Transcript
  • ms al rasgo fund.amental de la realidad que todas las dems ideas sobre

    el hacer y el planific ar. I-a nueua hermtica no resuelve el usecretoo ni dejaque simplemente contine siendo un secfeto. Ms bien lo liga a un PIo-cedimiento, sin duda ms artstico que hbil, en el cual el hombre hacerealidad su propia autotranscendencia. El hornbre que sabe, valora y cul-

    tiva su autotranscendencia es el nuevo hombre que, efectivamente,est en un nuevo escaln de la realidad, aunque slo sea (nuevo)) para ly no para las cosas o para la naturaleza.

    La hermtica se contfapone a la hermenutica, aunque ambos con-ceptos se remonten a Ia misma ralz (Hermes, el dios de los intrpretesy de los parlamentarios). La hermenutica se orienta hacia un movi-miento en la ucomprensinr, la hermtica hacia un movimiento en el(ser). La diferencia se hace clara en las dos formas de nprofesor, (enOccidente) y de nmaestroo (en el lejano Oriente). EI profesor a sus alumnos y les proporciona un (saberD que se adquiere (aPren-diendoo. El rnaestro (transfofmaD a sus discfpulos y les da otro (sen)'otra vida, otlo yo en la autoelevacin, que se alcanza (Practicando,' Enello no ayuda nsaben alguno, slo una oiluminacin>, que significa unailuminacin de toda la existencia. El saber se adquiere y se explica porla hermenutica, la iluminacin por la hermtica. Esta es un arte detransformacin del hombre. Slo hay muy Pocos ejemplos de ello enOccidente, pero una tradicin de siglos en Oriente. Sin embafgo' unanhermtica filosficao todava no se ha desarrollado ni aqu ni all; slohace poco existe un Proyecto que se puede considerar como una ins-truccin del ser para el hombre futuro y del que aqul slo se ha mos-trado un esquema muY general.ro

    30. H. Rombach, Weh und Gegenweh. Umdcnken ber die Virklichkeit: DiePhilosophische Herznetih [Mundo y contramundo. Gio en el pensamiento sobre la rea-lilol. lo ff|."^f, c lr hermticel. Fribrrrso/Basilea. 1983.

    Capltulo III

    EL FENMENO BASICO DE IA SITUACIN

    A. Fuera y denuo

    1. I TSTnUCTUM DE LoS FENMENos BAsICos

    Lo que aqul entendemos, de un modo muy concreto, por nanlisis estruc-tual, no parte de un ncleo esencial fijo en el hombre, sino que consi-dera al hombre como aquel que siempre tiene que dotarse de nuevo y deuna manera histrica una nueva constitucin esencial, una esucturabsica. La estructura bsica se configura como un tejido defenmenos bsi-cos. Por fenmenos bsicos entendemos aquellos fenmenos que no sepueden comprender como derivaciones de otros fenmenos, sino que oris-ten sin estar derivados, poseen ia misma esencia y forman una constela-cin global que no se puede simplificar ms. Algunos de estos fenmenosbsicos son: trabajar, experimentar, jugar, luchar, esperar, creer, arnar,decidir, actuar, dominar, producir, ayudar, educar, sanar, etctera.

    Eu.gen Fink incluyo seis fenmenos bsicos en su anffopologla feno-menolgica:3r trabajat, luchar, amar) jugar, reconocer y 6ear. Esta elec-cin no es mala, pero le faltan fenmenos importantes como, por ejem-

    3 1. Eugen Fink, Grandphhnornene menschlichen Dasein [Fenmenos bsicos de lae*i.-^--:^J-f L--L-, 1n:L -, t\'l

  • plo, creer y aueverse, cuya inalineabilidad ya se muestra porque en laevolucin de la humanidad no existe ni un solo pueblo que no estuvie-ra determinado de un modo muy elemental por el fenmeno religiosode creer, y porque no se hubiera dado ningrn desarrollo de la humani-dad sin que esta humanidad no hubiera sido irnpulsada cada vez de nue-vo, por la seduccin de la osada, a superar las formas de vida ya des-cubiertas y a abandonarlas para dotarse de una nueva realidad en loindeterminado y peligroso'32

