80
Boletín 16 Í Í n n d d i i c c e e Boletín de ARBA Número 16, noviembre 2005. Imprime: Gráficas Gil Sanz. ISSN 11338-0934 Depósito legal: M-29302-1997 Dirección y diseños: Carlos Fierro. Maquetación: Lola López y Carlos Fierro. Editorial................................................................................................2 Apúntalo en la Agenda........................................................................3 Noticias Verdes ....................................................................................4 Manual del buen compostador Maite Marqués y Raúl Urquiaga ..........................................................5 Australia: el continente insular. Carlos Fierro ....................................................................................15 El Naranco un espacio natural a proteger Guillermo César Ruiz Sierra-Blanco....................................................24 La vegetación halófila de los humedales endorreicos salinos: La salada del Guatén Por el Grupo Espliego ........................................................................35 El quejigo de alta montaña Andrés Revilla ..................................................................................39 El tablón de noticias ARBA ..............................................................................................42 Memoria de la campaña otoño - invierno de 2004 - 2005 ............44 Causas que provocan los incendios forestales Simón Cortés ....................................................................................50 El granado Juanjo ..............................................................................................53 "Bosque Sur", o el Final de la Naturaleza del Sur Madrileño. Por el Grupo Espliego ........................................................................56 Toponimia, ecología y botánica. La toponimia del tejo en internet Guillermo García Pérez ..............................................................................58 No sembrados aunque también comestibles (Hojas sueltas VI) Günter Kunkel ..................................................................................66 Adiós Barbol Rosa Colomer Rodríguez ..................................................................71 Cómo vencer el letargo de las semillas de Retama sphaerocarpa Simón Cortés y Silvia Romero ..........................................................73 Por una ley nacional o normativa europea del suelo, el agua y la Actividad urbanística sostenible ......................................................74 El Roble-Pino y otros Arboles singulares........................................75 Noticias de andar por casa José Antonio Rodríguez Crespo. ........................................................77 Fototeca de salidas de ARBA ..........................................................79 1 Portada: foto y diseño(Carlos Fierro) Fotos contraportada: Naranco (Guillermo César Ruiz Sierra-Blanco); Australia (Carlos Fierro)

Boletin 16

  • Upload
    arbatmj

  • View
    334

  • Download
    11

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: Boletin 16

Boletín 16 ÍÍ nn dd ii cc ee

Boletín de ARBANúmero 16, noviembre 2005.Imprime: Gráficas Gil Sanz.ISSN 11338-0934Depósito legal: M-29302-1997Dirección y diseños: Carlos Fierro.Maquetación: Lola López y Carlos Fierro.

Editorial................................................................................................2

Apúntalo en la Agenda........................................................................3

Noticias Verdes ....................................................................................4

Manual del buen compostadorMaite Marqués y Raúl Urquiaga ..........................................................5

Australia: el continente insular.Carlos Fierro ....................................................................................15

El Naranco un espacio natural a protegerGuillermo César Ruiz Sierra-Blanco....................................................24

La vegetación halófila de los humedales endorreicos salinos: La salada del Guatén

Por el Grupo Espliego ........................................................................35

El quejigo de alta montañaAndrés Revilla ..................................................................................39

El tablón de noticiasARBA ..............................................................................................42

Memoria de la campaña otoño - invierno de 2004 - 2005 ............44

Causas que provocan los incendios forestales Simón Cortés ....................................................................................50

El granadoJuanjo ..............................................................................................53

"Bosque Sur", o el Final de la Naturaleza del Sur Madrileño.Por el Grupo Espliego ........................................................................56

Toponimia, ecología y botánica. La toponimia del tejo en internetGuillermo García Pérez ..............................................................................58

No sembrados aunque también comestibles (Hojas sueltas VI)Günter Kunkel ..................................................................................66

Adiós Barbol Rosa Colomer Rodríguez ..................................................................71

Cómo vencer el letargo de las semillas de Retama sphaerocarpa Simón Cortés y Silvia Romero ..........................................................73

Por una ley nacional o normativa europea del suelo, el agua y laActividad urbanística sostenible ......................................................74

El Roble-Pino y otros Arboles singulares........................................75

Noticias de andar por casaJosé Antonio Rodríguez Crespo. ........................................................77

Fototeca de salidas de ARBA ..........................................................79

1

Portada: foto y diseño(Carlos Fierro)Fotos contraportada: Naranco (Guillermo César Ruiz Sierra-Blanco);Australia (Carlos Fierro)

Page 2: Boletin 16

Boletín 16

2

Editorial

ARBA cumple 20 años, no somos una organización de las gran-des, nuestra labor permanece casi siempre a la sombra de los medios

de comunicación. Nuestro método es más bien callado, doblando el espi-nazo con una azada en la mano, intentando que con ello el paisaje esté máscubierto por unos árboles y arbustos autóctonos. ARBA no sólo ha planta-do bellotas o árboles sino también ideas, ideas que han dado sus frutos en laproliferación de numerosas ARBAs por todo el territorio, que con su propiaautonomía suman las fuerzas a un ideal común.

También estamos de enhorabuena, por que el día 17 de octubre se ha a con-memorado el 250 aniversario del Real Jardín Botánico. En una jornada de

puertas abiertas, con entradas gratuitas, cerca de 5500 personas rindieron unhomenaje a un botánico que se codea, en vecindad, con el Museo del Prado. Si

bien, hasta hace poco los tesoros de su vecino, eran más valorados por el públicoen general que las plantas del botánico, pero tal y como van las cosas, y como ha

apuntado algún investigador del botánico en los medios de comunicación, con un lito-ral ibérico, cubierto cada vez más y más, y sin un freno o límite, de campos de golf, urba-

nizaciones, puertos deportivos y autopistas de pago, habrá que visitar el botánico para ver,bien en vivo, o lamentablemente sólo ver los restos embalsamados en pliegos de herbario, lo

que fue una vez la vegetación autóctona del litoral. Así, esos pliegos o esas semillas en los ban-cos de semillas, puede que se conviertan en piezas únicas, con un valor inconmensurablemente

para la ciencia y para un público, que poco a poco, se dará cuenta de lo que se está en juego.

Queda claro que no hay voluntad política para combatir el problema, demasiados intereses,además que la financiación de los partidos, de todos, pasa por esa fiebre constructora. Algunos se lopueden pagar ahora, pero todos lo pagaremos a la larga, con la destrucción de calas, playas, ensena-das, bahías y albuferas, por unas edificaciones humanas, casi siempre infrausadas cuando no vacías.

Page 3: Boletin 16

Boletín 16

A p ú n t a l o e n l a A g e n d a

E s t u d i o d e l e c o s i s t e m a k á r s t i c o m e r i d i o n a l a l a s s i e r r a s d e G u a d a r r a m a , S o m o s i e r r a y Ay l l ó n

Este libro nace con una doble vocación: por una parte la de dar a conocer diversos trabajos deinvestigación, que dentro del marco de las ciencias naturales, se han realizando sobre el karst meri-dional a las sierras de Guadarrama, Somosierra y Ayllón, y, por otra parte, ser una plataforma de divul-gación accesible a todos aquellos que aman la naturaleza y quieren conocer uno de sus ecosistemas.Con estudios sobre: su geología, su paleontología, su vegetación y flora, sus hongos, su fauna, enespecial sus murciélagos, y sus singularidades kársticas.

Editan:Federación Madrileña de Espeleología (FME)y Asociación para la Recuperación del Bosque Autóctono.

El libro lleva prólogos de: Juan Carlos Blanco yFrancisco de Diego Calonge.En total han participado 15 autores en 11 capítulos yhan colaborado 4 ilustradores. Con la portada a color;192 páginas, de las cuales 16 son en color; contenien-do 129 fotos e ilustraciones a color, a las que hay quesumar 64 fotos e ilustraciones en BN.

De ARBA han participado:José Ramón Andreu(dibujante), Manuel Gómez, Ángeles González, Lola López, Francisco Prieto Andrés Revilla Silvia RomeroCoordinador: Carlos Fierro.

El libro se pondrá a la venta con un precio de 10€ enla sede de ARBA, estando a 12€ en las tiendas.

Flora ibérica en la red: Proyecto ANTHOSSi bien no es nuevo, pues ya lleva funcionando hace tiempo, es una joya que ningún amante delas plantas debe desconocer. Con mapas de distribución, fotos, imágenes, listados por localidadeso cuadriculas UTM y un sin fin de datos. wwww.progranthos.org

Mapas de mamíferos terrestres, en nuestra webLa SECEM ha iniciado la actualización del Atlas de Mamíferos Terrestres de España, publicado en2002. Para que sirvan de referencia a los socios y colaboradores de la SECEM que aporten suscitas, se han volcado en la web los mapas de distribución de cada especie.www.secem.es/Noticias/2005/noticias27.htm

Libro de unos amigos y socios de ARBA

N o tt i cc i aa ss WW EE B

3

Page 4: Boletin 16

Boletín 16

NN oo tt ii cc ii aa ssvv ee rr dd ee ss

D o ñ a n a : A l ó c t o n a s a c u á t i c a s i n v a s i v a sDesde comienzos de este año, la lechuga de agua, Pistia stratiotes, de

origen suramericano, está en forma invasiva en los caños de Sanlúcar deBarrameda (Cádiz), concretamente en el caño Martín Ruiz. Técnicos de

la conserjería de medio ambiente de la Junta de Andalucia han proce-dido a su eliminación a mano (vamos que se pusieron manos a la obra). Hay que resaltar que los medios acuáticos del entorno del Parque Nacional de Doñana,

de hecho el ecosistema primordial de dicho parque, ya ha sufrido recientemente la inva-sión de otras plantas aloctonas acuáticas, concretamente en abril de 2004, por parte deAzolla filiculoides, de origen norteamericana, y que en la actualidad sigueaumentando su superficie.(Fuentes: Quercus 232 )

Es un hecho bien conocido, que los ecosistemas naturales son bastanteherméticos a la colonización de taxones alóctonos, salvo casos de gran dese-quilibrio o perturbación. De hecho, según muchos autores en los ecosiste-

mas mediterráneos sanos no se ha consta-tado la presencia de flora naturalizada.

Así pues, la detección de tales taxo-nes es una clara señal de grave

alteración de un ecosis-tema natural.

El 250 aniversario del Real Jardín BotánicoEl Real Jardín Botánico cerró los actos de su 250 aniversario con una

jornada de puertas abiertas, en la que se batió el record de asistencia al jardín, y unareunión de los departamentos de divulgación y comunicación de la Asociaciónde Jardines Iberomacaronésicos.( Fuentes: www.rjb.csic.es)

M e n o s o s o sHallan en Palencia un oso envenenado y otro tiroteado.

El veneno y las escopetas han sido la causa de la muerte de dos osospardos cuyos cadáveres han sido encontrados recientemente en la montaña palentina.Los conservacionistas reclaman soluciones urgentes, entre ellas planesregionales contra los cebos envenenados.

( Fuentes:www.secem.es/Noticias/2005/noti-

cias28.htm)

Recopilación y comentarios: Carlos Fierro

4

Page 5: Boletin 16

1. Introducción. El compostaje como necesidad Los residuos son uno de los mayores problemasambientales con los que se encuentran las socie-dades modernas. Este hecho deriva del incre-mento desproporcionado de la generación deresiduos y de la dificultad de encontrar y aplicarsoluciones ambientalmente apropiadas para sutratamiento. En las últimas décadas hemos asis-tido a un profundo cambio de las pautas de con-sumo. El sobreenvasado, los productos de usar ytirar, la no reutilización o reparación de los bie-nes de consumo, la aparición en el mercado denuevos materiales y compuestos, la imposiciónde modas, un consumismo generalizado..., hansido algunas de las causas por las que los resi-duos han aumentado de forma preocupante.Como consecuencia, han proliferado en canti-

dad y en tamaño los vertederos en nuestras ciu-dades, produciéndose multitud de problemasambientales y sociales (malos olores, contami-nación atmosférica, contaminación de aguasy suelos, degradación del paisaje, degra-dación social de barrios próximos...),algunos de ellos todavía sin solución.Por otro lado, cada vez esmayor el rechazo socialque encuentran las incine-radoras de residuos por lospeligros potenciales y realesocasionados en la salud y porsu incompatibilidad con unapolítica integral deprevención yreciclaje de resi-duos. Por últimolas tasas de reci-

clado de materiales siguen siendo bajas, debidoentre otras causas a un ineficiente sistema derecogida y separación, a la falta de informaciónciudadana, o a la escasa voluntad por recuperaralgunos materiales. La bolsa de la basura que producimos todos losdías es un conjunto heterogéneo de multitud demateriales (plásticos, papel, cartón, metales,gomas, telas, maderas, restos de comida, restosvegetales, vidrio, pilas, medicamentos, etc.).Dependiendo de la zona en la que nos encontre-mos, el porcentaje de materia orgánica puedeoscilar entre el 40-50 % en peso del total. Estacantidad puede ser fácilmente aprovechable através del compostaje, siempre que seamos desepararla del resto de materiales. En esta situación, el compostaje de los restosorgánicos se convierte casi en una necesidad siqueremos dar una solución sostenible a los resi-duos, poniendo de nuevo en valor la parte másabundante de los mismos. Y más aún si tenemos

en cuenta la pérdida de suelos, los procesos dedesertificación y la carencia de materia orgá-

nica de la parte sur de la Península.Además, el compostaje es una técni-

ca fácil de implantar en nuestraspoblaciones, que coordinada con

el resto de políticas de resi-duos, puede dar grandes

beneficios directos alos ciudadanos, a losmunicipios y, en defi-nitiva, a nuestro medioambiente.

Boletín 16

5

MANUAL DEL BUENCOMPOSTADOR

Textos: Maite Marqués y Raúl Urquiaga Dibujos: Raúl Urquiaga

www.asociaciongrama.orgTfno: 675 569 118

Grama es una asociación con la que mantenemos una intima relación de colaboración, aquí ospresentamos un manual elaborado por ellos. Realizado en septiembre de 2005 (Madrid)Este material puede ser reproducido, almacenado en un sistema informático o transmitidopor cualquier medio, siempre que sea sin ánimo de lucro y se indique la fuente.

Page 6: Boletin 16

2.Por qué hacer compostaje domésticoEl compostaje tiene grandes beneficios tantopara el ciudadano que se decide a hacerlo en suparcela como, a nivel municipal, para un ayun-tamiento que quiere hacer una gestión ecológicade sus residuos: - El compost mejora la estructura de la tierra,haciendo más porosos los suelos, mejorando suventilación y su capacidad de retener agua. - Con el compost aumentamos la cantidadde materia orgánica del suelo y facilita-mos la asimilación de nutrientes para lasplantas. - Con el compostaje doméstico seconsigue un producto de alta cali-dad, mucho mejor que otros pro-ductos comerciales utilizados.Al ser un producto natural,evitamos tener que utilizarproductos químicos, con-taminantes y a la largaperjudiciales. De estaforma podemosabonar nuestro jardín o huerto de una formaecológica, sencilla ybarata. - Se reduce de unaforma significativala cantidad de resi-duos que van aparar a ver-

tede-r o s .

Además seminimizan los verti-dos y quemas incontroladas, mejorando con elloel aspecto de nuestras calles. - Con ello se produce un importante ahorro en lagestión municipal, al reducir los costes de trans-porte y tratamiento de residuos. - El compostaje doméstico, por último, es unapotente herramienta de educación ciudadana,

consiguiendo cambios de comportamiento yactitud ante el problema de los residuos.

3. El compost y el compostaje En la naturaleza se produce en la parte superfi-cial del suelo una capa de tierra rica en nutrien-tes llamada humus. El humus se forma debido ala descomposición de los restos vegetales y ani-males que realizan diversos seres vivos, entreellos microorganismos. Este proceso se ve favo-recido por las altas temperaturas y la abundante

humedad.Las plantas no pueden tomar los mineralesdel suelo directamente. Para ello necesitan

que los organismos transformen las sus-tancias que no son capaces de absorber

convirtiéndolas en asimilables. Enuna tierra con materiales en des-

composición, abundan dichosorganismos y por tanto mejo-

ran la fertilidad de las plan-tas.

El compostaje pretendeimitar el proceso natu-

ral de formación dehumus, obteniéndo-se un producto lla-

mado compost. El compost es el resultado de ladescomposición aerobia (en presencia de oxíge-

no) de la materia orgánica en las condicionesadecuadas de humedad, temperatura, oxige-

nación, pH, cantidad de organismosetc. Los residuos orgánicos

que producimos en nues-tros hogares son los quevan a descomponerse en

sustancias orgánicas simplesformando el compost.

El compost no sólo enriquece el suelomediante sustancias orgánicas asimilables,

sino que mejora la estructura del mismo,ayudándole a retener la humedad y obteniendouna tierra más esponjosa. El compostaje, otransformación en compost de la fracción orgá-nica de los residuos, puede ser centralizado odescentralizado. Entendemos por compostajecentralizado el que se realiza en una planta decompostaje a la que llegan los residuos proce-dentes de la recogida municipal, previa separa-ción selectiva en los domicilios. Mientras queen el compostaje descentralizado es el propiogenerador de los residuos quien los gestiona,

Boletín 16

6

Page 7: Boletin 16

llevando a cabo el proceso de compostaje, amenor escala en su propio domicilio.

El compostaje descentralizado o domésticopresenta ventajas considerables frente al com-postaje en planta:

· Disminución de costes de tratamiento delos residuos a nivel municipal · Mejor separación selectiva de los residuosdestinados a hacer compost · Mejor calidad del producto obtenido · Mayor conciencia y sensibilización de lapoblación

4. El proceso de compostaje. .

El compost se forma por la acción de millonesde organismos y microorganismos denominadosdescomponedores. Estos degradan la materiaorgánica hasta convertirla en un compuesto asi-milable por las plantas. No todos operan de lamisma forma ni en el mismo momento, sino quecada uno entrará en juego en las distintas fasesdel proceso de compostaje, dependiendo delestado de los materiales orgánicos, de la hume-dad y de la temperatura. El proceso de compostaje se desarrolla en variasfases: - Fase de latencia y crecimiento. Comienzacuando formamos el montón de restos orgáni-cos. Los microorganismos que se alimentan deestos restos son bacterias queviven en temperaturas de hasta45ºC. Debido a la actividad bac-teriana, la temperatura aumentaprogresivamente. Los organis-mos liberan ácidos, lo que pro-voca una disminución del pH enel medio. Esta fase puede durarhasta 15 días. - Fase termófila. El aumento detemperatura provoca la prolife-ración de bacterias y hongostermófilos presentes en los resi-duos en estado latente, que vivenen temperaturas de 45ºC a 75ºC.En esta fase se comienza a obte-ner sustancias orgánicas sim-ples. La elevada temperaturaprovoca la esterilización delmedio, eliminando patógenos,

larvas y semillas. Se comienza a formar amonio,lo que produce disminución del pH. La actividad bacteriana va disminuyendo enfunción de la y por tanto la temperatura tambiénlo hace. Debido a que la disponibilidad de alimento vasiendo cada vez menor, la actividad bacterianatambién disminuye, y por tanto, la temperaturatambién lo hace. Esta etapa se desarrolla enaproximadamente 3 meses. En ambas etapas es necesaria una adecuadaaireación para que el proceso se produzca encondiciones aerobias (en presencia de oxígeno),así como una humedad en torno al 50% que per-mita la vida de los descomponedores. - Fase de maduración. Se considera que estaetapa comienza cuando la materia orgánica estáprácticamente toda descompuesta, la temperatu-ra sigue descendiendo, y el pH tiende a la neu-tralidad. Al terminar la maduración, la materiaorgánica inicial se ha transformado en un pro-ducto estable en el que ya no se reconocen losmateriales orgánicos que se habían aportado alcomenzar. Para que la maduración se completa debemosesperar al menos un mes. De esta manera nosaseguramos que los descomponedores hanabandonado la pila de compost por ausencia dealimento.

Boletín 16

7

Page 8: Boletin 16

5.Cómo hacer compost - Lo primero que debemos hacer es encontrar unbuen sitio donde colocar nuestro compostador.Siempre deberá ser sobre suelo (tierra, césped...)para facilitar la entrada de organismos y evitarque se compacten los materiales. Además procu-raremos que sea sombreado y protegido del aire,para prevenir un exceso de calor y la desecacióndel montón. Un lugar ideal puede ser bajo unárbol frondoso de hoja caduca, que dé sombra enverano y sol en las épocas más frías. Un últimoaspecto que tenemos que tener en cuenta es laaccesibilidad, es decir, buscaremos un lugar en elque podamos trabajar sin dificultad a la hora deechar los residuos, voltear, sacar el compost,regarlo, acumular restos vegetales, etc. - Previamente a introducir los materiales en elcompostador, tendremos que almacenar restosvegetales del jardín y restos de comida duranteunos días. Hay que disponer de una cantidadmínima de residuos para que comience adecua-damente el proceso de compostaje. Deberemoscomenzar con un montón de unos 50 cm mínimo,pero cuanto más grande mejor. Los restos vege-tales los trituraremos o cortaremos, porque cuan-to más pequeños sean, antes se descompondrán. - En el fondo del compostador pondremos unlecho de material leñoso, de unos 10 cm., parafacilitar la entrada de aire al montón. Este lechofunciona como un colchón para los materiales,dificultando que se compacten. - Incorporaremos los materiales bien mezcladosentre ellos, tanto materiales verdes o frescos

como materiales leñosos o secos. Cuanto másheterogénea sea la mezcla mejor se nos hará elcompost. Intentaremos que la cantidad de mate-riales frescos sea el doble que los secos. Asígarantizamos una correcta relación de Carbono yNitrógeno y que haya oxígeno y humedad sufi-cientes. - La temperatura del montón subirá sensiblemen-te. Pasados unos días veremos que el volumen delos materiales desciende. Seguiremos agregandomateriales según los vayamos generando, inten-tando guardar las proporciones de dos partes defrescos por una de secos. Al introducirlos, losmezclaremos bien con ayuda de una horca, unrastrillo o una pala. Mezclar, mezclar y mezclar. - Pasados de 3 a 6 meses, la parte inferior delmontón (que es la que más tiempo lleva descom-poniéndose) se habrá transformado en una tierravegetal de color marrón oscuro, de textura gru-mosa y de olor parecido a tierra de bosque. Estoes el compost. Lo sacaremos por la parte de abajoy lo cribaremos para separar elementos quetodavía no se hayan descompuesto totalmente(palos, hojas...) (Ojo, todos estos materiales losdepositaremos de nuevo en el compostador, paraque continúen su proceso de descomposición). - Una vez cribado el compost, lo dejaremos repo-sar a cubierto durante 15- 30 días para dar tiem-po a que madure totalmente y asegurar que nocontiene invertebrados. ¡Enhorabuena! El compost estará listo para serutilizado en macetas, jardín, huerto, semilleros...Y el proceso continuará de forma ininterrumpidasi seguimos echando materiales orgánicos.

Boletín 16

8

Page 9: Boletin 16

6.Qué materiales echar y cuáles no La materia orgánica vegetal que se va a com-postar está compuesta principalmente porCarbono y Nitrógeno. El carbono abunda en laspartes leñosas de las plantas, como la paja,serrín, ramas... Es el principal formador de lalignina, celulosa y los azúcares, y por tanto delpapel y cartón. Podemos generalizar diciendoque en los materiales secos encontramos lamayor cantidad de Carbono. El Nitrógeno predomina en las partes verdes delas plantas, restos de comida, excrementos deanimales, césped verde... es decir, en los restosque contienen más humedad. Al principio del proceso de compostaje losmicroorganismos consumen unas 30 veces máscarbono que Nitrógeno, por tanto, si queremos

que se composte en condiciones óptimas, debe-mos aportar una mezcla de materiales que man-tenga las proporciones deseadas. Los materiales verdes (con abundancia deNitrógeno) favorecen el aumento de la veloci-dad de la descomposición, pero no generan grancantidad de producto. En cambio, los materialessecos o leñosos (con abundante Carbono) sirvenpara mejorar la aireación del montón y se des-componen más lentamente, pero incrementan elvolumen del producto final.

Para conseguir un equilibrio correcto denutrientes se puede seguir una sencilla regla;aportando el doble de materiales verdes que desecos conseguimos una relación C/N de 30 a 1,que es la deseada. Al compostador echaremos exclusivamente

materiales orgánicos. Comoejemplos, podemos aportar: - Restos de cocina: mondas defruta, restos de verduras, cáscarasde huevo, posos de café, bolsas deinfusiones... - Restos de jardín: podas, césped,hojas secas... - Estiércol de animales herbívoros - Ceniza vegetal (en pequeñas can-tidades) - Papel y cartón (muy troceado y enpequeñas cantidades) - Pelo, uñas, etc.

Boletín 16

9

Page 10: Boletin 16

No debemos echar: - Excrementos de perros o gatos: ya que puedencontener patógenos. - Materiales inorgánicos:no se van a descomponer(ceniza de carbón mineral,plástico, metal, vidrio,telas, filtros de cigarri-llo...) - Papeles satinados o contintas de color: contienenmetales pesados que con-taminan el compost. - Restos de carne y pesca-do: ya que su descomposi-ción puede producir malosolores. - Productos que contengan grasas: ésta formauna película que dificulta la oxigenación. - Restos de aspiradora o de barrido: pueden con-tener metales pesados.

7.El compostadorPara hacer compost basta con apilar los residuosy taparlos con un plástico para evitar pérdidasde temperatura y de humedad. Pero lo más con-veniente es utilizar un compostador, en el quevamos a controlar mucho mejor las condicionesdel proceso, y poder disponer con más facilidadlos materiales. La capacidad del compostador dependerá bási-camente de nuestra producción de desechos y dela extensión de nuestro jardín o huerto. Entreotras cosas, deberemos valorar a la hora de ele-gir el tamaño la cantidad de plantas en jardín yhuerto, las podas anuales que hagamos, elnúmero de árboles y arbustos de hoja caduca, lasuperficie de césped plantada, el número dehabitantes en el hogar, el número de comidasdiarias realizadas en casa.. El compostador podemos comprarlo o bienfabricarlo nosotros mismos. En el mercado exis-ten multitud de modelos, normalmente de plás-tico reciclado, con distintos tamaños, precios ycalidades. Normalmente los compostadores sue-len estar diseñados para controlar mejor las con-diciones de aireación y temperatura. Además

garantizan que no va a entrar agua de lluvia ensu interior. Suelen tener una estética y

constan de colores que les hace pasar desaperci-bidos en el jardín. Los más cómodos son aque-llos que pueden ser desmontados en cada unode sus lados. Esto facilitará mucho cualquieroperación que debamos hacer en el composta-dor (visionado del montón, riego, volteo, sacarel compost, etc.).Para hacer compost basta conapilar los residuos y taparlos con un plásticopara evitar pérdidas de temperatura y de hume-dad. Pero lo más conveniente es utilizar uncompostador, en el que vamos a controlarmucho mejor las condiciones del proceso, ypoder disponer con más facilidad los materia-les. La capacidad del compostador dependerá bási-camente de nuestra producción de desechos yde la extensión de nuestro jardín o huerto.

Entre otras cosas, deberemos valorar a la horade elegir el tamañola cantidad de plan-tas en jardín y huer-to, las podas anua-les que hagamos, elnúmero de árbolesy arbustos de hojacaduca, la superfi-cie de césped plan-tada, el número dehabitantes en elhogar, el número decomidas diariasrealizadas en casa... El compostadorpodemos comprarlo o bien fabricarlo nosotrosmismos. En el mercado existen multitud demodelos, normalmente de plástico reciclado,con distintos tamaños, precios y calidades.Normalmente los compostadores suelen estardiseñados para controlar mejor las condicionesde aireación y temperatura. Además garantizanque no va a entrar agua de lluvia en su interior.Suelen tener una estética y constan de coloresque les hace pasar desapercibidos en el jardín.Los más cómodos son aquellos que pueden serdesmontados en cada uno de sus lados. Estofacilitará mucho cualquier operación que deba-mos hacer en el compostador (visionado delmontón, riego, volteo, sacar el compost, etc.).

