Cinco Exegesis Ireneanas de Gen 2,17 b Adv. Haer. v, 23,1-2

Cirico exegesis ireneanas de Gen 2,17b adv. haer. V, 23,1-2

E1 mandato del Senor al hombre fu tajante: Comers de todo rbol del paraiso, mas del rbol de la ciencia del bien

y del mal no comers: el dia que comiereis de l, moriris de muerte (Gen 2,16-17). La serpiente lo entendi muy bien de labios de la mujer; pero logr seducirla: No moriris en modo

alguno. Dios sabe que el dia en que comis de l se abrirn vuestros ojos y seris corno dioses, conocedores del bien y del mal (Gen 3,4-5). Ireneo lee con los LXX.

tQuin llevaba razn, Yahveh la serpiente? Tan no murie ron, con el manjar prohibido, que Adn perserver an en vida

largo tiempo (cf. Gen 5,5)1, a la mujer se le conden a engen drar hijos en dolor (cf. Gen 3,16), y al hombre a nutrirse de la tierra todos los dias de su vida (cf. Gen 3,17)2.

La solucin heterodoxa era bien clara. Llevaba razn la

serpiente. Por su boca hablaba la Sabiduria del Logos. No hay motivo alguno para que mienta un dios

se lee

en la Repblica de Platn ... la divinidad y lo divino estn en absoluta pugna con la mentir... la divinidad es totalmente sim

ple y verdadera en palabras y en obras 3. Amparados no en

las palabras de Scrates, los gnsticos urgen la ignorancia y la envidia del Demiurgo, mas que su mentir. El que dice una

1 Cf. s. Efrn, Comentario al Diatessaron XIX, 4 SC 121, 333; XXI, 25

(388). D. Petau, De opificio sex dierum, lib. II cc. 9 y 10. 2 Cf. ps. Anastasio Sinata, In Hexaemeron, lib. XI PG 89,1043 AB :

Ex hac vero nobis proposita Dei cum Adamo collocutione, nos do cemur multo magis spiritualiter audire et intelligere quae dicuntur de

paradiso et lignis et fructu quem comedit mulier et homo. Nam cum illic dixisset Deus (Gen 2,17)

' Quo autem die ex eo comedes, morte morieris ',

quomodo hoc in poenis non solum eis sustulit, sed eis dat vitam multo rum annorum, mulieri quidem dicens eam in doloribus filios parituram. Adamo autem (Gen 3,17)

' In doloribus comedes terram omnibus diebus

vitae tuae '? . 3 Rep. 383 E 3ss.

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76 ANTONIO ORBE, S. I.

cosa a impulsos de la envidia no atiende a la verdad de lo que

dice, ni a su futuro cumplimiento. E1 obispo de Lin trata, frente a ellos, de probar lo con

trario. Las palabras del Demiurgo {Ger 2,17) decian verdad; y asi lo testifcaron los hechos. Descuida otros capitulos de acu sacin: la envidia (maliciosa) y la ignorancia del Creador. E1 Santo desarrolla las tentaciones de Jess en el desierto {adv.

haer. V, 21-24), y presenta con singular relieve la mentir de la antigua serpiente.

Acenta la tctica del enemigo en el paraiso con nuestros

primeros padres, en paratelo con las tentaciones evanglicas. Una y otra vez, el arma del enemigo es la mentir.

Ni en los dias del Salvador ni en el Paraiso, fu el ene

migo depositario de la verdad. La antitesis Cristo/diablo pro longa la antigua Demiurgo/serpiente.

A nadie se le ocurre hoy hacer de la serpiente del Paraiso, vehiculo de la verdad; y del Creador, vehiculo de la mentir. No asi a los ' intelectuales ' del siglo II.

De ahi el inters de Ireneo en descubrir, por caminos va

rios, la veracidad del Demiurgo en su conminacin a Adn. A fin de esclarecer las exegesis que apunta, de Gen 2,17b,

convendr dividir el trabajo en dos partes: I - premisas gnsti cas, y II - soluciones ortodoxas.

I - Parte primera:

Premisas gnsticas de Gen 2,17b

Muy pronto descubrieron los marcionitas ineficacia, y aun falta de verdad, en el primer mandato del Demiurgo4. El de

miurgo trataba intil y neciamente de atemorizar con la muerte al protoplasto; sin propsito, a lo que parece, de darsela.

Otro camino siguen los Ofitas de Ireneo. La verdad est en la sierpe (resp. Sofia), por cuya boca se manifiesta la Sa

4 Es la actitud latente en los Silogismos de Apeles. Tertium obiciunt escribe s. Ambrosio (de paradiso V, 28) con alusin a Apeles : Et si homo non gustaverat mortem, utique quam non gustaverat, scire non poterai. Ergo si non gustaverat, nesciebat, si nesciebat, timere non poterat. Frustra igitur deus mortem pr terrore obiecit, quam homines non timebant . Cf. A. Harnack, Marcion2, Leipzig 1924, 178s 192 y 413*ss ; H. Savon, S. Ambroise devant l'exgse de Philon le Juif I, Paris, 1977, 25-42; II, 21-29.

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CINCO EXEGESIS IRENEANAS DE GEN 2,17b 77

biduria de Dioss. E1 demiurgo, segn ellos, miente. No porque se le ocurriera entonces mentir, sino corno corolario de una

mentir mas fundamental: la del Shem hebreo, resumida

en Is 46,9: Yo soy el Dios, y fuera de mi no hay otro . Se

cuela a su vez del origen primero, fruto de error , del de

miurgo6, lo mismo entre ofitas que entre valentinianos y otros

gnsticos7. La verdad mas sagrada del Antiguo Testamento (Deut 6,4ss;

32,38)8 paso a ser, gnsticamente, el delito bsico del Creador; el error radicai de la economia hebrea, y de los eclesisticos, sus herederos. Por encima del Demiurgo estaba el Padre, primer

5 Iren., adv. haer. 1,30,7: Mater autem ipsorum (Sophia Prunicos) argumentata est per serpentem seducere Evam et Adam, supergredi prae ceptum Ialdabaoth; Eva autem quasi a Filio Dei hoc audiens, facile cre didit et Adam suasit manducare de arbore, de qua dixerat Deus, non manducare. Manducantes autem eos cognovisse eam, quae est super omnia, Virtutem dicunt, et abscessisse ab his, qui fecerant eos: Pruni cum autem videntem, quoniam et per suum plasma vieti sunt, valde

gratulatam et rursum exclamasse, quoniam, quum esset Pater incor

ruptibilis, olim hic semetipsum vocans Patrem, mentitus est; et quum homo olim esset et prima femina et haec adulterans peccavit . Cf. ps. Anastasio

Sinata, In Hexaemeron, lib. X, PG 89,1021 BC : Qui autem ad litteram solum audiunt quae scripta sunt de paradiso et fructibus et lignis et cibo et serpente et visus recuperatione (cf. Orig., Homil. XVI in Lucam

7; ps. Clem., Homil. Ili, 39,1; Filastrio, haer. 116,1), incidunt in exitiosam Manichaeorum et Ophitarum impietatem. Illi enim serpenti tanquam be nefactori maximas agunt gratias dicentes quod per serpentem nobis ac cessit cibus; per cibum recuperatio visus; per eam deinde nuptiae; per nuptias autem mundus; propter hominis autem peccatum, deus homo fac tus est. Hinc coelorum regnum et bona aeterna quorum auctor et conci liator fuit nobis serpens .

6 Iren., adv. haer. 11,9,2 Hi autem (valentiniani ; resp. ophitae) hunc

quidem { = Demiurgum s. Fabricatorem mundi) labis fructum dicentes et animalem eum vocantes, dicentem quoque:

' Ego sum Deus et praeter

me non est alius Deus '; mentiri eum dicentes . Para el Demiurgo labis

fructus ( ), Iren. 1,17,2; 19,1 y otros muchos lugares, transcritos por F.-M. Sagnard, La Gnose valentinienne et le temoignage de saint Irne, Paris, 1947, 433s.

7 UW (=NH C XIII, 2) pi. 160, 27ss Elias (las potentias) se rieron del Archigenetor (= el Demiurgo), porque habta mentido al decir:

' Yo

soy Dios, ninguno existe antes de mi"; pi. 151,12s. 30s.; II Logos del

gran Set (= NH C VII,2) pi. 64,17ss.; Iren. 1,30,6 Unde exultantem

Jaldabaoth in omnibus his, quae sub eo esset, gloriatum et dixisse: ' Ego

Pater et Deus et super me nemo '. Audientem autem Matrem clamasse

adversus eum: Noli mentiri, Jaldabaoth, est enim super te Pater omnium

primus Anthropus et Anthropus filius Anthropi . Otros testimonios

anlogos examin en El pecado de los Arcontes, Estudios Eclesidsticos

43, 1968, 354-357. Cf. Kl. Koschorke, Die Polemik der Gnostiker gegen das

kirchliche Christentum, Leiden, 1978, 234. 8 Ved ahora que soy yo, yo mismo, y fuera de mi no existe otro

Dios . Cf. F. Weber, Jiidische Theologie2, Leipzig, 1897, 41s.

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7 8 ANTONIO ORBE, S. I.

Anthropos, y el Hijo, segundo Anthropos ... y la dispensacin del Espiri tu, con su Pleroma mundo propio.

Ignorante de si, el Creador obraba muchas veces secreta

mente movido por la Sabiduria del Hijo9. Con frecuencia empero, abandonado a sus fuerzas, actuaba

' psiquicamente a merced de sus naturales limitaciones. Tal

ocurri en la escena del paraiso. Los gnsticos se valieron h bilmente de la letra de Moiss para contraponer la ignorancia (y mentir) del Demiurgo a la ciencia (y verdad) de Sofia. El

Demiurgo manifest con espontaneidad sus sentimientos para el hombre, en Gen 2,17. Y la Sabidurfa del Hijo se sirvi de la

serpiente para revelar los suyos.

Lejos de ser portadora de engafio, vehiculo de Sofia10, la serpiente adoctrina a Eva, previnindola contra el fraude (y envidia) del Demiurgo u.

Entre los escritos de Nag Hammadi, ltimamente editados, ofrece inters particular el Testimonium veritatis (NH C X, 1).

Evang. sec. Philippum 16; Iren. 1,5,1 y 3; Exc. ex Theol. 49,1... Cf. J.-E. Mnard, L'Evangite selon Philippe, Paris, 1967, 136.

io Simbolo, a la postre, del verdadero Cristo. Vase Apocryphon Johan nes BG p. 57,20s; s. Agustn, haer. 46,1,5 (maniq.); Hiplito, Ref V, 19,20s (setianos); V, 16,10; 17,8 (peratas); s. Epifanio, haer. 37,2,6; 8,1 (ofitas). Cf. Orgenes, C. Cels. VI, 28.

n Hipstasis de los Arcontes pi. 137,31ss : Empero la {mujer) espiri tual (= Sofia) se acerc (e introdujo en la) serpiente, el instructor, y (la instruy) diciendo: 'cQu es lo que (os dijo): De todo rbol del pa raiso comers; pero del de la ciencia del mal y del bien no comas?

'

La mujer carnai dijo : ' No solo dijo : No comis, sino no le toquis, por

que el dia en que comiereis de l moriris de muerte '. Y la serpiente, el instructor, dijo :

' No moriris de muerte. Esto os lo dijo por envidioso

(-). Se abrirn mas bien vuestros ojos, os haris corno dioses, co nocedores del mal y del bien '... Siguen unas lineas con la narracin del Gnesis. Entonces contina (pi. 138,19ss) el magno Arconte vino y dijo: 'Adn, i dnde ests?

