada con los procesos de

enseiianza, que presuponen aprendizajes por parte de los

agentes y garantizarian la concreci6n de los prop6sitos de laasistenciatecnica.

La consideraci6n de los aspectoe institucionales se ha acen-

tuado a partir de los proyectos de reforma estructural; al

respecto se advierte una inclinaci6n por producir un fuerte

imp acto en la estructura institucional de los aparatos del

Estado, propiciando instituciones gubernamentales s6lldasdesde el punta de vista organizativo, administrativo y de

procedimientos, y de un fuerte imp acto en Ia medida en que

ademas de concretar estos prop6sitos tiende a transfcrmar

las practicas delos agentes e instituciones.

Los aspectos econ6micos de un proyecto estan asociados

fundamentalmente a los costoslbeneficios del mismo, 10 que

10 vincula especialmente con el program a de inversiones del

prestatario, con las politicas econ6micas sectoriales y nacio-

nales, su repercusi6n fiscal, distribuci6n del ingreso, cues-

tiones que se ligan a la tasa de rendimiento del proyecto y

las probabilidades de riesgo, pero impactan sobre la estruc-tura social del conjunto de la sociedad argentina al involu-

crar a distintos sectores y actores.

Los aspectos financieros se detienen especialmenteen

evaluar los fondos para cubrir los costos del proyecto y se

centran particularmente en la viabilidad financiera.w

36 En este punto cabe aclarar que la tendencia mas generalizada, en estasultimas decadas, es la deque elBanco opere comoun fuerte supervisor, en la medidaen que la mayoria de los prestamos son decofinanciacion, 1 0 que implica que ademasde que e l pais prssta tario sufrague una pa rte de l proyec to con su presupuestoordinar io, existan otros organismos que participen financieramente (bancos comer-cia les, fondos de inversiones y BID).

35 La redaccion y negociaci6n de los doeumentos legales que formalizan los acuer-des alcanzados entre elpresta tario yel Banco contienen diferentes apartados, entre

los que destac an los objetivos del proyecto, las medidas pa ra a lcanza rlos y loscalendarios de ejecuci6n.

466 467

ALEJANDRACORBALANA S IS T ENC IA TECN ICA Y D IS C IP L INAM IENTO . E L BM EN ARGENT INA



De modo que los diferentes ciclos de un proyecto al ejer-

cerse en plazos que oscilan en tiempos no menores a los cinco

afioses un elemento que garantiza concretar parte de los

procesos disciplinadores, mas alla que muchos de los resul-

tados esperados hayan sido evaluados como insuficientes 0

inadecuados por parte del BM.

El disciplinamiento de las burocracias del Estadoargentino

comola diseiplinarizacion de este, por 10 antes expresado, parece

haberse concretado suficientemente, sin embargo, debieran ha-

cerse algunas precisiones ala hora de evaluar tales procesos.

En primer termino, las transformaciones de las estructu-

ras burocratieas del Estado se ponen en evidencia a partir

de la disminuci6n del numero de agentes y por la transfer-

maci6n de las estructuras organizativas de los entes guber-namentales. .

Con relaci6n al primer aspecto, se produjo una merma

significativa de las plantas funcionales de empleados y fun-

cionarios. Considerando los datos registrados a un afio de

iniciado el proceso de reforma administrativa del Estado

argentino en junio de 1991, en la administraci6n centraliza-

da37 se habia producido una reducci6n de 26 % de Ia dotaci6n

total del sector, y en el sector de Ia administraci6n descen-

tralizada la disminueion fue de 18 %. Mas cabe aclarar que

en los afios subsiguientes se continu6 este proceso, elevan-

dose los porcentajes mencionados. Segun datos de las pro-

yecciones estimadas.en 1991, se esperaba que la reduceion

en Ia planta de la administraci6n centralizada y .descentra-

lizada llegara al30 por ciento.P

En relaci6n con la trarisformaci6n de las estrueturas, cabe

hacer mencion de algunas cuestiones ligadas a ello. En

primer lugar, tiene que mencionarse la privatizacion de las

empresas publicae y las sociedades del Estado, las cuales

han sido privatizadas en su totalidad (petr6Ieo, gas, agua,

telecomunicaciones y telefonia, energia electrica, empresas

de aviacion, etc.). En segundo termino, Ia terciarizacion 0

externalizaci6n de servicios ejecutados por el Estado (liqui-

daci6n de haberes, mantenimiento y Iimpieza de los edificios

publicos, etc). En tercer lugar, Ia descentralizaci6n de servi-

cios nacionales, los cuales pasaron a depender de los entes

provinciales y/o municipales, especialmente el sector salud

y la educaeion, En cuarto termino, se debe afiadirlas modi-

ficaciones de las estructuras funcionales y operativas. A este

respecto, para Ia administraci6n central la idea basica "fue

asignar cada funci6n 0responsabilidad sustantiva a una sola

unidad decisional", asunto que provoc61a desaparici6n de un

numero considerable de direcciones, subdirecciones y otrasunidades. Tambien el cumplimiento de determinadas funcio-

