CONTRACARA Cuento Albert Estrella

Embed Size (px)

Citation preview

  • 8/18/2019 CONTRACARA Cuento Albert Estrella

    1/3

    TÍTULO: CONTRA-CARASEUDÓNIMO: ROBERT DELIRO

    Cuando llegué al puesto de salud; mi primer paciente fue un muerto. Tuve laconciencia de este acontecimiento, mientras soñaba.En mi sueño, una voz me decía: “Están tocando la puerta, es una emergencia, ponte los zapatos, camina por el  pasillo y atiende. En la puerta hay alguien desangrándose…” Y efectivamente, me desperté, salí presuroso por el pasillo.o !ue ante mi se estaba por revelar, a"n no termino de comprenderlo.#C$mo supe !ue estaba muerto% es una cuesti$n de pulso, tomar la muñeca ola parte interna del cuello & luego contar mientras el tiempo pasa.#Cu'nto tiempo debi$ (aber pasado para darme cuenta de !ue el pulso delmuerto, volvía a latir% si; de manera repentina comenz$ a latir tan r'pido comosi adentro de esas arterias pasara un tren & uno pusiera los oídos sobre losrieles de una vía ferroviaria donde el sonido a un inicio casi imperceptiblepasara a ser un sonido ensordecedor, amplificado por parlantes; & mientras lesostenía la muñeca, el muerto !ue empezaba a vivir, se incorporaba; pude ver su cara cubierta con el retazo de una tela !ue al parecer era parte de sucamisa, al descubrir la tela pude ver su tabi!ue roto con el cartílago e)puesto,pero no pude reconocer si era alguien conocido & es !ue los o*os los tenía(inc(ados, pero a"n así al levantarle el rostro ba*o esas $rbitas inflamadas

    pude apreciar como aguzaba los o*os como cuando uno se encuentra con unconocido de (ace muc(os años & este conocido te di*era: “fíjate bien, soy yo el mismo de siempre pero con unos cambios…” +o me di cuenta, &o estaba interesado en (acer mi traba*o.os protocolos de atenci$n dicen !ue lo primero !ue se debe (acer en unasituaci$n donde la sangre emana como si uno (ubiera reventadoaccidentalmente un tubo de agua del servicio p"blico, es parar el sangrado, dealguna manera cerrar el caño, mientras al afectado se le realiza preguntassencillas, para asegurarse si est' conciente o ba*o el afecto de las drogas  #C$mo se llama% le pregunto acerc'ndome (acía un lado de su cabeza, demanera !ue me escuc(e claramente

    #C$mo me llamo% - se pregunta el muerto !ue empezaba a vivir, con voztrémula, como si se le trabara la lengua al pronunciar estas palabras.í, #c$mo te llamas% - vuelvo a preguntar, mientras me incorporo & medesplazo (acía el t$pico en busca de guantes & gasas.+o es la primera vez !ue vo& suturar pienso mientras me pongo los guantes,pero las manos me tiemblan./reparo todo: e!uipo de sutura, (ilo & agu*a, la *eringa, la anestesia, el aguapara lavar la (erida, la crema antiséptica01nspiro profundamente & e)piro, las manos de*an de temblarme, e)traigo lape!ueña *eringa de su pa!uete, me preparo para cargar la anestesia,introduzco la agu*a, retraigo el émbolo para !ue empiece a fluir lentamente el

    lí!uido mientras se forman unas pe!ueñas burbu*as.

  • 8/18/2019 CONTRACARA Cuento Albert Estrella

    2/3

    Y como parte de una rutina las golpeo con el dedo para !ue estas emer*andesde la base de la *eringa (asta la parte superior para luego salir como aire,como si la *eringa también !uisiera inspirar & e)pirar.

    /ara entonces el muerto !ue empezaba a vivir se encontraba en el t$picosentado en la camilla con la cabeza (ipere)tendida mirando el fluorescente.e pregunto si se siente bien, si &a (a parado la sangre, pero no obtengorespuesta, él sigue mirando el fluorescente.

    2esplazo mi coc(e de curaci$n a un costado de la camilla con la pierna; de lamisma forma procedo con el tac(o de desperdicios, le digo !ue se ec(e de talmodo !ue su cabeza !uede cerca (acia donde esto& desplazando el coc(e.+o obtengo respuesta, pero de improviso se su*eta el retazo de tela !ue lecubría el rostro & se recuesta lentamente (acía lado donde le (abía indicado.3ecostado como est' puedo observar c$mo se mueve la tela, entre inspiraci$n

    & e)piraci$n; mientas respira, la tela !ue a un inicio era de color ro*o brillantepor la sangre fresca se torna blanca, como si al inspirar el aire ingresara a suspulmones con sangre & todo & al e)pirar le saliera el color blanco.

