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Estudio personas sin techo. Zaragoza 2012

Estudio personas sin techo Zaragoza 2012

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Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Cruz Roja Española

© CRUZ ROJA ZARAGOZA

DEPARTAMENTO DE INTERVENCIÓN SOCIAL

Edita:

Cruz Roja Zaragoza

Calle Sancho y Gil 8

50001 Zaragoza

D.L: Z 1744-2013

Diseño, maquetación y fotografía de portada: Isaac Ganuza Madurga.

Fotografías: Páginas 36/40/42/45/47/48/50/53/55/58/ 62/73/77 I Concurso de fotografía “Mirando a la calle”, organizado por la Coordinadora de Centros y Servicios para perso-nas sin Hogar.

Páginas 12/22/28/30/32/33/34/35/78 Archivo Cruz Roja Zaragoza.

Impresión: Gráficas Vela. Zaragoza.

Autor:

Pedro José Cabrera Cabrera. Profesor del departamen-to de Sociología y Trabajo Social, de la Universidad Pon-tificia de Comillas. Madrid.

Han colaborado en este estudio:

Albergue Municipal de Zaragoza; Cáritas Diocesana de Zaragoza; Centro de día El Encuentro de la Fundación La Caridad; Centro Social San Antonio; Gustavo García Herrero, Jefe de la unidad de Alojamientos Alternativos en el Ayuntamiento de Zaragoza; Hermandad del Refu-gio; Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl; Parro-quia de Nuestra Señora del Carmen; Coordinadora de centros y servicios para personas sin hogar.

Este proyecto ha sido financiado por la Cruz Roja de Zaragoza.

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PrólogoVolvemos a presentar de nuevo una fotografía de los más invisibles de nuestra sociedad, de los que están en la calle junto a todos nosotros, pero a los que no vemos, no miramos o simple-mente esquivamos. Las personas sin techo tie-nen una vida dura, muy dura, con muchas difi-cultades para salir de esta situación.

Cruz Roja de Zaragoza trabaja con estas per-sonas a través de la U.E.S. (Unidad de Emer-gencia Social) desde el año 2005, cada noche salen los voluntarios a recorrer la ciudad para acompañarles, escucharles y atenderles en lo que podemos.

Pero para entender mejor a este colectivo, co-nocer su situación concreta y ver en que exacta-mente podemos mejorar nuestra atención, rea-lizamos un estudio en el año 2010. Hicimos un mapa de nuestra ciudad, una fotografía real de su situación, así conocimos que prefieren dormir en cajeros o plazas frente a los parques, que el principal motivo para su situación es la falta de trabajo, y que lo que les gustaría es poder tener un piso para vivir.

En el año 2012 hemos vuelto a buscarles, he-mos vuelto a peinar la ciudad para poderles encuestar, como siempre gracias al voluntaria-

do de nuestra Institución y con el apoyo de la coordinadora de personas sin hogar y como no destacar la labor del equipo técnico de Interven-ción Social que ha coordinado todo el proceso.

Nos ha sobrecogido la cantidad de mujeres que duermen en la calle, como ha crecido su número, y esto lo hemos podido constatar al ser pioneros en este campo, realizando estudios periódicos para poder comprobar la evolución de nuestra ciudad a través de sus habitantes invisibles.

Fernando Pastor Loscertales.

Delegado especial de Cruz Roja Española en Zaragoza.

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Intervenciónsocial

En el Plan de Intervención Social de Cruz Roja Española trabajamos para favorecer la inclu-sión social de las personas en situación de vulnerabilidad social, intentando ofrecer res-puestas integrales que incidan en los distintos factores que generan procesos de exclusión, o, en su caso, revertir estos procesos. En el con-texto actual, el riesgo de exclusión puede afec-tar a cualquiera de nosotros y abarca un com-plejo entramado de situaciones que , además de la pobreza de ingresos, incluyen factores como el desempleo o la precariedad laboral, la falta de formación y competencias, los proble-mas de salud, la fragilización del capital social y de las redes de apoyo socio-familiar y todo el abanico de situaciones que englobamos en el concepto de excusión residencial.

Una de las tendencias sociales que más agra-van los riesgos de exclusión es la disminución de la capacidad de los sistemas de protección social como estabilizadores automáticos, lo que agrava la situación de las personas más vulne-rables y genera nuevos riesgos de pobreza. Hoy la exclusión residencial y la problemática relacionada con la vivienda se ha incrementa-do: 400.000 personas duermen en la calle en Europa y existen más de tres millones con ries-go de perder el hogar. Analizando la situación

en nuestro país, los procedimientos de desahucio iniciados en los juzgados espa-ñoles en el primer semestre del año 2013 ascendieron a 41.595, según estadísticas del Consejo General del Poder Judicial. Otro factor que queremos destacar es el aumento de la desigualdad social, que tiene en España el indicador más elevado de la UE27: El 20% de la población más rica concentra 7,5 veces más riqueza que el 20% más pobre.

La crisis socioeconómica ha traído consi-go una merma de los derechos fundamen-tales, el aumento de la brecha entre ricos y pobres y el incremento de personas en riesgo de exclusión social o directamente excluidas, un fenómeno del que las per-sonas sin hogar son una de las caras más amargas.

Desarrollamos nuestra labor en los con-textos en los que los factores menciona-dos se producen, promoviendo acciones inclusivas de forma intensiva e incidiendo en la prevención de aquellas situaciones que son o pueden constituirse como de especial riesgo. Además dinamizamos las redes de proximidad y de apoyo social para dar soporte y contribuir a la integra-

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Intervenciónsocial

ción de las personas en su entorno más cer-cano. Nuestro enfoque es proactivo, acercán-donos para responder a situaciones objetivas de deterioro y prestando especial atención a los rápidos cambios que experimentan las dinámi-cas sociales.

Fue la atención a estos cambios la que nos hizo plantearnos hace dos años la necesidad de realizar el primer estudio. Necesitábamos contar con un punto de partida que nos permi-tiera conocer de primera mano quienes y cuan-tos de nuestros vecinos estaban viviendo sin un techo, para ofrecerles respuestas adecuadas. Además esa primera iniciativa nos permitiría ver cómo se modificaba su situación a lo largo del tiempo, ofertando soluciones preventivas. Este segundo estudio nos ofrece claves para ello, además de constatar dos fenómenos, uno preocupante y otro esperanzador. Preocupante el incremento de personas sin techo en Zarago-za una fría noche de noviembre similar a la de hace dos años; esperanzadora la solidaridad en pie de igualdad de la sociedad civil, el sano ejercicio democrático de unos vecinos que de manera libre y voluntaria buscan encontrarse con otros vecinos sin techo para conocer de primera mano sus necesidades, miedos y es-

peranzas con el fin de trabajar por su in-clusión.

No queremos dejar pasar la oportunidad de agradecerles a todos ellos y a las en-tidades miembro de la Coordinadora de Centros y Servicios para personas sin ho-gar de Zaragoza su esfuerzo y su magní-fico trabajo. Sin ellos el estudio que tienes en tus manos no hubiera sido posible.

LOS VOLUNTARIOS......... 022

LA NOCHE S........................ 028Cómo transcurrió la noche del Recuento ............ 030

RESULTADOS OBTENIDOS............ 036¿Cuántas personas sin techo?.......... 037Distribución por Distritos..................... 040Perfil socio-demográfico ......................... 042Explorando las causas....... 051Estado civil....... 052Edad.................. 053Nacionalidad...... 054Nivel de estudios............ 056Empadronamiento.......... 057Tiempo en la calle........... 058Motivos o causas expresadas de verse sin techo........... 059Trabajo ............... 061Ingresos............. 063Uso de servicios........ 064Victimización........................ 069Salud ............................ 070Servicios en calle........... 072

¿POR QUÉ SALIR A LA CALLE UNA VEZ MÁS?............ 012Los recursos de atención a Personas Sin Hogar: Zaragoza 2012 ......... 014

Ultimas cuestiones....... 074 La crisis........... 074 Necesidades... 075 Futuro.. 075 Conclusión.... 076

SIN TECHO / SIN HOGAR......... 078

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ÍNDICE

BIBLIOGRAFÍA ESPAÑOLA SOBRE PERSONAS SIN HOGAR........... 092

ANEXOS 110Cuestionario 111Ficha de inscripción de voluntarios 115 Ficha de evaluación 117Guía de Recursos 119

Porqué salira la calle una

vez más

0131Porqué salir a la calle

una vez másEstudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Por la misma razón por la que necesita-mos actualizar periódicamente otras estadísticas y datos que nos ayudan a entender la sociedad en que vivi-

mos, a planificar nuestra agenda política y a pro-porcionarnos una base de conocimiento objeti-vo desde la que intentar resolver los problemas que nos rodean.

Pero también por una cuestión de dignidad cívi-ca y de derechos humanos. No aparecer en las estadísticas oficiales, no ser tomado en cuenta, o si se quiere, no ser contado, significa de algún modo no existir oficialmente, ser eliminado, des-preciado, verse arrojado a un limbo de inexisten-cia e irrealidad.

Por más que las personas que se encuentran viviendo en las calles de nuestras sociedades de abundancia, resultan ostentosamente visi-bles para quien lleve los ojos abiertos, el hecho cierto es que con frecuencia acaban formando parte de un escenario ciudadano que de algún modo maquinal e inconsciente da por hecho que siempre estarán ahí, presentes y a la vez profundamente ausentes de nuestro horizonte vital personal, al igual que están presentes y da-

dos por supuesto, los bancos en las plazas, los semáforos en los cruces o los alcorques en los que plantamos nuestros árboles urbanos.

Visibilizar la cuestión inquietante y humillante para todos nosotros, ciudadanos que vivimos en una sociedad rica pese a todas las crisis en la que cientos de miles de viviendas se encuen-tran vacías de modo permanente, mientras al lado mismo podemos comprobar que existen personas viviendo literalmente sin techo y en la calle, es un ejercicio de afirmación democráti-ca indispensable y necesario que hay que tratar de repetir de forma regular y periódica. No sólo para poder saber en cada momento quiénes son, qué necesitan, cuáles son las expectativas de la gente que vive sin techo y de esa forma poder idear la mejor manera de prestarles ayu-da, sino para intentar hacer algo más decente y habitable esta sociedad en la que nos encontra-mos todos, unos bien integrados e incluidos y otros en cambio profundamente excluidos. Por-que pese a todas las negaciones, conscientes o no, sin embargo están ahí, presentes, como ángeles caídos de alguna parte, obstinados en su estricta materialidad física, corporal, insosla-yables como un reto inevitable si de verdad que-remos andar todos por las vías de la libertad, la justicia y la solidaridad.

Los recursos de atención a Personas Sin Hogar:

Zaragoza 20121

Porqué salir a la calle una vez más Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

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Porqué salir a la calleuna vez más

Desde la anterior operación de recuen-to en Zaragoza, la red de recursos que trabaja para paliar las necesida-des de la gente sin hogar en la ciu-

dad de Zaragoza, continúa siendo básicamente la misma. La parte más sustancial se agrupa en la Coordinadora de Centros y Servicios para personas Sin Hogar, a ella pertenecen el Alber-gue municipal, dependiente del Ayuntamiento de Zaragoza, que presta una colaboración téc-nica a la Coordinadora; Cáritas Diocesana de Zaragoza; la Hermandad del Santo Refugio; la Parroquia del Carmen; las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paul; la Fundación La Ca-ridad; Casa Abierta y Cruz Roja Española. A estas entidades se les unió en ese mismo año 2012, el Centro Social San Antonio ubicado en una zona más al sur de la que concentra a la mayor parte de los recursos. Sin estar integrado en la Coordinadora, hay que reseñar también la actuación que lleva a cabo en la calle la Misión Evangélica Urbana de Zaragoza.

Es importante que continúe en vigor la voluntad casi unánime entre las instituciones y entidades sociales de trabajar coordinadamente y en red, puesto que con frecuencia la actuación por libre

que llevan a cabo algunos grupos o personas individuales, aunque bien intencionada, puede dar al traste con un trabajo sostenido a largo plazo que intenta abordar el problema en pro-fundidad, desde sus orígenes. En ocasiones, las acciones de beneficencia puntuales basadas en la vieja tradición asistencialista dificultan la acción social fundada en derechos tal y como corresponde a un Estado de bienestar maduro. Precisamente porque estamos en momentos de crisis económica y sistémica en los que se multi-plican los deseos de ayudar y “echar una mano”, hay que tratar de evitar que de la mano de la filantropía reverdezcan y se extiendan las viejas actitudes benefactoras y humillantes que excul-pan al orden social desigual e injusto mientras inculpan a sus víctimas. Esta fue con seguridad la situación que denunciaban el 3 de febrero de 2013 en Zaragoza un grupo de personas que se reunieron para rememorar los antiguos repartos de sopa caliente y pan a los pobres necesitados, adoptando actitudes, vestimentas y trazas de otros tiempos acaso no tan lejanos como creía-mos.