    La serie de fenmenos bsicos est abierta y no se puede cerrar. Seffansforma con cada nueva configuracin. Hay pocas en que la osada'la investigacin y el descubrimiento estn en primer plano, y otras enque la conservacin, la profundizaciny la interiorizacin asumen el pri-mer lugar. En estas uansformaciones, la totalidad de los fenmenos bsi-cos se rg nir^ cadavez de nuevo, aPafecen en escefra nuevos fenme-nos bsicos, otros ms antiguos se pierden en el olvido, y los fendmenosbsicos transmitidos asumen otras posiciones en la constitucin fun-damental del hombre, con lo cual tambin se ansforman en su con-tenido. Cuando el hombre se dota de una nueva constitucin bsica,con ello modifica su esenciay organiza nuevamente su relacin con elmundo y con Dios.

    La forma en que los fenmenos bsicos estn determinados Parti-cularmente no se determina de modo Perticulaf, sino justamente por laimagen global de su configuracin. Por eso, solamente se puede com-prender a uno solo de los fenmenos que peftenece a la imagen glo-bal entendindolo en relacin con otros fenmenos bsicos cercanos,y stos slo se pueden caPtar si se captan incluyendo su relacin conlos dems fenmenos bsicos. Esto significa lo siguiente: slo se Pue-den captar los fenmenos bsicos dentro de la totalidad de s:r esnuc-turay en ello se tiene que ver que se Pueden convertif en su contrariopor una nueva configuracin. Asl, oDiosu tiene un significado muy dis-

    32. Compfuese con Peter Vusr, (Jngew$heit und \Yagrtis fincertidumbre y osa-dal, Mnich y Kempten, 1946.

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    dnto para un hombre creyente que para un ateo, y no dene titgut senti-do decir que el ateo oniega, a Dios. Una transfomacin como sta supon-dra que el ateo podra relacionar su negacin con el mismo oDioso enel que cree el creyente, porque su idea de Dios es de tal manera que elcreer pertenece a ella inmediata e indisolublemente. La idea de Dios delos ateos es completemente distinta y est determinada Por el hechode que creer en ella sera un sinsentido, Por esto no cree. Si el creyen-re tuviera el Dios del ateo tambin se convertirla en ateo; si el ateotuviera el Dios del creyente, tambin I creera'.Asl pues, qu Dios tie-nen? Qu nDioso se tiene depende de qu omundoo, qu ohombre,r, qu, qu otrabajou, qu nienguart, qu nactuacino se tiene; es decir,depende de todos los fenmenos bsicos que estn situados y estructu-rados de distinta manera en cada existencia. E tt .s la tesis fundamen-tal de la antropologla estructural.

    No toda existencia se elabora una estructura propia de fenmenosbsicos. De hecho, esto slo sucede en los casos de una existencia com-pletarnente creadora. Normalmente se asufnen aquellas estructuras bsi-cas que han creado una poca, una cultura o un pueblo. De todos modos,hay diferencias individuales que sobre todo son posibles porque los indi-viduos pueden seguir distintos proyectos histricos. fu, por ejemplo, amediados del siglo >x podran haber tropezado dos personas que tenanunas estfucturas bsicas tan distintas corno la del expresionismo, por una

    Pafte, I Ia esuucnrra de una esPeranza de redencin de los inicios del cris-tianismo, pof la oua; la cuestin es si realmente se pueden (encontfan)rnutuamente. Si no se pudieran encontrar, eso tamPoco se hubiera podr-do constatar pof un enfrentamiento entle ellos, pues Ia lengua est adap-tada y es adecuada a la correspondiente esf,nura d k existencia, y parlo tanto no se asume una posicin superior y comn a Partif de la cualse podrlan ver y expresar una posicin por un lado, y otra posicin porotro lado. La diferencia estructural enue mundos existenciales no se pue-de expresar lingsticamente. Cada uno utiliza las mismas palabras perolas relaciona con otros significados, y esto slo lo puede volver a expre-sar mediante sus propios significados, no con los significados del offo y

