Alumno: Herbert Cuba Cceres

Lima necesita una mejor gestin del transporte, por Alexandra Ames. Publicado en Peru21 02/06/15El trnsito en Lima parece haber colapsado. El tiempo promedio de viaje es tres horas diarias para ir de la casa al trabajo y viceversa. As, una persona, en promedio, pierde, a causa de la congestin, 15 horas a la semana, lo que hace un total de 32 das y medio perdidos al ao. En trminos de horas hombre, se estaran perdiendo en la ciudad 6 mil millones y medio de soles.Se continan ampliando carriles y construyendo by-passes, pero parece no haber solucin, pues tarde o temprano estas obras viales terminan congestionndose tanto como si no se hubiera invertido en ellas. Por ejemplo, en la va expresa de la avenida Javier Prado, la velocidad promedio a la que van los vehculos en hora punta es de 6 kilmetros por hora. Qu sentido tiene hacer una va que te dice que puedes ir a un mximo de 80 kilmetros por hora, pero que, en realidad, te permite ir solo a 6 cuando ms lo necesitas?El vehculo particular es el modo menos eficiente para trasladarse, mientras que un sistema de transporte masivo es el ms eficiente para hacerlo. Por qu? En Lima, existen aproximadamente 746,723 automviles, los mismos que ocupan un espacio de 2,613.5 kilmetros de largo. Es decir, si se les coloca uno detrs de otro, la cola llegara hasta Arequipa y regresara nuevamente a Lima. Si cada auto es utilizado por una sola persona, se calcula que se les podra trasladar en 4,667 buses patrn, los mismos que ocuparan un espacio de tan solo 56 kilmetros de largo. Es decir, la cola generada no llegara ni a Pucusana. Qu medio de transporte debemos priorizar?El problema de Lima no es el exceso de vehculos, sino la ausencia de una gestin eficiente del trnsito. Debemos ser inteligentes con el gasto pblico. Por ejemplo, con el costo de un by-pass, alcanzara, de sobra, para disear una red semafrica inteligente a lo largo de ms de 140 intersecciones, lo que aliviara el trnsito en todo sentido.

Comentario:Uno de los principales problemas que tiene Lima es el trnsito vehicular, como bien seala Alexandra Ames. Este caos que se vive en la ciudad tiene diversas aristas. No obstante, el principal es tal vez la necesidad de una reforma en el transporte pblico. Crear un sistema de transporte pblico de calidad exige voluntad poltica y apoyo tcnico. La dimensin poltica es muchas veces muy importante, sobre todo si tenemos en cuenta los diversos actores que intervienen en el proceso de diseo e implementacin de polticas pblicas. Es por ello que la reforma del transporte iniciada durante la gestin de Susana Villarn resultaba fundamental. Como sabemos las dificultades que afront durante la implementacin de los corredores viales tuvieron un impacto negativo en la percepcin de la ciudadana sobre la necesidad de esta reforma. Todo cambio es complicado y difcil de asumir, no es casualidad por ello que cambiar la forma en la cual los limeos estamos acostumbrados a transportarnos-llena de informalidad, improvisacin, inseguridad, insalubre, etc- genere resistencias y sea impopular. Lo ms sencillo polticamente hubiera sido seguramente ampliar algunas vas importantes, construir ms by-pass y/o ampliar el servicio del Metropolitano. Ninguna de estas medidas va a solucionar el problema de fondo. Por ello, el apoyo poltico a la reforma del transporte resultaba fundamental. No obstante, pudieron ms las pasiones poltico-partidarias, y rencores contra la izquierda, crticas desmedidas sin ningn aporte significativo, que la bsqueda de soluciones por parte de la clase poltica.Finalmente, como bien seala la autora del artculo, el problema del transporte en la ciudad no se va a solucionar si las personas siguen adquiriendo cada vez ms autos o camionetas para uso personal, y usando stos para ir al trabajo o para cualquier otra actividad. Crear un sistema de transporte pblico moderno, eficiente, y seguro va a beneficiar a todos y todas los ciudadanos. Se reduciran las horas hombres, la contaminacin ambiental sera mucho menor e implicara una ayuda a un cambio mucho ms estructural, como el de una cultura cvica agresiva y defensiva en las calles de nuestra ciudad, en gran medida influida por el transporte catico.