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A Aminta que se cubrió los ojos con la mano... Lo que me quita en fuego, me da en nieve la mano que tus ojos me recata; y no es menos rigor con el que mata, ni menos llamas su blancura mueve. La vista frescos los incendios bebe, y volcán por las venas los dilata; con miedo atento a la blancura trata el pecho amante que la siente aleve. Si de tus ojos el ardor tirano le pasas por tu mano por templarle, es gran piedad del corazón humano; mas no de ti que puede al ocultarle, pues es de nieve derretir tu mano, si ya tu mano no pretende helarle.  A Aminta que teniendo un clavel en la boca... Bastábale al clavel verse vencido del labio en que se vio, cuando esforzado con su propia vergüenza, lo encarnado a tu rubí se vio más parecido, sin que en tu boca hermosa dividido fuese de blancas perlas granizado, pues tu enojo, con él equivocado, el labio por clavel dejó mordido; si no cuidado de la sangre fuese, para que, presumir a tiria grana, de tu púrpura líquida aprendiese. Sangre vertió tu boca soberana porque roja victoria amaneciese llanto al clavel y risa a la mañana.

A Aminta que se cubrió los ojos con la mano...QUEVEDO

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QUEVEDOPOESÍA ESPAÑOLA SIGLO XVI

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7/14/2019 A Aminta que se cubrió los ojos con la mano...QUEVEDO

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A Aminta que se cubrió los ojos con la mano...

Lo que me quita en fuego, me da en nievela mano que tus ojos me recata;y no es menos rigor con el que mata,ni menos llamas su blancura mueve.

La vista frescos los incendios bebe,y volcán por las venas los dilata;con miedo atento a la blancura tratael pecho amante que la siente aleve.

Si de tus ojos el ardor tiranole pasas por tu mano por templarle,es gran piedad del corazón humano;

mas no de ti que puede al ocultarle,pues es de nieve derretir tu mano,si ya tu mano no pretende helarle.

 

A Aminta que teniendo un clavel en la boca...

Bastábale al clavel verse vencidodel labio en que se vio, cuando esforzadocon su propia vergüenza, lo encarnadoa tu rubí se vio más parecido,

sin que en tu boca hermosa divididofuese de blancas perlas granizado,pues tu enojo, con él equivocado,el labio por clavel dejó mordido;

si no cuidado de la sangre fuese,para que, presumir a tiria grana,de tu púrpura líquida aprendiese.

Sangre vertió tu boca soberanaporque roja victoria amaneciesellanto al clavel y risa a la mañana.