    4e do& cuenta de lo raro de la situaci$n, pero sigo como si no pasara nadasostengo la *eringa con la anestesia cargada & pregunto esta vez con voz firme: #sabe usted, d$nde se encuentra% - 5ue sí sé donde me encuentro - responde como (aciéndose al tonto & *act'ndose no sé de !ué, al final de la frase; el (ec(o de !ue uno responda unapregunta con otra pregunta puede parecer normal si uno es una persona !ue(a sufrido un traumatismo en la cara o en la cabeza & (a perdido la conciencia,pero en este caso es como si la paciencia me estuviera colgando de un (ilo dearaña & la paciencia con cada pregunta se volvía m's pesada.

    &o sí sé donde esto& - me responde con toda la naturalidad del mundo - el!ue no sabe d$nde est', eres t" -

    5ue un paciente se comporte de manera e)traña, rara, peculiar o inco(erentese puede e)plicar siempre & cuando este paciente (a&a ingerido sustanciast$)icas, o !ue el golpe en la cabeza (a&a sido fuerte; así !ue prosigo con lacon la conversaci$n d'ndole la raz$n:

    dime entonces, #2$nde me encuentro% Est's & no est's, pero s$lo (a& una forma en !ue lo puedes comprobar - meresponde mientras sigue tirado sobre la camilla sosteniendo la tela en su rostro. #& cu'l es la forma% - pregunto mientras me apo&o a un lado de la camilla, &diri*o la mirada al fluorescente, !ue inesperadamente (a llamado mi atenci$n. siga (aciendo lo !ue tenga !ue (acer, & s$lito se dar' cuenta - luego de decir esto con un tono despectivo, casi insultante, se descubre el rostro.

    a tela pr'cticamente (a vuelto a su color, tiene unas manc(as de sangre peroes como si ese tipo nunca (ubiese sangrado.

  • 8/18/2019 CONTRACARA Cuento Albert Estrella

    3/3

     6 pesar de !ue ese (ec(o es demasiado impactante, lo !ue m's me impactaes el rostro del tipo, !ue &a no tiene ninguna (erida, ni tiene las $rbitasinflamadas, a(ora tiene el rostro completamente descubierto & limpio.Es demasiado siniestro e)plicar la situaci$n en la !ue me encontraba perotengo !ue decirlo con todas sus palabras, el rostro !ue observaba con total

    aturdimiento, era el mío.Cuando me di cuenta sentí como la sangre pasaba a través de mi garganta,ese sabor met'lico !ue tienen esos co'gulos, sentí como se me (inc(aban loso*os, sentí como se me nublaban los o*os0

    Cuando volví a abrir los o*os, los seguía teniendo (inc(ados; era difícil apreciar las cosas, mi mirada se concentraba en la luz del fluorescente. 6lguien me pregunt$ entonces con voz firme pero calmada:#C$mo se llama% -Y &o le di*e mi nombre, sin pensarlo dos veces mientras por dentro sentía unaresignaci$n.

    sabe usted, #donde se encuentra% - sí, me encuentro ec(ado sobre una camilla0 pronuncié estas palabrascomo cansado, como si se me apagara la voz no diga m's, (a& !ue proceder a suturar la (erida - &a no podía distinguir de!uien era esta voz !ue se parecía a la mía pero una melodía gangosa la (acíadiferente. (a& !ue suturar esa (erida para !ue no se le salga el alma - #se me va a salir el alma% - pregunté contrariado í, se te va a salir con la "ltima e)piraci$n -Y &o &a ni !uería respirar, me daba miedo así !ue lo (acía lentamente & conpoca profundidad, como aguantando la respiraci$n, como si estuviera en lasduc(as de gas, & antes de in(alar el veneno sentía la desesperaci$n del !uesabe !ue se va a morir0Y como si una voz me guiara desde le*os; alguien decía: respira, respira, no tengas miedo cuando llegues a ese lugar, si sabr's dondete encuentras - s$lo sigue la luz0

    2e repente me (e despertado con sobresalto, agitado.Trato de realizar una inspiraci$n profunda pero con miedo como si el (ec(o derespirar me provocara dolor, pero el aire pasa a mis pulmones sin resistencia,

    no siento co'gulos en mi garganta, me levanto de la cama, vo& al baño, me veoen el espe*o, todo en mi cara est' en su sitio.4e palpo el rostro para descubrir donde demonios est' la sutura !ue (aevitado se me va&a el alma.#C$mo ser' la cicatriz% Talvez los puntos los (a&a (ec(o en el aire, pero nada.Es entonces en !ue inesperadamente me llama la atenci$n la luz delfluorescente, de repente como !ue todo se llena de una luz distinta, !ue no esni blanca, ni amarilla es como si las cosas (ubiesen cobrado m's vida & el !uese pone como borroso so& &o.Y s$lo tengo la certeza de !ue alguien en mi sueño me decía:“Están tocando la puerta, es una emergencia, ponte los zapatos, camina por el 

     pasillo y atiende. En la puerta hay alguien desangrándose…”