' Ignoraba en efecto lo que habia ocu

rrido... . Anloga versin en UW pi. 166,28ss: Dijole (a Eva):

' iQu os ha

dicho Dios que No comis del rbol de la gnosis?' Replic: 'No solo dijo no comis de l; ni lo toquis siquiera, para no morir'. Respondi (la serpiente) :

' No temis. No moriris. (Sabed) que si le comis, desper tar vuestra inteligencia y os haris corno los dioses, conocedores de la diferencia entre los hombres malos y buenos. Eso os lo ha dicho, por envidioso (), para que no comis de l'. Fise pues Eva de las palabras del instructor (= de la serpiente). Mir al rbol, vi que era hermoso y elevado, le dese, tomo de su fruto, comi y se lo di a su marido, que tambin comi de l. Abrise entonces su inteligencia. No bien comieron, la lumbre de la gnosis les ilumin . Cf. El pecado de los Arcontes, Est. Ecles. 43, 1968, 346-348; R. A. Bullard, The Hypostasis of the Archons, Berlin, 1970, 85; M. Tardieu, Trois mythes gnostiques, Paris, 1974, 193-195. 204-208.

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En la Ley est escrito sobre el particular, cuando Dios orden a Adn:

' De todo rbol puedes corner, pero del

rbol que est en medio del paraiso no comas, pues el dia en que comas de l seguramente morirs La serpien te empero era ms lista que todos los animales existentes

en el paraiso y persuadici a Eva, diciendo: ' El dia en

que comis del rbol situado en medio del paraiso, los ojos de vuestra mente se abrirn Y Eva obedeci y ex

tendi su mano, tomo del rbol, comi, y dio tambin de l a su marido. E inmediatamente conocieron que esta

ban desnudos, y tomaron algunas hojas de higuera y se

cifieron. Mas Dios al tiempo del atardecer vino a pasear en medio del paraiso. Al verle Adn se escondi. Y dijo l: ' Adn, ^dnde ests?

' Respondi y dijo:

' He venido debajo de la higuera Y en aquel momento conoci Dios que habia comido del rbol de que le habia ordenado 'No comas de l'. Y le dijo: ',-Quin te ha instruido?

'

Y Adn respondi: ' La mujer que me diste Y la mujer

dijo: ' La serpiente es la que me instruy Y l maldijo

a la serpiente y la llam ' diablo Y dijo:

' Ved que Adn se ha hecho corno uno de nosotros, sabedor del mal y del

bien'. Entonces dijo: ' Echmosle fuera del paraiso, no

vaya a tornar del rbol de la vida y viva para siempre Pero tde qu clase es el Dios este? Primeramente, en

vidi a Adn fuera a corner del rbol del conocimiento n. En segundo lugar, dijo:

' Adn,


a corner del rbol de la vida y viva para siempre Dio

a conocer que era un envidioso lleno de malicia. Y iqu suerte de Dios es ste? Grande es la ceguera de los que leen14 y no echaron de ver esto. Y dijo:

' Yo soy el Dios

celoso; yo llevar los pecados de los padres sobre los

hijos hasta tres (y) cuatro generaciones Y dijo: ' Yo en

durecer el corazn de ellos, y har que se ciegue su in

teligencia, para que no puedan entender ni comprender las cosas que se dicen Estas cosas las dijo l a quienes creen en l y le sirven ( ! )15.

Las puntadas finales contra los eclesisticos saltan a la vista,

i Crno es posible, se pregunta el gnstico tener fe en

un Dios asi, sujeto a tan humanas pasiones? Juliano apstata16 repetia anlogas acusaciones (de igno

rartela y envidia) contra el Dios de los cristianos.

Hay que situarse en el plano heterodoxo. Marcionitas y

gnsticos discurren unidos. La verdad est por la serpiente; el engafio y la envidia por el Demiurgo. ^Qu garantias puede ofrecer un precepto inspirado en la envidia? El efecto inme diato les darla la razn. Ni Adn ni Eva murieron aquel dia.

Ireneo no teme a sus adversarios, ni le impresionan sus ar

gumentos. Los conocia muy bien, y los silencia en absoluto. Atento a la letra del Gnesis, persigue su declaracin corno si

nadie la discutiese. Hasta es posible que, corno mas tarde Ter

tuliano 17, viera en el precepto divino la sintesis de todo el de

clogo. Orienta empero su exegesis a un punto particular: la

amenaza de Gen 2,17: Qua autem die manducaveritis ab eo, morte moriemini 18; y la rplica de la serpiente en Gen 3,4:

14 Alude a los eclesisticos. 15 Test. Ver. pi. 45,23ss. Vase Kl. Koschorke, Die Polemik der Gnos

tiker gegen das kirchliche Christentum, Leiden, 1978, 148ss. 16 Contra Galilaeos 75A-94A ed. K. J. Neumann p. 167-169; Koschorke,

o. c. 150s; W. J. Malley, Hellenism and Christianity, Rome, 1978, 310-312. 17 adv. iudaeos 2,2ss: Namque in principio mundi ipsius Adae et

Evae legem dedit, ne de fructu arboris plantatae in medio paradisi ede rent; quod si contra fecissent, morte morerentur. Quae lex eis suffice ret, si esset custodita. In hac enim lege Adae data omnia praecepta con dita recognoscimus quae postea pullulaverunt data per Moysen, id est {Deut 6,5)

' Diliges dominum deum tuum de toto corde tuo et ex tota

anima tua ', et (Lev 19,18) ' Diliges proximum tibi tamquam te et (Ex

20,12-17) ' Non occides, non moechaberis, non fraudaberis '... Primordialis

enim lex est data Adae et Evae in paradiso quasi matrix omnium prae ceptorum Dei . Cf. D. Petau, De opificio sex dierum, lib. II c. 9 5.

18 Segun V, 23,l,8s.

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Non morte moriemini . Las dos clusulas, antitticas, no pue den ser verdad.

tSolucin? Una, a priori, presumible en todo creyente, judio eclesistico. La verdad est por el Creador. Haya no que acudir a una explicacin espiritual alegrica, es indiscutible la veracidad del Demiurgo, si bien algunas circunstancias pa rezcan dar la razn a la serpiente.

El obispo de Lin la ignora. En su lugar opta por ima a

posteriori al parecer decisiva: el resultado. Pero tirios y troyanos invocaban lo mismo. Segn los he

terodoxos, la serpiente estaba con la verdad; Adn y Eva co

mieron y siguieron en vida. Segn Ireneo, ocurri lo contrario.

II - Parte segunda:

SOLUCIONES ORTODOXAS

Sed quoniam Deus verax, mendax autem serpens, de ef

fectu ostensum est, morte subsecuta eos qui manducaverant 19.

El Santo, no obstante, se cree en la obligacin de probarlo.

Y lo hace largamente con varias razones (V, 23,1,28-2,56); sobre las cuales vuelve enseguida (V, 23,2,56-65), para concluir20:

Secundum omnia ergo quae significantur, Deus quidem verax, mortui enim sunt qui gustaverunt in ligno, serpens autem mendax ostensus est et homicida, sicut Dominus

ait de ipso (Joh 8,44): 'Quoniam ab initio homicida21 est et in veritate non stetit '22.

adv. haer. V, 23,1,26-28. 20 De una vez para siempre, al citar est pgina, y en general las

de los tres ltimos libros de Ireneo, adv. haer. (Ili, IV y V) ade ms del libro, capitalo y prrafo, indicar el nmero de la linea lineas de la edicin de Sources chrtiennes.

21 Es la lectura coniente. En cambio, el propio Ireneo habia leido en el capitalo anterior (V, 22,2,58s) : Dominus autem ait : Quoniam dia bolus mendax est ab initio et in ventate non stetit . Tal lectura, igno rada entre los criticos neotestamentarios, reaparece, tal vez por influjo de Iren. lai., en Prisciliano (traci. V ed. Schepss p. 64 = PLS 2,1457 init.) : Sic enim scribtum est de hiis :

' Pater vester diabolus ab initio mendax fuit ', et necesse est, cuius initium mendacii natura dedit, viam veritatis tenere non possit .

22 adv. haer. V, 23,2,65ss. G. T. Armstrong (Die Genesis in der Alien

Kirche, Tiibingen, 1962, 76 n. 2) conoce la pgina, pero no se detiene a analizarla. Algo dice, porquisimo, Feuardent, apud A. Stieren, Apparatus ad opera S. Irenaei... Lipsiae 1849 voi. II/2 p. 1056s.

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Adn y Eva comieron del rbol prohibido y murieron. Llevaba

pues razn el Demiurgo. Ireneo enumera una tras otra las ex

plicaciones, sin personales comentarios, corno si las diese to das por buenas. Exegesis anteriores al Santo, comunes quizs a eclesisticos y hebreos atentos a salvar la veracidad del

Creador.

A primera vista todas parecen claras. Sometidas a anlisis,

no tanto. Consciente quizs Ireneo de su inicial presentacin poco difana, volvi a formularlas por el mismo orden, ms escuetas, y con perfles complementarios. Merced a la iteracin,

da lugar al estudio de un tema, hoy marginado, que mereci

en el siglo II escrupuloso examen.

Distribuidas las lineas a doble columna, sin tocar la letra ni el orden ireneanos, bastar un vistazo para descubrir el n

mero y extensin de las soluciones. Todas responden a una

misma preocupacin: probar, contra los adversarios, que Adn

y Eva murieron el mismo dia que faltaron a la palabra del De miurgo. Justificar, en otros trminos, la verdad de Gen 2,17: In qua die manducabitis ex eo, morte moriemini .

Iren., adv. haer. V, 23,1-2

lineas 28-56 lineas 56-65

1] Simul enim cum esca, et Sive ergo secundum inobau

mortem asciverunt, quo- dientiam, quae est mors, niam inobaudientes mandu

cabant: inobaudientia enim

mortem infert.

2] Propter hoc ex eo traditi sive quod exinde traditi sint, sunt ei, debitores mortis ef- et facti sunt debitores mortis, fecti.

3] In ipsa itaque die mortui sive secundum unum et eun sunt in qua et manducave- dem diem in quo manducave

runt et debitores facti sunt runt et mortui sunt, quoniam

mortis, quoniam conditionis una conditionis dies, dies unus:

' Factum est

enim, inquit (Gen 1,5), ve

spere et factum est mane

dies unus '. In ipsa autem

hac die manducaverunt, in

ipsa autem et mortui sunt.

42:07 PM


4] Secundum autem circulum sive secundum hunc circulum

et cursum dierum, secun- dierum, quia in ipsa mortui

dum quem alia quidem ri- sunt in qua et manducaverunt,

ma, alia autem secunda et hoc est Parasceve, quae dici

alia tertia vocatur, si quis tur cena pura, id est sexta fe velit diligenter discere qua ria, quam et Dominus osten die ex septem diebus mor- dit passus in ea, tuus est Adam, inveniet ex

Domini dispositione. Reca

pitulans enim universum ho minem in se ab initio usque ad finem, recapitulatus est

et mortem ejus. Manife stum est itaque quoniam in illa die mortem sustinuit Dominus obaudiens Patri in

qua mortuus est Adam ino

baudiens Deo. In qua autem

mortuus est, in ipsa et man

ducavit. Dixit enim Deus: ' In qua die manducabitis ex eo, morte moriemini

Hunc itaque diem recapitu lans in semetipsum Domi

nus, venit ad passionem pri die ante sabbatum, quae est sexta conditionis dies, in qua homo plasmatus est,

secundam plasmationem ei,

eam quae est a morte, per suam passionem donans.

5] Quidam autem rursus in sive secundum quod non sit

millesimum annum revo- supergressus mille annos, sed

cant mortem Adae, quoniam in ipsis mortuus sit. enim (2 Pe 3,8 ...)

' Dies Do

mini, sicut mille anni non superposuit autem mil

le annos, sed intra eos mor

tuus est, transgressionis ad

implens sententiam.

42:07 PM


No a todas las soluciones otorgaria el Santo la misma impor tancia. Le merecen singular detenimiento las tres ltimas; y sobre todo la cuarta.

