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- 177 - doña Elena y así rre hacen pasar las penas, y así cada que viene mi paR§!. cito" . Otras vecinas le prestan herramientas y materiales de bajo, cuando se trata de construir o arreglar su vivienda. "Si pedido y dado favores insignificantes COMO materiales de construcci6n, herramientas para la construcci6n, no se me ha negado. Yo siempre que pue do hago también el favor, porque cuando se hace un favor se paga con otro favor. Con todos, pero claro, los primeros que me he llevado aquí es la sefiora Elena, doña María y otros que fufmos los primeros". Además de los vecinos del barrio, 1 i r-no huo nas relaciones con moradores del barrio vecino dondo tiene otra casa y vive su hermana, y con amigas del contro. Caso E Margarita Ruiz Harqari ta ha tenido mayor ayuda íl ni ('S de' v i \l i 1- C'11 1 (' barrio. Primero, cuando soltera, f uo il viví r con u na nrn iq a que le consigui6 un trabajo. le ayudaba en los quehaceres <lom6s l. i t amb i (- n le' di () ('on- se -j o s, los eua1es se ar re P i. n t ('o de n () h il ho r s r-q ni ti () • vi vir con una amiga en un c uo r t.o , o sa arn.i qn era c omo hc rrna na , ella misma "me dió consiguiendo trabc:lio·: "mi nmioa me aconsojnba que no fuera con él (su marido) Yo le ayudaba , ol.Ja tenfa dos ouacruas y trabajaba". En Santa Anita (barrio vecino) recibió ayudns do lo cn- fermera del ambulatorio, de la cual se Jlizo comnclr0. "Si, ella es mi comadre , IXJr el guagui to que murió, cuando os t U\'t) bien mal el guagua, el padre dijo que le iba a hacer el bautizo ahí mí.srro .Y que si viviera la guagua rcqrcsélsc vuC'ltél nnrn hacer otro bautizo, sino ya estaba bautizado con esa agua bendita quo le puso, entoncos, ella le amarc6 el guagua, después corro se muri6,mi marido no le considera comadre, pero yo si, mi marido no la quiere ver, pero yo la quiero mucho, yo sigo tratando a ella de canadre, pero él no, cuando vivíil élllá cualquier cosa, cualquier problema que tenía me ayudaba , e11 a c'mlll-e t.rntaba <le 11

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Page 1: 177

- 177 -

doña Elena y así rre hacen pasar las penas, y así cada que viene mi paR§!.cito" .

Otras vecinas le prestan herramientas y materiales de tr~

bajo, cuando se trata de construir o arreglar su vivienda. "Sir~ pedido y dado favores insignificantes COMO materiales de construcci6n,herramientas para la construcci6n, no se me ha negado. Yo siempre que puedo hago también el favor, porque cuando se hace un favor se paga con otrofavor. Con todos, pero claro, los primeros que me he llevado aquí es lasefiora Elena, doña María y otros que fufmos los primeros".

Además de los vecinos del barrio, r'1c'rC'c'd('~~ 1 i r-no huo n a s

relaciones con moradores del barrio vecino dondo tiene otra

casa y vive su hermana, y con amigas del contro.

Caso E

Margarita Ruiz

Harqari ta ha tenido mayor ayuda íl ni ('S de' v i \l i 1- C'11 c'~~ 1 ('

barrio. Primero, cuando soltera, f uo il viví r con u n a nrn iq a

que le consigui6 un trabajo.

le ayudaba en los quehaceres <lom6s l. i (~()S, t amb i (-n le' di () ('on-

s e -j o s, los e u a 1e s s e a r reP i. C~ n t ('o d e n () h il h o r s r-q ni ti () •

vi vir con una amiga en un c uo r t.o , o s a arn.i qn era c omo hc rrna na ,

ella misma "me dió consiguiendo trabc:lio·: "mi nmioa me aconsojnbaque no fuera con él (su marido) • Yo le ayudaba , ol.Ja tenfa dos ouacruas ytambi~n trabajaba".

En Santa Anita (barrio vecino) recibió ayudns do lo cn-

fermera del ambulatorio, de la cual se Jlizo comnclr0.

"Si, ella es mi comadre , IXJr el guaguito que murió, cuando os t U\'t)

bien mal el guagua, el padre dijo que le iba a hacer el bautizo ahí mí.srro.Y que si viviera la guagua rcqrcsélsc vuC'ltél nnrn hacer otro bautizo, sinoya estaba bautizado con esa agua bendita quo le puso, entoncos, ella leamarc6 el guagua, después corro se muri6,mi marido no le considera comadre,pero yo si, mi marido no la quiere ver, pero yo la quiero mucho, yo sigotratando a ella de canadre, pero él no, cuando vivíil élllá cualquier cosa,cualquier problema que tenía me ayudaba , e11 a f~i c'mlll-e t.rntaba <le 11(~VilT1Tl('

Page 2: 177

- 178 -

al doctor cuando yo necesitaba, o los guaguas, por cualquier otra cosame ayudaba". Dice que en una ocasi6n su comadre le ha dado

hasta víveres, pero ella no ha tenido como retribuirlc.

Aquí en el barrio,Margarita mantiene amistad con su co-

madre. "La canadre ~chita me hu conseguido en el Voz l\ndes turno".

Asegura que no se lleva con nadie. "A veces por arriba así nemáspara conversar, con la señora de la tienda a veces vaya conversar, conella me llevo un poco. Con los demás no. Cuando vaya comprar así nosquedamos conversando, la señora de la tienda a veces me vaya fiar".

Ella "acostumbraba fiar" con la señora de la t .i.onda , pero "se

resinti6 cuando le fue a cobrar" (cuenta la scfiora de la tien

da) por ese hecho, le cort6 OSé) ayuda, odomás era utilizod(1

para contar sus problemas o convorsar. Un a v o c i na I.o cons i -

gui6 trabaj o cuando rogrc 5Ó cl0 ] a r1¿1 te' r n i dn(l "si cl1si í'nsí'flui dame dijo la vecina que había una casa quo qllc'rf,1n p.'lra lnvnr , y ílsf nr> fuf ",

Margarita dice que s610 conversa sus prob lomas c nn nd o "11,1)'

confianza" porque hay cosas que "uno se hace saber". Explica

que hay problemas que tiene verguenzo de cantor las y que otras

personas se enteren.

Con los "crnp l.ondo s " dc" In I rul r j] l(-.ríél t i o no c ir r ta s rf'1.1-

c i ono s de ayuda (los ornp l o nd o s v i v f a n con o l IC'lr('IH) c'ollli<J'IO

donde están los hornos). Po ro o Ll n , <jllílnlil ('jl't 1,) di:;I;lIH'iil:"yo no podf'a ver como le poqaba duro 01 mar i do, 1í' ('~~(,()I)¡jí il .1 (' I 1t1 Y 1(',hablaba a él" (eso PilSÓ a Iqunas vC'(X'~:; r-n qll('l o l Plllp I(',l<ln "eh, mru lo " qnll)(';l­

ba él su paroja) , "Ella (la rmrjor del omp lo.u lo) TlK'l C'll!,C'll¡) 1111 lT'Jl)l:'din p(lL1

quo lo quaqua ya no vuelva i1 r-n fpnntlrSí' ('<1<1.1 r.11 (), ql JI' 1l' 1);lq;\ pi (',u' onlas nalqas con una abeja".

El marido también recurre pa r a avud or (l ]<1 familia, pi(lr....,. t~

prestada plata al ho rmano c un nclo TlC'('{'!, i I t\ pn r(l (11 qunél c'Jl\r"rqe.!l

c i.a y no tiene de la Lad r i Llc r f a (por ejemplo, cuando o Ll.a

fue a tener el dltimo guaguA).

Page 3: 177

- 179 -

Las ayudas en ese caso se dan al interior de la familia,

sea en la producci6n (ladrillería), en la construcci6n de

la casa, en cuidar un guagua, o hasta dar consejos.

Cuando Margarita se fu~ al hospital a operarse de un tu-

mor en el ojo, dej6 su guagua él cargo de la h íj a . "El doctorme mand6 a la casa a dejar encargada a cualquiera la ~TlIFICJll(l y que regresara al otro día. Yo vine a la casa y le dc:jé dicho él mi hijo que siempre­le cambiara los pañales, que le diera la mamadera y que cui dara él la quagua". Según cuenta Margarita, la h i j a no la ha s o qu i do ITll1cliO

las instrucciones porque cuando rC~CJl.~('f~O d(\ I 11()f'~P i t ;,1 (do~~ me'

ses dcspu~s) la hija estaba "casi muerta".

En la construcci6n de la v i v i.o nrl a , aparte (le' un ClJh<111i 1

contratado "todos ayudarnos, desdo los qU¡1ql1¡'S Jx'qu(,\)()r, lhl~~t(1 los qr;11l-

des".

I Le aconsej6 a su hijo: "le dije él mi hi-jo que ya no t rabajo conel (su marido) . Le trata muy mal, le he dicho que busquo trabajo en laCoca Cola donde tiene un amigo, (vecino ele enfrente) que le elijo que vaa ver si le da consiquiendo" .

En los últimos partos, Ln hij a mn v o r 1<' nYlld() c-n C' 1 J'C'l-ío

do pos t-parto . Cuando e s tuvo en 1. a Ma t 0 rn i dél d lime' fueron (1 v isitar, todos dejaban algo, hasr.a los cmplC'ndos que t.rabajan con él en la-­ladri11cr!a, los vecinos, lIDOS doiaban 100 sucrr-s , 0\ ot-ro rmnos y tlsí fu'ljuntando, de eso le canpre ropi t.a usarla de' una semrél quo vende' y ] o donrisdej~ para comprar la leche".

Respecto a las ayudas comunales que ofrecC' 121 familln, se

cuenta la participaci6n de su esposo en las mi n q a s e "el nomás vaa las mingas, a las sesiones tanto barriales como de la r-souo la c10 los ni­ños también" (ella no participa) .

Caso F

Rita Salcedo

Durante ciertas temporadas pas6 nlojada on la casa de

los padres de su primer marido. General Tn(711 te, cuando se tra

Page 4: 177

- 180 -

taba de ir a dar a luz, recurría a sus suegros que la aloj~

han en casa. Tarnbi~n vivi6 tres meses en la casa del herma

no, aquí en Quito.

piezas en alquiler.

Una tía de su primer marido la daba unas

Con la "señora fvJarinita me llevo, pero con todos sn l.udo, Pero Llsí purair nnlestando no, mejor me voy donde mi hermano. Pero si,algún favorci todonde la señora ,Marinita. Ella tambi6n es buena con nosotros, sabe <l.YU-dar a ver los guaguitos".

Rita siempre le manda o da ayu~a a su vecina Morina. Son

víveres o "le da tejiendo" alquna cosa.

Su hermano administr6 la construcción de la vivienda de

Rita Salcedo, sin cobrar nada. Cuando Rita t<'nía días libres

del trabajo, ayudaba a Lav a r }(1 r opn o n Ci1S(1 de' 1 l io r mano y n o

cobraba. Tamb .i~n a yuda en 1 él r i n e (1 rl (\ 1 ] )( , rm él n () e 1I n Il d () ~ ~ (\ 1H \ -,

cesita para la cosecha.