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  • de ninguna manera con significados de nivel superior. l'of Io tanto' nohay forma de que uno pueda expresar sus propios significados. cada

    nivel superior. Por Io

    estnrctum bisica es una estru$ura

  • Se fijar la atencin en el primero de los fenmenos bsicos mientras queel segundo slo se uatara modo de contraprueba. No negamos que seffara de un inrenro arriesgado. De hecho, slo se puede exPonef Porquelo sostienen los anilisis realizados de otros fenmenos bsicos, anlisisqre no se pueden exponef por motivos de espacio. Sin embargo, se publi-cafn en su propio contexto relacional (por Io menos sta es la intencin),de modo que se pueda cfear una visin general suficiente sobre la actual

    estructura global de los fenmenos bsicos.:a

    2. LA iNEVITABILIDAD DE LA SITUACIN

    Donde la existencia humana se encuentra originariament es en la situa-cin. A lo que responde es a le situacin. A lo que est enfrentada essiempre a la situacin. Todo lo que se Puede dar, se da en una situacin.Cualquier cosa que se puede Poner en marcha Parte de una situacin yes considerada en vista de otras situaciones. Parece ser que la situacinprepara el terreno indispensable sobre el cual vivimos y experimenta-mos, nos relacionamos con lo uno o con 1o offo' nos clarificamos a noso-tros mismos, etctera. fu, la situacin es todava ms primaria que elmundo, porque siempre experimentamos el mundo slo en situaciones.Lo que pensamos en cada momento del mundo, si el contacto con l esesrrecho o ms distendido, si se nos Presenta abierto o cerrado, todoesto depende de la situacin en que nos encontremos. Ella es el ama

    34.fJnzmetodologla del nanlisis estructuralr, que al mismo tiempo es una meto-dologa d.e la fenomenologa que se ha ido desarrollando' ya no se exPone aqu puestoque ya fue explicada detalladamente en publicaciones anteriores (vase H. Rombach'ih,inornenologie dcs gegenwiirtigen Beuutltseins, Friburgo/Mnich, 1980). All tambinse uara con ms detalle la historicidad de las estructuras bsicas y las nesuucturas Pro-fundaso. A partir de alll tambin queda clro en qu sentido la fenomenologa estruc-tural es la autntica fenomenologa profunda.

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    del mtlndo. No es que el mundo sea el ama de la situacin. Parece quees a la inversa, puesto que el mundo se aproxima como lo ogeneraln,pero justamente slo se acerca as porque se trata delasituacin delLo-br., que es la de existir siempre de cara a lo general.

    As pues, un anlisis primero de la existencia debe partfu de la situa-cin. Seguiremos este fenmeno destacando algunos rasgos de la cons-titucin en su totalidad. En un primer momento, pafece que estos ras-gos fundamentales son escogidos casualmente, pero a continuacin seunen en un complejo que sigue una determinada ley constitutiva. Comoes as, los rasgos particulares no son comPonentes aditivos sino que yasiempre se trata de caracterlsticas esenciales de [a situacin en su totaii-dad, aunque en aspectos distintos y bajo una luz distinta.

    La situacin es cada vez nmi, situacin. No existe la situacin nengeneralo. Yo soy siempre yo ((enD situaciones. No existe el yo nsin ms>.La situacin es ma en un grado tal que la puedo entender justamentecomo mi

  • 3. LxPREDISPosIctN poR t sttuclN

    a. La afectacin Por la situacin

    La"situacin no es simplemenre lo que me rodea sino aquello que me

    afecta.Y me afecra de manera que no me puedo alejar de la afectacin sinrelacionarme expresamente con ella y asumiria. La afectacin precede

    todos mis comportamienros y todas mis decisiones. Es imposible sobre-

    ponerse a ella. F-s Ia afectacin la que me pone en una detetminacin ya

    .rr.orrtrad.", me muest n a m mismo como el que est afectado de un

    modo u offo. La situacin se deja definir justamente como mi afectacin.Laafectacin no es una caracterstica de aquello q.re se da en la situa-

    cin, en las cosas, sino una caracterstica de [a situacin misma. Incluso

    cuando las cosas (no son asunto mo', estoy afectado por ellas' Me recha-zan. Puede que ste sea un sentido muy duro de situacin y puede pro-

