Colegio de San Francisco de Paula. CXXV Testimonios

TESTIMONIOS CXXV

COLEGIO DESAN FRANCISCO

DE PAULA

CO

LEG

IO D

E S

AN

FR

AN

CIS

CO

DE

PA

ULA

•

CXX

V •

TE

STI

MO

NIO

S

EDITA | Colegio de San Francisco de Paula DIRECCIÓN EDITORIAL | Miguel Ángel Robles Gómez. REDACCIÓN Y DOCUMENTACIÓN | Miguel Ángel Robles Gómez, Daniel Ruiz García, José Antonio García Andrés, Sandra del Campo Lopera. DISEÑO Y MAQUETACIÓN | Ernesto Sánchez Bohórquez, Rubén Piñero Chamorro. REALIZACIÓN Y PRODUCCIÓN | Euromedia Comunicación. IMPRESIÓN | Escandón Impresores.

TESTIMONIOS CXXV

COLEGIO DESAN FRANCISCO

DE PAULA

5

Desde las páginas de esta publicación que conmemora el 125º aniversario del Colegio San Francis-co de Paula, quisiera felicitar a la comunidad educativa y a quienes están unidos a ella por lazos intelectuales y afectivos imborrables.

Hace más de un siglo se puso en marcha este proyecto que ha supuesto una contribución importante a la formación intelectual y humana de los alumnos y al progreso cultural y socioeconómico de Andalucía.

Los sucesivos equipos directivos, pedagógicos y docentes del centro han asumido el compromiso de trans-mitir a los niños y jóvenes los valores del trabajo, el respeto por la persona, el esfuerzo y la libertad de pensamiento.

Las personas son el patrimonio más valioso, el pilar de todo proyecto educativo y el futuro de nuestra sociedad. La excelencia profesional y la calidad humana de quienes pasaron por sus aulas es el reflejo de la trayectoria de éxito de esta institución.

Los andaluces sabemos que la educación es la mejor garantía de futuro. La actual sociedad del conocimien-to nos exige renovar el compromiso por la calidad educativa para que los alumnos puedan desarrollar todas sus capacidades y adquirir nuevas competencias y destrezas sociales esenciales en la era digital.

Los centros educativos son espacios para el aprendizaje de los valores esenciales para una vida en democra-cia. Espero que la celebración de este 125º aniversario sea un estímulo para seguir trabajando con responsa-bilidad por la mejora de Andalucía.

José Antonio Griñán MartínezPresidente de la Junta de Andalucía

7

El 1 de octubre de este año de 2011 la ciudad de Sevilla celebra un cumpleaños muy especial; por quien lo cumple y por los muchos años que cumple. El Colegio San Francisco de Paula llega a su ciento veinticinco aniversario. Desde el ya lejano 1885, este centro escolar ha prestado a nuestra ciudad un servicio impecable, formando a muchas generaciones de sevillanos y sevillanas en un

ambiente de respeto a las Ciencias y a las Letras y, sobre todo, de consideración y cariño al alumnado. El gran caserón de la calle Santa Ángela de la Cruz ha cobijado entre sus antiguos muros a más de 17.000 alumnos a lo largo de este productivo siglo y cuarto de existencia. En cierto modo este homenaje que le brinda la ciudad incluye también el reconocimiento y la gratitud de otros muchos establecimientos educati-vos, de vida más corta, que tanto han hecho por mejorar las condiciones de vida de nuestros antecesores.

Quizá la mejor prueba de la capacidad docente y de la entrega profesional de este Colegio sevillano la hemos podido contemplar en la exposición de documentos y libros antiguos que ha ido atesorando la Bi-blioteca del Centro y que su actual director, don Luis Rey, ha querido compartir con todos los sevillanos en las instalaciones del Real Alcázar que el Ayuntamiento ha cedido para la ocasión. La Biblioteca ha sido uno de los ejes educativos básicos en esta institución docente centenaria.

Es una satisfacción, estando al frente del gobierno de la ciudad, agradecer al San Francisco de Paula tantos años de dedicación a los niños y a los jóvenes sevillanos en un empeño tan complicado y tan vocacional como es la educación, un trabajo paciente y creativo que sin lugar a dudas constituye uno de los cimientos básicos de nuestra sociedad y la garantía de un futuro mejor. Este libro quedará como testigo de la larga historia de un Colegio ya histórico; este libro quedará sin duda como el eslabón entre el pasado y el futuro de un centro escolar modélico en muchos aspectos.

Mi más sincera enhorabuena.

Juan Ignacio Zoido ÁlvarezAlcalde de Sevilla

9

Alumnos. Chicos, medianos o grandes, más joviales o de carácter reservado, metódicos o intuitivos. Niños y niñas (de nuevo juntos, tras aberrante prohibición dictatorial) que crecen y se desarro-llan, conociéndose y preparándose para una vida en que la colaboración les deberá hacer más fructíferos y felices. Llenos de energía e ilusiones, con un camino por trazar, un universo por

descubrir, un mundo que mejorar con su creatividad, su esfuerzo, sus aportaciones.

Sin duda lo mejor de un colegio, los alumnos son (y deben siempre ser) la máxima prioridad de cuantos constituimos el sistema educativo: desde quienes lo legislan y dirigen, hasta los que, años después, vuel-ven a él en calidad de padres, pasando por los que a diario le transfundimos existencia. Porque ellos han de construir su futuro, porque su vida es demasiado valiosa como para que no hagamos todos cuanto sea posible por ayudarles a formarse: emocional, intelectual, culturalmente, hasta convertirse en adultos de existencia fecunda que generen progreso y felicidad para sí y en derredor. Y eso requiere nuestro estímulo, que asumamos la responsabilidad que tenemos y que paulatinamente habrán ellos de afrontar – pues tam-bién en ese delicado proceso nos cabe parte.

Nada hay más gratificante para un educador que el afecto de sus alumnos. A veces este tiene su origen en hechos que uno consideró menores, pero que permanecen grabados indeleblemente en el espíritu recep-tor; en otras ocasiones ocurre que, cual ciertas plantas, y acaso porque nunca podemos ser perfectos, ese sentimiento necesita tiempos fríos antes de florecer – pero eso sólo añade valor, y robustez, a los nuevos brotes. Junto a ese vínculo, la otra gran satisfacción es ver cómo dichos jóvenes superan las limitaciones de las generaciones precedentes, alcanzan su propia plenitud y contribuyen a que la sociedad avance hacia superiores condiciones para todos. Todo verdadero maestro ha hecho del amor su mejor regla, toda persona cabal ha buscado que quien le suceda vea más lejos – como, a su inmensa escala, aquellos gigantes de la ciencia a cuyos hombros Newton afirmara haberse aupado.

Por todo ello en el Colegio de San Francisco de Paula siempre hemos valorado de modo muy especial la cercanía y los logros de nuestros alumnos. De esos niños y adolescentes que, como su mejor tesoro, sus padres nos hicieron un día el honor de confiarnos, y que tantas, ¡tantas – y nunca demasiadas!, veces retor-nan para devolvernos, acrecentado, el aliento y el cariño que antaño procuramos darles. En este centésimo vigésimo quinto aniversario hemos compilado el testimonio de ciento veinticinco muy señalados antiguos alumnos. No están todos los muchísimos que son, y bien duro que ha resultado restringirse a este número: pero son todos los que están, como bien demuestran unas palabras que nos llegan al corazón, y que desde el fondo del mismo agradecemos emocionadamente.

Quienes ahora dedicamos nuestras vidas al Colegio somos conscientes de la tremenda responsabilidad que nos cabe. Sabemos el reto que supone intentar estar a la altura de nuestros predecesores y continuar adap-tando ese lema de respeto y trabajo a los convulsos tiempos actuales. Pero el ejemplo de los que nos ante-cedieron, el calor y el ánimo que nos infunden nuestros antiguos alumnos, la confianza y la colaboración de los padres y, por encima de todo, el entusiasmo y el futuro de los jóvenes que llenan cada día nuestras aulas, nos impulsan a hacer cuanto podemos y sabemos para arrostrar las dificultades y esforzarnos por mejorar, con la siempre costosa independencia que permanentemente nos hemos honrado en preservar.

Muchas gracias a Euromedia por la idea de este maravilloso libro; muchísimas a don Miguel Ángel Robles Gómez por la ingente empresa de compilar y dar forma a tantos y tan diversos escritos; e infinitas a todos los que, a lo largo de siglo y cuarto, día tras día y hasta hoy, han contribuido en sus diversos modos a que podamos celebrar este aniversario. Que seamos capaces de dar a nuestros sucesores motivos de legítimo orgullo, como tantos podemos nosotros tener de quienes nos precedieron.

Luis Rey GoñiDirector del Colegio de San Francisco de Paula

10

Teniente General del Ejército de Tierra jubilado, D. Fermín Casado Cepeda fue un buen estudiante en el Colegio, capaz de terminar un curso antes los seis años del Bachillerato de entonces. En una época de gran convulsión política, previa al estallido de la guerra civil, recuerda que había discusiones políticas entre los alumnos, pero nunca dentro del Colegio, porque D. Luis y D. José Rey Guerrero no lo permitían. Piensa que el Colegio le ayudó a adquirir sentido de la responsabilidad sobre el trabajo así como a valorar el compañerismo y dice que desde entonces ha mantenido una gran amistad con la familia Rey. “Hace unos años, caí muy enfermo, y mis hijos me contaron que D. Luis Rey Romero iba casi todos los días al hospital a enterarse de cómo estaba”, comenta agradecido. Sus dos hijos varones han estudiado en el Colegio y una de sus hijas también preparó en él el ingreso en la Universidad. “Los que hemos ido al San Francisco de Paula hablamos bien del Colegio y después hemos llevado a nuestros hijos allí. En mi opinión, eso es una buenísima señal”, manifiesta.

SEIS AÑOS, EN CINCO. “Entré en el Colegio San Francisco de Paula con nueve años para empezar a estudiar lo que entonces se llamaba Bachillerato. Estuve allí hasta que terminé, pero adelanté curso, de modo que si el Bachillerato dura seis años, yo lo acabé en cinco. Mi padre quería un colegio que tuviera buena enseñanza, aunque no tuviera fama de colegio de élite en aquel momento, tenía fama de ser una buena institución educativa. Era buen estudiante, tenía muy buenas notas. Nunca he presumido de eso, pero si me pregunta… Siempre estaba entre los tres primeros en todas las materias. Mis asignaturas favoritas siempre eran las de Ciencias, matemáticas sobre todo”.

SIN SUBSIDIOS. “Los chicos que estábamos allí pertenecía-mos a familias de clase media-alta o clase media. No eran hijos de familias de renombre. Además también había alumnos que estudiaban a través de becas, becas que el Colegio daba. Otra cosa que marcaba mucho la personalidad del Colegio es que nunca recibió sub-sidios, al menos cuando yo estuve escolarizado allí. Ni tan siquiera en momentos en los que el Colegio iba mal económicamente, aceptaron subvenciones de ningún organismo público. Lo cual le permitía tener una libertad total para enseñar”.

MUY TRABAJADORES. “En el Colegio adquirí sentido de la responsabilidad sobre el trabajo, los que estu-diábamos allí hemos sido todos muy trabajadores… Y también el compañerismo”.

n En el 37 se alistó en el Ejército donde adquirió el rango de Oficial Provisional. Al finalizar la guerra civil ingresó en la Academia militar de Ingenieros en Burgos donde ascendió a teniente del Arma de Ingenieros del Ejército.

n Lo destinaron a Madrid y al mes adquirió el rango de Capitán del Arma de Ingenieros. En la División de Caballería de Madrid permaneció cuatro años, hasta que logró el rango de Comandante y lo trasladaron a Mallorca, allí permaneció tres años.

n Regresó a Madrid donde permaneció hasta que se casó con Dª Pilar de la Puerta y trasladó su residencia familiar a la capital andaluza, donde tras diez años, fue nombrado Teniente Coronel del Arma de Ingenieros del Ejército, permaneciendo 5 años al frente del Regimiento de Ingenieros de Sevilla.

n Ascendió a General de Brigada en Sevilla como cabeza visible de la segunda región militar del país. Más tarde, ya como General de División lo destinaron a la Jefatura de Ingenieros del Ejército en Madrid, de modo que llegó a ser el máximo representante del Arma de Ingenieros en España.

n Su último destino fue Galicia como Teniente General donde en 1984 fue nombrado Hijo adoptivo de A Coruña. A los 68 años pasó a la reserva y se jubiló.

n Tiene los siguientes reconocimientos: Medalla de la Campaña 1938, guerra civil Española; Cruz de Guerra; Gran Cruz de San Hermenegildo, y Gran Cruz del Mérito Militar con distintivo blanco.

Fermín Casado CepedaTeniente General del Ejército de Tierra jubilado

“Los que hemos ido al San Francisco de Paula hablamos bien del Colegio y después hemos llevado a nuestros hijos allí, lo que es una buenísima señal”

DESPUÉS DEL COLEGIO

11

LAS DISCUSIONES, FUERA DEL COLEGIO. “Ideología teníamos la que queríamos, afortunadamente nunca hubo muchos follones. Había alum-nos que eran ateos y otros que eran religiosos, pero si en alguna ocasión surgió algún conflicto, normalmente era por temas políticos, no por cuestiones de fe. Allí había gente que, por su familia, eran republicanos cuando el país era monárquico. Sí que había discusiones entre alumnos, pero no dentro del Colegio, porque D. Luis y D. José jamás lo habrían permitido. Pero recuerdo que durante nuestras visitas a edificios históricos de la ciudad, algunos chicos de padres republicanos se negaban a entrar en las iglesias, llegaban hasta la puerta y comenzaba a insultar a los que entrábamos. Eran chicos que a pesar de su corta edad, no tenían más de trece años, les gustaba alardear de sus principios republicanos”.

D. JOSÉ Y SU MADRE, Dª TERESA. “Sin duda alguna, D. Joaquín del Olmo fue un profesor que me marcó mucho, era un hombre mayor con una perso-nalidad enorme, que nos enseñó química. Pero recuerdo que cuando ingresé en el Colegio quien más me impacto fue D. José Rey Guerrero, el Director y tío-abuelo de D. Luis Rey. Era un hombre con quien podías hablar de cualquier cosa desde el primer momen-to. Por esa razón, rápidamente comenzabas a tenerle aprecio. En aquel entonces el Colegio, a pesar de que era pequeño, ya tenía alumnos internos que vivían allí. Yo no. La madre de D. Luis y D. José, Dª Teresa, era quien se encargaba de estos niños. Nunca la olvidaré, era una mujer muy cariñosa, y aunque los externos no viviéramos allí, si te dolía algo o te pasaba alguna cosa, ella siempre se preocupaba por nosotros”.

D. FRANCISCO BALÓN. “Hice muchos amigos, pero mi mejor amigo era Francisco Balón. Curiosamente jugaba muy bien al fútbol. A mí desde pequeño me gustaba también el fútbol y formaba parte del equipo del Colegio, pero Balón era quien organizaba el equipo ya que era el mayor. Tenía un par de años más que yo, pero íbamos al mismo curso y nos hicimos muy amigos. Balón llegó a ser jugador del Betis a pesar de ser sevillista (risas). Desgraciadamente quedamos ya muy pocos… Yo creo que quizás sea el último de mi promoción. Uno de los últimos que ha fallecido ha sido precisamente Paco, Paco Balón”.

LA ELECCIÓN DE LA CARRERA MILITAR. “Todos mis profesores me recomendaban que estudiara inge-niería porque sabía mucho de matemáticas. Cuando estalló la guerra, yo estaba en Madrid, matriculado en una academia de preparación especial que había para aquellos que quisiéramos presentarnos a las pruebas de ingreso en la Escuela de Ingenieros de Caminos. Finalmente, pasé la primera criba, pero la segunda la suspendí. Y digo que ‘con suerte’ porque mi familia estaba en Sevilla y yo vivía solo en Madrid. La Guerra estalló un 18 de julio y yo regresé a mi casa en Sevilla el día 6, apenas una semana antes. La guerra me hizo darme cuenta que lo que yo realmente quería era ser militar, más incluso que estudiar ingeniería”.

ORDEN EN LA SALA. “Como anécdota, recuerdo las horas que teníamos libres todos teníamos que ir al salón de estudios. Allí había un señor muy estricto que se encargaba de mantener el orden en la sala, pro-curaba que todos estuviéramos en silencio y estudiando. Cuando alguno no se callaba, lo llamaba y con una palmeta le daba en la mano (risas). Este señor murió muy pronto y lo de los palmetazos desapareció”.

GRAN AMISTAD CON LA FAMILIA REY. “Cuando era joven y vivía en Sevilla siempre iba a visitar al Colegio. Pero luego estalló la guerra y yo quería ir al frente. A mi me ha unido una gran amistad con la familia Rey. Hace unos años, caí muy enfermo, y mis hijos me contaron que D. Luis Rey Romero iba casi todos los días al hospital a enterarse de cómo estaba. Mis hijos varones todos han ido al Colegio. Y una de mis dos hijas estuvo en el Colegio para preparar su ingreso en la Universidad. La más pequeña completó todos sus estudios en otro colegio religioso”.

CONDUCTA MORAL Y SENTIDO DEL TRABAJO. “Desde mi punto de vista los valores que deberían incul-carle a los niños en el colegio son una conducta moral adecuada y el sentido del trabajo. Todos los que hemos ido al San Francisco de Paula hablamos bien del Colegio y después hemos llevado a nuestros hijos allí. En mi opinión, eso es una buenísima señal”.

“Allí había gente que por su familia eran republicanos cuando el país era monárquico. Sí que había discusiones entre alumnos, pero no dentro del Colegio, porque D. Luis y D. José jamás lo habrían permitido”

12

Empresario con más de 60 años de trayectoria, Francisco Benítez Guillén ingresó en el Colegio en el año 1931, tras trasladarse su familia a Sevilla desde Cazalla de la Sierra, su pueblo natal. Se recuerda como un “malísimo estudiante” durante el invierno que sólo lograba ponerse delante de los libros en verano para aprobar los exámenes de septiembre. Con la guerra civil, perdió a su padre, y, como tantos hermanos mayores de tantas familias en esos años, tuvo que ponerse a trabajar para sacar adelante la suya. Y así fue como empezó a forjarse la gran trayectoria empresarial de este sevillano emprendedor, que define el San Francisco de Paula como un colegio extraordinario, ejemplar , familiar, y muy diferente a otros, aunque reconoce que en realidad el único colegio que él conoce es el San Francisco de Paula, “gracias a Dios”. Piensa que el paso por sus aulas le ayudó mucho a afrontar la situación tras la muerte de su padre y comenta que los valores que recibió del Colegio fueron “caballerosidad siempre, respeto, educación y saber andar por la vida”

INGRESO EN 1931. “Entré en el Colegio en 1931. Yo nací en Cazalla de la Sierra (Sevilla) y por aque-lla época en el colegio sólo te enseñaban a leer y escribir, por eso mi padre quiso que tuviera estudios superiores y decidieron trasladarse a Sevilla, y entré en el San Francisco. Yo comencé en párvulo con 9 años y terminé en cuarto de Bachillerato. Yo era un malísimo estudiante, no estudiaba no porque fuera torpe, porque me cateaban en junio y luego en septiembre las aprobaba todas, yo es que estudiaba solo en verano. No había ninguna asignatura que me gustara de forma especial, quizá geografía”.

LLEGÓ LA GUERRA Y TUVO QUE PONERSE A TRABAJAR. “El título de Bachillerato no pude conseguir-lo porque el día que me tenía que examinar tuve que asistir al entierro de mi padre y terminé entonces mis estudios. Era plena guerra y arreglé vías de tren destrozadas, muelles,… y todo fue porque al morir mi padre que era abogado, en casa no quedó dinero, tuvimos que malvender muebles y trabajar para alimentar a siete personas y yo como era el mayor de los hermanos tuve que dejar los estudios y ponerme a trabajar”.

LA PERSONALIDAD DEL COLEGIO. “Yo diría que es un Colegio extraor-dinario, ejemplar y familiar. Sobre todo esto último, pues hace poco he tenido un detalle del actual director y de su madre que no olvidaré nunca”.

SABER ANDAR POR LA VIDA. “¿Qué valores recibí del Colegio? Caballero-sidad siempre, respeto, educación y saber andar por la vida”.

SIN PROBLEMAS DE CONVIVENCIA. “Sí desde luego, la pluralidad siem-pre fue un rasgo de identidad del Colegio. Recuerdo que había un profesor, creo que era concejal del Ayuntamiento republicano, Don Alberto, que era muy de izquierdas y se comportó como un magnífico educador. En el San Francisco de Paula no había problemas de convivencia, siempre recordaré

n Francisco Benítez Guillén ha tenido una larga trayectoria como empresario, con más de 60 años en el sector del cash and carry de ferretería. n Durante esta trayectoria, ha abierto grandes ferreterías en varias localidades españolas, entre ellas el mayor cash and carry de ferretería de España, inaugurado en Badajoz en 2007, y con más de 30.000 referencias.

Francisco Benítez GuillénEmpresario

“El San Francisco es un colegio extraordinario, ejemplar y familiar, sobre todo esto último”

“Yo en invierno no estudiaba, me

cateaban en junio y en septiembre las

aprobaba todas, sólo estudiaba en verano”


13

que la calle se llamaba Alcázares y que Sor Ángela de la Cruz murió en 1932 y, habiendo un ayuntamiento totalmente republicano, cambiaron el nombre de la calle por el de Sor Ángela”.

DON NICOLÁS GELO. “Don Nicolás Gelo fue el profesor que más me influ-yó personal y académicamente. Recuerdo que la primera alumna que hubo en el Colegio fue su sobrina”.

COMPAÑEROS. “La verdad es que perdí bastante el contacto con los que fueron mis compañeros, porque yo me fui antes del Colegio y ellos se quedaron allí. Entre los compañeros que tuvieron luego una trayectoria destacada, yo destacaría a Julio López Mejías, a Antonio Zambrano Corta-da y a Octavio Mollet Guerra, como excelentes médicos. También coincidí con Francisco Capote Mancera y Antonio Palacios Martín, que ahora son abogados, y con Roberto Valiente, que ahora es arquitecto”.

AYUDA EN SU CARRERA. “Me influyó muchísimo por las circunstancias en las que me encontré. Tuve que encontrar salida a mi situación y me sirvieron de mucho los conocimientos que yo recibí en el Colegio”.

ANÉCDOTA. “Una mañana antes de clase estábamos jugando en el patio durante el recreo. Allí en el centro había un husillo y mientras jugábamos a la pelota salió una rata y nosotros empezamos a darle patadas hasta que me cayó en la mano y me mordió en la muñeca. Parece una tontería pero esas cosas no se olvidan, porque me tuvieron que llevar al médico y poner-me una vacuna en el vientre cuando a mí siempre me han dado pánico las inyecciones”.

VÍNCULO. “El contacto con el Colegio lo he mantenido tanto con Luís Rey como con su madre y su difunto padre, con los tres he tenido una muy buena relación y a día de hoy la sigo manteniendo, por supuesto. Y con el Colegio en general. Luís me ha invitado en muchas ocasiones al centro pero no quiero ir porque prefiero mantener ese recuerdo de niño, y aunque sé que ahora estará mejor, prefiero conservar el recuerdo que tengo de cuando yo estudiaba allí”.

AYER Y HOY. “En general, creo que ahora los alumnos están mejor prepa-rados en cuanto a tecnología, y en las asignaturas, pero creo que no pasa lo mismo con la educación, el respeto, el comportamiento y la urbanidad. En la educación de hoy echo en falta la formación en valores, tan impor-tante en mi época. Yo recuerdo que más de una vez Don Nicolás Gelo en clase de caligrafía me daba con los nudillos en la cabeza y aquello lo valoro. Las nuevas generaciones están mejor preparadas pero les faltan los valores de antaño”.

UNA RECOMENDACIÓN PARA EL FUTURO. “Yo le diría a Luís Rey Goñi que no se muera”.

LA DIFERENCIA DEL SAN FRANCISCO. “Creo que para eso habría que conocer otros colegios, y yo sólo conozco el San Francisco de Paula, gracias a Dios.”

“¿Qué valores recibí del Colegio? Caballerosidad siempre, respeto, educación y saber andar por la vida”

“El San Francisco me influyó mucho por las circunstancias en las que me encontré tras la muerte de mi padre. Tuve que encontrar salida a mi situación y me sirvieron de mucho los conocimientos que yo recibí en el Colegio”

“¿Una recomendación?Yo le diría a Luís Rey Goñi que no se muera”

14

Ingresó en el Colegio en septiembre de 1935, procedente de un colegio eclesiástico anterior, siguiendo su padre la recomendación de un gran amigo suyo, y dice que ensegui-da notó la diferencia de una enseñanza no memorística, sin libros de texto apenas, con un criterio liberal de la ense-ñanza, y con formación de una personalidad de tolerancia y capacidad de discusión. De hecho, y a pesar de haber estudiado durante la guerra civil y los primeros años de posguerra, recuerda haber recibido una enseñanza neutral y sin excesos partidarios, “aspecto difícil en una época con sus odios y mentalidades extremas”.

UN GRAN CAMBIO. “Yo salía de un colegio eclesiástico anterior y, por decisión de mi padre, pasé al Colegio de San Francisco de Paula por consejo de un gran amigo suyo, D. José Hernández Díaz. Enseguida notamos la diferencia de una enseñanza no memorística, sin libros de texto apenas (excepto la Historia de Roma de Malet), con redacción escrita de las lecciones habladas, con un criterio liberal de la enseñanza, con formación de una personalidad de tolerancia y capacidad de discusión”.

UN MISTERIO. “La orientación de la docencia durante la guerra civil, en la que había que escoger entre los dos bandos enfrentados, tenía forzosamente que ubicarse entre la tendencia del nacional catolicismo y política de derechas, y una alternativa librepensadora de izquier-das. El Colegio estaba catalogado en Sevilla como ‘rojo’, con su enseñanza y estudios sobre personalidades como Antonio Machado, Federico García Lorca (Romancero Gitano), Pío Baroja, Alberti (Marinero en Tierra), Miguel Hernández, Azorín, etc., condenados a un indice de libros prohibidos, tanto por la Iglesia como por las autoridades civiles, que habían prohibido su lectura y divulgación. En el Ateneo de Sevilla existía un cuarto cerrado con todos los libros ilegales y vedados durante muchos años después. Para mí es un misterio que el Colegio no fuera castigado severamente, pero durante la guerra y postguerra inmediata nunca fue sancionado o suspendido por las autoridades gobernantes. (…) La enseñanza recibida fue neutral y formativa de un criterio y pensamientos liberales, sin excesos partidarios, aspecto difícil durante una Guerra Incivil con sus odios y mentalidades extremas, aniquilación de pensamientos contrarios, y lo que es peor, incluso la eliminación de personas ‘enemigas’ en ambos bandos”.

LA PARTE DE RAZÓN DE TU INTERLOCUTOR. “Lo que el Colegio me enseñó primordialmente fue a redactar y condensar las conferencias, y textos integrados para su lectura en casa y entregar los resúmenes e impresiones experimentadas. En segundo lugar, el llegar a pensar qué parte de razón podía tener mi interlocutor o autor de libro e intentar comprender sus ideas y criterios. Y en tercer lugar y muy importante, una excelente preparación para el difícil Examen de Estado final del año 1941 en el que obtuvimos Sobresaliente y Premio Extraordinario Paco Sicardo y yo, amén de una cultura general amplia y profunda”.

PROFESORADO. “El Colegio fue fundado en 1885 y estaba dirigido por los hermanos Rey Guerrero, D. José y D.

n Carrera de Medicina, Universidad de Sevilla, 1941-1948. Doctor en 1967.

n Título de Especialista en Anestesia y Reani-mación 1953-1954.

n Jefe de Servicio de Anestesia y Reanimación de la Cátedra de Patología Quirúrgica de la Facultad de Medicina de Sevilla desde 1955 a 1967.

n Jefe Clínico de Servicio de Anestesia y Re-animación por oposición C.S. Virgen del Rocío en 1967.

n Jefe de Departamento del C.S. “Virgen del Rocío” desde 1974 hasta su jubilación en 1994.

n Académico correspondiente de la Real Aca-demia de Medicina de Sevilla 1967.

n Profesor Asociado Médico de Anestesiología 1988.

José María Gutiérrez GoicoecheaMédico Especialista en Anestecia y Reanimación

“Recibí una enseñanza neutral, sin excesos partidarios, aspecto difícil durante una Guerra Incivil con sus odios y mentalidades extremas”


15

Luis, durante mi estancia en sus aulas. A D. José Rey, licenciado en Letras y Derecho, le pilló la guerra en Madrid y Alicante, pero regresó pronto a Sevilla y se encargó de la enseñanza de Letras; alto, bien vestido, tranquilo, con su frecuente frase ‘Hijo querido ¿Qué te ha pasado?’, falleció en 1982. D. Luis, licenciado en Química y Farmacia, era más bajo, nervioso, explicaba ciencias, con frecuentes preguntas a los alumnos, falleció en 1979. Ambos hermanos se complementaban estrechamente. El resto del profesorado era D. Leandro Díaz (matemáticas), Dª María Abele (alemán), D. Manuel Bermudo (literatura en la ausencia de D. José Rey), D. Francisco Repetto, D. Nicolás Gelo (párvulos), D. Amancio Mendoza y D. Germán Delgado (estudios) y un largo etcétera. La en-señanza recibida de todo el profesorado (...) facilitó la aprobación del Examen de Estado de los 30 compañeros míos presentados por el Colegio”.

COMPAÑEROS. “Desgraciadamente, de los 30 colegas que abandonamos el Colegio en 1941 solo viven 2, han fallecido 28, y somos supervivientes Juan Tristando y yo, que ya he cumplido 87 años. Siempre permanece-rán en mi recuerdo y que descansen en paz y el Señor los tenga en su gloria. Uno de ellos era Emilio Segura Olloqui, gran amigo y gran señor de la escena sevillana. Actuó mucho en el teatro, fundador de la Agrupación Álvarez Quintero que tuvo grandes éxitos en Sevilla y Madrid, trabajó también en Radio Nacional de España (su gran éxito fue Piruetas), T.V.E-Cine (Malvaloca) y culminó en la interpretación del monólogo psiquiátrico Las manos de Eurídice, escrito por Bloch (autor del guión de Psicosis de Hitchcock). Otro compañero de curso fue Luis González que tuvo una actuación muy fructífera en la enseñanza ejercida en el Colegio durante mu-chos años posteriores”.

LA CARRERA DE MEDICINA. “Mi elección de la carrera de Medicina fue compartida por los compañeros finalistas del Examen de Estado que ingresamos en el Hospital de las Cinco Llagas (Macarena) y la Facultad de Medicina (C/ Madre de Dios) por lo que es indudable que hubo relación entre la docencia del Colegio y la elección de carrera, pero que no puedo especificar qué factores influyeron en esa decisión de 1941, que integró un primer curso de 40-50 futuros médicos”.

CAFÉ POR LA GLORIA DE MI PADRE. “Respecto a las anécdotas, todavía yacen en la memoria, el primer cigarrillo fumado clandestinamente en los servicios del patio posterior, los nervios desatados en el Teatrillo (De noche mataron al caballero, La gala de Medina, La flor de Olmedo). El cierre del Colegio cuando las tropas na-cionales iban a ocupar una ciudad de provincias (‘Mañana no hay colegio porque se va a tomar Tarragona’). El bocadillo de jamón por 30 céntimos y el súper de 50 céntimos de la Universal en la esquina de Laraña y Orfila, y el cartel de un bar de La Europa con tiza: ‘café= 30cts’; ‘café-café= 40cts’; ‘café por la gloria de mi padre= 50cts’. Era el año del hambre 40-41”.

SIGUIÓ EL CONTACTO. “Durante el resto de mi vida, siguió mi contacto con el Colegio, particularmente con la estancia de mis cuatro hijos y después con la creación de la Asociación de Antiguos Alumnos en 1993”.

IDIOMAS Y NUEVAS TECNOLOGÍAS. “Es evidente que la docencia actual está basada en el dominio incrementado de ordenadores, y cada vez más complejos, procedimientos en los que el Colegio adopta rápidamente y recibe premios por su uso. La juventud actual necesita conocimientos profundos e incluso especializados de idiomas clásicos (inglés, francés, etc.) o modernos (chino en el futuro próximo) para poder afrontar debidamente la salida del Colegio y encontrar trabajo bien remunerado y estable”.

EL ALMA MATER DE NUESTRA VIDA. “Pienso que el Colegio sigue la misma línea y objetivos básicos en la adquisición de conocimientos y formación de la personalidad y que seguirá el contacto con el Colegio después de abandonarlo, porque constituye el Alma Mater de nuestra vida. (...) El Colegio debe seguir siendo, como fue desde su fundación en 1885, una institución educativa que combine la enseñanza teóri-ca y práctica con la formación global de la juventud a su cargo. Las figuras y personalidades de D. José y D. Luis, siempre estarán presentes en la memoria e historia futuras del Colegio, gracias a los esfuerzos de sus sucesores D. Luis Rey Romero y D. Luis Rey Goñi”.

“El Colegio me enseñó a pensar qué parte de razón podía tener mi interlocutor e intentar comprender sus ideas y criterios”

16

Pedro Castro fue alumno del Colegio en los difíciles años de la postguerra. De hecho, ingresó en el San Francisco de Paula durante la contienda, en 1937. A pesar de ello, el recuerdo es muy grato y feliz. Adoraba las matemáticas y en general todas las Ciencias, demostrando una temprana predilección por los terrenos que más tarde le valdrían el reconocimiento profesional. “En toda mi vida he tenido un suspenso”, sostiene, con un recuerdo especial para los profesores que más le marcaron: los hermanos Rey Guerrero y el profesor de Matemáticas D. Leandro Díaz de Urmeneta. “Valoro mucho el liberalismo y el sentido de responsabilidad que intentaron inculcarnos, así como la educación respeto a los profesores”, explica. Y no puede olvidar la anécdota de que los dos Directores del colegio, D. José y D. Luis, se hablaban de Usted en público. A sus 80 años, Pedro Castro, uno de los fundadores de la Asociación de Antiguos Alumnos Rey Guerrero, aún mantiene el contacto habitual con muchos de sus ex compañeros. Uno de ellos, de hecho, es su compadre.

ALUMNO DE POSTGUERRA. ”Ingresé en el Colegio en enero de 1937, ya que por cuestiones de salud no pude hacerlo en septiembre del 1936. Mi hermano mayor estaba ya en el Colegio y mis padres se encon-

traban satisfechos. Estuve desde párvulo hasta aprobar el llamado Examen de Estado en 1947. En resumen, 11 años. (…) De mis hijos, los tres varones han estudiado en el Colegio, las hembras no porque no existían colegios mixtos”.

JUVENTUD FELIZ. ”Mis recuerdos son muy gratos. Fui un buen alumno como en general éramos todos en aquella época, la juventud no tenía ninguno de los problemas de los que tiene hoy. Mi asignatura preferida fue matemáticas y las otras de Ciencias como física, química, etc. En toda mi vida he tenido un suspenso”.

PERSONALIDAD. ”Los Directores, D. José, licenciado en Filosofía y Dere-cho, y D. Luis, en Química y Farmacia, irradiaban su propia personalidad al Colegio. Los que particularmente más me marcaron fueron los hermanos Rey Guerrero y el profesor de matemáticas D. Leandro Díaz de Urmeneta”.

SIEMPRE DE USTED. ”Valoro mucho el liberalismo y el sentido de respon-sabilidad que intentaron inculcarnos, así como la educación y respeto a los profesores. Por ejemplo, una cosa que me impactó fue que siendo D. José y D. Luis los Directores del Colegio, en público se trataban de Usted”.

AMIGO Y COMPADRE. ”Uno de mis mejores amigos, compañero del

n Profesor Titular de la Escuela Universi-taria Politécnica de Sevilla entre los años 1984 y 2000, dentro del Departamento de Ingeniería Eléctrica.

n Fue Director gerente las empresas Tran-vías de Sevilla e Hidrocalor Sur.

n Fue Presidente del Colegio Oficial de Peritos Industriales de Andalucía.

n Fundó la Asociación de Antiguos Alum-nos Rey Guerrero, en la que ejerció como Vicepresidente y Presidente.

Pedro Castro Artigas Ingeniero Industrial

“Intenté actuar siempre como había visto a mis antiguos profesores”

“Además de haber llegado a Presidente

del Colegio Oficial de Peritos Industriales de Andalucía, uno de los logros de los que me siento más orgulloso en mi vida fue haber

sido cofundador y primer Presidente de

nuestra Asociación de Antiguos Alumnos Rey

Guerrero”


17

Colegio, junto a su esposa, son padrinos de una de mis hijas. Ahora, por razones edad (hemos pasado ya de los ochenta años), nos reunimos menos, pero hasta hace poco nos reuníamos semanalmente y con los restantes compañeros de curso nos hemos reunido frecuentemente en comidas que organizábamos”.

MIRÁNDOSE EN EL ESPEJO DE LOS MAESTROS. ”La influencia del Cole-gio ha sido primordial, en mi vocación quizás no mucha porque la tenía marcada por una serie de razones, pero sí en mi trayectoria profesional. Profesor durante más de 50 años en la Escuela Universitaria de Ingenie-ría Técnica Industrial de Sevilla, intenté actuar siempre como había visto actuar a mis antiguos profesores”. PETROMAX. ”En nuestra época las clases empezaban a las 8 de la mañana en nuestros dos últimos cursos y se impartían iluminadas por Petromax, artilugio que funcionaba con petróleo, por las restricciones eléctricas de entonces y porque naturalmente no había calefacción...”.

ASOCIACIÓN REY GUERRERO. ”Siempre había tenido la idea de una asociación de antiguos alumnos, idea que compartía con mi antiguo compañero de curso, Javier Martínez de Azcoytia, y que se consiguió finalmente, siendo el primer Presidente de ella, en la que tuve una colaboración extraordinaria de Julio López Mejias, ya fallecido, sin el cual no hubiese podido sacarla adelante. (…) Además de haber llegado a Presidente del Colegio Oficial de Peritos Industriales de Andalucía, uno de los logros de los que me siento más orgulloso en mi vida fue haber sido cofundador y primer Presidente de nuestra Asociación de Anti-guos Alumnos Rey Guerrero”.

EN BUENAS MANOS. ”Creo que el Colegio sigue en buenas manos y que el biznieto de los fundadores del mismo, mi admirado Luis Rey Goñi, lo está llevando por el camino correcto, incorporando las Nuevas Tecnologías. (…) Con vistas al futuro, recomiendo al Colegio que siga manteniendo su ideario sin cambiar”.

POCOS CAMBIOS. ”Estimo que la forma de enseñar poco ha cambiado: una materia explicada por el profesor, que luego se debe asimilar por el alumno. Las nuevas generaciones pueden que tengan peor formación inicial, porque en muchos colegios no se mantiene una adecuada relación profesor-alumno en las primeras relaciones entre ambas partes”.

“Estimo que la forma de enseñar poco ha cambiado: una materia explicada por el profesor, que luego se debe asimilar por el alumno”

18

Catedrático Emérito de la Universidad de Sevilla, Guillermo Paneque afirma que su larga carrera científica empezó a cimentarse en el Colegio, empujada por D. Luis Rey Guerrero, quien le descubrió la Edafología, una ciencia relativamente nueva entonces y a la que él dirigiría con el paso de los años buena parte de sus estudios e investigaciones. Formado en los difíciles años de la guerra civil y la posguerra, recuerda que la Dirección fue capaz de mantener criterios propios respecto a algunas cuestiones de organización, que se hicieron del modo que el Colegio consideró más adecuado, aunque hubieran sido dispuestas de otra manera por el propio Ministro de Educación Nacional. Y piensa que esa ha sido la tónica del Colegio en toda su Historia: la independencia de criterio y la defensa de ese criterio frente a otras posiciones no compartidas.

CRITERIOS PROPIOS. “Estudié durante once años en el San Francisco de Paula. (…) La educación que recibí en el Colegio durante los primeros cursos de Primaria tuvo lugar en los años centrales de la guerra civil de 1936. El resto de la enseñanza que cursé -incluida la preparación para la Reválida de Estado- transcurre desde el citado año final de aquella contienda fratricida y la primera década de la post-guerra. (…) A pesar de mi corta edad pude apreciar (…) que la Dirección mantenía criterios propios respecto a algunas cuestiones de organización ‘aunque hubieran sido dispuestas de otra manera por el propio Ministro de Educación’. Siempre he tenido la impresión de que el Colegio mantiene cierta independencia y criterios propios en muchas materias; y los defiende firmemente como institu-ción docente privada frente a otras posiciones intelectuales, sociales y morales que no comparta plenamente”.

COLABORACIÓN DE LOS PADRES. “Los padres de los alumnos colaboraban en la disciplina del Colegio; agrade-cían con su presencia o por escrito el interés que el Colegio mostraba en el estudio de los hijos, y ayudaban todo cuanto podían; y no solo cuando los resultados académicos eran buenos, sino también cuando manifestaba el Colegio la conveniencia de una mayor dedicación y esfuerzo del alumno al estudio”.

TRES GENERACIONES REY. “Tengo el honor y la satisfacción personal de haber conocido a tres generaciones Rey como Directores. Unos, como Profesores míos, muy queridos y a los que siempre estaré agradecido (me refiero a D. José y D. Luis Rey Guerrero). Otro Director, D. Luis Rey Romero, estudiante de la Facultad de Ciencias (Quí-mica) en la calle Laraña cuando yo me doctoraba. Posteriormente, como Catedrático de la Facultad de Química, colaboré con él como Delegado de la Universidad de Sevilla en el curso de Selectividad; y siempre nos profesa-mos mutuamente gran amistad. Finalmente, al actual Director, D. Luis Rey Goñi -compañero en algunos cursos del Bachillerato en el San Francisco de Paula de mi hijo Carlos-, le tengo la satisfacción de considerarlo entre mis alumnos más brillantes de la Facultad de Química. Hoy, Dª Maribel Goñi, como Directora de la Escuela Infantil, es responsable de la formación de mis nietos Carlos y Luis Paneque Calvo”.

DON NICOLÁS Y SU REGLA. “Guardo grata memoria como alumno-niño del San Francisco de Paula. La pri-mera etapa de mi formación aquí la llena casi por completo el recuerdo de D. Nicolás Gelo Rodríguez, referente indiscutible para muchas generaciones de alumnos. Maestro, guía, tutor y Director del 2º Curso de Primaria fue profesor respetado y querido. Aljarafeño de Albaida, bien podría ser de estirpe romana: mitad legionario, mitad

n Licenciado en Farmacia por la Universidad de Granada (1953). Doctor en Farmacia (1957)Diplomado en Edafología y Fisiología Vegetal en la Universidad de Sevilla (1959).

n Profesor de Investigación del CSIC. (1971 Catedrático de Química Agrícola de la Universidad de Córdoba (1975). Decano de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Cór-doba (1975). Catedrático de Química Agrícola de la Universidad de Sevilla (1981). Profesor Emérito de la Universidad de Sevilla (2000).

n Encomienda de la Orden Civil de Alfonso X El Sabio. (1968). Académico de la Real Acade-mia Sevillana de Ciencias (1993).

Guillermo Paneque GuerreroCatedrático de Química Agrícola Emérito de la Universidad de Sevilla

“El Colegio siempre ha mantenido criterios propios, y los ha defendido frente a otras posiciones intelectuales, sociales y morales no compartidas”


19

maestro y filósofo de ‘escuela singular’; monitor de gimnasia, entrenador de fútbol. (…) Don Nicolás nos parecía un gigante cuando -toda la clase por bancas en fila- llegábamos a él y descansaba un brazo con la mano abierta sobre nuestros pequeños hombros; en la otra mano sostenía la regla, instrumento muy útil y apreciado para todo maestro de vocación. Si respondías bien a la materia correspondiente, te tranquilizaba con un liviano apretón de la mano, premio muy valorado -más que un caramelo-; si no... Pasabas otra vez a la cola de los examinandos ‘para meditar’. Y, claro, llegaba la solución: ¡había que estar para ir bien preparado!”.

UNA ENSEÑANZA MUY VALIOSA. “En los primeros cursos de mi Bachillerato, la parroquia de San Pedro y el Colegio tomaron la responsabilidad de trasladar al cementerio de San Fernando los restos mortales de un profesor del Colegio de los primeros cursos. (…) El duelo recorrió calles de la parroquia de San Pedro, San Juan de la Palma, Omnium Sanctorum y San Gil, camino del cementerio. Recuerdo que numeroso público se acercaba a la comitiva, y con mucho respeto y sentimiento asumía como propia aquella manifestación del dolor de alumnos, profesores y Director del Colegio por uno de los suyos. Para muchos de nuestra aula fue una enseñanza muy valiosa, recibida con pocos años de nuestras vidas”.

VOCACIÓN CIENTÍFICA. “Reconozco que fue para mí muy importante contar con la formación recibida en el Co-legio, tanto para la educación humana como para la preparación a posteriores actividades profesionales. Durante

el Bachillerato me ‘marcaron’ especialmente los profesores de ciencias natu-rales. (…) Aquellos queridos profesores del Colegio muy pronto descubrieron en mí una mente en parte cuadriculada, también experimental... Y contem-plativa; más bien, algo salvaje e intuitiva, en especial por la época y edad en la que vivía. D. Luis Rey Guerrero me propició un último e importante empuje en el séptimo curso de Bachiller para proseguir mi vocación científica. Estaba él seleccionando posibles temas para el examen de Reválida cuando dijo dirigiéndose a todos, pero señalándome con el dedo: ‘Niños, hay una ciencia relativamente nueva, la Edafología, que se ocupa del suelo, las plantas los nutrientes minerales y orgánicos de ésta... ¡Prepara un tema para exponerlo en clase!’. (…) El tema que preparé entonces, en lo referente al suelo, lo amplié con bibliografía reciente y variada (...) en el Preparatorio de Ciencias de la Universidad de Sevilla. Al finalizar la Licenciatura, mi Tesis Doctoral trataba sobre el Estudio Mineralógico y Físicoquímico de los Suelos calizos del Valle del Guadalquivir”.

¿DÓNDE VAS CON ESA GOETHITA?. “D. Luis Rey Guerrero preguntaba en clase según ‘el sistema de la varilla’ (…) inquiriendo de pie (los alumnos sentados) sobre cuestiones puntuales previamente expuestas por él o conte-nidas en el texto correspondiente. Sus explicaciones perseguían siempre choques e impresiones en sus alumnos, a todos los cuales quería muy profundamente -aunque a veces lo disimulara mal, por aquello de la autoridad paterna-. Explicando Mineralogía nos contó D. Luis que un día visitó el Laboratorio de Ciencias de un famoso investigador. Allí se presentó con un ejemplar museístico en la mano, que de lejos reconoció -de visu- aquel sabio; y la pregunta que hizo al joven estudiante D. Luis Rey resolvía al mismo tiempo las dudas que entonces tenía este, y que eran las mismas que nos inquietaban a todos, después de ver pasar por delante de nuestros ojos tan magnífico ejemplar. Con voz autoritaria, el sabio inquirió a Don Luis: ‘¡Rey!, ¿dónde vas con esa Goethita?’. Aquel suceso, y sobre todo la explicación del mineral en cuestión, quedaron grabados en la mente de los del aula, quienes para toda la vida aprendimos perfectamente dicho mineral”.

NO SOLO CIENCIA. “La formación que recibimos aquellos años maravillosos para nosotros, va mucho más allá de la ciencia. Pienso sobre todo en la literatura de D. José Rey Guerrero, que siempre la exponía con inmensa sa-biduría didáctica, elegancia y autoridad. (…) No olvido al excelente colaborador y amigo de D. José y D. Luis Rey Guerrero, D. Luis González. Pienso también en el latín con el que D. Genaro Marcos nos enseñó muchas cosas, como ‘Ranae inflamaverunt pellen rugosa’, cuestión que algunos del aula ya habíamos intentado hacer nosotros mismos. (…) Igualmente recuerdo el griego de D. Anuario Mendoza, incluyendo algunas incursiones muy intere-santes sobre Teología moral y Teología Natural. Y finalmente (...) quiero mencionar el gran esfuerzo fonético que exigía realizar obligatoriamente el francés de Dª Antonia Brzezicki; el inglés diplomático de D. Bernardo Dejuan, y, cómo no, las entretenidas clases de Alemán de D. Humberto de Pablo Spiss”.

“Los Paneque aspiramos a tener

representantes nuestros en el Colegio

de San Francisco de Paula cuando cumpla

su 250º aniversario”

20

El nombre de Santiago del Campo Sánchez no necesita ninguna presentación. Lleva más de medio siglo dedicado a la pintura y sus obras están en colecciones públicas y privadas de medio mundo. De su inmenso talento no tardaron en darse cuenta en el Colegio, donde no fue un estudiante de buenas notas, salvo en Dibujo, claro. Dice que entró en el San Francisco de Paula porque era el colegio más cercano al domicilio de sus padres: “fue para mi suerte”. Estuvo ocho cursos, entre el 39 y el 47, y cuando le preguntamos sobre los valores que le inculcaron en esos años, responde de forma tan tajante como elocuente y significativa: “no me inculcaron nada afortunadamente, era un colegio arreligoso, apolítico y no clasista y sí muy bien informado del pensamiento científico y literario”. Recuerda especialmente a D. José Rey, que le señaló públicamente como “el poeta del Colegio”, así como a otros profesores y a muchos compañeros de entonces que con el paso de los años llegaron a ser íntimos amigos suyos. Considera que “perseverando como hasta ahora en la noticia de los avances de la investigación y de sus logros” el San Francisco de Paula llegará al 250º aniversario y valora el avance en idiomas y nuevas tecnologías.

EL MÁS CERCANO. “Mis padres, músico y modista, no sabían del prestigio de los colegios y me inscribieron en el más cer-cano. Fue para mi suerte. Estuve en el Colegio unos meses de preparación para el ingreso; los siete cursos del Bachillerato, y otro más, el de sexto que repetí; desde 1939 a 1947. Yo era mal alumno. Había vivido una guerra civil muy agitada y carecía de

conocimientos básicos”. AL POETA NO SE LE PUEDE EXAMINAR. “Recuerdo mu-cho a Don José Rey, sus clases de geografía, las del Siglo de Oro, Garcilaso; golpeaba brevemente su cigarrillo inglés sobre la mesa, luego abría el libro y leía con la mirada larga. Me señaló públicamente como el poeta del colegio, y me dispensó de hacer el examen porque ‘al poeta no se le puede examinar’, dijo. Fue el curso que repetí porque me quedaron seis asignaturas en junio y en septiembre no me examiné porque pensaba que moriría pronto. Yo era el portero del equipo de futbol de sexto; al final del partido que ganamos, alguien lanzó el balón al ángulo; caí abrazado al balón y escupí sangre. La sangre era la tuberculosis,

n Realiza los estudios de Bellas Artes en la Escuela Superior Santa Isabel de Hungría. n Lleva más de medio siglo dedicado a la pintura. Sus obras están en colecciones públicas y privadas españolas y de Roma, Milán, París, Bruselas, Luxemburgo, Jerusa-lén, Arabia Saudí, México D.F., Nueva York, Londres y Colonia. n En su haber, numerosas exposiciones in-dividuales y colectivas, 133 obras murales, 161 retratos (entre ellos los dedicados al Rey, al Cardenal Spínola o al Rector Maria-no Peñalver), diferentes carteles (entre ellos los de Feria y Semana Santa de Sevilla de 1986), así como numerosos dibujos en diario ABC, revistas y libros. n Ha dedicado especial atención a las escenografías teatrales, no en vano obtuvo el Premio de esta especialidad en 1961. En los años sesenta completó la escenografía, murales y vidrieras, de siete iglesias en Sevilla y Huelva. n Ha sido miembro del Patronato del Museo de Bellas Artes y del Museo de Arte Contemporáneo de Sevilla, y parte del jurado de distintos certámenes nacionales e internacionales de pintura. n Autor de diferentes ensayos en prensa y múltiples conferencias en las universidades de Sevilla, Córdoba y Madrid.

Santiago del Campo SánchezPintor

“En el Colegio no me inculcaron nada afortunadamente: era arreligoso, apolítico y no clasista, y sí muy bien informado del pensamiento científico y literario”

“Mis padres, músico y modista, no sabían

del prestigio de los colegios y me

inscribieron en el más cercano. Fue para mi

suerte”


21

muy distinguida porque era la enfermedad de Chopín o de Alfredo de Musset. No teníamos dinero; mis padres no debían saber nada, ni mis amigos, y para qué examinarse. Pero no morí. Cuando dos años después entré en la facultad de Derecho, al hacerme la inspección sanitaria obligada, supe que había tenido una lesión bronquial, ya calcificada”. ARRELIGIOSO, APOLÍTICO Y NO CLASISTA. “No me inculcaron nada, afortuna-damente. Creo que el Colegio era arreligioso, apolítico y no clasista; sí, muy bien informado del pensamiento científico y, para mí, del pensamiento literario”.

NOMBRES PROPIOS. “Don José Rey, Don Nicolás, Don Anuario, Don Elías Ferrer, Don Leandro Díaz de Urmeneta y Dña Antonia Brzezicki fueron los pro-fesores que más me influyeron”. AMIGOS ÍNTIMOS. “Algunos antiguos compañeros siguen siendo íntimos, como Francisco Soto Castro o Ino-cencio Peña. Otros íntimos murieron: Antonio San Pere, Salvador Fernández, José Castellano, Mariano Peñalver, Fernando Guillamón, Sivianez y Santos (…) Entre los compañeros que luego tuvieron una trayectoria destacada recuerdo a Patricio Peñalver, Manuel Losada, Manuel Castillo, Salvador Fernández, Manuel del Valle, Ignacio Ca-macho, Francisco Márquez Villanueva, Salas Tornero, Roberto de Juan Valiente y Pepín Martin Vázquez ‘Currito de la Cruz”. INFLUENCIA EN LA CARRERA. “El Colegio me aficionó a los buenos libros, la música, el cine, y el museo”. DIBUJOS A TRES PESETAS. “Yo era muy bueno en dibujo. El segundo día de clase presentaba en un papel ‘gua-rro’ grande, dibujados en pequeño, todos los ejercicios de geometría del curso. Tenía entonces una nota de 10 para todo el año y me pedía D. Elías Ferrer que corrigiera a los alumnos a los que, por no entrar el dibujo en el examen de reválida, no les preocupaba hacerlo ni bien ni mal, acaso aprobar. ¿Por qué no hacérselos yo? Empecé con algunos, hasta 35. Los llevaba al Colegio el día de la clase a primera hora, cada uno a falta de su firma. Calcaba un dibujo previo cometiendo los fallos previsibles: los puntos de fuga que se salen del papel, el cerco que no cabe, la regla que se desplaza y emborrona, una gota de aceite del desayuno; hacía, en fin, una antología del compor-tamiento humano. Al dar a cada uno su dibujo me daba mis 3 pesetas. Luego en clase iba de alumno en alumno corrigiendo y calificándole el trabajo. Ya en 7º curso alguien se lo dijo a D. Elías Ferrer, que no me habló más”. LOS SÁBADOS A MEDIODÍA. “Los sábados a mediodía, en un piano vertical de la clase de Don Nicolás, muy grande, la de Primaria, Salvador Fernández y Manuel Castillo improvisaban a cuatro manos. Salvador gustaba de gastar bromas y todo lo que tocaban me lo atribuía. Yo ponía cara de estar conmovido”. VÍNCULOS. “Mis hijos Claudio, Aquiles y Gautama hicieron cursos de Primaria. Invitado por Don Luis Rey (hijo) di una charla sobre el espacio en la pintura. Fui invitado por Don Luís Rey Goñi a hablar de mis recuerdos del Colegio a un pleno de alumnos, con motivo de un fin de curso. Fui invitado también por un grupo de alumnos a responder a una rueda de preguntas sobre el cómo de la vocación”. AVANCE EN IDIOMAS Y NUEVAS TECNOLOGÍAS. “Es bueno poner al alcance de los alumnos los idiomas y las nuevas tecnologías, sus logros y la afición a su búsqueda”. CÓMO LLEGAR AL 250º ANIVERSARIO. “Perseverando como hasta ahora en la noticia de los avances de la investigación y de sus logros. Y del uso de los instrumentos para asimilarlos; informar a los alumnos de los lugares para la ampliación de estudios y la manera de alcanzarlos”. LO QUE DISTINGUIRÁ A LAS INSTITUCIONES DE EXCELENCIA. “Pienso que lo que debe aportar el Cole-gio a sus nuevos estudiantes es la máxima información y el amor a la enseñanza”.

“D. José Rey me señaló públicamente como el poeta del colegio, y me dispensó de hacer el examen porque decía que al poeta no se le puede examinar"

22

Doctor en Ciencias Químicas y Medicina, Manuel Repetto ha sido Profesor Titular universitario de Toxicología y fue también Director del Instituto Nacional de Toxicología, en el Departamento Territorial de Sevilla. Hoy jubilado, sigue no obstante dirigiendo un Master Internacional de Toxicología, a través de Internet, con la colaboración de 152 expertos de 12 países y la participación de numerosos alumnos de 14 países. Muestra evidente de un espíritu inquieto que empezó a cuajar en el Colegio de San Francisco de Paula, en el que ingresó en 1939. Padre de cuatro hijos educados en el Colegio, hijo del que fuera Secretario y Profesor del centro Francisco Repetto Rey, opina que el rasgo más sobresaliente del Colegio es su contribución al desarrollo del sentido de la responsabilidad individual por parte del alumno. Sus recuerdos principales se refieren a la disciplinia y la exigencia docente, unidas a la profunda amistad entre los compañeros. Cree que el Colegio le inculcó “el valor del trabajo personal y una sólida formación que le ha sido útil toda su vida” y que también le ayudó a comprender que ideas muy distintas pueden convivir con absoluta normalidad. Sobre su evolución en los últimos años, estima que se ha abierto a nuevas experiencias, y valora que siga manteniendo su espíritu libre y comprometido.

VÍNCULOS FAMILIARES. “Ingresé en 1939 y estuve hasta 1947. Los Directores (D. José y D. Luis Rey Guerrero) eran primos de mi padre (Francisco Repetto Rey) quien, a su vez, fue Secretario y Profesor del Colegio”.

EXIGENCIA DOCENTE. “Mis principales recuerdos son sobre la disci-plina y la exigencia docente, que nos dio una gran formación en Cien-cias y en Letras, y la profunda amistad entre los compañeros. Era un estudiante ‘regular’, pero normalmente con buenas notas. Me gustaban las materias de Ciencias como química, ciencias naturales, aunque también literatura y geografía”.

SENTIDO DE LA RESPONSABILIDAD INDIVIDUAL. “El desarrollo del sentido de la responsabilidad individual es a mi juicio el rasgo más sobresaliente de la personalidad del Colegio. El Colegio me inculcó el valor del trabajo personal y una sólida formación que me ha sido muy útil toda mi vida. También me ayudó a ver que ideas muy distintas pueden convivir con absoluta normalidad”.

n Doctor en Ciencias Químicas y Medicina.Profesor Titular universitario de Toxicología y Director del Instituto Nacional de Toxicología, Departamento Territorial en Sevilla.

n Ha sido Presidente de la Asociación Española de Toxicología y directivo de la Asociación Europea y de la Federación Mundial de Toxico-logía.

n Fue durante años el toxicólogo español en la Comisión Científica Asesora en Toxicología de la Unión Europea (Luxemburgo).

n Ha pronunciado conferencias en numerosas universidades españolas y extranjeras y ha participado en más de 125 congresos de su especialidad.

n Ha publicado más de 200 trabajos científicos y 6 libros de Toxicología, uno de ellos con 4 ediciones.

n Director de un Master Internacional de Toxi-cología, a través de Internet.

Manuel Repetto JiménezDoctor en Ciencias Química y Medicina

“El Colegio se ha abierto a nuevas experiencias, pero sigue manteniendo su espíritu libre, independiente y comprometido”

“El desafío fundamental debe

ser consolidar la personalidad del

alumno, proveerle de instrumentos

para aprovechar sus capacidades para

que desarrolle con éxito sus estudios y

profesión posteriores”


23

CUATRO PROFESORES. “D. José y D. Luis Rey Guerrero y D. Manuel Ruiz Sánchez y D. Manuel Pérez-Cerezal Clavijo fueron los profeso-res que más me influyeron. D. José me ilusionó por conocer mundo y aprender idiomas, y los otros tres citados, en la elección de la carrera universitaria y el interés por la investigación y alcanzar el Doctorado”.

“FRANCISCANOS”. “Sigo saludando y viendo a algunos ‘franciscanos’ de vez en cuando, pero lamentablemente varios ya han fallecido. De mi mismo curso recuerdo compañeros que tuvieron una trayectoria destacada como Héctor Morell, Juan Carriazo, Bernardo V. Carande, Buenaventura Pinillos, y muchos otros”.

QUÍMICAS PRIMERO Y LUEGO MEDICINA. “El Colegio sí influyó en mi carrera, porque la sólida preparación que recibí en Ciencias me inclinó a estudiar primero Ciencias Químicas y luego Medicina”.

MENDRUGO. “Tengo buen recuerdo de mis colaboraciones en la revista del Colegio MENDRUGO que firmaba con seudónimo y enviaba a Se-cretaría, para que las pusiera sobre una mesa, con un chaval de clases inferiores”.

CONTINUIDAD FAMILIAR. “He mantenido este tiempo la vinculación con el Colegio, porque mis cuatro hijos han estudiado en el San Fran-cisco y pertenezco a la Asociación de Antiguos Alumnos”.

NUEVAS EXPERIENCIAS. “El Colegio se ha abierto enormemente a experiencias externas y de dinamización, tanto en idiomas, en nuevas tecnologías y algunos deportes. Pero sigue preservando su espíritu libre e independiente de los poderes públicos, manteniendo un aire liberal pero comprometido”.

AYER Y HOY. “Creo que en general la enseñanza se ha adaptado a las exigencias sociales (por ejemplo los idiomas se estudian como lenguas vivas, no como lenguas muertas tal como se hacía antes), pero pienso que se ha disminuido la visión del mundo, paradójicamente frente al cacareado ‘mundo global’; no hay nada más absurdo que programar geo-grafía o literatura local en lugar de la universal, por ejemplo”.

RETOS DE FUTURO. “Pienso que la Dirección del Colegio tiene formación, dedicación y visión suficientes para enfrentarse a los retos del futuro. (…) Las exigencias de la sociedad pueden ser cambiantes, pero quizás apostar por lo futurible, por modas o por novedosas ideas pedagógicas por en-cima de la experiencia puede no ser la clave del éxito, como se ha visto con los cambios (experimentos) docentes sucedidos en España”.

DESARROLLAR LAS CAPACIDADES. “El desafío fundamental debe ser consolidar la personalidad del alumno, proveerle de instrumentos para aprovechar sus capacidades y formarle intelectualmente para que desa-rrolle con éxito sus estudios universitarios y/o posterior profesión”.

“La sólida preparación que recibí en Ciencias me inclinó a estudiar primero Ciencias Químicas y luego Medicina”

“He mantenido en este tiempo la vinculación con el Colegio, porque mis cuatro hijos han estudiado allí y además pertenezco a la Asociación de Antiguos Alumnos”

“Mis principales recuerdos son sobre la disciplina y la exigencia docente, y la profunda amistad entre los compañeros. (...) El Colegio me ayudó a ver que ideas muy distintas pueden convivir con normalidad”

24

Notario jubilado, Francisco José de Castro nunca ha perdido el contacto con el Colegio a pesar de haber pasado la mayor parte de su vida profesional fuera de Sevilla. De hecho ha asesorado y aconsejado en diferentes momentos y en cuestiones cruciales al Colegio, con tan buen criterio y tanta generosidad que la Fundación Goñi y Rey ha querido homenajearlo denominando una de sus becas con su nombre. Más allá de esa colaboración, su vínculo con el Colegio ha sido constante, pues sus cinco hijos han sido alumnos del San Francisco de Paula y ahora lo son sus siete nietos mayores. Y desde ese seguimiento continuo de la trayectoria del centro, Francisco José de Castro se alegra de “los progresos que se han efectuado y se siguen produciendo día a día” en sus aulas y valora muy positivamente que sus nietas estén recibiendo la enseñanza de las distintas asignaturas en ingles, francés y alemán.

SIN DUDAS EN LA ELECCIÓN. “Ingresé en el Colegio en sep-tiembre de 1940 en el 4º curso de Bachillerato y permanecí en él hasta terminarlo, en junio de 1944. Mi padre, que era Catedrático de la Universidad y participaba en los exámenes de ingreso en la misma, tuvo facilidades para llegar al convencimiento de que era el mejor Colegio que había entonces en Sevilla, para preparar el Bachillerato. No tuvo dudas en la elección. Tengo muy buenos recuerdos de los compañeros y de la relación Alumno-Profesor. Fui un estudiante normal al que le gustaban más las Ciencias que las Letras. Sin embargo, cuando ingresé en la Universidad, elegí Derecho”.

FORMACIÓN ÉTICA Y MORAL. “Creo que el Colegio se ha caracterizado por la formación de la personalidad del alumnado no sólo en el aspecto intelectual de la enseñanza, sino también en el ético y moral, en la enseñanza de la convivencia social y humana”.

HACER TODO LO QUE SE PUEDE. “Los valores que me han inculcado en el Colegio los he ido apreciando con el transcurso del tiempo ya fuera del Colegio. Cumplir con tus obligaciones, la necesidad del esfuerzo, sin desmayos,

para llegar a la meta. Respetar a tus semejantes y sus opiniones. El valor de la verdad. Luchar hasta la última gota de sangre, para conseguir el fin propuesto. Ser honesto en nuestro comportamiento con nuestros semejantes. Cuando en alguna ocasión me he dado cuenta que no he hecho todo lo que podía hacer, el remordimiento me ha hecho sufrir”.

LIBRE DE ADOCTRINAMIENTOS. “En el inicio de la década de los 40 no se podía practicar con libertad y oficialmente la pluralidad, tolerancia y convi-vencia entre las personas de diferentes ideologías y maneras de pensar. Sin embargo todo el mundo sabía que era el colegio en el que había más libertad de criterios y una enseñanza libre de adoctrinamientos”.

SIEMPRE EN LA MEMORIA. “Recuerdo cómo le brillaban los ojos y la sonrisa a D. Luis Rey Guerrero cuando explicaba un experimento de Física; con qué

n Estudió la carrera de Derecho en la Univer-sidad de Sevilla.

n Tras hacer las Milicias Universitarias en Ribas de Fresser, en plenos Pirineos catala-nes, preparó las oposiciones a Notarías en Sevilla y Madrid y consiguió plaza en las Oposiciones de Barcelona de 1959.

n Tomó posesión de su primer destino en Alcalá de Xivert (Castellón) en febrero de 1960. Sucesivamente he desempeñado la profesión en Lalin (Pontevedra); Valencia de Alcántara (Cáceres); Morón de la Frontera (Sevilla); Barbate (Cádiz); San Fernando (Cádiz); Fuengirola (Málaga) y finalmente en Sevilla, donde se jubiló en 1997.

“Todo el mundo sabía que el San Francisco

de Paula era el colegio en el que había más

libertad de criterios y una enseñanza libre

de adoctrinamientos”

Francisco José de Castro BrzezickiNotario jubilado

“Me quedo asombrado de los progresos que se han efectuado y se siguen produciendo día a día en el Colegio”


25

facilidad y claridad explicaba D. Julio Mínguez los problemas de matemáticas con ‘ayuda’ de un alumno; el interés, dedicación y cariño que nos transmitía D. José A. Rey Guerrero por la literatura, las buenas formas y el comportamiento; el entusiasmo que tenía D. Anuario Mendoza con el latín y el griego; D. Elías Ferrer, que me enseñó el poco dibujo que sé. También recuerdo con afecto a D. Humberto Spiss, que nos enseñó alemán, por su extraordinaria personalidad abierta que después de una larga vida de corresponsal por el mundo, se afincó en Sevilla”.

ELECCIÓN DE LA CARRERA. “Es difícil para mí saber cómo influyó el Colegio en mi vocación. Estaba más incli-nado a las Ciencias que a las Letras tal vez por el ambiente familiar, en el que había biólogos, médicos, químicos y matemáticos, y sólo mi madre de Letras. Al final me incliné por el Derecho, pero pensando ya en la Notaría, seguramente por la recomendación de mi abuela paterna que me decía que estudiara para notario porque ‘a los notarios no los llaman por la noche…’. No me arrepiento, pero me han llamado muchas noches para trabajar”.

PÉRDIDA DE CONTACTO EN MADRID. “Durante la carrera y cuando empecé a preparar las oposiciones a Nota-rías, mi contacto con los compañeros de curso fue continuo y fluido. Después me fui a Madrid a seguir preparan-do las oposiciones, y perdí contacto con Sevilla a la que volvía solo esporádicamente. Saqué las oposiciones y sólo he vuelto a vivir en Sevilla en los últimos años de la profesión. He estado más de 35 años sin vivir en Sevilla y eso ha enfriado mis contactos con los antiguos alumnos. Tal vez sea éste uno de los casos a los que aludía antes que me hacían sufrir… En todo caso, las noticias que tengo de ellos son que han sido buenos profesionales en sus distintos trabajos y ocupaciones”.

SIEMPRE LIGADO AL COLEGIO. “Con los compañeros de entonces sí perdí el contacto, pero nunca lo perdí con el Colegio. Mis cinco hijos han sido alumnos del Colegio y ahora lo son mis siete nietos mayores. Y la octava ingresará en el año próximo cuando tenga la edad. He tenido la suerte de poder aconsejar y ayudar en distintos momentos durante los últimos años profesionalmente al Colegio en problemas jurídicos”.

EN LA VANGUARDIA DE LA VANGUARDIA. “Mi padre siempre se preocupó de la enseñanza de idiomas y nos lo inculcó a sus hijos. Todos empezamos estudiando desde pequeños en el Colegio Alemán en la década de los 30. Yo llevaba el Bachillerato alemán y el español (por libre) durante los tres primeros cursos. Cuando no fui capaz de simultanear ambos fue cuando ingresé en el Colegio. En la actualidad me quedo asombrado de los progresos que se han efectuado y se siguen produciendo día a día en el Colegio. Mis nietos están recibiendo la enseñanza de las distin-tas asignaturas en ingles, francés, alemán… Creo que está en la vanguardia de la vanguardia. El trabajo ímprobo, incesante de la Dirección, es digno de toda clase de elogios. El cambio ha sido completo y radical. Pero siempre con la misma doctrina: preparar al alumnado con los medios existentes de la mejor manera posible”.

LA ENSEÑANZA DE AYER Y DE HOY. “Hoy se ha tecnificado toda la vida y naturalmente eso ha afectado de una manera radical a la enseñanza. Tiene más importancia saber manejar un ordenador que leer el Quijote. Entiendo que las actuales generaciones están mucho mejor formadas para luchar por la vida y que su formación humanista, en cambio, es inferior a la que recibimos nosotros. Se tiende a la especialización desde jóvenes y por ello tienen lagunas en otros campos que es imposible rellenar por falta de tiempo. (…) Hoy los alumnos salen técnicamente capacitados, pero con algunas lagunas en sus conocimientos de historia, literatura, arte, etc”.

RECOMENDACIÓN PARA EL FUTURO. “Que sigan los principios que les inculcaron sus mayores sin apartarse un ápice pero adaptándolos a los nuevos tiempos”.

FORMACIÓN ÍNTEGRA. “Lo que deben aportar las mejores instituciones educativas es una formación humana ín-tegra que sepa adaptarse y vivir en la sociedad actual con absoluto respeto de sus semejantes en sus ideas, religión y modo de vida, en ambiente de libertad y convivencia y, naturalmente, con los conocimientos suficientes para poder sobrevivir adecuadamente. Las mejores instituciones trabajan para lograr estos fines. Por ejemplo: hay que estudiar chino, que será imprescindible en las próximas generaciones…”.

“El Colegio se ha caracterizado por la formación de la personalidad del alumnado no solo en el aspecto intelectual de la enseñanza, sino también en el ético y moral”

26

Javier Martínez de Azcoytia ingresó con nueve años en el Colegio, donde tuvo un rendimiento muy brillante, alcanzado incluso el Premio Extraordinario en la temidísima Reválida. Esos resultados fueron el preludio de una Licenciatura en la Facultad de Derecho, igual de brillante, con media de Sobresaliente, y el de una carrera profesional como abogado tan dilatada como reconocida. En todo este tiempo, no perdió el vínculo con el Colegio e incluso llegó a ser presidente de su Asociación de Antiguos Alumnos. Y desde esa relación continuada, opina que en lo esencial el proyecto del Colegio sigue siendo el mismo, asentado fundamentalmente en una base humanística. Como recomendación para el futuro, aconseja conservar el espíritu de libertad, tolerancia y eficacia que, de siempre, ha caracterizado al centro.

CON NUEVE AÑOS. “Cumplidos los nueve años, decidie-ron mis padres que debía de ir a un colegio. El elegido fue el de los Escolapios, pero no había plaza, por lo que optaron por el San Francisco de Paula, también muy cer-cano. Allí permanecí durante ocho años, terminados con el examen de Reválida. Los recuerdos de mi estancia en el Colegio fueron todos gratísimos”.

LA FAMILIA REY. “Coincidí en el Colegio con importantes personalidades, pero, de todas ellas, destaco a la familia

Rey: D. José y D. Luis Rey Guerrero, D. Luis Rey Ro-mero y D. Luis Rey Goñi”. VALORES. “Las principa-les virtudes que adquirí en el San Francisco fueron la sinceridad y la tolerancia. (…) Ya desde entonces, supimos mantener un gran respeto por las ideologías distin-tas a las nuestras”.

PROFESORES. “Todos los profesores, de una forma o de otra, influye-ron en mí. Destaco, además de a los ‘Hermanos Rey’, a D. Leandro Díaz de Urmeneta, Dª Antonia Castro y D. Federico Mateos”. REUNIONES ANUALES. “De aquellos años, conservo multitud de amigos. Incluso, durante mucho tiempo, nos reuníamos en el mes de octubre, los antiguos compañeros de curso, para revivir la antigua convivencia”.

n Finalizado el Bachillerato en el mes de junio del año 1947, y tras aprobar el exa-men de Reválida, con Premio Extraordina-rio, se matriculó en la Facultad de Derecho de la Universidad de Sevilla.

n Durante los cinco años de la carrera, obtuvo una nota media de Sobresaliente, por lo que gozó de matrícula gratuita.

n Obtenido el título de Licenciado en Derecho, se dio de alta en el Colegio de Abogados, para dedicarse al ejercicio libre de la profesión.

n Entró, para iniciarlo, como pasante, en el bufete de D. Ángel Camacho Baños y, luego, en el de D. José Luis Aguilera Cornejo

n Se independiza en los últimos años 50, habiendo tenido, desde entonces, diversos pasantes, entre ellos Antonio del Pino Fer-nández y Enrique Pérez Perera.

n Durante los años 60, fue miembro de la Junta de Gobierno del Colegio de Abogados de Sevilla.

n Ejerció la abogacía hasta el año 2008 en que, por razones de salud, se dio de baja como Letrado ejerciente.

Francisco Javier Martínez de Azcoytia y LaffónAbogado

“En lo esencial, el proyecto del Colegio sigue siendo el mismo, asentado, fundamentalmente, en una base humanística”

“De aquellos años, conservo multitud de amigos. Incluso,

durante mucho tiempo, nos

reuníamos en el mes de octubre, los

antiguos compañeros de curso, para

revivir la antigua convivencia”


27

COMPAÑEROS INSIGNES. “Son muchos los compañeros que han desta-cado en sus actividades. Por citar alguno, recuerdo a Manolo del Valle y a Paco Márquez Villanueva”.

VOCACIÓN PROFESIONAL. “En cuanto a mi vocación profesional, yo, de siempre, tenía claro que había de seguir una carrera de Letras: Filo-sofía o Derecho. Opté por esta última y no me he arrepentido.

UN RECUERDO CONCRETO. “Recuerdo lleno de gozo y un tanto emo-cionado, cuando D. José Rey nos llamó, a Paco Márquez y a mí, para que nos ocupáramos de la reedición de MENDRUGO, lo que llevamos a efecto puntualmente, solos, pese a nuestros poquísimos años”.

CONTACTO CONTINUADO. “Desde que salí del San Francisco, no he perdi-do el contacto con el Colegio, e incluso llegué a ser Presidente de la Asociación de Antiguos Alumnos”.

AYER Y HOY. “Pienso que, en lo esencial, el proyecto del Colegio sigue siendo el mismo, asentado, fundamentalmente, en una base humanística”.

ABUSO DE LA LIBERTAD. “Creo que, en general, las nuevas gene-raciones de alumnos no están tan bien formadas como las nuestras, quizás porque han llegado a abusar del margen de libertad, cada vez mayor, que se les ha concedido”.

EL FUTURO. “Recordaría a los que, en el futuro, estén al frente del Colegio, que habrán de conservar el espíritu de libertad, tolerancia y eficacia que, de siempre, ha caracterizado al centro”.

“Son muchos los compañeros que han destacado en sus actividades. Por citar alguno, recuerdo a Manolo del Valle y a Paco Márquez Villanueva”

“Recordaría a los que, en el futuro,

estén al frente del Colegio, que habrán

de conservar el espíritu de libertad, tolerancia y eficacia

que, de siempre, ha caracterizado al

Centro”

28

Marcelino Vidarte Zabala ingresó en el Colegio en plena Guerra Civil. Aunque la dificultad de los tiempos se notaba en el día a día, este médico especialista en Radiología destaca “la convivencia con compañeros de distintas ideologías” que reinaba puertas adentro. Se define como “estudiante de matrículas de honor”; no obstante, asegura que sobre todo en sus aulas aprendió a respetar al profesorado y a defender la verdad. Recuerda que sus compañeros más cercanos durante sus años en el Centro fueron después “sus mejores amigos”. Sus nietos integran ahora la tercera generación de los Vidarte en sus aulas.

UN BAGAJE SATISFACTORIO. “Entré en el Colegio en el año 1938, primero por el prestigio del Centro y después por la proximidad a mi domicilio. Mis recuerdos son muy gra-tos en general; era estudiante de matrículas de honor y mis materias preferidas eran la física y las ciencias naturales”.

ESPÍRITU. “En el Colegio se respiraba seriedad y equidad y de él salí con dos valores fundamentales: el respeto a los profesores y la defensa de la verdad”.

CONVIVENCIA EN TIEMPOS DIFÍCILES.“Eran años de guerra y postguerra y era difícil exponer ideas. Pero sí era posible convivir con compañeros de distintas ideologías”.

SUS DOS PROFESORES REFERENCIA. “Me quedo con D. Luis Rey Guerrero y D. Manuel Bermudo”.

TRADICIÓN FAMILIAR. “Mi vinculación con el Colegio ha pervivido en el tiempo. Mis hijos estudiaron allí, igual que ahora lo hacen mis nietos. Además, nuestro grupo de siete u ocho amigos de la clase con-servó la amistad hasta que por desgracia fueron falleciendo”.

CONFIANZA EN LAS NUEVAS GENERACIONES. “Aunque me resulta difícil apreciar las diferencias en las formas de enseñar y aprender de ahora y entonces, creo que estas nuevas generaciones están perfectamente orientadas hacia el desarrollo actual de la vida”.

UN CONSEJO PARA EL FUTURO. “Que sigan eligiendo un profesorado bien formado y actuando con equidad, como hasta ahora”.

INTERNACIONALIDAD, RESPETO Y ORDEN. “Desde el Colegio se debe facilitar el aprendizaje y el estudio en instituciones similares extranjeras. Además de eso, un buen centro educativo se distingue de uno menos bue-no en el respeto a los profesores y en el orden de la institución”.

n Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de Sevilla en 1952.Posteriormente, obtuvo el título de Cardio-logía por la Universidad deBarcelona.

n Título de Especialista en Radiología en 1964.

n Miembro del Servicio de Radiología del Hospital Virgen del Rocío entre 1955y 1972, año en que asumió la Jefatura del mismo hasta 1996, año de sujubilación.

n También trabajó en la medicina privada entre 1958 y 1995.

Marcelino Vidarte ZabalaMédico radiólogo

“En el Colegio se respiraba seriedad y equidad y de él salí con dos valores fundamentales: el respeto a los profesores y la defensa de la verdad”

“Entré en 1938; eran años de guerra

y postguerra, pero era posible convivir con compañeros de distintas ideologías”


29

Desde muy joven tuvo que dedicarse al negocio de su padre, una tienda de frutas y hortalizas en el mercado de la Encarnación. Es por ello por lo que abandonó pronto el Colegio, de forma que se vio obligado a realizar el Bachillerato por libre. Aun así, cree que el Colegio le dio una importante base formativa y también de carácter, que le sirvió “para toda la vida”. De hecho, decidió matricular a sus dos hijos en el Colegio, dándoles a ellos lo que él no pudo tener. Presidente de la Asociación de Comerciantes Minoristas de Frutas y Hortalizas de Sevilla, entre los años 83 y 99 ejerció como Concejal y Teniente de Alcalde del Ayuntamiento de Sevilla, así como Presidente Local y Vicepresidente Provincial de Alianza Popular de Sevilla. Actualmente desempeña su labor como Hermano Mayor de la Hermandad de la Macarena de Sevilla.

UNA BASE. ”Sobre el año 1940, mis padres consideraban que era un gran Colegio. Estuve pocos años, pues me tuve que ir a ayudarle a mi padre en su negocio. Terminé el Bachillerato por libre y me dediqué al negocio familiar. Pero creo que salí con una base, que después me sirvió para toda la vida. Mis dos hijos estuvieron en el Colegio”.

ESTUDIANTE “REGULAR”. “Fui un estudiante ‘regular’. Mi materia preferi-da eran las matemáticas”.

INDEPENDENCIA Y LIBERALIDAD. “Lo que más valoré del Colegio fue su independencia y liberalidad. El respeto a las personas y la vocación de realizar el trabajo de la mejor forma posible”.

GENTE QUE RECUERDO. “Las personas de las que conservo un mayor y mejor recuerdo son D. Nicolas Gelo y el abuelo del actual Director. De las personas que conocí en el Colegio y que después alcanzaron cierta pro-yección, lo cierto es que ya faltan muchos, pero recuerdo a los hermanos Torres”.

QUE SEAN PERSONAS. “Creo que el Colegio se ha adaptado a los tiempos actuales, y, por lo que tengo entendido, sigue con la misma disciplina que antiguamente. En su 125 Aniversario, animo al Colegio a que siga con la misma línea que ha mantenido hasta hoy. Que los alumnos salgan muy preparados, muy disciplinados y que sean personas”.

n Presidente de la Cooperativa del Mercado de la Encarnación durante 25 años.

n Presidente de la Asociación de Comer-ciantes Minoristas de Frutas y Hortalizas de Sevilla y su provincia.

n Concejal del Ayuntamiento de Sevilla en los equipos de Gobierno de Alejandro Rojas Marcos y Soledad Becerril.

n Delegado de Seguridad Ciudadana durante la Expo 92, con Medalla al Mérito Policial.

n Hermano Mayor de la Hermandad de la Macarena de Sevilla desde 2009.

Manuel García García Ex concejal y Teniente Alcalde del Ayuntamiento de Sevilla

“Salí del Colegio con una base que después me sirvió para toda la vida”

“En su 125 Aniversario, animo

al Colegio a que siga con la misma línea que ha mantenido hasto hoy. Que los

alumnos salgan muy preparados, muy

disciplinados y que sean personas”


30

Diego Carriazo se formó en el Colegio de San Francisco de Paula desde los 12 años hasta la Universidad. Licenciado en Medicina con Premio Extraordinario, se especializó en Medicina Interna en Sevilla, llegando a ingresar en la Real Academia de Medicina y Cirugía merced a un estudio sobre el diagnóstico del cáncer en la provincia. Después de desempeñar su labor como médico en diversas empresas, constituyó su propia consulta privada, que compaginó hasta su jubilación con su labor como médico generalista de la Seguridad Social, desarrollando la mayor parte de su carrera como médico internista en el Hospital Virgen Macarena de Sevilla. Casado, con tres hijas y siete nietos, del Colegio conserva muy buenos recuerdos y valores que le han acompañado durante toda su vida. Fundamentalmente, como él mismo explica, “responsabilidad, tener un alto sentido del bien hacer y ser compresivos y tolerantes con todos”. Algo de lo que tienen buena culpa los profesores, un verdadero ejemplo “a seguir por todos”.

LA LLAMADA DEL PRESTIGIO. “Entré en el Colegio en 2º de Bachillerato en el año 1941-1942. El primer año lo hice en Madrid. Mi padre decidió matricularme en el San Francisco porque gozaba de un gran prestigio como centro docente. Además el profesorado era muy competente y trataba con mucho cariño a sus alumnos. Cuando finalicé mis estudios de Bachillerato en 1947 salí del Colegio, mi paso por él lo recuerdo como una experiencia muy positiva. Le tenía un gran cariño y afecto a todo el profesorado. Yo era un estudiante bastante cumplidor, procuraba preparar bien las clases porque quería aprender cuanto más. Fundamentalmente las ciencias naturales, la física, la química... Pero también tenía interés por las Humanidades porque mi padre era Profesor de historia”.

CALIDAD HUMANA Y PROFESIONAL. “Tuvo siempre un gran prestigio en toda Sevilla porque los fundadores eran unas personas extraordinarias y competentes. Sin duda alguna, ejemplos a seguir para todos sus alumnos. (…) Los profesores que más me marcaron fueron D. Luis y D. José Rey. También Dª Antonia, Profesora de francés y de origen polaco. Mi relación con D. Luis Rey y sus clases fueron fundamentales para iniciar mis estu-dios de Medicina”.

PASADO, PRESENTE, FUTURO. “El Colegio siempre procuraba que cada cual pudiera tener su propio pensamiento y desarrollara su escala de valores. Esto hacia que destacara como centro de educación entre los de-más. Yo creo que actualmente mantiene la mayor parte de sus objetivos y compromisos. El Colegio tiene un papel muy importante en la marcha del pensamiento de los intelectuales que viven y trabajan en la ciudad, debido a su estrecha relación con personalidades de Sevilla. Desde mi punto de vista debe continuar aportando las mismas cosas que ha aportado a lo

n Licenciado en Medicina por la Universi-dad de Sevilla. Premio Extraordinario.

n Académico de la Real Academia de Medi-cina y Cirugía de Sevilla.

n Especialidad en Medicina Interna y en Medicina de Empresa.

n Médico en diversas empresas, tales como Galerías Preciados, Medina Garvey o Finanziauto.

n Médico internista del Hospital Virgen Macarena de Sevilla.

Diego Carriazo Ramírez Ex médico internista Jubilado del Hospital Virgen Macarena de Sevilla

“Sin duda alguna, los profesores eran ejemplos que podíamos seguir todos los alumnos”

“El Colegio tiene un papel muy importante

en la marcha del pensamiento de los

intelectuales que viven y trabajan en la ciudad, debido a

su estrecha relación con personalidades de

Sevilla”


31

largo de su Historia. También considero que es importante que el Colegio continúe siendo muy exigente con sus alumnos, y mantenga su alto nivel académico, pero siempre de forma amigable y no impuesta”.

VIEJOS AMIGOS. “Entre las amistades que conservo se encuentra la de Pe-dro Castro Artigas, o también la de Francisco Javier Martínez de Azcoitia. Francisco Javier ha tenido una trayectoria profesional bastante destacada, como abogado ha hecho una gran labor”.

UNIDO AL COLEGIO PARA SIEMPRE. “El Colegio ha ejercido una gran influencia sobre mí en diferentes aspectos, aunque mi interés por la medi-cina venía de antes. Mis hijas y mis nietas no han ido al Colegio, pero yo acostumbro a ir a muchos de los actos que el Colegio organiza: reuniones de antiguos alumnos, conferencias… Disfruto mucho”.

NUEVOS TIEMPOS, NUEVOS MÉTODOS EDUCATIVOS. “Los métodos edu-cativos actuales tienen grandes ventajas. Por ejemplo, la forma de enseñar de antes era muy memorística y la de ahora, es más para ser razonada. Creo que hay un poco de todo, antes se exigía que el promedio de una clase fuera lo más homogéneo posible, hoy esto existe en mucho menor grado. En una misma clase hay alumnos muy dispares”.

“El Colegio siempre procuraba que cada cual pudiera tener su propio pensamiento y desarrollara su escala de valores. Esto hacia que destacara como centro de educación entre los demás”

“Considero que es también importante que el Colegio continúe siendo muy exigente con sus alumnos, y mantenga su alto nivel académico, pero siempre de forma amigable y no impuesta”

32

Licenciado en Derecho por la Universidad de Sevilla, Carlos Fernández González ha desempeñado la mayor parte de su trayectoria profesional como Agente de Bolsa en Madrid y ahora trabaja como Protector del Inversor y Consejero de la Comisión Permanente de la Sociedad Rectora de la Bolsa de Madrid. Entró en el San Francisco de Paula en 1943 para estudiar junto a su hermano mayor Andrés y allí descubrió un Colegio cuya personalidad estaba marcada “por la pluralidad de ideas y la convivencia junto a la emulación” y que promovía en sus alumnos la inquietud intelectual, la competitividad y el mutuo respeto, así como el espíritu crítico. Además de esos valores, piensa que su etapa colegial le proporcionó “la formación necesaria para elegir cualquier carrera”. A la salida del Colegio, siguió manteniendo el contacto con muchos de sus compañeros, así como con la familia Rey.

INGRESO. “Mi hermano Andrés ya estudiaba en el Cole-gio. Y yo ingresé en octubre de 1943 y permanecí durante nueve años”.

DISFRUTAR APRENDIENDO. “Guardo muchos y muy gratos recuerdos. Eran un disfrute las clases de geografía de D. José Rey Guerrero, las de física y ciencias naturales de D. Luis Rey Guerrero, las de literatura e historia de D. Luis González Fernandez y las de matemáticas de D. Julio Mín-guez. Era buen estudiante en general pero, por gustarme más las de Letras, destacaba más en ellas”.

PLURALIDAD Y ESPÍRITU CRÍTICO. “La pluralidad de ideas y la convi-vencia junto a la emulación marcaban la personalidad del Colegio (…) La inquietud intelectual, la competitividad y el mutuo respeto eran los principales valores que promulgaba el Colegio, siempre unido a un espíritu crítico”.

PROFESORES. “De Primaria, recuerdo especialmente a D. Nicolás Gelo y D. José Montllor. Y de Secundaria, a D. José y D. Luis Rey Guerrero, también a D. Luis González Fernández, profesor de Literatura e Historia, y a D. Julio Mínguez, de Matemáticas”.

COMPAÑEROS. “Sigo manteniendo el contacto con mis compañeros, con todos ellos. Sin querer omitir a nadie, recuerdo a D. Luis Rey Romero (q.e.p.d.), D. Pedro Cascajo, D. Manuel Vazquez Berrones, D. Carlos Pera

n Licenciado en Derecho por la Universi-dad de Sevilla en 1958.

n En 1960 entra en el Cuerpo de Abogados del Estado tras aprobar las oposiciones, y desempeña este cargo en Ceuta, Huelva y Sevilla.

n En 1973 y 1975 oposita a Agente de Cambio y Bolsa para las bolsas de Barcelo-na y Madrid, respectivamente.

n A finales de los 80, funda la Sociedad de Valores Mediación Bursátil de la que es Presidente.

n En el año 2000 se incorpora como Corre-dor de Comercio de Madrid y fue Notario de la capital hasta su jubilación en 2005.

n Actualmente es Consejero y miembro de la Comisión Permanente de la Sociedad Rectora de la Bolsa de Madrid, cargo que desempeña desde 1991. También es Pro-tector del Inversor de la Bolsa de Madrid desde 2001.

Carlos Fernández GonzálezConsejero y Protector del Inversor de la Bolsa de Madrid

“La inquietud intelectual y el mutuo respeto eran los principales valores que promulgaba el Colegio, siempre unido a un espíritu crítico”

“Hoy ha cambiado a mejor en el Colegio

tanto el dominio de las lenguas

extranjeras como la cibernética, que son

imprescindibles en el mundo actual”


33

Madrazo y los hermanos D. José y D. Manuel Losada Villasante. Todos ellos son profesionales con carreras de éxito”.

EXCELENTE BASE. “Creo que mi etapa colegial me dio la formación nece-saria para elegir cualquier carrera, si bien luego elegí la rama del Derecho”.

GEOGRAFÍA POR D. JOSÉ REY. “Recuerdo el modo en que D. José Rey Guerrero nos enseñaba la geografía, y cómo la relacionaba con la histo-ria, la filosofía, la industria, el desarrollo urbanístico y la economía de los países. Lo mismo acontecía con la forma en que su hermano D. Luis Rey Guerrero nos enseñaba la física, la química o las ciencias naturales. Reali-zaba una enseñanza verdaderamente transversal de sus asignaturas”.

VÍNCULOS. “Tras mi marcha del Colegio colaboré con D. Luis Rey Guerre-ro primero y D. Luis Rey Romero (este último fue mi compañero de clase en los siete años del Bachillerato) después. Eran reuniones organizadas los sábados por la tarde (…) por D. Luis padre, D. Luis hijo, alguna vez, Dª Concepción Romero, esposa del primero y madre del segundo, y D. Luis González Fernández, que nos exponían a un grupo de antiguos alumnos formado por D. Jose Losada Villasante, el Notario Castro Brzezicki (hijo de Dª. Antonia, profesora de francés), el Dr. Julio López Mejías, (médico de D. José Rey) y yo mismo, sus dudas sobre la concertación o no del Colegio, y sobre una posible ubicación en las afueras de la ciudad en alguna nueva urbanización. (…). Recuerdo un día en que hube de abandonar una de estas reuniones porque llamaron de mi casa (…) donde se había declarado un incendio. Además, D. Luis Rey pidió mi consejo en la compra de algunas fincas colindantes para la ampliación del Colegio y redacté algún contrato sobre el particular. También solicitó mi intercesión y acompañamiento en alguna entrevista con el Ministro de Educación D. Cruz Martínez Esterue-las, o el Secretario de Estado D. Juan Manuel Ruigomez Iza, ambos com-pañeros abogados del Estado. Además, matriculé a mi hijo Carlos mientras vivimos en Sevilla y hoy estudia mi nieta Andrea, que es la única que vive en Sevilla”.

CAMBIO POSITIVO. “Creo que el Colegio mantiene sus valores fundamen-tales, esto es la pluralidad, la convivencia, la emulación y el compañe-rismo. Desde mi punto de vista, hoy ha cambiado a mejor en el Colegio tanto el dominio de las lenguas extranjeras como la cibernética, que son imprescindibles en el mundo actual”.

INQUIETUD POR APRENDER. “Creo que la inquietud es la primera fase del conocimiento y en este sentido la siembra de la inquietud intelectual de los alumnos es esencial para la transmisión del conocimiento. En cuanto a los métodos y planes de estudios, creo que el plan de estudios de 1938 a saber, siete años de Bachillerato y Examen de Estado para acceder a la Universidad, fue, con el lunar de los idiomas, el más completo plan de estudios, al estimular el sentido crítico y la inquietud intelectual en todos los campos del saber”.

FORMACIÓN INTEGRAL Y AFÁN DE SUPERACIÓN. “Hoy en día todos los colegios deberían preocuparse por ofrecer una formación integral, incentivar el esfuerzo en el día a día de sus alumnos, y promover el deseo de superación. Todo esto, unido a la competitividad entre los alumnos y la emulación como factor de mejora de los conocimientos y de la formación de las personas en todos los aspectos de la vida, marca-rá la diferencia dentro de la oferta educativa”.

“Creo que el plan de estudios de 1938 a saber, siete años de Bachillerato y Examen de Estado para acceder a la Universidad, fue, con el lunar de los idiomas, el más completo plan de estudios, al estimular el sentido crítico y la inquietud intelectual en todos los campos del saber”

“Hoy en día todos los colegios deberían preocuparse por ofrecer una formación integral, incentivar el esfuerzo en el día a día de sus alumnos, y promover el deseo de superación"

34

Carlos Pera Madrazo ingresó en 1943 en el Colegio, donde estudió Primaria y los siete años de Bachillerato. Años más tarde se convertiría en un insigne cirujano, después de formarse para ello en Sevilla y Lyon, principalmente, aunque también en París, Oxford, Cambridge, Zurich y UCLA. Pionero en el transplante de hígado y páncreas en España y Andalucía, con semejante bagaje y formación internacional, no es extraño que diga que los alumnos actuales deben cobrar conciencia de que, lo quieran o no, son hijos de la Comunidad Europea, y, por tanto, deben dominar una lengua franca, además de la materna. Además de eso, considera fundamental hacerles ver a los niños que el motor más importante es el método y el trabajo, y enseñarles a hacer un buen uso de las nuevas tecnologías. Del Colegio guarda unos recuerdos muy agradables y, aunque vive desde hace años en Córdoba, afirma que ha mantenido los lazos de amistad y afecto y que a quien le pide recomendación por un colegio en Sevilla, siempre le contesta que el San Francisco de Paula. ¿Por qué? Porque allí les enseñaron, a él y a sus compañeros, a acercarse al conocimiento con intención y método.

UNA ENSEÑANZA EFICAZ Y ATRACTIVA. “Ingresé en 1943. Estudié Primaria e ingresé a los siete años en Ba-chillerato. La razón que llevó a mis padres fue el prestigio del centro y que mi familia podría considerarse liberal. En general son recuerdos muy agradables. No era mal estu-diante, más bien bueno. Me gustaban las ciencias naturales y, también, la geografía. Yo diría que el Colegio buscaba sobre todo proporcionar una enseñanza eficaz, en la que

uno se viera atraído por la materia”.

ENSEÑANZA PARA LA VIDA. “Sí llegué a percibir la convivencia de ideas muy distintas en el Cole-gio. Y tengo que decirle que eso me ha servido mucho en la vida. Como también la competitividad y el afán de superación que me inculcaron en el

n Formación como cirujano en Sevilla y posteriormente como “Interne des Hôpitaux de la Université de Lyon”, con estancias en París, Oxford, Cambridge, Zurich y Los Ángeles.

n Catedrático de Cirugía de la Universidad de Córdoba desde 1976.

n Profesor Emérito de Cirugía de la Universidad de Córdoba desde 2005.

n Ha sido Director y Jefe de la Unidad de Trasplantes de Hígado y Páncreas del Hospital Universitario Reina Sofía de Córdoba

n Ha realizado el primer trasplante de páncreas (1988) y de hígado (1989) en Andalucía.

n Ha realizado los primeros trasplantes infan-tiles y de neonatos de hígado en Andalucía, con hígado reducido y con hígado compartido (1992).

n Ha realizado por primera vez en España el primer trasplante de hígado-páncreas (riñón en secuencial) (1990) y de hígado-riñón-páncreas (1997, en un solo tiempo).

n Ha realizado el primer trasplante de vivo-relacionado de hígado en Andalucía (2002).

n Tiene 305 publicaciones, la mayoría en revis-tas anglosajonas, ha dirigido 31 Tesis Doctorales y ha participado en multitud de congresos internacionales.

n Académico de Número de la Real Academia de Medicina de Sevilla y Académico correspon-diente de la Nacional y de Granada.

n Ha sido Presidente de la Sociedad Andaluza de Cirugía y Vicepresidente de la Sociedad Española de Patología Digestiva.

n Premio “Cordobés del Año 2003” y “Averroes de Oro Ciudad de Córdoba a las Ciencias Médi-cas” (2004) y Premio Virgili en 2010.

“Tengo conciencia de que el Colegio ha sido cuna de grandes

profesionales; señal de que salían bien

formados”

Carlos Pera MadrazoCatedrático de Cirugía Emérito de la Universidad de Córdoba

“Nos enseñaron a acercarnos al conocimiento con intención y método”


35

Colegio. (…) Luis Rey Guerrero y Luis González fueron los profesores que más me influyeron”.

¿UN COLEGIO EN SEVILLA? DONDE ME EDUQUÉ. “Antes coincidía con alguno de mis antiguos compañeros del Colegio, especialmente los relacionados con la medicina. Ahora menos, porque no vivo en Sevilla. (…) Aunque he seguido manteniendo lazos de amistad y afecto. Asistí a la reunión del décimo quinto Aniversario de mi promoción. Y, siempre que me han consultado para recomendar un colegio en Sevilla, contesto: el San Francisco de Paula, que es donde me eduqué. (…) En general, tengo conciencia de que el Colegio ha sido cuna de grandes profesionales; señal de que salían bien formados”.

FACILIDAD PARA ALCANZAR EL GRADO DE LICENCIADO Y DOCTOR. “Realmente el Colegio no influyó en la elección de mi carrera. Pero sí, en cuanto a la facilidad para alcanzar el grado de licenciado y de doctor. Nos enseñaron a acercarnos al conocimiento con intención y método”.

UN FALANGISTA FAMOSO. “Recuerdo muchas anécdotas ligadas a la época de la Primaria y el ingreso; esto es: a los años 40. Por ejemplo, recuerdo que una vez llegó un inspector de Formación del Espíritu Nacio-nal a la clase de D. Nicolás, a Primaria. Mi hermano era el segundo de la clase y D. Nicolás lo eligió para responder a las preguntas del evaluador. Dime, ¿qué falangista famoso conoces?, preguntó el inspector. Luis Agüe-ra, respondió Javier. ¿Y, quien es ese…, hijo?, volvió a preguntar. Uno que juega conmigo al ‘golfito’ en el parque de María Luisa, respondió Javier, sin vacilación, refiriéndose a un ‘Flechas y Pelayo’ que jugaba con él en el parque al golf en miniatura”.

EL PAPEL DEL PROFESOR. “Una cosa es la forma de enseñar y aprender y otra muy distinta los planes de estudio vigentes. Dicho esto, creo que se enseña igual que antes: a comunicarse mediante la capacidad de leer, escribir y dominar idiomas; a adquirir información; a comprenderla; a memorizarla y a evocarla. Y, en todos estos pasos, más en fomentar la curiosidad, debe estar más o menos presente el Profesor”.

MÉTODO Y TRABAJO. “Lo fundamental es hacerles ver a los niños que el motor más importante es el método y el trabajo; así como la conciencia de que, lo quieran o no, son hijos de la Comunidad Europea, y, por tanto, deben de dominar una lengua franca, además de la materna (entiéndase, hoy por hoy, el inglés además del español). Es fundamental que dominen las tecnologías que permiten el acceso a la información y saber hacer un uso correcto de ellas”.

EL ORGULLO DE HABER PERTENECIDO. “Mi recomendación al Colegio para el futuro es que no pierda la conciencia de liderazgo, ni el estilo fundacional. (…) Lo que diferencia a las mejores instituciones educativas es el orgullo que se siente de haber pertenecido a ellas”.

“Siempre que me han consultado para recomendar un colegio en Sevilla, contesto: el San Francisco de Paula, que es donde me eduqué”

“Yo diría que el Colegio buscaba sobre todo proporcionar una enseñanza eficaz, en la que uno se viera atraído por la materia”

“Sí llegué a percibir la convivencia de ideas muy distintas en el Colegio, y tengo que decir que me ha servido mucho en la vida, como la competitividad y el afán de superación”

36

Más conocido como Tony Benítez, Antonio Benítez Villapol ha vestido, entre un sinfín de personalidades relevantes de la vida social española, a Su Majestad la Reina Doña Sofía, sus hijas las Infantas Doña Elena y Doña Cristina, Doña Cayetana de Alba. Y lo cierto es que sus habilidades para el diseño ya se adivinaban en el Colegio, donde muchas veces, en vez de bajar al patio durante el recreo, se quedaba dibujando en clase. “El Colegio influyó en mi vocación en el sentido de fomentar mi tendencia natural al dibujo”, cuenta el célebre modisto sevillano, que, no obstante, al principio de su carrera, y tras su paso por el Colegio, encaminó sus primeros pasos profesionales por otros derroteros. No estaba satisfecho, y marchó a Ginebra (Suiza) para desarrollar sus inquietudes sobre el Diseño y la Moda. Lo que vino después de eso es una brillante y notoria carrera como modisto. Sus recuerdos del Colegio son los de una infancia feliz y apacible de un niño que era buen dibujante y mal estudiante. Y su percepción hoy del San Francisco de Paula es la de “un colegio especial por su excelencia e ideario independiente”.

AÑOS DE POSGUERRA. “Estuve en el Colegio desde el año 1944 hasta el 1950. Recibí una enseñanza de más calidad y menos mediatizada que la que se daba generalmente en esos años de posguerra (…). En el Colegio en aquella época y a esa edad no se percibía más que el compañerismo y la amistad”.

MAL ESTUDIANTE Y BUEN DIBUJANTE. “Mis recuerdos de aquellos años son los de una infancia feliz y apacible. Era mal estudiante y mis asignaturas preferidas eran el dibujo y la religión”.

VALORES MORALES Y HUMANOS. “El San Francisco de Paula es un colegio especial por su excelencia y su ideario independiente. En él me inculcaron la honestidad, la honradez y los valores morales y humanos”.

NOMBRES PROPIOS. “¿Profesores que me influyeron? D. Nicolás Gelo, D. Juan Prieto, D. Elías Ferrer, y muchos más que sería prolijo enumerar”.

ANTIGUOS COMPAÑEROS. “Conservo algunos amigos de aquellos años y nos vemos con frecuencia. Hubo muchos que tuvieron una trayectoria

n Una vez terminados sus estudios en el San Francisco de Paula, hizo la carrera de Practicante (después de ATS y posterior-mente DUE), profesión que ejerció varios años.

n A continuación marchó a Ginebra (Sui-za) para desarrollar sus inquietudes sobre el Diseño y la Moda.

n Años después regresó a España, esta-bleciéndose en Madrid, para empezar una nueva etapa en el mundo de la moda, que le llevó de diseñar botones y cinturones para la alta costura a ser Modisto.

n En el año 1992 inauguró tienda en Sevilla, donde terminó su vida laboral en el año 2008.

n Ha vestido a infinidad de personalida-des relevantes de la vida social española.

n Ha realizado trabajos para el Ballet Na-cional, colaborando con la gran bailaora Manuela Vargas.

n Ha realizado numerosos desfiles de moda bajo la denominación “Sevilla, siempre Sevilla”

n Ha recibido numerosos premios, distin-ciones y demás galardones en reconoci-miento a su labor y entrega.

“La virtud del Colegio ha sido siempre estar

en la vanguardia de todos los adelantos

que se han ido produciendo”

Antonio Benítez VillapolModisto

“El San Francisco de Paula es un colegio especial por su excelencia y su ideario independiente”


37

profesional muy notable. Así, puedo destacar, entre otros, a Antonio Gil Merino, Ricardo Pachón, Julio de la Rosa, Juan Calvo de Mora y Francis-co Medina”.

REFUERZO DE UNA TENDENCIA NATURAL. “El Colegio influyó en mi vocación en el sentido de fomentar mi tendencia natural al dibujo”.

ANÉCDOTAS. “Recuerdo mis buenos ratos con los compañeros y sobre todo que en vez de jugar en el patio me quedaba en clase dibujando”.

VÍNCULO. “Perdí un poco el contacto cuando estuve viviendo fuera de Sevilla, pues no me era posible, al asentarme aquí nuevamente sí he tenido ese contacto”.

SIEMPRE A LA VANGUARDIA. “La virtud del Colegio ha sido siempre estar en la vanguardia de todos los adelantos que se han ido producien-do. A mi modo de ver sería conveniente introducir técnicas de diseño en moda”.

DIFERENCIAS. “Las diferencias entre las generaciones anteriores y las actuales son aquellas que nos han venido dadas por el progreso y el de-venir inevitables de los acontecimientos, tanto políticos como tecnológi-cos. Como todo en la vida en unos aspectos mejor (metodología, técnicas de estudio, etc.), en otros peor (valores morales y humanos que antes parecían imprescindibles)”.

ADECUACIÓN A LOS CAMBIOS. “El actual Director ha sabido aunar el rigor en la enseñanza con la adecuación a los cambios que exige la sociedad. ¡Ese es el camino!”.

PESE A QUIEN PESE. “Lo principal ese tener un ideario, una meta, un fin y seguir el camino pese a quien pese. Las buenas instituciones educativas siempre se diferencian de las otras por el esfuerzo que hacen para salir de la estricta legalidad”.

“Lo principal ese tener un ideario, una meta, un fin y seguir el camino pese a quien pese”

“Recibí una enseñanza de más calidad y menos mediatizada que la que se daba generalmente en esos años de posguerra”

“El actual Director ha sabido aunar el rigor con los cambios que exige la sociedad”

38

Pocos nombres propios hay en la Ciencia Española como el de Manuel Losada Villasante, Premio Rey Jaime I en 1990, Premio Príncipe de Asturias en 1995, y Premio Maimónides en 1998. Este farmacéutico nacido en Carmona estudió por libre los primeros años de Bachillerato en el Instituto San Isidoro de Sevilla, e ingresó en el Colegio de San Francisco de Paula para realizar los dos últimos cursos, antes de ingresar en la Universidad. “Debo dar gracias al cielo por haber podido completar mis estudios de Bachillerato en uno de los mejores colegios de Sevilla y Andalucía”, comenta Manuel Losada, que considera a sus entonces directores, los hermanos D. José y D. Luis Rey, unos “maestros insuperables”. Sus recuerdos de aquellos dos cursos son los de “unos años felices con magníficos compañeros y unos profesores excelentes que dedicaban por entero su vida a nuestra formación y educación”. Dice haber recibido del Colegio las claves para una sólida formación humanística y científica posterior, así como valores como el comportamiento y la solidaridad. Preguntando sobre qué debe priorizarse en la educación, si los conocimientos o los valores, subraya que la transmisión de unos y otros resulta inseparable.

DOS CURSOS. “Yo tuve la fortuna de nacer y vivir mis primeros años en Carmona, en el seno de una honra-da y feliz familia trabajadora muy numerosa. La amplia casa en que nací está situada en la plaza del colegio de las monjas dominicas de Madre de Dios –donde aprendí urbanidad y las primeras letras– frente a la casa-palacio de los Caro, familia muy influyente en la historia de Carmona. Aunque Carmona tiene ahora varios institutos de segunda enseñanza y varios miles de alumnos, no era así ni mucho menos cuando yo inicié por

libre mis estudios de Bachillerato en los años cuarenta en el Instituto San Isidoro de Sevilla. Debo dar gracias al cielo de que esto fuera así, pues, sin tener que salir de Carmona, nuestro curso, que no llegaba a la docena, pudo recibir una educación e instrucción esmerada. Y de nuevo debo dar gracias al cielo por haber podido completar, ya oficialmente, mis dos últimos cursos de Bachillerato en el de San Francisco de Paula, que considero uno de los mejores colegios de Sevilla y Andalucía, y que entonces estaba dirigido por los hermanos D. José y D. Luis Rey Guerrero”.

CLAVES PARA UNA SÓLIDA FORMACIÓN. “Ingresé en el San Francisco en 1944 y salí en 1946. Estuve por tanto los dos últimos cursos de Bachille-rato, antes de ir a la Universidad. Durante estos dos años viví en el barrio de San Pedro. A todos mis profesores de Bachillerato de aquellos años debo en gran parte los firmes cimientos en lenguas clásicas y modernas, geografía e historia, física, química y matemáticas, claves para una sólida formación humanística y científica posterior”.

n Licenciado en Farmacia por la Universi-dad Complutense con Premio Extraordina-rio en 1952. Doctor en 1956. Investigador del Departamento de Fisiología Celular de la Universidad de Berkeley (California) entre 1958 y 1961.

n Catedrático de Bioquímica de la Univer-sidad Hispalense. Director del Instituto de Biología Celular del CSIC. Fundador del Instituto de Fotosíntesis de Sevilla.

n Premio de Investigación Científica y Téc-nica Maimónides de la Junta de Andalucía en 1998. Premio Rey Jaime I de Investiga-ción en 1990. Hijo Predilecto de Andalucía en 1993. Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica en 1995.Recibió la Medalla de la Universidad de Sevilla en 2006. Doctor honoris causa por varias universidades españolas.

Manuel Losada VillasanteCatedrático de Bioquímica y Biología Molecular, Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica en 1995.

“Doy gracias a Dios por haber podido completar el Bachillerato en uno de los mejores colegios de Sevilla y Andalucía”

“Mis recuerdos son los de unos años

felices con magníficos compañeros y unos

profesores excelentes de Letras y Ciencias que

dedicaban por entero su vida a nuestra

formación y educación”


39

AÑOS FELICES. “Mis recuerdos del Colegio son los de unos años felices de una juventud feliz, con magníficos compañeros y unos profesores exce-lentes de Letras y Ciencias, que dedicaban por entero su vida a nuestra formación y educación”.

ESTUDIOS Y FAMILIA. “En aquellos años, yo, como mis hermanos, estaba dedicado por entero al estudio y al disfrute de una vida familiar (…) Mis asignaturas preferidas eran las matemáticas y la física”.

D. JOSÉ Y D. LUIS. “Como ya he señalado, recuerdo con agradecimiento a todos los profesores, por su dedicación y entrega, pero de forma especial debo mencionar a D. José y D. Luis Rey, que eran maestros insuperables de letras y ciencias, respectivamente”.

COMPORTAMIENTO Y SOLIDARIDAD. “Si tuviera que resumir las ense-ñanzas más valiosas que recibí en el Colegio, yo destacaría dos: com-portamiento y solidaridad. Con su dedicación, los profesores nos daban ejemplo de un comportamiento que nosotros tratábamos de imitar, y entre los alumnos cundía un sentimiento de verdadero compañerismo y solidaridad”.

INSEPARABLES. “Pienso que, en la enseñanza, los conocimientos y la transmisión de valores deben ser inseparables, y en el Colegio lo eran”.

‘CACHARREAR’ EN EL LABORATORIO. “En la enseñanza de entonces había quizás un exceso de enseñanza memorística, pero tampoco nos venía mal. A mí lo que más me hubiera gustado hacer es ‘cacharrear’ continuamente en el laboratorio y estar mirando todo el día por el microscopio”.

CIENCIA Y CONCIENCIA. “Soy un científico que he buscado la verdad por encima de todo. Además, creo que hay que poner por delante la bondad. Los hombres y especialmente los científicos no debemos olvidar nunca que la inteligencia y la ciencia con conciencia son admirables, pero sin conciencia son temibles y terribles…”.

INSISTIR EN LO IMPORTANTE. “Dicen que afirmaba Sócrates, en los tiempos de la Grecia clásica, que las cosas importantes hay que repetirlas muchas veces, y si son muy importantes con las mismas palabras a ser posible. Yo por mi parte añadiría de mi propia cosecha que es importante separar lo principal de lo secundario. Vivimos demasiado deprisa, y nos paramos poco en lo importante, incluso la educación parece contagiada por esas prisas, queremos abarcar demasiado, y eso no es bueno, es mejor insistir en lo importante y que los conocimientos se asienten sobre bases sólidas”.