1\ s u él C t u a 1 s u e q ::::- a y s u 5 h 1. j () 5 1 (... II ¡ II 1 d <l. (1 () .1 il e él s (l P;1 1 (1

que viva sin pagar alquiler. "No ve qua aquí le tcnfu (l la melm5 cuando yo toní'a el sa16n y cuando ya ost.aba ln Ci1S11 llC(llxlc1(l, (\'105 r-st.alvm vi::'viendo aquf en la casa n •

El piso de abajo está alquilado él una c orn.u l r o de su mnri «

do. "l\sí mismo por ayudar le dllllor, unos dos cuarti t on IX)\' ~no sucron, De'ahf rre han pedido otras personas que le arrí.ondo quo nll' (1.-1n 1. 000 ~:;l1(T("'S.

Ellos en cambio son ahi j ados de él, por eso, 61 no ou i C' ro él r ronda r él otrosrx~rsonas" .

Una sobrina de Rita Sulcc"'(]o cose ropa 1'(1),-(-1 Ji1 f nm.i Lia sin

cobrar nada.

t "~

Ri ta recibe consejos, avisos y a ao s or f a s en d í.vo r s a s o(.'a

siones. Cuando estaba separada del primer marido, los suegros

y la madre: "bueno, cuando se reunieron todos diciendo que como va aser posible que esteroos separados, entonces yo ffi0 fui a Dubahoyo para ~cerle separar de esa mujer. En otra ocasión "que- yo cst.aba en Cuenca,desp~s de dar a luz llega un telegrama de la t.ía de el, que vive en laFloresta, y decía que venga la Rita lo rMS pronto posible porque 61 ha d~

Page 5: 177

- 181 -

saparecido del cuarto. Mi suegro me da para el pasaje y vengo".

Cuando se enter6 que su primer marido estaba con otra mu

jer: "entonces me voy donde mi hermano y le digo, ñañito ahora que hago,entonces se juntan primos de ~l y dicen vanos todos a darles duro a ~l ya ella. Entonces nos vanos yo, mi cuñada, mi hermano, todos a darle unapisa". La tía de su primer marido, que vive en la Floresta,

"se lleva bien conmigo. Ella misma me decía, mejor cáscso Rita". Cuan-

do conoci6 el actual marido su hermano le di jo a él "usted subeque mi hermana es casada. Si la quiere, puede casarse el civil, entonceshace el trillnite del divorcio".

La inversi6n de sus dineros ha hecho con la asesor fa del

hermano. Ella dice "si, el es peor que padrc, Si no hubi.or'a sido porel, la plata nos hubiéramos malgastado y no hubiérarros tenido nada, El medecía, Rita, si tienes cuidado mija, voz eras de mala suerte. No ves comote bot6 el otro marido y ahora este tambión te bot.a, no quiero. Cuando YLlestán las escrituras te voy hacer en tu careza todito, entonces nos ViUTlOf>

a firmar las escrituras. Ni hermano va él hahlar con la señora Or f a <111e porfavor lTE diera s610 en mi cabeza. "Es casada sr, rx-ro 011 ti ti 0n0 1.1 ('0(111­la de divorci ada" .

Ella t.amb í éri presta asesoría a sus vecinas: "no hay t.i.ompo ,no hay lugar. Cuando pasaba aquf , venía la señora Elena, Id sofiora ~bri (1

na, les enseñé a tejer, les enseñé purrtadas , Buono , con 011.18 si me' 11('llevado" .

Re fi. ri.éndose a los s 110qrO:1 <1(' I P r i 111(\ r m.i ! I i Il1nl1 i () : 111l1f'j()l­

allti dondo mi. suoqra , Ella era bien huona , P¡llil dc'ci r lld:'llll 1,1 rop i t.a 111<'

daban" . Mientras estuvo sola Ri.ta, cont6 con el apoyo rmra.l y ocon/mi.codel hermano. "Cuando yo vivía so.l.i.ta en la Fl.oroata , él compraba el arroz ,azücar , apenas la mujer se iba al centro, el vonfn con lo que' quiera. Sema.nalmente me daba y no me fa.It.aba nada. l\sf, cuando él VC'llíél yo Subía es-­tar triste, "tana mijita It, ya me daba 500 sueros, 300 sucrr-s o cualquiercosita me daba. Ahora también es bueno. Cuando toen .lllS cosochas corro ticno un terrenito en los Chillas, do <1hf ví ono 7..1p,lllos, ("h(x'los, sélTllIX1s,vic­no todo para la casa, es bien bU0YlO. l\sí mi r-:TTlO, C'\lilndo 1(\ 1(X",l 1<\ (1c'shi ('rba, dice "vamos", alú si vamos (a ayudar l ",

La tía del primer esposo In ayudn hn mucho: ".ifll,lcrí.ncs0, no dabala lista de útiles, cocrfa v se i1)("1 con todo cl cnmnr,lr. ~~(il() ('r:;U~ .uio , 1,;11<1ha (ludo 1.1 C'duc<lción !'clrél el o rnn.lr-, i(xl¡l 1,1 C'~~('1l("1(l n.1r¿l !l11(" t-ílmhit":\1".'~

t.ante. La relaci6n con sus Pdricntos, confirmi1 osa nscveraci6n.

Page 6: 177

- 182 -

Allí están incluídas las ayudas recibidas del hermano, de la

tía y de los suegros del primer matrimonio.

ayud6 a Rita cuando recurri6 a ella.

Su madre no le

"Mi hermano es cano mi padre, tutor de mis cuatro hí jos , No ve quemi marido me meti6 juicio queriéndanc quí. t.ar él mis cuatro quaquas , Nihermano gast6 caro 12 mil sueros 5610 para hacerle tutor de mis cuatroguaguas. Por eso él ve todo por nosotros. El un varoncito y la Veleriason ahijados de ~l". En este caso, la reciprocidad se ha dado,

pero ella ha dado menos de lo que rccibo dcl hermano.

forzado los lazos de parentesco con el compadri1zqo.

Tli1n re

Con sus vecinos del barrio, el marido de Rita mantiene

un int.ercambio de pequeños favores como préstamos de horré1JniC'.!:!.

tas recíproco con la familia Salcedo y otras del harrio.

A las mingas del barrio Véln Hito o SIl marido. Si nillqu

no de los dos puede, asiste el h i ·jo mnvo r en ~>1I rC'f)r(':,('JlI .le i ón.

Los hijos mayores participan en unél rod interna fi1rni1.i<1.c con

la madre.

Resumiendo Rita Sn Lcr-rlo ni pmpr("' 11.1 f>oli e j f'-ldo .1Yll(L1 ,1 lH'T

sonas con quienes mantiene lazos fami liares. 1h I r ;1 Jl 1 (' f> ti P r i -

mor matrimonio recurría a los pnd r o s do su mar ido, (1 lI11;l t 'Í..l.

de él Y tambi~n a su hermano. '1 1 -¡ e n ("' ti n a r r- I el ci (; 11 m11 Y e's t rc-

cha con una vecina que ella considero "dí' mf1s ('nl) fi n nz a ? , Ade

m5s, esa vecina vive muy cerca do 511 cnsn.

Caso G

Patricia Horeno

Patricia e xp Li.ca o uo o n f'f,0 ba r r 1() nolic'IH\ ni nqún tipo

de relaciones de ayuda, porque las relaciones que tiene son

s6lo formales: "pero así de buenos días, c(-,!1l0 e~:~:í y ele oso no ha p<ls~

Page 7: 177

- 183 -

do. De vez en cuando conversar, pero no tengo mucha amistad con ninguna".

Agrega la raz6n de su reticencia a solici tar ayudas: "yo no lesconozco mucho, me parece que no sor: tan de confianza caro para pedirlesalgo" .

En el barrio que vivía anteriormente sí tenía amistades

y podía pedir cualquier favor o préstamo. Cuando trabajaba de

lavandera, a veces recurría a una vecina que le veía a las ni

ñas pues quedaban solas en la piczu que ocupabun.

tras vivía en El Camal, "pues ahí si había confianza".

Eso era mí.on

"l\sí cuando necesitarnos alqún a.l irrcnt.o o plata alltl nos oodfnmos , h~

ciéndonos el favor". En el barrio de El Camal tiene am i s t ado s con

quienes intercambia ayudas y favores. Por esa r az ón do s o a ro

tornar a ese sector. Allá cree quo no<1r1"a r ot.o r nn r el. 1 t r;1b¡1-

lia. Habitualmente recurre fl ayudas d(\ sus nnler.iorp[; .uu i s t a

tcnqo mis señoras que rro conocen y dan <le' tcxk i",

Las a y u d a s pa r a Pa tri e i a, él par t r de] ti ~3 d (, ~ ; ti ,'111 t j q 1I() 1>;1

rrio están vinculadas a familiares. Sus hermanlls, L(lllln

dos que viven en Quito, como las que viven en 1\l(1l1~;í.

las dos hermanas cose ropas y no le cobra la hcc hu r n r la otra

le acompañ6 a la maternidad, la otru le tuvo 011 la C(lsa en

Alausí hasta que diera a luz la primara hija; t~ml)i6n un(l de

las hermanas se hizo cargo de cuidar (le su hija para que ella

pudiera trabajar.

"Entre las hermanas s í.cmpro nos hemos a y ud acto , si, ha s t a

a.hora nos ayudamos cuando una le trae, también una le da algo".

Page 8: 177

- 184 -

"Ella naci6 en Alausí allá me fuí a dar a luz, después reqresé a Quito con elJa (se refiere a la niña mayor que tuvo cuando era soltera).­En Quito para trabajar cuando tenfa la bebé se me hizo m:'ls fácil caro yovivfa con mis hennanas, entonces ellas me cuidaban y así yo les pagabaalgo. En la otra niña. él no pudo acanpañanne porque no est.aba aquí, letocaba el turno de la noche, ahí me fui solita donde una de mis ñañasa dejarle a la niña, y allí me acanpaoo ella hasta la maternidad"

"Si, siempre nos manda mi papí, algo y aquí nos repartimos todas lastres (hermanas) , Cualquier cosa nos manda por ese cariño que nos tiene.Yo no se hacer nada de costura, les compro hecho donde mi hermana comoella es costurera, ella me vende la ropa hecha y no me cobra la hechura",

Para conversar tilmbién buscil i1 RUS hí'rmílTlilS n ílmi\fi1s del

otro barrio. Cuando necesita un pr6stamo en pli1ta el marido

pide a sus amigos o compañeros de trabajo. La condici6n de

inquilino en el barrio hace que ellos no sean socios del co-

mité barrial, tampoco tienen obligaci6n de participar en las

mingas, ni son invitados a las aSilmbleilR. Por lo t.an to, en

las actividades barriales no participan, sólo o n UT1n oens LÓll

asistieron al cine de la casa barrin 1 porque fueron .i nv i I-a-

dos.

6.3. Comparaci6n y análisis

si retrocedemos a los tipos de ayudas que rresenti1n los

casos, vemos que son numerosas V d ívorsLf ícnd.i s LIS ayudn s

que se dan o usufructúan. Donde se c oncr-n tr a e> 1 mnv o r n(¡m.Q

ro de ayudas es en los servicios pro s lados o dtHlos. El ca-

so G, resalta por el bajo número do ayudas; si oon s i.dc r amo s

las ayudas en el barrio e ncontramo s que' son pr-:l('t:icilmpnl(~ ll~

las. Eso se debe a que pertenece a una minoría de inquili-

nos en el barrio (del 10 al 20% aproximadamente) a eso se

agrega la presencia reciente en el barrid. Las ayudas con

Page 9: 177

- 185 -

que pueden contar son externas al barrio, y por lo tanto,di~

tantes físicamente.