Boletín 16

10

Page 11: Boletin 16

Fabricar un compostador Dependiendo de lo manitas que seamos pode-mos fabricarnos un compostador más sofistica-do o menos. Lo único que debemos tener encuenta es hacer un lugar donde depositar losmateriales orgánicos, que no les falte aireación,que puedan retener la temperatura y la humedady que estén suficientemente aislados de la llu-via. Otras cuestiones que podemos tener encuenta son la facilidad para disponer y echar losmateriales, comodidad de trabajar en él,tamaño, reutilización de materiales para sufabricación, durabilidad, estética, etc. A conti-nuación describimos algunos de los modelosmás utilizados:

1. Compostador de malla metálica.

Formaremos un gran cilindro con la malla,adaptado a la cantidad de materiales orgánicosque generemos. Conviene forrar la malla con

cartón, tela o plásticopara evitar desecaciones.En su parte superiorhabrá que colocar unatapa. Tiene un coste bajode fabricación, pero nor-malmente no estamosreutilizando. Una alter-nativa puede ser sustituirla malla por una persianavieja. A favor: fácil demontar y de trasladar. Encontra: para voltear osacar el compost es nece-

sario desmontar todo el compostador.

2. Compostador de palés de madera.

Con cuatro palés de obra (o con tres si aprove-chamos la pared de nuestra parcela), construire-mos un recinto cuadrado en el que echar losresiduos. Los palés los podemos unir entre ellosde diversa forma: con cuerdas, clavos, gomas...El palé frontal hará las funciones de puerta. Laparte superior la taparemos con un plástico, unalona, una tabla o algo que impida el paso delagua de lluvia. A favor: fácil de trabajar en elcompost, fácil de construir, gran capacidad;construido con elementos reutilizados. En con-tra: elementos pesados y poco duraderos.

3. Compostador de ladrillos.

Su disposición será similar al anterior modelo.En las paredes dejaremos algún hueco para faci-litar la aireación. Deberemos construir una puer-ta. Nos puede servir un palé de obra, una mallametálica, una persianavieja... A favor:resistente yd u r a d e r a ;gran capaci-dad; fácil detrabajar en elc o m p o s t .relativa dec o n s t r u i r ;materiales no reci-clados; mayor costeeconómico.

4. Compostador de bidón.

A un bidón de aceite, bien lavado, le quitaremosla base para que losmateriales estén encontacto con el suelo.Realizaremos variosagujeros en los ladospara facilitar la airea-ción. Buscaremos unatapa que lo aísle de lascondiciones climatoló-gicas. A favor: durabili-dad; reutilización de unmaterial; fácil de fabri-car. En contra: dificul-tad para trabajar en él;para voltear y sacar elcompost hay que levan-tarlo en su totalidad;peligro de sobrecalen-tamiento de los materiales.

Boletín 16

11

Page 12: Boletin 16

8. Herramientas necesarias - Horca. Una buena horca nos resultará útiltanto para voltear los materiales, en caso de quefuera necesario, como para sacar el compostcuando esté hecho, como para agregar malezasy paja. Además, existen horcas de mano o ras-trillos, que son muy cómodos a la hora mezclarlos materiales cuando los disponemos en elcompostador.

- Trituradora. Cuanto menor sea el tamaño delos materiales, más rápida será la descomposi-ción. Para las ramas y podas una herramienta degran ayuda es una trituradora vegetal, capaz dereducirlas a tamaños de menos de 3 cm. Estastrituradoras tienen un motor eléctrico o de gaso-lina y su potencia varía según el modelo. Paraun uso doméstico se recomienda una eléctrica.En esto es preferible buscar un modelo de granpotencia, ya que son capaces de reducir ramasde mayor diámetro y son mucho más duraderas.

- Tijeras de jardinero. Pueden resultar un sus-tituto de la trituradora, aunque el trabajo serámás costoso y nos deberemos armar de pacien-cia. De todas maneras es una herramienta muyútil para reducir el tamaño de pequeñas ramas,plantas, malezas.o restos frescos de cocina.

- Regadera o manguera. En los casos en losque haya que regar el montón porque se hayanproducido pérdidas considerables de humedad,cualquiera de estos utensilios nos permitiránhumedecerlo de una forma homogénea, llegan-do a todos los lados del compostador.

- Tamiz. Cuando el compost está maduro esnecesario cribarlo para eliminar las partes másgruesas que todavía no se han descompuesto(ramas, hojas, paja...). La criba podemos fabri-carla fácilmente con una caja de madera a la queclavaremos una malla metálica. También en elmercado se encuentran modelos muy útiles yfacilitan el proceso de tamizado. La luz deltamiz conviene que no sea muy pequeña, entorno al centímetro. Además existen otros uten-silios que pueden sernos de gran ayuda a la horade hacer el compost, tales como aireadoresmanuales, termómetros, palas, carretillas, etc.

Boletín 16

12

Page 13: Boletin 16

9. Solución de problemas Aunque el proceso essencillo, nos pode-mos encontrar conuna serie de dificulta-des que se solucionanfácilmente.

- El montón no sedescompone, no dis-minuye su volumeny está seco. Lo queocurre es que, porfalta de humedad, lapila se ha secado yhan desaparecido losorganismos descom-ponedores. Se deben

sacar todos los restos del cubo, humedecerloscon agua, mezclarlos con restos verdes, removerbien y volver a introducirlos en el compostador.

- La pila produce mal olor y está muy húme-da. Parte o la totalidad de los residuos han sidoencharcados, los huecos de aire se han tapadodebido a la excesiva humedad y el proceso hadejado de producirse en condiciones aerobias,pasando a ser anaerobio. El exceso de humedadpuede deberse en muchos casos a un exceso decésped, que se ha echado húmedo y sin mezclarcon otros restos. El césped se apelmaza conmucha facilidad y esto impide una correcta aire-ación. Debido al exceso de nitrógeno, se produ-cen pérdidas de este elemento en forma de amo-niaco (NH4), con un característico olor. Se debeechar mezclado con materia seca, o dejarlosecar un tiempo hasta que pierda gran parte dela humedad. Para solucionar el problema de lahumedad excesiva se debe extraer la materiacompactada, mezclarla con restos secos, remo-ver la mezcla y cuando haya perdido humedadsuficiente, volver a introducirla en el composta-dor.

- La temperatura no aumenta. Lo que ocurrees que falta Nitrógeno, unido a un exceso demateriales secos (con abundante Carbono). Sedebe añadir una mayor cantidad de materialesfrescos, y hacer una mezcla con los secos yadepositados.

- Hay demasiadas moscas. Suele ocurrir cuan-do los restos de cocina se han dejado en la partesuperior del montón sin mezclar con los otros, oen demasiada cantidad. Se debe recordar que laproporción correcta es el doble de materialesfrescos que de secos. Se pueden cubrir con unacapa de materiales secos o una finísima capa detierra, o bien, cada vez que se haga un aporte derestos de cocina, abrir un hueco en la pila, intro-ducirlos y taparlo con la materia que estaba enproceso de descomposición.

- Exceso de hormigas. Suelen indicar que elcompostador está seco. Se debe proceder de lamisma manera que en primer apartado. Con elvolteo se evitará la formación de hormigueros.Si vemos que con un volteo no es suficientepara eliminarlas, se repetirá la operación. Enningún caso se debe aplicar insecticida, ya queperjudica a la población de descomponedoresque actúa en nuestro compostador.

10. Características del compost.Cómo saber cuando está hecho. Para saber que el compost que hemos obtenidoya está maduro debe cumplir los siguientesrequisitos:

Boletín 16

13

Page 14: Boletin 16

- Temperatura. Una baja temperatura del com-post indica que se encuentra en proceso demaduración. La temperatura, en la fase final vadisminuyendo progresivamente, y cuando másfría esté la pila, más madura se encontrará.

- Organismos. Si ya no hay restos que descom-poner, los organismos no tendrán alimento, ypor tanto no los encontraremos en el compostmaduro.

- Aspecto. Los materiales introducidos al prin-cipio ya no se reconocen. El aspecto del com-post maduro es de color marrón oscuro y conestructura granular.

- Humedad. Para saber si la humedad del com-post es adecuada debemos comprobar que alcogerlo en la mano y presionarlo, no desprendelíquido. Tampoco debe estar demasiado seco, sepuede comprobar al tacto si los agregados no sedeshacen fácilmente. Debe tener aspecto de tie-rra y no de arena.

11. Utilización del compost Cuando vayamos a esparcir el compost sobrecultivos ya establecidos procuraremos tener cui-dado en que no toque ni tallos, ni brotes, nihojas, debido a que podría dañar las plantas. Elcompost puede ser utilizado según las distintasetapas de descomposición dependiendo de lasexigencias de nuestras plantas. Así podemosdistinguir entre compost fresco y compostmaduro.

El compost fresco es aquel que ha pasado laprimera fase de descomposición pero que aúnno es estable. Tiene un alto contenido en hume-dad y la relación de nitrógeno es bastante alta.Se utilizará en plantas exigentes de nutrientes yen árboles. Se aplicará directamente sobre la tie-rra (sin mezclar), como acolchado o protegidopor una capa de hojas o hierba. El compost fres-co es adecuado para melones, acelgas, alcacho-fas, maiz, pimientos, tomates, patatas...Echaremos entre 3 a 5 kg. de compost por m2.

El compost maduro es aquel en el que la mate-ria orgánica está totalmente descompuesta,aproximadamente tras los 6 meses. La relacióncarbono/ nitrógeno se haya en torno al 15:1.Además de mejorar la estructura de la tierra, yaaporta elementos nutritivos para las plantas.Puede ser utilizado para cualquier tipo de plan-tas tales como espinacas, coles, puerros, lechu-gas, judias, zanahorias, guisantes, tomates,pimientos, acelgas... Se echará directamentesobre la tierra o mezclado en superficie (sólo encaso de un compost muy maduro puede serenterrado), en cantidades entre 1 y 3 kg. por m2.También este compost maduro puede utilizarsepara hacer semilleros, el cual mezclaremos conmantillo o compost viejo (de más de 1 año, conun alto grado de mineralización).

Boletín 16

14

Page 15: Boletin 16

Como continente es el más pequeño y el másseco –salvo la Antártida-, basta decir que su ríoinsignia, el Murray, llamado el MississippiAustraliano, se secó dos veces durante el últimosiglo. Sólo una estrecha franja costera se librade ser catalogada como desierto o semidesierto,algo que inevitablemente implica grandesextensiones de tierras improductivas. Estasequedad conlleva que los incendios forestalessea algo tan cotidiano que la evolución ha dota-do a gran número de la flora australiana de lacapacidad de ser ave fénix (o planta fénix): sur-giendo o sobreviviendo a sus propias cenizas.Así, en ciertos géneros como Bankia es el fuegoel único capaz de hacer germinar las semillas;según algunos botánicos la corteza en tiras des-prendibles de muchos eucaliptos, y que cubrengran del suelo entre los ejemplares de los bos-ques abiertos, no tiene otra función que favore-cer el fuego, y con ello la apertura de las cápsu-las que contienen las semillas y que sólo seabren con un calor extremo (y no la función dedesprenderse de epifitas como sugieren otros).

Es un continente eminentemente llano, susmáxima cota es de 2 228 m en los AlpesAustralianos, nombre, que dada su escasa alti-tud, en nada tiene ver con su homónimo euro-peo, haciendo sonreír por ello a un chauvinistafrancés orgulloso de su Montblanc. Los austra-lianos insisten en que la superficie nevada eninvierno supera a la superficie de Suiza. Sinembargo, y sin poner en tela de juicio este

dato, el manto de nieve es sólo invernal,Australia, de hecho, es el único continente queno tiene glaciales, o sea hielos permanentes.Pero tampoco tiene volcanes en activos, estaausencia de volcanismo reciente es un factorque resta fertilidad al suelo australiano. Asípues, estamos ante un continente pequeño,llano, muy seco, con un suelo poco fértil y sinlos grandes colosos de fuego y hielo presentesen el resto de los continentes.

Con esta carta de presentación, uno podríapensar que es un continente con pocos atracti-vos para el naturalista o viajero. Sin embargo,este pedazo de tierra, desde el punto de vistabiológico, parece como una creación aparte oparalela, cuando no una ventana al pasado,habiéndose constituido en un refugio para for-mas de vida primitiva, que ya han desaparecidoen el resto de la tierra. Separada de los otroscontinentes desde hace 75 millones de años, susformas de vida primitivas han estado a salvo deotras más evolucionadas y competitivas permi-tiendo que sobrevivan equidnas, ornitorrincosademás de un tropel de marsupiales, con loscanguros a la cabeza, que aquí han podidoseguir sus propios derroteros evolutivos. Segúnlas teorías actuales, en virtud de los fósilesencontrados, el origen de los marsupiales sesitúa en Sudamérica, Australia actuó como refu-gio de ellos, al igual que la propia Sudamérica.Pero en Sudamérica hace 3 millones de añosla unión con Norteamérica causó la gran

Boletín 16

15

A u s t r a l i a :el continente insular

Texto y fotograf ías Carlos Fierro

Australia es difícil de clasificar: ¿La isla más grande? o ¿El continente más pequeño? Podíamossalirnos por la tangente y denominarla la isla continente: el continente insular. Si Marte es el plane-ta rojo, Australia es el continente rojo, rojo es color de gran parte de su centro arenoso, de su suelo,de sus rocas y de su arena. Se podría decir que Australia es como la sección de una sandia alargada,verde en el borde y rojo en el centro, pero con una diferencia fundamental: sin agua.

Sin embargo, para el naturalista es un paraíso, lo más parecido a un viaje en el tiempo o en elespacio: se trata de casi una creación aparte, donde la evolución ha seguido sus propios derroterosdentro de un aislamiento protector.

Page 16: Boletin 16

invasión de mamíferos placentarios y extermi-nio de los marsupiales. Bueno, salvo la zarigüe-ya, que no sólo resistió sino que colonizóAmérica del norte. A excepción de los quiróp-teros, permeables a las barreras marinas por sucondición de voladores, entre el resto de mamí-feros placentarios sólo el hombre con su mejoramigo, el perro dingo, pudieron penetrar en estemundo perdido de la evolución, alcanzaronAustralia aprovechando el descenso del mar enla última glaciación y usando barcas entre lascadenas de islas. El rápido asilvestramiento deldingo fue el causante de la extinción de multitudde animales que la ciencia del hombre blancono llegó a conocer. Sin embargo, fue la llegadade los colonos blancos lo que marca elApocalipsis para la fauna autóctona con unanueva y masiva extinción, directa con el rifle oindirecta por la introduc-ción de gatos, zorros oratas.

Cook en 1770, llegó ensu viaje descubridor condos botánicos de prestigio,Joseph Banks y DanielSalander, pero las prime-ras evaluaciones botánicasestaban más interesadas enla utilidad de las plantaspara una colonización, ybajo ese prisma, ningunade las plantas nativasresultaba comestible ogustosa para el hombreblanco, así pues los barcos que llegaban connuevos colonos, si bien inicialmente sólo fueronpresos, traían multitud de especies agrícolasrecogidas tanto en las Islas británicas, como enlas Islas Canarias o Sudáfrica, o sea todo lo quepillaban de camino. De hecho los colonos nosólo trajeron las ovejas, sino la hierba que ellascomían. Con tanta especies introducidas algunase les fue de las manos como el higo chumbo,traído de las Canarias para el tinte de los unifor-mes militares que se obtiene de la cochinilla queparasita la chumbera. En Australia, sin un ene-migo o limitador natural, la chumbera protago-nizó una de las más espectaculares invasiones

de un territorio por parte de un vegetal.

Pequeña reseña morfológicaComo ya hemos dicho Australia carece de

grandes alturas, la razón es muy simple: su ais-lamiento secular la ha tenido a salvo de la coli-sión con otras placas continentales, que es elauténtico motor capaz de levantar colosalescadenas montañosas como los Himalayas, conel choque de la placa de la India con Asía. EnAustralia, la mayor parte de los estratos sonhorizontales, las cadenas de montañas, como lascadenas orientales –que los australianos llamanla Gran Cadena Divisoria, que resultó un obstá-culo infranqueable para los primeros colonos,son asimétricas, apareciendo como montañassólo desde las llanuras costeras, no existiendocumbre sino una meseta que, con leve caída, seextiende al interior. Esta Gran CadenaDivisoria, con sus 3200 km de longitud, desde

el Cabo de York hasta Tasmania, es lagran responsable de la sequedad delinterior de Australia. A pesar de escasaaltura, obligar a los vientos del Este,cargados de humedad del océanoPacífico, a subir en altitud, descargan-do generosas lluvias en las vertientesorientales, con espectaculares ríosespumosos, pero impidiendo que elgran grueso de esas lluvias alcancen elinterior. El gran interior de Australia,llamado Outback (=fuera y atrás), esuna inmensa meseta que salvopequeños macizos de escasa alturacomo la cordillera Macdonnell, cercade Alice Springs, o enigmáticas roca-montañas como Las Olgas o Ayres

rock, Uluru en lengua nativa, el relieve es deuna monotonía total, que va, perdiendo alturahacia el centro sur, alcanzando en el lago Eyresu punto más bajo con 15m por debajo del niveldel mar. El lago es parte de una colección delagos endorreicos donde van a parar gran partede las aguas del Outback, eso si el sol no las haevaporado antes, que es lo usual, de hecho ellago sólo se ha llenado tres veces desde que hayregistros. Recogiendo las aguas que correnhacia el oeste desde la Gran Cadena Divisoria,está la cuenca del Murray-Darling, siendo elMurray el único río con agua permanente queatraviesa el Outback.

Boletín 16

16

Lambertia formosa, una bellaProteácea.

Page 17: Boletin 16

La f lora de Austral iaBotánicamente Australia tiene, al igual que

en zoología, auténticos fósiles vivientes: colo-nias de estromatolitos, algas que son una de lasformas de vida más primitivas con registro fósily que increíblemente han sobrevivido en ense-dadas hipersaladas del oeste de Australia, enHamelin; en 1994 fue descubierto el pinoWollemi, con los parientes más cercanos en fósi-les de hace 120 millones de años (ver Boletín15; pg. 7); las selvas húmedas tropicales de lacosta este de Queensland, según ciertas teoríasson las más antiguas de la Tierra.

A nivel filogenético la flora Australianatiene cierta relación en géneros y familias conSudamérica y con Sudáfrica, no en vano forma-ron parte, conjuntamente con la Antártica, delgran continente austral denominado Gondwana.Así pues, comparten familias como Proteáceaso géneros como Araucaria, Podocarpus yNothofagus (las hayas australes, que si bien enel pasado se consideraron Fagaceas, en laactualidad forman familia aparte); además de elgénero Acacia, si bien el tremendo poder decolonización de este último género le ha permi-

tido expandirse por gran parte del mundo tropi-cal y templado. Al igual que todos los continen-tes australes, Australia es generosa en helechosarborescentes y en cicadáceas, estas últimas quesi bien semejan palmeras, representan plantasmuy primitivas que apenas representan un avan-ce evolutivo con respecto a los helechos. Peropara el neófito hablar de Australia a nivel botá-nico es hablar de los eucaliptos, de hecho sólodos especie de Eucalyptus no son nativos deAustralia. Es sin duda es el género que más tapi-za de verde el paisaje australiano con una diver-sidad de formas y tamaños: que incluyen desdearbustos esclerófitos hasta los gigantescos“olmos” de montaña (Eucalyptus regnans), quedisputan a las secuoyas la supremacía en alturade los árboles, alcanzando los 95m, si bien hayregistros, no homologados, de árboles cortadosde 131m. Sin embargo, el Eucalipto con 850especies es superado en diversidad por el géne-ro Acacia con cerca de 955 especies, género quedado su no exclusividad a Australia, como elEucalipto, parecemos pasar por alto. Comocuriosidad cabe decir que mientras gran parte delas acacias africanas poseen espinas, ninguna delas australianas poseen espinas: coevolu-

Boletín 16

17

C u r i o s i d a d e s d e l a p o l i n i z a c i ó n e n A u s t r a l i aPara un europeo pensar en polinización es pensar en insectos, cuando nos trasladamos a

Iberoamérica, los colibríes nos dan el toque de sangre caliente (¡la pasión de la polinización!). Sidamos el salto a África, ocupando el nicho ecológico de los colibríes tenemos los sunbirds (=pája-ros del sol), nectarínidos de brillantes colores iriscentes, más grandes y pesados y sin la capacidadde cernirse, claro que las plantas protáceas, con inflorescencias grandes, pueden resistir el asalto delpesado nectarínido. Si nos vamos a Australia el nicho del pájaro polinización lo ocupan los llamadoshoneyeaters (=comedores de miel, aunque setrata de néctar) son aún más grandes que lossunbirds y sin la brillantez de colorido. Pero elcolorido emplumado en Australia lo pone elloro arcoiris (Trichoglossus haematodus), sulengua terminada en papilas largas capaces decaptar bien el néctar de ciertas flores, si bien esun generalista que también come frutas y semi-llas. Pero al igual que en África, Australia tieneflores ubicadas dentro del follaje, no visibles aaves voladoras, cercanas del suelo, o inclusoflores que salen sobre un tronco gordo, la razónes favorecer la polinización por parte de mamí-feros, que en algunos casos pueden ser tangrandes como un oposum, del tamaño de unagineta. En otros casos el blanco y olor acre de la flor, delata que el polinizador es un murciélago.

Loro arcoiris libando nectar del arból paragüas(Schefflera actinophylla)

Page 18: Boletin 16

ción de las acacias africanas con un tropel deherbívoros eficientes y con posibilidades deramoneo en ramas altas. ¿Nueva prueba de laescasa competitividad evolutiva de la faunaAustraliana?

Cobertura vegetalEn una primera aproximación, un tanto

(demasiado) simplista, podemos dividir lacobertura vegetal australiana en orden a susrequerimientos en agua:

Manglares: complejo de varios géneros conuna decena de plantas con porte arbóreo, a lasque se suman epífitas como la orquídea deoro (Dendrobium discolor). Todos tiene encomún raíces neumatoforas, que creciendopor encima del lodo permiten que el resto delsistema radical obtenga oxígeno en un mediosin él. El más común es el mangle rojo(Rhizophera stylosa). Extensos bosques demanglares cubren la costa norte y noreste.

Selva lluviosa tropical: Son las tan afamadasselvas tropicales de la costa de Queensland,orgullo Australiano por ser, según investiga-dores australianos, las selvas más primitivasde la tierra. Tiene su origen en las selvas ter-ciarias que cubrían gran parte de Australia,hasta que el cambio climático las ciñó a lafranja costera de Queensland. Dichas man-chas de selva tropical australianas han sufridouna tremenda merma con la introducción deexplotaciones de caña de azúcar que empezó

en los años 1920, y compiten por la franja

costera de Queensland. En 1988 se formógran revuelo por una disputa entre elGobierno Federal (gobierno central, paraentendernos) partidario de una proteccióntotal de las tierras gubernamentales, condeclaraciones de Reservas de la Biosfera de laUNESCO, y el Gobierno Estatal deQueensland, partidario de una explotaciónsostenible. La extracción de 600000 m3 demadera en la década de los 60, por parte delGobierno Estatal de Queensland, parecía pocosostenible y marcó el comienzo del revueloque culminó en 1988. El Gobierno Estatal deQueensland desafió la intromisión delFederal, pero las urnas dieron la razón alFederal saliendo elegido un nuevo GobiernoEstatal partidario de las tesis Federales deprotección (queda claro que las ganancias porla tala no estaban suficientemente repartidas).

Desde el punto de vista de la biodiversi-dad la selva lluviosa tropical tienen 2500especies de de plantas con flor, que compara-do con las selvas del sureste asiático con más25000 especies, las deja empobrecidas encomparación. El aislamiento es refugio, perono favorece la biodiversidad. La riqueza aus-traliana aún podría ser menor a no ser por queen tiempos geológicos recientes, la línea deWallace a podido ser traspasada por aves ycon ellas semillas que enriquecieron Australiacon especies del sureste asiático.

Boletín 16

18

Mangle en Cabo Tribulation

Selvas tropicales de la costa de Queensland

Page 19: Boletin 16

Bosques húmedos templados: Se da en la fran-ja costera de Nueva Gales del Sur y Victoria.Son la transición hacia el sur de la selva tro-pical de Queensland, la sustitución poco apoco de especies cálidas por especies másfrías. Algo común a ambos son los helechosarborescentes. El género eucalipto será elgran protagonista, alcanzando su máximaesplendor al este de Melbourne con los increí-bles bosques del olmo de montaña, con unsotobosque de helechos arborescentes pordonde corretea el pájaro lira. Son bosquesespesos y húmedos.

Brezales: Si bien en Europa, y curiosamente enla zona de África Austral y Nueva Guinea–ambos con unos lazos filogenéticos muyfuertes con Australia-, los brezales, que ocu-pan zonas de suelo ácido muy pobre, estándominados por el género Erica, familiaEricaceae, en Australia, con ausencia total delgénero Erica, es la familia Epacridaceae laque ocupa el nicho, con géneros comoEpacris, y con especies como el brezo común(Epacris impresa) o Leucopogon el más biodi-verso con 154 especies.

Bosque abierto con sabana: Con sólo unacobertura del 30%, el género eucalipto seránuevamente el más numeroso, seguido deCasuarina, Callitris, Melaleuca y Acacia. El

sotobosque dependerá de suelo, humedad,nutrientes y luz, cuando está cubierto porhierbas bien desarrolladas, cosa que sucede enel norte y las zonas de transición con los bos-ques húmedos de la franja este, se habla desabana con bosque abierto.

Pradera estacional con arbustos: Es el paisajevegetal más común de Australia, consta unmosaico de parches de diferentes tipos devegetación dominados por matas de acaciasesclerófilas, conjunto de hierbas espinosasdenominadas spinifex, que incluye a 20 espe-cies individuales, que constituyen refugiopara pequeños reptiles y mamíferos. Los cur-sos secos se distinguen rápidamente por lapresencia de la serpenteante hilera del gome-ro o eucalipto rojo de río (Eucalyptus cama-dulensis).

Desierto: Desde el punto de vista de coberturavegetal la idea general del gran desierto inte-rior es algo que requiere matizaciones, asípues, hasta de Desierto de Simpson, el grandesierto australiano por antonomasia, estácubierto de vegetación en forma de matas yhierbas como spinifex, que cubren en partesus dunas. Sólo las grandes extensiones delagos salados, como el Lago Ayre, secos en lamayor parte de su superficie durante la mayorparte del año están sin cobertura vegetal.Zonas del centro rojo australiano, donde sobreun desierto de arena roja se yergue la impo-nente mole de Ayre’s Rock, Uluru en lenguaaborigen, sólo tiene en común con los autén-ticos desiertos del Sahara o Namib una arenaomnipresente, que en el caso australiano es un

Boletín 16

Los gigantescos “olmos” de montaña (Eucalyptusregnans), que disputan a las secuoyas la suprema-cía en altura de los árboles, alcanzando los 95m.

“Roble” del desierto, con Urulu de fondo.

19

Page 20: Boletin 16

seductor color rojo, pero a diferencia de otrosdesiertos aquí hay una cobertura vegetal dehierbas, arbustos, y hasta bosques ralos deárboles: como zonas cubiertas por el denomi-nado “roble” del desierto del géneroAlocasuarina. Aquí hay que puntualizar delos pioneros blancos, ingleses en su mayorparte, tenían pocos conocimientos en botáni-ca, así que llamaron a los árboles por la utili-dad que sacaban de ellos, así pues el roble deldesierto tiene una madera dura cercana alroble europeo y alejado del blando eucalipto.

Taxones más sobresal ientesGénero AcaciaPertenecen a la subfamilia Mimosoideae de

las Leguminosas. Dada la actual distribución delgénero Acacia, con 1350 especies distribuidaspor África, el Océano Índico, Asia tropical,Australia y en las Américas tropicales, todohace pensar que su origen fue Gondwana.

Las especies Australianas, 955 en total, nohacen honor al origen griego de su nombre quesignifica espina. Son muy distintas de las africa-nas, que además de contar con las espinas cuen-tan con hojas compuestas, mientras que las aus-tralianas poseen falsas hojas que en realidad sonpecíolos modificados en forma de seudohojasdenominadas filodios, en muchas casos enforma falcada, que semejan a las auténticashojas de los eucaliptos. Es algunas especies deAcacia se puede observar las hojas compuestasen los brinzales y observar como poco a pocolos pecíolos van ensanchándose a la par que lashojas se van perdiendo. Los filodios o falsas

hojas tienen la parte plana en posición vertical(ver dibujo) algo que sugiere un intento de elu-dir los rayos solares. Los filodios, dado su ori-gen en los peciolos, tienen muchos menos esto-mas que las hojas auténticas, algo que va a ayu-dar a las plantas a no perder agua, recordemosque el gran problema de las plantas en sitiossecos es la pérdida de agua por los estomas. Asípues, todo parece apuntar a que las acaciasAustralianas han seguido una evolución paraeludir la sequedad de un sol abrasador.