MENOS MEDIOS PERO MÁS ENTUSIASMO. “En los tiempos en los que yo estudié, los alumnos teníamos menos facilidades y medios, pero creo que los aprovechábamos más y mejor y con mucho entusiasmo. Hoy me parece que hay excesivo número de estudiantes que tienen poco interés por aprender y a los que les cuesta trabajo estudiar y esforzarse”.

EN DESVENTAJA CON EUROPA. “En general, España no ha logrado aún ponerse en educación a la altura de sus vecinos europeos. Las universidades europeas nos siguen llevando ventaja, aunque desde el pasado siglo nos estamos acercando bastante. A las universidades españolas yo les daría un 7 en docencia y otro 7 en investigación”.

LA FÓRMULA PARA EL ÉXITO. “Trabajo, dedicación y entusiasmo. Creo que esa es la fórmula para avan-zar en todos los ámbitos de la vida, y también es la recomendación que puedo hacer al Colegio para que continúe con su fructífera labor en los próximos años”.

“Si tuviera que resumir las enseñanzas más valiosas que recibí en el Colegio, yo destacaría dos: comportamiento y solidaridad”

“Me acuerdo con agradecimiento de todos los profesores, pero de forma especial debo mencionar a D. José y D. Luis Rey, que eran maestros insuperables de letras y ciencias, respectivamente”

40

Director general del Grupo Barea, Manuel Barea Velasco pertenece a la segunda generación de una familia de empresarios dedicada desde 1942 al comercio mayorista de alimentación, bebidas y droguería. Guarda muy buenos recuerdos del Colegio y de sus profesores, quienes formaban, dice, “un elenco de muchos quilates”. Siente gran admiración por la familia Rey y recuerda con cariño que D. Luis Rey Guerrero, “que era un apasionado de la música”, le decía que tenía un gran parecido físico al compositor austriaco Franz Schubert. Dice que el Colegio le aportó método y disciplina, “pero con libertad de expresión y amplitud de miras” y que allí amplió sus horizontes “tanto culturales como personales”. Comenta que en todos los estamentos relevantes de Sevilla y Andalucía se ven con frecuencia antiguos alumnos del San Francisco de Paula y cuenta con orgullo que el Colegio acoge hoy ya a la tercera generación de los Barea.

CERCA DEL COLEGIO. “Ingresé en 1945 en Párvulos con D. Félix y salí en 1954 con la Revalida de 4º. Mi familia tenía una buena referencia de la calidad de enseñanza que se impartía en el Centro. Eso, unido a que mi padre tenía su empresa en la calle Imagen y yo nací muy cerca del

Colegio, creo que fueron las razones para su elección”.

AMIGO DE LAS LETRAS. “Guardo muy buenos recuerdos de mi estancia en el Colegio. Como estudiante no era de los mejores y mis asignaturas preferidas eran las de letras: literatura, latín y francés”.

NUEVOS HORIZONTES. “Yo tuve la suerte de recibir clases de D. Luis y D. José Rey y recibir de primera mano lo que después ha sido la impronta y el carácter que ha distinguido con los años la personalidad del Colegio y de muchos de sus alumnos. Si hubiera que resumirlas diría que método y disciplina pero con libertad de expresión y amplitud de miras. El Colegio me abrió muchos horizontes tanto culturales como personales y me enseñó a darle valor al individuo por sus cualidades”.

LEJOS DEL CONVENCIONALISMO. “Los estándares de pluralidad, toleran-ciay convivencia estaban por encima de la media de colegios de mi época, y por supuesto el estudiante lo percibía aunque no supiera valorarlo en ese momento”.

n En 1956 se incorporó al negocio familiar de alimentación al por mayor, pasando por distintos departamentos de la empresa has-ta 1968, año en el que comenzó a ocupar el puesto de director general de la empresa Manuel Barea S.A.

n Durante ese tiempo, además de completar su formación profesional, participa como vocal pleno de la Cámara de Comercio de Sevilla, cargo que continúa desempeñando en la actualidad.

n Presidente de la Federación de Industria y Comercio de Sevilla y Provincia y de la Confederación Andaluza de Empresarios de Alimentación (CAEA).

n Pertenece al Consejo de Euromadi Ibérica S.A. y a su Comité Comercial. También es consejero delegado de Manuel Barea S.A., Cash Barea S.A., Cash Colombino y Cash Extremeño S.A.

Manuel Barea Velasco Director general de la empresa Manuel Barea S.A (CASH Barea)

“En todos los estamentos relevantes de Sevilla y Andalucía se ven con frecuencia antiguos alumnos del San Francisco de Paula”

“Tuve la suerte de recibir clases de

D. Luís y D. José Rey y recibir de primera

mano lo que después ha sido la impronta y el carácter que ha distinguido con los

años la personalidad del Colegio y de

muchos de sus alumnos”


41

ELENCO DE MUCHOS QUILATES. “Debo destacar la humanidad de D. Nico-lás Gelo, la categoría y la personalidad de D. José y D. Luis Rey Guerrero, la ecuanimidad y la impronta de D. Francisco Repetto, la elegancia y la sapiencia de D. Luis González y la calidad humana y profesional de tantos otros profesores que sería muy largo de enumerar porque el elenco era de muchos quilates”.

FRANCISCANOS DE RENOMBRE. “Conservo muchos amigos y muchos recuerdos, nos vemos con cierta frecuencia y nos llamamos con cierta asi-duidad. En todos los estamentos relevantes de Sevilla y Andalucía se ven con frecuencia antiguos alumnos del San Francisco de Paula, ya sean cien-tíficos, médicos, políticos, empresariales, abogados, notarios… Destacaría a Juan Salas, Federico, Narciso y Vicente Flores, Manolo del Valle, Antonio Gil Merino, Fernando Villar, José García Chamizo, Ángel Benítez… La lista sería muy larga y temo caer en algún olvido lamentable”.

HIJO Y NIETO DE EMPRESARIOS. “Mi vocación profesional viene de familia desde mis abuelos y yo desde pequeño tenía muy claro dónde iba a aterrizar, seguramente tenía el virus inoculado desde nacimiento”.

PARECIDO FÍSICO CON SCHUBERT. “Don Luis Rey Guerrero era un apasio-nado de la música y decía que yo me parecía al compositor austriaco Franz Schubert cuando era joven. En el Colegio se organizaban los sábados con-ciertos y D. Luis no dejaba que me perdiera ninguno. Por aquel entonces yo apenas tenía doce años”.

TRES GENERACIONES. “Mis hijos han estudiado en el Colegio, mis dos sobrinos también han estudiado allí hasta que entraron en la universidad y en la actualidad cuatro sobrinos nietos hacen lo mismo. Además he parti-cipado en reuniones y cenas de aniversario de la promoción de mi curso y en distintas conferencias a las que he sido invitado”.

CONSERVA SU ESENCIA. “Yo creo que se mantienen las raíces básicas. El Colegio ha evolucionado pero conserva lo básico y lo importante. No estoy muy al tanto de la educación que se imparte actualmente, pero, por las referencias y los resultados tan brillantes que se perciben, sé que están en el camino acertado”.

PRESTIGIO, HISTORIA Y CATEGORÍA. “Pocos centros educativos llegan al 125º aniversario con el prestigio, la historia y la categoría que actualmente tiene el Colegio de San Francisco de Paula y su dirección, la familia Rey. Yo entiendo que para doblar esta cifra hay que seguir haciendo las tareas y estar al día de lo que surge en este revuelto mundo”.

PERVIVENCIA DE LOS VALORES. “Un institución educativa debe estar al máximo nivel en las materias que se imparten, priorizando las nuevas tecnologías, idiomas, informática, e incluir quizás algunas especificaciones en temas empresariales. Todo ello, sin perder de vista los valores fundamentales: educación íntegra de la persona, disciplina, esfuerzo, pluralidad, tolerancia… que las mejo-res instituciones educativas, sin duda, deben transmitir”.

“Pocos colegios llegan al 125 aniversario con el prestigio, la historia y la categoría que actualmente tiene el San Francisco de Paula y su dirección, la familia Rey”

“Los estándares de pluralidad, tolerancia, y convivencia estaban por encima de la media de colegios de mi época, y por supuesto el estudiante lo percibía aunque no supiera valorarlo en ese momento”

“Yo creo que se mantienen las raíces básicas. El Colegio ha evolucionado pero conserva lo básico y lo importante”

42

Es una eminencia literaria reconocida internacionalmente. Estados Unidos le acogió en 1959, cuando tuvo que salir de Sevilla, y allí se convirtió en uno de los mayores especialistas en Cervantes, optando incluso al Príncipe de Asturias en 2009. Señala que en el San Francisco de Paula encontró, como alumno, “naturalidad, sensatez y respeto”, y que su experiencia posterior como Profesor en el Colegio le ayudó a encauzar su carrera. Destaca su excelente relación con los hermanos Rey Guerrero: “D. José Antonio tenía una sensibilidad exquisita y D. Luis daba unas clases muy creativas, casi sin manual”.

UNA LIBERACIÓN. “Entré en 1945, en 4º de Bachillerato. Los tres cursos previos los hice en un colegio religioso de Sevilla del que tuve que salir muy insatisfecho tanto yo como mis padres, y que se queda en los recuerdos más horrorosos de mi vida. El paso al Colegio fue una especie de satisfacción de la que sigo viviendo hasta hoy”.

NATURALIDAD, SENSATEZ Y RESPETO. “En el Colegio había disciplina, pero razonable. No existían rivalidades entre los alumnos y la experiencia en conjunto se distinguía por la falta de violencia física e moral, común en la época. Marcaba por completo la vida diaria y hacía que se viniera a estudiar de una manera no forzada y natural, una expe-riencia agradable y grata”.

INTELIGENCIA ANTE LA DICTADURA. “El Colegio tuvo que escapar del ambiente cerrado de la época de una manera muy hábil, no fomentando ninguna actitud discrepante ni de buscar pelea ni de oposición abierta. Actuó con enorme prudencia que cada vez admiro más, de una manera muy pensada, sin buscar conflictos ni en lo religioso ni en lo político. La docencia estaba y está montada de una manera alejada de los conflictos y eso contribuyó a crear un concepto pedagógico y refinado de gran altura”.

DOS REFERENTES. “Había dos grandes personas capaces de llevar adelante el centro como D. Luis Rey Gue-rrero y D. José Antonio Rey Guerrero, que se complementaban a la perfec-ción pero que a la vez eran muy diferentes. D. José Antonio, con el que tuve más contacto por mi fuerte orientación hacia Letras, tenía una sensibilidad exquisita, un gran maestro de literatura, y creo que era quien llevaba sobre sí la orientación general del sentido educativo. Y lo principal que aprendí de él fue que la enseñanza es un acto de amor, tanto a la materia que se imparte como a la enseñanza en sí, y a respetar profundamente al alumno, con honestidad y sinceridad. D. Luis Rey Guerrero se dedicaba a las Ciencias y encontró conmigo un problema difícil, porque yo tenía una polarización impulsiva hacia las Letras que y no me gustaban nada las Ciencias. Recuerdo que frecuentemente nos daba la sorpresa de corregir los manuales que uti-

n Doctor en Literatura por la Universidad de Sevilla.

n En 1959 se ve obligado a trasladarse a Estados Unidos y Canadá para desarrollar su carrera como Profesor de Literatura.

n En 1978 se incorpora como Profesor de Literatura de la Universidad de Harvard, de la que ha sido Catedrático.

n En 2004 es nombrado Hijo Predilecto de Andalucía.

n En 2009 optó al Premio Príncipe de As-turias de la Comunicación y Humanidades.

n Es autor de múltiples publicaciones sobre las aportaciones judías y árabes al factor hispano y ha impartido conferencias por todo el mundo.

Francisco Márquez Villanueva Catedrático de Literatura Española en la Universidad de Harvard

“Aquí aprendí que la enseñanza es un acto de amor, tanto a la materia como a la enseñanza en sí, y de respeto hacia el alumno”

“Sin mi paso por el Colegio, hubiera

sido una persona totalmente distinta, y

no creo que mejor”


43

lizábamos. Decía: ‘Esto está equivocado, es un horror. Esto fuera’. Eran unas clases muy personales y muy creadoras y el manual sólo era la ayuda, un bastón. Esto fue un estímulo intelectual sumamente creador y grato”.

ESTRENO LITERARIO. “Escribí en el primer número de MENDRUGO sobre nuestra primera lectura del Conde Lucanor. Lo orienté en un plan entre serio y jocoso y desde luego no figura como número uno de mi bibliografía pero me insertó por completo en la marcha de la publicación. Terminé siendo llamado al final Clásico del MENDRUGO”.

REGRESO COMO PROFESOR. “Me incorporé de una manera espontánea pues todavía era estudiante y tenía 19 años. Fue a propuesta de D. José Antonio Rey Guerrero debido a las dificultades que encontraba el Colegio para disponer de un Profesor de inglés. Hasta 1959, cuando abandoné Sevilla, recuerdo haber apren-dido mucho como docente, me hizo prepararme para posteriores experiencias”.

AMIGOS. “Los hice buenos y muy señeros: Javier Martínez Azcoytia, con el que me sigue uniendo una amistad entrañable; José Castellano, un chico espléndido como persona y con talento, que murió muy joven; los hermanos López Ruiz, José y Paco; Guillermo Paneque; y un compañero muy especial, Pérez Solano, que era un genio matemático maravilloso al que D. Julio Mínguez admiraba por su rapidez mental para buscar caminos y asimilar los conceptos matemáticos de manera instintiva”.

SU SEGUNDA CASA. “Siempre que venía por Sevilla me acercaba al Colegio, pero de manera natural y espon-tánea, no forzada. Venía a ver a D. José Antonio y a D. Luis, que me daban una acogida muy cordial, pero sin revestirlas de visitas extraordinarias”.

EL ESPÍRITU DEL COLEGIO. “Responsabilidad en la docencia, conocimiento profundo de la mentalidad del estudiante y estímulo intelectual muy sincero y muy exigente pero dentro de parámetros sensatos. Un acerca-miento en conjunto a la enseñanza que no he visto ni siquiera en Estados Unidos, donde la enseñanza media es un desastre”.

UN PASO CON HUELLA. “Lo que aprendí en el Colegio me ha servido para toda la vida, mi estancia aquí no pudo ser más positiva. Si no hubiera estudiado aquí sería una persona distinta, no creo que mejor, sin ningún género de dudas”.

125 AÑOS. “Ha sido la crónica de un crecimiento y de una mejora general y sobre todo una respuesta a una situación distinta del colectivo estudiantil. El Colegio ha tenido una marcha de adaptación muy sabia a los tiempos, a los cambios de la vida española, de la ciudad y de las exigencias peculiares de cada momento histórico. En los últimos diez años el cambio ha sido enorme y el esfuerzo muy duro pero muy bien enfocado. La capacidad de evolución del Colegio, con medios limitados, ha sacado un rendimiento de las posibilidades ejemplar, fruto de una gran inteligencia”.

TIEMPOS DISTINTOS. “Hoy día, la informática es algo esencial en la inteligencia joven. Por otra parte, ha habido una adaptación por el cambio político hacia una enseñanza con un sentido democrático. Son criterios nuevos, problemas inéditos que no son con los que yo me enfrenté ni de estudiante ni de profesor. Aunque el tipo de enseñanza es muy diferente en sus metodologías, el problema fundamental de la educación existe, pues no tiene solución, sólo puede tener resultados relativos. Por eso creo que no tiene verdadero valor de ha-blar de diferencias, que existen, pero que son difíciles de calibrar si lo de mi etapa era mejor o peor. Depende de las exigencias de la sociedad. Lo que sí creo es que entonces y ahora el Colegio funciona muy bien”.

CONSEJOS. “Que siga por donde va, pues el Colegio ha estado muy bien orientado en 125 años, tiene una experiencia muy grande en enfrentarse a problemas prácticos y deberá seguir capeando el temporal de lo que se presente”.

“El Colegio actuó durante la dictadura con una enorme prudencia que cada vez admiro más, de una manera muy pensada, sin buscar conflictos, y eso contribuyó a crear un concepto pedagógico refinado y de gran altura”

44

Muy gratos son los recuerdos de Manuel Alberto Vázquez Berrones de su paso por el San Francisco de Paula, donde compartió clase con D. Luis Rey Romero, padre del actual Director. Destaca sobre todo el carácter liberal del Colegio y la magnífica convivencia entre compañeros y profesores, donde se conciliaban el respeto y la confianza para expresar las ideas. “Pienso que supieron educarnos para ser demócratas de verdad”, sentencia. Sobre la evolución del Colegio, opina que ha ido mejorando, y que tanto la incorporación del bilingüismo como de las nuevas tecnologías son grandes aportaciones. Por ello, recomienda al centro que siga como va, y sobre todo que no pierda la libertad. “Recuerdo que D. Luis Rey Romero nos reunió a varios compañeros para preguntarnos sobre los conciertos con la Junta de Andalucía. Y nuestro consejo fue que evitara las posibles injerencias que ellos iban a provocar”, comenta.

TODO EL BACHILLERATO. “La fecha de ingreso fue el mes de octubre de 1945. Mi padre cursó sus estudios de Bachillerato en el Colegio, dirigido por el bisabuelo del actual Director y seguramente el buen recuerdo que tenía del Colegio le llevó a matricularme en él, igual que también matriculó antes a mi hermano Ramón, mayor que yo y ya fallecido. Estuve los siete cursos del Bachillerato”.

INTENSO ESTUDIO Y RATOS DE OCIO. “Mis recuerdos son todos muy gratos, aunque los más importantes se refieren al intenso trabajo de estudio que realicé, pues siempre traté de disputar el primer puesto de la clase y la competencia se ejercía con compañeros de mucha talla, como era el padre del actual Director, que fue compañero

de curso durante los siete del Bachillerato. Pero también teníamos ratos de ocio, en los que se pasaba muy bien. Todos éramos muy buenos estudiantes. La ver-dad es que algunos compañeros, pocos, que no seguían el ritmo, abandonaban el Colegio. Y yo siempre tuve la suerte de encontrarme entre los primeros. Yo era más afín a las Ciencias”.

PERSONALIDAD. “Destaco su carácter liberal, basado en valores de base cristiana, pero tremendamente liberal. Gracias a ello, se lograba una magnífica convivencia entre nosotros y con los profesores, con los que, dentro de un profundo respeto, teníamos una gran confianza para expresar nuestras ideas. Pienso que supieron educarnos para ser demócratas de verdad”.

RIGOR Y BÚSQUEDA DE LA VERDAD. “En el Colegio me enseñaron a tratar los asuntos con rigurosidad. Y como creo que la rigurosidad está basada en la verdad, pienso que me inculcaron la búsqueda de la verdad y la manifestación de la misma. Como todo ello coincidía con el estilo también de mi familia, siempre me encontré muy a gusto”.

n Licenciado en Ciencias Químicas en la especialidad de Química Orgánica y Bro-mología por la Universidad Complutense de Madrid

n Catedrático de Matemáticas en el Institu-to de Ayamonte donde desarrolló la mayor parte de su carrera docente y permaneció hasta su jubilación.

n Durante 20 años fue Director técnico de las fábricas de conversas familiar Vázquez y Puerta de Alcalá en Ayamonte y Tarifa

n Propietario de Librería Delta situada en Ayamonte hasta 2001

n Miembro del Consejo Regional Anda-luz de la UCD desde la transición hasta la disolución del partido.

Manuel Alberto Vázquez Berrones Catedrático de Instituto

“Dentro de un profundo respeto, teníamos una gran confianza para expresar nuestras ideas: pienso que supieron educarnos para ser demócratas de verdad”

“Pienso que de una forma plena, sin los

conocimientos recibidos y los estilos de los

diferentes profesores, nunca hubiera podido

saber decidir, con certeza, el ejercicio de un trabajo con el que

he disfrutado”


45

TODOS SON VENERABLES. “Todos los profesores me dieron su ‘marca’ de alguna manera. Pero para mí el mejor fue D. Luis Rey Guerrero, el abuelo del actual Director. Claro que mis compañeros siempre me consideraron ‘su’ niño mimado. De él podría decir muchas cosas magníficas, que no cabrían en este cuestionario. Su autoridad a la hora de manifestarse y el amor que le ponía a lo que enseñaba. Me ayudó mucho D. Francisco Repetto, y sus enseñan-zas religiosas me han servido en mi vida. Magnífico Profesor D. Anuario Mendoza. Aprendí muchísimo con D. Luis González. Me dio su estilo para explicar matemáticas D. Julio Mínguez. Hizo bonito el latín que me enseñó D. Genaro Marcos. D. José Rey siempre fue exquisito en sus modos y embellecía la geografía de forma muy especial, además de lo bien que olía el humo de los cigarrillos que fumaba. Nunca hubo ninguno que me disgustara, todos fueron muy buenos profesores: D. José Vadillo, D. José Vázquez Roncero, Dª Antonia, la Profesora de francés, D. Manuel Pérez Clavijo. Y los inspectores, como D. Nicolás, todos para mí, son venerables”.

AMIGOS. “Sí, conservo amigos de entonces, aunque nos vemos de tarde en tarde, nos hemos reunido en mu-chos de los acontecimientos que se han celebrado en el Colegio, pero sobre todo cuando aún vivía D. Luis Rey Romero, el padre del actual Director, que nos aglutinaba a los compañeros del curso. Sin embargo, no quiero nombrarlos porque son muchos y me da miedo dejar a alguno”.

UNA PERSONA ADMIRABLE. “Muchos antiguos alumnos del Colegio son conocidos como médicos, aboga-dos, ingenieros, militares, políticos de prestigio, algunos con nombres de relevancia pública, pero otros tam-bién que han ejercido o ejercen puestos importantes, pero menos conocidos y son tantos, unos y otros, que quiero evitar la nominalización, con una sola excepción: creo que la persona de D. Luis Rey Romero merece el mayor homenaje, en estos recuerdos del 125º aniversario, porque su labor a lo largo de su mandato, supuso que el Colegio diera la mejor educación a un número inmenso de sevillanos y siguió abonando la semilla para que siga aumentando sus frutos. Su personalidad es bien conocida y creo que muy querida en una parte importante de Andalucía. También es cierto que de todos mis compañeros fue el que mejor recuerdo y huella me dejó, hasta tal punto que mi mujer, de tanto como yo le hablé de él, también empezó a admirarlo”. INFLUENCIA POSTERIOR. “Pienso que de una forma plena, sin los conocimientos recibidos y los estilos de los diferentes profesores, nunca hubiera podido saber decidir, con certeza, el ejercicio de un trabajo con el que he disfrutado”.

VÍNCULOS. “He seguido vinculado al Colegio. Antes, en muchas ocasiones iba a visitar a D. Luís, sobre todo en las celebraciones de los aniversarios. También estuve cuando rotularon la calle con su nombre. Matriculé a mis dos hijas, para que terminaran en él el Bachillerato. Además, pertenezco a la Asociación de Antiguos Alumnos”.

AL DÍA. “Pienso que ha ido mejorando, sobre todo en la cuestión de la enseñanza de idiomas, que siempre fue una de mis asignaturas pendientes. Encuentro ideales las clases bilingües, que visité hace un par de años, en donde los alumnos y la Profesora me hablaron en inglés y para poder salir del paso más o menos airoso, tuve que terminar con un ‘all right’, malamente dicho. Lo mismo que las aulas de informática, en lo que sí me defiendo algo más. Creo que se está bastante al día, pero indudablemente ha de mantenerse la creación de las nuevas técnicas, métodos y medios que estén en vanguardia”.

SIN INJERENCIAS. “¿Recomendaciones? Muy sencillo. Que sigan como van. Que nunca pierdan la libertad. D. Luis Rey Romero nos reunió a varios compañeros para preguntarnos sobre los conciertos con la Junta de Andalucía. Y nuestro consejo fue que evitara las posibles injerencias que ellos iban a provocar”.

VALORES Y LIBERTAD. “Lo principal es formar a los alumnos en valores de libertad, sin olvidar nuestras ba-ses culturales y cristianas, sin complejos, buscando la verdad, el bien común, ahora emplean mucho la palabra solidaridad, que sí, pero a mi me gusta más la palabra caridad, amor al prójimo”.

“Lo principal es formar a los alumnos en valores de libertad, sin olvidar nuestras bases culturales y cristianas, sin complejos, buscando la verdad y el bien común”

46

Alberto Losada Villasante ingresó en 1947 en el Colegio, donde ya estudiaban tres de sus hermanos. En el San Francisco de Paula cursó los siete años de Bachillerato y allí encontró “un ambiente sencillo, donde se cultivaba el compañerismo y, sobre todo, la libertad”, aunque de esto, como de otras cosas, sólo llegaría a tomar plena conciencia pasado el tiempo. Destaca la influencia que sobre él ejercieron D. Luis Rey, D. Leandro Díaz de Urmeneta, y D. José Rey, aunque de esta influencia también dice haberse dado cuenta con el transcurrir de los años. Explica que el Colegio le transmitió “la motivación para entender y hacer bien las cosas” y considera que eso ha sido muy importante en su carrera. Una brillante y larga carrera docente e investigadora en el campo de la ingeniería hidráulica, en el que se le considera una eminencia internacional. Es consultor de la FAO en sistemas de riego, Catedrático jubilado de la Universidad de Sevilla, y fue Rector de la Universidad de Córdoba.

RESPETO Y RACIONALIDAD. “Estuve los siete años de Bachi-llerato en el San Francisco de Paula, hasta 1954, aunque los dos primeros estuve a caballo entre Carmona y Sevilla, por una especial y generosa consideración del Colegio (es decir, de su Dirección). (…) Recuerdo haber encontrado un ambiente sencillo, donde se cultivaba el compañerismo y, sobre todo, la libertad, aunque de esto, como de otras circunstancias que siguen, sólo llegaría a tomar plena conciencia con mucho

tiempo. (…) Los valores que destacaría del Colegio son orden, seriedad, capacidad para motivar y, sobre todo, respeto y racionalidad.

ENTENDER Y HACER BIEN LAS COSAS. “Yo era un estudiante discreto, aunque mejoré a lo largo de todo el Bachillerato. Mis materias preferidas eran las matemáticas, las ciencias naturales y la física. Para algunas mate-rias de Letras, como filosofía, fui inmaduro y, para otras, mi mala memoria no podía ser compensada ni con voluntad ni con rabitos de pasa -como decía D. Luis Rey Guerrero-, para poder emular a muy buenos compañeros. Sin duda, no saqué todo el provecho a los excelentes apuntes de D. José Rey Guerrero o D. Luis González en geografía, literatura e historia (comple-mento esencial de libros de la época, cuyo coste, por otra parte, el Colegio trataba de evitar). A aquellas enseñanzas en Letras respondí más bien como una esponja en la que todo aquello tardaría en germinar y madurar. (…) Si

n Catedrático Jubilado de Ingeniería Hidráu-lica, Doctor Ingeniero Agrónomo, Diplomé Hydraulique Agricole (Ecole Nat. du Génie Rural); Master Irrigation Science, (University of California). n Numerosos trabajos publicados sobre inves-tigación en hidráulica aplicada al riego. Premio en 2004 al mejor trabajo de investigación teórico-experimental publicado en el Journal of Irrigation and Drainage, de la American Society of Civil Engineers.

n Comunicaciones y ponencias ante congresos nacionales e internacionales. Conferencias y cursos de capacitación y especialización en riegos en diversas instituciones de España y otros países.

n Colaborador con organismos internaciona-les en materia de asistencia técnica en riegos. En particular, como consultor de la Food and Agriculture Organization (FAO), la Organiza-ción Meteorológica Mundial y el World Bank, bajo la coordinación del PROMMA (Comisión Nacional del Agua, México).

n Fue Rector de la Universidad de Córdoba, trabajó en la Confederación Hidrográfica del Tajo y en el centro de Estudios Hidrográficos, del Ministerio de Obras Públicas, y es funciona-rio excedente del Ministerio de Agricultura.

“Pocas veces encontré profesores

a la altura de los responsables que yo encontré en el San Francisco, salvando

circunstancias de tiempo y de rango

institucional”

Alberto Losada VillasanteCatedrático jubilado de Ingeniería Hidráulica

“En el Colegio me encontré un ambiente sencillo dondese cultivaba el compañerismo y sobre todo la libertad”


47

tuviera que resumir lo que me aportó el Colegio, yo diría que una estructura coherente de conocimientos, en un espacio mental diverso, adecuado a cada edad y bastante libre, para la época. (…) El Colegio me transmitió la motiva-ción para entender y hacer bien las cosas, en correspondencia con la edad’’.

NOMBRES PROPIOS. “D. Luis Rey, por su categoría docente y D. Leandro Díaz de Urmeneta, por su temperamento muy respetuoso, fueron los profe-sores que más me influyeron. En cuanto a D. José Rey, fue un raro Profesor para mí, por cuanto me motivó al límite de una capacidad que contribuyó a desarrollar con efecto retardado, muchos años después de salir del Colegio. (…) También conservo a algunos antiguos compañeros en el recuerdo, con el agradecimiento de quien se sabe deudor de mucho que tanto ellos como los profesores, que ya no viven, no podrían ni imaginar. (…) De mi época recuerdo algunos compañeros que tuvieron una trayectoria destacada, como Antonio Gil Merino, en mi curso, y Juan Antonio Yáñez, siempre más joven, en un colegio mayor que fue como una buena segunda parte del San Fran-cisco. Mi compañero sorpresa es Ricardo Pachón, al que sorprendería con mis vivencias flamencas, tanto de Camarón como de otros’’.

UN BUEN ALUMNO DE D. LUIS PODRÍA VIVIR HOY DE LAS RENTAS EN LA UNIVERSIDAD. “¿Diferencias sobre la forma de enseñar y aprender de ayer y hoy? Más que cuestión de ayer y de hoy, es de madurez humana, científica y pedagógica de docentes específicos. Pocas veces encontré profeso-res a la altura de los responsables que yo encontré en el San Francisco, salvando circunstancias de tiempo y de rango institucional. (…) A modo de ejemplo, a la luz de mi limitada experiencia personal, un buen estudiante de D. Luis Rey Guerrero podría vivir de sus rentas para competir en métodos y con rigor en el ámbito de la física actualmente impartida en la Escuela Técnica Superior en que yo me he movido como Catedrático de Universidad durante más de treinta años’’.

TOUCHÉ. “La anécdota que más recuerdo tiene que ver con una invitación de D. Luis Rey a su casa, junto con José Gómez Escudero y Antonio Gil Merino, ya en uno de nuestros últimos años en el Colegio. D. Luis quiso acompañar una copa de vino español con varias composiciones musicales y unos comentarios a libros. A pesar de mi mala memoria, el brillo de mil soles (la energía nuclear), por una parte, y Maruxa, la Niña de los Peines y Bach, por otra, me quedaron grabados para siempre, ayudándome a salir del campo gravitatorio y a escapar de mi mundo zarzuelero. A este último se reducía casi todo lo que yo alcanzaba entonces en música, y mi compañero de pupitre, Antonio Gil, me dio la puntilla (en el buen sentido) tarareándome el concierto de Brandenburgo al día siguiente, entre clases. Touché’’.

VÍNCULOS EMOCIONALES. “He participado en la vida del Colegio sólo muy ocasionalmen-te, porque siempre me moví lejos, aunque tengo la satisfacción agridulce de haber conec-tado con D. Leandro, D. Luis y D. José, en sus últimos meses de vida, cuando ya yo podía apreciar lo que ellos habían hecho por mí. Quizás demasiado tarde para apreciar todo lo que tenían y, en particular, el buen republicanismo de D. José. De todos modos, siempre ha mantenido el vínculo emocional, como cuando arrastré a mi hijo Héctor a que foto-grafiase a su tío Manolo y a su padre, junto al surtidor del patio del Colegio, ya en 2010, en la imagen que acompaño’’.

LA SUERTE FAVORECE AL HOMBRE PREPARADO. “Al Colegio le recomendaría que no deje de aplicar el principio de Pasteur en el sentido de que la suerte favorece al hombre preparado. Puesto que ese principio es aplicable por extensión -añado yo- al Colegio como institución. (…) ¿Qué es lo principal que debe aportar un colegio privado como el San Francisco de Paula a un estudiante del siglo XXI? Lo que voy a decir puede traernos olores a naftalina. Me alegraría que alguien lo asocie con la Institución Libre de Enseñanza: el desarrollo de la libertad para pensar y para expresarse, en concordancia con lo que la democra-cia podrá entonces devolver’’.

“Al Colegio le recomendaría que no deje de aplicar el principio de Pasteur en el sentido de que la suerte favorece al hombre preparado. Puesto que ese principio es aplicable por extensión -añado yo- al Colegio como institución”

“He participado en la vida del Colegio sólo muy ocasionalmen-te, porque siempre me moví lejos, aunque tengo la satisfacción agridulce de haber conec-tado con D. Leandro, D. Luis y D. José, en sus últimos meses de vida, cuando ya yo podía

grafiase a su tío Manolo y a su padre, junto al surtidor del patio del Colegio, ya en 2010,

decir puede traernos olores a naftalina. Me alegraría que alguien lo asocie con la Institución Libre de

48

Médico Pediatra hoy ya felizmente jubilado, Jefe de Servicio de Pediatría del Hospital Infantil Virgen del Rocío durante dieciséis años, Aníbal Tovaruela Santos guarda buenos recuerdos del San Francisco de Paula “por los compañeros y amigos y por el apoyo de los profesores”. Destaca del Colegio que el vivió la calidad de su profesorado, el rigor en la enseñanza y la exigencia en el trabajo. Valores por los que sus dos hijos varones también estudiaron en el San Francisco de Paula. Sobre el Colegio actual, opina que está consiguiendo una proyección nacional e internacional importante, a través de la potenciación de los idiomas y las nuevas tecnologías. Para el futuro, considera clave que siga manteniendo una alta cualificación de sus profesores (en conocimientos y técnicas de enseñanza) y una buena colaboración e integración de las Familias en el proyecto educativo.

PROXIMIDAD Y PRESTIGIO. “Ingresé en el Colegio en el curso 47-48, en párvulos, y continué hasta el 57-58, Preuniversita-rio. Vivíamos muy cerca, en San Juan de la Palma, y supongo que eso fue fundamental para la elección del Colegio por parte de mis padres, como también el prestigio que en esa época ya tenía”.

LO PEOR, EL LATÍN. “En general los recuerdos son buenos, por los compañeros y amigos, y el apoyo que tuve de los profesores. No tengo ningún mal recuerdo de ningún pro-fesor. En los primeros años, hasta 1º ó 2º curso, fui un buen estudiante, después tuve un bache sobre el 3º y 4º curso, y a

partir de ahí, mejoré, pero sin llegar a sobresalir. Las asignaturas que más me gustaban eran ciencias na-turales, geografía, historia, literatura, dibujo. La peor, el latín”.

RIGOR Y AUTORIDAD. “Del Colegio de aquellos años destaco la calidad de su profesorado, que era exce-lente, y el rigor y autoridad en su enseñanza. También el respeto que se tenía al alumno, y la exigencia en el trabajo”.

n Licenciatura en Medicina y Cirugía, en la Facultad de Sevilla, durante los cursos aca-démicos 1958-59 a 1964-65 (incluido primer curso de selectivo de Ciencias).

n Médico Especialista en Puericultura y Pediatría durante los años 1966-67.

n Título de Médico Puericultor por la Escuela Departamental de Puericultura de Sevilla, durante los años 1968-69.

n Socio fundador de la Sociedad de Pediatría de Andalucía Occidental y Extremadura. 1969.

n Nombramiento en propiedad, mediante Concurso-Oposición, de la especialidad de Pe-diatría y Puericultura en la Seguridad Social (1970).

n Jefe de Sección de la Escuela Departamen-tal de Puericultura de Sevilla (dirigida por Don Juan Luis Morales y González) por nom-bramiento del Ministerio de Gobernación, a partir de enero de 1970.

n Médico del Colegio de San Francisco de Paula, con posterioridad a Don Julio López Mejías.

n Nombramiento de Jefe de Sección de Me-dicina Infantil, en la Ciudad Sanitaria “Virgen del Rocío” de Sevilla, 1974.

n Organización y puesta en funcionamiento de la Unidad de Cuidados Intensivos Pediátri-cos, como Jefe de Sección de la misma, desde 1973 hasta julio de 1989.

n Jefe de Servicio de Pediatría del Hospital Infantil Virgen del Rocío, desde 1989 hasta su jubilación en 2005.

n Miembro de la Asociación de Antiguos Alumnos “Rey Guerrero” desdeel año 2009.

“Un Colegio como el San Francisco de

Paula debe preparar a sus alumnos en el

respeto y solidaridad hacia los demás, en

definitiva, formar ‘buenas personas’

además de excelentes profesionales”

Aníbal Tovaruela SantosMédico Pediatra

“Percibíamos que todos éramos tratados por igual en el Colegio, sin diferenciaciones algunas, nadie se dejaba al margen”


49

CONSTANCIA Y ESFUERZO. “Los valores que allí conocí fueron el respeto a los compañeros, profesores y mayores en general, y la necesidad de cons-tancia y esfuerzo en el trabajo bien hecho, para ir consiguiendo metas”.

TODOS POR IGUAL. “No fui muy consciente de la convivencia de ideas po-líticas y formas de pensar muy distintas, lo que sí percibíamos es que todos éramos tratados por igual, sin diferenciaciones algunas. Nadie se dejaba al margen, ni era excluido porque pudiera parecer o ser diferente”.

NOMBRES PROPIOS. “En la primera etapa, recuerdo especialmente a D. Germán Delgado y D. Nicolás Gelo. A D. Nicolás le teníamos bastante afec-to aunque alguna que otra vez nos diera algún palmetazo en las manos, o nos tirara de las patillas (eran los máximos castigos que excepcionalmente conocí en el Colegio). Posteriormente los profesores que más me influyeron fueron D. Luis González (literatura), D. Luis Rey (física-química, con sus famosas varillas que te podían dejar castigado un sábado por la tarde, en el estudio), D. José Rey (geografía-historia), D. Manuel Pérez Cerezal, y D. José Vadillo (siempre llevaba la corbata sin terminar de anudar)”.

ANTIGUOS COMPAÑEROS. “Sí, conservo bastantes amigos entre los antiguos compañeros, al menos 12-14, aunque la mayoría nos tratamos poco ya en la actualidad. Que hiciéramos Medicina y con mayor contacto, Conchita Rey, Felipe Yoldi, González Quirós, José Mª Morón del Valle. Por otros derroteros, Paco Repetto, Jorge Piñero, Manolo del Valle, José Luis Manzanares, Agustín Argüelles, Paco Venegas… Manolo Barea, buen amigo y muy querido por todos. Últimamente con el que tengo más contacto, a través de la Asociación ‘Rey Guerrero’, es Emilio Ruciero”.

ANÉCDOTAS. “No recuerdo ninguna especial, salvo que la única fractura ósea que he sufrido hasta ahora, fue la de una de las muñecas, por la que estuve bastante tiempo con un yeso, jugando en el patio grande entonces (hoy patio chico, entre las clases de párvulo y la de D. Nicolás)”.

MÉDICO INTERNO DEL COLEGIO. “Mantuve escasa vinculación hasta que me llamaron para ser médico de los internos del Colegio, después que lo dejara de ser D. Julio López Mejías, que había sido el Médico del Colegio de ‘toda la vida’. Esto duraría dos o tres cursos, (con D. Manuel Corredera como ATS) después conti-nuaría D. José Bolaños. Luego, durante los años 80 y 90, mantuve ese contacto a través de los ingresos en el Colegio de mis dos hijos varones, Aníbal y José Luis. (…) En los últimos años, pertenezco a la Asociación de Antiguos Alumnos ‘Rey Guerrero’, y asisto a sus tertulias, y comentarios de libros, la mayoría muy intere-santes”.

ADAPTACIÓN CONSTANTE. “Creo que el Colegio ha cambiado bastante desde nuestros tiempos, ya que se ha ido adaptando paulatinamente a las circunstancias por las que ha ido pasando y actualmente pienso que está consiguiendo una proyección nacional e internacional importante, a través de la potenciación de los idiomas y las nuevas tecnologías. Pero, aunque el cambio en espacio y volumen ha sido muy importante, sigue man-teniendo el espíritu de superación, de dar una enseñanza de primera línea y avanzada como antaño (nuestro famoso Laboratorio de Física y Química de D. Luis Rey)”.

BUENAS PERSONAS Y PROFESIONALES. “Mi recomendación al Colegio para el futuro es que siga man-teniendo una alta cualificación del Profesorado, no solo en conocimientos, sino también en facilidad para poder transmitirlos (técnicas didácticas, de comunicación y conocimientos psicológicos de cada etapa del alumnado). También, mantener un buen nivel de exigencia y trabajo a los alumnos y encontrar una buena colaboración e integración de las familias en el proyecto educativo. (…) Un colegio como el San Francisco de Paula debe proporcionar en el futuro a sus alumnos unos niveles de conocimientos adecuados y que po-sibiliten la adaptación a diferentes ámbitos profesionales (en el futuro habrá que ejercer en campos multidis-ciplinares). Y debe prepararlos también en el respeto y solidaridad hacia los demás, evitando los egoísmos y prepotencias, en definitiva, que los preparen para ser “buenas personas” además de excelentes profesionales. Hay que conseguir fomentar una buena preparación humana, que les será fundamental en sus vidas”.

“Aunque el cambio en espacio y volumen ha sido muy importante, el Colegio sigue manteniendo el espíritu de superación, de dar una enseñanza de primera línea y avanzada como antaño”

50

Escritor afamado, reconocido por público y crítica, colaborador habitual de importantes medios de comunicación, Julio Manuel de la Rosa ingresó en el Colegio en el curso académico 1948-1949, procedente de un centro religioso, y lo primero que le llamó la atención fue la tolerancia y diversidad social. “En el otro colegio las diferencias de clases estaban bastante subrayadas, aquí solo había una puerta y todos éramos compañeros”, comenta. Cree que los tres conceptos que mejor definen la personalidad del Colegio son “libertad interior”, “amplitud de miras” y “rigor intelectual” y manifiesta que en sus clases descubrió el valor de la inteligencia, los libros y la cultura. También en el Colegio veló sus primeras armas periodísticas, y recuerda de hecho que su primer artículo fue publicado en MENDRUGO.

UNA SOLA PUERTA. “Yo venía de un colegio religioso donde hice 1º y 2º después, al fin, mi padre me llevó al Colegio, donde había estudiado él, mi tío y toda la familia. Ingreso en el curso académico 1948-1949, hasta que terminé mi formación preuniversitaria. Mi primera sensación fue encontrarme con la libertad intelectual sobre todo frente al colegio religioso del que venía, que tenía cosas con las que no me encontraba bien. En el San Francisco de Paula había una tole-rancia social que yo descubrí nada más llegar. En el otro colegio las diferencias de clases estaban bastante subrayadas. El Colegio de San Francisco de Paula sólo tenía una puerta y todos éramos compañeros”.

EL LIBRO DE HORROR. “Con la perspectiva de la edad que ya tengo son muy gratos y agradables porque además no perdí nunca el contacto con el Colegio, siempre iba a hacer alguna visita, veía a Feliciano,

aquel inolvidable portero. En Aracena coincidía algunos veranos con D. José Rey en su casa, y, en general, todos los recuerdos eran buenos. Lo malo, por ejemplo, eran los sábados cuando aparecía D. Luis Rey con el llamado “libro de horror”, donde se incluían aquellos alumnos que habían cosechado tres ceros, y que tenían que recuperar tres horas, lo que nos pri-vada de la libertad del sábado, aunque yo no era muy frecuentador de esos encierros. También recuerdo las clases, las amistades. El Colegio ahora se ha ampliado, pero recuerdo un Colegio pequeño, donde entre otras cosas no se podía jugar al fútbol y eso explicaba nuestras derrotas en partidos de fútbol con otros centros. También recuerdo las clases al final de D. Francisco Márquez Villanueva, un sabio con el que tuve cierta amistad después. Yo era mal estudiante, desigual, sacaba muchos ceros en química, en matemáticas y sacaba indefectiblemente 10 en redacción, mi materia preferida, que la daba D. Anuario Mendoza, literatura e historia”.

DESCUBRIMIENTO. “Libertad interior, amplitud de miras y rigor intelec-tual son los tres conceptos que me parecen resumen mejor su personal. Al

n Escritor, autor de quince libros, Julio Ma-nuel de la Rosa ha desarrollado una prolífica carrera narrativa. Sus cuatro últimas obras son La sangre del Sur, Fin de Semana en Etruria, como La sangre y el eco y Guantes de seda.

n Ha colaborado en periódicos como ABC o Diario 16, además de revistas culturales como Espiral o Triunfo.

n Entre los reconocimientos recibidos, destacan el premio Ateneo Ciudad de Sevilla del 2004 o el Premio de Andalucía de la Crítica en 2008.

Julio Manuel de la Rosa HerreraEscritor y Periodista

“Al Colegio debo el descubrimiento de la inteligencia como un factor decisivo, el rigor, los libros y la cultura”

“Como profesor de Periodismo, al sacar

a los alumnos a la pizarra, por la manera

de escribir, por el orden y la claridad,

sabía quién venía del Colegio. Era como una

marca intelectual”


51

Colegio debo quizás el rigor, el descubrimiento de la inteligencia como un factor decisivo, los libros, la cultura”.

PROFESORES. “D. José Rey, por su irónica sapiencia, y D. Francisco Már-quez Villanueva, por su amor a la literatura y su forma de transmitir ese entusiasmo, fueron los profesores que más mi influyeron”.

COMPAÑEROS. “Conservo muchos amigos, mi cuñado y amigo Juan Calvo de Mora; mi gran amigo Alonso Díaz Velázquez, médico ya fallecido; mi amigo Ricardo Pachón, compañero de curso; mi amigo y compañero Ramón Ortiz… Y muchísimos más. (…) Manuel Losada Villasante, Premio Principe de Asturias; Manuel del Valle, alcalde de Sevilla; los hermanos Pera, médicos muy distinguidos; el poeta Pedro Rodríguez Pacheco, son algunos de los alumnos de aquella época que recuerdo han tenido una trayectoria destacada”.

EL PRIMER ARTÍCULO. “Influyó bastante en mi carrera, porque en MEN-DRUGO publiqué yo mi primer artículo. Después D. José Rey me consultaba mucho e incluso me hizo un encargo literario que yo me afané en completar con mucho esmero, comentar la fotografía del final del curso, no superior a un folio. Me di la traza formal y significativa suficiente para hacer una referencia a cada alumno de los 40 que aparecíamos y D. José Rey me felicitó”.

ENCERRADO EN EL LABORATORIO. “Anécdotas, por docenas. Una realmente divertida pasó cuando un alumno compañero se quedó encerrado en el laboratorio. No porque él quiso, desde luego, sino que se entretuvo, salimos de clase y no estaba, se quedó encerrado. Llegó la hora casi de salir y todos nos pre-guntábamos dónde estaría, alarmados. Estábamos en el estudio y de pronto se sintieron unos golpecitos en la puerta del laboratorio y se lo dije a D. Federico Mateo, creo que era; me dijo que era un imaginativo, que si creía que estaba ahí un fantasma. Le dije: ‘No, quien ahí está es Diego Velo’… y, efectivamente, allí estaba”.

PARA MEJOR. “El espíritu fundacional no ha cambiado, pero el resto, tanto continente y contenido ha cambiado para mejor. Ese Colegio estrechito hoy es un edificio extraordinario y tiene unas inquietudes tecnológicas y pedagógicas selectísimas. Creo que se hace de todo; a los idiomas les dan una importancia brutal; a la literatura, supongo que igual, a las Humanidades, área en la que recuerdo a D. José Rey y a D. Luis González de mi época. Creo que está en la vanguardia de las tecnologías pedagógicas”.

UNA MARCA INTELECTUAL. “He sido profesor de Periodismo y cada mes de octubre me tenía que enfren-tar con un lamentable test de ortografía. Y un alumno del Colegio de San Francisco de Paula no cometía faltas de ortografía. Nosotros teníamos unas clases de redacción que eran de auténtica composición lite-raria. (…) Y otra cosa, no teníamos de ninguna asignatura con libro de texto, era todo por apuntes, lo que nos daba una destreza ortográfica muy grande. Una anécdota; como profesor de Periodismo, al sacar a los alumnos a la pizarra, por la manera de encarar y comenzar a escribir, por el orden y la claridad, sabía que venía del Colegio de San Francisco de Paula; le preguntaba y, efectivamente, así era. Era como una marca intelectual”.

SEGUIR EL CAMINO. “Ninguna recomendación, ellos saben muy bien el camino, lo que haría sería ani-marles en ese mismo camino que simboliza ese apellido. Yo fui alumno de D. José y D. Luis y mis padres de los padres de D. José y D. Luis”.

“En el primer colegio en que estuve, las diferencias de clases estaban bastante subrayadas. El Colegio de San Francisco de Paula sólo tenía una puerta y todos éramos compañeros”

52

Dr. Ingeniero Agrónomo y Licenciado en Química, Catedrático de la Universidad Politécnica de Madrid desde 1970 hasta 2008, Francisco García-Olmedo define la personalidad del Colegio de San Francisco de Paula con los conceptos de rigor y exigencia académica y dice que en sus aulas le inculcaron la necesidad del trabajo diario. De sus recuerdos, destacan las clases recibidas de D. José Rey Guerrero y D. Luis Rey Guerrero, y subraya cómo el primero le motivó para hacer trabajos monográficos en geografía, algo muy infrecuente en el ambiente educativo de la época, y cómo el segundo le enseñó cristalografía mucho mejor que luego lo harían en la asignatura de geología en la Facultad de Ciencias.

LOS MEJORES RESULTADOS EN EL EXAMEN DE ESTADO. “Ingresé en 1º de Bachillerato allí en 1948, si la memoria no me falla. Estuve 7 años, hasta terminar el Bachillerato. Mi padre era Catedrático de universidad y formaba parte del Tribunal del Examen de Estado, por lo que conocía de primera mano que el Colegio de San Francisco de Paula obtenía los mejores resultados en dicho examen y decidió matricularnos a mi hermano Bernardo y a mí”.

SIN PREFERENCIAS. “No recuerdo tener especial preferen-cia por alguna asignatura. Recuerdo gratamente las clases de filosofía, geografía, literatura y matemáticas. Era buen estudiante”.

TRABAJO DIARIO. “El rigor y la exigencia académica. En el Colegio me inculcaron la necesidad del trabajo diario”.

MENOS ESPÍRITU NA-CIONAL. “La convivencia existía, sin duda, pero no creo que mi generación fue-ra muy consciente de ello, salvo en el hecho de que ni la Religión ni la Formación del Espíritu Nacional tenían el protagonismo que podían tener en los colegios a que asistían algunos amigos y conocidos”.

n Dr. Ingeniero Agrónomo y Licenciado en Química, ha dedicado la mayor parte de su vida profesional a la mejora de las plantas adaptándose a las posibilidades de cada momento, ya que comenzó mediante cruzamientos y técnicas clásicas hasta 1980 para después reconvertirse ante la aparición de la ingeniería genética aplicada a este campo. Desde entonces, es reconocido como el pionero de esta disciplina.

n Ha sido Catedrático de Bioquímica y Biología Molecular en la Escuela Superior de Ingenieros Agrónomos de Madrid, hasta su reciente jubilación en 2008.

n Ha sido asesor de los Gobiernos belga y finlandés y miembro del Consejo Científico del Instituto Max Planck alemán, sin olvi-dar su pertenencia a la Real Academia de Ingeniería, a la Real Academia de Ciencias y a la Academia Europea.

n Ha recibido el “Premio de la Real Acade-mia de Ciencias” y “Premio a las Ciencias de la CEOE” y es autor de de los libros La Tercera Revolución Verde (Debate, 1998); Entre el Placer y la Necesidad (Crítica, 2001); El ingenio y el hambre (Crítica 2009), los poemarios Natura según Altroío (Huerga & Fierro, 2002) y Mar Congelado. Glosas y Tergiversos (Huerga & Fierro, 2005) y la novela Notas a Fritz (Tabla Rasa, 2004).

n Ideó un centro de Investigación de Plan-tas que se ha visto realizado con la puesta en funcionamiento del Centro de Biotec-nología y Genómica de Plantas (CBGP), un centro mixto entre la UPM y el INIA, en el Parque Científico y Tecnológico de la UPM. Sus investigaciones han originado re-sultados directamente aplicables al estudio de las plantas transgénicas resistentes a patógenos.

Francisco de Asís García-Olmedo Catedrático jubilado de Bioquímica y Biología Molecular de la Universidad Complutense de Madrid

“D. Luis Rey Guerrero me enseñó Cristalografía mucho mejor que luego lo harían en la Facultad de Ciencias”

“Guardo un vivo recuerdo de los

conciertos, el fútbol y la lectura en

clase, a viva voz, de obras clásicas de la

literatura”


53

LOS HERMANOS REY. “D. José Rey me motivó para hacer trabajos mono-gráficos en geografía, algo muy infrecuente en el ambiente educativo de la época. D. Luís Rey me enseñó cristalografía mucho mejor que luego lo harían en la asignatura de geología en la Facultad de Ciencias”. LOS HERMANOS LOSADA Y MANUEL CASTILLO. “No conservo ningún amigo porque me fui a Madrid a estudiar. Trabé amistad y he seguido tratando con los hermanos Alberto y Manuel Losada Villasante, pero en el curso de mi vida profesional, no en el Colegio, pues pertenecen a promo-ciones anteriores a la mía. También me encontré de vez en cuando con el compositor Manuel Castillo”.

LA VOCACIÓN. “No sabría decir qué influencia tuvo el Colegio en la elección de mi vocación y mi trayectoria profesional, salvo que allí me enseñaron a estudiar.”

MÚSICA, FÚTBOL Y LITERATURA. “Guardo un vivo recuerdo de los con-ciertos, el fútbol y la lectura en clase, a viva voz, de obras clásicas de la literatura”. VÍNCULOS. “A veces, en mis visitas a Sevilla, he pasado a saludar al ma-trimonio Rey-Goñi, quienes hicieron sus Tesis Doctorales en la Cátedra que dirigía mi padre, y he podido comprobar la progresiva expansión que ha experimentado el Colegio”. EVOLUCIÓN DEL COLEGIO. “No conozco suficientemente el proyecto del Colegio como para poder opinar. Sé de la excelente reputación del Colegio a través de otras personas”.

AYER Y HOY. “En general, y al margen del Colegio, creo que han mejorado los medios técnicos y di-dácticos y se han incorporado nuevas disciplinas. Han decaído algunos aspectos básicos, tales como la capacidad para expresarse por escrito y la del razonamiento cuantitativo. Ha decaído dramáticamente el respaldo social al estudio y la valoración del esfuerzo, así como el grado de exigencia al estudiante”.

RECOMENDACIONES PARA LOS PRÓXIMOS 125. “Creo que están bien encaminados y que no necesitan demasiados consejos”.

“D. José Rey me motivó para hacer trabajos monográficos en geografía, algo muy infrecuente en el ambiente educativo de la época”

“Ni la Religión ni la Formación del Espíritu Nacional tenían el protagonismo que podían tener en los colegios a que asistían algunos amigos y conocidos”

54

“¡Yo he estudiado más en el Colegio de San Francisco de Paula que en la carrera de Medicina!”, exclama José Pérez Castilla, uno de los médicos de mayor prestigio en el campo de la Rehabilitación y la Medicina Física. Lo hace cuando recuerda sus diez años en el Colegio y se le vienen a la memoria las noches que pasó estudiando en los lavabos, a hurtadillas, porque las dos horas y media de estudio que tenían los internos no le resultaban suficiente para encarar los exámenes. A pesar de esas noches en vela, José Pérez Castilla califica de “maravillosos” sus recuerdos como alumno interno, afirma que el Colegio le hizo muy feliz y le enseñó a ser responsable en la vida, y, de todas las personas, destaca a D. Luis Rey Guerrero: “Yo le adoraba, aunque me infundía mucho respeto”.

POR QUÉ EL SAN FRANCISCO. “Ingresé en el curso 48-49, con 10 años, y terminé en 1956, tras estudiar los 6 años de Bachiller y el PREU. Sinceramente, creo que mis padres me matricularon porque era, es y seguirá siendo el mejor colegio de Sevilla”.

PREDILECCIÓN POR LAS CIENCIAS. “Mis recuerdos son maravillosos, allí me hicieron muy feliz y me enseñaron a ser responsable en la vida. Yo era un estudiante sobre la media; en 2º y 3º estuve siempre en el Cuadro de honor, pero en 4º pasé las paperas, perdí 15 ó 20 días de clases muy importantes y me alejé un poco del nivel. Además, me ponía muy nervioso en los exámenes, creo que no lo superé hasta 5º de Medicina. En cuanto a las materias, las preferidas eran las Ciencias, yo adoraba a D. Luis Rey Guerrero; me gustaba mucho la Biología y por eso opté por Medicina”.

SERIEDAD, IMPARCIALIDAD Y SACRIFICIO. “Seriedad, imparcialidad y con un espíritu de sacrificio por parte del profesorado permanente. Esos son los conceptos que mejor reflejan la personalidad del Colegio”.

LO QUE APRENDÍ. “En el Colegio me inculcaron el sentido de la responsabilidad en la vida y que había que luchar para destacar”.

IGUAL UNOS POLÍTICOS QUE OTROS. “Sí, efectivamente, la convivencia de ideas se palpaba. Allí lo mismo se hablaba de unos políticos que de otros, en tiempos en los que no se podría hablar de nadie.

n Licenciado y Doctor en Medicina y Cirugía. Se especializa en Traumatología y Ortopedia; Reumatología y Rehabilita-ción, siendo uno de los especialistas más reconocidos en éste último campo. Posee el título de Board Europeo de Medicina Física y Rehabilitación.

n Ha sido Profesor Titular de Terapéutica Física y Rehabilitación (Escuela Universitaria de Diplomados en Enfermería); Profesor Titular de Rehabilitación (Facultad de Medicina) y Catedrático de Rehabilitación y Medicina Física de la Facultad de Medicina de Sevilla. También ha sido Director del programa Docente para Médicos Internos Residentes de la Especialidad de Rehabili-tación en el Hospital Universitario Virgen Macarena.

n Ha publicado 57 artículos en revistas nacionales e internacionales; dirigido 12 Tesis Doctorales; impartido 82 cursos y seminarios y ha presentado 75 comunicacio-nes y ponencias en congresos nacionales e internacionales.

n Durante su trayectoria profesional ha obtenido el II Premio de la Sociedad Espa-ñola de Rehabilitación en el XII CONGRESO NACIONAL; el II Premio de la Fundación Mapfre, a los mejores trabajos científicos; el I Premio de la S.E.R.M.E.F. en las XII Jornadas de la Sociedad; el I Premio de la Fundación Mapfre en el Congreso Mun-dial de Medicina Física; el I Premio de la S.E.R.M.E.F. en el XV Congreso Nacional; el I Premio Rhone-Poulenc de Investigación en Osteoporosis y el I Premio XXV aniversario del Virgen Macarena de Sevilla.

José Pérez CastillaCatedrático en Rehabilitación y Medicina Física de la Universidad de Sevilla

“¡Yo he estudiado más en el Colegio de San Francisco de Paula que en la carrera!”


55

Recuerdo que los internos de mi época protagonizamos la primera manifestación de de estudiantes porque nos ponían muchas patatas en el menú, e hicimos una manifestación desde el Patio Interior hasta el Patio Principal e íbamos cantando: ‘¡Estamos hartos papas, estamos hartos papas!’. Al día siguiente, D. Luis González en vez de dar clases se puso a preguntarnos sobre la materia y les puso a todos un cero, menos a mí, que me puso un tres… ¡Y eso que las acerté todas!”.

VERSOS PARA D. ANUARIO. “Yo adoraba a D. Luis Rey Guerrero, me infundía mucho respeto; aunque era tímido e introvertido era muy humano y tenía cualidades didácticas extraordinarias. También me acuerdo de D. Manuel Pérez Cerezal, que daba matemáticas. Y de D. Anuario Mendoza, que llegaba en bicicleta al Colegio y al que le recitábamos la siguiente poesía: “Helo helo por do viene/D. Anuario Mendoza/caballe-ro a la jineta/en bicicleta mohosa”.

LOS HERMANOS YÁÑEZ-BARNUEVO. “Sí que conservo amigos de entonces, todos los veranos me veo en La Antilla con Santiago Almero Noval, y hablamos del Colegio. También coincido con otros como Jesús Coronado López. (…) Que hayan tenido una trayectoria destacada, recuerdo principalmente a los hermanos

Yáñez-Barnuevo, Luis y Juan Antonio; sobre todo éste era un estudiante brillantísimo”.

LA VOCACIÓN. “Mi vocación me llegó porque tenía dos tíos médicos, los doctores Emilio Serrano y Enrique Serrano Díaz, aunque sí recuerdo que admiraba mucho al médico que nos reconocía todos los años a los internos, D. Julio, que tenía la consulta en la Plaza Argüelles”.

VACACIONES CON PAPERAS. “Recuerdo la primera noche que pasé en el Colegio. Yo estaba acostumbrado a las camas grandes de mi pueblo, y me pusieron en una pequeña; me caí por la noche tres veces y me harté de llorar. Al día siguiente cuando vino mi padre a verme pensé en decírselo y pedirle que me llevara al pueblo, pero al final no le dije nada y el que se fue llorando fue él. También me acuerdo de que un paisano mío tenía paperas; me fui a la enfermería, algo que estaba prohibido, me refregué su almohada por todo el cuello y, consecuentemente, cogí las paperas. Nos mandaron a los dos 20 días al pueblo y pasamos unas vacaciones maravillosas. Tampoco se me olvidan las noches que pasá-bamos estudiando en los lavabos. Los internos solo teníamos dos horas y media diarias para estudiar y no dábamos abasto, por lo que teníamos que sacar tiempo de donde no lo había, quitarnos horas de sueño e irnos al cuarto de los lavabos sin atril, ni flexo y liados en un cobertor. ¡Yo he

estudiado más en el Colegio de San Francisco de Paula que en la carrera de Medicina! Por último, quiero recordar que los ‘internos’ más serios íbamos a dormir a un piso de la calle Alberto Lista porque a veces no cabíamos en el Colegio. En este piso había unas ratas enormes y había un compañero que tenía una habilidad increíble para aniquilarlas. De hecho, terminó siendo veterinario”.

IDIOMAS, INFORMATIZACIÓN Y TAMAÑO. ”El único problema que yo he tenido en mi formación es que no sabía de idiomas nada más que el francés, y para mí ha sido un hándicap el volver a estudiar el inglés. Yo quería que mis hijos supieran idiomas y entonces no había mucho idioma en el Colegio y los mandé a otro centro donde aprendieron alemán, inglés y hasta danés. Ahora eso ha cambiado y estoy intentando que mi nieta entre en el Colegio de San Francisco de Paula. (…) El Colegio ha cambiado muchísimo en la cuestión de idiomas y la informatización, además del propio cambio físico del edificio, que ahora llega a la calle Imagen”.

CUMPLIR EN EL TRABAJO. “Lo principal que debe aportar el San Francisco a un estudiante del siglo XXI es lo que ha hecho siempre, inculcar el sentido de la responsabilidad y de que hay que cumplir en su trabajo en la vida, en la profesión que se elija; y sobre todo, que los estudiantes escojan la profesión que creen que les gusta más”.

“No se me olvidan las noches que

pasábamos estudiando en los

lavabos. Los internos sólo teníamos dos

horas y media diarias para estudiar y no

dábamos abasto, por lo que teníamos que sacar tiempo de donde no lo había”

56

Agustín Argüelles ingresó en el Colegio en 1949, con ocho años, y permaneció en él hasta 1958, concluidos los estudios de Preuniversitario. Fue, en sus propias palabras, “su primer y único colegio”, y asegura que siempre ha agradecido a sus padres aquella elección. Del paso por sus aulas dice haberse llevado “la afición al estudio, la ambición de la excelencia en el trabajo, el amor a las Ciencias y las Artes, la admiración a la sabiduría, y el respeto y la comprensión a las ideas de todos”. Valores que han estado presentes en la trayectoria de este Ingeniero de Caminos, Canales y Puertos del Estado, con una larga y exitosa carrera profesional en la Administración del Estado, que ha compaginado con la docencia en la Universidad.

PRIMER Y ÚNICO COLEGIO. “Nací en 1941, y a partir de 1946 recibí enseñanza de una entrañable y buena Profesora que iba a mi casa, creo recordar que un par de horas más o menos al día. Durante las vacaciones, en plan más infor-mal, recibía clases de un tío mío que era un sabio y gran maestro, pero que residía durante el curso fuera de Sevilla. Por tanto, mi primer y único colegio fue el San Francisco de Paula. (…) Ya era un Colegio con mucho prestigio en aquel tiempo, tanto en el aspecto docente como en formación hu-mana. Siempre he agradecido a mis padres aquella elección’’.

NINGUNO COMO D. LUIS. “De los primeros años recuerdo a entrañables profesores como D. Nicolás Gelo y D. José Montllor, simpáticos y afectuosos, además de magníficos profesionales. Después, de los años de Bachillerato, tengo gratos recuerdos de un sacerdo-te muy campechano, D. Juan Prieto, de D. Manuel Asencio y, D. José Vadillo, pero sobre todo destaca en mi recuerdo D. José Rey Guerrero, gran persona, afectuoso, dotado de un inmenso caudal de conocimientos, combinando rigor y exigencia con simpatía y paciencia. D. Luis Rey Guerrero ha sido quizás el mejor Profesor que yo haya cono-cido nunca, a lo largo de mis muchos años de estudio. Aunque estudié y

n Ingeniero Técnico de Obras Públicas (1965), Licenciado en Ciencias Físicas (1965), Inge-niero de Caminos, Canales y Puertos (1971), y Doctor Ingeniero de Caminos, Canales y Puertos. (1977 – Premio Fundación Entrecana-les a la mejor Tesis Doctoral).

n Número 1 Grupo A, Concurso Oposición Cuerpo Ingenieros de Caminos Canales y Puertos del Estado. Madrid, 1978.

n Su trayectoria profesional comienza en 1965 en la empresa consultora de Ingeniería EDES. En 1966 pasa a la Dirección General de Carreteras (Jefatura Regional). En 1979 a la Dirección General de Obras Hidráulicas (Comisaría de Aguas y Confederación Hidro-gráfica del Guadalquivir). Entre 1985 y 1992, su carrera profesional está vinculada a EXPO 92, como Consejero Técnico de la Comisaría de la Exposición Universal de Sevilla, primero, y como Director de Departamento de la Sociedad Estatal EXPO 92, después. Ya en la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, donde ha desarrollado su carrera profesional hasta hoy, ha sido Jefe del Servicio de Explo-tación e Ingeniero Encargado de la Oficina de Planificación Hidrológica (1992-1994), Jefe de Servicio de Recursos y Demandas de la Oficina de Planificación Hidrológica (1994-1998), Jefe de la Oficina de Planificación Hidrológica (1998-2000), Comisario de Aguas de la Cuenca del Guadalquivir (2000-2004), y Jefe de la Ofi-cina de Planificación Hidrológica desde 2004.

n Ha compatibilizado esta intensa trayectoria profesional con la docencia en la Universidad, actualmente como Profesor asociado de la Es-cuela Superior de Ingenieros de la Universidad de Sevilla.

Agustín Argüelles MartínIngeniero de Caminos, Canales y Puertos del Estado

“Mi primer y único colegio fue el San Francisco de Paula y siempre he agradecido a mis padres aquella elección”

“Aunque estudié y terminé tres carreras y un Doctorado, y he

conocido a profesores de gran prestigio,

puedo asegurar que nunca he tenido un

lujo de Profesor como D. Luis Rey Guerrero”


57

terminé tres carreras y un Doctorado y lógicamente he conocido a profesores ilustres y de gran prestigio, puedo asegurar que nunca he tenido un lujo de Profesor, como D. Luis Rey Guerrero, que aunque en principio, por su rigor, nos asustaba un poco, tenía una gran humanidad y tal entrega a su trabajo que sus clases alcanzaban la excelencia. Ha sido también para mí inolvidable Profesor, D. Luis González, querido por todos los que tuvimos la suerte de ser sus alumnos, su nivel docente y su calidad humana eran también de excelencia. Con estos profesores y tantos otros cuya mención harían esto interminable, pero de imborrable recuerdo -D. Francisco Repetto, Dª Antonia Brzezicki, D. Julio Mínguez, D. Francis-co Márquez y tantos otros buenos profesionales- no es de extrañar que el Colegio registrara marcas de buenos resultados en todos los exámenes en los que había concurrencia de otros colegios: reválidas y Preuniversitario’’.

AFICIÓN AL ESTUDIO Y EXCELENCIA EN EL TRABAJO. “Yo era buen estudiante y aprendí a trabajar lo suficiente, pero con constancia y continuidad y a sinergizar todo lo que día a día iba aprendiendo, esti-mulado también por la atención que en mi familia se prestaba a este progreso continuado que yo perci-bía que mis padres valoraban. (…) Los valores que el Colegio me inculcó fueron la afición al estudio, la ambición de la excelencia en el trabajo, el amor a las Ciencias y las Artes, la admiración a la sabiduría, y el respeto y la comprensión a las ideas de todos. (…) En cuanto a las palabras que definen mejor la personalidad del Colegio, yo diría profesionalidad y eficiencia, honradez, trabajo y respeto a los demás”.

GRATOS MOMENTOS. ‘‘Recuerdo algunas que otras travesuras más bien inocentes y muchos gratos momentos en interesantes y agradables ex-cursiones, entre otras a Lisboa y Madrid. (...) Recuerdo también memo-rables partidos de fútbol y un concurso radiofónico en la SER en el que el Colegio llegó a la final y en el que los premios que íbamos obteniendo semanalmente eran libros a elegir’’.

ANTIGUOS COMPAÑEROS. “Conservo a muchos amigos del Colegio y coincido con algunos. A otros los he dejado de ver por cambios de residencia y esferas de actividad distintas, pero tengo grato y entrañable recuerdo de muchos, aun sin haber tenido prácticamente contacto con ellos con posterioridad a la salida del Colegio. (…) Puedo citar a muchos que han tenido una trayectoria profesional destacada, pero por centrar-me en los más allegados, citaré a José Luis Manzanares, Juan Antonio Yánez, Jorge Piñero, Paco Repetto, Manolo Valle y José Luis de Justo Alpañés (que era dos cursos mayor que yo y fue Director de mi Tesis Doctoral, habiendo sido la mía la primera de las muchas que después ha dirigido)’’.

EL COLEGIO, HOY. ‘‘Durante algunos años no tuve una vinculación estrecha con el Colegio -aunque siempre tuve contactos con los descen-dientes directos del inolvidable D. Luis Rey y asistí a algunos actos- has-ta que me inscribí en la Asociación de Antiguos Alumnos hará unos seis o siete años. (…) Las referencias que tengo del Colegio hoy son inmejorables en cuanto a la utilización de nuevas técnicas y apertura a nuevas ideas y nuevos caminos, enfatizando la enseñanza de idiomas y la realización de aplicaciones y prácticas de laboratorio en las Ciencias Experimentales, así como de la formación en Informática. (…) Considero que actualmente hay mayores oportunidades sobre todo en los aspectos de aplicaciones y prácticas, en los que siempre este Colegio ha brillado’’.

LOS PRÓXIMOS 125. ‘‘Mis recomendaciones al Colegio para el futuro se resumen en estas palabras: profesionalidad, honradez, fomento de la excelencia en el trabajo e independencia. (…) Las mejores insti-tuciones deberán enseñar a los alumnos futuros profesionales a entender la importancia del esfuerzo y a ser estudiantes permanentes’’.

“Las referencias que tengo del Colegio hoy son inmejorables en cuanto a la utilización de nuevas técnicas y apertura a nuevas ideas y nuevos caminos, enfatizando la enseñanza de idiomas y la realización de aplicaciones y prácticas de laboratorio en las Ciencias Experimentales, así como de la formación en Informática”

58

Juan Ignacio Losada Villasante ingresó en el Colegio en 1949 y salió en 1956, concluidos todos sus estudios Preuniversitarios. Unos estudios que, dice, influyeron en la elección de su vocación y en su posterior trayectoria profesional: “Los conocimientos que adquirí en matemáticas, física y química fueron para mí esenciales para poder con el ingreso en la Escuela de Ingenieros de Madrid”. Tras ese ingreso, vino una exitosa carrera tanto en la docencia, como profesor de la Universidad de Sevilla, como en la empresa privada, en el Departamento Técnico de International Business Machines (IBM). En uno y otro ámbito, le sirvió de mucho el principal legado que, cree haber recibido del San Francisco de Paula: la convicción de que “los objetivos son accesibles con el esfuerzo”.

UNA EXCELENTE DECISIÓN. “Entré en septiembre de 1949. Y estuve hasta 1956, final del Preuniversitario. Los cinco hermanos varones estudiamos en el San Francis-co de Paula, por decisión de mis padres. Creo que los cinco pensamos que fue una excelente decisión”.

UN ESTUDIANTE EN PROGRESIÓN. “Mis recuerdos son buenos pero, a veces, preocupado con los estudios y las notas. Al principio fui un estudiante mediano, pero fui mejorando de forma continua. Creo que en ello contribuyeron dos factores: el Colegio y mi mejor comprensión con los años. Mis asignaturas preferi-das fueron las de Ciencias. Sólo conseguí matrículas en física, con D. Luis Rey, y en matemáticas, con D. Julio Mingues. ¡Quién le iba a decir a D. Manuel Pérez Clavijo, en 2º, que me aprobó sabiendo poco, que me daría un nueve, en 3º!”.

FORMACIÓN HUMANA Y TÉCNICA. “Disciplina, respeto, libertad, formación humana y técnica son a mi juicio las palabras que mejor definen la personalidad del Colegio. Del paso por sus aulas aprendí esos valores y sobre todo comprendí que los objetivos son accesibles con el esfuerzo”.

A MISA. “Sí que percibí en todo momento en el Colegio la convivencia de ideas distintas. Recuerdo, de manera especial, la disposición de D. Francisco Repetto a llevar a los que quisieran a las misas de San Pedro en fiestas o primeros viernes”.

LOS MEJORES RECUERDOS, DE D. LUIS REY. “No estuve en párvulos, pero era visible el trato de D. Nicolás a los niños. Yo creo que del que mejores recuerdos tengo es de D. Luis Rey Guerrero, que aparte de sus enseñanzas en física y en ciencias naturales, me inculcó el interés por la música en los conciertos de algunos sábados. Tengo de él muy buenos recuerdos y anécdotas. D. Genaro Marcos, de latín. D. Anuario Mendoza. D. Julio Mínguez, único buen Profesor de matemáticas, que he conocido, que no tocaba la pizarra. D. Manuel Pérez Clavijo, D. José Vadillo, D. José Rey, D. Luis González, Dª Antonia, D.Elías, con su cigarro, D. Fede-rico, D. Juan Prieto, etc.”.

n Ingeniero Industrial: 1956 – 1965, E.T.S. de Ingenieros Industriales de Madrid.

n Doctor Ingeniero Industrial: 1972, Madrid. 1965–1993: Departamento Técnico de International Business Machines (I.B.M. S.A.E.). 1966–1972, E.T.S. de Ingenieros Industriales, Sevilla.

n 1993–2003, Departamento de Mate-máticas I de la Universidad de Sevilla en los centros de la Escuela Universitaria de Arquitectura Técnica y de la E.T.S. de Inge-niería Informática.

Juan Ignacio Losada VillasanteDoctor Ingeniero Industrial

“El Colegio me enseñó sobre todo que los objetivos son accesibles con el esfuerzo”

“D. Julio Mínguez era el único buen profesor

de matemáticas que he conocido que no

tocaba la pizarra”


59

COMPAÑEROS Y AMIGOS. “Creo que, en general, nos sentimos amigos todos los antiguos alumnos: compañeros de la Universidad, como Mª José Chaves; de la Milicia Universitaria, como José Luis Manzanares; pero sobre todo de los de clase, y dentro de ellos, los que tenían hermanos compañeros de mis hermanos tales como: Muñoz Noguera, Fernández González, Gómez Escudero, Justo Alpañés, Pichi Castro, Martínez Reta-mero, etc”.

CONOCIMIENTOS ESENCIALES PARA EL FUTURO. “El paso por el Cole-gio tuvo una influencia importante en mi carrera. Los conocimientos que adquirí en matemáticas, física y química fueron para mí esenciales, para poder con el ingreso en la Escuela de Ingenieros de Madrid”.

ANÉCDOTAS. “Tengo muchas, pero me voy a centrar en dos con D. Manuel Pérez Clavijo que ilustran lo que dije antes: Estoy en 2º curso y D. Manuel me lleva a una especie de repesca a examinarme solo en el laboratorio y yo recuerdo que pensaba: ‘no tengo ni idea. Imposible aprobar’. Se encuentra a mi hermano Fernando y ante la indecisión de D. Manuel le dice que me aprobara y que en septiembre volvería mejor preparado. Así lo hizo y a partir de septiembre, con poco esfuerzo lo entendía todo. Al año siguiente, tercer curso, me encuentra una ‘chuleta’ en un examen. Él sabía que yo sabía hacer el problema y me preguntó por qué lo había hecho. Le dije que sabía hacerlo pero que por flojo y sabiendo que la tenía en el bolsillo la había usado. No me puso un cero”.

VÍNCULOS. “He ido a algunas excursiones y por supuesto al 50 aniversario de la salida del Colegio, reunión inolvidable. Leo con atención todo lo referente al San Francisco de Paula. He tenido ocasión de ver a los Directores siguientes, algunas veces, en celebraciones y otras en funerales. Tengo una asignatura pendiente. Siendo consciente de la suerte que tuve yo, siento que las circunstancias no hayan propiciado el que mis hijos hubieran tenido la oportunidad de estudiar en el San Francisco. Aunque he conocido y asesorado a padres e hijos de alumnos, posteriores a mi salida del Colegio”.

MEDIOS DISPONIBLES. “Pienso que las diferencias entre las formas de enseñar y aprender de ayer y de hoy están relacionadas con los medios disponibles, y lo equilibrado que tienen que estar alumnos y profe-sores para hacer un buen uso de ellos. Recordemos que nosotros teníamos que tomar apuntes directos de D. José Rey, de D. Luis González, etc. en asignaturas tales como literatura, geografía, historia, filosofía, y contábamos con medios muy limitados en asignaturas como dibujo, inglés o francés”.

CUATRO RECOMENDACIONES PARA EL FUTURO. “1) No olvidar los principios de disciplina, respeto, libertad, justicia y formación humana y técnica, que creo eran reales en el San Francisco que yo conocí; 2) Como padre, abuelo y Profesor y Jefe he sido consciente de que el desarrollo de las personas es como el crecimiento, que es muy variable y no continuo; 3) Que el mismo castigo a tres hijos tiene distintos efectos: a uno le sirve, a otro lo empeora y otro como si nada. Por ello cada uno tiene que conocer a sus alumnos y dar la motivación o castigo adecuado; y 4) Crear buenos hábitos en los componentes: directi-vos, profesores y alumnos”. DIFERENCIA POSITIVA. “Es complicado decir qué diferenciará a las mejores instituciones educativas. Me quedo con: 1) Formar a personas con principios. Los humanos necesitamos algún pilar en los que apo-yarnos, como los edificios: puede darlo la cultura, la religión, la educación; 2) Tener claros los objetivos; 3) Aprovechar los medios; 4) No abarcar más de lo que se puede; 5) Ponernos en el pellejo del que está enfrente e intentar ayudarlo y disfrutar con ello; 6) Ser austero; 7) Interés por la cultura, idiomas, historia, leer, calcular, medios disponibles, viajar; y 8) Tenacidad, paciencia y suerte”.

EL MEJOR ACIERTO. “Creo que es un reto para la sociedad en general y para los responsables y profesores del San Francisco en particular, ofrecer la mejor opción formativa a los alumnos y les deseo a todos el mejor acierto”.

“El mismo castigo a tres hijos tiene distintos efectos: a uno le sirve, a otro lo empeora y otro como si nada. Por ello cada uno tiene que conocer a sus alumnos y dar la motivación o castigo adecuado”

60

Abogado y administrador de siete sociedades, Francisco Repetto ingresó en el Colegio con ocho años y sufrió el nepotismo en su versión “franciscana”. Su padre, que era Secretario y Profesor del Colegio y primo de los hermanos Rey Guerrero, cuando le daba clases de lengua española nunca le preguntaba a él directamente, sino que señalaba a dos o tres compañeros para que lo hicieran y le calificaran. Y luego le rebajaba la nota que le daban. Además, como era inquieto y charlatán en clase, y su hermano mayor había sido un alumno excelente, se ganaba no poco castigos por parte su padre, que, claro, tenía noticia diaria de su comportamiento. A pesar de ello, dice que con el paso del tiempo ha ido quedándose solo con los buenos recuerdos y, aparte de la formación académica recibida, destaca y aprecia especialmente del Colegio que le inculcara valores como el trabajo, el esfuerzo, el tesón, la tolerancia, la amistad, y el cumplimiento del deber y las normas, que considera forman parte del “espíritu franciscano”. Un espíritu que dice imprime carácter y por el cual no resulta difícil reconocer en el trabajo y hasta en la calle a los que han sido alumnos del Colegio.

TODOS APROBADOS EN LA REVÁLIDA. “Ingreso con 8 años, en 1949, con D. Félix. Mi padre era Secretario y Profesor del Colegio y los Directores, entonces D. José y D. Luis Rey Guerrero, eran primos hermanos de mi padre y tíos míos. Ya mi hermano mayor, Manuel, había estudiado en el Colegio. Estuve hasta terminar 6º de Bachillerato, marchando junto con mis otros seis compañeros de clase, que componíamos el PREU de Letras, a la Academia Estudio, porque aquel año el Colegio no impartió PREU de Letras. Todos aprobamos la Reválida en Junio. Fuimos los únicos de la clase de la Academia”.

ALUMNO INQUIETO. “Fui un alumno inquieto y charlatán en clase. Buen estudiante, aunque tenía descontento a mi padre, que pretendía la excelencia. Como mi hermano mayor. Mis asignaturas preferidas eran sin lugar a dudas la física y las ciencias naturales, y en tercer lugar la literatura de D. Luis González”.

RECUERDOS. “Al principio guardaba malos recuerdos. Sobre todo por mi especial situación en el mismo. Todos los profesores, prácticamente a diario, al llegar a Secretaría y en mi presencia, informaban a mi padre de mi actitud en clase. Y me ganaba muchos castigos impuestos por mi padre, y muchas horas de ‘estudio’ con los internos en la clase de D. Nicolás Gelo. Además los sábados por la tarde acompañaba a mi padre y lo ayudaba en Secretaría (por ejemplo, archivando, ayudando a las limpiadoras a firmar las nóminas -ninguna sabía leer ni escribir-, etc.). En la clase que daba mi padre, lengua Española, él nunca me preguntaba, señalaba a dos o tres compañeros para que lo hicieran y me calificaran. Siempre él rebajaba la nota que me daban. Pasado el tiempo, esos malos recuerdos fueron olvidándose y sólo quedaron los buenos”.

PERSONALIDAD. “Definiría el San Francisco de Paula como un Colegio serio, preocupado exclusivamente por la formación integral del alumno, no sólo en el aspecto académico, sino también en el humano y personal”.

n Licenciado en Derecho por la Universidad de Sevilla. Colegiado en1964, desde entonces ejerce la profesión liberal de abogado desde el Despacho Colectivo Bufete Repetto.

n Ha sido Secretario del Consejo de Adminis-tración y Consejero de de la Clínica Sagrado Corazón, SA; de Hospitalización y Servicios, SA y del Grupo CSC.SA. Ha sido Adminis-trador Solidario de Servicios Asistenciales, SL; R-E Asesores, SL; Bufete Nervión, SL. y de Consulting Repetto-Ellauri, SL. Ha sido Miembro del Órgano de Administración de Ibérica de Viviendas de Protección Oficial, SA y de Construcciones Garda, SA.

n Actualmente es Administrador de Ropas Paco Repetto, SL; Enroque y Fundo, SL; Bacpetto, SL; Tetrafinan, SL; Pacopetto, SL; Trianetto, SL y del Bufete Repetto, SL.

Francisco de Paula Repetto JiménezAbogado

“Se suele reconocer en el trabajo y hasta en la calle a los que a los que han sido alumnos del Colegio”


61

ESPÍRITU FRANCISCANO. “Con independencia de la formación académica, nos inculcó lo que siempre se ha llamado ‘el espíritu franciscano’. No en referencia a los ‘Frailes Mínimos’ fundados por el Santo Titular del Colegio, sino simplemente por su nombre. Este ‘espíritu franciscano’ nos imprimió carácter. Nos inculcaron valores como el trabajo, el esfuerzo, el tesón, la tolerancia, la amistad, el cumpli-miento del deber y las normas, y principios éticos. La mayoría de los que fuimos alumnos los conservamos por el resto de nuestras vidas, y eso precisamente nos distingue de los de otros colegios. Se suele reconocer a los antiguos alumnos del Colegio, precisamente por el comportamiento en los centros de trabajo, profesio-nes, o incluso en la calle”.

NUNCA ADOCTRINAR. “En los años en que yo estuve en el Colegio, aunque conocíamos de su existencia, y se percibía esa pluralidad, era más difícil cons-tatarla, por las circunstancias políticas del momento. Sí era clara y patente la asepsia de los profesores en sus clases. No pretendían nunca influir y adoctrinar a los alumnos”.

PROFESORES. “Positivamente hubo varios profesores que me marcaron: D. Luis Rey Guerrero, D. Luis González, D. Anuario Mendoza, D. Genaro Marcos, y mi padre en su aspecto de profesor. Negativamente -creo que debo decirlo, aunque no mencionaré su nombre- el profesor de química, que probablemente pudo influir en cambiar mis iniciales tendencias profesionales, aunque a la vista del devenir de mi vida, no sé si debo alegrarme”. MIS MEJORES AMIGOS. “Mis mejores amigos han sido y siguen siendo varios de los antiguos compañeros de clase. Seguimos viéndonos y manteniendo estrechas relaciones, sobre todo tres, porque uno falleció ya. (…) Limitándome a mi curso, puedo enumerar varios compañeros muy destacados, que, además, me honran con su amistad y con los que sigo teniendo mucha relación: Manuel del Valle, Juan Antonio Yañez-Barnuevo García, Agustín Argüelles Martín, José Luis Manzanares Japón y Jorge Piñero Gálvez”.

DONDE AÚN PERMANECE. “Yo fui quien desembaló la Imagen del San Francisco de Paula, una tarde de sábado cuando acompañaba a mi padre, y ayudado por Feliciano de la Osa y Pepito (los porteros), la coloqué en la hornaci-na que hay en el patio, a la izquierda de la cancela, donde aún permanece”.

EN LA PRIMERA JUNTA DIRECTIVA DE LA ASOCIACIÓN. “Estuve mucho tiempo alejado del Colegio, a pesar de mi relación familiar con la Dirección y mi cercano domicilio, sobre todo cuando mi padre dejó de trabajar en él y definitivamente tras su fallecimiento. Sin embargo, más tarde recobré la vinculación, a raíz de la fundación de la Asociación de Antiguos Alumnos, en cuya Junta Directiva desde su inicio estuve primero de Vocal. Luego de Presi-dente, varias veces reelegido, y actualmente otra vez de Vocal. Como es lógico asisto a las reuniones, todos los actos que organiza la Asociación y el propio Colegio y participo en actividades y sobre todo viajes, con toda mi familia”.

EVOLUCIÓN. “De los años 50 del pasado siglo, cuando yo era alumno, a hoy, el Colegio, su Dirección y metodología han cambiado radicalmente, pero manteniendo el mismo hilo conductor del ‘espíritu franciscano’ y calidad formati-va. (…) Me consta que el nivel del alumnado del Colegio, de los más altos de España, no desmerece de las generacio-nes pasadas antes por sus aulas, más bien al contrario. No así la de otros muchos colegios e institutos en los que el nivel educativo y formativo deja mucho que desear”.

LA MISMA LÍNEA. “El Colegio debe continuar con la misma línea que le ha llevado a estos 125. Debe aportar a sus alumnos una excelente formación, una preparación para el mundo futuro y unas bases deontológicas, éticas y de comportamiento que le permitan enfrentarse y superar los retos actuales y futuros del mundo en que vivimos. Precisamente ese nivel de exigencia, y del más alto nivel académico, que no debe rebajarse por ningún motivo, es lo que distinguirá a las mejores instituciones educativas”.

“Me consta que el nivel del alumnado del Colegio, de los más altos de España, no desmerece de las generaciones pasadas antes por sus aulas, más bien al contrario”

62

José Cañete Serrano pertenece a la tercera generación de Maestros Sastres de su familia y en sus establecimientos se visten desde hace años muchas de las personalidades de mayor relevancia de la vida política, económica y andaluza. Es además presidente de la Federación Provincial de Comerciantes de Sevilla, y vicepresidente de la Confederación de Empresarios de Sevilla y de la Cámara de Comercio de Sevilla. De su paso por el Colegio, recuerda que era buen estudiante y que su asignatura preferida era la historia y comenta que allí adquirió conciencia de la importancia de la formación y la cultura para la vida. Es más, considera que el San Francisco le preparó concienzudamente para ayudar a su padre en la sastrería y poder continuar con tanto éxito el negocio familiar. Sobre el Colegio actual, opina que ha habido “una evolución lógica”, pero que el “concepto no ha cambiado” y destaca asimismo los buenos resultados académicos que siguen obteniendo sus alumnos.

PRESTIGIO. “Ingresé en 1947, y la decisión de mis padres obedeció al prestigio que tenía la enseñanza que allí se impartía. Estuve 5 años”.

BUEN ESTUDIANTE. “Era buen estudiante y nunca suspendí en el tiempo que estuve en el Colegio. Mi asignatura prefe-rida era la historia”.

AMBICIÓN POR ESTUDIAR. “Creo que la personalidad del Colegio se resume en la ambición por estudiar”.

FORMACIÓN Y CULTURA. “Me mostraron que la formación y la cultura son muy importantes”.

PLURALIDAD. “Ideas muy diferentes convivían en el Colegio perfectamente”.

NOMBRES PROPIOS. “D. Luis Rey, D. José Rey, D. Luis González y D. Ma-nuel Perez Clavijo fueron los profesores que más me influyeron”.

COMPAÑEROS Y AMIGOS. “Conservo muchos amigos de los compañeros del Colegio. Muchos. Areal, Vadillo, Espina, Lesmes Gonzalez, Martínez Retamero, Flores son algunos de ellos”.

INFLUENCIA EN LA CARRERA. “El Colegio me preparó concienzudamente para ayudar a mi padre y me hizo consciente del valor del esfuerzo”.

n Después de formarse en París y Barcelo-na sigue con la Sastrería de su padre (él es la tercera generación de Maestros Sastres).

n Inaugura en 1963 su primera tienda de ropa de hombre, con las mejores firmas tanto españolas como extranjeras y la pañería más selecta.

n En 1975 tiene cuatro tiendas de Lujo ubicadas en las calles Rioja, Tetuán y Asunción, en Sevilla, y en Calle Ancha de Cádiz.

n Se convierte en sastre de máxima cate-goría vistiendo a las personalidades más importantes de la región.

n Miembro del Club de Sastres de España.

n Actualmente es Presidente de Aprocom (Federacion Provincial de Comerciantes de Sevilla).

n Es vicepresidente de la Confederación de Empresarios de Sevilla (C.E.S.) y vicepresi-dente de la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de Sevilla.

José Cañete SerranoMaestro Sastre y Presidente de Aprocom

“El Colegio me preparó concienzudamente para ayudar a mi padre en su sastrería y me transmitió el valor del esfuerzo”

“En el Colegio me inculcaron que la

formación y la cultura son muy importantes”


63

VÍNCULOS. “Mi hija Mayte estudió COU en el Colegio”.

EVOLUCIÓN LÓGICA. “Creo que hay una evolución lógica pero el concep-to del Colegio no ha cambiado y siempre ha estado puntero en todas las evaluaciones a lo largo de todos estos años. Sigue siendo el colegio con mejores notas en la Selectividad”.

ORTOGRAFÍA Y GRAMÁTICA. “Por lo general, pienso que las nuevas generaciones tienen nuevas asignaturas, pero creo que en ortografía y gramática están peor formados”.

EN LA MISMA LÍNEA. “El Colegio debe seguir en la misma línea, que se viene demostrando durante estos años que es la buena, y adaptarse a los nuevos tiempos, como está haciendo”.

LO MEJOR DE CADA ALUMNO. “Las mejores instituciones educativas serán aquellas que intenten sacar lo mejor de cada alumno y que logren fomentar el valor del esfuerzo personal en la búsqueda de la formación personal y profesional”.

“Creo que hay una evolución lógica pero el concepto del Colegio no ha cambiado y siempre ha estado puntero en todas las evaluaciones a lo largo de todos estos años”

64

El Médico y Catedrático Jesús Loscertales Abril estudió en el Colegio de San Francisco de Paula en los años más severos del franquismo, de forma que España estaba deshojando la flor del aperturismo cuando lo abandonó para ir a la Universidad, en 1966. “Yo era buen estudiante, aunque no recuerdo ninguna materia preferida. Las estudiaba todas, porque había que hacerlo”, explica, recordando que el San Francisco de Paula era, sobre todo, un Colegio diferente y serio. “A veces demasiado”, añade. En el Colegio aprendió el valor del trabajo y la capacidad de estudio. Los profesores que más le marcaron fueron D. Luis Rey y Julio Mínguez. Tanto sus cuatro hijos como ahora sus nietos han continuado formándose en el Colegio. En estos momentos, el Catedrático, que sabe bien de lo que habla, cree que las nuevas generaciones están peor formadas, algo que achaca principalmente a los planes de estudio, que “no acompañan a las necesidades de aprender”. Con respecto al futuro del Colegio, opina que lo mejor es ir día a día. “Lo mejor que puede aportar es conocimientos y educación cívica. Se diferenciarán los que ofrezcan esto”, explica.

PORQUE HABÍA QUE HACERLO. ”Entré en el Colegio San Francisco de Paula a los siete años, allá por el año 1951. Desconozco las razones por las que mis padres me matricu-laron en el centro. Estuve en el Colegio hasta 1966, es decir, hasta terminar Preuniversitario. Guardo buen recuerdo. Yo era buen estudiante, aunque no recuerdo ninguna materia

preferida. Las estudiaba todas, porque había que hacerlo”.

UN COLEGIO SERIO Y DI-FERENTE. “El San Francisco de Paula era un colegio se-rio y diferente a los demás. A veces demasiado serio. Allí me enseñaron a estu-diar y también el valor del trabajo, que no siempre obtenía la recompensa adecuada. No creo, sin embargo, que el Colegio influyera en mi vocación de Médico y Catedrático. Es algo que vino inducido por la profesión de mis padres, y lo de ser Catedrático de Universidad también se lo debo a ellos”.

n Licenciado en Medicina en 1966 por la Universidad de Sevilla. Doctor en Medicina y Cirugía en 1973.

n Catedrático en la Universidad de Sevilla

n Premio “Domínguez Rodiño” de la So-ciedad Médica de Hospitales de Sevilla en 1967 y Premio Científico “San Lucas” del Real e Ilustre Colegio Oficial de Médicos de Sevilla en 1993, entre otros. n Jefe de servicio de Cirugía General y Torácica en el Hospital Universitario Virgen Macarena de Sevilla

n Director médico del área quirúrgica del Hospital Infanta Luisa de Sevilla y Presi-dente del Consejo de Administración de “Clínica Esperanza de Triana S.A.”, Entidad Gestora del Hospital

n Presidente de la Asociación Iberoameri-cana de Cirugía Torácica hasta 2011.

n Ha trabajado en varios hospitales extran-jeros en Londres, París o Lyon.

n Ha dirigido 18 tesis de licenciatura y 60 doctorales, y ha publicado más de 150 artí-culos en revistas científicas y una treintena de monografía, libros y capítulos de libros.

n En 1994 fue nombrado Tutor de Resi-dentes de Cirugía Torácica del Hospital Universitario Virgen Macarena, cargo que desempeña actualmente.

Jesús Loscertales Abril Catedrático y Médico especialista en Cirugía General y Aparato Digestivo de Sevilla

“En el Colegio me enseñaron a estudiar y también el valor del trabajo”

“Guardo buen recuerdo del

Colegio. Yo era buen estudiante, aunque

no recuerdo ninguna materia preferida.

Las estudiaba todas, porque había que

hacerlo”


65

GENTE QUE DEJÓ HUELLA. “Los profesores que más me marcaron fueron D. Luis Rey y D. Julio Mínguez. En cuanto a antiguos compañeros, aún conservo entre ellos a algunos amigos, con los que de vez en cuando coin-cido. De mi promoción, hay algunos catedráticos de Universidad que han alcanzado una notable proyección”.

TAMBIÉN LOS HIJOS Y LOS NIETOS. “La tradición de estudio en el Colegio ha sido seguida por mi descendencia. Mis cuatro hijos estudiaron allí, y actualmente mis cuatro nietos estudian en el Colegio”.

LOS PLANES DE ESTUDIO NO ACOMPAÑAN. “Creo que las nuevas gene-raciones están peor formadas, porque los planes de estudio no acompañan a las necesidades de aprender. La única ventaja de es que conocen varios idiomas, cosa que yo tuve que hacer por mi cuenta y no siendo un niño ya”.

IR DÍA A DÍA. “Superados los 125 años de actividad, desconozco lo que puede pasar en el Colegio en el futuro. Creo que lo mejor es ir día a día y adaptarse a las circunstancias del entorno. Lo principal que puede aportar el Colegio es conocimientos y educación cívica”.

“El San Francisco de Paula era un colegio serio y diferente a los demás. A veces, demasiado serio”

“En el Colegio me enseñaron a estudiar y también el valor del trabajo, que no siempre obtenía la recompensa adecuada”

66

El currículo de José Luis Manzanares es tan extenso como brillante y polifacético. Ingeniero, Catedrático de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de la Universidad de Sevilla, Presidente de la hoy multinacional Ayesa, articulista de prensa y escritor, autor de numerosos ensayos, lo único que no ha hecho José Luis Manzanares en su vida es perder el tiempo. En el Colegio estuvo siete años, en los que asegura haber sido formado en valores como el rigor, amor a la ciencia, exigencia y respeto a todas las ideas, que considera también definitorios de la personalidad del centro. Guarda muy buenos recuerdos de aquellos años previos a la Universidad, “recuerdos de amigos inolvidables y magníficos profesores”, comenta. Afirma que es ingeniero porque amó la física y matemáticas que entonces le enseñaron, y sobre la evolución del proyecto educativo del Colegio, comenta escueta y expresivamente que está ‘encantado’ con la educación que reciben sus nietos. Representan la tercera generación de los Manzanares en el Colegio.

EL INGRESO. “Entré tras examinarme de ingreso, en octubre de 1951. Salí al finalizar PREU en junio de 1958. Estuve, por tanto, siete años”.

AMIGOS INOLVIDABLES Y MAGNÍFICOS PROFESORES. “Guardo muchos buenos recuerdos, de amigos inolvidables y magníficos profesores. Fui un buen estudiante. Me encan-taban las matemáticas, la física y química, la literatura y la filosofía”. LA PERSONALIDAD DEL COLEGIO, EN POCAS PALABRAS. “Rigor, amor a la ciencia, exigencia y respeto a todas las ideas. Esos son los valores que me inculcaron allí”.

PLURALIDAD. “Sí que percibí la pluralidad y convivencia de diferentes ideas que usted comenta.”.

NOMBRES PROPIOS. “Guardo especial recuerdo de D. Julio Mínguez, D. Luis Rey Guerrero, D. José Rey Guerrero, D. Luis Gonzalez y la señorita Ester, mi magnifica profesora de francés”.

n Doctor Ingeniero de Caminos y pasa por ser uno de los ingenieros más prestigiosos de España.

n Comenzó su carrera profesional a finales de la década de los 60, y desde entonces, ha participado en la ejecución de innumerables obras emblemáticas de ingeniería, entre ellas algunas tan populares en Andalucía como el Circuito de Jerez, el estadio Olímpico de la Cartuja, o el Puente del Cachorro, en su barrio sevillano de Triana.

n En la actualidad es Presidente de AYESA, una compañía multinacional, con delegacio-nes en América, Europa, África y Asia, más de 2.700 empleados y unos ingresos anuales de 216 millones. n Es además Catedrático de Estructuras de la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Sevilla, articulista de prensa y escritor, siendo autor de nueve libros, muchos de ellos sobre Sevilla y el último sobre el debi-litamiento de valores de “un país que se que creía rico”.

n Es Académico de la Real Academia de Ciencias de Sevilla y de la Academia de Ciencias Sociales y del Medio Ambiente de Andalucía. Ha sido Vicepresidente del Ate-neo Hispalense, Presidente de la Academia de Ciencias de Sevilla, Presidente del Centro de Nuevas Tecnologías del Agua, Presidente de la Asociación Española de Consultores de Ingeniería(ASINCE), Medalla de honor del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos en el año 1989, Sevillano del año 1990, Rey Mago en 1992, Premio Puente Alcántara en 1989 y 1995 y Premio Eduardo Torroja en 1999.

José Luis Manzanares JapónEmpresario, Catedrático de Estructuras de la Universidad de Sevillay escritor

“Soy ingeniero porque amé la física y matemáticas del Colegio”

“Mi consejo es que sigan con la misma

ilusión y orgullo por la institución. El

hábito hace al monje”


67

COMPAÑEROS. “Como ya le he dicho, conservo amigos inolvidables de aquellos años y me veo de vez en cuando con ellos. Aunque algunos han muerto ya. (…) Juan Antonio Yáñez, Manolo del Valle, José Maria Luzón y Agustín Arguelles son alumnos que luego tuvieron una trayectoria muy destacada”.

INFLUENCIA EN LA CARRERA. “Soy ingeniero porque amé la física y matemáticas del Colegio”.

UNA ANÉCDOTA. “Recuerdo que en el laboratorio, destilando benceno, volqué el matraz y por el tubo de gases empapé de líquido los pantalones de D. Luis Rey”.

VÍNCULOS. “Allí ha estudiado mi hijo, tengo matriculados a ocho nietos, he dado alguna conferencia y he asistido a la reunión de aniversario de mi promo-ción”.

EVOLUCIÓN. “Lo que puedo decirle es que estoy encantado con la enseñanza que reciben mis nietos”.

LA EDUCACIÓN, HOY. “Me parece que en general hay un abuso de Goo-gle y faltan deberes personales con problemas a resolver”.

UN CONSEJO. “Que sigan con la misma ilusión y orgullo por la institución. El hábito hace al monje.”.

LO QUE DEBE APORTAR UNA INSTITUCIÓN EDUCATIVA DE REFERENCIA. “Los idiomas, el rigor, el culto a la excelencia, el afán por sentirse en la elite y el amor por el trabajo”.

“Estoy encantado con la enseñanza que reciben mis nietos”

“Guardo especial recuerdo de D. Julio Mínguez, D. Luis Rey Guerrero, D. José Rey Guerrero, D. Luis Gonzalez y la señorita Ester, mi magnifica profesora de francés”

“Conservo amigos inolvidables de

aquellos años y me veo de vez en cuando

con ellos”

68

Jefe del Servicio de Cirugía en el Hospital Universitario Virgen Macarena, hijo y padre de antiguos alumnos del Colegio, Domingo Martínez Obradó se siente “orgulloso” de ser “franciscano”, “como la mayoría de los que hemos pasado por allí”. Cree que el Colegio “ha sido y es arriesgado y valiente”, y que su proyecto educativo está en la línea del Instituto Libre de Enseñanza de D. Giner de los Ríos. Una “línea maestra” que, recomienda, se mantenga siempre, adaptándola a los nuevos retos y tiempos. Además de la formación y los buenos recuerdos, Domingo Martínez Obradó aún guarda del Colegio un buen número de amigos, antiguos compañeros con los que se reúne periódicamente para compartir “amistad, compañerismo y vivencias”.

POR EXPRESO DESEO PATERNO. “Ingreso en octubre del año 1951 por expreso deseo de mi padre que era antiguo alumno de ese colegio. Estando en él hasta junio de 1961, es decir, diez años, para matricularme en la Facultad de Medicina de La Universidad de Sevilla, iniciando los estudios de mi carrera profesional. (…) Estoy orgulloso de ser franciscano como la mayoría de los que hemos pasado por el San Francisco de Paula, y debo de agradecerle, después de a mis padres y a mi familia, la formación y la educación recibida”.

INFINIDAD DE RECUERDOS. “Tengo infinidad de buenos recuerdos tanto de compañeros como del profe-sorado así como de la convivencia en el Colegio. Recuerdo con cariño las clases con D. Germán, D. Nico-

lás Gelo, las varillas de D. Luis Rey… Los juegos de frontón en el patio de recreo, los partidos de fútbol con D. Nicolás en el campo de La Botella y Del Marqués del Contadero, así como las celebraciones cada 2 de abril día de San Francisco de Paula. Como estudiante era normalito, es decir, ni de la cabeza ni de la cola y mis materias preferidas, las de Ciencias: mate-máticas, ciencias naturales, física y química y de las de Letras: literatura y geografía e historia”.

LA REFERENCIA DEL INSTITUTO LIBRE DE ENSEÑANZA. “Creo que el San Francisco de Paula ha sido y es un Colegio arriesgado y valiente, desde mi punto de vista que está en la línea del Instituto Libre de Enseñanza (I.L.E.) de D. Francisco Giner de los Ríos".

TOLERANCIA Y LIBERTAD. “El valor principal que me inculcaron fue la convivencia en tolerancia y libertad. Y ese ha sido siempre a lo largo de mi vida el camino a seguir, pues fue la atmósfera que respiramos en el Colegio y en la que nos criamos”.

n Licenciado en Medicina por la Univer-sidad de Sevilla en 1967. Especialista en Aparato Digestivo.

n Cirujano Jefe de Cirugía de Urgencias de la Beneficencia Provincial Real Hospital de San Lázaro (1969-1982).

n jefe de Equipo de Cirugía de Urgencias del Hospital Central de las Cinco Llagas (1968-1972).

n Jefe de Sección de Cirugía del Hospital Virgen Macarena (1974-1990).

n Jefe de Servicio de Cirugía General y del Aparato Digestivo del Hospital Virgen Macarena (1990-2007).

n Tras su jubilación, ejerce como cirujano general y médico especialista de aparato digestivo en el sector privado.


Domingo Martínez Obradó Jefe de Servicio de Cirugía del Hospital Virgen Macarena

“El San Francisco ha sido y es un colegio arriesgado y valiente, en la línea del Instituto Libre de Enseñanza de D. Francisco Giner de los Ríos”

“Estoy orgulloso de ser ‘franciscano’ como

la mayoría de todos los que hemos pasado

por el San Francisco de Paula, y debo de

agradecerle, después de a mis padres y a mi familia, la formación y la educación recibida”

69

UNA INFLUENCIA POSITIVA. “Todo el profesorado tuvo incidencia positiva en nuestra formación, pero para mí destacaron en la primera enseñanza D. Nicolás Gelo y D. Germán. Y en la segunda enseñanza, D. Luis Rey Guerrero, Director del colegio y Profesor en las materias de ciencias naturales y física y química; D. Julio Mínguez, Profesor de matemáticas, D. Luis González, Pro-fesor de literatura, D. Manuel Pérez-Clavijo y Cerezal, que nos daba clase de Física-Química, D. Manuel Sánchez Asencio que impartía geografía…”.

COMPAÑEROS. “Conservo amigos de entonces. Pues en diez años pasando de curso a curso hicimos un grupo grande en el que todavía, al día de hoy, compartimos amistad, compañerismo y vivencias. (…) A lo largo de esos diez años he coincidido, no sólo con compañeros de curso, sino con compañeros de los cursos anteriores y posteriores al mío que después han llegado a ser personalidades destacadas en la vida política económica y empresarial de la sociedad sevillana, andaluza y española, como son Juan Salas Tornero, los hermanos Galeote Jiménez, Jesús Agustín Loscertales Abril, los hermanos Bullón Sopelana, los hermanos Bedoya Bergua, Manuel del Valle Arévalo, Manzanares Japón, Luis Yáñez Barnuevo y García y muchos más que harían una lista interminable”.

ELECCIÓN DE LA CARRERA. “En mi caso fue decisión personal, aunque marcada por la influencia familiar y colegial, pues un numeroso grupo de compañeros de clase eran hijos de médicos y todos pasamos, cuando terminamos, a estudiar medicina pues mi padre no era médico pero sí practicante en aquella época. Y digo en aquella época porque a posteriori estudió la carrera de medicina acabándola días antes que yo terminara”.

TRAVESURAS. “Hay muchas anécdotas, pero las más destacables eran las travesuras que le hacíamos al profe-sorado que no creo deban de ser reseñadas”.

CONTINUANDO LA TRADUCCIÓN. “Me ha sido casi imposible mantener una vinculación activa, a pesar de haber estudiado en el Colegio, continuando la tradición familiar, mi hijo, sobrinos, sobrinos-nietos, ahijados y bastantes recomendados míos y de pertenecer desde su fundación a la Asociación de Antiguos Alumnos y de conservar una amistad con la Familia Rey-Romero a través de alguno de sus miembros”.

AVANCE DENTRO DE LA TRAYECTORIA MAESTRA. “Creo que el Colegio no ha cambiado en su trayectoria maestra sino ha mejorado, como es lógico, pues sigo creyendo, como ya anteriormente he dicho, que está en la línea del I.L.E. de D. Francisco Giner de los Ríos y en mi concepto ha mejorado esa línea ampliándola y adaptándola a los tiempos actuales, adelantándose al futuro que se vislumbra. Sí ha cambiado en su forma de ir desarrollando, dentro de la filosofía del I.L.E., las nuevas tecnologías con la pluralidad idiomática dentro de un espíritu libre, independiente y modernizador, sin renunciar a sus pilares fundamentales. Creo que deben de fomentarse todas aquellas habilidades y competencias que sirvan para un futuro próximo y lejano”.

APRENDIZAJE RAZONADO. “La diferencia global en la enseñanza es abismal: antes todo era memorizar y hoy es mucho más razonar. Y en nuestro Colegio siempre se ha ido más al aprendizaje razonado que al me-morizado, considerando que las nuevas generaciones están hoy mucho mejor preparadas que las de antaño”.

FUTURO. “No me considero capacitado para recomendar nada a quienes llevan la Dirección actualmente, que considero extraordinariamente preparados para enfrentarse a los retos actuales y futuros y llegar no solo a su 250 aniversario sino a más. Lo que sí aconsejaría es no abandonar la línea maestra que ha mantenido siempre el Colegio, pues demostrado está que ha sido válida para 125 años, sólo habrá que irla adaptando a los nue-vos retos que se presenten en la actualidad y en el futuro”.

UN PROFESORADO EXCELENTE EN EVOLUCIÓN. “Creo que la diferencia que existe entre las excelentes y las buenas instituciones educativas radica en la elección permanente del excelente profesorado sobre el buen profe-sorado, es decir, tener como tiene el San Francisco de Paula un profesorado excelente en evolución y no abando-nar nunca el espíritu de independencia, libertad, convivencia, pluralidad y rigor y disciplina en el trabajo”.

“Lo que sí aconsejaría es no abandonar la línea maestra que ha mantenido siempre, pues demostrado está que ha sido válida para 125 años, sólo habrá que irla adaptando a los nuevos retos”

70

José María Navarro Álvarez formó parte de la primera promoción de la Escuela de Arquitectos de la Universidad de Sevilla en 1966. Y desde entonces ha ejercido la profesión libre de arquitecto, siendo autor de numerosos edificios públicos y privados de la ciudad. A él debemos la remodelación y ampliación del Colegio a finales de los 60, fundamental para su mantenimiento en el casco histórico de la ciudad. Del paso por sus aulas como alumno guarda unos amigos que le han durado toda la vida, así como una manera de pensar y enfrentarse a los problemas que lo ha acompañado durante toda su vida y que en muchas ocasiones, “afortunadamente”, le ha distanciado del éxito inmediato. En esa manera de pensar, José María Navarro destaca el deseo de hacer las cosas bien y comportarse honestamente, cumpliendo siempre los compromisos, incluso los contraídos con uno mismo. Y sobre ello, recuerda un examen en que D. José Rey les dijo: “Poned en el encabezamiento, doy mi palabra de honor de no copiar”, y luego se puso a leer un libro. “Yo no copié y aprendí a respetar los compromisos, y es algo que he recordado muchas veces”, afirma.

AGRADECIDO POR EL CAMBIO. “Entré en Ingreso de Bachiller, en 1951, con don José Montllor. (…) No sé lo que movería a mis padres a cambiarme de colegio, pero les estoy enormemente agradecido; supongo que conocían el tipo de enseñanza que se impartía y la respuesta que yo podía darles. Permanecí hasta acabar el Preuniversitario”.

AMIGOS PARA TODA LA VIDA. “Hice los amigos que después me han durado toda la vida, aunque los vea poco. El Colegio era algo inherente a mi juventud, no puedo separar uno de la otra. No tenía problemas para estudiar, sentía curiosidad por todas las asignaturas y los resultados solían ser buenos. Mis preferen-cias estaban más en función del profesor que de la propia materia, aunque prefería las de comprender a

las de memorizar, por tanto las matemáticas, las de Ciencias, la filosofía o las que agudizaban mi curiosidad, como la geografía o la historia”. RESPETAR LOS COMPROMISOS. “Creo que las tres palabras que me-jor definen la ‘personalidad’ del Colegio son rigurosidad, honestidad y excelencia. (…) En el Colegio aprendí esos valores, básicamente a hacer las cosas bien y comportarse honestamente. Recuerdo un examen en que D. José Rey nos dijo: ‘Poned en el encabezamiento doy mi palabra de honor de no copiar’, y se puso a leer un libro. Yo no copié y aprendí a respetar los compromisos, incluso los contraídos con uno mismo. Lo he recordado muchas veces”.

LAS PERSONAS, ANTES QUE LAS IDEOLOGÍAS. “En mi época no se manifestaban tanto las ideologías, pero aprendimos a encontrar el valor de las personas por encima de aquellas”.

n Obtuvo el título de Arquitecto en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Sevilla en 1966 formando parte de la primera promoción de la misma.

n Desde entonces ha ejercido la profesión libre de arquitecto, siendo autor de nume-rosos edificios públicos y privados de la ciudad.

n Es profesor del Departamento de Urba-nística y Ordenación del Territorio de la Universidad de Sevilla.

