Jesús es el

camino

V Domingo de Pascua

¿Para qué estamos en este mundo? • Hemos sido

creados por Dios para cosas grandes. El ser humano no es “un accesorio”, un adorno para el mundo, ni mucho menos para los demás.

• Nuestra vida es una identidad, una tarea, un camino.

¿Qué determina nuestra identidad cristiana?

• El Bautismo recibido nos da esa identidad, porque nos dice lo que somos: “piedras vivas”, “hijos de Dios”, que unidos a

la Piedra Fundamental (Jesús), hará más

sólido nuestro ser.

• Por eso somos Iglesia, porque

somos como Cristo, piedras que edifican

una casa o un camino,

para transitar hacia una meta, en compañía de otros.

Ser Iglesia es ser Camino, es ser piedra

• En el libro de los Hechos, se elige a siete servidores. Eso no es casual, eso nos recuerda que también hemos sido elegidos servidores.

• Y servimos convirtiéndonos para los demás en “camino de piedra firme”, no fangoso ni resbaloso, sino FIRME.

Jesús utiliza imágenes

• El domingo anterior, Jesús utilizó las imágenes de Pastor y de Puerta para indicar su cercanía, sus cuidados, su accesibilidad, pues quiere mostrarnos todo su amor.

• Hoy, utiliza la imagen del camino, porque para llegar al lugar correcto, debemos optar por Él.

La imagen de CAMINO

Debemos imitar a Cristo

• estamos llamados a imitar a Cristo siendo camino que permite a otros llegar a Jesús.

• De la misma manera que debemos ser pastores para los demás, es decir, llamados a cuidar y alimentar la fe de otros, y ser puerta de acceso para los demás expresando lo mejor de mí;

¿Cómo puedo ser camino como Jesús?

• Haciendo experiencia de su amor sanador.

• Confiando en ese amor que nos tiene.

• Dejándonos guiar por su Palabra e imitando sus gestos.

Nuestras acciones son camino en construcción • Para construir el

camino es necesario

vivir una íntima unión con Jesús por medio de la oración.

La conversión.

Búsqueda de las cosas santas.

“Acérquense al Señor Jesús, la piedra viva” (I

Pedro);

• Saber que Jesús es el Camino, la Verdad y la Vida, y construir mi vida desde Él, me capacita para iluminar el camino de las realidades cotidianas,

Y alinearlas al ese Camino

llamado Jesús

Los “otros caminos”

• El problema es cuando se toman otros caminos. A veces “nos cansamos de la fe” porque tomamos el camino “fácil”: el que empacha y agota rápido: lo superfluo, lo pasajero.

No apartarse del camino

• No puedo encontrar a Dios, ni la realización cristiana, si antes no he reconocido que el camino se construye cuando descubro: QUE EL OTRO ME INTERESA PORQUE ES PARTE DE MI CAMINO DE FE.

• Los siete diáconos son signo de la Iglesia servidora que proclama el Evangelio.

• Cuando se anuncia el Evangelio, el discípulo se hace más fuerte, la Iglesia se hace fuerte.

Mi compromiso como camino

• Es reconocer que mi vida como servidor es y debe ser una respuesta de amor para los demás, que mi vida debe ser siempre el camino que conduce a los demás al Señor.

• Y eso lo logro cumpliendo

responsablemente mi parte en el

mundo y en la

Iglesia como

piedra viva que

soy.