¿Por qué tanta biodiversidad? Parece unacontradicción que dada la uniformidad climáti-ca y de relieve, si lo comparamos con otros con-tinentes, sea precisamente Australia el centro dela biodiversidad, si bien esto podría explicarseadmitiendo que Australia fue origen y centro dedispersión, pero es un tema que requiere másinvestigación.

A c a c i ap y c n a n t h adisfrutó de laacep tac iónp o p u l a rcomo la flornacional deA u s t r a l i adurante elsiglo XX,pero no sep r o c l a m óoficialmente

como el emblema floral nacional hasta 1988, elaño del bicentenario de las primaras colonias enAustralia.

En la península Ibérica se ha plantadocomo ornamental y se ha naturalizado enGalicia y Portugal (López, 2002).

Generos Eucalyptus y CorymbiaSi bien Cook en su primera expedición de

1770, cuando redescubre Australia, llevabaabordo botánicos, es un francés el que da laprimera cita y nombra al género Eucalyptus(1788). Nombre que deriva del griego eû(bien) y kalyptós (cubierto), en clara alusión ala tapadera correosa que cubre los estambres yque ha de desprenderse para dejarles libres.

Boletín 16

20

Escudo de Australia con Acaciapycnantha de fondo

Los pecíolos van ensanchándose a la par que lashojas se van perdiendo.

Imagén obtenida en página WEB del Gobierno Australiano

Page 21: Boletin 16

En 1797 se publica el genero Angophora,hojas opuestas (alternas en el géneroEucalyptus) si bien hasta hoy sigue la discusiónde si se trata del mismo género.

En 1995 Hill y Johnson crean una nuevadivisión en el género Eucalyptus introduciendoel género Corymbia. Donde sitúa 113 de losantiguos Eucalyptus entre ellos:

Eucalipto con olor a limón (Corymbiacitriodora). Oriundo de la parte central ynorte de Queensland. Sus hojas despiden unfuerte aroma a limón, razón por la cual seusa en la industria para dar aroma de limón,mucho más barato que el fruto del limón.

Eucalipto fantasma (Corymbia papua-na) uno de los gomeros más fotogénicos delOutback Australiano, su blanco tronco resal-ta como un faro sobre las rocas rojas oscurasde los afloramientos rocosos donde le gustaenraizar.

La dependencia del los eucaliptos al fuegoha sugerido a ciertos autores que la supremacíaactual del eucalipto en bosque abierto australia-no, donde representa el 75%, en competenciacon los géneros de Casuarina y Acacia, estámotivada por la llegada del hombre hace 50000años y su uso del fuego, que incrementó signifi-cativamente los incendios forestales.

Son de hoja perenne, no suelen toleran lasheladas, siendo el más tolerante al frío el euca-lipto de nieve (Eucalyptus pauciflora).

Banksia Banksia genero de la familia Proteaceae (80

géneros y 1500 especies en todo el mundo, sien-do la zona de El Cabo su centro de dispersión),de la misma familia son los generos Grevillea,Hakea y Macadamia también presentes enAustralia., nombrado en honor del botánico SirJoseph Banks, miembro de la primera expedi-ción de Cook en 1770, son desde pequeñosarbustos postrados hasta árboles de porte medio.

Las flores son inflorescencias con centena-res de flores. Bajo las flores se desarrolla uncono de semillas que permanece en el árbolvarios años.

Casuarinas y demás parientesSon unos bichos raros, capaces de despistar

por su apariencia: Poseen unas seudohojas ver-des, filiformes, delgadas, colgantes y flexiblesque semejan las plumas del casuario (de ahí elorigen del nombre); las seudohojas poseen arti-culaciones y con estrías longitudinales, que deno ser por lo leñoso de las ramas más grandesnos parecería estar ante un Equisetum, al fin y alcabo, si hay helechos arborescentes por que nocolas de caballo arborescentes. Fijándonos unpoco más, vemos la existencia de unos frutos enforma de piñas, esto unido a que las verdes yflexibles ramas jóvenes se parecen un poco a

Boletín 16

21

Eucalipto fantasma (Corymbia papuana)

Banksia serrata

Page 22: Boletin 16

las acículas del pino, nos hace pensar en subirun peldaño más en las plantas vasculares: ¿esta-remos ante una gimnosperma? La realidad esque tampoco, las seudo hojas, no son hojassino ramas, las piñas son verdaderos frutos deuna angiosperma, las hojas son diminuta esca-mas verticiladas en torno a las articulaciones ysólo visibles con lupa.

El roble del desierto Allocasuarina es otro género de familia

Casuarinaceae. Son los roble del desierto, lla-mados también con el nombre, tan políticamen-te incorrecto de sheoak (robles-ella), en alusióna que son algo menos fuertes que los robleseuropeos (para que luego hablen del machismoibérico). En su estado juvenil son de aspecto tandistinto que para el neófito serian especies dis-tintas, con sólo el tronco leñoso erecto y rami-

lletes lacios que cuelgan, sólo con los años vansaliendo ramas leñosas laterales que de danaspecto de arból.

Como las legumbres, las raíces del sheoakposeen nódulos que contienen nitrógeno por lasimbiosis con bacterias; adaptación para creceren una tierra muy pobre y en áreas semiáridas.Sin embargo, los robles del desierto son muchomenos tolerantes al fuego que los eucaliptos.

Ambos géneros se han plantado en España,en fijación de dunas y cortavientos en zonas

costeras.

MalaleucasInconfundibles por su corteza en forma de

pila de papeles amarillentos, viejos y rasgados:otra forma de luchar contra el calor como el cor-cho de nuestros alcornoques.

En Australia son conocidos como paper-barks (=corteza de papel). Son casi endémicasde Australia, aunque ciertas especies lleganhasta Indonesia y Malasia.

Swainsona formosaUna leguminosa que dado su tremenda

belleza se ha convertido en emblema floral deAustralia del Sur, su nombre común es Sturt’sDesert Pea.

Boletín 16

22

El “roble” del desierto Allocasuarina

Una pareja de kookaburras sobre un tronco deMalaleuca sp.

Swainsona formosa

Page 23: Boletin 16

XanthorrhoeaGenero con 15 especies. Si bien el nombre

común australiano es grass trees (=arboles-hier-ba) están más cercanas a las Liliáceas que a lasgramíneas.

X. australis es probablemente la más comúnde todas las especies.

Son otras de las ave fénix de Australia,observaciones apuntan a masivas floracionesdespués de un incendio. Es muy normal que eltronco esté quemado: superviviente de un sin finde bushfires.

Coníferas australianasAraucarias

Genero que alcanza su esplendor en los bos-ques de las montañas del cono suramericano,aquí en Australia tres especies autóctonas cre-cen en la costa este: A. birdwilli, A. cunning-hammii y A. heterophylla.

Podocarpus

Con seis especies Australianas, esPodocarpus elatus el más común.

Cicadáceas

Son una de las familias más antiguas, puesaparecieron hace 245 millones de años. Habitandesde las selvas tropicales, como Cycas media,selvas de Queensland, hasta cañones con micro-clima en el mismo corazón de la Australia seca,como la Macrozamia macdonnellii.

Boletín 16

Xanthorrhoea sp.

R e f e r e n c i a s y b i b l i o g r a f í a

BEASLEY J. (2005). Plants Cairs-Kuranda. Ed. Footloose Publications. Kuranda. 96 pp.DARK J. O. (1986) Trees and Shurbs for Eastern Australia. Ed. New South Wales University Press. 180 pp.GIACOMA C. (1985). Australia. Ed. Ítaca. Barcelona. 127 pp.BLOMBERY A. M. (2001) The flowers of central Australia. Ed. J. B. Books Australia.GREIG D. (2002). Wildflowers of Outback Australia. Ed. New Holland Publishers Sydney. 144 pp.GREIG D. (2002). Wildflowers of South-eastern Australia. Ed. New Holland Publishers. Sydney. 144 pp.HILL, K.D. y L.A.S. JOHNSON, (1995). Systematic studies in the eucalypts - 7. A revision of the bloodwoods, genus

Corymbia (Myrtaceae). Telopea 6: 173–505.LÓPEZ G. (2002). Los árboles y arbustos de la Península Ibérica e Islas Baleares: (especies silvestres y las cultiva-

das más comunes). Ed. Mundi-Prensa Libros. Madrid. 894 pp.KEAST A. (1973). Australia y las Islas del Pacífico. Ed. Seix Barral. Barcelona. 298 pp.ROBINSON H. (2004). Australia an ecotraveller’s Guide. Ed. Reed New Holland. Sydney. 190 pp.

Pequeño bosquete de Macrozamia macdonnellii, llama-do el Jadín del Eden (zona Kings Canyon).

23

Page 24: Boletin 16

Boletín 16

24

E l Naranco un espac ionatura l a p roteger

Guillermo César Ruiz Sierra-Blanco1

Introducción general a la flora y vegetación actual y potencial del naranco.

1Licenciado en Biología, y socio de ASOCIACIÓN DE AMIGOS DEL NARANCO, AMIGOS DE LA NATURALEZAASTURIANA (ANA) y ARBA.

Page 25: Boletin 16

El Naranco es un conjunto de sierras preli-torales, enclavadas íntegramente en el concejode Oviedo / Uviéu; formado por dos unidadesbásicas: la sierra del Naranco propiamentedicha en disposición NE-SO protegiendo a laciudad, y que se une en su extremo occidentalapenas casi sin discontinuidad aparente a la sie-rra de Llubrió de disposición NO-SE, formandoen conjunto un relieve complejo, de litologíadiversa y de distinta antigüedad geológica quevan desde areniscas ferruginosas propias de estelugar (formación Naranco), como materialmás antiguo, hasta la caliza de montaña ydolomías originadas durante la reciente oroge-nia Herciniana. Es un relieve muy evoluciona-do, erosionado, que origina un paisaje de perfi-les suaves con cumbres romas o redondeadas,más propio de los del occidente asturiano; aun-que aún están presentes manifestaciones kársti-cas dignas de mención. En algunas laderas yvalles muy encajados de esta sierra se encuen-tran aún masas forestales y arbustivas dispersasque aunque no muy extensas, si son valiosas, degran belleza e incalculable valor científico,como es la increíble presencia de algunos ele-mentos florísticos relícticos más propios de

regiones macaronésicas o paleotropicales, talescomo el grezu u olivu montés o labiérnago(Phyllirea latifolia), en la zona más occidentaly caliza en La Rodiella y Fabarín, arbolín que ensu momento formó parte de los bosques de ardi-na que poblarón las zonas más térmicas delNaranco;

O la presencia, hasta ahora casi desconocidaen Asturias de manera espontánea (aunque sícultivada en parques y jardines de algunas ciu-dades asturianas en los últimos años), de la llo-ral o lloru o Loro (Prunus lusitanica subsp.lusitanica), presente en la zona central de la sie-rra sobre areniscas ferruginosas muy antiguas,sin protección actual en nuestra comunidad.

Y que junto a otros elementos más conoci-dos entre nosotros como l’albornial o borrachi-nal o madroño (Arbutus unedo), l’arnéu o ala-dierno (Rhamnus alaternus) o el lloréu o laurel(Laurus nobilis), son más propios de la floralauroide que existió en la era Terciaria, hace 65millones de años, y que sobrevivieron en deter-minadas “zonas refugio” cerca de la costa,como el Naranco, hasta nuestros días tras supe-rar los largos periódos glaciares acontecidosdurante el final del Pleistoceno en la tierra.

Boletín 16

Detalle de la disposición opuesta de las hojas y su característico color verde que tiene este her-moso ejemplar de Grezu u olivu montés en Fabarín.

Los bosques

25

Page 26: Boletin 16

El Naranco y su entorno,se encuentra ubicado bioge-ográficamente hablando, enel sector Ovetense, sectorGalaíco-Asturiano de lasubprovincia Cantabro-atlántica (provinciaAtlántica-Europea, regiónEurosiberiana, reinoHolártico), caracterizadopor un clima templado,oceánico, de precipitacionesmoderadas y regulares einviernos suaves con bajoriesgo de heladas o si estasse producen alguna vez, sonescasas y débiles. Las condi-ciones biogeográficas y bio-climáticas que se dan en esteterritorio, unidas a la hetero-geneidad de los sustratos presentes en la sierra(básicos o éutrofos: calizas y dolomías, comoácidos u oligótrofos: areniscas ferruginosas), laaltura sobre el nivel del mar a la que se alzan los

mismos, orientación, así como los fuertes desni-veles originados en algunas zonas (cota mínima:80m, cota máxima: 637m) en tan sólo 3,5 km,contribuyen a la aparición de determinadospisos de vegetación que corresponden con los

siguientes: Piso termotem-

plado o termocolino:hasta los 100 msnmaprox.

Piso mesotem-plado o colino: delos 100 a 700 msnmaprox

Ambos pisos devegetación se carac-terizan por albergardeterminadas forma-ciones vegetales,que en el caso de losbosques estos se dis-tingue por su morfo-logía foliar: bosquesplanicaducifoliosdominados por árbo-les de hoja caduca;bosques marces-centes dominadospor árboles de hojasemicaduca y final-

Boletín 16

Detalle de las hojas y flores en racimos colgantes de la lloral o lloruen la cuenca del reguero de Porciles.

Aún quedan preciosos ejemplares de albornial o borrachinal en algunaszonas del Naranco, como este ejemplar superviviente a una reciente tala de

ocalitos acontecida en la cara sur próximo a Villamexil.

26

Page 27: Boletin 16

mente los bosques esclerófilos planiperenni-folios dominados por árboles de hoja siempreverde de consistencia dura; si bien decir quepor lo general los dos primeros dominan en laszonas más altas mientras que los segundosdominan en las zonas bajas. “Bosques” que porotro lado, y en la mayoría de los casos, nossobreviven hasta hoy día solo a modo de algu-nos retazos de ellos, bien en forma de pequeñasmanchas aisladas o rodales de muy poca exten-sión o especies aisladas entremezcladas con loscultivos forestales (llamados también bosquesindustriales), mayoritariamente estos de ocali-tos o eucaliptos (Eucalyptus globulus), cuandono son las etapas de mayor o menor estado dedegradación o regresión de estos bosques pri-migenios, las que dominan actualmente y deforma mayoritaria, las zonas deforestadas queocupan una superficie aproximada del 40%,bien a modo de presencia arbustiva (árgomas,cotoyas o tojos Ulex europaeus, Ulex canta-bricus; toxu moriscu, atoxu o abrojos Genistahispanica subsp. occidentalis) o de pastizal oprados de diente (Brachypodium spp., Holcusspp., Dactylis spp. Poa spp. Bromus spp.,Lolium spp., etc.). Unos terrenos que a pesar desu estado actual, altamente degradado por laactividad humana desarrollada sobre ellosdurante decenas de cientos de años, aún sepuede apreciar en ellos su evolución naturalhacia su estadió más maduro y natural o “cli-max”, el bosque autóctono (apenas ocupa el15% aproximadamente de la superficie total delNaranco); a través de esos rodales que aún que-dan esparcidos en zonas alejadas de la influen-cia humana, de difícil orografía, nos ha permi-tido y nos sirve aún posible recrear la recons-trucción de los bosques primigenios que un díapoblaron las laderas de este magnífico y sagra-do monte hasta principios del siglo XVII, antesde la industrialización.

Se entiende como vegetación potencial poraquel terreno que colonizado por una determi-nada composición inicial de plantas (general-mente herbáceas), es capaz de albergar tras unlargo período de tiempo de crecimiento, evolu-ción y competencia de las especies que lo com-ponen (sucesión vegetal), una etapa límite omadura denominada “climáx”, en la cual las

especies finalmente mejor adaptadas a las con-diciones ambientales generadas se mantieneninteractuando entre sí, sin variación cuantitati-va y cualitativa significativa, y en donde, unaspocas especies, dominan claramente sobre lasdemás. Así, decir que si las condiciones climá-ticas y orográficas son lo suficientemente favo-rables, la evolución natural de un terreno es aformar con el tiempo un bosque. Si esto no secumple, porque existe un algún factor ambien-tal, orográfico o antropogénico limitante que loimpide, la “climax” podría detenerse en unestadío intermedio de modo temporal o perma-nente, bien a modo de una formación vegetal“arbustiva” o simplemente una formaciónvegetal “herbácea” en el peor de los casos. Encualquiera de las situaciones, finalmente se for-man siempre unos determinados “grupos vege-tales”, organizados de manera jerárquica quedenominamos asociaciones o comunidadesvegetales, fácilmente identificables en el terre-no y que constituyen para el profesional unaeficaz herramienta de trabajo a la hora de poderde diseñar elaborar distintos estudios de campoo elaborar determinadas políticas agroambien-tales o forestales.

Un bosque no es simplemente un conjuntode árboles, es todo un ecosistema vivo, madu-ro, perfectamente sincronizado, donde todoslos elementos tanto bióticos como abióticosinteractúan entre sí y de manera autorregulada,en función de la cantidad de energía que llegaal sistema. Los bosques son sistemas puesdonde sus individuos dominantes, los árboles,forman un estrato continuo capaz de reproducira su vez bajo las copas de los mismos unascondiciones microambientales significativa-mente distintas (luz, temperatura, humedad ycomposición del suelo) de las del exterior queson generales para todos los seres vivos; y quepor tanto son capaces de albergar en su interiorunas condiciones de vida tanto animal comovegetales inferiores idóneas, exclusivas paracata tipo de bosque, es decir, que serán distin-tas al resto de las condiciones microambienta-les generadas por otros árboles capaces deagruparse entre si y constituir una formaciónboscosa u asociación vegetal.

Boletín 16

27

Page 28: Boletin 16

Según lo expuesto hasta ahora, y con losdatos que tenemos en la actualidad tanto bioge-ográficos, como bioclimáticos, cabe distinguiren el entorno del Naranco los siguientes tiposbosques potenciales y actuales. En cada uno deellos se especifica, como es claro el nombre dede la asociación vegetal a la que pertenecen, lle-vando implícito en el nombre latino que se men-ciona las especies características que conformanla asociación vegetal (a excepción de los culti-vos forestales, por no ser esta una formaciónnatural).Bosques esclerófilos y planiperennifolios

*Ardinales / Encinares cantábricos (Lauronobilis-Quercetum ilicis)

L’ardina o ancina o encina amarga(Quercus ilex subsp. Ilex), es un árbol propio delas formaciones boscosas costeras edafoxerófi-las termófilas que se da en toda la costa cantá-brica. Actualmente no quedan mas ejemplaresadultos que los que existen en Priañes fuera dela sierra y los reintroducidos recientemente,quedando en todo caso algún que otro renuevoescaso y vigoroso fundamentalmente por lazona sur y este. En cambio si existe bastantematorral de sustitución arbóreo de carácter lau-roide, termófilo y relíctico como el lloréu,arneú, borrachinal, incluso boxéu (buxus sem-pervirens) aún presente en Tuernes; así como lapresencia tan importante como el grezu u olivumontés (Phyllirea latifolia), la cita más occiden-tal que se tiene hasta la fecha de su presencia enAsturias; como matorral arbusti-vo y herbáceo aparecen plantastermófilas como artu moriscu, layerba apegallíngua, etc…. Ambasespecies, ardina y grezu estánprotegidas a nivel autonómico enel Decreto 65/95 con la categoría“de interés especial. L’ardinaademás goza de un “Plan deManejo” según Decreto146/2001, y como formaciónvegetal los ardinales gozan deuna protección a nivel europeosegún la Directiva 92/43/CEEHábitat como “de interés comuni-

tario”.

Lugares de interés: La Rodiella, Fabarín,Peña el Fuelle, Arnéu, Villamexil o en zonaspróximas a la cumbre de La Miliciana (593m) ydel Picu’l Paisanu o Campu de Los Xardines

*Lloréos / Lauredales (Hedero helicis-Lauretum nobilis)

Normalmente el lloréu o laurel (Laurusnobilis) aparece salpicado o mezclado con otrasespecies en biotopos que le son propicios, así esfrecuente encontrarlo junto a carbayos, encinas,etc. También junto a formaciones de riberacomo salgueros, umeros, si bien no llega a ocu-par posiciones inmediatas al cauce del río pueshuye de los suelos encharcados. Más infrecuen-te resulta ver al laurel formando masas o roda-les casi puros, lloréos, cuando las condicionesson propicias para su formación aparecenentonces como bosquetes densos e impenetra-bles presentes en relieves casi esqueléticos y denaturaleza caliza. Protegida a nivel europeo enla Directiva 92/43/CEE Hábitat como “deinterés comunitario”.

Lugar de interés: Naranco, Constante, LaCogolla-Fitoria, Axuyán, Quintana, La Peña

Bosques marcescentes

*Rebollales cantábricos termófilos /Rebollares cantábricos (Lauro nobilis-Quercetum ilicis quercetosum pyrenaicae)

Bosques marcescentes edafoxerófilos, relíc-ticos y termófilos formados por rebollu o melo-

Boletín 16

28

Relícticos vestigios de Grezu u Olivu montés amenazados porel pastoreó y los incendios en La Rodiella. En su día formaron

parte de los ardinales.

Page 29: Boletin 16

jo (Quercus pyrenaica), acompañado de otrasespecies lauroides termófilas ya comentadas enlos ardinales además de híbridos con el carbayu.Bosques muy castigados por los incendios yplantaciones de ocalitos que se desarrollan enzonas calizas del sur del Naranco. Formaciónvegetal protegida a nivel europeo en laDirectiva 92/43/CEE Hábitat como “de interéscomunitario”.

Localidades de interés: Peña el Fuelle,Arnéu, La Quintá, El Rebollal

*Rebollales orocantábricos / Rebollares(Linario triornithophorae-Quercetum pyrenaicae)

Bosques marcescentes formados rebollu,castañal, peruyal, carbayu, híbridos con el car-bayu y bidul fundamentalmente; siendo espe-cies como pata de gallu o paxarinos (Linariatrionithophora), la uz (Erica arborea), el pior-nu (Adenocarpus complicatus) y la uz moural(Erica australis aragonensis). Formación vege-tal protegida a nivel europeo en la Directiva92/43/CEE Hábitat como “de interés comunita-rio”

Localidades de interés son: Porciles, ElMontucu, El Rebollal,

*Caxiguéos / Quejigales (Cephalantherolongifoliae-Quercetum rotundifoliae var. conQ. faginea)

Son bosques formados por caxigal o caxigu(Quercus faginea); árbol marcescente que fueindiscriminadamente talado y ahogado por losocalitos, hoy casi desaparecido. El caxigu seencuentra protegido a nivel autonómico en elDecreto 65/95 con la categoría “de interés espe-cial” y como formación vegetal recogida en laDirectiva 92/43/CEE Hábitat, como “de interéscomunitario”.

Lugar de interés: La Venta

Bosques planicaducifolios

*Carbayeos oligótrofos / Carbayedas conabedules (Blechno spicanti-Quercetum roboris)

Bosques mixtos planicaducifolios formadospor el carbayu (Quercus robur). Son las forma-ciones arboladas más características del pisomesotemplado. Sin embargo, debido a su locali-zación en áreas de gran interés agrícola, quedanescasísimos reductos bien conservados. La granriqueza en especies arbóreas planicaducifoliascomo fresnu (Fraxinus excelsior), plágano

Boletín 16

Sorprendente hallazgo de este híbrido de caxigu con rebollu (Q. xneomarei, =Q. xnumantina)próximo a La Venta, en la parroquia de Brañes, lo que prueba la existencia remota de caxigales en

Uviéu29

Page 30: Boletin 16

(Acer pseudoplatanus), bidul (Betula celtiberi-ca) o el milenario cultivo de castañal (Castaneasativa) que crece en estos bosques, constituyesu característica más notable, así como los estra-tos arbustivo, herbáceo y muscinal. Formaciónvegetal protegida nivel europeo en la Directiva92/43/CEE Hábitat como “de interés comunita-rio”

Localidades de interés: Les Cabañes,Folgueras, Axuyán, y los montes de LaMeredal, Les Quemáes o Las Vilorteras .

*Carbayeos termófilos / Carbayedas termó-fias (Rusco acuelati-Quercetum roboris)

Son rarísimos y de escasa distribución engeneral en Asturias. Son carbayeos que se danen zonas bioclimáticas muy bajas, termotempla-das, y destacan en ellos la presencia en su soto-bosque de elementos termófilos como el Rusco(Ruscus aculeatus) así como otras herbáceascomo l’artu moriscu (Smilax aspera) y la ape-gallingua (Rubia peregrina).

Lugar de interés: El Molinón, La LlavaderaCarbayéos éutrofos / Carbayedas con arces

y fresnos (Polysticho setiferi-Fraxinetumexcelsioris)

Son bosques formados fundamentalmentepor carbayos, frecuentemente acompañados ensus estadíos juveniles (prebosques) por fresnos(Fraxinus excelsior), pláganos (Acer psedopla-tanus), fayas (Fagus sylvatica) y ablanos(Corylus avellana). Estan escasamente repre-sentados, pues se localizan en las zonas bajasnorteñas u occidentales influenciadas por loshúmedos vientos procedetetes del cantábrico;actualmente se encuentran la mayor parte extin-guidas por la actividad existentes en las canterashoy activas.

Lugares de interés: Monte La Meredal, ElFayéu, Cantu Los Corralones, Folqueras,Quintana, Axuyán y Rodiella-La Vega.

*Ablanéos / AvellanedasLa situación que con más frecuencia pode-

mos ver l’ablanu o avellano (Corylus avellana)es asociado de manera aislada a bosques húme-dos desarrollados sobre suelos profundos y fres-cos, como los fayéos y carbayéos tanto sobre

terrenos ácidos como básicos. En cambio

los ablaneos propiamente dichos se forman bajocondiciones ambientales suficientemente húme-das, pero con escasez de suelo, lo cual favoreceque el ablanu no sólo pueda aparecer aisladosino originar formaciones monoespecíficas oprebosques como las de otras especies arbóreas,con las cuales compite en estas condiciones deforma eficaz dominando finalmente en la comu-nidad vegetal cuando la orografía del terreno eslo suficientemente compleja o se encuentra muyerosionada con escaso acúmulo de materia orgá-nica. En estos casos se trataría de bosquetes,generalmente no muy extensos y de densidadvariable que ocuparían las zonas de valles enca-jados en distintas zonas del Naranco. Así cabedistinguir dos tipos:

*Ablaneos caliares (Omphalodo nitidae-Coryletum avellanae)

Estos bosquetes son más frecuentes en eloriente asturiano donde predomina el sustratocalizo. En el Naranco existe aún una signifi-cativa presencia de ellos, debido a que este esel material predominante. Junto l’ablanu,estan presentes otras especies de porte arbó-reo u arbustivo tales como los relícticoscarrascos o xardones o acebos (Ilex aquifo-lium) y texos o tejos (Taxus baccata), ambosprotegidos en la legislación autonómicavigente, según decreto 65/95 con la categoría“de interés especial” y gozan de un “Plan deManejo” según Decreto 147/2001 y 145/2001respectivamente; también les acompañanespineras o espinos blancos (Crataegusmonogyna), algún carbayu (Quercus robur) yfaya o haya (Fagus sylvatica). El sotobosquede estos ablanéos, debido a la naturaleza delsustrato calizo, muy permeable y pedregoso,unido a la densa sombra que generan suscopas, hace que a pesar de presentarse enzonas frescas, abunden un elenco limitado deplantas más umbrófilas como Omphalodesnitida, la mercurial (Mercurialis perennis), elacebún (Daphne laureola), el pitallón(Helleborus foetidus), etc; aparte del numero-so estrato muscinal y helechos (Dryopterisfilix-mas, Polypodium cambricum, Athyriumfilix-femina, Polystichum setiferum) princi-palmente. Solo en la orla de los mismosdonde la luz es más abundante, y por la altitud

Boletín 16

30

Page 31: Boletin 16

donde se dan, es posible encontrar abundanteselementos termófilos lianóides como la yerbaapegallingua (Rubia peregrina) o l’artumoriscu o zarzaparrilla (Smilax aspera)

Lugares de interés: La Rodiella-La Vega,Porciles, Fitoria, Los Llosicos, El Fayéu , LaEría de San Andrés, Cueva del Agua, yMonte’l Oscuro

*Ablaneos silicícolas (Luzula enriquesii-Fagetum coryletosum avellanae)

Siendo relativamente frecuentes en eloccidente asturiano en el centro y oriente sonraras estas formaciones al no predominar elsustrato silícico en estas zonas, de ahí suimportancia que debería considerarse su pre-sencia en el Naranco. Junto l’ablanu crecenotras especies silicícolas como el rebollu(Quercus pyrenaica) y la peruyal (Pyrus cor-data) o elementos relícticos como el carrascuo la lloral o Loro (Prunus lusitanica); tam-bién es importante la presencia de la salgueraprieta (Salix atrocinerea), mientras que elestrato herbáceo destaca la presencia deherbáceas umbrófilas y nemorales como laLluzula (Luzula sylvatica), helechos como lafolecha (Blechnum spicant) y Dryopteris affi-nis; l’arandanal (Vaccinium myrtillus), elyerbu prietu (Helleborsu viridis subsp. occi-dentales), Dryopteris affinis, etc.

