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Provincia Ibérica Ficha 13 ¡Ven Señor Jesús! La palabra Adviento significa advenimiento o venida. El tiempo de Adviento nos prepara a la fiesta de Navidad. Cuatro semanas que nos invitan a recordar la primera venida al mundo de Jesús, el Hijo de Dios, y a avivar nuestra esperanza en la plenitud de los tiempos. Adviento: signos, actitudes, color y cantos * El color morado, nos recuerda que estamos en un tiempo de reflexión para pre- parar nuestro corazón al Señor que viene. * La petición constante: «¡Ven, Señor, Jesús!» recoge la necesidad que tenemos de que el Señor siga viniendo a nuestra vida para seguir creciendo en la fe, y aviva nuestra esperanza en la plenitud de todo lo creado. * La Corona de Adviento con sus cuatro velas nos indica las semanas que dura el Adviento, la vela que encendemos semanalmente simboliza nuestro camino agradecido por la encarnación y nacimiento del Señor. * Los cantos, como: «Ven, ven, Señor, no tardes», «Ven, Señor, Jesús», «Prepa- rad el camino al Señor», «La Virgen sueña caminos»…Todos ellos, hablan de la necesidad de preparar el camino al Señor que viene, porque desea un encuentro personal con cada uno de nosotros, porque nos ama. La palabra de Dios en Adviento, es especialmente esperanzadora y nos prepara para el nacimiento del Señor. Se resaltan especialmente, los personajes de Isaías, Juan Bautista y María. Todos modelos en este tiempo de espera. Mensaje del Adviento ¡Estad en vela! Vivid en tensa espera, como el centinela que vigila desde lo alto del horizonte. ¡Estad atentos! Como el guarda que controla el paso del tren. ¡Vigilad en medio de la noche! Este es el tiempo de la espera; mejor, de la esperanza. Ha llegado el momento de construir el futuro. No podemos estar parados. No durmáis más. Daos cuenta del momento en que vivís. La gran oportunidad está llamando a la puerta; todo es posible.

¡Ven Señor Jesús! 13.pdf · el Adviento, la vela que encendemos semanalmente simboliza nuestro camino agradecido por la encarnación y nacimiento del Señor. * Los cantos, como:

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Page 1: ¡Ven Señor Jesús! 13.pdf · el Adviento, la vela que encendemos semanalmente simboliza nuestro camino agradecido por la encarnación y nacimiento del Señor. * Los cantos, como:

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Ficha 13

¡Ven Señor Jesús!La palabra Adviento significa advenimiento o venida. El tiempo de Adviento nos prepara a la fiesta de Navidad. Cuatro semanas que nos invitan a recordar la primera venida al mundo de Jesús, el Hijo de Dios, y a avivar nuestra esperanza en la plenitud de los tiempos.

Adviento: signos, actitudes, color y cantos* El color morado, nos recuerda que estamos en un tiempo de reflexión para pre-

parar nuestro corazón al Señor que viene.

* La petición constante: «¡Ven, Señor, Jesús!» recoge la necesidad que tenemos de que el Señor siga viniendo a nuestra vida para seguir creciendo en la fe, y aviva nuestra esperanza en la plenitud de todo lo creado.

* La Corona de Adviento con sus cuatro velas nos indica las semanas que dura el Adviento, la vela que encendemos semanalmente simboliza nuestro camino agradecido por la encarnación y nacimiento del Señor.

* Los cantos, como: «Ven, ven, Señor, no tardes», «Ven, Señor, Jesús», «Prepa-rad el camino al Señor», «La Virgen sueña caminos»…Todos ellos, hablan de la necesidad de preparar el camino al Señor que viene, porque desea un encuentro personal con cada uno de nosotros, porque nos ama.

La palabra de Dios en Adviento, es especialmente esperanzadora y nos prepara para el nacimiento del Señor. Se resaltan especialmente, los personajes de Isaías, Juan Bautista y María. Todos modelos en este tiempo de espera.

Mensaje del Adviento ¡Estad en vela! Vivid en tensa espera, como el centinela que vigila desde lo alto del horizonte. ¡Estad atentos! Como el guarda que controla el paso del tren. ¡Vigilad en medio de la noche! Este es el tiempo de la espera; mejor, de la esperanza.