Los casos A, B, CyD son unidades dom6sticns que han lle-

gado en la formaci6n del barrio, como una de ellas cucnta:"nosotros soros de los primeros, cuando L'locarros esto era puro bosque". Esehecho le da a sus integrantes mayor fluidez, posibilidades y

oportunidades de obtener y dar ayudas. Eso no significa que

la intensidad de las ayudas fuera dol barrio no puedan existir.

En los casos B, C y D son significativas. El CélSO E, pese al

grado de necesidades no recibe muchas ayudas. En el caso v,

se dan ayudas dentro del barrio, p0ro no en qran n~moro, lo que

qu i z á s ha sido compensada por las a vuda s do u f uo ,-(] .

Las re lac iones que cond.i e i oria n n (1c't (' r m i 11éHl (' r;c' p re )(.(,~;()

de ayudas, la de parentesco o s t.ri prC'~H'nt r- pl':ícti (",H1)('11t c' c'n I ()-

dos los casos, sea actualrnen te, o en él] q uno s mornr-n los c10 1 il v.i:.

da de esas personas. Llama la atenci6n que en ('1 o a s o T~, ('f">íl

ayuda sea exclusivamente del lado <10 la fllllli1 iél (101 rnélric.lo.

Eso quizás se deba a que en el familia de ella ha habido un de

terioro de las relaciones por circunstancias vividas.

En todos los demás casos las r01 ne i on o s de' pll r o n to s co son

fuertes y constituyen base de muchos intercambios y uYUdilS.1'111-

chas veces, el factor parentesco, se il~n~0 il 1n vocinrlnd o ~ro

ximidad geográfica, acercando así m~s los relaciones y fncili-

tanda el referido proceso. Entre los cn sos , tenemos ej('mplos- li~

-parientes que también son vecinos- en la mayorfn rlc los casos

(caso A, B, C, D y F). Las ayudas solo entre vecinos son muy

fuertes en casi todos los casos,-A, n, e, D y F- (con un núme

1ro reducido de vecinos) sin que exista rel¿lciones de parcntes-

Page 10: 177

- 186 -

ca. Las ayudas basadas en relaciones de compadrazgo o amis

tad en los casos estudiados coinciden con las relaciones de

parentesco y/o vecindad. Una forma de fortalecer lazos ya

existentes, en los casos estudiados es "hacerse compadres".

Existen determinadas condiciones para que se den ayudas

además de lazos de parentesco y/o vecindad. En todos los ca

sos se expresa la necesidad de la "confiélnza" para pedir o

prestar ayuda. Ejemplo, el caso G dice: "cuando no hay confian­za no hay corro pedir Wl favor. El caso e dice: "si Jes pido cllulquiercosa y ellos también porque hay confianza ",

La determinaci6n de la existencia o no do. con ri anz a llepC'~

de de factores subjetivos, pero también a Lrrurio s o bio Livos , Los

c a s o s A , B, C, D, F Y G t L 0 n e n e () n r i n n 7. rl (' 11 r)(' r fi o 11 ;-1 S 1 i q;H L1 ~ ~

por lazos de consanquinidad o pclrpnl.c'flco, pero I1 i 11Qlll10 (~{)ll~~ i .1('

ra ese el ün í co medio de obtorio r. con r i ;l11Z(l •

e a a gre g .1ndos e a e s e fa c t o r el L i.e mpo, <l U 11q U e s C' v i v n e e't e a (' s ,

un elemento con s í.dcrado de i rnpo r Inu r-i i1, 'le'l'O m.i í i ~~.ld() I)()J (' I

compartir una misma situació11. Por ('j<,lrtplo l ri.: (·.l~:():j 1\,1\, (',

y D han 11e g ado albar r i o y han e ompar t .i elo e o n o L r o s 11101.- II do r:c' s

las luchas por lograr las moj o r a s que' hoy o x i r~l ('11. 1~ ~--; C' lt e ()1Il11<1 r-

tir" una situación tiene q ue ver e ()n s u e () 11 die i Ó 11 ~) (H' i () - C' e o

n6mica. Esta circunstancia ha influído en el « r ado ele con fia n

7.a que puedan tener entre sr.

El hecho de la procedencia de la misma provincia no fue

',l!considerado importante en el establecimiento de un mayor q r ud o

de confianza en los casos es t ud i.n do n .

Cuando analizarnos la existencia o no de reciprocidad en

las ayudas expuestas encontramos una IllZ1YOI rLll ele casos de reci

Page 11: 177

- 187 -

procidad, tanto entre parientes como entre vecinos. Eso pOE

que, se da un flujo de bienes y servicios on ambos sentidos.

En estos casos se puede hablar de In existencia de redes ya

que se trata de intercambios que fluyen en dos sentidos, de

forma intermitente y se da dentro de un marco de una relación

social establecida.

En cuanto a la equivalencia del intercnmbjo, no se da en

algunos casos, como por ejemplo, el caso F', pero eso. hccho no

significa que no es vista una reciprocidad, soncill"~mcntc, se

t r a t a dein te rc amb i o s con valore s ele rn e're ¡Hlo el I s ti n t: () s , pe r o

que pueden tener valores afectivos imponderLlulcs. Distinto

es el caso E, en que rec ibe a y ud a s ('11 unr: re' 1(le i (i11 elo COl1l1 \,)­

drazgo unilateral, o sea, solo hnc la 1el mu] o r ele.... 1 cnso 1';,

sin que haya la posibilidad de roLribllción. 1,; 11 C' ~, e e ,1 ~;o, 1 i1

ayuda adquiere más bien un c a r ác t.c 1::- a si s lene i.n l o píl l: o r n a l i.s

ta. Una cierta unilateralidad parcial so. cncucntrLl C'll otros

casos (TI y 1") en doto rm.i na dos p('rr()(lo~l «le' c r i r: i i: ('11 (,1 C¡l~;()

P, y de"retribuci6n" de h í j o s adu l to s o n e] C(l~l() n) o n r('ln­

ciones de parentesco.

En las relaciones de vecindad o xi s t.o r o c i p r oc.i d ad en los

siete casos estudiados (el caso G en el barrio ílntcrior exis­

tía, aqu f existe ausencia d o a y uda a l , Pod('m()~; h.rl: 1.i r o n t.o nco a

de la existencia de redes de intercambio de bienos y servicios

compuestas por vecinos en que participan ac t í.vnmon t e los ca{'¡/'s

e y D, en menor grado los C<1S0S 1\, I~ Y 1" Y un a p;lI-licipaci()n

muy esporádica del caso E. Las redes de parentesco se compo­

nen de redes de familia extensa que comparten el terreno pero

Page 12: 177

- 188 -

sin gastos comunes -A y B-. Los casos e y D mantienen un in

tercambio de ayuda mutua con parientes que están en el campo

y otros que ya emprendieron el proceso migratorio. Intercam

bio de ayudas tambi~n mantienen con parientes en la ciudad

los casos F y G.

Finalmente, tocamos el punto do la persona que toma la

iniciativa en el establecimiento de flyudas en ln vccindn~, en

todos los casos la iniciativa es de ln mujor, en algunos (C y

F) es de ambos. Son cinco los casos en que es la mujer la

que toma la iniciativa en las ayudas con lazos de parentesco

(A, B, D, F Y G). En el caso C, son ambos, y en el caso E,

es el hombre. Eso nos podría llevar n rnt"ificnr la idea ~0

que es la mujer la que sostiene ] os mr-orm i srno s dC' n vud a t nI) lo

en lazos familiares como (]C' vecin<1íld. Por ollo , ('1 P¡l[;() ~~i-

guiente en es ta inves tiqac ión es a n a l i 7.tl r o 1 apn r t c' C' rC'c t i vn

de la mu-jer dentro de las o s trn tc-q i n s dc' :,ohrc'viv011Cii"1.

7.1. Contenido

En esta parte hacemos una globallznci6n ~(' lns cstrnlC'qié.ls

de subsistencia creadas o adop t.ada s por 1,-IS mu j(·.-('S dr' 1111C'~:; 1 ro

estudio. l\notamos problemas ya abordados ('11 01'-.., parte' dr-l e~

tuc1io y nuevos enfoques do s a r r o lLados , tra ta ndo dc' a c La r o r los

"comportamientos encaminados a ase<Jurur }.:1 reproc1ucci6n mate-

rial y bio16gica del grupo" (Rodríguez, Daniel, Revista Dcmo-

grafía y Economía, Vol. 15, No. 2(46), Colegio de México,1981,

p. 238).

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- 189 -

Estos comportamientos son en algunos casos deliberados y

en otros no, y en goneral, buscan obtener .la reproducción eS?.

mo grupo. La forma como lo hacen, se podr~ ver en la exposl

ción de los casos: "es una combinación de vurios elementos

que trascienden las formas capitalistas de reproducción de ln

fuerza de trabajo" (Sáenz y Di Paula, Opa cit. p. 151). La

ubicación de clase o de fracción de clase se encuentra hechu

en la medida que los casos están ubicados o pertenecen a un

sector popular determinado, por lo tanto, son las estrategias

de ese sector las que tratamos. Los c o ndic i onarn i o ntos de ni

vel global están dados por el "estilo de desarrollo" v i rronto

en el país y en la reqión.

Por u n .í el a (1 d o m~ s tic tl o n t p n 1'1 ("mo s íl I q t ti, )( ) "11 ,¡J Ji 1 ; ¡( • i ()n íl I

que o n f r o n ta conj un t amo n tol él r0proc! \lCC i nll ;1 I ('Olllll,"\ r l i 1 Tl:11'-­

cial o totalmente las instancias de i.nqrcso-eqrc·so lH"C'C"snl-i ;lS

para la reproducci6n ampliadél" (S50n7. y Di PéluJa, Opa cit. p.

155) •

En los "componentes"dc La s estrategias s o l.o oci onnrnos los

elementos m~s importantes. Estos son: la consti~uci6n de la

familia; la procreación o número de hijos; el ilprovcchamicnto

del espacio; la educaci6n de los hij o s y 1a fune ión de" la mu­

jer. Estos temas e s t án matizados por los compouon t c s genera­

les de las estrategias donde hay elementos que se constituyen

en recursos de las unidades dom~sticas,sc~n ellos monetario~

o no, provenientes de una inscrci6n on el mercncto de trabajo,

producci6n doméstica o, aún, recursos públicos que se logra

captar en las unidades dom~sticas. En or~11' tl I ti mo sentido,

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- 190 -

resaltamos la actuaci6n de los pobladores ante organismos pQ

blicos para lograr "mejoras" que han tornado "habitable" el

barrio, con ciertas condiciones mínimas que no existían al

principio.

Los elementos tomados aquí no son exclusivos desde el pu~

to de vista de una estrategia, por ejemplo, el número de hijos

tiene otro tipo de condicionamientos, sean ideológicos, mora-

les, etc.