En las antípodas de una normalización del asis-tencialismo está la iniciativa que presentamos una propuesta ciudadana de investigación, visi-bilización y concienciación social, presidida por una clara voluntad de acercamiento a las perso-nas en situación de exclusión severa, realizada por voluntarios ciudadanos, que van en busca de otros ciudadanos en situación de sin hogar, para encontrarse con ellos cara a cara, tratar de conocer sus características, sus demandas, sus necesidades, sus deseos y aspiraciones libre-

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secución de unos objetivos comunes, optimizan-do los recursos y adaptando las respuestas del conjunto de entidades que la forman a las ne-cesidades emergentes de la población zarago-zana. Es esa solidaridad en pie de igualdad con el que menos tiene que muestran nuestros veci-nos y vecinas diariamente la que hace mover la maquinaria de las organizaciones del tercer sec-tor. Sin eso no serían más que cáscaras huecas.

En el momento en que salimos a la calle el mapa con la distribución territorial de los centros en el tejido urba-no nos muestra el siguiente panorama

mente expresados e intentar servir de puente entre ellos y los Servicios Sociales que buscan atenderlos en Zaragoza.

El partenariado y el trabajo en red desarrollado desde la coordinadora de centros y servicios para personas sin hogar de Zaragoza es un cla-ro ejemplo de cómo la solidaridad de la sociedad civil puede encauzarse de manera coordinada, eficaz y complementaria, trabajando por la con-

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Porqué salir a la calleuna vez más

Una descripción algo más detallada de los recursos existentes a nivel municipal sería la siguiente:

\Centro Social San Antonio

Es un recurso gestionado por la Asociación Ser-vicio Capuchino de Cooperación al Desarrollo Aragón. Proporciona servicios de: acogida, co-medor (en el que se atiende diariamente a más de 70 personas y se sirven más de 2000 comi-das al mes), ropero, atención a familias en di-ficultad, atención sanitaria (dirigido a personas que tienen dificultades para acceder a las pres-taciones del sistema público de atención sanita-ria, servicio prestado por un médico).

- Igualmente se realiza un importante trabajo de dinamización comunitaria, con distin-tas actividades dirigidas a los vecinos del barrio (aula de informática, salón de actos para usos polivalentes, actividades culturales, o en el ám-bito de la salud, recreativas, etc.).

- Finalmente, cuenta también con un Centro de día que abre los martes y jueves por las mañanas. Está dirigido principalmente a las personas usuarias del comedor y a quienes de-riven los profesionales de la zona. Está animado por 6 voluntarios, e intentar ser un espacio de encuentro y desarrollo personal en donde poder trabajar hábitos de la vida diaria, relaciones so-ciales, mejora de la autonomía personal, u otros aspectos más concretos en función de las ca-

\Misión Evangélica Urbana de Zaragoza (MEUZ)

Ofrecen un servicio de atención en calle a las personas sin techo, un día a la semana, que consiste en el reparto de cenas, mantas y ropa, además de ofrecer compañía, llegando a esta-blecer con las personas sin techo a las que ven relación de confianza, y en sus instalaciones también cuentan con un servicio de duchas y la-vadoras que ponen a disposición de los usuarios en los casos necesarios.

racterísticas de los asistentes como por ejem-plo: búsqueda activa de empleo, lectura, ocio dirigido, conocimiento de los recursos del barrio, etc.

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\Albergue Municipal

Gestionado por el Ayuntamiento de Zaragoza, proporciona información y asesoramiento, así como alojamiento (en régimen convencional o en inserción), manutención, servicio de duchas, ropero y lavandería. El régimen de estancia tie-ne una duración, con carácter ordinario, de seis días cada tres meses. Cuenta con capacidad para setenta plazas aproximadamente.

Además coordina módulos de inserción y fami-liares, una red de seis viviendas tuteladas, sala de emergencia para pernoctar en época de frío y servicio de comedor para personas no aloja-das.

\Hermandad del Santo Refugio

Se trata de un programa de acogida, con recur-sos similares a los del Albergue Municipal. Pro-porciona alojamiento, manutención, servicio de duchas, ropero y lavandería además de dispen-sario médico. Tiene una capacidad de setenta y dos plazas.

\Obra Social de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paul

Al igual que la parroquia de Nuestra Señora del Carmen dispone de varios recursos comple-mentarios.

- Comedor Social San Vicente de Paúl.

- Centro de día de Integración Comu-nitaria “San Vicente de Paul”: Servicio de aco-gimiento diurno para personas en situación de desamparo social. Tiene capacidad para veinte plazas y se complementa con un servicio de co-medor de lunes a domingo.

- Comunidad Psicoterapéutica “La En-cina”: Su finalidad es atender a personas con problemas de dependencia de alcohol y algunas enfermedades mentales añadidas, que no dis-pongan de recursos económicos suficientes.

- Alojamientos alternativos “Puente”: Proyecto de alojamiento semitutelado para personas solas o familias con dificultades de acceso a la vivienda que inician o prosiguen un proceso de inserción social. Doce viviendas.

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\Obra social de la Parroquia de Nuestra Señora del Carmen

Cuenta con distintos programas dirigidos a per-sonas sin hogar, como son:

- Comedor y ropero, con una media de ciento cincuenta comidas diarias.

- Recursos residenciales: Residencia con doce plazas para acogida temporal de hom-bres en procesos de inserción social y siete pi-sos para familias con escasos o nulos recursos económicos, además de una vivienda para mu-jeres en riesgo de exclusión social.

- Rehabilitación de alcohol “Alcozara”: Ofrece tratamiento terapéutico en dos niveles: internamiento y centro de día.

\Centro Asistencial de Ayuda Familiar Agustina de Aragón (CAFA)

Ofrece servicios de duchas y lavandería a bajo precio o de manera gratuita, dependiendo de las necesidades personales.

\Cáritas Diocesana de Zaragoza

Cuenta con un proyecto de acompañamiento dividido en dos recursos: El de acogida, esta-blecido como información sobre los recursos de la ciudad y orientación y apoyo directo, y el de acompañamiento, basado en cuatro pilares bá-sicos: confianza, recurso residencial, actividad y garantía de ingresos mínimos.

\Cruz Roja Española

Dentro del departamento de Intervención So-cial, el programa de Lucha contra la pobreza y exclusión social engloba aquellos proyectos en-caminados a paliar la pobreza extrema. Uno de ellos es el de la Unidad Móvil de Emergencia Social (UMES), que desarrolla su intervención con aquellos que durante la noche se hallan sin techo.

Ofrece una atención directa y asistencial, me-diando entre ellos y el resto de recursos exis-tentes en Zaragoza, ya sean dirigidos específi-camente a este colectivo o en general a toda la población. Los contenidos de las prestaciones que se realizan son de dos tipos:

- Encaminados a la cobertura de nece-sidades básicas, mediante el reparto de mantas y ropa de abrigo, bebidas calientes/frías, ali-

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Cruz Roja Española

\Fundación La Caridad

La labor realizada por la Fundación con las per-sonas sin hogar se articula a través de su centro de día: El Encuentro. Ofrece rehabilitación psi-cosocial para que aquellos afectados por tras-tornos mentales graves, puedan mejorar su ca-lidad de vida, obtener un adecuado seguimiento de su problemática mental e iniciar un proceso socializador que les permita acceder a recursos normalizados.

\Casa Abierta

Recurso de gestión mixta, en el que el Albergue Municipal aporta las instalaciones y la logística, la Parroquia de Nuestra Señora del Carmen el conjunto de voluntarios, y ambas entidades la intervención técnica. Es un recurso de baja exi-gencia para personas sin hogar en situación cró-nica con procesos de grave deterioro. El número de plazas es de once y su estancia es indefini-da. Un grupo de voluntarios, por parejas, realiza atención en calle. Tienen asignada una o varias personas sin techo de referencia a las que visi-tan con cierta frecuencia en horario diurno

mentos, preservativos, etc., así como informa-ción social. Se establecen vínculos para iniciar procesos de relación de ayuda, intervención en crisis personales y coordinación con la red de emergencia sanitaria y policial.

- De mediación, posibilitando el acce-so y adherencia de estas personas a recursos públicos de servicios sociales y de salud. Esta mediación se complementa con una atención social diurna adicional al trabajo realizado por la noche, orientada al seguimiento de los procesos iniciados de acompañamiento social.

\Centro de día y Consignas San Blas

Abrió sus puertas a principios de 2012 con el apoyo del sacerdote de la Parroquia de San Pa-blo, las Conferencias de San Vicente de Paúl, la Obra Social de Caja Inmaculada y de Acción Social Católica. Este centro cuenta con dos es-pacios: consigna y sala de estar. Pretenden evi-tar que la desestructuración social y personal de sus usuarios se cronifique, aligerar la carga que muchas veces llevan las personas que están en la calle, y cuidar su alimentación.

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2Los voluntarios.Captación.Formación

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Para realizar el recuento nocturno del 22 de noviembre en Zaragoza, se inscribieron un total de 249 voluntarios. Lo que supone una cifra similar a la de hace un par de años y en términos relativos viene a darnos una tasa de participación ciudadana que es superior

en un 23% a la de Madrid por estas mismas fechas.

En esta ocasión hubo un porcentaje mayor de varones que en la edición anterior, si bien, como suele ser habitual en actividades de vo-luntariado, hay una mayoría de mujeres (5%).

La edad media fue de 42,31 años (en 2010 los voluntarios fueron algo más jóvenes: 37,21 años de media), siendo el tramo modal el de los trein-tañeros, que por sí solos representan un 25% de todos los voluntarios inscritos. (ver gráf.).

Madrid-2012 Zaragoza-2010 Zaragoza-2012Voluntarios 915 276 249Población 3.223.527 696.656 679.624

Tasa de participación 0,28 ‰ 0,40 ‰ 0,37 ‰

Voluntarios según sexo2010 2012

N %cit. N %cit.Mujer 176 63,8% 125 50,4%Varón 100 36,2% 123 49,6%Total 276 100% 248 100%

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Cruz Roja Española

Por lo que se refiere a la actividad principal, tenemos que la mayoría de los voluntarios se encontraban trabajando (44%). Los estudian-tes son el 13% y los que además de estudiar, trabajan, representan un porcentaje similar (12%); en conjunto los estudiantes, trabajen o no, viene a ser una cuarta parte (25,5%). Prácticamente lo mismo que los jubilados e inactivos (amas de casa, por ejemplo) que re-presentan un 26% de todos los voluntarios, y aparecen bajo la rúbrica de “otra situación”, una categoría que hace dos años no ofrecíamos en la hoja de inscripción y que merecía ser con-signada aparte.

Algo parecido ocurre con la posibilidad de marcar la casilla “Des-empleado”, que acu-mula algo más de un 5%.

Debido a la diferente codificación empleada en este año 2012, la comparabilidad con las res-puestas sobre “Actividad” que obtuvimos en el año 2010, es imposible. No obstante los datos de ambos años se presentan en la tabla siguien-te.

Actividad principal de los voluntarios2010 2012

Estudia 26,1% 13,4%Trabaja 54,2% 43,5%Estudia y trabaja 19,7% 12,1%Desempleado 0% 5,2%Otra situación 0% 25,9%Total 100% 100%

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Los voluntarios.Captación. Formación.

Una vez recodificadas las respuestas libres a la pregunta sobre la profesión, obtenemos la tabla siguiente:

Aparte de quienes se dicen “jubilados”, “estu-diantes” y “parados”, que propiamente no pue-den ser considerados como profesiones, nos encontramos con que la profesión más numero-sa es la de Trabajo Social (casi un 9% de todos los voluntarios) seguida de los administrativos (6%), los funcionarios (4%), los maestros y pro-fesores (2,4%), los educadores sociales (2%), las amas de casa (2%), los terapeutas ocupa-cionales (1,6%) y los médicos (1,6%).Pero el paisaje profesional es mucho más he-terogéneo y encontramos profesiones de todo tipo albañiles y arquitectos, agricultores y fun-cionarios, camareros, carretilleros, comerciales, fisioterapeutas, jardineros, policías, militares, libreros, peluqueros, economistas, informáticos, taxistas, contables, etc.

El 43% de los voluntarios dijeron disponer de vehículo (coche en su inmensa mayoría) y en consecuencia mostraron disposición a utilizarlo en caso de que hubiese sido necesario.