Ha llegado el momento de construir el futuro. No podemos estar parados. No durmáis más. Daos cuenta del momento en que vivís. La gran oportunidad está llamando a la puerta; todo es posible.

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Es posible el cambio. Es posible la esperanza. Es posible la reconstrucción personal. Es posible el caminar hacia la meta.

No nos contagiemos de los que pasan junto a nosotros, arrastrando penosamente la vida... Que nadie caiga en la rutina. Están sonando ya los timbres de la historia. Amanece un nuevo siglo... Es posible una nueva humanidad.

La Palabra de Dios nos anuncia que Dios nos ama. Volved a los caminos en que encontraréis la paz. ¡Vigilad! Aquello que esperábamos está llamando a la puerta. Dios está aquí. Está en medio de nosotros. Y nos invita a vivir la vida y desarrollarla.

Pregones de Adviento(Podemos elegir uno, dos o los tres… Uno del grupo proclama el pregón. Después hay un tiempo de oración y reflexión personal que puede terminar con un momento de compartir. Al final de cada pregón se propone un canto.)

Pregón de Isaías. Llamada a la alegría«El desierto y el yermo se regocijarán, se alegrarán el páramo y la estepa, florecerá como flor de narciso, se alegrará con gozo y alegría. Fortaleced las manos débiles, robusteced las rodillas vacilantes, decid a los cobardes de corazón: sed fuertes, no temáis. Mirad a vuestro Dios que trae el desquite, viene en persona y os salvará. Se despegarán los ojos del ciego, los oídos del sordo se abrirán, saltará como un ciervo el cojo, la lengua del mudo cantará, y volverán los rescatados del Señor. Vendrán a Sión con cánticos: en cabeza, alegría perpetua, siguiéndolos, gozo y alegría. Pena y aflicción se alejarán.»

Este pregón es un cántico a la alegría. Vamos a examinarnos cómo andamos de alegría. ¿Cuál es para ti el camino de la alegría? ¿En qué consiste la alegría de la que nos habla el texto?

Canto (Escuchado o cantado)

En mi debilidad, me haces fuerte. (2)Sólo en tu amor me haces fuerte.Sólo en tu vida me haces fuerte.En mi debilidad te haces fuerte en mí.

Pregón de Juan Bautista. Llamada a la conversión«Dad el fruto que pide la conversión... Convertíos porque está cerca el Reino de Dios. ... Una voz grita en el desierto: preparad el camino al Señor, allanad sus sende-ros... Yo os bautizo con agua para que os convirtáis; pero el que viene detrás de mí puede más que yo, y no merezco ni llevarle las sandalias. Él os bautizará con Espíritu Santo y fuego...»

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La conversión es dejarse amar por Dios, es hacer visible al Dios invisible. No se trata de hacer grandes cosas, sino de ser transparentes, de hacer gestos since-ros de paz, de amistad... ¿Con qué frecuencia regalo mi presencia y atención a alguien que está solo? ¿O digo algo bueno a los que me rodean? ¿Cómo cuido tiempos para mi recuperación y descanso personal que me permiten vivir con más paz? …

Canto (Cantado) Preparad el camino al Señor y escuchad la palabra de Dios. (Bis)

Voz que clama en el desierto: «Preparad el camino al Señor, haced rectas todas sus sendas, preparad el camino al Señor.»

Pregón de María. Llamada a la escuchaEn el sexto mes, el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret, a una virgen que estaba comprometida con un hombre perte-neciente a la familia de David, llamado José. El nombre de la virgen era María.El Ángel entró en su casa y la saludó diciendo: «¡Alégrate!, llena de gracia, el Señor está contigo».Al oír estas palabras, ella quedó desconcertada y se preguntaba qué podía sig-nificar ese saludo.Pero el Ángel le dijo: «No temas, María, porque Dios te ha favorecido. Concebi-rás y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús; él será grande y será llamado Hijo del Altísimo. El Señor Dios le dará el trono de David, su padre, reinará sobre la casa de Jacob para siempre y su reino no tendrá fin».María dijo al Ángel: «¿Cómo puede ser eso, si no tengo relaciones con ningún hombre?»El Ángel le respondió: «El Espíritu Santo descenderá sobre ti y el poder del Al-tísimo te cubrirá con su sombra. Por eso el niño será Santo y será llamado Hijo de Dios. También tu parienta Isabel concibió un hijo a pesar de su vejez, y la que era considerada estéril, ya se encuentra en su sexto mes, porque no hay nada imposible para Dios».Maria dijo entonces: «Yo soy la servidora del Señor, que se cumpla en mí lo que has dicho». Y el Ángel se alejó.