Nuestra unidad de análisis -la muier- se iustifica aGn m~s

por las evidencias de que, en las situaciones de crisis o ele

falta de recursos cotidianos para la subsistencia, ella clomuo s

tra una "ingeniosidad asombrosa" para o n f r c n t.a r sLtu.rc iouo s V

organizar la unidad domé.s t í c a do f o r mo t 01 quo se) o a r a n ! i.c o la

sobrevivencia del ndcleo. Entre estas estrategias fiqura: la

disminuci6n del gasto familiar, la rcorqanización elel grupo r.Q

s í.dcnc í a L, la organ.ización o pa r t ie j paci.ón (='11 r od o s de' (1YIHLI~)

mutuus. Un último c Lomo n t.o (~~:~ .L:1 t.o n l a l Lv n <l<' i rlo n I ¡ F i o.r t 1il~~

o st r a t.cq ias existentes en los Cil~)OS corno rl()rL('n('ci('nl('!~ i11 con

t o x t o urbano o como t r-a s Lnrio (h=' (='f) 1 r;11 (\qi ¡l!) ru i ,111':' 11;)(' i;1 111

ciudad.

7.2. Dcscripci6n y narraciones

Caso 1\

Martha de Calder6n

Cuando se cas6 Mar t ha su esposo t. r abn j a ha ('11 1,\ z o n a en

que vivi6 como pe6n. No t.cn I a p r opi.cdad pero o lLa sí: "si, latierrita que tenerros allá era herencia rnítl nOITk1s, cuando ya nos casorrosse qued6 de ~l tambilm, o sea, de los dos y ahf LIrclbajarTlos durísimo conhacha y machete".

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- 191 -

Hartha considera que cuando vivían de la aqricultura era

muy duro el trabajo. Pero el marido aportaba mfis. Después

que vendieron la tierra y compraron un lote en el barrio, el

marido se fué "dañando". Esa opinión Martha la justifica no

sólo por los malos tratos (que anteriormente tnmbi6n se daban),

sino por el hecho de dejar de aportar económic<1mentc y por d~

dicar casi todo lo que percibe por l.:1S v o n t a s ele ho La do s <1

gastar en bebida: "se ha dañaclo ahora ti l t i nr i, q¡Y;Ll 0!l In lOTllnc1('r¿-1 pllrilél y para los ami.qos que le aconse-jan mal", 1': 11 n , e-n 10s ú1 timos t .i.orn

pos ha decidido en conjunto con sus hiioR controlar a su ospo-

so cuando éste la quiere golpear o pretende h acor "desmanes".

Igualmente, han decidido no darle de comer en la casa cunndo

no aporta, hasta que cambie: "ahora 50 compuso un P(X~o. Vil t r.u> V\101

ta alguna cosita para la caniela".

hi. jos que tiene por la ayuda que p r o n 1n n aho r a V I C) q nr- PU('Id;lT1

prestar en el futuro.

c u Lt.ado s de la crianza. "/lilra que' ho eh, f)('ci r, C'II()~; ~d 1Il(' VI'II, r;jse duelen cuando estoy onforrm , si me cuicl.'ln". I':n ('~)I ()~; ('¡1~;()~~1 O!; 11 i

jos le ayudan y la mantienen.

Del futuro de sus hijos piensa que: "verá, sC'q(in ahora la si­tuaci6n y cada cual ve por si mismo. Entonces, ya nosotros somos de edad,Entonces, nosotros pueden ser que ya nos rrorimos o pasado mañana paSG al­guna cosa. En cambio, ya los hijos quc.xJan.En camhi.o uno ya no se sien­te animado a vivir, ya a la edad cuando es avanzruIn , r.o (111(' los hi ios,ya sea cano sea, todos tienen para t.rnbajnr y yrl pi('In~:;¡ln :--:unlir. lo quouno en cambio ya no se trabaja, eso es".

Martha cuenta que cuando vivían do. 1<1 arr ri c u I t u r a e "yo as?tenía que trabajar estese encinta, cst.cso con quaoua , como sea, dej<1r](~'~

ol almuerzo tenía que ir y cuando nmrió mi marnaci.t.a t onf'a CTllC lidiar yocon tajos los quaquas",

En el lote de la familia, como ya se dijo viven además de

la familia, las tres hijas casadas con SU:i7 respectivos micm-

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- 192 -

bros. Aparte de la prima que alquila. Martha justifica la

donaci6n, lo que les imposibilit6 la opci6n de cultivar en

el lote: "todos viven acc1 cano para que no estén pagando arriendo, poreso no tengo aquí ticrrita para sembrar, tcxJito está hocho caso, lo dadoa mis hijas porque ellas si son consideradas conmiqo". r"í1rtha explico

c6mo su decisi6n es parte de su estrateqia en mutcria do Rrr~

"vechamiento del espacio y como eso repercute on otras &roas

de su vida, incluyendo el futuro: "los hijos se casan toditos y sequedan los mayores solitos, no saben a veces se van lejos. l os pap('Ís sequedan solitos y solitos se mueren. Mis hí.jos vivían lejos. Yo por ejemplo, cuando me enfermé no as0rn6 ni un hijo, y los chiguitos, o sea, 10s­dos j6venes que ahora están eran chiquitos, quedaron allá en mi tierracon el papc1, yo vine solita, s6lo con una hija que me vino trayendo. Yaquí en tierra ajena y primera vez no sabía ni caro estoy, ni donde estoy,ni quienes serán, nada, dése cuenta. Por eso es que mis hijas me dijeronque querían hacer la casita unidos porque así hay casos que mueren I os paptís sin saber los hijos, y por eso vivimos aquf unidos talos". -

En cuanto a la cducaci6n de los h i j o s Mi1 r t 11(1 no lo vi !le 111 '1

como una poa ibi li d ad (le 01>(\1\(\1" 11\.'Í~; }(\('lll ~;(l~;. ~;ól() V(' II!lO, 11<'

cesaria la alfabetizaci6n para Loq r a r un t.ra baj o e "S1 011:1 C'1\ o lcampo no hay como aquí para est.udí ar , n(Xll:í~-, 1o~:; 1. re-s (1ilos hav , e'so ~, ¡lesmandé a mis hijos allá porque sino cono I l rm él t.raba jrrr aquf ",

El aporte de Martha es Lmpo r tau t.o , s o a o n o I c-c ti vo (rnorio t a

rios o no) que ha dado a lo larqo rlc su victo, como en CU<lnto él

la organizaci6n de la red de parentesco que 011,1 mismo formó.

la persona que se relaciona y p<lrticipo.

e o e x i s t e un t r a s 1a d o delo r u r él 1 h ,1 e i ¿1 C' 1 h.] r I i () (' 11 1 ,-1 (' i I H1i1 el •

En cambio, las relaciones de ay ud a o n tro vc-c i.no s se I o rmn r on

en el propio barrio, pero en eso Coso, se oon sido r a de monor i ml~

portancia.

Caso B

Haría de Soto

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- 193 -

Cuando se cas6 María era muy joven. Vivía en casa de p~

rientes y tenía muchas di ficul t.ado s económicas: "yo me casé de15 años, entonces vivíamos en casa de mi tía con mis hermanos y mi mamáy también mis abuelitos". Explica María que eran muchos, pero él

su mamá no le alcanzaban los recursos para vivir para que vi

vieran separados.

María pese a las dificultades que ha tenido que enfrentar

considera que su matrimonio es afortunado porqllc tiene casa

propia y su marido aporta a la unidad dom6stica lo que qana:"si hay maridos malos que botan la plata con mujeres, con 'trago, adomrisles poqan a las mujeres. El mfo no ha sido t1sf. Todo lo t rao <l 1;1 Cll­sa, Por eso gracias él Dios tenemos un tocho a donde' vi vi r ",

En cuanto al número de hi jos fJ1t1rli'l no 10 toma como por; i 1) i

lidadcs de ayuda presente, aunque 10 ht1q.l, mós bien, L¡ f~i('I1--

te como una estrateqia futura.

tos solteros como un apoyo (en su C(l:,O '1 hilas) por ('1 ilpnrtC'

(monetario o de otro tipo) que ella considera una r c t ribucíón

por la crianza. Ella afirma que se tiene los hi ios: "no es porlo que ayudan, sino porque Dios TTl('\ ha mandado, M-"jor t ('I1CT una Inmil i él

errando porque as! SCllDS bast.antos y C'1.1 or~ h.m do V( '1" I)()[ nosot r()~') (sc' n-..­fiere a cuando sean ancianos los Pi1ptis). ~1i s hijilS !;1 ,1y tiC1.111 ,1;1 so 1lCr¡lncmás en todo ayuda, coro ya son señori tus tiene derecho a ,lyu(lél rrro , yohe sufrido mucho en la crianza de ellas, eso los he oxpl icaclo, Los h iioscasados de repente vienen a ayudar, poro son apart.o ('Ll.on, 1"lS h i.iu~-; f')olt.oras cst:::~n mucho mejor, porque 10 c"ri.ldt1, v(-..r.'.'i corro sur, o ", nC' r i él-eso-

a la h i j a mti s joven (1 7 años ) que n n e n l u el.i a n .i 1 r (lbni (l r u C' 1:nde la casa: "si, a ella la tengo en la casa para que ¡W' ¡lyulle\, no 1a mando ni a trabajar afuera porque TTk1s b ion S0 rllll-l,l, ot r;l~) V(-..('(-..~') ~)c' v.m d(-..uno".

En el lote además de vender una parte para que el hi.jo casado

mayor, construya su propia vivienda, María tiene un espacio~I\'

ra sembrar.

truir una vivienda pequeña d o unos JO IllLs 2 (en un c ua r t.o d uo r mon

seis adultos): "si atrás sembramos y de repente t.encrros chanchí.tos y cuyos,pero es casi s6lo para el uso, no alcanza para más l'.

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- 194 -

Dieron a sus hijos educaci6n primaria y de "oficio" para

una hija que ahora trabaja y aporta. Le ofrecieron al hijo

mayor la posibilidad de continuar estudiando por consioerar

que ese podía ser un apoyo en el futuro, pero él no quiso.

Dice no hacer distinciones en la educación de los hijos var~

nes y muj eres: "no porque cuando les puse en la escuela pensé darlesa todos iguales, porque después dicen usted no me puso en la escuela ysi de alú no aprenden ya no es culpa, iquales les dimos, ni al uno másni al otro menos. Mi esposo y yo quisimos darle al varón mayor m5s estudio pero ~l nos despreci6, dijo que no, que quería t.rabajar entoncesdije, varros darle a todos iguales para que no peleen, hasta sexto qradovanos dar. La otrita la que es costurera, ella nos pidió, ella elijoque querra estudiar la costura tres años más y le dimos, ahora ella está trabajando y si nos ayuda, para que".

Marra es decisiva en su aporte a la estrategia de vida

de su unidad domé s t í ca , ella orq an i.z a 'in to r n amo n to 01 tr-a hn

jo de sus miembros de f o rma de ap r ovo c ha r me jOI- l o« n'cul :;()f;

existentes y lograr los necesarios. Ella es In CnC<1['CFlda del

presupuesto familiar. 1 q U i1 .1 mo n te, o 1 ] íl S e re 1él C' j o n .: e ()11 1()~

vecinos integrando redes de nvuda s mut U in; ('11 (' 1 lK1T)- i o •

Cuando la hija casado que' f rnhn j;l ('11 un ~1el/ i no picli(i f)('"

miso para dar a Luz s l.a s o iio r a Maru.i,l In l"c'lIIpl,\z() clu r o n to Ul1

mes: "pura que no pierda el t rabajo mi hi j.l, porque' ll¡lY ve'ccs que' c' lremplazo ya se queda".