José María Navarro ÁlvarezArquitecto, profesor de la Universidad de Sevilla

“En el Colegio aprendí a respetar los compromisos conmigo mismo, como cuando D. José Rey nos hizo dar nuestra palabra de no copiar, y él se puso a leer un libro”

“Hice los amigos que después me

han durado toda la vida, aunque los vea poco. El Colegio era algo inherente a mi juventud, no puedo

separar uno de la otra”


71

CASI TODOS. “Los profesores que más recuerdo son: D. José Rey, una pos-tura ante la vida; D. Luis Rey, la curiosidad y el rigor científico; D. Manuel Pérez Cerezal, cómo estudiar; D. Francisco Márquez, comprender la Histo-ria; D. Anuario Mendoza, cómo interpretar las normas, etc. Casi todos”.

DE LA MISMA COFRADÍA. “Casi todos los compañeros, los más amigos, están fuera. Pero muchos pudieron venir para celebrar el 50º aniversario de nuestro último curso. Sin embargo, coincido de vez en cuando con antiguos alumnos y nos sentimos como de la misma cofradía, que tenemos algo en común”.

UNA RESPUESTA QUE VALIÓ UN CAMPEONATO. “Debió de ser hacia el año 53. (…) Radio Sevilla —la radio era entonces el entretenimiento familiar equivalente a lo que es hoy la televisión— había organizado un campeonato entre los colegios de la ciudad con un encuentro semanal; aquellos habían de constituir cada uno un equipo similar a los de futbol con once alumnos y el locutor lanzaría preguntas que sacaba de un sobre que deberían correr por las distintas líneas y ser detenidas antes de llegar a la puerta y marcar un gol, era un juego muy rápido. El Colegio montó un equipo con alumnos de 4º en las dos primeras líneas y a los de 3º, más pequeños, nos reservó para la defensa y la portería; a mí me correspondió un lugar en la defensa. Habíamos superado victoriosamente todas las fases y estábamos en la final; la pelota no había sobrepasado nunca la línea media, así que mi curso no había tenido nunca ocasión de actuar. De pronto surgió la pregunta inesperada: ‘¿Con qué otro nombre es conocida en la Historia Dª Ana de Mendoza?’. Indudablemente aquello era una incursión di-recta a la puerta, eso no se había dado nunca. Yo tenía la costumbre de hojear una enciclopedia de varios tomos que había en casa deteniéndome en aquello que me llamaba la atención y, justamente hacía unos días, que me la había llamado un retrato de una hermosa señora con un ojo tapado que leí que corres-pondía al de la Princesa de Éboli, que recordaba que aparecía en un pie de página de escasos renglones en nuestro libro de historia, con letra muy pequeña, y pude entonces conocer su biografía. La pelota sobrepa-só rápidamente la línea delantera, la media, y por primera vez accedía a la defensa con todo el aspecto de convertirse en un tremendo gol. Me salió una voz apenas perceptible: ‘La Princesa de Éboli’. ‘¡Coorrecto!’ Había salvado la situación y aquello nos valió la final y el campeonato para el Colegio”.

OBRAS DE AMPLIACIÓN. “Heredé de otro Antiguo Alumno, D. Roberto de Juan, que se había marchado a Estepona, el proyecto y la Dirección de las nuevas obras de remodelación y ampliación del Colegio, allá por el año 69 ó 70. Aunque esta vez era algo más complicado porque se trataba de una ampliación con unas casas colindantes que se habían adquirido; había que derribarlas con gran parte del Colegio —la clase de D. Nicolás— y construir todo en un tiempo increíble, desde junio a octubre. Pudo hacerse debido a la tenacidad y perseverancia de D. Luis Rey Guerrero —recuerdo los viajes a Madrid en el expreso para resolver el expediente, los marrons glacés que compraba en la calle Peligros para la empleada que lo aten-día y la obra que él vivía cotidianamente, demasiado cotidianamente, llena de imprevistos y con un plazo improrrogable: la entrada de los alumnos para el nuevo curso—. La localización actual del Colegio en el centro histórico es una consecuencia de la decisión tomada entonces”.

PRINCIPIOS VIGENTES. “Pienso que la sociedad ha variado y por tanto las técnicas para el desarrollo de cualquier profesión o actividad, y estas han de aprenderse desde el principio; yo conocí la pluma y el tintero. Pero creo que los principios que el Colegio me inculcó entonces siguen siendo, y lo serán en el futuro, vigentes y que el colegio es un perfecto transmisor de ellos en su línea educativa actual y espero que lo seguirá siendo en el futuro”.

CONSEJO. “Que sepan conservar el espíritu de siempre y abrirse, no obstante, a las posibilidades que indu-dablemente nos facilitarán las técnicas de comunicación futuras”.

“La ampliación pudo hacerse debido a la tenacidad y perseverancia de D. Luis Rey Guerrero. La localización actual del Colegio en el centro histórico es una consecuencia de la decisión tomada entonces”

72

No ha podido seguir la marcha del Colegio, pues nada más salir de él marchó a Suiza, en principio para pasar dos meses de verano, pero luego se quedó 14 años. Y cuando regresó a España, no volvió a Sevilla, sino a Barcelona, donde pasó otros 26 años. Pero recientemente asistió al reencuentro de los alumnos que salieron del centro hace 50 años y confiesa que fue muy emocionante para él poder saludar a compañeros que no veía desde entonces. Dice que guarda muchos recuerdos del Colegio, del que destaca su “profesionalidad y alto grado de disciplina”, así como la calidad de sus profesores, algunos de ellos “inmejorables”. Preguntado por las claves para que el Colegio pueda cumplir otros 125 años, él apunta dos muy concretas: perseverancia e inversión.

BUEN NOMBRE. “Entré en la clase de D. Nicolás. Hice todo el Bachillerato y el Preuniversitario. Antes estaba en los Escolapios, y creo que el cambio fue debido al buen nombre y calidad que tenía el Colegio de San Francisco de Paula”.

RECUERDOS. “Recuerdos muchos, los motes que les poníamos a los profesores, las tortas que hemos recibido (¡qué cosa ahora!), la buena calidad del profesorado. Yo era un alumno normal, de Ciencias. Las Letras no eran mis preferidas”.

LA PERSONALIDAD DEL COLEGIO. “Profesionalidad y alto grado de disciplina. Creo que son los concep-tos que mejor la resumen”.

PERSEVERANCIA. “Pienso que éramos muy jóvenes, pero yo siempre he sido perseverante en mi vida y no sé si eso lo aprendí en el Colegio”.

PROFESORES. “El Colegio era famoso por el alto grado de la enseñanza. Profesores como D. Luis y D. José Rey, D. Julio Mínguez o Mr. Dejean fueron inmejorables”.

CATORCE AÑOS EN SUIZA. “Al finalizar el Preuniversitario, marché a Suiza para pasar dos meses de verano, ¡y me quedé allí 14 años! Con la única persona que he mantenido y mantengo contacto es con Luis Yáñez-Barnuevo. Hace unos meses, en la reunión de los 50 años, pude encontrarme con otros antiguos como Salas, Palma, Loscertales, Govantes. Fue una gran emoción. Hacía 50 años que no los había visto”.

VOCACIÓN. “Creo que cada cual teníamos inclinaciones diferentes. Siempre me gustó la mecánica, la electricidad y como dije antes, Cien-cias y no Letras. Tenía claro que lo mío era la ingeniería”.

n Después del Preuniversitario, marchó a Sui-za, donde estudió Ingeniería Eléctrica, y trabajó en varias empresas suizas del sector eléctrico

n Volvió a España (Barcelona) en 1974 con una empresa suiza, con la que fundó y tomó la dirección general de su filial española. Allí trabajó 26 años, hasta el año 2010.

n A partir de aquí, fundó su propia empresa, Intermetor SL. Ahora está jubilado

Federico de Seras ChopardIngeniero Industrial

“El Colegio era famoso por el alto grado de la enseñanza, y yo tuve algunos profesores inmejorables”

“Tras el Colegio, marché a Suiza… Fue

una gran emoción reencontrarme con

antiguos compañeros 50 años después”


73

ANÉCDOTA. “En un examen oral de filosofía, D. José Rey me preguntaba, y yo no tenía ni idea. Al final me dijo: ‘¡Hijo, Federico!, dime algo porque si no te tendré que catear’. Y me cateó”.

DERECHOS… Y OBLIGACIONES. “En mi modesta opinión hay que fo-mentar la perseverancia, las ganas de trabajar, porque ¡parece ahora que trabajar es un pecado! Que la juventud se divierta, bien, pero no solo hay derechos, nos olvidamos de las obligaciones”.

BUENA FORMACIÓN GENERAL. “Personalmente creo que la formación general que habíamos recibido era muy buena. Cuando veo a mis nietos en Barcelona, que no aprenden Historia de España, ni Geografía de España, etc., pues encuentro que no es lógico, y por lo tanto los de hoy tendrán menos conocimientos generales que los de antaño”.

DOS CONSEJOS. “Perseverancia e inversión. Eso es lo que recomendaría al Colegio si quiere llegar a su 250 aniversario”.

EDUCACIÓN, SIN OLVIDAR LA DE LOS PADRES. “Creo que las mejores instituciones educativas aportarán a sus alumnos formación, saber acep-tar las otras opiniones, educación, sin olvidar la de los padres, y creo que no se puede olvidar algo de religión, ya que todo está muy materializado”.

“En mi modesta opinión hay que fomentar la perseverancia, las ganas de trabajar”

“Pienso que éramos muy jóvenes, pero yo siempre he sido perseverante en mi vida y no sé si eso lo aprendí en el Colegio”

74

Se jubiló en el año 2006, pero sigue yendo a diario a la Facultad de Química, de la que fue Decano durante catorce años. Catedrático desde 1981 y con más de 43 años de docencia a sus espaldas, Vicente Flores Luque afirma que los alumnos que traían mejor formación a su Facultad eran los que procedían del San Francisco de Paula. Como Antiguo Alumno que fue, dice haber aprendido en el Colegio a “trabajar muchísimo” y destaca las palabras “exigencia”, “seriedad” y “tolerancia” para definir su personalidad. La impresión que tiene hoy del Colegio es que “está a cierta distancia de los demás”, y destaca la implantación en sus métodos de las nuevas tecnologías y la apuesta por los idiomas. Su recomendación para el futuro es que siga en la misma línea y no abandone su ideario.

VALORACIÓN DESDE LA DISTANCIA. “Guardo muy buenos recuerdos. He permanecido 43 años de docente en la Uni-versidad, y eso me ha llevado a valorar de forma muy po-sitiva el profesorado que tuve en el Colegio. Fui un alumno de tipo medio, siempre tenía por delante a tres o cuatro compañeros que marcaban la pauta y yo trataba de seguir-les. Mis materias preferidas, aunque yo no he marginado la formación humanística en la Universidad, han sido las científico-técnicas, que después me han servido bastante. En aquella época, mi idea era estudiar Arquitectura pero Arquitectura no vino a Sevilla en la fecha que mi padre había pensado, y estudié Química”.

SERIEDAD, EXIGENCIA Y CONVIVENCIA. “Yo marcaría dos palabras para definir el Colegio, seriedad y exigencia. El Colegio fue muy exigente en todas las materias, era un claustro de profesores muy riguroso que llevaba su tarea con una seriedad tremenda. (…) Por tanto, yo allí aprendí principalmente a trabajar, si uno quería mantener el tipo frente a esos compañeros que iban en cabeza, había que trabajar muchísimo. Otra palabra clave que yo destacaría del Colegio era la tolerancia, allí se respetaba siempre. (…) Convivía gente muy diversa, que tenía mentalidades distintas, pero no nos diferenciábamos, hacíamos una vida en común (...) y allí ni uno era más ni otro menos, éramos todos del mismo nivel”.

BUENOS POLÍTICOS Y BUENOS PROFESIONALES. “Con respecto a la convivencia, yo tuve compañeros que políticamente se fueron definiendo, aunque en aquella época era difícil definirse, primero por la situa-ción política que vivíamos y segundo por la edad que teníamos. Algunos han hecho carrera dentro de la política, sin abandonar su trabajo profesional. Hoy en día es algo que yo valoro mucho, pues pienso que es negativo que los políticos no tengan una trayectoria profesional previa”.

SIEMPRE AL LADO DE LOS SUYOS. “Aunque me hicieron pasar algunas veces momentos difíciles, recuer-do con mucho cariño a D. Luis Rey Guerrero, que explicaba física y ciencias naturales, y a su hermano

n Licenciado en Ciencias Químicas por la Universidad de Sevilla en 1963. Cinco años más tarde obtuvo el Doctorado en Ciencias Químicas. Su vida profesional ha estado prácticamente ligada esta Facultad, de la que ha sido Decano durante muchos años.

n Catedrático y Decano en la Facultad de Ciencias de Cádiz.

n En 1981 fue nombrado Catedrático de Ingeniería Química en la Facultad de Química de Sevilla. Un año después, Decano de la Facultad de Química hasta el año 1996.

n Finalmente se jubiló en 2003 cuando ocu-paba el puesto de Director del Departamento de Ingeniería Química de Sevilla,.

n Ha dirigido y participado en 15 proyectos de investigación y una veintena de Tesis. También ha publicado cerca de 150 artículos en revistas y libros especializados.

Vicente Flores LuqueCatedrático de Ingeniería Química de la Universidad de Sevilla

“Después de 43 años de docencia en la Universidad, puedo decir que los alumnos que traían mejor formación a la Facultad eran los que procedían del San Francisco de Paula”


75

D. José. También recuerdo con mucho cariño a D. Leandro, que era el profesor de matemáticas, a D. Manuel Pérez Cerezal, a D. Luis González, en sus clases de literatura, y a D. Francisco Repetto, en las de lengua. (...) Guardo recuerdos muy entrañables de D. Luis González porque con él mantuve bastante relación incluso después del Colegio. (...) Cuando celebramos los 50 años de salida del Colegio, en el 2007, yo destaqué la forma en que el Colegio se comportaba con algunos alumnos brillantes que habían pasado por ahí y que en algún momento hubo que echarles un capote. Puse dos ejemplos: D. Manuel Castillo, que después fue Cate-drático del Conservatorio, había terminado su carrera, hizo una estancia en Francia y cuando volvió el Colegio lo acogió para que diera clases de francés; y D. Francisco Márquez que, actualmente creo que está en Har-vard, también estuvo durante unos años dando clases en el Colegio”.

COMPAÑEROS Y AMIGOS. “Mantuve una relación fenomenal con tres compañeros de mi curso y, desgraciadamente, los tres han fallecido: Felipe Yoldi, (Hematólogo), Pepe Mar-tínez Botella (Pediatra), y Antonio Jiménez Gilabert, que fue un personaje singular y que (...) podía estar entre los 3 ó 4 alumnos más brillantes que han pasado por el Colegio”.

CON UNA TRAYECTORIA DESTACADA. “De mi promoción hay un gran empresario, Manolo Barea. De otros cursos recuerdo a José Luis Manzanares, Presidente de Ayesa; Juan Antonio Yáñez-Barnuevo, ahora en el Ministerio de Exteriores; o Manolo del Valle, ex Alcalde de Sevilla. También Manuel Losada Villa-sante con el que mantengo una buena relación personal y epistolar, o Eugenio Alés, que fue diputado en las Cortes Constituyentes”.

INFLUENCIA EN LA CARRERA. “Yo creo que influyó bastante por lo que he dicho antes, por la formación en materias como matemáticas, física o química que luego me sirvieron mucho en la Universidad (...) al decantarme profesionalmente por la docencia”.

ANÉCDOTAS. “Lo que primero que se me viene a la memoria son las famosas varillas de D. Luis Rey Guerrero; entraba en clase y era un torbellino. Recuerdo que llegaba con el cajón de las figuras de crista-lización a las clases de ciencias naturales. Se ponía el cajón entre las piernas, cogía una figura, la tiraba por alto para que las cogíeramos en el aire. Uno tenía que decirle qué figura era y todo lo referente a la misma. Había también dos hermanos gemelos que eran del curso superior; uno repitió y se incorporó a nuestro curso. En clase con D. Francisco Márquez, el gemelo que estaba en el otro curso salía a la fuente a beber y el que estaba en el nuestro se escondía debajo de la banca y D. Francisco veía al que estaba fuera y cuando lo iba a meter en la clase veía al otro allí sentado.”.

LOS MEJOR PREPARADOS. “ En la Facultad (...) tengo que decir que, para mí, los alumnos que traían mejor formación eran los del San Francisco de Paula. El Colegio está a cierta distancia de los demás. En mis últimas visitas, estuve viendo la implantación de las nuevas tecnologías y eso no se da en todos los colegios. También en el tema de los idiomas creo que el Colegio es pionero, sigue un poco la pauta del principio que condujo a su creación. Creo que el Colegio debe mantenerse en esos criterios porque es favorable para los alumnos”.

LUCHAR CONTRA LA MEDIOCRIDAD. “Mi recomendación es que mantengan el ideario del Colegio, que se creó con unos criterios que se han mantenido incluso en momentos políticos muy difíciles. Yo les diría que no se apartaran de esa línea. (…) Actualmente, toda la política de enseñanza está dirigida a obtener o crear un estatus de mediocridad y, yo creo en todo lo contrario, hay que ir a méritos, a esfuerzos, y es por donde el Colegio se tiene que guiar”.

“He permanecido muchos años de docente en la Universidad, y eso me ha llevado a valorar de forma muy positiva el profesorado que tuve en el Colegio”

76

Catedrático de Física Química de la Universidad de Sevilla, Francisco Sánchez Burgos dice que tan importante como los recuerdos del Colegio son las cosas de él que no recuerda. “Sobre todo, no recuerdo ese ambiente agobiante y siniestro de la primera y segunda enseñanzas que se ha reflejado luego en la literatura y en el cine”, comenta. Y en cambio sí recuerda un colegio donde había disciplina, pero no arbitrariedades, y donde se enseñaba a los alumnos en la libertad responsable, o sea, en la capacidad de tomar sus propias decisiones y pechar con sus consecuencias. Opina que el Colegio ha sabido innovar, pero sin confundir los medios con los fines, uno de los peligros de la educación actual, demasiado marcada por el deseo de hacer profesionales competitivos, en vez de personas felices. En este sentido, señala que lo principal que debe suministrar un colegio a sus alumnos es una formación que les permita ser felices.

FORMACIÓN ‘FRANCISCANA’ Y JESUITA. “Ingresé como alumno en el San Francisco de Paula cuando tenía seis años (1952). Desde luego recuerdo que la decisión de que fuera así la tomó mi padre. Mi madre era más bien partidaria de un colegio de religiosos. La cosa se solucionó adecuadamente: fui alumno del San Francisco y miembro de la congregación de San Estanislao de Kostka. De manera que recibí formación de los ‘franciscanos’ y de los jesuitas. Me alegro de ambas cosas. En cuanto a las razones que tenían mis padres para opinar como lo hacían, las ignoro absolutamente. Supongo que mi padre, que desarrollaba su actividad en el mundo de la enseñanza, conocía bien las cualidades del Colegio y le gustarían. Estuve hasta 1962 (desde párvulos hasta que fui a la Universidad)”.

LOS ‘NO RECUERDOS’. “Casi tan importante para mí como los recuerdos del Colegio (y de la Congregación) son las cosas que no recuerdo: no recuerdo ese ambiente agobiante y siniestro de la primera y segunda enseñanzas que se ha reflejado luego en la literatura y en el cine. Recuerdo sobre todo que, pese a que había disciplina, no había arbitrarie-dades. Pero sobre todo recuerdo cómo había en el Colegio una libertad responsable. Se nos repetía: ‘Uno debe pechar con las consecuencias de sus actos’. Creo que eso es lo principal que aprendí en el Colegio: que hay que procurar

n Licenciado en Química en 1967.

n Licenciado en Física en 1971. n Doctor en Ciencias en 1972.

n Premio Extraordinario de Licenciatura de Química.

n Premio Extraordinario de Doctorado.

n Premio Ciudad de Sevilla al mejor expe-diente de su promoción.

n Estancia por Doctorado en CNRS, París, 1973-74.

n Colaboraciones con la Universidad de Leicester, Pisa, Bolonia y otras.

n Más de 180 artículos científicos publica-dos.

n Más de 90 comunicaciones en congresos nacionales e internacionales.

n Director de 26 Tesis de Doctorado.

n Director de 35 Tesis de Licenciatura.

n Catedrático de Química Física de la Uni-versidad de Sevilla.

n Director de 20 proyectos de investigación (con la Junta de Andalucía y otros organis-mos nacionales e internacionales).

n Miembro de ANEP (Agencia Nacional de Evaluación y Prospectiva).

n Académico de número y actual Secretario de la Real Academia Sevillana de Ciencias.

n Académico electo de la Real Academia de Farmacia de Cataluña.

Francisco Sánchez BurgosCatedrático de Química Física de la Universidad de Sevilla

“En el Colegio había una libertad responsable, se nos enseñaba a los alumnos a ser consecuentes con nuestros actos”


77

ser libres y responsables. Otra cuestión que recuerdo con agrado es el sentido del humor que mostraban la mayoría de los profesores”.

AFICIÓN AL FUTBOLÍN Y LAS CHICAS. “En función de mis calificacio-nes yo era eso que suele llamarse un buen estudiante. Pero mi principal preocupación no era el estudio. De niño lo era el futbolín. De ‘mayor’ (adolescente), las chicas”.

¿PREDILECCIÓN POR LAS CIENCIAS? “En cuanto a mis materias preferi-das, he de decir que con eso me pasa una cosa curiosa: yo creía entonces que eran las Ciencias. Pero ahora no estoy seguro de ello. Tal vez quería que lo fuesen. En todo caso, estoy convencido actualmente de que lo importante es realizar una actividad intelectual, investigadora. En qué se investigue no me parece relevante”.

UNA LECCIÓN NO ACADÉMICA. “Sería absolutamente injusto dar nom-bres de profesores que me influyeran especialmente. Solo indicaré que D. Luis González me dio una lección (no académica) que medio siglo después no he olvidado”.

AMIGOS QUE NUNCA SE PIERDEN. “Conservo amigos de esos años. Sucede que no los veo con la frecuencia que quisiera. Afortunadamente los amigos de la infancia y de la adolescencia no se pierden nunca. Por mucho que haga que no nos vemos, en cuanto nos encontramos ‘reconec-tamos’ a los pocos minutos. Es algo en lo que he reparado hace tiempo y que me maravilla cada vez que sucede.”

UN PUNTO A SU FAVOR. “Creo que el Colegio no influyó demasiado en mi vocación (y eso es un punto a su favor). De hecho, como indiqué, yo creo ahora que no tenía clara mi vocación. En cuanto a mi trayectoria profesional… no sé que decir. Afortunadamente, nunca me he sentido profesional de nada”.

RELACIÓN VIVA. “Mi relación con el Colegio sigue viva. Soy miembro de la Asociación de Antiguos Alumnos y asisto a sus actos, aunque mucho menos de lo que quisiera”.

MEDIOS Y FINES. “Tengo la impresión de que el Colegio ha actuado acertadamente en su evolución. Uno de los peligros de la innovación es considerar que los medios son fines. Por ejemplo, suele creerse que leer, saber idiomas o manejar bien un ordenador son un bien en sí mismos. Y no es así. Esas cosas son interesantes en cuanto nos ayudan a conseguir fines. Leer sirve (siempre que meditemos sobre lo leído) para que no nos engañen y los idiomas y los ordenadores amplían nuestro horizonte vital. Creo que eso lo tiene claro la Dirección actual del Colegio”.

REFLEXIONAR ANTES DE ACTUAR. “Creo que las buenas instituciones se diferencian de las que no lo son en que sus actuaciones son la consecuencia de una reflexión profunda, hecha antes de actuar. Esto es, que no se lanzan a las modas vigentes en cada tiempo. Que no les preocupa ser, o parecer, modernos. En cuanto a lo que debe aportar una institución dedicada a los estudiantes del siglo XXI, creo que exac-tamente lo mismo que en el siglo XX o en el XIX, etc. Debe suministrarle una formación que le permita ser felices”.

“Uno de los peligros de la innovación es considerar que los medios son fines. Por ejemplo, suele creerse que leer, saber idiomas o manejar bien un ordenador son un bien en sí mismos. Y no es así. Creo que eso lo tiene claro la Dirección actual del Colegio”

“Las buenas instituciones se diferencian de las que no lo son en que sus actuaciones son la consecuencia de una reflexión profunda, hecha antes de actuar. Esto es, que no se lanzan a las modas vigentes en cada tiempo”

78

El nombre de José María Luzón Nogué lo dice todo. No necesita presentaciones. Catedrático de Arqueología en la Universidad Complutense de Madrid, ha sido Director del Museo Arqueológico Nacional y del Museo del Prado. Sus recuerdos del Colegio están vinculados a nombres propios como los de D. Luis González, D. José Rey y D. Luis Rey Guerrero, “personas extraordinarias que he ido valorando más y más con el paso del tiempo y a las que, cincuenta años después, todavía estoy oyendo hablar”, comenta. Asimismo, destaca que en un ambiente de mucha opresión educativa, el San Francisco de Paula era un colegio que nunca adoctrinaba, se limitaba a enseñar, un colegio laico en una oferta de enseñanza dominada por las órdenes religiosas. Opina que aunque el Colegio hoy es otro, “mantiene sus genes” y pide a quienes hoy llevan sus riendas que “continúen”, porque el San Francisco de Paula “hace falta” y “ojalá hubiera más colegios como este para hacer de la sociedad española una sociedad moderna, tolerante y dinámica”.

POR QUÉ EL SAN FRANCISCO. “Un niño de doce años se da cuenta de las conversaciones de los padres que afectan a las soluciones que están buscando para su formación. Eran años en los que la oferta de enseñanza daba pocas opciones fuera de los colegios de órdenes religiosas. Mi padre había sido profesor del Instituto Escuela en Madrid antes de la guerra y buscaba otra cosa para mi hermano y para mí. Fi-nalmente, un Catedrático del Instituto de Enseñanza Media de Huelva, a quien conocía de sus años en la Facultad, le

habló del Colegio de San Francisco de Paula. Yo estaba a su lado oyéndo-les la conversación y años después he sabido valorar la importancia que tuvo para mí. Estuve hasta terminar 6º curso de Bachillerato. El Preuni-versitario de Letras no se hizo aquel curso en San Francisco”.

PERSONAS EXTRAORDINARIAS. “No me consideré nunca ni un alumno de la primera fila, ni mal estudiante. Trabajé siempre con comodidad y muy a gusto. Mis recuerdos están vinculados a personas extraordinarias que he ido valorando más y más con el paso del tiempo: D. Luis Gonzá-lez, D. José Rey y D. Luis Rey Guerrero... Todavía les estoy oyendo hablar ¡y ya han pasado más de cincuenta años! (…) Y que conste que he citado a algunos, pero fueron muchos más”. AIRE LIBRE. “Era un Colegio laico. Un Colegio en el que no se nos estaba

n José María Luzón Nogué es Catedrático de Arqueología en la Universidad Complutense de Madrid. También es Académico Numera-rio de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando desde el año 2000.

n Fue Director del Museo Arqueológico Nacional de Madrid a comienzos de los 90, y posteriormente Director del Museo del Prado. También fue Subsecretario General de Bellas Artes en 1992 y puso en marcha la Escuela Española de Historia y Arqueología en Atenas, aunque dicha institución nunca llegó a abrirse y actualmente está pendiente de su apertura.

n Doctorado en Arqueología por la Univer-sidad de Sevilla, es experto en navegación en el Egeo y Mediterráneo, ciudades hispa-norromanas, coleccionismo y anticuarismo, escultura clásica, vaciados en yeso y en la arqueología española en general. Es nieto de José Nogué Massó, pintor de renombre a principios del siglo XX.

n Llevó a cabo las excavaciones de Itálica, es autor de numerosas monografías y artícu-los y ha dirigido varias Tesis Doctorales.

José María Luzón NoguéCatedrático de Arqueología en la Universidad Complutense de Madrid

“Ojalá hubiera más colegios como este para hacer de la sociedad española una sociedad moderna, tolerante y dinámica”

“Pertenezco a la Asociación de

Antiguos alumnos y los actuales responsables

saben hasta qué punto lo llevo muy dentro

de mí”


79

adoctrinando, sino enseñando. En una España que vivía momentos de mucha opresión educativa, en el Colegio se respiraba aire libre”.

PAUTAS DE CONDUCTA. “No puedo resumir qué fue lo que aprendí en el Colegio. No fue la enseñanza de nada en concreto, sino las pautas de con-ducta que inevitablemente se trasmiten a esa edad de manera inconsciente, tanto para el profesor como para el alumno que las recibe”.

COMENTARIOS SOBRE TEMAS PROHIBIDOS. “Por supuesto que sí, que percibí la convivencia de ideas diferentes. Y, además, lo comentábamos entre nosotros. Al menos los que teníamos más confianza para hablar de temas prohibidos. Por ejemplo de la situación política por la que pasaba España. Tenía yo trece años cuando un compañero con el que he manteni-do estrechos lazos de amistad toda la vida y parecía estar mejor informado me comentaba ‘dice mi padre que Franco no dura ya ni dos años’, pero se equivocó”.

ONCE PREMIOS EXTRAORDINARIOS EN SU PROMOCIÓN. “Sí, conservo amigos del Colegio y es uno de mis patrimonios personales. No quiero olvidar a ninguno. Pero han sido varios los que han tenido una trayectoria destacada. Cuando terminé la Licenciatura y obtuve Premio Extraordinario, fui a decírselo a D. José Rey. Llevaba una lista y de mi curso y, en diferen-tes carreras, habíamos terminado con Premio Extraordinario once, de un total de unos treinta o cuarenta”.

LO TENÍA CLARO. “El Colegio me ayudó, pero mi trayectoria profesional se vio determinada por circunstancias exteriores al propio Colegio. El mismo compañero que cité antes me decía: ‘Tenemos que ser o diplomáticos o Ca-tedráticos de Universidad’. Él fue lo primero y yo lo segundo. Lo teníamos claro”.

LAS VARILLAS. “De anécdotas, recuerdo alguna barbaridad en los exámenes. Quizás entra también dentro de lo anecdótico aquello que llamaban las varillas”.

MUY DENTRO. “He mantenido con el Colegio la vinculación lo más que he podido, viviendo fuera de Se-villa. Pertenezco a la Asociación de Antiguos Alumnos y los actuales responsables saben hasta qué punto lo llevo muy dentro de mí”.

LOS MISMOS GENES. “El Colegio es otro, pero los genes son lo que son y el San Francisco mantiene su personalidad y su línea”.

NI MEJOR NI PEOR. “Es un error creer que nosotros aprendíamos más y mejor o al revés. Lo más impor-tante es que ahora se valora la enseñanza de los idiomas. Yo tuve la suerte de tener otros idiomas por razones externas al Colegio, pero ahora son una parte esencial de la educación. Siempre lo he creído así”.

UN COLEGIO QUE HACE FALTA. “¿Mi recomendación? Que continúen. El Colegio de San Francisco de Paula hace falta y ojalá hubiera mas colegios como este para hacer de la sociedad española una sociedad moderna, tolerante y dinámica”.

IDIOMAS Y CONEXIÓN INTERNACIONAL. “Es importante que la formación no se limite al estrecho marco de lo regional o de lo nacional. Los idiomas y la conexión cultural con otros países. En fin, lo que se está haciendo en el Colegio”.

“El Colegio es otro, pero los genes son lo que son y el San Francisco mantiene su personalidad y su línea”

“Es importante que la formación no se limite al estrecho marco de lo regional o de lo nacional. Los idiomas y la conexión cultural con otros países. En fin, lo que se está haciendo en el Colegio”

80

Dirigente histórico socialista, médico de carrera y Doctor en Ginecología, Luis Yánez-Barnuevo es hoy diputado por el Grupo Socialista en el Parlamento Europeo. Se explica su ingreso en el Colegio por la coincidencia ideológica de su padre y los entonces Directores del Colegio, D. José y D. Luis Rey Guerrero, aunque subraya que en el centro estudiaban y convivían a gusto hijos de familias progresistas y conservadoras. Opina en este sentido que en los años de la dictadura franquista el Colegio era un “oasis de libertad y profesionalidad” y cuenta como anécdota la respuesta de la Dirección cuando sus compañeros convocaron una manifestación por la escasez y poca calidad de la comida. Lejos de responder de forma represiva, los Directores enseñaron a los representantes de los alumnos los libros de cuentas y les invitaron a acompañar todos los días al cocinero al cercano mercado de la Encarnación para hacer la compra de los alimentos. Precisamente al buen hacer de las generaciones de los Rey que se han hecho cargo del Colegio y a la calidad de la enseñanza impartida, atribuye los 125 años de Historia del centro, y sobre esta larga trayectoria apunta: “No creo que exista otro caso de una institución educativa que haya permanecido tanto tiempo, no solo en Sevilla sino en toda España”.

COINCIDENCIA IDEOLÓGICA. “Ingresé como alumno inter-no en octubre de 1953. No sé por qué mis padres me ma-tricularon en el San Francisco de Paula, pero poco a poco y al cabo de los años he ido reconstruyendo la amistad que unía a mi padre con los dueños y Directores del centro, los hermanos D. José y D. Luis Rey Guerrero y su coinciden-

cia ideológica, republicana, laica, contra la dictadura franquista, características tan excepcionales en la Sevilla -y la España- de los primeros años cincuen-ta, que es probable que esa fuera la causa de que los cinco hijos varones de mis padres fueron alumnos del Colegio. En él estuve seis años interno”.

AGRIDULCE. “Guardo un recuerdo agridulce. Duro porque no era fácil la vida -para nadie- de interno, sin calefacción, con comida pobre y racionada, además de la disciplina de la época. Recuerdos agradables de buenos amigos y magníficos profesores (como muestra basta un botón: D. Luis González, profesor de literatura). La historia, la geografia y la literatura fueron mis materias preferidas. Yo fui un estudiante mediano:

n Licenciado en Medicina y Cirugía en 1967, se doctoró en Ginecología en 1970. Fue adjunto en Sevilla en 1971 y jefe de la sección de ginecología en Málaga en 1974.

n Durante la dictadura franquista, ingresó en las filas del PSOE. Fue Secretario de relaciones internacionales de la Comisión Ejecutiva de 1975 a 1979, Presidente de la PSOE de Andalucía de 1980 a 1985 y miembro del Comité Federal desde 1980.

n En las elecciones generales de 1977 fue elegido Diputado al Congreso por vez primera, repitiendo escaño en las sucesi-vas legislaturas hasta el 2000. Durante los gobiernos de Felipe González fue Secretario de Estado de Cooperación Internacional y para Iberoamérica de 1985 a 1991. Fue elegido concejal del Ayuntamiento de Sevilla en las elecciones municipales de 1991, actuando como portavoz del grupo municipal socialista.

n De 1999 a 2004 fue miembro de las Asambleas parlamentarias del Consejo de Europa y de la Unión Europea Occidental. En 2004 y 2009, fue elegido eurodiputado por el PSOE. Es Presidente de la Confe-rencia de Presidentes de Delegación y de la Delegación para las Relaciones con los Países del Mercosur.

Luis Yáñez-Barnuevo García Médico-Ginecólogo, Diputado en el Parlamento Europeo

“No creo que exista otro caso de una institución educativa que haya permanecido tanto tiempo, no solo en Sevilla sino en toda España”

“En unos años grises, duros, represivos y dogmáticos el San

Francisco de Paula era un ‘oasis de libertad’ y

profesionalidad”


81

siempre aprobé los cursos en junio, pero saqué pocos Notables o Sobre-salientes”.

EXIGENCIA Y PRESTIGIO. “Al Colegio lo definía su alto nivel de exigencia académica, y el prestigio de que gozaba en la ciudad. En unos años grises, duros, represivos y dogmáticos el San Francisco de Paula era además un ‘oasis de libertad’ y profesionalidad”.

CONVIVENCIA DE DIFERENTES IDEAS. “Si bien he acentuado sus rasgos laicos y progresistas, ello no era óbice para que allí estudiaran y convivie-ran a gusto también hijos de familias muy católicas y conservadoras”.

AUCTORITAS, HUMANISMO Y RIGOR. “He citado a D. Luis González no sólo por su calidad académica sino por su auctoritas. También me influye-ron el humanismo de D. José Rey Guerrero y el rigor en la enseñanza de D. Luis Rey Guerrero”.

AMIGOS. “En general no soy muy amigo de cultivar la nostalgia, pero sí conservo amigos de entonces como Juan Salas Tornero, Federico Seras Chopart, Domingo Martínez Obradó y, aunque últimamente los veo menos, guardo un especial cariño por Jesús Loscertales, Alfonso Palma y Carlos Bedoya”.

CARRERA DE MEDICINA. “En la elección de la carrera de Medicina me influyó sobre todo mi padre, gran médico de familia o de cabecera, como se decía entonces. Pero es probable que en mi opción por la políti-ca influyera indirectamente el ambiente de servicio público, de superioridad de los principios democráticos y de la libertad que viví en el Colegio”.

RESPUESTA DIALOGANTE. “Conté esta anécdota no hace mucho en MENDRUGO: en 1955, aún en la épo-ca más cruel y dura de la dictadura franquista, un grupo de alumnos internos provocamos por sorpresa un boicot al comedor para quejarnos por la, en nuestra opinión, escasa calidad y abundancia de la comida. Nos manifestamos en el patio y la reacción de la Dirección no fue represiva sino dialogante: llamó a una delegación de los manifestantes, les enseñó los libros de cuentas y les invitó a acompañar todos los días al cocinero al cercano mercado de la Encarnación para hacer la compra de los alimentos. Mejoró la comida y ahí quedó la cosa. En los 50 les aseguro que eso no hubiera ocurrido nunca en cualquier otra institución académica”.

LAZOS VIVOS. “Siempre he mantenido relación con el Colegio: mientras vivieron los Rey Guerrero, en toda la época de D. Luis Rey Romero, lamentablemente desaparecido, y la que lleva rigiendo los destinos del colegio D. Luis Rey Goñi. Soy miembro de la Asociación de Antiguos Alumnos y he participado en alguna de las actividades de la misma. Mi hijo mayor, escolarizado en Madrid, cursó un curso en el San Francisco de Paula y hoy es alumno un sobrino carnal, Carlos Yáñez-Barnuevo”.

DINAMISMO. “No tengo una opinión clara de cómo el Colegio se ha ido adaptando y aprovechando las ventajas que ofrecen las tecnologías de la comunicación para mejorar las técnicas pedagógicas, pero co-nociendo el dinamismo de Luis Rey Goñi seguro que están al día”.

UN CASO ÚNICO. “La institución se ha mantenido tanto tiempo (no creo que exista otro caso, no solo en Sevilla sino en toda España) por su calidad, pero probablemente también por la saga familiar que ha dirigido sus destinos durante 125 años. Mi pregunta es: ¿continuarán los ‘luises reyes’ al frente del colegio dentro de cuarenta o cincuenta años?”.

CIUDADANOS RESPONSABLES Y PARTICIPATIVOS. “Sobre todo, una institución educativa debe formar ciudadanos responsables, solidarios, participativos, que no sólo piensen en sí mismos sino en los demás, porque del entorno social dependemos todos”.

“La institución se ha mantenido tanto tiempo por su calidad, pero probablemente también por la saga familiar que ha dirigido sus destinos durante 125 años”

82

Catedrático de la Universidad Complutense, Director de la revista científica “Cuadernos de Historia del Derecho” y autor de veinte libros y un centenar de artículos sobre la Inquisición Española, Juan Antonio Alejandro García asegura que su paso por el Colegio, como alumno interno, le dejó un recuerdo imborrable, pues allí aprendió a ser consecuente y responsable, a vivir en un sistema democrático donde se practicaba la libertad pero donde las conductas improcedentes se sancionaban sin contemplaciones. Considera que esa combinación entre libertad y disciplina era el principal rasgo de identidad del Colegio, además de una experiencia “inusual, arriesgada y sorprendente” para la época. Asimismo, destaca la austeridad espartana en que se educaba a los alumnos, de la cual daban ejemplo en primer lugar los propios Directores del Colegio.

UN SISTEMA DE AUTOCONTROL RESPONSABLE. “Ingresé en octubre de 1954, en 1º de Bachillerato. Estuve hasta junio de 1960, cuando concluí el Bachillerato Superior. No pude cursar en el Colegio el Preuniversitario porque éramos muy pocos los alumnos de Letras y tuve que prepararme en una academia. Mi ingreso en el Colegio se debió a la reco-mendación de quien entonces era profesor de latín del Cole-gio, D. Anuario Mendoza, conocido de mi familia. Tengo un recuerdo imborrable. Fui alumno interno, y por primera vez supe lo que significaba vivir alejado de la familia, e impro-visar un sistema de autocontrol responsable (del trabajo, del tiempo, del dinero, de las compañías, de las ocupaciones). Fui un buen estudiante. Obtuve con gran frecuencia men-ciones de honor en las calificaciones mensuales, y todos los cursos apareció mi nombre en el Cuadro de honor que se exponía en el Tablón de Anuncios del Colegio y se publica-ba en periódicos locales. Obtuve Matrícula de honor en la Reválida Elemental, de 4º Curso, y en la Superior, de 6º. Mis materias preferidas eran literatura, latín, historia, geografía, francés, dibujo y matemáticas”.

UNA EXPERIENCIA ARRIESGADA EN LA ÉPOCA. “He considerado siempre el Colegio como prototipo de una experiencia inusual, arriesgada en aquella época, y sorpren-dente, la que combinaba perfectamente los conceptos de libertad y de disciplina. A estos principios habría de unirse el de la austeridad, casi espartana, en que se nos educó: con medios limitados (falta de grandes espacios,

n Licenciado en Derecho por la Universi-dad de Sevilla en 1966, se incorpora desde ese mismo año como profesor ayudante en dicha Universidad hasta 1971.

n En 1969 obtiene el Doctorado y realiza un curso postdoctoral en Roma, tras el cual, en 1971, es Profesor Titular interino en la Uni-versidad Complutense de Madrid. En1975 pasa a ser Profesor Titular numerario de esta Universidad.

n Durante el curso 1978-1979 es Catedráti-co de la Universidad de Valencia y, a partir de entonces hasta la actualidad, Catedrático de la Universidad Complutense.

n Además, ha sido vicedecano de la Fa-cultad de Derecho de la UCM entre 1984 y 1987; Director del Instituto de Estudios Bursátiles (IEB) entre 1996 y 2003; Director del Departamento de Historia del Derecho de la Facultad de Derecho UCM entre1991 y 1995, y nuevamente, desde 2008 hasta la actualidad, Director de la revista científica “Cuadernos de Historia del Derecho”.

n Durante su trayectoria profesional ha sido profesor invitado en otras universidades nacionales y extranjeras, especialmente en la de Messina (Italia) desde 1999 hasta 2005 y Director de diversos proyectos de inves-tigación interuniversitarios financiados por los Ministerios de Educación y de Ciencia e Innovación sobre temas histórico-jurídicos.

n Es autor de 20 libros y un centenar de artículos sobre la Inquisición española y, especialmente, la del Tribunal de Sevilla en el siglo XVIII; el sistema de juicios por Ju-rados; el régimen franquista desde una pers-pectiva jurídica, y distintos tipos de delitos y penas desde el punto de vista histórico.

Juan Antonio Alejandre GarcíaCatedrático de Historia del Derecho de la Universidad Complutense

“En el Colegio aprendí a vivir en un sistema democrático donde se practicaba la libertad pero donde las conductas improcedentes se sancionaban sin contemplaciones”


83

de lujos, de campos de deporte; habitaciones para los alumnos internos con escasas comodidades) aprendimos que era posible vivir, trabajar, disfrutar, esforzarse en suplir las deficiencias, sin que éstas repercutieran negativa-mente en el resultado del esfuerzo. El ejemplo, inolvidable, de esa auste-ridad lo daban los propios Directores del Colegio, que cada día llegaban de su lejano domicilio en Nervión en sus respectivas bicicletas, cuando ya algunos profesores lo hacían en motocicletas o en un modesto automóvil”.

APRENDIZAJES. “Aprendí que el esfuerzo era imprescindible para obtener el éxito. Aprendí a optar con responsabilidad en ámbitos muy diversos. Aprendí a vivir en un sistema democrático (ejemplo: la elección por vota-ción de las películas a las que los internos íbamos los sábados), donde se practicaba la libertad (quien prefería quedarse a estudiar después de cenar cada día o un sábado podía hacerlo, sin cortapisas; iba a misa quien quería, sin imposiciones), pero también que las conductas equivocadas o impro-cedentes se sancionaban sin contemplaciones. En suma, aprendí a ser consecuente y responsable”.

PROFESORES. “Sin duda, los hermanos D. José y D. Luis Rey fueron profesores que me influyeron; también, D. Luis González; la profesora de francés, Mme. Lahore; el profesor de latín, D. Anuario Mendoza, y el profesor de matemáticas, cuyo nombre lamento no recordar. Académica-mente creo que mis profesores de asignaturas de Humanidades inclinaron mi vocación por la rama de Letras. Lamenté no haber podido cursar el Preuniversitario en el Colegio. En este curso decidí mi vocación, pero ésta ya estaba condicionada por los profesores de aquellas asignaturas que más me atraían, que eran las de Letras, si bien mis conocimientos de matemáti-cas, recibidos en el Colegio, no los he olvidado”.

GRATO RECUERDO. “Conservo nítidamente el recuerdo grato de quienes fueron mis mejores amigos entonces, con muchos de los cuales me gus-taría volver a conectar. Pero desde 1971 no vivo en Sevilla, y por eso he perdido el contacto con ellos. En Madrid he coincidido en varias ocasiones con Juan Antonio Yáñez y con José María Luzón. Mantengo la relación con algunos otros sevillanos, como Fernando Castellano”.

CARPETA DE RECUERDOS. “En seis años se acumulan las anécdotas, pero para mí lo más reseñable es que conservo en una carpeta todos los boletines mensuales con mis calificaciones de todos los cursos, las facturas pagadas por mi familia, desde las primeras del año 1954 (3.250 pesetas al trimestre por la pensión como interno y las enseñanzas), los justificantes de la asignación semanal que, por encargo de las respec-tivas familias, se nos entregaba a los internos para nuestros gastos (6 pesetas, que era la asignación más habitual), los cargos por la entrega de material escolar (1’50 pesetas cada cuaderno) y los telegramas diri-gidos por D. Luis Rey notificándome que había obtenido Matrícula de honor en las Reválidas y dándome la enhorabuena. Todo este material es hoy para mí un pequeño tesoro de gran valor sentimental”.

VÍNCULOS. “Soy socio de la Asociación de Antiguos Alumnos desde hace muchos años. El hecho de vivir en Madrid me ha impedido asistir a los actos convocados por la Asociación o la Dirección del Colegio. En 1994, sin embargo, presenté en el Colegio un libro mío sobre la Inquisición sevillana”.

DIRECCIÓN ADECUADA. “Creo que el Colegio sigue la dirección adecuada y supongo que conservará las virtudes que siempre ha tenido. Espero que el espíritu fundacional del Colegio, que mantuvieron firme-mente los hermanos Rey Guerrero, se mantenga. Esa fórmula será la mejor garantía del éxito futuro”.

“He considerado siempre el Colegio como prototipo de una experiencia inusual, arriesgada en aquella época, y sorprendente, la que combinaba perfectamente los conceptos de libertad y de disciplina”

“Aprendimos que era posible vivir, trabajar, disfrutar, esforzarse en suplir las deficiencias, sin que éstas repercutieran negativamente en el resultado del esfuerzo”

84

Abogado, Alcalde de Sevilla entre 1983 y 1991, Manuel del Valle ha sido alumno, hijo de alumno y padre de alumnos del Colegio y asegura que, después de más de 50 años, sus amigos siguen siendo básicamente sus compañeros de entonces. Resume la personalidad del Colegio como la de una institución liberal, dentro de la órbita de lo que fue la Institución Libre de Enseñanza, en la que al alumno se le facilitaban los instrumentos necesarios para su desarrollo personal e intelectual, y señala que los valores que le quedaron del paso por sus aulas fueron los de la libertad de pensamiento, la curiosidad por conocer, y el rigor y la disciplina en todos los ámbitos de la vida.

SELLO PERSONAL E INTELECTUAL. “Debió ser en el año1954, para entrar en el curso 4º de lo que entonces se denominaba Bachillerato, y la decisión de mi ingreso se debió al hecho de que mi padre era Antiguo Alumno del Colegio, y había sido compañero de curso de D. Luis Rey que, por aquel entonces, era co-Director del Colegio conjuntamente con su hermano D. José Rey. En cuanto a los años que permanecí en el Colegio es lo de menos, lo importante es el sello que dejó en mi formación, tanto en lo personal como en el aspecto intelectual”.

RECUERDOS CONTRADIC-TORIOS. “Los recuerdos son siempre contradictorios con el paso del tiempo. Los recuerdos de aque-llos años eran de dureza en la enseñanza, y hoy se agradece la dureza; de disciplina inflexible, y hoy se añora aquella disciplina. Yo era un estudiante tipo medio; con facilidad para las Letras, y completamen-te negado para las Cien-cias, por lo que disfrutaba con D. José Rey y con D. Manuel González. No tanto con D. Julio Mínguez y D. Luis Rey”.

n Licenciado en Derecho por la Universi-dad de Sevilla, ejerce como abogado desde 1968.

n En 1970 ingresa en el Partido Socialis-ta Obrero Español (PSOE), y en la Unión General de Trabajadores (UGT) y funda el Despacho Laboralista “Capitán Vigueras” (Sevilla).

n Entre 1970 y 1978 ocupa diversas res-ponsabilidades en la Dirección del PSOE y de la UGT en la clandestinidad.

n En 1978/79 es Director del Gabinete de Presidencia de la Junta de Andalucía, etapa Pre-Autonómica, siendo Presidente de la misma el Excmo. Sr. D. Plácido Fernández Viagas. Entre 1979 y 1982 es Senador por la provincia de Sevilla y Presidente de la Excma. Diputación de Sevilla (en este último caso hasta 1983).

n Desde 1983 hasta 1991 es Alcalde de la ciudad de Sevilla, siendo nombrado Presi-dente del PSOE en la provincia de Sevilla desde 1985 hasta el final de su mandato

n En 1993 se reintegra al ejercicio profe-sional de la Abogacía como titular de BU-FETE NERVIÓN, donde trabaja junto a un grupo de profesionales del Derecho, todos ellos antiguos alumnos de San Francisco de Paula.

n Está en poder, entre otras, de las siguien-tes condecoraciones: Medalla de la Ciudad de Sevilla; Gran Cruz del Mérito Militar del Ejército Español; Caballero de la Orden del Imperio Británico; Oficial de la Orden de las Artes y las Letras de Francia y la Medalla del Consejo de Europa.

Manuel del Valle Arévalo Abogado y Alcalde de Sevilla entre 1983 y 1991

“Después de más de 50 años, básicamente mis amigos siguen siendo mis compañeros del Colegio”

“El entorno de libertad que se

respiraba dentro del Colegio hacía

que muchos no nos percatáramos en

aquellos momentos que aquello era

una isla que nada tenía que ver con el entorno social que

nos rodeaba”


85

PERSONALIDAD. “Era un colegio liberal, dentro de la órbita de lo que fue la Institución Libre de Enseñanza, en la que al alumno se le facilitaban los instrumentos necesarios para su desarrollo personal e intelectual”.

VALORES. “Los valores que me quedaron de mi paso por el Colegio fueron los de la libertad de pensamiento, la curiosidad por conocer, y el rigor y la disciplina en todos los ámbitos de la vida”

UNA ISLA. “Los años de mi estancia en el San Francisco de Paula pertenecen a una de las épocas más negras de la Historia de nuestro país. Sin embargo, el entorno de libertad que se respiraba dentro del Colegio, la exquisita tolerancia que se practicaba en todos los órdenes, hacía que muchos no nos percatáramos en aquellos momentos que aquello era una isla que nada tenía que ver con el entorno social que nos rodeaba”.

OTRA FORMA DE CONVIVENCIA.“Indudablemente, el profesor que más me influyó fue D. José Rey, por hacerme comprender sutilmente que existía otro mundo, otra forma de convivencia; y también D. Manuel González, por abrir mis entendederas a la lectura, aunque fuera desordenada, de todo lo que caía en mis manos”.

AMIGOS, 50 AÑOS DESPUÉS. “Después de más de 50 años, básicamente mis amigos siguen siendo mis compañeros del Colegio. Sería una lista muy larga citarlos a todos”.

ELEGIR EL CAMINO. “Los años de estancia en el San Francisco de Paula me pusieron en la situación tener libertad de discernimiento para, en cada momento, saber elegir el mejor camino de los posi-bles”.

ANÉCDOTA. “Recuerdo la extraña costumbre que tenía D. Anuario Mendoza, profesor de filosofía, entre otras materias, de partir los cigarrillos que fumaba exactamente por la mitad, guardando cere-moniosamente una de las mitades, y fumándose la otra”.

VÍNCULOS ININTERRUMPIDOS. “Mi vinculación con el Colegio arranca de principios del siglo pasado, en que mi padre, como ya he dicho, fue también alumno de San Francisco de Paula, y compañero de curso del que después fuera co-Director del mismo, D. Luis Rey. Posteriormente, mis dos hijos tam-bién han estudiado en el Colegio, y han heredado la formación que allí se imparte. Por otro lado, y por diversas razones relacionadas con las actividades que he desarrollado a lo largo de algunos años de mi vida, he seguido muy vinculado a la trayectoria del Colegio en casi todos sus ámbitos”.

RENOVACIÓN DENTRO DEL ESPÍRITU. “Creo que el Colegio siempre ha procurado estar al día en la renovación de los sistemas educativos, pero para mí lo más importante es que esa renovación se ha venido haciendo dentro del espíritu que siempre caracterizó al San Francisco de Paula”.

ADAPTARSE A LOS TIEMPOS. “Mi recomendación es que se adapte a los tiempos, sabiendo escoger, en cada momento, aquello que mejor encaje con la Historia pasada, con objeto de que el camino siga siendo brillante en el futuro”.

LA MARCA ‘FRANCISCANA’. “El Colegio debe seguir aportando su ‘marca’; hoy se suele decir ‘este estudió en San Francisco de Paula’, y eso es una garantía, por la calidad de la enseñanza, y porque los que tienen esa ‘marca’ es señal de que han superado muchos controles de calidad. Las mejores instituciones seguirán siendo aquellas que aúnen disciplina y libertad, firmeza y tolerancia, conoci-mientos y ansia de saber. Pero todo ello no puede conseguirlo el colegio solo; necesita de la impres-cindible colaboración de los padres”.

“Los valores que me quedaron de mi paso por el Colegio fueron los de la libertad de pensamiento, la curiosidad por conocer, y el rigor y la disciplina en todos los ámbitos de la vida”

86

D. Luis González decía de él que era un perfecto ácrata, por los intereses tan dispersos que tenía. Sin embargo, lo que llama la atención en el currículo de Juan Miguel Salas Tornero es su capacidad de trabajo, que le permite asumir y compaginar numerosas responsabilidades. Así, resulta casi inagotable la enumeración de puestos de responsabilidad que ocupa en organizaciones empresariales y ciudadanas. Ahora acaba de sumar una nueva, precisamente como Presidente de la Asociación de Antiguos Alumnos del Colegio, donde se ha propuesto aumentar e intensificar los vínculos entre los antiguos compañeros “franciscanos”. Asegura que el Colegio le inculcó la constancia, el amor al esfuerzo y al trabajo, y conocer que el éxito supone renunciar a otras muchas cosas. Además, aprendió que “las ideas están hechas para acercar a las personas y no para alejarlas”.

CON LOS HIJOS DE LOS AMIGOS DE SU PADRE. “Ingresé en 1954 y estuve hasta 1960. Mi padre había estudiado en el Colegio San Ramón y el quería que fuera a otro buen colegio de Sevilla porque el suyo había perdido parte de su personalidad. Él pensaba que el mejor sitio para mí era aquel en el que estuvieran los hijos de sus amigos, como D. Luis Yáñez o D. Jesús Loscertales”.

LIBERTAD, CURIOSIDAD Y TRABAJO. “Su gran virtud fue que nos dejó a todos pensar libremente. Eso hoy puede

parecer normal pero enton-ces era imposible con un ‘partido único’ y una iglesia única. En ese ambiente criar con sutileza a niños para que puedan pensar libre-mente, y que acepten que los demás piensen distinto a ti, era algo insólito. También despertó en todos nosotros la curiosidad por saber. Nos interesaba, y nos sigue interesando, todo lo que pasa, lo que se ve y no se ve. Asimismo, aprendimos que todo se consigue con esfuerzo y trabajo. D. Severo Ochoa me dijo una vez que hay muchos Premios Nobel que no lo han conseguido por su inteligencia, sino por su esfuerzo y trabajo”.

UN SOPLO DE LIBERTAD. “En mi época el ambiente era magnífico y había

n Licenciado en Derecho por la Universidad de Sevilla y abogado del Colegio de Aboga-dos de Sevila, donde ejerce actualmente.

n Ha sido Profesor Auxiliar de la Cátedra de Derecho Romano de la Facultad de Derecho en Sevilla, Teniente de Infantería de Marina, Presidente de la Federación de Empresarios del Metal de Sevilla y Presidente de la Con-federación de Empresarios de Sevilla.

n Es Vicepresidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía, Miembro de la Junta Directiva de CEOE, Presidente de la Feria de Muestras Iberoamericana de Sevilla, Presidente de la Asociación de Ferias Comerciales de España, Presidente del Consorcio de Cámaras de Comercio e Indus-tria y Navegación de Andalucía, Presidente de la Comisión de Comercio Exterior del Consejo Superior de Cámaras de Comercio de España, Vicepresidente de la Asamblea de Cámaras de Comercio Iberoamericana y Filipina, Vocal del Consejo Económico y Social Nacional, Vicepresidente del Consejo Económico y Social de Andalucía, Coordi-nador General de la Escuela Andaluza de Economía de la Confederación de Empre-sarios de Andalucía, Presidente de Tribuna Económica de Andalucía y Presidente de la Fundación Nao Victoria.

n Está en posesión de la Medalla de Oro de la Cámara de Comercio e Industria y Navegación de Sevilla y de la del Consejo Superior de Cámaras de Comercio de Espa-ña, entre otras distinciones.

Juan Miguel Salas TorneroAbogado, Vicepresidente de la CEA y Presidente del Consorcio de Cámaras de Comercio de Andalucía

“En el Colegio aprendí que las ideas están hechas para acercar a las personas y no para alejarlas”

“En el ambiente de la época criar con

sutileza a niños para que puedan

pensar libremente, y que acepten que los demás piensen

distinto a ti, era algo insólito”


87

una cosa que nos distinguía; nosotros éramos un soplo de libertad, de conciencia, aunque no éramos una institución agnóstica en absoluto. En el Colegio se estudiaba la religión como las matemáticas, con clases excep-cionales, lo que no se imponía era la práctica de la religión. El Colegio, en aquel entonces, cumplía con la ley, que era enseñar religión católica, pero a nadie se le imponía que la practicara. Por ejemplo, recuerdo una magis-tral clase de D. José Rey, que decía que había una gran diferencia entre llegar a Dios amándolo o temiéndolo; y que él creía que lo importante era lo primero. Soy cristiano católico practicante y mi formación religiosa se la debo al Colegio. En definitiva, esa idea de tolerancia, de poder ser amigo de quien quisieras, hoy no tiene valor, pero entonces tenía una importan-cia insólita. Aprendí que las ideas están hechas para acercar a las personas y no para alejarlas”.

PROFESORES EXCEPCIONALES. “Tuve magníficos profesores, excepciona-les. Si tengo que señalar a alguno destaco a D. Luis Rey Guerrero, a D. José Rey Guerrero y a D. Luis González. Tengo una manía, que es llevar los za-patos muy limpios, y eso me lo inculcó D. José Rey, al que le brillaban los zapatos como un espejo. D. Luis Rey era un portento, capaz de enseñarle química a un analfabeto. Y D. Luis González era una persona excepcionalmente dotada para la enseñanza de las que he conocido pocas”.

COMPAÑEROS. “Sí, conservo amigos de mi clase, y nos da mucha alegría vernos aunque ha fallecido parte importante del curso. Anteriores a mi curso, con una trayectoria profesional destacada, podría citar a D. José Luis Manzanares Japón, Presidente de Ayesa, o a D. José Luis de Justo, Catedrático de Estructura de Materiales en la Escuela de Ingenieros de Caminos. De mi curso, puedo nombrar a catedráticos como D. Domingo Martínez Obradó, D. Jesús Loscertales, D. José Carlos Bedolla y D. Marcelino Baras, y a políticos como D. Luis Yáñez-Barnuevo”.

QUÉ ES ESO DEL DERECHO. “Creo que la confrontación que había entre la sociedad en la que vivíamos y la que intuíamos despertó una enorme curiosidad en mí, que también se fomentaba en el Colegio, y eso influyó en la salida profesional de mucha gente. Además, en nuestra etapa en Bachillerato se tocaban todos los temas menos Derecho, Economía y Agricultura, y me pregunté: ¿Qué es eso del Derecho?”.

ANÉCDOTAS. “Tengo tantas... Por ejemplo cuando acabamos el PREU lo celebramos en la Bolera del Pis-cinas Sevilla. Cuando vi a todos los compañeros juntos pensé, sin incluirme: ‘Os veo viejos’. Otra simpá-tica ocurrió cuando nos llevaron a ver la Base Aérea de Morón. Nos enseñaron los aviones, nos metimos dentro y algún que otro compañero rompió ciertas herramientas que prefiero no nombrar”.

MUCHA VINCULACIÓN. “Siempre he tenido mucha vinculación con el Colegio y relación con D. Luis Rey Romero, que por cierto nunca me dejó que le invitara a nada, ni a una cerveza, siempre pagaba él, y ahora con D. Luis Rey Goñi. Además, actualmente presido la Asociación de Antiguos Alumnos y tengo un nieto que acaba de entrar”.

IDIOMAS Y TECNOLOGÍA. “Creo que lo están haciendo muy bien con los idiomas y las tecnologías, que son sus dos grandes aportaciones. El resto sigue igual: sacrificio, esfuerzo y actitud por aprender. Sin nada de esto no sirve lo anterior”.

RECOMENDACIÓN.“Que acepten como una esponja los líquidos de la sabiduría y después la aprieten, la depuren y tomen aquello que de verdad sea interesante, pero sin dejarse llevar por la moda. Eso ha lleva-do al Colegio a la excelencia actual”.

“Recuerdo una magistral clase de D. José Rey, que decía que había una gran diferencia entre llegar a Dios amándolo o temiéndolo; y que él creía que lo importante era lo primero”

88

Considerado como una eminencia en la especialidad de Gastroenterología y Nutrición Pediátrica, este prestigioso médico sevillano cursó todos sus estudios Preuniversitarios en el Colegio, precedido por un hermano mayor que ya estaba obteniendo muy buenos resultados en el centro. Él no le fue a la zaga, y su nombre aparecía asiduamente en el Cuadro de honor. Fue el preludio de una brillante trayectoria profesional como Médico Especialista, una vocación que despertó en él su padre, Pediatra, pero que, dice, llegó a conseguir gracias, entre otras cosas, a la formación recibida en el Colegio. “En sus aulas aprendí a buscar la perfección en el trabajo, la constancia en el estudio y el deseo de superación”, explica Federico Argüelles, que tiene ya a algún nieto formándose en el Colegio, después de que sus cuyos cuatro hijos también lo hicieran y sean hoy profesionales destacados del mundo de la empresa, la medicina y la ingeniería.

UN PADRE CREYENTE QUE QUERÍA UN COLEGIO SE-GLAR. “Yo ya tenía un hermano en el centro que obte-nía muy buenos resultados y ello influyó mucho en la decisión de mis padres que tenían muy buenas referencias del centro. Mi padre era creyente, pero deseaba para sus

hijos un colegio seglar de prestigio y solvencia. Cursé en el Colegio todos mis estudios. No conocí otro colegio”.

VIVENCIAS GRATIFICANTES. “Fundamentalmente tengo buenos re-cuerdos y guardo vivencias muy positivas y gratificantes. No obstante también pasé algún mal rato. En tantos años es de esperar que así ocu-rra. Fui un estudiante destacado que aparecía asiduamente en el Cuadro de honor y en la relación del periódico del día 18 de julio de cada año, Día de San Federico por cierto. Mis materias preferidas fueron matemá-ticas, física y química, francés y geografía”.

EFICIENCIA, TRABAJO Y DISCIPLINA. “En el Colegio aprendí a buscar la perfección en el trabajo, la constancia en el estudio y el deseo de superación. (…) Creo que las palabras que mejor definen la persona-lidad del Colegio son eficiencia, espíritu de trabajo y disciplina. (…) La convivencia de ideas distintas se percibía en todo momento y esta

n Doctor en Medicina por la Universidad de Sevilla, Especialista en Pediatría-Puericultura y Aparato Digestivo.

n Profesor Titular de Pediatria de la Uni-versidad de Sevilla, Jefe de la Sección de Gastroenterología y Nutrición Pediátrica del Hospital Universitario Virgen Macarena, Miembro de la Real Academia de Medicina de Sevilla, Director de tres ediciones del Master sobre Gastroenterología y Nutrición Pediátricas de la Universidad Internacional de Andalucía y cursos de verano en la misma universidad.

n Director de más de quince Tesis Doctorales y otras tantas de Licenciatura.

n Editor de tres libros de la especialidad y un cuarto en imprenta actualmente.

n Autor de varios trabajos publicados en revistas nacionales y extranjeras. Autor de varios capítulos en libros de su especialidad.

n Distinguido con varios premios de socieda-des científicas por trabajos de experimenta-ción (AEP, SEPEAP, Fundación HEINZ KOCH, SEGHNP...).“Aunque la educación

corresponde sobre todo a los padres, el colegio debe no sólo

enseñar sino también educar inculcando

formas de actuar en la sociedad y

fomentar las buenas maneras para la

convivencia”

Federico Argüelles MartínMédico Especialista en Pediatría, Puericultura y Aparato Digestivo, Jefe de sección en el Hospital Virgen Macarena

“En el Colegio aprendí a buscar la perfección en el trabajo, la constancia en el estudio y el deseo de superación”


89

percepción de pluralidad y tolerancia marca positivamente para toda la vida. Quizás estas características del Colegio influyeron mucho en mis padres a la hora de elegirlo para mí y para mi hermano”.

NOMBRES PROPIOS. “Los profesores que más me influyeron, personal y académicamente, fueron D. José Rey Guerrero. D. Manuel Pérez Cerezal, D. Luis Rey Guerrero, D. Luis Rey Romero, D. Miguel Fernández de los Ronderos, D. Luis González, D. Juan Plata, D. Nicolás Gelo y D. Genaro Marcos, entre muchos otros”.

COMPAÑEROS MÉDICOS. “Guardo algunos amigos de aquellos años, alguno de ellos incluso trabaja o ha trabajado conmigo en el hospital. Del Colegio han salido muy buenos profesionales de la medicina”.

LA ELECCIÓN DE LA CARRERA. “En mi trayectoria profesional in-fluyó sobre todo mi padre, Médico Pediatra que desde siempre marcó mi trayectoria. Siempre quise ser médico y gracias a la formación recibida en el Colegio lo conseguí”.

ANÉCDOTAS. “Recuerdo muchas anécdotas. En la clase de geografía, D. José Rey preguntó un producto típico de la sierra de Montánchez y un alumno respondió: los montanchones. Otro día preguntó a otro alumno por sus preferencias y aficiones y éste le contestó: a mí me gusta comer y dormir. Otra muy divertida fue cuando el Profesor de francés preguntó la traducción de pas encore y el alumno respondió: pasa un cura. Entonces, el Profesor le indicó que se traducía todavía no, a lo que replicó el alumno: bueno, pero pasará”.

VÍNCULOS ACTUALES. “Pertenezco a la Asociación, pero no tengo demasiado tiempo para participar, aunque, si se me ha solicitado alguna vez, he hecho un hueco para colaborar. Mis cuatro hijos han estudiado en el Colegio y actualmente son profesionales destacados en la empresa privada, la ingeniería y la medicina. Ya tengo algún nieto

también formándose en el Colegio”.

ACTUALIZACIÓN. “Creo que el Colegio se ha adaptado muy bien a las exigencias del momento y va incorporando nuevas técnicas de enseñanza, nuevas materias conservando lo esencial de su estrategia. (…) Creo que eso es lo fundamental para el futuro: la continua puesta al día, pero sabiendo mantener los valores tradicionales para educar en la responsabilidad, el trabajo bien hecho, la sana competitividad que no es arrolladora y el deseo de superación”.

NUEVAS GENERACIONES. “Actualmente hay una juventud con valores muy positivos, con deseos de ser útiles a la sociedad, con afán de supera-ción, junto a una población desilusionada, apática y que sólo piensa en el ocio sin saber simultanearlo con la actividad productiva. Hay de todo”.

ENSEÑAR Y EDUCAR. “Aunque la educación corresponde sobre todo a los padres, un buen colegio debe no solo enseñar, sino también educar, inculcando formas de actuar en la sociedad y fomentar las buenas ma-neras para la convivencia. Ha de incluir también un buen colegio una enseñanza actualizada y de utilidad para poder ejercer con dignidad y eficacia cualquier profesión”.

“Creo que el Colegio se ha adaptado muy bien a las exigencias

del momento y va incorporando

nuevas técnicas de enseñanza, nuevas

materias, conservando lo esencial de su

estrategia”

“Por influencia de mi padre, que era Médico Pediatra, yo siempre quise ser médico y gracias a la formación recibida en el Colegio lo conseguí”

90

En el Colegio fue un alumno muy bueno, al que le gustaban todas las materias, que sacó Matrícula de honor en casi todas las asignaturas y en la Reválida de 6º. Esos prometedores inicios en los estudios se vieron confirmados luego con la Licenciatura en Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos en la E.T.S. de Ingenieros de Caminos, y con una carrera profesional que le ha llevado a ser reconocido como uno de los mayores expertos en ingeniería del terreno, autor de libros de referencia en Geotecnia y Cimientos, con un amplio currículo científico y técnico, tanto en el campo de la docencia como en proyectos complejos a los que ha prestado su valiosa colaboración. Es Profesor Emérito de la ETS de Arquitectura de la Universidad de Sevilla y desde junio de 2011 Presidente de la Real Academia Sevillana de Ciencias. Del Colegio, donde estudió seis cursos, guarda un muy buen recuerdo por el trato exquisito de los profesores y los excelentes amigos que hizo.

LA DISTANCIA NO FUE UN INCONVENIENTE. “Era un Colegio de gran prestigio y por eso nos matricularon en él a los tres hermanos, tras un incidente con las notas en la Escuela Francesa. El Colegio estaba distante de muestro do-micilio (calle Betis), lo que no les pareció, en ese momento, un inconveniente”.

TRATO EXQUISITO. “Guardo muy buen recuerdo. Era un alumno preferido de los dos Directores y el trato hacia mí fue exquisito por parte de casi todos los profesores. Tuve excelentes amigos, que han continuado siéndolo tras dejar el Colegio. (…) Me gustaban todas las materias”.

EXIGENCIA. “Exigente en el trabajo y disciplina. Creo que es el rasgo que mejor define la personalidad del Colegio”.

VALORES. “El Colegio me inculcó los valores fun-damentales, el trabajo, la ética y el compañerismo”.

NOMBRES PROPIOS. “Los profesores que más me influyeron fueron D. Luis Rey Guerrero y D. José

n Licenciado en Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos en la E.T.S. de Ingenieros de Caminos en 1963.

n Su trayectoria profesional comenzó en 1963 como ingeniero en Stump, S.A..

n Entre 1971 y 2009 es Catedrático de Universidad E.T.S. de Arquitectura de la Universidad de Sevilla y, entre 1975 y 1981, Vicerrector de Investigación.

n Desde 2009 hasta la actualidad es Profe-sor Emérito del Departamento de Mecánica de Medios Continuos de la Escuela T.S. de Arquitectura.

n Ha sido consultor en obras de ingeniería tan importantes como las del Metro de Sevilla; Tajo de San Pedro de la Alhambra de Granada; autovía Huelva-Ayamonte; au-tovía Jerez-Los Barrios; Canal Tajo-Segura; Expo de Sevilla; Líneas de alta velocidad Madrid-Barcelona y Córdoba Málaga, torres de Tenerife, etc.

n Ha sido Miembro del Comité Organizador, Científico o Presidente de Sesión de numero-sos Congresos nacionales e internacionales; fue Académico Numerario (1994) y Presi-dente de la Sección de Tecnología (1999) de la Real Academia Sevillana de Ciencias; ha sido Vocal (1992) y Presidente del Comité 6 de la Comisión Nacional de Evaluación Científica (1993) y recientemente, en junio de 2011, ha sido elegido Presidente de la Real Academia Sevillana de Ciencias.

n Destaca asimismo su amplia producción científica. Ha sido autor o coautor de 4 libros, ha publicado capítulos en otros 24; ha escrito más de 50 artículos en revistas científicas y más de 70 aportaciones a congresos. Ha dirigido 13 Tesis Doctorales y ha registrado 3 patentes.

José Luis de Justo AlpañésIngeniero de Caminos, Canales y Puertos y Catedrático Emérito de la Universidad de Sevilla

“Guardo muy buen recuerdo, el trato de los profesores era exquisito, y conservo excelentes amigos”

“Tuve excelentes amigos, que han

continuado siéndolo tras dejar el Colegio”


91

Rey Guerrero, D. Luis González, D. Manuel Pérez Cerezal, D. Anuario Mendoza y Dª Antonia Brzezicki”.

COMPAÑEROS Y AMIGOS. “Sigo siendo amigo de muchos de mis com-pañeros (José Pérez Castilla, José L. Márquez García, Ángel Martínez Re-tamero o Jaime Fernández González) aunque nos veamos poco, y cuando veo a otros nos saludamos con cariño. Con una trayectoria destacada, recuerdo a A. Santos, psiquiatra de prestigio en Nueva York, A. Alvarado y Coronado, ingenieros agronomos, o Ignacio Losada, ingeniero indus-trial. De Losada Villasante, cursos superiores. Y, por supuesto, a Manuel, Premio Príncipe de Asturias”.

LA CARRERA. “En mi caso era una vocación relacionada con el prestigio que en aquella época tenía el cuerpo de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos”.

ANÉCDOTAS. “Recuerdo el libro Flor Nueva de Romances Viejos que me regaló D. José Rey, dedicado. Y la afición de D. José Rey por los Estados Unidos de América, en los que veía el símbolo de la Democracia, cuya ausencia detectaba en España”.

NUEVAS EXPERIENCIAS. “El Colegio se ha abierto a experiencias exter-nas y he hecho una apuesta por los idiomas y las nuevas tecnologías”.

NUEVAS GENERACIONES. “Como profesor universitario, creo que en general las nuevas generaciones ahora están peor formadas en cultura y base científica, aunque naturalmente mejor en nuevas tecnologías”.

“Exigente en el trabajo y disciplina. Creo que es el rasgo que mejor define la personalidad del Colegio”

“Recuerdo la afición de D. José Rey por los Estados Unidos de América, en los que veía el símbolo de la Democracia, cuya ausencia detectaba en España”

92

Arquitecto técnico especializado en la prevención y protección contra los incendios, medalla al Mérito de Protección Civil por los Ministerios del Interior de España, Italia y Rumania, Ramón Fernández Becerra pide al Colegio que mantenga sus valores y su vocación de formar personas polifacéticas, que sean no solo buenos profesionales, sino también personas cultas y curiosas, interesadas en aprender en cualquier ámbito de la vida. De él nos llega una de las anécdotas más divertidas que en este libro de testimonios se cuenta. La de D. Luis Rey Guerrero paseando a hombros por todo el patio a un alumno que era mal estudiante y al que le tenía hecha esa promesa si algún día sacaba un diez. Como el alumno era inquieto, pero muy listo, sacó ese diez, y D. Luis hizo honor a su palabra y sacó a su alumno a hombros. Nos imaginamos las caras asombradas de sus compañeros.

UNA FORMACIÓN MÁS ABIERTA. “Ingresé en 4º curso, con 14 años, es decir, en el año 1955, hasta que terminé el PREU. Yo estaba en otro Colegio pero mis padres, llegado un momento, consideraron que necesitaba una formación más abierta y de mejor calidad”.

UNA LIBERACIÓN. “El mejor recuerdo que tengo es la diferencia impresionante, con respecto al anterior centro, en cuanto a la libertad y el hacerle a uno pensar y ser responsable, y fue muchísima culpa de D. Luis Rey Guerrero y D. José Antonio Rey Guerre-ro, que tenían una calidad humana impresionante. Me atrajeron de tal mane-ra que el Colegio para mí supuso una liberación de donde yo venía”.

CALIDAD, HUMANIDAD Y LIBERTAD. “Esas son las tres palabras que es-cogería para definir la personalidad del Colegio. En cuanto a los valores que me inculcaron, yo señalaría tres: responsabilidad personal, afán de superación y una enorme camaradería”.

n Aparejador y Arquitecto Técnico desde 1965.

n Diplomado Superior en Prevención de Incen-dios por CEPREVEN (Título Europeo).

n Diplomado de Protección Civil por la Ecole Nationale de Protection Civile de Francia.

n Medallas al Mérito de Protección Civil por los Ministerios del Interior de España, Italia y Rumania.

n Jefe del Servicio de Extinción y Prevención de Incendios de Sevilla (1968-1989).

n Director del Área de Protección contra Incen-dios en la Edificación de la Expo’92 de Sevilla (1989-1993).

n Jefe del Gabinete Técnico de Protección Contra Incendios de la Gerencia de Urbanismo de Sevilla (1993-2005 por jubilación).

n Responsable del Grupo de Trabajo e Inves-tigación de Protección Contra Incendios del Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Sevilla (actualmente).

n Miembro de la Comisión ante el Ministerio de Fomento (Área de la Vivienda) en represen-tación del Consejo General de la Arquitectura Técnica de España, para el seguimiento del DB-SI y DB-SU del Código Técnico de la Edifi-cación (actualmente).

n Asesor de la Universidad de Sevilla para la Reforma de la antigua Fábrica de Tabacos (actualmente).

Ramón Fernández BecerraArquitecto Técnico, especialista en Extinción y Prevención de Incendios

“He visto a D. Luis Rey Guerrero pasear a hombros por todo el patio a un alumno al que tenía hecha esa promesa si algún día le sacaba un diez”

“Mi recomendación es seguir en la

misma línea, que lo ha definido como

el mejor colegio de Sevilla; que siga

creando hombres polifacéticos que en la sociedad puedan tener una relación

humana con cualquier tema”


93

DECIDIR EL PROPIO FUTURO. “Sí, la pluralidad del Colegio la percibí inmediatamente. Yo venía de un sistema rígido y llegué a un ambiente abierto. Fundamentalmente, al alumno se le decía que él era el que tenía que hacer su propia vida, que él sería quien decidiera su futuro, evidente-mente con la ayuda del Colegio”.

NOMBRES PROPIOS. “D. Luis Rey Guerrero, D. José Antonio Rey Guerre-ro, D. Luis González y un profesor que me abrió los ojos a la Literatura, D. Francisco Repetto, fueron los que más me marcaron. En cuanto a los compañeros de entonces, sigo coincidiendo con ellos y nos seguimos viendo aunque a algunos les perdí la pista. Recuerdo a José María Luzón Nogué, Francisco Malpica, José Luis García Arizti, José María Martínez Botella o José Luis Cáceres”.

VISIÓN UNIVERSAL. “El Colegio me inculcó una visión universal de las cosas, no provocó que me dedi-cara a nada en concreto, sino que me interesaran muchas cosas. Y en mi elección, que fue la de aparejador, me ayudó muchísimo en la prepara-ción”.

UN ALUMNO MUY PILLO. “Había un alumno (…) que ha sido diputado y concejal, que era muy pillo y no estudiaba nunca. Una vez le dijo D. Luis Rey Guerrero que si un día le sacaba un 10, le paseaba a hombros por el Colegio. Y como era listo, hizo un examen de química, le sacó un 10 y le paseó por todo el Patio. D Luis, cuando decía una cosa, la hacía”.

VÍNCULOS. “Sí he mantenido los vínculos con el Colegio, siempre tuve mucha relación con D. Luis Rey Romero y actualmente me veo mucho con D. Luis Rey Goñi. Y mis sobrinos estudiaron allí”.

MÁS EVOLUCIÓN QUE CAMBIO. “El Colegio no ha cambiado, sino que ha evolucionado, porque los valores del Colegio y su sistema siguen siendo los mismos. Hoy día al haber variado tanto las materias ha habido dispersión, quizás se profundiza menos en algunas materias pero siguen formando personas válidas en todas materias de la vida. El que haya pasado por el Colegio y haya estudiado Derecho no quiere decir que no pueda aprender Física y no sienta curiosidad por ello”.

GENERACIONES ACTUALES. “Yo creo que, en general, las generaciones actuales están peor formadas. En aquella época se exigía muchísimo. Cuando había que hacer el PREU ningún alumno suspendía. Hoy día el listón general de la enseñanza ha bajado mucho”.

PERSONAS POLIFACÉTICAS. “Mi recomendación es seguir en la mis-ma línea, que lo ha definido como el mejor Colegio de Sevilla; que siga creando hombres polifacéticos que en la sociedad puedan tener una relación humana con cualquier tema. Es algo identifica a un alumno del Colegio de San Francisco de Paula”.

RESPONSABLES DE SU FORMACIÓN. “Lo que debe seguir aportando el Colegio a los alumnos del siglo XXI es hacerlos conscientes de que deben ser responsables de sí mismos, y de su formación, no esperar que las cosas les vengan de fuera”.

”El Colegio no ha cambiado, sino que ha evolucionado, porque los valores del Colegio y su sistema siguen siendo los mismos”

”El mejor recuerdo que tengo es la

diferencia respecto al anterior centro, en cuanto a libertad y el hacerle a uno pensar

y ser responsable”

”El Colegio me involucró una visión universal de las cosas. Y en mi elección, que fue la de aparejador, me ayudó muchísimo”

94

Francisco Pérez Viguera, Doctor en Ciencias Químicas y Catedrático de Enseñanza Secundaria, ingresó en el Colegio en 1956, y salió al acabar Preuniversitario. Aunque la vocación por su carrera vino marcada por su padre, también químico, estima que en el Colegio se la reforzaron y sobre todo le influyó profundamente a la hora de ejercer su profesión “con el mismo entusiasmo y profesionalidad” que le habían enseñado durante su estancia en el San Francisco de Paula. Un entusiasmo que él vio en profesores como D. Luis Rey Guerrero, cuyo amor por la enseñanza era tal que, según le confesó a él y otros compañeros, a veces se despertaba por la noche imaginando un problema más bonito. “Para mí fue un gran ejemplo como persona y un gran profesional”.

MUCHÍSIMOS RECUERDOS. “Entré en Párvulos, con D. Germán en, 1956 y salí al acabar Preuniversitario, en 1966. El Colegio era y es un gran Colegio. Yo venía de Córdoba. (…) Son muchísimos los recuerdos, las clases, el patio de re-creo, el patio de la entrada, la escalera para subir a la clase de Ingreso. Las clases de educación física en la azotea, y recuerdo que había una señora que vendía roscos en el pa-tio interior, entre las clases de párvulos, 1ª y 2ª Elemental. Como estudiante era buenecito, sacaba matrículas pero las teníamos que repartir entre 7 u 8. Me gustaban las Ciencias, pero no era malo en algunas asignaturas de Letras, como la literatura, historia de España, sobre todo en 6º de Bachille-rato, donde obtuve Matrícula de honor”.

DISCIPLINA Y EXIGENCIA. “Era un centro con una gran disciplina y exigencia, y la formación que se impartía, gracias al gran plantel de profesorado, era digna de admiración. Ahora entiendo que esa rigurosidad era para darte seguridad a la hora de las pruebas que había en esa época: Revalida de 4º, Revalida de 6º y Preuniversitario. En el Colegio aprendí a ser responsable en el trabajo y el estudio, y valores como la disciplina, la seriedad y la ética”.

AMOR POR LA ENSEÑANZA. “El Profesor que más me marcó fue induda-blemente D. Luis Rey Guerrero, por su gran amor por la enseñanza de la física y de la química, así como por el trabajo de laboratorio y por educar-

n Doctor en Ciencias Químicas (1977) por la Universidad de Sevilla.

n Profesor Ayudante de Clases Prácticas de Química-Física en la Facultad de Ciencias y Profesor Adjunto Interino de Físico-Química de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Sevilla (1974-1978)

n Profesor Agregado de Bachillerato (1978) y Catedrático Numerario de física y quí-mica (1983) con destinos en Puente Genil (Córdoba) y Dos Hermanas, y Sevilla

n Es autor de 3 publicaciones químicas en revistas españolas y 8 en internacionales, y coautor de 5 libros y 10 publicaciones de carácter docente

n Vocal del Ilustre Colegio Oficial de Quí-micos de Sevilla, desde el mes de abril de 1993 hasta la actualidad.

n Vocal de la Asociación de Químicos de Andalucía desde su constitución, hasta el momento actual.

n Miembro de la Comisión de Enseñanza de la Asociación Nacional de Químicos de España (ANQUE).

n Coordinador Regional de la Olimpíada de Química de Andalucía. desde 1994.

Francisco Pérez Viguera Doctor en Químicas y Catedrático de Enseñanza Secundaria

“D. Luis Rey Guerrero nos confesaba que se había despertado por la noche porque se le había ocurrido un problema más bonito”

“Era un centro con una gran disciplina

y exigencia, y la formación que se impartía, gracias

al gran plantel de profesorado, era digna

de admiración”


95

nos de forma seria. En esa época de estudiante no entendíamos que ‘nos obligara a ir por la tarde para hacer problemas’. De esos problemas, algu-nos días nos confesaba que ‘por la noche se había despertado y se le había ocurrido un problema más bonito’. Creo que ha sido una figura que en mí causó un gran impacto en los tres cursos que me dio física y química y en la física de PREU que fue el último curso que lo tuve. Para mí fue un gran ejemplo como persona y un gran profesional. A D. Luis Rey Romero solo lo tuve como Profesor de química en PREU, aunque luego tuve la oportuni-dad de conocerlo más a fondo en la Ponencia de química y comprobar su gran calidad humana y profesional. Además de un gran maestro para mí fue un gran amigo. También recuerdo a D. José Rey, también por su gran profesionalidad, responsabilidad e interés siempre por que los alumnos fue-sen responsables y aprendiesen bien. A D. Luis González, quien tenía una forma muy especial de enfocar las clases, dictando apuntes y preguntando, involucrándote en el proceso de aprendizaje de la asignatura. A su mujer, Dª María Estela, que nos explicó en 1º de Bachillerato geografía. A D. José Montllor, por su gran esfuerzo en enseñarnos y prepararnos bien para superar el ingreso. A D. Julio Mínguez, que con sus ‘cuartillas de fórmulas’ te obligaba a retener todas las fórmulas matemáticas que poco a poco iba desarrollando en clase con la ayuda de algún alumno que iba desarrollan-do en la pizarra lo que el Profesor explicaba. Y también ejercieron gran influencia en nosotros D. Germán, D. Nicolás, D. Manuel Pérez Cerezal, D. Francisco Cruces, y D. José Ferrer”. COMPAÑEROS. “Con algunos de mis compañeros he coincidido a lo largo de la carrera y luego también he coincidido con ellos en algunas ocasiones. Pero reunirnos como grupo sólo lo hemos hecho hace unos tres o cuatro años”.

VOCACIÓN. “En mi caso vino marcada por mi padre, que era químico también, aunque trabajaba en un laboratorio de productos farmacéuticos y por dos hermanos de mi madre, químicos también. Pero en el Colegio reforzaron mi vocación y cuando terminé la carrera traté de ejercer mi profesión con el mismo entusiasmo y profesionalidad que me habían enseñado durante mi estancia en el San Francisco de Paula”.

LAS TERRIBLES VARILLAS. “Como anécdota, recuerdo sobre todo las terribles ‘varillas’ en las clases de D. Luis Rey Guerrero. Era un sistema de preguntar y responder rápidamente, a todos los alumnos del curso, en unos breves minutos. Disponía a dos alumnos ‘al pie del cañón’ (la lista) y si se decía una barbaridad decía: ‘ponle un tiro’ (eso era ni más ni menos que 5 ó 6 ceros)”.

VÍNCULOS. “Debido a mi condición de docente he tenido varios cambios de destino a lo largo de mi vida profesional. Por ello mis hijos no han estudiado en el Colegio. Pero sí le he recomendado a algunos ami-gos, residentes en Sevilla, que matriculasen a sus hijos por la calidad de la enseñanza que mantiene”.

EVOLUCIÓN. “Creo que sigue manteniendo la independencia de los poderes públicos y conservando el espíritu liberal que tenían sus creadores. Es importante el incorporar al estudio las nuevas tecnologías, así como el que los alumnos tengan conocimientos elevados de idiomas, ya que ello le permitirá desenvolver-se mejor en cualquier profesión que tenga en el futuro. En nuestra época se estudiaba mayoritariamente francés y la verdad es que acabamos hablándolo con bastante soltura, gracias al esfuerzo realizado en 6º y 7º por D. Miguel. En la prueba que se efectuaba en la Universidad figuraba una lectura de una revista, traducción de lo leído y una conversación de unos diez minutos. Los conocimientos de idioma que se adquieren en la etapa primera y en la adolescencia se quedan más fijados. Lo he podido comprobar ya que luego estudié inglés y aunque lo entiendo bien, aún recuerdo muchas expresiones y vocabulario de francés”.

“Cuando terminé la carrera traté de ejercer mi profesión con el mismo entusiasmo y profesionalidad que me habían enseñado en el San Francisco de Paula”

“Los Directores que ha tenido el Colegio siempre han apostado por el futuro, pero con una visión realista, adaptándose con previsión a los retos”

96

Disciplina y tesón son los dos valores que Manuel Eduardo Codes conserva como la principal enseñanza de su paso por el Colegio. Sentía predilección por la física y la química, y tuvo la suerte de recibir clases de D. Luis Rey padre y D. Luis Rey hijo. Además del recuerdo de estos dos maestros, también conserva en la memoria a D. Nicolás, el Profesor de parvulario. Sigue viéndose y encontrándose con muchos antiguos amigos del Colegio, y reconoce que allí se forjó un hábito de estudio que le ayudó sobremanera durante sus años de Universidad. “No se estudiaba para aprobar, sino para formarte”, sostiene. De cara al futuro, el doctor recomienda al Colegio que siga avanzando por la misma senda que ha mantenido invariable durante los últimos 125 años. “Que enseñen a los alumnos a ser personas, y si es posible buenas personas”, explica.

FÍSICA Y QUÍMICA. “En 1957, tenía 7 años. Mis pa-dres querían lo mejor para mí, soy hijo único y en aquel momento el San Francisco destacaba mucho. Además mis padres conocían a D. Germán y D. Bernardo Delgado, padre e hijo. Estuve en el colegio hasta 1967. (…) Mis clases preferidas eran las de física de D. Luis Rey padre y después química con D. Luis Rey hijo. Mis asignaturas favoritas eran la física y la química, pero las matemáticas tampoco me desagradaban. Comen-cé muy bien, tenía un expediente medio-alto, pero en 4º de Bachiller tuve un bache, cosas de la edad, las pandillas y las niñas… Cuando mis calificaciones comenzaron a bajar tuve problemas con la Dirección. El PREU (formación preuniversitaria) ya no lo hice en el San Francisco. (…) Los profesores que más me influyeron fueron D. Nicolás, Profesor de Parvulario, D. Luis González, D. Federico, Profesor de latín, y cómo no, D. Luis padre e hijo”.

DISCIPLINA Y TESÓN. “En el Colegio me enseñaron a responsabilizarme de mi trabajo. La disciplina y el tesón eran valores que se inculcaban a los alumnos del San Francisco. Los que salíamos de allí teníamos claro que, eligieras la carrera que eligieras, tenías que intentar ser el mejor”.

BUENOS COMPAÑEROS Y AMIGOS. “Al Colegio iba la jet set de Sevilla, muchos ‘hijos de’ abogados, arquitectos, médicos… Yo era un alumno tipo medio, pero no teníamos problemas de convivencia, todos nos llevábamos bien y éramos buenos compañeros. De aquellos tiempos conservo muchos amigos: Francisco Capote, médico y neumólogo en el Hospital Virgen del Rocío; Miguel Ángel Gentil Govantes, responsable de la Unidad de Transplantes Renal del Hospital Virgen del Rocío; y Francisco Murillo, que es abogado. Entre los de mi quinta que han acabado alcanzando altas responsabilidades recuerdo a Pedro Ollero, ingeniero y Catedrático en la Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Sevilla, Miguel Ángel Gentil,

n Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de Sevilla (1974) con Premio Extraordinario de Licenciatura. Doctor en Medicina y Cirugía con Premio Extraordi-nario de Doctorado (1985).

n Especialista en Medicina Interna (1977) y en Oncología Médica (1984) y titulado como Médico de Empresa (1980).

n Profesor Asociado de Oncología Médica de la Universidad de Sevilla.

n Jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Virgen Macarena de Sevilla y Director de la Unidad de Gestión Clínica Integral de Radiología y Radioterapia.

Manuel E. Codes M. de VillenaJefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Virgen Macarena de Sevilla

“En el Colegio no estudiábamos para aprobar, sino para formarnos”

“En el Colegio me enseñaron a

responsabilizarme de mi trabajo. La

disciplina y el tesón eran valores que

se inculcaban a los alumnos del San

Francisco”


97

Francisco Capote o Cayetano García Montes, ingeniero industrial y ya fallecido. (…) El Profesor D. José Ferrer y yo veraneamos los dos en Punta Umbría y cada año nos encontramos. También tengo una gran amistad con D. Bernardo, hijo de D. Germán Delgado”.

NO PARA APROBAR, SINO PARA FORMARTE. “En el San Francisco te inculcaban disciplina de estudio, no se estudiaba para aprobar, sino para formarte. Además se estudiaba todo el año, de modo que en la facultad estos hábitos de estudio me sirvieron muchísimo”.

MÁS INFORMACIÓN, MENOS HUMANIZACIÓN. “La educación que reci-bimos nosotros no tiene nada que ver con la educación que reciben los niños ahora. Yo por ejemplo estudié francés en vez de inglés, y eso ha sido una asignatura pendiente a lo largo de toda mi carrera. Hoy con Internet los niños tienen unas posibilidades increíbles. Antes nos pasábamos tardes enteras encerrados en la biblioteca entre libros, enciclopedias… Perdíamos mucho tiempo. Creo que están mejor formadas en cuanto a información, tiene acceso a una gran cantidad de datos de forma inmediata, y peor en cuanto a la humanización. Actualmente priman otros valores. No obstante, destacar en mi época de estudiante era mucho más complicado, exigía un esfuerzo mayor”.

QUE SIGA COMO HASTA AHORA. “Recomendaría al Colegio que siga como hasta ahora, que no pierda su esencia. El trato individual es fundamental, que una clase no sean cuarenta alumnos. La masificación perjudica la educación. También diría que enseñen a ser personas, y si es posible buenas personas… La categoría del Colegio la define el marcaje individual de sus alumnos”.

“Las nuevas generaciones están mejor formadas en cuanto a información y peor en cuanto a la humanización. Actualmente priman otros valores. No obstante, destacar en mi época de estudiante era mucho más complicado, exigía un esfuerzo mayor”

98

Ignacio Cortés, que estuvo diez años en el Colegio, no fue un buen estudiante. De hecho, sus recuerdos están asociados a la exigencia de los profesores de entonces y a lo duro que le resultaba aprobar las asignaturas. Sin embargo, desde muy pequeño destacó en dibujo y pintura, en las que obtenía Matrícula de honor, y afirma que los profesores trataron de ayudarle a potenciar esta habilidad: “Sabían que lo mío era la pintura y me dieron mucho cariño y apoyo en ese sentido”. Hoy, Ignacio Cortés es uno de nuestros mejores pintores, obtuvo el primer Premio Nacional de Pintura y Escultura en 1985, es además Doctor en Bellas Artes, y desde 1983 es profesor de la Facultad de Bellas Artes de Sevilla. Además del refuerzo de su vocación, del Colegio agradece que le enseñaran a ser responsable con las obligaciones y con la vida.

AL LADO DE MI CASA. “Si no recuerdo mal me matriculé en 1958. El principal motivo por el que ingresé en el San Francisco de Paula es que yo vivía en la misma calle del Colegio, en Sor Ángela de la Cruz, y desde párvulo mi Colegio era donde yo jugaba y allí estuve diez años, hasta 4º de Bachillerato”.

MATRÍCULA DE HONOR EN DIBUJO. “Recuerdos guardo muchos, porque yo me pasaba el día allí. Pero de lo que más me acuerdo es que era un Colegio muy rígido de nivel y yo era un mal estudiante, de hecho el colegio le dijo a mi padre que me fuera porque en 4º de Bachillerato tuve seis cates. Eso

sí, yo siempre destaqué en dibujo y pintura, donde tenía Matrícula de honor”.

GENTE MUY PREPARADA. “El Colegio tiene fama de duro y de exigente. Por eso de sus aulas salen catedráticos, abogados o empresarios, porque están muy bien preparados. Una matrícula en el San Fran-cisco de Paula en otro sitio era un 14 o un 15. Eran profesores muy responsa-bles con las materias”.

n Estudió la rama de Pintura en la Facultad de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría, especializándose posteriormente en el Grabado Calcográfico.

n Desde 1983 imparte la docencia en la Facultad de Bellas Artes de Sevilla en la asignatura de Dibujo del Natural. En 1986, obtiene el título de Doctor en Bellas Artes por la Universidad de Sevilla.

n Su obra se expone con asiduidad en las Galerías Haurie y Álvaro de la capital hispalense, extendiéndose también a León, Bilbao, Santan-der, Valencia, Las Palmas de Gran Canaria, Miami o Ginebra.

n Entre otros galardones, ha obtenido el Primer Premio Nacional de Pintura y Escultura en 1985; el de la Real Academia de Bellas Artes de Sevilla (1989) y el de la Excma. Cámara de Comercio, Industria y Navegación de Sevilla (1993).

n Muy vinculado con el mundo de las Herman-dades y Cofradías de Sevilla, ha realizado el cartel de las Fiestas de Primavera de Sevilla (1995), el del 75 Aniversario Fundacional de la Hermandad de los Estudiantes (1999), el conmemorativo del IV Centenario de la fundación de la Hermandad de Montserrat (2001), el de las Fiestas del Rosario de la Hermandad de la Macarena (2004) y el del Cincuentenario de la Bendición de la Virgen de los Dolores del Cerro del Águila (2005).

n A él se deben las ilustraciones de la edición del Pregón de la Semana Santa de Sevilla de 2003, el Paño de la Verónica de la Hermandad del Valle en 1995, numerosas portadas de Boletines de Hermandades o las miniaturas del Libro de Reglas de la Hermandad de Ntra. Sra. del Rosario de los Humeros. Además, es autor del cartel de la Velá de Santiago y Santa Ana y de la Festividad del Corpus Christi.

n En la actualidad realiza su labor docente e investigadora combinándolas con la actividad pictórica.

Ignacio Cortés MartínezPintor y Profesor de Dibujo del Natural de la Universidad de Sevilla

“En el Colegio te enseñaban a ser responsable con las obligaciones y con la vida”

“Yo tenía muy claro que quería

estudiar Bellas Artes y los profesores me

ayudaron, sabían que lo mío era la pintura y me dieron mucho

cariño y apoyo en ese sentido”


99

RESPONSABILIDAD. “El Colegio me inculcó el valor cristiano de la fami-lia, de la vida y la sociedad, allí te enseñaban a ser responsable con las obligaciones y con la vida”.

SOBRE TODO, LOS PROFESORES DE DIBUJO. “De los profesores que más me marcaron, yo destacaría a D. Anselmo y D. Nicolás Gelo, cuyo hijo me dio después clases particulares. D. José Muñoz era muy simpático, con él fue cuando repetí dos años y me llamaba cariñosamente D. Pedro, porque yo tenía las llaves de la clase. Y por supuesto, mis profesores de dibujo: D. Salvador y Dª. Nines, que de hecho cuando yo he tenido alguna exposición, ellos han venido a verla. (…) A D. Juan Plata le sigo teniendo mucho cariño y mantengo cierta amistad, él me formó en la Confirmación y cuando lo veo por la calle me sigue tirando de la patilla. Dª. Nines y su padre D. Luis han ido a exposiciones mías, lo mismo que D. Salvador y que el actual Director del Colegio, D. Luis Rey Goñi”.

ANTIGUOS COMPAÑEROS. “Si veo a alguno, los saludo, como por ejemplo Antonio Candil, que ahora es el Hermano Mayor de Cristo de Burgos; o Fernando López Carrasco, que era de mi curso, hace poco he estado con él. Pero por lo general, no he mantenido el contacto con mis compañeros (…). Que hayan teni-do una trayectoria profesional relevante, yo destacaría a mi primo Vicente Cortés Galeano, que tiene dos años más que yo, ahora es Catedrático de Ingeniería Química, sabe cuatro idiomas y tuvo la cátedra con 29 años. Fue un fuera de serie y se pasa todo el día investigando”.

APOYO EN SU VOCACIÓN. “Yo tenía muy claro que quería estudiar Bellas Artes y los profesores me ayu-daron, sabían que lo mío era la pintura y me dieron mucho cariño y apoyo en ese sentido”.

UN POLLO VOLANDO POR SOR ÁNGELA. “Recuerdo varias anécdotas, una de ellas se publicó en un libro. Recuerdo que por entonces, como mi padre era médico, la gente agradecida le regalaba muchas cosas. Mi madre ya no podía amarrar más pollos en la azotea y uno de ellos se le voló y salió volando por Sor Ángela de la Cruz y toda la gente por los balcones del convento detrás del pollo lo intentaban coger. También recuerdo que yo de pequeño me pasaba todo el día en el Colegio y todo el día en una panadería que estaba al lado del San Francisco del Paula, en la que yo ayudaba a amasar el pan. Y en el Colegio se servían en una tabla las vienas recién sacadas del horno de esa panadería, que se vendían como bocadi-llos. Otra anécdota era la forma de jugar al fútbol de ‘Manolete’, uno de los alumnos del Colegio, que yo creo que lo tenían allí acogido porque se veía un chaval con pocos recursos y que jugaba al fútbol de una forma admirable porque solo tenía una pierna”.

LAS NUEVAS GENERACIONES. “En general, creo que los jóvenes de la actualidad están mejor formados, están más enterados de lo que pasa en el mundo, hay muchos medios y todo eso son proyecciones, imá-genes. Pero desconocen lo básico, deberían leer a clásicos, escuchar música clásica o contemplar cuadros. Por lo general, han visto mucho pero no lo han profundizado”.

LA MISMA LÍNEA EDUCATIVA. “A D. Luis Rey Goñi la considero una persona preparada, inteligente, con imagen. Lo primero de todo sería felicitarlo y le recomendaría que siguiera con la misma línea educativa que han llevado desde sus abuelos y sus padres. El San Francisco de Paula es un colegio que interesa que esté en Sevilla, se nota bastante cuando un alumno de este Colegio llega a la Universidad”.

UN COLEGIO MÁS EXIGENTE. “Yo diría que es un Colegio mucho más exigente, que aporta el nivel de cultura que deben de tener el resto de colegios. Eso sí, el alumno que sea mal estudiante le va a resultar muy difícil estar ahí, aunque al mismo tiempo te animaban a que te dedicaras a lo que te gustaba. Algo que me gustaría también destacar es que a pesar de los años, siguen manteniendo el contacto con sus antiguos alumnos, están orgullos de haber sido ellos quienes les formaron”.

“El San Francisco de Paula es un colegio que interesa que esté en Sevilla, se nota bastante cuando un alumno de este Colegio llega a la Universidad”

100

Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de Sevilla y actual responsable de la unidad de Transplante Renal del Hospital Universitario Virgen del Rocío, Miguel Ángel Gentil comenta que el Colegio es toda su infancia y adolescencia y lo recuerda como “una espléndida excepción laica, con la dosis mínima tolerada de doctrina y consignas nacional-católicas”. Dice que en sus aulas se entrenó en el hábito del trabajo y la autoexigencia, el juego limpio en la competencia y el valor de la cultura y de los logros científicos, un entrenamiento, confiesa, que “en mi caso fue incluso algo exagerado, aunque creo que ese exceso fue más atribuible a mi personalidad que al propio Colegio, porque también recuerdo muchos mensajes de carpe diem de tantos profesores que tal vez no aproveché”. Considera que el compromiso personal del equipo directivo del centro ha sido un elemento decisivo en la continuidad de su proyecto educativo y piensa que es básico que se mantenga el sistema de valores: “rigurosidad, disciplina racional, pluralidad y que se aplique a la selección del profesorado, sin concesiones y sin incurrir en comercialismos a corto plazo”.

TRADICIÓN FAMILIAR. “Entré en el Colegio con 8 años, en la clase de D. Juan Plata y seguí hasta Preuniversitario, antes de cumplir los 17. Mi padre y mis tíos Gonzalo Go-vantes y Juan Martín Niclós conocían a los hermanos Rey y no dudaron en matricularnos en el Colegio a todos mis primos y a mis hermanos. (…) También mis sobrinos han estudiado en él”.

CONVERSACIONES Y FÚTBOL. “El Colegio es toda mi infancia y adolescencia. Guardo muy buenos re-cuerdos de los amigos, de las excursiones, los viajes. Era muy buen estudiante, siempre en aquel Cuadro de honor que se exhibía en el vestíbulo y salía publicado en ABC. Aunque la verdad es que estudiaba por obligación o disciplina, o deseo de agradar a mis padres y profesores, como supongo que la mayoría de los niños. Me gustaban más las asignaturas de Ciencias: química, ciencias naturales, pero también la lite-ratura y la historia del arte me impresionaron mucho en algunos cursos. Pero lo que más me gustaba de todo, sin ningún tipo de duda, eran los partidos de fútbol del recreo, con una pelota de trapo o de plástico o incluso con una simple piedra; y en segundo lugar, la vuelta a casa charlando con mis amigos (sobre todo con José Antonio Ordaz) del mundo en general”.

CUMPLIMIENTO DEL DEBER. “El Colegio me inculcó el hábito de trabajo y la autoexigencia; el juego limpio en la competencia; el valor de la cultura y de los logros científicos. Creo que en mi caso ese entre-

n Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de Sevilla. En 1973 recibió el Premio del Ayuntamiento al mejor expediente académico. Doctor en Medicina desde 1988.

n Médico interno y residente en la especialidad de Nefrología en el Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla, donde trabaja como médico adjunto desde 1978. Actualmente es Jefe de Sección de Transplante renal en el mismo Hospital.

n Durante cuatro años ha sido Coordinador del Programa Regional de Insuficiencia Re-nal Crónica de Andalucía de la Consejería de Salud y Consumo.

n Coordinador de un grupo de investiga-ción del Plan Andaluz de Investigación y de Red Nacional de Transplantes.

n Director de varias Tesis Doctorales y autor de más de un centenar de artículos para revistas científicas de ámbito nacional e internacional. También ha colaborado en numerosos libros relacionados con su especialidad.

Miguel Ángel Gentil Govantes Médico especialista en Nefrología, Jefe de sección en el Hospital Universitario Virgen del Rocío en Sevilla

“El Colegio me entrenó en el hábito de trabajo y la autoexigencia, el juego limpio en la competencia y el valor de la cultura y de los logros científicos”.


101

namiento fue incluso algo exagerado, tuve que ‘desentrenarme’ en los pri-meros años de carrera para llegar a disfrutar de otros aspectos más frívolos de la vida. De todas formas ese exceso seguramente fue más atribuible a mi personalidad que al propio Colegio, porque también recuerdo muchos men-sajes de carpe diem de tantos profesores, que tal vez no aproveché. Aunque sin duda el método de enseñanza era competitivo, nunca me adoctrinaron especialmente hacia la lucha por el poder o la relevancia social, sino hacia el cumplimiento del deber”.

COMPROMISO DE LA DIRECCIÓN. “El compromiso personal del equipo directivo ha sido un elemento decisivo en la continuidad del proyecto del Colegio. Es básico que se mantenga la sistemática de valores: rigurosidad, disciplina racional, pluralidad y que se aplique a la selección del profesora-do, sin concesiones y sin incurrir en comercialismos a corto plazo”.

TÉCNICA Y DISCIPLINA DE ESTUDIO. “Mi vocación de médico se basó en fantasías infantiles e impresiones literarias más que en influencias familiares o académicas. En mi fase de estudiante, la técnica y disciplina de estudio adquirida en el Colegio fueron fundamentales para conseguir un buen currículo, casi por inercia. Los hábitos de trabajo los he conservado hasta el día de hoy”.

EXCEPCIÓN LAICA. “En un contexto de colegios religiosos el Colegio era una espléndida excepción laica, con la dosis mínima tolerada de doctrina y consignas nacional-católicas. (…) Sobre todo por comparación con amigos de otros colegios, en su mayoría religiosos, de ideología única y excluyen-te”.

PROFESORES FUERA DE LAS NORMAS. “Más tarde he percibido cómo, de forma más o menos abierta, algunos profesores trataban de trasladar-nos una visión menos maniquea que la imperante. En particular recuerdo algunas charlas de D. José Rey y de D. José Olivares en clases de filosofía, de D. Manuel Abad en historia del arte; hasta el Profesor de formación política (que nos leía novelas de Julio Verne para llenar las clases) y los de religión (Padre Vázquez, D. Manuel Castillo) estaban fuera de las normas de la época”.

NOMBRES PROPIOS. “No sé qué habrá sido de los compañeros que salieron de Sevilla. De mi clase hay compañeros profesionalmente destacados: Paco Capote, Pedro Ollero, el inimitable Acosta, Rafael Gómez, Manuel Codes”.

AMBIENTES. “No sé conservar ni contar anécdotas, pero sí recuerdo ‘ambientes’: las lecturas poéticas de D. José Rey o las clases de química entusiastas, cercanas al delirio, de un D. Luis Rey Guerrero cubierto de tiza; D. Luis Rey Romero hijo, muy joven y recién casado, contándonos un poco ruborizado la vida sexual de los pájaros…”.

APUESTA CLARIVIDENTE. “El Colegio se ha sabido adaptar a los tiempos en el campo de la enseñanza de las nuevas tecnologías, de idiomas (lo del chino es una apuesta clarividente) y otros muchos. Creo que hay líneas quizás no muy de moda que deberían fomentarse: el trabajo en equipo en contraste con el indivi-dualismo excesivo, la recuperación del valor de las Humanidades como punto de partida de lo demás”.

EL GRAN RETO. “La flexibilidad. Adaptarse a las necesidades y potencialidades específicas de cada alum-no sin perder de vista lo que el mundo exterior nos pide, tan cambiante. Eso requiere un grado de profe-sionalidad muy elevado entre los enseñantes y supone un gran reto tanto en términos de organización de la enseñanza como incluso en el enfoque empresarial”.

“El Colegio se ha sabido adaptar a los tiempos en el campo de la enseñanza de las nuevas tecnologías, de idiomas (lo del chino es una apuesta clarividente) y otros muchos”

“Aunque sin duda el método de enseñanza era competitivo, nunca me adoctrinaron especialmente hacia la lucha por el poder o la relevancia social, sino hacia el cumplimiento del deber”

102

Jefe de Sección, especialista en Neumología, en el Hospital Universitario Virgen del Rocío y Profesor de la Universidad de Sevilla, el apellido de este médico resulta muy familiar para todos los alumnos actuales del Colegio, y también para los de las últimas generaciones de antiguos alumnos, ya que su hermano es hoy uno de los profesores de trayectoria más larga en el centro. Este neumólogo subraya que la singularidad del Colegio en Sevilla en su época era muy notoria: “Estaban los institutos, los colegios religiosos y el San Francisco”, aunque dice que de la pluralidad y tolerancia del Colegio no tomó plena conciencia hasta adolescente y fue por contraste, “hablando con amigos de otros colegios”. Se considera un afortunado por haber estudiado en un centro en el que le hicieron ver las cosas desde perspectivas distintas a la oficial y donde le inculcaron un gran sentido del deber, y recuerda que, mientras en casi todos los colegios los castigos físicos eran la norma, en el San Francisco “eran inexistentes en la práctica”.

HIJO DE ANTIGUO ALUMNO. “Entré en el Colegio en Ingreso, en el curso 1959-1960. Supongo que la razón primordial fue que mi padre era Antiguo Alumno y siguió perso-nalmente vinculado al Colegio durante toda su vida. Estuve hasta terminar Preuniversitario, en el curso 1966-1967. (…) Era buen estudiante, más por sentido del deber y miedo al fracaso, que porque me gustara demasiado estudiar”.

AFORTUNADO. “A mí no me gustaba ir al colegio (a ningún colegio), porque en ellos te hacen estudiar, te preguntan y te examinan. Por todo lo demás, los recuerdos son muy buenos, tanto de los compañeros como de los profesores. Ya entonces, hablando con amigos de otros centros, me daba cuenta de que era afortunado por

estar en el San Francisco. Por poner un par de ejemplos, en aquella época eran la norma, en casi todos los colegios, los castigos físicos, inexistentes en la práctica en el San Francisco. Además, teníamos pocos actos religiosos y disponíamos de más tiempo libre (y para estudiar...). Ahora, retrospectiva-mente, me doy cuenta de que era privilegiado por muchas otras cuestiones: me enseñaron a estudiar, me inculcaron el sentido del deber, me hicieron ver las cosas desde perspectivas distintas a la que era la oficial y la única en esa época, etc., etc”.

PERSONALIDAD. “Seriedad, rigor, laicismo (un verdadero tesoro para la época), exigencia académica, elitismo intelectual. Esas son las palabras que escojo para resumir la personalidad del Colegio”.

SENTIDO DEL DEBER. “En el Colegio me inculcaron sentido del deber, gusto por el trabajo bien hecho, la tolerancia. También la competitividad. (...) Teníamos que hacer nuestro trabajo lo mejor posible y los buenos estudiantes salíamos en el Cuadro de honor publicado en el periódico ABC cada final de

n Doctor en Medicina, es Jefe de Sección. Responsable de la Unidad Respiratoria de Trastornos del Sueño (desde 1990) en el Hospital Universitario Virgen del Rocío.

n Profesor Asociado de la Facultad de Medi-cina de la Universidad de Sevilla (desde 2005)

n Jefe del Grupo de Investigación de “Pato-logía Respiratoria durante el Sueño” del Plan Andaluz de Investigación (Grupo PAI CTS 282) de la Junta de Andalucía.

n 70 cursos y seminarios impartidos, 8 Tesis Doctorales dirigidas, 202 comunicaciones a congresos, 83 publicaciones en revistas nacionales e internacionales, 15 capítulos de libros y 21 proyectos de investigación subvencionados por agencias oficiales.