    ducir un estado claramente definido.La afectacin es un rasgo de la situacin, no se relaciona con lo par-

    dcular sino con la totalidad , y alavez caractetzala manera en que yome hallo ntirnamente ligado a la situacin'

    b. El card.cter anticipador de la situacin

    Yo no me doy de forma inrnediata sino siempre y slo a Partir de una

    situacin. Me hallo estando aqu, reflexionando, estorbado por multitud

    de ruidos, en cuanro hijo de mi poca, como perteneciente a una clasesocial, dotado de determinados talentos Pero limitado por capacidadesfinitas. Nad.ie se encuentfa a sl mismo slo en cuanto sl rnismo' trncluso

    Descartes se encontraba al lado del fuego de su casa sueca (taPado conuna capa), aunque no sac la conciusin correcta, a saber, que slo sesabe fuera de su situacin sino que crey que l en una yoidad Pura es

    la primera cosa cierta de su vida. Si fuera as, la consciencia en sl misma

    y^seral" ,itr.r".ir, originaria a Partir de la que, saliendode ella, el hom-bre se experimenta por primerayez como hombre. Yo slo rne conciboen situaciones. El ser-siempre-en-una-situacin es de nuevo una situa-cin. Slo cuando regreso de la totalidad de las ncircunstancias, (as sellaman los contenidos de la situacin) me concibo como uno que ya estdeterminado y que se enfenta en esta determinacin.

    La situacin es aquel entorno en el que el hombre est tan origina-riamente disperso que tropieza nconsigo mismo> solamente cuando regre-

    sa. No hay ninguna autoconsciencia del hornbrc que divague libremente.La autoconsciencia se logra en la situacin y posteriormente Pafece comosi con ella se pudiera dinamitar fuera de la situacin (en cuanto nyoopuro). No se puede encontrar la autoconsciencia, slo reencontrar. Sinembargo: qu es la autoconsciencia que todava no ha sido reencon-trada? Puede ser autoconsciencia si no se tiene a s misma? Parece quehay una luz inicial de la existencia del hombre que no tiene ni la formade consciencia ni de autoconsciencia y sin embafgo tiene una claridadinequvoca para ella misma. Puede sef que la situacin no sea otra cosaque claridad, si bien de una manera que slo se da hacia dentro y porello no se puede ,,exponeru?

    c. Sentir

    El catcter anticipador de la situacin no es temporal. M:s bien es uncarcter anticipador de la constitucin. Incluso antes de que el yo mismose constituya en reflexin, se le ha hecho clara su situacin de afectacin.En la bsqueda de s rnismo, la autoconsciencia tropieza en primer lugarcon una situacin y slo a pardr de eila tropieza consigo rnismo. fu, lasituacin es lo ms ntirno del yo mismo, es ms, es la base primera a PaI-tir de la cual se refleja el yo mismo. Alll donde el yo cree encontrarse a srnismo encuentfa la situacin; luego se encuentra a s misrno. Todavaantes de que el mismo se ocupe a sl mismo, es ocupado por la situacin.Esapredisposicina travs de la situacin es su base esencial ms profunda.

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  • La situacin no se encuentra como nmbito e$erion que orodean laexistencia, sino como el interior ms ntimo de la existencia, ya que esla base misma de su constitucin, incluso para la autoconsciencia.

    En resumidas cuentas: incluso antes de que el yo se encuentre a slmismo, encuentra una situacin, es decir, se encuentra afectado por elmovimiento de apertura de una situacin. En tanto sta ha ocupado unlugar en lo ms interior del yo mismo, ste se experimenta al mismotiempo como abierto por la situacin, panido con violencia hacia el espa-cio abierto, en cuanto taltiene de existir.