Sus buenas relaciones con los vecinos le ilyudan en ('1 no

gocio. La gente pasa saludando o se aco r c a el conversar y

o l l a ofrece: "vecinito o vcc i.ni t.a venq.l n l.l!-; nnpann(l.-\!; {u nlr¡l cosaque venda) haga el gasto, venqa ", Mi on l r,l~; h~lC'(, [;ll~'; vont .lr; f\'1;lrltj,l r-scucha los prob.lemas de la gente y a veces el:) c()w'lejo~l. '.\.1

Marra cuenta que an t.ori o rmo nt.o hncfa pn n ('11 1..-\ c a s a e "conlas hijas hacfa y él lograba har.ina m:Js borilti1 en el f'v'k:) 1ino , yo me cncar'gaba de las ventas, tambi~n trabajé en una fábrica de camisns , pero hacIaen la casa". (con las camisas ella y I.a s nos hijas cosían él de~

tajo). Así, María conforme C\H'n t a ron7

1()~-i r o c u r no s huma non y

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- 195 -

materiales va disponiendo para su mejor aprovechamiento.

Sus relaciones con los vecinos son buenas: "si, yo me 11e­v6 bien con todos aquí en el barrio y fuera del barrio también. Bueno,aquí no me llev6 con mis consuegros nomás , Con gente de los otros ba­rrios también, no ve que yo me iba para las ventas de pan y me hice amiga de todos. Si, aquí con las señoras del barrio hemos andado mucho enlas canisiones, con todas las señoras herms andado, pero si Loqraroos muchas cosas por el bien del barrio, desde las escrituras que la ITklyorf<l­tenerros y tantas cosas más".

Caso C

Luisa de Castro

Luisa cuando se cas6 estaba en Quito trabninnrlo como e~

picada dorn~stica "puertas adentro". Dcspu6s de en5<lda ella

sigui6 en el mismo trabaj o pero "puo r t an (l fuor a " .

que su matrimonio es s a t i s f ac Lo r i.o !>nnlll(' (' 1 c'~~pn~~o n po r l a

ccon6rnicl1mentc de forma r o qu l a r : "n i , yo :a'lIl1í 1I "h\ i.llldo IlI.'lll Ill\('l-.

t as afuera ncmás , Si,mi marido l.odo Jo t 1.1(' d 1<1 ("('I~:;il I)() lxil.n l a pL:11,l".Considera que tiene un buon ntlmo r o dI' 11 i jo:; p()rqlll' :;(1) 1I11d .i v u

da principalmente para el futuro: "ptlra nonot.ioa ,1sf 11()1l1:í~-; nlll l():~

que tenemos, porque los hijos si nyudan , T)í'ro r-n camb i o ouant o IllfÍs h iiosse necesita IlÚS, sea de una cosa o ele' ot.ra , y cuando son l rist.nntos no 01canza para todos".

La vivienda reducida a una cocina y un 5010 cuarto pare-

ce formar parte de una reducci6n de los costos. Ellos o~)La-

ron por dejar un espacio un poco m5s amplio P¡ll-il qul' Luisa

siembre o cuide animales para el consumo in t o r n o <le' 1 i1 f arni >

lia. La limitaci6n del espacio de lu viv-lcn(1a se aquclizLl po.!:.

que además de los seis miembros c uo n ton con huó s oorlc s o vcn t.ua I

mente en la casa. "Si, siembro nanás para el uso plII"a vender no a l c vm

za, siembro col, zanahoria, anirnal í.tos no t.onqo ahorn , pe-ro quiero ver sIcompro para tener vuelta cano ya tenemos cerrumicnLo. Cnvos y chanchos t~

nía yo. Los cuartitos que se van a hacer atrás van ser pura mis guaguas.Imagínese que a veces vierlen mis suegros o mi sobrina recién vino y noso­tros ya sorros seis, el problema es que ya no había plata para el aimerrtode la casa, tenerros que esperar hasta l\gosto pura hacer otro prést.arno ,po!:.que antes había que hacer el muro".

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- 196 -

Respecto a la educaci6n escolar de sus hijos Luisa la

considera más importante, inclusive les paga escuela partic~

lar para cursar la primaria. Ella asume los quehaceres do-

rn6sticos para que los hijos puedan estudiar. No hace distin

ci6n entre la educaci6n de los hijos, considera que es iqun!

mente importante educar a los hombres como él las mujcrcs:"pa­ra rrd parecer hay que prepararles igtlalcs los varoncitos y las muieres,le pusimos en esa escuela porgue me parece a mi y a mi marido que es ~jor allá enseñan de todo hasta religión. Lo primerito son los estudios,después si pueden si me ayudan, sino hago yo. Si, sin los estudios noson nadie, hoy día se quedan cano uno".

Respecto al aporte de Luisa se dá más en la auto-produc-

ci6n i.nternamente en 1a un i.d ad clomó s rí c a , y o xt o r namcnt o o n

el barrio a trav6s de la pa rt i c i p<1ci ón o n rod0s de' <1Yluln mu-:

tua entre vecinos.

Caso O

Mercedes Fernández

Mercedes a pesar de contar con C' 1 apovo r-oo nónt i co roqn-

lar del papá de sus dos hi40s 0S una muior sol<1 ror consti-

tuir una "segunda fumiliil".

<10 II n haq il r • Pues cree q 11("' S II ~~i r:- 11 (l ción s (\ r í.. el i ~~ t i n tn : "r-L.ro que el papá de mis hijos es bueno, poro si yo me' 1111bl('¡-,-1 C'1.~~¡1(ln yo 0St.arf'a mejor porque por lo menos hubir-ra t011i do un !1(XFII'''.

lIa tenido siempre que tra l i .. i .. r , ('~~ I n r (")IHII'II<I;Hld \' IL1C('1

que el aporte econ6mico de la "comido" alcance pn r a otros ga_~

tos y hasta para pequeñas inversiones: "el semanal para la c(lll)i~)

nunca me ha faltado (el papá de sus hijos siempr0. le viene él dejar) de lacomida muchas veces saco para pagar las d0.11c1é1s y los interesos. Cuandollegué al barrio puse una tienda, empece de él poco, Yo cargaba de la ~~

cidental para arriba. Una señora se admiraba de lo que cargaba yo, asíernpec~ con tres jabas, despu~s con las ganancias iba guardando y con esomisrro ya me hice de jabas, llegué a t.ono.r 30 iaoos, después vendí parapagar el terreno de abajo y la construcci ón de") 1¿f cas i ta , l a t ir-nd i ía Y;l

me daba".

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- 197 -

Respecto al número de hijos Mercedes considera que dada

la situaci6n leqal ella no puede tener m~s hiios (por ser se

gunda familia) pero sostiene que sus hijos scr5n su apoyo en

el futuro: "si mi hija, yo ahora cuento con mi papá, pero después ten­dré que contar con mi hijo, porque sabes carro soy mujer sola".

La construcci6n de la vivienda le cost6 mucho esfuerzo.

Aparte de ayudas en mano de obra necesit6 obtener pr~stamos

y vender obj etos personales: "vine él vivir acá cuando ost.aban las paredes, el techo y nada más, sin piso, nadtibmros pn el aqua. Primero es-­tabarros yo y una ñaña soltera, ya después vino mi cuñado y ya viéndane sola vino mi hermana casada. La construcci6n le hice primero con el prés-­tamo que él me logr6 en el banco. Después yo vondf 1(1 coc i na , un r ad io ,un t.ocadí.scos para poder poner puor tris y ventanas, (lo~;Pllés el poptí do mishijos me hizo otro préatarro para enlucidos y parn arrcqlor el- dormi bor i o ,Después vendí un par de aretes y lo que i ba rocoqi ondo <1<' 1(1 Dlorc(l(1c'r'C.que tenía. Por eso creo que Dios me dió por 10 monos baio un t.ocho (lon­de rmterrre".

Mercedes ha construído o n su lot (' un cuar t o q ur: ,[1 q u i 1:1

y conserva la parte de atrás para sombríos. l\parte de esto,

ella 10gr6 comprar otro lote él 200 mo tro s ele su c a s a y COI1S-

truir una casa que alquila. Los pr0;;tumos son hechos a nOI1l-

bre de ella con la qa r an t La de él (orio vi ab i 1 i 7,1l Y;l que (-1

es propietario de una farmacia).

Respecto a la educación escolar ele sus hi -los, r1c'rcc'clcs

opina: "sabes que mi ilusi6n más grande es que ellos se preparen y seanlo que yo nunca fui, por lo que hoy sin el estudio no son nadie. Entonces pienso que mis hijos sean bien educados, tcnqun una buena profesióny lo que te repito es que lo que yo no ho sirlo o l.Ios ~~('¡H1. Sobes quepor la educaci6n que le de una buena cabeza a mi hijo, poro mi hija tambí.én tiene que educarse para que sea algo. Creo que por igual porque -­una mujer aunque sea para que se case tambi én tiene ouo ser bien educa­da y bien preparada". \¡Il

El aporte de Mercedes él la o Labor a c ión de u n a o s t.rat.oq i a

no s6lo es básica, sino la única como ~jefe del l ioq a r , En ese

sentido, aparte de aportar con i n q r o s o s , (llr11Tl i 11 i s t ro las rcn-

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- 198 -

tas recibidas (alquileres y pensi6n). Ella tiene una partici

paci6n muy activa en redes de ayuda mutua dentro del barrio

y fuera de el.

La red de parentesco es fuerte también. Su participa-

ci6n en las redes le permite utilizar el endeudamiento como

una estrateqia. Ro s pec t.o él uno de los préstamos dice: "Era unossI. 2.700, pero ya le debo sólo unos SI. 700, de eso ya tengo que reunir­me en esta semana, ya vaya ver si hafJo ésto y a una señora de unos 2.000sucres que estoy atrasada con los intercs0.s. Ya me ceJe' la letra de paqarquizás me quiera esperar, de 10 contrario me tocaría ira ver por ahí para pagar la letra, hasta ver si le renuevo un préstéUllO al banco, a otra­amiga t.ernbí.én le debo, es amiga de confianza, no se cuando le pueda pagarDios 000".

Mercedes ha participado activamente en las comisiones pa

ra lograr las escrituras y otras mejoras on el barrio.

Caso E

Margarita de Ruiz

Margarita de Ruiz considera \fue flU unión COJl D. Huiz llO

no ha aportado de forma r oqu la r p a r a ma nt ene' r 1 (1 c a s a e "yo (~1lllJ1

do me hice de ~l, me he ido enqañada y los 16 años nomás Lonf'a, No mo --­cont6 que era viudo y dos de los hijos de él he criado yo, p2ro eso nome importa, ~ro mucho me ha hecho sufrir él. lleJ sido IllUY qrosero élNunca ha dado corno es debido, yo he t.oni.do la P1a til cuando be sal ido a lavar, de ahí no.