Lugar de interés: Porciles

*Umerales orientales / Alisedas ribereñasorientales (Hyperico androsaemi-Alnetum glu-tinosae)

La vegetación de las riberas se configuracomo una banda contínua que acompaña alcauce del río Nora y sus regueros tributarios quedescienden desde el Naranco, constituyendo losllamados “bosques de galerías”, siendo l’umeru(Alnus glutinosa), el árbol dominante en eltramo medio de los ríos y especialmente adapta-do pues los suelos están más estabilizados alpredominar más el proceso de sedimentaciónque el de la erosión. El dosel que generan suscopas es propicio para las formaciones umbro-sas propias de ambientes nemorales como plá-ganos, fresnos, ablanos, llameras (Ulmus gla-bra) y salgueros. El sotobosque es muy varia-ble dependiendo de las condiciones de ilumina-

ción que le llegan. Entre los integrantes delestrato arbustivo, destaca la importancia quealcanzan muchas rosáceas como los génerosCrataegus spp., Rosa spp., o Rubus spp. o matasnemorales termófilas y relícticas como fueya’lfrancu o zubón (Hypericum androsaemun).Estos desempeñan un importate papel en lasucesión vegetal, dominando con frecuencia lasprimeras etapas de sustitución cuando estratoarbóreo es eliminado. También es importanteseñalar el papel que ejercen las plantas trepado-ras. Su diversidad y desarrollo es superior al quealcanzan en los bosques climácicos del entornode la ribera, a causa de las condiciones ambien-tales tan favorables que disfrutan. Así, las prin-cipales famílias de lianas presentes en nuestrasriberas son la relícticas y termófilas mariselva omadreselva (Lonicera periclynemun), el bilortuo la hierba de los pordioseros (Clematis vital-ba), la yedra o hiedra (Hedera helix).Formación vegetal que goza de protección niveleuropéo en la Directiva 92/43/CEE Hábitatscomo “de interés prioritario”.

Lugares de interés: El Molinón, La Rodiella,La Vega, La Venta

*Umerales llamargosos / Alisedas panta-nosas (Carici lusitanicae-Alnetum glutinosae)

Bosques formados por bidules, salgueras yxangoneras o arraclanes (Frangula dodonei),además del umeru. El mayor grado de enchar-camiento hace que se incremente el número deplantas acuáticas propias de los cañaberales: elnabo del diablo (Oenanthe crocata), el lliriumariellu (Iris pseudocarus), la menta acuática(Mentha aquatica), la hierba centella (Calthapalustris); ciperaceas como Carex lusitanica,Scirpus lacustris; Juncaceas como Juncus mari-timus, gramineas como el carrizo común(Phragmites communis), la espadaña (Typhalatifolia). Formación vegetal protegida a niveleuropéo en la Directiva 92/43/CEE Hábitatscomo “de interés prioritario”.

Lugar de interés: El Molinón

Cultivos forestales o Bosques industrialesEl Naranco posee grandes extensiones de los

mismos. De las 4.200 Ha. que suponen suterritorio, en los últimos sesenta años el

Boletín 16

31

Page 32: Boletin 16

cultivo maderero por excelencia de mayorextensión es el del ocalitu (Eucaliptus globu-lus), ocupando este una superficie total discontí-nua de aproximadamente unas 1.250 Ha., casi el30% aproximadamente de la superficie total delterritorio. Mayoritariamente se encuentra domi-nando desde la franja suroriental a la nororien-tal de la Sierra, entre Constante, Cuyences, LosMatones, Poyana, La Comuña Los Trapones yPicos Secos (508m), y la franja suroccidental yoccidental que va desde El Boo, Llubrió, ElRebollal hasta La Venta; reseñando otras man-chas dispersas de mucha menor entidad, comolas de Santa Olaya, Folgueras, Obrís, Ules, ElConcorníu, La Berruga (535m), Picos Secos(568m), Fuente Los Pastores-Peña’l Fuelle-Arnéu, El Campamento o las proximidades a lacumbre del Picu’l Paisanu. Otras especiesmaderables reintroducidas con una beneficiosarepercusión para la flora y fauna, son las anti-guas repoblaciones efectuadas con castañal(Castanea sativa), que aún quedan como en LesQuemaes, Guindalorio, El Candanu, LesCabañes, La Manzanal, Santa Olaya o Llubrióy El Contriz-Ules); en las riberas de los ríos secultivan diferentes especies de chopos (Populusnigra, P. deltoides, P. xcanadensis.), que confrecuencia aparecen naturalizados formandoparte de los umerales en la cuenca del rio Nora.A continuación le siguen las recientes repobla-ciones efectuadas con carbayu americanu oroble americano (Quercus rubra), así como lanaturalización de ciertas especies ornamentalesexóticas también de naturaleza invasora como laalcacia o falsa acacia (Robinia pseudoacacia)que compite con nuetro carbayu. Finalmente ymenor cuantía se encuentran de manera casi tes-timonial la repoblación efectuada con el cipréso tuya (Chamaecyparis lawsoniana), realizadaen el Campu La Vara (607m) o en el ColláuLLinares y de manera aún más dispersa aún,algunos ejemplares de pinu americanu o pino deMonterrey (Pinus radiata), y pinu gallegu(Pinus pinaster) o mimosal (Acacia dealbata),todas ellas de pequeña y escasa repercusión enel conjunto del paisaje forestal.

A vueltas con l’ocalituLos efectos ecológicos que pueden traer

consigo la introducción de una nueva especie

en un medio natural, pueden acarrear conse-cuencias negativas (introducción de nuevas pla-gas y enfermedades, contaminación genética:hibridaciones y debilitamiento de la especie nat-ural, etc) o positivas (protección del suelo,nicho ecológico, comestibilidad de sus frutos,etc), dependiendo del grado de integración quetenga esa especie en el medio y el grado de tole-rancia o permisividad del resto de las especiestanto de flora como de fauna ante la intrusión deuna nueva. Así tenemos que una misma especiealóctona como l’ocalito que plantado sobresuelos llanos y semiáridos, el papel que juega enel medio no es negativo sino indiferente (RUIZDE LA TORRE, J.,1971), o que incluso queconsiderando aspectos como la biodiversidad,esta es superior a la de los pinares y solo ligera-mente inferior a la de los encinares (DOMIN-GUEZ DE JUAN, M. T. ,1987). En efecto segúnBARA TEMES, S et al. (1985), dice que “elocalito no es incompatible con ninguna especieautóctona en los montes gallegos”, y que aunreconociendo que de las grandes masas de euca-liptos “se acumulan cantidades importantes derestos que se descomponen con lentitud” noobstante se observa que “las frondosas se rege-neran bien en el ocalital…, lo que parece indi-car que no hay degradación notable del medio”.Asimismo, constata que “cuando existe mezclade frondosas entre el ocalital, la descomposi-ción de la hojarasca y otros restos del eucaliptoparece que tiene lugar con mayor rapidez quecuando se trata solo de restos de eucalipto”. Porotra parte, en cuanto al consumo elevado deagua que precisan estas especies para poderdesarrollar su gran envergadura y realizar unasproducciones de biomasa considerables en tanpoco período de tiempo (10-30 m3/ha/año enturnos de 10-15 años), es incuestionable, senci-llamente lo que ocurre es que las demás espe-cies no aprovechan toda el agua disponible en elsuelo y esta se pierde a niveles inferiores hastalos alcanzar el nivel freático por donde circulanlos acuíferos. Pero, solo en aquellas zonasdonde exista una regularidad en la cuantía deprecipitaciones a lo largo del año (como lasexistentes en las zonas costeras asturianas),puesto que en caso contrario el agua no sobraríaen níngun de los casos, y por tanto no alimen-

Boletín 16

32

Page 33: Boletin 16

taría a esos acuíferos. De ahí que se le atribuyala creencia popular de que l’ocalitu seca lasfuentes. Por otra parte en zonas susceptibles demovimientos de tierras (argayos) debido a surápido crecimiento y siempre junto a frondosastambién de rápido crecimiento como el bidul dedenso y resistente sistema radicular, puede teneruna función particularmente favorable. En cual-quier caso y dejando aparte los aspectos climá-ticos que hay que considerar en cuanto a su ubi-cación en el terreno, debemos tener en cuentaque dada la enorme longitud y capacidad depenetración de sus raíces, debe evitarse la plan-tación de ocalitos en las proximidades de lasfuentes y otros sistemas de almacenamientossubterráneos de agua a donde puedan llegar susraíces. Por ello a la hora de realizar repoblacio-nes forestales con estas especies es recomenda-ble la realización de plantaciones poco densas,es decir , espaciadas, de tal manera, que la luzpenetren en la masa y permita el desarrollo de lavegetación autóctona (la mal llamada “male-za”), además con ello serviría, en contra de lacreencia popular, de pantalla contra la posiblepropagación rápida del fuego si este se origina-se en su interior. Como colofón a este comenta-rio sobre estas plantaciones, decir que puede serlógico pensar que la utilización de especiesalóctonas de gran crecimiento y producción encondiciones ambientales poco exigentes, que sibien la necesidad de papel o de fibras vegetalesfue y sigue siendo una de las necesidades que

han impulsado a la humanidad a lo largo de laHistoria a utilizar el bosque para su beneficiopropio o en aras de su pervivencia colectiva,decir también que ello ha contribuido a modifi-car el paisaje vegetal de nuestro territorio, aveces de manera irreversible: arrasando grandesmasas de bosques primigenios, sin valorar (por-que conocimiento de ello se carecía), las nega-tivas consecuencias ecológicas que ello acarre-aría con el tiempo. Si bien es verdad que con losconocimientos que poseemos en la actualidadsobre la dinámica del medio natural, no se pue-den consentir los mismos errores de entonces,de cuya ignorancia si podía haber sido su únicaexcusa. Pero también nos debemos plantear quesi es necesario papel, fibras textiles artificiales yla madera es cada vez una materia prima cadavez más escasa y codiciada, parecerá lógicopensar el que los hombres nos planteemos elproblema de la gestión productiva de los bos-ques, que consideremos el empleo de especiesmás aptas para la producción de la biomasanecesaria para cubrir las demandas en materiaprima que nos exige la sociedad, como es elcaso del ocalitu, pero que nos hagan reflexionaren que debe haber un equilibrio entre gestiónproductiva y gestión protectora de los bosquespara no romper el equilibrio ecológico del cualdependemos todos los seres vivos, incluso elHomo sapiens.

Boletín 16

B I B L I O G R A F Í AALBA, J.; GALÁN P. & OTROS (1998) Nuestros Bosques. Amigos de la Tierra, Ed. Miraguano. Madrid.ACADEMIA DE LA LLINGUA ASTURIANA. (2000). Diccionariu de la Llingua Asturiana. KRK ediciones.

Uviéu.AMIGO, JAVIER, J. IZCO, J. GUITIÁN & M. INMACULADA ROMERO (1998): Reinterpretación del

Robledal Termófilo Galaico-Portugués: Rusco aculeati-Quercetum roboris. Lazaroa 19: 85-98BARA TEMES, S et al. (1985). Efectos ecológicos del Eucaliptus globulus en Galicia. INIA. Madrid.BLANCO CASTRO, E.; CASADO GONZÁLEZ, M. A. & OTROS AUTORES (1997). Los bosques ibéricos.

Una interpretación geobotánica. Planeta. Barcelona.BRAUN-BLANQUET, J. (1979) Fitosociología. Bases para el estudio de las comunidades vegetales. H. Blume,

Madrid.CASTROVIEJO, S. et al. (1986-2000). Flora Ibérica. Plantas Vasculares de la Península Ibérica e Islas Baleares

Vol I-VI &VIII. Real Jardín Botánico-Serv. de Publ. CSIC. Madrid.CASTROVIEJO, S et al. (2001). Claves de Flora Ibérica. Vol I. Licopodiaceae-Euphorbiaceae. Real Jardín

Botánico-Serv. de Publ. CSIC. MadridCEBALLOS, L. & J. RUIZ DE LA TORRE (1979). Árboles y arbustos de la España peninsular. E.T.S.I.M.-

Fundación Conde del Valle de Salazar. Madrid.DÍAZ GONZÁLEZ, T. E. & J. A. FERNÁNDEZ PRIETO (1994b). La vegetación de Asturias. Itinera

Geobotánica, vol 8: 243-528. Oviedo.33

Page 34: Boletin 16

Boletín 16

DÍAZ GONZALEZ, T. E. & J. A. FERNÁNDEZ PRIETO, NAVA FERNÁNDEZ & M.A.FERNÁNDEZ CASADO (1994c). Catálogo de la Flora Vascular de Asturias. Itinera Geobotánica, vol8: 529-600. Oviedo.

DÍAZ GONZÁLEZ, T. E.; J. A. FERNÁNDEZ PRIETO, H. S. NAVA FERNÁNDEZ & A. BUENOSÁNCHEZ (2003). Flora en peligro de Asturias. Asturnatura, 19: 1-96. Oviedo.

DÍAZ, TOMAS EMILIO & ANTONIO VÁZQUEZ (2004). Guía de los Bosques de Asturias. EdicionesTrea, S.L. Premio Alfredo Quirós Fernández 2003-2004, Oviedo, 287 pags.

FERNÁNDEZ DÍAZ-FORMENTÍ, J. M. (1995). Guía de los bosques de Asturias. Ediciones Trea, s.l.Gijón.

FERNÁNDEZ DÍAZ-FORMENTÍ, J. M. (2002). Bosques de Asturias. Cajastur-Ediciones Trea, s.l.Oviedo.

GALÁN, P., ROBERTO GAMARRA GAMARRA & JUAN IGNACIO GARCÍA VIÑAS (1998). Árbo-les y arbustos de la Península Ibérica e Islas Baleares. Ed. Jaguar. Madrid.

GARCÍA ÁLBA, JESÚS. (1987). Árboles y bosques. Naturaleza de Asturias. GH Editores. Xixón.GÓMEZ OREA, D. (1999). Conservación de la naturaleza y mundo rural: experiencias y perspectivas para

el s. XXI. Ed. Francisco Suárez, Madrid.GÓMEZ OLIVEROS, E. & J. J. LASTRA MENÉNDEZ (Eds.) (1998): Bosques Naturales de Asturias.

Universidad de Oviedo, Oviedo.GUTIÉRREZ CLAVEROL, MANUEL (2004). Reflexiones sobre la explotación de rocas industriales en

el monte Naranco. En La Nueva España, Martes, 17 de agosto de 2004, periódico página 4INSTITUTO GEOGRÁFICO NACIONAL. Mapa Topográfico Nacional de España. Hojas 28, 28 IV y 29

III, Ministerio de Fomento-Instituto Geográfico Nacional, Madrid.LABAJOS LUCIANO & EMILIO BLANCO (1992). Los últimos loros de la flora ibérica. Biología, dis-

tribución y utilidades de un arbolillo superviviente de los bosques subtropicales del Terciario. Quercus,82: 10-15

LASTRA MENÉNDEZ, JUAN JOSÉ & cols. (2003). Etnobotánica en el Parque Nacional de los Picos deEuropa. Colección Parques Nacionales. MMA. Madrid.

MARTÍNEZ GARCÍA, G., M. MAYOR LÓPEZ. & T. E. DÍAZ GONZÁLEZ. (1974). El Quercus fagi-nea. Lamk. en Asturias: su cortejo floristico. Revista de la Facultad de Ciencias, vol. XV (nº 2) y XVI:145-204.

MAYOR, M & J. ÁLVAREZ (1978). Phillyrea media L. y Pistacia terebinthus L., su comportamientoecológico y fitosociológico. En: Notas florísticas y ecológicas sobre Flora Ibérica I. Departamento deBotánica y Fisilogía Vegetal. Universidad de Oviedo. p. 2-5

MAYOR, MATÍAS & TOMAS E. DÍAZ (2003). La flora asturiana. Edición actualizada. RIDEA. Oviedo.MENÉNDEZ, JOSÉ ENRIQUE (2001). “El Naranco, andar y recordar”. Colección Un día en. KRK edi-

ciones, Oviedo, 142 pags.MONTOYA OLIVER, J. MIGUEL. (1995). El Eucalipto. Ed. Mundi-Prensa. Madrid.ORDIALES, BERTU & GUILLERMO CÉSAR RUIZ (2002). 21 rutes de Senderismu per Asturies,

Trabe, S.L., Uviéu.POLUNIN OLEG & MARTÍN WALTERS (1988). Guía de la Vegetación de Europa. Ediciones Omega.

Barcelona.RIVAS MARTÍNEZ, S. (1987a). Memoria del Mapa de series de Vegetación de España. ICONA. Madrid.RIVAS MARTÍNEZ, S. (1987b). Mapa de Series de Vegetación de España. ICONA-MAPA. Madrid.VÁZQUEZ, VÍCTOR M & JOSÉ A. FÉRNANDEZ PRIETO (1988). Árboles y Arbustos de Asturias.

Guía didáctica para escolares. Conocer Asturias. Servicio de Publicaciones de la Caja de Ahorros deAsturias. Gijón.

VALDEÓN, JOSÉ (2004). El entorno del Prerrománico. En La nueva España, domingo, 22 de febrero de2004, periódico pagina 6, Oviedo

VASCO, FERNANDO; LUCIANO LABAJOS & EMILIO BLANCO (1992). El laurel cerezo y otrosPrunas perennifolios. Quercus, 82: 16-17

VILLAR PIS, VÍCTOR (1998). Senderismo por el Concejo de Oviedo. Nadetur, S.L., Oviedo, 119 pags.VV.AA. (1994). Plan de Ordenación de los Recursos Naturales de Asturias (PORNA). Servicio de

Publicaciones del Principado de Asturias. Oviedo.

34

Page 35: Boletin 16

Distribuidos principalmente por el sur y estepeninsular, encontramos a lo largo de la mesetacastellano-manchega y el valle del Ebro, algunosde los humedales salinos más representativos,como la laguna larga de Villacañas, la laguna dela Sal y la salina grande de Quero, en Toledo, lalaguna de Alcahozo, en Ciudad Real, la lagunasalada de Pétrola, en Albacete, las saladas de losMonegros, las saladas de Alcañiz, y la mayorlaguna esteparia ibérica, la laguna de Gallocanta,estas últimas en Aragón; cerca de la costa medi-terránea hallamos el mayor humedal endorreicode Andalucía, la malagueña laguna de Fuente dePiedra.

También en la provincia de Madrid aparecenalgunos de estos humedales esteparios salinos,como son la laguna de Las Esteras, en Colmenarde Oreja, la laguna del Espartal, en Valdemoro, ola cercana salada del Guatén, en Torrejón deVelasco.

La alta concentración salina que singularizaa este tipo de humedales, esta originada por unescaso aporte de agua dulce a lo largo del año, elcual disuelve las rocas calizas o yesíferas (eva-poritas) sobre las que están asentados, diluyendoen sus aguas altas concentraciones de calcio,magnesio y sulfato, que precipitan en el fondo delas cubetas durante el intenso periodo de evapo-ración estival.

A pesar del exceso de sal, en estos humeda-les crece un tipo de vegetación que recibe elnombre de halófila. Esta vegetación ha desarro-

llado una serie de adaptaciones fisiológicas quelas capacitan para subsistir con éxito en estosambientes, evitando la competencia con las plan-tas glicófilas.

Esta incapacidad para competir con las haló-filas, se debe a una serie factores adversos pro-pios de los suelos salinos. Así por ejemplo, laescasa disponibilidad de nutrientes esencialescomo hierro, fósforo, y potasio, al formar estosfases insolubles, impide que sean absorbidos porlas plantas. Así mismo, las costras de sal, produ-cidas por la intensa evaporación, obstruyen losporos del suelo, por lo que, disminuye la perme-abilidad en la superficie del humedal. Además laelevada concentración de sales solubles, facilitala retención del agua en las partículas del suelo,substrayéndosela a los vegetales. La abundanciade iones tóxicos en el suelo, y por último, la alte-ración de los procesos vitales en el desarrollovegetal como la germinación y el crecimiento.

Pese a la extraordinaria adaptación de lasplantas halófilas a su hábitat, una de sus princi-pales necesidades es la absorción de agua delsuelo, la cual les es especialmente dificultosa.Mediante un proceso de osmorregulación, redu-cen su necesidad hídrica, permitiéndoles mante-ner el flujo de agua.

Para reducir esta necesidad de agua, las plan-tas halófilas han creado una serie de mecanismosvitales, según los cuales son conocidas por dis-tintas denominaciones, así: las plantasEuhalófilas acumulan sales en el interior de

Boletín 16

35

La vegetación halófila de loshumedales endorreicos salinos:La salada del Guatén

Característicos de paisajes esteparios, los humedales endorreicos salinos son un tipo de hábitatde extraordinario valor ecológico, poco frecuente en Europa occidental.

En la península Ibérica únicamente han podido ser catalogados 99 pequeños humedales salinos,evidenciándose, al comparar con las más de 687 pequeñas lagunas y charcas de agua dulce que exis-ten en el interior penínsular, la escasez de este tipo de hábitats.

Por el Grupo Espliego.

Page 36: Boletin 16

sus células, en las vacuolas, disminuyendo deeste modo su potencial hídrico interno, pudiendoaseguran el flujo de agua. Entre los géneros queposeen esta adaptación se encuentran Atriplex,Arthrocnemum, Halogeton, Salicornia, Salsola ySuaeda.

Otro mecanismo que emplean las plantaseuhalófilas, consiste en acumular en lugar desales, compuestos orgánicos con el propósito dereducir el volumen hídrico de las células. Dichoscompuestos orgánicos, llamados solutos compa-tibles, se concentran en la fracción soluble delcitoplasma celular, el citosol, sin dañar a la célu-la. Entre los solutos compatibles se pueden citarla prolina, la betaína, glicerol y ciertos azucares.Sarcocornia fruticosa, Suaeda monoica ySpartina townsendii son algunas de las especiescapacitadas para acumular estos solutos compa-tibles, acumulando la primera proina y las otrasbetaína.

La evolución convergente, a dotado a cactusy otras plantas suculentas desérticas de la capaci-dad para acumular agua en sus células, de igualmodo, las plantas euhalófilas de los humedalessalinos han desarrollado también el mecanismode la suculencia con el fin de acumular sales enel interior de sus células. De esta forma, la acu-mulación de sales no resulta nociva para la plan-ta, gracias a esta adaptación. Salicornia ramosis-sima, Arthrocnemum macrostachyum son algu-nas de las plantas que emplean dicho mecanismo.

El llantén marino (Plantago maritima) y elaster de saladar (Aster tripolium), habitantes desuelos húmedos y salinos del litoral, eliminan elexceso de sal de sus células viejas, desprendién-dose de ellas.

Otro grupo, el de las plantas Glicohalófilas,poseen un mecanismo de expulsión de ionesnocivos, impidiendo su acumulación en el siste-ma radical, absorbiendo únicamente los inocuos.La tan consumida cebada (Hordeum vulgare)utiliza este sistema, para ello dispone en el plas-malema (membrana celular), de mecanismosinternos que transportan el potasio y el cloruro,así como, de externos para el sodio. Otras espe-cies glicohalófilas son la cebadilla de campo(Hordeum murinum), la cebadilla marina(Hordeum marinum) y los tropicales mangles de

los géneros Sonneratia, Bruguiera y

Rhizophora.Otro mecanismo, consiste en aislar las sales

en estructuras especiales, controlando así, su dis-tribución en los tejidos. Este mecanismo lo utili-zan las plantas locahalófilas. La orzaga (Atriplexhalimus), por ejemplo, almacena las sales enescamas de la cutícula de las hojas. Otras plantasdel género Atriplex, acumulan las sales en unaserie de pelos vesiculares, que se caen cuandoestán llenos de sal.

Por último, las plantas crinohalófilas elimi-nan las altas concentraciones de sales, segregán-dolas a través de glándulas situadas en las hojas,manteniéndose así, en unos niveles salinos acep-tables para la planta. Esta adaptación es carac-terística de los géneros Tamarix y Limonium.

Otra adaptación distinta es la desarrolladapor ciertas plantas acuáticas halófilas, como pue-den ser las del género Ruppia. Estas plantas, típi-cas moradoras de marismas, marjales salinos,lagunas endorreicas, etc. desarrollan un ciclovital efímero, fructificando poco tiempo despuésde haber germinado, evitan así, estar expuestasal incremento progresivo de la salinidad de lasaguas, producida por la evaporación, y a lasequía, esperando las condiciones ecológicasfavorables para germinar de nuevo.

Los saladares y humedales salinos ibéricosson refugio de plantas singulares adaptadas a lasalinidad, entre las cuales podemos encontrargran variedad de plantas gravemente amenaza-das y/o endémicas, tanto monocotiledóneas,Carex lainzii o Puccinellia fasciculata pungenscomo dicotiledóneas Limonium spp., géneroextremadamente diversificado, del que sean des-crito hasta el momento 119 especies, lo que evi-dencia el excepcional valor biológico de estoshábitats.

LA SALADA DEL GUATÉN. Ubicada en la ribera del valle que forma el

arroyo que le da nombre, esta charca surge enuna pequeña vaguada, sobre rocas evaporíticasen un ambiente semiárido, rodeada de parcelasagrícolas dedicadas al cultivo de trigo y cebada.

La alta concentración salina de la charca,dificulta el aprovechamiento agrícola de la tota-lidad de la parcela, empleándose el prado halófi-lo que se extiende por el humedal como pastizalpara el ganado ovino, destinándose el resto de la

Boletín 16

36

Page 37: Boletin 16

parcela al cultivo de cebada, al poder crecer estecultivo en un terreno con menor salinidad.

Aunque de pequeña extensión, este humedalalberga una muestra representativa de vegeta-ción halófila. Rodeando la charca se extiende unprado halófilo de gramíneas, en el que predomi-na la cebadilla marina (Hordeum marinum),acompañada en la orilla norte por una praderaPuccinellia festuciformis.

La orilla sur y el saladar aledaño, que seextiende hacia el oeste, están poblados de roda-les de sosa espigada (Suaeda spicata) y sargadi-lla (Suaeda splendens), así como la orilla nores-te. Mezclada con ellas, hallamos en la mitad surdel prado halófilo y en el saladar bastantes ejem-plares de salicor fino (Salsola soda), abundandoespecialmente en la orilla sureste, junto al arro-yo Guatén. También encontramos en el saladarel endémico cardo craso (Sonchus crassifolius).

Al oeste, en la orilla de la charca y a lo largodel pastizal halófilo crecen dispersas diferentesespecies. Así, hallamos la acelga marina (Betamaritima), el cominillo marino (Spergulariamarina), el junco de saladar (Juncus gerardii), eljunquillo (Carex sp.), o el malvavisco (Althaeaofficinalis), poblando también este último, elborde este del pastizal, junto a la ribera del arro-yo Guatén. También en esta ribera del arroyo,encontramos numerosos ejemplares de hierba delos cirujanos, (Descurainia sophia) mezclada enel borde del cebadal aclarado, junto a la charca.

En el centro de su cubeta, aparecen algunossalgüeros, es decir, pequeñas depresiones desuelo desnudo, blanquecino por las eflorescen-cias salinas, que se agrieta una vez evaporada elagua del humedal. En uno de estos salgüeros,situado al este de la charca, aparecen dos espe-cies ruderales que toleran distintos grados desalinidad, de este modo, en la orilla del salgüerodescubrimos el armuelle silvestre (Atriplex pos-trata), que tapiza el suelo salino. Un poco másalejado al este, sobre un suelo con menor salini-dad, aparece el meliloto de flor pequeña(Melilotus indica).

En el tramo del arroyo Guatén que discurrejunto a la charca, crece una flora de helófitos queañade valor ecológico al humedal salino. Diluidala salinidad del suelo por las aguas de arroyo,podemos hallar tanto especies halófilas, cas-tañuela (Scirpus maritimus), junco marino

(Juncus maritimus), o masiega (Cladium maris-cus), como glicófilas, junco de laguna (Scirpuslacustris), junco churrero (Scirpus holoschoe-nus), o enea (Typha sp.), así como, el carrizo(Phragmites australis) indiferente al grado desalinidad.