    La existencia de cada uno partida de esta manera est herida. Noen una entrada desde fuera sino en una predisposicin desde dentro.Ya est siempre entregada a una situacin abierta, siempre actuando enella, siempre dejando que devenga lo uno o lo otro, siempre ya deter-minada por otra cosa que no es ella misma. A la existencia situacionalse le abre el mundo desde denuo. Ciertamente la existencia lo experi-menta como un mbito orterior, pero no Porque la situacin rodee exte-riormente el yo, sino porque la existencia situacional ha creado den-tro un ser que est entregado, en el cual la existencia ya siempre estpartida, incluso antes de que ella misma se sepa como tal. El exteriorde la situacin se abre desde el interior. Llamamos sensibilidad a estaherida que se anticipa constitutivalnente a todo lo dems y con ello nosreferimos a aquella fuerzapenetrante del mundo que, en contra de nues-tra voluntad y antes de la constitucin de nuestra subjetividad, ya nosha empujado desde dentro. En una situacin me importan cosas queestn all antes para ml de lo que yo lo estoy para m. Hay algo que meda a m mismo. La preocupacin, que se me impone desde lo otro yque me lleva al desamparo de un ser diferente en el interior, lo llama-mos sentir y percibir. Sentir es el mundo en m. En m hay algo dife-rente que yo mismo. Y este oen-ml> es lo que debo ser. Lo percibido eslo que se encuentra en el interior.xii

    xii. Juego de palabras entre Ernp-fundene (percibido) y fi.nden (encontrar, halla).Adems, en todo este prrafo los verbos utilizados condenen la pancula auf-, quie sig-nifica nabriro. N. de Ia T.

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    fu me escapo de m mismo, soy arrancado de ml mismo, soy pri-vado de m mismo. La situacin es una manera de ser privado de rnrnismo. Por ello el sentimientl contiene todas las formas del estupot,Pero justamente en eso me soy dado como lo otro de m mismo' Y estees el rasgo fundamental deI sufrimiento. Eslaforma b.sica y pattica dela existencia que se nos exige en el sentir, el dolor, los estados de ni-mo, el percibir, el hallarse, el estar enamorado, el querer, el sufrir yel nota.

    La situacin es la nz ontoleica del carcter de lastre de la exis-rencia, en tanto que en ella la existencia se carga como mundo y ya des-de siempre se ha asumido como lo abierto de un mundo que va a lle-gar con seguridad. La situacin slo es posible en una empatla sentida.Donde no se da empatfa o bien sta no tiene lugar debido a un motivocualquiera, las circunstancias no se ofrecen como situacin, siguen extra-as, alejadas, sin relacin alguna, simples piezas arbitrarias y sustituiblespara las situaciones y no situaciones propias.

    Afectacin significa sentir. Sentir es la forma bsica de la situa-cin, la cual no es ninguna constatacin sino un ser arrancado esPont-neo, estado en el cual uno tiene que existir necesariamente.

    La esencia fundamental de la situacin nos presenta otra imagen dela existencia que la que encontramos en Heidegger. Segn Heidegger esel yo misrno el que se muestra a la existencia en cuanto (tener que sen).La situacin nos ensea algo distinto. Precisamente no somos nosotros'sino Io (otro>, Ia sinacin (que se muestra como tal), que es la que noso-tros (tenemos que sern. En la medida en que la situacin se anticiPa atodo, es nuestro uestadoo. Con la expresin nestado, sale a Ia luzlo pat-tico de esta forma bsica.

    No constatamos las circunstancias de la situacin, p3r:a despus (exPo-nernos)) a ellas. Lo (otroD ya se nos hapuesto desde sl mismo antes decualquier constatacin; y justo de modo que nosotros ya hemos res-pondido a ello desde siempre. Ciertamente podemos modificar o rehu-sar esta respuesta, pero la debemos aceptaf como ya dada. Nosotros somosde la manera de nlo que siempre ha sidoo. Este es el sentido ms duro de

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  • la verdad de nuesrra vida. Ya desde siempre estamos de pie, nos senta-

    mos, alnalnos, y si ahora nos ProPonemos caminar' este cafiunar se rernl-

    te y se basa en un (Ya-ser-en>'Sentir significa tener mundo cn nosotros' Pero no en calidad de

    con-

    tenidos constat"bles, que los hallamos alll, despus de que nosotros Tzor

    hayamos encontrado previamente. Ms bien se trata de que nosotfos

    "..pa.-o, la apertura hacia el otro (la aPeftura del mundo, tal y como

    est articulada en una situacin), es decir, que nos aceptemos en estaexposicin diversificada de las relaciones vitales'

    d. Estar d'entro

    sentimos en el interior. Esto PaIece muy fcil de entender. Sin embar-

    go, en ninguna pane de no'ot'o' se halla un espacio interior en el cual el

    Ln.i, serla objetivamenre posible. Lo ninterion) no est en la base de lavivencia sino que se tiene que consdruir justo en la vivencia. Pero cmo?