En cuanto a los hijos ~1(trq<lrit.a no coris i do r a que' ~~C)lll1 una

ayuda para ella, pero sí para el marido Clt1C 1()~ inleqrll a la

producci6n y les paga salarios simbólicos. 7\1 hilo TT1<lyor si

lo considera su apoyo. M:1 s b i (" n c"\ 1 n fÍm(' r () d c' 11 i i o ~l 11 i1 S i q n i -

ficado para ella un esfuerzo para mantenerlos vi.vos ya quC',p~

ra ~l ese hecho no parece tener m<lyor signific<ldo (se murio-

ron dos niños de desnutrici6n). "Si, 1<l llona.ra y el otro varón 10

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- 199 -

ayudan en todo a ~l, en aplastar, en hacer el jaboncillo, en despachar,en cargar el horno. Hasta los pequeños ayudan cuando vienen de la es­cuela, n<Jl'Tás a los qrandcs dizque les paqa , pero asf , Ya no puedo yotrabajar allí por eso empecé con Jos Iavados , 01 doctor me prohibió, todo por el ojo, no podfa IX)r el polvo y la tierra".

"Hace algunos meses dejé de lavar cuando comencé él cnfermarrre, mihijo mayor me dijo mamita quédese on la casa , porque de ahf antes en toda la semana estaba yo lavando. A la gLlaguita le dejé al principio, ~'a

despu~s ernpec~ a llevar porque mi marido decía que ellu. molestaba".

Ella cuenta como casi pierde la hija mientras estuvo in

ternada para operarse del tumor en el ojo: "cuando llego del haspital mi hijita se est.i.ró nomás , yo pegué W1 grito, mi Dios, mi guaqua,­~l di jo, la guagua esper6 que venga la ITk-:un5 para acabarse, Yo que lacojo ha estado chorreadita como que le hubieran bañado, entonces, laquise llevar dijo si mi guagua mucre por lo menos para sacar el ccrtificado, pero el taxi que había vonido Yil S0 habío ido, d ijo yo, aunquo ­sea cami.nando me llevo mi quaqua , ]0 curnl)i6 de ropí1,l0 d ijo que me í.rn iqa la ropa limpia que como así lo ti0T1C as} él mi quaqua , yo Jo visto Y .-­el envuelvo con la chalina parn i rnos breve', pnrq\l0 cu.mclo yo ('~)L1hi1 ('1\

el hospitnl J""TP han dicho q1l0 yo p(Xlr<l dr"('¡ r'le' n m¡ llJ.lr;llc) P;U"'\'l (!;}r/(' de'lactar pero el no qu i so, no la t rajo , só1() ];1 ll\íll1li"l< k-rn 1(' h.m <léldo ('! :(.

t i.ompo y sabo corro. Y chorroadi 1".1 ("'::lnh;-l, h i o l n p~>' ;·,hl, ('Ilim!lo 11('(J11~.

I)('spu(.~j q\lC'Jc~ Cc1llll>;r- .lo l)1>riqll(-, l r- clr llllil llIíllll,-l¡Jl>¡-il (';11 jl'nll' y ~:l' .Iurmi6 y <1c'spurs ya 0rrq)('7.6 abrir lo;; ojiln:-, d("'~:rII16~:; Yél 11' dr (,1 !;('/lO vsi, coj i.ó nomris y ya csttl hnstn .ihorn , !~i 11'\I(It) l('ch(' I1d::!,l :1!1nr;l".

Ella dice acerca del número de h i -jos: "mejor fuc ra tenor pocos (hijos) porque ahora la vida está d if'f'c il, poro c l.a ro los hi jos uyi.-iclan a t.rabajar , m3s que todo él 61. Siqui o rn cuando uno ("'sto nk~s vicill-­que ya puedan ver por uno". Como SP d0S P r0THh"' <1(' 1,1 (i 1 tima po r-

te de su oxpre s í ón ella o s po r a élPOYO do sus 11 j "jos cuando os

t~ mayor.

La vivienda (desde hace dos aGns) 0T1 que est~n ahoro os

propia aunque vivan hacinados (IHICVC' perr>oniH:; ('11 un cua r t o

2de unos 7 mts ). Siqnific6 un nv a nc o con s ido r a h l o con r o La

c i 6 n a lo que v i v ! a n a n t e s; s o t r () t ah (1 el(' u n a pi 0. 7. él ~l un t o

al horno que alquilaba don Huiz, sin piso (tierra) y en mal

estado. En la nueva casn no hay espacio para sombrío ni tam

poco tienen fosa s~ptica.

a dentro de la vivienda.

Cuando crian pollos estos entran

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- 200 -

"En la otra casa si, allá daba. verguenza. Si, estarros mejor aquí.Si claro todos nosotros ayudarnos para hacer esta casa de aouf , pero aquícatarros más bien".

Ella considera importante el estudio para los hijos pa-

ra que est~n mejor en el futuro, pero dice que la decisión de

hacerles estudiar a los hijos depende ele él. "Busto el sexto qrado les ha dado <'51, no sé si les scquirá mandando o no". Considera q uc-;-

la educaci6n de los hijos varones es mtís importante que la de

las hijas mujeres: "l\mbos (varones y mujeres) on .irupor t.ant.o educarlos,pero claro que los varones es más principal porque tienen que conseguirtrabajo para mantener la familia.

El aporte de Margarita n In sobrevivcncia de In uni~nd

familiar ha sido decisivo, ello mrís Il11C con a po r t o s o f'r-c t .ivo s

moneterios (que tambi6n hu hecho) con brl aqur-da (]C' fo rma s pa rn

sacar el máximo provecho de todo y dr- una C¡lp¡lC ¡ <lile1 muv qrílll-

de de soportar si t.uac i.ono s con f lí c t i v a n con su C'~::P()~"l() Y de' IH'

ccsidades.

do se puede mantenerse en pie". Ella orq<lnizrl los qilGtos pnrél

hacer aLcnnz a r la pla t a q uo r o c l ho C)(\l C~~·'POS() I l í1 r í l COIllIH'il" 1ll11-

chas veces la comida de ~l nomri s , ¿-J~)('Cluro.

Cua ndo no tiene r ccur soa , o l l.a 1>IISCil 01 modo de' ournp l ¡ r

con lo que tiene que hacer: a sr-q u r a r e] Funct.onnrn i o n t.o y 1;1

sobrevivencia de la familiil.

siqni fic6 esa responsabilidad: "sentí dol orr-r: pero levanté a hncorel café, tuve que hacer la canida y salir a 1avar , pero y(1 no me aquarrtaba más , el dolor estaba dándome Las vuol.t.an, M-" vonqo a la quebrada a ­lavar porque no hay caro cojcr aqua al 1tí. No ves ,que la manquer-a nues­tra está puro hueco y él no me dá para que compre otra". l,¿-J q uc b r adre

queda a un ki16mctro de la vivi.ondn, existe unn llave de ngua

a 20 metros, pero se necesi ta una manquor a p a r a llevar el agua has

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- 201 -

ta los toneles y poder lavar ahí en la casa.

"Cuando no me dá plata 61, yo fió on In ti ('n<1(1. Cuando va me' lTh:in­

da comprar algo para él ahí yo pago, pero me cont.ro.la mucho. Si, 61 si~

pre tiene que tener su buen pedazo de carne. De ahí Suco para el caldoy algo más para nosot.ros. Yo he aguantado t.odo 10 que me ha hecho sufrirpero todo por mí.s guaguas".

Margarita no ha participado activamente en las redes de

ayuda, ni de vecinos (muy poco), ni do parientes. Ha buscudo

su estrategia en su propio s a c r i ficin y (,1 dr- ~~11~~ h ij o s ,

Caso F

Rita Salcedo

Rita Salcedo considera su s c q uruIo matr i mon in con "n uo r t p"

ya que su situaci6n mejor6 mucho.

nnda , al contrario, perdió. Por p.jc'1IJplo, (,1 '('!T('1l1) qtH' (.J In

tenía en el campo, y que recibió elo h0rC'nciél lo hu vendido.

Cuando su marido la abandon6, se L'l.ov ó n Lqu nos obj o t.o s e "yo mevenqo con los guaguas, lleq6 al cuarto y nada, Y (llCJUn(1~·~ COS;1S dol CU(1rto se ha llevado. El reverbero, la JTk-:iquinfl (le coser lf1J(~ yo t onf'a de he='­rencia tambi6n se ha llevado, la cobija la m5s buena so hu ] Iovado , sóloqued6 la ropita y alguna cosa JTIc'Ís".

Con su segundo marido oons i d o r a q uo hn to n i d o :.uc'ctC' por

las cosas que logr6, pese a que ahora Ii l f j mo no (';-,f<'Í ta n bien

la relaci6n. "8610 ahora ült irnarrcnte Pepe cst~ así. Pero do rcrx~ntc~

cuando tengo iras yo digo que si va a scquir <Jsí, rrojor que se largue. Elotro día le mand6 arriando. Yo vengo trabajélndo y me daba 1.1nu8 iros. Se.imaqfna el met.í.do , una sola vez nos peleamos y estos quaquas sufrieron.Ya no daba nada s6lo venía a estar bravo, yo le digo, si quiera para tushijos tienes que dejar para la leche, aunque para mis hijos no dés y mí shijos no necesitan de voz. En cambio para la mamc1 le Ll.ovaba por qui.nta­les y para nosotros le digo, porqué no cltís, 1Il' dice, voz esU'ls qann.ndo,Jle digo bueno pero n-e tienes que dar".

Cuando se cas6 con Pepe lo consic1cr6 un afio ric suerte:

"ese año apareci6 el terreno, la casa, me canpr0 uno m5quina de coser ,unat.e loví aí.én.ese año esttibarros de suor tr-. M:"! c("npn~ (~td. trxlo , todo lo que

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tengo. Después la mala suerte. Y también ya no trabajé hasta casi W1 año,es lo que estoy trabajando de vuelta, pero es que pasabaroos mal aquí no t~

níamas plata porque él crnpez6 que cuando quiere dar d5 y cuando no quieredar no dá, entonces yo empecé a trabajar, alú es otra cosa".

Los hijos mayores son quienes permiten que Rita pueda tra

bajar y con ello asegurar la mantenci6n de sus niños :"si no fuera por ella (la mayor y el otro qrando l no podría t.rnba jnr yo. Ya cuundo­estese ya mayorcita les tocará él ellos ver por mí, ahora qrucia a Dios puedo trabajar. Mi hijo el mayor se está sacando bien ahora los fines de se=mana, el vende helados, pero cuando lo cojen preso porque no tiene pennisome da pena porque se queda encerrado hasta la noche, pero ~l si me da parala canida y se canpra ropita de repente".

La vivienda de Rita es de las m5s amplias del scctorCtiQ

ne tres cuartos) ella la adquiri6 en la época en que estuvo

bien econ6micamente. La hizo construir a través del hermano:"mi hermano dijo si quería que me dé haciendo la casita,de mano de obra nome cobr6 pero así taro la gente y yo tenía que darle plata para que les t~

gue, yo CaTO todo lo he ido ahorrando en el banco".

E11a e o n s ide r a q u o 10mu j o r (-1. uC' po ~~ (' C' ( , ~i 1.1 (' ¿1 ~i a, PO r t (,-

ner donde vivir y recibir un alqu ilo r , "'rLUTd.ri(>n ;,C' quedaron al.qunascosas del sa16n, esa cocina con horno, con talo es del 8':1 Ión mi smo, Hk'ÍS

bien una grande que compré para aouf osa vo lvf él vender n mi, hermano por­que rm falt6 plata para tenninar 1a casa, Tilmbj (-n vond f ot ra cocí ni) d(' 1sal6n pero por ayudar a una comadro que i hí1 1.1 poner un ~cll one i lo .le vr-nd '1más barato, a ella le dí mesas y sillns, también rntls bLlrnLo, por c1.yudclrlca mi ahijado".