Pero, no sólo la vegetación confiere granvalor ecológico a este humedal salino, tambiénla fauna que lo frecuenta. A lo largo de año,numerosas especies encuentran en la salada delGuatén un lugar apropiado donde completar suciclo biológico. Las avefrías (Vanellus vanellus),reproductoras en las inmediaciones, instalan enprimavera su colonia de cría en el prado halófi-lo. Asimismo, otras aves que se reproducen en elarroyo Guatén o en las estepas circundantes, fre-cuentan la salada. Entre ellas, son de destacar lagarcilla bueyera (Bubulcus ibis), la cigüeñuela(Himantopus himantopus), el andarríos chico(Actitis hypoleucos), el carricero común(Acrocephalus scirpaceus) y el carricero tordal(Acrocephalus arundinaceus), asícomo, dosespecies amenazadas, el aguilucho lagunero(Circus aeruginosus) y el alcaraván (Burhinusoedicnemus).

A partir del otoño y hasta el comienzo de laprimavera, diversas aves sedentarias e invernan-tes se alimentan y buscan refugio en la salada,destacando por su escasez en la península ibéri-ca el sisón (Tetrax tetrax) y la agachadiza chica(Lymnocryptes minimus).

Mamíferos como el conejo (Oryctolaguscuniculus) y la liebre ibérica (Lepus granaten-sis), se han establecido en este humedal, cons-truyendo en él sus vivares o son visitantes asi-duos, acudiendo a pacer al pastizal halófilo, aalimentarse con la sal depositada en los salgüe-ros, a delimitar sus territorios, etc.

LACONSERVACIÓN DE LOS MEDIOS SALI-NOS Y SU VEGETACIÓN ASOCIADA.

La dificultad que presentan los suelos salinospara la agricultura, los ha salvaguardado de ladestrucción y el deterioro hasta hace pocas déca-das. Las desecaciones, por motivos de insalubri-dad en un primer momento, y posteriormente lastransformaciones agrícolas de zonas semiáridas,con la instalación de regadios de dudosa rentabi-lidad, han originado que de un total de 67’43Kms², se conservasen hasta principios de

Boletín 16

37

Page 38: Boletin 16

los años noventa 52’12 Kms², es decir, el 70% delos suelos salinos ibéricos, aunque en gran partese debe a la supervivencia de las dos grandeslagunas salinas ibéricas, Gallocanta y Fuente dePiedra. Más vulnerables, los pequeños humeda-les salinos han sufrido con mayor ímpetu lainfluencia antropógena, habiendo desaparecidoun 16%, estando el 35% muy deteriorados.

Con el propósito de preservar estos peculia-res ecosistemas, la Unión Europea ha recogidoen la Directiva de Hábitats distintos tipos dehábitats salinos que deben ser conservados,como los pastizales salinos mediterráneos conJuncus maritimus, los matorrales halófilos medi-terráneos y termoatlánticos con Sarcocornia fru-ticosa, los matorrales halo-nitrófilos ibéricos conPeganum harmala y Salsola sp., los pastizalessalinos continentales con Puccinellia distans, lasestepas salinas con Limonium sp. y los estanquestemporales mediterráneos, estos tres últimos deforma prioritaria.

También algunas Comunidades Autónomas,como Castilla-La Mancha recogen en su legisla-ción ambiental (Ley 9/1999) estos ecosistemas,protegiendo de forma especial las“Comunidades halófilas terrestres o acuáticas” ylos “Humedales estacionales o permanentes”,estando diversos humedales protegidos legal-mente en el ámbito regional, comunitario e inter-nacional.

La Comunidad de Madrid también ha prote-gido algunos humedales salinos, como la ante-riormente mencionada laguna de Las Esteras, enColmenar de Oreja y el Mar Ontígola, enAranjuez, al incluirlos en el Catalogo Regionalde Humedales, además este último forma partedel “Espacio Natural de El Regajal-Mar deOntígola”. Pero, no basta con la declaración deunos pocos enclaves, para conservar eficazmen-te toda la riqueza ecológica que encierran loshumedales endorreicos hay que considerar laprotección y conservación de la totalidad, asico-mo, del entorno asociado a ellos.

De esta manera, multitud de humedalesmadrileños endorreicos, se encuentran en unestado de abandono por las administracionescompetentes a pesar de su gran valor ecológico,desapareciendo progresivamente por el desarro-

llismo. La urbanización del complejo palustre

salobre de Los Estrágales, en Pinto, es un ejem-plo evidente.

No muy lejana de Los Estrágales, la saladadel Guatén permanece ignorada a la espera demedidas conservacionistas que la salven deldeterioro o de una inadvertida destrucción. Paraello, es esencial que las medidas conservacionis-tas que se pusieran en practica, estuvieran res-paldadas por la protección legal de este humedal,protección que debe extenderse a todos lospequeños humedales madrileños.

Respecto a la protección legal de especies, laUnión Europea ha recogido en la Directiva deHábitats solamente siete especies de plantashalófilas ibéricas, veinticuatro Castilla-LaMancha y únicamente tres la Comunidad deMadrid, siendo innegable la necesidad de noesperar más para ampliar los inventarios deespecies protegidas.

Salvar los humedales salinos ibéricos y susplantas halófilas asociadas, de los múltiples pro-yectos desarrollistas que los degradan o hacendesaparecer resulta cada día más urgente, pues apesar de contar con los suficientes valores ecoló-gicos, estos son menospreciados habitualmente.Buen ejemplo de ello, es la elección del comple-jo palustre de Los Estrágales, anteriormente cita-do, para desarrollar en él grandes proyectosurbanísticos o los grandes planes de regadíos delas comarcas de Los Monegros (Zaragoza-Huesca) y de Alcañiz (Teruel), que afectan anumerosas lagunas endorreicas salinas y parajesesteparios de gran importancia ecológica.

La divulgación de los valores ecológicos deestos humedales y de sus plantas halófilas resul-ta imprescindible para conservarlos, por ello,animamos a los socios y amigos de ARBA aconocerlos y darlos a conocer. Desde el GrupoEspliego, os proponemos la realización deexcursiones para visitar con nosotros la mencio-nada salada del Guatén.

Boletín 16

38

Bibliografía.CASADO, S. MONTES, C. (1991).

Problemas de conservación de los humedalesespañoles. Revista Quercus. nº 66, pp 22-26.

MAESTRE, F. (1998). Adaptaciones de lasplantas ibéricas a los suelos salinos. RevistaQuercus nº143, pp 19-22.

Page 39: Boletin 16

Boletín 16

39

E l que j i go de a l ta montaña ,

un relíctico climático

Andrés Revilla Onrubia

“Como los pastores viejos, ellos le enseña-ron también muchas cosas, entre otras aapreciar el valor de los árboles, el porte delos pinsapos, a respetar a los tejos aunque nofuera nada más que por su edad y a fabricarun aguardiente que llevaba endrinos comohacían en el Norte:—¡Qué bien me vendría un traguillo ahora!Si no estuviera tan lejos iría a la choza deFrasquito el Guarda, beberíamos juntos ynos fumaríamos un cigarro de tabacogordo,esa mata que sólo él sabe donde está, y siFrasquito no estuviera en su choza, noimporta, me tiene dicho dónde guarda labotella.¡Cuántas veces les había dicho a los cabreros de Tolox que se equivocaban al quitar los pinsapos delas Plazoletas de Los Quejigales! Pero ellos con su idea de conseguir más pastos y bellotas sólo deja-ban los quejigos. “¡Si hasta quitan los agracejos!”, que ya casi no encontraba ni matorrales quetuvieran frutos con los que hacer el jarabe para los constipados de los niños del pueblo. Si hubierapinsapos podría cobijarse bajo su tronco que con las ramas bajas forma como un chozo donde nohace ni frío en los temporales de nieve. ¡Cuántas ventiscas y nevadas tenía pasadas pegado a losgrandes troncos!Está como aturdido y tiene sueño. Nota cómo se le van a helar los miembros.”…………“Cuando abrazó el corpulento cuerpo se dio cuenta de que era un quejigo helado y seco.Andaba sin rumbo tratando de mantener una línea recta, aturdido y con sueño. Sólo se daba cuentade que estaba descendiendo. Tropezó y rodó por la pendiente entre la nieve. Hacía tiempo que no lepreocupaban las ovejas. Sólo esperaba llegar al cortijo de Las Tablas, el situado a mayor altitud queestaba habitado. Allí encendería fuego. Si llegaba, podría sobrevivir.”

Fragmento del libro de Andrés Rodríguez, “Felipe el Siete”. Colección Paisajes y pasajes de la Serranía de Ronda.

Quercus faginea subsp. faginea =Quercus alpestris (Boiss.) Maire

Page 40: Boletin 16

Puede que se trate de uno de los árboles másraros y escasos de la Península Ibérica y tambiénde los más amenazados de extinción a corto plazo.

El Parque Natural Sierra de las Nieves, decla-rado por la Unesco Reserva de la Biosfera, sehalla en plena comarca natural de la Serranía deRonda, en la provincia de Málaga. Este territoriomontañoso está recortado por profundos barran-cos y tajos espectaculares como el de la Caina,con más de 100 m de caída. También, y debido ala naturaleza caliza del suelo se originan simascomo la Gesm, la tercera en pro-fundidad del mundo con sus 1.100m. La mayor altitud se alcanza enla Torrecilla (1.919 m), en laSierra Blanca de Tolox.

En cuanto al quejigo, estaespecie ha sido talada de formaabusiva durante largo tiempo ysustituida por pinares procedentesde repoblaciones. Sin embargoquedan algunos bosques en LaTorrecilla y en el monte «LosQuejigales».

Estos quejigos son un ecotipo(forma genética) muy localizadode Quercus faginea subsp. fagi-nea. Se los puede encontrar en Norte de África yen la Sierra de Las Nieves, destacando los queji-gales de Tolox. Se desarrolla a 1700 m de altitudy está formado por 18 pequeños grupos de vetus-tos árboles retorcidos por el frío y la nieve, con

alturas de 8 a 15 metros. Son ampliamente cente-narios, pues su grosor lo han alcanzado durantelos escasos meses de desarrollo vegetativo quepermite la alta montaña. Los mayores ejemplaresson los de la zona de Cerro Alto y el de la Cuevadel Oso. Debido al clima y al fuerte pastoreo deovejas y cabras no hay regeneración ninguna, porlo que las esperanzas de perpetuar el quejigal sonescasas.

Presentan unas hojas muy coriáceas, abarqui-lladas, con dientes agudos y nervios muy irregu-

lares, no paralelos y con una ter-cera nerviación muy marcada porel haz y envés de tomento corto;fruto todo ello de su adaptación alfrío del lugar.

Los matorrales que acom-pañan a la población son los pul-viniformes propios de las sierrasbéticas y otras especies de mon-taña: Juniperus sabina, J. nana,Erinacea anthyllis, Prunus pros-trata, Hormatophylla spinosa,Astragalus sempervirens subsp.nevadensis, etc. La curiosa asocia-ción fue estudiada por Ceballos yVicioso en los años treinta. Ellos

interpretaron la presencia de estos quejigos comoun resto de un pasado de clima más benigno.Aparecen también algunos arces, tejos y mosta-jos.

Se encuentran protegidos por la Junta deAndalucía bajo elDecreto 104/1994 de10 de mayo queestablece elCatálogo Andaluz deFlora SilvestreAmenazada. Alamparo de estedecreto se han reali-zado planes de rege-neración que hasta elmomento no hansido muy exitosos.

Para visitar lazona se puede con-tactar con laAsociación de

Boletín 16

40

Page 41: Boletin 16

Senderismo Pasos Largos ([email protected]) Aprovechar para visitar el Castañosanto de Istán. Auténtico monumento naturalsituado en la cuenca del Hoyo del Bote. Ejemplarúnico de unos 500-800 años y declaradoPatrimonio de la Humanidad. A 1,30 m del sueloel perímetro es de 15 metros mientras que a ras desuelo roza los 22 m. Tiene una altura total de 24,5m mientras que la altura del fuste es de 2,5 m. Eldiámetro de la copa es en la dirección N-S de27,40 m mientras que en la dirección E-W es de23,70 m. El área proyectada de la copa es de510,02 m2.

Cuenta la leyenda que en los montes en que sehalla este árbol centenario proliferaron grandeshazañas a lo largo de la Historia. Entre ellas pode-mos destacar la rebelión de Sierra Bermeja en losalbores del siglo XVI, cuyo testigo más represen-tativo fue el denominado Castaño Santo, bajocuyas ramas el rey Fernando el Católico celebróuna misa de acción de gracias, allá por 1501.(www.istan.es)

Foto tomada de (www.istan.es)

El quejigo en ÁfricaJesús Charco (Guía de los árboles y arbustos

del norte de África) nos da cuenta de la presenciaen las montañas próximas a Xaüen (Kelti, Tazaot,Lakrâa) de ejemplares que superan los 25 metrosde altura. Con estos datos se puede afirmar quehablamos de un ecotipo bético-norteafricano.

Boletín 16

Cirios de la carretera

41

Manolete si no sabes podar para que te metes.Es verano, el calor del asfalto agobia, y uno ala espera de algo que refresque el ambiente,pero nada, y de repente zas, una agresión a lavista: los cirios de las carreteras.Hay podas que son realmente mutilaciones.

La religiosidad del gobierno de laJunta de Castilla y León es tal que loscirios los colocan en cualquier lugar.

Simón Cortés

Page 42: Boletin 16

Boletín 16

El tablón de naticiasE n e s t a s e c c i ó n n o s p u e d e s m a n d a r l o s r e c o r t e s

d e n o t i c i a s q u e t ú c o n s i d e r e s i n t e r e s a n t e s

DESCUBERTO UN HÍBRIDO ENTRE CARBALLO ANANO E CARBALLO

Xabier Vázquez Pumariño

No coruñés concello de Carnota atopamos unha pequena poboación de carballo anano(Quercus lusitanica), unha auténtica rareza no noroeste da Península Ibérica pois é

característico do sudoeste da Península e do Norte de África. Debido ao seu aillamento eao exiguo das súa poboación galega, esta especie está a atravesar por serias dificultadesde conservación tendo en conta que o seu hábitat está seriamente maltratado por incen-

dios, cultivos forestais de especies exóticas e pistas sen control, sen que ningunha admi-nistración faga realmente nada por velar por esta pequena xoia botánica en Galiza.

Un grupo de botánicos da Universidade de León (véxase: F. Llamas, C. Lence & C.Acedo. 2003. Una nueva nothoespecie de Quercus L. (Fagaceae) en el NO de España.Lagascalia, 23: 85-90) ven de descubrir que esta especie hibrida precisamente co carballo(Quercus robur) dando lugar a un híbrido denominado Quercus xgallaecicus que seríaexclusivo deste lugar. Por unha banda supón unha confirmación da necesidade de conser-vación desta orixinal poboación de carballo anano, moi alonxada dos seus restantes núcle-os, e ven a alertar sobre a ameaza que supón a introgresión por hibridación con outrasespecies do xénero. É un bo momento para reclamar ás administracións que tomen asmedidas oportunas para a conservación da especie e o seus orixinais híbridos.

leído en: cern@ dixital, nº 3 (40) inverno 2003 Revista Galega de Ecoloxia e MedioAmbientewww.adegagaliza.org

SS oo cc ii oo ss

En los tiempos que corren, el arranque o tala deun árbol o alguna de sus partes sólo puede deberse a la acciónde un inconsciente o de algo mucho peor; un arboricida.

frase

42

Page 43: Boletin 16

Boletín 16

43

PPOOEESSIIAA

El cielo vestido de ceniza, y el alma enlutada de tizones.

¿Qué quedará? ¿Un desierto? ¿Una puerta al infierno?

Los días pasarán, pero no el olor a resina muerta. Los días pasarán, pero no las lágrimas de los corzos.Los días pasarán, pero no el eco del roer de la carcoma fosforescente.

El cielo se saturó de pavesas, y los ojos se llenaron de miedo.

¿Qué haremos? ¿Devolver el bosque al mar? ¿Podremos?

Los sueños se derramarán por el brasero en busca de la nada.Los sueños se convertirán en gritos contenidos.Los sueños no aliviarán ya al viejo pastor que mira las estrellas.

LOS TRINOS DEL VERDERÓN SE HAN CARGADO DE RUMORESAGUARDENTOSOS. EL CROTOREO DE LAS CIGÜEÑAS SUENA SINIES-TRO, ENLOQUECIDO, INCESANTE. EL ÁGUILA VE COMO ARDEN LASPLUMAS DE SU COLA. LO VERDE AHORA ES NEGRO. LO AMARILLO ESAHORA PARDO. LO AZUL PROFUNDO CUAJA LA TRISTEZA DE LOSCHOPOS SOLITARIOS, YA SIN COMPAÑEROS.

El bosque vestido de luna, y las manos doloridas e impotentes.

¿Quién nos explicará por qué tanta muerte, tanto Apocalipsis?

Los ríos volverán a regar las tierras calcinadas.Las lluvias volverán a empapar los restos de la pira.Las nieblas difuminarán a los espectros de los árboles.

Las piedras lloran de impotencia, son ya viejas y tienen demasiados recuerdos.

La noche cubrirá el espectáculo siniestro.La noche volverá a llenarse del aullido de los cárabos.La noche no será germen de vida en mucho tiempo.

LA CUEVA,... LOS CASARES,... DONDE LOS NEANDERTALES HICIERONSUS HOGUERAS. DONDE ARAÑARON LAS PAREDES CON SUS DIOSESANIMALES,... RINOCERONTE, GLOTÓN, PEZ, ASNO Y LA CONVIRTIE-RON EN SANTUARIO. ¿QUÉ FANTASMA DE TODOS ELLOS VOLVERÁ AEMPUÑAR EL PUNZÓN PARA DEJARNOS EL RECUERDO DE LO QUE SEHA PERDIDO?

Sólo una esperanza: ¡quizá alguien alguna vez podrá fecundar de nuevo la tierracon sus lágrimas y el viento avente el humo! Así sea.

Juan Ignacio Cuesta, 21 de julio de 2005

HUMO

Page 44: Boletin 16

Durante los meses de otoño e invierno delosaños 2004 y 2005 nuestra asociación ha llevadoa cabo una intensa campaña de repoblaciones.Estas han sido posible gracias al trabajo y apoyoque la asociación recibe desde el primero alúltimo de sus socios, desde el primero al últimode sus amigos, aportando cada uno su grano dearena, unos sus cuotas, otros organizando acti-vidades o participando en ellas, pero todos deuna u otra manera apoyándolas.

También queremos agradecer a todas aque-llas organizaciones hermanas con las que hemoscolaborado o trabajado en esta campaña u otras,que hallan confiado en nosotros, y felicitarlespor la importante labor que desempeñan en ladefensa de nuestros ecosistemas vegetales.

Para que tanto trabajo no se quede en el tin-tero, o en el mejor de los casos, en la memoriade aquellos que lo realizaron, sin que trasciendaal resto, lo recogemos en esta memoria con elfin de compartir la satisfacción que suponehaber dejado en el monte miles de plantas ysemillas, esperando que el día de mañana, si noson nuestros ojos, sean los de otros, vean lalabor desempeñada por tantos y tantos defenso-res de los bosques.

Describimos algunas de las actividadesdesarrolladas el pasado otoño – invierno inscri-ta en la campaña “un millón de bellotas paranuestros campos y montes”. En total se consi-guió plantar algo más de 250.000 bellotas dedistintas especies, y este año seguiremos con la

campaña hasta conseguir ese millón.

Desde Asturias, Guillermo, toda una insti-tución, nos cuenta:

Os paso los datos finales de la campaña deplantación de bellotas 2004-2005 ejecutada estatemporada en el Monte Naranco de Uvieu /Oviedo

15.000 bellotas de Quercus ilex s.l.

1.250 bellotas de Quercus faginea subsp.f aginea

150 bellotas de Quercus suber

Espero que con ello contribuya a disminuiren alguna medida esa cifra que nos hemos mar-cado como gran reto, y si no al menos que cundaejemplo de nuestra perseverancia hasta dondesomos capaces de llegar.

Un cordial saludo arbero.

Desde Pozuelo (Madrid):

A la millonada se suma el Aula deEducación Ambiental de Pozuelo. Van a recogerbellotas de la zona y a plantarlas en el entornode la Casa de Campo y aledaños a Pozuelo.Esperan llegar a muchos miles.

Boletín 16

44

En la sementera

Memoria de la campaña otoño -invierno de 2004 - 2005

Simón Cortés

Page 45: Boletin 16

El grupo GRAMA de Madrid se une a laBELLOTADA:

Este grupo recientemente creado en Madrid(Grupo de Acción para el Medio Ambiente),tiene pensado realizar una gran bellotada el día20 de noviembre, en el Parque Regional delGuadarrama. Una semana antes irán a recoger elmaterial a la misma zona.

Desde el Espinar, Segovia.

Ayer en el Espinar recogí algunos miles debellotas de melojo. Estoy deseando plantarlas.Cogeré algunas más en tanto sigan cayendo delos árboles. De donde las cojo no privo a lafauna. ya que son robles que bordean un picade-ro privado de caballos donde las barren y luegolas tiran a un contenedor. Les he pedido que melas guarden.

Una socia nos escribe: Hace unos días mellamaron mis padres muy “alarmados” diciendoque tenían que plantar un millón de bello-tas!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! Vamos, que ya han empe-zado a recoger bellotas de Gredos. todo porquerecibieron en casa una de vuestras cartas y lotomaron “al pie de la letra”, así que no quieroimaginar cuando vayan al vivero cargados consacos debellotas!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!.

Fueron al vivero, y nos trajeron dos bolso-nes llenos de bellotas de encina. Este año queviene tendremos plantas de encina de Gredospara repoblar media sierra.

Desde Cuenca:

Del millón que se ha propuesto ARBA sem-brar, ¿cuántas le tocarían a Cuenca?. Yo ya andomirando al suelo todo el rato. Ya tengo llenoslos bolsillos de varios pantalones. Va a haberque espabilar porque los arrendajos se estánponiendo las botas.

Desde Madrid:

Podéis poner otras 100 bellotas más para elmillón. Estas las he sembrado en los parterres yparques cercanos a mi domicilio, en lugaresdonde habitualmente no trabajan los jardineros.Si la ciudad va al campo, el campo tambiénpuede venir a la ciudad.

Cáceres: Los mozos y mozas de esta pro-vincia por lo que nos llega parece ser que están“super” lanzados.

En Madrid hemosrealizado en esta semana(25 – 31 de octubre) dosrecogidas de bellotas. Unaen la Casa de Campo,donde recogimos 5000 bellotas de encina y laotra en Matabuena (Segovia), donde recogimosunas 2000 bellotas de robles, además de sem-brar 150 más en una zona cercana, entre zarzaspara evitar el diente del ganado.

Bustarviejo (Madrid): Con unos amigos yen un rato recogimos un millar de bellotas deroble y a su vez plantamos unas 50 a lo largo dela Cañada Real.

El Escorial: Peque ARBA ha plantado 300bellotas de melojo, entre la Fuente de la Teja yel Camino del Arboreto.

Madrid: Plantadas 50 bellotas de encina enlos terraplenes de la M-40 a su paso porVallekas.

Alcorcón: Plantadas 100 bellotas de alcor-noque, recogidas de la mancha de esta especieque aún queda en la zona.

Boletín 16

45

Page 46: Boletin 16

No es mucho, pero menos es nada:Paseaba por el campo y me acordé de vosotros,planté, según recogí en la Encomienda deCastilla, cuatro bellotas de quejigos y dos deencina. ¡¡Ala Simón, descuéntala del millón!!.

Madrid: Poner otras 100 bellotas de encinaen los aledaños de otro parque.

Madrid: Otro socio de arba ha plantadounas 700 bellotas de encina en las afuera de laCasa de Campo.

Valladolid: El 6 de noviembre se sembraronentre 25 personas,1100 bellotas de quejigos enuna ladera cercana a Mucientes.

El sábado 13 de noviembre se sembraron unvertedero restaurado, en Villanueva de Duero,2700 bellotas de encina.

Huesca: Los arberos de esta provincia, hanplantado ya unas 4000 bellotas en diferenteslugares de la provincia.

Talamanca (Madrid): Aquí en Tala, llevoplantadas sólo 42 bellotas de encina aunquetengo muchas más para plantar, ya os irécomentando. un saludito.

Madrid: Un socio ha plantado 200 bellotasde encina en la Casa de Campo de Madrid

Villoslada, Segovia: Un arbero plantó 100bellotas de encina.

Cuenca: La recogida de bellotas que se rea-lizó en cuenca salió la mar de bien, nos junta-mos unas 25 personas, el ambiente muy bueno,los arberos de Cuenca geniales. La lástima esque las bellotas se habían malogrado por faltade lluvia y tan sólo recogimos unas 1200.

Para febrero tenemos pensado ir a ponerlas,pero necesitamos kilos y kilos, ya que, aparte delas repoblaciones que se realicen en Albalate delas Nogueras, Medio Ambiente, nos ha cedidoun terrero para repoblar, que con él, tenemospara cinco años o más.

Víctor desde Albacete: apuntarme las últi-mas de coscoja estas hubo que plantarlas conpico, como los mineros. En total fueron 10000junto a la ermita de Rus(1500 H. de cerros pela-dos y sobrepastoreados con pendientes del 15–25 %(propiedad por tradición de los menoresde 12 años de San Clemente, Cuenca)

Boletín 16

46

Page 47: Boletin 16

Morata de Tajuña: El sábado, día 13 denoviembre de 2004, estuvimos ayudando a laasociación “Ciruelo Rojo”, que trabaja con cha-vales discapacitado, a realizar una repoblaciónen Morata de Tajuña. Se plantó 86 plantones deencinas y coscojas, 130 quejigos, 86 bellotas decoscojas y unas 500 de encinas, además de unos200 quejigos más que cedió Medio Ambiente.El número de participante superó los 70.

Palancares: En la repoblación realizada el14 de noviembre de 2004, se plantaron 100robles melojos (Quercus pyrenaica) y se realizólabores de protección a los castaños ya planta-dos.

La participación fue escasa, 6 personas, seisespartanos, que lucharon como cosacos en con-tra de la pertinaz lluvia que caía.

Palancares empieza a dar sus frutos: Losvecinos de Palancares nos han contado que yaeste año ha ido a recoger castañas de los prime-ros árboles que se plantaron.

Robledo de Chavela: Se van a realizar dosrepoblaciones, una con chavales de un colegio,el día 23 y otra con la cuidadanía el 27 denoviembre de 2004. Convocan el Ayto. ARBA yLa Consejería de Medio Ambiente de laComunidad de Madrid.

Se han llevado del vivero 21 arce de mont-pelier, 250 robles melojos, 10 endrinos y 2majuelos.

Monte Abantos (El Escorial). Participaron300 personas. Se plantó unas 3600 bellotas derobles, unos 200 plántulas de melojos, ....

Losa de la Vera (Cáceres). Pequeña repo-blación en el otoño de 05 en una de las gargan-tas de este pueblo.

FICHA CONTROL DE REPOBLACIONES

Organiza: GRAMA (Jarama Vivo)

Lugar:Huertos de Ocio de Torrejón Caseríodel Henares.

Fecha: 30/01/05

Nº de Participantes: De 75 a 80 personas

Especie Numero Observaciones

Salix alba 30 A raíz desnuda.

Populus nigra 10 A raíz desnuda.

Tamarix gallica 20 A raíz desnuda.

F. angustifolia 140 A raíz desnuda.

Otras observaciones: La repoblación reali-zada el año 2004 está muy bien, ha tenido muypocas marras, ya que este verano se ha regado.Algunos árboles tiene ya un buen porte, algomás del metro y medio.

Los árboles que no tenían protectores esta-ban roído en parte por los conejos, los que losprotectores eran muy bajo tenían roído los bro-tes, y los que estaban bien puestos su estado essaludable.

Organiza: Un socio de ARBA con los/asmozos/mozas del pueblo

Lugar:El Almendral (Salamanca).

Cerca el pueblo.

Fecha: Noviembre de 04

Nº de Participantes: X

Especie Número Observaciones

Quercus ilex 1000 Bellotas

Boletín 16

47

Page 48: Boletin 16

Organiza: ARBA, El Soto, Amigos de laTierra, GRAMA, SEO, Ecologista en Acción.ADENA.

Lugar:Velilla de San Antonio (Día de losHumedales)

Fecha: 05/02/05

Nº de Participantes: Más de 100 personas

Especie Número Observaciones

Salix alba 55 Raíz desnuda

Salix salvifolia 40 Raíz desnuda

Otras observaciones: Además se realizaronotras actividades, visita a la zona, observaciónde aves, juegos con niños....