En una proporción similar a la del recuento 2010, la mayor parte de los voluntarios (el 56%) es-tán encuadrados en alguna entidad social que ya trabaja con personas sin hogar. Esto significa que estamos ante un voluntariado muy sensible y cualificado, lo que sin duda se traduce en una importante capacidad de actuación y aproxima-ción a las personas sin hogar, además de re-sultar especialmente indicado para poder llevar

Profesiones más citadasJubilados 22 8,80%

Trabajadores Sociales 22 8,80%

Estudiantes 19 7,60%Administrati-

vos 15 6,00%

Parados 11 4,40%Funcionarios 10 4,00%Maestros y Profesores 6 2,40%

Educadores Sociales 5 2,00%

Amas de Casa 5 2,00%

Terapeutas Ocupaciona-

les4 1,60%

Médicos 4 1,60%Conductores 3 1,20%Comerciales 3 1,20%Electricistas 3 1,20%Ingenieros 3 1,20%Psicologas 2 0,80%

adelante una conversación (entrevista) rica y rigurosa.

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Cruz Roja Española

En una proporción similar a la del recuento 2010, la mayor parte de los voluntarios (el 56%) están encuadrados en alguna entidad social que ya trabaja con personas sin hogar. Esto significa que es-tamos ante un voluntariado muy sensible y cualificado, lo que sin duda se traduce en una importante capacidad de actuación y aproximación a las personas sin hogar, además de resultar especialmente indicado para poder llevar adelante una conversación (entrevista) rica y rigurosa.

Si comparamos con el nivel de incardinación de la edición anterior (ver tabla sig.) vemos que este año la proporción de quienes tienen experiencia en el sector ha crecido un poco. Probablemen-te no sería descabellado pensar que muchos de quienes colaboraron en el primer recuento, aca-baron por integrarse como voluntarios en algún programa de atención a personas sin hogar.

¿Colabora con alguna entidad social que trabaje con personas sin hogar?

2010 2012 TotalN %cit. N %cit. N %cit.

Si 138 52,5% 133 55,9% 271 54,1%No 125 47,5% 105 44,1% 230 45,9%Total 263 100% 238 100% 501 100%

Casi una cuarta parte (23,8%) de estas personas encuadradas en alguna entidad social que intervie-ne sobre el problema eran trabajadores asalariados y el resto voluntarios (72%) o socios-donantes (4%).

Como en la ocasión anterior, es muy mayoritaria la presencia de voluntarios de Cruz Roja, de hecho la mitad de los voluntarios inscritos colaboran o trabajan con esta entidad que ha asumido el lide-razgo de estas operaciones de recuento, y también como el año anterior son muy abundantes los voluntarios de Caritas y del Comedor del Carmen, a los que siguen Casa Abierta, CRP El encuentro

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Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Los voluntarios.Captación. Formación.

Entidades en las que colaboran o trabajan Número Porcentaje

Cruz Roja 136 52,10%Comedor y Parro-quia Del Carmen 39 14,90%

Cáritas 39 14,90%Casa Abierta 11 4,20%Fundación La

Caridad – C.R.P El Encuentro

11 4,20%

Hermandad Del Refugio 7 2,70%

Hijas Caridad 6 2,30%Centro Social San

Antonio 3 1,10%

MEUZ 3 1,10%

Fundación La Caridad, Hermandad el Refugio, Hijas de la Caridad de San Vicente de Paul, el Centro Social San Antonio, y MEUZ, otras enti-dades como Zaraba, el comedor de San Pablo el centro de día San Blas o Médicos del Mundo son citadas por alguna otra persona.

Finalmente, en la hoja de inscripción, se pedía a los voluntarios que indicaran cuál había sido la vía por la que les había llegado la información sobre el recuento. Y nuevamente aquí, Cruz Roja ocupa una posición de liderazgo significa-tivo puesto que 94 dicen haber tenido conoci-miento de la convocatoria a través de Cruz Roja, 30 de Cáritas, 20 se enteraron en la Universidad, 21 por amigos ,15 en su Parroquia, etc.

Si analizamos las respuestas que facilitaron al inscribirse, 24 personas citan explícitamente al email o correo electrónico que recibieron, so-bre todo a través de Cruz Roja, pero también de otras entidades como la Coordinadora Ara-gonesa de Voluntariado y la Universidad San Jorge. Otros 17 se refieren a la Unidad Móvil de Emergencia Social de Cruz Roja, y de ellos 7 nombran concretamente a Patricia y 2 a Susana, lo que pone de relieve la importancia de la ac-

tuación personal. El boca a boca de amigos, ha funcionado al menos en 21 casos, prácticamen-te los mismos que citan a algún familiar. Tam-bién ha mostrado ser muy eficaz, la charla en la Universidad a estudiantes de Trabajo Social, o la captación realizada a través de las parroquias (especialmente la del Carmen). Finalmente, los voluntarios que tuvieron noticia a través del pe-riódico son también un grupo importante (9 citan al Heraldo y 1 al Qué). Todo esto conviene que se tenga presente de cara a sucesivas convo-catorias. Si bien es cierto que estamos en la sociedad de la información y que los mensajes electrónicos son muy eficaces (sobre todo cuan-do actúan sobre audiencias comprometidas y sensibilizadas), nada hay que sustituya al boca a boca y la relación afectiva y personal.

027

La noche S

3La noche S. Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

En lugar de repetir lo que ya es-cribimos en el informe ante-rior sobre el desarrollo de la metodología puesta en mar-

cha durante la noche del recuento y que básicamente reproduce lo aprendido de los recuentos realizados en otras ciuda-des como Nueva York, Madrid o Barcelo-na (ver Cabrera, Rubio y Blasco, 2008:77 y ss.) hemos optado en esta ocasión por incluir el relato de lo que hicimos aquella noche del 22 de noviembre en Zaragoza tal y como lo vivió una de las personas responsables del evento.

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3La noche S.Cómo transcurrió la noche del Recuento

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Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

La noche S.

“A las 19:30 un grupo de voluntarios y técnicos de Cruz Roja estábamos ya listas en el Aula Magna Ramón y Cajal de la Facultad de Medicina de

la Universidad de Zaragoza (C/Domingo Mi-ral, s/n, 50009), a la espera de que llegasen los coordinadores de los grupos que se dis-tribuirían por las cuarenta y ocho zonas que previamente se habían delimitado. El equipo de voluntarios al que le había correspondido la misión de ir al Albergue municipal acudió directamente allí, a las 20:00 horas. El Refu-gio contó con su propio equipo de voluntarios.Conforme fueron llegando los coordinadores de grupo se puso a su disposición elementos de comunicación (walkies), material de trans-porte (tarjetas bus-tranvia), y vestuario iden-tificativo (chalecos), y se fueron sentando en las butacas del Aula Magna donde estaba preparado el resto de material necesario que posteriormente se distribuiría a sus equipos.

A las 20:00 estaban emplazados el resto de voluntarios que participarían en la activi-dad (hubo quien se adelantó y llegó a la mis-ma hora que los coordinadores). Conforme

A cada participante se le proporcionó una carpeta con:

- Un mapa de la zona a recorrer, que normalmente era la más cercana a la solicitada en la ficha de inscripción.

- Hojas informativas sobre los recursos existentes para Personas sin hogar, que favoreciera el acercamiento a los recursos de aquellas personas sin te-cho con las que pudieran contactar a lo largo del recorrido.

- Fichas de observación que debían re-llenar con los datos apreciables a sim-ple vista de las personas sin hogar con las que se encontraran.

- Cuestionarios en distintos idiomas.

- Ficha de evaluación para los volunta-rios.

- Una tarjeta identificativa.

llegaban podían comprobar en las listas que había a en la entrada del edificio qué zona y qué coordinador tenían asignado. Hubo quien por diversas razones no aparecía en listas, y quien apareciendo no estaba muy de acuerdo con la zona que se le había asignado (a pesar de que en las sesiones formativas se insistió en que nos disculpasen si no podían estar en una zona determinada y se les tenía que po-ner en grupos para poder cubrir toda la ciudad), pequeñas incidencias que se resolvieron sin mayores dificultades gracias a la buena dispo-sición de todos.

031

Patricia Borraz Jaria

Trabajadora social. Cruz Roja Española

Cruz Roja Española

Una vez dentro del Aula Magna todo el volunta-riado, los equipos ya agrupados, identificados y con su material la Secretaria Provincial de Cruz Roja procedió a dar la bienvenida a todos los participantes, a agradecer su asistencia e inte-rés. A continuación el Director y la Subdirectora provinciales de Intervención Social explicaron brevemente en qué iba a consistir la actividad, ofrecieron algunos consejos para el buen de-sarrollo de la misma, y dieron pie a que una compañera y yo misma, diéramos algunas pau-tas sobre el funcionamiento de los walkies y el traslado a las distintas zonas de la ciudad según se realizara en vehículos de Cruz Roja, a pie, en bus o tranvía. Se comentó a todos los par-ticipantes que a la salida se les facilitaría una bolsa con cena (material proporcionado por el Albergue Municipal) y se señaló que estaban to-dos invitados a acudir a última hora a Cruz Roja (Sancho y Gil, 8) para depositar personalmente las fichas de evaluación de la actividad, poder tomar un café, y tener ocasión de reunirse con otros voluntarios e intercambiar impresiones. La incidencia más destacable fue la ausencia de algunos voluntarios, quedando un par de equi-pos con pocos voluntarios, por lo que se solicitó a los equipos más numerosos que cedieran a alguno de sus componentes; enseguida se con-figuraron todos los equipos previstos con un nú-mero suficiente de voluntarios.

Con puntualidad, a las 21h., estábamos salien-do todos del Aula Magna. Cada equipo se dirigió a su zona, y algunos compañeros de Cruz Roja nos encaminamos hacia la sede donde ya es-taban otros voluntarios en el Centro Provincial

032

Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

La noche S.

de Coordinación. Éste dio cobertura a todas las demandas e incidencias surgidas a lo largo de la noche.

Con cierto margen de tiempo, preparamos por un lado un punto de recepción e intercambio de experiencias, con una mesa para café, agua y pastas, y otra mesa en la que colocamos un or-denador portátil, folios y bolígrafos con el fin de que allí plasmasen por escrito y sin los límites de la ficha de evaluación, todo aquello que cada voluntario considerase oportuno contarnos so-bre la experiencia. No fueron muchos quienes se animaron a escribir. Por otro lado se montó el punto de recepción de toda la documenta-ción que se había ido rellenando (fichas de ob-servación, cuestionarios, fichas de evaluación) y del material prestado a los coordinadores de equipo; a este punto accedían principalmente los coordinadores. Para agilizar la extracción de unos primeros datos sobre la actividad, de cara a poder ofrecer información fehaciente a la mañana siguiente se recogió de manera resumi-da, el nº de personas detectadas en cada zona (número que se debía corresponder con el nº de fichas de observación cumplimentadas), se dis-tinguió entre varones y mujeres, y se consignó el número total de cuestionarios rellenados me-diante entrevista.

Hay que señalar que durante la noche hubo un grupo que demandó refuerzos, tanto humanos, como materiales para poder realizar la recogida de datos, dado el gran número de personas sin techo detectadas en la zona que les correspon-dió. Tras su llamada, acudieron con más mate-

033

Cruz Roja Española

rial, varios voluntarios, miembros de equipos que ya habían acabado su trabajo. Una pareja que iba en quad, a mitad de camino se quedo

“tirada” porque se descargó la batería del vehícu-lo; finalmente pudieron continuar el recorrido tras conseguir ponerlo en marcha. También se dio el caso de un grupo que solicitó atención sanitaria para una persona sin techo a la que localizaron en un parque, pues se había caído y herido. Por último, otro grupo avisó de que una persona sin techo demandaba una manta.

Los primeros grupos en llegar fueron el del Al-bergue y el de la zona 50006 zona 3 (Parque Grande). Los últimos grupos en llegar fueron los de las zonas 50008 zona 1, y 50015 zona 1. Aproximadamente a la 1:30 llegó el último coor-dinador, y a las 2:15 se dio por concluida la acti-vidad, más o menos una hora y media antes que en 2010.

la actividad se desarrolló tal y como se preveía.La predisposición y disponibilidad mostrada por los voluntarios fue importantísima. Las infraes-tructuras, medios y personal con que cuenta Cruz Roja facilitan el desarrollo de actividades de esta categoría, y la colaboración y coordina-ción con las distintas entidades de la Coordina-dora de centros y servicios de atención a perso-nas sin hogar de Zaragoza es esencial.”

Por lo demás, hoy tenemos la posibilidad de ofrecer un relato visual y con imágenes de lo sucedido aquella noche del 22 de diciembre de 2013, “II Estudio de personas sin techo Cruz Roja Zaragoza”, accesible a través de Youtube .

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Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

La noche S.

035

Resultados obtenidos

Resultados obtenidos.¿Cuántas personas sin techo?

Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

4

La noche del 22 de noviembre de 2012 fueron detectadas 186 personas vivien-do sin techo en Zaragoza.

Hace dos años fueron 158, se ha producido por tanto un incremento de casi el 18%.