    El sentir est (en> no,ot'o' slo porque mediante este sentir elmundo se adentra y se impone como la forma primera de nuestro ser

    propio. Tenemos que ser como ottros' y tenemos que ser este agarre de

    alteridad como nosotros mismos' Y todo esto slo Porque el yo sola-

    menre se constituye como uyoo cuando regresa desde la situacin hacia

    s mismo.No sentimos Porque estemos dotados de un sensorium' que permi-

    te que en nosoffos se esarrollen determinados procesos que convierten

    hechos exteriores en hechos que se encuentran ndentro'' sino que sen-

    timos Porque el mundo est dentro de nosotros en la forma de la situa-

    cin. .r,o ,ro fuera as, de nada nos servira tn sensorium. Si slo tuvi-ramos sensorium,pero ninguna existencia situaciona], eI sensoriurn caeraen el vaco. Sus avisos no llega'an a ninguna parte' no se pondran en

    nada,noencontraranningnesquemadeordenacinparaquefueraasumido, no haran ,.f.""ti" a nada y por ello no contendran nada denada.

    Nuestro interior se constituye por la situacin o, dicho de otro modo,porque los hechos del mundo suceden en una forma situacional.

    No es porque tengamos nalma, que tenemos ninteriorr. El alma esla esencia dela uiuencia. Pero la vivencia slo se conviene en un re-vir,xiiiporque se nos muestfa en curnto la forma exrraa de nuestro propio serpara realizarnos a nosotros mismos.

    Nosotros s,mos la situacin. Pero no la somos de tal manera que laidentidad sea dada, sino de modo que la no-identidad (el mundo) se nosexige en cuanto idenddad. La situacin es la exigencia del rnundo, queno nos est esperando sino que desde siempre ya nos ha forzado para surealizacin.

    La situacin significa el estar dentro del mundo en la existencia, cuyoestar dentro, evidentemenre, no es algo que se pueda hallar objetiva-mente, sino una forma de la identidad. Este estar dentro tambin se pue-de invertir. Encueno la situacin en m como el lugar donde me hallo.La situacin no slo est en m sino que,est de tal modo denro de rnque la experimento corno aquello donde yo esroy. Ella es mi lugar, por-que slo me encuentro cuando regreso de ella, al igual que como mesito a m mismo en la reflexin concntrica que parte de ia totalidadde las circunstancias.

    Yo soy en la situacin. Pero no como si ella fuera la totalidad delas circunstancias entre las cuales yo me encontrara en rnedio. No meencuentro en rnedio de las cosas y los contenidos de la situacin sinoque me encuentro en medio de la situacin; y esto quizs tambin cuan-do estoy totalmente nal margen de los acaecimientosr, pues entonces esteestar-al-margen es el centro de mi situacin.

    Por lo tanto, el estar dentro de una situacin no puede entendersede un modo objetivo, concreto, real, sino que es un rasgo esur.ictural deifenmeno situacional. No significa nada ms que el que la situacin esaquello desde lo que parre mi autocomprensin, es decir, al misrno tiem-po es el anillo de una autoconsrirucin concntrica. En ia medida en

    xiii. Juego de palabras entre Erleben (vivencia) y ErJeben (revivir). N. de la T.

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  • que este punto de partida, que como situacin se inserta en mi auto-constitucin, es a lavezla predisposicin que me impone la situacin ycon la cual ella se ensancha en medio de m mismo, su sef-en-m es tam-

    bin su ser-en-ella. Y as, la situacin es todo aquello que me afecta tan-

    to ndesde fuera, que a Iavez se efige (en ml). cada vivencia tiene ladoble perspediva de contener un nfuera, dentro de s' Esta autocom-

    prensin de la vivencia no se debe malinterpretar en cuanto objeto, asaber, como si las ncosas fuera de m, aparecieran en m como (en unsujeto cosificado>. Estas maneras de hablar no son incorrectas perono resisten un anlisis Profundo.