Si alguien supo escuchar y acoger a Dios fue María. Sabemos que fue una actitud permanente de su vida porque en otro texto se nos dirá: «María conservaba todas estas cosas, meditándolas en su corazón».Vamos a pedir a María que sepamos escuchar a Dios y acogerle como ella lo supo hacer. Como María, desde la humildad, la sencillez, el fiarse de Dios, con la certeza de que habrá cosas que, guardándolas en el corazón, serán comprendidas a su tiempo, en su momento, pero con la seguridad, fruto de esa confianza,

de saber de quién nos hemos fiado. Ponemos en sus manos de Madre aquello que llevamos en el corazón.

Canto (Cantado)

Junto a ti María como un niño quiero estar,tómame en tus brazos, guíame en mi caminar.Quiero que me eduques, que me enseñes a rezar.Hazme transparente, lléname de paz.

Madre, Madre (2)

Gracias Madre mía, por llevarnos a Jesús,haznos más humildes, tan sencillos como tú.Gracias Madre mía por abrir mi corazón,porque nos congregas y nos das tu amor.

Madre, Madre (2)

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4Comisión del laicado marista

E-mail: [email protected]

Peticiones* Por los que van por la vida sin rumbo fijo, desconcertados, buscando la posada de

alguien que les comprenda... ¡Ven, Señor Jesús!* Por los que sienten el frío de alojarse en la pobreza de una cueva, en la soledad de

la calle, en la incomprensión de los amigos o la falta de cariño de sus seres más queridos... ¡Ven, Señor Jesús!

* Por los que tienen que huir o dejar su hogar por causa de las guerras, del paro, del hambre, de la persecución…¡Ven, Señor Jesús!

* Por nosotros para que despertemos a la solidaridad humana y hagamos gestos que construyan una sociedad y un mundo más justos…¡Ven, Señor Jesús!

* Para que en nuestro día a día pongamos el corazón en lo que hacemos y así dis-frutemos de cada momento y lo hagamos disfrutar a otros…¡Ven, Señor Jesús!

(Añadimos espontáneamente las que deseemos.)

Oración (Rezamos juntos)

Señor: te esperábamos grande... y vienes hecho un niño pequeño.Te esperábamos en otro momento... y vienes ahora, a tu hora, en silencio... Te esperábamos en un lugar determinado... y has escogido el último sitio... Te esperábamos como Dios Fuerte... y vienes hecho un Niño débil... Señor: nos cuesta reconocerte... Porque no eres el que creíamos.Porque eres diferente... Porque eres sorprendente.Dios humilde. Dios com-pasión.Dios todo-cariñoso. Dios-con nosotros.¿Sabremos acogerte? ¡Ven a nuestra casa!

Canto: No durmáisQuiero que mi Navidad no se me escape una vez más,escuchar al mundo entero, cambiar mis ojos cansados ya de juzgar.He intentado ser feliz, alejarme siempre de tu calorHe negado mi amistad al querer llenar de oro mi corazón.

No durmáis, que un niño vendrá; vendrá el Señor, es nuestro Dios (bis)

Tú me has ofrecido en ti un descanso de verdad.Y, quizá, no he sabido encontrar un tiempo vivo para escuchar.Siempre quise tu perdón y a mi hermano yo no perdonéinsensible y sin amor ante el odio, la injusticia y el dolor.

No durmáis, que un niño vendrá; vendrá el Señor, es nuestro Dios (bis)

Sugerencias1. Esta reunión de Adviento quiere ser un momento de celebración y de compartir en ora-

ción; en ella se trata de sintonizar más desde el corazón que desde la cabeza.

2. Es conveniente que la persona o personas que vayan a prepararla, escojan los textos y las canciones que aportamos. Cuantos más participen en ella mejor, pero siempre ayuda que alguien la anime.

3. Ayuda tener un espacio adecuado para esta celebración, y cuidar la ambientación del mismo (capilla o sala, símbolos, músicas...).