Este incremento, es curiosamente similar al que ha arrojado el último recuento celebrado a me-diados de diciembre en Madrid, donde se de-tecto la presencia en la calle de 701 personas, cuando en 2010 habían sido 596.

2010 2012 ∆Madrid 596 701 17,6 %

Zaragoza 158 186 17,7 %

Si pensamos en lo que representa este número de personas sin techo en relación a la población de Zaragoza o Madrid (ver Tabla sig.), vemos que tampoco son excesivamente diferentes las tasas de sinhogarismo literal existentes en una y otra ciudad. En cualquier caso, no estamos ante un fenómeno de masas que afecte a cientos de miles de personas en España. Aunque sin duda se trata de una realidad impactante y cuya visi-bilidad en los núcleos centrales de las ciudades resulta ser enorme para el ciudadano medio, lo cierto es que su importancia no nace tanto de la cantidad de personas que sufren el problema, como de la cualidad intrínseca que conlleva la severa exclusión que padecen y lo que su exis-tencia misma entraña al producirse en el marco de una sociedad de abundancia y derroche.

Madrid 2012

Zaragoza 2010

Zaragoza 2012

Personas sin techo detec-

tadas701 158 186

PST/mil habi-tantes 0,22 ‰ 0,23 ‰ 0,27 ‰

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Cruz Roja Española

Por lo que se refiere al desarrollo del trabajo de campo, tenemos que en Zaragoza la hora más fruc-tífera para el rastreo resultó ser la comprendida entre las 22 h. y las 23 h.

Esta circunstancia debe ser tenida en cuenta de cara a poder ofertar la posibilidad de una entrevista, que resulta sencillamente imposible cuando la persona ya está durmiendo. Lo cierto es que el 40% de las personas sin techo detectadas se encontraban durmiendo a la hora en que fueron encontra-das por los equipos. Esto hace imposible la realización de la entrevista puesto que los voluntarios

tenían instrucciones de respetar y no interrumpir el sueño de nadie.

De las 112 personas que, de hecho, se encon-traban despiertas en el momento de ser detec-tadas, 67, esto es el 60%, aceptaron participar en la encuesta y responder a nuestro cuestiona-rio.

Una proporción bastante alta teniendo en cuen-ta las circunstancias que concurren en cualquier encuesta callejera y particularmente en esta.

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Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Resultados obtenidos.

Madrid-2012 Zaragoza-2010 Zaragoza-2012

Personas sin techo detectadas 701 158 186

PST/mil habitantes 0,22 ‰ 0,23 ‰ 0,27 ‰

Si a las personas que encontramos viviendo sin techo, les añadimos aquellas que esa mis-ma noche se encontraban alojados en los cen-tros que proporcionan alojamiento en casos de emergencia o exclusión residencial extrema, esto es, las que podríamos denominar como personas sin hogar, aunque estrictamente no se encontraran sin techo en aquella noche, en-tonces habríamos de añadir a las 186 personas descubiertas en la calle, otras 307 personas más, entre ellas 38 niños, que se albergaban en la red de Centros, tal y como se recoge en la siguiente tabla. De manera que si nos limitamos a consignar los adultos sin hogar/sin techo en Zaragoza, deberíamos hablar de 455 casos, y si incluyéramos a los menores, podríamos decir que aquella noche del 22 de Noviembre de 2012, había en Zaragoza 493 personas sin hogar, de las cuales, el 62% durmieron bajo techo gracias a la solidaridad institucional de los zaragozanos. Porcentaje curiosamente parecido al hallado en Madrid por esas mismas fechas, en donde en-contramos 2041 personas sin hogar en la noche del 13 de diciembre de 2012, de las cuales 701 fueron detectadas viviendo en la calle, mientras que 1340 (el 66%) estaban alojadas en la red de Centros de la capital.

ALOJADOS EN LOS CENTROS DURAN-

TE LA NOCHE S TOTAL

Parroquia del Carmen 81 (38 de ellos niños)Fund. La Caridad Centro de Día El

Encuentro23

Hijas de la Caridad 49 Com. Terapéutica 11

Alojamiento alternati-vo Puente 38

Caritas 7 Piso Pedro Saputo 4Casa tutelada Juan

Bonal 3

Albergue Municipal 81 Albergue general 71

Módulos de inserción 10El Refugio 66

TOTAL Alojados 307Total adultos alojados 269

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Cruz Roja Española

Resultados obtenidos.Distribución por Distritos

Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Distritos postales en los que se encontraban2010 2012

N % N %50001 22 13,9 % 15 8,1 %50002 39 24,7 % 41 22,0 %50003 14 8,9 % 15 8,1 %50004 21 13,3 % 18 9,7 %50005 9 5,7 % 6 3,2 %50006 5 3,2 % 6 3,2 %50007 4 2,5 % 0 0,0 %50008 7 4,4 % 13 7,0 %50009 5 3,2 % 5 2,7 %50010 19 12,0 % 33 17,7 %50011 0 0,0 % 0 0,0 %50012 0 0,0 % 0 0,0 %50013 0 0,0 % 3 1,6 %50014 4 2,5 % 9 4,8 %50015 3 1,9 % 10 5,4 %50016 1 0,6 % 0 0,0 %50017 3 1,9 % 7 3,8 %50018 0 0,0 % 5 2,7 %Riberas 2 1,3 % 0 0,0 %

158 100% 186 100%

La siguiente tabla y el siguiente gráfico recogen la ubicación de las personas sin hogar localiza-das durante la noche. Se agrupan por códigos postales.

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Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Resultados obtenidos.

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Cruz Roja Española

Resultados obtenidos.Perfil Socio-demográfico.

Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Por lo que se refiere a las personas sin techo, estamos ante una población masivamente inte-grada por varones. A partir de lo que los volunta-rios podían observar a simple vista, sin molestar, frente a 146 varones, localizaron “únicamente” 21 mujeres.

SexoNro. % cit.

Mujer 21 11,3%Varón 146 78,5%Desconocido 19 10,2%Total 186 100%

Ahora bien, en este punto hemos encontrado un significativo incremento del número de mujeres en las calles de Zaragoza respecto a lo encon-trado hace dos años (ver tabla).

PSH según Sexo2010 2012

Nro. % cit. Nro. % cit.Mujer 7 4,4% 21 11,3%Varón 141 89,2% 146 78,5%Desco-nocido 10 6,3% 19 10,2%

Total 158 100% 186 100%p=2,2% ; chi2=7,65 ; gdl=2 (s)

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Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Resultados obtenidos.

Pero como no en todos los casos detectados en la calle, fue posible identificar el sexo mediante observación, nos encontramos con que, si nos atenemos exclusivamente a la composición por sexo de la población sin techo en aquellos casos en los que se ha podido determinar si se trataba de varones o de mujeres, nos encontramos con lo siguiente:

El porcentaje de mujeres que en el recuento de 2010 resulta ser anormalmente bajo, y que atri-buimos a la mayor facilidad con la que accedían a los recursos de alojamiento existentes en Za-ragoza, pasa a ser dos años más tarde bastante similar al encontrado en el último recuento ma-drileño en el que se halló un 13% de mujeres entre quienes dormían en la calle.

La edad media estimada es de 46,7 años, bas-tante mayor que la del recuento 2010, que que-daba establecida en 42. Curiosamente, también

en este aspecto se ha producido una evolución similar en Madrid (ver tabla).

Edad media estimada Madrid Zaragoza

En 2010 43,76 41,98

En 2012 46,36 46,70

Y por tramos de edad nos encontramos con lo siguiente:

Edad aproximadaPromedio = 46,70 Mediana = 48,50Mín = 20 Máx = 72

Nro. % cit.Menos de 25 2 1,5%de 25 a 44 49 37,1%de 45 a 64 70 53%65 y más 11 8,3%Total 132 100%

Edad observada2010 2012

Menos de 30 4,8% 6,8%de 30 a 39 39,5% 19,7%de 40 a 49 33,9% 26,5%de 50 a 59 14,5% 27,3%de 60 a 69 6,5% 16,7%70 y más 0,8% 3%Total 100% 100%

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Cruz Roja Española

Al comparar los tramos de edad observada en 2010 y 2012, vemos que el incremento se produce por una reducción significativa de los treintañeros y por un notable incremento de los mayores de 60 años. Como se trata de datos estimados mediante observación, esto puede traducir tanto un dato objetivo, como el hecho de que a los ojos de los voluntarios parecen ser personas más mayores (¿acaso por encontrarse más deteriorados en su aspecto externo?).

Lo más habitual es que la gente sin techo en Zaragoza, duerma en el interior de los cajeros de algún banco:

Comparado con el año 2010 hay un porcentaje bastante menor de personas localizadas durmiendo literalmente en la calle, mientras que en cambio crecen los que lo hacen dentro de algún lugar no previsto para vivir (nave industrial, sótano, parking)…044

Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Resultados obtenidos.

Localización de las PSH2010 2012

N %cit. N %cit.Calle/plaza 58 37,2% 33 17,8%En un parque 4 2,6% 10 5,4%En un cajero automático 53 34% 76 41,1%Dentro o bajo una estructura (Túneles, estaciones, puentes) 35 22,4% 47 25,4%En una casa o edificio abandonado o en obras 0 0% 0 0%Dentro de un vehículo 0 0% 1 0,5%Dentro de un lugar no provisto para vivir (nave industrial, sótano...) 1 0,8% 18 9,7%Un establecimiento comercial (Tiendas, bares, C. comercial) 5 3,2% 0 0%Otros 0 0% 0 0%Total 156 100% 185 100%

045

Cruz Roja Española

A partir de lo que podían observar los voluntarios que realizaron el recuento nocturno, el aspecto externo de las personas localizadas, nos revelaba lo siguiente:

Observación

Si NoNo se puede

determi-nar

Total

Estaba sola 41,2% 58,2% 0,6% 100%Tiene la ropa sucia o muy sucia 34,7% 45,7% 19,7% 100%Presenta una higiene mala o muy mala 31% 39,7% 29,3% 100%presenta un mal aspecto físico 17,2% 51,7% 31% 100%Presenta alguna discapacidad física visible 6,8% 67,2% 37% 100%muestra síntomas que pudieran ser debidos a problemas de salud mental 8,1% 51,2% 40,7% 100%

Muestra síntomas que pudieran asociarse a alcoholismo 20,6% 42,9% 36,5% 100%Muestra signos que pudieran deberse a problemas de dogradicción 2,4% 54,8% 42,9% 100%

Está acompañado de alguna mascota 6,4% 86,6% 7% 100%Está acompañado de bosas, bultos u otras pertenencias 80,6% 14,9% 4,6% 100%Se puede pensar razonablemente que es una persona extranjera 42,5% 31,6% 26,9% 100%

Y si comparamos estos datos con lo que pudieron observar los voluntarios en Zaragoza dos años antes, no parece haber grandes cambios, si bien parecen haber observado menos personas bebi-das, más personas solas, menos extranjeros y también más mascotas:

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Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Resultados obtenidos.

“De acuerdo a lo que se puede observar, la persona…” 2010 2012 DiferenciaEstaba sola 30,8% 41,2% 10,4%Tiene la ropa sucia o muy sucia 31,4% 34,7% 3,3%Presenta una higiene mala o muy mala 26,3% 31,0% 4,7%Presenta un mal aspecto físico 21,8% 17,2% -4,6%Presenta alguna discapacidad física visible 4,5% 5,8% 1,3%Muestra síntomas que pudieran ser debidos a problemas de salud mental 3,9% 8,1% 4,2%

Muestra síntomas que pudieran asociarse a problemas de alcoholismo 34,0% 20,6% -13,4%

Muestra signos que pudieran deberse a problemas de droga-dicción 5,2% 2,4% -2,8%

Está acompañado de alguna mascota 1,3% 6,4% 5,1%Está acompañado de bolsas, bultos u otras pertenencias 77,4% 80,6% 3,2%Se puede pensar razonablemente que es una persona extran-jera 47,4% 42,5% -4,9%

Con lo que, aparentemente, también estos da-tos nos confirman lo que veníamos apuntando: no sólo ha crecido el número de personas, sino que su aspecto es más sucio y desaseado, y parece haber más enfermos mentales, mientras que desciende aparentemente el porcentaje de extranjeros o de personas con problemas de alcohol y drogadicción. Todo ello dicho con precaución puesto que el número de quienes se encontraban ya durmiendo y por tanto no mos-traban otra conducta que la de quien duerme, resultó ser muy cuantioso.

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Cruz Roja Española

El porcentaje de participación es también muy similar al del recuento anterior, si acaso un poco más alto, situándose en la línea de otras operaciones similares, alrededor de un 60% aceptan ser entrevistados.