    El estar dentro en la situacin es al mismo tiempo el experimentarde la situacin. El Percatarse no se basa en extraas capacidades nti-cas sino que rePresenta el mismo contexto estructural'

    Si llamramos sentir a este Pefcatarse' no se harla referencia a una

    determinada oclase, de vivencias, sino a un rasgo fundamental de cada

    vivencia, en tanto que con aquello que da, tambin da el yo a s mismo,

    y por lo nto con ello se da unavivencia nautntico, es decir, una viven-

    cia de lo

  • Al mismo tiempo la situacin libera. En cuanto situacin, siemprees una oientacin. La orientacin puede ser tan comPleta que no que-

    da eleccin, y justo en ello se muestra una situacin tpica.La orientacin puede evidentemente tener un carcter negativo.

    La orientacin no significa siempre que hay un ). Se ha creado un contexto, Ia continuidad situacional reanuda surumbo. Pero en el desconcierto de toda orientacin me he perdido a mmismo; odesapareco. Nadie puede constataf un desconcierto actu, dadoque la constatacin suPone un (yo)), el cual constata.

    La siruacin me ebre cadavez un mafgen de comportamiento. unespacio del querer y del disponer. Por qu? Porque la situacin se refie-fe al ser arrancado de la existencia, un ser arrancado que no se daunt uezy solo al principio, sino que es siempre constante. Esto slo esposible de tal modo que la situacin siempre sucede cuando est suce-diendo y me muestra en un haber-emPezado ya desde siempre, enun estar-de-camino sin inicio. En sentido estricto' ia situacin no esnunca ndadao sino que siempre est slo nsucediendo)), y esto signifi-ca para m estar siempre al mismo tiempo realizado por m mismo

    en una consumacin viva. Una situacin, puesro que no es dada, nose constata; su respuesta adecuada es vivirla a fondo, con lo cual ellaes llevada (asumida) totalmenre.

    La situacin en cuanto vivida, como siempre ya ejecutada, es unaposibilidad de la existencia ya desde siempre probada; aunque sea tam-bin la posibilidad de la propia cada.

    En la medida en que la situacin ya es desde siempre una posibili-dad de nuestra existencia que, por asl decirlo, se nos ha llevado y en lacual nos vemos expulsados, la situacin se experimenra como expulsin,como aquello dentro del que estamos fuera de nosotros: ex-tasis.

    El carcter exrrico de la situacin da testimonio de la alienacin encuanto a aquello a lo que nos vemos forzados en la vivencia pattica.Al mismo tiempo se revela que el rasgo parrico fundamental no se pue-de confundir con la pasividad, ya que no slo se puede unir con el xta-sis en cuanto forma ms extrema de la actividad, sino que ya estabanunidas desde siempre. Tambin lo que introducimos denffo de una situa-cin cuando actuamos forma parte del conjunto de su vivencia, es decir,forma parte de la forma partica fundarnental. Esta es el signo de la exis-tencia finita del hombre, cosa que no puede hacer olvidar ninguna ideo-loga de la actividad.

    La situacin se nos ha predispuesto tanto, que ya siempre estamosexpuestos en ella y en esta exposicin nos hemos converddo en coagen-tes. Respondemos a la situacin producindola de una u orra manera. Enel xtasis estamos tan fuera de nosotros rnisrnos que, en cierto modo,impulsamos y aceleramos la situacin incluso cuando sio la podemossoportar en el desamparo. El devenir pattico-exttico de la situacin sig-nifica una apertura de la existencia en un uhacia fuera, que no est fue-ra, sino que se diferencia en medio de nuesta existencia en cuanto aquelloque tenemos que ser. La consumacin exttica nos sugiere que somosarrojados en un espacio que considerarnos exterior, aunque 1o seamos lorns interiorrnente posible. Asl, se crea un nexterior, dentro de nosotros,o como nosotros, y al xtasis le sigue una aurocontradiccin existencial,cuya dialctica desde siempre ha desconcenado a la filosoffa.