Tampoco todas son igualmente lcidas. Aun las que por su brevedad parecen mas espontneas, ofrecen sus reparos.

En primer lugar, ^cuntas soluciones son, cuatro cinco?

Todo depende de la inicial, que en su primera presentacin se extiende a las lineas 28-31 ( Simul enim cum esca... debi tores mortis effecti ); y en la segunda, se desdobla.

1] Primera solucin

A farnos exclusivamente de la primera columna, cabe ofre

cer corno solucin inicial la siguiente: Adn y Eva murieron al desobedecer, porque con la transgresin se hicieron deudo

res de la muerte. En rigor, contraerian simplemente el debi tum mortis . En perfecta consonancia con la doctrina general de Ireneo, una cosa seria la inobaudientia y otra la muerte.

Aunque est ltima viniera mucho despus de la transgresin, valdria por metonimia situarla al momento de corner el fruto

prohibido.

Simul enim cum esca, et mortem asciverunt, quoniam inobaudientes manducabant: inobaudientia enim mortem

infert (lin. 28-30).

Tal solucin, muy en la linea de Ireneo23, tropieza con ima di

ficultad. Deja al aire la solucin correlativa de la segunda co lumna: Sive ergo secundum inobaudientiam quae est mors,

sive quod exinde traditi sint et facti sunt debitores mortis

(lin. 56-58)24. En sano mtodo, conviene explicar lo oscuro por lo claro,

y no viceversa. Ireneo, en la segunda columna, ofrece por este

orden dos respuestas:

a) una, fundada en la identidad mors=inobaudientia, ta xativa. Segn ella, Adn y Eva habrian muerto, con la muerte del pecado, al corner el fruto prohibido (' secundum inobau dientiam quae est mors ')

23 Vase mi Antropologia de san Ireneo, Madrid, 1969, 465ss. 24 Perfil que escapa a F. Loofs (Theophilus von Antiochien adversus

Marcionem, Leipzig, 1930, 69), cuando empareja las lineas de Ireneo con otras de Tefilo Ant. {ad Autol. 11,25).

42:07 PM

CINCO EXEGESIS IRENEANAS DE GEN 2,1Tb 85

b) otra, basada en la distincin entre inobaudientia ( = causa) y mors ( = efecto), igualmente explicita (' quod exin de traditi sint et facti sunt debitores mortis ') Segn ella, Adn y Eva habrian muerto, al contraer con el pecado, el

' debitum

mortis Est ltima tiene su exacto paralelo en las lineas 30-31:

Propter hoc ex eo (= exinde) traditi sunt ei debitores mortis effecti .

tQu decir de la primera? Lo obvio, en pgina tan armni camente estructurada por Ireneo, seria emparejar (sive ergo) secundum inobaudientiam quae est mors con las lineas (28ss) Simul enim... mortem inferi .

Y en efecto, desaparece la dificultad, entendiendo las li neas iniciales (28-30) a la luz de sus correspondientes (56-57). Mas, si se otorga a la clusula inobaudientia enim mortem

inferi , bastante equivoca, el alcance de inobaudientia enim mors est .

En resumen, la primera solucin presentada por el obispo de Lin en exegesis a Gen 2,17 se fundaria en la igual dad mors=inobaudientia. La desobediencia misma es muerte. Murieron al corner del fruto prohibido.

Una cosa es que Ireneo registre la solucin, y otra que

simpatice con ella. La respuesta { inobaudientia=mors ) dis corre sobre una antropologia diversa de la suya. El Santo la

enumera corno un intento, de autor autores conocidos, favo

rable a la verdad de Gen 2,17. Es sintomtico el modo rpido, casi incidental, de su presentacin. Ningn indicio hay de que se haga solidario de ella, corno parece indicar E. P. Meijering *.

25 Orthodoxy and Platonismus in Athanasius, Leiden 1968 . 145, 2; y sobre todo en su art. Die physische Erlsung in der Theologie des Irenus (= Nederlands Archief voor Kerkgeschiedenis LUI, 2, 1973, 147-159), transcrito en God Being History, Amsterdam 1975, [39] - [51]. Fiir Irenus escribe en la p. [46] sind einerseits Siinde und Tod und anderseits Gehorsam und Leben fast mit einander identisch. Siinde, Un gehorsam gegeniiber Gott ist Tod . De los testimonios que cita en su

apoyo, podria uno impresionar (IV, 39,l,2ss): Bonum est autem obau dire Deo et credere ei et custodire ejus praeceptum, et hoc est vita

hominis; quemadmodum non obaudire Deo malum, et hoc est mors ejus . E1 bien la vida del hombre est en obedecer a Dios; su mal la muerte del hombre en desobedecerle. iQuiere decir que, para Ireneo, la desobediencia se identifica con la marte, mas bien que le acarrea al hombre la muerte? Escribe a las pocas Iineas (lOss): et id quod

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Sus premisas de antropologia (y soteriologia) pugnan con ella; y singularmente su empefio por ignorar otra muerte que la del humano compuesto (resp. plasma). La aduce a mi enten

der, simplemente a benefcio de inventario. Escribe una vez Filn:

Dice por otra parte (Ger 2,17): 1 dia en que comiereis de l, moriris con muerte '. Y en comiendo no solo no

mueren, sino que tienen hijos y son constituidos autores de vida para otros. ^Qu decir a sto? Que hay dos clases de muerte: la una del hombre, la otra propia del alma.

La del hombre es la separacin del alma fuera del cuerpo; la muerte en cambio del alma es la corruptela de la vir tud y adquisicin del vicio. Al decir, no solo que mueren, sino que

' mueren ( =morirn) con muerte

' da a entender

no la muerte comn, sino la particular y por excelencia, a saber (la del) alma sepulta entre pasiones y toda suerte

de vicios26.

He ahi la exegesis compendiada por Ireneo. Si no alude al hebreo alejandrino21, denuncia la explicacin de Gen 2,17 por l representada; y probablemente compartida por los eclesis

ticos, contemporneos del obispo de Lin, impugnados en adv.

haer. V, 2,2-3; y V, 31,1-2 .

aufert ab eo vitam, hoc est non obaudire Deo, experimento discens quoniam malum est, neque temptet quidem illud unquam; quod autem conservatorium vitae ejus est obaudire Deo, sciens quoniam bonum est, cum omni intentione diligenter custodiat . Si el obedecer conserva la vida, y el desobedecer se la quita (resp. da la muerte), ima cosa es obedecer desobedecer la causa y otra la vida muerte su efecto.

Ni siquiera este pasaje (IV, 39,l,2ss) los dems invocados por Meijering (p. [46] notas 27 y 28) resultan menos convincentes constituye excepcin en la doctrina de Ireneo, sobre la distincin entre la inobe diencia (causa u origen) y la muerte fisica (su efecto): de que largamente dijimos en Antropologia de san Ireneo, Madrid, 1969, 461ss.

26 Leg. alleg. I 105. 27 Que vuelve con frecuencia sobre lo mismo. Agric. 171; fuga 113...

Vase C. Larcher, Etudes sur le Livre de la Sagesse, Paris, 1969, 172s 280ss; mi Antropologia de san Ireneo 450ss.

Por lo dems, es muy probable el conocimiento de algunos tratados de Filn por Ireneo. A los elementos registrados por E. Lanne, Cherubini et Seraphim, en RSR 43, 1955, 524-535 convendrfa sumar tal vez Cherub. 77 : Propio es de Dios el hacer... propio empero de la creatura el pa decer , que recuerda Iren. IV, 39,2,38s Non enim tu Deum facis, sed Deus te facit... 52ss Lacere enim proprium est benignitatis Dei, fieri autem proprium est hominis natura e (cf. IV, ll,2,21ss).

28 Cf. mi art. Adversarios annimos de la ' Salus carnis ', en Grego rianum 60, 1979, llss.

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Para un filoniano (resp. adversario de la Salus carnis) que hace de la psique el hombre esencial, y descuida por adifora y teolgicamente neutra la muerte del compuesto (resp. de la

sarx), no hay otro verdadero que el del hombre inte

rior (o psique). Gen 2,17 aludia a la muertepecado del hom bre esencial, en el instante de la transgresin; a la. muerte ino

rai, ante Dios:

Simul enim cum esca et mortem (sec. hominem interio rem) asciverunt, quoniam inobaudientes (Deo) manduca bant: inobaudientia enim Dei mortem (talem) infert (lin. 28-30).

Al Creador le importaba poco la muerte fisica. El dia en que ante mi, pecando contra mi comiereis del fruto prohibido, moriris de veras para Mi en vuestro hombre interior .

Es la solucin presumible en Orgenes y en todos los ori

genianos.

Sed et ad primum hominem a Deo prolata sententia ea

dem continet, cum dicit: ' Qua die autem manducaveri

tis ex eo, morte moriemini '. Statim namque ut praevari catus est mandatum, mortuus est. Mortua est enim anima

quae peccavit, et arguitur serpens fefellisse, qui dicit (Gen 3,4):

' Non morte moriemini '29.

La desarrolla ampliamente s. Gregorio Magno30, y mas tarde

29 Origen., Homil. in Genesim XV, 2. Cf. asimismo In Genes. PG 12, 100 C.

30 Registrum epistolarum, tom. I/pars I (VII, 31) ed. . Ewald . 480, 8ss Inter alia autem scriptum illic continebatur de Adae anima, quia in peccato mortua non fuerit et quod diabolus in cor hominis non in

grediatur et, si quis haec dixisset, anathema esset. Quae cum mihi relecta fuissent, valde contristatus sum. Si enim Adae, qui primus peccavit, anima mortua in peccato non est, quomodo de ligno vetito ei dictum est :

' In

quacumque die comederitis ex eo, morte moriemini '? Et certe comedit Adam et Eva de ligno vetito et tamen in carne sua ultra DCCCC annos

postmodum vixerunt. Constai itaque, quia carne non est mortuus. Si ergo anima mortuus non est, quod dici nefas est, falsam sententiam de ilio

protulit Deus, qui dixit, quia, qua die comederet, moreretur. Sed absit hic error, absit a vera fide. Nos enim primum hominem, qua die pec cavit, anima mortuum dicimus atque per hunc omne genus humanum in hac mortis et corruptionis poena damnatum. Per secundum vero homi

nem et modo a morte animae et postmodum ab omni corruptione carnis

in aeterna resurrectione liberari nos posse confidimus. Sicut autem et

praedictis responsalibus diximus, Adae animam mortuam in peccato di

cimus non a substantia vivendi, sed a qualitate vivendi. Quia enim aliud

est substantia atque aliud qualitas, non est eius anima ita mortua, ut

non esset, sed ita mortua, ut beata non esset. Qui tamen Adam postmo dum per paenitentiam ad vitam rediit .

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Claudio de Turn31. La rebate s. Agustn32. San Ambrosio, tan

fiel en muchas ocasiones a la exegesis de Filn, apunta la linea

del hebreo alejandrino, sin llegar empero a las expresiones de

s. Gregorio M.13.

2] Segunda solucin

Restituida la primera solucin, est segunda no ofrece re

paros. Los testimonios paralelos son:

Propter hoc ex eo traditi sunt ei ( = morti), debitores mor tis effecti (lin. 30-31). Sive quod exinde traditi sint , et facti sunt debitores mortis (lin. 57-58).

Ex eo exinde en griego 34 desde en

tonces , desde que comieron en desobediencia.