“Haber conseguido que funcionara un

colegio imbuido del espíritu de la

Institución Libre de Enseñanza tuvo que

ser enormemente difícil; pero una vez

logrado, el contraste era palmario”

Francisco Capote GilMédico Especialista en Neumología. Jefe de Sección en el Hospital Virgen del Rocío

“En mi época la singularidad del Colegio era notoria: estaban los institutos, los colegios religiosos y el San Francisco”


103

curso. Pero no recuerdo que nos dijeran (ni que nos inculcaran subliminal-mente) que de mayores deberíamos de ser personas importantes o famosas”.

PERCEPCIÓN POR CONTRASTE. “Estudié en una época muy especial, puro franquismo. De la pluralidad y tolerancia del San Francisco me empecé a dar cuenta por contraste, hablando (ya de adolescente) con amigos de otros colegios. De que existían verdades distintas de las oficiales, también, sobre todo gracias a Don José Rey Guerrero, que me dio clases de literatura y de filosofía en varios cursos”.

NOMBRES PROPIOS.“ D. José Rey Guerrero, D. Luis Rey Guerrero, D. Luis González, D. Luis Rey Romero, D. Manuel García Vázquez fueron los profeso-res que más me influyeron”.

UNA VEZ POR SEMANA. “Sigo teniendo algunos muy buenos amigos del Colegio, y con alguno de ellos me veo al menos una vez por semana. (…) Re-cuerdo a varios compañeros que luego han desarrollado una trayectoria profesional destacada, aunque seguro que olvido a algunos y que no he seguido la trayectoria de otros. Puedo nombrar a Miguel Ángel Gentil, Pedro Ollero, Manuel Acosta, Rafael Cómez y Manuel Codes”.

LOS ÚNICOS QUE SABÍAN TOMAR APUNTES. “En mi trayectoria de estudiante universitario influyó mucho el Colegio: tenía un nivel académico global alto, sabía estudiar y creo que tenía sentido del deber. Aunque parezca una anécdota, los del Colegio éramos los únicos que sabíamos tomar apuntes (estaban disputadísimos). Ya en mi trayectoria profesional, con la época de estudiante tan lejana, es difícil especificar en qué cosas concretas ha influido, aunque seguro que lo ha hecho, porque ha sido determinante (para lo bueno y para lo malo) en mi formación personal y ésta, a su vez, es muy importante en el desempeño profesional”.

MANCHADO DE TIZA EN EL FRAGOR DE LAS CLASES. “Destrozaría cualquier anécdota concreta que quisiera describir. Recuerdo los despistes (algunos desternillantes) de D. Luis Rey Guerrero. Recuerdo a D. Luis Rey Romero completamente manchado de tiza en el fragor de sus clases de química. Cosas así, que no tienen gracia si yo las cuento”.

VÍNCULOS FAMILIARES. “Mi hermano Genaro es Profesor del Colegio y mi hija estudió el Bachillerato en el Colegio. Yo mantengo una relación personal cercana con la familia Rey, y con algunos profesores”.

IMBUIDO DE LA INSTITUCIÓN LIBRE DE ENSEÑANZA. “En mi época de ‘franciscano’, al menos en Sevilla, la singularidad del Colegio era notoria: estaban los institutos, los colegios religiosos y el San Francisco. En aquel tiempo, haber conseguido que funcionara un colegio imbuido del espíritu de la Institución Libre de Enseñanza tuvo que ser enormemente difícil; pero una vez logrado, el contraste era palmario. Ahora me parece que las dife-rencias con otros centros son más difíciles de percibir. Supongo que el Colegio se ha renovado manteniendo sus esencias. Con respecto a las nuevas habilidades y competencias, no sé si soy el más indicado para sugerirlas. Si digo que la informática, las nuevas tecnologías, los idiomas (incluido, por supuesto, el chino), seguramente es algo ya desfasado. Desde luego, si se buscan elementos diferenciadores, la cultura en general y las Humanidades“.

PRESERVAR LAS ESENCIAS Y ADAPTARLAS A LOS TIEMPOS. “La implicación personal que han tenido en el proyecto del Colegio los directores sucesivos ha sido fundamental en su éxito y debe mantenerse. Por supuesto, también deben preservarse las esencias del Colegio (rigor, exigencia académica, tolerancia, pluralidad), adap-tándolas a los tiempos. Por último, creo que es importante la selección de profesores, que deben estar impli-cados en el proyecto del Colegio y, a la vez, deben tener personalidad propia y capacidad crítica (los buenos profesores con frecuencia tienen aristas)“.

TRATO PERSONALIZADO. “La capacidad para dar un trato personalizado al alumno probablemente será uno de los rasgos que caracterizarán a las mejores instituciones educativas, por el coste económico, el esfuerzo y la capacidad docente que requiere”.

“En mi trayectoria de estudiante universitario influyó mucho el Colegio: tenía un nivel académico global alto, sabía estudiar y creo que tenía sentido del deber”

104

Hijo de Antiguo Alumno, todos los hijos y sobrinos del catedrático Andrés Carranza Bencano se forman o se han formado también en el San Francisco de Paula, colegio que, dice, le inculcó “valores fundamentales, como el esfuerzo y el espíritu de superación, junto a un pensamiento liberal”. Valores que han guiado luego una trayectoria profesional brillante, cuajada de méritos y reconocimientos en su especialidad de Traumatología y Cirugía Ortopédica. Preguntado por unas recomendaciones para que el Colegio pueda perdurar otros 125 años, el doctor Carranza lo tiene claro e insiste en la necesidad de mantener esos valores: “que no se pierda el espíritu de esfuerzo, que no se pierda el sentido liberal de la enseñanza y de la convivencia”. En su opinión, las mejores instituciones educativas se caracterizarán por preservar esos valores, así como por “una enseñanza bilingüe con un proyecto a largo plazo de alto nivel de competitividad, basado en el estudio individual tutorizado con gran interrelación Alumno-Profesor-Tutor”.

INGRESO COMO INTERNO. “Debería tener sobre 9 ó 10 años (sobre el año 1959) pues entré para hacer el examen de ingreso y salí al terminar el PREU. Mi padre había sido alumno del Colegio e ingresé interno por vivir en un pue-blo, donde mi padre era Médico (Alcalá del Río) y no existir buenas comunicaciones que permitieran los desplazamien-tos propios del alumno externo”.

APROVECHAR BIEN LAS HORAS DE ESTUDIO. “Yo era buen estudiante con preferencias por las asignaturas de Ciencias. Creo que en el Colegio aprendí a organizarme para estudiar aprovechan-do al máximo las horas de estudio. Los valores fun-damentales que recibí son los derivados del esfuerzo y superación, junto a un pensamiento liberal”.

EN TRES PALABRAS.

n Catedrático de Traumatología y Cirugía Ortopédica de la Facultad de Medicina de la Universidad de Sevilla.

n Especialista en Traumatología y Cirugía Ortopédica.

n Especialista en Cirugía General.

n Doctor en Medicina y Cirugía.

n Diplomado en Medicina de Empresa.

n Especialista en Medicina Ortopédica y Tera-péutica Manual.

n Académico Correspondiente de la Real Acade-mia de Medicina y Cirugía de Sevilla.

n Jefe de la Unidad de Cirugía de Pie y Tobillo, Corrección de grandes Deformidades del Miem-bro Inferior y Cirugía de la Parálisis.

n Presidente de la Sociedad Española de Medi-cina y Cirugía del Pie y Tobillo.

n Secretario del Consejo de Redacción de la Revista de Medicina y Cirugía del Pie y Tobillo.

n Miembro del Consejo Editorial de la Edición Española del Journal of the American Academy of Orthopaedic Súrgeons.

n 4 premios por trabajos de investigación, 8 proyectos de investigación subvencionados por agencias externas y 20 Tesis Doctorales dirigi-das. 3 libros y 33 capítulos de libros.

n 89 artículos en revistas científicas nacionales e internacionales.

n 59 ponencias y 126 comunicaciones en con-gresos nacionales e internacionales.

n 259 conferencias en cursos y reuniones cien-tíficas.

“Las nuevas genera-ciones están mejor

formadas porque exis-ten mejores medios y más universalización

de la enseñanza, pero no se debe perder el

espíritu de esfuerzo y compensación a ese

esfuerzo”

Andrés Carranza BencanoCatedrático de Traumatología y Cirugía Ortopédica de la Universidad de Sevilla

“Los valores fundamentales que recibí del Colegio son esfuerzo y superación, junto a un pensamiento liberal”


105

“Las tres palabras que creo mejor definen la personalidad del Colegio son espíritu de estudio, esfuerzo y superación”.

ESPÍRITU LIBERAL. “Efectivamente en la convivencia se mantenía un espíritu liberal, difícil de mantener si pensamos en la época que corres-pondía”.

NOMBRES PROPIOS. “Mis recuerdos de profesores concretos se centran en los dos D. Luis Rey (abuelo y padre del actual Director), D. José Rey (hermano del abuelo del actual Director) y D. Luis González”.

REUNIÓN DE COMPAÑEROS DE CURSO. “Tengo compañeros que hemos seguido la misma trayectoria profesional y realizamos periódicamente una reunión de los compañeros del curso”.

INFLUENCIA EN LA CARRERA. “Mi vocación y trayectoria profesional depende más de la trayectoria familiar que de la influencia del Colegio”.

VIVENCIAS Y ANÉCDOTAS. “Son muchas las vivencias y anécdotas, después de muchos años de convivencia en un régimen de internado pero no recuerdo ninguna especialmente relevante como para compar-tirla”.

VÍNCULOS. “Todos mis hijos y sobrinos son o han sido alumnos del Colegio”.

EVOLUCIÓN. “El Colegio ha cambiado en la introducción de los idiomas como asignaturas importantes, que han perdido el concepto de ‘Marías’ de nuestra época”.

SIN PERDER EL ESPÍRITU DE ESFUERZO. “Las nuevas generaciones están mejor formadas porque existen mejores medios y más universalización de la enseñanza, pero no se debe perder el espíritu de esfuerzo y compensa-ción a ese esfuerzo”.

LO IMPORTANTE FRENTE A LO SUPERFLUO. “Mi recomendación al Co-legio para los próximos años es que no se pierda el espíritu de esfuerzo, que no se pierda el sentido liberal de la enseñanza y de la convivencia. Que no olvidemos las cosas importantes frente a las superfluas”.

LAS MEJORES INSTITUCIONES EDUCATIVAS. “Se caracterizarán por una enseñanza bilingüe con un proyecto a largo plazo de alto nivel de com-petitividad, basado en el estudio individual tutorizado con gran interre-lación Alumno-Profesor-Tutor, con introducción de dificultad progresiva controlada dependiendo de la personalidad del alumno. Pero sin olvidar el tiempo libre de estudio para el desarrollo personal y maduración den-tro de un contexto liberal”.

“En el Colegio aprendí a organizarme para estudiar aprovechando al máximo las horas de trabajo”

“Las mejores instituciones educativas se caracterizarán por una enseñanza bilingüe con un proyecto a largo plazo basado en el estudio individual tutorizado con gran interrelación Alumno-Profesor-Tutor”

“En la convivencia se mantenía un espíritu

liberal, difícil de mantener si pensamos

en la época que correspondía”

106

Carlos Lasarte Álvarez fue alumno del Colegio entre 1959 y 1966, años en los que hizo el Bachillerato completo. En todos los cursos, salvo en el último Preuniversitario, como alumno interno. Recuerda que ingresó en el San Francisco de Paula por el deseo de sus padres de proporcionarle “una enseñanza laica y rigurosa” y elige las palabras “exigencia, seriedad y amor por el trabajo bien hecho” para definir la personalidad del Colegio. Ya en aquellos años sintió más inclinación hacia el mundo de las Letras y de las Humanidades, aunque no lo considera determinante en el hecho de que estudiara posteriormente la Licenciatura en Derecho. Catedrático de la Universidad de Sevilla entre 1980 y 1989, Secretario General y Vicerrector de Profesorado entre 1980 y 1992, desde el curso 92-93 Carlos Lasarte ostenta la Cátedra de Derecho Civil de la UNED y vive en Madrid, algo que lógicamente lo ha alejado un poco de la vida del Colegio.

AÑOS DUROS. “Cursé el Bachillerato entero en el Colegio, de 1959 a 1966, además interno, salvo en Preuniversita-rio, en el que seguí de colegial, pero externo. Mis padres y algunos otros miembros de mi familia desearon que tuviera una enseñanza laica y rigurosa. De ahí la elección del San Francisco de Paula. Recuerdos guardo bastantes de esos años, como es natural, incluidos los propios del primer año, que no eran precisamente alegres, dada la dureza del inter-nado y de la España de la época”.

LA PERSONALIDAD DEL COLEGIO. “Exigencia, seriedad y amor por el trabajo bien hecho”.

EL PERFECTO CONTRA-PUNTO ENTRE CIENCIAS Y LETRAS. “Creo que algunos profesores, como D. Luis Rey Guerrero y D. José Rey Guerrero, muy admirados en general por los estudiantes, eran el perfecto contrapunto entre las Ciencias y las Letras y hasta en el atuendo. D. Luis Rey Romero, o D. Luis Rey ‘hijo’, como durante décadas le llamamos, era una persona atenta y encantado-ra. D. Luis González un maestro auténtico en el mundo de las Letras”.

n Licenciado en Derecho por la Universi-dad de Sevilla y Doctor en Derecho por la Universidad de Bolonia.

n Ha sido Catedrático de la Universidad de Sevilla (1980-89) y Secretario General y Vicerrector de Profesorado durante los años 1989-1992.

n Desde el comienzo del curso académico 1992-93 ostenta la Cátedra y la Dirección del Departamento de Derecho Civil de la Universidad Nacional de Educación a Dis-tancia.

n Desde 1991 es Vocal Permanente de la Comisión General de Codificación del Ministerio de Justicia.

n Desde octubre de 2004 hasta octubre de 2010 fue Presidente de la Sección española de la Comisión Internacional del Estado Civil y, en el año 2009, fue nombrado Pre-sidente de dicho organismo internacional.

n Ha participado en más de una decena de obras colectivas y ha publicado nume-rosos monográficos, así como manuales sumamente renombrados, como “Curso de Derecho Civil Patrimonial”; “Principios de Derecho Civil”; Manual sobre protección de consumidores” y usuarios o “Compendio de Derecho Civil”, entre otros.

n Ha sido Profesor invitado y conferen-ciante en distintas universidades extran-jeras (Bolonia, Paris, Perú, Roma, Buenos Aires, La Habana, Salermo, etc) y es Dr. Honoris Causa por la Universidad Interame-ricana de Morelos (México) desde 2008.

“D. Luis Rey Guerrero y D. José Rey Guerrero, muy

admirados en general por los estudiantes,

eran el perfecto contrapunto entre las Ciencias y las Letras y hasta en el atuendo”

Carlos Lasarte ÁlvarezCatedrático de Derecho Civil de la UNED

“Mis padres desearon que tuviera una enseñanza laica y rigurosa, de ahí la elección del San Francisco de Paula”


107

AMISTADES DE AQUELLOS AÑOS. “Conservo ciertamente amistad con antiguos compañeros del Colegio, en algunos casos íntima y en otros más circunstancial, pero no es extraño porque desde hace casi un cuarto de siglo resido en Madrid”.

LA ELECCIÓN DE LA CARRERA. “Por distintas razones, en el Colegio me incliné hacia el mundo de las Letras y de las Humanidades, aunque no fue determinante en el hecho de que estudiara posteriormente la Licen-ciatura en Derecho”.

MONTONES DE ANÉCDOTAS. “Anécdotas del internado las tengo a mon-tones, pues tantos años compartiendo vida con un centenar de compañe-ros…”.

VÍNCULOS “FRANCISCANOS”. “El vínculo con el Colegio lo he mantenido fundamentalmente, por mi relación personal de coincidencia como Cole-gial de Bolonia con D. Luis Rey Goñi, actual Director, aunque ciertamente me gustaría pertenecer a la Asociación de Antiguos Alumnos”.

CONSEJOS PARA EL FUTURO. “Creo que el actual Director (como ‘buena rama que del tronco sale’), de formación exquisita, inquieto y avispado, no necesita consejo alguno de quien carece de experiencia de gestión privada”.

CAMBIOS EN LA EDUCACIÓN. “Los medios audiovisuales y las redes de comunicación social han revolucionado el mundo contemporáneo y también la forma de aprender y enseñar. En la comparación entre gene-raciones o entre el pasado y el presente, con sinceridad, creo que siempre vence el futuro. Aunque a veces los problemas cotidianos nos aburran, nos abrumen o nos aterren, sin duda el mundo va a mejor”.

LO QUE DEBE APORTAR EL COLEGIO EN EL SIGLO XXI. “Ilusión por el aprendizaje y estudio; defensa del propio esfuerzo y, naturalmente, liber-tad de pensamiento y crítica”.

“D. Luis Rey Romero, o D. Luis Rey ‘hijo’, como durante décadas le llamamos, era una persona atenta y encantadora. D. Luis González un maestro auténtico en el mundo de las Letras”

“Los medios audiovisuales y las redes de comunicación social han revolucionado la forma de aprender y enseñar. En la comparación entre generaciones, creo con sinceridad que siempre vence el futuro”

108

Ingresó en el Colegio en Párvulos, en la clase de D. Germán, y salió cuando terminó COU, allá por el año 1971. Venía de padres y abuelos ‘franciscanos’, de forma que en su casa “hablar del Colegio era hablar del San Francisco”. Once años de trayectoria académica de los que extrajo numerosas enseñanzas y en los que cosechó amigos que, desde entonces, le han acompañado de forma cercana y regular. Libertad, independencia y cultura del esfuerzo son, para el arquitecto Rafael Aguilar Cazorla, las principales señas de identidad del Colegio, señas que considera alejadas de la personalidad de otros colegios de su tiempo por una diferencia abismal: “Cuando oigo y leo historias de esos tiempos en otros colegios, y recuerdo lo que pasaba en el colegio de mis hermanas o de otros amigos, me sorprende pensar que estábamos en el mismo tiempo y en la misma España”.

EXCELENCIA Y CULTURA DEL ESFUERZO. “He leído en la prensa, en estos días, que hay varias escuelas de negocio españolas entre las primeras del mundo. Los métodos de estas escuelas no son más que la excelencia en el trabajo y la cultura del esfuerzo, que quizás sea lo que más necesita el recién titulado o graduado de la Universidad española, y lo que más valorará su futuro en el mercado de trabajo. Este método formativo, que caracterizó al Colegio desde hace ahora 125 años, no se debe perder, pero con especial cuidado de no caer en la trampa de la exclu-sión, seleccionando únicamente al alumno brillante. El Colegio demostró sobradamente que el método

era válido para todos”.

“MI COLEGIO”. “Toda mi vida giraba en torno a la vida del Colegio, mis amigos, mis primeros viajes, experiencias, etc. En definitiva no hay recuerdo de aquellos años que no tenga como escenario ‘mi Colegio’. Siempre fui un estudiante, como decimos, ‘normal’. Llevaba mis cur-sos por año y me podía quedar alguna en junio que tenía que sacar en septiembre. Las materias eran muy diversas, mi preferida sin duda era el dibujo, también las matemáticas y la historia del arte”.

DIFERENCIA ABISMAL. “Los rasgos principales de identidad del Colegio para mí siempre fueron la independencia, la libertad y por encima de todo la cultura del esfuerzo, que hoy parece desaparecida. Cuando oigo y leo historias de esos tiempos en otros colegios, y recuerdo lo que pasaba en el colegio de mis hermanas o de otros amigos, me sorprende pensar que estábamos en el mismo tiempo y en la misma España. La diferencia era abismal”.

n Arquitecto por la Escuela Técnica Supe-rior de Sevilla, especialidad en Urbanismo.

n Socio fundador de ALMINAR, Arquitec-tura e Ingeniería, S.L.

n Miembro de la Comisión de Patrimonio del Arzobispado de Sevilla.

n Responsable de proyectos de restauración como los de la Iglesia Ntra. Sra. de la Paz de la Plaza del Salvador; la Iglesia de San Andrés o la antigua capilla y torre del Hos-pital de San Lázaro. Ha publicado distintos libros sobre Arquitectura y Diseño, y ha obtenido premios sobre Imagen y Mobilia-rio Urbano.

Rafael Aguilar Cazorla Arquitecto“Cuando pienso en la diferencia entre lo que pasaba en mi Colegio y en los de mis amigos, me parece sorprendente que estuviéramos en el mismo tiempo y en la misma España”

“De mi clase salió de todo, desde

sacerdotes, políticos, presidentes de

entidades financieras, eminentes doctores,

magistrados, notarios o ingenieros, hasta actuales profesores

del Colegio”


109

PROFESORES “MÍTICOS”. “En mi memoria quedara para siempre profeso-res míticos del Colegio, D. Germán, D. Juan Plata, D. Luis Rey Guerrero, D. Luis González, D. Manuel Pérez Cerezal, D. Miguel Fernández de los Ronderos, D. José Ferrer, etc. Pero sin olvidar a D. Salvador y la Srta. Nines, me marcó, especialmente, el profesor de matemáticas, D. Julio Mínguez. Posiblemente de los mejores que he tenido nunca. Su método docente de explicar las matemáticas era divertido, eficaz, tremendamente pedagógico y de una originalidad como no he vuelto a ver”.

“DE MI CLASE SALIÓ DE TODO”. “De todos aquellos años conservo mu-chos amigos, más bien casi todos. De hecho seguimos viéndonos perió-dicamente y mantenemos una relación de casi a diario. De mi clase salió de todo, desde sacerdotes, políticos, Presidentes de entidades financieras, eminentes doctores, magistrados, notarios o ingenieros, hasta actuales profesores del Colegio”.

EL SALTO AL MIXTO. “Fue en mi COU, el primero después del Preuni-versitario, cuando el Colegio hizo una experiencia piloto de iniciar una serie de actividades con las de alumnas del último curso de colegio de las Teresianas, para ir preparando la vida del centro al próximo curso en el que COU iba a ser de nuevo mixto y posteriormente todo el Colegio. Así, se organizaron obras de teatro (concretamente El Medico a palos de Moliére), audiciones musicales, conferencias, etc.”.

PARA TODA LA VIDA. “He seguido teniendo vinculación con el Colegio, y mucha, ya que estuvieron mis tres hermanos menores, mis dos hijos, mis tres sobrinos, hijos de amigos como Julia Baquero o el pequeño Gonzalo, que ya siente orgullo ‘franciscano’. En la actualidad participo y colaboro en todo, aunque no pertenezco a la asociación de antiguos alumnos”.

LA EXCELENCIA COMO COMÚN DENOMINADOR. “Tengo la impresión de que el Colegio, con la intención de buscar la excelencia, puede estar buscando el alumno excelente. Esto creo que sería negativo y lejano al espíritu de siempre, me parece que se debería intentar, aunque suponga más esfuerzo, volver a lo esencial, es decir: convertir a cualquier alumno en excelente. Creo que es lo que ha hecho grande a la institución”.

EL VALOR DE LA IMAGEN. “En la enseñanza, gracias a las nuevas tecnologías, aparece como fenómeno nuevo el valor de la imagen en la forma de aprender, es posible que cualquier cosa que el profesor cuen-te, es capaz de ilustrarlo a través de imágenes fotográficas o de videos, esto hace que pueda desaparecer el esfuerzo por imaginar las cosas y por consiguiente interpretarlas. Me parece que la formación del dibujo como sistema de comunicación en este mundo tan grafico sería especialmente importante para que las nuevas generaciones tuvieran una formación más acorde con el entorno que les tocará vivir”.

EL FUTURO. “Lo primero que debe buscar el Colegio para garantizar su viabilidad futura es asegurar la continuidad familiar. Ya que sería muy difícil mantener este proyecto en manos de otro tipo de socie-dad, tipo cooperativa, etc. Si no fuera así, creo que habría que pensar en algún tipo de institución tipo fundación o similar, en la que hubiera un consejo de asesores o consultores compuesto por antiguos alumnos de reconocido prestigio en los distintos ámbito de la sociedad, y que pudiera ir dotando al co-legio, profesores y Directores del centro del Alma que sin duda la familia Rey le ha dado en los últimos 125 años”.

“Los rasgos principales de identidad del Colegio para mí siempre fueron la independencia, la libertad y por encima de todo la cultura del esfuerzo”

“He seguido teniendo vinculación con el Colegio, y mucha, ya que estuvieron mis hermanos, mis dos hijos, mis tres sobrinos y muchos hijos de amigos”

“Toda mi vida giraba en torno a la vida del Colegio, mis amigos, mis primeros viajes, experiencias... No hay recuerdo de aquellos años que no lo tenga como escenario”

110

Químico y Farmacéutico, en gran parte, y según comenta, por la influencia que sobre él ejerció D. Luis Rey Romero, a Miguel Carranza Ariza no le cabe la menor duda de que el Colegio “siempre fue, es y será un adelantado a su tiempo”. De hecho, manifiesta haber visto en los últimos años una evolución profunda y una renovación continua, pero manteniéndose fiel a sus principios: exigirse a sí mismo para poder exigir a los demás. Del San Francisco de Paula dice haber aprendido la necesidad del trabajo continuado y diario como forma de conseguir metas, así como el respeto a las ideas contrarias a las propias, “pero siempre abiertos al intercambio de esas ideas con el fin de poder escoger lo mejor de las mismas”. Sobre la comentada exigencia del centro, dice que es en efecto exigente, “pero al mismo tiempo generoso con el alumnado, premiando el esfuerzo personal por encima de la inteligencia”.

UNA FORMACIÓN INTEGRAL. “Ingresé en el Curso 1960-61 y estuve hasta 1966-67. Mi estancia en el Colegio fue, pues, de 8 años: Ingreso, Bachillerato y Preuniversitario. La razón de estudiar en el Colegio de San Francisco de Paula fue el deseo de mis padres de que lograse una formación integral, lo más amplia posible, para que estuviese preparado a la hora de elegir, con los conocimientos adquiridos, una pro-fesión a la que dedicarme en un futuro próximo”.

TRATO ENTRAÑABLE. “Recuerdo el trato entrañable con los profesores, que era de mutuo respeto, y también con el personal subalterno (Félix, Pepe, Polvillo....), con los que conviví por mi condición de mediopensionista ‘con canas-to’, y finalmente con mis compañeros, con los que sigo manteniendo magníficas relaciones de amistad y cariño. Como estudiante era normalito, con media general de Notable, algunos aprobados y alguna que otra ma-trícula. Mis materias preferidas eran las de carácter científico (biología, matemáticas, física y química) sin olvidar la historia, geografía y dibujo (más el lineal que el artístico)”.

EXIGENTE Y GENEROSO. “Era un Colegio austero en su aspecto externo, exigente y, al mismo tiempo, generoso con el alumnado, que premiaba el esfuerzo personal por encima de la inteligencia”.

TRABAJO DIARIO Y APERTURA A LAS IDEAS AJENAS. “Del Colegio aprendí el trabajo continuado y diario como forma de conseguir metas y el respeto a las ideas contrarias a las propias, pero siempre abiertos al intercambio de esas ideas con el fin de poder escoger lo mejor de las mismas. (…) La pluralidad y tolerancia entre los que convivíamos fue fundamental para llegar a ordenar mis propias ideas, reafirmándome en las

n Licenciado en Ciencias (Sección de Quími-cas) y en Farmacia.

n Especialista en Análisis Clínicos.

n Presidente de la Agrupación Territorial de Andalucía y Extremadura de la Asociación Nacional de Químicos de España (4 años).

n Decano del Ilustre Colegio Oficial de Quí-micos de Sevilla (9 años).

n Presidente de la Asociación de Químicos de Andalucía (8 años).

n Miembro de la Comisión Permanente del Consejo General de Colegios Oficiales de Químicos de España, de la Comisión Nacional de Química Sanitaria y del Consejo General de Colegios Oficiales de Químicos de España. n Presidente de la Comisión Organizadora de varias Olimpiadas de Química en Andalucía.

n Tesorero de Unión Profesional de Sevilla.

n Tesorero de la Asociación de Laboratorios de Análisis Clínicos de Sevilla.

n Presidente de la Unión Profesional de Laboratorios Andaluces.

Miguel Carranza ArizaQuímico y Farmacéutico

“El Colegio siempre fue, es y será, no me cabe la más mínima duda, un adelantado a su tiempo”


111

que consideraba mejores y abandonando otras que pudieran parecerme superables”.

INFLUENCIA PERSONAL Y PROFESIONAL. “Personalmente, los profeso-res que más me influyeron fueron D. Luis Rey Romero, D. Luis González Fernández, D. Julio Minguez, D. Manuel Pérez Cerezal Clavijo, D. Miguel Fernández de los Ronderos, D. Manuel García Vázquez. Profesionalmente, D. Luis Rey Romero. (…) Él fue el ‘culpable’, afortunadamente, de que enca-minara mis estudios universitarios por la Licenciatura de Ciencias (Sección de Químicas) y, posteriormente, por la de Farmacia”. COMPAÑEROS. “Coincido con bastante de mis compañeros en diversos ám-bitos. Muchos de mis compañeros han llegado a conseguir un estatus profe-sional de muy alta cualificación y reputado prestigio. Algunos han logrado ser destacados profesores y catedráticos de institutos y universidad, y estoy especialmente relacionado de entre ellos con Francisco Pérez Viguera, An-drés Carranza Bencano, Francisco Javier Monteseirín Mateo y, sobre todo, con José Luis Gómez Ariza, compañero de Colegio y de Facultad”.

PRÁCTICA DE LABORATORIO. “Podría contar muchas anécdotas. Sin embargo, una que siempre recordaré tuvo lugar en el laboratorio de física y química. D. Luis Rey Romero nos explicaba cómo trabajar el vidrio al fuego.... Tuve la mala fortuna de que al doblar una de las varillas de vidrio toqué la parte incandescente y me quemé; tiré la varilla al suelo. Se me acercó D. Luis y, tras mirarme la quemadura y ponerme una po-mada, no se le ocurrió otra cosa que ponerme un cero. A la semana siguiente, en otra práctica se necesitaba doblar una varilla hueca de vidrio para conectar dos recipientes; calenté la varilla, llamé a D. Luis para pre-guntarle qué ángulo debía tener y al cogerlo se quemó. Esta vez no me puso el correspondiente cero, pero sí que me castigó: A permanencia con D. Germán hasta las siete de la tarde”.

VÍNCULOS. “He mantenido mi vinculación con el Colegio a través de D. Luis Rey Romero (q.e.p.d) y D. Luis Rey Goñi tanto personalmente como en asuntos relacionados con la química, especialmente, con las Olimpiadas de Química, y con D. Miguel Fernández de los Ronderos a nivel profesional y al que me une una profunda amistad. Aunque no he podido mantener una actividad continuada en el Colegio por falta de tiempo, siempre que me ha sido posible o se me ha ofrecido la oportunidad de hacerlo, he intentado dejar mis ocupaciones y dedicarle un ‘ratito’. En ocasiones, he aportado para la biblioteca algún que otro libro que consideraba interesante estuviese allí: uno de ellos firmado por el profesor Henry Taube, Premio Nobel de Química”.

POR DELANTE DE LOS ACONTECIMIENTOS. “El Colegio siempre fue, es y será -no me cabe la más mínima duda- un adelantado a su tiempo. Siempre ha ido por delante de los acontecimientos y de lo que la sociedad podía exigir. Por ello, ‘desde fuera’ he visto una evolución profunda y continua en la búsqueda de ofertas educativas pioneras pero siempre manteniéndose fiel a sus principios: exigirse a sí mismo para poder exigir a los demás”.

SEGUIR EN EL EMPEÑO. “No tendré la osadía de dar recomendaciones ni consejos para que ‘nuestro Colegio’ pueda llegar a cumplir una cantidad de años como los cumplidos hasta ahora. Sin embargo, sí me atrevería a vaticinar que, incluso, se pudiera rebasar esa cifra siempre y cuando la dirección siga en el empeño de ofertar una enseñanza de calidad -como hasta ahora ha venido haciendo desde sus primeros pasos- acorde con los tiempos que en cada momento se presente”.

VERSATILIDAD, ENTUSIASMO Y TRABAJO CONTINUADO. “El estudiante del siglo XXI, como el de todos los tiempos, debe tener memoria, algo de inteligencia y, sobre todo, ser un trabajador nato. Con estas tres condicio-nes, el éxito está asegurado. Creo que las mejores instituciones educativas se distinguirán de las menos buenas no sólo por sus propuestas educativas sino por su versatilidad y, por supuesto, por el entusiasmo del profesorado en proporcionar esa enseñanza y el esfuerzo y el trabajo continuado del estudiante para asimilarla”.

“He visto en el Colegio una evolución profunda y continua en la búsqueda de ofertas educativas pioneras pero siempre manteniéndose fiel a sus principios: exigirse a sí mismo para poder exigir a los demás”

112

Ingresó en el Colegio en 1960, y permaneció en él siete años, en los que cursó todo el Bachillerato y el PREU. Llamado por su prestigio, sus padres matricularon al joven José Luis Gómez Ariza en el Colegio de San Francisco de Paula en el año 1960. Allí, el futuro Catedrático de Química cursó todo el Bachillerato y el PREU, una “puerta desconocida” que se abrió ante sus ojos y que en cierto modo fue comparable, como él mismo afirma, al país maravilloso de Alicia de las obras de Lewis Carroll. Aunque todos los profesores fueron importantes para él, no tiene reparos en afirmar que todo lo que ha llegado a ser como químico y profesor universitario se lo debe a D. Luis Rey Romero, de quien obtuvo innumerables enseñanzas, entre ellas el interés por la química como el gran “motor del mundo”. Participa activamente en la Asociación de Antiguos Alumnos y sus dos hijas han cursado estudios en el Colegio. Ello le ha permitido tener un conocimiento más preciso de su realidad actual, de forma que considera que “mantiene vivos sus valores tradicionales pero incorpora todo lo que un joven actual debe conocer”. Para este Catedrático de Química Analítica, buena parte de la clave del futuro del Colegio está en D. Luis Rey Goñi, su actual Director.

LA PUERTA DESCONOCIDA. “El Colegio me abrió una puerta desconoci-da (a veces me recuerda las obras de Lewis Carroll). Para mí fue todo un descubrimiento que despertó mi ambición por el conocimiento. Siempre me atrajeron las matemáticas, las ciencias naturales, la física y sobre todo la química, bajo el magisterio irrepetible de D. Luis Rey Romero”.

APRENDER A MARCARSE METAS. “Para mí, el Colegio podría sinteti-zarse en unos pocos rasgos definitorios: seriedad, compromiso, ecuanimi-dad, afán de superación, trato entrañable. En el San Francisco aprendí a marcarme metas y objetivos importantes, la perseverancia y el espíritu de superación, la voluntad inquebrantable, la responsabilidad”.

BÚSQUEDA DE CONOCIMIENTO Y ESTÍMULO PERSONAL. “En los años de mi permanencia en el centro las ideas no solían manifestarse en nuestro país, pero la vida del Colegio siempre discurrió en un ambiente de libertad personal, de respeto a la forma individual de pensar, de tolerancia. Los principios que siempre estaban presentes en la vida del Colegio eran la búsqueda del conocimiento y el estímulo personal, así como la perseveran-cia por alcanzar estos objetivos”.

TODOS FUERON IMPORTANTES. “Todos los profesores que contribuyeron

n Licenciado en Química por la Universi-dad de Sevilla (1973). Doctor en Química (1976).

n Catedrático de Química Analítica en la Universidad de Huelva desde 1993.

n Autor o coautor de más de 300 publi-caciones científicas, así como de diversos libros y patentes.

n Miembro de diversas sociedades científi-cas, ha obtenido diversos premios como el Premio de Investigación Regional de An-dalucía (2003) o el Premio a la Excelencia Investigadora concecido por la Asociación de Industrias Químicas Básicas de Huelva (2003).

José Luis Gómez-Ariza Químico. Catedrático de Química Analítica en la Universidad de Huelva

“Todo lo que he hecho después de salir del Colegio se lo debo a D. Luis Rey Romero”

“Mi estancia en el Colegio fue decisiva en la elección de mi

futuro. La importancia de la constancia,

el amor propio, el espíritu de superación,

la sana ambición, caló profundamente en ‘mis genes’, y en

especial el interés por la Química”


113

a mi formación durante mi estancia en el Colegio fueron importantes. Pero de manera especial me gustaría destacar en los cursos iniciales a D. Ma-nuel Pérez Cerezal por su humanidad y su poderosa pedagogía, a D. Julio Mínguez por su forma de enseñar a ‘pensar’ las matemáticas y a D. Luis Rey Guerrero por las clases maravillosas de ‘Observación de la Naturaleza’, quizá uno de los mejores ‘inventos’ que he visto para despertar el interés por la ciencia y el conocimiento. En la segunda parte de mi Bachillerato fueron profesores claves D. Luis González por transmitirnos una visión minuciosa, profunda, muy científica de la Historia y de la Literatura. Pero sin duda alguna, el profesor que más influyó en mí, tanto personal como académicamente fue D. Luis Rey Romero, mi maestro y mentor, el que determinó mi interés por la Ciencia y en particular por la Química. No me importa confesar que todo lo que he hecho después de salir del Colegio, durante más de 40 años dedicados a la Universidad, se lo debo a él”.

LAZOS PARA TODA LA VIDA. “Los lazos que se crean en esta etapa de la vida se mantienen poderosamente a lo largo del tiempo. Mantengo el re-cuerdo entrañable de algunos compañeros como José Eduardo García, Pepe Girona, Miguel Ángel Pineda, Javier Monteseirín Mateo, Miguel Carranza, y otros muchos. Con algunos de sigo manteniendo una buena amistad, a pesar del tiempo transcurrido”.

LA QUÍMICA, EL “MOTOR DEL MUNDO”. “Mi estancia en el Colegio fue decisiva en la elección de mi futuro. La importancia de la constancia, el amor propio, el espíritu de superación, la sana ambición, caló profundamente en ‘mis genes’, y en especial el interés por la Química, ‘motor del mundo’, en palabas de D. Luis Rey Romero”.

MODERACIÓN, EQUILIBRIO Y BUEN HACER. “Con motivo de uno de los ‘renacimientos’ del MENDRUGO que protagonizó mi curso en Preuniversitario, D. Luis Rey Guerrero nos dijo: “Si hacéis una caricatura simpática de algún profesor, nos reiremos todos, pero si le ponéis ‘dos cuernos y un rabo’, superáis los límites del buen gusto y el respeto que todos merecemos”. De esta forma tan didáctica y contundente, nos hizo evidente D. Luis cómo la moderación, el equilibrio y el buen hacer debía estar en todas nuestras actuaciones, y en particular en ésta”.

D. LUIS REY GOÑI, PIEZA CLAVE PARA EL FUTURO. “Creo que el proyecto actual del Colegio mantiene vivos sus valores tradicionales pero incorpora todo lo que un joven actual debe conocer: las lenguas, las Nuevas Tecnologías, las Ciencias emergentes. El equilibrio de todo ello es difícil, pero tengo gran con-fianza en el Director actual, D. Luis Rey Goñi, al que creo conocer, ya que fue alumno mío durante su Licenciatura de Química en Sevilla. D. Luis Rey Goñi va a ser una pieza clave para el futuro del Colegio en estos comienzos del siglo XXI”.

CUIDAR EL BINOMIO. “Creo que hay buenos y malos profesores, y buenos y malos alumnos. La enseñanza parte de este binomio, el profesor y el alumno, lo demás son circunstancias. La institución que cuide que el binomio funcione se mantendrá, más allá de los avatares y del tiempo. Confío que este sea el caso de nuestro Colegio”.

NO HAY FÓRMULAS MÁGICAS. “No existen fórmulas mágicas para garantizar un futuro de éxito para el Colegio, sólo lealtad al pasado y confianza en mantener los principios en el futuro, incorporando, por supuesto, los hallazgos de las nuevas generaciones. Los principios están ahí, pluralidad, tolerancia, convi-vencia, afán de superación y auto exigencia. Sólo hay que seguir manteniéndolos”.

“No existen fórmulas mágicas para garantizar un futuro de éxito para el Colegio, sólo lealtad al pasado y confianza en mantener los principios en el futuro, incorporando, por supuesto, los hallazgos de las nuevas generaciones”

114

Hijo de D. Luis González y Dª María Estela, dos verdaderas instituciones en el Colegio, Francisco Javier González, Magistrado de la Audiencia Provincial de Sevilla y Presidente de una de sus secciones penales, realizó todos sus estudios previos a la Universidad en el San Francisco de Paula, del que guarda unos recuerdos “francamente buenos” y donde dice haber disfrutado de “una enseñanza liberal, tolerante, alejada de cualquier dogmatismo y abierta al conocimiento y al mundo”. Aunque reconoce que el paso por el Colegio no influyó mucho sobre la elección de su carrera, piensa que los valores que allí le inculcaron, junto con los aprendidos de sus padres, le resultan “continuamente de gran utilidad” en el trabajo profesional que desarrolla, “cada día de mayor complejidad”.

ALUMNO DEL SAN FRANCISCO POR OBVIAS RAZONES. “Mis padres eran profesores del Colegio, mis dos hermanos mayores ya estudiaban en él… Por obvias razones ingresé en San Francisco de Paula (…) Fueron muchos años de aprendizaje en el Colegio. Mis recuerdos son francamente buenos. El paso del tiempo siempre nos hace tender a idealizar épocas pasadas, y no digamos si se habla de una fase de mi vida que comprende de los 5 a casi los 17 años de edad, pero creo que no me equivoco con esa afirmación. No era mal estudiante. Y para ser sinceros, no hubo ninguna materia que me atrajera especialmente por encima de las demás; lo que tampoco quiere decir que todas me resultaran atractivas. Tan es así que hasta el final

no tuve muy claro lo que estudiaría en la Universidad, hasta el punto de que estudié el Bachillerato de Ciencias para terminar haciendo Derecho”.

ABIERTO AL CONOCIMIENTO Y AL MUNDO. “Hablando del Colegio que yo viví y disfruté, esa ‘personalidad’ se plasmaba en una forma de en-tender la enseñanza liberal, tolerante, alejada de cualquier dogmatismo, abierta al conocimiento y al mundo. En el Colegio, adquirí interés por el saber, hábito de estudio, capacidad de trabajo, autoexigencia, sentido de la responsabilidad. (…) El Colegio no influyó especialmente en mi carrera. Pero en cuanto a formación personal, los valores inculcados en el Colegio -junto con los aprendidos de mis padres- continuamente me resultan de gran utilidad en el trabajo profesional que desarrollo, cada día de mayor complejidad”.

INDEMNE DEL AMBIENTE IMPERANTE. “En las aulas en las que estudié compartí asientos con compañeros de toda clase y procedencia. Por lo que recuerdo esa fue siempre una preocupación de D. José y D. Luis Rey Gue-rrero, los entonces Directores. Hay que tener en cuenta la época en que yo estudié, la última etapa del franquismo, un régimen no dado precisamente al pluralismo y la tolerancia. Pues bien, si algo puedo agradecer al Colegio es haber salido indemne del medio ambiente imperante”.

n Licenciado en Derecho por la facultad de Sevilla (Promoción 1972-1977).

n Ingresó en la Carrera Judicial en el año 1982.

n Magistrado desde el año 1984, con destino desde entonces en la jurisdicción penal.

n Desde 1992 en la Audiencia Provincial de Sevilla, y desde 2007 Presidente de una de sus secciones penales.

Francisco Javier González FernándezMagistrado de la Audiencia Provincial de Sevilla

“En el Colegio disfruté de una enseñanza liberal, tolerante, alejada de cualquier dogmatismo, abierta al conocimiento y al mundo”

“Recuerdo cuando D. Luis Rey Guerrero

nos reunió para informarnos, con

gesto grave, del asesinato de John

Kennedy. Creo que eso refleja el espíritu de mentalidad abierta, de interés por todo lo que en el mundo

sucedía, que tenía el Colegio”


115

PROFESORES COMPETENTES Y GRANDES PERSONAS. “El recuerdo que tengo es el de un conjunto de profesores competentes, grandes personas realmente interesadas en formarnos y en que aprendiéramos, a lo que nosotros, los alumnos, no siempre respondíamos con igual entusiasmo. Por razones quizás emotivas, sí he guardado siempre un gratísimo recuerdo de D. Germán. Fue mi primer profesor, y lo fue du-rante dos años. Con él aprendí a leer y mis primeras letras; algo difícil de olvidar. Para colmo era una persona de una inmensa bondad y con una enorme paciencia. Recuerdo también a D. Julio Mínguez, profesor de matemáticas en el tercer curso de Bachillerato, cuando tenía, si no recuerdo mal, 12 años. Todavía me maravillo recordando cómo era capaz de que aprendiéramos tamaña asignatura sin un libro, empleando como única guía sus explicaciones. Y ahí podía radicar el ‘milagro’. Sus explicaciones consistían en sacar a un alumno a la tarima e, indu-ciéndole a que pensara por sí mismo (y con él toda la clase), le hacía plasmar en la pizarra el desarrollo de las teorías, teoremas o como se llamaran. Enseñar así logaritmos, y que aprendiéramos, tiene mérito”.

CONEXIÓN CON LA ACTUALIDAD. “Anécdotas simpáticas podría contar muchas. También alguna triste (…). Pero hay una que creo que refleja ese espíritu de mentalidad abierta, de interés por todo lo que en mundo sucedía, que representaba el San Francisco de Paula en aquella época. No sé por qué, pero uno de los recuerdos más indelebles que tengo y que con mucha frecuencia se me viene a la memoria es el de un día del invierno de 1963 cuando a los alumnos de Primaria y de los cursos primeros de Bachi-llerato nos reunieron en uno de los patios del Colegio donde D. Luis Rey Guerrero (abuelo del actual Director), con gesto grave, nos informó del asesinato de John Kennedy. Evidentemente no éramos conscientes del alcance de lo sucedido, pero con el tiempo fuimos asimilando que en el mundo ocu-rrían cosas, y que esas cosas nos podían afectar. Puede resultar curioso, pero en 3º de Bachillerato (en el famoso año 1968) también se nos hablaba, por ejemplo, de la crisis de EE.UU. con Corea del Norte a causa del buque espía norteamericano ‘Pueblo’, o del mayo francés, y eso con ocasión de las clases de historia sagrada que nos daba D. Manuel García Vázquez. O cuando D. Manuel Sánchez Asencio, a cuentas de las clases de geografía que nos daba para prepararnos para la reválida, nos comentaba la crisis de los misiles de Cuba”.

PROYECTO CAMBIANTE. “Teniendo en cuenta que salí del Colegio en el año 1972 puede decirse que ha cambiado tan intensamente como haya podido cambiar la sociedad en la que está inmerso. Tan cambiante que, incluso, me resulta distinto al que conocieron mis hijos (mi hija pequeña terminó sus estudios en SFP en el año 2006). Desde esa visión ‘externa’ percibo, pues, un proyecto colegial distinto al que yo viví. (…) Desde luego, me apabulla saber que chiquillos de pocos años comienzan a apren-der en varios idiomas. Hay que reconocer la responsabilidad de impartir una educación de ese calado puliendo al mismo tiempo todo amago de arrogancia intelectual en los alumnos”.

MANTENER LA PERSPECTIVA HUMANÍSTICA. “No me creo en condiciones de hacer recomendación alguna a quienes tienen mucha más experiencia que yo en esas lides y, sobre todo, la responsabili-dad de llevar el barco a buen puerto. Que los tiempos cambian es un lugar común, y empieza a serlo también, desgraciadamente, que los que se avecinan no son precisamente buenos. Si cada vez más las necesidades del mercado han ido modificando -no sé si degenerando- la enseñanza, lo que se avecina puede ser peor. Prudencia es que lo me atrevo a sugerir. Desde luego, mantener la perspectiva huma-nista que siempre caracterizó al San Francisco de Paula tal como yo lo conocí como alumno”.

“Yo estudié en la última etapa del franquismo, un régimen no dado precisamente al pluralismo y la tolerancia. Pues bien, si algo puedo agradecer al Colegio es haber salido indemne del ambiente imperante”

116

Ingeniero Técnico Industrial y Empresario del sector metalúrgico, José María Manzanares ingresó en el San Francisco de Paula en el curso 60-61. Comenta que el nivel de exigencia era muy alto y que a los alumnos les inculcaban “responsabilidad en todos los órdenes de la vida, formalidad y comprensión de la forma de ser ajena para una mejor convivencia”. Sobre este aspecto, recuerda que “en plena etapa del nacional catolicismo, los alumnos de Bachillerato que no profesaban la religión católica, estaban autorizados para ausentarse de la clase que impartía el párroco de San Pedro, D. Francisco Cruces”.

VARIAS GENERACIONES. “Ingreso en el curso 1960-61 en la clase de D. Nicolás. Para que esto ocurriera influyó en mis padres mi tío y padrino José Manzanares García, amigo de D. José Rey; sus hijos, mis primos José Luis y Fernando, habían obtenido muy buenos resultados académicos en el Colegio. Estuve ocho años formándome en el San Fran-cisco de Paula. (…) Mi hijo José Mª Manzanares Saldaña también estudió la ESO y el Bachillerato en San Francisco de Paula”.

MUY EXIGENTE. “En general mis recuerdos son muy gratos, aunque el nivel de exigencia en el estudio era muy alto. Por este motivo se creó un problema en el colegio el curso 1966-67, en el que sólo había una clase de 5º de Bachillerato y habíamos aprobado la reválida todos los alumnos que componíamos las dos clases de 4º de Bachillerato del curso anterior, por lo que no teníamos cabida todos los que queríamos continuar nuestros estudios en el Centro. Afortunadamente la Inspección autorizó un curso con todos los alumnos. Me considero un estudiante de nivel medio, sobre todo en las asignaturas de

letras. Mis materias preferidas eran las asignaturas de ciencias y el dibujo”.

PERSONALIDAD Y VALORES. “La personalidad del Colegio está mar-cada por la profesionalidad en la Dirección y Claustro de profesores; innovación y rigor en el método educativo y respeto a la diversidad del alumnado. Nos inculcaban responsabilidad en todos los órdenes de la vida, formalidad y comprensión de la forma de ser ajena para una mejor convivencia”.

EL SUECO Y LAS CLASES DE RELIGIÓN. “En el curso 1961-62, en Ingre-so con el profesor D. José Montllor, estuvo unos meses compartiendo las clases con nosotros un alumno sueco, lo que me pareció muy adelantado para la época (…) También destacaría que, en plena etapa del nacional catolicismo, los alumnos de Bachillerato que no profesaban la religión católica, estaban autorizados para ausentarse de la clase que impartía el párroco de San Pedro, D. Francisco Cruces”.

n Ingeniero Técnico Industrial, especializa-do en Proyectos y Direcciones de Obra de Estaciones de Servicio, y Empresario del sector metalúrgico.

n Actualmente Tesorero de la Ejecutiva Nacio-nal de Consejo General de Ingenieros Técnicos Industriales y de la Asociación Nacional de Ingenieros Técnicos Industriales de España e Interventor de la Mutualidad de Peritos e Ingenieros Técnicos Industriales de España.

n Ha desempeñado diversos cargos en el Cole-gio de Peritos e Ingenieros Técnicos Industria-les de Sevilla, del que fue Decano entre 200 y 2004.

José María Manzanares TornéIngeniero Técnico Industrial y Empresario

“Nos formaron en la responsabilidad, la formalidad y la comprensión de la forma de ser ajena para una mejor convivencia”

“En casi todas las asignaturas de los últimos cursos, se

daban los temarios a un nivel similar a los

primeros cursos de las carreras técnicas,

facilitándonos posteriormente el

estudio de éstas”


117

PROFESORES MUY INSPIRADORES. “Destacaría a D. José Rey por su elegancia y personalidad. A la profesora Maribel Goñi, que me enseñó a ver las matemáticas más cercanas por su manera de enseñar innovadora. A D. Manuel Pérez Cerezal y su famosa ‘máquina’; a Dª Estela, que nos hizo amar la Geografía Española. La verdad es que en el San Francisco, en casi todas las asignaturas de los últimos cursos, se daban los temarios a un nivel similar a los primeros cursos de las carreras técnicas, facilitándonos poste-riormente el estudio de éstas. En 5º de Bachiller, con D. Luis Rey Romero, aprendimos de memoria la tabla periódica y a deducir, a través de ésta, la configuración atómica y electrónica de sus elementos”.

PREMIO DE DIBUJO. "El dibujo, tanto el artístico como el lineal, fue otra asignatura que me marcó. (…) En el año 1963 recuerdo que la profesora de Dibujo nos animó a presentar nuestros trabajos a una exposición-concurso Nacional de pintura; realicé un cuadro impresionista sobre un bodegón que ella preparó y tuve la suerte de ser uno de los premiados".

COMAPÑEROS. “Recuerdo que en mi curso casi el 50% eran internos que procedían de fuera de Sevilla y como es lógico es más difícil conservar una amistad; pero cuando coincido con alguno de ellos, recordamos nuestra época de compañeros del San Francisco”.

LA ELECCIÓN DE LA CARRERA. “El tener el Colegio, en el ámbito científico-técnico, un plantel de profe-sorado que sabía transmitir y a su vez crear un ambiente agradable en las clases, me facilitó atreverme con una carrera de ingeniería, a pesar de saber las dificultades que esa elección conllevaba (…)”.

MULTA DE 50 PESETAS. “Algunos de los compañeros que jugábamos al balompié e íbamos en dirección a la zona de la Macarena, nos citábamos a la terminación de las clases de la tarde para echar un partidillo delante del Palacio de Dueñas. No sé si por el jaleo que armábamos o porque alguna que otra vez tropezá-bamos con algún viandante que se dirigía a palacio, lo cierto es que una tarde, como teníamos por costum-bre, marcamos las porterías con las maletas y empezamos el partido. Cuando nos dimos cuenta, había dos municipales en unas de las porterías, llamándonos. Todos salimos corriendo y, al pasar por la otra portería, los que tenían las maletas en ella las recogieron a toda prisa. Pero he aquí que mi equipo tenía las maletas en la otra portería y tuvimos que ir a recogerlas, teniéndonos que acercar a los guardias. Nos informaron los municipales de que existía una ordenanza que prohibía jugar al fútbol en la calle y que, debido a la denuncia del palacio de la Duquesa, nos tenían que multar; nos tomaron nota de todos nuestros datos y nos dejaron marchar. A partir de ese día, la primera pregunta a los compañeros al llegar a clase era si a alguno le había llegado la multa. Y así fueron pasando los días, con la preocupación de cómo reaccionarían nuestros padres cuando llegara la notificación, aunque teníamos la esperanza de que los municipales se hubieran compadecido de nosotros y no llegara nada. Pero sí que llego, ¡y nada menos que una multa de 50 pesetas de las de aquella época! En mi caso, como mi padre me consideraba un niño tímido y retraído, recuerdo que me recibió quitándole importancia a ese tema que me había quitado el sueño durante muchos días”.

BUSCANDO LA EXCELENCIA ACADÉMICA. “Creo que el Colegio, desde que terminé en él mis estudios, ha ido incorporando a su tarea educativa todos los avances tecnológicos y pedagógicos que se han ido pro-duciendo, siempre que puedan redundar en conseguir la mejor preparación para sus alumnos, que ha sido y seguirá siendo la idea básica del proyecto del San Francisco de Paula. (…) Cuando yo estudié en el Colegio, no existían los medios tecnológicos con los que cuentan actualmente los alumnos. En cambio sí contábamos con lo fundamental, que era y sigue siendo, la excelente preparación del profesorado y con un proyecto educativo muy avanzado. Las nuevas generaciones reciben mucha más cantidad de información pero creo que eso no conduce necesariamente a una mejor formación”.

FORMACIÓN EXTRAORDINARIA. “Le recomendaría que mantengan la línea de trabajo que llevan desde la crea-ción del Centro, ya que ha demostrado sobradamente su utilidad para formar extraordinariamente a sus alumnos”.

“El Colegio ha ido incorporando los avances tecnológicos y pedagógicos que se han ido produciendo y puedan redundar en la mejor preparación para sus alumnos, que ha sido y seguirá siendo la idea básica de su proyecto”

118

Catedrático de la Universidad de Sevilla y fundador de una compañía andaluza líder en ingeniería industrial y consultoría ambiental, con una creciente presencia internacional, Vicente Cortés asegura que en el Colegio adquirió la capacidad de estudio que le fue necesaria para sus estudios universitarios y el convencimiento de que el esfuerzo al final tiene su premio. En el San Francisco de Paula fue un alumno excepcional, con predilección por la Química y la Geografía, que salía todos los años en los Cuadros de honor de ABC, que sigue guardando su madre. D. Luis Rey Guerrero y su hijo D. Luis Rey Romero fueron los dos profesores que más le influyeron y recuerda con especial agrado sus colaboraciones en la revista MENDRUGO. Piensa que lo principal que una institución educativa como el San Francisco de Paula debe aportar a sus alumnos en el siglo XXI es una buena capacidad analítica y crítica para discriminar y seleccionar el enorme caudal de información que hoy circula.

PRESTIGIO Y PROXIMIDAD. “Ingresé en el Colegio en octu-bre de 1961. Los motivos fueron dos: el prestigio que tenía el Colegio y la enorme proximidad física entre el domicilio familiar y el Colegio. Estuve hasta que terminé el Bachille-rato, en el 1969”.

SIEMPRE EN LOS CUADROS DE HONOR. “Yo salía todos los años en los Cuadros de honor de ABC, que incluso sigue guardando mi madre. Mis materias preferidas eran la química y la geografía”.

SERIEDAD Y RIGOR. “Seriedad y rigor en el trabajo. Eso es lo que yo creo que distinguía princi-palmente al Colegio”.

VALORES. “En el Colegio adquirí la capacidad de estudio y el convenci-miento de que el esfuerzo al final tiene su premio”.

n Doctor Ingeniero Industrial por la Escuela Superior de Ingenieros de Sevilla, Catedráti-co de Ingeniería Química de la misma desde 1986 y socio fundador de INERCO, Ingenie-ría Tecnología y Consultoría S.A, imparte docencia en Tecnología de Combustibles, sus procedimientos de transformación y los efectos sobre el medio ambiente.

n Desde el año 2007 es Director del Programa de Captura de CO2 de CIUDEN, fundación pública estatal responsable de la construcción y operación de un centro de referencia internacional para el desarrollo y validación de tecnologías de Captura y Almacenamiento de CO2 en El Bierzo (León).

n Sus actividades de I+D+I, mayoritaria-mente realizadas bajo contrato con compa-ñías del sector energético y con la Comisión Europea del Carbón y del Acero, se centran en el desarrollo y mejora de técnicas de de-puración de gases de combustión de deriva-dos petrolíferos y carbón; en la operación y control de grandes instalaciones de combus-tión para mejora de rendimiento y reducción de emisiones de CO2 y en el diseño de planes de gestión y herramientas predictivas para la mejora del tráfico urbano.

n Es miembro del Comité de Expertos en Combustión y Gasificación de la DG Inves-tigación de la Comisión Europea, Miem-bro del Comité Ejecutivo de la Agencia Internacional de la Energía, Greenhouse Gas Program desde 2007 y miembro del Advisory Council, Plataforma Europea de Cero Emisiones.

n Ha recibido cinco Premios de Inves-tigación Ciudad de Sevilla sobre Medio Ambiente Urbano, y es autor de más de treinta publicaciones y varias patentes sobre sistemas de optimización de combustión en hornos y calderas.

Vicente Cortés GaleanoDoctor de Ingeniería Química, Catedrático de la Universidad de Sevilla y Empresario

“En el Colegio adquirí la capacidad de estudio y el convencimiento de que el esfuerzo al final tiene su premio”

“Si hubiera venido de otro colegio, mi rendimiento

en el primer curso universitario no

hubiera sido el mismo. Y eso se lo debo a la

preparación que traía”


119

PREMIO AL ESFUERZO. “Todo el mundo era bien recibido, pero había una clara preferencia por los alumnos que se esforzaban y daban un resultado óptimo”.

D. LUIS REY PADRE E HIJO. “Me marcó D. Luis Rey Guerrero y su hijo D Luis Rey Romero, éste último extraordinariamente. Con él disfrutaba en sus clases muchísimo”.

ANTIGUOS COMPAÑEROS. “Con uno de mis antiguos compañeros sigo coincidiendo muchísimo, hasta el punto de que es el marido de la madri-na de mi hija, Pablo Emilio Pérez Mallaína, que es Catedrático de Historia de América de la Universidad de Sevilla. Otro compañero que ha tenido una trayectoria muy destacada es Juan Fernández Haeger, Catedrático de Ecología de la Universidad de Córdoba”.

INFLUENCIA EN LA CARRERA PROFESIONAL. “En la elección de la vo-cación no influyó en demasía. Pero sí, una vez elegida la opción, influyó en mi formación de manera excelente. Si hubiera venido de otro colegio, mi rendimiento en el primer curso universitario no hubiera sido el mis-mo. Y eso se lo debo a la preparación que traía”.

REDACTOR DE MENDRUGO. “Recuerdo con mucho agrado las contribu-ciones que hacía en MENDRUGO; el contribuir a algo que leían los demás era una iniciativa muy atractiva”.

PERFECCIONISMO. “No sé muy bien cómo es el proyecto docente del Colegio en este momento, pero sí estoy convencido de que con el espíritu innovador y de perfeccionismo que caracteriza al Colegio están las tecno-logías plenamente incorporadas.”

ESPÍRITU DE ESFUERZO. “Mi impresión general es que las nuevas generaciones están mucho peor formadas de lo que estábamos nosotros. Hay una cuestión básica: el cultivo del espíritu del esfuerzo y del reconocimiento se ha perdido. Hay una tendencia al igualitarismo por abajo”.

GARANTÍA DE ÉXITO. “Mi recomendación es que mantengan su espíritu y la intención de ser una institu-ción de referencia e incorporar innovación de manera meditada. Eso es garantía de éxito”.

CAPACIDAD ANALÍTICA Y CRÍTICA. “Creo que lo fundamental que debe aportar hoy un Colegio de refe-rencia a sus alumnos es una buena capacidad analítica y crítica para discriminar y seleccionar el enorme caudal de información que les llega, en ocasiones no contrastado”.

“Me marcaron D. Luis Rey Guerrero y su hijo D Luis Rey Romero, éste último extraordinariamente. Con él disfrutaba en sus clases muchísimo”

“Un Colegio debe hoy aportar a sus alumnos una buena capacidad analítica y crítica para discriminar y seleccionar el enorme caudal de información que les llega en ocasiones no contrastado”

120

Médico especialista en Anestesiología y Reanimación, Jerónimo Herrera Silva ingresó como alumno interno en 1961, y cree que esa experiencia en el internado le fue muy útil para cultivar el compañerismo y hacer buenos amigos. Utiliza una palabra, “liberal”, para definir la personalidad del San Francisco de Paula y señala que en sus aulas aprendió a ser responsable en el trabajo y a ser lo suficientemente competitivo como para marcarse metas constantemente e intentar alcanzarlas. Considera asimismo que los años en el Colegio fueron decisivos para realizar sus estudios de Medicina y recomienda a quienes llevan las riendas del centro en la actualidad que mantenga sus valores pasados y actuales, incentivando a los alumnos para que traten de ser cada vez mejores. Finalmente, señala que un colegio como el San Francisco de Paula debe ofrecer una educación de calidad y buscar permanentemente la excelencia, extendiendo un espíritu liberal y un clima de responsabilidad entre alumnos y profesores.

INGRESO. “Ingresé en el año 1961 como alumno interno. Estuve interno cuatro años. En PREU estuve externo. Mis padres tenían conocimiento del Colegio a través de D. Germán Delgado, y ésa es la razón por la que escogieron este centro”.

INTERNADO. “Los años de internado me sirvieron de base para encontrar y fomentar el conocimiento de muchos

compañeros y amigos. Yo era un estudiante de Notable de nota media y mis materias preferidas eran el latín, la literatura y la biología”.

SOBRE TODO, LIBERAL. “Si tuviera que resumir en una palabra la personali-dad del Colegio utilizaría ésta: liberal”.

VALORES. “En el Colegio aprendí el compañerismo, la responsabilidad en el trabajo y la competitividad. En la vida es fundamental ponerse metas e intentar alcanzarlas, y eso me lo enseñaron en el Colegio”.

n Licenciado en Medicina y Cirugía en el año 1974 por la Facultad de Medicina de Sevilla.Ese mismo año se incorpora como Médico del Cuerpo de Titulares en Fuentes de León (Badajoz). n En 1975 se traslada al Hospital Militar de San Sebastián.

n En 1977 se forma como Medico especia-lista en Anestesiología y Reanimación vía M.I.R en la Ciudad Sanitaria Virgen del Rocío (Sevilla) hasta 1979. n En 1980 regresa a Badajoz, incorporándose como médico adjunto de Anestesiología y Re-animación en el Hospital del Insalud de Don Benito-Villanueva hasta 1985. Desde 1981 es Jefe de Servicio de Anestesiología del Hospi-tal Municipal de Santa Justa de Villanueva de la Serena.

n En 1985 vuelve a Sevilla como jefe clínico de Anestesiología y Reanimación del Hospital Universitario de Valme, donde trabaja en la actualidad.

n Es miembro numerario de diferentes sociedades médicas y ha sido Presidente de la Sociedad Andaluza del Dolor y Asistencia Continuada; Vocal de la Junta Directiva de la Sociedad Española del Dolor; y Vocal de la Junta Directiva de la Sociedad Española de Cuidados Paliativos. Ha sido también Director de la Revista Dolor: Avances y Actualidad.

Jerónimo Herrera SilvaMedico especialista en Anestesiología y Reanimación. Jefe Clínico del Hospital de Valme

“En el Colegio aprendí el compañerismo, la responsabilidad en el trabajo y la competitividad”

“Tengo actualmente familiares en el

Colegio y me cuentan que el colegio ha

mantenido y superado el nivel educativo al

incorporar el deporte, los idiomas y las

nuevas tecnologías”


121

TOLERANCIA. “La tolerancia y la convivencia de ideas distintas han sido y son una de las grandes virtudes del Colegio”.

PROFESORES. “Recuerdo especialmente a D. José Rey Guerrero, D. Luis González, D. José Olivares, D. Miguel Fernández y el citado D. Germán Delegado”.

COMPAÑEROS ENTONCES, AMIGOS HOY. “Sí que conservo amigos de mis años en el Colegio, como Bernardino Ibáñez, Bernardo Delgado o Juan Marín. (…) Recuerdo otros que han tenido una trayectoria profesio-nal destacada como D. Miguel Ángel Gentil, D. Rafael Comes o D. Ramón López Rosa”.

DECISIVOS PARA LA UNIVERSIDAD. “Mis años en el Colegio fueron decisivos para realizar mis estudios de Medicina”.

EL ‘NIÑO DE OLIVARES’. “Siempre he sido una persona muy dormilona y en mi tiempo de Internado nos despertaba D. Nicolás, que, desde que iba subiendo las escaleras, ya estaba llamando al ‘niño de Olivares’ (que es mi localidad de nacimiento). Es la principal anécdota que recuerdo”.

LAZOS. “La vinculación con el Colegio la he mantenido porque mis hijos han estudiado allí y pertenecí a la Asociación de Padres de Alumnos”.

¿PEOR O MEJOR FORMADAS?. “Creo que en general las nuevas genera-ciones, quizás por los planes de estudios, están peor formadas. Falta una educación más humanística”.

EVOLUCIÓN. “Tengo actualmente familiares en el Colegio y me cuentan que ha mantenido y superado el nivel educativo al incorporar el deporte, los idiomas y las nuevas tecnologías. (…) Las nuevas tecnologías ayudan al aprendizaje y conocimiento de las materias. Favorecen una educación más interactiva”.

INCENTIVAR LA COMPETITIVIDAD. “Le recomendaría mantener los valores pasados y presentes mante-niendo el prestigio y la competitividad de los alumnos, incentivándolos permanentemente”.

RESPONSABILIDAD DE ALUMNOS Y PROFESORES. “Un colegio como el San Francisco de Paula debe ofrecer una educación de calidad y buscar permanentemente la excelencia. Y mantener el espíritu liberal y de responsabilidad a los alumnos y profesores”.

“En la vida es fundamental ponerse metas e intentar alcanzarlas, y eso me lo enseñaron en el Colegio”

“Mis años en el Colegio fueron

decisivos para realizar mis estudios de

medicina”

122

Antonio Jiménez Filpo es consejero delegado de Caligari Films, productora de espacios televisivos de tanto éxito de público y crítica como “La Noche de Jesús Quintero”, en TVE, o más recientemente, “Se llama Copla”, actualmente en emisión en Canal Sur Televisión. Este reconocido profesional del mundo de la producción audiovisual, Presidente de la ANEPA, asociación empresarial nacional del sector, guarda “buenísimos” recuerdos del Colegio, cuya personalidad define con los conceptos de ‘formalidad’ y ‘honradez’ y del que dice haber recibido una formación “para el trabajo y la responsabilidad”. Considera que el Colegio ha tenido mucho que ver con su trayectoria profesional, ya que, si bien estudió Derecho fundamentalmente por tradición familiar, el aprendizaje y el esfuerzo adquirido en el Colegio le ayudaron mucho a establecerse como empresario. “Yo no recuerdo haberme aburrido nunca en el San Francisco de Paula, allí nos enseñaban a prepararnos para la vida y estábamos muy entusiasmados”, comenta el consejero delegado de Caligari Films, que subraya la gran cualificación de los profesores del centro: “Bien podrían haber sido catedráticos universitarios”.

RECUERDOS. “Entré a los nueve o diez años, mis padres consideraban que era el mejor Colegio que había en la

ciudad. Y permanecí allí hasta 5º de Bachiller, con catorce ó quince años. Tengo buenísimos recuerdos. Yo era buen alumno, mis calificaciones solían rondar el siete o el ocho, además era normal que durante el año académico recibiera más de una mención de honor. Mis asignaturas favoritas eran historia y matemáticas, pero al final me decanté por las Letras porque no me gustaba la química”.

VALORES. “En el Colegio me formaron para el trabajo y la responsabi-lidad. Los principales valores que me inculcaron fueron formalidad y honradez”.

PREPARACIÓN PARA LA VIDA. “Sí claro, la pluralidad en el Colegio era mayor que en otros centros. Recuerdo por ejemplo las clases de Formación del Espíritu Nacional, que impartía el profesor Ferrer: no tenían nada que ver con la orientación que se les daba en otros colegios. Nosotros en esas horas nos preparábamos para la vida, nos inculcaban el amor por la lectura…”.

n Licenciado en Derecho, Master Bussiness Administration (MBA) y Diplomado Alta Dirección (San Telmo – ISE).

n Consejero delegado de Caligari Films, S.A., compañía con la que ha producido y/o realizado once programas para TVE y más de 30 programas para Canal Sur TV, además de seis largometrajes cinemato-gráficos, e innumerables cortometrajes, videos industriales, anuncios publicitarios y publireportajes, etc.

n Presidente de la Junta Directiva de la Asociación Nacional de Empresas de Pro-ducción Audiovisual (ANEPA.).

n Miembro de las comisiones delegadas para Hacienda y Canal + de la Federación de Asociaciones de Productores Audiovi-suales Españoles (FAPAE).

n Miembro de la Junta Consultiva de la Confederación de Empresarios de Andalu-cía (CEA).

Antonio José Jiménez FilpoAbogado y Empresario, consejero delegado de Caligari Films

“Yo no recuerdo haberme aburrido nunca en el Colegio, allí nos enseñaban a prepararnos para la vida y estábamos muy entusiasmados”

“Las clases de Formación del Espíritu Nacional que impartía

el profesor Ferrer no tenían nada que ver

con la orientación que se les daba en otros

colegios. Nosotros en esas horas nos

preparábamos para la vida”


123

UN CLAUSTRO DE ‘CATEDRÁTICOS’. “Con los años me he dado cuenta que en nuestro claustro de profesores había docentes que estaban tan preparados que podrían haber sido catedráticos de Universidad. Eran personas muy cualificadas (…) D. Luis González y D. Luis Rey, padre, fueron los que más me influyeron”.

AMIGOS DE ENTONCES. “Sí que guardo algunos amigos de aquellos años: Alberto González Quirós, Juan Luis Jiménez Casanova, Gil Coro-nado, los hermanos Benítez, y Pablo Emilio Pérez-Mallaína, que es un excelente Catedrático de Historia de América”.

ABOGADO Y EMPRESARIO. “Mi padre era abogado y yo estudié Derecho por tradición familiar, pero posteriormente, gracias al aprendizaje y el esfuerzo adquirido en el Colegio me hice empresario”.

EXCURSIONES. “Las principales anécdotas que recuerdo proceden de las excursiones, hacíamos muchas y recuerdo especialmente una, cuando fuimos al Castillo de Almodóvar del Río”.

VÍNCULOS. “Mantengo una relación cercana con la familia Rey. Mis hermanos también estuvieron en el Colegio. Mis hijos no han ido al San Francisco porque vivíamos fuera”.

NUNCA ABURRIDOS. “En el San Francisco te enseñaban a prepararte para la vida, estábamos muy entusiasmados, yo no recuerdo haberme aburrido nunca en el Colegio”.

LA MISMA FILOSOFÍA FUNDACIONAL. “Mi recomendación para el futuro es que mantenga la misma filosofía de la familia fundadora (…). Lo que hay que esperar del Colegio es que ofrezca a sus alumnos una preparación adecuada para enfrentarse a la globalidad del mercado, a la dura competencia del mercado global. Y sin duda, los resultados acadé-micos de sus alumnos son el mejor baremo”.

“Mi recomendación para el futuro es que mantenga la misma filosofía de la familia fundadora”

“Mi padre era abogado y yo

estudié Derecho por tradición familiar,

pero posteriormente, gracias al aprendizaje

y el esfuerzo adquirido en el

Colegio me hice empresario”

124

Francisco Javier Monteseirín Mateo, Médico Especialista en Alergia y Medicina Familiar y Comunitaria, responsable de I+D+i en el Virgen Macarena de Sevilla, Profesor Titular de la Universidad de Sevilla, dice que el paso por el Colegio le ayudó mucho a enfrentar su carrera profesional, pues en sus aulas asumió que había que tener capacidad de lucha, de trabajo y espíritu de superación, “en especial para enfrentarte a ti mismo y a tus propios errores”. Señala asimismo que la pluralidad y convivencia de ideas diferentes que percibió en el Colegio marcó su forma de pensar y actuar en la vida e insiste mucho en la importancia de preservar el ‘espíritu franciscano’, espíritu que considera la principal seña de identidad del Colegio. “Los profesores se sentían integrantes de una familia, más que empleados del Colegio, y ese espíritu se transmitía a los alumnos”, comenta Francisco Javier Monteseirín Mateo, para quien las mejores instituciones educativas se distinguirán por fomentar valores como la lucha por el liderazgo con humildad, el esfuerzo personal y el espíritu de superación.

INGRESO. “Mi padre estuvo realizando las prácticas de ma-gisterio en el San Francisco, de ahí supongo que yo acabara estudiando en el Colegio. Permanecí siete años, desde 1º de Bachiller a Preuniversitario”.

RECUERDOS. “Durante los siete años, hubo de todo como es natural. Se me daban mejor las asignaturas ‘de Letras’. D. Luis Rey Guerrero y D. Luis Rey Romero hicieron que

al finalizar mi etapa en el Colegio me inclinara más por las ‘Ciencias’”.

UNA FAMILIA. “Lo que definía al Colegio es el ‘espíritu franciscano’, los profesores se sentían integrantes de una ‘familia’ más que empleados del mismo. Ese espíritu se transmitía al alumno de forma natural”.

INTERÉS POR LA INVESTIGACIÓN. “D. Luis Rey Guerrero y D. Luis Rey Romero me transmitieron su interés por la Investigación pero de forma realista, estaba claro que en nuestro país era una actividad muy difícil de realizar, sobre todo por la falta de medios disponibles para los investiga-dores”.

n Licenciado y Doctor en Medicina

n Especialista en Alergia, ejerciendo la especialidad en EL Hospital Universitario Virgen Macarena, Clínica Sagrado Corazón y Unidad de Alergia.

n Responsable de las áreas de Diagnóstico in Vitro y de Investigación, Desarrollo e In-novación del Hospital Universitario Virgen Macarena de Sevilla

n Especialista en Medicina Familiar y Comunitaria.

n Supervisor de Instalaciones Radioactivas, área de Biomedicina

n Investigación: 322 publicaciones, .67 libros y capítulos de libros, 250 participa-ciones en Congresos, Conferencias, etc. na-cionales e internacionales, 30 Proyectos de Investigación obtenidos en convocatorias competitivas, 31 Tesis Doctorales dirigidas. Evaluador científico de varias agencias y revistas científicas tanto a nivel nacional como internacional

n Profesor Titular de la Universidad de Sevilla en la Facultad de Medicina, donde imparte las asignaturas de Alergología y Patología General.

Francisco Javier Monteseirín Mateo Médico Especialista en Alergia y Profesor de la Universidad de Sevilla

“Los profesores se sentían integrantes de una familia, más que empleados del Colegio, y ese espíritu se transmitía a los alumnos”

“En el Colegio asumí que había que tener

capacidad de lucha, de trabajo y espíritu de

superación en especial para enfrentarte a ti

mismo y a tus propios errores”


125

TOLERANCIA. “Sí que percibí la pluralidad y la convivencia de ideas dife-rentes que comenta. La percibí totalmente, hasta el punto de que marcaron mi forma de pensar y actuar a ese respecto”.

DURO, PERO JUSTO. “Muchos profesores me influyeron, pero D. Luis Gon-zález quizás haya sido uno de los profesores más duros que he tenido, pero a mi parecer, absolutamente justo con el alumno”.

COMPAÑEROS. “Sigo coincidiendo con bastantes de los que fueron compañeros míos en el Colegio. Muchos de ellos tuvieron una trayectoria profesional destacada, la lista sería bastante extensa y sería injusto no incluir a todos”.

APRENDIZAJE PARA LA CARRERA PRO-FESIONAL. “Sobre todo asumí que había que tener capacidad de lucha, de trabajo y espíritu de superación en especial para enfrentarte a ti mismo y a tus propios errores”.

DIRECTOR DE MENDRUGO. “Fui Director del periódico del Colegio, MENDRUGO, fue una etapa llena de experiencias y sobre todo de aprendizaje con respecto a las relaciones con los demás”.

VÍNCULOS. “Mis hijos estuvieron posterior-mente en el San Francisco de Paula”.

EL MISMO PROYECTO. “Pienso que en lo sustancial es el mismo proyecto que cuando yo estuve, eran unos valores que a mi parecer deberían conser-varse. Los cambios técnicos que debe sufrir el Colegio con el transcurso del tiempo deben de ser complementarios y no esenciales”.

EL LISTÓN, MÁS BAJO. “Las autoridades educativas han bajado el listón de lo que debe ‘conocer’ un alumno. Por lo que se ve en la Universidad, en general, las nuevas generaciones de alumnos están peor formadas”.

CONSERVAR EL ESPÍRITU FRANCISCANO. “Mi recomendación es conservar el ‘espíritu franciscano’, aun-que comprendo que puede ser una visión un tanto utópica en los tiempos que corren. Está claro que yo no tengo que pagar las facturas ni los sueldos del Colegio a fin de mes”.

VALORES DIFERENCIALES. “La lucha por el liderazgo con humildad. El esfuerzo personal. El espíritu de superación. Eso es lo que pienso que distinguirá a las mejores instituciones educativas”.

“Pienso que en lo sustancial es el mismo proyecto que cuando yo estuve, eran unos valores que a mi parecer deberían conservarse. Los cambios técnicos que debe sufrir el Colegio con el transcurso del tiempo deben de ser complementarios y no esenciales”

“Muchos profesores me influyeron, pero D. Luis González quizás haya sido uno de los profesores más duros que he tenido, pero, a mi parecer, absolutamente justo con el alumno”

“Fui director del periódico del Colegio,

MENDRUGO, fue una etapa llena de

experiencias y sobre todo de aprendizaje

con respecto a las relaciones con los

demás”

126

Periodista y escritor, Francisco Pérez Gandul ha recibido el reconocimiento nacional e internacional con la adaptación al cine de su primera novela ‘Celda 211’, galardonada con ocho premios Goya en 2009. Articulista del diario ABC Sevilla, confiesa que desde un punto de vista puramente académico no le adornaron las virtudes que se le presuponen al buen estudiante. De modo que se considera “orgullosamente un superviviente”. De su primer día de Colegio recuerda las “lágrimas porque mamá se marchaba y de solidaridad con otros críos que ensayaban una polifonía de llantos” y cómo un maestro “con sonrisa de Plata” se acercó y le preguntó el porqué de su desconsuelo: “Porque yo no sé ni leer ni escribir”, contestó. “Hoy, cincuenta años más tarde, tampoco”, comenta con su sarcasmo habitual. Afirma que el San Francisco de Paula es una institución educativa muy exigente que valora el esfuerzo, la superación personal y recomienda a la Dirección actual “seguir en la vanguardia de la educación en Sevilla tal como hasta ahora, sin abdicar en su ideario”.

UN SUPERVIVIENTE. “Entré en 1961 porque mi hermano mayor ya estudiaba allí. Curso estudios hasta 1974. Sufrí más que gocé desde un punto de vista académico porque no me adornaban ninguna de las virtudes que se le presuponen al buen estudiante, así que me considero orgullosamente un superviviente”.

NOMBRES PROPIOS. “D. Germán, D. Juan Plata, D. Miguel Fernández de los Ronderos, D. Luis González, D. Antonio Jiménez y D. Francisco Javier Fernández de Liencres, fueron los profesores que más me influyeron”.

POLIFONÍA DE LLANTOS. “Lo he escrito por algún sitio: El niño lloraba, y lloraba mucho, el primer día que de la mano de su madre arribó al patio de entrada del Colegio de San Francisco de Paula. Lágrimas porque mamá se marchaba y de solidaridad con otros críos que ensayaban una polifonía de llantos. Se acercó un maestro, con sonrisa de Plata, y le preguntó el porqué de su desconsuelo: ‘Porque yo no sé ni leer ni escribir’, contestó. Hoy, cin-cuenta años más tarde, tampoco”.

LA BÚSQUEDA DEL EQUILIBRIO. “¿Mi impresión sobre la evolución de la educación en España? Pues que ni tanto, ni tan poco. Ni tantísima letra y estudio como antaño, ni tanto dibujito. Ni el saber enciclopédico para el que se necesitaba una memoria descomunal ni el no pasa nada de ahora por no saber donde está Varsovia”.

n Licenciado en Ciencias de la Información en la rama de Periodismo por la Universi-dad Complutense de Madrid.

n Trabajó para varios diarios hasta que en 1986 recaló en el ABC de Sevilla donde fue redactor jefe y actualmente trabaja como articulista.

n En 2003 escribió su primera novela Celda 211 finalista del Premio Fernando Lara y galardonada como la mejor novela negra con el Silverio Cañada en la Semana Negra de Gijón. En 2009 el Director de cine Da-niel Monzón adaptó la novela al cine con gran éxito, ya que recibió el reconocimien-to de la Academia del Cine español con 8 premios Goya y también obtuvo el respaldo del público, convirtiéndose en una de las diez películas más taquilleras de la Historia del cine español.

n En 2011 la CBS americana adquirió los derechos de la cinta para grabar un remake dirigido por el escarizado Paul Haggis.

Francisco Pérez Gandul Periodista y Escritor

“El Colegio debe seguir en la vanguardia de la educación en Sevilla tal y como hasta ahora y sin abdicar de su ideario”

“Un colegio del siglo XXI debe aportar

a sus alumnos una formación general

sólida, idiomas a un alto nivel e inculcar

en el alumno un espíritu democrático y

solidario”


127

CORDÓN UMBILICAL. “Lo cierto es que salvo el cordón umbilical que su-pone mi querido MENDRUGO no he tenido relación con el Colegio”.

VANGUARDIA EDUCATIVA. “El San Francisco de Paula es una institución educativa muy exigente que valora el esfuerzo y la superación personal. Yo les recomiendo que sigan en la vanguardia de la educación en Sevilla tal y como hasta ahora y sin abdicar de su ideario”.

UN ESPÍRITU DEMOCRÁTICO. “Un colegio del siglo XXI debe aportar a sus alumnos una formación general sólida, idiomas a un alto nivel e inculcar en el alumno un espíritu democrático y solidario”.

“El San Francisco de Paula es una institución educativa muy exigente que valora el esfuerzo y la superación personal”

128

Catedrático de Historia de América de la Universidad de Sevilla, autor de diecisiete libros, reconocido investigador sobre Historia marítima, faceta por la que ha recibido numerosos premios, Pablo Emilio Pérez-Mallaína recuerda el San Francisco de Paula como un colegio laico en una época en la que abundaban colegios religiosos, en el que se enseñaba con vocación, exigencia y profundidad, y del que dice haber aprendido valores como la responsabilidad y el amor por el trabajo bien hecho. Está convencido de que la voluntad y el entusiasmo son las dos ruedas que mueven a los seres humanos y además son contagiosas. Por eso su recomendación al Colegio para que cumpla otros 125 años es que no pierda el entusiasmo y la voluntad de querer seguir haciendo, y de seguir evolucionando.

MUCHOS RECUERDOS. “Debí de ingresar en 1961 y estuve en el Colegio hasta entrar en la Universidad en 1969, así que debieron de ser ocho o nueve años. Los recuerdos son muchísimos, porque, al fin y al cabo, el Colegio marcó una parte de mi infancia y el conjunto de la adolescencia: jue-gos en el patio, los primeros camaradas y amigos, gimnasia en la azotea, preguntas en clase casi a diario, las temidas notas… A pesar de que fui un estudiante bastante bueno”.

SE ENSEÑABA CON VOCACIÓN Y EXIGENCIA. “Diría que el San Francisco de Paula era un colegio laico (entonces abundaban los colegios religiosos) en donde se enseñaba

con vocación, con exigen-cia y con profundidad. En él aprendí valores como la responsabilidad y el amor por el trabajo bien hecho”.

UN COMPAÑERO PROTESTANTE. “Sí que pude percibir la pluralidad y la convivencia de ideas distintas en el Colegio y recuerdo que entre mis condiscípulos había un chico de religión protestante. Eso hubiera sido muy difícil en otros centros de enseñanza muchos de los cuales eran claramente confesionales”.

AGRADECIDO A D. LUIS REY ROMERO. “Hay muchos que me influye-ron, pero recuerdo muy bien, por ser el primero, a D. Nicolás Gelo, un maestro de los antiguos, y dicho sea en el mejor sentido de la palabra. Claro que también D. José y D. Luis Rey (tío abuelo y abuelo del actual Director); a D. Miguel Fernández de los Ronderos, que era un excelente

n Licenciado en Filosofía y Letras, sección de Historia de América, por la Universidad de Sevilla (1969-1974). Premio Extraordinario de Licenciatura y Premio del Ayuntamiento al Me-jor Expediente. Doctor en Historia de América por la Universidad de Sevilla.

n Profesor Titular del Departamento de Historia de América de la Facultad de Geografía e Histo-ria de la Universidad de Sevilla (1983-2000).

n Director de estudios de L’ecole des Hautes Etudes en Sciences Sociales de Paris (1987 y 1993).

n Asesor histórico del Pabellón de la Navega-ción de la Expo’92 de Sevilla. Contratado por la Xunta de Galicia para realizar el proyecto de contenidos históricos del Museo Gallego del Mar (1992-1993).

n Catedrático de Historia de América de la Universidad de Sevilla (desde 2000)

n Ha publicado 17 libros y 25 capítulos de libros y 33 artículos en revistas científicas y actas de congresos y ha recibido numerosos premios por su actividad investigadora. A su actividad docente e investigadora en la Univer-sidad de Sevilla une la desarrollada en numero-sas estancias en universidades extranjeras

Pablo Emilio Pérez-Mallaína BuenoCatedrático de Historia de América de la Universidad de Sevilla

“El Colegio era un centro laico cuando abundaban los religiosos y donde se enseñaba con vocación y exigencia”

“Los educadores del Colegio me

mostraron no solo mis capacidades, sino también mis

limitaciones y en qué tipo de carrera podía

sacarles más partido a las primeras…”


129

profesor de francés, pero tal vez mi recuerdo más entrañable sea el de D. Luis Rey Romero al que le estoy muy agradecido por sus enseñanzas y sobre todo por el afecto que me demostró siempre”.

UNA AMISTAD. “No he conservado las amistades del Colegio, ¡¡han pasado tantos años!! Pero siempre hay una excepción y es la de Vicente Cortés Galeano, compañero a partir de 5º curso de Bachillerato con el que sigo manteniendo contactos frecuentes y una gran amistad. Actualmente es Catedrático de la Es-cuela de Ingenieros de la Universidad de Sevilla y cofundador de una empresa puntera en el estudio de los procesos de contaminación ambiental, por lo que es una figura destacadísima a nivel mundial”.

CAPACIDADES Y LIMITACIONES. “La verdad es que siendo un alumno del llamado Bachillerato Científi-co, más tarde estudié Filosofía y Letras. En ese sentido, los educadores del Colegio me mostraron no solo mis capacidades, sino también mis limitaciones y en qué tipo de carrera podía sacarles más partido a las primeras…y por eso me cambié de disciplina al llegar a la Universidad”.

PRÁCTICAS EN EL LABORATORIO. “Recuerdo que D. Luis Rey, el abuelo del actual Director, nos daba prácticas de física en la que teníamos que pesar y medir con precisión una bolita de acero y calcular su velocidad al desplazarse por un plano inclinado. Aquella pequeña bola era para D. Luis un tesoro, pues la tenía medida, y pesada a la milésima y podíamos decir que la mimaba, pues la traía a clase envuelta, literalmente, entre algodones. La bola a veces al rodar por el plano se caía y entonces había que buscarla pues sin ella la clase no podía continuar… y muchas veces, precisamente por eso, la bola no aparecía y solo se encontraba cuando ya quedaban pocos minutos para acabar la clase. ¡Y es que buscar la bolita bajo las mesas era mucho más entretenido que encontrar las fórmulas del plano inclinado!”.

RELACIÓN CONSTANTE. “He tenido mucha relación con el Colegio a través de mi amistad con D. Luis Rey Romero, su esposa y su hijo, el actual Director. Soy miembro de la Asociación de Antiguos Alum-nos y durante algunos años fui el representante de la Universidad de Sevilla en las evaluaciones de la Selectividad y en esas reuniones pude comprobar, con una mezcla de agrado e inquietud por aquello del paso inexorable del tiempo, que varios de los profesores actuales habían sido alumnos míos en la Universidad…”.

EVOLUCIÓN. “El Colegio ha apostado por modernas técnicas pedagógicas y entre ellas creo que destaca la importancia que se da a la educación bilingüe, que abre unos campos de aprendizaje que se multiplican al conocer nuevas lenguas”.

VISIÓN GENERAL DE LA ENSEÑANZA. “Un alumno tiene hoy con el uso de Internet acceso a unos vo-lúmenes de información inimaginables en los años en los que estuve en el Colegio. Con todo, no hay que olvidar que información no es conocimiento y que es necesario desarrollar el espíritu crítico para separar lo fundamental y verdadero de lo accesorio y falso. Además creo que en la pedagogía actual se han co-metido excesos y hay algunas técnicas que por viejas no deben ser relegadas. Hoy se rechaza todo lo que sea aprendizaje llamado despectivamente memorístico y se suele decir que todo lo que se puede encontrar en un libro no merece la pena aprenderlo. Creo que llevar las cosas a ese extremo es un error, pues pensar no es sino poner en relación conceptos previamente aprendidos, y si uno tiene la cabeza vacía de datos de ninguna manera será capaz de hilvanar una nueva idea”.

CONSERVAR EL ENTUSIASMO. “Mi recomendación es que no pierdan el entusiasmo y la voluntad de querer seguir haciendo, de seguir aprendiendo, de seguir evolucionando. La voluntad y el entusiasmo son las dos ruedas que mueven a los seres humanos… Aunque también son los valores más inexplicables y a los que es más difícil encontrar motivaciones. El entusiasmo y la voluntad no se sabe de donde provienen, lo único que se sabe es que son contagiosos…. ¡Por eso no hay que perderlos!”.

LIBERTAD E INDEPENDENCIA FRENTE A LO OFICIAL. “Un colegio privado como el San Francisco de Paula debe aportar independencia y libertad frente a todo lo que sea oficial u oficialista. Debe ser inde-pendiente al régimen imperante, sea del signo que fuere”.

130

Estuvo en el Colegio desde párvulo, con D. Germán, hasta 2º de Bachiller inclusive, año en que sus padres decidieron trasladar a todos sus hijos a dos institutos públicos por razones de cercanía y para que conocieran a gente de diferentes estratos sociales. Sin embargo, dice sentirse tan ‘franciscano’ como los que acabaron allí sus estudios Preuniversitarios. “De hecho asistí como uno más a la celebración del 25 aniversario de haber terminado COU”, comenta. Y es que los años pasados en el Colegio los considera decisivos para su vida y para su carrera. En él aprendió valores como la disciplina, la voluntad y la superación, que le fueron muy necesarios para aprobar las oposiciones de Notaría, a la primera y con solo 25 años. Piensa que en el Colegio se utilizaba la mano de hierro en guante de seda y, desde el conocimiento que le proporciona ser hoy padre de dos alumnos “franciscanos”, afirma que el proyecto educativo no ha cambiado en todos estos años, en todo caso ha “cambiado o perfeccionado” el método, adaptándose a los nuevos tiempos.

UN PERÍODO DECISIVO. “Ingresé en el Colegio creo que en 1961, a los 6 años en unión de mi hermano Javier, dos años y dos cursos por encima mía, proveníamos de los Escolapios de donde mi padre nos sacó por una discusión con uno de los padres píos (…). A raíz de esta experiencia mis padres decidie-ron enviarnos a un colegio laico y el de más calidad de Sevilla, laico o no, era y es a mi juicio el San Francisco de Paula, donde actualmente estudian mis dos hijos. Estuve en el Colegio desde los 6 a los 11 años (…) A alguien puede parecerle poco tiempo, para mí fue decisivo este periodo, y me siento tan ‘franciscano’ como los que acabaron allí sus estudios Preuniversitarios”.

EXIGENCIA. “El Colegio en aquella época era duro. Habiendo nacido un 31 de diciembre, fui durante toda mi vida el estudiante más joven de mi curso. Esto, que puede parecer y creo que de hecho lo es, una ventaja, entre los 6 y los 11 años te convierte en el más chico de la clase. Además era pelirrojo y zurdo, como dicen que era Judas. (…) Entre mis padres y el Colegio me enseñaron, supongo que con su mejor intención, a aparentar, no a ser, diestro; así aprendí a coger correctamente los cubiertos y a escribir con la derecha, para lo que me ponían un calcetín en la mano izquierda, a resultas de lo cual no soy ambidextro, sino torpidextro y presento como tara más visible una letra que ni yo mismo entiendo mis apuntes pasados unos días. Esto no lo cuento con más animo que retratar una época, la mía de colegial, y no olvidemos que tanto el Colegio como mis padres eran liberales, progresistas y cultos. De mi curso creo que solo la madre de Javier González, el hijo de D. Luis y Dª Estela, y la mía eran universitarias y ejercían su profesión. Mi madre, a sus 84 años, sigue acudiendo a su farmacia. El Colegio era duro, había clase hasta los sábados por la mañana. La tarde del sábado era lo mejor de la semana; el domingo por la tarde comenzaban las angustias de tener que volver a clase; y el Colegio era exigente: con 7 y 8 años, con D. Nicolás teníamos notas todos los días de todas las asignaturas de aquella enciclopedia Álvarez que era el doble de gorda o voluminosa que la que el año anterior había-mos estudiado con D. Juan Plata”.

n Cursó la carrera de Derecho en Sevilla, donde se licenció siendo el alumno más joven. Preparó las oposiciones de Notaria, que sacó a la primera.

n Con sólo 25 años comenzó a ejercer como Notario en Moratalla (Murcia).

n Después ha ocupado las plazas de Estepa, Montilla, Ceuta, Sabadell, Ceuta otra vez, Huelva, Sevilla, Ávila, Sevilla otra vez y Lorca, donde ejerce en la actualidad.

Eduardo Villamor UrbánNotario

“En el Colegio se utilizaba la mano de hierro en guante de seda”


131

FLORES A MARÍA. “En aquella época, en el mes de mayo que era y supongo que seguirá siendo el mes de María, había en el Colegio la costumbre, norma o privilegio de conceder, al alumno que llevara durante ese mes un ramo de flores a la virgen, 10 puntos. Ese día, el afortuna-do portador floral podía aplicarlos como quisiese a las asignaturas que quisiese. Dado que vivíamos en el Matadero de Sevilla, esa joya del neo mudéjar que dejó la exposición iberoamericana, del que mi padre era Director, teníamos la suerte mi hermano y yo de disponer de jardines y jardineros que durante todo el mes de mayo del primero al último de los lectivos nos proveían de sendos ramos de rosas rodeadas de romero, que devotamente llevábamos para la virgen y que nos valían los susodichos 10 puntos. No recuerdo en qué invertía mi hermano Javier sus puntos; yo desde luego durante el mes de mayo no estudiaba ni aritmética ni geografía”.

GUANTE DE SEDA. “En el Colegio se utilizaba la mano de hierro en guante de seda. Los valores que aprendí fueron disciplina, voluntad y superación”.

DE TODOS LOS PELAJES. “Salí a los 11 años y de la pluralidad del Colegio no pude percatarme en aquella época, pero sí he podido constatarlo más adelante en el contacto con mis antiguos compañeros y otros antiguos alumnos que me he ido encontrando en mi vida personal y profesional. Los hay de todas las leches y pelajes pero a todos nos une el haber sido ‘franciscanos’”.

MAESTROS. “Recuerdo con cariño a mis maestros: D. Germán, del que la primera clase que recuerdo fue aprender las horas y cómo leer un reloj (…) De D. Juan Plata, que por cierto ha preparado para la comu-nión a mis 2 hijos, guardo el recuerdo de ser el más simpático y afable de mis maestros. Recuerdo un día que estando en el patio alguien me tapó los ojos por detrás jugando a ver si adivinaba quién era y no se me ocurrió otra cosa, pensando que era un compañero, que soltar unas palabras subidas de tono para un niño en aquella época y en aquel Colegio; me quedé de piedra cuando al girarme vi que era D. Juan Plata, que me había dado clase hacía unos años y estaba vigilando el patio; no dijo nada pero me miró de tal forma, entre triste y desilusionado, antes de dar media vuelta, que esa mirada me hizo más efecto que cualquier reproche. No recuerdo si tuve valor para pedirle disculpas. Y de D. Nicolás recuerdo sus terribles varillas, solo una vez y por segundos fui el primero de la clase: estábamos dando los millones, por casua-lidad acerté la cifra que D. Nicolás había escrito en la pizarra”.

AMIGOS. “Afortunadamente sí, conservo algunos amigos, y frecuentemente ando con Fernando Ostos y con José Mª Sánchez-Barahona. Hace unos años Miguel Ángel Ponce vino a verme a mi despacho, acom-pañado de José Mª Sánchez-Barahona; acabamos en la biblioteca, que es como eufemísticamente mis em-pleados se referían a la bodeguita situada a espaldas de mi notaria; y allí, entre copa y copa, acordamos reunirnos cada cierto tiempo, concretamente cuando José Mª, que es marino mercante, viniese por Sevilla, y nos comprometimos a llamar a otros compañeros; y así nos hemos reunido para comer varias veces además de los citados, Carlos Yáñez, Antonio Tejado, Javier Silva, Carlos Pérez- Llorens y Juan Velarde”.

IDIOMAS Y TECNOLOGÍAS. “Creo que el proyecto del Colegio no ha cambiado, lo que sí ha cambiado o perfeccionado es el método: los idiomas y las nuevas tecnologías son actualmente imprescindibles para vivir en este mundo. En este sentido creo que el Colegio ha sabido adaptarse a los nuevos tiempos”.

RECOMENDACIÓN PARA EL FUTURO. “Mi consejo es que siga con la misma tónica de tolerancia y rigor; además me molestan los padres que quieren inmiscuirse en la política, doctrina e ideario del Colegio; eso está bien para los centros públicos, pero a uno privado y de pago, se va voluntariamente y si no se acepta el ideario lo mejor que puede hacer uno es sacar a sus hijos del centro. Y si no, hay que acatar lo que dice el Colegio que son los auténticos profesionales de la docencia y se debe presuponer que saben lo que hacen; amén de que la educación del Colegio se complementa con la que se recibe en casa”.

“El Colegio era exigente: con 7 y 8 años, con D. Nicolás teníamos notas todos los días de todas las asignaturas”

132

Manuel Alonso Gil es el coordinador autonómico de Trasplantes de Andalucía en los Servicios Centrales del Servicio Andaluz de Salud, donde ha conseguido que, desde 1993, nuestra Comunidad haya casi triplicado la tasa de donación de órganos, pasando a ser una referencia internacional en esta materia. El secreto de este éxito, y de todos, para este prestigioso nefrólogo no es otro que trabajar y trabajar, algo que, dice, le inculcaron tanto el Colegio como sus padres. “Recuerdo que mi padre me decía que todas las personas éramos más o menos iguales, y lo que realmente nos diferenciaba a unos de otros era la constancia y el continuado trabajo, la honestidad y la responsabilidad ante uno mismo y ante los demás”, comenta Manuel Alonso Gil, para agregar a continuación que “en la misma dirección era la enseñanza que recibía en el Colegio”. Para él, ésa es la clave que la educación recibida de padres y profesores sea coherente.

UNA IDEOLOGÍA MÁS AVANZADA Y LIBERAL. “Estuve seis cursos, los tres primeros como alumno interno (vivía entonces en Carrión de los Céspedes, de donde mi padre era veterinario), y los tres últimos como externo. (...) La razón de mis padres para matricularme en este Colegio fueron varias: tenía un gran prestigio, en una época tan restrictiva como era la franquista, tenía una ideología avanzada y liberal, era laico, un tío paterno había estudiado también en el Colegio, etc.”.

TRABAJO, DISCIPLINA Y RESPONSABILIDAD. “Se podrían enumerar muchas características, pero creo que la personalidad del Colegio se puede resumir en tres básicos conceptos: trabajo, disciplina y responsabilidad. Consi-dero que la educación de niños y adolescentes debe ser compartida entre padres y profesores y ambas deben ser coherentes, en la misma dirección. Y así al menos fue en mi caso. Por ejemplo, recuerdo que mi padre me decía que todas las personas éramos más o menos iguales, que los extremos de inteligencia o idiotez eran excepciona-les y lo que realmente nos diferenciaba a unos de otros era la constancia y el continuado trabajo, la honestidad y la responsabilidad ante uno mismo y ante los demás. O dicho de otra forma, cualquier medianía (interpretada como una persona normal, que no mediocre), con espíritu de lucha, honestidad y perseverancia tenía un cheque al portador para triunfar en la vida. En cambio, el éxito estaba menos garantizado para aquellos que, siendo muy in-teligentes y brillantes, fueran poco trabajadores o inconstantes. Pues bien, en la misma dirección era la enseñanza que recibía en el Colegio. Siendo importante la calidad de la enseñanza en sí, para mí es mucho más importante y trascendente inculcar en la etapa colegial una serie de valores que, cuando se aprehenden en esa edad, quedan configurados en la personalidad de cada uno para toda la vida. Afortunadamente, a mí me ha ido bien”.

UN SELLO ESPECIAL. “He tenido la oportunidad de conocer a distintas personas y de distintas generaciones que han estudiado en el San Francisco y tienen un “sello especial”, como una marca de calidad. Mis dos hijas también han estudiado en el San Francisco de Paula y la experiencia ha sido igualmente magnífica. Las dos, que hicieron también Medicina como mi mujer y yo, aman a su profesión, son responsables y, lo que es más importante, llevan una vida normal y son felices. Reconozco que somos afortunados, pero, por otro lado, tam-bién tengo la convicción de que nada es gratis y que todo hay que ganárselo con el esfuerzo. Me aproximo más a la conocida frase de Napoleón que decía algo así como que la suerte la necesitan solo los idiotas”.

n Licenciado en Medicina y Cirugía por la Facultad de Medicina de Sevilla en 1974, se especializa en Nefrología en el Hospital Univer-sitario ‘Virgen Macarena’ entre los años 1974 y 1978.

n Desde octubre de 2000 hasta la actualidad es coordinador autonómico de Trasplantes de Andalucía en los Servicios Centrales de Servicio Andaluz de Salud.

n Su producción científica consta de más de 100 publicaciones y comunicaciones en temas relacionados la Nefrología y más de 200 publicaciones y comunicaciones en temas rela-cionados con la Coordinación de Trasplantes.

Manuel Alonso GilMédico Especialista en Nefrología, Coordinador de Transplantes autonómico del SAS

“La educación debe ser compartida entre padres y profesores, ambas deben ser coherentes, y así lo fue en mi caso”


133

25 PESETAS PARA IR AL CINE. “A los valores que ya he comentado, se po-drían añadir la pluralidad, el respeto hacia los demás y la competitividad. En este sentido tengo una anécdota curiosa. En mi etapa de interno y la primera vez que tuve una ‘mención de honor’, D. José Rey, tío abuelo del Director actual y todo un gentleman, me llamó una tarde a su despacho, me felicitó con unas magníficas y estimulantes reflexiones, y me dio 25 pesetas de su bolsillo para que me fuera al cine. Quedé impresionado. Me felicitó, gratificó y estimuló. Yo tenía 12 años y ya me estaban induciendo a sacar lo máximo de mí mismo y a ser competitivo, y si bien fui un alumno normal, os puedo decir que, con el mismo trabajo que hacía en el Colegio, en la Facultad de Medicina lo tuve mucho más fácil. Pude constatar por comparación con compañeros procedentes de otros colegios que tenía una excelente prepara-ción y estaba ya acostumbrado a trabajar y a estudiar de forma regular”.

UN HECHO QUE DICE MUCHO. “Recuerdo que una tarde del año 63 ó 64 vino a darnos una conferencia D. Manuel Giménez Fernández, prestigioso personaje liberal y progresista, Ca-tedrático de Derecho y Ministro de agricultura en 1934 durante la República y posteriormente denostado por el régimen franquista. Hoy, en la actual etapa democrática, este hecho no tendría valor alguno, pero en la década de los años 60 del siglo pasado era una acción muy meritoria y arriesgada teniendo en cuenta la dictadura existente”.

APASIONADOS DE SU PROFESIÓN. “D. Luis Rey Romero y D. Luis González fueron los profesores que más me influyeron. Eran extraordinarios y unos apasionados de su profesión. Transmitían entusiasmo”.

RECUERDOS DEL PREUNIVERSITARIO. “Lamentablemente no conservo la relación con muchos antiguos compañeros. Abandoné Sevilla durante 15 años y perdí el contacto. Cuando volví en el año 1993 propuse y participé en la organización de la celebración de los 25 años de haber finalizado la etapa en el Colegio. Solo conseguimos reunir a 10 de los 35 alumnos que constituíamos el curso que acabó en el 68. Obviamente, todos habíamos cambiado físicamente, algunos más que otros. Recuerdo que aprobar el Preuniversitario era durísimo y solo lo pasaban el 10% de los que se presentaban. Pues bien, de los 27 alumnos que presentó el Colegio en aquel año 1968, aprobamos el PREU 22, y los 5 restantes aprobaron en uno de los dos grupos. Espectacular éxito del Colegio”.

UN ENCUENTRO CASUAL. “Desde que acabé el Colegio en 1968 y hasta 1991 perdí el contacto. Viví 15 años fuera de Sevilla y en la Feria de Sevilla del 91 me encuentro casualmente con D. Luis Rey Romero. Me sorprendió que, después de tantos años, no solo me reconociera físicamente, sino que se acordaba de mi nombre y apellidos. Este emotivo encuentro me generó un sentimiento de gratitud y le envié un carta con mis reflexiones sobre el impacto que había significado en mi vida mi paso por el Colegio. Después, en el año 1993 cuando vuelvo defini-tivamente a Sevilla, contacto nuevamente para que mis dos hijas de 13 y 10 años por aquel entonces, continúen y finalicen los estudios hasta su entrada en la Universidad. Desde que mis hijas finalizaron su etapa escolar, he vuel-to a perder el contacto. Aunque no pretendo excusarme, mi trabajo me deja muy poco tiempo libre”.

QUE SIGAN COMO SIEMPRE. “¿Recomendaciones? Simplemente que sigan como siempre. He tenido la opor-tunidad de conocer a las tres últimas generaciones de la familia Rey y estimo que mantienen la línea educativa adecuada y adaptada a la evolución del discurrir de los tiempos. Estoy seguro de que, al igual que yo llevé a mis hijas a mi Colegio, cuando ellas tengan hijos harán lo mismo”.

IMPORTANCIA DE LOS PADRES. “Estimo que la educación de un niño no es solo una misión de los padres o del Colegio, sino de los dos, y debe de llevarse a cabo de forma conjunta. Los mensajes educativos deben ser similares, coherentes y en la misma dirección por ambas partes, haciendo un uso adecuado de refuerzos positivos. Por ello, debe ser fundamental establecer nítidamente y a priori los valores humanos que constituyen el ideario del Colegio (con los que obviamente me identifico), para establecer y contar con el ineludible compromiso de los padres para que sus hijos se impregnen de estos valores. No se puede pretender que un colegio inculque en un niño valores de honestidad y espíritu de sacrificio si los padres son unos absentistas laborales o unos ‘listillos’ del pelotazo”.

“He tenido la oportunidad de conocer a distintas personas y de distintas generaciones que han estudiado en el San Francisco y tienen un sello especial”

134

Recaló en el Colegio en una época en que España se veía en blanco y negro. Corrían los años 60, años de NO-DO y nacional-catolicismo, donde una institución académica laica e independiente como el Colegio de San Francisco de Paula no estaba libre de sospechas. Siguiendo la tradición “franciscana” de su familia, se formó entre las paredes del Colegio, donde aprendió a mirar la vida y a formarse desde los principios de trabajo y respeto. “Tengo un recuerdo muy marcado por el trabajo serio”, explica, reconociendo que lo que debe sobre todo al Colegio es su capacidad de alentar en él la actitud independiente y la vocación de servicio. Francisco de Asís ha llevado esta vocación de servicio al extremo, primero a través de su actividad como médico, después mediante la labor de sacerdocio, y finalmente a través de su actividad humanitaria y asistencial al frente de Proyecto Hombre, que él mismo implantó en Sevilla. Desde entonces, ejerce como Director general de esta ONG en la provincia, y sigue participando activamente en todas las actividades del Colegio a través de la Asociación de Antiguos Alumnos.

TRADICIÓN “FRANCISCANA”. “Ingreso en el Colegio en 1962 y permanezco hasta 1970. Supongo que no hubo duda para la elección de centro, la generación an-

terior ya estuvo en el Colegio así como mis hermanos y primos mayores. La siguiente generación de la familia también ha sido ‘franciscana’. Todos los sobrinos han estado en el Colegio”.

LO MEJOR DE CADA ALUMNO. “Tengo un recuerdo muy marcado por el trabajo serio. Había un esfuerzo significativo por sacar lo mejor de cada alumno, por desarrollar todas las potencialidades. En el San Francisco no se podía ser mal estudiante, o seguías el ritmo de la clase o te descolgabas definitivamente. Tenía tendencia a las Ciencias en general, pero era impo-sible no acabar amando la Literatura o la Historia después de asistir a las clases de D. Luis González”.

EDUCACIÓN EN TIEMPOS DEL “NO-DO”. “Probablemente los años 60 que a mí me tocaron vivir en el San Francisco, el Colegio tuvo una serie de carencias que sufrió mi generación. En plena dictadura la fama de una educación en la tolerancia y el respeto a las personas con diferentes for-mas de pensar, debió influir para estar en el punto de mira de la corriente generalizada más afín al régimen. La mayoría de los colegios privados de la época eran religiosos y muy en la línea del nacional-catolicismo. Siem-pre pensé en la cierta sospecha o desconfianza que podíamos suscitar en

n Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de Sevilla (1979) y especialista en Aparato Digestivo (1982)

n Estudios de Filosofía y Teología por la Universidad de Cartuja Granada (1981-1985).

n Experto en Drogodependencias por la Universidad Complutense de Madrid y cursos especializados en ONGs e Institucio-nes Sociales del Instituto Internacional San Telmo de Sevilla y ESADE de Madrid.

n Creación y puesta en marcha de la Fun-dación CES Sevilla-Proyecto Hombre, de la que es actual Director general. También es Presidente de la Asociación Andaluza Proyecto Hombre, y fue Vicepresidente nacional entre los años 1996 y 2001.

Francisco de Asís Herrera del Pueyo Médico, sacerdote y Director general de Proyecto Hombre Sevilla

“En plena dictadura, el Colegio estuvo en el punto de mira de la corriente generalizada más afín al régimen”

“Siempre pensé en la cierta sospecha

o desconfianza que podíamos suscitar en

aquella España aún un poco gris y en la Sevilla provinciana, lo que influía en la

absoluta carencia de actividades que había en el Colegio más allá

de lo estrictamente académico”


135

aquella España aún un poco gris y en la Sevilla provinciana, lo que influía en la absoluta carencia de actividades que había en el Colegio más allá de lo estrictamente académico. (…) Creo que la ausencia de actividades más allá de las académicas, mermó en parte la vinculación entre compañeros, cosa que no ha ocurrido en las generaciones posteriores de alumnos del Colegio”.

TRABAJO Y RESPETO. “No cabe duda que ‘trabajo y respeto’ resumen lo central del ideario del Colegio”.

“LOS LUISES”. “Los profesores que más me marcaron, en todos los aspec-tos, fueron ‘los luises’. D. Luis Rey Guerrero, D. Luis Rey Romero y Don Luis González. Por la forma de enseñar, con un método probablemente anticuado pero extraordinario, D. Julio Mínguez nos enseñó varias genera-ciones a amar las matemáticas”. UNA PROMOCIÓN DE MÉDICOS Y ABOGADOS. “De mi curso salimos un buen grupo de médicos: Jesús Montero, Juan Luis Álvarez-Osorio, José María Gutiérrez Guillén, Carlos Yánez-Barnuevo, Juan Velarde, Jaime Garrigós y creo que alguno más. Del mundo del Derecho también, a des-tacar Javier González Fernández, Magistrado de la Audiencia de Sevilla o Antonio Candil, Procurador. A mi curso pertenecía también Rafael Aguilar Cazorla, Arquitecto”.

RELACIÓN CON EL COLEGIO. “(Amigos) conservo algunos, menos de lo que me hubiera gustado. Pertenezco a la Asociación de Antiguos Alumnos que me mantiene informado de las actividades. De modo personal el actual Director D. Luis Rey Goñi tiene la deferencia de invitarme a participar en diversos actos”. PRESENTE, FUTURO. “Creo que en el Colegio se mantiene un nivel de excelencia en la formación académica de modo que difícilmente se podría hablar de un cambio negativo. La recomendación primera que me surge es casi utópica en el panorama actual. Mantener el nivel y la independencia del Colegio pasa por seguir siendo privado y mantener unos costes muy elevado, de modo que queda fuera del alcance de muchas familias. Hay antiguos alumnos que no pueden tener a sus hijos en el San Francisco. Es la mayor diferencia entre mi Colegio y el actual. Puede perjudicar para el futuro estar reservado a una élite económica”.