La casa es de dos pisos, In parto de élbajo y un cuorto son

alquilados, con eso el espacio de scmbrfos en 01 .loto so hu re

ducido mucho, además de tratnrse de un lote m~s chico que los

dcm:ls.

Sobre la educaci6n e s co l.a r para sus h i. j o s , ni t.a considera

básica para que puedan trabajar en el futuro, C'1 hijo mayon~

asiste a la escuela secundario y In 11 i j n mayo r C' 1 próximo año

(termina ahora la primaria) será matriculada en un curso de

corte. Ella se sacrifica para que sus hijos siqan los ostu­r

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dios y espera con ello que después se ponqan a trabajar en

algo mejor: "a ella, a la r-~TI"ra le vaya poner a que aprenda el corte.No le puedo dar ITlc:'Ís que eso; que aprenda una profesión. l\l var6n s.í sporque él algo ayuda ahora, no quiero que deje los estudios para trabajar,­siquiera que se qradue , quizás cst.arri mejor después".

El aporte de Rita Salcedo rara la sobrevivcncia del gru-

po familiar es decisivo; tanto para su trabajo directo, co~o

en el funcionamiento de las redes, en la solicitud como en

la retribuci6n de las ayudas, él nivel de vecinos y de familia

res. La red de ayuda familiar a que pertenece Rita fu6 bási-

ca para lograr lo que posee ahora y posibilitar que ella siga

trabajando fuera de la casa y así llpnrLar más que antes (tc-

jra para vender).

Cuando su marido dej6 de aportar regularmente dinero al

pez6 a faltar para la comid~.

tenci6n principalmente de los hijos del p ri mo r mn tr imo n i.o .

Rita Salcedo en su primer matrimonio demostr6 gran capa-

cidad de soportar situaciones conflictivas en funci6n de la

sobrevivencia de sus hijos y tarnbi~n su capaci~ll~ do pnrticl

paci ón en redes que v Lab i 1 i Z,I )'011 0:;í1 r.ohn"v i VI \1)(' i .i ,

Caso G

Patricia Moreno

Patricia considera que ha tenido "suerte" en su act.ua l.':'

uni6n, por el hecho que Galo siempre 11n nportlldo con requl~

ridad, trayendo al hogar todo lo que gana. También por el

hecho de haberle aceptado como madre solf 0 r a , así como a la7

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- 204 -

hija que tuvo antes.

"Con el papá de mi primera hi j('l fué un frélcaso,ól eré) casado, élc1cmlistenía muchas mujeres, no valía. Calo si es bueno, no me ha faltado nuncahasta ahora".

Cuenta que con la segunda nifia ella dei6 de trabajar y cQ

mo tuvieron muchos gastos, 61 ha suplicIo trélbajé1ndo rnfis horas:"si carro los gastos fueron más ,Galo tuvo que trabajar dos tUITlOS, porquesi se puede trabajar de acuerdo a lo que tilla desee en el hotel, ahí sonpor turnos, pero es duro trabajar así. Por esto él mi no me ha f'a l t.ado ennada, ni tiene costumbre de tarar, se admiran todos y dicen que raro. Conmi hija tambi6n es bueno. Le da para ella éll iqual que a la hija de él".

En cuanto al número de hijos Patricia considera más bien

una carga tanto en el cuidado como en lo económico, al menos

mientras están en la etapa crono16qica en que se encuentran

sus hijas (1 y 5 años). "Yo pr(~ct-ic(mlC'n'('" yn no qui oro tc-rv-r mls,hil.sta para cuidarles en cambí.o tonicncl0 muchos hi -jos 08 nroh 1eJn.:1S que no f10les dá todo lo necesario, o se crían rml, pn rtl mí S0 T1l0 flil 11.-1C0 el11 ro t ('.­ncr otro mtis¡ si por 10 menos hi1St:il (Jl10 S0;"m qrilnd0r;; buono , qu i 7.,~~' "¡1~'­

ta cuando ya cst.én grandes y puedan ayudar on a 1(Jo" •

Patricia cuenta que 10 (>poca m:.ír; di fíC'j 1 pn r a o l.La fU0

cuando naci6 la segunda niña por s o r promn t u r n y t ambi ó n por

I or: ('()lo~ q uo le c au s aron t-ranfit()nl()~) prdcol()q;('()!) ("'n ln pr'_~_

mera hi j a: "fué más difícil cuando ya nació la soqun.ln ni lío, tonfa quotener mucho cuidado, además no me rllc()nza}).l. 1() plélta, 1.'1 otro c<lmbió c1C'1.todo" .

La vivienda es a Lqu iLad a , I a s condicionc"':::, d(' h abi ta o i.ó n

son buenas, pero Patricia no se siente' bi o n o n (':~C' b a r r i o , 1\

corto plazo piensa req~esar al Carnal y ~ lllrqo Jl]oZO vC'nder

un terreno que Galo tiene en Chillo<JilLlo e ir il vivir en la

Costa (agricultura). Piensa que sertí mo j o r p a r a 1n sobrevi vN I

c i.a de In unidad dornó s ti c a ni :")(' d o d i on n il 1í1 ílQricultura:"Osoa, que mi marido tiene un tcrrcn:i.l-o quo ponsaroos vondor porque es muylejos, pensamos irnos a la Costa, comprar C'llJtl porque yo t:é1Jnbién he vivldo en la Costa, pienso que la Costa es prcxIucliva, es sólo hasta tenerun terrenito y cria el fruto rapidito, mí.ontrns ql¡("' aquí sino hay platase queda uno con las ganas de un pJtlt:nno o d0 a l quna fr'uta , en cambio

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allá uno se ayuda bastante.hnmbrc, en cambio a115 yo meíabarros íbarros nom:.ís a coqcrno hay nada. Pero 050 no es

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Si fuera bueno porque acuf él. veces se paso.acue-rdo ql1(~ con mi s horrmnon cuando nccc'si­alguna f ruta , mi.ontr.is é1quf r;jno hi1Y pL,télparn ahorn , ~)C'r:í lnii:; ndo l.mt c",

Acerca de la educaci6n de los hijos, Patr ic i.a piensa que

es necesario tener una profesión: "yo si crui s i.ora que mis hi iastengan una profesi6n para que no estén pasando noccs.idados corro uno, Yomismo a mi me gustaba mucho la onfcrmcrIe , pero no hcpcxlido hacer el curso para J.XX1er trabajar en eso".

El aporte de Patricia tambi~n ha sido significativo, en

el otro barrio aportaba con su trabajo de lavandera y el tr~

bajo dom6stico. También por su pa r t.i.ci pn c í ón o n las r oclo s fu

miliares y de vecindad. En el nuevo barrio ella C'st:l .impcdid a

de dar mayor aporte y con la rcducci~n do los incJrosos cllll

ha disminuído los gastos en alimentuci6n y otros. Cuenta co-

mo hacía cuando lavaba todos los dril;:;: "si, ya c1r:,iilln hac ir-nclo Lodo I me levantaba a las cuatro de la rmñana , doiaba hacicnclo lcl ccmi.da , ylavando. En cambio ahora ITC hace duro porque solo con un lavado estoy,los días viernes que ~l se queda con las ni.ñas , 1\ veces por no sacarlesmuy de mañana o el tiempo no alcanza para arreglélrlas, entonces no voy.l\hora 5610 con lo que gana ~l no rm o Icanzo , ontonccs ya no coci no ('1arroz , mañana y t.arde, otras cos i t i'lS íamb i t"~11 y,-l no CClIllfl1'O, pon lile' I}O m'()1C<1J1Zél " •

Las mujeres han clasi f í.c ado s u s un i o no s ('11 do~~ tipos ,con

él Lqurio s intermedios: "con suerte" y "si 11 ~';u(' r t (''', de' llCll(' r.Io

u lo que ellas han juzgado o n 01 c ompo r t.am i o n t o de su compa-

ñero o c6nyuque con relaci6n a sus cspcctativas.

casos consideraron aue la un i.ón fuó "con s uo r t.o "

y G-.

'Eres de los

,,,"

-caso n , l'

La principal causa de ese juicio es que sus compafieros

aportaban regularmente a sus casas. Por fanto, la situaci6n

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- 206 -

que ha n vivido con esta unión o ma r r i mon i.o 11<1 sido más po s i.

tiva en relaci6n a la onterior. nos do ellos son obreros

(B Y C) con muchos afias de estabilidad y el tercero es un cm

pleado de hotel, tambi~n con algunos afias de servicio en el

mismo puesto. La estabilidad en el trabajo do estos tres c~

sos parece tener alguna relación con el nportC', cierta sequ­

rielad econ6mica y una e s t r a t crr ía qur- ha d ado r o s u l t.ad o , 1\

parte del factor econ6mico, 1i1 ¡lIIr;('Il<: i ¡l de' "mil I ()~; l r a t o n " ('r,

otro factor para juzgar como positivo la 11nión con el compa­

fiero. Lo interesante es que ese fnctor viene unido al ante­

rior en los tres casos. Poro ese fao t o r on s I , no define p~

ra ellas si la e s t r at.cq i a h,l s i do pos i ti. Vil o no.

El caso F', (el c6nyuque t r ahaj a por (,llC'ntíl propia)jU7.<¡<l

su un i6n con suerte, aunque ú 1 t: Lmamo n te es rnod i () i r rortu l il r ,

en comparac.i6n con lallméll.n ll unión a n to r i o r , <111(' el po s a r d o

sus esfuerzos no resu].tó.

El caso D, se trata <lo una SC'fJllll<!n f arni ,. i el. ('\len 1"<1 COIl

un aporte econ6mico r oqu la r¡ no lo ('Oll!'"; i d o r n r- n t f'l','ll1('llle' con

s uo r t o por s o r seqllndtl f ruu i ] in dl'l míll i r lo ,

hubiera casado con otro hombre a un q uo m:ís pohn-' hn lrr I.a si 110

quizás más pos í.t.Lva como c ntra t.oq ia !)Orl1ll0 no ('r;lnl"Í<l "so-

1a". Los casos A y E son oorrsidorados de' ma I ¡l suerte y como

un.i <,strateqia que no r o s u l tú. La f a l t-n (1C' nflort e's y molos

tratos hizo que se bus c a r-f o tra s 0r;IT¡1l('qi,,~:; I'ill-" r~obn'vi\',

De los dos, el E es mfis d r amri t Lco , ('1) (p.H' ~;()I)(lrl¡ll- todo se

ha constituIdo en sr en uno 0slrot0q¡~. El hr nnbro del Ci1~)O

1\ es vendedor ambulante y (~I c1('1 Cil~;O ":, r' i011(' un a cxploto-

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- 207 -

ci6n artesanal, o sea, sus inqrcsos son b,,-jns C' irrcqultlrcs.

Tenemos tres CtlSOS "COIl nuo r Ir''', d()~) "ro qu l él r0S" y dos

con "mala suerte". En todos los casos la unión o matrimonio

se constituye en una búsqueda (10 una e s tra t.ocr i a nueva que pll~

de tener resultados positivos o no.

El número de hijos no asoma como una estrategia conscien

te, pero si (todos) como una soqu r i dnd pa r a 01 futuro, Clléll1-

do los padres sean mayores (scquriJl (ld s oo i a ] que no c uon t a n ) .