Traditi sunt ei ( = morti) , traditi sint fueron

entregados a la muerte fisica (futura) , por contraer el de

bitum mortis . Casi seguro, ha de restituirse, en el segundo testimonio, el dativo ei

31 In Genesin PL 50, 908 AB. 32 De civit. Dei XIII, 12 Quando ergo dixit Deus primo illi homini,

quem in paradiso constituerat, de cibo vetito, '

Quacumque die ederitis ex eo, morte moriemini non tantum primae mortis partem priorem, ubi anima privatur Deo {= sententia Philonis et Origenis); nec tantum poste riorem, ubi corpus privatur vita {= sententia Irenaei); nec solum ipsam totam primam, ubi anima et a Deo et a corpore separata punitur (cujusnam sententia?): sed quidquid mortis est usque ad novissimam quae secun da dicitur (cf. la nota complem. 38, Bibl. August. voi. 35, 1959, 526-529), qua est nulla posterior, comminatio illa complexa est . Por otro lado van las cuatro muertes enumeradas por Orgenes (Rufino), Ad Romanos VI, 6 (PG 14,1068 AB). Vase mi Antropologia de san Ireneo 409ss; J. Flamant, Macrobe et le No-platonisme latin, la fin du IV sicle, Leiden, 1977, 582-587; Benedicto Pererio, In Genesin, lib. IV 157ss ('disputatio de poena mortis quam Deus Adamo edenti fructum arboris vetitae com minatus est ')

33 Vase W. Seibel, Fleisch und Geist beim heiligen Ambrosius, Miin chen, 1958, 115-119.

34 Cf. adv. haer. III, 18,4,80s Ex eo ( ) enim, inquit (Mt 16, 21), coepit demonstrare discentibus {= discipulis), quoniam oportet illum Hierosolymam ire; III,21,9,200s Non enim erit ex eo sedens super thronum David (ler 36,30); V, 21,l,8s Ex eo enim qui ex muliere Virgine habebat nasci secundum similitudinem Adam .

35 Cf. s. Metodio, de resurrectione II, 18,3s : Por eso, merced a su indole intermedia entre la corrupcin y la incorruptela, al no ser la sarx (a la sazn) corrupcin ni incorruptela, apoderse de ella la corrup cin, a causa del deleite, hechura corno era y posesin de la incorruptela (en rgimen gratuito). De resultas vino a caer en corruptela y declin a

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CINCO EXEGESXS IRENEANAS DE GEN 2,17b 89

Representa la solucin personal y espontanea de Ireneo,

para quien el hombre conoce solamente la muerte comn. E1

Creador le amenaza con la muerte, disolucin fisica de los com

ponentes, corruptela del plasma. Adn y Eva contrajeron la

deuda de la muerte, por haber transgredido Su precepto36. La

contrajeron con Dios. Adquirieron ante El el deber de morir; encadenados a la muerte, a raiz de su desobediencia.

Adn y Eva no murieron al corner del rbol prohibido. Hicironse mortales31. Mas tarde les llegaria la muerte.

Elevados gratuitamente, en el paraiso, a un rgimen in termedio entre la mortalidad fisica y la inmortalidad de Dios a que estaban destinados, con la desobediencia se volvieron

mortales M.

Es la solucin de Tefilo Antioqueno; y, despus de Ire neo, la presumible en Tertuliano39, Novacianos. Cipriano41,

la tierra de sepultura. Y corno cay en poder de la corrupcin y fu consignada para disciplina a la muerte ( Si ), no la abandon Dios en Victoria, corno herencia, a la corrupcin, sino que triunfando de nuevo, mediante la resurreccin, de la muerte, se la de volvi a la incorruptela, para que no heredase la corrupcin a la in

corruptela; y si la incorruptela a lo corruptible . 36 Cf. adv. haer. V, 16,3,48ss quem in primo quidem Adamo offendi

mus, non facientes ejus praeceptum, in secundo autem Adam reconciliati sumus, obaudientes usque ad mortem facti. Neque enim alteri cuidam eramus debitores, sed illi cujus et praeceptum transgressi fueramus ab initio; III, 19,l,2ss ; IV, 22,1,6s. Vase Antropologia de s. Ireneo 455s.

Epideixis 31: Y porque en la primera creatura Adan nos habia encadenado a todos a la muerte, por el hecho de la desobediencia, con venia que fueran rotas (las cadenas) de la muerte, por la obediencia del

que se habia hecho hombre a causa de nosotros ; adv. haer. 111,21,10, 216ss Et quia quemadmodum per inobaudientiam unius hominis introi tum peccatum habuit et per peccatum mors obtinuit, sic et per obaudien tiam ... Cf. Ili, 23,7,160ss.

37 Es la solucin del targum PS. Jonatn (ad Gen 2,17 reo de muerte), en consonancia con la vers. de Smaco ( ), que siguen Teodoreto, Quaest. in Genes. 38; el Crisstomo, Homil. 17 in Genes. 9; s. Jernimo, De hebr. quaest. in Gen. c. 2. Como Smaco leen los codd. X, 127,135 regis trados por F. Field, Origenis Hexaplorum ... fragmenta I, Oxonii 1875 p. 14.

38 Cf. s. Tefilo Ant., ad Autol. 11,24 y TI. Vase mi Antropologia de

san Ireneo 395ss. 39 adv. ludaeos 2,4 Si proximum diligerent, id est, semetipsos, per

suasioni serpentis non credidissent atque ita in semetipsos homicidium

non commisissent, excidendo de immortalitate faciendo contra Dei prae

ceptum; de anima 52,2; adv. Marc. 11,8,2. de trinitate 1,6 Ex quo mortalitas, invidia utique in ipsum re

dit, qui, cum illam de oboedientia posset evadere, in eandem incurrit, dum ex Consilio perverso deus esse festinat . Vuelvo (contra V. Loi) a la lectura de Fausset.

41 de zelo 4 Dum stimulante livore homini gratiam datae immortali

tatis eripit .

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s. Zenn de Verona 4Z, Comodiano 43, Prudencio 44, y otros de an

loga inspiracin45. Los testimonios citados por Feuardent 46, a saber, Teodo

reto 47 y san Agustn 48 evocan la misma solucin49; mas no con

cuerdan con las premisas de su antropologia.

3] Tercera solucin

A tenor de las lineas precedentes (28-31) parecia haber re suelto el Santo la dificultad. Adn y Eva murieron a Dios, con el pecado (solucin filoniana y origeniana), al momento de co rner; se hicieron fisicamente mortales, condenados a morir (solucin ireneana).

Tales soluciones ofrecen su lado dbil. Obviamente enten

42 traci. 1,4,8 (CCL 22 ed. B. Lofstedt p. 33) posteris (Adam) heredi tatem indigestae mortis, quae homicidium mox peperit, dereliquit .

42 Carmen apologeticum 149s Hic fecerat primum hominem, ut esset aeternus, / Sed ruit in mortem neglectis ille praeceptis ; 321ss Per quod prius hominem prostraverat morti malignus, / Ex ipso devictus; unde nobis vita provenit. / Adam degustato pomo mori iussus obivit; / Cuius de peccato morimur sic et omnis idemque . Cf. A. Salvatore, Commodia no: Carme apologetico, Torino, 1977, 150ss.

44 Cathemerinon 3,181ss Sit satis anguibus horrificis, / Liba quod inpia corporibus / A ! miseram peperere necem ; / Sufficiat semel ob fa cinus / Plasma Dei potuisse mori . Vase el anlisis de J. Pascual Torr, Antropologia de Aurelio Prudencio, Roma, 1976, 139s.

45 Tal vez s. Efrn, Comment. in LHatessaron XIX, 4 (SC 121, 333); XXI, 25 (388).

46 Apud A. Stieren, Apparatus ad opera s. Irenaei... II/2 Lipsiae, 1849, 1056.

47 Quaest. 38 in Genesin PG 80,137 C. 48 De civit. Dei XIII, 23,1 Quapropter, etiamsi mortem istam mani

festam, qua fit animae a corpore separatio, intelligamus simul significa tam in eo quod Deus dixerat,

' Qua die ederitis ex ilio, morte moriemini non ideo debet absurdum videri, quia non eo prorsus die a corpore sunt soluti, quo cibum interdictum mortiferumque sumpserunt. Eo quippe die mutata in deterius vitiataque natura, atque a ligno vitae separatione iustis sima, mortis in eis etiam corporalis necessitas facta est, cum qua nos necessitate nati sumus . Algo parecido en De Genesi ad litteram 1,17,33 ; XI, 32,42.

49 Digase lo propio de s. Atanasio, De incarnatione Verbi c. 3 fin SC 199,274: PG 25,101 CD extrafi amente interpretado por J. C. M. van Win den, An Early Christian Philosopher, Leiden 1971, 108. Como si el Creador amenazase en Gen 2,17 con el retorno al no-ser (!); Atanasio dice simple mente: Aquello de moriris con muerte viene a ser que (les amenaza) no solo con el morir, sino con el perseverar asimismo en la corrupcin de la muerte ( , ) . En otros trminos, les amenaza adems de con la muerte, con el rgimen de mortalidad, afecto a la corrupcin y muerte. Cf. Oratio II contra Arianos PG 26,288 AB.

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ANTONIO ORBE, S. I. 91

dido Gen 2,17 Dios conmina con la muerte comn, inmediata y sensible, capaz de atemorizar a los primeros padres. ^Cmo es

que no murieron?

Entendida la insuficiencia de las dos soluciones precedentes,

querria tal vez Ireneo demonstrar la verdad espontnea, literal,

de las palabras del Creador: E1 dia mismo en que comiereis de l (del rbol prohibido), moriris con la muerte comn (contra la solucin primera); y de hecho, no simplemente

' de derecho ' (contra la segunda solucin).

En otros trminos, quedaria por ver cmo el dia en que comi Adn del fruto prohibido, ese mismo dia muri de facto.

San Ireneo presenta tres soluciones, y se extiende algo en

su desarrollo. Las tres ofrecen paralelos en la segunda columna.

Atiende a declarar el misterioso dia: In qua die man ducabitis... Es de tal naturaleza, que en su mbito da lugar a la manducacin prohibida y a la muerte comn. iDia de 24 horas, ms bien Dia del Sefior? ^de la semana, de la Heb dmada (csmica)? dia nico, Dia de mil anos?

* * *

La respuesta y entramos en la Tercera solucin se

basa en Gen 1,5 Factum est enim, inquit, vespere et factum

est mane dies unus ( ). El Dia de Gen 2,17b es el mismo Dies unus de Gen 1,5. Dia

unico de la creacin. Jornada '

sui generis '

que abarca todos

los tiempos del universo creado; en oposicin al Dia de la eter ni dad ().

En l transcurren todas las historias y acciones del hom

bre: la conversacin del paraiso, el pecado, la vida y la muerte.

En ese magno Dia de la creacin quoniam conditionis dies unus (33-34), quoniam una conditionis dies (60) en que ocurren los actos de la humana historia, comieron Adn y Eva,

y murieron de facto con muerte comn. En l gustaron el manjar

prohibido y en l bajaron al sepulcro. Los LXX y la Vulgata leen un dia ( , unus dies).

Lo mismo el Targum Onqelos y el ps. Jonatn50. La lectura

obvia seria primus dies ( ). Desde muy pronto de nunciaron los exegetas el fenmeno. A diferencia de los dems

dias, que figuran con ordinales ( dies secundus... tertius ...

sextus, septimus ), el primero viene con cardinal.

50 No asi el Neofiti 1 (ad loc.).

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Non dixit ' dies prima ' escribe Orgenes 51 sed dixit

dies una. Quia tempus nondum erat, antequam esset mun

dus. Tempus autem esse incipit ex consequentibus die

bus. Secunda namque dies et tertia et quarta et reliquae omnes tempus incipiunt designare.

Mejor todavia Filn:

A cada dia asign algunas partes del todo, a excepcin del primero, al que no llama primero, para no nume

rarlo con los dems. Al denominarle uno () le llama con un nombre atinadisimo, corno quien descubre en l

la natura y apelativo de mnada y se los aplica. No hay modo de expresar todo lo que contiene este nmero. En

cierra en efecto el solitario mundo inteligible52.