TRABAJAR POR LO QUE UNO QUIERE. “En el tiempo del Colegio me apa-sionaba la química por la influencia de D. Luis Rey, pero también descubrí las Letras. Al final prevaleció el deseo inicial. Creo que en lo que verdaderamente el Colegio me influyó es en trabajar decididamente por lo que yo quería y desarrollar una vocación de servicio. Si había cosas en el mundo que no me gustaban, de nada servía lamentarme o quedarme bloqueado, podía trabajar para cam-biarlo. Tal vez por eso hice Medicina, después Teología, fui ordenado sacerdote y más tarde me he movido en el campo de las ONGs de carácter asistencial”.

LA TRIBU. “Veo dos lagunas en la formación de las nuevas generaciones. Por una parte la falta de curio-sidad por todas las cosas, creo que no se motiva o se estimula suficientemente para la adquisición de una visión global, para la obtención de una cultura básica significativa. Por otra parte la heroicidad de formar personas con unos valores en medio de un mundo de anti-valores, de voces dispares. Dice el Profesor Marinas que para educar hace falta la tribu entera, y gran parte de esa tribu emite acordes disonantes”.

“Creo que en lo que verdaderamente el Colegio me influyó es en trabajar decididamente por lo que yo quería y desarrollar una vocación de servicio. Si había cosas en el mundo que no me gustaban, de nada servía lamentarme o quedarme bloqueado, podía trabajar para cambiarlo”

“Lo principal que me inculcaron fue: trabajo y respeto a todas las personas y a todas las ideas. Creo que era extraordinario el esfuerzo por desarrollar al máximo las posibilidades de cada persona”

136

Manuel Benegas Capote ha desarrollado casi toda su carrera profesional fuera de Sevilla, incluso mucho tiempo fuera de España, y quizás por ello, desde esa visión menos localista y más internacional, se muestra ambicioso sobre los objetivos a los que debe aspirar el Colegio de San Francisco de Paula tras llegar a su 125º aniversario. “Yo creo que debe aspirar no solo ya a ser el mejor colegio de Sevilla, sino de España, y, por qué no, a ser uno de los mejores de Europa”, comenta este Ingeniero de Caminos, actualmente Director de Operaciones Ferroviarias de INECO, al que le produce una enorme tristeza leer que hoy no hay ninguna Universidad o Escuela Superior española entre las 100 mejores del mundo, y por el contrario sí hay algunas chinas o indias. Nacido en Barcarrota, al sur de la provincia de Badajoz, ignora por qué sus padres lo metieron interno en el Colegio, pero tiene muy claro que acertaron de pleno.

ACERTARON DE PLENO. “Yo soy de un pequeño pueblo, Barcarrota, del sur de la provincia de Badajoz, y no conoz-co las razones de por qué eligieron mis padres enviarme al San Francisco de Paula a estudiar interno el Bachiller Superior (5º,6º y PREU), pero lo que sí tengo claro es que acertaron de pleno. Estuve desde el 63 al 66, y los recuer-dos son magníficos. Tengo que reconocer que fui un estudiante brillante. Me gustaban las Ciencias en general, las matemáticas, física y química”.

PREMIO AL ESFUERZO. “Definiría el San Francisco de Paula como un Colegio seglar que incentivaba y premiaba el esfuerzo de los alumnos en contacto con la realidad que nos rodeaba en ese tiempo, y con un plantel de profesores extraordinario. (…) Los valores que me inculcaron fueron disciplina, esfuerzo, trabajo y plura-lidad”.

LISTA ALFABÉTICA. “Por desgracia no he podido conservar amigos de entonces, pues además de estudiar Caminos en Madrid, mi vida profe-sional me ha llevado de un lugar a otro, incluso mucho tiempo fuera de España, pero sí que veo de vez en cuando a algún antiguo compa-ñero. (…) Eso sí, recuerdo perfectamente el orden correlativo alfabé-tico de mi curso: … Benegas, Bernal, Bernáldez, Carmona, Carranza, Carrasco…”.

VÍNCULOS. “Realmente he tenido poca vinculación con el Colegio poste-riormente, dado salvo un periodo fugaz, previo a la Expo, que trabajé en Sevilla, el resto del tiempo he estado deambulando por distintos lugares de

Ingeniero de Caminos, Canales y Puertos por la E.T.S. de Madrid y Master en Alta Dirección de Empresa (IESE).

Entre 1971 y 1978, ocupa puestos de res-ponsabilidad en Agromán.

En 1985 pasa a KRONSA Internacional, donde ocupa diversos puestos directivos hasta 1989.

Se incorpora a Renfe en 1989, y en 2006 es nombrado Director General de Explotación de la Infraestructura de ADIF.

Desde 2009 es Director de Operaciones Ferroviarias de INECO.

Fue Presidente de la Sociedad REDAL-SA desde 1992 a 2007 y Presidente de la Sociedad EMFESA desde 2002 a 2007. Es Consejero de INECO desde 1992.


Manuel José Benegas Capote Ingeniero de Caminos, Director de Operaciones Ferroviarias de INECO

“Este Colegio debe aspirar no solo a ser el mejor de Sevilla sino uno de los mejores de Europa”

“No conozco por qué eligieron mis padres

enviarme al San Francisco de Paula a

estudiar interno el Bachiller Superior,

pero lo que sí tengo claro es que acertaron

de pleno”

137

España y el extranjero. En el breve tiempo que estuve en Sevilla tuve a mis hijos Macarena y Manuel matriculados en el Colegio”.

DECISIÓN SOBRE LA CARRERA. “Sin duda, era un buen estudiante de Ciencias, y por ello pensé en hacer Arquitectura, dado que había Escue-la en Sevilla, y algunos compañeros ‘mayores’ ya estaban en ella y al venir al Colegio comentaban sus ‘cuitas’ y, sobre todo, lo dura que era la asignatura Análisis de Formas, de primer curso. Pero curiosamente, hice la siguiente reflexión: ‘Aunque no se me da mal el dibujo, y soy el mayor de siete hermanos, si hago Arquitectura, y tardo tres o cuatro años en pasar el Análisis de Formas, mi familia no podrá pagarme la carrera, por lo que voy a hacer algo ‘parecido’ pero que sacarlo adelante, en un curso por año, sea consecuencia del trabajo y del esfuerzo’. Me decidí por Ingeniero de Caminos, saqué la carrera en Madrid, naturalmente con gran esfuerzo, pero año por año”.

NOMBRES PROPIOS. “Sin duda el profesor Mínguez, de matemáticas, y los Don Luis Rey, Guerrero y Romero, fueron los profesores que más me influyeron. A D. Luis Rey Guerrero lo recuerdo investigando los componentes de la resina de la jara en el laboratorio del Colegio, intentando descubrir algún com-ponente que tuviera valor económico suficiente que permitiera su explotación y generara riqueza en las zonas más pobres de la España del Sur. A D. Luis Rey Romero contando en el año 63 que Japón volvería a ser una gran potencia económica y tecnológica. Recuerdo a Polvillo y a Juan sirviéndonos la comida en el comedor. Recuerdo a D. Nicolás, especialmente cuando entraba en los dormitorios ‘tocando diana’ por las mañanas. Recuerdo a D. Luis González, magnifico profesor de literatura y su clara dicción castellana, y recuerdo, aunque no su nombre (por favor, que alguien me ayude), del gran profesor de historia del arte que tuvimos. Con él, entre otros, descubrimos la grandeza de Sevilla”. RECUERDOS. “Recuerdo perfectamente, en el año 63, recién llegado, en noviembre, cuando se difundió la noticia del asesinato de Kennedy; esa noche los internos pensamos que a la mañana siguiente se habría desencadenado la tercera guerra mundial. Recuerdo el gran terremoto (parece que de 5,6 grados) que se sintió en Sevilla, sin víctimas, con epicentro en el Atlántico, próximo a la costa, cuando íbamos a acos-tarnos en los dormitorios del ultimo piso en marzo de 1964. No tengo el recuerdo de la vibración, pero nunca olvidaré el ruido ensordecedor que surgía del fondo de la tierra. (…) Recuerdo la Coronación Canó-nica de la Macarena y su paso por la Calle Sor Ángela hacia la Catedral y su regreso en el año de 1964. (…) Recuerdo lo que mis compañeros andaluces decían que significaba la palabra PAZ en el eslogan “25 años de Paz” que recorrió Sevilla en los autobuses urbanos durante todo el año de 1964. Decían que PAZ era un acróstico que quería decir ‘P’Alemania Zumbando’. (…) Y no olvidaré nunca la visita que hicimos con el Colegio a la base aérea de Morón, en plena Guerra Fría, cuando vimos en las pistas una veintena de bombarderos B-52 cargados con bombas atómicas, con las alas curvadas al estar repletas de combustible y con sus tripulaciones listas y preparadas para despegar ante cualquier emergencia”.

MÁS RAZONAMIENTO QUE MEMORIA. “La existencia de medios tecnológicos potentes, que ponen a disposición en segundos, la información de que precisamos, me inclina a pensar que la educación futura deberá centrarse más en desarrollar las capacidades de razonamiento de los alumnos, que en almacenar memorísticamente la información que hoy está disponible de forma rápida y expedita en cualquier biblio-teca virtual”.

PILARES. “Los pilares en los que deberá sostenerse el Colegio en el futuro deben ser los mismos en los que se ha sostenido hasta ahora: calidad de la enseñanza, disciplina, esfuerzo, trabajo y pluralidad”.

ASPIRACIONES. “Sus actuales dirigentes y los futuros, deben aspirar permanentemente, no ya a ser el mejor Colegio de Sevilla, sino de España, y, por qué no, a ser uno de los mejores de Europa. Me produce una enorme tristeza leer que hoy no hay ninguna Universidad o Escuela Superior española entre las 100 mejores del mundo, y que por el contrario sí hay, entre esas 100, algunas chinas o indias”.

“Recuerdo a D. Luis Rey Romero contando en el año 63 que Japón volvería a ser una gran potencia económica y tecnológica”

138

Médico Oftalmólogo, Jefe de la Unidad de Superficie e Inmunopatología Ocular del Servicio de Oftalmología del Hospital Virgen Macarena de Sevilla y del Grupo Oftalmológico Cartuja Visión, Jesús Montero Iruzubieta estuvo en el Colegio desde el curso 63-64 hasta el 71-72. Opina que era entonces y sigue siendo un gran Colegio, caracterizado principalmente por su exigencia en el trabajo y en el comportamiento, y que ha sabido mantener su espíritu libre e independiente. Dice haber aprendido en sus aulas el valor del trabajo bien hecho para conseguir resultados satisfactorios, la ética en el trabajo y el compañerismo, y en todo este tiempo no ha perdido el vínculo con el Colegio pues pertenece a la Asociación de Antiguos Alumnos siendo amigo de muchos de sus compañeros. Además, todos sus hijos han estudiado en el Colegio, y se lo recomienda a todos los que le preguntan.

ERA Y ES. “Ingresé en el Colegio porque era (y es) un gran Colegio y vivía a 50 metros de él. Tengo muchísimos recuerdos de tantos años…. Era un estudiante ‘regular’, pero siempre con buenas notas. Me gustaban las materias de Ciencias como matemáticas, física, química, y ciencias naturales”.

VALORES. “En el Colegio me inculcaron el valor del trabajo bien hecho para conseguir resultados satisfactorios, la ética en el trabajo y el compañerismo”. LOS ÚLTIMOS AÑOS DE LA DICTADURA. “Yo viví en el Colegio la última época de una dictadura de la

que fuimos conscientes poco a poco según despertaba nuestra adoles-cencia y nos abríamos al mundo, el Colegio siempre fue muy libre de pensamiento y así se nos transmitió de una forma natural y sin crispa-ción”.

NOMBRES PROPIOS. “Los profesores que más me influyeron fueron D. Luis Rey Guerrero y D. Luis Rey Romero, D. Luis González, D. José Montllor, D. Julio Minguez, y D. Manuel Benigno García Vázquez”.

COMPAÑEROS. “Sigo siendo amigo de muchos de mis compañeros y sigo saludando y viendo a otros muchos con cierta frecuencia”.

VÍNCULOS. “Pertenezco a la Asociación de Antiguos Alumnos y todos mis hijos han estudiado en el Colegio, al igual que he recomendado a cuantos conozco que hicieran lo mismo con alto grado de satisfacción”.

n Licenciado en Medicina y Cirugía en 1977 con Premio Real Maestranza al Mejor Expe-diente de su promoción.

n Consigue su título de Doctor de Medicina y Cirugía con Premio Extraordinario del Docto-rado.

n Logra por oposición en la Universidad de Valencia el título de Profesor Titular de Oftal-mología.

n Desde entonces ha dirigido infinidad de Tesis de Licenciatura y Tesis Doctorales y ha organizado y participado activamente en numerosos cursos y reuniones de carácter nacional e internacional.

n Pertenece al Consejo Editorial de importan-tes revistas de la especialidad y ha publicado más de 100 artículos en revistas nacionales e internacionales.

Jesús Montero IruzubietaMédico Especialista en Oftalmología. Jefe de Unidad en el HospitalVirgen Macarena

“El San Francisco de Paula era y es un gran colegio, y sigue manteniendo su espíritu libre e independiente”

“Todos mis hijos han estudiado en el

Colegio, al igual que he recomendado a

cuantos conozco que hicieran lo mismo con alto grado de

satisfacción”


139

EVOLUCIÓN. “Sigue manteniendo un espíritu libre e independiente de los poderes públicos y mantiene un aire liberal pero comprometido. Se ha abierto enormemente a experiencias externas y de dinamización, tanto en idiomas como nuevas tecnologías. Creo que el cuadro de profesores cam-bia con demasiada frecuencia y no es fácil mantener una línea de trabajo estable cuando el componente humano es tan variable”.

UNA FORMACIÓN ADECUADA A LA ÉPOCA. “Creo que la formación es la que corresponde a cada época, tal vez ahora más diversificada, más amplia y por tanto mas superficial en algunos aspectos. ¡No hay tiempo para todo!”.

MIRAR HACIA DELANTE. “Para tener éxito siempre hay que adelantarse a los acontecimientos, ¿qué individuos necesitará este mundo en los próxi-mos años? Esos son los que hay que preparar, ¿cómo saber cueles serán las nuevas exigencias y retos? Apostar por el futuro y no por el pasado suele dar siempre claves para el éxito”.

HERRAMIENTAS. “La capacidad de tener herramientas mentales y un suficiente grado de conocimientos para dar respuestas adecuadas en las diferentes circunstancias en las que tenemos que tomar decisiones. Eso es lo que ofrecerán los mejores colegios a sus estudiantes”.

“Se ha abierto enormemente a experiencias externas y de dinamización, tanto en idiomas como nuevas tecnologías”

“El Colegio siempre fue muy libre de pensamiento así se nos transmitió de una forma natural y sin crispación”

140

Catedrático de Bioquímica y Biología Molecular de la Universidad de Sevilla, dice, en un gesto de generosidad y afecto hacia el que fuera Director del Colegio, que casi toda la química que sabe la aprendió de D. Luis Rey Romero y que sus años de estudio e investigación hasta llegar a Catedrático “no han sido más que un repaso de lo que él me enseñó, tanto de Química como el gusto por la investigación y la curiosidad por comprender las cosas”. Asegura, de hecho, que en su vida académica ha encontrado tres profesores a los que podría calificar de “Maestros”, dos en la Universidad y D. Luis. No es, en todo caso, el único buen docente que recuerda del Colegio y piensa precisamente que la elección del profesorado es el factor clave para el éxito de cualquier colegio, lo era antes y lo seguirá siendo en el futuro: “Un buen profesor lo será igual con una tiza o con los más sofisticados medios audiovisuales. Un mal profesor lo seguirá siendo por mucha tecnología que se ponga a su disposición. Por tanto, lo crítico es una buena selección del profesorado”.

TODA LA VIDA ESCOLAR. “Ingresé en 1963, estuve 11 años en el Colegio, toda mi vida escolar. Mis padres tenían buenas referencias del Colegio. Un tío mío había estudiado en él”.

UN BUEN ESTUDIANTE CON ‘TERROR’ AL POTRO Y LA CUERDA. “Lógicamente guardo muchos recuerdos, buenos y malos, dado el número de años que pasé en el Cole-gio. Muchos recuerdos se han difuminado con el paso del tiempo. Fui un buen estudiante. Conservo un recorte de ABC de 1970 con el Cuadro de honor del Colegio que indica que tuve 6 Matrículas de honor en 3º de Bachillerato, el máximo en ese curso. Me gustaban casi todas, sobre todo las materias de Ciencias. Recuerdo mejor lo que menos me gustaba, la gimnasia”.

VALORES. “Independencia, rigor, disciplina son las palabras que, para mí, resumen mejor la personalidad del Colegio. A mí, el Colegio me aportó rigor intelectual, conocer la importancia del trabajo y el esfuerzo personal, y confianza en mí mismo”.

RESPETO A LA PLURALIDAD. “Llegué a percibir la tole-rancia y convivencia de ideas diferentes. En las clases que se prestaban más a ello se podía debatir abiertamente cual-quier tema y reflejar todos los puntos de vista. Mis últimos años en el Colegio coincidieron con el final del

n Licenciado en Biología por la Universi-dad de Sevilla en 1979. Doctor en Ciencias por la Universidad Autónoma de Madrid en 1983.

n Entre 1979 y 1984, Profesor Ayudante. Centro de Biología Molecular. Universidad Autónoma de Madrid-CSIC.

n Entre 1985 y 87, Becario Postdoctoral. Departamento de Biología. Universidad de Yale (New Haven, Estados Unidos). Labora-torio de Sidney Altman (Premio Nobel de Química en 1989).

n Entre 1987 y 88, Profesor Asociado. Centro de Biología Molecular. Universidad Autónoma de Madrid-CSIC.

n Entre 1988 y 89, Científico Titular del CSIC. Centro de Edafología y Biología Aplicada del Segura (Murcia). CSIC

n Entre 1989 y 2009, Profesor Titular de Universidad. Universidad de Sevilla-CSIC.

n Actualmente, Catedrático de Bioquímica y Biología Molecular en la Facultad de Biología de la Universidad de Sevilla y Director del Departamento de Bioquímica Vegetal y Biología Molecular de dicha Universidad.

n Actualmente dirige un grupo de in-vestigación en el Instituto de Bioquímica Vegetal y Biología Molecular, centro mixto de la Universidad de Sevilla y el CSIC.

n Ha publicado más de 45 artículos cientí-ficos y es miembro de la Sociedad Española de Bioquímica y Biología Molecular y de la RNA Society

Agustín Vioque PeñaCatedrático de Bioquímica y Biología Molecular de la Universidad de Sevilla

“Los años de estudio e investigación en la Universidad no han sido más que un repaso de lo que D. Luis Rey Romero me enseñó”


141

franquismo, y la efervescencia política que había en la calle se reflejaba en el interior del Colegio donde, conscientes de la tolerancia ideológica y respeto a la pluralidad existentes, podíamos discutir y exponer abierta-mente nuestras opiniones sobre política, religión, etc”.

LOS PROFESORES QUE MÁS LE INFLUYERON. “D. Germán, que me ense-ñó a leer y a escribir. D. Nicolás, que era capaz de mantener la atención y el orden en una clase con 100 niños de 8 años. No había un momento de aburrimiento en su clase. D. Javier Liencres, profesor de filosofía, que me ayudó a pensar por mí mismo. D. Julio Mínguez era profesor de matemá-ticas y nos aterrorizaba con sus inspecciones de la ‘libreta de fórmulas’, que debía estar en perfecto estado, pero tenía una metodología docente original que hacía que fuéramos descubriendo por nosotros mismos los diferentes teoremas y reglas matemáticas mediante procesos de inducción y de deducción a partir de datos que nos iba proporcionando poco a poco. Lo que descubrías por ti mismo ya no se te olvidaba. D. Anuario, profesor de latín, con su extraordinaria bondad y paciencia. Dª Pilar Sanz, profesora de biología. Su entusiasmo por la materia y sus clases de COU impulsaron en gran medida mi decisión de estudiar Biología en vez de Medicina, que era la otra opción que consideraba. Y sobre todo D. Luis Rey Romero. A lo largo de mi vida académica he encontrado tres profesores a los que podría calificar de ‘Maestros’, dos en la Universidad y D. Luis. Casi toda la química que sé la aprendí de él. Los años de estudio e investigación en la Universidad hasta llegar a Catedrático de Bioquímica no han sido más que un repaso de lo que él me enseñó, tanto de química como el gusto por la investigación y la curiosidad por comprender las cosas”.

PÉRDIDA DEL CONTACTO. “Desgraciadamente he perdido en gran parte el contacto con mis antiguos com-pañeros. La mayoría de mis amigos más cercanos de entonces estudiaron Medicina y/o Biología, luego me marché a Madrid y más tarde a Estados Unidos. El contacto se fue diluyendo. Ocasionalmente coincido con alguno de forma accidental. (…) Con una trayectoria destacada, yo recuerdo a Enrique Becerra, que tiene un excelente restaurante en Sevilla y se ha convertido en una figura relevante de la gastronomía sevillana”.

INFLUENCIA EN LA CARRERA. “Mis años en el Colegio influyeron decisivamente en la carrera, despertando mi interés por la investigación científica y mi vocación por la Biología y por la Bioquímica en particular”.

CEROS DOBLES, TRIPLES Y ESPIRALES. “D. Luis Rey Guerrero era (a nuestros jóvenes ojos) muy estricto y fácilmente ponía un “cero” a cualquiera que contestara erróneamente a alguna pregunta. Si el error era muy grave ponía un “cero doble”, y lo anotaba como dos ceros concéntricos. En alguna ocasión puso un “cero triple”, tres ceros concéntricos, por un error que él consideraba gravísimo. Recuerdo la ocasión, creo que en clase de física de 3º ó 4º de Bachillerato, en que alguien cometió un error que debió considerar insoportable y le puso un ‘cero espiral’, lo que matemáticamente puede considerarse como ¡infinitos ceros! Luego muchos de esos ceros se olvidaban, pero conseguía mantener la atención y hacernos pensar y trabajar”.

EVOLUCIÓN. “He mantenido una vinculación escasa con el Colegio, aunque he asistido a alguna celebra-ción como el 25 aniversario de la promoción, el homenaje a Dª Maribel Goñi o el homenaje a D. Luis Rey Romero. También he participado de forma esporádica en alguna actividad de la Asociación de Antiguos Alumnos. No conozco, por tanto, lo suficiente el proyecto actual del Colegio como para opinar, pero tengo entendido que está haciendo un esfuerzo por incorporar las nuevas tecnologías a la enseñanza”.

UN CONSEJO PARA LLEGAR AL 250 ANIVERSARIO. “Que mantenga la independencia económica y buro-crática y conserve el espíritu de libertad y tolerancia”.

PROFESORADO PREPARADO Y MOTIVADO. “Lo principal es un profesorado preparado, motivado y entu-siasta. También un ambiente de libertad, pero tranquilo y donde impere el rigor y el orden. Eso, junto con los recursos materiales adecuados (laboratorios, ordenadores, etc.), marcará la diferencia entre un colegio excepcional y otros menos buenos”.

“Lo principal es un profesorado preparado, motivado y entusiasta. También un ambiente de libertad, pero tranquilo y donde impere el rigor y el orden”

142

El prestigioso restaurador sevillano Enrique Becerra estuvo diez años en el Colegio, desde 2º de Primaria hasta COU. Confiesa que fue un estudiante bueno, pero “comodón”, demasiado fiado de sus posibilidades, y valora la gran suerte que tuvo al haber sido protagonista de una pequeña/gran revolución en el Colegio: el primer curso mixto (COU). “Fue un año muy enriquecedor”, comenta divertido, mientras recuerda alguna que otra anécdota de entonces. Enrique Becerra nunca ha dejado de estar vinculado con el Colegio. Sus hijos y sobrinos también han estudiado en el San Francisco de Paula, como lo hicieron él y sus hermanos, y además participa de forma activa en la Asociación de Antiguos Alumnos, de cuya Junta Directiva ha formado parte. Opina que el Colegio siempre se ha distinguido por la búsqueda de lo bien hecho y bien terminado. Y recuerdo el buen ambiente con los compañeros y los profesores a pesar de la disciplina.

DIEZ AÑOS. “Estuve en el Colegio entre 1964 y 1974. Desde 2º de Primaria hasta COU, es decir diez años. La razón de la elección de este Colegio fue la amistad de mi padre con D. José Rey Guerrero”.

BUEN AMBIENTE Y DIS-CIPLINA. “Recuerdo sobre todo el buen ambiente con los compañeros y los profesores a pesar de la disciplina. El ansia de aprender cosas nuevas. Y los nervios en los exá-menes a pesar de llevarlos bien preparados. Yo fui un estudiante bueno, pero ‘comodón’. Me fiaba demasiado de mis posibilidades. Mis clases preferidas eran las de lengua y literatura, historia, laboratorio, química, filosofía, biología y los primeros cursos de matemáticas. Luego la cosa se torció un poco con ella”.

LUCHA POR LAS HUMANIDADES. “¿La personalidad del Colegio? La búsqueda de lo bien hecho, bien terminado y bien presentado. La lucha permanente por las Humanidades”.

VALORES. “El valor del esfuerzo y la constancia y la capacidad de dis-cernir y el respeto a los compañeros fueron los principales valores que me inculcaron en el Colegio”.

n Tras acabar en el Colegio estudió dos cursos de Farmacia en la Universidad de Sevilla. Abandonó la carrera y, con 22 años, creó su empresa (restaurante Enrique Bece-rra), en la calle Gamazo de Sevilla, donde sigue ejerciendo su primer oficio.

n He representado oficialmente a la gastro-nomía sevillana en muchos actos en Europa.

n Desde 2002 a 2004 tuvo una columna semanal en “El Correo de Andalucía”. Y ha mantenido colaboraciones periódicas o esporádicas en diarios y revistas andaluzas como “ABC”, “El País”, “Diario de Sevilla”, “Tuguía”, “Agenda de la Empresa”.

n Tiene tres libros publicados con la edito-rial Almuzara: Recetas con Historia, 2005; La Gran Aventura de Montar un Restau-rante, 2007; y El Gran Libro de la Tapa y el Tapeo, 2009.

n Actualmente es Secretario de la Asocia-ción de Empresarios de Hostelería de Sevilla.


“La elección de la carrera profesional

en mi caso vino marcada por mi

familia, pero hoy, casi 40 años después, estoy empezando una nueva vía profesional

para la que me preparé en el Colegio:

la literatura”

Enrique Becerra GómezEmpresario hostelero y Escritor

“El Colegio siempre se ha distinguido por la búsqueda de lo bien hecho y bien terminado”

143

EL HÁBITO NO HACE AL MONJE. “En mi época no había negros ni chi-nos en las aulas, pero sí los primeros melenudos y aprendimos aquello de que el hábito no hace al monje”.

PROFESORES. “Los profesores que más me influyeron fueron D. Luis Rey Romero, D. Luis González, D. Juan Plata, D. Nicolás Gelo, D. Javier Fer-nández de Liencres, D. Miguel Fernández de los Ronderos, D. José Ferrer, y D. Antonio Cano”.

ANTIGUOS COMPAÑEROS. “Veo a bastantes compañeros, incluso de otros cursos y, cosa curiosa, todavía se me vienen de repente a la cabeza antiguos compañeros dos o tres días antes de coincidir con ellos después de años y años sin vernos. Me ha sucedido varias veces. (...) Que hayan tenido una trayectoria destacada, recuerdo a José María O’kean, Paco Santamaría, Agustín Vioque y Carlos Schlatter. Y seguro que se me olvida alguien”.

VOCACIÓN LITERARIA. “La elección de la carrera profesional en mi caso vino marcada por mi familia, pero hoy, casi 40 años después, estoy em-pezando una nueva vía profesional para la que me preparé en el Colegio: la Literatura”.

EL PRIMER COU MIXTO. “Tuve también la suerte de ser protagonista de una pequeña/gran revolución en el Colegio: el primer curso mixto (COU). Fue un año muy enriquecedor. (…) Recuerdo especialmente el primer día del COU mixto: 66 chavales comidos por los nervios frente a 11 chicas encantadas de haberse conocido que se sabían las reinas de la fiesta, tanto que, dos o tres horas después de haber debutado en el Cole-gio, ya montaron su primer pollo en la puerta de Dirección protestando por el pequeño tamaño del espejo de sus recién estrenados aseos. La cara de D. Luis Rey Guerrero era todo un poema”.

VÍNCULOS TRAS SU PASO POR SAN FRANCISCO. “Mis hermanos permanecieron en el Colegio. Luego mis hijos y mis sobrinos y, además, pertenezco a la Asociación de Antiguos Alumnos, participo en bastantes actividades organizadas por ellos e incluso he pertenecido a la Junta”.

GENERACIONES ACTUALES VERSUS GENERACIONES ANTERIORES. “Creo que, en general, las nuevas generaciones están peor preparadas académica y personalmente que nosotros. Falta disciplina y espíritu de

esfuerzo. El papel del profesor se ha devaluado”.

EL COLEGIO, HOY. “Creo que sigue manteniendo su espíritu libre e independiente y que, gracias a la asi-milación de experiencias de fuera, ha evolucionado en idiomas y nuevas tecnologías”.

RECOMENDACIONES PARA EL FUTURO. “Lo mismo que sus antecesores me inculcaron a mí: esfuerzo, sentido común, constancia, honestidad, humildad y tesón. (…) Resumiendo y parafraseando a D. Luis Rey Romero: un colegio no son sus ladrillos, sino sus personas. Si los ‘franciscanos’ seguimos queriendo mejo-rar, nuestro Colegio lo hará al mismo ritmo”.

“Recuerdo el buen ambiente con los compañeros y los profesores a pesar de la disciplina. El ansia de aprender cosas nuevas. Y los nervios en los exámenes a pesar de llevarlos bien preparados”

“Veo a bastante compañeros, incluso de otros cursos y, cosa curiosa, todavía se me vienen de repente a la cabeza antiguos compañeros dos o tres días antes de coincidir con ellos, después de años y años sin vernos. Me ha sucedido ya varias veces”

144

José Luis Villar ingresó en el Colegio en párvulos y se fue con el COU terminado. Sin embargo, dice tener la sensación de no haber abandonado nunca el Colegio del todo. No en vano, pertenece a la Asociación de Antiguos Alumnos, y sus dos hijas, como él y como su padre, no han conocido otro centro educativo que el San Francisco de Paula. Entre sus recuerdos, un nombre propio, el de D. Luis Rey Romero, y un recuerdo concreto, cuando al terminar una clase de COU el añorado Director de San Francisco de Paula le entregó las llaves del Laboratorio de Química animándole a que continuara con el experimento que había iniciado. “Sin ninguna advertencia, D.Luis me entregó las llaves de armarios y vitrinas, cerró la puerta y me dejó solo. Recibir con 17 años esa prueba de confianza y complicidad es algo difícil de olvidar. Después de muchos años y muchos profesores he sabido que aquel fue además un hecho insólito”, recuerda emocionado.

UNA TRADICIÓN FAMILIAR. “Mi padre había sido alum-no del Colegio y mis hermanos y yo siempre supimos que estudiaríamos allí. Ingresé en el curso académico 1964-65 (párvulos) y lo abandoné en el 73-74 (COU). (…) Nuestras hijas Beatriz y Cristina han estudiado en el Colegio desde Preescolar hasta el último curso del Bachillerato, y per-tenezco a la Asociación de Antiguos Alumnos. Tengo la sensación de que nunca lo he abandonado del todo”. BUEN ESTUDIANTE NO SIN ESFUERZO. “Creo que fui un

buen estudiante, pero no sin esfuerzo: se nos exigía mucho en el Colegio, y también en casa. Siempre me gustaron más las asig-naturas de ciencia, y la literatura”.

RECUERDOS ASOCIADOS A PROFESORES. “Tengo buenos recuerdos, como aquellas largas conversaciones con los compañeros al salir de clase, las excursiones, la llegada de las once chicas que compartieron con nosotros el primer COU mixto de la nueva época… Pero en estos años los recuerdos espontáneos han tenido generalmente como protagonistas principales a los profesores. Los tuvimos excelentes, inolvidables por su personalidad o su talento”.

ESTILO PROPIO. “Exigente, independiente y con un estilo propio. Esas son las palabras que escojo para definir al Colegio. En cuanto a los va-

n Licenciatura de Medicina en la Universidad de Sevilla (1974-1980).

n Médico Especialista en Anatomía Patológi-ca (1989).

n Facultativo Especialista de Área (Mé-dico Adjunto) en el Servicio de Anatomía Patológica del Hospital Universitario Virgen Macarena de Sevilla desde 1989 hasta la actualidad.

n Profesor Asociado de la Universidad de Sevilla en el Departamento de Citología e Histología Normal y Patológica, desde 1990, continuando en activo.

n Doctor en Medicina y Cirugía (1993).Miembro del Grupo de Investigación “His-toquímica y Morfometría” de la Universidad de Sevilla.

n Director de cinco Tesis Doctorales.

n Participación en 52 cursos nacionales e internacionales.

n Autor o coautor de 9 capítulos de libros, 50 artículos en revistas nacionales e internacio-nales, 7 ponencias a congresos nacionales, 119 comunicaciones a congresos y reuniones científicas nacionales e internacionales.

José Luis Villar RodríguezMédico Especialista en Anatomía Patológica

“El profesor más importante de toda mi vida académica(e incluyo los años universitarios) ha sido D. Luis Rey Romero”

“Me consta que llegado el momento cambió (y arriesgó)

todo lo necesario para poder seguir

siendo el mismo. El proyecto y los valores

que lo inspiran me parece que son los de

siempre”


145

lores que me inculcaron en el Colegio, destaco rigor intelectual, esfuerzo personal y respeto a las opiniones de los demás”.

AMBIENTE AJENO A LA REALIDAD DEL PAÍS. “Quizá entonces no fui del todo consciente, pero con el paso de los años me he dado cuenta del privilegio que fue vivir y formarnos en ese ámbito de tolerancia y libre-pensamiento, tan ajeno a la realidad de aquella España”.

UN NOMBRE Y UN RECUERDO. “El profesor más importante de toda mi vida académica (incluyo los años universitarios) ha sido D. Luis Rey Romero. De él guardo un recuerdo concreto que conté en el home-naje que los antiguos alumnos del Colegio tributamos a D. Luis Rey Romero. (…) Estudiábamos COU y D. Luis impartía la asignatura de Química, casi siempre en el laboratorio. Debía de ser hacia final de curso cuando trabajábamos en unas cromatografías en papel, que por alguna razón no llegamos a concluir. Al terminar la clase, D. Luis me animó a continuar con el experimento. Todos los antiguos alumnos saben lo que significaba el laboratorio de Química: era un lugar casi sagrado, algo así como el sancta sanctorum del Colegio. Sin ninguna advertencia, D. Luis me entregó las llaves de armarios y vitrinas, cerró la puerta y me dejó solo. Recibir con 17 años esa prueba de confianza y complicidad es algo difícil de olvidar. Después de muchos años y muchos profesores he sabido que aquel fue además un hecho insólito”.

OTROS NOMBRES PROPIOS. “D. Luis González nos enseñó a leer poesía y nos legó para siempre el amor a la literatura y a los libros. D. Julio Mínguez explicaba las matemáticas de manera asombrosa y eficaz: sentado en una banca del fondo, guiando desde allí la mano del alumno aventajado que, solo en la pizarra, resolvía para todos los problemas de cada día. D. Javier de Liencres nos enseñó a pensar y a debatir. Con los profesores de Primaria, y en particular con D. Nicolás Gelo, la deuda es todavía abrumadora”.

UN ESTILO. “Conservo algunos amigos, pero nos vemos muy poco: ocasionalmente en los encuentros que organiza la Asociación de Antiguos Alumnos del Colegio. (…) Prefiero no dar nombres, pero sí quie-ro subrayar que muchos compañeros han destacado en los ámbitos profesionales más diversos. Creo que eso es una buena prueba de que, esencialmente, en el Colegio aprendimos un estilo, un modo de ser y de hacer la tarea, cualquiera que esta sea”.

UNA ESPECIE DE FATUM. “Desde muy pronto supe que quería ser médico. Mi padre lo era, así que más que una vocación creo que se trataba de una especie de fatum. El Doctor Jesús Loscertales, que impartía en COU una asignatura optativa llamada ‘Introducción a las ciencias médicas’, contribuyó a que lo de ser médico fuera también en parte una decisión propia”.

CAMBIAR PARA SER EL MISMO. “Me consta que llegado el momento cambió (y arriesgó) todo lo nece-sario para poder seguir siendo el mismo. El proyecto y los valores que lo inspiran me parece que son los de siempre. (…) Y mi recomendación para al futuro se resume en esta máxima: cambiar todo lo necesario para mantener lo esencial”.

UN NUEVO PARADIGMA. “La diferencia principal entre las formas de aprender y enseñar de antaño y de hoy está relacionada con la incorporación de las nuevas tecnologías a la enseñanza. Pero con ellas no sólo han cambiado las herramientas pedagógicas y se ha modificado la relación Alumno-Profesor, las nuevas tecnologías cuestionan los propios contenidos de las asignaturas, el modo de saber, lo que sig-nifica ‘saber’… Creo que estamos en otro paradigma y que por tanto la comparación entre generaciones anteriores y actuales no es posible”.

VALORES, MÉTODO Y FELICIDAD. “Una educación en valores, un método de trabajo, un amplio cono-cimiento del mundo y la vocación de ser feliz. Eso es lo principal que deber aportar un colegio como el San Francisco de Paula a un estudiante del siglo XXI”.

“En el Colegio aprendimos un estilo, un modo de ser y de hacer la tarea, cualquiera que esta sea”

146

Ingresó en el Colegio por decisión de sus padres, que tenían amistad con D. José y D. Luis Rey, aunque dice que también él debió influir algo en esa decisión, pues le habían llegado comentarios de que “era muy riguroso y apretaba bien” y eso suponía una especie de reto para él. Y en el San Francisco encontró lo que había oído y se había imaginado: rigor, disciplina, trabajo, pero también muchas explicaciones del “por qué las cosas son como son y la necesidad de razonarlas”. Recuerda especialmente las clases de D. Luis Rey Romero, que fue su Profesor de química. Cuarenta años después, dice que aún no se ha olvidado de la tabla periódica. También recuerda mucho las prácticas en el laboratorio, “cosa que amigos de otros colegios nunca hicieron”.

UNA ESPECIE DE RETO. “Ingresé en el Colegio de San Francisco de Paula en Octubre de 1966. Cursé solamen-te lo que se llamaba entonces el bachillerato superior, es decir, 5º, 6º y reválida y el PREU. Yo procedía del Colegio Alemán, donde sólo se podía cursar el bachillerato elemen-tal. La elección del colegio correspondió fundamentalmente a mis padres (en esa época las cosas eran así) y probablemente influyó mucho la amistad que tenían con D. José y D. Luis Rey. A D. José y a D. Luis los recordaba de años anteriores, de los veraneos en Pun-ta Umbría, pero en aquella época no imaginé nunca que serían mis profesores. Recuerdo haber estado muchas veces en su chalet de Pinomar y de una piragua que a veces bajaban sus hijos (Luis y Guillermo) a la playa y que, en aquellos tiempos, era la única que se veía por allí. Algo debí influir yo también en esa decisión de ir al San Francisco porque, aunque no sabía ni dónde estaba, algunos comentarios me habían llegado: rigor, te aprietan bien... y eso suponía una especie de reto para mí. En los tres años que estuve allí la cosa fue como imaginé: trabajo, rigor, disciplina... y también explicaciones novedosas sobre el por-qué de las cosas y la necesidad de razonarlas”.

NI CANCELACIÓN NI RETRASO. “Entre los muchos ‘profes’ que tuve no puedo olvidar las clases de Luis Rey Romero, que fue mi Profesor de química, y las de su padre que fue mi Profesor de física y que entonces compartía la Dirección del Colegio con su hermano D. José. Recuerdo lo que me costó aprender de memoria la tabla periódica de los elementos que, aunque han pasado más de 40 años, todavía no he olvidado y lo que me fascinó cuando entendí las claves de su organización. También recuerdo las prácti-cas en el laboratorio, cosa que otros amigos de otros colegios nunca hicieron. Tampoco puedo olvidar el día que nació su hijo. Debió ser en 1967. Ese día teníamos clases con él y suponíamos con gran ilusión que se retrasaría o incluso no habría clases. Ni una cosa ni otra. Cuando entró en el aula nos anunció: ‘el niño y la madre están bien’ y acto seguido seguimos con el sistema periódico de Mendeleyev. Ese ‘niño’ es hoy el Director del Colegio. De los profesores de las asignaturas de Letras recuerdo con especial cariño al de historia del arte y como nos enseñó a entender el arte en el escenario social, económico y político que lo generaba. Manolo Abad era entonces un ‘progre’ que iba con una trenka a dar clases. Muchos años

n Licenciado y Doctor en Ciencias (Sección Biológicas) por la Universidad de Sevilla.

n Profesor Titular de Ecología de la Facul-tad de Ciencias de la Universidad de Córdo-ba desde 1983. Catedrático de Ecología de la Universidad de Córdoba desde 1986

n Ha conseguido financiación para sus lí-neas de investigación de distintos organis-mos públicos y privados, tanto nacionales como internacionales, ha publicado alrede-dor de un centenar de trabajos científicos en revistas especializadas y libros y ha presentado un número parecido de comu-nicaciones y ponencias en congresos. Es Director de un grupo de investigación del Plan Andaluz de Investigación de la Junta de Andalucía.

Juan Fernández Haeger Catedrático de Ecología de la Universidad de Córdoba

“En el Colegio encontré trabajo, rigor, disciplina... y también explicaciones sobre el porqué de las cosas”


147

después coincidí con él en la Universidad de Córdoba, pero ahora no sé qué habrá sido de él. D. Luis González fue mi ‘profe’ de literatura. Su hijo fue compañero mío de curso. Con él había menos que entender y mucho más que memorizar. Dictaba unos apuntes que aparentemente se sabía de me-moria y de los que todavía recuerdo algunos pasajes: ‘San Juan de la Cruz, el poeta más densamente lírico de la Literatura española’. Debe ser verdad, o al menos él lo decía con mucha pasión”.

SUPUESTAMENTE, FORMACIÓN DEL ESPÍRITU NACIONAL. “Recuerdo también lo que debieron ser las clases de una asignatura que existía en-tonces, la Formación del Espíritu Nacional (FEN), que se cursaba obliga-toriamente también en los primeros cursos de la Universidad. Lo que me enseñaron allí no tenía nada que ver con el título de la asignatura sino más bien con la economía, la demografía, la sociología (sectores producti-vos de la economía, justificación de los impuestos....). ¡Debía ser porque en aquellos tiempos el Colegio tenía alguna ‘fama de rojo’!”.

COMO ESTUDIANTE. “Yo no fui un estudiante de Cuadro de honor. Jamás aparecí en el que colgaba en el vestíbulo del viejo edificio de Sor Ángela de la Cruz. Pero tampoco he conocido nunca la convocatoria de Septiem-bre. El examen de PREU, que no tenía nada que ver con la actual selecti-vidad, lo pasé sin problemas y con menos apuros que otros más brillantes que yo”.

VOCACIÓN ‘TARDÍA’. “Inicialmente me matriculé de Ingeniería Industrial, junto con algunos otros compañeros. Probablemente seguir la tradición familiar influyó de alguna manera. Pero en la ETSII existía entonces un sistema terrible de enseñanza, basado en dedicar un día completo a cada asignatura y el prestigio de la Escuela se basaba, al parecer, en elevar el listón hasta límites inalcanzables para la inmensa mayoría de los que entramos en el primer curso. Los profesores eran además en su ma-yoría inabordables. Mi falta de entusiasmo por esa carrera y aquel, para mí, erróneo sistema de enseñanza me hicieron desistir (recuerdo que sólo aprobé la química, que no me costó mayor esfuerzo y, aun así, fui de los pocos de ese curso que aprobó alguna asignatura) y al año siguiente me matriculé en el selectivo de la Facultad de Ciencias con la intención de estudiar la carrera de Biología. Aunque fui de vocación tardía, la Biología me abrió un mundo muy atractivo de conocimientos que me ha hecho sentirme feliz”.

COMPAÑEROS EN EL RECUERDO. “En la Facultad se hacen nuevos amigos y se pierden otros que siguen otros derroteros. Mi temprana marcha a la Universidad de Córdoba, donde estoy desde 1977, me hizo des-conectarme más de los que tuve en el Colegio, por lo que de la mayoría de ellos no sé gran cosa. Pero me acuerdo especialmente de Vicente Cortés, ahora Catedrático en la Escuela de Ingenieros, mi compañero de banca durante varios años, con el que compartí muchas horas de estudio y la música que él le proporcio-naba a Eva Montesinos en Radio Vida; de Pepe Sierra, un cántabro que hizo Medicina; de Luis Recasens Luca de Tena, compañero mío del Colegio Alemán y Eduardo López Álvarez, lector empedernido que decía haber leído todos los Episodios Nacionales de Galdós; de Rafael Fernández Camacho, que vivía también en el Prado de San Sebastián y con el que compartí muchos trayectos de ida y vuelta hasta la Encarnación... Algunas veces, cuando vuelvo a Sevilla, he pasado por Sor Angela de la Cruz para ver el Colegio. Después de 40 años está para mi irreconocible. Nunca me he atrevido a entrar...”.

UNA DE LAS TAREAS MÁS NOBLES. “Ahora, que también soy ‘profe’ en la Universidad, gracias a lo que me enseñaron y a lo que aprendí, reconozco como el que más el esfuerzo de enseñar y el valor de lo aprendido. La enseñanza es probablemente una de las tareas más nobles y dignas a las que el ser humano se puede dedicar”.

“No puedo olvidar el día que nació el hijo de Luis Rey Romero, que entonces era mi profesor de Química. Teníamos clases con él y suponíamos con gran ilusión que se retrasaría o incluso no habría clases. Ni una cosa ni otra. Cuando entró en el aula nos anunció: ‘el niño y la madre están bien’ y acto seguido seguimos con el sistema periódico de Mendeleyev”

148

El Colegio lo ‘enfocó’ hacia la ingeniería industrial, como él mismo dice, y luego ha tenido una trayectoria profesional muy destacada, gran parte de ella en Inerco, compañía de la que es hoy socio y Consejero Delegado. Es además Vicepresidente del Círculo de Empresarios de Cartuja 93 y Presidente de la Entidad de Conservación del Parque. Define sus recuerdos del Colegio como entrañables y no oculta que siente una gran alegría cuando se encuentra a antiguos profesores, como D. Juan Plata, así como a antiguos compañeros de clase: “Soy capaz de reconocerlos, aunque haga años que no los vea”, comenta. Dice, de hecho, que la gran singularidad del Colegio es que dota a sus alumnos de un sello personal muy marcado, que es fácil de reconocer. El respeto y la responsabilidad son los dos valores que dice haber aprendido en sus aulas y aboga por que en el futuro el Colegio siga fomentando la cultura del esfuerzo en una sociedad que vive en la cultura del “pelotazo” y en la que hay que sacar cuanto antes a los jóvenes la idea de ganar dinero rápido para no tener que trabajar el resto de la vida.

CON GRAN SACRIFICIO DE LOS PADRES. “Ingresé en 1º de Primaria con D. Germán. Mis padres eran co-nocedores de la ‘buena fama’ del Colegio, vivíamos relativamente cerca (en la calle Feria) por aquella fecha y, a pesar del sacrificio económico que para ellos suponía, decidieron que el San Francisco de Paula sería mi Colegio. Y allí cursé mis estudios hasta COU para después ingresar en la Escuela de Ingenieros de Sevilla”.

CAPAZ DE RECONOCERLOS. “Guardo unos recuerdos entrañables, aún soy capaz de reconocer a todos mis compañeros de clase cuando los veo por la calle, a pesar de que hace años que no veo a la mayoría, obvia-mente. Con otros, sin embargo, sigo manteniendo contacto con bastante asiduidad y somos amigos desde y para siempre. Era buen estudiante, nunca suspendí ni una sola evaluación o examen en cualquiera de los cursos que estudié y, en varias ocasiones, fue merecedor de aparecer en el Cuadro de honor que el Colegio tenía a bien publicar en ABC al final de cada curso. Mis asignaturas preferidas eran las matemáticas, la química y la física”.

PROCEDENCIA RECONOCIBLE. “Visto desde hoy, creo que la singu-laridad del Colegio era precisamente dotar a sus alumnos de un sello personal bastante marcado. Mucho después de abandonar el Colegio, he tenido ocasión de conocer a diversas personas que al descubrir su proce-dencia ‘franciscana’, ambos hemos reconocido esa personalidad”.

VALORES. “Sin duda, el respeto y la responsabilidad fueron los valores principales que aprendí en el Colegio”.

n Actualmente, Consejero Delegado de Inerco, después de haber sido Director General y Consejero Delegado (hasta mar-zo/2010), Gerente y Director General (hasta marzo/1997) y Director Técnico (hasta junio/1989)

n Es Vicepresidente del Círculo de Em-presarios de Cartuja-93, Presidente de la Entidad de Conservación de Cartuja-93 desde 2005, Presidente de ACON (INERCO-Colombia) desde octubre/2010 y Profesor Colaborador de la Escuela Superior de Ingenieros Industriales.

José González JiménezIngeniero Industrial, Consejero Delegado de INERCO

“El Colegio debe seguir fomentando la cultura del esfuerzo frente a la cultura del pelotazo”

“Debemos predicar la cultura del esfuerzo

en vez de la del ‘pelotazo’. Sacar a los jóvenes cuanto antes

de la idea de hacer algo rápidamente

para conseguir mucho dinero y así no tener que trabajar el resto

de la vida”


149

PLURALIDAD. “Para nosotros, la pluralidad pasaba más desapercibida por la naturalidad con que allí se procedía en ese sentido. Hoy día, consi-derando los tiempos que eran y el régimen político que nos gobernaba, obviamente aún le damos más valor a ese hecho”.

NOMBRES PROPIOS. “En Primaria, sin duda fue D. Juan Plata (aún siento algo especial cuando lo veo por Montesión, por ejemplo) el profesor que más me influyó. En el Bachillerato, D. Luis y D. Guillermo Rey Romero”.

ENFOCADO HACIA LA INGENIERÍA. “Sí, completamente, el Colegio influyó sobre mi carrera, porque yo destacaba en matemáticas, física y química y en el Colegio me enfocaron hacia la ingeniería que finalmente cursé”.

EL ‘BOTICA’. “Se me viene ahora a la memoria el día que bautizamos a un compañero como ‘el Botica’ (y se le quedó para siempre) porque tradu-ciendo del francés en voz alta en clase con Dª Miguel Fernández, creyó que la palabra ‘boutique’ debía ser algo parecido a una farmacia y dijo algo así como que a la Sra. Blanch le encantaba ir a la botica a probar sus prendas”.

CAMBIO SOCIAL. “La verdad es que no he tenido mucho contacto posterior con el Colegio. Al principio sí, nada mas terminada la carrera, pero después las ocupaciones y el no haber tenido descendencia para que cursaran sus estudios allí, no me han acercado mucho. Entiendo que el Colegio ha cambiado en la medida que también ha cambiado nuestra sociedad. Yo en la educación de hoy echo bastante de menos la formación en valores. Creo que el Colegio no debería abandonarla. Y en cuanto a materias, obviamente es necesario adaptarse a los tiempos y en particular a las nuevas tecnologías, sin las cuales hoy día no pode-mos pensar en estudiar ni en Primaria. Los idiomas resultan también absolutamente primordiales”.

RECOMENDACIONES. “Mi recomendación es que piensen en todo momento que con su labor de hoy pue-den contribuir a que el Colegio perdure más allá de su propio paso por él, pero en parte gracias a su es-fuerzo y contribución. Dicen los buenos tratados de Economía que el primer objetivo de cualquier empresa no es ganar dinero, como se apresurarían a decir algunos, sino perdurar para siempre o al menos el mayor tiempo posible. Lo de ganar dinero debe ser un medio para conseguir algo, no un fin en sí mismo”.

CULTURA DEL ESFUERZO. “Yo sigo confiando en diferenciales como la perseverancia, la responsabilidad y ese tipo de valores tan necesarios para afrontar luego en la vida cualquier tipo de vicisitud. Debemos predicar la cultura del esfuerzo en vez de la del ‘pelotazo’. Saber transmitirles a nuestros jóvenes que trabajando todos los días se puede alcanzar cualquier meta y sacarlos cuanto antes de la idea de hacer algo rápidamente para conseguir mucho dinero y así no tener que trabajar el resto de la vida. El 80% de nuestros universitarios quieren ser funcionarios para disfrutar lo que hemos dado en llamar nuestro Esta-do del Bienestar… Yo creo que es urgente empezar a darle la vuelta a esa situación, empezando desde muy pequeñitos, en el Colegio y en casa, porque de lo contrario, más pronto que tarde, vamos a perder todos ese Estado del Bienestar tan apreciado”.

“Yo sigo confiando en diferenciales como la perseverancia, la responsabilidad y ese tipo de valores tan necesarios para afrontar luego en la vida cualquier tipo de vicisitud”

150

Le tocó vivir en el Colegio todo el periodo de la transición española, del que recuerda vívidamente dos grandes momentos históricos: la muerte de Franco y la intentona golpista del coronel Tejero. “Nunca fui un estudiante brillante, más bien normal”, explica, reconociendo a renglón seguido que lo pasó muy bien en el Colegio. De esa época conserva muchos amigos, algunos de ellos compañeros de trabajo, y alguno profesor, como D. Juan Plata, a quien agradece asimismo la labor que ha hecho con sus hijos, actualmente estudiantes en el Colegio. Curiosamente, en 2011 se cumplen también los 125 años de la compañía Coca-Cola, compañía longeva como el Colegio San Francisco de Paula, que tiene, como el universal refresco, su propia fórmula secreta: trabajo, esfuerzo y liderazgo. La permanencia de esos valores es lo que otorga credibilidad a su proyecto formativo, y lo que lo convierte en lo que hoy es: un Colegio líder.

UN ESTUDIANTE NORMAL. “Entré en el Colegio en 1968 para cursar 1º de EGB y continué hasta finalizar COU. Mis padres buscaban un estilo concreto de formación integral en valores, además de la proximi-dad a mi domicilio. Ambos factores fueron determinantes en su elección. La verdad es que yo no era un estudiante brillante, más bien normal. Pero eso sí, disfrutaba mucho de mis amigos, de los juegos, etc. En cuanto a las materias, disfrutaba mucho de las matemáticas, aunque en un principio se me resistían. Y

especialmente me encantaba el inglés”.

VALORES DE AYER, VALORES DE MAÑANA. “En nuestra época no dis-poníamos de una orientación clara hacia qué tipo de estudios podíamos dirigirnos, no había tanta información como se tiene hoy en día. En mi trayectoria profesional, en lo que sí creo que me marcó el Colegio fue en el respeto a los demás, al trabajo bien hecho y a la fidelidad a unos valo-res. Percibí claramente el espíritu de pluralidad, tolerancia y convivencia que se respiraba en el Colegio, y lo sigo percibiendo actualmente en la formación de mis hijos que también cursan estudios en el San Francisco de Paula, teniendo la suerte de recibir todos esos valores de respeto, plurali-dad y humanidad. Desde mi punto de vista, que esos valores permanezcan en el tiempo le da credibilidad al proyecto de formación, al Colegio y a la empresa en sí. Si tuviera que definir brevemente la personalidad de la educación del Colegio, lo resumiría en estas pocas palabras: exigencia, rectitud, seriedad, criterio, rigor, eficacia y eficiencia. Todo eso fue lo que aprendí en el Colegio, además de respeto, valor de compromiso, trabajo en equipo, pluralidad, excelencia y humanidad. Mantener la curiosidad, el nivel de esfuerzo, conseguir que los estudiantes se sientan cómodos en un entorno muy cambiante, muy informatizado, con una integración y

n Licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad de Sevilla.

n Master en Dirección de Empresa por Uni-versidad de Deusto Desarrollo Profesional.

n Elians Spanish School en Londres e Irlanda.

n Vinculado a Rendelsur Coca-Cola desde 1990.

n Profesor y colaborador en distintos programas formativos de la Universidad de Sevilla, Universidad Pablo de Olavide y Universidad de Huelva.

Gabriel Dronda Fernández Jefe de Relaciones Externas y Publicidad de Rendelsur Coca-Cola Andalucía y Extremadura

“El Colegio me marcó en la fidelidad a unos valores”

“En Coca-Cola, como en el Colegio, también celebramos

125 años. Y diría que hay que conservar la fórmula secreta, que es trabajo con

esfuerzo, liderazgo en todos los sistemas de

formación y liderazgo en la formación de

profesores”


151

valoración de los idiomas importante. Yo creo que son valores que ya tiene el San Francisco de Paula y que deben de seguir con ellos”.

EL RECUERDO DE LOS MAESTROS. “Sin duda, el profesor que más me influyó fue D. Juan Plata. He tenido la suerte de conservar amistad con él desde 2º de EGB. Me formó como persona, me ayudó mucho también con mis hijos a través de su labor como catequista. También tengo buen recuerdo de D. Luis González, una persona justa y eficaz, preocupada por su trabajo, sus asignaturas, por la literatura y por la formación íntegra de las personas. Y muy especialmente, por muchísimos motivos, D. Luis Rey padre”.

ANTES COMPAÑEROS, PARA SIEMPRE AMIGOS. “Tengo el privilegio y la suerte de trabajar en Coca-Cola con amigos míos del Colegio, tales como Luis Abad, Manolo Verdugo, etc… Además, mantengo excelente amistad con José Julio y Pablo Fernández Vázquez, Ángel Cabral, sus hermanos Enrique y Manolo, José Miguel García Gómez o Jesús Hernández Baraho-na. Fuimos compañeros desde 1º de EGB hasta COU y seguimos mante-niendo y cultivando nuestra amistad”.

GENTE QUE SALIÓ DE AQUÍ. “Por diversos motivos coincido mucho con José Luis Escañuela, Presidente de la Federación Española de Tenis; Ángel Cabral González-Sicilia, Vicepresidente de la Asociación Española de Urba-nistas; Jesús Hernández Barahona, una eminencia dentro de la Oftalmolo-gía; Manuel Pérez Fernández, Presidente del Colegio de Farmacéuticos de Sevilla, y Rafa Serna, compositor y cantante. Además de Ángel Luque, Catedrático de la Universidad de Sevilla, o Martín Pareja Obregón, matador de toros. Grandes profesionales de la restauración como Jesús Becerra, Juan Diego Periki, Jesús Álvarez, periodista en ABC Sevilla…”.

MOMENTOS HISTÓRICOS DE LA TRANSICIÓN. “Coincidieron con nuestra formación en el San Francisco de Paula dos hechos históricos relevantes para la Historia en España: la muerte de Franco y el Golpe de Estado del 23 F. Fueron dos momentos que nos impactaron mucho y marcaron a nuestra generación. El fallecimiento del dictador nos cogió aterrizando en la adolescencia, con 12 ó 13 años. El golpe de Estado ocurrió en una época en la que ya éramos personas con una formación y creencias políticas propias y ese respeto y pluralidad de ideas ya se respiraba en las aulas, en COU. Ese día se vivió de una manera natural, suspensión de las clases y desalojo tranquilo de las instalaciones”.

COLABORACIÓN. “Seguimos viviendo mucho el día a día del Colegio ya que mis hijos también son ac-tualmente alumnos. Además, tenemos puntos de contacto debido a la participación, excelente por cierto, en varias actividades que desarrollamos como la Copa Coca-Cola de Fútbol o el Concurso Nacional de Redacción, en el que destacan sobremanera los alumnos del San Francisco de Paula. En la última edición, sin ir más lejos, el primer premio en la fase de Sevilla fue una alumna del San Francisco de Paula, Maria Domínguez del Castillo. Por último, desde Coca-Cola hemos tenido ocasión de colaborar, recientemente, con unas conferencias organizadas conjuntamente con el AMPA en materia de Felicidad con personas tan relevantes en este ámbito como la Psicóloga Alejandra Vallejo Najera o el Catedrático Miguel Ángel Flores”.

LIBROS, DISCIPLINA… Y CODOS. “Evidentemente, la preparación que tiene hoy un chico que esté estu-diando en el San Francisco de Paula es mucho más alta que la que teníamos nosotros. Hoy en día tienen todos los medios disponibles, Internet, pizarra electrónica, conocimientos, idiomas, etc… Tienen muchas más herramientas de las que teníamos nosotros, que nos conformábamos con libros, disciplina… Y codos”.

“La preparación que tiene hoy un chico en el San Francisco de Paula es mucho más alta que la que teníamos nosotros. Hoy en día tienen todos los medios disponibles, muchas más herramientas de las que teníamos nosotros, que nos conformábamos con libros, disciplina… Y codos”

152

Es uno de los mayores especialistas en Medicina deportiva de nuestro país y actualmente ocupa el puesto de Secretario de la Comisión Médica de la Liga de Fútbol Profesional. Tomás Fernando Fernández dice que sus mejores amigos siguen siendo los que hizo en el Colegio y considera que el paso por sus aulas es una especie de sacramento que imprime carácter. Aunque los contenidos y las formas tengan que cambiar con el paso de los años, recomienda al Colegio que no pierda nunca ese “sello”, y pone el ejemplo de las grandes instituciones educativas anglosajonas que forman líderes para dirigir sus países y sociedades y mantienen su método de excelencia a pesar de los avatares de la Historia.

GRATIFICANTES Y FELICES. “Ingresé en Párvulos, sobre 1968. Mi padre era Antiguo Alumno. Estuve hasta COU, durante doce cursos. Los recuerdos son múltiples y varia-dos, con el paso del tiempo, sobre todo, son gratificantes y felices. Era un buen estudiante. Mis materias preferidas eran las de Ciencia”.

TRABAJO BIEN HECHO Y LIBERTAD DE PENSAMIENTO. “El Colegio es como un sacramento que imprime ‘carácter’ a los que pasamos por allí. Aprendí el amor al trabajo bien hecho y, como valor, la libertad de pensamiento para apli-carla y respetarla. Esa libertad se percibía muy bien en los años que me tocó vivir en el Colegio, pues España era un país confuso, convulso y en plena transición”.

GRANDES MAESTROS. “Mis recuerdos son sobre todo de los profesores de Primaria. D Germán, D Nicolás, D Juan

Plata, D Joaquín Leflet, D Luis Rey Guerrero... Nos moldearon cuando lo podían hacer. En Bachille-rato tuve profesores de un gran nivel intelectual (D. Manuel García Vázquez, D.Guillermo Rey, D. José María Garrido, D Javier de Liencres, Dª María Estela, Dª Maribel Goñi, D. Miguel Fernández de Los Ronderos…), pero compartían con nosotros

n Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de Sevilla en 1986, especializa-do en Medicina de la Educación Física y el Deporte.

n En 1993 recibe una beca para la investiga-ción de “Cirugía Láser Artroscópica”. Ese mis-mo año y, hasta 1994, se especializa también en Anatomía Funcional y Clínica de la Rodilla por la Universidad Complutense de Madrid.

n En 1998 obtiene el título de Doctor por la Universidad Complutense de Madrid. Ese mismo año es nombrado Subdirector Médico de la Clínica CEMTRO de Madrid.

n Médico asistencial del Campeonato Mundial de Atletismo de 1999 (Sevilla).

n Profesor del Master “Cirugía láser” de la Universidad Rovira i Virgill de Reus (Tarrago-na) entre 2001 y 2004.

n Jefe de Servicio de Medicina y Traumato-logía del Deporte en la Clínica CEMTRO desde 2006.

n En 2007 fue Secretario de la Sociedad Espa-ñola de Traumatología del Deporte (SETRADE) (hasta 2009) y actualemente ocupa el puesto de Secretario de la comisión médica de la Liga de Fútbol Profesional.

n Ha recibido dos premios por sus inves-tigaciones. En 2001 gana el Primer Premio Na-cional de Investigación en Traumatología del Deporte “Pedro Guillen” y en 2006 el Premio Nacional de Investigación en Medicina del Deporte.

n Ha participado en más de 80 conferencias, congresos y seminarios; ha sido autor o coau-tor de 13 publicaciones y ha dirigido 14 Tesis Doctorales.

Tomás Fernando Fernández JaénMédico especialista en Medicina de la Educación Física y del Deporte

“El Colegio es como un sacramento que imprime ‘carácter’ a los que pasamos por allí”

“En el Colegio me dieron un bagaje que he utilizado toda mi vida, me enseñaron el método de cómo

hacer las cosas, como los buenos maestros”


153

el tiempo de forma esporádica, por tanto también influyeron pero en menor medida. Los maestros nos enseñaron a estudiar, a comportarnos, nos educaron”.

TRIUNFADORES EN LA VIDA PROFESIONAL Y PERSONAL. “Conservo amigos del Colegio y son además mis mejores amigos. Para mí, lo más importante es que la mayoría ‘han triunfado’ en su vida profesional y personal”.

ALFORJAS PARA TODA LA VIDA. “El Colegio ha influido en mi carrera profesional en todo. Me me dieron un bagaje y unas alforjas intelectuales que he utilizado toda mi vida, porque me enseñaron el método de cómo hacer las cosas, no el contenido, como los buenos maestros”.

UN FIN DE SEMANA ESTUDIANDO. “Cuando estábamos en 4º de EGB, en un examen de Departamento, los resultados no fueron lo suficientemente buenos de acuerdo con lo esperado en el Colegio. En consecuencia, D. Luis Rey Guerrero nos hizo ir el sábado y domingo por la mañana y él, el primero, para explicarnos la materia en la que habíamos fallado. Las enseñanzas de esta anécdota son claras”.

ALIVIO CONTRA EL CALOR. “Otra anécdota se refiere a D. Nicolás Gelo, en el mes de junio, en la Sevilla de 1971-1973, con un calor espanto-so, no existía aire acondicionado, en el aula donde ahora hay un patio. Éramos entre 60-80 alumnos en clase, después de la hora de estudio, invitaba a coca-colas pagadas de su propio bolsillo a los que habían estudiado más y mejor”.

VÍNCULOS. ”Siempre he estado pendiente de las noticias que me llegaban del y sobre el Colegio. Vivo fue-ra de Sevilla y las obligaciones profesionales no me han permitido participar tanto como fuera mi deseo”.

CARÁCTER “FRANCISCANO”. “Creo que el método de enseñanza, la impregnación del ‘carácter francis-cano’ no debe cambiar porque es la esencia del Colegio. En relación con los contenidos es evidente que se tiene que adaptar al mundo actual y futuro. Hoy no se puede caminar por el mundo sin ser bilingüe, manejar con soltura los ordenadores, en materia de Ciencias básicas hay mucho que profundizar... Y sobre todo que sigan siendo ‘buena gente’ que piensa por sí misma”.

NO OLVIDAR LA MEMORIA. “Hoy en día en el mundo que yo me muevo de formación postgrado uni-versitaria, se utiliza mas el método de elaboración de trabajos por parte de los alumnos, se intenta que el alumno piense, razone y se especialice, pero creo que es imprescindible a nivel escolar no olvidar el culti-vo de la memoria y de las cualidades intelectuales, tener una formación humanística y amplia para sentar las bases donde después poder construir la especialización, pero no ir directamente a la especialización. Las nuevas generaciones pierden riqueza intelectual y visión de conjunto”.

NO PERDER LA ESENCIA. “Mi recomendación para el futuro es no perder la esencia de lo que somos, se puede cambiar los contenidos y las formas, pero no lo que nos imprime carácter, lo que llamo el ‘espíritu franciscano’. El Colegio debe seguir haciendo lo mismo que lleva portando durante 125 años, una forma de ser, de actuar, de tolerancia, de libertad… Aunque a veces vaya en contra de lo llamado ‘políticamente y socialmente correcto’. Las grandes instituciones educativas anglosajonas forman líderes para dirigir sus países y sociedades y mantienen su método de excelencia a pesar de los avatares de la Historia”.

“Sobre todo, el Colegio debe seguir formando a buena gente que piense por sí misma”

“En verano, D. Nicolás Gelo invitaba a coca- colas pagadas de su propio bolsillo a los que habían estudiado más y mejor”

154

Concejal del Ayuntamiento de Sevilla durante muchos años y actualmente Vicesecretario provincial de Participación Ciudadana del Partido Popular, Ignacio Flores piensa que el paso por el Colegio le ha servido, en su carrera política y en su vida, para apreciar la libertad y el respeto a las opiniones de los demás. Señala que fue un estudiante “más bien normalito” y aprecia enormemente que el Colegio valorara en sus alumnos, no tanto si sacaban mejores o peores notas, como la capacidad de esfuerzo y el respeto con que trataban a compañeros y profesores. Cree que ese ideario básico. el Colegio lo ha mantenido intacto con el paso de los años, y que los cambios introducidos han sido para renovar los métodos y adaptarse a los tiempos. En este sentido, no duda en recomendar a la actual Dirección que siga evolucionando e introduciendo novedades en el Colegio, para que así el centro pueda “cumplir muchos años más”.

UNA TRADICIÓN FAMILIAR. “Entré en el 68 y mis padres me matricularon porque mi padre y mi tío fueron alumnos al igual que mis dos hermanos, vamos, que lo mío fue por tradición familiar. Y allí estuve unos ocho años, desde 1º hasta 8º. Fueron unos años espléndidos, en los que hice muchos amigos. Como estudiante era más bien ‘normalito’, no era un alumno que destacara por las notas, pero la asignatura que más me gustaba era principalmente historia”.

LIBERTAD SIN CONDICIONANTES IDEOLÓGICOS. “El San Francisco de Paula era un colegio en donde primaba la libertad sin condicionantes ideológicos, muy importante en aquella época, ya que todavía estábamos en la dictadura de Franco. En este Colegio podíamos pensar y decir todo aquello que estimáse-mos oportuno. Sin duda la convivencia era estupenda, se respetaban las ideas de todo el mundo, no había ‘persecución’ contra nadie por su forma de ser o pensar y nunca nos sentíamos con la vara encima”.

ESFUERZO Y RESPETO. “La personalidad está relacionada con los valores del esfuerzo y la educación en el respeto a los demás, gracias a un magnífico equipo de profesionales. Por encima de todo se valoraba no tanto si eras un buen o mal estudiante como la capacidad de esfuerzo de cada uno y el respeto con el que nos hablábamos alumnos y profesores”.

PROFESORES. “Recuerdo principalmente tres profesores: D. Germán, D. Nicolás, histórico en el Colegio y Dª María Estela ya en mis últimos años en el Colegio, de la que destaco su capacidad tremenda de hacer maestría hasta el punto de que todos los alumnos estudiaban su asignatura con gusto porque ella conse-guía transformarla en una materia más fácil”.

COMPAÑEROS. “A algunos los veo de vez en cuando, lo que pasa es que yo dejé el Colegio a los 14 años

n Después de estudiar ocho años en el Colegio de San Francisco de Paula, estudió el Bachille-rato en el Instituto San Isidoro, de Sevilla.

n Licenciado en Derecho del Trabajo en la Universidad de Sevilla (Promoción de 1982).

n Ejerció la abogacía desde 1991 a 1995 en la Unión Sindical Obrera (USO).

n En 1995 entró como asesor de la alcaldesa de Sevilla Soledad Becerril.

n Desde 1999 ha sido concejal del Partido Popular del Ayuntamiento de Sevilla, excepto en 2007 y 2008.

n Actualmente es Vicesecretario provincial de Participación Ciudadana del Partido Popular.

Ignacio Flores BerenguerAbogado, Vicesecretario Provincial de Participación Ciudadana del Partido Popular en Sevilla.

“El Colegio valoraba no tanto si eras un buen o mal estudiante sino la capacidad de esfuerzo de cada uno y el respeto con el que nos tratábamos”


155

para hacer el Bachillerato en otro centro y ellos continuaron, así que perdí el contacto”.

INFLUENCIA EN LA CARRERA. “El Colegio me influyó de alguna manera, por los valores que transmitía de libertad y de respeto a las opiniones de cada uno; esos valores sí que me han servido a lo largo de mi vida y no solo en la política sino en lo personal, porque hay que saber respetar a todo el mundo. En mi trayectoria profesional sobre todo porque en el panorama político tenemos distintas ideologías y hay que aprender a respetar todas las ideas y puntos de vista”.

ANÉCDOTAS. “Recuerdo, por ejemplo, el día 20 de noviembre de 1975, que fue cuando murió Franco. Ese día me confirmé con el Cardenal Bue-no Monreal y tuvimos que ir al Colegio a pesar de que no hubo clase”.

PARTICIPACIÓN. “Últimamente he vuelto a recuperar el contacto con el Colegio. Desde que asumió la Dirección D. Luis Rey Goñi, me ha invitado en muchas ocasiones a actos del Colegio y me envía la revista que edita el Colegio. El último evento al que he acudido ha sido cuando se inaugu-ró el aula Jiménez-Becerril”.

EL MISMO IDEARIO, ADAPTADO A LOS TIEMPOS. “El Colegio ha man-tenido siempre su filosofía e ideario. Ha sabido adaptarse a los nuevos tiempos, a las nuevas tecnologías, a los idiomas, sigue funcionando a la perfección y no se ha quedado anticuado en los métodos sino todo lo contrario, se ha ido adaptando a los tiempos”.

EDUCACIÓN EN VALORES. “Creo que las nuevas generaciones están mucho mejor formadas en sentido general porque hay más medios y más posibilidades, sobre todo en idiomas, que antes estaba muy limitado. Pero creo que es posible que se haya perdido esa educación en valores, que ahora no digo que sea peor pero no es igual que la de antes”.

RECOMENDACIONES. “Yo le diría a D. Luis Rey Goñi que siga evolucio-nando e introduciendo novedades en el Colegio, para que así pueda con-seguir otros años más y que no arroje la toalla, que hay muchos ciudada-nos en Sevilla que necesitan pasar por este Colegio para recibir esa educación rica en valores”.

LA PERSONA, POR ENCIMA DE TODO. “Que siga manteniendo la libertad ideológica y que por encima de todo continúe el respeto, que no haya nadie mejor o peor por cómo piense o saque mejor o peor nota. Hay que valorar a las personas por encima de todo”.

“El Colegio ha mantenido siempre su filosofía e ideario, pero ha sabido adaptarse a los nuevos tiempos, y no se ha quedado anticuado en los métodos sino todo lo contrario”

“El San Francisco de Paula era un Colegio en donde primaba la libertad sin condicionantes ideológicos, muy importante en aquella época, ya que todavía estábamos en la dictadura de Franco”

156

Manuel Pérez Fernández, Presidente del Colegio de Farmacéuticos de Sevilla, guarda magníficos e inolvidables recuerdos del San Francisco de Paula. Recuerdos de un alumno interno que, de la mano de D. Luis Rey Guerrero y D. Luis Rey Romero, aprendió a amar la química, que fue descubriendo que la constancia es fundamental en la vida para conseguir las cosas que verdaderamente merecen la pena, y que en suma comprendió que hay que ser responsable de los actos y opiniones propios, respetuoso con las ajenas, y comprometido con la realidad que te rodea. Apunta en este sentido que en el Colegio comentaban con los alumnos internos la actualidad casi a diario, sin adoctrinamientos, incitándoles a que se formaran su propia opinión sobre lo que pasaba en el mundo, y cuenta que les leían diferentes diarios que representaban el espectro ideológico más amplio posible dentro del Régimen, para hacerles ver que la realidad podía interpretarse desde diferentes puntos de vista. Desde entonces, no sólo es un lector consumado de prensa, sino que en su vida ha tratado de mantener el máximo compromiso cívico, y por ello, entre otras razones, lleva tantos años dedicado al trabajo de representación colegial. Precisamente hacer buenos ciudadanos, ciudadanos implicados, que hagan más fuerte la sociedad civil, y más sana

y robusta nuestra democracia, es uno de los objetivos que entiende, debe perseguir cualquier institución educativa de referencia en el siglo XXI. Un reto en el que, dice, el San Francisco de Paula lleva mucha ventaja por su independencia y compromiso social.

TANQUES SOVIÉTICOS EN PRAGA. “Ingresé en el año 1968, y lo recuerdo muy bien porque fue poco después de la entrada de los tanques soviéticos en Praga, algo que le comentó D. Luis Rey Guerrero a mi padre el día que vini-mos a Sevilla a la entrevista para entrar en el Colegio. Estuve seis años como alumno interno, seis años de recuerdos inolvidables y que indudablemente me influyeron enormemente en mi formación académica y humana”.

FORMACIÓN ACADÉMICA. “Académicamente, creo que el Colegio me aportó una vasta formación humanística que me ha sido muy útil en la vida. Además, D. Luis Rey Guerrero y D. Luis Rey Romero me hicieron amar la química, algo que fue determinante para la elección de mi carrera profesio-nal como farmacéutico”.

n Licenciado en Farmacia por la Universi-dad de Sevilla. n Ejercicio profesional en Oficina de Far-macia Comunitaria en Sevilla desde 1984. n Presidente del Colegio de Farmacéuticos de Sevilla desde marzo de 2000. n Vocal del Comité Ejecutivo del Consejo Andaluz de Colegios Farmaceuticos, Pre-sidente de la Fundación Mehuer (Medica-mentos Huérfanos y Enfermedades Raras), Patrono de la Fundación Farmacéutica Avenzoar y Consejero de Previsión Sanita-ria Nacional de España.

n Ponente, Director y Presidente de diver-sos congresos nacionales e internacionales. n I Premio Teresa Barco de la Federación Española de Enfermedades Raras, I Premio “Talla Única” de la Asociación de Enfermos ADAC de Deficiencia del Crecimiento y Desa-rrollo, Diploma de honor de la ONG “Madre Coraje”, medalla de la Facultad de Farmacia de Sevilla 2009, insignia de honor del curso “Temas Sevillanos” 2009, embajador de las Enfermedades Raras en España 2009.

Manuel Pérez Fernández Presidente del Colegio de Farmacéuticos de Sevilla

“El Colegio me enseñó a amar la química y me hizo comprender que la constancia es fundamental para alcanzar los retos”

“Mi consejo es que preserven el

espíritu fundacional, y se esfuercen

por aportar a la sociedad ciudadanos

responsables y comprometidos,

además de capacitados para trabajar en el

mundo cada vez más global y competitivo

que tenemos”


157

VALORES. “Desde el punto de vista humano, la influencia ha sido aún mayor, en consonancia con los valores que recibí en mi familia. Además de la sólida formación académica, opino que los rasgos que mejor definen la personalidad del Colegio son precisamente los que los conectan con los valores humanos: responsabilidad, libertad y tolerancia. Creo que en el Co-legio me hice un hombre libre y tolerante, me enseñaron a pensar las cosas por mí mismo y a saber que hay distintas formas de ver las cosas, y que todas son admisibles, siempre que se mantengan en los límites del respeto. Y por supuesto, en el Colegio adquirí la cultura del trabajo, y comprendí que con constancia se llega, y que es fundamental ser perseverante para conseguir las cosas que merecen realmente la pena”.

CIUDADANO INFORMADO. “Ya he comentado que nada más llegar, me lla-mó la atención que en el Colegio los profesores nos invitaran abiertamente a pensar y debatir sobre diversos temas. Pues bueno, eso fue una tónica general. A los alumnos de COU internos D. José Luis Álvarez del Río todos los días nos leía la prensa, y además diarios que representaban el espectro ideológico más amplio posible dentro del Régimen, para hacernos ver que la realidad podía interpretarse desde diferentes puntos de vista (Diario Pueblo y Diario Informaciones). Desde entonces, he tratado de ser una persona informada, atenta de la actualidad, respetuosa con las opiniones ajenas, y comprometida como ciudadano con la realidad política, social y económica”.

TRABAJO Y RESPONSABILIDAD. “Tengo una anécdota que es bien elocuente sobre la cultura del trabajo y el sentido de la responsabilidad que se nos inculcaba en el Colegio. Un mes, suspendí dos asignaturas, y D. Luis Rey Guerrero, siguiendo fielmente las normas colegiales, me dijo que tendría que quedarme castigado en el Colegio estudiando el siguiente fin de semana. Pero resulta que ese fin de semana hacía mi hermana la Primera Comunión en Osuna, y mi padre vino a recogerme el viernes por la tarde. Con las carreteras de entonces, eran dos horas de viaje. Cuando D. Luis Rey Romero lo supo, le dijo a mi padre que sentía mucho que hubiera hecho ese viaje, pero que yo tenía que quedarme estudiando el fin de semana en el Colegio. De modo que tras un infructuoso viaje en carretera, mi padre se fue por donde había venido, y yo me quedé sin ir a la Primera Comunión de mi hermana. Creo que ese episodio lo dice todo y también muestra la plena coincidencia de valores entre familia y Colegio, así como la enorme auctoritas de D. Luis Rey, y la confianza plena de mi padre en el proyecto educativo del centro. Sin duda, D. Luis Rey Romero fue junto a su padre, D. Luis Rey Guerrero, la persona que más me influyó dentro del Colegio. También guardo un gran recuerdo de las clases magistrales de D. Luis González y de D. Julio Mínguez. en Matemáticas”.

DOBLE INFLUENCIA. “Creo que la influencia del Colegio sobre mi carrera fue doble. Como ya he dicho, D. Luis Rey Romero y D. Luis Rey Guerrero me hicieron amar la química, lo que influyó mucho en mi decisión de ser farmacéutico. Por otra parte, mi dedicación a tareas colegiales desde hace ya muchos años, creo que puede obedecer en buena parte a cómo nos animaron en el Colegio a ser ciudadanos participati-vos, activos y responsables”.

ESTRENO DEL POLIDEPORTIVO. “Además de las anécdotas que ya he citado, recuerdo mucho las varillas, que eran el terror de los alumnos. También el club que teníamos los alumnos internos, donde escuchá-bamos música, leíamos periódicos, fumábamos legalmente y hablábamos de todo. Y por supuesto la divertida vida de los dormitorios. Asimismo, recuerdo mucho el estreno del Polideportivo, que fue un gran acontecimiento para todos nosotros, algo increíble, cómo en aquella azotea, pudo haberse levantado ese Polideportivo y en tan poco tiempo”.

MANTENER EL ESPÍRITU. “La fórmula del Colegio ha servido durante 125 años y servirá para los siguientes. Mi recomendación es que la mantengan y perfeccionen, introduciendo las novedades acordes con los tiempos y con un mundo globalizado y competitivo, pero preocupándose de mantener el espíritu tradicional de ofrecer una formación integral, académica y humana, orientada a dar a la sociedad ciudadanos responsables y com-prometidos. Creo que eso es precisamente lo que distinguirá a las mejores instituciones educativas en el futuro”.

“En el Colegio adquirí la cultura del trabajo, y comprendí que con constancia se llega, y que es fundamental ser perseverante para conseguir las cosas que merecen realmente la pena”

158

José Manuel Quero ingresó en el año 1968 en el Colegio, donde permaneció hasta el acceso a la Universidad. Doce años que lo formaron como persona y que, en cierta medida, le pusieron en el camino de su futuro profesional como ingeniero y empresario..“La principal cualidad que me enseñaron -sostiene- fue la independencia ante todos y ante todo, y el amor por la libertad”. Independencia y libertad, dos elementos que considera consustanciales al espíritu del Colegio y a ese estilo franciscano, tan reconocible, dice, entre los antiguos alumnos. De su época como estudiante destaca sobre todo el “exquisito equilibrio entre transmisión de conocimiento y desarrollo de la persona”. De cara al futuro, José Manuel Quero aboga por seguir transmitiendo la cultura del esfuerzo entre sus alumnos, aunque también subraya la importancia de los idiomas

AMOR POR LA LIBERTAD. “Tengo muchos recuerdos del Colegio: sus instalaciones, las actividades, el profesorado (…) La mayoría de ellos muy gratos. La principal cualidad que me enseñaron fue la independencia ante todos y ante todo, y el amor por la libertad como el mayor bien que tiene el ser humano. Destaco la capacidad del Colegio de ofrecer una enseñanza integral, con un exquisito equili-brio entre transmisión de conocimientos y desarrollo de la persona. De manera natural, el Colegio conseguía que todos los alumnos pareciéramos y fuéramos iguales”.

BUENA MANO CON LAS CIENCIAS. “Se me daban bien las materias de Cien-cias en general, y física y matemáticas en particular. Aunque me apasionaban asignaturas como la filoso-fía. Sin pretender ser vani-doso, normalmente estaba entre el 10% de calificacio-nes superiores de mi curso, algo que conseguí a través de bastante dedicación”.

RECOCIMIENTOS DE JUSTICIA. ”La mayoría de los profesores me dejaron una profunda huella, pero es de justicia citar profesores como D. Luis Rey

n Licenciado en Ingeniería Industrial en 1988 por la Universidad de Sevilla. Doctor en Ingeniería Industrial desde 1991.

n En 1989 se diplomó en Lengua Inglesa.

n Desde 2001 es catedrático de la Universi-dad de Sevilla.

n Director del Grupo de investigación en Microsistemas de la Universidad de Sevilla y miembro del grupo de investigación de Tecnología Electrónica de la Junta de Andalucía.

n Coautor de 15 patentes, trece de las cuales están siendo explotadas por empresas y dos de ellas han logrado extensión internacional.

n Coautor de varios capítulos de libros y más de una treintena de artículos publi-cados en revistas de ámbito nacional e internacional.

n Socio fundador y Presidente de la empre-sa Solar MEMS Technologies, spin-off de la Universidad de Sevilla (2009).

n Socio fundador de la empresa Ingenia-trics Technologies, spin-off de la Universi-dad de Sevilla (2005).

n Primer Premio a la Innovación en el IV Encuentro de Emprendedores de la Conseje-ría de Economía, Innovación y Ciencia de la Junta de Andalucía (2010).

n Accésit del IV Curso de Iniciativas Empre-sariales de la Universidad de Sevilla (2009).

José Manuel Quero Reboul Catedrático de Ingeniería Industrial de la Universidad de Sevilla

“El Colegio mantenía un exquisito equilibrio entre la transmisión de conocimiento y desarrollo de la persona”

“Es muy fácil identificar a los

antiguos alumnos del Colegio porque reflejan un ser y un

estar a imagen y semejanza del antiguo

profesorado del Colegio”


159

Romero, por su sentido de la firmeza, D. Germán, por su capacidad de ser hombre niño, o D. Amadeo, por su proximidad”.

EX COMPAÑERO Y CUÑADO. “Afortunadamente conservo muchos y buenos amigos de mi época de estudiante, si bien es verdad que la falta de tiempo hace que me encuentre con ellos esporádicamente. Aunque uno de mis compañeros es actualmente cuñado (…) En cuanto a compañeros que más tarde han adquirido una especial relevancia pública, destacaría a Miguel Fernández de los Ronderos, que es juez, o al médico Juan Carlos de la Torre, por citar algunos”.

FORMACIÓN ADECUADA A LA PROFESIÓN. “Si bien nunca recibí ninguna orientación directa en relación con mi futuro desempeño profesional, la formación recibida me permitió elegir con total acierto mi profesión, tanto en su vertiente técnica, en la parte que tengo de Ingeniero, como docente, en mi faceta de Catedrático, y como empresarial, ya que acabo de fundar una pequeña empresa de base tecnológica”.

MOMENTOS INOLVIDABLES. “En cuanto a momentos especiales o llamati-vos que perviven especialmente en mi recuerdo, retengo sobre todo dos: la primera huelga de alumnos que se hizo tras el fallecimiento de Francisco Franco, y la instalación de las duchas comunes en el Colegio, que causó una gran expectación”.

ESFUERZO, SEGURIDAD Y TRABAJO EN GRUPO. “Mi vinculación actual con el Colegio se limita a la asistencia a actos de la Asociación de Anti-guas Alumnos, aunque mantengo una relación más directa con D. Luis Rey Goñi. De manera indirecta me he ido informando de los cambios en metodología docente que lleva realizando el Colegio en los últimos años, aunque desconozco los detalles. En cualquier caso le recomendaría poten-ciar tres aspectos: la cultura del esfuerzo, la seguridad del alumno en sí mismo y su capacidad de trabajo en grupo”.

RECUPERAR LA CULTURA DEL ESFUERZO. “Dada mi actual condición de Profesor de Universidad, puedo garantizar que, en general, tanto la aptitud como la actitud media de los alumnos han disminuido significativamente entre los alumnos. Por ello recomendaría volver a la cultura del esfuerzo, y a la concienciación de que cada persona debe forjar su futuro. Sin embar-go, debo apreciar la capacidad media del alumno actual por tener sus ideas y expresarlas con convicción. También es de destacar su dominio de las nuevas tecnologías y los idiomas”.

SENTIDO COMÚN E INGLÉS. “Cuando tuve que buscar colegio para mis hijos, sólo pedí que tras su formación les quedaran dos virtudes: tener sen-tido común y hablar perfectamente inglés. Si además se incluye el máximo de conocimiento y formación como persona, mucho mejor.”

IMPRONTA “FRANCISCANA”. “Es muy fácil identificar a los antiguos alumnos del Colegio porque reflejan un ser y un estar a imagen y seme-janza del antiguo profesorado del Colegio. Continuaría con la buena labor docente, pero incluso fomentaría aún más la transmisión de valores”.

“De cara al futuro formativo del Colegio, recomendaría potenciar tres aspectos: la cultura del esfuerzo, la seguridad del alumno en sí mismo y su capacidad de trabajo en grupo”

“La formación recibida me permitió elegir con total acierto mi profesión, tanto en su vertiente técnica como docente y empresarial”

”La mayoría de los profesores me dejaron una profunda huella, pero es de justicia citar profesores como D. Luis Rey Romero, por su sentido de la firmeza, D. Germán, por su capacidad de ser hombre niño, o D. Amadeo, por su proximidad”

160

Catedrático de Física y Vicerrector de la Universidad de Sevilla, Antonio Ramírez de Arellano ingresó en el Colegio en el año 1970, en 1º de EGB, y terminó COU en 1982. De aquellos años dice haber aprendido “una cultura del esfuerzo, del mérito y de la responsabilidad personal que impregnaba todas las actividades que se realizaban”. “No había atajos para la excelencia, que no era un fin, sino un camino”, agrega Antonio Ramírez de Arellano, que califica de “decisiva” la influencia que tuvo el Colegio en la elección de su carrera, tanto por los valores generales como por los estudios de BUP y COU que le inclinaron hacia las Ciencias Experimentales.

DISFRUTABA ESTUDIANDO. “Mis padres, que venían de Madrid, buscaban una enseñanza laica de calidad y el Colegio era un referente en la ciudad. (…) Guardo muy buenos recuerdos. Me gustaban todas las materias. Era buen estudiante. Sinceramente, no tiene mérito; disfrutaba estudiando”.

CIUDADANÍA PARA LA DEMOCRACIA. “Los años 1970 fueron muy complicados para la sociedad española. El Colegio era, además de un centro docente de calidad, un ámbito de debate y aprendizaje de ciudadanía para la democracia. Esta era su personalidad entonces. (…) El

Colegio era un espacio de absoluta tolerancia, inclu-so en momentos difíciles. Recuerdo especialmente los duros días que siguie-ron al 23 de febrero de 1981. En aquel momento era de especial relevancia y singularidad que así fuera, porque además se tenía la sensación de ser fruto de una tradición muy consolidada, que incluso había sobrevivido a vaivenes políticos serios”.

CULTURA DEL MÉRITO Y LA RESPONSABILIDAD PERSONAL. “Además de aprender las materias docentes al máximo nivel, y los rasgos de ‘personalidad’ del Colegio, aprendí una cultura del esfuerzo, del mérito y de la responsabilidad personal que impregnaba todas las actividades que se realizaban. No había atajos para la excelencia, que no era un

n Licenciado (1987) y Doctor en Física (1991).

n Licenciado en Economía (1999).

n Catedrático de Física de la Materia Con-densada (2009) en la Facultad de Física.

n Vicerrector de Infraestructuras de la Uni-versidad de Sevilla, de la que es Profesor desde 1992.

n Con anterioridad ha sido Vicerrector de Postgrado y Doctorado (2006-2008), Direc-tor del centro de Investigación, Tecnología e Innovación de la Universidad de Sevilla, CITIUS (2004-2006) y Vicedecano de la Facultad de Física (2000-2004).

n Autor de más de 160 publicaciones cien-tíficas nacionales e internacionales.

n Ha participado como investigador en más de 40 proyectos y contratos de inves-tigación básica e industrial, nacionales e internacionales, dirigiendo 14 de ellos.

n Autor de 4 patentes internacionales.

n En 1999 recibió el Eshbach Visiting Scholar Award en la McCormick School of Engineering de esta universidad norteame-ricana.

n En el año 2006 recibió el Diploma de Excelencia Docente de la Universidad de Sevilla.

“Los años 1970 fueron muy complicados para la sociedad

española. El Colegio era, además de un centro docente de

calidad, un ámbito de debate y aprendizaje

de ciudadanía para la democracia”

Antonio Ramírez de Arellano LópezCatedrático de Física y Vicerrector de la Universidad de Sevilla

“En el Colegio no había atajos para la excelencia, que no era un fin, sino un camino”


161

fin, sino un camino. También era muy singular la importancia que ya se daba entonces a la enseñanza de los idiomas. Nunca estaré sufi-cientemente agradecido por haber aprendido a hablar inglés sin darme cuenta”.

ALUMNOS Y PROFESORES. “De los cursos anteriores y posteriores al mío, mantengo contacto con Juan Ramón Lacalle, Decano de la Fa-cultad de Medicina, con Juan Pablo Sobrino, Decano de la Facultad de Enfermería, y con Miguel Ángel Castro, Vicerrector de Ordenación Aca-démica de la Universidad de Sevilla, y por tanto compañero del Equipo de Gobierno de la Hispalense. Con menos intensidad, también manten-go contacto con mi compañero de curso, Sebastián Chávez, Catedrático de Genética y promotor de la iniciativa ‘Sevilla Abierta’, que considero admirable. Hasta hace poco fue vicerrector de la Universidad Interna-cional de Andalucía. (…) Entre los profesores, el que más me marcó, sin duda, fue José María Garrido, al que admiraba y admiro en lo personal y profesional. Otros profesores que destacaría son Amadeo Gómez, Luís Rey Romero, Miguel Fernández de los Ronderos, Manuel García Váz-quez, Luis González… A otro nivel, guardo un recuerdo muy entrañable de D. Germán, mi Profesor de 1º y 2º de EGB. En la nube de la niñez, recuerdo que le adoraba”.

LA ELECCIÓN DE LA CARRERA. “El Colegio me influyó de manera decisiva en la elección de mi carre-ra. Además de por los valores generales y las enseñanzas, los últimos años, BUP y COU, me decidieron por los estudios de Ciencias Experimentales. Amadeo Gómez y Luis Rey Romero fueron esenciales en esto. Estudié la carrera de Física entre 1982 y 1987, y luego me doctoré en Física de Materiales en 1991, ámbito en el que he desarrollado toda mi carrera académica, como Profesor e investigador. No por he ello perdí el gusto por las Ciencias Sociales, seguramente derivadas de las enseñanzas de José María Garrido. Entre 1994 y 1999 completé la Licenciatura en Economía”.

RECUERDOS DE MENDRUGO. “Pertenecí al equipo de estudiantes que volvimos a poner en marcha MENDRUGO en los años 70, con D. Luis Rey Guerrero. Los primeros números de esta nueva época del periódico se imprimían gratuitamente, gracias a los contactos de D. Luis, en las rotativas del ABC de Sevilla, con excelente calidad. Tras el fallecimiento de D. Luis, volvimos a las rústicas multicopistas, con sus pliegos de carbón, la tinta, el oloroso líquido rosado, que servía para corregir los pliegos, e interminables tardes mecanografíando torpemente los artículos en la Secretaría del Colegio”.

INDEPENDENCIA, ESTABILIDAD Y CULTURA DEL ESFUERZO. “Estoy seguro de que el Colegio no ha perdido los valores que ya tenía en los 70. Los valores y contenidos son más importantes que las me-todologías y las tecnologías. Estas son vehículos, no fines en sí mismos. (…) Creo que lo que diferencia a las mejores instituciones educativas es la independencia, la estabilidad y la apuesta por la cultura del esfuerzo (…) Mi consejo para el futuro sería que mantuviera su apuesta por la independencia y su línea de trabajo. También recomendaría estudiar la viabilidad de una política de becas mediante patrocinios, para abrir las aulas del centro a todas las clases sociales”.

LA IMPORTANCIA DE LOS PADRES. “Personalmente creo que los jóvenes de hoy están muy bien for-mados, si bien puede que la universalización y obligatoriedad de las enseñanzas haya provocado una bajada de las medias porque los objetivos han sido demasiado ambiciosos para los recursos aplicados. También sería muy deseable la estabilidad normativa para garantizar la estabilidad de los currículos académicos y programar la disponibilidad de medios a largo plazo. El principal problema que veo, sin embargo, no está en la escuela. Creo que los padres hemos pensado que podemos delegar toda la educación en la parte formal que se imparte en los centros docentes, olvidando en algunas ocasiones el ejemplo en casa, la preocupación y el compromiso por reforzar los valores que antes le señalaba”.

“También era muy singular la importancia que ya se daba entonces a la enseñanza de los idiomas. Nunca estaré suficientemente agradecido por haber aprendido a hablar inglés sin darme cuenta”

162

Licenciado en Derecho en la Especialidad de Empresa, Juan Manuel Rueda es actualmente Director de Recursos Humanos de Sogecable. Estuvo en el Colegio entre 1970 y 1979 y se define como el típico estudiante al que le gustaba divertirse pero también sacaba buenas notas. Opina que las palabras que mejor definen la personalidad del Colegio son excelencia, tolerancia y fomento de la curiosidad. Y tiene muy clara qué recomendaciones hacer a la actual Dirección para el futuro, recomendaciones que resume en un solo concepto: anticipación. Eso sí, manteniendo los valores.

HASTA EL BACHILLERATO. “Estuve durante desde 1970 hasta 1979, ahí me marché a realizar Bachillerato a otro instituto. Supongo que mis padres me matricularon en el Colegio porque por aquel entonces los centros buenos pertenecían a instituciones religiosas y el San Francisco de Paula era un referente, de altísima calidad y no vinculado a ninguna institución religiosa”. EL TÍPICO ‘FALSO ESTUDIANTE’. “Guardo un recuerdo ma-ravilloso. No era mal estudiante ni especialmente brillante, era el típico ‘falso estudiante’, porque siempre me ha gus-tado divertirme, pero sacaba buenas notas. Me gustaban muchísimo la literatura, la historia, la historia del arte, el dibujo técnico o la pretecnología de D. Salvador. En esas edades te dejas mucho influir por quien te enseña”.

TOLERANCIA Y CURIOSIDAD. “Tolerancia y fomento de la curiosidad son las palabras que definen mejor para mí la personalidad del Colegio. Ese afán de curiosidad, eso de preguntarte por qué, es algo que a mí

se me quedó grabado en el cerebro. También la tolerancia y por último la excelencia, el saber que las cosas hay que hacerlas de una determina-da manera”.

PLURALIDAD SOCIAL. “El carácter plural del Colegio me ha acompaña-do siempre, de hecho, tengo amigos que sigo manteniendo, aunque no vivo en Sevilla, de muchas clases sociales; mi padre, por ejemplo, era fontanero”.

PROFESORES. “D. Juan Plata, D. Salvador, D Nicolás, D. Enrique Sojo, que cuando empezó a darnos clase tenía recién acabada la carrera, D. Anuario Mendoza, que era una persona impresionante, D. Javier del Valle, D. Miguel Fernández de los Ronderos, profesor de inglés, el señor más elegante y educado que recuerdo. La verdad, me acuerdo muchísi-mo de ellos casi a diario”.

n Licenciado en Derecho en la especialidad de Empresa y Master en Dirección Comercial y Marketing por el Instituto de Directivos de Empresa. n Ha pasado por diversos cargos de respon-sabilidad como consultor en la división de Change Management Services de Andersen Consulting y Director de Recursos Humanos en las compañías Egmasa, Agribética y Ren-delsur.

n Desde noviembre de 2005 es Director de Recursos Humanos de Grupo Sogecable.

n Ha ejercido diversos cargos académicos a lo largo de su trayectoria profesional. Ha sido Profesor y miembro del Consejo Asesor de la Escuela de Organización Industrial; Miembro de la Asociación Española de Dirección de Personal; Profesor en el master de Producción Audiovisual de la Universidad Complutense; Profesor del MBA de Gestión de Empresas Audiovisuales y conferenciante y colaborador en cursos, seminarios, etc. relacionados con la gestión de recursos humanos.

Juan Manuel Rueda MartínDirector de Recursos Humanos de Sogecable

“A un colegio como éste hay que pedirle anticipación, pero manteniendo la formación en valores”

“Mi padre me contó una frase de pequeño:

‘casi todo lo que te hará triunfar en la vida lo aprenderás

antes de los 12 años’. Y tenía toda la razón

del mundo”


163

COMPAÑEROS. “Llevo muchos años fuera de Sevilla, pero sigo coinci-diendo con el actual Director, D. Luis Rey Goñi, que estaba un curso por debajo, Javier Arroyo, que es un magnífico arquitecto, o Miguel Ángel Rodríguez Muñoz, que es uno de los grandes consultores que conozco. Cuando eres del Colegio de San Francisco de Paula se crea una especie de vínculo que te identifica”.

VOCACIÓN. “Creo que el Colegio no influyó, porque estudié Derecho y Economía. Sí influyeron en mi trayectoria, en los valores de excelencia y curiosidad; eso te acompaña y es el mejor aliado para tu trayecto-ria. Mi padre me contó una frase de pequeño: ‘casi todo lo que te hará triunfar en la vida lo aprenderás antes de los 12 años’. Y tenía toda la razón del mundo”.

INSTRUCCIÓN MILITAR, LIBROS Y CUÑAS. “Me acuerdo de D. Francisco Balón, profesor de Educación Física, que era militar y nos ponía a todos a hacer instrucción. Te enseñaba el paso, derecha e izquier-

da, algo muy extraño con 8 ó 9 años, mi padre no se lo podía creer. Y también recuerdo de la primera biblioteca que creamos en 5º de EGB con D. Enrique Sojo y teníamos que coger libros y repartírnoslos; el cariño a los libros que tengo surge de ahí. O cuando nos escapábamos a la panadería de Polvillo a comprar las cuñas porque estaban más baratas que en el bar del Colegio”.

VÍNCULOS. “Soy miembro de la Asociación de Antiguos Alumnos y una de mis hijas, la que vive en Sevilla, ha estudiado en el Colegio”.

HERRAMIENTAS POTENTÍSIMAS. ”La educación de valores no debería cambiar, solo adaptarse a los nuevos tiempos. La tecnología marca esta época, en la que nosotros no dejamos de ser emigrantes mientras que los niños son nativos. Tenemos que concienciar a los niños del buen uso de las tecnologías, porque un ordenador es una herramienta potentísima para lo bueno y para lo malo pero hay que dedicarle tiempo a eso”.

MÁS VENTANAS. “Las generaciones de ahora están mucho mejor formadas que nosotros, porque tienen muchas más ventanas, muchísima más capacidad de aprendizaje, varias carreras, masters… Su forma-ción es bastante mejor que la nuestra. En mis tiempos sólo había un canal de televisión cuya emisión finalizaba por la tarde”.

ANTICIPACIÓN Y VALORES. “A un centro de este nivel lo que se le pide es que se anticipe, que es lo que da el ‘plus’ con respecto a los otros, siempre y cuando mantenga una formación en valores impor-tantes y no lo pierda. No vale la anticipación utilitarista. (…) Antici-pación con valores, crear gente que tenga ese espíritu de anticipación, de curiosidad, de creatividad y fomentarlo. Es verdad que vivimos posiblemente en un mundo donde se valora mucho la mediocridad, parece que nos conformamos con que todo el mundo sea mediocre, y tenemos que buscar sistemas educativos que busquen la excelencia, identificarles, darles capacidades y que no se frustren en el camino. Y que en el futuro devuelvan a la sociedad lo que ésta les ha dado, pero con el fomento de valores de excelencia”.

“Cuando eres del Colegio de San Francisco de Paula se crea una especie de vínculo que te identifica”

“El carácter plural del Colegio es algo que me ha acompañado siempre en la vida”

“Ese afán de curiosidad, eso de

preguntarte por qué, es algo que a mí se

me quedó grabado en el cerebro”

164

Por su trabajo en el Servicio Común de Interpretación y Conferencias de la Comisión Europea, José Luis Vivas afirma que no puede seguir tan de cerca como quisiera el día a día del Colegio, que sigue considerando “su casa”. Asegura que en el San Francisco de Paula aprendió el valor del trabajo y de la constancia y admira cómo siempre ha ido por su camino "incluso cuando esto suponía arriesgarse a desaparecer". Cree que el Colegio hoy se orienta acertadamente hacia un mundo cada vez más pluricultural e interconectado y subraya la importancia de enseñar a los alumnos a dominar con desenvoltura varios idiomas.

LLEGADA. “Mis padres no me matricularon, sino que llamaron del Colegio preguntando que cuándo me iban a inscribir, como si fuera de la familia. En realidad, así lo siento; mi abuelo coincidió con D. Luis Rey Guerrero, mi padre con D. Luis Rey Romero y yo con el actual director. El Colegio fue mi casa y aún ahora lo siento así".

SUPERACIÓN, PAN Y VISITAS. “Mis recuerdos son inmejorables. La sensación de mejorar cada curso, de que el trabajo rindiera, de apoyo por parte de los profesores, de competencia y al mismo tiempo solidaridad entre compañeros... También pequeños detalles como el olor a pan de la panadería vecina en mi aula de 3º de EGB; la visión del claustro del monasterio de Sta. Inés desde la azotea. Esto último me intrigaba tanto que acabé organizando con varios compañeros una visita al propio Monasterio, pidiendo permiso al Arzobispo”.

DE HUMANIDADES, PERO CURIOSO. “Siempre preferí, y aún prefiero, las Humanidades, aunque la física y la química también me interesaban porque con ellas entendía cómo funcionaba el mundo que me rodeaba”.

PERSONALIDAD. “El Colegio siempre ha ido por su camino incluso cuando esto suponía arriesgarse a des-aparecer. Cuando cambió la ley de centros concertados perdió todo tipo de subvención por mantener su independencia”.

RESPETO, NO TOLERANCIA. “Aprendí el valor del trabajo y de la constan-cia, y a superarme y dominar -o al menos manejar- cosas que me parecían imposibles al principio. Como no me quitaron la curiosidad, sino más bien me fomentaron la que yo traía, me enseñaron a aprender de todo y de todos. También me enseñaron el respeto a los demás. Respeto, no tolerancia. Ésta es una actitud de superioridad hacia algo o alguien que en el fondo se considera insignificante. El respeto se ejerce entre iguales y circula en los dos sentidos”.

CONVIVENCIA, DENOMINADOR COMÚN. “Entre los profesores había quien declaraba abiertamente su simpatía por el régimen y quien había estado condenado a muerte por el mismo. También entre mis compañeros y coetáneos había desde hijos de modestos tenderos hasta herederos de títulos nobiliarios, pero el trato que recibían dependía de su comporta-miento, no de su cuna”.

n Cursó Filología en la Universidad de Sevi-lla, obteniendo la Licenciatura en Filología Semítica por la Universidad de Granada.

n Intérprete de conferencias freelance en Sevilla, entre 1991 y 1995.

n Intérprete funcionario en el Servicio Común de Interpretación y Conferencias de la Comisión Europea, cumpliendo funciones de interpretación simultánea al español de inglés, francés, alemán, italiano, portugués y griego.

José Luis Vivas BailoIntérprete en el Servicio Común de Interpretación y Conferencias de la Comisión Europea

“El Colegio siempre ha ido por su camino incluso cuando esto suponía arriesgarse a desaparecer”

“Entre mis compañeros había desde hijos de modestos tenderos hasta herederos de

títulos nobiliarios, pero el trato que recibía

cada uno dependía de su comportamiento, no

de su cuna”


165

SUS PROFESORES. “Sobre todo dos: D. Miguel Fernández de los Ronde-ros, que me enseñó inglés y sin cuya guía no habría llegado a ejercer como intérprete de conferencias; y D. José María Garrido, que me enseñó las claves de la Historia y lo mucho que se puede aprender de ella para guiarnos hacia el futuro. Recuerdo también con especial cariño a D. Germán Delgado Colón, que mantenía escrita en lo alto de la pizarra una consigna que resume la clave del éxito en la vida mejor que todos los manuales de autoayuda del mundo: ‘saber lo que hay que hacer y hacerlo’; D. José Montllor Vivó, que mantenía en orden y atentos a cincuenta (o más) fieras de 8-9 años sin levan-tar la voz y que recuerdo como una de las personas más bondadosas (y más amantes del jamón serrano) que he conocido; y D. Carlos Martín Nogués, que aplicaba pedagogías alternativas basadas en la responsabilización del alumno: corregíamos nuestros propios trabajos y nos imponíamos nuestros castigos cuando nos portábamos mal. Lo más grande era que no hacíamos trampas ni aprovechábamos para no castigarnos”.

EX COMPAÑEROS. “Sigo coincidiendo con algunos, tanto cuando voy a Sevilla como en los sitios más insos-pechados. Hace cosa de dos años me encontré con uno de ellos en la catedral de Estrasburgo, y lo reconocí por la voz antes incluso de verlo... De ellos, recuerdo que dos han destacado especialmente en sus campos: Antonio Ramírez de Arellano, que se hizo físico y de quien supe que andaba investigando nuevos materiales, y Sebastián Chávez, compañero de fatigas en MENDRUGO, que es hoy un biólogo de gran altura".

INTERÉS POR EL IDIOMA. “El manejar inglés bien bastante pronto me abrió los ojos a lo diferentes que son las cosas cuando se ven a través de la lente de otro idioma; tanto me gustó la experiencia que pronto tuve claro que quería aprender más idiomas y trabajar en algo relacionado con ellos. Y la capacidad de trabajo y confianza en lo que se puede conseguir si se tiene tesón me sirvieron para hacerme intérprete de conferencias y aprobar una oposición de la Comisión Europea sin haber pasado más de tres meses en el extranjero”.

'LA ROTATIVA’ DE MENDRUGO. “Para encuadernar los números inventamos un sistema consistente en poner los montones de copias de cada página sobre unos cuantos pupitres en el centro de un aula e ir dando vueltas alrededor cogiendo una página tras otra y entregando el montón al compañero que las grapaba. A este siste-ma lo llamábamos ‘la rotativa’, y no sin razón”.

DISTANCIA. “Mantengo una vinculación de afecto con el Colegio y con la familia que lo regenta, que es como la mía. Soy miembro de la Asociación de Antiguos Alumnos y recibo los boletines y el MENDRUGO, que ya habría querido yo poder editar en color como ahora. Si viviera en Sevilla allí sin duda mi hijo estudia-ría en el Colegio”.

PROYECTO EDUCATIVO. “El Colegio se orienta hacia un mundo cada vez más pluricultural y más interconecta-do. En cuanto a nuevas competencias creo que lo esencial hoy es precisamente seguir enseñando las antiguas. Algo tan elemental como expresarse con claridad y riqueza oralmente y por escrito se está perdiendo. También es importante que los niños y jóvenes aprendan a utilizar las nuevas tecnologías como herramientas, y no como portal, vía y medio de conocimiento del mundo. Que sean las personas las que dominen a las máquinas”.

NUEVAS TECNOLOGÍAS. “Las nuevas tecnologías facilitan mucho la obtención de datos, pero a menudo nos quedamos observando árboles de uno en uno y no nos damos cuenta de que pertenecen a un bosque. La gene-ración actual dispone de medios técnicos y recursos económicos que para mi generación eran ciencia ficción”.

RETOS EDUCATIVOS PARA EL FUTURO. “Lo que debe aportar un colegio a un estudiante de cualquier siglo es la capacidad de aprender por sí mismo; los medios para expresarse lo mejor posible racional y emocionalmen-te; y un buen desarrollo físico y social. Sólo una cosa me parece más necesaria hoy que en siglos anteriores: el dominio de los idiomas extranjeros y desenvoltura para trabajar en un idioma diferente del materno. Tam-bién deberán mostrar a los alumnos que el mundo es ancho y diverso, y no centrarse en el ombligo sagrado de la propia región o aldea”.

“Siempre preferí las humanidades aunque la física y la química también me interesaban bastante porque con ellas entendía cómo funcionaba el mundo que me rodeaba”

166

Hijo de quien fuera profesor de inglés y francés durante más de 40 años, Miguel Ángel Fernández de los Ronderos decidió estudiar Derecho cautivado por la figura de D. Antonio Gil Merino durante una conferencia que este magistrado y antiguo alumno dio en el Colegio: “Para mí, aquella charla fue un auténtico foco de luz, pues hizo referencia a la importancia social del Derecho y al papel central de los Tribunales de Justicia”. Además de descubrir su vocación, señala que en el Colegio aprendió “cómo, a través del esfuerzo y la constancia, es posible conseguir alcanzar las metas que uno se proponga, y cómo se puede hacer en un entorno de competencia sana y de respeto a los demás”. Hoy es magistrado en el Juzgado de 1ª Instancia número 13 de Sevilla, y afirma que no ha perdido el contacto con el Colegio: “soy miembro de la Asociación Rey Guerrero de Antiguos Alumnos desde el año de su fundación, y mis dos hijas son también alumnas y estudian actualmente 1º y 3º de ESO”.

MI PADRE ERA PROFESOR DEL COLEGIO. “Ingresé en el Colegio con 8 años, (…) en la clase de don José Montllor. (…) Mi padre, Miguel Fernández de los Ronderos, ha sido profesor de inglés y francés en el Colegio durante más de cuarenta años”.

BUENOS RECUERDOS. “Con el paso del tiempo se tiende a darle más brillo a las experiencias agradables y a poner sordina a las que no lo son tanto. Sin embargo, los recuerdos que conservo treinta años después son todos buenos, pues al final te das cuenta de que incluso los momentos más complicados te ayudan a ir madurando, y la formación que he recibido creo que es impagable”.

RESPETO Y TRABAJO. “Oí muchas veces a D. Luis Rey Romero el lema del Colegio: ‘respeto y trabajo’, es decir, promover un espíritu de comprensión para con las diferentes opiniones y la firme voluntad de dedicar el tiempo y el esfuerzo necesarios a alcanzar el mejor desarrollo intelectual y personal posible. (…) En el Colegio me enseñaron cómo a través del esfuerzo y la constancia se consigue alcanzar las metas que uno se proponga, y que eso se puede hacer en un entorno de competencia sana y de respeto a los demás”.