nes de apoyo para las denominadas sustantivas, que guarda-

ban una relaci6n de 3 a 1, y fue sustituida por Ia de 1 a 1. En

quinto lugar, cabe mencionar algunas otras modi£icaciones,

como a) la de los institutos cientificos estataies que pasaron

a convertirse -por una cambio en la tipificacion juridica- en

organismos publicos no estatales, sociedades anonimas y

otros tipos de figuras juridicae que permitieron la incorpora-

cion de capitales privados para el desarrollo tecnoI6gico y

cientifico; b) los organismos reguladores del mercado de

bienes y servicios, de naturaleza diversa, fueron disueltos, yc) se fortalecieron otros como la Administraci6n Nacional de

Aduanas y Ia Direcci6n General Impositiva.

Mas si las transformaciones se miden en terminos de gas-

tos, el monto del gasto publico destinado a recursos humanos

de las plantas funcionales de los organismos gubernamenta-

les no implic6 una reducci6n significativa, por Ia equipara-

cion de los salarios de los cargos sustantivos a salarios de Ia

actividad privada. En este punta cabe aclarar que una parte

importante de los costos de los programas con financiamien-

to de los organismos internacionales de credito, corresponde

A LG U NA S R EF LE XIO NE S A M OD O D E C ON CL US IO N

37 Incluye los min is te rios y la pre sidenc iade la nacion , con las sec re ta rias quela inte gran. Los organismos desc entraliz ados i nc luyen dtve rsos organismos ypuede n ser clasi fic ados por la funci6n que de sempeiia n. Asi, dentro de estesorganismos selocaliza el sector educativo y el de salud, ademas de otros servicios.

38 Datos extra idos de Ricardo Gaudio, "Enfoque, a lcances y estra tegias basicasdel Programa de Reforma Administrativa del Estado argentino», trabajo presentado

en el Simposio de Costa Rica, sobre otras referencias, 1991. .

46 8 46 9

1

ALEJANDRA CORBALAN A S IS TE NC IA T EC NI CA Y D I SC IP LI NAM IE NTO. E L BM EN A R GENT IN A



al rubro personal, representando un porcentaje del costa del

programa que oseila entre 17 y 40% del total, dependiendo

del tipo de proyecto. De modo que podria hablarse de un gasto

en recursos humanos (contratos de consultorias), que susti-

tuye en parte a la planta permanente.

8i se consideran datos acerca de la existencia de una bu-

rocracia estatal que adopt6 procedimientos y mecanismos

fuertemente orientados ypautados conlineamientos que pri-

vilegian la simplificacion de normas y procedimientos admi-

nistrativos -decididamente orientados por pautaciones ofre-.

cidas por el BM en el program a de reforma administrativa-,

son significativos los cambios e importante la influencia de

las instituciones internacionales.

A ella cabe agregar que estas reformas, al. haber sido

realizadas en su mayoria por programas con finaneiamiento

de los organismos internacionales, sus ejecutores y disefia-

dores fueron consultores a termino, los cuales no pasaron a

formar parte de la planta permanente dela estructura de los6rganos de gobierno. De alii que valga preguntarse siesta

cireunstancia disminuye los procesos de disciplinamiento.

En otras palabras, si el disciplinamiento se encarna en los

sujetos 0 tambien es efectivo cuando queda presente en las

normas y procedimientos de las instituciones.

La pregunta que queda por responder es, en que medida

se consolid6 el supuesto disciplinamiento de las burocracias

estatales por la incorporaci6n de estas nuevas pautaciones

en las practicas de sus agentes. Algunos elementos -como

el alto desempleo, y el temor a engrosar la importante masa

de desocupados- operan como un aditamento que previsi-blemente colabora para fortalecer la incorporaci6n de nue-

vas practicas por parte de los agentes que tienen empleo.

En definitiva, los parametres considerados nos permiten

concluir que el Estado argentino concreto parte del proceso

disciplinador, y que una porci6nconsiderable delmismorecibi61a fuerte orientaci6n de los organismos internaciona-

les de credito.