Las especulaciones sobre la Mnada aparecen, bajo la in

fluencia del pitagorismo, en la escuela de Platn; y proliferan con el neopitagorismo53. La Mnada no es nmero, sino prin

cipio de los nmeros. Unidad simplicisima e inmutable, Filn hace de ella el

mundo inteligible , imagen del Dios incorpreoM, anterior a los tiempos, sintesis de ellos en estadio antecedente al mundo

sensible 55.

Tales filosofias se prestaban entre los gnsticos a curiosas

aplicaciones. Las recuerda oportunamente Hiplito:

Los egipcios... ensenaban que Dios es una mnada indivi sible, y que ella se engendra a si propia, y a partir de ella se constituyen todas las cosas. En efecto... siendo

51 Homil. in Genesim 1,1. 52 de opif. 15. Cf. ibid. 35 E1 Creador llam la (medida del tiempo) ' dia y dia no primero, sino uno, asi denominado a causa de la sepa

racin ( ... ) del mundo inteligible, que tiene natura mo ndica ( ) . Sobre la mnada, imagen de Dios, y anterior a los nmeros, vase Festugire, Le Dieu inconnu et la gnose, Paris, 1954, 19ss; U. FrOchtel, Die kosmologischen Vorstellungen bei Philo von Alexandrien, Leiden, 1968, 27s.

53 Festugire, en nota a CH IV, 10-11 (t. I p. 56s); J. Kroll, Die Lehren des Hermes Trismegistos, Miinster i.W., 1913, 23ss.

54 Spec. II, 176. Festugire, Le Dieu inconnu et la gnose, Paris 1954, 19ss; P. Courcelle, Ambroise dvot de la monade, en Recherches sur s. Ambroise, Paris 1973, 25-33.

55 Muchos otros testimonios de Filn, y paralelos de otros autores, en K. Staehle, Die Zahlenmystik bei Philon von Alexandreia, Leipzig, 1931, 19-21.

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ingnita engendra a los dems nmeros56. Afiadida a si propia, la mnada engendra la diada...

Muy poco tuvieron que afiadir simonianos y valentinianos al

neopitagorismo aqui implicito, para lanzar primeramente a ti tillo de Mnada superior, En nico (resp. Raiz del univer so, Pleroma), el mundo divino; y desarrollarlo luego en los

Seis eones (= Dias inteligibles divinos)58 virtualmente conteni dos en la (Primera y) Sptima Dynamis Jornada de Dios59 simoniana; en los Seis eones, que componen el Pleroma espacio y tiempo divinos valentinianos a.

Los gnsticos aplicaron la ideologia neopitagrica al Pie roma divino, y paralelamente corno sombra de l a la Heb

dmada planetaria61. El hebreo Filn ide el mundo inteligible, mas alla del

espacio y del tiempo, a modo de Dies unus ; y asent las premisas para descubrir en el caracteristico del

la unidad , reilejada luego umbrtilmente en los dias de la Semana; anticipo del En eterno.

Se han perdido las especulaciones de Orgenes sobre el Unus dies , que por desgracia tampoco reaparecen entre sus

discipulos. San Basilio y san Ambrosio, en ocasiones fervorosos ori

genianos filonianos, adoptan otro sesgo62. A la semana, el mundo del tiempo sucesivo y mltiple, opo

nen el dia octavo, el mundo definitivo y nico de la eternidad.

5 Cf. Ref 1,2,6; IV, 51,4; VI, 23,2. 57 Ref IV, 43,4s (65,12ss). Cf. Hermipo 1,18,135 y los dems textos

citados por W. Scott, Hermetica II. 152ss. 5 Ref VI, 12,lss (138,9ss). 59 Ref VI, 14,lss (139,12ss). Vase J. . A. Salles-Dabadie, Recherches

sur Simon le Mage, Paris, 1969, 51ss. Cf. Iren., I, 1,1s; y mejor Hiplito, Ref VI, 29,2-3; VI, 30,2-3. 61 UW pi. 160, lOss Empero (el) Adn-Luz, al querer entrar en su

luz (= en el Pleroma), a saber, (en) la Ogdada (superior), no pudo, a causa de la deficiencia que se habia mezclado a su luz. Entonces cre para si un magno En


E1 (dia octavo) est en el principio de los dias y fu lla mado por Moiss no

' primero sino

' unico

' Hubo una

tarde, dice (Gen 1,5), y hubo una mariana, dia unico co rno si el mismo dia recomenzara a menudo el mismo ciclo.

Este dia nico es tambin octavo, y representa por si

mismo el dia aquel realmente nico y octavo, mencionado

por el salmista en el titulo de algunos salmos63, a saber

la catstasis que seguir a este tiempo, el Dia sin fin que no conocer tarde ni manana, el siglo imperecedero y sin

vetustez64.

S. Basilio hace caso omiso de la exegesis filoniana, substituyn dola por la pardosis, fuertemente eclesistica, del Dia pri mero y octavo , testimoniada por 2 Enoc 33,1 65; s. Justino,

dial 41,4 y Orac. Sibyll. VII, 140.

San Ireneo va por otro camino. Refractario a la existencia

de mundos anteriores al nuestro, ignora la '

mnada ' neopita

63 Cf. Ps 11 ' in finem, pr octava 64 S. Basilio, de Spiritu sancto 27. Vase M. Tardieu, Trois mythes

gnostiques, Paris, 1974, 137s. En sus Homiltas sobre el Hexaemeron, sefiala s. Basilio otras explicaciones : mas bien, conviene preferir una razn venida de tradiciones secretas. Dios, al otorgar al tiempo su natu raleza, le depar corno medidas y signos las duraciones de los dias. Va lindose por tanto de la semana, ordena a sta que revuelva de conti nuo sobre si para numerar el movimiento del tiempo, y al dia nico {le ordena) llenar la semana, tornando siete veces sobre si. Tal es la cir cunferencia: comienza y termina en ella misma. Es asimismo lo propio de la eternidad, que revuelve sobre si, sin nunca acabar. El comienzo del tiempo no se llama

' dia primero ', sino ' uno ', para indicar el pa

rentesco del tiempo con la eternidad {Homil. in Hexaemeron II : PG 29, 49 CD)... Le digas dia eternidad, expresas la misma idea. Si se llama dia esa duracin, hay un dia y no muchos; si eternidad (), sera so litario y no mltiple. Para dirigir nuestro pensamiento hacia la vida fu tura llam la Escritura uno a ese dia, imagen de la eternidad, primicias de los dias, contemporneo de la luz, el Dia santo del Sefior, el que honr el Maestro con su resurreccin (ibid. PG 29,52 AB). Vanse las notas de Stan. Giet, en Sources chrt. voi. 26 p. 180ss. S. Ambrosio (In Exameron 1.10,37 CSEL 32 p. 39) se inspira en s. Basilio. S. Jernimo denuncia brevisimo la idea In Hiez. IX (Ez 29,1-3) ed. Glorie 402,559ss unde et in principio Geneseos non est dictum

" Factum est vespere et mane, dies prima ', sed una, ut eandem diem revolvi semper edoceat .

65 Ed. A. Vaillant p. 103s. 66 Jesucristo resucit de entre los muertos en el Dia uno de los

sbados. El cual (dia) siendo el primero de todos los dias, segn el nmero de la circunferencia de todos los dias que se repiten en circulo se denomina octavo, sin dejar de ser primero . Vase la nota de Otto ad loc.

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grica. No habiendo , mal podr dies unus alu dir a l, corno a paradigma del mundo material67, E1 Obispo de Lin solo conoce el mundo sensible. A l se refiere el dies unus . Ireneo le concibe corno sintesis de los seis siete ma

gnos Dias de la historia. El conditionis unus dies se inspira en Gen 1,5. Su contenido est a merced del alcance otorgado a la Conditio: que entre gnsticos podria muy bien referirse al Pleroma Adn de Luz68; entre filonianos y origenianos al

mundo inteligible en su duracin pretemporal; mas en Ire

neo ha de aplicarse necesariamente al mundo sensible. A di

ferencia de los dems dias, denunciados con ordinales, escon

de un significado excepcional, nico, corno expresin del tiempo todo del mundo sensible; prob. frente al Dia del Senor ,

eterno, que sintetiza la duracin metahistrica del propio mundo.

Dia unico, sin primero ni segundo69, y tornando la parte

por el todo70, denota el tiempo global del universo sensible.

Y segn eso, en el mismo dia de la creacin sensible

comieron (Adn y Eva), y murieron . Importa poco haya vi vido Adn 930 anos (Gen 5,5). Aunque hubiese continuado en vida hasta hoy, seguirla en el Dies unus conditionis , (Gen 1,5).

tOtorgaba Ireneo singular importancia a est exegesis? Es

muy de l abrirse a grandes perspectivas; entender el alcance

de la sentencia conminatoria de Gen 2,17, segn las medidas

de Dios. Todo el tiempo de la creacin cuenta por un solo Dia. Hermosa respuesta, pero demasiado generica. La solucin lti

ma apurar esto mismo, con mejor base escrituraria y sentido

ms humano.


Por lo primero, todas las efemrides se pueden fechar en

uno de los siete dias. Por lo segundo, todas las fechas se re

piten indeflnidamente por ciclos semanales. E1 viernes por ej empio se repite de una semana a otra.

Lo que afecte a la feria sexta , interesa a todas las semanas,

a lo largo del ano.

No hay suceso en el mundo sensible que se salga de las

leyes del tiempo. La transcendencia de algunos hechos puede

gravar fuertemente sobre el dia en que tuvieron lugar hasta

caliiicarlos. Tal cosa tuvo lugar en lunes, en martes... La Pa

sin y muerte de Cristo fij asi, con peso decisivo, el viernes de Parasceve , corno el dia de la muerte de Jess.

Puede ocurrir primer caso que el misterio inherente

a una fecha v.gr. la muerte del Salvador responda a otro

anlogo (' a contrario '). Que Cristo se entregue a la muerte,

en la Cruz, para contrapesar el misterio de Adn: su culpable

entrega a la muerte, en el rbol del Paraiso. En tal caso, bastar

conocer el dia de cualquiera de los extremos correlativos, para descubrir la fecha del extremo contrario.

Cabe asimismo segundo caso que lo cronolgico sea

totalmente marginai. Que la muerte de Cristo, correlativa a la

de Adn, no est vinculada a una fecha. Podria sobrevenir en cualquiera de la semana. En tal caso, la determinacin del dia,

en uno de los extremos, no entrarla la correlativa del otro.


replasmacin () por el Segundo. En dia sexto fu mo delado Adn, segn cronologia conjunta de Gen l,26s y Gen 2,

771; y en feria sexta fu remodelado por Cristo.

Un paso mas. Las dos correlaciones primeva, entre el

dia de la obediencia y muerte de Jesus, y el de la desobedien cia y muerte de Adn; segunda, entre la replasmacin del hom

bre por Jess, y la plasis en Adn apuntan, a modo de coor

denadas: a) a la feria sexta ( sexta conditionis dies ), tanto

para la manducacin y muerte de Adn, corno para la obedien

cia y muerte de Cristo; b) al mismo Dia para la formacin de Adn y para su muerte, de un lado; para la reformacin de

Adn y para la muerte de Cristo, de otro.

En consecuencia, un mismo Dia el sexto conoci la

plasis de Adn (Gen 2,7; l,26s); su desobediencia manduca cin del fruto prohibido; y su muerte. ^Quiere eso decir que, segn Ireneo, Adn muri el mismo dia de 24 horas en que fu formado del lodo; a imagen de Cristo que dentro del dia

de 24 horas replasm al hombre con su Pasin y muerte?

Seria extremar la correlacin. Ireneo deja caer la identi

dad del Dia, en su duracin de 24 horas; y urge nicamente la del Dia semanal. En viernes fu hecho el hombre; en viernes

comi del rbol de la ciencia; y en viernes muri.