Participa en la encuesta

2010 2012 TotalSi 56,1% 59,8% 58%No 43,9% 40,2% 42%

A la pregunta “¿Dónde va a pasar Ud. la noche?” encontramos un significativo descenso de los que dicen que van a dormir en la calle, mientras crece el de los que buscan refugio en alguna estructura. Y cerca de la mitad (42%) se refugian dentro de un cajero:

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Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Resultados obtenidos.

¿Dónde va a pasar usted la noche?2010 2012

N %cit. N %cit.En una habitación, piso o casa propia 2 3,4% 5 8,1%En una pensión u hotel 0 0% 0 0%En casa de unos amigos 1 1,7% 0 0%En casa de unos familiares 0 0% 0 0%En un centro para personas sin hogar 0 0% 0 0%En la calle o plaza 22 37,9% 11 17,7%En un parque 1 6,9% 5 8,1%Bajo una estructura (Túnel, estación, puente, aeropuerto) 2 3,4% 14 22,6%En una casa o edificio abandonado o en obras 2 3,4% 1 1,6%En un vehículo 1 1,7% 0 0%En un lugar no provisto para vivir (nave industrial,sótano...) 0 0% 0 0%En un cajer automático 22 37,9% 26 41,9%En un establecimiento comercial (Tiendas, bares, C.Comercial) 2 3,4% 0 0%

En un piso protegido 0 0% 0 0%Otro lugar 0 0% 0 0%Total 58 100% 62 100%

Si comparamos la situación que expresan las personas sin techo en Madrid y Zaragoza (ver Gráf. sig.), vemos que sin duda hay importantes diferencias. Parecería que en el caso de Zaragoza es más fácil sortear la posibilidad de dormir directamente a la intemperie, es más probable que una persona sin techo encuentre acomodo en un cajero o en una infraestructura no diseñada para que duerman personas en su interior, mientras que en Madrid, estos espacios son más inaccesibles, y muy probablemente están sometidos a un tipo de vigilancia que implica el desalojo de las personas sin hogar.

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Cruz Roja Española

En Madrid las personas que fueron localizadas en cajeros la noche del 13 de diciembre de 2012 apenas se acercaban al 9%, mientras que resulta sorprendente lo “acogedores” que son los bancos y cajas de ahorros en Zaragoza como lugar de pernocta, puesto que más de un 40% de las perso-nas fueron localizadas en estos lugares. Lo que sin duda refleja una política de expulsión y desalojo muy diferente a la que aplican en Madrid las entidades financieras.

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Resultados obtenidos.Explorando las causas.

Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Si nos atenemos a las respuestas libremente emitidas por los entrevistados, vemos que dos re-corridos típicos llevan a la gente a la calle desde su propia casa (26%) o después de agotar las posibilidades de acogida de su red social, esto es después de haber sido acogidos en casa de algu-nos familiares (30%) o de amigos (7%). Las opcio-nes residenciales que po-dríamos llamar “baratas” o precarias, que suponen intentar mantenerse bajo techo a un coste econó-mico antes de verse en la calle, vendrían a ser algo más del 12 por ciento de los itinerarios hacia la calle (10,5% en una habi-tación o piso compartido, más un 1,8% en pensión). Por último nos encontra-mos, con quienes están de vuelta de las instituciones de acogida, un 10,5% que vendría a suponer el núcleo duro de la gente sin techo, aquellos con los que de algún modo ya se ha “fracasado” durante el proceso de in-tervención. Dicho con todas las precauciones, puesto que el número de casos que responden a esta pregunta es muy reducido, si lo extrapoláramos al total de las personas detectadas, podríamos decir que en las calles de Zaragoza habría alrededor de unas 20 personas que están “de vuelta de todo” lo que sean albergues o instituciones de acogida. Muy probablemente, el trabajo con ellas resultará particularmente difícil y complejo, y por eso mismo resultará especialmente necesario e ineludible.

051

Cruz Roja Española

Resultados obtenidos.Estado civil.

Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

En cuanto al estado civil, el pa-norama encontrado es el que refleja el siguiente gráfico:

Tampoco en este asunto hay diferencias significativas de ayer a hoy (ver tabla sig.).

Estado civil2010 2012

solter@ 42,6% 38,6%En pareja 0% 3,5%Divorciad@ 16,7% 14%Viud@ 1,9% 7%Casad@ 22,2% 24%Separad@ 16,7% 12,3%Total 100% 100%

052

Resultados obtenidos.Edad.

Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

La edad declarada confirma lo que indicaba la estimación de la edad realizada por los volun-tarios según el aspecto, esta-mos pues ante una población tres años más envejecida que en el 2012.

EdadAño recuento = 2010

N %cit.Menos de 25 1 1,8%de 25 a 44 28 50,9%de 45 a 64 20 36,4%65 y más 6 10,9%Total 55 100%Promedio=44,8 MIn=21 Mediana=44% Máx=77

EdadAño recuento = 2012

N %cit.Menos de 25 2 3,6%de 25 a 44 20 35,7%de 45 a 64 30 53,6%65 y más 4 7,1%Total 56 100%Promedio=47,8 MIn=20 Mediana=48,5% Máx=72

Veamos ahora lo que ocurre con el caso de los extranjeros, ¿cómo habrá incidido la crisis económica en términos de exclusión residencial severa?, ¿habrán aumentado los extran-jeros en la calle?, ¿habrá creci-do su porcentaje? . 053

Cruz Roja Española

Resultados obtenidos.Nacionalidad.

Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

En términos absolutos han aumentado a la par que ha aumentado el número total de quienes viven en la calle, pero en cambio la proporción que representan los extranjeros entre la gente sin techo ha permanecido invariable. No hay ninguna diferencia entre los dos recuentos, los españoles sin techo en Zaragoza siguen siendo un poco más de la tercera parte (36%) del total.

Nacionalidad2010 2012

Español 36,2% 36,4%Otra 63,8% 63,6%Total 100% 100%

Curiosamente, también en esto se sigue la ten-dencia descubierta en Madrid, donde tampoco varió el porcentaje de extranjeros entre 2010 y 2012, si bien sus niveles son algo menores, puesto que allí representan “tan sólo” un 52% del total sin techo.

% de Extranjeros Madrid Zaragoza 2010 52% 63,8% 2012 52% 63,6%

Nacionalidad Personas %Rumanía 32 40,5%Marruecos 18 22,8%Portugal 8 10,1%Senegal 4 5,1%Argelia 3 3,8%Bulgaria 3 3,8%Polonia 2 2,5%Alemania 1 1,3%Canadá 1 1,3%Francia 1 1,3%Ghana 1 1,3%Grecia 1 1,3%Hungría 1 1,3%Italia 1 1,3%Moldavia 1 1,3%Túnez 1 1,3%

Por países, los más abundantes son los ruma-nos que representan el 41% de los extranjeros entrevistados, seguidos por los marroquíes (23%) y los portugueses (10%).

054

Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Resultados obtenidos.

Esto refleja sin duda la composición regional de aquellos sectores de inmigración más desa-sistidos y/o con más dificultades de integración laboral y social en el entorno económico de Za-ragoza. En Madrid en cambio, nos encontramos con que si bien los rumanos siguen ocupando, de lejos, el primer lugar (39%), les siguen en los primeros lugares de la tabla búlgaros (11%), ecuatorianos/polacos (6%), portugueses (5%) y marroquíes (4%), dentro de un paisaje mucho más heterógeneo y diversificado: mientras en Zaragoza identificamos personas sin techo pro-cedentes de 17 países, en las calles madrileñas se daban cita 33 nacionalidades diferentes.

055

Cruz Roja Española

Resultados obtenidos.Nivel de estudios.

Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

El perfil educativo, sigue mostrándonos una población con bajo nivel de estudios, tal y como ocurría el año 2010. Y también como entonces, los extranjeros muestran una cualificación superior a la de los locales: casi la mitad (48%) tienen estudios secundarios o universitarios, mientras que no ocurre así entre los españoles donde apenas superan el 26%.

Nivel de estudios2010 2012

Primaria o inferior 57,4% 62,2%Secundaria 27,7% 26,7%Superior 14,9% 11,1%Total 100% 100%

Nivel de estudiosEspañol Otra

Primaria o inferior 72,7% 52,2%Secundaria 18,2% 34,8%Superior 9,1% 13%Total 100% 100%

La mayor proporción de extranjeros en Madrid, se traduce por ejemplo en una sobrecualificación educativa respecto de la población sin techo total en Zaragoza (Ver tabla sig.)

Nivel de Estudios Madrid ZaragozaPrimaria o inferior 47,9 62,2Secundaria 28,6 26,7Superior (completos o no) 23,6 11,1

056

Resultados obtenidos.Empadronamiento.

Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Un dato importante es que el 40% están empa-dronados en Zaragoza

En total, un 66% aproximadamente de los en-trevistados nos dijeron estar empadronados; un 40% en Zaragoza, y un 26% lo están en otro municipio de España. Finalmente, algo más de un tercio no están empadronados, con todo lo que ello implica en términos de exclusión admi-nistrativa y dificultades de acceso a servicios y prestaciones de todo tipo.

¿Está empadronado? N %Empadronado en Zaragoza 24 39,3%Empadronado en otro municipio 16 26,2%No está empadronado 21 34,4%Total 61 100,0%

Como no podía dejar de ocurrir, las diferencias entre la situación de empadronamiento de las

personas sin techo de nacionalidad española y la de los extranjeros son muy considerables (ver Gráfico sig.)

Mientras que el 86% de los españoles están empadronados, entre los extranjeros el por-centaje apenas es de un 55%, lo que deja en el limbo administrativamente a un 45%, casi la mitad de los extranjeros sin techo en las calles de Zaragoza.

057

Cruz Roja Española

Resultados obtenidos.Tiempo en la calle.

Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Después de haber reducido a días en total que ha pasado en la calle a lo largo de su vida (Ver tabla sig.), las respuestas en las que anotába-mos, los años, meses, semanas o días que de-cía haber vivido en la calle cada persona, nos encontramos con que, por término medio las personas que responden a nuestra encuesta dicen haber estado sin techo alrededor de 4,5 años. Claro que la variabilidad interna es muy grande, puesto que entrevistamos desde perso-nas que apenas llevaban 3 días en la calle, a quien había gastado ¡37 años! de su vida vivien-do sin techo. Precisamente por eso, resulta una medida de tendencia central más adecuada, la mediana, que se sitúa en 3 años exactos.

Tiempo total vivido en la calle

N %Menos de 1 año 14 27,5

De 1 a 3 años 11 21,6Más de 3 años 26 51Total 51 100Media 4,49 añosMediana 3,0 años

058

Resultados obtenidos.Motivos o causas expresadas de verse sin techo.

Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

En esta respuesta sí que se advierte un cambio importante entre 2010 y el 2012. Si hace dos años, eran el 55% de los que respondían a esta pregunta los que se referían a la “falta de traba-jo” como una de las razones o motivos que les habían llevado a verse en la calle, dos años más

tarde son el 70% los que se refieren a ello. Sin duda, el efecto de la crisis se deja sentir en esta respuesta.

059

Cruz Roja Española

Si a eso le añadimos el hecho confesado de que el 52% pasa el día solo y el 29% con otras personas sin hogar, queda pues tan sólo un res-to de un 19% que pasa la mayor parte del día acompañado de otra gente ajena al circuito de la exclusión residencial extrema, con lo que poco se puede esperar de su red social efectiva como palanca de incorporación al mundo laboral. Son fundamentales, por tanto, el trabajo de los profe-sionales y la acción explicita de las instituciones

encaminadas a conseguir su reincorporación al mercado de trabajo.

060

Resultados obtenidos.Trabajo.

Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

A la pregunta “Actualmente, hace algún trabajo, del tipo que sea? Nos han respondido NO, 55 personas, mientras que 5 han afirmado trabajar. Claro que estos trabajos son todos en la eco-nomía sumergida y de carácter irregular: chata-rrear, vender lo que sacan (en la rebusca) por la noche, y venta ambulante.

Más interés tienen las respuestas abiertas a la pregunta de “¿por qué no trabaja en este mo-mento?” de las 29 personas que han respondido a esta pregunta, las dos terceras partes directa-mente no buscan, ya que dicen haber perdido la esperanza de encontrarlo, el tercio restante que al parecer sigue buscando, dice que no tra-baja porque no encuentra; alguno se refiere a que utiliza los contactos de amigos, otro alude al “paro” (INAEM), y otro más dice buscar en la agricultura (por La Almunia). Tan sólo dos de estas personas dicen mantener la esperanza de encontrar algún empleo. Cunde por tanto, el desánimo y la desesperanza.

Si “SI”, ¿cuál?:N %cit.

Chatarrero 2 50%Vender lo que saco por la noche 1 25%

Venta ambulante 1 25%Total 4 100%

061

Cruz Roja Española

De hecho, un tercio aproximadamente dicen es-tar apuntados en el INAEM:

En cuanto al tiempo que dicen llevar sin trabajo, más del 80% serían técnicamente parados de larga duración, puesto que afirman llevar más de un año desempleados. Sólo un 18% dice lle-var parado menos de un año.