ESPÍRITU DE TOLERANCIA. “Mi juventud coincidió con el final de la Dictadura y los años de la Transi-ción, un periodo con una carga política evidente y, con la perspectiva de los años, me atrevería a decir que excesiva. En esos momentos se expresaban opiniones políticas e ideológicas muy diversas y tengo que decir que todas tuvieron cabida en el Colegio. (...) Ese espíritu venía de los años posteriores a la Guerra Civil, cuando era muy difícil apartarse de las verdades oficiales. Y lo cierto es que el Colegio sobrevivió, y lo hizo sin ofender ni a unos ni a otros”.

n Licenciado en Derecho en 1987 por la Universidad de Sevilla.

n Juez por oposición desde 1990. Al año siguiente, y hasta 1993, se trasladó a Aya-monte (Huelva) para desempeñar su labor como juez en el Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción núm. 1. Entre 1995 y 1998, fue designado Juez del Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción núm. 2 de Osuna (Sevilla). n En 1998 ascendió a Magistrado y fue des-tinado al Juzgado de 1ª Instancia núm. 13 de Sevilla, donde permanece actualmente.

n Profesor colaborador en el Instituto de Ciencias del Derecho y de la Empresa (ICIDE).

n Director y ponente en cursos de forma-ción de jueces y magistrados.

n Colaborador de la Editorial Aranzadi con diferentes sentencias para su Colección de Jurisprudencia.

Miguel Ángel Fernández de los Ronderos MartínMagistrado

“La formación que recibí en el Colegio creo que es impagable”


167

DEDICACIÓN DEL PROFESORADO. “Me marcaron D. Nicolás Gelo, D. Manuel Pérez-Cerezal, D. Luis González, D. Luis Rey Romero, D. José Mª Garrido, y también mi padre, pues pude ver su dedicación y el esfuerzo que ponía en la enseñanza del inglés y del francés, incluida la incorporación de las nuevas tecnologías de la época”.

ALUMNOS CON UNA TRAYECTORIA DESTACADA. “Recuerdo a José Manuel Quero, que se ha especializado en el mundo de la robótica y es catedrático en la Escuela de Ingenieros de Sevilla; a Jorge Mejías, que es doctor en Física, profesor de Instituto y de la Universidad de Sevilla, y a José Luis Vivas, que es intérprete de no sé cuántos idiomas en la Comisión Europea”.

FOCO DE LUZ. “En un principio, mi aspiración era ser piloto civil. En un momento dado me enteré de que no iba a poder superar las pruebas físicas, y eso hizo que en COU me pasara a letras puras, con el propósito inicial de hacer Historia. Fue durante una conferencia (…) organizada por el Colegio (...) cuando asistí a la impartida por Antonio Gil Merino, a la sazón magistrado de carrera, antiguo alumno y persona entonces muy vinculada al Colegio. Para mí, aquella charla fue un auténtico foco de luz, pues hizo referencia a la importancia social del Derecho y al papel central de los Tribunales de Justicia. Ciertamente, mis dudas (...) subsistieron aún unos pocos meses más (...) Al final me decanté por las ciencias jurídicas, y la Historia la tengo como hobby. Perso-nalmente, creo que acerté”.

UNA PANCARTA POLÉMICA. “En marzo de 1981, con motivo de la recaudación de fondos para el viaje de fin de curso del COU, se organizó una fiesta en el Colegio y, para darle publicidad, se confeccionó una pancarta en la que se hacía referencia al teniente coronel Tejero y a la importancia de los tanques –de cerveza, claro–. El problema fue que el apellido referido coincidía con el de un profesor del Colegio y no gustó esa suerte de vinculación con el entonces recentísimo golpe de Estado del 23-F, de tal forma que la Dirección nos sugirió la retirada de dicha publicidad”.

TRES GENERACIONES EN EL COLEGIO. “Mi padre siguió dando clases en el Colegio hasta el año 2000; además, soy miembro de la Asociación de Antiguos Alumnos desde el año de su fundación (...) Asimismo, mis dos hijas son también alumnas y estudian actualmente 1 º y 3 º de ESO”.

LA PIEDRA ANGULAR. “El respeto y el trabajo considero que siguen siendo la piedra angular sobre la que pivota el proyecto educativo del Colegio. A ellos se ha añadido la de una mayor apertura de miras hacia el exterior, imprescindible en un mundo global, (...) y la importancia que ha adquirido el estudio del inglés y el francés (...). En segundo lugar, el salto tecnológico y la incorporación de las nuevas tecnologías, cuyo desconocimiento te convierten también en analfabeto”.

REVITALIZAR LA DISCIPLINA Y LA MEMORIA. “Se ha producido un cambio en las relaciones entre profesores, alumnos y padres, marcado por una importante reducción del papel del principio de autoridad y por una cierta ‘satanización’ de lo memorístico. Sin necesidad de volver a los años cuarenta del siglo pasado, creo que sería precisa una cierta revitalización de ambos conceptos (...)”.

RIESGOS DE INTERNET. “Las nuevas generaciones estudian en una sociedad más compleja (...) y eso lo veo ahora cuando compruebo las matemáticas, la física, la química, etc., que estudian mis hijas. Además, cuentan con un acceso a la información (...) por Internet que nosotros no podíamos ni soñar, aunque con el riesgo de que el medio sea más importante que el mensaje”.

CULTIVAR LAS MENTES. “El Colegio no debe renunciar a sus principios (...) y tiene que seguir conside-rando como objetivo primordial la calidad de la educación que imparte. Sólo con personas auténticamente formadas podremos ganar el futuro”.

“Me enseñaron cómo a través del esfuerzo y la constancia se consigue alcanzar las metas que uno se proponga, y que eso se puede hacer en un entorno de competencia sana y de respeto a los demás”

168

Enrique Gómez-Alvarez Salinas entró en el San Francisco de Paula como alumno interno en 5º de EGB. “Fue al cursar mis hijos 5º de Primaria cuando me di cuenta lo pequeño que era yo al salir de mi casa de Guadalcanal y venirme interno a Sevilla”, comenta. Desde entonces, el Colegio se convirtió para él en su casa, no en vano pasaba allí mucho más tiempo que el que podía compartir con su propia familia. Recuerda que los alumnos internos formaban un grupo especial entre los que existía una especial unión. Quizás por eso, afirma que en el Colegio aprendió el valor de la amistad y del grupo, y también valora enormemente que le enseñaran a ser disciplinado. “¡Qué antiguo pero qué necesario!”, apunta. Todo ello, junto a la constancia en el trabajo, que le ayudó mucho para hacer la carrera de Medicina y también para su posterior trayectoria profesional. Una reconocida trayectoria como Médico Psiquiatra, con consulta privada en Sevilla, y como Psiquiatra asesor de Mutuas de Accidentes de Trabajo y Enfermedades Profesionales.

MI PADRE LO TENÍA CLARO. “Mis padres tenían muy claro que estudiaría en el San Francisco de Paula, ya que mi padre fue también Antiguo Alumno. Siendo muy pequeño, cuando veníamos a Sevilla y pasábamos delante de la iglesia de San Pedro me señalaba hacia la calle Sor Ángela y me decía que allí estaba ‘su’ Colegio”.

VALORES. “Trabajo, respeto y tolerancia, creo que son las palabras que mejor definen el Colegio. Si tuviera que resumir de forma breve qué es lo principal que aprendí allí, diría que me enseñaron a trabajar y a ser respetuo-so, tolerante, plural, abierto a nuevas ideas y al aprendizaje continuo. Me enseñaron también a ser disciplinado (¡qué antiguo pero qué necesario!) y aprendí el valor de la amistad y del grupo. Lógicamente también estoy muy contento de la enseñanza recibida pero esto casi que lo doy por sentado”.

TOLERANCIA CON LAS IDEAS AJENAS. “Mi etapa en el Colegio coincide con la etapa de mayor cambio en España. Allí vivimos el asesinato de Carrero, la muerte de Franco, el inicio de la transición democrática… Eran años de mucha ‘política’ estudiantil y siempre todas las ideas fueron absolutamente aceptadas y toleradas”.

LOS ‘D. LUISES’. “Muchos profesores me marcaron de forma importante y de todos y cada uno aprendí cosas, pero algunos destacaron en esa influencia, también posiblemente por el grado de convivencia que los alumnos internos teníamos con ellos. Destacaría en primer lugar a los ‘D. Luises’. A D. Luis González, con una enorme calidad humana y hacia el que siempre he sentido un cariño muy especial. Recuerdo con devoción sus clases de literatura y el buen trato (eso sí, serio y disciplinado) que siempre tuvo con todos sus alumnos. A D. Luis Rey, siempre en continua actividad y con su Colegio en todo momento en el primer pla-no del pensamiento. Un magnífico Profesor, magnífico Director, magnífico tutor y, por encima de todo, una todavía mejor persona que estará siempre vinculada a mi recuerdo del Colegio. Junto a ellos Dª María Estela (que también, como D. Luis González, fue tutora un año de mi clase) y Dª Maribel Goñi, tantos años nuestra Profesora de francés. D. José Guillermo Rey, de quien aprendía disfrutar de la Biología. Y también tengo un recuerdo muy especial de D. Manuel García Vázquez (¡qué fácil era con él la Historia!) y de D. Manuel Pérez Cerezal. Ambos fueron tutores de mi clase durante un curso”.

n Licenciado en medicina y cirugía por la Universidad de Sevilla, promoción 1979/1985.

n Especialista en psiquiatría. Especialidad realizada en el Hospital Juan Ramón Jiménez de Huelva (1992/1995).

n Desarrolla su actividad como Médico Psiquiatra, en su consulta privada en Sevilla, y como psiquiatra asesor de Mutuas de Acciden-tes de Trabajo y Enfermedades Profesionales.

Enrique Gómez-Álvarez SalinasMédico especialista en Psiquiatría

“En el Colegio me enseñaron a ser disciplinado (¡qué antiguo pero qué necesario!) y aprendí el valor de la amistad y del grupo”


169

UNA GRAN ALEGRÍA CUANDO NOS ENCONTRAMOS. “Sigo teniendo buenos amigos y nos alegra muchísimo cuando nos encontramos. Como es lógico, he tenido mucha más relación con los compañeros del Colegio que además fueron posteriormente compañeros de Facultad. La vida, sin embargo nos va llevando por caminos diferentes y es difícil mantener una relación cercana. Disfruté muchísimo de la convivencia que realizamos en el Colegio con motivo de los 25 años de la finalización del COU”

LA ELECCIÓN DE LA CARRERA. “No creo que el Colegio tuviese una especial influencia en mi vocación hacia la Medicina pero sí, lógicamente, en el desarrollo de la capacidad de estudio y de trabajo que me permitió el adecuado desarrollo de la carrera de Medicina y de mi actividad laboral posterior”.

ALGUNAS CURIOSIDADES. “Más que anécdotas, voy a contar algunas cu-riosidades relacionadas con nuestra vida en el Colegio. Los alumnos internos nos levantábamos diariamente a las 7:40 horas tras ser despertados por D. Luis González, que a esa hora ya había comenzado su actividad en el Colegio. Teníamos tres estudios obligatorios diarios, vigilados por maestros del Colegio, el primero de 8:15 a 8:45 (para los últimos repasos antes de las clases), por la tarde de 18:00 a 19:30 y por la noche de 21:00 a 22:15 horas. Esto quiere decir que desde pequeños teníamos tres horas y cuarto al día para el estudio diario. Nos podíamos ir todos los fines de semana a nuestra casa, pero eso sí desde el sábado a las 10:15 horas (tras el estudio obligatorio del sábado) hasta el domingo a las 20:00 si cenabas en el Colegio o las 22:00 si llega-bas ya cenado. Claro que para marchar al pueblo el fin de semana el tutor del curso tenía que firmarte una autorización que le presentábamos escrita en media cuartilla en que rezaba así: ‘Se puede conceder permiso al alumno D. …., del curso … para marchar a su domicilio este fin de semana’. Posteriormente la teníamos que entregar en Dirección para la autorización definitiva. Los alumnos de pueblos distantes solíamos irnos a casa cada dos semanas. Si nos quedábamos en el Colegio salíamos en lo que se llamaba ‘La Fila’ los sábados por la tarde y los domingos (mañana y tarde) bajo el control de un profesor o vigilante del Colegio con el que íbamos al Parque de Mª Luisa o al cine. A partir de 7º-8º de EGB ya teníamos autorización paterna para poder salir solos, sin el control de ‘La Fila’, volviendo siempre al Colegio a la hora del almuerzo y por la tarde a las 20:00, hora de la cena”.

PARTICIPACIÓN COMO PADRE. “Mi vinculación al Colegio se mantiene desde hace mucho tiempo por mi per-tenencia a la Asociación de Antiguos Alumnos. Si bien no puedo acudir a muchas de las interesantes activida-des que desde allí se organizan, sí que he participado (junto a mi familia) en varias excursiones (de verano y de fines de semana), donde hemos pasado unos días inolvidables, y en alguna de las tertulias de los lunes. En los últimos años esta vinculación ha sido y es mucho más intensa por estar mis dos hijos estudiando actualmente en el Colegio. De esta forma durante estos últimos años he estado acudiendo al Colegio casi a diario para lle-varlos o para recogerlos, para asistir a las Jornadas dedicadas a distintos países o para ver e incluso participar en las Miniolimpiadas de los niños”.

CAMBIOS SIN ALTERAR EL PROYECTO GLOBAL.“Indudablemente el cambio ha sido radical en el Colegio desde mis tiempos de estudiante. Este cambio lógicamente ha ido paralelo al cambio que ha existido en nuestra sociedad y en el desarrollo mundial de nuevas tecnologías, a las que entiendo se ha ido realizando una correc-ta adecuación. Sin embargo, considero que el proyecto global del Colegio se mantiene, con la ‘obligación’ de formar personas con un nivel académico alto pero con un nivel humano superior. La potenciación del estudio de idiomas me ha parecido un hecho fundamental y necesario”.

RECOMENDACIÓN PARA EL FUTURO. “Mi consejo es simplemente que mantengan el ‘espíritu franciscano’ otros 125 años. Que sean capaces de aprovechar los inmensos recursos pedagógicos actuales con un manejo adecuado del trato humano hacia los alumnos”.

“Fue al cursar mis hijos 5º de Primaria cuando me di cuenta lo pequeño que era yo al salir de mi casa de Guadalcanal y venirme interno a Sevilla”

170

Sebastián Chávez, Catedrático de Genética de la Universidad de Sevilla, y padre de dos hijos que estudian hoy en la Escuela Infantil de San Francisco de Paula, asegura que varias de las mejores imágenes de su infancia y adolescencia se asocian con el Colegio: desde las entrañables lecciones de civismo de Dª María Estela hasta el gran viaje de fin de estudios a París en compañía de D. Luis y Dª Maribel. Ingresó en el San Francisco de Paula en 1972, y afirma que los años que pasó en el Colegio le sirvieron para apreciar el placer de conocer, vivir buscando la verdad, y mantener una actitud de permanente autoexigencia y de compromiso con el entorno social. Una actitud bien evidente en la biografía de este biólogo, Catedrático de Genética de la Universidad de Sevilla, inventor de una decena de patentes internacionales y socio fundador de una spin off de base tecnológica.

UN COLEGIO CERCANO Y LAICO. “Ingresé en 1972, a la edad de 8 años, procedente del Colegio San Fernando de los Her-manos Maristas, que ese año cerró sus instalaciones de la calle San Pablo y se trasladó al barrio de Los Remedios. Mis padres preferían un colegio situado en el centro de la ciudad, más cercano a nuestro domicilio. El carácter laico del Colegio de San Francisco de Paula era además del agrado de mi padre”.

IMÁGENES DE LA INFANCIA Y ADOLESCENCIA. “Guardo recuerdos muy gratos. Varias de las mejores imágenes de mi infancia y mi adolescencia se asocian con el Colegio: las esti-mulantes y participativas clases con D. Ricardo Carmona, las entrañables lecciones de civismo de Dª María Estela, las excelentes enseñanzas de literatura española de D. Luis González, las reuniones de la redacción de MENDRUGO, las memorables sesiones en los laboratorios de Física y de Química con D. Luis Rey, y el gran viaje de fin de estudios a París, en compañía de D. Luis y Dª Maribel”.

DIFÍCIL ELECCIÓN. “Fui un buen estudiante que disfrutaba aprendiendo. Me gustaba todo. Fue muy difícil para mí elegir entre Ciencias y Letras en el Bachillerato. Si hubiera podido habría seguido todas las mate-rias. Me resultaba – y me sigue resultando – apasionante y enriquecedor navegar por el conocimiento”.

SEIS PALABRAS PARA DEFINIR LA PERSONALIDAD DEL COLEGIO. “Ciencia, cultura, honestidad, es-fuerzo, civismo, laicidad. (…) En el Colegio aprendí a apreciar el placer de conocer y a vivir buscando la verdad, manteniendo una actitud de permanente autoexigencia y de compromiso con el entorno social”.

ALEJADO DE CUALQUIER SECTARISMO. “En el Colegio se respiraba pluralismo. En una época tan dada a planteamientos extremos de uno y otro signo como fue la transición de la dictadura a la democracia, que yo viví de lleno durante mis años escolares, en el Colegio se mantuvo un clima de convivencia en libertad y compromiso democrático alejado de cualquier sectarismo”.

n Licenciado en Biología por la Universidad de Sevilla en 1987, y Doctor en Biología en 1992.Estancias posdoctorales en Marburg y Londres. Premio Real Maestranza de Caballería 1999 a jóvenes investigadores.

n Profesor del Departamento de Genética de la Universidad de Sevilla desde 1999 y Catedrático desde 2010. Profesor visitante de la Universidad de Colorado en Denver (EE.UU.)

n Director del grupo de investigación sobre Expresión génica en eucariontes desde su fundación en 2000. Autor de más de cincuenta artículos científicos publicados en revistas internacionales e inventor de una decena de patentes internacionales.

n Socio fundador de Ingeniatrics Tecnologías, empresa creada con otros investigadores de la Universidad de Sevilla.

n Vicerrector de la Universidad Internacional de Andalucía de 2001 a 2005.

n Miembro del Comité Andaluz para la Socie-dad del Conocimiento y socio fundador de la asociación Iniciativa Sevilla Abierta.

Sebastián Chávez De DiegoCatedrático de Genética de la Universidad de Sevilla

“En el Colegio aprendí a apreciar el placer de conocer y a vivir buscando la verdad”


171

NOMBRES PROPIOS. “Guardo buenos recuerdos del conjunto del profeso-rado del Colegio y siempre será injusto resaltar solo a unos pocos. Además de los que ya he mencionado anteriormente, nunca olvidaré las interesantes conversaciones sobre Historia con D. Manuel García Vázquez y D. Francisco Garrido, así como a D. Amadeo Gómez y Doña Pilar Sanz, que influyeron de manera decisiva en mi opción por la investigación científica”.

GRANDES AMIGOS. “El devenir nos ha llevado a lugares y entornos dife-rentes pero conservo grandes amigos, y a veces organizamos reuniones de antiguos compañeros de promoción. (…) Muchos compañeros de promoción son grandes profesionales en diferentes ámbitos. Es difícil señalar solo a algunos. Valgan como muestra dos de ellos, que forman parte de los equipos de gobierno de las universidades sevillanas: Andrés Garzón es Vicerrector de la Universidad Pablo de Olavide y Antonio Ramírez de Arellano lo es de la Universidad de Sevilla”.

AMOR POR LA CIENCIA. “El Colegio influyó de manera absolutamente deci-siva en mi vocación. En el Colegio me enamoré de la Ciencia, algo impres-cindible para hacer investigación científica”.

DISPUESTO A COMERSE EL MUNDO. “El primer día que entré en el Colegio, con 8 años, estaba tan cohi-bido que fui incapaz de pedir que me calentaran la comida que llevaba en el canasto. Me la comí fría. Casi 10 años después salí de ese mismo Colegio dispuesto a comerme el mundo, con la seguridad del bagaje intelectual y humano que había recibido”.

LOS PATIOS DE MI INFANCIA. “He mantenido siempre una vinculación afectiva con el Colegio que se ha traducido en mi participación en algunas actividades, por ejemplo en charlas organizadas por la Asocia-ción de Antiguos Alumnos. Ahora mis hijos Felipe y Leo estudian en la Escuela Infantil del Colegio; rara es la semana que no recorro de nuevo los patios de mi infancia cuando voy a recogerlos”.

ACIERTO ESTRATÉGICO. “El Colegio ha modernizado muy significativamente sus medios técnicos. A mis hijos les cuesta concebir una pizarra que no sea digital. La decisión de hacer de la enseñanza una tarea absolutamente multilingüe, con profesorado nativo, es un gran acierto estratégico, así como la apuesta por el Bachillerato Internacional. Simultáneamente el Colegio mantiene los mismos valores humanos y el mismo ambiente intelectual de los que yo me beneficié como estudiante. Esa combinación entre innova-ción técnico-pedagógica y solidez de principios es muy positiva”.

INFORMACIÓN VERSUS CONOCIMIENTO. “La principal diferencia entre las formas de aprender de antaño y hoy radica en el acceso a la información, que se ha multiplicado gracias a la red digital y puede rea-lizarse de manera directa, sin necesidad de que se canalice a través del sistema educativo. Pero la mera información no equivale al conocimiento. Éste último implica necesariamente el arte pedagógico de los profesores y el entorno intelectual y humano de los centros educativos. Las tecnologías de la información son por tanto estupendas aliadas de la docencia pero no sus sustitutas. Los jóvenes andaluces en general tienen grandes habilidades en el uso de la Red y en comunicación digital pero no por ello son más cultos. Valga un ejemplo: el 90% de los contenidos de la Red están en inglés y a pesar de eso la mayoría sigue sin dominar ese recurso fundamental de la vida contemporánea”.

UN CONSEJO. “Que mantengan el rumbo, siendo innovadores en las metodologías, que seguirán evolucio-nando, y muy fieles a los principios que han inspirado estos 125 años”.

RETO DE FUTURO. “El reto es formar auténticos ciudadanos del siglo XXI, no simplemente personas dotadas de un conjunto de habilidades y destrezas. Con todo lo que ello representa: seres humanos cultos y empren-dedores, felices de tomar parte activa en la actual Sociedad del Conocimiento y de contribuir todos los días, con la actuación personal en su entorno, a afrontar los grandísimos problemas que sufre la Humanidad”.

”La decisión de hacer de la enseñanza una tarea absolutamente multilingüe, con profesorado nativo, es un gran acierto estratégico, así como la apuesta por el Bachillerato Internacional”

172

Antonio Mariano Esteban reconoce que las prácticas en los laboratorios del Colegio le hicieron ver muy claro lo que quería ser. Recuerda las explicaciones de D. Luis Rey Romero. Especialmente rememora una práctica en el Laboratorio de Física con el “Aparato de Sánchez”, un dispositivo que generaba tensiones de 100.000 voltios. D. Luis anunció que conectaría dicho dispositivo mediante un cable a una placa metálica situada debajo de un cojín, y que se sentaría encima sosteniendo con una mano un tubo fluorescente, el cual se encendería al pasar la corriente por él. “Evidentemente los que estábamos allí nos quedamos atónitos de que fuera a sentarse en esa silla eléctrica, ya que acabábamos de ver los chisporroteos que pegaba aquel chisme, y él, para rematar la situación nos dijo: Si esto falla no me toquéis, me empujáis con algo de madera”. Hoy, este ingeniero industrial es Director de Proyectos y Consultor en Sistemas de Información, y socio de las ingenierías Guadaltel, S.A. y PID Ingenieros.

DE PRIMERO A COU. “Entré en el Colegio en 1º de EGB con D. Juan Plata. La motivación de mis padres para llevarme al Colegio fueron la buena referencia que tenían de él y la cercanía (...). En el Colegio realicé todos los cursos hasta llegar a la Universidad. (...) Solía tener buenas calificaciones, especialmente en Ciencias, mis preferidas (...). Pero tengo que reconocer que había profesores que consiguieron que algunas asignaturas, a las que en principio mostraba menos ‘entusiasmo’, me resultaran realmente atractivas como la historia, la literatura y la filosofía”.

TESÓN Y RESPETO. “La personalidad del Colegio se podría resumir en una institución en cierto modo familiar, con una exigencia elevada, donde se valoraba el trabajo bien realizado y el trato con educación y respeto. (…) Hay varios aspectos fundamentales que me transmitió el Colegio y permanecen en mí (...) entre ellas el valor del esfuerzo para conseguir alcanzar nuestras metas. Considero que conseguir un objetivo o superar una dificultad es una cuestión de tesón. Y, desde un punto de vista de las relaciones humanas, en el Colegio aprendí a valorar y a respetar a los demás y lo que hacen, ya que es en las diferencias con los otros donde precisamente podemos enriquecernos”.

DIFERENCIAS IDEOLÓGICAS. “En el periodo que estuve en el Colegio se produjo la transición hacia la demo-cracia en España, por lo que eran momentos en los que las diversas opiniones ideológicas sobre algún aspecto solían salir entre los compañeros en pequeñas tertulias de patio, y que en ocasiones se trasladaban a algunas clases, donde se opinaba sin ningún tipo de problemas. Y en general, cualquier forma de pensar y ver las cosas era tratada con toda naturalidad”.

TRES ETAPAS. “Creo que tendría que destacar a diferentes profesores. De la primera etapa, más infantil, destacaría a D. Juan Plata, D. Germán, D. Fernando y D. Nicolás que me inculcaron el valor del esfuerzo. En una segunda etapa, D. Manuel Pérez Cerezal, D. Salvador Serra y D. Francisco Gómez, que afianzaron mi preferencia por la ciencia y la tecnología (...). Por último, ya en el bachillerato, las explicaciones de física y química de Don Bernar-do, Don Amadeo y especialmente de D. Luis Rey Romero fueron fundamentales para mi formación universitaria”.

n Ingeniero Industrial (especialidad eléctrica) por la Universidad de Sevilla.

n Asistente honorario como investigador en el Departamento de Tecnología Electrónica de la Universidad de Sevilla.

n Socio de Guadaltel, S.A, ingeniería de sistemas dedicadas a las diferentes áreas de las TICs y de PID Ingenieros, S.C.A. ingeniería dedicada al área de proyectos.

n Ha participado en más de 60 proyectos como Jefe de Proyectos o Consultor de algún área de las mismas.

Antonio Mariano Esteban RomeroIngeniero Industrial y Empresario

“En el Colegio descubrí que en las diferencias con los otros es donde precisamente podemos enriquecernos más”


173

COMPAÑEROS. “Conservo un grupo de amigos muy queridos del Colegio. Y cuando nos reunimos, suele salir algún que otra anécdota. También tengo contacto con otros compañeros por tener sus hijos en el Colegio y coincidir en el patio, y en otros casos por temas profesionales. (…) Me consta que hay numerosos compañeros que son estupendos profesionales, por destacar alguno podría nombrar a D. Luis Rey Goñi y a D. Manuel Altava, premios jóvenes empresarios de Sevilla 2006 y 2007 respectivamente, al escritor y columnista D. Alvaro Pastor, al productor de cine D. Gervasio Iglesias, a Dª Esperanza Caro”.

ORIENTACIÓN HACIA LA INGENIERÍA. “Siempre he tenido mucho interés por la ciencia, el Colegio me fue abriendo las puertas hacia la trayectoria profesional que seguí, la ingeniería. Por lo que el poder ver películas de Cien-cias, hacer experimentos en los laboratorios, me hicieron tener muy claro lo que quería hacer”.

UN EXPERIMENTO INOLVIDABLE. “Recuerdo varias anécdotas, pero quería señalar una de D. Luis Rey Romero. En este caso nos explicaba en el laboratorio de física los experimentos de electricidad que se realizaban a principios del siglo XX. Para ello se utilizaba un dispositivo (‘Aparato de Sánchez’) que generaba tensiones de 200.000 voltios, la idea era que dicho dispositivo se conectaba mediante un cable a una placa metálica situada debajo de un cojín, él se sentaría encima y sostendría con una mano un tubo fluorescente que se encendería al pasar la corriente por él. Evidentemente, los que estábamos allí nos quedamos atónitos, ya que acabábamos de ver los chisporroteos que pegaba aquel chisme, y el profesor se iba a sentar en aquella autentica silla eléctrica y para rematar nos dijo: ‘Si esto falla no me toquéis, me empujáis con algo de madera’. Nos miramos y toma-mos los taburetes como si fuéramos a domar a un león… Le dio al interruptor, el aparato chisporroteó con un gran arco eléctrico y el fluorescente se encendió. (...) Consiguió que todavía me acuerde de cómo se llamaba el aparato”.

EVOLUCIÓN. “Mi vinculación ha sido doble, por un lado por la estrecha amistad que tengo con D. Luis Rey Goñi. Y por otra, por tener en la actualmente a mis hijos en el Colegio. Creo que hay cosas que no han cambia-do y que deben perdurar, como es el mantener una formación completa y rigurosa en las diferentes disciplinas. (...) Considero que el Colegio se ha adaptado a la realidad social que nos ha tocado vivir, como es el caso de los idiomas, el empleo del ordenador y el acceso a Internet, etc. Pero en esta realidad, donde el acceso a la “información” es tan sencillo, creo que el Colegio debe fomentar aún más la habilidad de ser críticos ante la información que reciben y el respeto a las diferentes formas de pensar y culturas”.

NUEVAS HERRAMIENTAS. “La formación que yo recibí estaba muy unida al profesor y a su talento para ga-narse a los alumnos (‘cada maestrillo tiene su librillo’), y esto seguirá siempre así, pero creo que con los medios actuales (pizarras electrónicas, ordenadores, etc.) conseguir la atención del alumno es más fácil. A esto se une que los idiomas son impartidos por profesores nativos, que seguro que suenan mejor que el radiocassete de D. Miguel (...). La unión de la preparación pedagógica de los profesores, de los medios y la visión de formación integral de los alumnos hacen que las nuevas generaciones de estudiantes estén mejor preparadas”.

EL FUTURO. “Es fundamental que (...) se continúe estando a la vanguardia educativa, vigilante de las deman-das sociales. Pero, pensando en el futuro, y teniendo presente conceptos como la globalización, se demandarán nuevas formas de recibir la formación más allá de las aulas, acogiendo incluso profesores de todas partes del mundo sin necesidad de desplazamiento, y se potenciará nuevas formas de aprender a aprender. Y en general se producirán cambios a los que el Colegio les deberá dar una respuesta innovadora y atrevida”.

EL GRAN RETO. “Creo que el gran reto, y será lo que distinga a las mejores instituciones educativas de otras, es la capacidad que tengan estas de poder detectar en cada alumno aquellas habilidades importantes para él y su futuro, animándole a desarrollarlas y dotándole de los medios para que se oriente en esa dirección. En definitiva centrarse en las personas como objetivo a potenciar sacando lo mejor de cada uno para aportarlo a la sociedad”.

“El hacer experimentos de física y química en esos maravillosos laboratorios que te trasladaban en el tiempo, me hicieron tener muy claro lo que quería hacer”

174

Juan Pablo Sobrino es Decano de la Facultad de Enfermería, Fisioterapia y Podología de la Universidad de Sevilla, donde imparte la asignatura de Psicología de la Salud y Técnica de Comunicación para profesionales de la salud. Sin embargo, dice que lo primero que debería aparecer en su currículo es que tiene “una mujer fantástica y tres hijos maravillosos”. Percibe el San Francisco de Paula como un colegio “con personalidad” que enseñaba a sus alumnos la importancia del esfuerzo y el gusto por el saber. “Además, también nos inculcaron ser muy exigentes con nosotros mismos, pensar que siempre podemos apretar un poco más”, dice Juan Pablo Sobrino, que asegura que, en eso y otras cosas, el Colegio tuvo una influencia importante en su carrera profesional, “porque además los profesores te informaban de forma muy correcta sobre tus posibilidades”. Sobre el futuro, opina que cualquier institución educativa de excelencia debería trabajar de forma muy específica sobre la educación emocional.

HIJO DE ANTIGUO ALUMNO. “Entré en el Colegio en 5º de Básica porque mi padre era alumno y decidió que sus tres hijos varones acudieran al mismo colegio. Recuerdo que no era un alumno muy brillante en cuestiones académicas pero iba aprobando. La asignatura que más me gustaba era biología, que impartía D. Gui-llermo Rey, y luego me gustó mucho la filosofía”.

EXIGENCIA. “Yo definiría el San Francisco de Paula como un colegio con personalidad. Los valores que fomentaban eran el esfuerzo, el trabajo y el gusto por el saber. Guardo una gran capacidad para disfrutar aprendiendo y estudiando, siempre y cuando no tenga que examinarme. Además, también nos

inculcaron ser muy exigentes con nosotros mismos, pensar que siempre podemos apretar un poco más. (…) El Colegio influyó muchísimo en mi carrera. Además los profesores te informaban de forma muy correcta sobre tus posibilidades”.

INTELIGENCIA Y TOLERANCIA. “En el Colegio se percibía la pluralidad y la convivencia de diferentes ideas, de hecho había una formación importante en eso. Yo creo que la inteligencia tiene mucho que ver con la tolerancia. O lo que es lo mismo, la intolerancia es fruto de la ignorancia”.

NOMBRES PROPIOS. “Entre los profesores, D. Manuel Benigno García Vázquez, que por aquel entonces impartía la asignatura de historia, fue de los que más me influyeron. En cuanto a antiguos alumnos, claro que sí, que conservo amigos de esos años, ahora me encuentro mucho

n Doctor en Psicología. n Profesor Titular de la Universidad de Sevi-llaDecano de la Facultad de Enfermería, Fisiote-rapia y Podología.

n Director del Master Oficial Universitario en Nuevas Tendencias asistenciales en Ciencias de la Salud y profesor de varios masters.

n Ha trabajado como terapeuta familiar, especializado en terapia de pareja, y actual-mente trabaja en técnicas de hipnosis para el alivio del dolor.

n Ha colaborado con varias revistas cientí-ficas y libros relacionados con su ámbito de estudio.

Juan Pablo Sobrino ToroDoctor en Psicología y Decano de la Facultad de Enfermería de Sevilla

“Nos inculcaron ser muy exigentes con nosotros mismos, pensar que siempre podemos apretar un poco más”

“En el Colegio se percibía la pluralidad

y la convivencia de diferentes ideas, de hecho, creo que la inteligencia tiene

mucho que ver con la tolerancia”


175

con el Decano de Medicina, Juan Ramón Lacalle, y con dos vicerrecto-res, Miguel Ángel Castro y Antonio Ramírez de Arellano. En general, todos mis compañeros con los que mantengo contacto son muy buenos profesionales y ocupan puestos de responsabilidad. (…) Hace cuestión de dos o tres años celebramos el 25 Aniversario de mi promoción, y me hizo mucha ilusión volver a reencontrarme con todos esos compañeros, y también con D. Luis Rey Romero”.

SUSPENSIÓN DE LAS CLASES. “Guardo muchas anécdotas fundamen-talmente relacionada son los alumnos internos. También recuerdo el día que falleció Franco ya que fue de los pocos que suspendieron las clases”.

VALORES Y FILTRO DE LAS FUENTES. “Los métodos educativos han cambiado radicalmente, principalmente por el rápido acceso a la in-formación a través de Internet y la importancia de los idiomas. Desde mi punto de vista sería necesario que se acentuara la importancia de los valores. Actualmente tenemos acceso a multitud de datos vacíos, debemos transformarlos, infundir en ellos unos principios, unos valores. En este proceso sería útil alguien con conocimientos sobre el tema que nos orientara al mismo tiempo que actúa como filtro de la información y le proporciona un valor. Otro punto que creo que hoy en día tenemos un poco olvidado y que deberíamos tomarlo mucho más en cuenta, son las fuentes de información. Le damos el mismo valor a una informa-ción vertida en un programa de cotilleo que a una revista científica de reconocido prestigio”.

FOMENTAR LA CURIOSIDAD. “La esencia del proceso de enseñanza y aprendizaje no ha cambiado, hay gente que tiene conocimientos y ganas de enseñarlos a otras personas que desean aprenderlos. Por otra parte, el profesor debería trabajar en su capacidad de captar la atención de su auditorio, al tiempo que lo orienta y dirige. Es imprescindible que los sistemas educativos no aborten la curiosidad natural de los niños”.

RECOMENDACIONES. “Mi recomendación al Colegio es que siga como está, que mantenga su esencia y que se adapte a los nuevos tiempos. Desde mi punto de vista, cualquier colegio hoy en día debe proporcio-nar a sus alumnos las herramientas necesarias para que estudiar sea algo natural y agradable, no un sacrificio. El verbo aprender no admite el imperativo, no se puede obli-gar a nadie a estudiar. Creo además que las mejores instituciones educativas no se centrarán exclusiva-mente en el rendimiento académico, sino que tendrán muy presente la educación emocional”.

“Desde mi punto de vista sería necesario que se acentuara la importancia de los valores. Actualmente tenemos acceso a multitud de vacíos, debemos transformarlos, infundir en ellos unos principios”

“El profesor debería trabajar en su capacidad de captar la atención de su auditorio, al tiempo que lo orienta y dirige. Es necesario que los sistemas educativos no aborten la curiosidad natural de los niños”

176

Jorge García es socio Director de una empresa especializada en servicios de Retail Centros Comerciales y de un grupo de residencias para mayores y discapacitados. Como empresario, se guía por los tres valores fundamentales que dice aprendió en el Colegio: exigencia, disciplina y trabajo. Aunque no puede seguir directamente la actualidad del Colegio, pues vive en Madrid desde hace años, desde la lejanía valora el desarrollo en idiomas, la apertura y alianzas con otros centros, proyectos y/o sociedades y la aplicación de nuevas tecnologías. A pesar de la distancia, y ayudado por las redes sociales, sigue en contacto con muchos de sus compañeros de promoción. Sobre el futuro del Colegio, se muestra reacio a ofrecer consejos, pero dice que las mejores instituciones educativas se distinguirán por sustentar su proyecto en los siguientes pilares: innovación, idiomas, apertura a nuevas sociedades y programas de colaboración e integración de otras culturas y modelos educativos, Dice conservar del Colegio muchas anécdotas, “algunas de las cuales no se pueden contar” y recuerda de forma especialmente intensa la que él denomina “noche de los cuchillos largos”, una noche en la que padres, alumnos y Dirección del Colegio decidieron sobre la excursión de COU. Sobre ella, dice que siempre recordará a D. Luis Rey Romero argumentando, bien entrada la noche, “por qué debíamos ir”, y dice que siempre se lo agradecerá, porque fue “una experiencia única”.

DOCE AÑOS. “Ingresé en el Colegio en 1973. Y estuve los 12 años, de 1º EGB a COU. Mis padres eligieron el San Francisco de Paula por el prestigio que tenía”.

RECUERDOS LIGADOS A LOS COMPAÑEROS. “Fui un estudiante de nivel medio, sin notas sobresalientes, y mis asignaturas preferidas eran quími-ca y física, posiblemente influenciado por el Profesor, D. Bernardo. Mis recuerdos están ligados principalmente a los compañeros que tuve, de los cuales conservo algunas amistades, a pesar de vivir fuera de Sevilla”.

VALORES. “Exigencia, disciplina y trabajo son las tres palabras que definen mejor la personalidad del Colegio, lo principal que aprendí en él, y son también los valores que aplico en mi empresa”.

CON EL PASO DEL TIEMPO. “En mi caso, no fui consciente de la plurali-dad del Colegio en los años de estudiante. Sin embargo es cierto que con el paso de los años sí lo he percibido y valorado”.

NOMBRES PROPIOS. “Quizás por el tiempo que los disfruté, frente a

n Licenciado en Ciencias Económicas por la Universidad de Sevilla

n MBA en el Instituto de Empresa de Ma-drid.

n 1990-1994. Responsable de Unidad de Seguros en CAJA MADRID, en Cádiz.

n 1994-1996. Ejecutivo comercial del Área de Empresas en BANCO ATLÁNTICO.

n 1996-1998. Director de Unidad de Nego-cio en RANDSTAD.

n 1.998-2005. National Sales Manager HEINEKEN ESPAÑA.

n Actualmente. Socio Director en QUICK EXPANSION, empresa con sede en Madrid especializada en la prestación de servicios de Retail & Centros Comerciales.

n Es también Socio Director en centros de mayores Santa Genma. Centros Geriátricos.

Jorge Juan García LoboEconomista y Empresario

“Exigencia, disciplina y trabajo son los valores que aprendí en el Colegio, y los que aplico en mi empresa”

“En toda mi carrera profesional, tanto

ahora de empresario como cuando me

tocó trabajar para otras organizaciones, siempre he aplicado

los principios que aprendí en el Colegio”


177

otros que quizás no tuvimos suficiente tiempo para conocernos, yo des-tacaría a D. Juan Plata, D. Fernando Pérez Campillo. D. José Ferrer y D. Bernardo Delgado”.

AMIGOS EN CONTACTO EN LA RED. “A pesar de no vivir en Sevilla des-de 1990, sí conservo bastantes y nos vemos o tenemos contacto con asi-duidad. Antonio Toro, Miguel Nogales, Antonio Seras, Hermanos Cazorla del Río, Antonio Gandul, Jesús Gª Díaz, Antonio Plata, Manuel Hidalgo, Manuel Altava… son algunas de esas amistades. ¡Facebook nos ha ayuda-do mucho! Tenemos un grupo muy activo de la promoción del 85”.

INFLUENCIA EN LA CARRERA PROFESIONAL. “Tuve algunas dudas sobre qué carrera hacer tras el COU, y tengo que decir que el Colegio no influyó de forma directa en la elección mi formación (Empresariales) ni de mi profesión (empresario). Pero sí es cierto que en toda mi carrera profesional, tanto ahora como cuando me tocó trabajar para otras orga-nizaciones, siempre he aplicado los principios que aprendí en el Colegio. Tras 25 años de mi promoción (1985) tengo que decir que pienso seguir aplicándolos otros tantos”.

ANÉCDOTAS. “Hubo varias, algunas se pueden decir y otras no, pero con especial cariño recordamos cuando nos reunimos la ‘noche de cuchillos largos’ alumnos, padres y Dirección, para decidir si íbamos a Roma en bus, tras poner algunos padres inconvenientes para ello. Recuerdo a D. Luis Rey Romero, bien entrada la noche, argumentando por qué debíamos ir. Siempre se lo agradeceré – junto a mi padre- pues fue una experiencia única. En caso contrario nos hubiéramos quedado sin viaje de COU”.

EN EL EQUIPO DE FUNDACIÓN DE LA ASOCIACIÓN. “Con el actual Di-rector tengo una buena y asidua relación al ser de la misma promoción, y tuve la suerte de poder colaborar con el equipo inicial que fundó la Asociación de Antiguos Alumnos allá por el curso 1992-93”.

EVOLUCIÓN E INVOLUCIÓN POSITIVA. “No estoy lo suficientemente cer-ca del Colegio para poder opinar al respecto, pero desde la lejanía valoro el desarrollo en idiomas, apertura y alianzas con otros centros, proyectos y/o sociedades y la aplicación de nuevas tecnologías. Como involución positiva, destacar que los valores del Colegio siguen siendo los mismos. Trabajo, disciplina y respeto, tan escasos en los momentos que vivimos”.

¿GENERACIONES MEJOR FORMADAS? “Las nuevas tecnologías están aportando velocidad en el aprendizaje pero ello no es garantía de aprender más y mejor. La generación 2.0 se mueve por valores diferentes a los que nos tocó a nosotros pero tengo la sensación que no están mejor formadas ni mucho menos. El tiempo dictaminará”.

EL FUTURO. “No considero que deba recomendar nada al Colegio, pero sí valorar la innovación, compro-miso con los principios del Colegio y calidad. Los cuatro pilares que creo debe aportar un colegio como el San Francisco de Paula son innovación, idiomas, apertura a nuevas sociedades y programas de colabora-ción, e integración de otras culturas y modelos educativos”.

“Tuve la suerte de poder colaborar con el equipo inicial que fundó la Asociación de Antiguos Alumnos allá por el curso 1992-93”

“Siempre agradeceré a D. Luis Rey Romero y a mi padre que nos dejaran hacer la excursión a Roma de COU, fue una experiencia única”

“La involución positiva de este Colegio es que mantiene sus valores fundacionales, tan escasos en los momentos que vivimos”

178

Andrés Garzón, Profesor de Genética y Vicerrector de Tecnologías de la Información y la Comunicación de la Universidad Pablo Olavide, estuvo diez años en el Colegio, desde 4º de Educación Básica hasta COU. Diez años que, según dice, tuvieron una “intensa” influencia del Colegio tanto en la definición de su vocación y en la decisión de cursar la Licenciatura de Biología como en la adquisición de los valores que lo han guiado en su trayectoria profesional. En este sentido, apunta que el respeto a la pluralidad, el valor del esfuerzo y el rigor académico son valores recibidos en el Colegio que le han ayudado mucho a lo largo de su vida. Sus reflexiones sobre los retos de la educación en el futuro son muy interesantes. Así, considera que “las formas de enseñar aún no ha cambiado suficientemente mientras la forma de aprender lo ha hecho como nunca en la Historia”

y concluye que “hay que buscar el punto de convergencia entre nuestra forma de enseñar y la forma de aprender de los estudiantes”.

RECUERDOS Y SENSA-CIONES. “Estuve en el Colegio diez años. Ingresé en 1973, en 4º de EGB, en la clase de D. Nico-lás. Permanecí allí hasta finalizar COU en 1982. (…) Es difícil enumerar una serie de recuerdos que además se vuelven difusos con el tiempo. De la época más relacionada con la infancia permanecen recuerdos de sensaciones como olores (el olor de la pastelería cercana a la hora del recreo o del comedor a la hora del almuerzo), o actividades ‘fue-ra de programa’ como las clases de judo o algunas clases extraordinarias de inglés donde conocí la música de los Beatles. De la adolescencia otros más relacionados con el desarrollo personal como nuestro viaje a París o la que creo fue la primera huelga de estudiantes en el Colegio en protesta

n Andrés Garzón es Licenciado en Biología por la Universidad de Sevilla en 1987 y Doctor en Biología desde 1994.

n Realizó una estancia postdoctoral de casi tres años en el Departamento de Biología de la Universidad de Utah.

n En 1997 fue contratado por la Universidad de Málaga como Profesor Asociado del Área de Genética.

n En 2000 se traslada a la Universidad Pablo Olavide como Profesor asociado del Área de Genética y en 2001 obtiene su plaza como Profesor Titular.

n En la UPO, ha impartido docencia de Genética en la Licenciatura de Biología, en la Diplomatura de Nutrición Humana y Dietética, en la Licenciatura de Ciencias Ambientales y en el programa de Postgrado en Biotecnología, del que fue codirector en varias ediciones. Participó activamente en la implantación de la Licenciatura en Biotecnología en la Universi-dad Pablo de Olavide, de Sevilla.

n Realiza sus tareas de investigación en el centro Andaluz de Biología del Desarrollo en genética de la proliferación celular y su relación con el estrés celular.

n En el ámbito de la Gestión universitaria, ha sido Secretario del Departamento de Ciencias Ambientales y ha participado en dos equipos de gobierno como Director General de Biblio-teca y Nuevas Tecnologías y Vicerrector de Tecnologías de la Información y la Comunica-ción, cargo que ocupa actualmente.

“Recuerdo que para una huelga

que realizamos los estudiantes por una

determinada reforma universitaria, la

Dirección nos solicitó una autorización de

nuestros padres. Creo que es un delicioso

ejemplo de la unión de los valores de

pluralidad y respeto a las posturas personales

con la vocación ‘paternalista’ en el

buen sentido que el Colegio ha practicado”

Andrés Garzón VillarVicerrector de TIC y Profesor de Genética de la Universidad Pablo Olavide

“El respeto a la pluralidad, el valor del esfuerzo y el rigor académico que me transmitieron en el Colegio me han ayudado mucho a lo largo de mi vida profesional”


179

por determinada reforma universitaria. Como estudiante no era malo, pero tampoco brillante, digamos que de Notable. Mis materias preferidas fueron siempre las de Ciencias y el inglés”.

LIBERAL Y HUMANISTA. “Los términos ‘liberal’ y ‘humanista’ han caído hoy en día en un cierto desprestigio pero entiendo que en su mejor acepción eran términos que podrían encajar con mi impresión general del Colegio en aquellos momentos. En la época de la que hablo no era fácil serlo. Recuerdo también un trato muy personalizado que a veces podía interpretarse como un cierto ‘paternalismo’. (…) He comentado antes la primera huelga que realizamos los estudiantes, recuerdo que la Dirección nos solicitó una autorización de nuestros padres para poder llevarla a cabo. Creo que es un delicioso ejemplo de la unión de los valores de plu-ralidad y respeto a las posturas personales con la vocación ‘paternalista’ en el buen sentido que el Colegio ha practicado con todos los estudian-tes”.

INFLUENCIA EN LA VIDA PROFESIONAL. “El respeto a la pluralidad, el valor del esfuerzo y el rigor académico, han sido valores que me han ayudado mucho a lo largo de mi vida profesional. (…) El Colegio influyó de forma muy intensa, desde la definición de mi vocación y mi decisión de cursar la Licenciatura de Biología hasta la adquisición de estos valores de rigor académico, del esfuerzo y la búsqueda de la ex-celencia que he comentado. (…) Sería injusto hacer una lista de los profesores que más me marcaron. Solo comentar a Dª Pilar Sanz que fue quien provocó mi vocación por la Biología”.

ANTIGUOS COMPAÑEROS. “Fundamentalmente sigo en contacto con aquellos con quienes continué compartiendo mi actividad académica. Pero hay muchos más compañeros a los que guardo especial cariño aunque no hayamos coincidido más que esporádicamente en el mejor de los casos. (…) ¿Compañeros que hayan tenido una trayectoria destacada? Por coincidencia de ocupación me vienen a la mente dos compa-ñeros que han llegado a ser vicerrectores de la Universidad de Sevilla, Antonio Ramírez de Arellano, y de la UNIA, Sebastián Chávez”.

LA VISIÓN DEL COLEGIO. “Lamentablemente no he tenido ocasión de seguir vinculado al Colegio como me hubiera gustado aunque es un ‘defecto’ que espero corregir en el futuro. Sí he tenido ocasión de co-laborar en algún proyecto con la Dirección. (…) No tengo una visión suficientemente cercana como para responder con objetividad qué ha cambiado en el Colegio. Sin embargo, proyectos como el Bachillerato Internacional son indicios de que está evolucionando e innovando siempre en la línea de la excelencia académica”.

NUEVOS MODOS DE ENSEÑAR. “Las nuevas generaciones son muy distintas en cuanto al modo de perci-bir el entorno y de gestionar la información. La forma de enseñar aún no ha cambiado mientras la forma de aprender lo ha hecho como nunca en la Historia. Es nuestra obligación como formadores buscar el punto de convergencia entre nuestra forma de enseñar y la forma de aprender de los estudiantes. La socie-dad de la información ha cambiado el valor del conocimiento. Ya no es tan importante la información en sí (eso que antes teníamos los docentes y considerábamos nuestro secreto más preciado) dado que está al alcance de cualquiera, ahora lo importante es adquirir las competencias de buscar, evaluar y ‘digerir’ esa información. Mientras no seamos conscientes de este cambio seguiremos pensando que las nuevas gene-raciones vienen peor formadas, estaremos culpando a la inmediatez de la nueva sociedad tecnológica de este defecto y no estaremos aprovechando la oportunidad que nos brindan de dar la formación que estas generaciones necesitan”.

INNOVACIÓN Y MOVILIDAD. “Esfuerzo, trabajo y búsqueda de la excelencia son las claves y deben estar presentes en cualquier modelo educativo que pretenda ser referencia. Pero hay dos elementos que van a hacerse cada vez más importantes en una sociedad globalizada: la movilidad académica y la capacidad de innovación y de gestionar esa innovación”.

“El Colegio influyó de forma muy intensa, desde la definición de mi vocación hasta la adquisición de estos valores de rigor académico, del esfuerzo y la búsqueda de la excelencia”

180

Con una carrera repartida en el mundo de la política y de la empresa, este abogado sevillano, el primero en estudiar en el Colegio en una familia de diez hermanos –luego los otros cinco harían lo mismo-, recuerda que lo primero que le llamó la atención cuando ingresó en el San Francisco fue que los alumnos iban con ropa de calle. “Yo hasta ese momento siempre había llevado uniforme, y este detalle me pareció que nos daba cierta libertad, pero siempre controlada, es decir, una libertad responsable”. De hecho, ese concepto, “libertad responsable”, cree que es el que mejor define la personalidad de un Colegio que, a su juicio, ha hecho un gran milagro “manteniéndose en una histórica edificación en el centro, renunciando a tentaciones especulativas y dando prioridad a la conservación de su propia esencia en todos los aspectos”.

EL ‘PRIMER HERMANO FRANCISCANO’. “Ingresé en el Co-legio con diez años, en 5º de EGB. Aparte de por cercanía, el Colegio estaba muy cerca de mi casa, mi padre consideró que era un colegio que me podría enseñar bien. En casa éramos diez hermanos, yo soy el quinto y el primero en ir al San Francisco, luego todos fueron a este Colegio. Salí del colegio al terminar 2º de BUP”. CON ROPA DE CALLE. “Recuerdo que lo que más me llamó la atención al entrar en el San Francisco es que íbamos con ropa de calle. Yo hasta ese momento siempre había llevado uniforme. Este detalle me pareció que nos daba cierta libertad, pero siempre controlada, es decir, una libertad

responsable. Era un estu-diante medio, aprobaba todo y no repetí ningún curso. Me aplicaba mucho más en las asignaturas que me gustaban como ciencias naturales que era mi favorita”.

PRECEPTOS FUNDAMENTALES DEL DERECHO ROMANO. “Libertad res-ponsable, creo que es la expresión que mejor resume la personalidad del Colegio. Creo que en él se daban los preceptos fundamentales del derecho romano: vivir honestamente, no hacer daño al prójimo, y dar a cada uno lo que le corresponde. Estos principios resumen el sentido de la responsa-bilidad. Durante los años de la transición, en el colegio nos inculcaban los valores de libertad y del uso libre y responsable de los espacios públicos. Esos valores se han podido deteriorar con el paso del tiempo, pero en aque-lla época en el Colegio se esmeraban mucho en reforzarlos”.

n Universidad Sevilla. Facultad de Derecho.

n Ha ejercido como abogado en despacho propio.

n Profesor de Derecho Procesal en la Uni-versidad de Sevilla durante 10 años.

n Teniente de Alcalde del Ayuntamiento de Sevilla desde 1995 hasta 1999.

n Presidente de la sociedad estatal de ges-tión de activos AGESA.

n Presidente de la corporación empresarial CAJASUR.

n Director de la Fundación Sánchez- Rama-de.

n Actualmente, Director de negocios de la firma Ernst & Young en Andalucía.

n Pertenece además a diferentes consejos y empresas andaluzas,

n Fue Rey Melchor en la Cabalgata de Reyes 2006 de Sevilla y tiene la Medalla al Mérito Pericial del Ayuntamiento de Sevilla

Luis Miguel Martín Rubio Abogado, Director de Negocios de Ernst & Young en Andalucía

“El Colegio ha hecho un gran milagro manteniéndose en una histórica edificación en el centro, renunciando a tentaciones especulativas y dando prioridad a la conservación de su propia esencia en todos los aspectos”

“Durante los años de la transición,

en el Colegio nos inculcaban los valores

de libertad y del uso libre y responsable de los espacios públicos”


181

RESPETO. “La sociedad de los años 70 era mucho más homogénea, mono-corde en sus ideas y su forma de pensar, de modo que respetarse no reque-ría un gran esfuerzo, ya que los que opinaban diferente eran los menos”.

NOMBRES PROPIOS. “Guardo un recuerdo especial de D. Nicolás, Profesor de parvulario, D. Germán Delgado, D. Manuel Pascual, D. Salvador Serra, profesor de trabajos manuales con quien fabriqué mi primer barco en el sótano del Colegio. También D. Francisco Balón, profesor de educación física a quien le guardo un gran cariño, ya que me enseñó a nadar”.

AMIGOS CON LOS QUE SIEMPRE PUEDE CONTAR. “Mis mejores amigos son de aquella época. Los hermanos Martín Urbano, los Vázquez Velázquez o los hermanos Sobrino. También los hermanos Ruiz, los Olmedo y los González de la Serna. Yo digo que son como las estrellas, porque muchas veces no los puedes ver pero sabes que siempre puedes contar con ellos”.

VOCACIÓN POR LAS HUMANIDADES. “Influyó en mi carrera muchísimo, el Colegio te inculcaba una só-lida formación académica y una maravillosa formación humana. Dentro del Colegio descubrí mi vocación por las Humanidades, lo que me llevó a elegir mi carrera universitaria. Tenía claro que quería ser aboga-do”.

A POR LAS CUÑAS DE CHOCOLATE.- “Recuerdo momentos maravillosos durante los recreos. También me acuerdo de una persona a la que cariñosamente llamábamos ‘Polvillo’ y de sus palmeras de huevo y cuñas de chocolate. En un hueco de escalera establecía un pequeño mostrador en el que nos ‘hacinábamos’ los jóvenes escolares a la caza de tan suculenta repostería”.

UN REFERENTE PERSONAL. “Me unía una gran amistad con el desaparecido D. Luis Rey Romero, a quien he tenido como referente personal a lo largo de toda mi vida y le dediqué una pequeña frase cuando falleció: ‘Aquellos que enseñan a muchos el camino de la justicia brillarán como estrellas en perpetuos firmamentos’. Y su esposa, mi profesora Dª Maribel, y su hijo, que aunque era más pequeño que yo, hemos sido amigos desde el Colegio. Actualmente pertenezco a la Asociación de Antiguos Alumnos y en la medi-da que me resulta posible procuro participar de sus múltiples actividades”.

COMBINACIÓN ENTRE PASADO Y FUTURO. “El Colegio ha hecho un gran milagro permaneciendo en los muros de una histórica edificación en el centro de Sevilla, renunciando a tentaciones especulativas y dando prioridad a la conservación de su propia esencia en todos los aspectos. Todo ello, al mismo tiempo que introducía los más avanzados medios pedagógicos y tecnológicos que lo han convertido sin duda en el mejor colegio del sur de Europa. Debería fomentarse la combinación entre pasado y futuro, tradición y nuevas tecnologías”.

RECOMENDACIÓN. “No perder su esencia, tener como principio básico que hay que formar en libertad pero con responsabilidad”.

AL SERVICIO DEL HOMBRE. “Lo que debe aportar ahora y siempre el Colegio es una sólida formación humana. Me remito de nuevo a los preceptos del derecho romano. La Humanidad en veintiún siglos de Historia no debe cambiar, al contrario, debe salvaguardar estos principios básicos e intentar alcanzarlos. Desde mi punto de vista los alumnos no deben perder el contacto con la sociedad que les rodea, a la vez que permanecen tutelados y dirigido por el profesor. También es necesario que las mejoras tecnológicas e innovadoras estén al servicio del hombre y no al contrario”.

“El Colegio te inculcaba una sólida formación académica y una maravillosa formación humana. Dentro del Colegio descubrí mi vocación por las Humanidades”

182

Informático, Jefe de Unidad en la Dirección de Tecnologías de la Información del Tribunal de Cuentas Europeo, José María Carrascosa vive desde el año 2000 fuera de Sevilla, pero sigue atento toda la actualidad del Colegio, y cree que el cambio en los últimos años ha sido enorme, pero a mejor, y manteniendo el fondo. Sus recuerdos del Colegio lo sitúan en los laboratorios, en los patios cubiertos donde jugaba al fútbol, a pesar de que no se podía, en la portería con Feliciano y Rufino… Dice que si en general la formación de una persona depende en un 70% de la etapa anterior a la Universidad, en el caso del Colegio y por lo que a él respecta, ese porcentaje llega a subir hasta el 90%.

ESCENARIOS LLENOS DE RECUERDOS. “Entré en 2° de EGB en 1974 y ya me quedé hasta el final, COU del 1984-85. Las razones no fueron otras que el prestigio del Colegio. Guardo muchísimos recuerdos desde luego, y la inmensa mayoría de ellos muy positivos. Recuerdo particularmente los laboratorios, aún hoy me acuerdo del olor tan característico que tenían. De pequeño, recuerdo cuando jugaba al fútbol en los patios cubiertos (¡cosa totalmente prohibida!), el bar de Emilio, la portería con Feliciano, Rufino… Ya en COU, el ‘patio de fumadores’ de la parte nueva…”.

TRABAJO AL CUADRADO. “¿La personalidad del Colegio? Trabajo, seriedad y… ¡trabajo! En cuanto a lo que aprendí, valores humanos, yo diría que todos. Es admirable cómo nos iban preparando para cada nueva fase con gran acierto, visto desde ahora. Por ejemplo recuerdo una excelente charla de D. Luis Rey, en 3º de BUP creo, sobre los valores cívicos, los derechos humanos, cómo afrontar la etapa posterior al San Francisco y cómo preparar adecuadamente el futuro profesional… Antes que eso, recuerdo las charlas sobre la adolescencia de D. José Ferrer en 7º de EGB, y las fantásticas lecciones de D. José María Garrido y D. Manuel García Vázquez…”.

TOLERANCIA Y RESPETO. “Me tocó vivir un período que va desde la muerte de Franco hasta la entrada de España en la Comunidad Europea. Aunque éramos pequeños pudi-mos captar muchos de esos cambios. A mi entender, tanto la Dirección del Colegio como sus profesores nos transmitieron tolerancia y respeto. Claro que este era el espíritu que yo recuerdo de la sociedad española de por entonces”.

PERSONAS MARAVILLOSAS. “Fui un buen estudiante, mis materias preferidas eran la geografía, la historia y las ciencias naturales, todo ello influido sin duda por los excelentes profesores que las impartían: D. José María Garrido, D. José Ferrer, D. Manuel García Vázquez, D. Francis-co Gómez, D. Genaro Capote… Además de estos profesores, guardo un recuerdo muy entrañable de otros como D. José Mejías, D. Salvador, D. Fernando Pérez Campillo, D. Juan Plata, D. José Luís Albelda, D. Bernar-

n Licenciado en Informática por la Univer-sidad Politécnica de Madrid y Master en la Universidad de Sunderland.

n Programador senior en Coritel y analista IT de Helvetia Seguros (hasta 2000).

n Jefe de la sección en la Dirección de Infor-mática Comisión Europea (hasta 2010).

n Desde entonces, jefe de Unidad en la Dirección de Tecnologías de la Información del Tribunal de Cuentas Europeo.

José María Carrascosa MorenoInformático. Jefe de Unidad en el Tribunal de Cuentas Europeo

“Si en general la formación de una persona depende en el 70% de la etapa pre-universitaria, en mi caso el Colegio representó hasta el 90%”

“Evidentemente el cambio ha sido

enorme y a mejor: idiomas, tecnología,

Bachillerato Internacional…”


183

do Delgado, D. Juan Manuel Infante… Cada uno de una época distinta, pero todos unos excelentes profesores y unas personas maravillosas. No quisiera tampoco dejarme en el tintero a personas de la talla de D. Miguel Fernández de los Ronderos, D. Manuel Pérez Cerezal, Dª María Estela o D. Luís González”.

LOS MEJORES AMIGOS, DEL COLEGIO. “Desde luego que conservo amigos, los mejores. Y eso que al terminar COU me marché de Sevilla a estudiar a Madrid, luego a trabajar a Luxemburgo… Cuando voy a Sevilla intento mantener el contacto con los viejos amigos. (…) Mi quinta pro-dujo excelentes profesionales. Muy buenos médicos desde luego, como Eusebio Martín Chacón, Jesús García Díaz, Antonio de Toro o Luis Jiménez de Haro. Pero hay profesio-nales de todos los ramos. Quisiera mencionar a Julio Paneque, excelente procurador, a Alejandro Mejías, reputado profesor de la Universidad de Indiana, científicos como Ignacio Luque, empresarios como Jorge Lobo, periodistas como Angel Gámiz, informáticos como Joaquín Ponce o Aurora Hermosilla, abogados como Joaquín Medina o Jesús Borjabad…”.

PROPORCIÓN 90%-10%. “Yo diría que al menos un 70% de la formación de una persona procede de la etapa anterior a la universidad y un 30% de la etapa universitaria. En el caso del Colegio, y al menos en mi caso, los porcentajes son ¡90%-10%!”.

LOS TEMIDOS ‘ORAL DRILS’. “Tengo muchas y muy graciosas anécdotas. Muchas de ellas están relacio-nadas con las clases de inglés de D. Miguel Fernández de los Ronderos. Los sorteos en los que una mano inocente sacaba un número que marcaban la suerte ‘fatídica’ de la víctima que salía a la palestra eran me-morables. Más aún si lo que se estaba rifando eran los temidos ‘Oral Drills’ de los libros de Arthur Newton. Un amigo mío, del que no voy a decir el nombre pues no sé si el delito ha prescrito, se las ingeniaba para ponerse en primera fila y rebuscar siempre un número que no fuera el suyo para evitar el suplicio…”.

LAZOS. “Aunque vivo en el extranjero, sigo toda la actualidad del Colegio a través de la página web, las noticias que me llegan por compañeros, últimamente a través de Facebook… Mi familia sí ha seguido ligada al Colegio, todos mis sobrinos que viven en Sevilla están o han estado en el Colegio”.

CAMBIO A MEJOR. “Recientemente pude acudir al 25 aniversario de mi promoción, un acontecimiento memorable que recuerdo con un gran cariño. Pude comprobar lo mucho que ha cambiado el Colegio en sus instalaciones deportivas, aulas, salón de actos, etc. (…) El cambio ha sido enorme y a mejor: idiomas, tecnología, Bachillerato Internacional… Por fortuna, otras cosas no han cambiado. Ni en lo material (los viejos laboratorios siguen ahí) ni, lo que es más importante, en el fondo”.

NO DORMIRSE EN LOS LAURELES. “Mi recomendación sería innovar constantemente y no dormirse en los laureles (expresión esta última muy ‘franciscana’). E insistir más si cabe en desarrollar los valores humanos de cada individuo. Sin olvidar la calidad de los conocimientos desde luego, sin duda lo primero deja más poso”.

“Es admirable cómo nos iban preparando para cada nueva fase con gran acierto, visto desde ahora”

184

Vicerrector de la Universidad de Sevilla, Miguel Ángel Castro Arroyo entró en el Colegio con nueve años para estudiar 4º de EGB continuando así una tradición familiar iniciada por su padre y que ahora prosiguen sus dos hijas. De su época de estudiante recuerda los exámenes de D. Nicolás Gelo, su primer profesor, y la estricta pero eficaz metodología de enseñanza de D. Juan Francisco: “Iba mesa por mesa con su varilla preguntando los afluentes por la derecha del Guadiana, seguido muy de cerca por el secretario (uno de nosotros) con la lista de clase dispuesto a poner ceros como roscones a todo aquel que no supiera la respuesta”. A pesar de las varillas y los exámenes, se confiesa un ‘franciscano devoto’, y dice que se lo pasaba realmente bien en el Colegio, “donde cada día era una aventura en la que todos participábamos y disfrutábamos”. Agradece además al San Francisco que le proporcionara unos cimientos sólidos para continuar su formación aunque reconoce que la que hoy es su mujer fue su principal influencia a la hora de elegir su carrera profesional. Por cierto que a ella la conoció también en el Colegio.

TRADICIÓN FAMILIAR. “Entré con nueve años en 4º de Básica con D. Nicolás Gelo y su ayudante D. Fernando. Mi padre fue estudiante del Colegio de modo que ir al San Francisco era algo

así como una dinastía o una tradición”.

FRANCISCANO DEVOTO. “Soy un franciscano devoto y casi todos mis recuerdos son hermosos. El Colegio era sinónimo de rigor, esfuerzo y trabajo. Recuerdo que D. Nicolás nos hacía todos los viernes un examen de lo que habíamos visto durante el curso… Me acuerdo del silencio durante los exámenes, que, a pesar de nuestra corta edad, se respetaba intensamente. Y por último, recuerdo la camare-ría y el buen humor entre compañeros y con los profesores”.

HONESTIDAD. “En el Colegio nos enseñaban a ser honestos con nosotros mis-mos y nuestras convicciones, y a no temer lo desconocido... Nos estimulaban en el deseo de avanzar y explorar nuevos caminos”.

AJENOS A CUALQUIER DOGMATISMO. “El Colegio fomentaba el libre pen-samiento y trataba de mostrar al alumno las distintas posturas ante cualquier aspecto. Por hablar en términos ideológicos teníamos la suerte de ser formados por personas con una posición ideológica muy concreta y una formación acadé-mica profunda. Aquello era un escenario extraordinario para la excelencia. En el Colegio cohabitaban profesores de ideología muy diferentes, no voy a concretar

n Vicerrector de Ordenación Académica de esta Universidad desde 2009.

n Doctor y catedrático de la Universidad de Sevilla, en el área de Química Inorgánica.

n Ha participado en ocho Proyectos de I+D del Plan Nacional y la UE ha financiado dos de sus proyectos.

n En 1999, recibió el Premio de Investiga-ción “Real Academia Sevillana de Ciencia”. n Ha sido Director del Centro de Investiga-ción, Tecnología e Innovación (CITIUS) de la Universidad de Sevilla y Director del Se-cretariado de Centros, Institutos y Servicios de Investigación de la Hispalense.

n Director del Servicio General de Inves-tigación de Rayos X de la Universidad de Sevilla desde 2005 hasta 2008.

Miguel Ángel Castro Arroyo Catedrático de Química Inorgánica y Vicerrector de la Universidad de Sevilla

“Me lo pasaba realmente bien en el Colegio, donde cada día era una aventura en la que todos participábamos y disfrutábamos”

“La experiencia de mi hija mayor

con el Bachillerato Internacional me

permite opinar sobre el acierto de incorporar

este Programa, que ofrece una formación

amplia y trasversal en diferentes áreas y

habilidades”


185

cuáles, pero allí una hora te estaba dando clase D. José María Garrido y a la siguiente D. Manuel Pérez-Cerezal, ambos de ideología opuesta pero con una formación tan rigurosa y un planteamiento impecable de sus conocimientos que resultaba muy enriquecedor”.

NOMBRES PROPIOS. “En EGB, los profesores que más me influyeron fueron D. Nicolás Gelo, que recibió la medalla del mérito al trabajo al jubilarse, D. Juan Francisco y D. Manuel Pérez-Cerezal. En BUP y COU, D. Luis González y D. Luis Rey fueron los que ejercieron una influencia mayor”.

COMPAÑERA DE VIAJE. “Conocí a mi mujer, María del Mar Orta, en COU. Ten-go que agradecerle al Colegio que me proporcionara unos cimientos sólidos para mi posterior formación universitaria, pero debo reconocer que los motivos de mi elección de la carrera no fueron muy académicos sino que lo que sobre todo me movió fue continuar la formación universitaria junto a mi pareja. Actualmente ella también es profesora en la Universidad de Sevilla, que está por cierto repleta de franciscanos, como Juan Ramón Lacalle, Decano de la Facultad de Medici-na. Antonio Ramírez de Arellano, Vicerrector de Infraestructuras, o Sebastián Chávez, investigador y Catedrático de Genética”.

PERSONALIDADES. “Por las aulas del San Francisco han pasado muchas personas que hoy en día han alcanzado un renombre en diferentes áreas de conocimiento. D. José Luis Manzanares, Presidente Ayesa, Catedrático e Inge-niero de fama mundial, y D. Manuel del Valle, que fue alcalde de Sevilla, son dos buenos ejemplos”.

LA VARILLA DE D. JUAN FRANCISCO. “Me lo pasaba realmente bien en el Colegio, donde cada día era una aventura, un buen espectáculo en el que todos participábamos y disfrutábamos de él. Pero si hay que recapitular alguna anécdota, se me viene a la cabeza D. Juan Francisco, que era capaz de examinar a cuarenta alumnos en quince minutos. ¿Cómo? Iba mesa por mesa con su varilla preguntando ‘los afluentes en orden por la derecha del Guadiana’, seguido muy de cerca por el secretario (uno de nosotros), con la lista de clase dispuesto a poner ceros como roscones a todo aquel que no supiera la respuesta, o dudara más tiempo de la cuenta”. VÍNCULOS. “Tengo a mis dos hijas en el Colegio, así que rara es la semana que no paso por allí. También me une una amistad personal con el actual Director y pertenezco a la Asociación de Antiguos Alumnos”.

LA ESENCIA PERVIVE. “El proyecto educativo del Colegio no ha cambiado en lo fundamental: rigor en los con-tenidos, la visión de los temas de un modo ‘no acabado’ conscientes de que el saber nunca acaba, y la posibilidad de interpretar una realidad con diferentes teorías para posteriormente contrastarlas. El principal cambio se ha producido en la metodología, en tanto que disponemos de una batería de herramientas que antes no teníamos. No había Internet, ni pizarras electrónicas… Ahora bien, uno tiene que continuar enseñando los contenidos de una manera rigurosa, y en ese sentido por la experiencia de mis hijas, sé que eso continúa siendo igual. Se ha sabido conjugar ambas cuestiones: las nuevas tecnologías que permiten presentar mejor los contenidos y una rigurosa formación. (…) La experiencia de mi hija mayor con el Bachillerato Internacional me permite opinar sobre el acier-to de incorporar este Programa, que ofrece una formación amplia y transversal en diferentes áreas y habilidades. El Colegio ha sabido conectar con las grandes tendencias actuales sin perder de vista su esencia”.

LOS IDIOMAS. “La importancia que se le da a los idiomas es desde mi punto de vista uno de los avances cualitati-vamente más llamativos. En mi época sólo dábamos inglés y aunque la asignatura era impartida por un excelente profesor, no era nativo. No ocurre lo mismo ahora, mis hijas aprenden inglés, francés y alemán con profesores nativos”.

CONTROL DE CALIDAD. “El Colegio debe continuar ofreciendo a sus alumnos una formación sólida, madurez apropiada a la edad y capacidad de decisión para el futuro. (…) La trayectoria universitaria de su alumnado será el verdadero control de calidad que podrá presentar a la sociedad y su principal carta de presentación”.

“En el Colegio nos enseñaban a ser honestos con nosotros mismos y nuestras convicciones, y a no temer lo desconocido... Nos estimulaban en el deseo de avanzar y explorar nuevos caminos”

186

Director Gerente en Sevilla del Grupo Aromas, compañía con 112 tiendas, 700 empleados y ventas agregadas de 111,9 millones en el sector de la perfumería y cosmética, Rafael González Martínez se ríe de la tensión de un Consejo de Administración de final de año, y dice que para tensión la de las varillas de la tabla periódica que hacía D. Bernardo en 7º. Esos y muchos otros recuerdos del Colegio dice que los siente tan cercanos que parece que los hubiera vivido hace unas semanas. También es verdad que ahora tiene ocasión de rememorarlos a menudo, porque sus hijos estudian en el Colegio, y él mismo fue profesor del centro. Desde esa cercanía, apunta que la esencia no ha cambiado, aunque sí se ha producido una adaptación al entorno actual. En este sentido, destaca el bilingüismo, los intercambios internacionales de alumnos y el Bachillerato Internacional como iniciativas muy enriquecedoras.

EN CONTACTO CON D. JUAN PLATA. “Me incorporé al Colegio en el año 1974. Tres años antes mi familia había vuelto de St. Croix (U.S. Virgin Islands) con la intención de instalarnos permanentemente en Sevilla. D. José Gándara, buen amigo y compañero de mi padre, fue quien le puso en contacto con D. Juan Plata. De esta manera me convertí en alumno del Colegio”.

COMO SI FUERA AYER. “Parece mentira que hayan pasado casi veinticinco años y hay momentos que recuerdo como si los hubiera vivido hace unas semanas. El día del Golpe de Estado en febrero de 1981 (...), la inestimable ayuda de D. Luis Rey Romero, D. Bernardo Delgado y D. Amadeo Gómez cuando me admitieron en la Univer-sidad Internacional de Florida y sobre todo los buenos amigos que a día de hoy tengo. También, reconozco que alguna noche que otra me despierto como si estuviese ante D. Bernardo Delgado con sus ‘varillas’ de la tabla periódica que superaban en tensión a un Consejo de Administración de final de año”.

SER UN INCONFORMISTA. “La personalidad del Colegio no deja indiferente. Los rasgos diferenciadores son: la búsqueda constante de la superación personal, ser siempre un inconformista y asumir que siempre hay alguien que sabe más que tú”.

NUNCA RENDIRSE. “Los valores (...) que el Colegio me enseñó fueron la constancia y el no rendirse nunca. La familia Rey Goñi es claro exponente de esto”.

LA RIQUEZA DE LA DIVERSIDAD.“Durante mi etapa en el Colegio no era muy consciente de la tolerancia que allí había. Donde me di cuenta del bagaje acumulado fue cuando regresé a EEUU. Allí te encuentras con una mezcla de culturas y razas que no tiene parangón con ningún país del mundo. La verdadera riqueza de las personas reside en la diversidad y no en la exclusión”.

NOMBRES PROPIOS. “En la EGB los profesores que más me influyeron fueron mis tutores (...). En el BUP y COU, D. Luis González, D. Bernardo Delgado, D. Amadeo Gómez, D. Genaro Capote, D. Roberto Reina, D. Javier

n Licenciado en Administración y Dirección de Empresas y Finanzas en la Universidad Interna-cional de Florida (1991).

n Licenciado en Administración y Dirección de Empresas en la Universidad Internacional de Schiller (1994).

n Director gerente durante cinco años de P&A Consultores en Sevilla y de la División Corpora de Deloitte & Touche, Sevilla, hasta 2003.

n Profesor asociado del Colegio de San Fran-cisco de Paula hasta 2005. n Asesor Técnico durante dos años del Fondo Atlantis para compañías de rápido crecimiento en la Agencia de Innovación y Desarrollo de Andalucía (IDEA).

n Actualmente, Director Gerente del Grupo Aromas en Sevilla.

Rafael González MartínezDirector gerente de Grupo Aromas en Sevilla

“Las ‘varillas’ de la tabla periódica superaban en tensión a un Consejo de Administración de final de año”


187

Fernández, D. José María Garrido y Don Miguel Fernández de los Ronderos. No quiero olvidarme del personal no docente del Colegio como Pepe, Feliciano y Polvillo en la portería”.

AMIGOS INCLUSO EN LA DISTANCIA. “Todos mis amigos son antiguos compañeros del Colegio. Durante el tiempo que estuve fuera mantuvimos el contacto. Utilizamos cintas magnetofónicas donde mis amigos, Luis Zamora y Antonio Seri, me grababan música, programas de radio y tertulias que ame-nizaban ellos mismos sobre lo que ocurría en España. (…) Compañeros de mi promoción que hayan tenido una trayectoria destacada, conozco a José María Cantarero Artacho, fundador de la empresa Bio-Dis, presente en varios países. A Miguel Ángel Moro, dueño de los restaurantes El Espigón. También a Jesús Becerra, al frente del Restaurante Becerrita, y a su hermano Enrique”.

LA ELECCIÓN DE LA CARRERA. “Mi idea era cursar la carrera de ingeniero aeronáutico. Dado que la formación en EEUU es muy práctica, me tocó estar unos días en las oficinas de un banco. Fue allí donde el mundo de las finanzas me llamó poderosamente la atención y decidí cambiar a Económicas, Administración de Empresas y Negocios Internacionales”.

VÍNCULOS. “En 1999 volví al Colegio como profesor de Organización Empresarial y Relacionales Laborales. Mi etapa hasta el año 2005 fue de las más gratificantes que he tenido en mi vida profesional sobre todo cuando te encuentras con alumnos y te comentan lo mucho que les sirvió lo que aprendieron. Actualmente, mis hijos son alumnos del Colegio. (...) De esta manera sigo conectado al Colegio”.

INICIATIVAS ENRIQUECEDORAS. “La esencia del Colegio no ha cambiado aunque por supuesto se ha ido adaptando al entorno actual. El bilingüismo, el uso de nuevas tecnologías, los intercambios internacio-nales, el foro de personalidades, el Bachillerato Internacional son iniciativas diferenciadoras. En cuanto a habilidades, recomendaría, aunque creo que ya se fomentan, el liderazgo, la eficiencia y los trabajos conjuntos con otros centros internacionales”.

MUCHO QUE HACER EN EDUCACIÓN. “Creo que la principal diferencia en la forma de aprender y enseñar entre mi época y la actual radica en la ‘necesidad’ que se tenía en los años 70 de construir una nueva so-ciedad, que no es la misma que en el año 2011, aunque la actual situación económica nos está empujando a tener que volver a reinventarnos. Antes pensábamos en conseguir cosas a largo plazo, hoy pensamos en tener cosas en el menor tiempo posible. Quiero dejar bien claro que en ningún momento hago un juicio de valor (...). En cuanto a que si las nuevas generaciones están peor o mejor formadas me remito al Informe (…) publicado por el Instituto de la Empresa Familiar en marzo de 2011: la tasa de paro juvenil supera el 40% y duplica la media europea (…), el gasto público total en educación está por debajo de la media euro-pea (…). Con esta realidad solo queda ponernos, todos, manos a la obra y asumir nuestra responsabilidad con la sociedad”.

OBJETIVOS CLAROS MÁS ALLÁ DE ÉPOCAS Y MODAS. “Lo que recomendaría al Colegio es que siga la línea de actuación que le caracteriza. D. Luis Rey Romero me entregó el libro Recuerdos en Torno a un Patio de D. Luis Rey Goñi. De su lectura pude sacar la conclusión de las vicisitudes en las que se ha visto envuelto el Colegio pero siempre manteniendo la proa con rumbo fijo hacia objetivos claros independien-temente de la época y de las modas. (…) La trayectoria del Colegio es su mejor aval”.

TRES PILARES SÓLIDOS. “Actualmente el Colegio (...) se asienta en pilares forjados en un know how que le augura crecimiento y permanencia en el tiempo. Su estrategia está contrastada respondiendo a unos objetivos que permanecen invariables (...). Y tiene un compromiso total de todas las personas que forman el Colegio en fomentar una cultura innovadora y de aprendizaje permanente”.

HERENCIA INMATERIAL. ”Una visión global del mundo y criterio propio. Esa es la herencia que debe dejar el Colegio en todos sus alumnos y que no se encuentra en ningún programa de estudios reglado”.

“Lo más importante que el Colegio me enseñó fue la constancia y el no rendirse nunca ante nada ni nadie. La familia Rey Goñi es claro exponente de lo que digo”

188

Decano de la Facultad de Medicina de la Universidad de Sevilla, Juan Ramón Lacalle ingresó en el Colegio en 1974 para cursar 7º de EGB y continuó hasta COU. Opina que el rigor intelectual, acompañado de la libertad de pensamiento, era la seña de identidad del Colegio y se declara sobre todo influido por la tolerancia con la que se aceptaban todas las ideas. “En el Colegio aprendí a huir del dogmatismo y de las opiniones excluyentes. y a pensar que la realidad tiene muchas facetas que hay que considerar antes de formar un juicio”. Profesionalmente, considera que las prácticas en el laboratorio contribuyeron a fomentar su inclinación hacia el trabajo científico.

UNA ÉPOCA DE CAMBIOS. “Supongo que el motivo para matricularme, no solamente a mí sino al resto de mis hermanos, se debió a que otros familiares habían pasado ya por el Colegio. Viví allí pues los años de la adolescencia, con los cambios personales que se producen en esa época de la vida. Además, coincidió con una época de grandes cambios políticos y sociales en España: murió Franco, subió al trono Juan Carlos I, se celebraron elecciones municipales, generales, etc. Todos esos acontecimientos los vivíamos y discutía-mos en clase, en el patio, al salir del Colegio”.

INTERESES DISPERSOS. “Como estudiante, era un estudiante normal, más preocupado por saber de lo que me gustaba que de obtener buenas calificaciones. Reconozco que era un poco disperso en mis intere-ses: me atraía la literatura, pero también mucho las matemáticas; la física y la biología, pero también la

filosofía. No era apasionado con ninguna materia, pero me interesaban casi todas”.

INTERESES DISPERSOS. “Del Colegio que conocí debo destacar su rigor intelectual, acompañado de grandes dosis de libertad en las ideas, no solo ideológicas, sino también en lo cultural”.

DIVERSIDAD SIN PROSELITISMO. “En el Colegio aprendí a huir del dog-matismo, de las opiniones excluyentes, y a pensar que la realidad tiene muchas facetas que hay que considerar antes de formar un juicio. Creo que la pluralidad fue lo que más me influyó de la experiencia del Colegio. Tenía compañeros con convicciones religiosas muy profundas, y otros que venían de familias digamos con ambiente librepensador. Teníamos una convivencia bastante buena, a pesar de que manteníamos discusiones bastante encen-didas algunas veces. Algunos profesores analizaban la realidad desde una postura conservadora, y otros con una actitud progresista. Pero el recuerdo que tengo es que ninguno incurría en el proselitismo de sus ideas, ni en descalificaciones”.

n Licenciado en Medicina y Cirugía (Sevilla, 1986).

n Doctor en Medicina (Sevilla, 1991).

n Es Profesor Titular de la Universidad de Sevilla, del Departamento de Medicina Preventiva y Salud Pública.

n Desde julio de 2009 es Decano de la Facultad de Medicina de la Universidad de Sevilla (desde julio-2009).

Juan Ramón Lacalle RemigioDecano de la Facultad de Medicina de la Universidad de Sevilla

“En el Colegio aprendí a huir del dogmatismo y de las opiniones excluyentes”

“Algunos profesores analizaban la realidad

desde una postura conservadora, y otros

con una actitud progresista. Pero el

recuerdo que tengo es que ninguno incurría

en el proselitismo de sus ideas, ni en descalificaciones”


189

MIRADA CRÍTICA Y DIVERTIDA. “Con la distancia de los años, reconozco que ahora valoro más a algunos profesores que cuando era estudiante. Di-cho eso, y que seguro que me olvidaré de algunos, los que recuerdo como más influyentes fueron D. José María Garrido, que nos enseñaba historia de España, D. Javier Liencres, que ‘intentaba’ enseñarnos filosofía, y D. Manuel Benigno García Vázquez, que fue profesor de religión y de lo que entonces se llamaban ciencias sociales. Estos tres profesores compartían varias características: eran sacerdotes, de un gran rigor intelectual y eran profundamente abiertos ideológicamente. Cuando hablo con compañeros de aquella época, coincidimos en que ellos crearon un tono intelectual en nuestras clases en las que la seriedad del estudio se combinaba con una mirada crítica, y casi siempre divertida, sobre la realidad. Hay otros que recuerdo con afecto, como D. Antonio Menéndez, que enseñaba latín y lengua. También recuerdo al atlético D. Antonio Jiménez Cano, Profesor de gimnasia, y a D. Bollet Boye, profesora de inglés, que a pesar de su origen danés, hablaba con un marcado acento… sevillano”.

VÍNCULOS INTANGIBLES. “Las relaciones se debilitaron cuando entramos en la Universidad y durante mucho tiempo los compañeros del Colegio no hemos vuelto a tener más que contactos casuales. Sin embargo, creo que mantenemos unos vínculos intangibles, que cuando hay alguna oportunidad se reavivan. Curiosamente, con los nuevos recursos de la web 2.0 y las redes sociales, muchos hemos vuelto a entrar en contacto, y aunque por motivos de trabajo no podemos vernos como nos gusta-ría, volvemos a comentarnos cosas, anécdotas, etc.”.

INCLINACIÓN HACIA LA INVESTIGACIÓN. “Más que vocación, me gusta el término ‘inclinación’, que es más amplio. En cierta medida el Colegio orientó mi formación hacia el trabajo científico, no lo voy a negar. El trabajo en el laboratorio, el interés por demostrar fenómenos y principios científicos de forma empírica, me orientaron hacia esta rama del conocimiento”.

UÑAS PINTADAS. “En mi época, el colegio era masculino excepto COU. Uno no se daba cuenta bien de las diferencias que existían en la conducta de chicos y chicas hasta que no llegaba a ese curso. Recuerdo que el primer día de clase en COU, al girar la cabeza, me sorprendí al ver la mano de la persona que estaba a mi lado. Tenía las uñas un poco largas y pintadas. Era de una nueva compañera. Hasta aquel momento, lo que podía esperar al ver la mano de un compañero era ¡que estuviera manchada de tinta y con las uñas mordidas!”.

ENSEÑANZA BILINGÜE. “De lo que conozco, creo que la enseñanza bilingüe es un elemento crítico para preparar mejor a los estudiantes, mucho más que la acumulación de contenidos que naturalmente se van a ir borrando de la memoria. Hablar, y sobre todo pensar, en otro idioma nos obliga a ser más flexibles, adaptables a nuevas condiciones. En mi opinión, la enseñanza bilingüe es la principal diferencia con la enseñanza de mi época, con independencia de los avances tecnológicos que se han producido en estos años”.

UNA REFLEXIÓN. “Es difícil darle un consejo a una institución con esta larga trayectoria. (…) Más que una recomendación, lo que haré será una reflexión. El mundo va a ser cada vez más abierto (…) y los es-tudiantes deben prepararse para movilizarse por todo el mundo. Y Asia es un destino que se debe explorar no como un recurso turístico exótico, sino como una zona con la que tenemos que competir”.

CREATIVIDAD. “Las mejores instituciones educativas serán aquellas que abandonen la mera transmisión de conocimientos, y en cambio persigan que sus estudiantes tengan la capacidad de enfrentarse a proble-mas creando nuevas soluciones”.

“Hablar, y sobre todo pensar, en otro idioma nos obliga a ser más flexibles, adaptables a nuevas condiciones. En mi opinión, la enseñanza bilingüe es la principal diferencia con la enseñanza de mi época”

190

Antonio López Tarrida ingresó en el Colegio con ocho años. “Por motivos de trabajo, mi familia tuvo que mudarse de Montellano a Sevilla y mis padres buscaban un colegio con un ideario liberal, tolerante pero exigente, y en esto dieron con el Colegio”, recuerda el hoy Profesor Titular de la Universidad de Sevilla, que asegura que nunca podrá agradecer a sus padres el esfuerzo económico y el sacrificio que supuso para ellos matricularlo en el San Francisco de Paula. En el Colegio fue feliz y descubrió su vocación, por influencia directa de D. Luis Rey Romero. “Él me hizo adorar la química y la física, a la que acabé dedicándome. Y lo considero el verdadero ‘culpable’ de que yo sea Profesor. La primera vez que me dio clase, supe que quería imitarle. Y es la persona a la que evoco en cada clase que doy”, afirma.

MI SEGUNDA FAMILIA. “En pocas palabras, el Colegio fue mi segunda casa, mi segunda familia. Allí crecí, intelectual y afectivamente. Allí tuve referentes de conducta ejemplar, desde la Portería hasta la Dirección. Allí hice buenos amigos, algunos para toda la vida. Allí, en definitiva, fui feliz. (...) Aprendí el valor del esfuerzo sostenido y constante, el amor a la precisión y el detalle, y el placer que conlleva el trabajo bien hecho. Además, el respeto a los que no piensan como uno mismo, y el cultivo del espíritu crí-tico basado en un informado, sano y equilibrado escepticismo, capaz de cuestionar los sesgos con que uno interpreta la realidad. Aprendí en definitiva a ser mejor persona (ciudadano, compañero, amigo, hermano, hijo). Y por imitación de mis maestros del Colegio, aprendí a entusiasmarme y gozar de la docencia.

SABER LO QUE HAY QUE HACER Y HACERLO. “Creo que el lema del Colegio, ‘Respeto y trabajo’, condensa perfectamente la personalidad de la institución. Todo lo demás sería mero escolio. No obstante, guardo un nítido recuerdo infantil que quiero compartir: el primer día de clase, los aproximadamente sesenta y cinco alumnos del aula de 4º A de la antigua EGB del curso 1974/75, escolares de 8 ó 9 años, fuimos testigos de un acto simbólico que fue nuestra primera lección. Yo era un debutante. D. Nicolás Gelo Rodríguez y D. Fer-nando Pérez Campillo, nuestros maestros, escribieron con tiza en la parte superior de la pizarra el siguiente lema: Saber lo que hay que hacer, y hacerlo. Permaneció allí todo el curso, presidiendo las clases, y cada ma-ñana lo recitábamos para nuestros adentros, cuando no a viva voz, todos a coro. D. Nicolás y D. Fernando hacían realidad un lema tan estricto y exigente todos los días, pero lo hacían aplicándose a la docencia con un enorme cariño hacia sus pequeños alumnos, fortiter in re, suaviter in modo. Yo lo escribí en mi cuaderno, y hoy, casi treinta y ocho años después, a menudo se lo recito como un mantra a mis hijos y a mis alumnos de la Universidad, pero siempre de manera amable. Buena parte de la personalidad del Colegio que yo conocí se sustanciaba en ese valor del esfuerzo sostenido y del trabajo bien hecho, en esa ética del tesón, el mérito y la excelencia, exigente, sí, pero profundamente humana, comprensiva y tolerante.

CONVIVENCIA EN LA PLURALIDAD Y EL RESPETO. “Entre mis compañeros. (…) había compañeros que pertenecían a familias que hoy calificaríamos como progresistas, otros a familias más conservadoras (aunque estas etiquetas me parecen excesivamente simplistas, incluso reduccionistas). A pesar de lo variopinto del grupo, la armonía presidía el día a día, y fue creciendo a medida que lo hacíamos nosotros en saber, edad

n Profesor Titular del Departamento de Física Aplicada II, Escuela Técnica Superior de Inge-niería de Edificación, Universidad de Sevilla.

n Diplomas de Reconocimiento de la Universi-dad de Sevilla a la Excelencia Docente en todas sus convocatorias.

n Menciones honoríficas a la Excelencia Do-cente por la Escuela Universitaria de Arquitec-tura Técnica (EUAT), y a la labor personal en la Comisión de Calidad de la EUAT.

Antonio José López TarridaProfesor Titular de Física Aplicada de la Universidad de Sevilla

“D. Luis Rey Romero me hizo descubrir mi vocación, es la persona a la que evoco en cada clase que doy”


191

y gobierno. Y en cuanto a los profesores, los tuvimos de edades diversas, de orígenes bien distintos, religiosos y seglares, y de todas las maneras de pensar, siempre respetuosos con los que ideológicamente estaban en otras coordenadas, lo que no implica que no hubiese tensiones y desencuentros”.

MAESTROS AÑORADOS. “Cada profesor, a su manera, me aportó algo muy valioso, y con todos estoy en deuda, tanto más cuanto que hoy día también soy docente, y mi comportamiento en el aula es un reflejo o imitación de lo que en ellos observé y asimilé. A todos los que tengo en mente pero no voy a nombrar, pido perdón. Dicho esto, citaré a algunos de mis maestros y profesores que, desgraciadamente, ya no están entre nosotros… Como D. Nicolás Gelo Rodríguez (…), D. Ricardo Carmo-na Aguado (…) D. Manuel Pérez Cerezal, (…) D. Juan Francisco Martín Sánchez, D. Manuel Benigno García Vázquez (…). Y qué decir de D. Luis González Fernández (…) que fue un pilar del Colegio y un modelo de puntualidad, honradez y trabajo bien hecho: todos mis compañeros de la promoción del 83 comparten conmigo el recuerdo imborrable de sus lec-turas mientras paseaba por el aula (…) sosteniendo el libro con una sola mano, con cuyo dedo meñique trababa la página que iba leyendo”.

D. LUIS REY ROMERO, PUNTO Y APARTE. “En mi vida merece un punto y aparte. D. Luis Rey Romero fue la primera persona que me habló de esa extraña disciplina llamada Mecánica Cuántica, con la que hoy disfruto como investigador. La persona que hizo que naciera en mí la pasión por la docencia, que me hizo descubrir mi vocación, la persona a la que evoco en cada clase que doy. Maestro cautivador, magnético, enérgico, riguroso, exigente, entregado (de física, de química, de lo que fuera, qué más daba). Maestro no solo en el aula, sino también en la vida, tanto en la salud como, especialmente, en la enfermedad que no pudo doblegar su espíritu. (…) La primera vez que me dio clase, supe que quería imitarle, y cuando abandoné las aulas del San Francisco de Paula, nunca me faltó su sabio consejo y su cariñoso apoyo”.

AMIGOS DE ENTONCES. “Mi mejor amigo es Alberto Garnacho González, Antiguo Alumno del Colegio, hoy Profesor de filosofía, al que me une una profunda amistad desde 1974. Y aunque no sea compañero de promoción, el actual Director, D. Luis Rey Goñi, pertenece a ese reducido elenco de amistades a las que profeso un afecto especial. Uno de mis compañeros de Departamento en la Universidad, Martín Muñoz Aleñar, con el que llevo trabajando desde 1989, es además un buen amigo y Antiguo Alumno del Colegio. (…) Afortunadamente, muchos de esos compañeros han tenido una trayectoria destacada. (…) De todos ellos, quiero destacar a un antiguo compañero que desgraciadamente ha fallecido tras larga enfermedad (…), y que si bien quizá no es muy conocido en Sevilla, lo ha sido en la comunidad científica europea, en el campo de la Física de Partículas y de Altas Energías: se trata de Joaquín Íñigo Golfín, ingeniero, que se unió al CERN (European Organization for Nuclear Research) en 1992, y que desde 2004 capitaneaba el Grupo de Refrigeración y Ventilación de dicha institución científica de primerísima línea mundial”.

EVOLUCIÓN. “No creo que el Colegio haya cambiado en lo esencial, es decir, en los valores plasmados en su lema, ‘respeto y trabajo’. Lo que ha cambiado es la forma de llevarlos a cabo, especialmente por el impacto (imprevisible y hace unos años impensable) de las nuevas tecnologías de la información y comunicación, no sólo en el día a día del aula, sino en prácticamente cualquier ámbito de nuestra vida. (...) Los descubrimientos que han tenido lugar en el último cuarto de siglo acerca del funcionamiento del cerebro y (...) la importancia de una educación que no prescinda del aspecto emocional, sino que se potencie a través de éste, estoy convencido de que han influido en el cambio operado en los modos de hacer del Colegio. (...) La proyección internacional ya estaba en la mente del anterior Director, D. Luis Rey Romero, que tenía la visión de un colegio involucrado en programas de intercambio y colaboración entre instituciones educativas de distintos países, no sólo en Europa, sino también en Estados Unidos. La puesta en marcha y el avance sostenido en esa línea estratégica por parte de D. Luis Rey Goñi constituye en mi opinión la realización del sueño y la aspiración de su padre para el Colegio”.

“Buena parte de la personalidad del Colegio que yo conocí se sustanciaba en ese valor del esfuerzo sostenido y del trabajo bien hecho, en esa ética del tesón, el mérito y la excelencia, exigente, sí, pero profundamente humana, comprensiva y tolerante”

192

Empresario dinámico e inquieto, premiado en 2007 por la Asociación de Jóvenes Empresarios de Sevilla, Manuel Altava guarda muy buenos recuerdos del Colegio, del que dice haber aprendido valores como el trabajo, la constancia, el esfuerzo, el respeto y la tolerancia. Además de esos valores, considera que lo mejor que guarda de su paso por el Colegio son sus amigos, que sigue conservando “como un tesoro”. Se considera un afortunado por haber disfrutado del último año de docencia de D. Luis Rey Guerrero, y, como padre de alumnos actuales del Centro, valora muy positivamente los cambios que está realizando la Dirección actual para adaptarse a los tiempos que vivimos, siempre de una forma siempre innovadora y pionera pero manteniendo la esencia y los principios fundacionales.

BUENOS MOMENTOS. “Ingresé en 1975 tras un gran esfuer-zo por parte de mis padres, ya que venían de otra ciudad y, entre las opciones de educación que se plantearon, pensaron que este centro era la mejor que podían ofrecerme. Estuve hasta el año 1985 cuando finalicé COU. Recuerdo indudable-mente, los buenos momentos, sobre todo de mi última etapa y que paradójicamente fue la peor a nivel académico. Al entrar en 4º de EGB, viniendo de un colegio público y ade-más de un pequeño pueblo, noté el cambio y tuve un primer año en el que tardé algo en adaptarme, dado que permanecía en el colegio de 8 de la mañana hasta las siete y media de la tarde, en el estudio con los internos, al trabajar mis padres fuera de Sevilla. No recuerdo haber tenido grandes proble-

mas para aprobar e incluso sacar bastante buenas notas. Pero evidentemente esto no implica ser un buen estudiante y así al crecer y ya en 2º de BUP dedicar mucho de mi tiempo al de-porte y competiciones, esto se reflejó en mis resultados académicos, aunque finalicé sin mayores problemas. Mis materias preferidas siempre fueron de acuerdo al profesor que te las impartía, quiero decir, me gustaron prácticamente todas de la misma forma que pude aborrecerlas en algún otro momento con distinto profesor. Las técnicas siempre se me dieron mejor”.

n Licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales (Rama de Empresa) por la Universidad de Sevilla.

n Socio-fundador de Afamel, S.L y Descar-tes Multimedia, S.L.. en 1995 y 1996.

n Consejero Delegado de Cortijo Aurora (1998).

n Socio-fundador de Asociación Coordena-da Sur (200).

n Administrador de Frutalta, S.L (2000).

n Director gerente de SAT 4671 SUPRA (2001).

n Apoderado de Frutos Cítricos Sevillanos, S.A (2001).

n Consejero Delegado de Andaluza Logísti-ca de Ocio y Aventura, S.L (2001).

n Director-Gerente S.A.T. CO-0016 LA AURORA (2002).

n Miembro del Comité Ejecutivo de Asaja Sevilla (2004).

n Administrador de Equipamientos Depor-tivos y de Ocio del Sur S.L.U y de Global Naturegreen S.L y Consejero delegado de Impulso Andaluz S.L (2006).

n Consejero delegado de CAÑALTA S.A. y Administrador de Servicio Andaluz de Mantenimiento Industrial S.L (2007).

n VII Premio Joven Empresario (2007).

Manuel Altava Pérez Economista y Empresario

“Junto a los valores recibidos, lo mejor que guardo de mi paso por el Colegio son mis amigos, que sigo conservando como un tesoro”

“Me consta el esfuerzo y trabajo inquebrantable de la actual Dirección

para conseguir que el Colegio siga siendo un referente cada día más

diferenciador”


193

LIBRE DE PREJUICIOS. “Trabajo, constancia, esfuerzo, respeto y tolerancia, son los valores que mejor definen la personalidad del Colegio. Del paso por sus aulas me llevé todos esos valores, y el sentirme una persona totalmente libre de prejuicios”.

UN PUNTO DE INFLEXIÓN. “Yo entré en el colegio (evidentemente por la insistencia de mi madre) tras una prueba, con un año de adelanto. Fue al llegar a 8º de EGB cuando, a sugerencia de D. Luis Rey Romero y ante la imposibilidad en aquellas fechas (1981) de pasar al BUP, me enviaron aquel curso a estudiar en Inglaterra, cosa anormal en aquellas fechas. Dado que era en invierno, no coincidí con ningún español, ni siquiera europeo, conviví con árabes, chinos, japoneses, etc… Fue un punto de inflexión en mi vida con 12 años, que tengo que agradecer al esfuerzo evidente de mis padres y a la actitud de D. Luis, que la propuso y facilitó”.

UN PRIVILEGIO. “El primer profesor que salta a mi memoria sería a D. Ricardo, coincidiendo aquel año con la jubilación de Dña. Paca (qué sólo volvió a salir del armario una vez aquel año…) su temible y mítica regla de madera que nos esperaba al pasar a 5º… D. Manuel Pérez y su inmensa y tierna mano, como su bondad, D. Juan Francisco con su interminable e inmensa geografía, D. Francisco Gómez y sus ya legendarias historias, D. José Ferrer que me inculcó la pasión por la lectura, etc…es imposible no dejar atrás a muchos que marcaron de una u otra forma nuestra personalidad, pero por encima de todo, tuve el privilegio de asistir al magisterio en su vuelta y último año, de D. Luis Rey Guerrero, y posteriormente de sus dos hijos, D. Luis Rey Romero y D. Guillermo Rey Romero. De ellos conservo no sólo el mejor de los recuerdos, sino la pasión por ciertas materias y sobre todo una curiosidad por el saber que no me aban-dona. Disfruté por igual de sus magníficas, amenas y entrañables clases, como sufrimiento me trajeron la mayor cantidad de “ceros” posible”.

LOS AMIGOS, UN TESORO. “Aparte de los valores y la educación recibida, lo mejor que guardo de mi paso por el centro son mis amigos, que sigo conservando como un tesoro. (…) Sería innumerable y seguramente injusta (por olvidar a alguno) la lista de antiguos compañeros que han visto realizadas con éxito sus ex-pectativas profesionales en todos los campos imaginables, pero por encima de ese éxito, lo que he podido constatar es, que en la gran mayoría, todas sus expectativas vitales se han cumplido, son gente equilibra-da, que ha llevado su vida por el camino elegido, con sensatez, coherencia, honestidad, reportando esa felicidad que no da sólo el desarrollo profesional. (…)”.

INFLUENCIA EN LA CARRERA. “Más que en la elección de mi vocación, lo que destacaría es la influencia que tuvo mi educación para facilitarme el paso por la Universidad, ya que dada mi “inquieta” trayectoria, dudo que sin la base que “debía” tener, hubiese conseguido ser Economista”.

DE LOS “PEORES” CURSOS. “Anécdotas, tengo innumerables. Creo honestamente que fue una suerte coincidir con alguno de los “peores” cursos que ha habido. Esto también te enseña y mucho y como anécdota destacaría que alguno de los alumnos “peores” que recuerdo yo y el centro y con los que me une gran amistad al día de hoy (alguno un poco más tarde de la cuenta…) han conseguido todo lo que se han propuesto y guardan igualmente un recuerdo imborrable del paso por el colegio”.

PERMANENTE EVOLUCIÓN. “Tengo dos hijos actualmente estudiando en el Colegio, lo cual me da la oportunidad de constatar la permanente evolución y mejora del mismo, lo que particularmente me satisface en dos aspectos: la educación de mis hijos y la buena marcha del centro bajo la dirección de Luis Rey Goñi, del que fui compañero de banca en algún curso y del que me consta el esfuerzo y trabajo inquebrantable para conseguir que el colegio siga siendo un referente cada día más diferen-ciador. (…) Veo que todo sigue siendo igual en lo esencial, pero con muchos cambios para adaptarse a los tiempos que vivimos, de una forma siempre innovadora y pionera. Aunque el modelo educacional viene muy limitado por el entorno y legislación vigente, sí que veo conveniente y me consta que se trabaja en ello, el fomento y potenciación de las habilidades personales, concurran o no con las tradi-cionales materias”.

“Algunos de los peores alumnos que yo recuerdo, lo de peores entrecomillas, sé que guardan un recuerdo muy grato de su paso del Colegio”

194

Sus padres buscaban un colegio que aunara la excelencia en la formación y la libertad ideológica. Y por eso eligieron el San Francisco de Paula, un centro que él define precisamente desde esa ambivalencia: “Riguroso y exigente en la formación, y libre y abierto en el pensamiento”. Dice haber aprendido en sus aulas la disciplina en el trabajo, la búsqueda del equilibrio y el respeto por lo diferente sin renunciar a ser uno mismo. Valores que guían ahora su práctica profesional como abogado y que trata también de inculcar a sus dos hijos, que también estudian en el Colegio. Desde su condición de padre de alumnos, estima que el proyecto educativo del centro ha evolucionado mucho, dando un importante salto de calidad en diferentes áreas, aunque sin cambiar el nivel de exigencia académica y disciplina en el trabajo.

EXCELENCIA Y LIBERTAD. “Mis padres buscaban una buena formación desde la libertad ideológica. Y por eso eligieron el San Francisco de Paula. Durante doce años, el Colegio fue mi segunda casa, en sus aulas evolucioné y me formé como persona, fui un estudiante medio que tuvo que trabajar algún que otro verano, y siempre tuvo preferencia por las asignaturas de Letras”.

RESPETAR LA DIFERENCIA SIENDO UNO MISMO. “En el Colegio siempre han sido rigurosos y exigentes en la forma-ción, y libres y abiertos en el pensamiento. Allí aprendí la disciplina en el trabajo, la búsqueda del equilibrio y el respeto por lo diferente siendo uno mismo”.

LAS PERSONAS POR ENCIMA DE LAS IDEOLOGÍAS. “Por supuesto que sí, que se percibía la pluralidad y la convivencia de diferentes ideas, de hecho las aulas eran un reflejo de la sociedad del momento y por encima de las ideologías siempre estaban las personas”.

RESPETO Y CARIÑO. “Sería injusto mencionar solo a algunos profesores, fueron muchos años en el centro, siempre me sentí querido y bien aconsejado incluso en los momentos académicamente difíciles, que los hubo, y aprovecho estas líneas para mostrar mi más sincero respeto y cariño por mis antiguos profesores”.

COMO SI NO HUBIERA PASADO EL TIEMPO. “Tengo la satisfacción de conservar muchos y buenos amigos de diferentes promociones con los que mantengo relación, en muchos casos conozco a sus familias y cuan-do nos vemos es como si no hubiera pasado el tiempo. Hay una parte de nosotros que no ha cambiado”.

PERSONAS HONESTAS E INTEGRADAS. “Casi todos los antiguos compañeros con los que coincido son personas sanas, honestas, integradas en la sociedad y que han conseguido canalizarse profesionalmente cada uno en su campo, lo que ya considero es un importante triunfo a destacar, otra cosa es que solo algunos

n Licenciado por la Facultad de Derecho de la Universidad de Sevilla y Master en Práctica Procesal Tutelada en 1995, ese mismo año ingresa en la Escuela de Practica Forense del Ilustre Colegio de Abogados de Sevilla, donde continúa su formación hasta 1997.

n Abogado en ejercicio desde el año 1995 con despacho profesional en Sevilla, ha sido asesor jurídico del Consulado de la R.O. del Uruguay en Andalucía, Ceuta y Melilla entre los años 1995 y 2008 y ha prestado servicios como le-trado, contratos de asesoría y consultoría, para la Delegación de Arquitectura y Vivienda de la Consejería de obras Públicas y Transportes de la Junta de Andalucía entre 1997 y 1999.

n Es colaborador del Turno de Oficio en las especialidades de derecho Penal y Militar, Civil, Familia, Extranjería y en favor de las victimas de delitos vinculados a la trata de seres humanos, perteneciendo al Cuerpo de Peritos Contadores-Partidores de dicha corporación. Es miembro del Servicio de Asistencia y Orienta-ción al Inmigrante, y de la Comisión de Nuevas Tecnologías del Colegio de Abogados de Sevilla.

Luis Felipe Pou PérezAbogado

“El Colegio siempre ha sido riguroso y exigente en la formación, y libre y abierto en el pensamiento”


195

consigan salir en el futuro por la Puerta del Príncipe utilizando un símil taurino. La vida es una carrera de fondo y mi generación aún está corrien-do”.

VOCACIÓN TEMPRANA. “La personalidad del Colegio y mis años de apren-dizaje en el mismo me sirvieron entre otras cosas para tener perspectiva, saber lo que quería y decidir. Mi vocación fue temprana, siempre tuve claro que quería estudiar Derecho, ser abogado y dedicarme al ejercicio libre de la profesión”.

UN JURAMENTO SOBRE LA BIBLIA. “Cuando cursaba 2º de BUP, entre otras, suspendí latín para septiembre y el primer día en las clases de recu-peración de verano que hoy no existen (conocidas como ‘veraneos en Costa Paula’ entre los parroquianos), el profesor D. Enrique Garrido nos garantizó que todos íbamos a aprobar pero necesitaba nuestro firme compromiso, para ello sacó una Biblia y nos hizo jurar uno a uno con la mano puesta so-bre ella ‘Juro aprender declinaciones y verbos en plazo de quince días’. Fue divertido ver a todos haciendo el ritual y más gracioso aún ver cómo en un mes empezamos a traducir textos del Latín, nos gustaba y todos aprobamos en septiembre. Consiguió que nos gustara la asignatura y algunos, como en mi caso, nos decidimos a elegir la rama de Letras puras”.

VÍNCULO MÁS ESTRECHO. “Siempre he mantenido el contacto a través de la revista MENDRUGO que recibo por gentileza del centro, habiéndose estrechado mi relación durante estos últimos años como consecuencia de que mis dos hijos, Luis Felipe y Carmen, cursan sus estudios en el Colegio y juntos hemos participado en actividades varias”.

SALTO DE CALIDAD. “El proyecto del Colegio ha evolucionado mucho y dado un importante salto de calidad con su firme apuesta por los idiomas, por estar a la vanguardia de las nuevas tecnologías y por ser aperturista incorporando nuevos métodos educativos a nivel internacional y profesores extranjeros, no habiendo cambia-do en el nivel de exigencia académica y disciplina en el trabajo. Considero que dentro de una buena forma-ción deben tener cabida materias que demanda la sociedad como la urbanidad, el protocolo, la nutrición, la seguridad vial, los hábitos saludables, etc.”.

DIFERENCIAS CON LAS GENERACIONES ACTUALES. “Resulta evidente que muchos centros educativos de ni-vel cuentan ahora con muchos más medios que antes, con la ayuda de las nuevas tecnologías y con una ma-yor implicación de los padres a todos los niveles, ello facilita y agiliza el trabajo pero nunca puede desdibujar e ir en detrimento de la figura del docente. La profesionalidad y el factor humano en la enseñanza seguirán siendo fundamental para los alumnos; y de la química ‘Profesor-Alumno’, que es la formula tradicional, seguirá dependiendo el éxito escolar. Considero que las nuevas generaciones, más que una mejor formación, tienen la posibilidad de tener una más amplia formación que las pasadas, pero lo preocupante es que cada vez suspenden más en valores humanos y sin valores mal se puede canalizar el conocimiento”.

CONTINUAR CREANDO ESCUELA. “Mi recomendación al Colegio es que mantenga su personalidad, con-tinúe creando escuela, empatice con los padres que apuestan por su sistema, mantenga y estimule a los buenos profesores, y no se deje intoxicar por el mercantilismo que casi todo lo invade. Considero que en el campo docente hay veces que menos es más. Considero que su resto principal es formar ciudadanos de futuro mentalmente sanos y preparados para incorporarse a un mundo diverso y globalizado, facilitándo-les la suficiente formación, visión general de lo que les rodea y en definitiva perspectiva para que puedan decidir su trayectoria en la vida, luchar por lo que quieren e intentar realizarse como personas. Teniendo presente que un colegio nunca puede ser un club social, considero que la diferencia principal de las mejores instituciones educativas seguirá estando en la exigencia académica y filosofía docente de cada institución, su profesorado, los medios empleados para transmitirla y su capacidad de empatizar con lo que demande la sociedad del momento”.