Las lineas consagradas a la cuarta solucin equivalen en extensin a las de las otras soluciones juntas. Las distribuye

en dos partes de anlogas proporciones: la primera (lin. 36

43) enuncia prcticamente la solucin; la segunda (lin. 43-52) la desarrolla por via casi de silogismo.

Primera parte: la solucin viene de la Economia del Seftor

( ex Domini dispositione ). Se funda en la correlacin a ti tulo de anacephalaiosis entre los dos Adn.

El dia a que se refiere el Creador (en Gen 2,17) es uno de los siete que por su revolucin semanai sirven al desarrollo

de la Economia histrica. Asi entendido, en su alcance obvio,

icmo averiguar el dia en que muri Adn?

71 Conjunta, porque la antropologia de san Ireneo ignora dos crea ciones Gen l,26s (para el hombre esencial) y Gen 2,7 (para el sensible) ; conoce una nica, la plasis del hombre terreno a imagen y semejanza de Dios. Vase Antropologia de san Ireneo 13ss.

42:07 PM


Solucin: inveniet ex Domini dispositione . Merced a la Economia (salvifica) del Sefior, entendemos directamente el dia de la muerte del Segundo Adn. Indirectamente, el dia de la muerte de Adn.

Secundum autem circulum et cursum dierum, secundum

quem alia quidem (dies) prima, alia secunda et alia tertia vocatur, si quis velit diligenter discere qua die ex septem diebus mortuus est Adam, inveniet ex Domini dispositione (fin. 36-41).

Dispositio Domini no coincide con dispositio Dei . In dica la Economia salvifica abrazada por el Sefior: Disposicin (o Economia) de Dios fijada por el Padre a su Hijo en la universal Dispensacin de la humana Salud72. Abraza los mis

terios todos de la vida del Salvador. Ahora bien, articulo fundamental de la Economia del Se

fior es la recapitulacin . Mas si la dispositio es concepto vago, no lo es menos la recapitulatio . Cristo recapitula: a) todas las cosas, del cielo y de la tierra73; b) a todos los hom

bres sin excepcin74; c) al primer hombre Adn: la natura toda,

en cuerpo y alma, y su entera historia (desobediencia para Dios, actitud frente al enemigo...)75.

^A qu recapitulacin alude ahora el Santo? Tan obvio se

le antoja el trnsito de la dispositio Domini a la recapitu latio , corno el paso de la recapitulacin del hombre entero

( universum hominem ) a la de la muerte de Adn. El Santo

invoca la en apoyo de la nueva solucin ex

Domini dispositione . Qu derecho le asiste para fijar el dia sexto de la semana, corno fecha de la muerte de Adn? Responde:

72 Cf. adv. haer. IV, 33,15,325ss Et reliqua omnia quaecumque per tantam seriem Scripturae demonstravimus prophetas dixisse, spiritalis vere qui est interpretabitur, unumquodque eorum quae dieta sunt in quem dictum sit characterem dispositionis Domini et integrum corpus operis Filii Dei ostendens, semper eundem Deum sciens ... .

72 Segn expresin paulina (Ef 1,10): Recapitulans in se omnia quae in caelis et quae in terra. Sed quae in caelis spiritalia sunt, quae autem in terris secundum hominem est dispositio (adv. haer. V, 20,2,54ss). Puede verse E. Scharl, Recapitulatio mundi, Freiburg im Breisgau, 1941, 47.

74 adv. haer. Ili, 16,6,213ss et omnia in semetipsum recapitulans in omnibus autem est et homo, plasmatio Dei et hominem ergo in se metipso recapitulatus est . Cf. J. A. de Aldama, Maria en la patristica, Madrid, 1970, 295 y 313s.

75 adv. haer. V, 21,1,lss Omnia ergo recapitulans, recapitulatus est et adversum inimicum nostrum bellum . Ntese la construccin gramatical, muy parecida a la de ahora (lin. 4143).

42:07 PM


Recapitulans enim universum hominem in se ab initio usque ad finem, recapitulatus est et mortem ejus. Ma

nifestum est itaque quoniam in illa die mortem sustinuit Dominus obaudiens Patri in qua mortuus est Adam ino

baudiens Deo {lin. 41-45)76.

Pues al recapitular en si al hombre entero desde el principio hasta el fin, recapitul tambin su muerte . La clusula se

presta a equivocos, segn se refiera al gnero humano, al pri mer hombre Adn. Todo depende del universus homo :

a) en su aplicacin al gnero humano, universus homo = omnes homines, el Sefior habria recapitulado en Si a todos los hombres en el espacio y en el tiempo, desde Adn hasta el ltimo de sus hijos;

b) en su aplicacin a solo Adn, el Sefior le habria reca

pitulado por entero, en cuerpo y alma, y en toda su historia,

desde el principio (plasis) hasta el fin {muerte fisica); sin que ninguno de los misterios del primer hombre, singularmente corno plasma77, escapase a la por el Segundo Adn.

El contexto impone la segunda interpretacin. Sin negar

que indirectamente pueda Ireneo aludir a la historia de todo el linaje, desde Adn hasta el ltimo de sus hijos78, derecha mente se refiere a Adn, en cuerpo y alma79. En lineas anterio

res habla de Adn. Importale esclarecer la fecha de su muerte.

Al invocar el argumento de la recapitulacin , hace valer la

nica atinente, la anacephalaiosis del primero por el Segundo.

76 Cf. E. Scharl, Recapitulatio mundi, Freiburg im Breisgau, 1941, 23, y 56s.

77 Cf. Scharl, Recapitulatio mundi 46ss. 78 III, 12,13,453ss Sic erant perfecti qui unum et eundem Deum ab

initio usque ad finem variis dispositionibus adsistentem humano generi sciebant; III, 18,1,9ss sed quando incarnatus et homo factus, longam hominum expositionem in seipso recapitulavit, in compendio nobis salu tem praestans ; IV, 6,7,127ss omnia autem Filius administrans Patri perficit ab initio usque ad finem, et sine ilio nemo potest cognoscere Deum... Ab initio enim adsistens Filius suo plasmati, revelat omnibus Patrem; V, 16,l,12ss et cum sit unus et idem Pater, cujus vox ab initio usque ad finem adest plasmati suo... jam non oportet quaerere alium Patrem praeter hunc... neque alteram manum Dei praeter hanc quae ab initio usque ad finem format nos .

79 Otorga al universum hominem el alcance de totum hominem, en cuerpo y alma. Como entiende


Cristo recapitula a Adn. Mas no, corno quieren los gns

ticos, al vero Anthropos, luminoso; ni, corno dirla lgicamente

Orgenes, al Adn u hombre esencial () ; sino a todo el hom bre, en cuerpo y alma, con particular nfasis para lo somtico

(resp. el plasma). Le recapitula en la plasis (corprea), en la desobediencia segn el plasma (con acto corpreo, corno es la

manducacin del fruto prohibido), y sobre todo en la muerte '

segn la carne

Segunda parte. Por recapitular el Sefior al primer hombre,

en cuerpo y alma ( universum hominem ), y a lo largo de su historia, desde la plasis hasta el fin { ab initio usque ad finem ), recapitula asimismo su muerte. Y si sta, igualmente la fecha de la muerte: circunstancia de particular relieve, por su misterioso enlace con la sentencia de Gen 2,17.

Ireneo razona la solucin en forma casi de silogismo. Asi la presentamos para mayor claridad, sin tocar el texto.

Mayor: Manifestum est itaque quoniam in illa die mortem sustinuit Dominus obaudiens Patri, in qua mortuus

est Adam inobaudiens Deo.

menor: In qua autem mortuus est, in ipsa et manducavit.

[Prueba de la menor] Dixit enim Deus (Gen 2,17): ' In qua die manducabitis ex eo, morte moriemini '.

consecuente: Hunc itaque diem recapitulans in semetipsum Dominus, venit ad passionem pridie ante sabbatum,

quae est sexta conditionis dies, in qua homo plasma tus est, secundam plasmationem ei, eam quae est

a morte, per suam passionem donans (lin. 43-52).

La Mayor va implicita en la recapitulacin , cuerpo y alma, del primer hombre, desde su formacin hasta la muerte (' ab

initio usque ad finem '); incluido el dia de la muerte singu larmente comprometido en el rgimen del paraiso.

A la menor: Es asi que el dia en que muri, fu el mismo en que comi del rbol prohibido. Ireneo la prueba con Gen 2,17.

Al consecuente. Luego Cristo muri en la feria sexta (de Parasceve) por haber recapitulado el dia sexto de la crea

cin ( = feria sexta), en que comi y muri Adn. Ireneo pre senta de otra forma su idea, extendindose sobre la correlacin '

a contrario '

de las dos fechas: muerte de Jess para de Adn; muerte (y plasis) de Adn.

42:07 PM


E1 Gnesis omite la fecha en que Adn y Eva comieron del

rbol prohibido. Mas, segn la sentencia conminatoria, por la

fecha en que murieron cabe deducir la del pecado. Pero tam

poco registra Moiss la fecha de la muerte. Hay que acudir

al argumento ex Domini dispositione (resp. de la recapi tulacin). E1 Sefior que recapitula en su integridad a Adn, mue re el dia sexto de Parasceve. Luego.

Ocurre adems que ese mismo dia recapitulaba el Sefior la plasis de Adn, replasmando su cuerpo segun el Espiritu. En consecuencia, consta por el camino de la anacephalaiosis que

Adn, formado el dia sexto (cf. Gen l,26s), comi desobediente el dia sexto, y muri a la postre ese mismo dia. Tres fechas

distanciadas en el tiempo con arreglo al circulo y trascurso de

los dias de la semana.

En absoluto, para la solucin al conflicto de Gen 2,17 la identidad del dia (en feria sexta) de la manducacin ilicita, y de la muerte de Adn sobra la correlacin entre la plasis del primer hombre y la secunda plasmatio () del Sefior. Por qu escogi ste la feria sexta para la Pasin y muerte? La respuesta seria: porque Adn pec (y muri) en feria sexta. A fin de recapitular en el tiempo la desobediencia

y muerte de Adn.

Ireneo afiade otra razn. Resulta que el primer hombre

habia sido modelado (Gen 2,7) ese mismo dia, sexta conditio nis dies . El Santo80 simplifc la creacin (resp, plasis) del hombre. La fecha de la plasis (de Gen 2,7) se deduce de la

poiesis (de Gen l,26s). Al recapitular pues Cristo la fecha de la muerte de Adn,

compendi asimismo la de su aparicin primera. Pero est segunda anacephalaiosis no pudo ser casual, coin

cidencia entre el dia de origen de Adn y la fecha de la muerte

del Segundo Adn? Hasta ahora habia registrado Ireneo el fenmeno: el Se

80 Frente a Filn (de opific. 69; leg. alleg. 1,31: vase H. Willms, EIKON. Eine begriffsgeschichtliche Untersuchung zum Platonismus I. Teil : Philon von Alexandrien, Miinster i.W. 1935, 63ss) y OrIgenes (Hotn. I in Genes. 13; Hom. I Jer. 10... : vase H. Crouzel, Thologie de l'image de Dieu chez Origene, Paris 1956, 150ss) partidarios de dos creaciones: una del hombre esencial, el Dia sexto, segn Gen l,26s; y otra del hombre sensible en qu dia? segn Gen 2,7. Vase mi Antropologia de san Ireneo 8ss.

42:07 PM


fior muri por obediencia al Padre en el mismo dia en que Adn habia muerto por desobediencia a Dios.

Ahora da otro paso, del hecho al motivo. La muerte es

la contrapartida de la plasis. Est configura al hombre, y le

dispone a la vida. La muerte le destruye y devuelve al polvo de origen. El Sefior se alleg, por obediencia, a la muerte, para triunfar de la de Adn, y devolverle a la plasis con una

secunda plasmatio . He ahi por qu se ofreci Cristo a la Pasin y muerte en el dia sexto de la creacin, el mismo de la humana plasis. Adn, con su pecado (y muerte) deshacia la plasis inicial, condenndola al polvo;

' a contrario ', el Se

gundo Adn, con su obediencia (y muerte), restauraba la plasis, devolvindola a la vida. La correlacin entre la muerte de Jess

y el origen de Adn, escondiase en la simple correlacin entre ambas muertes por obediencia y por desobediencia. Y corno

ella, la relacin de fechas.