062

Resultados obtenidos.Ingresos.

Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Por lo que se refiere a la fuente principal de in-gresos, no se aprecian variaciones significativas con lo que ocurría dos años atrás, la mendici-dad callejera es citada en primer lugar y a gran distancia de la segunda opción, el trabajo. Cla-ro que entre los que se encuadran en la opción

“Otros”, hay también mucha actividad económica, puesto que más de la mitad se dedican a buscar y vender chatarra o todo lo que encuentran de valor en la basura; una persona es vendedora ambulante, aunque raramente consigue más de 70 € al mes; otro intenta vender libros; mientras que otra persona dice cobrar una pensión no contributiva y finalmente otro se encuentra co-brando 420 € que alargan la ayuda del paro una vez que se han agotado las prestaciones.

Y, en fin, más de un 20%, dice cobrar alguna pensión o ayuda oficial, pero tan escasa que no le saca de la situación de tener que vivir sin techo.

Principal fuentes de ingresos

2010 2012

Trabajo 3,5% 7%Familiares 1,8% 3,5%Amigos 7% 5,3%Pidiendo en la calle 29,8% 33,3%Seg. Social 7% 3,5%Seguro de paro 1,8% 5,3%Renta mínima 3,5% 1,8%Prostitución 0% 0%Pensión de vejez 3,5% 7%Pensión de viudedad 0% 0%Ayudas discapacidad 1,8% 1,8%Otro tipo de pens. 5,3% 1;8%Otros 35,1% 29,8%Total 100% 100%

063

Cruz Roja Española

En cuanto a los Servicios que son utilizados más habitualmente por la población sin techo en Zaragoza, contamos con 54 personas que responden a esta pregunta en 2010 y un núme-ro casi idéntico (55) en 2012. Los datos obteni-dos en respuesta múltiple son los que aparecen en el gráfico siguiente. Comedores y albergues, son los más utilizados, alternándose en el pri-mer puesto. Pero también los roperos y los ba-ños públicos son muy utilizados. Parecería que estos últimos han experimentado un incremento en la demanda durante el último año. Finalmen-te, alrededor de un 10%, algo menos que hace dos años, se muestran refractarios a usar los servicios que existen en Zaragoza.

Este año introdujimos como novedad una pre-gunta en la que pedíamos que nos dieran su opinión sobre los recursos que usaban. Dispo-nemos de 52 respuestas consignadas. Tienen el enorme valor de haber sido recogidas en la calle, en una situación de plena libertad para opinar puesto que se trata de una relación cara a cara, dialógica, gratuita y anónima que no im-plica ninguna contrapartida en función de cuál sea la respuesta dada al entrevistador.

Las contestaciones en respuesta libre, pueden clasificarse entre quienes están satisfechos con ellos y los valoran “Bien”, o tienen “buena” opi-nión (36%) entre estos hay quien precisa: “es gratis”; o “muy bien” (8%) ya que “dan bien de comer” (en el Carmen), o porque le permiten

“pasar el día en el Albergue y comer en el Car-men”.

Un 9% da respuestas que no significan ni bien ni mal sino más bien “Regular”, o “normal”.

Finalmente, los que muestran mala opinión (un 29%) quejándose del mal trato, de que hay “mala gente”, porque “le chillan en el ropero”, porque

“son escasos y no ayudan a mejorar la situación”, o porque “le han robado varias veces”, o “no le gusta ponerse la ropa de otro”. A estos clientes insatisfechos habría que sumarles otro 8% que dicen tener una opinión “muy mala” o similar (“nefasta”, “tétricos”, “fatal”, etc.) entre estos últi-mos hay una persona que precisa: “sólo ayudan a extranjeros”. Por último, otros 5 no opinan, o dicen que no recurren a ellos a pesar de haber señalado alguno en la pregunta anterior.

Resultados obtenidos.Uso de servicios.

Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

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Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Resultados obtenidos.

Si prescindimos de este grupo que no opina. Y agrupamos el resto de contestaciones, el pano-rama general es el que ofrecemos en el siguien-te gráfico. Si bien hay división de opinión, son mayoritarios los que tienen buena o muy buena opinión de los recursos que utilizan. Todo ello a pesar de ser la opinión de personas que, recor-démoslo, están durmiendo en la calle esa noche.

065

Cruz Roja Española

En cuanto a los servicios que dicen no haber obtenido a pesar de necesitarlos, nos encontramos con el panorama que refleja el siguiente gráfico. La carencia subjetivamente más sentida es la rela-tiva a la Alimentación (33%) seguida de la Ropa (23%) y en tercer lugar aparecen con igual número de quejas la demanda de “Alojamiento temporal” y de “Ayudas económicas” (20%).

Pero quizás tenga más interés comparar esta “demanda no satisfecha” en 2012, con lo que captamos en 2010 (ver Gráfico sig.).

Conviene tener presente que este año, ofrecimos otras dos posibilidades de respuesta que han permitido desagregar el abundante grupo de opiniones

que se englobaban en el ge-nérico “Otras”. Una vez dicho esto, parece que mientras ha descendido la queja de quie-nes demandaban “alojamiento permanente”, o Educación/for-mación, han aumentado quie-nes se lamentan de no obtener Alimentación, ayudas económi-cas y lo que es más importan-te: atención médica (que sube

del 6% al 13%), lo que parece coherente con 15% que dicen no haber conseguido Medica-mentos/Recetas. Puesto que el 100 por cien de los que di-cen no haber podido obtener medicamentos o recetas son extranjeros, y que el 80% de los que dicen no haber conse-guido atención médica también lo son, hay que pensar que es-

066

Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Resultados obtenidos.

tamos ante el resultado del en-durecimiento de la asistencia sanitaria para los extranjeros sin papeles en nuestro país.

Como viene siendo habitual en este tipo de operaciones, preguntamos a las personas que iban a pasar la noche a la intemperie “¿de qué tipo de alojamiento les gustaría dis-

poner?” y como de forma rei-terada viene siendo habitual son una ínfima minoría los que

“piden” plaza en un albergue o una pensión, por el contrario la gente sin techo, desea, vivir en una vivienda, ya sea compar-tida con otras personas (56%) con su familia (13%) o para vi-vir ella sola (20%).

Lo hemos defendido tantas veces en los últimos años que resulta tedioso volver a insistir sobre ello, pero el hecho es que si pretendemos intervenir a partir de los propios sujetos afectados y si nos atenemos a lo que la evidencia empírica disponible en otros países nos sugiere, resulta urgente empe-zar a multiplicar las intervencio-

067

Cruz Roja Española

nes basadas en la filosofía “housing first”, todavía minoritarias o inexistentes en muchas ciudades españolas.

Esta filosofía se basa en una intervención temprana en vivienda, proporcionando viviendas asequi-bles y permanentes a personas que vienen directamente desde la calle o desde dispositivos de emergencia, ofreciendo un apoyo social y de salud intensivo. Ade-más se fundamenta en la libertad de decisión del usuario y la acep-tación de la persona. Las expe-riencias desarrolladas en países como Finlandia, Reino Unido o Ir-

landa resultan especialmente relevantes para contrastar la eficacia de este modelo de intervención.

Si bien hay que tener presente que en Zaragoza contamos con la respuesta de un número pequeño de personas sin techo, lo cierto es que en todos los recuentos que se han venido realizando en ciu-dades españolas las respuestas obtenidas han seguido sistemáticamente la misma orientación. Del año 2010 a este, con algunas variaciones la pauta es la misma, sólo una minoría “desea” soluciones residenciales institucionales. Esta tendencia a aspirar a un alojamiento en vivienda se agudiza in-cluso entre la muestra de 2012 (50 respuestas) frente a la de hace dos años (cuando conseguimos también otras 50).

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Resultados obtenidos.Victimización.

Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

También en este aspecto los datos de esta últi-ma encuesta refuerzan los obtenidos dos años antes. Vivir en la calle es peligroso. Casi la mi-tad (el 43%) dice haber sufrido algún tipo de de-lito en el tiempo que lleva viviendo en la calle (en 2010 eran el 48%). Y también como hemos encontrado en otras operaciones de recuento, sigue siendo muy bajo el porcentaje de quienes denuncian ante la policía.

Con todo, parecería que de dos años acá, ha mejorado algo la seguridad de la gente sintecho en Zaragoza y la confianza en la policía, puesto que los que se declaran víctimas de delitos son menos y en cambio las personas que dicen ha-ber denunciado han crecido.

Este era el paisaje que obtuvimos en 2010:

069

Cruz Roja Española

Resultados obtenidos.Salud.

Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

En cambio por lo que se refiere a la salud, la evolución del 2010 a 2012 ha seguido el sentido in-verso: ha empeorado sensiblemente. Más de la mitad dicen padecer algún problema de salud (en 2010 fueron el 38%), y ha descendido un poco más el porcentaje de quienes dicen estar tomando alguna medicación, que ahora ya no llegan a ser ni la cuarta parte (23,5%) de los enfermos como ocurría en 2010.

Teniendo en cuenta que recientemente se habían introducido reformas legales que endurecían las condiciones de acceso de extranjeros “sin papeles” a la sanidad, incluimos este año una pregunta sobre si tenían tarjeta sanitaria, el resultado obtenido es que sólo el 57% de las personas sin techo en Zaragoza dispone de ella, y más de una cuarta parte de ellas no sabe si está en vigor.

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Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Resultados obtenidos.

En este importante aspecto, la condición de extranjero implica una doble exclusión, frente a quienes estando viviendo en la calle como ellos, sin embargo son españoles. Más del 80 por ciento de los nacionales tienen tarjeta sanitaria, mientras que entre los extranjeros apenas si llegan al 44%, en un contraste perfectamente significativo desde el punto de vista estadístico, tal y como se refleja en la tabla siguiente.

¿Tiene tarjeta sanitaria? Según nacionalidadEspañol Otra

Si 81% 44,4%No 19% 55,6%Total 100% 100%p=0,7% ; Chi2=7,25 ; gdl=1 (MS)

¿Tiene tarjeta sanitaria? Según nacionalidadEspañol Otra

N %cit. N %cit.Si 15 100% 8 50%No 0 0% 8 50%Total 15 100% 16 100%p=0,1% ; Chi2=10,11 ; gdl=1 (MS)

Por si fuera poco, mientras que la totalidad de los españoles dicen saber que su tarjeta está en vi-gor, entre los extranjeros apenas el 50%, de los pocos que la tienen , creen que está en vigor y aún podrían usarla sin problemas.

De hecho cuando les pedimos que nos precisen cuándo y dónde fue la última vez que la utilizaron, el 20% la han usado en los últimos quince días, y más de un 60% la utilizaron en el último año. Mien-tras otro 20% hace más de un año que no la utiliza. En cualquier caso, está por hacer en nuestro país un estudio sistemático sobre la utilización de los servicios de salud que realizan las personas excluidas sin techo. Si dejamos a un lado los estudios sobre salud mental (por ejemplo los de Muñoz et al. en 2003 para el caso de Madrid), apenas si contamos con un estudio más genérico sobre salud general de las personas sin techo, realizado hacia finales de los 90 en Barcelona; salvo este caso aislado no hay muchas más evidencias empíricas que nos ayuden a entender y conocer en detalle esta vertiente del problema con indudables y graves implicaciones, tanto si lo consideramos desde las propias personas sin techo, como si lo hacemos en términos de salud pública.

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Cruz Roja Española

Resultados obtenidos.Servicios en calle.

Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Para las personas que viven en las calles de Zaragoza, hay un servicio público que resulta ser particularmente útil y habi-tual: el que les ofrece la UMES que gestiona Cruz Roja. Este servicio dice haberlo utiliza-do un 77% de las personas sin techo que entrevistamos. Habiendo incrementado su cobertura de manera muy im-portante en los últimos dos año (en 2010 lo había usado el 62%).

A más distancia, pero también es muy habitual que la gente sin techo deba usar los ser-vicios de la policía (49%) que también parece haber sido mas empleado en estos úl-timos años. A más distancia se sitúa el “061”, los servicios de limpieza y Casa Abierta. Como novedad, en este último recuento incluimos otro ítem para explorar el nivel de utiliza-ción y conocimiento de la Mi-sión Evangélica Urbana de Za-

ragoza, que efectivamente ha conseguido hacerse un hueco importante puesto que sus ser-vicios han sido usados por algo más de la cuarta parte de las personas que viven en la calle en esta ciudad (ver Gráfico).

También, como en el recuento anterior, pedimos a aquellas personas que habían hecho uso de alguno de estos servi-

cios, que manifestaran su opi-nión sobre ellos indicando si los consideraban “Muy útil” (1)

“Bastante útil” (2) “Poco útil” (3) o “Nada útil” (4). En este sen-tido, la máxima satisfacción o utilidad vendría a ser expresa-da por un 1 y la máxima insa-tisfacción o inutilidad por un 4.