Organiza: El Soto (Jarama Vivo)

Lugar:Lagunas de Miralrí

Fecha: 12/02/05

Nº de Participantes: 25 personas

Especie Número Observaciones

Zarzas 30 Acodos del vivero

Salix alba 50 De estaquillas, 1 savia

Salix salvifolia 55 De estaquillas, 1 savia

Otras observaciones: En esta zona se realizóhace ya unos 4 ó 5 años otra repoblación. Losárboles que quedan como un 20% están grandí-simo. Sabemos, que los cazadores se encargaronde arrancar y tronchar gran cantidad de los plan-tados.

Organiza: ARBA

Lugar: Albalate de la Nogueras(Cuenca).

Fecha: 19/02/05

Nº de Participantes: De 25 a 30 personas.

Especie Número Observaciones

Quercus ilex 1000 bellotas

Organiza: Peque ARBA

Lugar:Torrelaguna

Fecha: 19/02/05

Nº de Participantes: Unas 15 personas

Especie Número Observaciones

Alcornoque 700 bellotas Micorrizadas Pisuletum

Otras observaciones: Esta repoblación serealiza para tratar de recuperar el alcornocalexistente en la zona, ya que apenas existe rege-neración natural.

Organiza: Secretaría de Medio Ambientede CCOO (Jarama Vivo)

Lugar: Desembocadura delQuiñónez en el Jarama. (Sanse)

Fecha: 20/02/05

Nº de Participantes: Algo más de 50

Especie Número Observaciones

Salix salvifolia 120 De 1 año. 50cm altura

Fresno 50 Una salvia.

Encina 2 En un cerrillo cercano

Otras observaciones: El Ayuntamiento de SanSebastián se gastó en esa zona 900 millones enacondicionarla (de pena) y repoblarla (de asco)entre otras cosas metieron Cytisus scoparius.

Organiza: SCI con planta cedida porARBA

Lugar:Canencia (Madrid).

Fecha: 20/02/04

Nº de Participantes: Estimación de unos 20

Especie Número Observaciones

Roble melojo 45 Una savia.

Acebo 7 2 savias

Roble melojo 1000 bellotas

Boletín 16

48

Page 49: Boletin 16

Organiza: Ayuntamiento de Carabaña yARBA

Lugar:En los cerros de la margen izquierdadel río Tajuña

Fecha: 04/03/05

Nº de Participantes: 32

Especie Número Observaciones

Quejigos 110 Dos savias

Coscojas 1000 bellotas Semillas de Morata

Vivero

Hasta el momento hemos estratificado en elvivero:

1200 bellotas de encina procedente de SanMartín de Valdeiglesias (19 Sierra de Gredos)*

1150 bellotas de encina de la Casa deCampo (28 Cuenca de Madrid)*

500 bellotas de coscoja de Morata de Tajuña(21 Alcarrias)*

1700 bellotas de roble melojo deMatabuena, Segovia (20 Sierras deGuadarrama-Ayllón)*

1200 bellotas de encina de Colmenarejo,Madrid (20 Sierra de Guadarrama – Ayllón)*

1800 bellotas de Velada, Toledo. (30 Tajo-Campo Arañuelo)*

Se han estratificado muchas más, pero lospapelotes donde las hemos apuntado se nos hanperdido. ¡Somos penosos!.

* Regiones de identificación y utilización dematerial forestal de reproducción

Se nos han quedado muchas repoblaciones,y siembras de bellotas en el tintero. La culpa enparte es nuestra, por no haber recogido los datosque nos habéis enviado y en parte es vuestra,por no haber enviado ningún dato.

Boletín 16

49Noviembre 2004. La Morcuera

Page 50: Boletin 16

Boletín 16

España es uno de los países europeos másafectados por los incendios forestales. Segúnestadísticas, en la década de los 90 se produje-ron una media de 18.000 incendios al año, afec-tando a 6,4 millones de hectáreas, lo que vienea representar que cerca del 1% de toda la super-ficie forestal española arde cada temporada.

A los daños producidos en el medio ambien-te, que son incontables, habría que añadir losque se producen entre la población. Según datosdel Servicio de Protección de la Naturaleza dela Guardia Civil (SEPRONA), entre junio y sep-tiembre del 04, fallecieron en España 6 personasy otras 27 resultaron heridas, además, 4.166personas tuvieron que ser evacuadas y 981viviendas desalojadas. Este año su número haaumentado, y hasta el momento de escribir estaslíneas, el número de fallecidos se sitúa en los18, y el número de evacuados se ha triplicado.

En cuanto a su origen, según datos delMinisterio de Medio Ambiente, el 60% de losincendios son intencionados, el 15% se debe anegligencias, un 16% a causas desconocidas, el4% se produce por causas naturales (rayos), un3% a reproducciones, y un 2% a otras causas.Hemos de destacar que del 60% de incendiosintencionados en su mayoría no se investiganlas motivaciones que los causan. Investigarlas afondo ayudaría mucho a prevenirlos.

A pesar de que como hemos indicado ante-riormente en su mayoría no se investiguen porparte de los cuerpos encargados de esa labor,algunas instituciones independientes y gruposambientalistas, han apuntado muchas de esasmotivaciones, lo que ha llevado al gobierno ahacerse eco de ellas y tomar varias medidas parahacer frente a estas catástrofes, algunas decarácter transitorios, como la de prohibir hastael 1 de noviembre hacer fuego en áreas foresta-les y espacios abiertos. Pero tal vez la más

importante haya sido la modificación de la

Ley de Montes, que prohíbe la recalificación deterrenos quemados durante al menos 30 años, yla creación de una Fiscalía medioambiental, asícomo la de un fondo para la gestión sosteniblede los bosques.

A nuestro parecer aunque se ha avanzadoalgo, estas medidas son insuficientes, ya que loque se necesita es atajar de raíz las causas quelos provocan y tener suficiente coraje y volun-tad política, a parte de lucidez, para aplicarlas.

Causas y posibles soluciones.

Quemas agrícolas. Esta es una mala prácti-ca que emplean los agricultores para eliminarrestos de cultivos, de poda o para limpiar setosy lindes. Provoca cada año una media de unos3600 incendios, lo que supone el 19% del totalde los incendios forestales.*

La quena de setos y lindes debería de estarprohibidas por el alto valor ecológico que estosposeen, ya que en ellos se encuentra una buenareserva de especies vegetales, además de ser unhábitat donde multitud de especies animaleshayan alimento y refugio.

Igualmente debería de desecharse las que-mas agrícolas con el objetivo de eliminar restovegetales de la anterior cosecha, y en caso deque estas se produjeran, sería necesario que serealizaran durante los meses de invierno, conpermiso de la autoridad competente y siemprebajo la vigilancia del agricultor autor del fuego,previa labor de arado del perímetro del campode cultivo motivo de esta práctica.

En caso de que no cumplirse esos requisitos,al autor, se debería de aplicar las normas vigen-tes para tal caso(Artículos 351 a 358 del CódigoPenal) y tocarle bien el bolsillo.

Quemas ganaderas para regenerar pastos.Estas son producidas por los ganaderos, para

Causas que provocan losincendios forestales

Simón Cortes

50

Page 51: Boletin 16

eliminar matorral viejo, no palatable para elganado, y general pasto y brotes tiernos. Es lasegunda causas que produce más incendios alaño, 2060*.

Esta práctica es común entre los ganaderosextensivos, y aunque la actual Ley de Montesprohíbe que en las zonas afectada por quemasentre el ganado durante un año, en la práctica nose cumple, bien por dejaciones de los cuerpos deseguridad encargados de velar dicho cumpli-miento, bien por que los organismos con com-petencia en la materia (CC AA) hacen la vistagorda o simplemente para ellos es un temamenor, el cual no les merece un mínimo esfuer-zo.

Todo el mundo de su entorno sabe, puestoque estamos hablando de que estos fuegos seproducen en comunidades pequeñas, quienesson los autores, sin atreverse a denunciarlos,existiendo por lo tanto una tolerancia y compli-cidad social que es necesario desterrar. Laacción de estos empresarios, tanto ganaderoscomo agricultores, supone un fuerte desembolsoen planes de recuperación de la zona afectada,así como en indemnizaciones a afectados, quetenemos que pagar todos. Ya es hora de quedejemos de ver al hombre del campo de manerabucólica, al fin de cuentas él gestiona ese mediocomo una empresa más.

Al igual que en el anterior caso debería deaplicarse tanto la Ley de Montes como la LeyPenal y aumentar en números de años el acota-miento al ganado extensivo de las áreas quema-das.

Incendios provocados por perturbados(pirómanos). Viene a ser unos 1000 al año *, lamayoría de ellos se producen en Galicia, y locurioso de todo es que muchos de ellos sonconocidos por las autoridades.

Quema de basuras. Suponen el inicio deunos 400 incendios al año *. Esta práctica esinadmisible puesto que está prohibido por Ley10/1998 de 21 de abril y Real Decreto1481/2001de 27 de diciembre sobre residuos,pudiendo ser denunciado el organismo o parti-cular de semejante práctica.

Fumadores. Los incendios provocados porel arrojo de colillas o cerillas encendidas vienena ser unos 290 al año *. A pesar de que estáprohibido arrojar colillas o cerillas encendidas,no son pocos los desaprensivos que las arrojandesde el coche, vasta darse una vuelta por cual-quier cuneta.

Es necesario una campaña informativa ysancionadora de esta incívica actitud.

Trabajos forestales. Estos se producen porla quema de restos de podas o desbroce, asícomo por chispas procedentes de los aperos enusanza, motosierras, desbrozadoras, etcétera. Lamedia de incendios al año por estas causas es deunos 240*.

Estos trabajos deberían de hacerse en losmeses menos propicios a incendios forestales.El material sobrante debería de retirarse delmonte para compostaje, o, si no es posible dichaacción, al menos cuando se queme en piras sehaga con la presencia de un camión autobomba.

Rayos. Son los únicos incendios producidospor causas naturales, suponen el 4% del total delos fuegos forestales. Cogidos a tiempo sonfáciles de controlar por la existencia de un solofoco.

Cosechadoras y maquinaria, tendidos eléc-tricos, líneas de ferrocarril, etc. Estas causasprovocan un total de: 506* incendios de mediaal año, repartiéndose de la siguiente manera;219 producidos en trabajos de limpiezas decunetas, caminos, o tareas agrícolas, por salto dechispas o causas parecidas; 172 provocados porel mal estado y mantenimiento del tendido eléc-trico y unos 115 por el ferrocarril.

La solución a estos incendios no es muy difí-cil, basta con que se haga un buen manteni-miento de las infraestructuras existentes y undesbroce de la hierba en cunetas y caminos, asícomo dejar determinados trabajos de manteni-miento para los meses menos proclives a losincendios.

En caso de producirse un incendio por deja-dez de estas labores básicas, las empresas res-ponsables debería de hacerse cargo de los costesproducidos.

Boletín 16

51

Page 52: Boletin 16

Incendios forestales cuyas causas se desco-nocen Los datos oficiales sobre causalidad deincendios forestales son extremadamente preo-cupantes, e indican que sigue existiendo un ele-vadísimo número, lo que pone en evidencia elpoco esfuerzo que se emplea en la investigaciónde las causas y la persecución del delito.

A pesar de que el presupuesto (59.371.600euros) para la Defensa contra IncendiosForestales del Ministerio de Medio Ambientepara el 2005 se ha incrementado en un 1,4%, delos cuales el 65,8% se ha destinado a la extin-ción y tan sólo el 34,2% a prevención, se puededecir que este modelo de estrategia adoptadapara la lucha contra los incendios forestales hafracasado. Además, la notable descoordinaciónentre los colectivos y administraciones queintervienen en la extinción de los incendiosforestales ha determinado una menor efectivi-dad de dicha estrategia.

Pensamos que se debería de cambiar deestrategia y tomar medidas más serias, y no lasque por desgracia se escuchan de la boca dealgunos políticos, verdaderas aberraciones paraen el fondo dejar las cosas como están.

Medidas serias a aplicar.

La creación de un mando único,capaz de coordinar de manera másefectiva a los distintos organismos ycuerpos encargados de la extinción delos fuegos.

Ir poco a poco reduciendo las repo-blaciones forestales monoespecíficas ypirófitas, dejando paso a las especiesautóctonas, más resistentes a la accióndel fuego.

En las zonas donde se compruebeque existe un buen banco de semillas oyemas en el suelo, y que no corran unserio peligro de erosión, se debe dejarque se regenere por si misma, de formanatural, sin la intervención del hombre.Volver a introducir nomocultivos depirófitas significa preparar el terrenospara nuevos incendios.

La nueva Ley de Montes

debería de recoger que los agentes forestalestuvieran la facultad de actuar como policíasjudiciales, investigar y denunciar toda actuaciónque atente contra el medio ambiente.

Se deben modificar los modelos de selvicul-tura preventiva. En general, su práctica actual esmuy agresiva para el medio ambiente, con granimpacto paisajístico y con la única función defavorecer el modelo de extinción y ataque delfuego, el acceso a los montes y el uso de agua.Estas labores de selvicultura preventiva obede-cen simplemente a los esquemas de las empre-sas que las realizan, es decir, mínimo coste,hábitos rutinarios, tratando por igual cualquiertipo de vegetación y empleo de maquinariapesada. Los trabajos más habituales consistenen la apertura y mejora de accesos y pistas, lasquemas controladas y autorizadas producto delos desbroces y podas y la apertura de fajas cor-tafuegos.

* Datos del informe elaborado porWWF/ADENA sobre Incendios Forestales.Junio de 20005. La media se ha sacado desde elperiodo 1991 – 2003.

Boletín 16

52

Page 53: Boletin 16

El género Punica tiene solo dos especies,Púnica Protopunica, que habita solamente en laisla de Socrota, esta en peligro de extinción, y elPunica Granatun , el granado, de habito másamplio.

Púnica deriva del latin, el genero es deJoseph Pitton de Tournefort (1656-1708), aun-que se atribuye a Linneo por motivos legales.

Granatun significa granada, abundante engranos.

El genero Púnica se venia separando a unafamilia diferente, Punicaceas, pero una vezdemostrado su parentesco estrecho con lasLitráceas se incluye en la familia de lasLitráceas-Lytraceae.

HISTORIA DEL GRANADO

Ha sido considerado símbolo de fertilidad yal mismo tiempo de la muerte y la resurrección.En el antiguo Egipto era fácil encontrar grana-dos en los jardines. Se encontraron restos degranadas en tumbas de hace 2500 años. El ori-gen del granado es silvestre, con pequeños fru-tos de sabor muy agrio y con mucho menos jugoque los actuales. Pero los hortelanos egipcios lotransformaron en lo que conocemos hoy día.

Los egipcios regalaban granadas como insi-nuación erótica. De origen oriental, los feniciostrajeron el granado cultivado de Persia,Kurdistán o Afganistán (su procedencia exactaes incierta) y lo introdujeron en los países medi-terráneos.

En Oriente, se consideraba a las granadassímbolo del amor y de la fecundidad, también sedice que Eva le dio a Adán una granada y no unamanzana como dice la Biblia, esto puede ser

debido a que el nombre romano del granado,Malun Púnicun: granada, es decir manzana deCartago.

Se conocía y cultivaba en la prehistoria. Semenciona con frecuencia en la Biblia. Los ára-bes lo introdujeron en el sur de España en elsiglo VIII. Desde entonces la ciudad de granadaostenta el nombre del fruto.

En el siglo XIX los médicos ingleses com-probaron en la india su poder tenífugo. Su evo-lución es paralela a la higuera.

El cáliz persistente de los frutos del granadosirvió al parecer de modelo para la corona delrey Salomón, que luego fue copiada por losmonarcas de casi todo el globo.

En el famoso tratado de agricultura romanode Columea se dice que rociando las raíces delgranado con una mezcla de excrementos huma-nos y de cerdo, amasados con orina, se transfor-maran las granadas agrias en dulces.

En el libro de agricultura Árabe andalusí deIbn Al-Awwán (Abu Zacaria, siglo XII) se diceque debajo de un granado no habrá ni insectosni víboras ¿quién lo diría? Cuando vemos a lashormigas pastorear a sus pulgones en las ramasfloridas del árbol.

También se dice que una hermana de Abd´-el-Rahmán el Dájel le envió a Córdoba una gra-nada desde Bagdad o Medina y que las primerasgranadas que llegaron a España procedían de ungranado que había plantado el mismísimoMahoma.

Boletín 16

53

EE LL GG RR AA NN AA DD OO

JuanjoPunica granatun L.

Page 54: Boletin 16

Descripción:

El granado es un arbusto o pequeñoarbolito caducifolio muy ramoso y espino-so de hasta 5m.

Hojas opuestas de 2 a 8 cm. Verde brillante,lustrosas por el haz y con el borde entero.

Las yemas hibernantes son pequeñas, condos pares de escamas externas.

Las flores son hermafroditas, regulares, de3-4 cm. De diámetro, de color rojo vivo, se dis-ponen solitarias o en grupitos de 2-3 en la ter-minación de las ramas, 4 pétalos, o más en lasflores que son dobles, numerosos estambres,con filamentos largos, rojizos y antenas amari-llas, con el tubo del cáliz grande, rojizo y car-noso, en forma de jarra, rematado por 5-8 dien-tes triangulares, con forma de corona, quecorresponde a los verdaderos sépalos, todo elcáliz es rojo vivo y bastante correoso.

El fruto se denomina botánicamente balaús-tra y es de corteza gruesa correosa, amarillentao rojiza, del tamaño de una naranja y está inte-riormente dividido en numerosos compartimen-tos con gajos triangulares.

En el granado silvestre los granos son menosjugosos y de sabor agrio, las cultivadas son desabor dulce y agradable y también hay otras desabor intermedio, agridulces.

Las semillas tienen un embrión recto, conlos cotiledones enrollados en espiral.

Es indiferente a la naturaleza del suelo, leconviene que sea suelto y bien drenado. Es decrecimiento lento y puede vivir varios siglos.Soporta bien el recorte, por lo que se hacen conel magníficos setos. Se multiplica por acodo,renuevos y esquejes plantados en primavera.También puede utilizarse el injerto sobre patro-nes obtenidos de semilla.

Florece en abril, mayo, o junio y madura elfruto en septiembre u octubre.

En España es muy frecuente en las provin-cias del este, sur, comunidad Valenciana,Murcia, Andalucía y Baleares. También es fre-

cuente en linderos de caminos formando setos.

Se asilvestra esporádicamente en forma dearbusto espinoso.

Hay una variedad miniatura que no pasa de1´5m. produce frutos diminutos y se emplea enjardinería o para hacer arbolitos forzados deltipo “bonsái”. Se llama Púnica Granatun cv.“NANA” a si como variedades con flores blan-cas o amarillas o dobles como ya hemos dichoantes.

Usos medicinales

Tradicionalmente fue usado como:

Vermífugo: Se usaba para eliminar gusanosintestinales.

Antidiarreico: Aliviaba los síntomas de dia-rreas y cólicos.

Febrífugo: Regulaba la temperatura corporalhasta niveles normales.

Antivomitivo: Combatía náuseas, vómitos, yasentaba el estomago.

En la actualidad:

Antihelmíntico: Sobre todo para combatirtenias y la solitaria.

Astringente: Cierra heridas y seca supura-ciones.

Acción estrogénica: Existen procesos comola menopausia que desciende los niveles de hor-monas sexuales, como los estrógenos y la pro-

Boletín 16

54

Page 55: Boletin 16

gesterona. Esta planta tiene estructuras que tra-tan de reequilibrar sus valores y aliviar sus sín-tomas.

Contiene:

Taninos

Alcaloides

Derivados estrogenicos

Materias minerales

Efectos principales

Tenífugo

Astringente

Estrogenico

Colorante aromatizante

Partes utilizadas

Los frutos, la corteza de la raíz, y ocasional-mente del tronco.

De las flores desecadas se extraen taninospara curtir pieles y fabricar tintes.

Su madera se utiliza en marquetería, parafabricar bastones, mangos de paraguas, etc.

Preparados y aplicaciones

Decocción de la raíz

Coger 60g. de la corteza de la raíz o troncoy macerar durante 24h. en ½ l. de agua. Hervirhasta que quede reducido a la mitad. Tomar enayunas, a intervalos de 15m. y 1 ½ h. después,administrar una infusión purgante para eliminarla tenia. (no mata los parásitos, los paraliza)

Decocción de los frutos

Coger 30g. de la corteza de los frutos por l.de agua, hervir 10m. Tomar de 3 a 4 tazas al día.Efecto astringente y estrogénico. Tambiénhaciendo gárgaras ayuda a curar llagas y ulcera-ciones bucales.

Jarabe de granadina

Con el jugo de los frutos. Como acciónestrogénica . También da color, dulzor y enmas-cara aromas.

Advertencias

La corteza está contraindicada en el embara-zo, lactancia, niños menores de 5 años, personasdepresivas, nerviosas y/o enfermas. Porquepuede producir intoxicaciones e intolerancia porlos alcaloides que contiene. Usar bajo controlmedico.

Boletín 16

55

Page 56: Boletin 16

Boletín 16

La Comunidad de Madrid ha impulsado elproyecto denominado “Bosque Sur”, el cual seimplantará en los municipios deArroyomolinos, Móstoles, Alcorcón Leganés,Fuenlabrada, Getafe, Parla y Pinto, abarcando2.900 Ha. de superficie, donde serán plantadosunos 2.300.000 árboles y especies vegetales yserán construidas infraestructuras viarias y deocio.

Iniciada la primera fase del proyecto con laplantación en Leganés de los primeros árboles,el Grupo Espliego de ARBA (Asociación para laRecuperación del Bosque Autóctono), deseahacer llegar a los habitantes de dichos munici-pios una versión distinta de un proyecto que sepresenta engañosamente como “ecológico”, elcual acabará sin rubor, de forma drástica y defi-nitiva con la Naturaleza del sur madrileño.

Los importantes valores naturales y cultura-les de los municipios del sur de Madrid, sonsilenciados por las administraciones competen-tes, trasladando a los ciudadanos la idea de quela Naturaleza de sus municipios se reduce a losparques y jardines, considerando interesada-mente a los campos, a la Naturaleza real comosuelo, dinero, materia de especulación.

“Bosque Sur”, es la compensación “ecológi-ca”, la artimaña perfecta, a cambio de arrasarmiles de hectáreas de vida silvestre, de valiososhábitats, desde estepas cerealistas, bosquetes,

arroyos y humedales estacionales, pasando

por inmemoriales cañadas, hasta retamares, oli-vares, etc., desbordantes todos ellos de flora yfauna silvestres, protegidas legalmente, ademásde yacimientos arqueológicos y paleontológi-cos, junto a elementos culturales y etnológicos,que serán sepultados en el olvido, con la inva-sión urbanística de la comarca.

La antes ininterrumpida Naturaleza del surde Madrid, será definitivamente transformadaen una sucesión interminable de carreteras,urbanizaciones, centros comerciales, etc. queunirán consecutivamente los municipios afecta-dos, que acabarán siendo simples barrios deMadrid capital asfixiando la calidad de vida,creando nuevas necesidades consumistas.

Asimismo, consideramos pretencioso apli-car el calificativo de “bosque” a un proyectoconcebido realmente como un mero parqueurbano, ya que, un bosque es un ecosistema nat-ural, fruto de cientos o miles de años de com-plejas relaciones ecológicas, productor de múl-tiples formas de vida, por lo que resulta vergon-zoso pretender vender a la sociedad la idea del“bosque del sur de Madrid”.

Así, esta bucólica idea carece de credibili-dad desde que fue proyectado como una segun-da Casa de Campo, como un gran espacio parael ocio de la considerable masa de ciudadanos,que se ambiciona para el sur madrileño. Noindica lo contrario las infraestructuras viarias yde ocio que se desean desarrollar.

"Bosque Sur" , o e lF i na l de l a Natura leza

de l Sur Madr i l eño.Por el Grupo Espliego

56

Page 57: Boletin 16

El planteamiento aparentemente “ecológi-co” del parque, no se traduce en la practicaal emplear por un lado especies no autóctonasde la zona, como la encina costera (Quercus ilexilex), el quejigo (Quercus faginea) o elmadroño (Arbutus unedo). Por otro lado, la dis-posición de la vegetación en hileras, en grandensidad y comprimida, se parece más a unordenado vivero forestal, que a la estructura deun verdadero bosque.Más grave e indignante,resulta la utilización ilegal de árboles adultos nocultivados, descuajados del monte, como elmadroño o el alcornoque (Quercus suber), queesta empleando la Comunidad de Madrid alestablecer este parque urbano, colaborando así,en la destrucción de los auténticosbosques.Podemos estimar, que en torno al 50%de dichos árboles extraídos del monte acabansecándose, como ya está ocurriendo con losmadroños.

La inclusión en este proyecto de ciertosespacios de gran valor natural, que debían deestar protegidos legalmente hace tiempo, comoson el Cerro de La Cantueña, en Parla y el Cotode Franco, en Móstoles es una contradicción“ecológica” más de “Bosque Sur”, ya que suimplantación no favorecerá el mantenimiento dedichos valores naturales, sino que supondrá supérdida definitiva.

En la misma línea de conservación de laNaturaleza del sur madrileño, la Consejería deMedio Ambiente y Ordenación del Territorio,prevé desarrollar además “Bosque Sur” en elárea de influencia o incluso en el interior deespacios naturales protegidos, concretamente enla zona comprendida entre la Cañada RealGaliana y el límite con el Parque Regional delSureste, al noreste de Pinto (emplazamientoeste, cercano a una de las Reservas Naturales desusodicho Parque Regional) o en el tramo bajodel Aº de los Combos, en Arroyomolinos, elcual penetra en el Parque Regional del CursoMedio del Río Guadarrama.

Ofrecemos alternativas, la posibilidad realde no destruir la comarca y sí de conservarla, deconocerla, de vivir la Naturaleza a pocos metrosde nuestra casa, participando en un proyectoeducativo personal que nos haga conscientes de

los valores que nuestra tierra atesora y la posi-bilidad de disfrutarlos.

Colaborar en la restauración forestal de loscauces fluviales, vías pecuarias, bosquetes ymontes de la comarca, pero conservando los pri-vilegiados ecosistemas esteparios; reconstru-yendo elementos tradicionales y culturales denuestros paisajes como son, pozos, albercas,acequias, norias, hitos y construcciones rurales;fomentar el empleo de las vías pecuarias parausos ganaderos y de ocio; inventariar los árbo-les sobresalientes de la comarca; estudiar loshumedales estacionales que alimentan la vida deaves, anfibios y flora singulares; crear aulas alaire libre que completen de forma práctica losestudios académicos, proporcionando saber yafecto hacia el legado de la tierra; crearpequeños viveros forestales en cada colegio einstituto, donde además de aprendizaje y res-ponsabilidad por el cuidado de los seres vivos,se tenga un suministro de plantas y árboles ver-daderamente autóctonos para propagarlos en loshábitats más adecuados; crear y participar enproyectos de conservación de la fauna silvestrede la comarca, etc., en suma, participación detodos para conocer nuestra Naturaleza, prote-gerla en la práctica y disfrutarla sin largos des-plazamientos, grandes presupuestos y merma derecursos.

Boletín 16

57

Madroño (Arbutus unedo)

Page 58: Boletin 16

El REGISTRO SISTEMÁTICO DE LOSTEJOS SILVESTRES de un área geográficadeterminada (península, archipiélago, país,región o comarca) con tales procedimientosconlleva, al menos, como se sabe, tres fases: 1ª)Localizar las noticias sobre los tejos que existeno han existido en el área de referencia. 2ª)Buscar la planta –y en su defecto el hábitatdonde estuvo2– sobre el terreno. Y, 3ª) Integraren conjuntos más amplios los estudios parcialeso locales de que se disponga en cada momento.

Introducción

Simón CORTÉS y otros (una treintena decolaboradores) nos ofrecieron hace unos años(2000) un estudio de conjunto sobre esta conífe-ra3 verdaderamente extraordinario: científica yculturalmente documentado, animoso, entusias-ta, dirigido hacia su profundo conocimiento yconservación. (Un estudio que continúan per-feccionando de cara a próximas ediciones). Tresaños después, Juan Manuel APARICIO ROJOpublicó en ARBA4 un artículo titulado “Notassobre la distribución del Tejo (Taxus Baccata,L.) en la provincia de Castellón”, que es asimis-mo excelente: modélico en su género. Si, poco apoco, “sin prisa pero sin pausa”, se hicieran tra-

bajos como éste para las distintas comar-

cas, provincias, regiones o nacionalidades, opara cualquier otro ámbito geográfico a consi-derar, y si se integrasen después en estudios deconjunto, el registro o catálogo de los tejos sil-vestres del área de referencia estaría casi con-cluido. Mientras tanto, las noticias documenta-das sobre los tejos que son o han sido, los estu-dios locales de ámbito reducido y los enfoquescolaterales o complementarios, como el queaquí se sugiere, pueden ir contribuyendo a relle-nar los distintos huecos observables.