Hunc itaque diem recapitulans in semetipsum Dominus, venit ad passionem pridie ante sabbatum, quae est sexta

conditionis dies, in qua homo plasmatus est, secundam plasmationem ei, eam quae est a morte, per suam pas sionem donans (lin. 47-52).

Distraido tal vez Ireneo por las correlaciones de fecha que se

advierten entre la plasis, el pecado y la muerte de Adn,

entre la anaplasis, la obediencia y la muerte de Cristo todas

en torno al dia sexto , amontona nuevos datos para ratificar

la solucin buscada. La segunda columna, de sintesis, deja caer

la relacin plasis/anaplasis, contenta con la de ambas muertes, de Cristo y de Adn:

Sive secundum hunc circulum dierum, quia in ipsa mor tui sunt in qua et manducaverunt, hoc est Parasceve, quae dicitur cena pura, id est sexta feria, quam et Dominus

ostendit passus in ea (lin. 60-64).

A fiarnos del sentido obvio, los primeros padres habrian muer to, igual que Jesus, en la Parasceve, el dia antes del Sbado. Mas el lugar paralelo de adv. haer. 1,14,6 lo disuade, al con traponer abiertamente el dia sexto en que fu hecho el hom

bre ( ), al sexto dia, a saber (dia) Paras

42:07 PM

CINCO EXEGESIS IRENEANAS DE GEN 2,17*> 103

ceve en que se dej ver el hombre ltimo para regeneracin del primero 81.

Cena pura , en griego , indica el dia sexto de

la semana judia82. Jess habria escogido, no sin misterio, aquella fecha, para

su Pasin y muerte: atento a la Cena pura , por contraste

con la impura manducacin del fruto prohibido; y a la propia muerte, en antitesis con la del primer hombre.

Mas an, habrialo consagrado ostendit , en el sentido

mas noble y fuerte haciendo de l el Dies ostensionis

( ) 83, corno quien oficialmente lo santifica con su Pasin y muerte ( quam et Dominus ostendit passus in

ea ).

Resumiendo la cuarta solucin. Al conminar el Creador

(Gen 2,17) ' El dia en que comiereis de l del rbol prohi

bido moriris referiase a uno de los dias de la semana; y en particular a la feria sexta. Adn y Eva murieron ese dia.

Tal solucin desconcierta. Qu podia importarle a Adn morir el mismo dia de la semana, en que comiera del rbol

prohibido? A la semana inmediata, a los afios, en la feria de Parasceve en que muri Jesus, qu m^s daba morir en

viernes en martes?


placitum habeat, pr universo semine ejus Dilectum et

Unigenitum Filium suum praestare sacrificium in nostrani

redemptionem M.

Arguyendo a pari. Abrahn entendi corno profeta que, si obe

decia al dificil mandato de sacrificar a su hijo Isaac, tambin Dios Padre sacrificarla al Unignito para redencin del hombre. Y por eso accedi con pronto nimo al sacrificio que Dios le demandaba.

Pudo tambin Adn, a titulo de profeta, haber entendido

el misterio de su obediencia (resp. desobediencia). A saber, que, si desobedecia al mandato del Creador (2,7), el manjar prohi bido habria de costarle al Hijo la muerte: El dia en que co miereis de l, moriris (en mi Hijo) . La falta del primer Adn la expiaria con su muerte el Segundo.

El que, a raiz del origen de su mujer, profiri.uno de los vaticinios ms grandes de la humana Economia el sacra

mento de Cristo y de su Iglesia (Gen 2,23) era indicadisimo

para comprender el sacramento de la Muerte del Segundo Adn,

vinculado a su propia muerte; y por ende, a la manducacin

del rbol, tan solemnemente prohibida. Tan desconcertante corno esplndida perspectiva concuer

da a maravilla con las alturas habituales de Ireneo. Sin negarla de plano, creo ms bien que el obispo de Lin ofrece est cuar

ta exegesis, a beneficio tambin de inventario, para salvar la

letra de Gen 2,17. Sus mismas lineas delatan el artificio: si

quis velit diligenter discere qua die ex septem diebus mortuus

est Adam, inveniet ex... ^Era ese el problema basico? En vez

de ponerlo en salvar la identidad numrica del dia (de 24 ho

ras) en que tuvo lugar la manducacin, y en que fu castigado con la muerte, lo distrae hacia la identidad genrica espe cifica del dia semanai, en que Adn comi, y del tambin se manai en que muri.

5] Quinta solucin

Ireneo la formula con relativa brevedad. Se funda en Ps

89,4; 2 Pe 3,8. El Dia del Senor es de mil afios. Adn muri

84 adv. haer. IV, 5,4,68ss. Cf. 1 Clem. 31,3 y s. Cipriano, bon. pat. 10 (Moreschini 123,183ss) citados por L. Martnez-Fazio, La eucaristia, ban quete y sacrificio, en la iconografia paleocristiana, en Gregorianum 57, 1976, 472 . 58. Puede verse Ph. Baco, De l'ancienne la nouvelle Alliance selon S. Irne, Paris, 1978, 67.

42:07 PM

CINCO EXEGESIS IREHEANAS DE GEN 2,17b 105

antes de cumplirlos. La muerte le sorprendi en el mismo Dia en que comi del rbol prohibido. Verificse pues, a la letra, la amenaza de Gen 2,17.

Quidam autem rursus in millesimum annum revocant mor

temi Adae, quoniam enim 'Dies Domini sicut mille anni non superposuit autem mille annos, sed intra eos mor

tuus est, transgressionis adimplens sententiam (lin. 52-56).

A diferencia de las precedentes soluciones, que Ireneo enumera

en forma impersonal, est de ahora se la asigna a algunos

que no nombra. Algunos a su vez colocan la muerte de Adn

en los limites del milenio . In millesimum annum, a saber, ' intra millenium '.

Prob. alude a s. Justino: Pues corno Adn fu amonestado

(cf. Gen 2,17) de que habia de morir el Dia que comiese del rbol de la vida (sic!), sabemos no cumpli los mil afios ( ) 85. prosigue Justino: En

tendemos que tambin aquel dicho ' El Dia del Sefior, corno

mil afios '

(Ps 89,4: 2 Pe 3,8) hace al mismo intento 86. El santo

mrtir escribe en contexto quiliasta87; en absoluto, empero, la

exegesis invocada es independiente del milenarismo. Antes de

Justino corrian parecidas tradiciones hebreas.

Conviene distinguir aqui dos cosas: el recurso al Dia del

Sefior, calculado segn la Escritura; su aplicacin al Dia de la muerte de Gen 2,17. Ambas aparecen unidas en Justino, pero delatan prob. tradiciones paralelas.

A] Quoniam enim Dies Domini sicut mille anni (lin. 53-54)

Ireneo se allega a 2 Pe 3,8 ms que a Ps 89, 4. Porque un

Dia ante el Senor ( ) corno mil afios, y mil afios corno un dia , se lee en 2 Petri88.

Barn 15,485 escribe: He aqui el Dia del Senor ser corno

mil afios .

85 dial 81,3. 86 dial 81,3. 87 Cf. . Prigent, Justin et VAncien Testament, Paris, 1964, 22s; G.

Otranto, Esegesi biblica e storia in Giustino, Bari, 1979, 213. 88 Sintomtica la lectura de Gregorio de Elvira, tract. VII, 26. Mien

tras una tradicin manuscrita atribuye el logion a David; otra se la asigna al ap(stol Pedro).

89 En contexto similar al de Ir., adv. haer. V, 28,3,74s Si enim Dies Domini quasi mille anni, in sex autem diebus ...

42:07 PM


Ps. Bernab, s. Justino y s. Ireneo compendiali el escritu

rario unus Dies apud Dominum en Dies Domini ( ) .

Del obispo de Lin dependeria Hiplito: Porque el Dia del Sefior, corno mil afios

La tradicin rabinica contrapone el dia de los hombres al Dia de Dios. Uno y otro comportan duracin distinta. Gen 2,17 referiase a un Dia de Dios, no al dia de los hombres.

Dijo Dios: El dia que comas de l, morirs (Gen 2,17). Mas vosotros .no sabis, si es uno de los vuestros un Dia

de los mios. Mi Dia comporta 1000 anos. He aqui que yo le doy un Dia de los mios. De est suerte Adn vivi luego 930 anos, y dej todavia para sus descendientes 70 anos;

pues la vida (normal) del hombre son 70 afios (Ps 89,10)91.

La curiosa noticia quiere conjugar Gen 2,17; Ps 89,4 (el Dia del Sefior es del mil anos) y Ps 89,10 (la vida del hombre es de setenta afios). En virtud de la palabra del Creador (Gen

2,17), Adn debiera haber muerto el mismo dia normal dia de los hombres en que comi del rbol prohibido. Pero Dios se compadeci de l.


La muerte a los 930 impidi llenara el Dia de mil afios. Y sac verdadero el dicho de Gen 2,17. Mas ntese bien

segn el Beresch. rabba c. 19 no muri Adn antes de los

mil afios en castigo a la transgresin. Dios se la habia per donado.

Seria errneo llevar el tecnicismo del actual Dies Domi ni por el Dia de Dios de la apocaliptica hebrea93, por el Dies Domini de Joel 1,15,2,1; Is 13,6.9... (cf. Joel 2,11; 3,4 y Act 2,2)94.

Mucho menos piensa aqui Ireneo en el Domingo Dies dominica 95, atestiguado por Apoc 1,10; Barn 15,996 y otros

lugares. Al aducir el Dia del Sefor es corno mil afios denota la

medida de las Jornadas de Yahveh. El dies magnus Dei 97 el

Dia a que alude Gen 2,17 que en el calendario de Dios equi vale a mil afios.

Se vislumbra el desarrollo que daria Ticonio al tema con su Regia Quinta (' de temporibus '):

Temporis quantitas in Scripturis frequenter mystica est

tropo synecdoche, aut legitimis numeris, qui multis modis positi sunt et pr loco intellegendi; synecdoche vero est

aut a parte totum, aut a toto pars98... Sex dies sunt mundi

aetas, id est sex milia annorum. In reliquiis sexti diei, id

netarias. Mas el Hado, expresin de la Providencia de Sofia que los go bernaba, lo impidi. Solamente les permiti reducir en 10 anos, cada uno, la propia revolucin, y por ende la vida de Adn fijada en un prin cipio para 1000 anos. Asi, por conjuncin de los siete arcontes (7x10=70), redujeron en 70 los anos de Adn, fjando su existencia para 930 anos.

M. Tardieu (Trois mythes gnostiques, Paris, 1974) omite el anlisis de las lineas.

Las diez semanas de Henoch 93 (=91,12-17) y 91,12-15 siguen otra

pardosis (70=7x10). Sobre el misterio del nmero 70, W. Bousset, Hauptprobleme der Gnosis, Gottingen, 1907 (= 1973), 358-361; W. Bousset H. Gressmann, Die Religion des Judentums im Spathellenistischen Zeitalter, Tiibingen, 1926, 246-248.

93 Cf. P. Volz, Die Eschatologie der jiidischen Gemeinde, Tubingen, 1934, 163-165 (' Der Tag Gottes ').

94 S. Basilio (In Hexaemeron Homil. II PG 29,52 A) y s. Ambrosio

(In Exameron 1,10,37) aducen sin embargo Joel 2,11 y Amos 5,18 en exe

gesis a Gen 1,5. 95 Cf. M. Tardieu, Trois mythes gnostiques 136-139. 96 Cf. Did 14,1. Vase R. Knopf ad loc. 97 Lactancio, Inst. div. VII, 14,8 Dies enim magnus Dei mille anno

rum circulo terminatur . Vase J. Bidez-F. Cumont, Les mages hellniss

II, 1938, 366. 98 Liber regularum ed. F. C. Burkitt 55,lss.