SI ordenamos los promedios de valoración de estos servi-

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Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Resultados obtenidos.

cios, el resultado es el que aparece en la tabla siguiente:

2010 2012

UMES Cruz Roja 1,34 1,23

Policía 1,59 1,51

Misión Urbana Zaragoza N.P. 1,74

“061” 1,78 1,79

Servicios de limpieza 1,67 1,79

Casa Abierta 1,8 1,84

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Cruz Roja Española

Resultados obtenidos.Últimas cuestiones.

Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Al final de la entrevista figura-ban unas cuantas preguntas abiertas que lanzaban cuestio-nes relativas a la experiencia de “la crisis”, los desahucios o desalojos de la vivienda en que residieron, y las necesidades más perentorias de la persona. Por último, les pedíamos que nos dieran una opinión general sobre el conjunto de la red de centros y recursos sociales a los que pueden acudir las Per-sonas Sin Hogar en Zaragoza. La crisis

Como no podía dejar de ocurrir, su experiencia es que la situa-ción está “mal”, “muy mal” o

“fatal”. En el mejor de los casos, “de un trabajo estable han teni-do que pasar a un empleo tem-poral”, aunque lo más habitual es que se encuentren en paro (“antes trabajaba y tenía ingre-sos para el alquiler, comida…”) y vean que “cada vez hay más

gente en esa situación”, sin tra-bajo o incluso en la calle (“ha notado que hay mucha gente sin techo, sobre todo españo-les”). Eso si además de no te-ner trabajo no se añaden otros problemas, por ejemplo de sa-lud: “Lo pasa muy mal. Aparte del problema del trabajo tiene dolores de cabeza”.

Pero como hemos dicho antes, para una buena parte, el em-pleo se ha convertido en un ho-rizonte demasiado lejano, por lo que la incidencia de la crisis es algo que les hace remitirse exclusivamente a la supervi-vencia en la calle, con lo que hay quien se limita a decir que su experiencia es que “la gente no le echa dinero”, o bien que

“hay días que puedes comer y otros no”. Los que se ganan la vida como vendedores dicen que “sí, se vende mucho me-nos y hay más competencia”. El testimonio recogido por uno de

los voluntarios como respuesta a la pregunta ¿Cómo ha vivido Vd. las consecuencias de la cri-sis económica? es sumamente explícito: Mientras saca su úni-cos 6 céntimos, dice:‘”Esto es lo que hay. Me has he-cho una pregunta que no pue-do responder, estoy jodido con la crisis’”.

Hay un par de respuestas que tienen interés porque muestran la diversidad de la experiencia subjetiva de quien siendo ex-tranjero se ve viviendo en las calles de Zaragoza, mientras una persona nos decía que “ha trabajado en el campo como temporero y ahora va por toda España buscando trabajo para conseguir el dinero y volver a su país”, otro entrevistado en cambio nos confesaba que “en Rumanía se encontraba mu-cho peor que en España” (¡!).

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Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Resultados obtenidos.

Necesidades

Inmediatamente después de la pregunta sobre la crisis, les pedíamos que nos dijeran: En este momento, ¿qué necesi-ta usted?, ¿cuáles serían sus necesidades más urgentes o importantes?. Aunque pueda resultar una obviedad, lo cierto es que la demanda más mayo-ritaria se refiere al alojamiento, expresada de una u otra forma, como “un lugar donde dormir” o

“un sitio para vivir”, “una vivien-da”, “una casa”, “una habita-ción con baño”, en resumen un pequeño espacio en el mundo en donde refugiarse, o como decía un pensionista: “un alo-jamiento barato y que le pueda quedar dinero para comida”, es decir que no tenga que verse en la tesitura de elegir entre co-mer o dormir bajo techo.

Tras la referencia al alojamien-to que aglutinaba por sí sola la mitad de las respuestas, nos encontramos con la necesidad de encontrar un trabajo a la que aluden casi un 30% de los que responden. A mayor dis-tancia se encuentra la deman-da de “papeles” que expresan algunos extranjeros (“Tramitar

sus papeles para tenerlos en regla”; “Solucionar sus papeles rumanos”; “Empadronamiento para tramitar la tarjeta sanitaria aquí en Aragón”).

Por último, hay quien puesto a expresar lo que necesita se conforma con bien poco, como por ejemplo aquel que nos dijo que necesitaba: “un colchón”, o en una línea algo más filosófica habría que situar el siguiente diálogo:

Voluntario: - En este momento, ¿qué ne-cesita usted?, ¿cuáles serían sus necesidades más urgen-tes o importantes?

Persona sin techo: - Beber un vino tinto con ga-seosa.

En fin…

Futuro

Con este panorama era difícil pero también obligatorio, tratar de aproximarnos a las expecta-tivas ante el futuro de quienes se encuentran viviendo sin te-cho, por eso mismo nos atre-víamos a preguntarles “¿Qué

espera en el futuro?”.

En lógica continuidad con las respuestas anteriores, pues-tos a soñar y ser positivos, la respuesta más frecuente es la de quienes sueñan con un trabajo:“encontrar un trabajo”, poder disponer de “trabajo y vivir tranquilo”, o bien poder

“trabajar y mandar dinero” como dice un inmigrante. No obstan-te, hay también varios casos de extranjeros que del futuro no esperan tanto un empleo como poder retornar: “Trabajar o volver a Rumanía”. Quien ha perdido la esperanza o ve de-masiado lejano el posible tra-bajo sólo espera que el futuro le permita: “Dejar la calle y vol-ver a Marruecos”; obtener “un billete para Valencia [otra per-sona nos dirá Madrid], trabajar allí y luego regresar a su tierra”. Este mismo sueño del retorno está presente en el caso de quien manifiesta al voluntario que “quiere volver a Argelia [porque] tiene allí su familia y su casa”.

Para los españoles de cierta edad, en el futuro esperan po-der llegar a cobrar una pensión (“una paga”; “cumplir los 65 y

075

Cruz Roja Española

poder cobrar ya”), el resto se limita a expresar deseos más o menos difusos (“salir de esta”,

“vivir”, “mejorar”, “un hogar”, “vi-vir bien” o al menos “algo me-jor”), o directamente inalcanza-bles: “ser millonario”.

Pero sin duda el rostro más te-rrible de la calle nos lo muestra ese 20% de los entrevistados que dicen no esperar ya nada del futuro o, finalmente, el caso extremo de quien dice que sólo espera “la muerte”.

Conclusión

La encuesta finalizaba con una pregunta en la que animába-mos a “añadir libremente al-gún otro comentario u opinión”, ocasión que fue aprovechada por 17 personas para hablar de asuntos muy diversos. En unos casos se limitaron a pedir “que por favor le lleven mantas”, o

“que vengan más a menudo a traer bocatas y mantas”. Algu-nos otros apuntaron más allá de la vida en la calle para aludir a los servicios y profesionales o quejarse de ellos: “algunas trabajadoras sociales no ayu-dan”, “más horario para las du-chas”, o bien “mejorar el alber-

gue para dormir todos los días”. Creemos importante consignar que hay tres casos en los que se alude a actuaciones de la policía que se consideran in-correctas o inadecuadas; lite-ralmente se expresan así: “Al-rededor de los comedores hay coches de policía que siempre les dan la razón a los vigilan-tes”; otro “comenta el acoso policial por ser vendedor ambu-lante” y en el tercer caso, el vo-luntario que rellena el cuestio-nario recoge un testimonio algo confuso pero que en todo caso refleja su estado de ánimo y su malestar: “La policía hace unos días en el cajero le pidió la do-cumentación (mientras dormía allí) y se la llevó. El mismo poli-cía ayer le dijo que si lo volvía a pillar, lo encerraría” y continúa:

“Fue una vez a una entidad so-cial y se lo negaron todo (fue por alimentos), así que no pidió más ‘en esta puta ciudad y soy de aquí’”. Más allá de que los hechos reflejen exactamente o no la realidad de lo que efecti-vamente ocurrió, creemos que es importante, tras una entre-vista larga y compleja, ofrecer la oportunidad de poder des-ahogarse y expresar libremen-te sus sentimientos a quienes

viven habitualmente en la calle y probablemente casi nunca pueden llegar a hacerlo sin su-frir las consecuencias de una u otra forma.

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Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Resultados obtenidos.

077

Encuestas en centros:sin techo/sin hogar

Encuestas en centros:sin techo/sin hogar.

Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

5

Para concluir este informe, comparare-mos los datos que hemos expuesto hasta ahora, procedentes de las en-trevistas realizadas a quien se en-

contraba aquella noche, durmiendo literalmente Sin Techo, con quienes se encontraban Sin Ho-gar y durmieron acogidos en la red de recursos de alojamiento de Zaragoza. Querríamos saber hasta qué punto se trata de dos grupos de per-sonas más o menos semejantes o diferentes.

Gracias al trabajo de campo realizado por los equipos de voluntarios en los propios centros, disponemos de 57 entrevistas procedentes de usuarios de la Hermandad del Refugio y de 26 entrevistas obtenidas en el Albergue Municipal, 8 de las cuales fueron realizadas en Casa Abier-ta. En total 83 entrevistas en Centros, frente a las 62 entrevistas en Calle. Mostraremos el análisis mediantes gráficos casi exclusivamente.

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Cruz Roja Española

En cuanto al sexo, es fácil comprobar que se trata de dos subpoblaciones muy semejantes. A diferencia de lo que ocurre en otros lugares, donde las mujeres están sobrerrepresentadas entre las personas alojadas, en Zaragoza no hay apenas diferencias. Bien es verdad que es-tos datos no incluyen los recursos de alojamien-to más normalizados, como pisos tutelados por ejemplo, donde las mujeres son más abundan-tes. Por ejemplo, representan el 55% de las 38 personas sin hogar del Alojamiento Alternativo Puente que gestionan las Hijas de la Caridad, son el 44% de los adultos que aloja la Parro-quia del Carmen, o el 35% de la Fundación La Caridad.

Su edad media resulta ser de 41,58 años, cuan-do en la calle encontramos una media de 47,8 años de edad. Se trata por lo tanto de una po-blación más envejecida que la que se aloja en los centros, tal y como se puede comprobar en el siguiente gráfico. De hecho mientras que la edad modal de los albergados se encuentra en

el tramo de los cincuenta y tantos, en las calles de Zaragoza lo más frecuente es encontrar sin techo a treintañeros.

Curiosamente, también hay importantes con-trastes si comparamos el Estado civil o situa-ción de convivencia declarado por unos y otros. Mientras que en los Centros apenas son un 2,5% los que dicen estar casados, en la Calle hemos

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Estudiopersonas sin techo.Zaragoza 2012

Resultados obtenidos.

encontrado casi una cuarta parte de casados. Creemos que esto se debe particularmente al efecto de los inmigrantes que mantienen su fa-milia (aunque lejos) y se han visto momentánea-mente sin alojamiento, pero en cambio mantie-nen los vínculos afectivos y familiares. Digamos que en los centros nos encontramos con que los “solitarios” por soltería o ruptura, suponen un 92,4%, mientras que en la calle son “única-mente” un 78%. Y efectivamente, tal y como se muestra en el si-guiente gráfico, es mucho más probable encon-trar a extranjeros en la calle que en los centros. Digamos que, hoy por hoy, parece producirse una especie de discriminación (positiva para el caso de los españoles) que lleva a elegir prefe-rentemente a los nacionales frente a los inmi-grantes en los centros para personas sin hogar de Zaragoza. En la calle hay un 64% de perso-nas extranjeras sin techo, mientras en los cen-tros para personas sin hogar “sólo” son un 41%

Una consecuencia de ese reparto asimétrico de los extranjeros sin hogar, la vemos reflejada en el siguiente gráfico que resume el nivel de es-tudios alcanzado por unos y otros. La distribu-ción en la calle es mucho más extrema que en los centros. Digamos que en la calle confluyen muchos españoles con muy bajo nivel educativo (un 73%), mientras que un 35% de los extran-jeros tienen estudios de secundaria y un 13% superiores. Por lo demás, también entre la población aloja-da en los centros, encontramos un superior ni-vel educativo entre los extranjeros, de los cuales sólo un 31% tienen estudios primarios o inferio-res, mientras que dos de cada tres españoles (64%) se mueven en este nivel educativo.