“El profesor D. Enrique Garrido nos garantizó que todos íbamos a aprobar pero necesitaba nuestro firme compromiso, para ello sacó una Biblia y nos hizo jurar uno a uno con la mano puesta sobre ella… En efecto todos aprobamos”

196

Licenciado en Derecho desde 1988 y Letrado de la Junta de Andalucía desde 1993, Manuel Andrés Navarro Atienza ha confiado la educación de sus hijos al Colegio, del mismo modo que sus padres le confiaron la suya, movido por los buenos recuerdos que guarda de la enseñanza recibida, basada en el rigor, el estudio y el esfuerzo diario, y también de la percepción de la propia evolución del centro. A este respecto, destaca que le parecen muy interesantes nuevas iniciativas que ahora se desarrollan, como las Jornadas Anuales sobre distintos países antes de Navidad, y confiesa que le causó una gran impresión ver por primera vez el funcionamiento de las pizarras electrónicas y sus distintas aplicaciones y posibilidades.

RIGOR Y TRABAJO DIARIO. “Ingresé en 6º de EGB, por la cercanía del Colegio a mi casa. Estuve 7 años. Era un buen estudiante. Mis materias preferidas eran la historia y la geografía, aunque también el francés y el latín. Recuerdo de manera especial la enseñanza que transmitían los profesores, basada en el rigor, en el estudio y esfuerzo diario”.

OPINIÓN PROPIA. ”Creo que, de manera principal, lo que mejor define la personalidad del Colegio es que te proporciona una educación para la vida, para la formación de una opinión propia sobre las cosas”.

HUMANISMO.”¿Lo principal que aprendí del Colegio? El valor de la cultura y del conocimiento. El humanismo”.

COMPAÑERISMO EN LA PLURALIDAD. “Bastaba con ver a los compañeros de clase, donde, pese a las diferencias, reinaba el compañerismo”.

HISTORIA AMENA Y DIVERTIDA. “Vinculado con mi gusto por la Historia, recuerdo especialmente a D. José María Garrido Luceño, y su manera de enseñar dicha asignatura de manera amena y divertida, salpicada de anécdotas. También recuerdo a un profesor de geografía, D. Juan Francisco, y sus famosas varillas, donde iba paseando por la clase y asaltándonos a preguntas sobre las sierras que componían los sistemas montañosos o bien los afluentes de los ríos por la margen izquierda o por la derecha”.

AMIGOS DEL COLEGIO. “Mis dos mejores amigos son compañeros de clase. A mi mujer la conocí en COU, que era el único curso mixto en aquélla época. Por otro lado, fue muy grato reencontrarnos los de nuestra promoción hace tres años gracias a la excelente iniciativa del

n Licenciado en Derecho por la Universi-dad de Sevilla en 1988.

n Letrado de la Junta de Andalucía por oposición en junio de 1993.

n Desde entonces desempeña su trabajo en los Servicios Jurídicos de la Junta de Andalucía.

n Complementa su actividad profesional con diversas publicaciones y la impartición de cursos en materias relacionadas con el Derecho.

Manuel Andrés Navarro AtienzaLetrado de la Junta de Andalucía

“Recuerdo de manera especial la enseñanza que transmitían los profesores, basada en el rigor, el estudio y el esfuerzo diario”

“Me causó una gran impresión cuando vi por primera vez el funcionamiento

de las pizarras electrónicas y sus

distintas aplicaciones y posibilidades”


197

Colegio de convocarnos. Si bien no son personalidades conocidas a nivel popular, me consta su valía profesional y personal”.

SENTIDO DE LA JUSTICIA. “No creo que influyeran sobre mi carrera tanto las materias que dábamos como el sentido de la justicia y del humanismo que nos inculcaron”.

VÍNCULOS. “Los mantengo porque he matriculado a mis hijos. Me parecen muy interesantes las iniciativas que se desarrollan, como la celebración de las Jornadas Anuales sobre distintos países antes de Navidad”.

EVOLUCIÓN. “Creo que en los últimos años, el Colegio ha hecho una fuerte apuesta por la educación en los idiomas, así como en la incorporación de las nuevas tecnologías visuales que complementan las técnicas tradicionales de enseñanza. (…) En la actualidad, lo visual ha adquirido una extraordinaria importancia. Me causó una gran impresión cuando vi por primera vez el funcionamien-to de las pizarras electrónicas y sus distintas aplicaciones y posibili-dades”.

LA ANTORCHA ENCENDIDA. “Mi recomendación es sobre todo que mantengan encendida la antorcha cuya luz ha guiado el camino del Colegio durante generaciones, de manera que las generaciones actua-les puedan transmitir a las siguientes este legado”.

EN EL FUTURO. “Yo creo que el reto fundamental es ofrecer un pro-ducto de calidad educativa que contribuya al desarrollo de las distin-tas potencialidades que cada ser humano posee”.

“No creo que influyeran sobre mi carrera tanto las materias que dábamos como el sentido de la justicia y del humanismo que nos inculcaron”

“Creo que en los últimos años, el

Colegio ha hecho una fuerte apuesta por la educación en los

idiomas, así como en la incorporación de

las nuevas tecnologías visuales”

198

Pintor y museógrafo, y ahora también emprendedor, Francisco Pérez Valencia mantiene indemne el espíritu de rebeldía que, dice, le inculcaron desde pequeño sus profesores del San Francisco de Paula. El Colegio, afirma, le enseñó a no doblegarse, a pensar, a hacerse muchas preguntas y a buscar por sí mismo las respuestas. Y eso es justamente lo que sigue haciendo hoy, y lo que le ha llevado a fundar La Universidad Emocional, un proyecto que pretende llevar el arte a las empresas para hacerlas más creativas, innovadoras y emocionales. ¿Por qué el arte, territorio por antonomasia de la creación, no puede inspirar las innovaciones empresariales? Francisco Pérez Valencia, que ya es conocido por ser un destacado innovador de la práctica expositiva en nuestro país, pretende revolucionar ahora el mundo de la gestión empresarial. Su mejor activo, la capacidad de soñar que mantiene intacta y que le regalaron los profesores de “un colegio de las personas y para las personas”.

FELIZ, MUY FELIZ. “Entré en 3º de EGB, en el año 1977 y salí al mundo diez años más tarde como una persona feliz, muy feliz, convencido de que podía hacer cualquier cosa que me propusiera, y mucho de esto nació en este Colegio. Soy el primero de tres hermanos y mis padres pensaron que el San Francisco de Paula era un lugar especial para estudiar. Siempre he sentido el amor y el empuje de mis pa-dres, aunque entonces nunca fuera consciente del enorme esfuerzo por darnos lo mejor a cada uno de nosotros. Ahora puedo imaginarme cuánto tuvieron que sacrificarse por mí y sus ganas por dar a sus hijos lo mejor”.

AMIGO DE TODOS. “Como vivo con una estrella, tuve el honor de ser alumno el año de mi ingreso (y también el siguiente) de D. Juan Plata. La clase era un lugar mágico, un planeta imaginario al que se accedía por una esca-lera pronunciada desde el patio más pequeño del Colegio, su interior estaba impregnado de un maravilloso olor a pan recién hecho, aroma que ascendía del horno que había justo debajo del aula. Desde entonces amo el pan. D. Juan también tuvo mucho que ver en mis primeras ilusiones, me hizo soñar desde el principio con un mundo distinto al que ahora veo como adulto, un mundo lleno de magia, de sueños y de convicción por transformarlo. (…) Mis recuerdos son incontables, los mismos que puede tener cualquier niño en sus edades más felices, desde los juegos infantiles, hasta las fiestas adolescentes en el patio del Colegio con las chicas que acababan de entrar cuando yo tenía quince años (…). Fui amigo de los empollones y de los más golfillos, con mis dibujos y caricatu-ras siempre me sentí apreciado. Creo que hice caricaturas a todos mis compañeros y profesores”.

UN COLEGIO QUE ENSEÑA A PENSAR. “Yo defino el San Francisco de Paula como un colegio de personas y para las personas. Esto es algo inaudito en un mundo tan competitivo y con tanto desafecto. El San Francisco de Paula es un Colegio que enseña a pensar; me hizo formular las preguntas y a buscar yo mismo las respuestas, un Colegio que me enseñó a no doblegarme”.

PLURALIDAD. “La pluralidad era nuestra bandera, entonces y aún hoy (…). Y debo decir que es completamente evidente si pienso en cada uno de los profesores que tuvimos a lo largo de aquellos años. Por ejemplo, en D. Juan Plata, un enorme vitalista con ideas extraordinarias para la época, como las de dedicar cinco minutos al

n Doctor en Bellas Artes, desde 1991 ha reali-zado cerca de cuarenta exposiciones individua-les de sus obras y ha participado en cerca de un centenar de muestras colectivas. Su obra ha cosechado multitud de premios y está presente en diferentes museos y colecciones públicas.

n Ha dirigido el proyecto museográfico de más de setenta exposiciones y ha sido Director-con-servador de la Colección Cajasol, Director del Espacio Escala, y representante en Andalucía de la Sociedad Arte, Información y Gestión.

n Actualmente preside la Universidad Emo-cional, que ha fundado para trasladar el Arte a la gestión Empresarial. Además, es Director de dos masters sobre museografía e imparte clases como profesor en escuelas de referencia nacionales e internacionales.

Francisco José Pérez ValenciaPintor, Museógrafo y Empresario

“El Colegio me enseñó a pensar, a hacerme preguntas y buscar yo mismo las respuestas, y sobre todo a no doblegarme”


199

silencio. Todavía hoy me saluda con su inconfundible cachete, como si yo siguiera siendo el mismo crío, y no puedo negar que me enternece profunda-mente. Esta marca de identidad se vio amplificada con D. Salvador, mi primer profesor de plástica, y D. Juan Francisco, de lengua, los primeros que me hicieron creer en mi capacidad para soñar, siempre envueltos en el humo de sus cigarrillos. (...) Creo que ya entonces éramos conscientes del privilegio de ser alumnos de mentes brillantes como las de D. Ramón, cuyas matemáticas se nos mostraban como una coreografía limpia y fresca, o D. Bernardo, serio y cercano al mismo tiempo. Recuerdo con especial cariño a D. Fernando, el primero en ver mis cualidades humanísticas siendo, curiosamente, profesor de ciencias, y a Ana Torres, profesora de letras clásicas, quien me impulsó a decidirme definitiva y honestamente por el arte, aún recuerdo cuando me lo dijo, cual una premonición, en una visita a Itálica, por cómo miraba uno de los mosaicos romanos. D. Roberto Reina fue el primero en hablarme de la contemporaneidad y D. José María Garrido, increíble comunicador, siempre con el puño de una sola manga desabrochada, me llevó a través de la Historia de la forma más apasionante que uno pueda sospechar, hasta el punto de vivir momentos únicos. D. Javier Liencres fue el primero que me hizo ver la vida como el adulto que soy. Fueron muchos los que me mostraron caminos atractivísimos y por ello mi eterno agradecimiento. Sólo espero haber merecido tanta fortuna”.

AMIGOS MUY CERCANOS. “Tengo amigos de todas las edades, no solo de los de mi promoción. Hermanos de compañeros, mayores y jóvenes que aún te saludan, como mi querido Miguel Ángel Robles, un hombre bueno por encima de todo, o Javier Alonso y Emilio Gallardo, de un curso inferior al mío, que junto a José Luis Tous, formaron parte de la etapa más feliz de mi vida. Entre los más cercanos hoy tengo a uno de los mosqueteros, Al-fonso Castro Sáenz, siempre cerca, fiel, leal e inmenso en su amistad, era el notario del curso, retiene en su privi-legiada mente cualquier rastro de nuestro grupo con una impresionante fiabilidad. Enrique Barrero, el primer poeta que conocí, envuelto de emoción hasta la pasta de sus gafas. Álvaro Gutiérrez Bucero, una mente brillante para la ingeniería y amigo, amigo. Javier Cano Morán, el mejor imitador del mundo, un auténtico referente en clase, que sabía activar el sentido del humor cuando más se necesitaba. Fernando Llano, el cántabro bondadoso, buena persona, honesto y coherente. Álvaro Navarro, un caballero desde que estuvimos juntos en 3º… Todos, ab-solutamente todos, los que estuvieron conmigo desde el comienzo hasta el final y los que se marcharon dejando una estela imborrable en mí, están conmigo, los siento cercanos aunque no nos veamos como nos gustaría”.

VÍNCULOS. “Mi historia personal y profesional está indisolublemente ligada a este Colegio. Soy la persona que soy, libre, soñadora y pasional, porque estudié aquí, donde pasé allí los mejores años de mi vida, porque cada día que viví allí fue mágico y lleno de expectación. (…) El Colegio forma parte de mi realidad. Cada vez que ten-go una noticia del mismo, me afecta directamente. Cada vez que paso por las calles a donde dan sus fachadas, todo un universo me llega de golpe. (...) Yo siempre estoy y estaré a cuanto me soliciten de mi Colegio. Manten-go con D. Luis Rey Goñi una exquisita amistad y él sabe de mi lealtad a un Colegio que marcó mi vida”.

ANÉCDOTAS. “Podría hacer una película con mis anécdotas o escribir un libro cargado de éstas, hilvanando cada una como una constelación –de hecho, es muy posible que lo haga-. Repentinamente, recuerdo en mi pri-mer año haberme partido el diente superior, una de las paletas, jugando en uno de los bancos de mármol gris del patio y no darme cuenta hasta llegar a casa. Mi madre casi se desmaya cuando me vio; yo siempre pensé que lo que había roto era la piedra. Ya mayor, mi vida en la redacción del periódico, MENDRUGO, fue como en las pe-lículas, tratando de subvertir la seriedad del entorno en humor e ironía, con caricaturas de profesores. Entonces me parecía como una acción de rebeldía romántica. Allí trabajé muy cercanamente con D. Luis Rey, padre del actual Director del Colegio, entonces su responsable. No fue profesor mío pero siempre sentí su aprecio”.

SOBRE TODO, VALORES HUMANOS. “¿Recomendaciones para el futuro? Que peleen por un proyecto educativo donde los sentimientos cuenten. El escenario para una formación privilegiada por los valores humanos. Donde todos inventen. Donde la creación sea una rutina, y la rutina, una liturgia de la creación. Con una firme voca-ción de humanidad. Esa debe ser la constante, ir a lo nuclear, directo a las personas. Ese es el motor que mueve el mundo”.

“Soy la persona que soy, libre, soñadora y pasional, porque estudié aquí, donde pasé allí los mejores años de mi vida, porque cada día que viví allí fue mágico y lleno de expectación”

200

Fundador y Presidente de Laboratorios Bio-Dis, una compañía dedicada a la fabricación y distribución de Vitaminas, Minerales, Complementos Alimenticios y Nutrición Deportiva, con más de 400 productos y diversas marcas propias, y que exporta a 20 países, José María Cantatero fue en el Colegio un alumno inquieto al que en esos años le interesaba sobre todo jugar. Sin embargo, considera que el paso por sus aulas (y por sus habitaciones, pues fue alumno interno) ha influido bastante en su vida personal y profesional, pues allí adquirió valores como la constancia, el trabajo o la disciplina, que le han sido fundamentales como empresario.

INTENSOS RECUERDOS COMO ALUMNO INTERNO. “En el año 1978 ingresé en el Colegio. La razón que llevó a mis padres a matricularme en este centro fue la calidad de la enseñanza, educación y la excelente preparación de los alumnos a nivel académico. Estuve cinco años, como interno, y durante toda la semana mi vida era el Colegio. Conviví con todos mis compañeros que estaban en la misma situación que yo y por ello estábamos más unidos que el resto. El más grato y vivo recuerdo era cuando todas las mañanas nos despertaba D. Juan Plata con palmadas y decía: ¡Vamos arri-ba!, ¡buenos días! Y especialmente cuando los viernes decía: ¡Hoy es San Viernes! También guardo en la memoria el olor a pan que emanaba de la panadería cercana al Colegio en mis tardes de estudio”.

UN ESTUDIANTE CUYA PRIORIDAD ERA… JUGAR. “Era un estudiante de nivel medio que nunca sobre-salió en ningún sentido, en aquellos tiempos mi prioridad era solo jugar. Mis materias preferidas eran biología, historia y judo”. DEFINICIÓN DEL SAN FRANCISCO DE PAULA. “Yo lo definiría como un colegio plural y tolerante con una gran disciplina a todos los niveles, que trataba de inculcar y trasmitir el esfuerzo, el trabajo y el respeto a los demás”.

DISCIPLINA Y ORDEN. “Lo principal que aprendí fue la disciplina y el orden. Los profesores nos dieron una educación orientada hacia el respeto a los mayores, la honradez y la honestidad, así como el sacrifi-cio, la voluntad, la convivencia y la constancia en el trabajo”.

CONVIVENCIA EN EL RESPETO. “En el Colegio no tuve problemas o diferencias con ningún alumno pro-piciado por diferentes ideologías o formas de pensar, simplemente los profesores nos trataban a todos por igual y sin distinción alguna, y nos enseñaban a convivir respetando a los demás”.

n Su primera experiencia profesional fue en 1991 como delegado comercial de Redi-sur.

n En 1992 funda la empresa BIO-DIS, S.C. Y en 1993 funda Laboratorios BIO-DIS ES-PAÑA, S.L., empresa de la que es Presidente y que ha logrado convertirse en una refe-rencia internacional en el exigente mercado de productos dietéticos y para la salud.

n Su trayectoria empresarial le ha valido diferentes reconocimientos. Así en 2003 fue el Primer Finalista “IV Premio Joven Empresario de Sevilla”; en 2004, Ganador del “V Premio Joven Empresario de Sevilla” y finalista del “Premio Joven Empresa-rio Andaluz” y del “IX Premio Nacional Joven Empresario”; y en 2006, 2º Premio “Programa de lanzamiento 50 K” Instituto Internacional San Telmo.

José María Cantarero de ArtachoEmpresario, Presidente de Laboratorios Bio-Dis

“El Colegio ha influido bastante sobre mi vida personal y mi carrera como empresario, gracias a los valores que allí adquirí”


201

MAESTROS. “D. Juan Plata, D. Francisco Pérez Cerezal y D. Joaquin Leflet fueron los profesores que más me influyeron”.

BUENOS AMIGOS DE LA INFANCIA. “Por supuesto, uno de los valores añadidos que tiene haber estado en el Colegio de San Francisco de Paula es la gran cantidad de buenos amigos que conservo de la infancia, tanto compañeros de clase como compañeros del internado y otros muchos que no estaban en mi curso. Y sigo coincidiendo con algunos de ellos, pero no con todos. (…) Rafael González, Alfonso Vázquez Macías, Francisco Fernández Romero, Emilio Losada Vieira o Ángel Rojas Alcario son algu-nos de los compañeros de mi época que sé que han tenido una trayectoria profesional destacada”.

INFLUENCIA PERSONAL Y PROFESIONAL. “El Colegio influyó bastante sobre mi carrera. La disciplina, el esfuerzo, el trabajo, el respeto a los de-más, la educación, el nivel académico y el nivel de enseñanza me ayuda-ron para posteriormente desarrollarme a nivel personal y profesional como empresario”.

GUERRAS DE ALMOHADAS. “Como anécdotas, recuerdo las cenas de Navidad de los internos y las gue-rras de almohadas con los compañeros de BUP cuando yo cursaba EGB, estas guerras de almohadas eran tremendas, bajaban los compañeros mayores con las almohadas y con las toallas mojadas en una punta y nos intentaban dar un ‘efecto látigo’. Ellos podían con nosotros ya que eran mayores, pero nosotros cuan-do bajaban a nuestro dormitorio juntábamos jabón por el suelo para que se resbalaran. También recuerdo que después de esta ‘guerra’, en que los mayores salían victoriosos, nosotros, los vencidos, subíamos a su dormitorio de madrugada y cuando estaban dormidos, le echábamos pasta de dientes en el pelo e incluso dentro de los zapatos y le pintábamos la cara con Kanfort negro. Era francamente divertido, qué buenos e inolvidables recuerdos…”.

AÑORANZA. “No he perdido el contacto con el Colegio, tengo añoranza de él, cada vez que puedo intento ir a todos los actos y actividades que se realizan y en estos momentos soy miembro de la nueva Junta Directiva de la Asociación de Antiguos Alumnos, donde tengo el cargo de Vocal”.

A LA ALTURA DE LOS NUEVOS TIEMPOS. “Creo que el Colegio ha cambiado en algunos aspectos porque ha necesitado adaptarse a las nuevas necesidades y tendencias del mercado en materia de educación, para ser más competitivo, evolucionar en materia de innovación educativa y estar a la altura de los nuevos tiempos. Lo que no ha cambiado es el espíritu del propio Colegio, que mantiene los mismos valores de siempre, tanto educativos como a nivel personal”.

LA EDUCACIÓN, HOY. “En general, pienso que en la educación de antes te inculcaban los valores de res-peto, sacrificio, trabajo, esfuerzo con algún castigo asumible, creo que las nuevas generaciones posible-mente estén mejor formadas, pero en materia de respeto y valores no lo suficiente, ya que los profesores están muy limitados a la hora de impartir disciplina. Creo que en general que los alumnos de hoy en día están demasiados protegidos por los padres”.

EN LA MISMA LÍNEA. “Mi recomendación para llegar al 250º aniversario es seguir con la misma línea que lleva la Dirección del Colegio y sobre todo que se adapte continuamente a las nuevas necesidades y tendencias del mercado educativo condicionado por las demandas de alumnos y padres cada vez más exigentes”.

VALORES DIFERENCIALES. “Alto nivel de conocimientos teóricos, buena metodología didáctica, óptima utilización de los recursos de aprendizaje y profesorado altamente cualificado. Por supuesto inculcar y trasmitir los valores del esfuerzo, el trabajo, el sacrificio y el respeto a lo demás. Todo esto es lo que creo que diferenciará a las mejores instituciones educativas”.

“Como interno, pude apreciar perfectamente que los profesores nos trataban a todos por igual y nos enseñaban a convivir respetando a los demás”

202

‘Franciscano’ hasta la médula, como él mismo se define, alumno, hijo de alumno y padre de alumno del Colegio, Francisco José Fernández Romero dice que el San Francisco de Paula es “una forma de sentir” que se lleva para toda la vida. Quizás por eso ahora, a todos esos galones “franciscanos”, ha unido uno nuevo: el de pertenecer a la Junta Directiva de la Asociación de Antiguos Alumnos. Con una trayectoria profesional muy destacada tanto en el sector público como en el sector privado, este abogado sevillano, hoy Director del equipo jurídico en Andalucía de la multinacional KPMG Abogados, reconoce que el Colegio le inculcó los valores del esfuerzo y la formación continua aunque subraya que esos valores sólo pueden desarrollarse en los alumnos con el apoyo de la familia. Cree además que el Colegio actual ha sabido adaptarse a la nueva realidad social y opina que el Bachillerato Internacional marcará un hito.

POR VOCACIÓN Y CONVICCIÓN. “Ingresé en el año 1978 y estuve en el centro hasta el curso 1988-89. Ha sido el único Colegio en el que he cursado estudios, por vocación y por convicción. Mi padre estudió también en el Colegio, en una época en la que funcionaba el internado. Algunos de los profesores que impartieron clase a mi padre, también fueron profesores míos. Tuve una relación con ellos muy especial. Siempre he creído que la forma de enseñar de los profesores del Colegio son uno de los aspectos de su éxito. Y ello a través de generaciones. El tutor que tiene este año mi hijo mayor fue Profesor mio”.

INTENSO APRENDIZAJE. “Mis recuerdos son de una época muy intensa de aprendizaje. Era muy buen estudiante, y mis materias preferidas fueron el latín y el griego. Uno de los momentos más importantes de mi vida fue cuando obtuve Matrícula de honor en todas las asignaturas de COU. Le dije a mis padres que el primer año de la Licenciatura ya estaba pagado, ya que era automático que la Universidad subvencio-nara el primer curso si habías obtenido esa calificación”.

SENCILLEZ, ESFUERZO Y RESPETO. “Sencillez en la conducta, esfuer-zo en el trabajo y respeto hacia los demás, esos son los conceptos que entiendo mejor definen la personalidad del Colegio”.

EL EJEMPLO Y EL APOYO DE LOS PADRES. “En el Colegio aprendí el valor de la profesionalidad, del esfuerzo y de la formación continua. Me ha dado credibilidad en mi vida personal y profesional el desarrollar esos valores. Y todo ello con el ejemplo de mis padres. Los valores que te inculca el Colegio no pueden desarrollarse sin una vocación familiar por mantenerlos y optimizarlos”.

n Doctor en Derecho y Abogado en ejercicio.

n En la actualidad, Director Jurídico en An-dalucía de la multinacional KPMG Abogados.

n Ha desempeñado puestos de responsabili-dad en la Junta de Andalucía, como Jefe de Contratación de Gestión de Infraestructuras, Consejería de Obras Públicas,

n En el ámbito de la empresa privada, fue Director Jurídico del Grupo AYESA.

n Ha publicado varios libros sobre el contra-to de obra, la concesión de obra pública, y el Contrato de Project Management.

n Especialista en Derecho de la Ingeniería, en Contratos Públicos y en Derecho de la Construcción.

n Ha intervenido algunas de las obras públicas más relevantes de Andalucía en los últimos años como el Metro de Sevilla y Má-laga, el PGOU de Sevilla o la Torre Cajasol.

“El verdadero elitismo que he conocido en el Colegio es el elitismo

por el trabajo bien hecho”

Francisco José Fernández RomeroAbogado, Director del Área Jurídica de KPMG en Andalucía

“La condición de ‘franciscano’ se lleva toda la vida. Creo que el Colegio es una forma de sentir”


203

DIVERSIDAD. “Recuerdo que mis compañeros de clase provenían de lugares distintos, sus padres tenían trayectorias diversas. El verdadero elitismo que he conocido en el Colegio es el elitismo por el trabajo bien hecho”.

LOS ABRAZOS A CURRITO. “D. Juan Plata, D. Juan Francisco y D. Luis Rey Romero fueron los profesores que más me influyeron. Recuerdo muy especialmente el cariño de D. Juan Francisco con los compañeros que éramos del Betis. Siempre realizaba un comentario sobre el resultado del último partido. Recuerdo también el abrazo que D. Luis Rey Romero me daba cuando lo veía en el recreo, y me llamaba “Currito”. Hace pocos años, en recuerdo de aquéllos encuentros, nos hicimos los dos una foto en el recreo. La tengo en casa y le envié una a Dª Maribel. La expresión de cariño de D. Luis Rey en esa foto lo dice todo”.

ANTIGUOS COMPAÑEROS. “Conservo muchos amigos de entonces, aun-que no nos vemos mucho. Tampoco hemos tenido la suerte de coincidir profesionalmente, ya que no ha sido una promoción que se haya dedicado de forma acusada a las Ciencias Jurídicas. Solo tres compañeros de Colegio finalizaron la carrera de Derecho conmigo, y ninguno de los tres permaneció en el Doctorado, solo yo. (…) Aunque eran de distinta promoción guardo mucho afecto de Paco Pérez Valencia y de Alfonso Castro. De mi promoción, Enrique Albor y Raimundo García”.

LIBRE PARA ELEGIR EL CAMINO. “El Colegio me capacitó en primer lugar para ser libre y elegir mi ca-mino desde la preparación. De igual forma, potenció mi visión humanista de la profesión. Disfruté mucho con el latín y el griego, y me apasionó la literatura y la escritura. De hecho, creo que tengo un asunto pendiente con estudiar Periodismo”.

VÍNCULO AFECTIVO. “Mi presencia en el Colegio es permanente. He sido Secretario de la Asociación de Antiguos Alumnos durante dos etapas, y soy padre de dos alumnos. Además continúo mi vínculo afectivo con el Colegio en distintos Foros y en mi actividad profesional”.

UNA CONDICIÓN PARA TODA LA VIDA. “La condición de ‘franciscano’ se lleva toda la vida. Creo que el Colegio es una forma de sentir. Hay una cuestión que permanece en el tiempo: el pertenecer al Colegio de San Francisco de Paula como alumno es un proyecto educacional del alumno y de su familia. Eso no ha cambiado”.

ENFOQUE ACTUAL. “Actualmente creo que el Colegio ha sabido adap-tarse a la nueva realidad social, a los métodos de enseñanza dirigidos al conocimiento, y no solo al resultado. Y sobre todo, el Bachillerato Inter-nacional es un logro de D. Luis Rey Goñi, que marcará un hito”.

LOS PRÓXIMOS 125. ”Mi consejo para los próximos 125 años pasa por lo mismo que se ha hecho hasta ahora: renunciar a lo fácil, optar por una línea que funciona, y no estar hipotecados por las circunstancias políticas”.

LIDERAZGO. ”Creo que lo fundamental es que el Colegio trabaje mucho el liderazgo de sus alumnos. Ahora no basta con ser buen profesional, hay que ser un profesional líder en lo que hagas”.

“El Colegio me capacitó en primer lugar para ser libre y elegir mi camino desde la preparación y el esfuerzo. De igual forma, potenció mi visión humanista de la profesión”

“Creo que ha sabido adaptarse a la nueva realidad social, a los métodos de enseñanza dirigidos al conocimiento, y no solo al resultado”

204

La parlamentaria europea Teresa Jiménez-Becerril ingresó en el Colegio para estudiar COU, y lo hizo siguiendo la recomendación de su hermano, Alberto Jiménez Becerril, cuyo nombre ya preside para siempre el aula en que realizó sus estudios Preuniversitarios. La diputada por el PP guarda unos recuerdos maravillosos de aquel año, y aprecia sobre todo el clima de superación, de trabajo y también de diversión que había en el Colegio y que “hacía muy llevaderas las horas de clase”. Define el San Francisco de Paula como un centro libre, serio y abierto, y se declara una ferviente impulsora del estudio de idiomas en los colegios, así como de educar a los alumnos españoles para que sean ciudadanos europeos y conozcan a sus vecinos de la UE.

RECOMENDADO. “En el colegio ingresé para hacer COU y elegí el San Francisco de Paula porque había estudiado un tiempo mi hermano Alberto Jiménez-Becerril, quien me lo recomendó”.

RECUERDOS MARAVILLOSOS. “Mis recuerdos son maravillo-sos. El clima de superación, de trabajo y también de diversión hacía muy llevaderas las horas de clase. Recuerdo que la libertad y el respeto con el que los alumnos éramos tratados me sorprendió gratamente. Como estudiante era aceptable tirando hacia arriba, era brillante en lo que me gustaba, las Letras y menos aplicada en Ciencias”.

LIBRE, SERIO Y ABIERTO. “Diría que el San Francisco de Paula es un colegio libre, serio y abierto. En el Cole-gio me inculcaron estudiar por mí misma, amar el estudio y el trabajo bien hecho”.

TOLERANCIA Y SENCILLEZ. “Yo venía de un colegio de monjas católicas irlandesas y creo que noté esa plu-ralidad de la que se habla. En cuanto a convivencia no era muy diferente a donde yo estudiaba. La tolerancia depende mucho de los profesores en particular, pero el aire que se respiraba en el San Francisco de Paula era de tolerancia y de sencillez, lo que siempre es de agradecer”.

PROFESORES Y COMPAÑEROS. “De los profesores recuerdo sobre todo a mi profesor de filosofía, que me dejó huella. Era excelente. Algunos amigos sí conservo entre mis compañeros de entonces: mi amiga Mercedes Dar-mude, Joserra Halcón, etc. Aunque yo me fui a estudiar a Madrid y perdí muchos contactos”.

AMAR LA ESCRITURA. “Yo siempre he querido escribir, es lo que elegí, soy periodista. En el Colegio me ayudaron a perfeccionar y a amar la escritura.

n Licenciada en Ciencias de la Comunicación en la Universidad Complutense de Madrid, es-tudió también Diseño en el Instituto Marangoni de Milán y varios cursos de Filología Hispánica.

n Es Diputada en el Parlamento Europeo y miembro de la Comisión de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos de Interior, la Comisión de Derechos de la Mujer e Igualdad de Género, la Subcomisión de Derechos Humanos y la Delegación para las Relaciones con Japón.

n Es además empresaria y en la actualidad dirige una empresa de rehabilitación y gestión inmobiliaria.

n Ha sido manager de la firma Prada en Lon-dres. Es Presidenta de honor de la Fundación Alberto Jiménez-Becerril.

n Colaboradora habitual del periódico ABC y autora de numerosos artículos en prensa española e internacional.

n Habla español, inglés, francés e italiano.

Teresa Jiménez-Becerril BarrioDiputada en el Parlamento Europeo, Periodista y Empresaria

“El clima de superación, de trabajo y también de diversión hacía muy llevaderas las horas de clase”

”El aire que se respiraba en el San Francisco de Paula

era de tolerancia y de sencillez, lo

que siempre es de agradecer”


205

DELEGADA DE CLASE. “Recuerdo que me eligieron delegada de clase sin que yo me ofreciera para ello, lo cual fue muy curioso, pero al final me alegré de haberlo sido”.

HOMENAJE A ALBERTO. “En estos años no he participado con el Cole-gio porque siempre he vivido fuera, pero recientemente he tomado con-tacto con su Director, quien se ha comportado exquisitamente poniendo el nombre de Alberto Jimenez-Becerril, mi hermano, a un aula”.

ESTUDIO DE IDIOMAS. “Yo soy una ferviente impulsora del estudio de idiomas en los colegios, creo que conocer varias lenguas abre muchas puertas. A mí me las ha abierto. Creo que sería conveniente familiari-zar a los alumnos con las instituciones europeas, no estaría mal educar para que fueran ciudadanos europeos y conociesen a sus vecinos de la Unión”.

DIFERENCIAS DE AYER Y HOY. “Creo que antes se estudiaba más de me-moria y ahora se le da más importancia a trabajos en grupo, etc. También existe la tendencia a priorizar el estudio más técnico-científico. Existe el miedo a no encontrar trabajo si uno no estudia cosas más prácticas. En ese sentido nosotros salimos ganando porque preparamos mejor la mente, éramos más libres, hoy están más limitados”.

EN LA MISMA LÍNEA. “Yo no me atrevo a recomendarle nada al Cole-gio, como máximo a que sigan en la línea de excelencia que tan buenos resultados les ha dado durante tantos años”.

RETOS PARA UN COLEGIO PRIVADO. “En mi opinión, un colegio privado debe tener una enseñanza de calidad, con un alto nivel en todas las asignaturas y con opciones de aprender idiomas. También es con-veniente que tenga un buen número de actividades extraescolares. Creo que es importante que mantenga una buena interacción con los padres y sus exigencias. Y por último que sea un ambiente libre y grato para los estudiantes”.

“Yo siempre he querido escribir, es lo que elegí, soy periodista. En el Colegio me ayudaron a perfeccionar y a amar la escritura”

“Recuerdo que la libertad y el respeto con el que los alumnos éramos tratados me sorprendió gratamente”

206

Directivo de banca, Miguel Nogales Castilla tiene la doble perspectiva del Colegio como ex alumno y como padre de alumno. Desde la primera, destaca la fuerte personalidad de un centro que le inculcó los valores del esfuerzo, el trabajo y el respeto hacia las opiniones distintas. Desde la segunda, valora la evolución metodológica hacia una enseñanza no basada exclusivamente en la memoria, y más orientada hacia la investigación y la práctica, el bilingüismo y el apoyo de las nuevas tecnologías. Sobre ambas bases, opina que “los actuales alumnos del Colegio están adquiriendo una clara ventaja en formación, tanto académicamente como en disciplina y sistemática de trabajo”.

UN ALUMNO CON BUENAS NOTAS. “Empecé en 1978, los dos primeros años como interno, y estuve hasta 1985. Mi promoción ha cumplido recientemente los 25 años. En aquella época había dos o tres colegios de referencia en Sevilla, y mis padres se decantaron por el nuestro, sobre todo por recomendaciones de otros amigos. Los recuerdos de esos años son muy numerosos, y de todo tipo: en clase, en el internado, en actividades extraescolares, de deportes, de judo… Creo que puede decirse que fui un alumno que sacaba buenas notas, y que acabó en ‘letras mixtas’ en COU”.

FUERTE SEÑA DE IDENTIDAD. “El San Francisco de Paula es un colegio con una fuerte seña de identidad, diferenciadora, probablemente por su carácter de colegio aconfesional, pero también por su respeto a la identidad personal, al talento individual, con valores sólidos firmemente apoyados en el esfuerzo, la exigencia y el trabajo”.

VALORES. “Los principales valores que me inculcaron en el Colegio fueron el esfuerzo, el trabajo, el respeto hacia opiniones distintas, lo enriquecedor del debate, del diálogo, del trabajo en común…”.

APASIONADAS DISCUSIONES. “Sí, coincido totalmente en que era un colegio muy plural. Aún recuerdo las apasionadas discusiones que se planteaban en clase sobre temas de toda índole, en especial el cuestionárselo todo a donde nos llevaba D. Manuel García Vázquez, D. José María Garrido, o la forma de plantearnos los problemas de D. Luis Rey Romero, D. Amadeo…”.

PROFESORES. “Cualquier enumeración de profesores resulta injusta porque sin duda me dejo a muchos y de casi todos “sacábamos” algo, pero puedo decir que recibí mucho de profesores como D. Manuel García Vázquez, D. Luis Rey, D. Luis González, Dª Maribel, Dª María Estela, D. José María Garrido, D. Javier Liencres, D. José Ferrer, o D. Pascual Colón, que era mi cuidador en el internado, amigo y que ahora es profesor de uno de mis hijos”.

n Licenciado en Derecho por la Universidad de Sevilla (Junio 1991).

n Gestor Administrativo (1994).

n Programa Superior de Dirección de Nego-cio Bancario (IADE – Universidad Autónoma de Madrid, 2003).

n Programa Superior de Desarrollo Directivo (Instituto de Empresas – Madrid, 2005.

n Empleado del Banco Santander desde 1995, desarrollando sucesivas funciones como Gestor Comercial, Director de Oficina, Director de Colectivos y Universidades de la Territorial Andalucía, y actualmente, desde 2002, como Director de Particulares de la Territorial Andalucía.

Miguel Nogales CastillaDirector de Particulares de la Territorial Andalucía del Banco de Santander “Los actuales alumnos del Colegio están adquiriendo una clara ventaja en formación, tanto académicamente como en disciplina y sistemática de trabajo”

“Creo que se debe seguir potenciando

y premiando la capacidad individual,

pero sin dejar de fomentar valores de

equipo”


207

EN EL CÍRCULO MÁS PRÓXIMO. “Conservo varios amigos de aquellos años, y no sólo seguimos coincidiendo, sino que están dentro del círculo de amigos más próximos. Sin concretar ninguno, me gustaría destacar que gran parte de los antiguos alumnos de mi época, mantienen carreras profesionales de relevancia en diferentes ámbitos del derecho, la medicina, la industria, la economía…”.

CARRERA PROFESIONAL. “Creo que los años de colegio son determinantes a la hora de devidir el futuro profesional de cualquier persona, aunque posteriormente diversos factores vayan amoldando las elecciones personales”.

EL INOLVIDABLE VIAJE DE COU. “¿Anécdotas? Pues recuerdo, de mi paso por el internado, en los dos primeros años de mi estancia en el Colegio, cómo le teníamos que pedir permiso a D. Luis González (Jefe de Estudios si no recuerdo mal en aquellos años) para llamar por teléfono a casa a cobro revertido, en la cabina que hay en el zaguán: ahora todos llevamos un móvil en el bolsillo. Del resto de años, me quedo con los debates en clase de sociales los viernes por la tarde, las clases medio vacías del 24-F, las carreras en gimnasia por las calles de ‘Sor’ Ángela y Doña María Coronel… Finalmente tengo un recuerdo muy especial del último año, con motivo de la organización del viaje de COU: merece la pena destacar cómo D. Luis Rey Romero, además de dejarnos debatir abiertamente en el Salón de Actos el destino del viaje, admitió lo que decidió la mayoría de los alumnos, Italia, aunque evidentemente no era el destino preferido por los padres ni tampoco por el centro, pues entrañaba mayores riesgos y dificultades organizativas que las otras alternativas que se planteaban, y cómo la noche de la partida habló con varios de nosotros pidiéndonos que colaborásemos en lograr que todo fuera bien. La conclusión fue que disfrutamos enormemente aquel viaje, sin incidencias, y que aún hoy lo seguimos recordando cada vez que tenemos ocasión”.

VINCULACIÓN PERMANENTE. “Mi vinculación con el Colegio ha sido permanente, a través de amigos, hijos de amigos que han entrado al Colegio, sobrinos, y actualmente mis tres hijos, de 10, 7 y 4 años”.

EVOLUCIÓN. “Está claro que la apuesta por el bilingüismo es fundamental como elemento diferenciador y enriquecedor, junto con la formación complementaria en otros idiomas: el menor de mis tres hijos se sabe mejor los colores en inglés y francés que en español. Si a esto le unimos el acceso a nuevas fuentes de información, creo que es primordial crear, fomentar y mantener en los alumnos la curiosidad por aprender, porque en el mundo en el que van a vivir, se da por hecho que van a utilizar las ‘nuevas’ tecnologías, que para ellos son cotidianas e intuitivas. El desligarnos hasta cierto punto de la memorización pura, más allá de como mero ejercicio mental, e incentivar la investigación y la práctica como medio de aprendizaje, también me parece esencial”.

CLARA VENTAJA COMPETITIVA. “Los métodos van cambiando, y me parece necesario que así sea. Respecto a si unas generaciones están o mejor formadas que otras, no creo que sean comparables, aunque si nos ceñimos a los alumnos del Colegio, creo que los actuales están adquiriendo una clara ventaja en formación respecto al entorno, tanto académicamente como en cuanto a disciplina y sistemática de trabajo”.

TRADICIÓN E INNOVACIÓN. “Mi recomendación para los próximos 125 es continuar con las líneas esenciales del Colegio, respetando los principios básicos que hemos comentado, y persistiendo en ellos, al mismo tiempo que innovando de forma constante. Creo que se debe seguir potenciando y premiando la capacidad individual, pero sin dejar de fomentar valores de equipo, de grupo, de manera que se logre que el número de alumnos que completan sus estudios en el Colegio aumente. (…) Creo que en todos los ámbitos de la vida, el esfuerzo y el trabajo son aspectos esenciales, junto con el respeto a lo que hacen los demás, y eso entiendo que debe valer tanto para el siglo XXI, como valió para el XX y sin duda el XIX. En un entorno como el actual, donde muchos de estos principios, junto con los de autoridad y el del reconocimiento a la valía individual, están muy en cuestión, creo que el persistir en los mismos, junto con la aplicación de nuevas técnicas formativas, seguirá diferenciando a unas instituciones de otras, y por lo tanto al futuro de unos y otros alumnos”.

“Aún recuerdo las apasionadas discusiones que se planteaban en clase sobre temas de toda índole”

208

Gerente territorial de Justicia de Andalucía en Sevilla desde 2005, Francisco Jesús Cano Pérez hizo todos sus estudios pre-universitarios en el Colegio de San Francisco de Paula. Ingresó en el 79 y se marchó en el 91, después de terminar el COU. No es extraño que el Colegio sea para él la referencia de su infancia y adolescencia, “como una segunda casa”. Del paso por sus aulas dice haber aprendido a trabajar duro, y con ahínco para conseguir las metas, pero sin olvidar los principios. “Desde su ideario moderno y progresista, el Colegio buscaba hacernos personas de bien y buenos profesionales, personas con fuertes principios a las que no les gusta ganar a cualquier precio”, afirma.

LA MEJOR HERENCIA. “El Colegio ha sido y es la referencia de mi infancia y adolescencia, como una segunda casa. (…) Mis padres quisieron que estudiase allí por el gran prestigio que tenía el centro, por la seriedad del mismo, confiaban en que el Colegio me daría las herramientas para defenderme en la vida y para desarrollarme personal y profesionalmente. Recuerdo que mis padres siempre nos decían que esa sería nuestra mejor herencia, la del conocimiento, la preparación, la formación y la asunción de valores imprescindibles. (…) Mentiría si no digo que guardo los mejores recuerdos, fueron muchos años en esas clases, en esos patios, muchos años com-partiendo buenos momentos con amigos, compañeros y profesores. A veces he pasado por delante de la puerta con amigos que no estudiaron en el San Francisco y les sorprende la fisonomía del Colegio con su patio central, sus columnas, su fuente. Todos esos son símbolos de una institución. (…) En el Colegio todos éramos conocidos, las dimensiones del centro y el trato personal, lo facilitaban. Yo fui un buen estudiante, no tuve problemas en aprobar con nota los cursos, aunque esto requería un esfuerzo constante, in crescendo, desde las primeras etapas hasta los últimos cursos, lo que en cierta forma hacía que aprendieses a estudiar, ese hábito de estudio que te lleva con cierta costumbre a dedicarle horas a estas tareas, haciendo trabajos, subrayando, esquematizando”.

UNA GRAN FAMILIA. “La esencia del San Francisco de Paula la componían sus profesores, verdaderos maestros vocacionales y entregados. Todos conformábamos una gran familia, sabíamos que pertenecíamos a un proyecto común, nos sentíamos parte de ese microcosmos que es el Colegio. Curiosamente a las sagas de alumnos le seguían sagas de profesores, que nos conocían a todos, uno a uno, perfectamente, sabían de qué pie cojeábamos, qué se nos podía pedir a cada uno, cómo era el hermano que nos antecedía o precedía. Hemos vivido con estos profesores y con la Dirección del centro todos los buenos y malos momentos de nuestros años escolares, nos han visto crecer y los hemos visto envejecer, hemos celebrado sus jubilaciones y hemos asistido a sus funerales. Insisto, el San Francisco ha sido para muchos de nosotros una familia”.

IDEARIO. “El Colegio nos enseñó muchas cosas, desde su ideario moderno y progresista buscaba hacernos personas de bien y buenos profesionales. La búsqueda de la excelencia, del trabajo, del sacrificio, es algo que va dejando mella en los espíritus, especialmente en los más jóvenes y maleables y se termina instalando como una manera de ver las cosas. Para mí no existe nada que no se pueda conseguir con esfuerzo, y porque requiere ese esfuerzo vale aún más la pena. Entiendo que debe trabajarse duro, con ahínco en conseguir nuestras metas, pero sin olvidar seguir siendo personas con fuertes principios a las que no les gusta ganar a cualquier precio. Intento día a día que el fruto de lo que hago, de mi trabajo, diga mucho y bueno de mi persona. Todas estas cosas me las inculcaron en el Colegio y podrían ser un sello de identidad de esa gran familia. (…) El ideario

n Licenciado en Derecho por la Universidad de Sevilla.

n Funcionario por oposición del Cuerpo Su-perior de Administradores Civiles del Estado desde 2003.

n Desde 2005 Gerente Territorial de Justicia de Andalucía en Sevilla, con responsabili-dad territorial sobre Andalucía Occidental y Ceuta.

Francisco Jesús Cano PérezAdministrador Civil del Estado

“El Colegio buscaba hacernos personas de bien y buenos profesionales con fuertes principios”


209

del Colegio (…) ha defendido el respeto a la pluralidad y a la tolerancia. (...) Indiscutiblemente su vocación era de un adelantado a su tiempo. Siempre se valoró el libre pensamiento y se nos animaba a pensar por nosotros mismos y a buscar nuestra verdad, no era un colegio que adoctrinaba, todo lo con-trario, buscaba que fuésemos personas formadas, preparadas y con valores, que nos sirviesen para esa búsqueda”.

PROFESORES EXCELENTES Y ENTREGADOS. “Prácticamente todo el claus-tro me marcó, eran profesores excelentes, entregados, con personalidades fuertes, atractivas, motivantes. Como he dicho eran maestros que disfrutaban con la docencia, que se volcaban. Un colegio son siempre sus profesores, ellos son los artistas ‘no reconocidos’ que convierten el barro de sus alumnos en verdaderas obras de arte, los perfeccionan, los acaban. No me gustaría que en mi relación faltase ninguno, simplemente por que no se merecen el olvido (…). Así recuerdo al Profesor D. Miguel Tejero (de mis primeros años en el cole), D. Joaquín García Gallego, D. Salvador, D. Gabriel, Dª María Estela, D José Manuel Perea, o D. José María García Garrido, Dª Lola, D. Juan Carlos… y tantos otros, sin olvidar nunca a D. Luis Rey y a Dª Maribel Goñi, cuya relación y trato personal excedía lo académico, adentrándose en terrenos de especial afecto y cariño”.

AMIGOS DE AQUELLOS AÑOS. “Conservo un buen puñado de amigos de aquellos años, algunos de ellos siguen siendo simplemente los amigos con los que quedo habitualmente para salir el fin de semana (…). En la actualidad con las redes sociales hemos aumentado la intensidad y es fácil ver qué es de cada uno de nosotros, qué hace, si está casado, si tiene niños (…). Entre mis compañeros hay importantes funcionarios, médicos, pro-fesores de Universidad, ingenieros, periodistas, y también conductores de autobús o cocineros, pero sobre todo hay buenas personas y excelentes profesionales. Eso es lo que distingue a esa familia ‘franciscana’ las ganas de hacer las cosas bien y dejarse todo el empeño en conseguirlo”.

LA VOCACIÓN. “No puedo decir que mi vocación se perfeccionase totalmente en mis años escolares, pero sí una gran parte de ella. Recuerdo mi primera aproximación a la Constitución, en una asignatura que se llamaba Ordenamiento Constitucional. Recuerdo perfectamente una clase con D José María García Garrido, una emi-nencia, en la biblioteca del Colegio, con la bandera de España en la mesa. Me pareció fascinante comprender la importancia de ese texto como norma vertebradora de la realidad de España, y cómo los distintos Poderes del Estado trabajaban para garantizarnos vivir en paz y seguir avanzando. Algo que tan bien explicaba D. Javier de Liencres cuando desarrollando Hegel nos decía que el Estado era el paso de Dios sobre la tierra. Todas estas cosas me fueron llevando a estudiar Derecho, me parecían y me parecen apasionantes, me llevaron por la senda del Derecho Público en que me especialicé y determinaron mi carrera profesional en la función pública. Soy el primer funcionario de mi familia desde generaciones, y pese a la percepción que algunos interesadamente proyectan en la opinión pública, me siento orgulloso de serlo, de servir a los intereses generales, de poner ese tesón y esfuerzo diario en conseguirlos y de que las plusvalías de mi trabajo sean (...) para conseguir progreso, estabilidad, derechos y bienestar para la sociedad. Por otra parte, las herramientas aprendidas en los años esco-lares, el hábito de estudio y trabajo, me han servido para conseguir mis expectativas profesionales”.

RETOS PARA EL FUTURO. “En mi opinión el reto al que deben enfrentarse las instituciones educativas en este siglo XXI es facilitar el tránsito de la Sociedad de la Información a la Sociedad del Conocimiento. Debemos darle a los jóvenes las herramientas para pensar, para discernir lo que está bien y lo que está mal, los resultados y las consecuencias de lo que acontece en el mundo. La información, como la potencia sin control, no sirve de nada, manejamos una red infinita con conexiones a lo largo y ancho del planeta, pero si no somos capaces de pensar por nosotros mismos y tomar nuestras propias decisiones de nada servirá que podamos obtener tanta información y tan rápidamente. La juventud que no sabe pensar es una juventud fácilmente manipulable. Creo que lo que distinguirá a unas instituciones educativas de otras es la educación en valores. Asistimos en la actualidad a un cambio de paradigma y si queremos que realmente las cosas cambien debemos tener claros los valores que perseguimos. Debemos seguir persiguiendo la excelencia, el trabajo duro y la moralidad, porque no todo vale ni a cualquier precio y que esto nos convierta en ciudadanos activos y responsables ante los nuevos retos”.

“Un colegio son siempre sus profesores, ellos son los artistas ‘no reconocidos’ que convierten el barro de sus alumnos en verdaderas obras de arte”

210

Cuenta que decidió ser periodista cuando leyó un texto de Mariano de Larra en Bachillerato, y pensó que a él le gustaría escribir algo parecido. Ahora se dedica profesionalmente a asesorar a empresas y organizaciones en cuestiones de comunicación e imagen. Tiene a sus dos hijos en el Colegio, donde espera que aprendan muchas cosas, pero sobre todo algo fundamental que también le enseñaron a él: que no hay ningún patrimonio más valioso que el conocimiento y la integridad personal, y que no hay ninguna meta que merezca realmente la pena que pueda lograrse sin esfuerzo y trabajo.

QUÉ QUIERES QUE SEPA CON CINCO AÑOS. “Yo era el más pequeño de cinco hermanos, dos niñas y tres niños, y por ello quizás el más mimado. (…) A mi madre le dio pena mandarme a la guardería, así que, a los cinco años, yo no sabía nada de nada, y mi padre tuvo dudas de si meterme en el Colegio. (…) Fue a ver al entonces Director, D. Luis Rey Romero, a quien tenía y siempre tuvo en una altísima estima, y le contó la situación. Según mi padre me ha contado muchas (pero muchas) veces, D. Luis le dijo: ¿qué quieres que sepa con cinco años?. Así que D. Luis Rey Romero fue importante para que yo entrara en el Colegio, y también lo fue para que siguiera en él, y con él tengo una deuda de gratitud enorme. (…) Ha sido, sin duda, una de las personas más importantes en mi vida”.

MANTENER EL LISTÓN. ”De pequeño no manifesté ninguna inclinación especial hacia las Ciencias o las Letras. Como no sacaba malas notas, algunos compañeros pensaban que a mí me gustaba estudiar, pero no, realmente lo que me gustaba es jugar, y desde luego la motivación más grande para hincar los codos

era quizás corresponder al gran esfuerzo que yo sabía que estaban hacien-do mis padres para darme esa educación, y también mantener el listón que iban dejando mis hermanos. (…) Ya en los niveles superiores, en Bachille-rato, sí manifesté una orientación clara hacia las Letras, particularmente hacia la Filosofía y la Historia, creo que motivado en buena parte por los profesores que tuve. Ni en la Facultad ni en un ningún otro lado he tenido luego profesores como aquellos”.

NO ES LO QUE TENGO, ES LO QUE SOY. ”El Colegio me aportó capacidad de estudio y de trabajo, y, junto con mis padres, me enseñó a ser respon-sable. Este es un aspecto que me parece esencial: que profesores y padres vayan en la misma dirección. Y creo, de hecho, que esa es una de las claves de este Colegio, que reúne a una comunidad de padres que piensan parecido sobre cómo deben ser educados sus hijos. Padres que creen en el

n Licenciado en Ciencias de la Informa-ción, rama de Periodismo, y Master en Comunicación y Periodismo Económico por EOI

n Se inició en medios de comunicación en Huelva Información, Europa Press, Canal Sur Televisión y ABC de Sevilla, periódico con el que ha colaborado, como columnis-ta, entre 2000 y 2009.

n En 1997 se incorporó al Grupo Eurome-dia Comunicación. Adquirió la condición de socio en el año 2000 y en la actualidad dirige la empresa matriz del grupo, que presta servicios de asesoría y asistencia técnica en comunicación, con una cartera anual de medio centenar de clientes y responsabilidad directa sobre un equipo de 30 profesionales.

Miguel Ángel Robles Gómez Periodista y Consultor, Socio-Director de Euromedia Comunicación

“En el Colegio aprendí que no hay ningún patrimonio más valioso que el conocimiento y la integridad”

“El proyecto educativo actual mantiene todo

aquello que yo conocí, incorporándole

algunas mejoras importantes, como el

bilingüismo”


211

mérito intelectual y dan más importancia al conocimiento y a la honestidad que al dinero, las relaciones sociales o el apellido. Yo, en el Colegio, aprendí a valorar a las personas por cómo se comportan y por lo que saben, es decir, por lo que son, nunca por lo que tienen o por el puesto que ocupan o por de quién son hijos. Como en el anuncio, no es lo que tengo, es lo que soy. (...) Por resumirlo, en el Colegio com-prendí que no hay ningún patrimonio más valioso que el conocimiento y la integridad”. SOBRE TODO, UN NOMBRE PROPIO. ”Yo siempre he creído que las empresas son sus personas, y, en el caso de un Colegio, muchísimo más. Y yo tuve magníficas personas enseñándome. De pequeño, quise mucho a D. Miguel Tejero, D. Juan Francisco, Dª Maria Estela, D. Gabriel, Dª Maribel, y D. Joaquín García Gallego, a los que siempre llevaré en mi corazón. Sólo puedo decir que no me imagino que un niño pueda recibir un ejemplo mejor que el que yo recibí de todos ellos. En cuanto al Bachillerato ya he señalado que tuve profesores de una envergadura intelectual como luego no he tenido en mis estudios universitarios. Pero, como también he dicho ya, para mí el Colegio tiene un nombre propio principal, que es el de D. Luis Rey Romero”.

UN INMENSO PRIVILEGIO. ”En mi clase, había gente intelectualmente extraordinaria. Me gustaría mencionar a un compañero que desgraciada-mente ya no está con nosotros y con el que tuve el inmenso privilegio de compartir banca un curso. Se trata de Fernando Manzanares, el tipo más desconcertantemente inteligente que nunca he conocido. Recuerdo como si fuera ayer cuando D. Bernardo, en una clase de química, lo sacó a la pizarra y le puso un problema. Fernando se quedó clavado en el suelo, sin mover un dedo, como si no tuviera ni idea, y la gente ya empezó a pensar que en efecto no la tenía. Pero yo lo conocía bien, y sabía que estaba haciendo el problema mentalmente e iba a plantar el resultado final en la pizarra, que fue exactamente lo que hizo. D. Bernardo le obligó a desarro-llarlo por escrito y en efecto el resultado final era el que inicialmente puso. Gracias a Fernando y otros muchos compañeros, aprendí otra cosa que me ha resultado útil en la vida: que siempre hay alguien con más talento que tú, y que la actitud más inteligente con esas personas es admirarlas, acercarse y aprender de ellas y trabajar todo lo posible para llegar a su nivel”.

ESCRITO EN LA FRENTE. ”Aparte de gente muy brillante, en el Colegio me encontré muy buenas perso-nas. Mi mejor amigo, el único al que llamo todas las semanas esté lo liado que esté, es del Colegio. Pero no es la única amistad que conservo, de hecho la gente con la mejor me lo paso y más a gusto estoy es del Colegio. Mi mujer dice que los del San Francisco de Paula llevamos escrito en la frente que somos del Colegio”.

UN BOCADILLO POR LOS AIRES. ”Recuerdo que, con seis o siete años, D. Miguel Tejero me dio dinero para que fuera a comprarle al bar de Emilio un bocadillo. Aquello era una muestra de gran confianza, y yo estaba al tiempo feliz y abrumado por la responsabilidad. Mi mala suerte fue que cuando volvía a clase por el patio unos niños se me echaron encima, y el bocadillo y yo rodamos literalmente por el suelo. Hoy, con gran remordimiento, confieso que lo que hice fue recoger el bocadillo, recomponerlo, y dárselo sin decirle una palabra. Sé que estuvo muy mal no contarle la verdad. En mi descargo, diré que, si no me presenté en clase con las manos vacías, sin el dinero y sin el bocadillo, fue por no defraudarle en la confianza que me había regalado”.

NO SÓLO BILINGÜISMO. ”Pienso que el proyecto educativo actual mantiene todo aquello que yo conocí, incorporándole algunas mejoras importantes, como el bilingüismo, y lo compruebo por mis dos hijos, que estudian en el Colegio, aunque el pequeño aún está en la Escuela Infantil. Creo que Luis Rey Goñi tuvo una gran visión cuando decidió apostar por los idiomas, y la ha vuelto a tener ahora incorporando méto-dos y sistemas contrastados internacionalmente”.

“Aparte de gente muy brillante, en el Colegio me encontré muy buenas personas. Mis mejores amigos son compañeros de entonces”

212

Estuvo solo un año en el Colegio, el de COU, y a pesar de ello dice que pasar por el San Francisco de Paula le cambió la vida, pues varió su mentalidad y la forma de ver las cosas. Aquel año fue muy duro para ella, pues venía de dos años en Utrera de huelga por parte del profesorado de su Instituto en los que apenas si dio clase. Por ello, el entonces Director, D. Luis Rey Romero, le auguró que seguramente repetiría curso, debido al nivel tan bajo que traía. Sin embargo, aquellas palabras de sirvieron de estímulo, y logró aprobarlo todo, “gracias en parte a todo el apoyo que recibí allí”. Piensa que en el Colegio aprendió a ser constante, a esforzarse y a no hacer chapuzas, y considera que fue clave para su carrera. Quizás por eso, hoy tiene a sus tres hijas en el Colegio y es Vocal de la Junta Directiva de la Asociación de Antiguos Alumnos. Desde esa perspectiva actual, destaca positivamente el cambio del Colegio, en tecnologías y en idiomas. En este sentido, valora especialmente que los alumnos aprendan desde pequeños con profesores nativos y estén tan acostumbrados a hablar inglés, “como a sumar y restar”.

UN AÑO QUE CAMBIÓ SU VIDA. “Yo ingresé solo un año, el de COU, y en realidad fue idea mía, yo vivía entonces en Utrera pero en mi instituto hubo dos años de huelga por parte del profesorado, por lo que prácticamente solo di el 20% de las clases que debería haber dado. Así que perdí dos años de estudio, me sentía inculta y para solucionarlo decidí venirme a estudiar COU a Sevilla. Mis padres estuvieron indagando

cuáles eran los mejores colegios de la ciudad, entre los que estaba el San Francisco de Paula. Así que solo fue un año, pero fue un año muy duro. Para poder entrar en el colegio a hacer COU tuve que hacer un examen y una entre-vista y desde el principio me di cuenta del nivel que había, menos mal que los profesores me ayudaron bastante. En relación a mi otro instituto había muchísimas diferencias, pero no solo de nivel, sino en la forma de dar las clases y en la mentalidad. Pasar por el San Francisco de Paula me cambió la vida, porque me cambió la mentalidad y la forma de ver las cosas”.

n Licenciada en Farmacia por la Universidad de Sevilla en 1986.

n Doctora en Farmacia por la Universidad de Sevilla desde 1992.

n Su trayectoria profesional siempre ha estado centrada en la investigación y vinculada con la Universidad de Sevilla, donde actualmente es profesora titular e imparte clases de Microbio-logía en la Facultad de Farmacia y en estudios de postgrado.

n Durante dos años trabajó para el Centro Nacional de Biotecnología del CSIC en Madrid.

n En 1996 recibió una beca de la CEE que le permitió trasladarse a Francia y continuar su labor en el Centro Nacional de InvestigaciónCientífica (CNRS).

n Ha dirigido numerosos proyectos de in-vestigación obtenidos mediante financiación pública o contratos con empresas.

n Actualmente ha iniciado una nueva línea de investigación sobre la enfermedad celíaca con el grupo que dirige en la Universidad de Sevilla, siendo dos veces premiada por la Asociación de Celíacos de Madrid.

n Miembro fundador y vocal de la Junta Di-rectiva de la Sociedad Española de Enfermedad celíaca desde 2007.

n Autora de más de treinta artículos publi-cados en revistas científicas y coautora de un libro. Además, es la inventora de tres patentes, una de ellas internacional.

Carolina Sousa MartínProfesor Titular de la Universidad de Sevilla

“Pasar por el San Francisco de Paula me cambió la vida, porque me cambió la mentalidad y la forma de ver las cosas”

“Soy investigadora y fue en los laboratorios

del San Francisco de Paula donde se forjó ese espíritu

científico. Allí me hacía preguntas y me planteaba respuestas

a nivel científico”


213

MARCA LA DIFERENCIA. “Es un Colegio que marca la diferencia en esta Comunidad Autónoma por la mentalidad hacia la constancia, el esfuerzo y el saber hacer y además por la proyección que tienen los estudios hacia fuera, hacia la vida real”.

LECCIONES. “En el Colegio aprendí a ser constante, a esforzarme y a no hacer chapuzas. Yo estoy segura de que si me hubiera quedado en mi pueblo no hubiera terminado estudiando Farmacia”.

MENTALIDAD MÁS PLURAL Y TOLERANTE. “Por supuesto que percibí la pluralidad, el Colegio también se caracteriza por eso, por la tolerancia tanto en aspectos políticos, como religiosos, como de razas. Allí hay gente de mu-chos países que ayudan a los alumnos a tener una mentalidad más plural y tolerante. Como yo era de Ciencias, mis asignaturas preferidas no podían ser otras que biología, química y matemáticas. Además tuve unos magníficos profesores y allí te permitían hacer prácticas en el laboratorio, cosa que en otros centros era impensable. Mi profesor de biología, D. Guillermo Rey, y su mujer Dª Pilar fueron los que más me influyeron”.

ESPÍRITU CIENTÍFICO FORJADO EN LOS LABORATORIOS. “El Colegio me influyó en mi carrera, sobre todo, porque además de profesora de la Universidad de Sevilla, soy investigadora y fue en los laboratorios del San Francisco de Paula donde se forjó ese espíritu científico. Allí me hacía preguntas y me planteaba respuestas a nivel científico. Anteriormente yo casi no sabía ni lo que era la Ciencia, pero en el San Francisco no sólo te aportan mentalidad científica sino también en Letras o filosofía, te hacían pensar en todas las asignaturas”.

ERRÓNEA PREDICCIÓN. “Recuerdo a D. Luis Rey Romero, el padre del actual Director, que el día de mi entrevista de acceso me dijo que no iba a aprobar COU, ni selectividad y que seguramente repetiría curso, debido al nivel tan bajo que traía. Y aún así, lo aprobé todo, gracias en parte a todo el apoyo que recibí allí, además aquellas palabras me sirvieron de estímulo”.

VINCULACIÓN ‘ABSOLUTA’. “Tengo tres hijas y las tres están en el San Francisco de Paula: una en 1º de Bachillerato, otra en 6º de Primaria y otra en 3º. También soy Vocal de la Junta Directiva de Antiguos Alum-nos, para intentar de alguna forma, mejorar las cosas y que tanto mis hijas como todos los alumnos de este colegio reciban la mejor educación y las mejores enseñanzas. Por lo que mi vinculación con el Colegio es absoluta”.

COMPAÑEROS. “Sí, he mantenido el contacto con varios compañeros, todavía guardo amistad con algunos de ellos y nos seguimos viendo de vez en cuando. (…) De mi promoción salieron Directores de varias empre-sas y en Medicina también han destacado varios compañeros”.

HABLAR INGLÉS, COMO SUMAR O RESTAR. “El Colegio ha cambiado desde que yo estudié muchísimo. Una de las grandes cosas que ha hecho el actual Director incumbe a la asignatura de inglés. Los alumnos apren-den este idioma desde los tres años con profesores nativos para todos los niveles; así que para ellos hablar inglés es como saber sumar o restar, lo ven algo natural. Mis hijas ven la televisión en inglés. Y en tecnolo-gía también está todo a punto, el hecho de que el Colegio sea un edificio antiguo no significa que no esté al día en este campo, los padres por ejemplo, pueden ver las notas de sus hijos por Internet”.

MANTENERSE COMO AHORA, QUE NO ES POCO. “Mi consejo es que se mantenga como hasta ahora, que no es poco. Que mantenga el espíritu de excelencia en el esfuerzo y en la constancia. Tienen que seguir haciendo el trabajo bien hecho, independientemente de los que estén a su alrededor”.

LA DIFERENCIA. “Al San Francisco de Paula le diferencia la profesionalidad de los alumnos que salen de allí. A ser profesional no se aprende de un día para otro, se aprende desde la infancia con la constancia y el afán de superación”.

“Una de las grandes cosas que ha hecho el actual Director incumbe a la asignatura de inglés. Para los alumnos actuales hablar inglés es como saber sumar o restar, lo ven algo natural. Mis hijas ven la televisión en inglés”

214

Manuel Hidalgo Jiménez cursó todo el Bachiller y el COU en el San Francisco de Paula. Corrían los florecientes años 80, años de movida y de apertura, pero también años convulsos en lo político. Entre sus aulas, trabó una de esas amistades que con el tiempo se consideran decisivas: conoció al que más tarde sería Director del Colegio, D. Luis Rey Goñi, y que también llegaría a ser testigo en los dichos de boda y padrino de su hija mayor. Gracias a esta amistad, Manuel Hidalgo conoció en profundidad el Colegio (fue, de hecho, uno de los fundadores de la Asociación de Antiguos Alumnos, y miembro durante 10 años de su Junta Directiva) y a la propia familia Rey-Goñi, con la que mantiene estrechos vínculos. “Luis Rey Romero es la mejor persona que he conocido”, sostiene este empresario, Director General de Aplei, al referirse al padre del actual Director, de quien guarda recuerdos únicos.

UN ESFUERZO QUE NUNCA PODRÁ AGRADECER DEL TODO. “Entré en el Colegio con 14 años, cuando corría el año 1980. Cursé todo el Bachillerato y el COU. El Colegio en el que había realizado la EGB no tenía Bachiller, así que mis padres se informaron sobre los mejores colegios que había en Sevilla. Les recomendaron el San Francisco de Paula. Para ellos fue un esfuerzo económico considerable, que nunca dejaré de agradecerles. Esfuerzo

económico que se vio recompensado con creces más tarde, ya que adquirí una formación y un bagaje cultural que me han acompañado durante to-dos estos años. Mi hermano Jose también cursó estudios en el Colegio, así como mis dos hijas, y, actualmente, también los hijos de mi hermano”.

APORTAR A LA SOCIEDAD. “¿Los valores del Colegio? Tolerancia, o llá-malo respeto, y esfuerzo. Un respeto y esfuerzo que se predicaba desde el ejemplo, ya que esos eran los principios que guiaban la actitud personal de D. Luis Rey Romero y Dª Maribel Goñi, y los que hoy gobiernan la gestión de D. Luis Rey Goñi. A los valores de respeto y esfuerzo, yo añadiría, en mi opinión, un tercer valor: compromiso social. El Colegio, en cierto modo, te traslada el mensaje de que hemos sido afortunados con lo que nos ha tocado vivir, nuestro entorno familiar, una formación de calidad, posibi-lidades de futuro, y una vez que salimos del Colegio debemos esforzarnos por intentar devolver a la sociedad todo lo que ésta nos ha reportado”.

ESCUELA-FAMILIA, UN BINOMIO NECESARIO. “Siempre he creído que el fomento de los valores no es un patrimonio exclusivo de la escuela. Uno trae unos valores de la familia, y la escuela lo que hace es reforzar o

n Con formación orientada a la Adminis-tración y Gestión de Empresas, ingresó muy pronto en Aplei, la compañía fundada por su padre, a la que lleva vinculada desde hace más de 25 años.

n Ha cursado diversos masters y cursos es-pecializados en gestión y coaching. Dentro de su compañía, desarrolla programas espe-cíficos de coaching para nuevos talentos.

n Desde 2006, es Director general de Aplei, compañía especializada en fabricación de material eléctrico para uso industrial líder nacional en el mercado del material eléctri-co para atmósferas con riesgo de explosión (ATEX).

n Precursor de la Asociación de Antiguos Alumnos Rey Guerrero, y miembro de su Junta Directiva durante 10 años.

Manuel Hidalgo JiménezEmpresario, Director General de Aplei

“D. Luis Rey Romero es la mejor persona que he conocido”

“En mi caso, tanto la familia como el

Colegio me han inculcado valores muy

parecidos: el sentido de la disciplina,

la constancia, la necesidad de dar a la vida un sentido ético,

por encima del todo vale”


215

reafirmar esos valores. Tiene que haber necesariamente una buena conjun-ción entre familia y escuela, para que dichos valores encajen. En mi caso, tanto la familia como el Colegio me han inculcado valores muy parecidos: el sentido de la disciplina, la constancia, la necesidad de dar a tu vida un sentido ético, por encima del todo vale”.

RESPETO Y TOLERANCIA. “Una de las cosas que siempre me han parecido muy gráficas del respeto y la tolerancia del ideario del Colegio fue el hecho de que, por encima de las creencias religiosas personales de la familia Rey, siempre mantuvieron un escrupuloso respeto por la libertad confesional. También por la libertad de los propios docentes: te encontrabas con profe-sores con posicionamientos políticos muy distintos (algunos te hablaban de Semana Santa y otros te animaban a leer a Lenin). Y todos se mostraban enormemente respetuosos con los alumnos. El Colegio rompía todos los arquetipos de un colegio privado”.

D. LUIS REY ROMERO, LA MEJOR PERSONA QUE HE CONOCIDO. “Tengo que distinguir entre mi época como estudiante y mi largo periodo de relación con el Colegio que se inició a partir de mi salida. De mi época de estudiante, recuerdo con especial cariño a D. Luis González, descubrién-donos la Literatura del Siglo de Oro, a D. José María Garrido, retransmi-tiendo en directo el primer encuentro de Cristóbal Colón con los Reyes Católicos, a D. Miguel Fernández de los Ronderos, y sus cassettes…. Pero por encima de todos, a D. Luis Rey Romero. Su ejemplo me ha marcado para siempre”.

AMIGOS, CASI HERMANOS. “Mi relación con el Colegio, como he dicho, excede lo convencional gracias a la amistad que me une con el actual Director. D. Luis y yo estudiamos juntos, hicimos el servicio militar juntos en Tablada. Él fue testigo de mis dichos de boda, y es padrino de mi hija mayor. Después de mi her-mano, es lo más parecido que tengo a un hermano. Nuestra relación me llevó a implicarme decididamente en la Asociación de Antiguos Alumnos, en cuya redacción de estatutos participé. Estuve presente en los diez primeros años de su Junta Directiva, lo que me permitió conocer el Colegio desde una perspectiva mucho más global. También a numerosos ex alumnos, que acabaron convirtiéndose en amigos. Manten-go muy vivo en el recuerdo de Julio López Mejías, con quien, a pesar de la diferencia de años, trabé una amistad entrañable. Gente como Pedro Castro, Julio López, Rafael Lago, Francisco Repetto, Andrés Bene-roso, Jesús Calvillo, Enrique Becerra, Carlos Rojas… Compañeros de promoción como Álvaro Pastor o Paco Lobo, a los que he vuelto a ver. Pero si tengo que hablar de amigos del Colegio, de amigos a los que siento más bien como familia, tengo que señalar además de a Luis, a Germán González Antón, a Jorge Lobo y a Juan Carrasco”.

GENTE ANÓNIMA PERO VALIOSA. “Del Colegio ha salido mucha gente eminente, empezando por mi pro-pio compadre, D. Luis Rey Goñi. He tenido oportunidad de tratar con alcaldes, embajadores, magistrados, investigadores, importantes empresarios… Pero también he conocido a muchos que, sin ser tan célebres no tienen nada que desmerecerles como personas. Gente, sin ir más lejos, como Juan Parrilla o Polvillo, a los que todos recordamos con enorme cariño”.

LA SUCESIÓN. Por encima de anécdotas, creo que la vivencia personal de la que puedo dar un testimonio más cercano y valioso es la época en la que se produce el traspaso de la Dirección de ‘Luis padre’ a ‘Luis hijo’. Fue un momento importante para el Colegio, crítico si me apuras, en el que D. Luis Rey Romero se enfrentaba a una doble preocupación: la relacionada con el Colegio y su futuro, al entregarlo a su hijo, y la relacionada con su propio sentimiento de padre, en el sentido de que era consciente de la responsabi-lidad que implicaba aquella gran carga, las noches en vela que iban implícitas en el legado y el cambio esto iba a producir sobre la vida de su hijo. El tiempo nos ha demostrado que aquella sucesión se hizo de forma impecable y exitosa”.

“Te encontrabas con profesores con posicionamientos políticos muy distintos. Y todos, independientemente de su posicionamiento, se mostraban enormemente respetuosos con los alumnos. El Colegio rompía todos los arquetipos de un colegio privado”

216

Entre los antiguos alumnos del San Francisco de Paula hay un productor y Director de cine galardonado con una Concha de Oro, varios premios Goya, y cuyas producciones han estado presentes en los principales festivales del mundo: Berlín, Cannes, Venecia, Toronto, Karlovy-Vary, Tokio, Tesalónica, etc. Gervasio Iglesias recuerda que al acabar COU y recibir la nota de Selectividad se fue con un grupo de compañeros a celebrarlo, e hicieron un juego: escribir en un papelito el sueño que querían cumplir de mayores. El deseo que él apuntó fue hacer una película antes de llegar a los 35 años. Y lo logró con creces. En eso, en luchar por cumplir los sueños y saber que el trabajo duro hace que se cumplan, considera que la educación recibida en el Colegio fue fundamental para él. Del Colegio aprendió eso y otra cosa que considera aún más importante en su vida: saber escuchar. Sin esa enseñanza cree que no hubiera conseguido pasar de la primera película, ni tampoco educar a su hijo.

UNA VENTANA ABIERTA AL MUNDO. “Ingresé creo que en el año 1980, porque mi padre había sido Antiguo Alumno. (...) Creo que era un buen estudiante, tenía facilidad para el estudio y sobre todo mucha curiosidad. Siempre me han gustado las historias que cuentan hechos importantes y la mayoría de asignaturas son una ventana abierta al mundo que te hace ampliar tus perspectivas como persona”.

PALABRAS PARA DEFINIR LA PERSONALIDAD DEL COLEGIO. “Responsabilidad, exigencia, autoestima, libertad, exquisitez, liderazgo, continua evolución para la mejora. Esas son las que escogería”.

SOBRE TODO, SABER ESCUCHAR. “El Colegio me enseñó, sobre todo, a saber escuchar, comprender y respetar a los demás. Algo tan básico pero tan difícil y necesario como esto, pero a la vez tan difícil de enseñar y aprender. Para mí ha sido el principal equipaje en mi mochila a lo largo de toda mi vida. Algo entre otras cosas imprescindi-ble para el trabajo en equipo. Yo me dedico al cine, donde los equipos los forman más de doscientas personas con fuertes personalidades artísticas. Si no hubiera aprendido esto en el Colegio, creo que no hubiera conseguido pasar de la primera película. Pero también creo que no hubiera sido capaz de educar a mi hijo en la forma en que lo he educado y que creo que ha dado como resultado una gran persona”.

EL 23 F. “Mi paso por el Colegio coincidió con la época álgida de la transición. Era una época en la que pasaban muchas cosas y aunque éramos demasiado jóvenes para comprender la dimensión de lo que estaba pasando, había cierto nivel de debate. Aunque lógicamente muy ingenuo. Se notaba también que una buena parte del profeso-rado estaba comprometida con la necesidad de un cambio de progreso y paz hacia la democracia. En mi etapa de estudiante vivimos un día muy tenso, el 23-F, hoy en día bien conocido, pero que alteró la vida normal del país y por supuesto del Colegio no sólo en ese día sino en los posteriores. Recuerdo que el 24 los profesores nos llevaron a dar la clase en el salón de actos viendo el telediario, pues ya eran conscientes de que se estaba produciendo un hecho histórico y debíamos vivirlo en primera persona (los pocos que ese día fuimos a clase, claro). Creo que fue una decisión muy acertada y que habla de lo bien que siempre se han hecho las cosas en el Colegio”.

n Estudios de Filosofía y CinematografíaRealizador en TVE y en Tele-Expo (Expo 92).Director y productor ejecutivo de La Zanfoña Producciones, en la actualidad.

n Miembro de la Academia de Cine de EspañaProductor de numerosos largometrajes y docu-mentales, así como de numerosos programas de Televisión y series de Ficción para TV.

n Sus producciones han estado presentes en los principales festivales del mundo: Berlín, Cannes, Venecia, Toronto, Karlovy-Vary, Tokio, Tesalónica, etc.

n Galardonado con una Concha de Plata, va-rios premios Goya, así como otros importantes premios nacionales, y más de 40 premios Internacionales en países como Francia, Ale-mania, USA, Australia, China o Brasil.

Gervasio Iglesias MacíasDirector y Productor Ejecutivo de La Zanfoña Producciones

“Sin el aprendizaje del Colegio no hubiese conseguido pasar de la primera película”


217

RECUERDO GRATO DE TODOS LOS PROFESORES. “Guardo muy grato recuerdo de todos los profesores, y de hecho me sigo viendo con algunos. Pero puestos a destacar, sigo recordando las excelentes clases de D. Amadeo Gómez (física), D. Juan Manuel Infante (lengua), Sr. Fernández Liencres (filosofía), Dª. Maribel Goñi (francés) y D. Francisco Gómez (geología)”.

COMPAÑEROS Y AMIGOS. “Un grupo de aproximadamente 15 compañeros nos solemos ver con frecuencia, en muchos casos también por relaciones laborales y estamos al tanto de cómo nos va la vida. Me gustaría recor-dar a un buen amigo que ya no está con nosotros, Ricardo Mejías, con el que compartí no sólo el BUP y el COU sino también la EGB en la Escuela Francesa. (…) También me gustaría destacar un excelente amigo, cuya amistad se fraguó en las aulas y que hoy permanece absolutamente viva y creo que con mucho respeto y admiración mutua, y que no es otro de D. Luis Rey Goñi. Fuimos compañeros en los cuatro años que coincidimos en el Colegio, siempre fue un excelente compañero de todos y creo que ha dado al Colegio una presencia y proyección no solo local, sino internacional, que demuestra sus características de emprendedor e incansable trabajador”.

TRABAJAR PARA CUMPLIR LOS SUEÑOS. “Yo tenía muy claro que me quería dedicar al cine, aunque no sabía muy bien cómo hacerlo, en esa época no había facultad en Sevilla y mis padres no querían que me fuera a Madrid a estudiar esa carrera, así que después de salir del Colegio me tuve que buscar bastante la vida para hacer lo que quería. Lo que sí es verdad es que toda la formación que recibí y el aprendizaje ético ante la vida me ayudaron muchísimo, como dije antes. Recuerdo que cuando acabamos COU y nos dieron la nota de Selectividad, nos fuimos un grupo a celebrarlo, y allí hicimos un juego, escribimos en un papelito el sueño que queríamos cumplir de mayores. Yo recuerdo que escribí hacer una película antes de cumplir los 35 años. Y lo cumplí con creces. En esto, en luchar por cumplir los sueños y saber que el trabajo duro hace que se cumplan, la educación recibida en el Colegio fue fundamental”.

SOSPECHOSO APAGÓN. “Recuerdo muchísimas anécdotas y muy divertidas. Quizás de la más divertida fue la fiesta que organizamos en COU para recaudar fondos para el viaje fin de curso. Nos unimos varios grupos (¡a cuál peor!) para tocar un concierto en el salón de actos. Nuestro repertorio llevaba temas algo pop (Radio Futura) pero muchos muy punks (¡versiones de Siniestro Total!). Justamente en mitad de una de ellas la luz del escenario se fue y hubo que suspender el concierto. La versión oficial fue que con tanto decibelio saltaron los plomos, pero nosotros siempre pensamos que teníamos ya hartos del ruido a todo el mundo y nos cortaron la luz. Fue todo muy divertido. Y ese viaje a las Islas Canarias, inolvidable”.

LA MEJOR EDUCACIÓN PARA MI HIJO. “Fui un padre bastante precoz e ingresé a mi hijo Mario desde el primer curso en el Colegio, no tuve ninguna duda de que iba a ser el sitio donde recibiera la mejor educación, como así ha sido. De hecho fui el primero de mi clase en tener un hijo, por lo tanto hubo una continuidad inmediata. Ahora que mi hijo ya ha acabado (está en 4º de Arquitectura) mantengo el con-tacto a través de los boletines y del MENDRUGO, y siempre que puedo y paso por allí, pues vivo cerca, si tengo tiempo entro y me asomo al patio. Me gusta recordar el tiempo pasado allí”.

INNOVACIÓN CONSTANTE. “Creo que es el Colegio de Sevilla que más se ha adaptado al uso de las nue-vas tecnologías y que constantemente innova para ofrecer una educación de alto nivel. Creo que a nivel general, y porque estoy directamente vinculado, estamos en la sociedad del audiovisual y el Internet, y creo que habría que potenciar la formación en este sentido sin descuidar el resto. (…) Mi recomendación para el futuro es que sigan en la misma línea. Lo que está bien hecho sólo debe retocarse para mejorar, y en ese sentido el Colegio es un ejemplo de inteligencia y buen gobierno. Si mantienen sus valores siempre serán (seremos, me incluyo) los primeros”.

IMPLICACIÓN DEL PROFESOR. “El aspecto clave que diferenciará a las mejores instituciones educativas es el compromiso del profesor hacia el alumno. Que el profesor no sea un funcionario que viene a dar sus horas de clase y punto. Que el profesor se implique con el alumno, lo oriente, lo anime, lo estimule”.

“Creo que es el colegio de Sevilla que más se ha adaptado al uso de las nuevas tecnologías y más innova”

218

Estanislao Martínez estuvo cuatro años como interno en el Colegio, realizando el Bachillerato y el COU. Allí fue enviado por sus padres desde Villaverde del Río, pensando que con ello desarrollarían su capacidad de sacrificio y espíritu de superación. Estanislao cree que sus padres acertaron y recuerda precisamente que el primer regaño paterno de su vida llegó a instancias de D. Luis Rey Romero, quien comentó a su padre que su nota no estaba en el 7, y debía aspirar al 10, algo que él ahora repite a sus hijas. Así fue modelándose el carácter de este empresario, fundador y Presidente ejecutivo de AGQ Labs, compañía con presencia en más de 20 países, y que desarrolla su actividad en los sectores agroalimentario, medioambiental e industrial, ofreciendo servicios de laboratorios de control, asesoría especializada, inspección, y outsourcing tecnológico. En su trayectoria profesional considera que la influencia recibida por el Colegio ha sido muy importante, pues destacó en la asignatura en la que después fundamentó su Licenciatura y Doctorado, y sobre la que ha girado todo su desarrollo profesional y empresarial hasta la actualidad. Además, en el Colegio, en su condición de interno, aprendió a ser más independiente y a luchar contra la adversidad.

INTERNO CUATRO AÑOS. “Ingresé en septiembre 1980, estuve cuatro (BUP y COU), hasta 1984, y siempre como interno. Sin duda mis padres deseaban proporcionarme la mejor formación académica y educación posible, e interno, porque, más allá de la distancia que había de mi pueblo (Villaverde del Río) a Sevilla, en cierta forma pensaron (y creo que acertaron) que contribuiría a desarrollar mi esfuerzo personal, responsabilidad y capacidad de sacrificio.

UN EJEMPLO QUE REPITE CON SUS HIJAS. “Creo que fui buen estudiante, aunque en aquella época algo cómodo y conformista. El primer gran regaño paterno de mi vida fue precisamente a instancias de D. Luis Rey, quien co-mentó a mi padre que yo no era de 7 ni 8, que mi sitio era ser de 10 (ufff, fue terrible e inolvidable, aún hoy sigo utilizando este ejemplo con mis hijas)”.

VALORES. “El fomento del sacrificio y desarrollo personal (con disciplina) y la convivencia en un entorno abierto de respeto a las ideas de los demás son las señas de identidad fundamentales del Colegio. (…) Además de estos valo-res, y por estar interno tantos años, el Colegio me proporcionó independencia y el afán por superar siempre la adversidad”.

PLURALIDAD. “La convivencia de ideas distintas que siempre ha caracteriza-do al Colegio la percibí muy especialmente, ya que fueron años (1980-1984)

n Doctor en Ciencias Químicas, Universi-dad Autónoma de Madrid.

n MBA Master en Dirección de Empresas, Finanzas y Control de Gestión, impartido por la Universidad de Deusto, Instituto Internacional de Dirección de Empresas. INSIDE. (1990-1991) y Alta Dirección Empresas Alimentarias. ADECA. Instituto Internacional San Telmo, Sevilla. (2004).

n Fundador y Presidente Ejecutivo (C.E.O) de AGQ Labs & Tech. Corporate y Solea Te-chnological Holding y consejero en varias empresas agroalimentarias.

n Profesor colaborador en el Dpto. de Química Agrícola, Edafología y Geoquí-mica. Universidad Autónoma de Madrid y Ponente en diversos seminarios y congresos Técnicos especializados en Química Agroa-limentaria y Medioambiental.


“Como en toda empresa, lo que

garantizará el futuro del Colegio es

mantener lo que le ha hecho ser especial y diferencial, su visión

y sus valores; aunque indudablemente

adaptándose continuamente a los

cambios del entorno”

Estanislao Martínez MartínezQuímico y Empresario

“El primer gran regaño paterno de mi vida fue a instancias de D. Luis, quien comentó a mi padre que no debía conformarme con el 7”

219

de grandes cambios políticos, de ruptura de barreras ideológicas y si cabe de visiones dispares donde también existían, con frecuencia, los extremismos”.

RECUERDOS DEL INTERNADO. “Conservo muchos recuerdos y de todo tipo, aunque siempre prevalecen los buenos. Fueron cuatro intensivos años en la medida en la que como dije estuve interno, de ahí que no solo conserve ex-traordinarios recuerdos vinculados a la parte docente o académica: profesores, alumnos, anécdotas de clase, excursiones, etc.; sino también, por el internado: el temor a que tras los viernes llegase el domingo por la tarde (aún hoy sigo sin soportar el ‘carrusel deportivo’, señal que significaba tomar el autobús de mi pueblo para ir al colegio), los castigos nocturnos en el patio de las colum-nas (aunque en verano siempre apetecía un ‘ratito de noche’ por el calor), las batallas campales en las habitaciones, D. José Manuel Escamilla o D. Juan Francisco, al levantarnos con palmas a diario, y en general los buenos compañeros y amigos que por el camino se hicieron y con quienes, hoy, 26 años después, sigo manteniendo un excelente contacto”.

UN ALTAVOZ, A CAMBIO DEL ESPAÑA-MALTA. “Conservo muchas anécdotas, algunas no tan buenas (fui el único interno que no pudo ir en vivo al partido épico España-Malta porque me castigaron por algo que no hice) que aún hoy lamento, y otras, muchas, extraordinarias; así como alguna “trastada” que nuestro amigo Polvillo y Rufino aún recordarían si les contase. Debo decir que posiblemente aún estén buscando a los responsables de las mayores trastadas de la época. Como un pequeño detalle a mi amigo Luis (Rey Goñi), por este medio, le diré que el altavoz derecho del televisor de la sala de los internos de COU, que creo fue la tele de los anteriores 30 años del Colegio, lo tengo en casa de recuerdo. Y francamente no sé cómo llegó a mí. En fin, lo conservo a cambio de lo del partido de España-Malta”.

DOCENTES. “Creo que en mayor o menor medida todos los profesores, académicamente hablando, me marcaron, y considerando además la parte personal, más especialmente D. Luis Rey y D. Bernardo”.

ANTIGUOS COMPAÑEROS. “Conservo la amistad con todos aunque no tanto el contacto. A lo largo de estos 26 años se pierde el contacto con muchos y te reencuentras con otros, pero el núcleo de internos que entonces conformamos seguimos habitualmente en contacto. (…) En mi etapa tuve muchos compañeros especialmente brillantes que después han desarrollado una excelente trayectoria profesional aunque quizás con menor impacto mediático (médicos, ingenieros, etc..), y otros que aunque no fueron tan brillantes estudiantes sí han tenido un desarrollo profesional o empresarial diverso también de éxito”.

INFLUENCIA ACADÉMICA. “El Colegio me influyó decisivamente en la elección de la carrera, ya que destaqué en la asignatura en la que después fundamenté mi Licenciatura y Doctorado (CC. Químicas) y a la postre, sobre la que ha girado todo mi desarrollo profesional y empresarial hasta la actualidad”.

VÍNCULOS. “Quizás por haber estado fuera de Sevilla en una época (universitaria) y concentrado en la creación y desarrollo de nuestra empresa actual apenas tuve contacto institucional directo, pero sí mucho con compañe-ros y amigos que estudiaron allí, así como muy especialmente, y directamente con D. Luis Rey Goñi, compañero de profesión (químico y empresario) y amigo”.

EVOLUCIÓN. “Sé que el Colegio en todo momento intenta mantenerse a la vanguardia (tecnología, programas psicopedagógicos, métodos educativos, idiomas, etc.)”.

CLAVES PARA EL FUTURO. “Como en toda empresa, lo que garantizará el futuro del Colegio es mantener lo que le ha hecho ser especial y diferencial, su visión y sus valores; aunque indudablemente adaptán-dose continuamente a los cambios del entorno (global), hoy más dinámico y exigente que nunca. (…) Las instituciones educativas que destacarán en el futuro serán aquellas que contribuyan a desarrollar más las capacidades y los valores de los alumnos con un enfoque global. Respeto a los demás en su amplio senti-do, así como fomentar la flexibilidad, la tolerancia, el compromiso, el espíritu y la capacidad de sacrificio, la responsabilidad, la competitividad, la creatividad…”.

“En mi etapa tuve muchos compañeros especialmente brillantes que después han desarrollado una excelente trayectoria profesional”

220

Profesor de Marketing de la Universidad de Sevilla y Empresario, Evaristo Nogales asegura que su exitosa trayectoria profesional está muy influida por el Colegio, que le enseñó a enfrentarse a cualquier cosa sin miedos, y del que destaca, como valor clave, su tolerancia: “Es algo que yo siempre he apreciado mucho y por eso mis hijos están ahí”. Considera que hoy día el Centro ha sabido incorporar a sus valores tradicionales nuevos métodos que han ampliado el horizonte de posibilidades para los alumnos y a este respecto no duda en asegurar que, en el caso concreto del Colegio, las nuevas generaciones salen cada vez mejor formadas, porque a los conocimientos que ya se impartían ahora se unen los idiomas y nuevas habilidades y metodologías vinculadas a las nuevas tecnologías y la internacionalización.

DE MINAS DE RIOTINTO A SEVILLA. “Me matriculé por primera vez en el Colegio de San Francisco de Paula en septiembre de 1980 y allí permanecí unos nueve años. Yo vivía con mi familia en Minas de Riotinto pero debido a una enfermedad que padecía mi hermano nos trasladamos todos a Sevilla, de hecho fue mi hermano el que empezó primero en este Colegio. Y probablemente mis padres nos matricularon allí porque conocían que este Colegio era de referencia. Yo era un mal estudiante, pero del Colegio guardo muy buenos recuerdos, como cuando jugábamos en el recreo con una pelota de papel albal. Y mis asignaturas preferidas eran inglés porque me resultaba muy fácil, física con D. Luis, o historia con D. Manuel Benigno, porque para mí las asignaturas preferidas están ligadas a los profesores”.

TOLERANCIA, LA CLAVE. “Tolerancia, ese es el valor clave del Colegio que yo siempre he apreciado y por eso mis hijos están ahí. En el Colegio podía haber un compañero con una camiseta de AC DC y otro vestido de domingo y todos se respetaban. Además, el Colegio transmitía responsabilidad y curiosidad por las cosas, te enseñaban a buscar soluciones, para que el alumno pudiera aplicarlas, mientras que en la mayoría de los centros se quedan solo en lo superfi-cial. (…) Los principales valores que me inculcaron fueron el compañe-rismo y el respeto”.

DEBATE ABIERTO. “Sin duda se percibía la convivencia de ideas dife-rentes. Recuerdo un día en una clase de 2º de BUP con D. Eduardo en la que debatíamos sobre la reforma agraria. Allí había gente a la que le afectaba de forma directa y gente que se acercaba al partido comunista y no recuerdo que hubiera alguien que se exaltara o se peleara, el debate fue muy natural”.

n Licenciado en Empresariales (1996).

n Profesor Asociado de Marketing de la Universidad de Sevilla (1998 – actualidad).

n Consejero Delegado y Director de Giralda Televisión (2000 – 2003).

n CEO Metromedia Tecnologies Ibérica (2005 –2007).

n Director General de Publigrupo, Comunica-ción y Marketing (2003 – 2007).

n Socio de Ameisin Marketing (2007 – actua-lidad).

n Profesor invitado del master DIRCOMEI de la Universidad de Sevilla (2010 – actualidad).

n Socio de Walnuters (2011 – actualidad).

Evaristo Nogales CastillaEconomista, Profesor Universitario y Empresario

“En mi trayectoria profesional el Colegio me ha servido sobre todo para enfrentarme a cualquier cosa sin miedos”

“El Colegio transmitía responsabilidad y curiosidad por las

cosas, te enseñaban a buscar soluciones

para que pudieras aplicarlas”


221

PROFESORES. “Yo diría que D. Luis, D. Genaro, D. Adolfo y D. Javier Liencres fueron los profesores que más me influyeron.

NÚCLEO DE AMIGOS. “Hay algunos compañeros que forman parte de mi núcleo de amigos y a otros en los que a través de las redes sociales los veo una vez al año, de hecho (...), el año pasado quedamos todos los alumnos que cumplíamos cuarenta años y montamos una fiesta. Lo curioso es que parecía que habíamos terminado ayer las clases, a pesar de que todos habíamos cambiado mucho. (…) En ese grupo de amigos que conservo hay gente muy valiosa, como mi amigo Carlos O´Connor, que es un cirujano muy prestigioso. O por ejemplo, Manolo Ribera, que para mí es destacable por su gran nivel intelectual y sin embargo no es conocido”.

INFLUENCIA EN LA CARRERA. “En elegir estudiar lo que hago yo creo que el Colegio ha influido bastante y en mi trayectoria profesional me ha servido sobre todo para enfrentarme a cualquier cosa sin miedos”.

EL ZAPATO VOLADOR. “Anécdotas hay tantas…. Fueron nueve años. Por ejemplo, en clase de física, con D. Luis que para explicar el movimien-to de inercia se quitó el cinturón, y sin querer la hebilla dio contra la mesa y casi me da. Otra anécdota podría ser cuando mientras jugábamos en el patio, un compañero le dio una patada al balón tan fuerte que se le soltó el zapato y fue a parar a una calle cercana al colegio, mi amigo improvisó poniéndose una bolsa de basura en el pie. O cuando un profesor se quedaba dormido en clase y le cogíamos el libro que tenía entre las manos y le dábamos la vuelta y todos nos reíamos”.

VÍNCULOS ININTERRUMPIDOS. “Por una parte me apunté a la asociación del Colegio en cuanto se creó, aunque después no he sido muy afín. También tengo allí a cinco sobrinos y una hija, y mi segundo hijo también va a empezar en el San Francisco de Paula, y además, me une una buena amistad con el actual Director”.

NUEVOS MÉTODOS. “El Colegio que yo conocí estaba basado en los valores que antes he mencionado y ahora, aparte de esos valores que todavía conserva, se ha profesionalizado, ha introducido nuevos méto-dos y ha conseguido convertirse en un grupo profesional que lo hace muy bien, pues están al tanto de lo que se hace, lo estudian y lo incorporan. (…) Recuerdo que yo estuve como alumno cuando se celebró el Centenario del Colegio y el Director de entonces dijo que le gustaría vernos en el 200, ¡lo rápido que pasa el tiempo! Creo que lo principal para continuar es que se aferre a los valores que defiende porque si ser como es significa una fórmula de éxito, pues que no la cambie, que la adapte a los tiempos”.

NUEVAS GENERACIONES. “Yo creo que en el caso concreto de Colegio, los alumnos van a estar mejor formados que nosotros porque a los conocimientos que nosotros teníamos hay que añadir el conocimien-to de idiomas más el intercambio con estudiantes extranjeros, las nuevas tecnologías, la globalización,… Todo esto, el Colegio lo está incorporando seguro que mejor que cualquier otro en Sevilla”.

GENTE RESPONSABLE. “Fundamentalmente una institución educativa tiene que sacar gente que se haga responsable de su vida, su carrera, su formación; que no esperen que venga nadie a decirle esto es lo que tienes que hacer o estudiar hoy o mañana”.

“El Colegio ha introducido nuevos métodos y ha conseguido convertirse en un grupo profesional que lo hace muy bien, pues están al tanto de lo que se hace, lo estudian y lo incorporan”

222

Profesor, historiador, escritor, periodista, crítico taurino y fotógrafo, autor de ocho libros sobre Sevilla, Álvaro Pastor Torres entró en el Colegio para hacer el Bachillerato, y allí descubrió un paraíso de la libertad de pensamiento: “Cabíamos todos, sin distinción de credos religiosos ni de ideales”. Asegura que esos cuatro años en el Colegio fueron determinantes en la elección de su carrera, y que los recuerdos que guarda son imborrables y casi todos buenos, “salvo un 0,75 en el inefable examen de Góngora de D. Luis González”. Además de conservar buenos amigos de aquellos años, mantiene el contacto con el Colegio a través de la Asociación de Antiguos Alumnos y dice que está al día de lo que pasa por MENDRUGO y las noticias de la prensa.

OTRO PARADEÑO EN EL COLEGIO. “Yo entré en el curso 1980-1981, para hacer 1º de BUP. Al trasladarme del pueblo de Paradas, donde me crié y estudié la EGB, a Sevilla, mis padres siempre tuvieron claro que el colegio donde querían que cursara el Bachillerato era el San Francisco de Paula. Además había varios paradeños trabajando en él (Manuel Carrión, Parrilla…). Hice el examen de ingreso… que no me debió salir muy bien, porque acabé matriculado por si las moscas en el Santo Tomás de Aquino, que también estaba cerca de casa, pero al final pude entrar en el San Francisco. Estuve hasta el curso 1983-1984 en que hice COU. Mi promoción es la del actual Director, D. Luis Rey Goñi”.

RECUERDOS IMBORRABLES. “Mis recuerdos son imborrables y casi todos buenos, salvo un 0,75 en el inefable examen de Góngora de D. Luis González. Era un estudiante me-dianito que destacaba en las asignaturas que le gustaban (historia, arte, francés, lengua y literatura… Las de Letras, vamos) y las pasaba canutas en las que se le atragantaban (matemáticas, física y química o dibujo, donde la magnanimidad de Roberto Reina me salvaba. También me echó alguna mano en educación física D. Francisco Chaparro, pero no con-siguió jamás que saltara el potro). (…) En esos años fueron muchos los profesores que me marcaron. Es difícil personalizar, porque seguro que se van a quedar atrás unos cuantos. Pero desde luego no puedo olvidar a Dª Maribel Goñi, D. José María Garrido, D. Javier Liencres, Dª Ana Padilla, D. Juan Manuel Infante o los ya citados D. Luis González y D. Roberto Reina”.

EL PARAÍSO DE LA LIBERTAD DE PENSAMIENTO. “En el Colegio descu-brí un paraíso del liberalismo y de la libertad de pensamiento (…). Con la transición en ebullición aquello era un fiel reflejo de la sociedad. Había

n Licenciado en Geografía e Historia, espe-cialidad Historia del Arte, por la Universi-dad de Sevilla, es Profesor, historiador de Arte y de Sevilla, escritor, periodista, crítico taurino y fotógrafo.

n Como escritor, ha publicado ocho libros sobre Sevilla y tiene publicados más de cincuenta artículos en revistas de difusión nacional e internacional.

n Como periodista y fotógrafo ha colabora-do con diferentes medios de comunicación, en los ámbitos de la cultura, las artes, la Historia y los toros. Ha ilustrado también con sus imágenes el libro Historia de Sevi-lla, de Manuel Jesús Roldán. En su faceta de guionista de televisión ha firmado las series “Historia de Sevilla” y “Sevilla: siglo XX” emitidas en Sevilla TV.

“Mis padres siempre tuvieron claro que

el colegio donde querían que cursara el Bachillerato era el San

Francisco de Paula. Además había varios

paradeños trabajando en él”

Álvaro Pastor TorresProfesor, Historiador y Escritor

“Cuando entré en el Colegio, descubrí un paraíso de la libertad de pensamiento”


223

de todo, desde extrema derecha hasta posiciones de izquierda bastante radical. (…) Pero allí cabíamos todos, sin distinción de credos religiosos (desde ateos hasta cristianos convencidos pasando por muchos capillitas) ni de ideales’’.

MUCHOS AMIGOS Y AMIGAS DEL RECORDADO COU. “Con todo lo que allí viví es normal que quedaran buenos amigos. Y amigas del recordado COU. Como Sevilla es un pañuelo me encuentro a muchos, en especial con los que comparto cercanía de vecindad o aficiones (Semana Santa, los toros…). (…) Sobre los que han tenido una trayectoria destacada, me va a pasar lo mismo que con los profesores, que muchos van a quedar en el tintero. Pero bueno, empezando por D. Luis Rey Goñi, que parece que apunta alto. Manolo Hidalgo o Mariano Esteban con sus reconocidas empresas. Rafael Fernández, magistrado. Unos cuantos dan clases en la Universidad. Otros estamos en instituto. Hay profesionales muy cualificados: médicos, abogados, arquitectos, directores de cine, etc”.

VALORES. ‘‘Los principales valores que me inculcaron fueron tolerancia, respeto, libertad, igualdad (y no vamos a dejar atrás la fraternidad), esfuerzo, constancia y superación”.

MIL Y UNA ANÉCDOTAS. “Tengo muchas anécdotas, tantas que no ha-bría espacio aquí para contarlas: la bufanda de D. José María Ballesteros volando por la ventana camino de los tejados de Santa Inés; los cigarri-llos Winston que nos ofrecía en las excursiones D. Luis González, que esos días parecía otra persona; los crepes que hacíamos con Dª Maribel en el laboratorio durante las clases de francés ese grupo de ‘bichos raros de pueblo’ que no habíamos sucumbido a los cantos de sirena de la lenguas ‘bárbaras’; las críticas de Pedro Malpica en la revista sobre los bocadillos rellenos de polvo que vendía Emilio en el sótano; las tertulias capillitas con mayoría macarena; el primer día de clase en COU donde aparecían por primera vez las chicas…”.

EL CONTACTO CON EL COLEGIO. “Como no tengo hijos mi contacto más directo es con la Asociación Rey Guerrero en la que he presentado varios de mis libros en sus tertulias literarias. También voy algunas veces –menos de las que debiera- a saludar y tomar café con Dª Maribel y D. Luis. Y gracias a la revista MENDRUGO, que me llega por la red, o por las noticias que aparecen en prensa, estoy al día de lo que pasa. Pero cada vez que paso por la calle Alcázares o por esquina de Sor Ángela (bue-no, ahora la calle se llama Santa Ángela, pero para mí siempre será Sor Ángela) me acuerdo del Colegio y de los buenos ratos que pasé en él”.

UNA SOCIEDAD DISTINTA, UN COLEGIO DISTINTO. ”La sociedad es otra muy distinta a la de hace treinta años, por tanto el Colegio no puede ser el mismo. Esto no es ni bueno ni malo, sencillamente es una realidad. Una sociedad tan despiadada y competitiva como la que vivimos ahora demanda otros ritmos diferentes. (…) Esto se nota. Las nuevas generaciones saben más de informática y de idiomas que nosotros, eso seguro. A partir de ahí ya dudo que de gramática parda anden mejor que nosotros a esas edades. (…) Y creo también que la ciudad, su ciudad, Sevilla, la conocen peor que los de nuestra generación. Y eso que tienen el privilegio de pasar muchas horas en el centro. El mundo es muy grande, sí, pero su primer referente es la ciudad donde viven. Estados Unidos queda aún muy lejos’’.

SOBRE TODO, LAS PERSONAS. “La diferencia entre un colegio bueno y uno malo está fundamentalmente en las personas que enseñan en él y en las familias. Si la elección del personal es acertada y hay un buen ambiente familiar y una implicación, la educación extraordinaria se nota, en todos los aspectos, no sólo los académicos, también los que van más allá, que al final son los más importantes. Y los de mi pro-moción pueden dar fe que tuvimos muy buena suerte con los profesores. Y en mi caso, también con los Padres”.

“Cada vez que paso por la calle Alcázares o por esquina de Sor Ángela (bueno, ahora la calle se llama Santa Ángela, pero para mí siempre será Sor Ángela) me acuerdo del Colegio y de los buenos ratos que pasé en él”

224

Ingresó en el Colegio en el año 80, cuando su familia se trasladó a Sevilla desde Morón de la Frontera, y estuvo en él cuatro años, hasta su salida a la Universidad. Tiempo suficiente para que sus intereses se volvieran más amplios y extensos y para empezar a admirar a las personas que saben utilizar el conocimiento con inteligencia. De hecho, esos son los dos valores principales que dice haber recibido del Colegio: curiosidad y respeto al conocimiento. Valores que sin duda marcan su exitosa trayectoria profesional como experto en campos clave de la gestión empresarial como los procesos de e-learning, la facilitación del cambio o los sistemas de información y gestión del conocimiento. Tiene a sus cinco hijos en el Colegio.

ADAPTACIÓN. “Mi familia se trasladó a Sevilla desde Morón de la Frontera en los 80 y la elección del Colegio fue, en parte por la reputación que tenía, y en parte por la cercanía. (…) Al principio me costó bastante adaptarme. Era, y soy, una persona tímida y el entorno de los alumnos y del Colegio era muy diferente a lo que yo estaba habi-tuado”.

LA VERDADERA ARISTOCRACIA. “Exigencia, amabilidad, franqueza y cercanía son las palabras que escogería para resumir la personalidad del Colegio. (…) Del Colegio recibí por un lado curiosidad y por otro el respeto hacia el conocimiento. La curiosidad es algo que se puede (y debe) desarrollar y fue gracias a la educa-ción que recibí que mis intereses se volvieron más amplios y extensos. En cuanto al respeto al cono-cimiento, los que me conocen seguro que me han oído decir que desde mi punto de vista la verdadera aristocracia no es la de los títulos nobiliarios o la del dinero, es la es del conocimiento. Admiro y respe-

to a las personas que saben utilizar su conocimiento con inteligencia. Este surge de mi paso por el Colegio”.

PLURALIDAD DE PENSAMIENTO. “En mi época, los años 80, la con-vivencia y la tolerancia no era tanto hacia la religión, sino más bien hacia los distintos credos políticos. Recuerdo a profesores que pro-clamaban y defendían esa pluralidad de pensamiento, en un entorno, como fueron aquellos años, en los que la política se vivía de forma muy diferente a la actual” .

UN ACTIVO CLAVE. “Hubo muchos profesores y todos dejaron alguna impronta. Los profesores eran protagonistas de la formación y todos tenían su peculiar forma de enseñar. Los profesores eran (y son actual-mente) uno de los activos clave del Colegio. Recuerdo especialmente

n Licenciado en Derecho por la Universidad de Sevilla, 1984-89.

n Banco Bilbao-Vizcaya, 1990.

n MBA por EOI, 1990-92 y Master en el ILS, de la Northwestern University de Chicago, 1992-94.

n Andersen Consulting, 1992- 1997Gerente en Arthur Andersen,1997- 2000.

n Desde 2000 en PriceWaterhouseCoopers, actualmente como Director de Consultoría de Negocio, responsable del desarrollo nacional de la solución de Human Performance .

n Desde 2008 en Élogos, actualmente con responsabilidad directa sobre Élogos i+d.

n Es profesor de EOI y colabora con diversos medios especializados.

Miguel Ángel Rodríguez MuñozDirector de Consultoría de Negocio de PriceWaterhouseCoopers

“El Colegio me transmitió curiosidad y respeto al conocimiento”

“Debo al Colegio la actitud de no

rendirme ante ningún reto académico que pueda ser obstáculo

a la hora de seguir una trayectoria

profesional”


225

la forma en la que te hacían responsable último del aprendizaje. Pero al mismo tiempo, además de su faceta académica, eran también los prota-gonistas de muchas de las anécdotas que todos recordamos. Siempre que nos reunimos algunos ‘franciscanos’ surgen de manera espontánea los D. Miguel, D. Luis o D. José. Pero siendo francos, sus motes han perdurado tanto o más en el tiempo, que sus apellidos. Esto motes, que se here-daban de generación en generación, y que en parte cándidos, en parte ingenuos, conforman también la marca del Colegio”.

ORGULLOSO DE SUS COMPAÑEROS. “Mis mejores amigos son en su ma-yor parte de esa época y sigo compartiendo con ellos tiempo y activida-des. Ahora además suelo ver a algunos otros en el Colegio con sus hijos. (…) No sé hasta qué punto son personalidades famosas o influyentes en la sociedad sevillana, pero sí hay muchos que me hacen sentir orgulloso porque consiguen el reconocimiento de su profesión. (...) Siempre que reconozco a algún ‘franciscano’ yo también me siento orgulloso”.

AFÁN DE SUPERACIÓN. “Recuerdo la dificultad de elegir carrera cuando no tienes una vocación muy definida. Mi decisión por la Abogacía se fraguó en el último año de Colegio. Mi trayectoria posterior ha sido muy ecléctica, y si bien el Colegio no me descubrió una vocación ‘escondida’ sí debo al Colegio la actitud de no rendirme ante ningún reto académico que pueda ser obstáculo a la hora de seguir una trayectoria profesional. La confianza en mis capacidades (que no son nada del otro mundo) y el afán de superación se la debo en gran parte al Colegio”.

ANÉCDOTAS. “Recuerdo muchas pero quizás demasiado locales. (…) Recuerdo una vez en clase que se le ocurrió a un compañero atarle a la pata de una mosca un cartel que ponía ‘Tío Pepe’ (no era una minia-tura, era bastante grande en proporción); la mosca se pasó volando toda la clase con el cartelito”.

EVOLUCIÓN. “No ha cambiado la visión avanzada y el nivel de exigencia que sigue siendo una seña de identidad del Colegio. Algo que sí ha cambiado a simple vista es que ahora se enseña en inglés (lo que hace que los padres aprendamos mucho vocabulario si queremos echar una mano en las tareas). Los idiomas me parecen un gran avance. Son clave, junto con implantación de nuevos métodos más com-prensivos que los que teníamos nosotros, como es el PAI (Programa de Años Intermedios), centrado más en el aprendizaje que en la memorización. Echo en falta en las aulas el refuerzo del trabajo en equipo y más formación en valores que les sean útiles en los nuevos entornos de trabajo, como son la colabora-ción, el uso coherente de la tecnología o la gestión de la diversidad”.

RETOS. “Uno de los retos principales es integrar las distintas fuentes de conocimiento presentes en la sociedad, en el proceso de aprendizaje que propugna el Colegio y en su dinámica diaria. Hoy los niños aprenden en un entorno digital, informal, abierto y global, con fuentes de consulta, creación y utili-zación de la información muy diversas. El Colegio debe integrar estas fuentes con los actores actuales del aprendizaje como son los profesores, los contenidos formales o los padres. El uso de la tecnología cambiará la educación en los próximos años y el Colegio tiene la oportunidad de ser un pionero en la forma y en el uso de la misma, mejorando el aprendizaje al conectar a padres, profesores y alumnos en nuevos entornos abiertos de educación”.

PERSONAS COMPROMETIDAS Y FLEXIBLES. “Las mejores instituciones educativas educarán a personas comprometidas con la sociedad, con una visión global y flexibles para poder adaptarse a los cambios que se vivirán en la sociedad del siglo XXI. La capacidad de orientación será más relevante que la capacidad de dirección. Deberán ser capaces de ver al mismo tiempo el árbol y el bosque. Deberemos enseñar a hacer productivo el conocimiento, y enseñar a aprender a lo largo (y lo ancho) de la vida. El Colegio, desde sus valores de respeto y trabajo, debe realizar una aportación clave para el éxito personal y profesional de las nuevas generaciones”.