42:07 PM


est annorum, natus est Dominus, passus et resurrexit ".

... Aliquotiens unus dies anni sunt, sicut scriptum est: '

Qua die gustaveritis ex arbore morte moriemini ' 10.

B] Non superposuit autem mille annos

Adn no super los mil anos. Lo mismo dice en la segunda columna (lin. 64-65): sive secundum quod non sit supergres sus mille annos, sed in ipsis mortuus sit . Basta leer Gen 5,5: todos los dias que vivi Adn vinieron a ser novecientos

treinta anos, y muri . Le faltaron 70 para los mil anos.

E1 Libro de los Jubileos delata la misma fundamental exe

gesis:

Y faltaban 70 anos para los 1000 101. Pues 1000 anos son

corno un Dia en el testimonio de los cielos (cf. Ps 89,4); y por eso est escrito del rbol de la ciencia:

' El dia en

que comiereis de l, moriris '. De ahi que l no haya con

sumado los anos de este Dia, sino que ha muerto dentro

de l102.

La ltima linea responde literalmente a la doble noticia de

Ireneo103.

Antes del obispo de Lin se hizo eco de la idea san Justino

(dial 81,3): Entendemos que no cumpli (Adn) los mil anos . Y despus de Ireneo, la atestigua fuertemente contaminada

Lactancio:

Sic facta est vita hominis temporaria, sed tamen longa,

quae in mille annos prorogaretur1M. Quod divinis litteris

proditum et per omnium scientiam publicatum cum Varr

ibid. 56,13ss. 100 ibid. 61,25s. Cf. K.-H. Schwarte, Die Vorgeschichte der augusti

nischen Weltalterlehre, Bonn 1966, 151. 101 Alude a los 930 de Adn, segn Ger 5,5. 102 Jub 4,30. 103 Non superposuit autem ille annos, sed intra eos mortuus est

(lin. 54s); secundum quod non sit supergressus mille annos, sed in ipsis mortuus sit (lin. 64s).

104 Segn Lactancio, el hombre ' plasmado

' hubiera vivido normal mente mil anos, en este mundo. Lo mismo Inst. div. VII, 14,14 { ut mille annis in hoc mundo viveret ) y Epitome 22,5. Cf. K.-H. Schwarte, Die Vorgeschichte der augustinischen Weltalterlehre 166.

Segun Jub 23,27 los hijos de los hombres vivirian en los tiempos mesinicos hasta 1000 afios. P. Volz, Die Eschatologie der jiidischen Gemeinde 401s.

42:07 PM


non ignoraret, argumentari nisus est, cur putarentur an

tiqui mille annos victitasse... quod argumentum perspi cue falsum est: nemo enim tunc millesimum annum trans

gressus estl0S.

Los invocados por Ireneo para est cuarta solucin ( qui dam autem ) serian s. Justino (y eclesisticos por l represen

tados); mas los exponentes de la pardosis hebrea de Jub. 4,30.

De ellos habria tornado la exegesis del Dia misterioso de Gen 2,

17; caracterizado a la luz de Ps 89,4 corno Dia del Sefior . Al conminrsele a Adn E1 dia que comiereis de l del

rbol prohibido moriris , Dios se referia al Suyo propio. E1 hombre falt, y muri antes de alcanzar los mil afios.

Semejante exegesis (resp. pardosis) no debe confundirse con la representada por Beresch. rabba c. 19.

Para Jub 4,30 (Justino, Ireneo...) el dia de Gen 2,17 era el milenario del Senor. En l muri Adn sin alcanzar los mil

anos.

Para Bereschit rabba c. 19 106, era el dia normal de los hom

bres. Adn, en castigo de su pecado, debi morir en l. Dios se le apiad, y en vez de darle muerte le regal un Dia de los

Suyos, de mil anos; entre otros fines, para que tuviese Eva

familia. Ireneo habiase cerrado el camino para invocar est ltima

solucin, hoy tan obvia. Aunque la conminacin de Gen 2,17 fuese verdadera, y hubiese podido el Senor dar muerte al hom

bre entonces mismo, con el manjar en la boca, prevaleci en

El la misericordia para Adn y sus hijos.

105 Inst. div. II, 12,21s. Vase V. Loi, Lattanzio, Ziirich, 1970, 250; K. H. Schwarte, Vorgeschichte 163ss.

106 En la linea del midrash Debarin rabba{7), a propsito de ' Acur

date de tu misericordia y de tus gracias '

(cf. Ps 25,6) : Habl David : Sefior del mundo, a no ser por las gracias adelantadas al primer hombre, no habria subsistido, pues se dice (Gen 2,17):

' En el dia que comas de l, morirs de muerte Y t no le has hecho asi, sino que le desterraste del jardin Eden... por haber traido la muerte sobre la descendencia, y ser culpable de padecer la muerte. Per t te has compadecido de l y le has exiliado . La misericordia y la gracia divinas segn Beresch. rabba c. 22 no son de ahora. Segun ellas trat Dios al primer hombre. Pues no obstante haberle conminado en Gen 2,17

' El dia en que co miereis ... ' librle de morir. Le regal un Dia de los propios Suyos, de mil anos; y pudo Adn unirse a Eva y tener descendencia. Vase Weber, Jiidische Theologie 260s. Corregir segn eso ltimamente G. Otranto, Esegesi biblica e storia in Giustino 213 con la confusin de la tradicin rabinica y la de Justino {resp. Jubil 4,30).

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Por este camino temia Ireneo dar armas al adversario; sin

gularmente a los gnsticos. En el Demiurgo gnstico era muy

poco presumible la misericordia. Aguant la ofensa del primer hombre, porque, corno Arconte animai, no era duefio de sus

actos ni de sus palabras, y obedecia a una providencia superior.

Negse pues el Santo a la solucin de la misericordia; y urgi la de la verdad. Habia que sacar verdadero al Creador. Bastaba entender el Dia de Gen 2,17 con arreglo a las medidas

de Dios (resp. Dia del Sefior) segn 2 Pe 3,8a (Ps 89,4) para asignar al mismo dia la manducacin ilicita y la muerte de los

primeros padres.

Secundum omnia ergo quae significantur, Deus quidem verax, mortui enim sunt qui gustaverunt de ligno, ser

pens autem mendax ostensus est et homicida, sicut Domi

nus ait de ipso (Joh 8,44): ' Quoniam ab initio homicida

est et in veritate non stetit'107.

Las cinco soluciones salvan la veracidad del Creador. Todas

identifican el dia del fatidico manjar, con el de la muerte de los primeros padres. El mismo dia en que gustaron el fruto prohibido, conocieron la muerte.

A MODO DE CONCLUSIN

La pgina de s. Ireneo se presta a reflexiones. En el fondo

transparece un gran inters por salvar la letra de la Escritura.

Y particularmente el verso Gen 2,17 de excepcional importancia en pugna con marcionitas y gnsticos.

Los herejes lo hicieron valer contra la divinidad del De miurgo. Amenazaba este a los primeros padres por envidia.

Queria atemorizarlos, para que no despertasen a la Gnosis y se hicieran dioses (' gnsticos, hijos de la luz ').

No asi Ireneo. Tenia que resplandecer ante todo la verdad

de la sentencia: In qua die manducabitis ex eo, morte morie mini . Y sin salir del sentido literal.

Antes an de la aparicin de los herejes el versiculo habia ocupado al tardo judaismo. No habiendo prejuicios contra la divinidad del Creador, tampoco interesaba conducir la exegesis por el camino de la veracidad. Asi aparecieron dos soluciones, relativamente simples:

107 adv. haer. V, 23,2,65ss.

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a) una, con recurso a la misericordia: Dios se compade ci de Adn y del gnero humano, y no quiso llevar adelante

su amenaza. Ningn judio descubri en elio peligro teolgico, contra las perfecciones del Creador; y en concreto, para Su ve

racidad. b) otra, con recurso al Dia del Sefior, que segn medi

das del salmista (Ps 89,4) duraba mil afios. E1 Demiurgo refe riase en Gen 2,17 a Su Dia, no al de los hombres. Y en el Dia del Sefior muri de hecho Adn, sin alcanzar los 1000 afios.

La primera respuesta era inoperante en pugna con los he

rejes del siglo II. Ireneo (y Justino) la ignoran. La segunda en cambio les mereci consideracin. Mas no era la nica.

Cinco exegesis enumera el obispo de Lin: 1] por ser el

pecado la nica verdadera muerte del hombre interior, con el

manjar prohibido murieron Adn y Eva para Dios (exegesis de

Filn, y ms tarde de Origenes y origenianos); 2] al corner del rbol prohibido, se hicieron mortales, deudores de la muerte

(exegesis conforme a la antropologia de Ireneo, Tertuliano...); 3] por durar el universo creado un solo Dia

el unus dies

( ) de Gen 1,5 en el mismo Dia en que comieron, gustaron tambin la muerte (exegesis prob. muy general); 4] por correlacin con la muerte del Segundo Adn, el primero hubo

de morir en el dia sexto de la semana, y en l tambin gustar

del fruto prohibido (, exegesis de Ireneo?); 5] por durar mil afios el Dia del Sefior (Ps 89,4; 2 Per 3,8), Adn muri antes de cumplirse (Lib. Jubil., san Justino, san Ireneo).

No pudo Ireneo dar igual beligerancia a las cinco solucio

nes. Algunas las ofrece solo a beneficio de inventario. La pri mera [1] no responde a su antropologia, y hasta en la pre

sentacin (confusa en la lin. 28-30; y solo clara en la lin. 56-57) delata la poca simpatia que le merece. La tercera [3], dema

siado simple, se basa en una exegesis ambigua del unus dies

(Gen 1,5). Quedan la [2], la [4] y la [5]. Aunque no disimula el inters que le merece la [4], tan ampliamente desarrollada a base de la recapitulacin , resulta artificiosa. Las preferen cias del santo debian de ir, casi seguro, por la [2], muy sen cilla y conforme con su thanatologia, y por la [5], exponente de una tradicin bien autorizada entre hebreos y eclesisticos, dentro de la linea que habia de prolongar el quiliasmo.

A vueltas sin embargo de tan repetidas exegesis, deja en trever el molesto planteamiento a que le obligan sus adversa

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rios. Para hacer ver la mentir de la serpiente, bastbale urgir el resultado, la muerte en que, mas tarde mas temprano, in

currieron por la desobediencia los primeros padres. Le desa

zona el planteamiento gnstico, mas sensible a la no-veraci

dad del Demiurgo. ^ Crno probar que murieron el dia mismo

en que tomaron del rbol, si a la postre siguieron en vida? Es

evidente que murieron por haber comido del rbol. Y es lo

que se apresura a concluir el Santo:

Secundum omnia ergo quae significantur, Deus quidem verax, mortui enim sunt qui gustaverunt de Ugno.

Pero la lgica imponia otro sesgo: Mortui enim sunt in qua die gustaverunt de ligno . Perfl incmodo, que Ireneo deja caer, por dificil, para urgir la mentir del enemigo.

Antonio Orbe, S. I.

SUMMARY

Among the phenomena of the earliest theology (of the second

century) glitters the early appearance of a multitude of exegeses of the Old and New Testaments. It suffices to analyze those deserved

by the parables of the Gospel. This time we found amusing a page of Irenaeus (Adv. Haer.

V, 23,1 f), a summary of fve exegeses. Contemporary specialists in Genesis slip by the theme, not even formulating it. In the Saint's

days it was important because of the slant given to it by the heret

Documents

Cinco Exegesis Ireneanas de Gen 2,17 b Adv. Haer. v, 23,1-2