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  • oEnu m se crea un campo mediante el cual (puesto que es anterior)todo est ofuera de m, (o, mejor dicho: nsin mlo o nanterior a mlo),incluso yo mismo. Para rn no slo son uobjetivaso las cosas de la situa-cin sino tambin yo mismo. El carcter anticipador de la situacin enm constiruye Ia extraezaabsoluta para todo y para ml mismo, a saber,constituye nrealidado. Constituye el manto de la oobjetividado, que esmi existencia, que lo envuelve exteriormente, (exterior, sin el cual miexistencia, sin embargo, no serla interior.

    En el momento de la autocontradiccin exttica, nace el carcter de(extrao)) (transcendente, orealr) en el interior de la estructura, carcterque al mismo tiempo es una imposicin de aquello que me exige como(no perteneciente a mo. Una imposicin a la que ya he respondido siem-pre cuando aceptaba la situacin. As mantengo la objedvidad del rnun-do que, justamente por ser objetiva, es el ncleo de mi subjetividad, esdecir, de rni vivencia.

    Esta autoconuadiccin extcase pase por alto en cualquier realismoo idealismo. Se elige una opcin y se cree que la a se puede abando-nar por ser (extraao. El idealismo ve que la exateza tiene que ser unconstituyente de m mismo, dado que, si no, no se podra construk algocomo la subjetividad, pero supone que por ello todo est (en mi,. No tomaen serio lo uextraor. El realismo ve que no slo las cosas sino tambin yomismo soy nobjetivoD y (exrao) para m mismo, y que de esta manerase constituye un mundo real de lo que existe, q.re es la condicin previapara mi propio ser. Pero pasa por alto que la extra'ezay la diferenciacindel mundo objetivo es lo que el sujeto tiene que ser czmo tal. Y en quconsiste la esencia de la subjetividad si no es en que la extraezatiene queser para l mismo? El idealismo slo se origina cuando el sujeto prirneroes consciente de s mismo, es decir, cuando se Presenta una nsubstanciancerrada en s que luego muestra nhorizontes anscendentaleso a partir deella. El idealismo se disuelve justo en el momento en que se comprendeque el sujeto slo se recupera en posterioridad desde la situacin (y estoquiere decir: desde la objetividad y desde la realidad). Sin embargo, coneso no se ha dicho nada a favor del realismo Puesto que la exterioridad de

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    este naundo real, bien entendido como totaiidad, dene que ser vivida, yjustamente la imposibilidad de llenarla y responderle roralmenre y en todaspartes, tiene que llenarse y responderse con respecro a la vida.

    nFuero y ndentroo se constituyen simultnea y mutuamente en launidad de la misma esuctura.

    B. El acercamiento

    6. LA ESTRUCTURA RADTAL DE Lt srruAcrN

    Lapredisposicinpertenece a la esencia de la situacin, con la cuai la exis-tencia mantiene ocupado lo ms lntimo de su constirucin. Es debidoa esta predisposicin que todos los contenidos de la situacin son vivi-dos con afectacin en cuanto existencia (en su auroconstruccin). Estolleva hacia una. centralizacin detodas las condiciones dentro de la situa-cin en el yo situacional. Lo que pertenece a una situacin participa ensu centralizacin. Todo participa en la orientacin de rnanifestacinde la totalidad. Las cosas tienen, correspondientemente, un rosuo. Semuestran, muestran en general. Pueden desviar el rostro, dirigirlo haciaotras situaciones, estar a la disposicin de otas existencias, pero de todosmodos se mantiene el rasgo fundamental del oestar dirigido a...D, que ala vez se puede profundizar hasta un (estar dirigido para...>. Las cosasapartadas posiblemente se hayan dirigido hacia otras situaciones: procon ello se orientan hacia m de una manera particular. Una mquinade escribir tiene un rostro, un carcte de invitacin. Pero ste no se refie-re justamente a ml sino a otra persona. Sin embargo, esta persona estorienrada hacia m, pues la mquina de escribir est dirigidaay pasa eIIa.Con ello la mquina de escribir pertenece a mi situacin, aunque sea porrnediacin de la secretaria.

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