1\dcm:ls Jos hijos qo nc r al rnr-n ro a po r t n n COIl nl'lfin I i j-o (1c' (1)'\1-

dél.

( ."

Por la od ad c r orio 1Óq i (';1 dr'

(principalmente este úllill1O)

( ., ') \

1,; I (') : " ,

I,ín vi o bi ¡ iZélIH\O él );1 m.r. l t " II ,d',l 111

,;OS (pOCOS).

11' '1 ·1 ~ ~ '1 , I . 1 I '1 i 1'" ( ~ : ! 1

1'1 adq u is í.c í.ón de una v i v i o n.Li 111(' 1,1 ('(,¡'0l1d(,j(>l1 ,JI' 11])" C'!,'-

'"I r a t o q i a trazada con <11qU])O!> ~)n('r i I i (' i (":. 1': I l' 1,; 1) 1\, (\!; II , l' \

c ióri fue traer a las h i j a s con sus Ll111i 1i<15 nlll.'lí'<ln~s inle-

qr ándos e así una gran red farn i 1 in r di' .1\ ,7 !.1, COI1 SC'Pé1íilción

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- 208 -

I';n el CélSO B, se c ornpa r tr- 1'1 loto CCHl l a f nm i li n de un hi­

jo, pero la red de mayor 'intc-n a id.icl C'f';I.:l d o n r r o dc' La f am i>

lia nuclear del caso B mismo. El caso e, hil optlldo por dc~

tinar un espacio del sitio pequeño pLlro viviendll y posibil.!.

tar más terreno de sembrío.

Existe sembríos en el lote, en los CLlSOS n, e, o y F (m~

nor escala). Esa es una tarea de la mujer en todos los ca­

sos para complementar los recursos dC' la unid~d rlom~stica

con productos agrícolas, rentas o in to r-c amb i o de' p r oduc t.o s ,

En el aprovcchnmiento del espucio cuenti1n vurlos elementos

en estos casos: los sembr ros (r-ocu rsos), t ama 1)0 <]e.... 1 il V i vi o n

da, (más pequeña menos egresos), al-rus c on s t r uuc i ono s (m!lr;

i.nq r o sos por alquiler u o t l-O I i po ) •

Existe por lo tanto en la mayorfa de los Cusos alqdn apro

vechamiento del espacio, S0(l q ur- S0 (10<1 i ca el 1 il cons t r ucr: i (in

el(\ 1il prop i il V i v i C' nela 11 () I '-;1:; V i vi f' 11 el¡) ~;, () il ~ ; ( 1 1111 ) I f () :; .

El hacinamiento puede to no r r oLac íón con 0:~(' factor () qu_i

z5s con costumbres, pero pr i n oi pri Lmr.... n 1(\, con ~~ll:) (\~; 1 r a tr -q i il::;

de vida. El hacinamiento es cn r ac t.o r I s t.í.co ele' C¡lS i t.od o s los

casos, presentándose más fuer t0 en ('J e a so g (11110ve po r aoria s

cn un cuarto) y menor en el caso J) (tres pcrsonas en un cuaE.

to) . La excepci6n del caso F, puede deberse a las buenas con

diciones econ6micas en la 6pocu. dc la construccjón.

1\ 1. q u i 1a n los e ti s o s n y f,l V 1 runh i (> tl (\ 1 1\ • 1''<) rrna n pa r t ('

ele sus estrateqias de los s i o t.o casos, habo r ("'scoq ido ese bQ.

rrio. Esa elecci6n s í qn.i f ic-ó en l():~ ('íl."1 /\, B, e y n y o n

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- 209 -

menor grado en el P, llegar a un bélrrio sjn ninqún tipo de'

servici.os (agua, luz, t r ans po r to , o tc ) ; POI" ('1 ln-ccio de La

tierra y una vez ahí empezar In lucl1il. coniuntél pnra loqrar

los servicios.

En los casos A, B, e (menos) y n, hubo tInél participaci6n

en la construcci6n (también el E) y una construcción proqre-

siva. Estos hechos redujeron ('] costo (10 .1(') construcción el

costa del sacrificio de la un i d ad dOJllésl i ca, que' P¡l~~Ó por un

período de privaciones e i ncomod idado s . r;: 1. Ci1S0 1", llcCJó a l.

barrio dospué s de Loqrados al.q unos Tc'cursos y qoznlldo de' e i ('E

ta comodidad. El c a s o E, t amb i ón ('r) c1<' 1()~; m(j~; r('('i('Jlt(,~,; o n

el barrio (3 años). La llegada a 1él casil. fué un ascenso n

la categoría de propietario y tamb i 011 dc' mo j o r o rs cond i c i ()llC'~)

habitaciona1es.

El caso G, es de inquilinos muy l"C'c'ic'l1tc"'s (.~ llK'~;("';'). 1\1-

qu i l a n los cuartos por .i ndi.caci.ón (j("' un amiqo y por lH"'ccsi-

dad de desocupar donde ví.vI'a n r oLl o s <1c"'sc('n<1i(""-Ol1 o n C'omndi-

déld Y s o r v i c i o s en ("'so nuo vo l i.r r r i o ,

I~('r('r('nte a la orl ucac i ón C'~";C()l()l (J(, I()!~ !Ji i l ) : : , ('()I1:-;ej('I)-

tes o no, todos la ven como una o s t.r a t r-q i n en ('1 sr-n t í do , de'

viabi 1izar una ocupaci6n q uo p r od uzr-a mn vo r o s r('('lll-Sn~~ y ('11

al.gunos casos mayor estatus (caso D) pa r a la mad r c y/o 01 p~

drQ. l\ 1q u n o s ( e , o y F ) uno n 0 ~, 1r- ,1 111l(' 1n (, ch1e <1 I i v () e ()n 1a

do ellos est~n ya mayores. 1\ un q no I oc1os el i C011 (P 1("' 1 ¿-¡ o d uo a

ci6n debe ser igual para los hijos C' hijas, mllcllns piensan

(13, e, D y F) que es más .i mport a nto la (>d'~cación del va r ón ,

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- 210 -

por e o n s i de r él r q ue e s é 1 q u i (' 11 rl ( l 1)(' r:í (l JI ( , (l J ( I . ¡ '[~ ( ) r1 (~ 1.-1 !il·l J1 ­

\('nción do s u futuro lHHFII.

El aporte de la mujer a lo o s Lra Lr-q i a cl0 ~obrcvivcncia

de la unidad doméstica es importante en los siete casos, ya

sea por ser un aporte organizativo o efectivo. Ese aporte

es más decisivo en algunos casos, como por ejemplo, en el A,

n , D, E Y F; mrís comp l ornc nt.a r i o OTl o t.r o s como ("1 e y c. T~n

los casos 13, e y (; cx i s t o una ~IYl1d;l ;1 1;1 1-('PI'()(II\('('i.ón d(" 1d

f u e r Z (1 d e t r (l b él j o ele 1 tl r ;1 ru i 1 i i 1 (h' 1 () I )I ( \ \ 1) () I I .t l i el '1;\d ( )J - '>' \1

que e] s uol.clo C\~) 1I ¡' i\ \ ' ( .,

( ) 11 o l. r ( )~ (~ ;1 [, ( ) ~:; (I'~ , , ) y 1") ( -x i :; I I I , ) r 1 I I (' 111 i ) I I1 \ I ' I I i'), ! 1¡, ,1 JI! : i

11, \ " 11,11 '( , I , 1 I ( " 111 i~ , 1 ,1I :;t I

t-ivcts. f ,1' ,1 1] l' ('( )I'!I ' 1 ! '¡:I' '111 ,1 i ' i t"'JI

( . I /'

1', I

i, ¡ II (' tI (\ ~, él r ro 11 él n un (l e s t r el t. (' tI i ¡ 1 • 1-: I ( . ,1 ~ (' l ' Ir l ' 1 I

1<1 ~-:;ub~,ist(~ncL, PC)}- ~::;II (';:1 1/11/·lli.\ 1,,111 i tu ] 11 <

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.11'( 1!

d (\ 1.1~' In u] C're s no ~~ i q ni r i (' (1 (1' I ( , 1í i: : ! l' 11' d 1 I (. ~ ; (' ' : ! ¡ I 1 ,1 I I : ;; , I 1 1 l' ~;

de la o Labor ac i ón de lo C~:;ll'(ll ('qi.ll, 1'(II'() si, 1/1.1 1 ' 1,) lllll ¡('I- i o

no mayor peso en es tos c a s o s .

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- 211 -

d (' P (l re n Le 7. e o v ine u 1 (l elo s (l 1 11\1'd i () r 11i <1 1 •

mo nt.o con esas ayuda s es tos mj ~)1ll0S C(1S0~':; (y e I n t (l mb.i é11 ) hn n

desarrollado estrategias que incluyon ayudas bél~,é1clé1s en redes

formadas en el barrio (de vecindad) y m~s urbélnns.

Esa combinaci6n de diferentes ri.pos de a vucl a s mu t.u a s in

tegran las estrategias de estos casos. En los casos E y e,

las estrategias son más urbanas en sus Cé1r¡let(~r'Í~·)t-i cn s y for-

mación. El tras lado de Id s dorn/i s crd ti re] a e i o n.v lo rion un Pí1-

sada céJmpcsino. Los demás CilSOS (el \1: tnmhién por- (~1) pnl-

sus características de miq r a n t C'~) () de' <11 rn m a re' 1¿1(' i ()n con (' 1

me dio r u.r él 1., han b 11s e él el o u n 1) in" r i () (' 01 1 ( , ~; / d!; (' () 11d i < ' i ( )11<' ~ ~. 1': ~ ; ( ,

f ac t o r les posibilito c r o a r o t l"ílSL1ddl' ¡lrf'iel i(';v~ dI' l"<'III I )l! Il { '

ci()n no t.o t .. l mon t.o u r bn no s , :;i 110 qll<' \1"1 ('('id.l~: d ];1:; 11111 ('l'l()'-

res.

muy ('spccfficilS y que' r o f lo 1;'11) ('~~i'l ('(lllil)j lIill'jÓI\ (1111111),)-1111.1\

dI' ('~;II"I('qi¡¡!; <1<, I ('JlIO<!Il<'{'jtlJl (11' 1.1 u u i i l.t. l l.lllli I ¡.II.

:;" 1'11:;( '.1 ('( )11 i (\ I I!I, II Illl 111,11'--

I'!) i n t.o r p r o la tivo qCIH'rnl qll(l ¡Il¡;qll<' 1.1~:"1'!~1, 011 {',¡i,l': di' ::(1/11 (\

v i v o no i.a ? , como el mecanismo ro a l y ('\('('1 i\'o 11l!1' I}(\:~ihi I il;1 Id

ro p r od ucc í.ón de la f uo r z a de' lr¿-ll>éljo, ('11 u n a 1-()11lJ,}ciún sPc'ial

d()IHJ(~ coexisten y 50. co.nbin a n d i vo r s a s f o rm.r s d,' pnHlllcci ón,

in t o ro amb i.o y consumo.

y no c ap i t a Li s t a s y conrOrTl\;11l UI).\ 1()llll id.l\1 \111 1 ' 1"",1 i c-. (,1 ~~C\n

Lido y la forma de 1. a r oprod llCC ión de' 'os S("C 1111 (':; floptd <l rC's

C'1l CS(~ tipo de f o rrnac íono s ~;{)<'iílll'~;~