¿Porqué el tejo?

El tejo (Taxus Baccata, L.) es una especieprotegida porque está en peligro de extinción ennuestras sierras. Árbol sagrado por excelenciade los celtas, conserva aún su valor emblemáti-co, o por mejor decir enigmático, en algunos denuestros pueblos; en particular en la mitad nortede España.

Sin cuidados humanos, el tejo crece muylentamente en ciertos hábitats adecuados. Seconocen bastantes ejemplares de más de 500años. Algunos superan los dos milenios. Esodicen, al menos.

En principio, toda la planta es tóxica5: flo-res, frutos, hojas, corteza, tronco. En particular,

Boletín 16

58

Topon im ia , eco log í a y botán i ca .La topon im ia de l te jo en i n ternet

En escritos anteriores me he ocupado de ilustrar como puede utilizarse la fitotoponimia, y en par-ticular la toponimia del texo, con el triple propósito de contribuir, aunque sea muy modestamente,por una parte, a la historia de nuestra botánica; por otra, a la intrahistoria de nuestros pueblos o alde-as; y, finalmente, a la conservación y disfrute de la especie que interese.

En esta ocasión me propongo hacer algunas indagaciones sobre cómo podrían utilizarse los datosinespecíficos, almacenados sin orden en Internet, para los fines enumerados, es decir, como materi-al complementario de mapas topográficos, documentos de archivo, libros, etc. sobre el tejo, y, engeneral, sobre cualquier otra especie vegetal1.

Guillermo García Pérez

Page 59: Boletin 16

sus bayas redondas y rojizas suelen ser mortalespara humanos y animales no rumiantes cuandose mastican. Pero, como se sabe, el veneno con-trolado puede ser también beneficioso: el taxol,que se extrae del tejo, se sigue utilizando conéxito para tratar cierto tipo de cáncer.

En realidad el taxus baccata, L. es una coní-fera de hojas aciculares verdinegras (en los másumbrosos) o verdirrojas (en los más resecos oexpuestos al sol). Pero pueden aparecer tambiéncon un porte semejante a un nogal (ejemplaresmilenarios) o como un simple arbusto (ejempla-res jóvenes o arruinados). En general, en cuantoconíferas, ofrecen en el monte a primera vistaun aspecto intermedio entre el pino negrillojoven, frondoso, el sabino o el enebro jóvenes.En algunas regiones del País Vasco, se le llamaincluso sabina6. Y en Asturias puede aparecercomo “enebro”7

Búsqueda de huellas toponímicas del tejo

Encontrar tejos en el ordenador resulta tancomplicado como hallarlos en el campo. Porconsiguiente, para controlar las huellas precisasde la toponimia del tejo en el moderno aparatohay que seguir estrategias y tácticas de búsque-da tan complicadas como para conseguir encon-trar el árbol, el rodal o la tejeda (tejera, teixar,etc.) en el monte (o bien, en su defecto, su hábi-tat), una vez que se ha detectado el fitotopónimoen el archivo o en el mapa general y se ha logra-do ubicarlo de un modo aproximado en el mapatopográfico más detallado de que se disponga.Buscar un tejo en un bosque, sin indicación nimétodo alguno, es equivalente a buscar unaaguja en un pajar. Preguntar, por tanto, al orde-nador por un tejo, a palo seco, no da ningúnresultado práctico, a nuestros efectos. No pare-ce útil entrar aquí ahora en la descripción ycomparación sistemática de las distintas tácticasy estrategias de búsqueda. Me limitaré, pues, aindicar qué es lo que he hecho yo. A título demero ejemplo, por supuesto, y por si le fueseútil a alguien para algunos casos similares con-cretos.

Si formamos, por un lado, una lista con losnombres de los accidentes geográficos que, porexperiencia acumulada, sabemos que suele ser

congruentes, afines o proclives al tejo (fuente,arroyo, barranco, desfiladero, cueva, peña, pico,etc.), y, por otro lado, una relación de los nom-bres con que puede aparecer el tejo (tajo, tejo,teja, tello, tejeda, tejera, etc.) en el área en estu-dio (la península Ibérica, por ejemplo), y si cru-zamos a continuación ambas listas, obtendre-mos un marco de referencia apropiado parapasar a la siguiente secuencia. En principio, estemarco puede arrojar más de mil expresiones otópicos a considerar, tales como, por ejemplo,“Fuente del Tejo”, “Arroyo de la Taja”, “Peñadel Tejo”, etc.

Ahora bien, hay que tener en cuenta tambiénque en la península Ibérica se hablan o hanhablado más de una docena de lenguas o idio-mas diferentes (euskera, ibero, iberovasco,celta, fenicio, griego, latín, germánico, árabe,beréber, portugués, gallego, bable, castellano,fabla üey, catalán, valenciano, etc.), más lascorrespondientes derivaciones regionales olocales. Y, además, que todas estas lenguas yhablas afectan a la toponimia, tanto en lo que serefiere a la denominación, originaria o deforma-da, de los accidentes geográficos como en loque atañe al árbol, rodal, bosque o arboleda queestemos considerando.

Las traducciones o calcos, sean cultos opopulares, de ambas series de términos, la sino-nimia y la homonimia incrementan aún más lacomplejidad de los datos a manejar. Así, porejemplo, tejeda suele aparecer en el SistemaCentral y en Andalucía como tejera, voz que, enprincipio, remite al alfar (tejar) donde se fabricala teja (tegula en latín). Taxo, tajo, al parecer laforma más extendida en los reinos de Castilla yAragón en los siglos XV y XVI, remite unasveces al árbol y otras (cada vez más a medidaque pasa el tiempo) a hendidura, desfiladero,garganta (Tajo de Ronda, etc.). Taxa, taja, puedeser tejo-hembra o una simple tabla con diversosusos (cortar, lavar, etc.). Sucede lo mismo contejonera que, en principio, remite al tejón,mustélido que se llama también taxu en la len-gua de Ennio, Horacio, Virgilio o Marcial.

Además, la toponimia registrada en las áreaslingüísticas gallega, catalana, etc., puede venirdada en castellano, con independencia de

Boletín 16

59

Page 60: Boletin 16

la lengua que se hable o se haya hablado conanterioridad. Se dan, en efecto, cuidados, respe-tos al vernáculo o al común, así como imposi-ciones, en ambos sentidos.

A todo esto, por si fuese poco, hay que aña-dir que, primero, según es bien sabido, este tipode bases de datos almacenadas en el ordenadorson ocasionales, incompletas, fragmentarias ynotablemente lábiles: lo que hoy está mañana noestá y viceversa. Segundo, que numerosas entra-das aparecen repetidas. Y, tercero, que los pocosdatos toponímicos verdaderamente útiles, parael propósito perseguido aquí, tienen que ser dis-criminados y seleccionados, caso por caso, porel indagador.

Con el fin de que el lector pueda formarseuna idea más concreta de la complejidad delfenómeno a que vengo aludiendo, pondré a con-tinuación una muestra de la variedad de formasen que puede aparecer el tejo en Asturias, esdecir, sólo en la toponimia asturiana:

Tesa, Tesadietsa, Tesu, Texeal, Texeira,Texeo, Texío, Texiu, Texón, Texona, Texones,Texu, Texuca, Teya, Teyao, Teyedal, Teyera,Teyedu, Teyeu, Teyeres, Tiesara, Tiedu, Tiegu,Tilar, Teichas, Teyas, Tixirua, Taya, Taia, Tayu?,Techa?. Y no recoge todas nuestro autor de refe-rencia, según puede verse tanto en los mapaspara excursionistas de los Picos de Europacomo en su propio “Índice de nombres”: Taxa,Tayada, Taye, Techera, Teichera, Teixeru,Teixeu, Teixeo, Teixera, Teixin, Teixois, Teixu,Teso (a veces), Tesón, Texa, Texaal, Texal,Texeal, Texedal, Texeira, Texera, Texeres,Texerielles, Texéu, Texio, Texeu, Texío, Texíu,Texos, Texuca, Teyeda, Teyeras, Tixiu, Tixu,etc.8

Por mi parte, no tengo dudas de que, en loque atañe al progreso del conocimiento científi-co a largo plazo, deberían abordarse proyectosde investigación como el aquí pergeñado paradistintas plantas o, al menos árboles, en toda suamplitud, integralidad y complejidad. Pero,desde un punto de vista “práctico”, a cortoplazo, y pensando además en los costes y rendi-miento cercano del esfuerzo a realizar, parece

más razonable empezar acotando proyectos

menores para casos concretos y zonas geográfi-cas determinadas. Por otro lado, cuando secomparen los resultados obtenidos con los queya se habían conseguido por otros medios(libros, memorias, etc.) se comprobará que no estanto lo que se añade. Pero el trabajo científicosuele ser siempre así: una tarea colectiva a largoplazo, para lo que pueda servir, que a la largasiempre es para muchas cosas, unas conocidas yotras insospechadas9. A veces, las aparienciasengañan. Salvo muy raras y conocidas excep-ciones, el que nos parece hoy que aporta mucho,visto con perspectiva histórica, resulta que“añade sólo un poquito”. Todo ello sin contarcon que, otras veces, se publica sólo para figu-rar, enturbiar y meter ruido en el sistema deconocimiento.

Listas de voces en juego

Las listas de voces que a mí me han pareci-do más interesantes en este caso, reduciendo elámbito al castellano, el catalano-valenciano y elgalaico-portugués son los siguientes:

Accidentes geográficos (sólo en castellano)

a). Hidrónimos:

a.1.) Fuente, manantial, manadero, nacede-ro, ojo.

a.2.) Río, arroyo, arroyuelo, riera, rambla,canal, reguera, regajo, reajo, caz, cacera, torren-te, gavia, cañada, valle.

a.3.) Pozo, balsa, charca, charco, lago, nava,laguna, ibón, presa, embalse, pantano, azud.

b). Orónimos:

b.1.) Tajo, yecla, garganta, gargantilla, paso,gollizo, desfiladero, estrecho, quebrada, canal,congosto, “tubo”.

b.2.) Peña, peñón, guija, guijar, hijar, risca,risco, piedra, cancho, cancha, canchal.

b.3.) Pico, cerro, alto, monte, ladera, loma,cabeza, collado.

b.4.) Cueva, boca, boquerón, sima, foso,fosa.

b.5.) Hueco, hoyo, hoya, hondo, -hondillo, -hondilla, red-hondillo, red-hondilla, val-hondillo.

Boletín 16

60

Page 61: Boletin 16

Especie, fitotopónimos (sólo en castellano).

Individuales:

a.1.) Taxa, taja, taxo, tajo, texa, teja, tesa,tiesa, texo, tejo, teso.

a.2.) Tejilla, tejillo, tejona, tejón, teja vieja,tejo viejo

Colectivos:

b.1.) Tejera, tejeda, tejada, tijera.

b.2.) Taxugueras, tasugueras, tejugueras,tijeras.

b.3.) Tejerizas, tejerillas, tejerina, tejeruela.

b.4.) -tejado, -tejero, -tejoso, -tejerino, -teje-rizo.

b.5.) Mosquito, mezquito, mesquito.10

Cruce de listas de voces

Cruzando las listas anteriores obtendríamos,sólo en castellano y para la península Ibérica,más de un millar de expresiones, tópicos oentradas a considerar. No me es posible desarro-llar aquí y ahora este proyecto en su integridad.Nos limitaremos, por consiguiente, a ilustrar elmétodo esbozado con el tratamiento de un casode cruce de voces que, a la luz de mi experien-cia en estas lides, sospecho especialmente fértil:fuente y tejo.

A partir de estos datos, son los estudiosos yaficionados de cada pueblo, comarca o regiónquienes se tienen que ocupar de llevar a cabo,con las orientaciones ecológicas y los métodoscorrespondientes, las distintas fases a que me hereferido en los primeros párrafos de este artícu-lo. Por mi parte, indicaré al paso, lo poco omucho que haya logrado averiguar sobre algu-nos de los casos o supuestos en juego que, pordiversas razones, me quedan más cercanos.

La Fuente del Tejo

El tejo doméstico puede crecer, en principio,en cualquier jardín. Se dan así, en capitales denación o de provincia, tales como Berlín,Londres, Madrid, Burgos, etc.; en arboretos (ElEscorial, Manzanares y El Paular en Madrid), yen las plazas, parques, iglesias o cementerios de

distintos pueblos. Suele haberlos en los santua-rios11, donde se han sustituido a veces por elciprés (Silos, etc.). El tejo silvestre aparece tam-bién en muy diversos lugares: montañas, llanu-ras, etc.

Desde una perspectiva toponímica, esteárbol resulta más señero y significativo cuandomás aislado y extraño resulta. Sus característi-cas tóxicas y etnológicas, así como su capacidadpara sobreponerse a los siglos, parecen explicarsu particular relevancia toponímica, al menosentre nosotros.

Ahora bien, el texo silvestre que podríamosllamar normal o habitual requiere unas condi-ciones de humedad, temperatura, altitud (depen-diendo de la región), protección, nutrientes, etc.,es decir, un hábitat, que nos orienta muchísimosobre sus posibles ubicaciones concretas. Y esaquí donde el agua (unas veces visible y otrasocultas) y, en particular la fuente (manantial,manadero, nacedero, etc.), adquiere un valorestratégico para nuestros mencionados propósi-tos.

Como es natural, consignaré aquí sólo loscasos que han dado resultados positivos (inves-tigaciones a continuar), aparte errores y omisio-nes propias o ajenas; olvidándome de todo eltrabajo y de toda la ganga o escoria, que quedapor detrás. Por otra parte, mis conocimientosrudimentarios de euskera (algunas voces) no mepermitirían discriminar e interpretar con certezalos topónimos que aparecen en dicho idioma.En consecuencia, limitaré mi sondeo al resto delas lenguas que se hablan hoy en la península

Boletín 16

61

Taxus baccata (Porte)

Foto

:Car

los

Fier

ro

Page 62: Boletin 16

Ibérica. Comenzaré con el castellano y con lasformas más antiguas, que son, sin duda, las quetienen mayor interés toponímico. No he cruza-do, para el caso elegido, todas las formas fitoto-ponímicas que aparecen en la lista; en particularlas de los apartados B.b.2 y siguientes. Y heincluido, como se verá, los tópicos catalano-ara-goneses y galaico-portugueses más importantesa los efectos que interesan aquí:

*

Fuente Taja. Lugar de la Merindad deCampos (ob. de Palencia) en 1362. Fuero deFuentaja (Fontetalia en 1203).

Fuente de la Taja. Se conserva enCamorritos (Cercedilla, M.)

Taja y Fuentetaja. Son apellidos toponími-cos (en lo sucesivo Ap.t.). Se dan en Madrid,Segovia, Navarra, Andalucía, etc.

[Ladera de la Taja]. Se corresponde conFuente de la Taja (Cercedilla).

[Río Taja]. En Campiello (?) y en Teverga(Ast.).

Fontaja. Manresa (B.).

Fuentaja. Apellido toponímico (Ap.t.).

La forma taja se conserva asimismo enPontevedra, Asturias, Granada, Soria(Tajahuerce), Tenerife (La Tajona), etc. Taja yTarek (tejo) se usan como nombres propiosentre los árabes (Irak, etc.). Entre nosotros, esbien conocido Tello.

Fontella. Navarra, Orense, etc., y es Ap. t.

Fontellas. Huesca, Navarra (junto a unMosquera, citado ya en época romana:Muscaria).

Fontelles. Ap. t.

Pero estos casos podrían aludir también a undiminutivo de fuente.

Fontello y Fonteyo son Ap. t., pero salentambién como nombres romanos.

Fuente del Tajo (Tejo en Portugal). EnAlbarracín (Ter.), Linares de Mora (Ter.), y en

La Axarquía (Gr.). [Tajonar], junto a

Pamplona. [Arr. del Tajo] en Villavieja (M.).

Fuentetajo. Ap.t.

*

Fuente de la Teja arroja en junio de 2005(Google) 650 entradas, unos 2/3 de ellas repeti-das. La abundancia de este tópico obliga a haceruna consideración previa. Puesto que esta formapuede remitir tanto a tegula (teja para formarchorro, etc.) como a texa (tejo hembra) pareceoportuno, en primera instancia, tomarlo sola-mente en consideración, para nuestros propósi-tos, cuando concurran las siguientes circunstan-cias:

No hay noticias ni indicios de que hubieseallí una teja significada (tegula), un alfar, etc.

Se trata de un microhábitat propicio al tejo.

Varias capitales y pueblos de España cuen-tan con una fuente o una calle dedicada a la Teja(Madrid, Toledo, Burgos, Soria, Pamplona,Granada, Córdoba, Almería, Leganés,Valdemoro, etc.). Y, en el ámbito campestre,aparece en los siguientes lugares (lista noexhaustiva):

Albacete: Villalgordo. Asturias:Rivadedeva. Ávila: Mijares. Burgos: Peñalbadel Castro. Cáceres: Hervás, Madrigal,Navalvillar de Ibor, Romangordo, Valle delJerte. Cantabria: Presmanes. San Vicente de laBarquera: Boria, Valle de Toranzo. Castellón:Alto Palancia, Sierra del Espadán, Benicasim.Ciudad Real: Villarrubia de los Ojos, Estadosdel Duque. Córdoba: capital, Palma del Río.Cuenca: Pozorrubio. Granada: barrios de lacapital, Alfácar, Bullejos, Cortes de Baza, LasGabias, Guéjar, Huetor-Taja, Nívar, Ogíjares,Otura, Pinos Puente, Sayalonga (Axarquía),Villa de Gor, Víznar. Guadalajara: Peñalén.Huelva: Galaroza. Jaén: Yayyan: Mágina,Pegalájar. Málaga: Archidona, Mijas, Monda,Ronda, Tolox. Navarra: capital, Puerto delPerdón, Castejón. Segovia: San Rafael. Soria:barrio de la capital (camping), Retortillo,Trébago, Valdeavellano de Tera. Teruel:Javalambre, Manzanera. Toledo: capital,Alcolea de Tajo. Valencia: Gandía, Gestalgar, S.de Murta, Rincón de Ademuz, Segorbe,

Boletín 16

62

Page 63: Boletin 16

Sumacárcer, Utiel. Vizcaya: Orduña. Zaragoza:Añón, Calcena.

Grosomodo, en todas esas comarcas se con-servan tejos. Sin localizar: Fuencaliente, Mas deCuevas, prov. de Ávila.

En cuanto a Madrid, de oeste a este y denorte a sur, pueden citarse las siguientes: ElEscorial (sobre el Embalse del Romeral)12,Guadarrama (frente al club de alterne, cerca deltejo del Arr. del Tejo), Cercedilla (Teja en lasDehesas y Taja o Teja en Camorritos),Galapagar-Torrelodones (junto al Arr. de laTeja), Manzanares (nac.oficioso del río delmismo nombre), Miraflores (junto a la Fuentedel Cura), Canencia (en el Puerto: ¿No se refie-re a la de la Raja?), Tres Cantos (junto al CerroTejada, ya incluso en La Reserva de Caza de ElPardo), Nuevo Baztán, además de la capital (M-30, Jardín del Moro). La de San Rafael (GR 88,1.280 m, al S.E. del C. de Fútbol) pertenece aSegovia. Todas ellas están en microhábitats pro-picios o compatibles con el tejo. No he visto lade Torrejón de Ardoz. En la F. de la Teja(Reniega) del Puerto del Perdón (Nav.) novimos indicios de texos. Pero...

Fuente la Texona (o Tejona). En Loroñe (-oña), Ast. [Tejona]; barrio, finca y arroyo enSantander (San Ramón de la Llanilla).

Fuenteteja es apellido toponímico.

Fonte da Telha. Se da en Setúbal (Port.) yen unos montes de Compostela. [Valle] da Telhaen el Algarve. En cuanto a Teha, supongo queremitirá a telha.

Fonte da Tella. En Covas (Coruña)

*

Fuente del Tejo. En este caso lo normal esque remita al árbol. Sorprendentemente, losregistros son mucho más escasos que en lasanteriores (24 registros, 10 útiles, y algunopodría ser repetición de teja). ¿Tienen las tejasmás capacidad de adaptación o supervivenciaque los tejos? En todo caso, son más llamativas.He aquí los resultados netos: Granada: Mojónde La Axarquía con Canillas de Aceituno.Cuenca: Las Majadas. Huelva: S. Mágina. Jaén:

P. N. de Cazorla. Madrid: Puerto de Canencia(¿F. de la Raja?). Sevilla: Carmona. Tarragona:Miravet. Teruel: Alcalá de la Selva, S. deCamarena, Formiche Alto, Las Majadas (?).Vizcaya: Balmaseda. No localizados: Sectororiental del Prebético andaluz.

Font del Teix. A pesar de las apariencias(102 entradas), sucede lo mismo con el singularmasculino en el área catalano-valenciana:

Alicante: Río Guadalert. Castellón:Benifasá, La Jara (La Petralta), monte de estenombre. Tarragona: Matarranyà (Puertos deBeceite), Cardó (“una de las reservas de tejoscentenarios más valiosas de toda Europa”, esdiú), Cornudella de Montsant, Montsiá, Paüls,Rasquera, La Senia (nac. del río). Teruel:Matarraña (Puertos ya en Tarragona). Valencia:La Malla.

Fuente de los Tejos. Huelva: Mágina.Madrid: Bustarviejo, Puerto de Canencia (¿LaFuente de la Raja?).

Font des Teix. Sale una en Baleares, pero esuna S.A.

Font dels Teixets. Tarragona: Cardó yRasquera (tal vez la misma).

*

Fuente de la Tejeda. En Navarra. Está porerror. Es “de la Teja”.

Fuente de las Tejedas. Teruel: Bronchales.

Fuente de la Tejera. Este tópico es muydudoso para nuestros fines: Tejera no remitenecesariamente a tejeda y, por otra parte, parafabricar la teja se precisaba agua. No obstante,en cuanto que sí que interesa: Cantabria:Ongayo. Cáceres: Hervás. Cantabria: Bedoya.Madrid: Belmonte del Tajo, Redueña,Valdepiélagos. Palencia: Frómista. Soria:Cubilla, Golmayo.

Nacimientos de ríos y arroyos

El río Tajo debe su nombre, en mi opi-nión13, a un tejo significado que habría en

su nacedero (Fuentetajo). En Portugal

Boletín 16

63

Page 64: Boletin 16

se llama Tejo (más Alemtejo: allende Tejo, etc.)y en Aragón (donde comienza), en Cuenca,Castellón, etc., el tejo se sigue llamando tajo(taxo). Por otra parte, este nombre era al parecerhabitual en Castilla en la Edad Media.

Según mis referencias, hay o hubo tejos entorno a las fuentes oficiales u oficiosas de lossiguientes ríos peninsulares: Guadalquivir(Cazorla), Darro (Gr.), Manzanares (Mad.),Guadarrama (Arr. Navazuela, 1.760 m), Tejeda(Ter.), Matarranyà (Tarr.), La Senia (Tarr.), y enlas de varios arroyos, rieras, etc.

Con independencia del culto antiguo a lasfuentes, los grandes tejos siguen siendo objetode veneración o reunión en distintos lugares (LaSeca, Otura, Almería, etc.). En algunos casos desincretismo de creencias, se conserva aún laromería, más o menos disfrazada de cristiana.

Registro de tejos

En Asturias, León, Galicia y Portugal lostejos han sido y son aún mucho más abundantesde lo que da a entender esta muestra parcial,pero en la base de datos elegida no he encontra-do más información.

Según esta misma muestra y referencias, seconserva el árbol, al menos, en los siguienteslugares: Balneario de Cardó, Rasquera,Matarranyà.

Pero hay que tener en cuenta que los infor-mantes, generalmente excursionistas u oficinasde turismo, no parecen haberse propuesto con-signar tal dato, salvo en casos muy significados.Habrá, pues, que esperar, en la advertida segun-da fase, a que los aficionados locales apuren, yregistren en lugares apropiados, los datos nece-sarios (fichas más o menos completas, a imita-ción de las del citado APARICIO ROJO) parapoder formar catálogos operativos.

Aunque pueden rebrotar de sus raíces, lostejos desaparecen como consecuencia del pasocentenario o milenario del tiempo, de incendiosde bosques, rayos puntuales, ignorancia o fana-tismo religioso, de reacondicionamientos en

carreteras, plazas o vías públicas, de planta-

ción de pinares, cortas autorizadas o fraudulen-tas del árbol, etc. Y, como ya he mencionado, lesafecta ahora sobremanera el progresivo calenta-miento de la Tierra. En algunos casos están aunvivos en la memoria de los más ancianos dellugar; en otros, sólo queda el topónimo, que,con el paso del tiempo, ni siquiera se sabe yainterpretar.

En las sierras de Madrid y Guadalajarahemos comprobado –en varios pueblos en queexisten aún ejemplares en sus montes– que, per-dida la memoria de los texos, ni siquiera reco-nocen ya su nombre: el tejo evoca únicamente altejón (mustélido), que sí que les resulta conoci-do. Mal se puede proteger, pues, lo que nisiquiera se reconoce. Ni como nombre ni comoplanta. Ahora bien, dejando aquí al margennecedades de personas ignorantes, pero capri-chosas e irresponsables, como las del que, en elsiglo XXI, ha cortado un tallo de tejo parahacerse una vara, junto a la Venta de losMosquitos de Valsaín; la del que ha hecho lomismo con un ejemplar más desarrollado parahacer un juguete “venenoso” a su niña en unaaldea cercana al nacimiento del Duero, etc., etc.;en otros pueblos, tampoco falta quien (¿?) corteclandestinamente tejos gruesos varias vecescentenarios para venderlos a madereros o car-pinteros sin cierta suerte de escrúpulos. Pero,puestos a hablar de escrúpulos o de carencia deellos, los hay de todas clases y para todos losgustos. Es, pues, en este caso, una cuestión desensibilidad personal y educación ecológica.

1 GALMÉS DE FUENTES, Álvaro: Toponimia deAlicante. (La oronimia). Alicante, 1990: “La flora (robledal,castañedo, pinar, etc.) puede servir para definir determina-dos lugares, mientras que la fauna no puede cumplir lamisma finalidad, y ello por una razón elemental: la flora esinamovible, mientras que un lobo o un águila pasan confacilidad de un monte a otro, por lo que no sirven para unaadjetivación particular” (pp. 78). Pero muchas veces, cadavez más, sólo queda el topónimo (El Alcornocal enManzanares R., El Castañar, El Rebollar o las endrinas enQuintanasrubias, etc., etc.).

2 Los tejos desaparecen, entre otras causas (ver másadelante), como consecuencia del aumento progresivo de latemperatura de la Madre Tierra, es decir, como consecuen-cia de la falta de respeto a la diosa que nos da la vida,Naturaleza; la diosa más digna de amor y de veneración que

Boletín 16

64

Page 65: Boletin 16

exista y haya existido nunca en todos los pueblos y culturas.En realidad, ahora se ve más claro que nunca que los pue-blos son tanto más salvajes cuanto menos comprenden ver-dades tan elementales: “No somos señores de la naturaleza,sino sus huéspedes”, se dice en el “Prólogo” de THEWORLDWATCH INSTITUTE: La Situación del Mundo.2005. Redefiniendo la seguridad mundial, Barcelona, 2005,Ed. Icaria. A pesar de la frecuente desaparición del árbol, laidea que ha motivado esta nota sigue siendo importante, aefectos de identificación y reposición, en casos señalados.

3 CORTÉS, Simón, y otros: El libro del tejo, Madrid,2000.

4 APARICIO ROJO, Juan Manuel: “Notas...”, Arba, 12(2003), pp. 11-19 y Arba, 13(2003), pp. 14.

5 La corola carnosa que rodea la baya tiene sabor dulcey es, también en principio, comestible. Conozco hombrestreintañeros que iban de niños a comerse las de cierto tejodel Parque del Retiro de Madrid, junto a la puerta de Sainzde Baranda.

6 MORALES, Ramón et al.: Archivos de flora ibérica,núm. 7. Nombres vulgares, II, Madrid, 1996, s.v. sabina ytaxus.

7 GARCÍA ARIAS, Xose Luis: Pueblos astur. ...,nombres, 1977, p. 163.

8 CONCEPCIÓN SUÁREZ, Julio: Dicc. topon. de lamontaña asturiana, Oviedo, 2001, s.v. Tesa y siguientes.[LUEJE, José Ramón; ODROZOLA, J.A. y otros]: Picos deEuropa, I y Picos de Europa, II, Barcelona, 1992 y 1991,resp., Ed. Alpina.