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Cruz Roja Española

Nivel de Estudios Español Extranjero TOTALCENTROS Primaria o inferior 64,1% 31,3% 49,3%

Secundaria 35,9% 56,3% 45,1%Superior 0,0% 12,5% 5,6%TOTAL 100% 100% 100%(N) (39) (32) (71)

CALLE Primaria o inferior 72,7% 52,2% 62,2%Secundaria 18,2% 34,8% 26,7%Superior 9,1% 13,0% 11,1%TOTAL 100% 100% 100%(N) (22) (23) (45)

También encontramos di-ferencias importantes en el recorrido residencial previo de unos y otros. Si nos fijamos en la pregunta

“¿En qué sitio residía antes de llegar a la calle?”, en-contramos que en los Cen-tros se duplica la propor-ción de los que llegan de vivir en su casa, o de un piso compartido. En este sitio, para la mayoría viene a ser un lugar de acogida una vez que se ven sin lu-gar donde vivir. Y hay que pensar que muchos logra-rán remontar y esta será únicamente una etapa di-fícil en su vida, puesto que en la calle nos encontra-mos sólo con un 11% que dice estar de vuelta de los albergues. Un porcentaje importante, pero limitado. En cambio la experiencia más frecuente de residen-cia anterior entre la gente de la calle es la que trans-curre por la acogida tem-poral en casa de algún fa-miliar antes de verse en la calle. Dicho sea todo esto con las debidas precaucio-nes. Pero en fin, parecería que los centros de alo-

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Resultados obtenidos.

jamiento están actuando como dispositivos de contención y acogida para los que se inician en la vida sin hogar, sobre todo, que una parte de ellos queden atrapados en el circuito de la ca-lle, no puede hacernos ocultar el hecho de que para muchos representarán un trampolín desde el que volver a encontrar su lugar en la sociedad.

Entre otras cosas, porque estar en un centro hace algo más fácil poderse empadronar en Zaragoza, y en consecuencia tener una situa-ción administrativa que permite el acceso a casi todos los servicios de la Administración que re-sultan inalcanzables para los no empadronados (tarjeta sanitaria, servicios de empleo, etc.).

No obstante, las diferencias halladas en este capítulo no son tan grandes como las que en-contramos en Madrid, donde entre la gente de la Calle los empadronados sólo representaban el 52%, mientras que en los Centros se alcan-zaban tasas de un 81% de empadronamiento. Cifras más extremas que el 65% y 72% de em-

padronados totales en las calles y los centros de Zaragoza.

En cambio no hemos encontrado diferencias apreciables al comparar los motivos decla-rados que les han llevado a verse en la calle (ver gráfico sig.). En ambos casos, la alusión a la falta de trabajo es el gran acumulador de responsabilidad. Pensemos por otra parte, que se trata de la causa socialmente más cargada de “legitimidad” aparente por lo que sin duda puede ser la referencia genérica que vele, de entrada, otras muchas realidades también pre-sentes sin duda. Por ejemplo, es bastante más fácil encontrar referencias a las rupturas afecti-vas y sentimentales entre quienes duermen en la calle, cuando seguramente también están presentes en alguna medida entre los acogidos en los centros..

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Donde sí que es posible apreciar el efecto dife-rencial de encontrarse en un recurso de aloja-miento es en el análisis de la fuente principal de ingresos declarada (ver gráfico sig.). Entre los alojados en Centros, se duplica el porcentaje de los que obtienen sus ingresos principalmente del trabajo (17% vs. 8%), mientras que con los que se dedican a la mendicidad, pidiendo en la calle, ocurre justamente lo contrario. Si bien es una actividad que no está completamente erra-dicada entre los acogidos en recursos, puesto que una quinta parte aún confiesa practicarla (20%), este porcentaje es la mitad del que en-contramos entre la gente de la calle (39%).

En general la gente de los Centros dice tener ingresos procedentes de alguna fuente oficial (renta mínima, pensión, seguridad social, etc) en un porcentaje mayor (31%) que la gente que está en la calle (24%). Esto creemos que se puede explicar tanto porque hay más espa-

ñoles y por tanto más posibilidades legales de obtenerlas, como también porque es más fácil su gestión y tramitación.

Esto es algo que puede comprobarse fácilmen-te cuando analizamos la relación “oficial” con el mundo del trabajo. Si bien, el porcentaje de los que en este momento dicen trabajar es muy pe-queño en ambos grupos (8% en la Calle y 6% en los Centros) y además sabemos que se tra-ta más bien de chapuzas y trabajillos menores en la economía sumergida y de subsistencia (chatarreo, etc) que de un verdadero trabajo a tiempo completo, el hecho más diferenciador lo encontramos cuando preguntamos si se en-cuentran apuntados en el INAEM, el servicio oficial de empleo en Aragón. Entonces compro-bamos que si bien apenas un 32% de la gente que vive en la calle está apuntado oficialmente como demandante de empleo, este porcenta-je sube hasta el 75% entre quienes se alojan en los centros. Otra cosa es que a corto plazo, sirva realmente para conseguir trabajo, pero al menos proporciona un estatuto administrativo y

“estadístico” muy diferente, en la medida en que te incorpora oficialmente a eso que se define como la “población activa”, es decir, aquella que se encuentra ocupada o buscando empleo.

Es una diferencia simbólica pero muy impor-tante, esta de existir administrativamente como

“activo” en busca de trabajo, sobre todo si tene-mos en cuenta que más allá de las diferencias sociodemográficas y de recorrido biográfico que hemos venido señalando en este apartado, se trata de personas que comparte esencialmente

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Resultados obtenidos.

las mismas situaciones de necesidad y deben atender con grandes dificultades a la tarea te-diosa y cotidiana de lograr sobrevivir día a día. Para lo cual hacen un uso muy similar de los recursos sociales orientados a atender a la gen-te en situación de exclusión severa (ver gráfico sig.)

Las únicas diferencias apreciablemente signi-ficativas se refieren a que los entrevistados en los Centros dicen usar más los albergues (como parece natural) mientras la gente que viven en la calle necesita hacer un uso mayor de los baños públicos. En todo lo demás son muy similares, personas en situación de gran exclusión, que sobreviven gracias a que comen, se visten y se asean o pasan el día en los pocos lugares y re-cursos donde puede hacerse de forma gratuita en Zaragoza.

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Como complemento de este estudio resulta de indudable interés el análisis de ocupación del Alber-gue municipal de Zaragoza y de los perfiles de las personas atendidas por el mismo. El siguiente resumen facilitado por D. Gustavo García Herrero, Jefe de la unidad de Alojamientos Alternativos en el Ayuntamiento de Zaragoza recoge los aspectos más relevantes de su evolución en los últimos años en el momento de la realización de este estudio. La ocupación del centro se mantiene en niveles muy elevados, aunque no alcanza los regis-trados entre los años 2001 a 2008. A partir de la mitad del año se constata un repunte consi-derable en la ocupación del centro.

En el año 2009 se quebró, por primera vez en los más de 20 años de existencia del Albergue, una tendencia de ocupación cada vez más elevada, a pesar de que el porcentaje de ocupación se mantiene en niveles muy elevados, próximos al 90 % de la capacidad total del centro. En los

años siguientes se constata una tendencia des-cendente, especialmente llamativa por cuanto se produce en un contexto de crisis económi-ca que parecía anunciar un incremento de las situaciones de necesidad que recibe un centro como este.Pero en 2012, sobre todo a partir de mitad de año, se vuelve a registrar un incremento en los niveles de ocupación. Será necesario ver lo que ocurre en 2013 para saber si nos encontramos

ante un cambio de tendencia o solo ante algo coyuntural.Los servicios de comedor, duchas y ropero continúan registrando en 2012 niveles de ocupación muy elevados y superiores a los de años anteriores a 2009.

Se consolida una tendencia decreciente muy prolongada en el número de personas diferen-tes que se alojan en el Albergue, y se incrementan las tendencias de cronificación.

El número de personas diferentes que se alojan el albergue en 2012 es el más bajo desde 1998. Este número alcanza su máximo en el año 2001, con 4.353 personas, y desde entonces se viene registrando una reducción constante, casi de forma ininterrumpida, de manera que entre el año 2001

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Encuestas en centros:Trayectoria ocupacional en el Albergue Municipal de Zaragoza

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Resultados obtenidos.

y 2012 el descenso en el número de personas diferentes que se alojan en el Albergue es de más del 36,9% (1.608 personas menos).Unos datos que de nuevo llaman la atención por cuanto se producen en un contexto de cri-sis económica muy acusada en los tres últimos años, a pesar de lo cual también en estos años continúa reduciéndose el número de personas diferentes que se alojan en el Albergue.

Junto a este dato, destacan otros que sugieren el incremento de la cronificación de los usuarios del Albergue:

• El porcentaje de usuarios nuevos sobre el total de usuarios del albergue en 2012 es el más bajo de los últimos 12 años (periodo desde el que se registra este dato).

• Después de tres años de descenso en los datos de cronificación (personas que utilizan el albergue más de dos veces en el año y que llevan siendo usuarios del albergue cuatro o más años), a partir de 2009 se incrementan tanto los porcentajes como el número absoluto de usuarios habituales y de usuarios crónicos.

En definitiva, los usuarios del Albergue son cada vez menos, y cada vez se incorporan menos per-sonas nuevas a este colectivo, al tiempo que quienes ya se encuentran en él cada vez tienen más dificultades para salir. Parece como si la crisis económica no se manifestara tanto en un incremento

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del número de personas que se quedan en la calle en situación de extrema necesidad –y que, por ello, necesitan acudir al Albergue-, sino en hacer cada vez más difícil salir de la calle a quienes ya se encuentran en ella.

Sin embargo, como ya se ha dicho, en los últimos meses de 2012 hay señales que pueden indicar un cambio de tendencia también en lo que se refiere al incremento del número de personas que utilizan el centro, y que habrá que esperar a la evaluación de 2013 para confirmar si se trata efecti-vamente de un cambio de tendencia.

Se mantienen estables las características generales de los usuarios del albergue en cuanto a composición por sexo y proceden-cia (nacionalidad), y se confirma la prolon-gada tendencia al incremento de la media de edad de los usuarios

Se mantiene el porcentaje de mujeres entre el 10 y el 12 %. Aunque en 2008 se rompió por primera vez el techo del 12 %, alcanzando el porcentaje de mujeres el 13,1 %, a partir de 2009 este porcentaje se sitúa por debajo de 11%

y en 2011 alcanza un mínimo de 9,6%. En 2012 es del 10,4%. Es decir, en el intervalo que se viene registrando desde 2002, años en los que el porcentaje de mujeres sobre el total de usuarios del Al-bergue se mantiene estable oscilando en entre el 10% y el 12% del total de usuarios.

Se estabiliza el porcentaje de extranjeros por debajo del 60%del total de usuarios del Albergue, y con ligera tendencia descenden-te. Las personas de origen extranjero han sido en 2012 el 54,6% del total de usuarios del Albergue, un punto menos que en 2011 (55,6%) e inferior también a 2010 (56,7%), 2009 (56,5%) y 2008 (56,6%)

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Resultados obtenidos.

Los marroquíes vuelven a ser el colectivo de extranjeros más numeroso, con un 14,4% del total de usuarios del albergue, superando a los rumanos que habían sido en los dos años anterio-res la nacionalidad con mayor número de usuarios. Los rumanos constituyen en 2012 el segundo colectivo más importante por nacionalidad, con el 12,3% del total de usuarios del Albergue. Los argelinos en tercera posición, con un 8,5% del total de usuarios del Albergue, y los subsaharianos, que alcanzan un 6,4%.

Tendencia a incrementarse la media de edad de los usuarios. Entre los años 1998 a 2001 se registró un ligero rejuvenecimiento de la población usuaria del Albergue, quizás debido al incremen-to de población inmigrante en estos años, que era población muy joven. Y a partir de esa fecha, en los últimos 11 años, es constatable una tendencia sostenida de envejecimiento de la población, al aumentar el peso de los intervalos de edad superiores a 36 años y disminuir, en consecuencia, los de menos de esa edad. Desde 2010 el intervalo modal ya no se sitúa entre los 26 y los 45 años, sino entre los 36 y los 55 años.

El incremento de usuarios residentes en la propia ciudad de Zaragoza registra una débil pero continuada tendencia creciente en los últimos años.

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Las personas residentes en la ciudad de Zara-goza, incrementan de forma sostenida su pre-sencia en el Albergue especialmente a partir de 2005 (8,6% del total de usuarios), hasta situarse en 2012 en el 13%. Hay que tener en cuenta que en este porcentaje solo se tiene en cuenta a los

usuarios de nacionalidad española, por lo que el porcentaje real de residentes en la propia ciudad sobre el total de usuarios del Albergue será, sin duda, mucho mayor, y en ningún caso inferior al 20% del total de usuarios (uno de cada cinco).

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Anexos

Cuestionario Calle

Ficha de inscripción de voluntarios

Ficha de evaluación

Guía de recursos

Mapa de recursos para personas sin hogar

100Ciento80Ochentay6Seis

www.cruzroja.es 902 22 22 92

Humanidad Imparcialidad Neutralidad Independencia Voluntariado Unidad Universalidad