Si estos fueran los parametres de disciplinamiento de las

burocracias del Estado, presumiblemente Argentina podria

estar en condiciones de graduarse. Para el sistema educati-

470

vo, la graduacion forma parte del mecanisme de legitimacion

y reconocimiento de ciertos saberes, de ciertas practicas y de

ciertos rasgos y atributos de los espacios institucionales don-

de se concretan estos procesos. EI BM recurre a este vocablo

del campo educativo, y 10 utiliza para medir los Iogros alcan-

zados en los procesos de ajuste estructural. La graduaci6n de

uti pals se concreto, cuando ha alcanzado un determinado

nivel de renta per capita, el eual determina 1acategoria-paisa la que se pertenece.w

Un pais estaria en condiciones de' "graduarse" de los ser-

vicios financieros y tecnicos prestados por e1Banco una vez

que ha alcanzado un grado de desarrollo tal que le permita

tener amplio acceso al mercado externo de capitales en

condiciones financieras razonables, y capacidad suficiente

para establecer instituciones adecuadas que sirvan al desa-

rrollo socioeconomico.w

Es en definitiva un mecanismo que sirve fundamentalmen-

te como indicador para determinar las condiciones de confia-bilidad del pais para losorganismosmultilaterales de credito

e inversores extranjeros. En este sentido, Argentina cumple

con este requerimiento desde 1994, sin embargo, en la eva-

Iuacion realizada por el Banco para 1998, se argumenta que

Argentina aun no tiene resuelto el problema del desempleo y

otros sintomas de pobreza y desigualdad socialy que poi'tanto

no esta en condiciones de graduarse. De modo que puede con-

cluirse que todavia es necesario concretar otros procesos y

nuevos aprendizajes, lDe cuales se trata y como se concre-

taran los nuevos requisitos para graduarse?

Los proyectos sociales con financiamiento del BM y del BID,puestos en marcha mas recientemente y con cierta posterio-

ridad a los de ajuste estructural, tienen por destinatarios a

, los afectados por. las reformas estructuralee., demodo quepuedepensarse quela disciplinarizaoionno se limitara a las

39 El BM ha establecido cinco categorias, Quien alcanza el nivel 1esta proximo

a graduarse . Sin embargo, muchas vecesse poeterga-el momenta de la graduacion,pues e l BM eva l ila que a pesar de exist ir una renta pe r cap ita adecuada per sistenotros tipos de problematicas, En elcaso deArgentina los altos niveles de desocupa-ci6n y agudizacion de otras problematicas socia les han ido postergando el proceso

de graduaci6n.40 Tornado de un doc umento interne (mimeo) de l Ministerio de Economia,

Argentina, 1998.

471

ALEJANDRACORBALAN



burocracias estatales, sino que tambien se hace extensiva a

la masa de subempleados y desoeupados, que representan un

contingente importante en la actualidad argentina, ya que las

cifras oficiales estiman que el desempleoalcanza aproxima-

damente 17% de la poblaci6n economicamente activa en los

inicios de 2001.

BIBLIOGRAFIA

AsSMANN,Hugo (editor), T. Dos Santos, N. Chomsky, et al.,

A Trilateral. Nova fase do capitalismo mundial, Petropo-

lis, Vozes, 1990.

AzPIAZU,D., E. Basualdo y M. Khavisse, El nuevo poder

econ6mico en la Argentina de los 80, Buenos Aires, Lega-

sa, 1989.BAER, M., "El Banco Mundial y su politica hacia America

Latina", tesis de maestria en Economia, UNICAMP,1981.

Banco Mundial, Normas para la utilizaci6n de consultores

por los prestatarios del Banco Mundial como organismo

de ejecuci6n, Washington, agosto de 1989.

BAUM,Warren C., El ciclo de los proyectos, Washington, D.

C ., BlRF/BM,1982.BOTZMAN,M. yD. Tussie, "Argentina y el ocaso del Plan

Baker. Las negociaciones con el Banco Mundial", separata

de Boletin Informativo, Argentina, Teehint, enero-marzo,

1991.

BOURDIEU,P., "0 poder simbolico", en Memoria e Sociedade,

Rio de Janeiro, 1995.---., "Espiritus de Estado. Genesis y estructura del campo

burocratico", en Sociedad, Revista de la Facultad de Cien-

cias Soeiales, Universidad de Buenos Aires, abril de 1996.

BOURDIEU,P. y L. Waequant, Respuestas. Por una antropo-

logia reflexioa, Mexico, Grijalbo, 1995.

Carta de Nelson Rockefeller a Richard Nixon, Nueva York,

30 de agosto de 1969, mimeo.

CASTORIADIS,C., Diante da guerra, voL 1, As realidades,

Brasil, Ed. Brasiliense S.A., 1981.

472 473

Documents

Corbalán.Asistencia técnica y disciplinamiento.-1