9 BUNGE, Mario A.: La investigación científica. Suestrategia y su filosofía, Barcelona, 1985, passim. Un libro,por otra parte, que me permito recomendar a todos los gra-duados o licenciados interesados en hacerse doctores enciencias naturales o sociales, medicina, ingeniería, etc.

10 GARCÍA PÉREZ, Guillermo: “Toponimia del Tejo”,Cuadernos de Etnología de Guadalajara, 36 (2004), pp. 83-93, pp. 88 y ss. Y en “Texos, Texas (U.S.A.) y Mosquitos.Toponimia” (aún inédito). Mis búsquedas en el ordenadorapuntan en la misma dirección.

11 Ntra. Sra. del Tajo o del Tejo, de Tejada o de Tejeda(que de todas estas formas aparece), en Garaballa-Cañete(Cu.); Ntra. Sra. de Tejeda, en Benicalep (Val.); Ermita delTajo (?) de la Cruz, en Alquería de Morayma (Gr.); Ermitade la Virgen del Tejo, en Queveda (Cant.); San Pedro deTejeda (Bur.); etc.

12 En las entradas toponímicas de la Vuelta ciclista aEspaña figura como F. de la Tejera. Es un error.

13 GARCÍA PÉREZ, Guillermo: “Toponimia del tejo”,Cuadernos de Etnología de Guadalajara, 36 (2004), pp. 83-93.

Boletín 16

65

Taxus baccata (fruto)

Foto

:Car

los

Fier

ro

Page 66: Boletin 16

Para el campesino puro; todo lo que apareceen sus campos, sin ser sembrado, es una maleza.El pastor de ganado ya distingue entre loInaprovechable (y quizás hasta venenoso) y loque come su ganado. Y para la gente de la ciu-dad todo lo que no son geranios son malas hier-bas.Sin embargo, no debo discriminar y compa-rar el pasado con los tiempos modernos, porqueprecisamente fueron los (algunos, varios) “urba-nos” que llegaron a conocer las planta de loscampos, generalmente mejor que los mismoscampesinos Y son estos “verde-orientados” queya saben del valor, de las propiedades de lasplantas silvestres - hasta de las llamadas inopor-tunas o no-invitados.

Estas plantas silvestres (aquellas no.-invita-das y discriminadamente denominadas “malashierbas”), en realidad son acompañantes delhombre y de sus actividades modificadoras de lasuperficie del suelo. No están o no jueganimportancia alguna dentro de ecosistemas intac-tos, de la clase o comunidad que sean; son másbien “oportunistas” que buscan (y encuentran)terrenos preparados, a su gusto y para su expan-sión. Nuestras cuatro especies aquí ilustradasson ejemplos: por ser de origen eurásico peroconvertidas en elementos cosmopolitas, hoy .endía común tanto en Nueva Zelanda y África delSur como en Argentina y Hawai, son plantasque no precisan ser cultivadas, son comidas porel ganado, y poseen propiedades curativas.

Además, son elementos capaces de sobrevi-vir desastres ecológicos, y son especies compe-tidoras, hasta a nivel conespecífico.

Teniendo hambre (|los ancianos recuerdanaquellos tierapos!) o simplemente apetito (sien-do ecologistas ya iniciados), se sabe quemuchas plantas silvestres son comestibles, deuna u otra manera. Nuestras cuatro espécies Ioson. De Ia verdolaga y Ia cerrajá se componeuna ensalada, mientras que las hojas del cenizoy de Ia ortiga sirven para caldos y sopas.Naturalmente se utiliza solo hojas y tallos tier-nos, bien lavados y, como es natural, para tratarIa ortiga se recomienda guantes. Una vez prepa-rado, Ia masa verde de Ias primeras se consumecomo si fuera lechuga, y Ia segunda como espi-naca, condimentada como acostumbrado.Y nohay que preocuparse: no acabe aquella “biodi-versidad”; Ia verdolaga tiene muchísimas semi-llas, Ia ortiga deja de entre 100 a1 000 por plan-ta, un cenizo bien desarrollado produce entre 3000 y 10 000, siendo Ia cerrajá campeona por-que, como dicen, puede diseminar hasta 100000, por año favorable y planta de buen tamaño.Y no hay que cultivarlas.

N O S E M B R A D O S

A U N Q U E T A M B I E N

C O M E S T I B L E S

Günter Kunkel el texto y Mary Anne Kunkel dibujos (Velez-Rubio, Almería)

66

Boletín 16

Page 67: Boletin 16

Boletín 16

67

CHENOPODIUM ÁLBUM L. {Quenopodiáceas) - “Cenizo”Anual hasta bienal, herbácea o endurecida, 20-100 {o 200) cm de altura. Flores verdes, muypequeñas, en aglomeraciones axilares hasta terminales. Semillas pequeñísimas, negruscas, muynumerosas.Especie de verano aunque persiste; en huertas, escombre-ras, campos de cultivo. - Propiedades medicinales; suavemente laxantes; hojas para curar heridas externas.

Page 68: Boletin 16

Boletín 16

LOS NOMBRES

Latín Chenopodium álbum Portulaca olcracea Sonchus oleraceus Urtica urensEspañol Cenizo Verdolaga Cerraja Ortiga

(C.blanco) (Lechecino) (O. brava)Francés Chénopode Pourpier Laiteron Ortie

Blanc (Porcelane) maraîcher brûlanteInglés Fat hen Purslane Sow-thisle Stinging

(Lamb’s quarters) Wild poortulaca (Milk-thisle) nettleAlemán Gänsefuss Portulak Gänsedistel Brennessel

(Saudistel)Portugués Catassol Belroega Serralha Urtigao

(S. Macia) Italiano Farinello Porcellana Crespino Ortico

(F. comune) (G. comune)

PORTULACA OLERACEA L. {Portulacáceas) - “Verdolaga”Planta anual y carnosa, rastrera o sublevantada, puede ocupar una superficie considerable. Floresamarillas, axilares, solitarias o de entre 2 a 3. Semillas numerosas, pequeñísimas, negras y lustrosas.Especie de primavera y verano; agregada en huertas regadas pero suele sufrir ataques de mildiu omoho blanco. - Propiedades medicinales: diurética, vulneraria, antiscorbútica, emenagoga y calmante.Para fines culinarios se cultiva Ia variedad sativa, con hojas mayores, especialmente apreciada enÁsia Oriental.

68

Page 69: Boletin 16

URTICA URENS L.. (Urticáceas) - “Ortiga”Anual, ramificada, de 10-30 (-50) cm, muy urticante, Flores pequeñas, verdosas; inflorescenciascilíndricas verticiladas. Semillas pequeñas, pálidas y lustrosas.Especie de invierno hasta primavera; en huertas y escombreras. -Propiedades medicinales: diurética, hemostática, antiasmática, dolores reumáticos; tónica para elcabello.

69

Boletín 16

Page 70: Boletin 16

SONCHUS OLERACEUS L. (Compuestas) - “Cerraja”Anual hasta bienal, subcarnosa, de 2O a 10O cm de altura. Flores amarillo-pálidas, pedunculadas,agrupadas, termina les o subterminales. Semillas (aquenios) comprimidas, rugosas, con vilanos;muy numerosas.Especie de primavera hasta verano; ruderal y en sitios bien nutridos. - Propiedades medicinales:diurética, refrigerante, galactogoga; molestias de hígado y de vientre.

70

Boletín 16

Page 71: Boletin 16

Boletín 16

A d i ó s B a r b o l

Parece que por fin llegan las lluvias y nuestros sufridos campos se remojan por fin. Sontiempos de cambios; siempre son tiempos de cambios. Hace unos días vi, después de muchotiempo a mi amigo Andrés Revilla al que le conte el gran cambio que en mi vida laboral estoyahora viviendo y me propuso escribir unas palabras en este gran boletín de ARBA con el quetanto aprendemos. ARBA fue para mi una parte muy importante de mi vida hace ya muchosaños; y también lo ha sido hasta hace muy poco BARBOL; y de eso quería escribir. BARBOLnació hace unos 15 años de la ilusión y la fuerza de unos pocos soñadores que no mirarondonde se metían; si lo hubieran sabido no lo habrían hecho; pero estoy segura de que solo asínacen los proyectos. Al cabo de estos 15 años se puede decir que en BARBOL hemos hechocosas importantes en la vida de los que hemos participado: hemos producido muchas plantasautóctonas que están repartidas por toda nuestra geografía (unas mejor cuidadas que otras) yhemos luchado en todo momento por que este proyecto de producción de planta autóctonafuera nuestra forma de subsistencia. Y así ha sido. Unos cuantos ahora después de pasar poresta empresa tenemos nuestras casas y criamos nuestros hijos. Ello ha sido, sin embargo siem-pre con un gran esfuerzo porque nunca estuvo en nuestro ánimo la visión de ganancia dedinero como único y mayor objetivo por encima de todo. El trabajo por la restauración delpaisaje, después la jardinería de bajo mantenimiento, las buenas condiciones de trabajo de laspersonas contratadas, por encima de las nuestras propias, y en fin la coherencia con nuestrasideas sobre lo que queríamos como empresa y nuestra mera subsistencia nos ha llevado apelear siempre muy duro con el exterior: instaurado capitalismo despiadado y al muchas vecesimpredecible Mercado. Con BARBOL hemos vivido unos cuantos y los aprendizajes a nivelhumano también han sido muy intensos e interesantes. Hemos aprendido a separar nuestrapasión por el trabajo y nuestra ilusión por los proyectos laborales de nuestra relación con laspersonas que nos rodean dedicando a ellas el tiempo que se merecen; hemos vivido frustra-ciones, impotencias y a veces hemos afrontado grandes discordias y rupturas en el grupo. Perotambién hemos vivido grandes alegrías, celebraciones de logros impensables y renovadas ilu-siones a lo largo del tiempo.

Tengo que hacer una gran mención a SANTI mi compañero de vida durante 10 años, padrede mi hijo y gran amigo generoso de innumerables personas, muchas de ellas ligadas a ARBA,que dejó una parte importante de su vida en Barbol con gran esfuerzo y entrega personal. Lalucha con ese exterior despiadado del que antes hablaba fue para él sin duda muy difícil de lle-var, y le produjo probablemente mayor desgaste que a los demás. En fin la vida continua ysiempre grandes cosas nos esperan a todos. Finalmente en el 2003 decidimos terminar conesta gran aventura y derivarnos individualmente por otros derroteros: el desgaste personal y lasituación del Mercado respecto a la planta autóctona ( ¡está por los suelos! ) nos llevaron atomar la decisión de cerrar antes de que fuera tarde y no pudiéramos asumir las deudas aúnabiertas. Para nuestra sorpresa en el verano de 2004 aparecieron unos desconocidos de unaConstructora de Bustarviejo llamada R&G que se interesaron por la empresa y sus clasifica-ciones. Finalmente en el Otoño de 2004 compraban la empresa, cosa a la que accedimos

71

Page 72: Boletin 16

Boletín 16

72

porque económicamente nos resolvía muchos problemas. En el pacto de venta yo me compro-metía a seguir trabajando en Barbol, lo cual me hacía ilusión porque resolvíamos nuestraseconomías todos y Barbol no tenía que desaparecer. Así, la vida da sorpresas: heme trabajan-do en lo que fue mi empresa y "mi hijo", al mando de unos desconocidos, que parecían buenagente, y con quien tenía que montar de nuevo un vivero que yo misma acababa de desmontar.Contra viento y marea, trabajando muy duro y situando en mi cerebro la nueva situación así lohice y en 9 meses teníamos de nuevo un vivero de planta autóctona, más mecanizado que antesy con una producción concluida de más de 600.000 plantas. Pués bien como la vida no deja desorprenderte he de decir hoy que la persona que dirige Barbol es en mi opinión una personaincomprensible (por ser elegante), por mi y por muchas personas, que me persiguió, recién ter-minada la producción, de manera infundada, despiadada y apoyándose en mentiras y ruindadeshasta que tome la decisión de abandonar antes de que las consecuencias para mi salud mentalfueran graves.

Así desde Julio de 2005 nadie realcionado con la historia y esencia de Barbol está en en estaempresa y es de interés que esto se sepa. La nueva dirección de Barbol ha heredado una empre-sa que nada tiene que ver con su pensar y sentir. Hoy Barbol es dirigida por personas que rele-van al personal, trabajan a destajo, la planta autóctona les da igual (solo les interesa si les dadinero) y por desgracia e ignorancia son de los que piensan que eso de "producir planta y hacerjardines ¡es una jilipollez! que hace cualquiera". Son más que productores de planta y creadoresde jardines: "una CONSTRUCTORA de planta y jardines" Así desde aquí que llegue a todos:"Adiós Barbol. Contigo vivimos y aprendimos. Hoy aunque sigues llamándote igual eres otracosa muy lejana al esíritu que te creo. ADIOS".

Torremocha de Jarama. 12 de Octubre de 2005

Rosa Colomer Rodríguez

TrébedeTrébede es una ventan abierta a la voz de los que no encuentran eco, donde la denun-cia y la noticia no tiene mordaza, donde la naturaleza y la música tradicional cami-nan juntas.

De lunes a jueves, de 8 a 9 de la tarde, Radio 3 emite trébede, programa dirigido porIñaki Peña, que no debemos perdernos los amantes de la naturaleza y el folk.

Page 73: Boletin 16

Muchas de nuestras plantas han desarrolladoen sus semillas una serie de mecanismos de ale-targamientos que les permiten elegir cuidadosa-mente el momento de su germinación. Estosaletargamientos son complejos y dependiendode las especies se dividen en:

-Letargo externo, que existe cuando lacubierta de la semilla es muy dura o imperme-able.

-Letargo interno, se da cuando el embrión olas sustancias internas de la semilla contienecompuestos químicos que impiden su germi-nación.

Igualmente se puede dar el letargo mor-fológico o dos letargos al mismo tiempo.

Las semillas de la especie que tenemos entremanos, poseen letargo externo, como conse-cuencia de la dureza de su cubierta. Para vencer-lo podemos usar dos tratamientos: el escardadoy el escarificado.

Escaldado.

Se puede realizar de dos formas:

1) Poner un recipiente con agua en unafuente de calor y cuando esta rompa a hervirechar las semillas al mismo tiempo que lo reti-ramos del fuego y removemos para que no sequemen las semillas con el contacto con elrecipiente caliente. Dejar las semillas en el aguade 24 a 48 horas, durante este tiempo van cam-biando de color (de verde a negro), a la vez quese van hinchando debido a la entrada de agua enel interior de la semilla. Se puede sembrar direc-tamente en semillero o esperar que germinen,

para lo cual hay que tenerlas en un recipientecon humedad y en oscuridad.

La germinación es muy alta, alrededor del100%, y el tiempo varía de 7 a 15 días.

2) Una vez que el agua rompe a hervir intro-ducir las semillas y mantenerlas dentro del aguadurante un minuto. Es importante que las semi-llas no toquen el fondo del recipiente, para locual se pueden mantener en suspensión en elinterior de un saquito de tela. Los siguientespasos son los mismos que en el caso anterior.

El éxito de la germinación es alto y se pro-duce antes que en el caso anterior, aunque elriesgo de dañar la semilla aumenta si no se tienecuidado.

Escarificado.

El escarificado se realiza por abrasiónmecánica, El método más sencillo es meter lassemillas en un recipiente con arena o con lijaspegadas en sus paredes. Menear o voltear hastacomprobar que en la cubierta se le han produci-do pequeñas heridas, hay que tener cuidado deno dañar el embrión o los cotiledones, donde sealmacenan las sustancias de reserva que con-tiene la semilla.

Sumergir en agua tibia durante 24 horas ysembrar en semillero. La germinación es máslenta y el porcentaje de plántulas nacidas menor.

Boletín 16

73

Cómo vencer e l l etargode las semi l l as de

Retama sphaerocarpa.

Simón Cortés y Silvia Romero

Page 74: Boletin 16

ULTIMA HORA

La Ministra de Medio Ambiente, CristinaNarbona, acaba de anunciar que su ministeriopodría comprar algunos terrenos en el litoral,para protegerlos de la especulación urbanística.Parece una buena noticia, pero la lectura quedesde ARBA deberíamos hacer del mensaje es:todo lo que no se compre, o sea el más de un95% restante, podrá urbanizarse, ilegalmentehasta en el dominio público, como se estáhaciendo ahora, impunemente.

Para más información de lo que ya sufre ellitoral español y lo que se le avecina, ver elinforme de costas 2005 de Greenpeace. EnInternet, además de la página de Greenpeace,también se puede ver el gráfico que basándoseen estas fuentes ha elaborado el diario ElMundo. http://www.elmundo.es/elmundo/2005/grafi-cos/jul/s1/costas.html

En algunos términos municipales, como el deTarifa, el 100% del suelo no protegido, esurbanizable. Aquí ya no cabe la vieja polémicade protección de espacios o protección del espa-cio.

Esto en el litoral, pero en Madrid, Extremadura,Navarra, las dos castillas, La Rioja y Aragón, enel interior, las cosas están igual. Si a esto se leañaden hechos como la manifestación celebradael pasado día 15 de julio en Murcia (apoyada-convocada por el PP) para pedir agua, con elobjeto de abastecer los nuevos macrocomplejos

urbanísticos, y a la que asistieron diferentes

personalidades de Andalucía, Murcia y Valencia(Rita Barberá, Javier Arenas, ...) y encabezadani más ni menos que por Mariano Rajoy, el ter-rible presente y futuro para el Medio Ambientenatural debe verse desde la perspectiva de que laespeculación urbanística consume, además desuelo, enormes cantidades de agua.

La realidad, a la vista de todos está, es que loscampos agrícolas del Sureste, desde Málaga aCastellón, se van transformando, de uno en unoen urbanizables, de modo que no pretendanengañar a nadie con que el agua de los trasvas-es es para que rieguen los pobres agricultores.Tampoco hacen falta viviendas, hay cientos demiles de viviendas vacías en España, muchas deellas nuevas y cerradas, compradas masiva-mente por inversores, con frecuencia para blan-quear dinero.

Si Dios creó a la naturaleza, estos infieles pre-tenden destruirla, con el euro y los votos poremblemas. Y muchos de ellos luego se llamancristianos y defensores de la moral cristiana. Nopuede haber peores enemigos de Dios.

Estamos celebrando, en todo el planeta, ¡ quebien !, el IV centenario del Quijote. Cada vezque pensamos en él, o en otras personas denobles pensamientos, idealistas todos quelucharon por la justicia, nos entristecemos unpoco por que acabaron molidos a palos y triste-mente volvieron a sus casas. Intuyo que nospasará lo mismo, pero ánimo.

Un anónimo.

Boletín 16

74

OO PP II NN II ÓÓÓÓ NN

POR UNA LEY NACIONAL O NORMATIVA EUROPEA DELSUELO, EL AGUA Y LA ACTIVIDAD URBANISTICA

SOSTENIBLE

Page 75: Boletin 16

De lejos parece un roble normal y corriente.Pero de cerca el excursionista no da crédito asus ojos. Se trata de uno de los árboles más rarosdel mundo: mitad roble, mitad pino.

La culpa la pudo tener una ardilla. Escondióuna piña entre las ramas del roble y uno de lospiñones germinó con la humedad. Había unaposibilidad entre un millón de que el pinonaciese, pero nació. Las raíces han taladrado eltronco del roble hasta llegar al suelo. El pinocrece ahora con toda normalidad pero a más detres metros de altura. Incluso ya es más alto queel roble sobre el que vive.

No resulta fácil encontrar al pino-roble. Estáen el paraje de La Cuesta, en Canicosa de laSierra (Burgos), en un bosque de robles y pinos.El guarda forestal del pueblo es el mejor guíaque nos puede acompañar.

El ingeniero técnico forestal José IgnacioCatón piensa que el pino-roble vivirá muchosaños: "El estado de conservación de ambasespecies es muy bueno".

Nombre: Roble-Pino de Canicosa

Localidad: Canicosa de la Sierra (Burgos)

Boletín 16

E l "Rob le-PP ino" deCan icosa

El Olmo de La Veguilla. Especie: Ulmus minor.

Nombre vulgar: Olmo negrillo, Olmo campestre.Nombre popular: No tiene.Provincia: Madrid.Término municipal: Parla.Paraje: Arroyo Humanejos.U.T.M: 30TVK5234Biometría: Perímetro del tronco: 1,70 metros.

Perímetro de la base: 1,70 metros.Altura: 10,20 metros.Diámetro de la copa: 7,70 metros.

Observaciones: Forma un pequeño bosqueterelícto, en un tramo del arroyo antaño arbolado.Presenta una buena regeneración a partir derebrotes de raíz. Su estado sanitario es acepta-ble, aunque tiene algunas ramas secas y otrastronchadas, a nivel del cauce tiene ramas poda-das; corre riesgo de contraer la grafiosis o de sereliminado por el polígono industrial que seconstruye junto a él. Ejemplar de gran valor

75

Page 76: Boletin 16

ecológico.

ESPECIE: “Populus nigra”.

NOMBRE VULGAR: Chopo, álamonegro.

LOCALIZACIÓN: “La Veguilla”, (Tramomedio del arroyo).

BIOMETRÍA:

Perímetro del tronco: 1,54 metros.

Perímetro de la base: 2,60 metros.

Altura: 7,50 metros.

Diámetro de la copa: 4,65 metros.

Observaciones: Ejemplar aislado.Presentaba mayor altura, pero su ápiceseco se tronchó. Se dividía en dos tron-cos, aunque el izquierdo se encuentrapartido a menos de un metro de altura,estando en fase de descomposición. Degran valor ambiental, por su papel pro-tector contra las avenidas del cauce. Esel último chopo del antiguo bosqueripario que crecía en el arroyoHumanejos.

ESPECIE: “Populus alba”.

NOMBRE VULGAR: Álamo blanco,Povo.

LOCALIZACIÓN: “Humanejos”,(Tramo medio del arroyo).

BIOMETRÍA: 1º álamo: Perímetro del tronco: 1,82 metros.

Perímetro de la base: 1,57 metros.

Altura: 7,80 metros.

Diámetro de la copa: 8,70 metros.

2º álamo: Perímetro del tronco: 1,40 metros.

Perímetro de la base: 1,80 metros.

Altura: 11,60 metros.

Diámetro de la copa: indeterminada.

3º álamo:Perímetro del tronco: 1,37 metros.

Perímetro de la base: 1,80 metros.

Altura: 11,60 metros.

Diámetro de la copa: indeterminada.

4º álamo: Perímetro del tronco: 1,22 metros.

Perímetro de la base: 1,50 metros.

Altura: 11,60 metros.

Diámetro de la copa: indeterminada.

5º y 6º álamos: Perímetro del tronco: 1,30 metros.

Perímetro de la base: 2,40 metros.

Altura: 11,60 metros.

Diámetro de la copa: indeterminada.

Observaciones: Se divide en dos tron-cos desde la base. El 2º al 6º forman unbosquete, por lo que dado la unión desus copas es imposible su mediciónexacta.

Grupo Espliego de ARBA.

Boletín 16

76

Page 77: Boletin 16

Los días 26 y 27 de Mayo hicimos unaexcursión, organizada por ARBA a Torre de D.Miguel en Cáceres. Este pueblo está en las estri-baciones de la sierra de Gata.

Alguien que conocía a gente de Arba nosinvitó a hacer una repoblación de árboles y con-vivir con la gente del pueblo.

Fue muy interesante la visita porque tuvi-mos oportunidad de ver como se dirige un pue-blo con una gente con otro concepto distinto altradicional de gobernar en la alcaldía.

Fuimos unas 20 personas en coche particu-lar.

En ese pueblo la gente joven se organizópara poder funcionar desde el ayuntamiento yde hecho uno de ellos es el alcalde. Están muyinteresados en que la gente emigrante a otrasciudades del estado regrese.

Desde el punto del medio ambiente se hanpropuesto como objetivos:

.Recuperar las casas antiguas pero con unos

precios lógicos en cuanto a venta de las mismas..Recuperar los laterales del rio para poder

convertirlos en paseos..Recuperar antiguos molinos de aceite situa-

dos en esos laterales..Ir repoblando en la medida que se pueda

con especies autóctonas..Construcción de un albergue para que la

gente visite el pueblo.Durante nuestra estancia(dormir en el alber-

gue y comer en la residencia de ancianos) hici-mos las siguiente4s actividades:

Recorrido cultural por el pueblocon uno de los maestros de la escuelaque además es nacido allí. Destaca elálamo de la plaza que sustituyó a unolmo centenario

Repoblación de bosqueVisita a la Almenhara, torre árabe

de defensa en lo alto de la sierra, desdedonde se divisa el pueblo y el valle.

Boletín 16

77

NN oo tt ii cc ii aa ssde andar por casa AARRBBAA

Excursión a Torre Don Miguel

Visita al Albergue de Tejadillos y al HosquilloEn el mes de Septiembre Arba hizo una

visita de dos días a la Serranía de Cuencaalojándose l@s arber@s en el Albergue deTejadillos.

Aunque es un pelín complicado llegar, si nohas estado allí anteriormente, luego vale lapena la estancia.

Saliendo alrededor de las cinco desde lacarretera de Valencia, a la altura de SantaEugenia se llega a Tarancón alrededor de las 6.Es de obligado cumplimiento comprar pipas encualquier establecimiento que hay a orilla de lacarretera. Hacia las siete estábamos en Cuencay desde allí continuamos hasta el objetivofinal: El Albergue. Todo fue normal hasta pasarel cruce que nos llevaría al día siguiente alHosquillo.

El que suscribe se había hecho a la idea deque el albergue estaba en un alto con unamaravillosa vista alrededor. Y continuando,continuando hasta la planicie nos pasamos elalbergue, Tratando de averiguar su lugar defi-nitivo, nos dimos la vuelta y allí estaba. Noestá en un alto pero su enclave es una pasada:árboles, montañas, etc.

Nos juntamos la noche del viernes trescoches: ocho adultos y tres niños. Maravillosaconvivencia y una cena muy agradable.

Por la mañana, el sábado, desayuno al airelibre y caminata. Entre todo lo que vimos huboalgo que nos fascinó: una estrella de mar petri-ficada, según Andrés un crinodeo.

Una vez regresado al albergue ya estabatodo el mundo con los niños. No hay que olvi-

José Antonio Rodríguez Crespo.

Page 78: Boletin 16

dar que esta excursión era peques arba.La tarde del sábado fuimos a visitar la

reserva del Hosquillo. La verdad que no vale lapena porque es una cosa similar a un zoo. Y alno dejarte andar a tu aire y visitar todo el par-que, se hace en coche y a unos lugares queellos ya tiene seleccionados, es un poco aburri-do.

Visitamos el museo con animales diseca-dos. Cualquier cosa que queráis saber de elloen las enciclopedias vienen muy bien explica-das.

Por la noche cenamos fuera del alberguecompartiendo las diferentes comidas que se lle-varon o que se hicieron allí, (hay de todo paracocinar).

El domingo por la mañana había programa-do una visita al barranco de la Hoz pero dadaslas malas condiciones en que estaba se decidió

seguir un poco más y cruzar el río para seguirhacia el Estrecho de Arroyo Frío.

Los niños se lo pasaron en grande cruzandoel río. Unos descalzos y otros a través de unpuente improvisado por el grupo de ingenierosde Arba. Justo al cruzar descubrieron hojasfosilizadas en terreno calizo. La caminatasiguió como una hora y ya se volvió paracomer en el Albergue y regresar a Madrid.

Creo que ha sido una vista muy interesantepor la variedad de gente: desde niños de meseshasta personas ya entradas en años. La varie-dad de árboles. Es un lugar que está lleno deBojs. Y finalmente en el maravilloso ambientede camaradería. Creo que la dormida tambiénfue muy buena pues no hubo quejas, inclusolos jóvenes que durmieron en el ático

Boletín 16

78

Page 79: Boletin 16

Boletín 16

79

Fin del curso de árboles

ARBA sube a Peña lara

Attrréveettee a

ssalliirr ccoo

nn nnoossoottrrooss

ARBA en Oña y Sierra de Tesla

ARBA en Carabaña

FototecaFototeca de salidas de ARBAFotos: José Antonio Rodríguez Crespo.

Page 80: Boletin 16

Boletín 16

80

PequeArba en la Serranía de Cuenca

PequeARBA en Santamera

PequeARBA en la Puebla de la Sierra

PequeARBA. Visita a Cuellar

Saalidaass PPeequeARRBBAA