“Las mejores instituciones de enseñanza educarán a personas comprometidas con la sociedad, con una visión global y flexibles para poder adaptarse a los cambios”

226

Investigador en un instituto científico independiente de California, Diego del Río Díaz Jara pasó doce años en el Colegio, de los que ya sólo le quedan “recuerdos buenos o muy buenos”. Entre ellos las prácticas optativas de laboratorio que daba D. Luis Rey Romero, que teóricamente debían ser de una hora de duración y acabar a las tres de la tarde, pero que en la práctica se prolongaban hasta pasadas las cuatro, y a veces, porque llegaba Dña. Maribel a “rescatar” a los alumnos. Dice que aquellas prácticas le ayudaron a decantarse por cursar la carrera de química, aunque en realidad lo que a él le hubiera gustado estudiar es bioquímica, pero entonces esa posibilidad no existía en Sevilla. Opina que la personalidad del Colegio está “muy definida en su lema de trabajo y respeto” y que manteniendo esos valores el San Francisco “no debería tener problemas para durar otros 125 años”.

SOBRINO DE ANTIGUO ALUMNO. “Ingresé en el curso 81/82, para hacer 1° de EGB. Estudié allí durante 12 años, hasta terminar COU en el curso 92-93. Mi tío Manolo había sido antiguo alumno. Él fue quien insistió a mis padres en que el San Francisco era el sitio adecuado”.

RECUERDOS BUENOS O MUY BUENOS. “Doce años dan para almacenar muchos recuerdos. Todos buenos o muy buenos. Los menos buenos quedaron ya olvidados hace mucho tiempo. No era mal estudiante, pero tampoco era de los que sacaba

sobresalientes sin despeinarse. Mis materias preferidas eran química y biología”.

TRABAJO Y RESPETO. “La personalidad del Colegio esta muy bien definida en su lema: 'trabajo y respeto'. Y eso fue lo principal que aprendí: trabajar y respetar a los demás”.

ALGO COTIDIANO. “Siempre que he escuchado hablar sobre pluralidad y tolerancia en el Colegio he tenido la impresión de que me hablaran de tiempos pasados al mío, donde al parecer esta tolerancia era algo excepcional. Yo siempre la tomé como algo cotidiano y no recuerdo problemas durante mi época de estudiante".

n Licenciado en Química con sobresaliente cum laude por la Universidad de Sevilla en 2003. Su tesis doctoral recibió el premio a la mejor de su especialidad en la Universidad de Sevilla en 2004.

n Ha disfrutado de becas de investigación como la I3P del CSIC, la beca FPI del Mi-nisterio de Ciencia e Innovación, o la beca Fundación Cámara.

n De 2004 a 2006 recibió una beca de investigación Marie Curie en la Universidad de Stanford, California.

n Ha desarrollado para DARPA (la agencia estadounidense de investigación de pro-yectos avanzados de defensa) un proceso de producción de gas sintético a partir de carbón y su posterior transformación en combustible para reactores. Este nuevo proceso reduce costes en gran medida y las emisiones de CO2 a cero.

n En la actualidad, y desde 2006, trabaja en California como científico investigador en SRI Internacional (instituto estadouni-dense de investigación independiente y sin ánimo de lucro) siendo responsable de la planificación, desarrollo e implementación de proyectos de investigación en los sectores químico, farmacéutico e industrial.

n Compagina su vida laboral con el MBA que está cursando desde 2010, y hasta 2013, en la Universidad de California en Berkelely.

n Ha publicado cerca de 40 artículos en prestigiosas revistas académicas, con más de 350 citaciones y participado cerca de una veintena de veces en encuentros científicos nacionales e internacionales.

Diego del Río Díaz JaraQuímico, investigador en el SRI Internacional de California

“Acabé decantándome por la química influido por las prácticas de laboratorio de D. Luis Rey Romero”

“Soy de la opinión que el verdadero mérito

está en la base. Como todas las promociones

del Colegio, la mía también está llena

de magníficos profesionales:

desde maestros a médicos, pasando por empresarios y artistas”


227

PROFESORES. “Recuerdo muchos nombres, y guardo un especial cariño a casi todos ellos, especialmente los que nos dieron clase durante los primeros años en el Colegio. No tengo muy claro qué clase de influencia pudieron tener, pero los nombres de D. Miguel Tejero, D. Joaquin Leflet y D. Francisco Luque, espe-cialmente el primero, están grabados para siempre en mi memoria. De mayor, recuerdo también las clases de bioquímica de D. Genaro Capote. Entonces no existía la carrera de bioquímica en Sevilla, pero no hubiera dudado en matricu-larme en ella”.

DIFÍCIL COINCIDIR EN CALIFORNIA. “Amigos conservo muchos, aunque coincidir, lo que se dice coincidir, se hace difícil. No son muchos los que se aventuran a pasar por California. Pero las nuevas tecnologías facilitan mucho el mantenerse en contacto y estar al día de lo que pasa en sus vidas”.

EL MÉRITO ESTÁ EN LA BASE. “No quiero caer en el tópico de nombrar una o dos personas que pudiera decirse están en el vértice de la pirámide por mucho que crea que se lo merezcan. Soy de la opinión que el verdadero mérito está en la base. Como todas las promociones del Colegio, la mía también está llena de magníficos profesionales: desde maestros a médicos, pasando por empresarios y artistas”.

LA ELECCIÓN DE LA CARRERA. “Siempre tuve claro que estudiaría algo relacionado con las ciencias. Entonces no era posible estudiar bioquímica. Me debatí una temporada entre química, farmacia o biología. Finalmente me decanté por la primera, entre otras cosas por aquellas prácticas de laboratorio optativas que organizaba D. Luis Rey Romero. Si no recuerdo mal fueron durante 3º de BUP. En teoría, deberían ser de una hora, de dos de la tarde a tres, o algo así. Pero, entusiasmado con los experimentos, raro era el día que nos dejaba salir antes de las cuatro de la tarde. Más de una vez fue Dña. Maribel la que llegaba a esa hora y al vernos allí nos hacía marchar. Sigo pensando que, si por él fuera todavía estaríamos allí destilando nicotina, soplando vidrio o calculando el volumen de los gases (…) Posteriormente, la influencia de D. Luis Rey Goñi fue decisiva para decantarme por el grupo donde hice mi tesis doctoral”.

ANÉCDOTAS. “Podría decir que las que se pueden contar no son interesantes, y las interesantes no las voy a contar. Pero como algo tengo que decir, ¿quién de los presentes aquel día ha podido olvidar la anécdota del za-pato con D. Juan Francisco? Lo que ocurrió fue que en una clase de estudio con D. Juan Francisco, que por cier-to era nuestro tutor ese año, a uno de los compañeros de las ultimas filas le quitaron un zapato que pasó, poco a poco de mano en mano, hasta que lo vio D. Juan Francisco cuando llegó a primera fila (…) Además de castigar a unos cuantos a pasar unas cuantas tardes en la biblioteca se pasó una buena temporada sin hablarnos (…)".

VÍNCULOS. “El vivir en California complica lo de participar de forma activa en la vida del Colegio. Mientras estuve en Sevilla participé en varias actividades organizadas por la Asociación de Antiguos Alumnos. Después de mi marcha he pasado alguna vez por allí para dar alguna charla a los alumnos y he aprovechado para comer con D. Luis Rey, padre e hijo".

IDIOMAS Y NUEVAS TECNOLOGÍAS. “Me consta de la importancia que tienen los idiomas y las nuevas tecno-logías en el actual proyecto educativo, pero no conozco el proyecto lo suficiente para opinar y hacer un análisis del mismo".

DIFERENTE GESTIÓN DEL CONOCIMIENTO. “Es indudable que el acceso a nuevas tecnologías ha cambiado nuestra manera de gestionar el conocimiento. Imagino que la tendencia será a memorizar cada vez menos y hacer entender conceptos y seleccionar información cada vez más. Este último punto, cómo seleccionar información útil de entre toda la que está a nuestra disposición, debería ser uno de los pilares de los nuevos métodos educativos".

FUTURO. “Los valores del Colegio están bien definidos en su lema: trabajo y respeto. Eso debería ser suficiente para durar otros 125 años, y es lo que creo que debe seguir aportando el Colegio a sus nuevos alumnos: educa-ción de calidad y una cultura de trabajo y respeto".

“No tengo muy claro qué clase de influencia pudieron tener, pero los nombres de D. Miguel Tejero, D. Joaquin Leflet y D. Francisco Luque, especialmente el primero, están grabados para siempre en mi memoria”

228

Médico Especialista en Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello, Carlos O’Connor tiene muy claro qué es lo principal que aprendió en el Colegio para la vida. Y lo resume en una máxima: “Si te esfuerzas, llegas”. Con esa convicción, desde que salió del Colegio, él nunca ha dejado de ‘llegar’ y muchas veces el primero. Reconocido internacionalmente en su especialidad, ha sido pionero de técnicas quirúrgicas novedosas en España, y es reclamado constantemente en congresos, cursos y conferencias internacionales. Jefe de Servicio de Otorrinolaringología del Hospital USP Marbella y Profesor asociado de la Universidad Hispalense, cuando no está viajando, vive a caballo entre Sevilla y la Costa del Sol. Eso sí, sus dos hijos estudian en el San Francisco de Paula, de donde espera que salgan con la misma motivación por el trabajo y espíritu de superación que el recibió como legado, así como con unos sólidos valores humanos, “cada vez más olvidados en esta sociedad del pelotazo y del sálvese quien pueda”. Su recomendación al Colegio para que pueda celebrar otros 125 años es que nunca pierda el espíritu de D. Luis Rey Romero, que miraba más la actitud que la aptitud de sus alumnos y valoraba sobre todo su esfuerzo.

AFÁN DE SUPERACIÓN ANTE LAS DIFICULTADES. “Estuve en el Colegio desde 1981 hasta 1988, y guardo recuerdos muy gratos. Había un gran espíritu de superación que se nos inculcaba desde pequeños. Y se palpaban valores como la independencia, la tolerancia, la rectitud y el respeto. Yo aprendí algo muy importante para la vida, y que trato de

inculcar también a mis hi-jos: si te esfuerzas, llegas”.

PROFESORES QUE RECO-NOCÍAN EL ESFUERZO. “Había un elenco de grandes profesores. (…) Todos tenían algo bueno, y es difícil hacer distinciones. Creo que merece destacar aquellos que nos dejaron. (…) D. Luis Rey, D. Salvador Serra, D. Juan Francisco, D. Manuel García Vázquez, D. Manuel Pérez Cerezal… Eran personas que les gus-taba lo que hacían, muy experimentados y sobre todo transmitían que conocían el oficio y sabían reconocer tu esfuerzo”.

UNA GRAN FAMILIA. “Conservo muchos entre los antiguos compañeros, incluso tenemos un grupo en Facebook. Mi grupo principal de amigos viene justamente del Colegio y nos reunimos con bastante periodicidad.

n Licenciado y Doctor en Medicina y Ciru-gía por la Universidad de Sevilla.

n Especialista en Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello.

n Diplomado universitario en Diseño y Estadística en Ciencias de la Salud por la Universidad Autónoma de Barcelona.

n Profesor Asociado Otorrinolaringologia de la Universidad de Sevilla.

n Jefe de Servicio de Otorrinolaringología del Hospital USP Marbella.

n Miembro de la Academia Norteameri-cana de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello.

n Pionero en la aplicación en España de de técnicas quirúrgicas novedosas, como el primer implante de paladar para tratamien-to del ronquido y la apnea del sueño.

n Autor de más de un centenar de trabajos científicos en revistas internacionales y nacionales, siendo revisor de algunas de las más importantes, como The Laryngoscope.

n Cursos y conferencias sobre su especia-lidad en diferentes ciudades europeas y americanas como Profesor invitado.

“Mi grupo principal de amigos viene justamente del

Colegio y nos reunimos con

bastante periodicidad. Somos casi una

familia”

Carlos O’Connor ReinaMédico Especialista en Otorrinolaringología, Jefe de Servicio del Hospital USP Marbella

“En el Colegio aprendí algo fundamental que intento también inculcar a mis hijos: si te esfuerzas, llegas”


229

Somos casi una familia. Tengo mucho trato con José Alfonso Cordero Andrade, Martin Peña Manchado, Francisco Javier Robles Gómez, Ma-nuel Rivera Colomé y Evaristo Nogales Castilla, que son compañeros que no sólo han triunfado profesionalmente en una etapa tan difícil como esta, sino que lo han hecho también en sus relaciones humanas mante-niendo el equilibrio entre el trabajo y sus familias. Ahí radica el triunfo en la vida”.

INFLUENCIA EN LA CARRERA. ”El Colegio no me influyó en lo que quería ser, siempre soñé con ser médico, pero sí me influyó en mi actitud ante la vida y en saber que, si se te presentan dificultades, debes asumir-las con afán de superarlas y tratar de ser mejor profesional y persona día a día”.

SAY IT AGAIN. “Recuerdo una anécdota muy divertida y que aún hoy seguimos comentando. Eran las ocho de la mañana de una clase de inglés con D. Miguel Fernández de los Ronderos, y uno de nuestros compañeros, no muy ducho en este idioma, le preguntó con total sinceridad qué sig-nificaba ‘repeat’, tras lo cual D. Miguel le respondió ‘say it again’, tras lo cual mi compañero con total inocencia le respondió ‘repeat’, tras lo cual otra vez D. Miguel le respondió ‘say it again’. Creo que se repitieron las palabras sobre una docena de veces hasta que mi compañero entendió lo que significaba ‘repeat’, por supuesto entre las risas de la clase, que han durado hasta nuestros días”.

VÍNCULOS ACTUALES. “A través de mis hijos, sigo la vida del Colegio, y trato de implicarme al máximo como padre en las actividades lectivas y extralectivas de mis dos hijos, que están en Primaria”.

EL ESPÍRITU DE D. LUIS. “Mi recomendación al Colegio, de cara al futuro, sería que nunca olvide que lo importante es la persona, y que no pierda el espíritu de D. Luis Rey Romero, que siempre trataba de evaluar el esfuerzo. A los resultados, el alumno podría llegar o no, pero lo que D. Luis miraba era sobre todo la actitud ante las obligaciones. La aptitud nunca puede ser más importante que la actitud (…). También entiendo que las relaciones interpersonales son fundamentales, y que debería fomentarse mucho la solidaridad y el conocimiento mutuo.

SOBRE TODO, LOS VALORES. ”Pienso que la docencia debería orientarse más hacia los valores que hacia la consecución de resultados, porque es la transmisión de valores lo más determinante para la vida. (…) Y lamen-tablemente los valores humanos están cada vez más olvidados por esta sociedad de pelotazos y sálvese quien pueda. (…) Finalmente, la calidad humana de los docentes y la implicación de éstos en el progreso educati-vo de sus alumnos es otro aspecto que me parece clave. Aquellos centros que cuenten con profesores felices con su profesión y que estén recono-cidos por alumnos y sus superiores serán los que marcarán la diferencia entre las mejores instituciones educativas”.

“A los resultados, el alumno podría llegar o no, pero lo que D. Luis miraba era sobre todo la actitud ante las obligaciones. La aptitud nunca puede ser más importante que la actitud”

“El Colegio me influyó en mi actitud ante la vida y en saber que, si se te presentan dificultades, debes asumirlas con afán de superarlas y tratar de ser mejor profesional y persona día a día”

“A través de mis dos hijos, que están en Primaria, sigo la vida del Colegio y trato de implicarme al máximo en sus activides lectivas y extralectivas”

230

Profesora Titular de la Universidad de Sevilla desde 1999, año en el que precisamente le fue otorgado el Premio de Investigación de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla, María José Ruiz Montero sólo hizo en el Colegio COU, el único curso mixto en su época. A pesar de ello, asegura que el San Francisco de Paula dejó en ella una “impresión muy honda”. En lo personal, recuerda sobre todo el gran compañerismo entre todos los alumnos. En lo académico, el alto nivel exigido, que no obstante podía alcanzarse gracias a la elevada calidad del profesorado. Considera que el Colegio fue determinante en su vocación, pues fueron las clases de Física recibidas en COU las que le hicieron inclinarse por esta rama de la ciencia, y las que estimularon su aspiración de dedicarse a la investigación y la enseñanza. Además, subraya que el Colegio le inculcó el aprecio por la excelencia en todos los órdenes de la vida.

UN SOLO CURSO. “Ingresé en el Colegio en el curso 1982-1983, a fin de realizar los estudios de COU, que era el único curso mixto en aquella época. Mis padres escogieron el Colegio por su prestigio en la formación académica de los alumnos, y porque conocían personalmente al Director del Colegio y su familia, y los tenían en muy alta estima y

consideración. Debo decir que era buena estudiante, y aunque en las primeras semanas tenía miedo de no llegar al nivel, la realidad es que me adapté enseguida. Mis asignaturas favoritas fueron sin duda la física, las matemáticas y la filosofía”.

AMBIENTE INTEGRADOR. “Aunque sólo permanecí en el Colegio un año, dejó en mí una impresión muy honda. En lo personal, recuerdo el gran compa-ñerismo entre todos los alumnos, con un ambiente muy integrador al que era sencillo adaptarse. Me gustó especialmente que había mucha interacción entre los alumnos de los distintos grupos de COU, no se establecían ‘camari-llas’ cerradas que excluyeran a nadie. (…) El ambiente en mi curso era muy diverso, con alumnos de muy distinta procedencia social e ideología. Por eso recuerdo hoy con más cariño el ambiente totalmente integrado y sin grupos

n Licenciatura en Física en 1988, en la especia-lidad de Física Fundamental.

n Imparte docencia en la Universidad de Se-villa desde 1990, tanto en la Facultad de Física como en la de Matemáticas.

n Premio Doctorado de la Universidad de Sevi-lla por su Tesis Doctoral “Modelos de relajación en vidrios”, presentada en 1992.

n Beca Marie Curie de la Unión Europea para realizar una estancia post-doctoral durante 1994 en el Instituto FOM de Amsterdam.

n Profesora Titular de la Universidad de Sevilla desde Diciembre de 1999.

n Premio de Investigación de la Real Maestran-za de Caballería de Sevilla en 1999.

n Pertenece al grupo de Investigación “Mecáni-ca Estadística” de la Universidad de Sevilla.

n Más de 50 publicaciones en revistas científi-cas internacionales del mayor prestigio e índice de impacto, que han recibido más de 1.000 citas de otros investigadores

n Conferenciante invitada en numerosos Con-gresos tanto nacionales como internacionales, entre ellos los prestigiosos “Gordon Conference” en EEUU.

n Ha dirigido tres Tesis Doctorales que han alcanzado la máxima calificación.

n Participa como docente invitada en el Máster de FisyMat de la Universidad de Granada.

María José Ruiz MonteroDoctora en Física. Profesora Titular de la Universidad de Sevilla

“El Colegio me inculcó el aprecio por la excelencia en todos los órdenes de la vida”

“En 2000 recibí el Premio de

Investigadores Jóvenes de la Real Maestranza

de Caballería de Sevilla. Los otros

dos investigadores premiados también

eran antiguos alumnos del Colegio. Creo que eso es señal

de la excelencia de la formación que

recibimos”


231

estancos que existía. (…) En lo académico, la exigencia era muy alta, pero la elevada calidad del profesorado ayudaba a alcanzar el nivel exigido”.

TRES PALABRAS PARA DEFINIR LA PERSONALIDAD DEL COLEGIO. “Exce-lencia, rigor intelectual y libertad”.

VALORES. “El Colegio me inculcó el aprecio por la excelencia en todos los órdenes de la vida, el valor del trabajo y la constancia, la responsabilidad y el compañerismo”.

LA INFLUENCIA DE D. AMADEO. “Es difícil escoger entre los profesores, porque guardo un gran recuerdo de todos ellos. D. Amadeo Gómez, que me dio las asignaturas de Física y Matemáticas, me marcó profundamente porque sin duda provocó que yo me decantara por estudiar la Licenciatura en Física. Fue un profesor excelente, y en lo personal un gran amigo. También recuerdo las excelentes clases de Filosofía de D. Javier, que siempre intentó que compren-diéramos la profundidad y riqueza de los distintos sistemas filosóficos, y la importancia de tener un marco de pensamiento y ética propios, basado en el análisis crítico de aquello que estudiábamos. Por último, recuerdo con gran cariño las prácticas de química con D. Luis Rey Romero, en las que siempre se estimulaba nuestra curiosi-dad”.

LA ALEGRÍA DE VER A ANTIGUOS COMPAÑEROS. “Hice muchos amigos. (…) Aunque no nos vemos de ma-nera sistemática, sí que cuando coincido con alguno nos paramos siempre a ponernos al día y me produce gran alegría verlos”.

DETERMINANTE EN LA VOCACIÓN. “El Colegio fue determinante en mi elección vocacional. Fueron las clases de física de COU las que me hicieron apreciar esta rama de la Ciencia, y me decidieron a dedicarme a la investi-gación científica, y también a la enseñanza”.

LOS TRES PREMIOS, DEL SAN FRANCISCO DEL PAULA. “Una anécdota que recuerdo con cariño ocurrió de hecho después de dejar el Colegio. En el año 2000 recibí el Premio de Investigadores Jóvenes de la Real Maes-tranza de Caballería de Sevilla. Y quiso la casualidad que los otros dos investigadores premiados (Sebastián Chávez y Miguel Ángel Castro) también fuesen antiguos alumnos del San Francisco de Paula. Creo que eso es señal de la excelencia de la formación que nos dio el Colegio”.

VÍNCULOS. “Tras la salida del Colegio, mantuve el contacto con D. Luis Rey Romero y con D. Luis Rey Goñi, padre e hijo, con el que me une una amistad personal. También en la actualidad y en estos años pasados miembros de mi familia (hermanos pequeños, sobrinos) han seguido formándose en el Colegio, por lo que me he mantenido siempre en contacto”.

EL MISMO IDEARIO, NUEVOS MODOS. “Creo que en lo básico el ideario del Colegio sigue igual: valoración de la excelencia académica, exigencia en el trabajo, libertad, tolerancia y respeto. Evidentemente, la incorpora-ción de nuevas tecnologías o la exigencia actual de una formación amplia en distintos idiomas pueden haber cambiado los modos y métodos, pero no el fondo”.

LOS DEL SAN FRANCISCO DE PAULA. “Que perseveren en los pilares del Colegio (excelencia académica, valor del trabajo personal, responsabilidad y tolerancia) adaptándose en las formas y métodos a las necesidades par-ticulares del momento. (…) Creo que lo que le debe aportar el Colegio al estudiante del mañana es lo mismo que me aportó a mí: una buena formación académica, y unos valores que le permitan ser mejor persona en todos los aspectos. También la sensación de pertenecer a una familia que tiene unos valores comunes, concretamente el valorar a cada uno por su trabajo y su esfuerzo. De alguna manera, como dijo Antonio Burgos en su artículo tras la muerte de D. Luis Rey, somos ‘los del San Francisco de Paula’. Y esa capacidad de hacer que los suyos sientan que pertenecen a un grupo humano que permanece con los años es lo que yo creo que distingue a las mejores instituciones educativas”.

“Esa capacidad de hacer que los suyos sientan que pertenecen a un grupo humano que permanece con los años es lo que yo creo que distingue a las mejores instituciones educativas”

232

Con una larga trayectoria directiva en la Administración pública, principalmente en tareas de gestión medioambiental, Esperanza Caro recuerda su paso por el Colegio como uno de los mejores años de su vida. Fue en 1983 cuando Esperanza ingresó en el Colegio para hacer el COU, siguiendo, como ella explica, la tradición familiar. Escoge las palabras “responsabilidad y compromiso” para definir el ‘alma’ del San Francisco de Paula y dice que, si algo aprendió en sus aulas, fue el amor por el trabajo bien hecho. Además de ex alumna, es madre de un alumno, y desde esa doble perspectiva opina que, aunque hayan cambiado las formas y la proyección externa, el fondo del Colegio sigue siendo el mismo.

DISFRUTABA ESTUDIANDO. “Sabía estudiar y divertirme a la vez. Entré en 1983, para hacer COU, por tradición familiar. El paso por el Colegio lo recuerdo como uno de los mejores años de mi vida. Mis asignaturas preferidas eran matemáticas y física. Era buena estudiante, pero sabía divertirme a la vez. Fue un año para hacer buenos amigos”.

AMOR POR EL TRABAJO BIEN HECHO. “Responsabilidad y compromiso creo que son las palabras que mejor definen la personalidad del Colegio. El valor principal que me inculcaron fue el amor por el trabajo bien hecho. (…) En el Colegio era fácil la convivencia entre diferentes maneras de sentir la vida”.

UN PROFESOR. “D. Amadeo fue el Profesor que más me influyó personal y acadé-micamente”.

ANTIGUOS COMPAÑE-ROS. “Conservo buenos amigos, aunque los veo poco. (…) La mayoría han resultado excelentes profesionales, aunque no siempre ello suponga visibilidad pública, pero su buen hacer es una referen-cia en su entorno”.

n Ingeniero Industrial, especialidad Quími-ca y Medioambiental (1984-1990 Universi-dad de Sevilla).

n Premio “Antonio Mora” de la Asociación Mutualista de la Ingeniería Civil de Apro-vechamiento en los Estudios.

n Prácticas en Cerámica Bellavista (ac-tualmente ROCA), en el Departamento de Ingeniería (1989-1990).

n Asesor técnico de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía (1990-2000).

n Diplomada en Ingeniería y Gestión ambiental (1990-1991 Escuela de Organiza-ción Industrial).

n Experto en Gestión de la Innovación por el Instituto Andaluz de Tecnología.

n Agente de la Propiedad Inmobiliaria (Ministerio de Obras Publicas, 1994).

n Jefa de Servicio de Desarrollo Tecnológi-co de la Junta de Andalucía (2001-2004).

n Directora General de Prevención y Ca-lidad Ambiental de la Junta de Andalucía (2004-2008).

n Secretaria General de Cambio climático y Calidad Ambiental (2008-2010).

n Subdirectora de la Agencia Andaluza del Agua.

n Subdirectora General de Régimen de Usuarios de la Consejería de Medio Am-biente.

n Docente en numerosos cursos y Másters en el área del conocimiento asociado al medio ambiente y al cambio climático.

“Creo que han cambiado las formas y la proyección externa,

pero el fondo es el mismo: responsabilidad, compromiso y amor por

el trabajo bien hecho”

Esperanza Caro GómezIngeniero Industrial, Subdirectora General de la Consejería de Medio Ambiente

“Los años en el Colegio los recuerdo como algunos de los mejores de mi vida”


233

VOCACIÓN TÉCNICA. “Yo tenía una clara vocación técnica, que me fomentaron en el Colegio”.

VÍNCULOS. “Mi vínculo actual se deriva principalmente de que tengo un hijo estudiando en el Colegio”.

EL MISMO FONDO. “Creo que han cambiado las formas y la proyección externa. Pero pienso que el fondo es el mismo”.

MÁS MEDIOS A SU ALCANCE. “Creo que las nuevas generaciones tienen más medios a su alcance, pero eso muchas veces puede generar un menor esfuerzo de integración de conoci-miento”.

UNA RECOMENDACIÓN DE FUTURO. “Mi recomendación a la Dirección actual es que siga con el trabajo bien hecho, de forma pausada pero sin perder el ritmo”.

EDUCACIÓN EN VALORES. “Considero que la diferencia fundamental de las mejores instituciones educativas se debe basar en una educación en valores y una integración con el medio que le rodea. La excelencia aca-démica se presupone, pero necesitamos una sociedad comprometida con su entorno y que ejerzan de elementos tractores para la comunidad”.

“La excelencia académica se

presupone, pero necesitamos

una sociedad comprometida con

su entorno y que las mejores instituciones educativas ejerzan de

elementos tractores para la comunidad”

“Conservo buenos amigos, aunque los veo poco. La mayoría han resultado excelentes profesionales, aunque no siempre ello suponga visibilidad pública, pero su buen hacer es una referencia en su entorno”

234

Subdirectora General de Relaciones Institucionales y Obra Social de Cajasol, Rosa Santos Alarcón dice que los dos años que estuvo en el Colegio fueron básicos para definir su interés por las humanidades y también para inculcar en ella una cultura de trabajo basada en la disciplina, el esfuerzo y el espíritu de superación permanente. Más allá de eso, cree que el paso por el San Francisco fue un revulsivo en su vida, que la hizo crecer intelectual y humanamente.

UN REVULSIVO. “Ingresé en el San Francisco de Paula, en el curso 84-85, en 3º de BUP, era el primer año en que el Bachillerato era mixto, así que me incorporé a la primera oportunidad de hacerlo, porque mis padres tenían mucho interés y además mi hermano, que hoy es profesor en el Co-legio, ya estudiaba allí. Y la verdad es que fue un revulsivo en mi vida, que me hizo crecer en el aspecto intelectual y en el humano. Fueron solo dos años, pero los viví con tal intensidad y me han ayudado tanto en la vida, que me considero a todos los efectos plenamente integrada en la comunidad ‘franciscana’, tanto como los compañeros que estudiaron allí más cursos que yo”.

OTRA PASTA. “Bueno, en gran parte esa influencia obedece a la arrolladora personalidad del profesorado que había, que los hacía algo más que meros docentes para nosotros. Eran personas a las que admirabas

y que te influían humanamente, personas que te hacían tambalear los esquemas, que te enriquecían y ampliaban horizontes. También creo que las relaciones personales entre los compañeros eran diferentes, menos superficiales, más ricas y auténticas, como si la gente del Colegio fuera de otra pasta. Había realmente mucho compañerismo”.

ADAPTACIÓN. “Como estudiante, el paso al San Francisco supuso para mí un cambio de nivel, y me costó. Yo era muy perfeccionista, y estaba acostumbrada a llevarlo todo muy bien y recibir felicitaciones, y, claro, fue duro para mí encontrarme con que tenía dificultades con algunas asignatu-ras como la física, las matemáticas o el dibujo técnico. Pero el esfuerzo que tuve que hacer para adaptarme hoy lo valoro muy positivamente y para mí es indisociable de los valores que recibí del Colegio. Creo que eso sirvió para hacerme fuerte y sobreponerme a las dificultades, y también para reforzarme la disciplina y el espíritu de superación”.

EL VALOR DE LO INMATERIAL. “Fueron muchos los profesores que tuvieron una gran influencia. Con D. Amadeo aprendí a descubrir y reconocer mis de-bilidades y tratar de superarlas con esfuerzo. D. José María Garrido, además de hacer excitante la historia, era un ejemplo de vitalidad, energía y modes-

n Licenciada en Derecho por la Univer-sidad de Sevilla (Junio 1991) y Master en Asesoría Fiscal por el Instituto de Estudios El Monte (Junio 1992).

n Entre mayo y diciembre de 1992, res-ponsable de planificación fiscal, adminis-tración y contabilidad para Expo Foods de COOPERS & LYBRAND.

n Entre enero de 1993 y junio de 1995, jefe de Estudios del Instituto de Estudios El Monte y entre junio1995 y mayo de 2009 directora de esta escuela de negocios

n Desde junio de 2009, es Subdirectora Gene-ral Institucional y de Obra Social de Cajasol.

Rosa Santos Alarcón Subdirectora General Institucional y de Obra Social de Cajasol

“El paso por el Colegio fue un revulsivo, que me hizo crecer intelectual y humanamente”

“El Colegio introduce al alumno en un

mundo plural, en el que no hay respuestas

inequívocas para las preguntas, sino muchas

posibles respuestas, y muchos puntos de

vista diferentes, y creo que ese también es

uno de sus rasgos más señalados”


235

tia. D. Genaro Capote era igualmente un ejemplo de sencillez y humildad. D. Javier Liencres me transmitió el gusto por las humanidades (todavía recuerdo hoy la satisfacción tan enorme cuando me vio en un pasillo y me dijo que le había hecho un examen ‘precioso’). Con D. Roberto Reina formé parte de un grupo de teatro, en el que aprendí a contener y trabajar las emociones, cosa que creo también es importante en la vida. Por cierto, que aún recuerdo con agradecimiento el ramo de flores que me envió D. Luis Rey Romero tras asis-tir a una de las representaciones del grupo. En fin, fueron muchos profeso-res, y ya digo que, aparte de la influencia académica, creo que contribuyeron a abrirme la mente, a hacerme apreciar las cosas inmateriales y los valores humanos, a ser más humilde y más consciente de la necesidad de mantener una actitud de esfuerzo y superación permanente”.

UN MUNDO PLURAL. “El Colegio introduce al alumno en un mundo plural, en el que no hay respuestas inequívocas para las preguntas, sino muchas posibles respuestas, y muchos puntos de vistas diferentes, y creo que ese también es uno de sus rasgos más señalados. Es un Colegio que no te forma en una interpretación determinada de la realidad, sino que te ofrece infor-mación completa sobre las diferentes interpretaciones posibles para que el alumno se forme su propia opinión de una forma fundamentada”.

INFLUENCIA EN LA CARRERA. En mi carrera, el Colegio ha sido importante, de entrada, porque definió mi tendencia hacia las humanidades. Yo venía un poco confusa y en el Colegio fui plenamente consciente de dónde estaban mis mayores capacidades. Eso naturalmente fue importante, pero aún más lo fue recibir todos esos valores que he comentado antes: la cultura del esfuerzo y la disciplina, el espíritu de supera-ción, la humildad, la curiosidad por las cosas, el afán de saber…”.

EVOLUCIÓN. “Creo que la trayectoria del Colegio es ejemplo de rigor, seriedad y superación. Sin per-der sus valores fundacionales, el San Francisco de Paula ha mantenido un esfuerzo constante por estar siempre en la vanguardia y trasladar la mejor formación posible a sus alumnos. Creo que es particular-mente interesante y clave el proceso de apertura en que lleva inmerso en los últimos años, que empezó a manifestarse con las jornadas internacionales anuales. En una Sociedad Global como la que vivimos, es fundamental que los alumnos sean conocedores de otros idiomas y culturas y se acostumbren a desenvol-verse con naturalidad en un mundo sin fronteras”.

UNA CUESTIÓN CRUCIAL. “La colaboración entre padres y profesores me parece un aspecto crucial. En el caso del Colegio y de mi familia esa comunión de intereses era total. Creo que en general antes los padres jamás cuestionaban las decisiones de los profesores, y los problemas se abordaban conjuntamente con la intención de solucionarlos. Estimo que uno de los problemas del sistema educativo, hoy día, es que los profesores se encuentran un poco desamparados, pues algunos padres, en lugar de estar con ellos, están contra ellos, y los alumnos lo saben y se aprovechan”.

EXCELENCIA, UNIDA A HUMANIDAD. “Mi recomendación al Colegio es que mantenga su espíritu de supera-ción, y que trate de aunar la excelencia, la calidad y el rigor en la enseñanza con la humanidad y con la bús-queda de lo mejor de cada persona. Asimismo, me parece importantísimo cultivar las habilidades emocionales”.

EDUCACIÓN A LA CARTA. “Creo que lo que distinguirá a las mejores instituciones educativas será la ca-pacidad de hacer una educación a la carta, adaptada a las potencialidades y limitaciones de cada alumno, una educación que no ponga el mismo techo y el mismo suelo para todos los alumnos, sino que los varíe según las características de cada alumno, de modo que con unas bases mínimas comunes cada individuo pueda encontrar su propio camino para desarrollarse”.

“Creo que la trayectoria del Colegio es ejemplo de rigor, seriedad y superación. Sin perder sus valores fundacionales, el San Francisco de Paula ha mantenido un esfuerzo constante por estar siempre en la vanguardia”

236

Álvaro Rodríguez vivió en el Colegio los estertores de la transición y el inicio de la democracia. Entre 1975 y 1980 pasaron muchas cosas en nuestro país, y él las vivió desde detrás del pupitre y con unos ojos que se abrían al mundo. Procedente de Aracena (“al igual que D. José Rey”, explica), fue un alumno interno en el Colegio, lo que en buena medida le forjó como persona disciplinada y con capacidad de trabajo, algo que, reconoce, le ayudó sobremanera en sus estudios de Derecho. “Era un colegio librepensador, no te inculcaban ideas religiosas ni nada, mientras no sacaras los pies del plato cada uno podía pensar lo que quisiera”, sostiene.

ALUMNO INTERNO. ”Yo era bastante mediocre en todo salvo en matemáticas y física y química, donde era sobre-saliente. Los principales valores que aprendí en el Colegio fueron la disciplina, por el hecho de estar interno, y la or-ganización del tiempo. Aunque el Derecho no era en princi-pio mi objetivo académico, la disciplina que me inculcaron influyó bastante en el hábito de estudio y en la capacidad de trabajo”.

COLEGIO LIBREPENSADOR. “Era un colegio librepensador, no te inculcaban ideas religiosas ni nada, mientras no sacaras los pies del plato cada uno podía pensar lo que quisiera. No importaba tu pensamien-to, únicamente la formación. No hubo jamás ningún conflicto”.

EN EL RECUERDO. “Los profesores que más me marcaron personalmente fueron D. Antonio Menéndez, que impartía la asignatura de lengua en 8º y luego lingüística en Bachillerato; D. José María Garrido, que daba geografía e historia; y, sobre todo, D. Guillermo Rey, tío del actual Director, que no me dio clase, pero era el Director del internado y teníamos relación directa con él. También su hermano, D. Luis, con el que, aunque tampoco me dio clase, tenía una gran relación”.

COMPAÑEROS DE INTERNADO. “No suelo coincidir con ningún compañero de mi antigua clase, pero sí con antiguos compañeros del internado. Diego Espina Camacho, Rafael Romero Jara, Juan Antonio Brio-so… Son con los que mayor relación tengo. Entre los compañeros de mi promoción que han tenido cierta repercusión pública recuerdo a Luis Miguel Martín Rubio, que fue concejal de Sevilla, o al juez Tirado Márquez”.

LA MUERTE DE FRANCO. “Entre las anécdotas, recuerdo por ejemplo que, cuando te castigaban, el vigi-lante, que era un antiguo guardia civil, te mandaba al patio de las columnas, que está detrás del Colegio. También recuerdo el día en que alguien le puso una chincheta en la silla a D. Manuel Carrión. Cuando Franco estaba enfermo nosotros queríamos que se muriera antes de Navidad para que nos dieran vaca-ciones. Cuando falleció, finalmente antes de Navidad, uno de nosotros gritó ‘viva’ y el profesor le dio una bofetada pensando que su motivo de euforia era político. Nada más lejos de la realidad, nosotros sólo pensábamos en que íbamos a tener días libres. Éramos niños”.

n Licenciado en Derecho, especialidad Derecho Privado, por la Universidad de Sevilla (1985). Cursos de especialización en Derecho Mercantil, Civil y Fiscal en la Universidad Autónoma de Madrid (1990, 91 y 92).

n Pasante de Bufete en Aracena desde 1993.

n Master en Gestión Administrativa y Tributaria por la Universidad de Alcalá de Henares (1994).

n Agente de la Propiedad Inmobiliaria colegiado en Sevilla desde 2005.

Álvaro Rodríguez Vázquez de Tovar Abogado y agente de la Propiedad Inmobiliaria

“Los principales valores que aprendí fueron disciplina y organización del tiempo”


237

Cursó todo el Bachillerato en el Colegio San Francisco de Paula, algo que, reconoce, fue decisivo en su carrera. Gran estudiante (el mejor de su promoción en términos académicos), siempre se sintió muy a gusto entre las asignaturas “racionales” (las Ciencias), y algo menos en las emocionales, como la literatura. “Mi impresión era que todos éramos iguales”, sostiene, definiendo en una sola palabra la personalidad del Colegio: profesionalidad. “Lo principal que aprendí fue la importancia del trabajo honesto y bien hecho”, asegura. Con una extensa actividad investigadora a sus espaldas, este físico y profesor de Universidad está en deuda con profesores como Dª Valentina, D. Ramón, D. Rafael Lago y D. Javier Liencres.

ALUMNO DE BACHILLERATO. “Ingresé en 1986, en 1º de BUP, y terminé en 1990, con COU. Era un Colegio que tenía buen nombre y estaba cerca de donde yo vivía. Mis padres quisieron matricularme en 1º de EGB pero no había plazas, de modo que tuve que esperar hasta el Bachillerato para entrar”.

INFLUENCIA DECISIVA. “La influencia del Colegio fue decisiva en mi carrera. Yo siempre había tenido la intención de estudiar Ciencias. El Colegio contribuyó a reforzar esa idea. En lo concreto, recuerdo espe-cialmente la influencia académica de Dª Valentina, D. Ramón, D. Rafael Lago y D. Javier Liencres”.

MUY BUEN ESTUDIANTE. “Era muy buen estudiante (el mejor de mi promoción si esto se mide en térmi-nos de las notas académicas). Disfrutaba particularmente las asignaturas ‘racionales’ (las Ciencias, pero también el latín y la filosofía) y me disgustaban las que incluían una mayor componente “emocional” (por ejemplo, la literatura)”.

TODOS IGUALES. “Mi impresión era que todos éramos iguales. Mi generación aún estaba impregnada de la homogeneidad del franquismo. Tampoco recuerdo a nadie que fuera especialmente batallador o que proce-diera de una familia con una ideología completamente divergente a la de la mayoría”.

PROFESIONALIDAD. “Resumiría en una sola palabra la personalidad del Colegio: profesionalidad. Lo prin-cipal que aprendí fue la importancia del trabajo honesto y bien hecho”.

ADAPTACIÓN A LAS CIRCUNSTANCIAS. “Conozco personalmente al actual Director del Colegio y a algu-nos de los profesores. El Colegio suele mandarme el boletín que publica, invitaciones a eventos… Asisto cuando puedo a las jornadas y conciertos que organiza. Mi impresión externa es que el Colegio ha reali-zado un gran esfuerzo por adaptarse a las nuevas circunstancias y que parece estar teniendo éxito. Ahora que ha cumplido 125 años, de cara al futuro solo espero que siga haciéndolo tan bien como hasta ahora”.

n Licenciado en Física por la Universidad de Sevilla. Mejor expediente académico Promoción 1990-1995.

n Premio Investigadores Jóvenes 1997 por la Real Academia Sevillana de Ciencias y la Real Maestranza de Caballería de Sevilla.

n Investigador contratado por la Ludwig-Maximilians-Universität, Múnich (Alema-nia) (2000-2002) y por el Max-Planck-Institut für Metallforschung, Stuttgart (2002-2004).

n Profesor Titular del Departamento de Física Atómica, Molecular y Nuclear de la Universidad de Sevilla desde 2009.

Álvaro Domínguez Álvarez Profesor Titular del Departamento de Física Atómica, Molecular y Nuclear de la Universidad de Sevilla

“La influencia del Colegio fue decisiva en mi carrera”


238

Ana Rodríguez trabaja en Bruselas, en la Comisión Europea, y en ello, asegura, tuvo mucho que ver el Colegio: “Fue decisivo para mí en cuanto que contribuyó a que tuviese la apertura de miras suficiente para creer que Europa se puede construir, y que hay personas y hechos concretos detrás de su construcción”. Y eso que solo estuvo un curso en San Francisco de Paula, el COU del 87-88. En su caso, la distancia no ha hecho el olvido, y sigue viendo a algunos compañeros cuando viene a Sevilla, y mantiene el contacto con otros a través de las redes sociales. Además, nos cuenta que también hay antiguos alumnos, de promociones diferentes, que viven en Bruselas y a los que ve con cierta regularidad. De sus recuerdos, destaca un nombre propio: “D. Luis Rey Romero, sin ninguna duda. Sin él, hoy no estaría donde estoy, ni sería quien soy”.

LA APERTURA A UN MUNDO NUEVO. “Estudié COU en el Colegio en el año académico 1987-88. La decisión de matricularme fue tomada de forma conjunta con mi familia, dados los lazos que nos unían, y nos unen, a la familia Rey. Por supuesto, la calidad de la enseñanza del Colegio fue determinante a la hora de tomar la decisión. (…) El recuerdo

de mi paso por el Colegio es óptimo. Para mí supuso la apertura a un mundo nuevo, donde se encontra-ban y convivían mentali-dades muy diferentes. (…) En una clase había chicos y chicas de medios socia-les, filosóficos y culturales muy diferentes. (…) Yo era una buena estudiante, en Letras mixtas (fui Premio Extraordinario de Bachi-llerato). Disfruté y aprendí mucho con las clases de historia. Las matemáticas me gustaron también. Y por razones muy particulares, nunca olvidaré una clase intensiva de física. (…) Accedí a muchos conocimientos, impar-tidos con una perspectiva muy interesante. Los valores que me transmi-tieron fueron, entre otros, el humanismo, la excelencia y el valor de la capacidad de superación”.

n Licenciada en Derecho, especialidad Dere-cho Público por la Universidad de Sevilla en 1993.

n Master en Estudios de Derecho Europeo (LLM) por el Colegio de Europa de Brujas, Bruselas, en 1994, con un proyecto de inves-tigación titulado “Los instrumentos jurídicos de la política regional en Andalucía”.

n En 1994 obtiene el Diploma en Comuni-dades Europeas de la Escuela Diplomática del Ministerio de Asuntos Exteriores y en 1998 el Diploma en Derecho Europeo de la Academia de Derecho Europeo del Instituto Universitario de Florencia, Italia.

n Comenzó su trayectoria profesional en 1994 ligada a la Universidad de Sevilla, donde formó parte del equipo de investiga-ción del Departamento de Derecho Público Internacional.

n En 1996 viaja a Bruselas donde trabaja para la Delegación de la Junta de Andalucía en esta ciudad.

n En 2000 pasa a la Dirección General de Mercado Interno y Servicios de la Comisión Europea, trabajando en las directivas para el reconocimiento de cualificaciones profesio-nales.

n En 2008 es nombrada Senior Adminis-trator de la misma Dirección General de la Comisión Europea, con responsabilidades en la constitución de empresas privadas euro-peas, estatutos para las empresas europeas y la coordinación de infracciones.

“El Colegio se ha adaptado a los

tiempos, y a las nuevas necesidades

que derivan de la sociedad en

que vivimos, pero los valores fundamentales,

como la excelencia, la tolerancia y el

respeto, se han mantenido”

Ana María Rodríguez PérezSenior Administrator de la Comisión Europea

“El Colegio me hizo ver que Europa se puede construir, y que hay personas detrás de ello”


239

SENTIRSE “FRANCISCANO”. “La diferencia entre las instituciones edu-cativas está en su personalidad. Los contenidos académicos son impor-tantes, el aprendizaje de idiomas, de Ciencias y de Artes, de deporte. Es fundamental también ofrecer instrumentos a los alumnos para que ellos puedan utilizarlos no sólo en sus estudios superiores, sino también a lo largo de sus vidas personales y profesionales. Pero lo esencial de una institución educativa es ser capaz de transmitir valores, en el más alto sentido de la palabra, que permitan que los alumnos se identifiquen con ella, aún después de haber terminado sus estudios. En resumen, es sentirse ‘franciscano’. (…) Yo creo que las palabras que mejor definen la personalidad del Colegio son acogida, tolerancia, respeto y amor por lo bien hecho”.

DECISIVO PARA CREER EN EUROPA. “El paso por el Colegio fue decisivo para mí en cuanto que contribuyó a que tuviese la apertura de miras suficiente para creer que Europa se puede construir, y que hay personas y hechos concretos detrás de su construcción. Recuerdo una frase de D. Luis Rey Romero, que me ha marcado: ‘se puede tener la profesión que se quiera, pero siempre hay que ser un buen profesional’. (…) D. Luis Rey Romero, sin ninguna duda, fue la persona que más me marcó. Sin él, hoy no estaría donde estoy, ni sería quien soy”.

LAZOS DESDE BRUSELAS. “Dado que vivo en Bruselas, sigo viendo a algunos antiguos compañeros cuando voy a Sevilla. Facebook ha permitido estar en contacto con otros, aunque no nos vemos a menu-do. También hay antiguos alumnos, de promociones diferentes, que viven en Bruselas y a los que veo con

cierta regularidad. (…) Entre los compañeros de promoción hay profesio-nales brillantes en los campos más diversos, de la Medicina a la Música, pasando por el Derecho (…) Cuando voy a Sevilla, me gusta pasar por el Colegio, y disfruto viendo cómo ha evolucionado. Desafortunadamen-te, la distancia hace que la participación activa en las actividades sea difícil”.

OTRA MANERA DE EXPLICAR LA HISTORIA. “Me acuerdo en particular de una clase de historia que ya los compañeros de años anteriores nos habían anunciado. Se trataba de la clase en que D. José María Garrido relataba la muerte de Rasputín. Aquel silencio interrumpido por la po-tente voz del Profesor, aquellas miradas admirativas de los alumnos, me hicieron descubrir otra manera de explicar la Historia”.

CAMBIAR PARA QUE NADA CAMBIE. “El Colegio se ha adaptado a los tiempos, y a las nuevas necesidades que derivan de la sociedad en que vivimos. En todo caso, los valores fundamentales, como la excelencia, la tolerancia y el respeto se han mantenido. Así, la apertura a Europa y

al mundo, a las Ciencias y a las Artes, la importancia del deporte, el valor de todas las personas, forman parte de la esencia del Colegio. (…) Cada generación es hija de su tiempo y el Colegio nos ha ofrecido siempre lo más que se podía ofrecer en cada momento. Las nuevas tecnologías, la sociedad de consumo y la movilidad de las personas tienen una clara influencia en la metodología actual. Dicho esto, también los ‘antiguos’ salimos con una formación académica y personal inmejorable. (…) Creo que el éxito del Colegio en el futuro dependerá de la conjunción de dos factores: seguir cambiando para que nada cambie. Dicho con otras palabras, adaptarse a los tiempos sin perder la esencia de la Institución”.

“Sin D. Luis Rey Romero, no estaría donde estoy, ni sería quien soy. Recuerdo especialmente una frase suya que me marcó: se puede tener la profesión que se quiera, pero siempre hay que ser un buen profesional’’

“Para mí llegar al Colegio en COU

supuso la apertura a un mundo nuevo,

donde se encontraban y convivían

mentalidades muy diferentes”

240

Ingeniero de Telecomunicaciones, Profesor de la Universidad de Sevilla, Francisco Jose Simois Tirado fue un magnífico estudiante en el Colegio, en el que logró el Premio Extraordinario de Bachillerato y el primer puesto de la Fase Nacional de la Olimpiada de Física. Hoy precisamente colabora con el Colegio preparando a sus alumnos para esa Olimpiada y dando la clase de física del Programa del Diploma del Bachillerato Internacional. Por eso, y porque su mujer es antigua alumna del Colegio, y sus dos hijos están en la Escuela Infantil, dice tener la sensación de no haberse ido nunca del todo. Recuerda la exigencia a la que estaban sometidos todos los alumnos, pero al tiempo la cercanía y el ambiente casi familiar, y asegura que el Colegio fue para él como un tercer padre, cariñoso pero exigente, cercano pero riguroso, “alguien a quien siempre acudirías si tienes un problema, pero también alguien que te pide cuentas si no le respondes con el mismo nivel de compromiso que él te ofrece”.

CON LA PERSPECTIVA SUFICIENTE. “Ya se sabe que el tiempo es el que da la verdadera perspectiva de cualquier hecho acontecido, y con el tiempo mi perspectiva de lo que fue mi paso por el Colegio no ha hecho sino mejorar más y más. Recuerdo, desde luego, la enorme exigencia a la que estábamos sometidos los alumnos, lo cual no era óbice para que el trato que recibíamos por profesores, directiva y personal en general fuera casi familiar. El Colegio nos trataba con cariño pero, al mismo tiempo, ponía el máximo es-fuerzo para guiarnos por el camino del trabajo y la responsabilidad. (…) Para mí fue como un tercer padre: cariñoso pero exigente, cercano pero riguroso, alguien a quien siempre acudirías si tienes un problema, pero también alguien que te pide cuentas si no le respondes con el mismo nivel de compromiso que él te ofrece”.

NI SUPERIOR NI INFERIOR A NADIE. “Ante todo, el Colegio me enseñó a ver que es necesario el esfuerzo por hacer las cosas bien. El conocer la responsabilidad de mis propias decisiones me indicaba que el traba-jo constante era la máxima que debía seguir en todo momento. Por otro lado, también aprendí a respetar a los demás, fuese cual fuese su condición. A no creerme superior a nadie, pero tampoco inferior. (…) En el terreno de las ideas, el Colegio jamás fomentaba ninguna postura por encima de otra, sino que inculcaba en el alumno la necesidad de formar su propia forma de pensar. Eso sí, como decía antes, siempre bajo el respeto a todos los demás”. AGRADECIDO A TODOS. “No quisiera destacar a ningún profesor por encima de los demás. Todos pusie-ron su granito de arena en mi formación personal y académica. Todos trataron de esforzarse, conmigo y con mis compañeros, para que en el futuro fuésemos personas de bien. No solo ellos, en mayor o menor medida el resto del personal del Colegio también colaboró en esa labor, así que a todos ellos les estoy igualmente agradecido”.

n Ingeniero de Telecomunicaciones por la Universidad de Sevilla. 1997.

n Doctorado en Ingeniería de Telecomunica-ciones desde 2005.

n Profesor Asociado desde 1997 en la ETSII donde pertenece al Departamento de Teoría de la Señal y Comunicaciones e imparte las asignaturas de Sistemas de Transmisión, Tratamiento Digital de Señales y Fundamen-tos de Tratamiento Digital de Señales.

n Ha participado en numerosos congresos relacionados con su área de conocimiento.

Francisco José Simois TiradoIngeniero de Telecomunicaciones, Profesor de la Universidad de Sevilla

“El Colegio fue para mí como un tercer padre, cariñoso pero exigente, cercano pero riguroso”


241

ESTÁ TODO DICHO. “Tengo la suerte de conservar excelentes relaciones con algunos antiguos alumnos de mi promoción. Con decir que tanto mi esposa como el padrino de bautismo de mi hijo mayor fueron compañeros míos en el Colegio, creo que está dicho todo. Además, sigo teniendo cierto contacto con bastantes otros de ellos, y aunque nos vemos quizá menos de lo que deberíamos, lo hacemos regularmente en cualquier caso”.

SOBRE UN PROFESOR NOVATO. “¿Anécdotas? Muchísimas. Ante todo, por su evidente carácter emotivo para mí, diré que el primer día que llegué al Colegio (en 1º de BUP) estaba hecho un manojo de nervios porque no sabía qué me iba a encontrar exactamente y porque no conocía a nadie. Al entrar en la clase, me coloqué en el primer pupitre que se me ocurrió y coincidió que, a mi izquierda, se sentó una chica que también era nueva y que estaba igual de nerviosa y desconcertada que yo. Ella fue la primera persona con la que hablé ese día. Hoy es mi esposa. También querría referir como anécdota la relación extraña, por infrecuente, que cierto profesor mantenía con varios de sus alumnos, incluido yo. Era un profesor novato, pues aquel era su primer año como docente, y tal vez por ello se sintió siempre muy cercano a nosotros. Éramos no pocos los que regularmente íbamos a su casa a charlar, escuchar música (tanto discos como a él mismo tocando el piano) o participar en juegos de mesa. No sé si es relevante añadir que dicho profesor se llamaba Luis Rey Goñi…”.

NUNCA ME HE IDO DEL TODO. “Bueno, realmente se puede decir que nunca me he ido del todo. Justo al terminar nuestra promoción su andadura por el Colegio (curso 1991-1992), daba sus primeros pasos la Asociación de Antiguos Alumnos Rey Romero, de la cual tengo el orgullo de ser uno de sus socios fun-dadores. Desde entonces he tenido una estrecha vinculación con ella, participando en muchas de sus ac-tividades e incluso colaborando en la organización de alguna de ellas. Todo ello se ve acrecentado por el hecho de que mi mujer ha sido miembro de la Junta Directiva de la Asociación durante seis años y medio (primero como Vocal, luego como Secretaria y finalmente como Vicepresidenta). Por otra parte, desde que terminé mi carrera universitaria colaboro como profesor en el Colegio. Concretamente, son ya catorce los años que llevo preparando a los alumnos para la Olimpiada de Física. Además, en los dos últimos cursos académicos, es decir, aquellos en los que lleva ofertando el Colegio el Programa del Diploma del Bachille-rato Internacional, imparto parte de la asignatura de física del mismo. Por último, mis dos hijos están en la Escuela Infantil”.

CULTURA DEL ESFUERZO. “Sin duda alguna el Colegio ha integrado con acierto nuevas técnicas educati-vas y mejoras. El manejo de las herramientas tecnológicas, la pluriculturalidad y el bilingüismo son aspec-tos que los alumnos de hoy en día dominan con naturalidad, lo cual es elogiable. No obstante, creo que ello no debería ir en perjuicio de los antiguos métodos y que la cultura del esfuerzo y la responsabilidad debería seguir siempre presente, pues no le veo incompatibilidad alguna con las nuevas técnicas educati-vas”.

PRESERVAR LA IDENTIDAD. “No creo que sea yo el más indicado para dar consejos de cómo conducir el Colegio. Sin duda, nadie mejor que el actual Director conoce cuál es el espíritu y la forma de hacer las cosas que su familia ha trasladado al San Francisco de Paula y que ha hecho que este sea lo que ha sido durante generaciones. Basta con mantener aquello y preservar la identidad del Colegio para que este per-manezca entre nosotros otros 125 años y muchísimos más”.

UNA FORMACIÓN INTEGRAL. “Sé de primera mano que el Colegio le dará a mis hijos no solo una mejor educación académica que otros centros, sino también una formación integral en valores que, a día de hoy, es muy difícil de encontrar en otros colegios”.

“Tengo la suerte de conservar excelentes relaciones con algunos antiguos alumnos. Con decir que tanto mi esposa como el padrino de bautismo de mi hijo mayor fueron compañeros míos en el Colegio, creo que está dicho todo”

242

Ingeniero de Telecomunicaciones, lleva la sangre emprendedora en sus venas. Con quince años, estando en el Colegio en 2º BUP, tuvieron que amputarle su pierna izquierda en Nueva York. Lejos de arrugarse por esa dificultad, hoy Manuel Boza Hernández tiene una empresa que se dedica precisamente al diseño, fabricación y comercialización de componentes protésicos para amputados de extremidad inferior. Precisamente de aquel momento guarda los recuerdos más emotivos sobre el Colegio. Los recuerdos de un jovencísimo Luis Rey Goñi, recién llegado como profesor, que, para que no perdiera el ritmo de estudios, iba a su casa a traerle y explicarle personalmente los apuntes de física. “Me sigo emocionando cuando pienso en ello, le estaré agradecido siempre y, por supuesto, sigo conservando sus apuntes”, comenta.

LA MEJOR HERENCIA. “Ingresé en 1989 en 1º de BUP, y estuve 4 años, hasta que finalicé COU. Mis padres siempre han considerado que la mejor herencia que me podían dejar era la mejor educación posible y que el resto dependería exclusivamente de mí. Teníamos referencias de amigos que estuvieron en el internado y por eso no lo dudaron e hicieron todo lo posible para que yo ingresara en el Colegio”.

ADAPTACIÓN PROGRESIVA. “El primer trimestre suspendí hasta Religión, y no es broma. Al principio me costó mucho adaptarme al nivel de exigencia y hacerme con una rutina de trabajo. Gracias al esfuerzo

con mis padres y a mis ganas de superar el reto fui capaz de corregirme. Al final me convertí en un estudiante muy bueno. Mis materias preferidas eran de Ciencias. Me sigue encantando descubrir cómo funciona la natu-raleza y los dispositivos que diseñamos los humanos, y comprobar cómo encaja todo y se explica con materias como biología, dibujo, química, física y matemáticas”.

PASIÓN POR LA EDUCACIÓN. “Del Colegio destaco su pasión por la edu-cación, tanto en valores como en conocimiento. (…) Visto con perspectiva, en el Colegio aprendí a trabajar para conseguir los objetivos marcados y lo que es aún más importante, que con esfuerzo se llega donde uno quiera. Si además uno descubre cuál es su verdadera vocación, el camino es mucho más interesante y el esfuerzo no pesa tanto”.

NOMBRES EN EL RECUERDO. “Es curioso, pero a pesar de lo malo que

n Ingeniero de Telecomunicaciones.

n MBA Internacional, Instituto de Empresa.

n Ingeniero de Compras y Pre-ventas de Telvent.

n Director Comercial del Sur de Europa en ÖSSUR, 2º fabricante mundial de prótesis para amputados.

n Director de Desarrollo de Negocios de Adapta Soluciones Socio-sanitarias.

n Fundador y Socio-Director General de LegsGo! Bioprotésica, primera empresa española dedicada al diseño, fabricación y comercialización de componentes protési-cos para amputados de extremidad inferior.

Manuel Boza Hernández Ingeniero de Telecomunicaciones y Empresario, fundador y Director de LegsGo! Bioprotésica

“Me sigo emocionando cuando recuerdo a Luis Rey Goñi viniendo a mi casa a traerme y explicarme personalmente los apuntes, antes de operarme”

“Mis padres siempre han considerado que

la mejor herencia que me podían dejar era

una buena educación e hicieron todo lo posible para que

yo ingresara en el Colegio”


243

soy para recordar nombres, me sigo acordando de todos los profesores del Colegio. No sólo me marcaron aquellos que me enseñaban las asignaturas que más me interesaban, las de Ciencias. Mis estudios coincidieron con la llegada de profesores jóvenes de asignaturas de Letras con ilusiones reno-vadas y que hicieron que disfrutara incluso con latín o literatura. ¡Sigo sin creérmelo!”.

PROFUNDO ARRAIGO. “Sigo conservando buenos amigos del Colegio. Algunos coincidimos posteriormente en la Escuela de Ingenieros de Sevilla. Y por supuesto, siempre que podemos quedamos para recordar viejos tiempos. (…) Conozco algunos compañeros que han tenido una trayectoria profesional muy destacada. Pero cuanto mayor me hago y más crezco a nivel profesional, más compañeros de otras promociones conozco. Me sigo asombrando de lo grande que es la red del Colegio y el profundo arraigo que tiene en la sociedad sevilla-na y andaluza”.

SEGURIDAD PARA SUPERAR LOS RETOS. “El paso por el Colegio ha sido fundamental en mi carrera. Me dio la tranquilidad de poder enfrentarme a cualquier reto futuro con la seguridad de poder conseguirlo con mi esfuerzo. Los profesores me contagiaron su curiosidad y pasión por aprender y encontrar solucio-nes a problemas. Por aquellos años dudaba entre estudiar Ingeniería o Medicina. Me decidí por la Inge-niería, pero más tarde he sido capaz de orientarme para ofrecer soluciones en el sector sanitario. Después de unos años, he conseguido establecer mi propia empresa, LegsGo!, el primer fabricante de componentes protésicos para amputados en España”.

APUNTES A DOMICILIO. “Me amputaron la pierna izquierda en Nueva York estando en 2º de BUP. Ya venía de un tratamiento anterior de quimioterapia que recibí con 11 años. Como me iba a perder el último trimestre, un jovencísimo Luis Rey recién llegado al Colegio no quería que perdiera el ritmo ni el año tan bueno de estudios que llevaba. Preparó sus apuntes del tercer trimestre de física y fue durante algunas tardes a explicármelo todo a mi casa, antes del viaje a Nueva York. Me sigo emocionando cuando pienso en ello, le seguiré agradecido siempre y, por supuesto, sigo conservando sus apuntes”.

LAZOS. “Intento no perderme ninguno de los eventos del Colegio. Pero para mí, lo importante son realmente los eventos informales que surgen a raíz de los encuentros que se producen con los amigos y compañeros del Colegio”.

VOCACIONES EMPRENDEDORAS. “No tengo ya una vinculación directa con el Colegio, por lo que me resulta más complicado valorar su proyecto educativo actual. Aun así, y basado en mi propia experiencia, creo que sería muy interesante inculcar a los jóvenes la pasión por emprender proyectos empresariales propios, y sobre todo, a perder el miedo a fracasar en ellos. Creo que en esa línea aún nos queda mucho por aprender de sociedades como la americana, por ejemplo”.

NO HAY FRONTERAS. “Obviamente, mi recomendación es que continúen en la línea de inculcar a sus alumnos la pasión por aprender, por superarse y tener la ambición de alcanzar todas las metas que se pongan en el futuro. En un mundo como el actual, en el que ya no hay fronteras, será cada vez más importante educarse en un entorno que ofrezca la posibilidad de aprender lo mejor de cada cultura (…). Creo que las mejores instituciones educativas serán aquellas que apuesten por enseñar a sus alumnos a desenvolverse en el entorno real, global y cambiante que nos rodea, como complemento del conocimiento y los valores adquiridos en las aulas”.

“A pesar de lo malo que soy para recordar nombres, me sigo acordando de todos los profesores del Colegio”

244

A pesar de su juventud, Emilia Gómez Gutiérrez reúne ya un currículo verdaderamente notable. Ingeniera de telecomunicaciones, es profesora e investigadora del Grupo de Investigación en Tecnología Musical (MTG) de la Universitat Pompeu Fabra (UPF) en Barcelona, autora de más de 60 publicaciones científicas y varias patentes, socia fundadora de la empresa BMAT (Barcelona Music and Audio Technologies) y ha recibido varios premios por su investigación centrada en las aplicaciones de la ingeniería y la tecnología en el terreno musical. Considera que su paso por el Colegio influyó “muchísimo” en la carrera que hizo, y también “en el hecho de hacer investigación”. Dice además que en el Colegio aprendió una cosa que le ha resultado muy importante para su vida: que para ser muy bueno en algo, no basta con tener la capacidad, sino que hay que trabajar duro.

EN MINORÍA. “Empecé en el Colegio en 1º de BUP y estuve hasta COU. A mis padres les gustó la idea de un colegio lai-co, tolerante y donde se premiara la excelencia académica y se valorara el esfuerzo. Guardo muchísimos recuerdos. Lo primero es que yo venía de un colegio de monjas de niñas, y el primer día de clase me encontré que éramos sólo cuatro o cinco niñas entre tanto niño. Me senté en la columna del medio, última fila, con mi amiga Olga Castelló, y de ahí no nos movimos hasta el último día de COU. Desde ese día he estado en minoría, y más cuando elegí Ciencias puras. Éramos sólo dos niñas en dibujo técnico con D. Roberto, pocas en telecos y actualmente la única mujer de mi grupo de investigación. ¡Menos mal que eso está cambiando!”.

GENTE BUENA Y DIVERSA. “La excelencia intelectual, el aprecio por el esfuerzo y la tolerancia de ideas son, para mí, los rasgos que mejor definen la personalidad del Colegio. (…) Creo que una de las cosas que valoro más de lo que aprendí es que para ser muy bueno hay que trabajar, no basta con tener la capacidad. También me di cuenta de que había gente muy buena alrededor, compañeros, y que trabajando en equipo se puede llegar muy lejos. De hecho mi grupo de estudio de la carrera estaba formado por amigos del Colegio más que nada. Por último, una de las cosas que me gustó es la variedad de gente, en mi clase había gente de todo tipo”.

UN BUEN ‘TUTE’. “Tengo muy buen recuerdo de D. Adolfo, profesor de inglés, músico además. También de D. Bernardo, y de sus clases de Química, de D. Genaro y de D. José María Garrido, por sus historias sobre todos los lugares del mundo. Y finalmente me marcó D. Luis, que nos dio un ‘tute’ de matemáticas y física que nos cundió hasta 2º de carrera”.

n Su investigación está centrada en las apli-caciones de la ingeniería y la tecnología en el terreno musical.

n Cursó la carrera de Ingeniería de Teleco-municaciones en la Universidad de Sevilla, al mismo tiempo que estudios musicales en el Conservatorio Superior de Música.

n Posteriormente se trasladó a Francia, donde realizó un Master en Acústica, Procesado de Señal e Informática aplicadas a la música en el IRCAM, Paris.

n Realizó su Doctorado Europeo en Informá-tica y Comunicación Digital en la Universitat Pompeu Fabra, Barcelona

n Es actualmente profesora e investigadora de la Universitat Pompeu Fabra (UPF) en Barcelona, autora de más de 60 publica-ciones científicas y varias patentes, socia fundadora de la empresa BMAT (Barcelona Music and Audio Technologies) y ha recibido varios premios por su investigación. Además, ha participado en numerosos proyectos de investigación con financiación pública y ha sido investigadora visitante en varias instituciones, entre ellas la École Nationale Supérieure de Télécommunicacions (París), el Royal Institute of Technology (Estocolmo) y la Universidad McGill (Montreal). Imparte también clases en la Escuela Superior de Música de Catalunya.

Emilia Gómez GutiérrezIngeniera de Telecomunicaciones, Empresaria e Investigadora en Tecnología Musical

“Para ser muy bueno, no basta con tener la capacidad, hay que trabajar, y eso lo aprendí en el Colegio”


245

AMIGOS EN LA DISTANCIA. “Claro, conservo amigos, no los veo mucho porque vivo en Barcelona pero con un grupito hice toda la carrera de telecos: Juanjo Pérez, Sergio González, Carlos Mascort, Nieves Estrada, Carlos Espada, Emilio…. También tengo a mi amiga Olga Castelló, a Vir-ginia Luzón, que es profesora en la Universidad Autónoma en Barcelona, y luego muchos con los que tengo contacto por internet: Alfonso Alés, que vive en Sídney, a Diego del Río, que vive en San Francisco, etc. De hecho, ahora pensándolo bien, la verdad es que conservo muchos amigos y conocidos del Colegio”.

EN EL CAMINO HACIA LA INVESTIGACIÓN. “El Colegio influyó mu-chísimo en la carrera que hice, y creo que también en el hecho de hacer investigación”.

ANÉCDOTAS. “Recuerdo que mi clase de 2º de BUP era lo más. Una vez, un compañero pagó a los de la cabra, que se pasaron toda la clase de ma-temáticas de D. Ramón tocando en nuestra ventana. Como esas muchas pero no las escribiría en un libro de aniversario del Colegio”.

EVOLUCIÓN. “La conozco, pero no al detalle, al vivir lejos de Sevilla. Aprecio el trabajo que se está haciendo para mejorar el nivel de los estu-diantes. Creo que actualmente es muy importante fomentar los idiomas, la internacionalización, valorar el trabajo y el esfuerzo, y fomentar la madurez de los niños y su autonomía”.

CONSEJOS. “Aconsejaría que sigan premiando la excelencia académica, la tolerancia y el respeto. Que se fomente el intercambio internacional y el espíritu científico. Que se evite que el Colegio se cierre en sí mismo por cuestiones sociales o económicas, y que se fomente la apertura a nuevas tendencias y a diferentes pareceres”.

LO MEJOR DE CADA ESTUDIANTE. “El Colegio debe aportar a sus alum-nos pluralidad, recursos e innovación, que a veces no es posible en otros contextos. Creo que lo que diferenciará a las mejores instituciones educa-tivas es la capacidad de sacar lo mejor de cada estudiante, de adaptar la educación a cada individuo y de guiar a cada joven para elegir lo mejor posible su camino en la vida, aprovechando al máximo sus posibilidades”.

“También me di cuenta de que había gente muy buena alrededor, compañeros, y que trabajando en equipo se puede llegar muy lejos. De hecho mi grupo de estudio de la carrera estaba formado por amigos del Colegio más que nada”

“El Colegio debe evitar cerrarse en sí mismo por cuestiones sociales y económicas, y debe fomentar la apertura a nuevas tendencias y diferentes pareceres”

246

Durante sus años en el Colegio no tenía ni idea de que su camino sería finalmente la música, pero dice que el paso por las aulas del San Francisco de Paula le aportó otras cosas importantes en su vida, y principalmente sentir que tenía una segunda familia. Considera que la rectitud es el rasgo que mejor define el Colegio, un valor que echa en falta en la sociedad actual, y opina que el futuro de este centro educativo pasa por conservar su pasado, y al tiempo por abrir a sus alumnos a otras culturas y experiencias internacionales. De padre sirio y madre palestina, Fahmi Alqhai pasa por ser uno de los intérpretes de Música Antigua más brillantes y con más proyección de su generación y es requerido por las formaciones camerísticas más importantes del panorama nacional e internacional de Música Antigua. Desde 2009 es el Director del Festival de Música Antigua de Sevilla.

HERMANO DE ALUMNO. “Mi ingreso fue en el año 1990, estuve los últimos 4 años (Bachillerato y COU). Mis padres tomaron esa decisión gracias a que mi hermano ya era alumno del Colegio y supongo que estaban felices con la educación que recibía en el centro”.

APLICADO CON LA GUITARRA ELÉCTRICA. “El recuerdo es muy grato, tanto por la relación que tenía con los alumnos y colegas como por los profesores, siempre atentos y gen-tiles. Era un estudiante medio, nunca he sido exagerada-mente aplicado a esa edad menos con la guitarra eléctrica. Las materias que más me atraían y captaban mi atención fueron filosofía y matemáticas”.

PRINCIPALMENTE REC-TITUD. “A mi juicio, el rasgo que mejor define el Colegio es la rectitud, que en estos tiempos está pe-nosamente infravalorada y desprestigiada”.

SEGUNDA FAMILIA. “Posiblemente lo más im-portante de mi paso por el Colegio fue el sentir que

n Ingresa en 1994 en el Conservatorio Superior de Sevilla Manuel Castillo para estudiar la viola da gamba con Ventura Rico. Continúa su formación en las prestigiosas escuelas Schola Cantorum Basiliensis (Basilea) y Conservatorio della Svizzera Italiana (Lugano)

n Paralelamente a sus estudios musicales obtiene la Licenciatura de Odontología por la Universidad de Sevilla.

n Ya en 1998 comienza su carrera de solista especializándose en el repertorio alemán para la viola da gamba.

n Es cofundador, junto a la soprano Marivi Blasco, y Director del grupo Accademia del Piacere especializado en la interpretación del repertorio musical del seicento italiano. Funda-dor junto a su hermano Rami Alqhai del sello descográfico Alqhai & Alqhai n Es requerido por las formaciones camerísticas más importantes del panorama internacional. Ofrece regularmente conciertos en toda Europa, Japón, EEUU y Latinoamérica.

n En calidad de solista ha actuado con orques-tas de la talla de Orquesta Nacional de España, Orquesta Filarmónica de Galicia, Ensemble Vocal de Lausanne (Michael Corboz), Orquesta Barroca de Sevilla. Al Ayre Español, entre otras.

n Ha realizado numerosas grabaciones para sellos discográficos (Alia Vox, Glossa, Winter & Winter, Tactus, Arsis, Enchiriadis, etc,), televi-siones y radios en todo el mundo. n Además de la Música Antigua ha colaborado como solista en espectáculos de flamenco en la Bienal de Flamenco de Sevilla y también realiza incursiones en el campo de la música contemporánea y el jazz.

n Desde 2009 es Director artístico del FeMAS, festival de música antigua de Sevilla.

Fahmi Alqhai KouriMúsico, Director del Festival de Música Antigua de Sevilla

“Lo más importante de mi paso por el Colegio fue el sentir que tenía una segunda familia”

“Todos estaban orgullosos de algún

modo de pertenecer a esta gran ‘hermandad’

y evidentemente, yo también”


247

tenía una segunda familia. Todos estaban orgullosos de algún modo de pertenecer a esta gran ‘hermandad’ y evidentemente, yo también”.

ACEPTACIÓN. “Yo mismo era diferente a mis compañeros por mis raíces árabes y en ningún momento sentí ningún rechazo por parte de nadie, ni alumnos ni profesores”.

UN PROFESOR. “D. Genaro Capote fue el profesor que más me influyó”.

SIEMPRE SE INTENTA. “Conservo amigos del Colegio, sí, aunque por motivos profesionales resulta muy difícil el encuentro. Pero siempre se intenta”.

EL CAMINO DE LA MÚSICA. “No puedo negar que en estos años no tenía ni idea de que mi camino era la música. Me di cuenta más tarde”.

APERTURA SIN PERDER LAS RAÍCES. “No soy muy conocedor de los cambios y las metamorfosis que ha vivido el Colegio. Siempre he pensado que la apertura hacia el futuro, la mezcla de culturas (idiomas-globaliza-ción) y la investigación son la base para cualquier tipo de desarrollo, pero siempre sin olvidar las raíces y orígenes que te han hecho ser quien eres”.

VALORES. “No creo poder hacer un juicio muy objetivo de la educación de hoy en día. Pero no creo que estuviera muy errado en pensar que el nivel educativo que surge desde el hogar y que después se refleja en toda la formación de los chicos está muy mermado y adelgazado en estos últi-mos años. La falta de respeto, síntoma común entre los chavales actuales, es un indicador de esa decadencia de valores y principios que sufre toda nuestra sociedad”.

CONSERVAR EL PASADO. “¿Una recomendación para los próximos 125 años? No perder nunca el pasado”.

INTERNACIONALIZACIÓN. “Debido a la cantidad de años que he vivido fuera de España, al constante contacto que tengo con personas de otras culturas y la importancia, que cada día más, tiene la internacionalización de los seres humanos, creo que hoy no se puede perdonar de ningún modo que las generaciones que se están preparando para el futuro no salgan de su nido hasta que estén más allá de la Universidad”.

“No se puede perdonar de ningún modo que las generaciones que se están preparando para el futuro no salgan de su nido hasta que estén más allá de la universidad”

“En ningún momento sentí ningún rechazo por parte de nadie, ni alumnos ni profesores, por mis raíces árabes”

“El rasgo que mejor define el Colegio es la rectitud, que en estos tiempos está penosamente infravalorada y desprestigiada”

248

Politóloga, autora del recordado libro La Forja de un Rey, sobre la transición española, Laurence Debray trabaja hoy en París en el Departamento Financiero del Grupo BOUYGUES SA – COLAS, aunque aún le queda tiempo para llevar su propia empresa, dedicada a la distribución de productos alimentarios orientados a la salud y colaborar en una publicación especializada en riesgos internacionales. En el Colegio estuvo solo un curso, el 90-91, del que guarda “muy buenos recuerdos”. Le gustaba mucho la literatura española y las clases de religión, y lo recuerda con un centro educativo “exigente y abierto, donde me acogieron muy bien a pesar de no ser española”. Además de los buenos recuerdos, del Colegio conserva una muy buena amiga, que le ayudó mucho en su adaptación, y con la que queda siempre que viene a Sevilla. Tras su paso por el Colegio y completar sus estudios Preuniversitarios se licenció en Historia en la Universidad de la Sorbona y posteriormente complementó su formación con diferentes masters sobre Historia Internacional y gestión de riesgos internacionales. Además de seguir apostando por los idiomas y las tecnologías, su recomendación al Colegio para los próximos años es que mantenga el nivel de exigencia y aumente su apertura al mundo.

UN COLEGIO CON BUEN NIVEL DE FRANCÉS. “Si no recuerdo mal fue el curso del 90-91, cuando tenía 15 años. Solo estuve un curso, el de 2º de BUP. Mis padres me matricularon allí porque yo llegaba de Francia y en Sevilla por entonces no había Liceo Francés, y cuando mis padres preguntaron cuál era el mejor colegio de la ciudad, le reco-mendaron el San Francisco de Paula. Ellos buscaban para

mí un colegio que tuviera un buen nivel de francés y además éste quedaba cerca de casa”.

UN AÑO DIFÍCIL, PERO CON BUENOS RECUER-DOS. “Tengo muy buenos recuerdos. Yo en España fui una estudiante normal, me costaba mucho aprender y fue un año muy difícil para mí, además estudiaba asigna-turas que yo en Francia nunca había tenido y era un sistema educativo diferente. Me gustaba mucho la asignatura de literatura española y me encantaban las clases de religión porque en Francia no se daba religión

n Licenciada en Historia en 1999 por la Universidad de la Sorbona, amplió su for-mación con el Master en Historia Interna-cional de London School of Economics en 2000 y cursos de posgrado en la Universidad de Nueva York en 2001. Durante los siguien-tes tres años, realizó el Master especializado en Gestión de Riesgos Internacionales, en la escuela de estudios superiores de Comercio HEC París.

n Desde 2005, trabaja en París en el Depar-tamento de Dirección Financiera del Grupo Bouygues SA – Colas, líder mundial en construcción de carreteras, donde se ocupa de la gestión de grandes proyectos.

n En 2008 creó y desde entonces gestiona Sante Sucree, una sociedad de importación y distribución de productos alimentarios orientados a la salud.

n Autora del libro La forja de un Rey (Ed. El Monte, 2000), sobre el papel del Rey Don Juan Carlos en el camino hacia la demo-cracia española, en la actualidad, colabora de forma habitual con la publicación espe-cializada en riesgos internacionales Risques Internationaux Nord Sud Expert.

n Con anterioridad, ha trabajado como ana-lista de mercado y de estrategias comerciales en multinacionales y grandes empresas de París y Nueva York, como Booz Allen Hamilton, Lazard Freres, HSBC y Credit Lyonnais Americas. Asimismo, ha realizado prácticas en los diarios Le Monde (París) y El Nacional (Caracas).

Laurence Debray Servan-SchreiberPolitóloga, Empresaria y Ejecutiva del Grupo BOUYGUES SA – COLAS en París

“Mis recuerdos son de un Colegio exigente y abierto, en el que me acogieron muy bien a pesar de no ser española”

“Siempre digo que se deberían fomentar la tecnología y los

idiomas y es algo que creo que el Colegio

está haciendo”


249

en los colegios, y además, el profesor que la impartía, D. Javier, me caía muy bien”.

TRABAJO Y ESFUERZO. “Lo recuerdo principalmente como un colegio muy exigente y muy abierto, donde me acogieron muy bien a pesar de no ser española. (…) En él me inculcaron, sobre todo, los valores del trabajo y del esfuerzo”.

UNA AMIGA QUE LA PONE AL DÍA. “De los profesores, recuerdo sobre todo al de religión de entonces, que se llamaba D. Javier. (…) En cuanto a los compañeros, a pesar de que solo estuve un año, conservo una muy buena amiga, Inmaculada Guzmán Carrizosa, que cuando voy a Sevilla quedo con ella. Ella me ayudaba mucho, me explicaba cuando no entendía las cosas y le guardo mucho cariño; sigo un poco conectada con ella a pesar de la distancia, y también me pone al día contándome cosas de otros compañeros”.

ELECCIÓN DE LA CARRERA. “No sé si influyó el Colegio o el hecho de vivir en España, pero para mí va todo junto. De hecho, hice una maestría sobre la transición española en Francia que publiqué en España y ahora también estoy preparando un libro sobre el Rey de España”.

MOMENTOS. “Me acuerdo que fuimos un día al Coto de Doñana con el profesor de religión, D. Javier, y fue una experiencia muy bonita, lo pa-samos muy bien. También recuerdo que teníamos un profesor de historia que en un momento dado habló de la Historia de Francia y yo lo percibí como algo extraño, como si no estuviera hablando de mi país”.

FUTURO. “Siempre digo que se deberían fomentar la tecnología y los idiomas y es algo que creo que el Colegio está haciendo”.

RECOMENDACIONES. “Le recomendaría que siga siendo muy selectivo y que siga premiando el esfuerzo y el trabajo. Que sea un colegio muy abierto hacia al mundo y muy exigente con sus alumnos”.

“Le recomendaría que siga siendo muy selectivo y que siga premiando el esfuerzo y el trabajo. Que sea un colegio muy abierto hacia al mundo y muy exigente con sus alumnos”

“Mis padres me matricularon allí

porque yo llegaba de Francia y en Sevilla

por entonces no había Liceo Francés, y cuando mis padres

preguntaron cuál era el mejor colegio

de la ciudad, le recomendaron el San

Francisco de Paula”

250

David García Ternero ingresó en el San Francisco de Paula en 3º de Bachillerato, buscando un Colegio que le preparara para el reto de sacar la Selectividad con nota y matricularse en Ingeniería de Telecomunicaciones. Según dice, su paso por el Colegio no sólo le sirvió para eso, sino que también le proporcionó la base de las competencias para ser después empresario. “Allí aprendí asumir retos importantes y a trabajar por objetivos y también a ajustar mi tiempo al milímetro”, comenta este ingeniero y emprendedor, Director general y socio fundador de Wellness Telecom, compañía especializada en proyectos de telecomunicaciones.

PREPARAR LA SELECTIVIDAD. “Ingresé en el año 1994, y la razón principal para matricularme fue prepararme para el reto de la Selectividad, ya que quería estudiar lo que finalmente estudié, Ingeniería de Telecomunicaciones, y prepararme de manera firme para el paso por la Universi-dad. Estuve dos años en el Colegio. (…) Fui buen estudiante, tuve buenos resultados, aunque recuerdo que lo que más me costó fue el inglés, para mí una de las asignaturas más importantes. También me gustó mucho la asignatura de biología de COU, lo que me hizo incluso pensar en estudiar Medicina, y también recuerdo que me gustó mucho historia de 3º BUP. (…) Tengo muy buenos recuerdos de mi paso por el Colegio, y de los muchos amigos que allí hice. Guardo re-cuerdos muy especiales del viaje de 3º de BUP a Jaca en el año 1995 y de los buenos momentos que pasamos, el viaje en tren, la discoteca, etc.”.

LA EXPERIENCIA DE INCORPORARSE EN UN GRUPO NUEVO. “Mi percepción de la persona-lidad del Colegio es la de un centro con muy alto nivel académico, centra-do en los resultados del alumno. En el Colegio aprendí a asumir retos importantes en la vida, y trabajar por objetivos, como fue el plantearme sacar Selectividad con alta

n Ingeniero Superior de Telecomunicaciones por la Escuela Superior de Ingenieros. Universidad de Sevilla. Especialidad Telemática. Proyecto Fin de Carrera: Seamless Handover en Mobile IPv6. Matrícula de honor.

n Año de estudios cursado en el Real Instituto Tecnológico de Estocolmo (KTH, Kungl Tekniska Högskolan). Agosto 2001-junio 2002.

n Beca de Investigación en Ericsson-KTH Suecia. Enero-junio 2002.

n Proyecto de diseño e implementación de una Overlay Network de servidores devideostraming. University of Michigan. 2003.

n Beca de Investigación. Escuela Superior de Ingenieros. Universidad de Sevilla.Enero-julio 2003.

n Beca de Postgrado. University of Michigan, Ann Arbor, USA. Agosto 2003- mayo 2004.

n Ingeniero de la Red Corporativa de la Junta de Andalucía, en SADESI (Sociedad Andaluza para el Desarrollo de la Sociedad de la Información). Junio 2004- enero 2005.

n Ingeniero de despliegue del proyecto RAP (Red de Accesos Periféricos) de la Red Corporativa de la Junta de Andalucía, en TELECOR. Enero 2005 – junio 2006.

n Ingeniero Experto de Red y Seguridad. CAP-GEMINI. NSMC Madrid. (Network and Security Management Centre). Junio 2005 –octubre 2005.

n Ingeniero Experto Networking TELSA DRAGA-DOS INDUSTRIAL. Octubre 2005 - agosto 2006.

n Responsable Departamento de Ingeniería VISASUR TELECOMUNICACIONES. Septiembre 2006 - julio 2008.

n Socio fundador y Director General de Wellness Tkelecom. Julio 2008- actualmente.

“Aprendí también por primera vez en la vida

a incorporarme a un grupo y a un entorno

nuevo, algo que me fue de enorme valor

en el futuro”

David García TerneroIngeniero de Telecomunicaciones y Empresario

“El Colegio me enseñó a asumir retos importantes y a trabajar por objetivos”


251

nota para poder estudiar Telecomunicaciones, a la vez que aprendía a ajustar mi tiempo al milímetro, ya que tuve que compaginar los estudios con entrenamientos diarios en un equipo de baloncesto. Aprendí también por primera vez en la vida a incorporarme a un grupo y a un entorno nuevo, algo que me fue de enorme valor en el futuro. Y el recibimiento me acuerdo que fue genial. Hice muchos amigos, de los cuales mantengo el contacto con bastantes”.

PLURALIDAD. “Me sorprendió mucho la pluralidad que había en el grupo de alumnos: alumnos que venían de familias de empresarios, de profesio-nales liberales, médicos, artistas, y todos convivíamos sin problemas en clase. Lo que quizás no se apreciaba por entonces era diversidad de raza o de nacionalidad, quizás porque no había tanta inmigración en España por entonces”.

LA HONRADEZ Y MODESTIA DE DON GENARO. “El profesor que más me influyó fue quizás D. Genaro Capote, Profesor de biología y tutor de COU, con su curiosidad, su honradez y su modestia”.

LOS AMIGOS QUE HICE. “Conservo varios de los amigos, y bastante a menudo coincido con muchos de los que fueron mis compañeros. (…) Es difícil destacar a alguno en especial, pero muchos de mis compañeros son médicos, arquitectos o empresarios de éxito. Mi vinculación con el Colegio viene sobre todo por el contacto con los amigos que hice entonces”.

COMPETENCIAS PARA SER EMPRESARIO. “El Colegio fue fundamental a la hora de poder elegir la carrera que quería, Ingeniería de Telecomu-nicaciones, y la base de las competencias para ser después empresario. También fue muy importante el apreciar una disciplina como el inglés”.

COSAS DE CADA ÉPOCA. “¡Me sorprendió muchísimo que prácticamen-te todo el mundo, en mi clase de 3º BUP, fumaba! Cada vez que había un recreo, la gente se iba rápidamente al patio de fumadores. Creo que son cosas de cada época, y en aquellos tiempos, el fumar estaba de

moda, pero a mí no me dejaba de sorprender”.

CLAVES PARA EL FUTURO. “Es muy importante la enseñanza de idiomas, en especial de inglés. Creo que se debería fomentar también los programas de intercambios con otros colegios de otros países. Y se debe mantener la enseñanza de valores fundamentales en el ámbito profesional como el trabajo de equipo y la orientación a resultados”.

LA INFLUENCIA DE LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS. “Las nuevas tecnologías tienen un peso muy impor-tante, y suponen aspectos muy positivos, como encontrar información al instante. Creo que habría que fomentar los contenidos interactivos, el material de estudio online, los foros de debate, etc.”.

ENTORNOS MULTICULTURALES. “Las mejores instituciones educativas se caracterizarán por el uso y aprendizaje de nuevas tecnologías, de nuevas disciplinas adaptadas a los requerimientos del presente y del futuro, el muy alto nivel de idiomas, y el enseñar a moverse por entornos multiculturales internacionales”.

“Es muy importante la enseñanza de idiomas y creo que se debería fomentar también los programas de intercambios con otros colegios de otros países”

“Se debe mantener la enseñanza de valores fundamentales en el ámbito profesional como el trabajo de equipo y la orientación a resultados”

252

Admitida en Imperial College, de Londres, y en la Universidad Autónoma de Madrid, donde cursa Primero de Medicina, Carlota Alonso Pardal lleva en realidad muy poco tiempo fuera del Colegio, y por eso dice que quizás aún le falte distancia para comprender íntegramente la suerte que ha tenido formando parte de “esta gran familia”. Sin embargo, en estos meses ya se ha dado cuenta por ejemplo del valor de haber cursado los programas del BI para Secundaria y Bachillerato. “Son muchas las razones, académicas y humanas, por las que cada día que pasa me alegro más de haber realizado el BI”, comenta Carlota Alonso Pardal, que cree que el San Francisco de Paula trata de cultivar sobre todo buenas personas, más que buenos estudiantes.

INGRESO. “Fue uno de esos primeros días de septiembre (…) en los que otros colegios aún no han abierto sus puertas a los alumnos. Una niña con un enorme lazo de flores en la cabeza, de la mano de su madre y su padre, cruzó la puerta del 'Sanfran' por primera vez. Y con mi lazo y mi mochila de Minnie entré en la clase de 2° A. No, era en realidad la clase se la Seño Coral, la que sería desde entonces en adelante, y todavía ahora, mi Seño Coral. Mi Seño, qué más se puede decir. Pero al principio el cambio fue, si no difícil, al menos brusco. Venía de otro colegio, con unas instalaciones impresionantes, unos jardines preciosos, piscinas gigantes y aulas con terrazas. Llegué, atra-vesando como pude un campo de combate en el que no bastaban ojos para esquivar pelotas de plástico, a una habitación plagada de desconocidos, y sin una sola planta, ni si quiera una florecilla de papel. ¡Vaya cambio! Tremendo. Tremendos eran los cambios que yo a esa edad podía percibir. Mayores aún los que iría descubriendo con el tiempo. Y estos hallazgos, en gran medida, se correspondían con la sabia decisión de mis padres al cambiarme de centro”.

UNA VENTANA ABIERTA. “Dentro de una sociedad conservadora como es la sevillana, el Colegio repre-sentaba y sigue representando hoy una ventana abierta al exterior donde se respira respeto, tolerancia y pluralidad cultural e ideológica. Al preguntarles, me confirman que para ellos esos valores primaron por encima del extraordinario nivel académico que el Colegio ofrece. ‘¿Donde están esos valores?’ - me he llegado a preguntar a menudo. Y he de admitir que no siempre he compartido que esa decisión de mis padres fuera tan sabia. Ahora, sin duda, estoy completamente de acuerdo. Pues ese extraordinario nivel académico, todas esas horas de matemáticas, idiomas, ciencias... e incluso algo de deporte, se vieron acompañadas por una gran calidad humana que con el tiempo hicieron de esos ladrillos mi hogar; de esos desconocidos, mi familia".

SOBRE TODO, BUENAS PERSONAS. “El Colegio aboga por la individualidad, la libertad y el desarrollo, como digo, no sólo como alumno, sino como persona. ¿Fui buena estudiante? No sé hasta qué punto la respuesta es tangible, pero sí, pasé muchas, muchas horas delante de muchos, muchos libros. No creo, sin embargo, que nuestro Colegio trate de cultivar buenos estudiantes. Si algo he aprendido a valorar es que por encima de todo uno debe preguntarse si es buena persona, con los demás y consigo mismo”.

n Presidenta del Foro de Personalidades.

n Representante de España en el Parlamen-to Europeo de la Juventud (2010 y 2011). n Primera promoción del plan tetralingüe en Primaria.

n Primera promoción del Bachillerato Internacional.

n Admitida en Imperial College, de Lon-dres, y en la Universidad Autónoma de Madrid –donde cursa Primero de Medicina.

Carlota Alonso PardalEstudiante de 1º de Medicina

“Cada vez me alegro más de haber hecho el Bachillerato Internacional en el San Francisco de Paula”

DURANTE EL COLEGIO Y DESPUÉS

253

AUTONOMÍA DEL ALUMNO. “De manera similar a lo que ha ocurrido en el campo de la Medicina durante los últimos años, en el que la relación médico-enfermo ha sufrido un proceso de horizontalización, evolucio-nando del llamado “paternalismo” al protagonismo de la autonomía del paciente, también la educación, por lo que percibo, ha experimentado numerosos cambios en un breve espacio temporal. Y creo entender, sin haber podido evaluar aún todos sus resultados, que el Colegio ha sido capaz, en buena medida, de combinar estos sucesos evolutivos con el eje transversal de su ideología y método de trabajo, común a estos 125 años de su existencia”.

IDIOMAS Y TECNOLOGÍA. "En Sevilla, recibir clases en cuatro lenguas distintas para algunos roza los límites de la locura. Pero cuando uno sale fuera de su ciudad, de su país o de su continente se da cuenta de que ese hecho que parecía algo extraor-dinario aquí (incluso inútil, he llegado a escuchar en alguna ocasión) no es más que parte de lo cotidiano para otros. Por otra parte, son los avances tecnológicos aquella herramienta fundamental que nos acerca a ese mundo exterior, a esa realidad más allá de nuestras fronteras, que nos abre al mundo y que, a su vez, nos amenaza".

BACHILLERATO INTERNACIONAL. "El que aterrizaran en nuestro Colegio innovadores proyectos educati-vos como son el Programa de Años Intermedios (PAI) y el Programa del Diploma del Bachillerato Interna-cional (BI) no se podía hacer esperar más. ¡Y yo he tenido la suerte de formar parte de la primera promo-ción en sufrir ambos! O eso pensaba, pues no en todo momento me agradó la iniciativa, ni el transcurso... Pero el caso es que tan sólo hace unas horas le escribía a un amigo sobre cómo me iba en la Universidad, y le decía que ¡cada vez me alegro mas de haber hecho BI! Ya el PAI pisaba fuerte, parecía que nos inva-día un tsunami. Criterios infinitos para cada asignatura que no terminábamos de asimilar, proyectos de in-vestigación en la Biblioteca con libros cubiertos por un manto de polvo, requisitos de cierta independen-cia, autonomía e iniciativa propia... en fin, un acercamiento a la realidad que nos asustaba. Pero también momentos graciosos, como la destreza de Don Luis con la pizarra interactiva... ¡les costó lo suyo llevarse bien! ¿Bachillerato Internacional? Eso... ¿qué es? Eso me lo pregunté yo en un principio, y todo el mundo que lo escucha por primera vez suele hacerlo también,¬menos el que lo ha cursado, claro, que entonces cambiaría su expresión resoplando un “Ufff...”. Como toda novedad, asusta. Pero yo me hice la valiente; toda una hazaña, creía. No. Eso era lo que pensaba en un principio, y me equivocaba. Toda una hazaña, verdaderamente, es que el Colegio se hiciera el valiente antes que ninguno de nosotros, mis compañeros de promoción. Y que mis padres se hicieran los valientes también, y no sin pocos motivos, confiaran de nuevo en las iniciativas del centro. Equivocaciones, muchas, probablemente más de las que aún podamos calibrar. Ventajas, infinitas: y son muchas las razones, académicas y humanas, por las que cada día que pasa me alegro más de haber cursado BI. Y todos estos días, también me preguntaba con un sentimiento raro, entre decepción y rabia, por qué no me habría yo dado cuenta de esto antes. Pero entiendo que ‘por un ladito no se ve el todo de lo que se mira” (Quijote, II, 41), y que probablemente necesite aún algunos años más de experiencia para darme cuenta de la inmensa suerte que tengo, por formar parte de esta gran familia gracias a unos padres que siempre han pensado que la educación es con total seguridad la mejor herencia que uno puede dejar a sus hijos”.

FUTURO. "Trabajos que entregas a través de una página en Internet que verifica su autenticidad, clases online, el Campus Virtual... No sé hasta qué punto todo ello era imaginable unos años atrás, pero hay mucho más. Mucho más, cada vez más rápido, más preciso, más informatizado, más automatizado (…) Por estas razones creo que lo mas importante para el presente y para el futuro, como el Colegio ha venido haciendo hasta el momento, es acompañar toda esta rápida innovación con el fomento de la virtud inte-lectual y moral y la convivencia como lazo que nos une, para evitar a toda costa que, como consecuencia de esos cambios a veces amenazadores, nos impregnara la deshumanización. O lo que es lo mismo, que el 'Sanfran', dentro de su tradicional excelencia académica, nunca deje de apostar por Buenas Personas como prioridad absoluta".

“Este Colegio es una ventana abierta al exterior donde se respira respeto, tolerancia y pluralidad cultural e ideológica”

254

Inés Rivero Belenchón estudia 3º de Medicina en la Universidad de Sevilla, así que, como ella misma dice, sus recuerdos sobre el San Francisco de Paula “aún permanecen frescos”. Estuvo en el Colegio seis años, desde su ingreso en 2003 hasta terminar 2º de Bachillerato (con Matrícula de Honor). Recuerda con especial cariño las jornadas internacionales, en las que descubrió el valor del trabajo en equipo, y el club de ciencias, donde aprendió a desenvolverse en el laboratorio con cierta fluidez, y dice haber sido testigo de importantes mejoras en el Colegio, como el bilingüismo, que considera fundamental en un mundo globalizado, la incorporación de ordenadores y pizarras interactivas en las clases, que otorgó mayor dinamismo a las explicaciones de los profesores y permitió una mayor participación por parte del alumnado, y la introducción del PAI y el Bachillerato Internacional. Considera que su vocación por la Medicina fue alimentada por el espíritu de entrega y compromiso social del Colegio, y hoy mantiene sus vínculos con el Centro gracias a su participación en la Junta Directiva de la Asociación de Antiguos Alumnos.

INGRESO. “En mi caso, fui yo, más que mis padres, la que se interesó por el Colegio. Conocía a varios alum-nos del San Francisco de Paula que estaban constantemente hablando del Colegio. Me contaban sobre las 'miniolimpiadas', las clases en el laboratorio, las jornadas culturales de países, las excursiones a la granja es-cuela el Remolino… mil maravillas que me decidí a probar. Por supuesto, mis padres fueron los que tuvieron la última palabra y tras hablar con padres de alumnos conocidos, decidieron matricularme.”

RECUERDOS FRESCOS. “Terminé el Colegio hace tan solo dos años, así que mis recuerdos permanecen frescos. Recuerdo la primera vez que entré en el Colegio, doña Maribel fue la encargada de presentármelo. Me parecía un laberinto imposible, lleno de pasillos y escaleras que comunicaban unos edificios con otros. Sin embargo, a los pocos días ya me manejaba como pez en el agua. También recuerdo con especial cari-

ño las Jornadas de Holanda (…) porque fueron las primeras en las que de verdad me impliqué. Aquel mes de diciembre se hizo casi normal pasar los fines de semana en el Colegio (…) Algunas de las personas que conocí aquellas Jornadas son hoy en día pilares fundamentales en mi vida. (…) También destacaría el Club de Ciencias, donde con ayuda de don Luis Rey Romero, don Luis Rey Goñi y don César Prado aprendí a desenvol-verme en el laboratorio con cierta fluidez y creo que fue decisivo para que junto a mis compañeras Victoria Barros Guerrero y Clara Mosquera Pérez nos clasificásemos para representar a España en las Olimpiadas Científicas Europeas”.

EL ESFUERZO TIENE RECOMPENSA. “Aprendí a trabajar en grupo, en gran medida por las Jornadas, aunque no solo gracias a ellas. Y lo que para mí es más importante, aprendí que el trabajo, el esfuerzo y la cons-tancia tenían recompensa”.

n Presidenta del Foro de Personalidades.

n Representante de España en la Olimpía-da Científica Europea (2008).

n Seleccionada para participar en la Beca Europa (2009).

n Matrícula de Honor en Segundo de Bachillerato.

n Tercero de Medicina en la Universidad de Sevilla.

“La incorporación de ordenadores y

pizarras interactivas otorgó mayor

dinamismo a las clases y permitió una mayor

participación por parte del alumnado”

Inés Rivero BelenchónEstudiante de 3º de Medicina

“El espíritu de entrega y compromiso social del Colegio alimentaron mi vocación por la Medicina”

DURANTE EL COLEGIO Y DESPUÉS

255

PLURALIDAD. “Mucha gente, externa al Colegio, piensa que todos los alumnos del San Francisco de Paula están cortados por el mismo patrón, debido al sesgo económico, pero tuve compañeros con todo tipo de ideolo-gías y creencias. La tolerancia que tiene a este respecto el Colegio fomenta la pluralidad, que enriquece, tanto a sus alumnos como a sus profesores”.

NOMBRES PROPIOS. “Son muchos los nombres propios que me han mar-cado. Dña. María Ángeles Frauca (…) fue mi tutora durante 1º y 2º de ESO, además de mi profesora de Ciencias Sociales. Su confianza en mí desde el primer día me ayudó mucho a adaptarme al nuevo colegio. De D. Genaro Capote (…) me conmovió la entrega y la pasión de sus clases y fue decisivo para que escogiese el bachillerato de Ciencias de la Salud. Don Juan María Parrilla, mi profesor de historia en 4º ESO y 1º Bachillerato, nos enseñó la ley del máximo esfuerzo. El cero comunitario en el primer examen del curso en capitales nos sirvió como bálsamo para el resto del año (…) Doña Amparo Govea, mi profesora de matemáticas en 4º ESO, 1º y 2º bachillera-to, me marcó tanto personal, como académicamente. Su exigencia y afán de perfeccionismo hacía que nos exprimiésemos para sacar lo mejor de nosotros mismos. (…) Don Luis Rey Goñi (…) como profesor me enseñó que las ciencias se aprenden mejor de forma experimental. Y como director, su confianza en mí me ha abierto muchas puertas”.

COMPAÑEROS. “Mis mejores amigos siguen siendo mis compañeros del San Francisco de Paula. (…) Belén Tejada tuvo una trayectoria académica brillante cursando sus estudios en la Universidad de Cambridge. Inés Dawson dejó una huella importante durante su paso por el Colegio y llevó una trayectoria académica insupera-ble; actualmente estudia en la Universidad de Oxford. María Soto Gómez fue ganadora de la primera edición de Becas Europa, tuvo una magnífica trayectoria en el Colegio, que continuó en la Universidad Francisco de Vito-ria. Licenciada en Administración y Dirección de Empresas, ahora cursa su último año de derecho en EEUU".

VOCACIÓN POR LA MEDICINA. “Ya desde Preescolar quise ser médico. El espíritu de entrega y compro-miso social del Colegio alimentaron mi vocación y las clases de biología de don Genaro hicieron que me decantara finalmente por Medicina”.

LEY DE MURPHY. “Los días que teníamos examen de inglés, don Adolfo entraba en clase y nos decía: ‘take a piece of paper and put something in the middle’. Desde que pronunciaba las palabras mágicas se multiplicaban por mil las probabilidades de que la ley de Murphy se cumpliese: ‘si algo puede salir mal, saldrá mal’. Don Adolfo traía tres fundas llenas de CDs, los miraba uno por uno mientras empezaban los sudores fríos, como él bien decía, más propios del trópico. El CD del examen estaba en una cuarta funda que había olvidado en el despacho. Cuando parecía que la situación ya estaba bajo control, el ordenador se apagaba, la disquetera no se abría, el audio no funcionaba o los altavoces se caían. Siempre pasaban unos 10 minutos entre que pronunciaba las palabras mágicas y empezaba el examen, en los que la clase permanecía en silencio con una risa contenida”.

CAMBIOS IMPORTANTES. “He sido testigo de cambios importantes, como la incorporación del bilingüismo. Mi generación fue la última no bilingüe, y pudimos comprobar cómo en las sucesivas generaciones el bilingüismo estaba cada vez más presente. El conocimiento de varios idiomas es hoy en día un requisito indispensable en un mundo tan globalizado. Otro cambio destacable fue la incorporación de las nuevas tecnologías, primero con los ordenadores en las aulas y más tarde con las pizarras interactivas. Esto supuso un plus en la enseñanza y abrió un abanico de nuevas posibilidades pedagógicas (…), pues otorgaba gran dinamismo a las explicaciones y una mayor participación del alumnado. También fui testigo de la incorporación del PAI y del Programa del Diploma, proyectos ambiciosos que suponen un valor añadido a la enseñanza de calidad”.

CONSEJOS PARA EL FUTURO. “Que siga fomentando un ambiente de compañerismo, pluralidad y respeto, y premiando el esfuerzo, el trabajo y la constancia. Y que siga apostando por la incorporación de innova-ciones, tanto tecnológicas como pedagógicas”.

“En el Colegio aprendí a trabajar en grupo, en gran medida por las jornadas internacionales, aunque no solo gracias a ellas. Y lo que para mí es más importante, aprendí que el trabajo y la constancia tenían recompensa”

257

Aguilar Cazorla, Rafael (1960)* ........................ 108Alejandre García, Juan Antonio (1954) ............82Alonso Gil, Manuel (1962) ................................132Alonso Pardal, Carlota (2000) ..........................252Alqhai Kouri, Fahmi (1990) ..............................246Altava Pérez, Manuel (1975) ............................192Argüelles Martín, Agustín (1949) ......................56Argüelles Martín, Federico (1955) .....................88Barea Velasco, Manuel (1945) ............................40Becerra Gómez, Enrique (1964) ........................142Benegas Capote, Manuel José (1963) ..............136Benítez Guillén, Francisco (1931) ......................12Benítez Villapol, Antonio (1944) .......................36Boza Hernández, Manuel (1989) ......................242Cano Pérez, Francisco Jesús (1979) .................208Cantarero de Artacho, José María (1978) .......200Cañete Serrano, José (1950) ...............................62Capote Gil, Francisco (1959) ............................ 102Caro Gómez, Esperanza (1983).........................232Carranza Ariza, Miguel (1960) ..........................110Carranza Bencano, Andrés (1959) ................... 104Carrascosa Moreno, José María (1974) ...........182Carriazo Ramírez, Diego (1941) ..........................30Casado Cepeda, Fermín (1928) ........................... 10Castro Arroyo, Miguel Ángel (1974) ...............184Castro Artigas, Pedro (1937) ...............................16Chávez De Diego, Sebastián (1972) ................. 170Codes M. de Villena, Manuel E. (1957) .............96Cortés Galeano, Vicente (1961) ........................ 118Cortés Martínez, Ignacio (1958) .........................98De Castro Brzezicki, Francisco José (1940) ......24De Justo Alpañés, José Luis (1955) ...................90

De la Rosa Herrera, Julio Manuel (1948) ..........50De Seras Chopard, Federico (1952) ....................72Debray Servan-Schreiber, Laurence (1990) ....248Del Campo Sánchez, Santiago (1939) ...............20Del Río Díaz Jara, Diego (1981) .......................226Del Valle Arévalo, Manuel (1954) ......................84Domínguez Álvarez , Álvaro (1986) ................237Dronda Fernández, Gabriel (1968) ...................150Esteban Romero, Antonio Mariano (1972) .....172Fernández Becerra, Ramón (1955) .....................92Fernández de los Ronderos Martín , Miguel Ángel (1971) .......................................................166Fernández González, Carlos (1943) ...................32Fernández Haeger, Juan (1966) ........................146Fernández Jaén, Tomás Fernando (1968) .......152Fernández Romero, Francisco José (1978) .....202Flores Berenguer, Ignacio (1968) .....................154Flores Luque, Vicente (1952) ..............................74García García, Manuel (1940) ............................29García Lobo, Jorge Juan (1973) .......................176García Ternero, David (1994) ...........................250García-Olmedo, Francisco de Asis (1948) ........52Garzón Villar, Andrés (1973) ............................178Gentil Govantes, Miguel Ángel (1958) ............ 100Gómez Gutiérrez, Emilia (1989) .......................244Gómez-Álvarez Salinas, Enrique (1971)..........168Gómez-Ariza, José Luis (1960) ......................... 112González Fernández, Francisco Javier (1960) 114González Jiménez, José (1966) .........................148González Martínez, Rafael (1974) ....................186Gutiérrez Goicoechea, José María (1935) .........14Herrera del Pueyo, Francisco de Asís (1962) ..134

* Entre paréntesis, fecha de ingreso en el Colegio.

Índice

José Antonio Griñán Martínez. Presidente de la Junta de Andalucía ...................................................... 5Juan Ignacio Zoido Álvarez. Alcalde de Sevilla .......................................................................................... 7Luis Rey Goñi. Director del Colegio de San Francisco de Paula ................................................................ 9

258

Herrera Silva, Jerónimo (1961) ........................120Hidalgo Jiménez, Manuel (1980) ..................... 214Iglesias Macías, Gervasio (1980) ...................... 216Jiménez Filpo, Antonio José (1961) ................122Jiménez-Becerril Barrio, Teresa (1978) ...........204Lacalle Remigio, Juan Ramón (1974) ..............188Lasarte Álvarez, Carlos (1959) .......................... 106López Tarrida, Antonio José (1974) .................190Losada Villasante, Manuel (1944) ......................38Losada Villasante, Alberto (1947) ......................46Losada Villasante, Juan Ignacio (1949) ............58Loscertales Abril , Jesús (1951) ..........................64Luzón Nogué, José María (1953) .......................78Manzanares Japón, José Luis (1951) .................66Manzanares Torné, José María (1960) ............. 116Márquez Villanueva, Francisco (1945) ..............42Martín Rubio, Luis Miguel (1973) ....................180Martínez de Azcoytia y Laffón, Francisco Javier (1940) .....................................................................26Martínez Martínez, Estanislao (1980) .............. 218Martínez Obradó, Domingo (1951) ....................68Montero Iruzubieta, Jesús (1963) .....................138Monteseirín Mateo, Francisco Javier (1961) ...124Navarro Álvarez, José María (1951) .................. 70Navarro Atienza, Manuel Andrés (1976) ........196Nogales Castilla, Miguel (1978) .......................206Nogales Castilla, Evaristo (1980) .....................220O’Connor Reina, Carlos (1981) .........................228Paneque Guerrero, Guillermo (1937) .................18Pastor Torres, Álvaro (1980) .............................222Pera Madrazo, Carlos (1943) ...............................34Pérez Castilla, José (1948) ..................................54

Pérez Fernández, Manuel (1968) ......................156Pérez Gandul, Francisco (1961) ........................126Pérez Valencia, Francisco José (1977) .............198Pérez Viguera , Francisco (1956) .......................94Pérez-Mallaína Bueno, Pablo Emilio (1961) ...128Pou Pérez, Luis Felipe (1975) ...........................194Quero Reboul, José Manuel (1969) ..................158Ramírez de Arellano López, Antonio (1970) ..160Repetto Jiménez, Manuel (1939) ........................22Repetto Jiménez, Francisco de Paula (1949) ....60Rivero Belenchón, Inés (2003)..........................254Robles Gómez, Miguel Ángel (1979) ............... 210Rodríguez Muñoz, Miguel Ángel (1980) .........224Rodríguez Pérez, Ana María (1987) .................238Rodríguez Vázquez de Tovar, Álvaro (1975) ..236Rueda Martín, Juan Manuel (1970) .................162Ruiz Montero, María José (1982) .....................230Salas Tornero, Juan Miguel (1954) ....................86Sánchez Burgos, Francisco (1952) .....................76Santos Alarcón, Rosa (1984) ............................234Simois Tirado, Francisco José (1988) ..............240Sobrino Toro, Juan Pablo (1972) .....................174Sousa Martín, Carolina (1979) ......................... 212Tovaruela Santos, Aníbal (1947) ........................48Vázquez Berrones, Manuel Alberto (1945) .......44Vidarte Zabala, Manuel (1938)...........................28Villamor Urbán, Eduardo (1961) ......................130Villar Rodríguez, Jose Luis (1964) ...................144Vioque Peña, Agustín (1963) ............................140Vivas Bailo, José Luis (1970) ............................164Yáñez-Barnuevo García , Luis (1953) ...............80

CO

LEG

IO D

E S

AN

FR

AN

CIS

CO

DE

PA

ULA

•

CXX

V •

TE

STI

MO

NIO

S

En el Colegio de San Francisco de Paula siempre hemos valorado de modo muy especial la cercanía y los logros de nuestros alumnos. De esos niños y adolescentes que, como su

mejor tesoro, sus padres nos hicieron un día el honor de confiarnos, y que tantas, ¡tantas – y nunca demasiadas!, veces retornan para devolvernos, acrecentado, el aliento y el cariño que antaño procuramos darles. En este centésimo vigésimo quinto aniversario hemos compilado

el testimonio de ciento veinticinco muy señalados antiguos alumnos. No están todos los muchísimos que son, y bien duro que ha resultado restringirse a este número: pero son todos los que están, como bien demuestran unas palabras que nos llegan al corazón, y que desde el

fondo del mismo agradecemos emocionadamente.

Documents

Colegio de San Francisco de Paula. CXXV Testimonios