83
Km J. Macksey, M. C, m* San Martin Historia

San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

  • Upload
    jdrm5

  • View
    338

  • Download
    58

Embed Size (px)

DESCRIPTION

La columna vertebral del ejercito aleman durante la guerra mundial.

Citation preview

Page 1: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

Km J. Macksey, M. C,

m *

San Martin Historia

Page 2: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

de una cia. En dial, q u ~

.ra dirigi 311, Skor

n catálo Dos guc

r la luch zeny y t

sncia pa de Pattc etc.

iglo di

como j¿ mundial

a por la iitler. Pr

Page 3: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 4: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

1 ! Director Editorial: Barrie Pitt. l

Editor Gráfico: Robert Hunt.

I / Ayudantes de Dibujo: Gibson y Marsh. 1 Portada: Denis P i ~ e r .

Ayudante de ~nveitigación: Yvonne Marsh. Cartógrafo: Richard Natkiel. Dibujos Especiales: John Batchelor. 1

6 Introducción

8 Nacimiento secreto

22 Polonia: La primera prueba

Las fotograñas de este libro fueron especialmente seleccionadas de los siguientes archivos de izqwerda a derecha, páginas 2 y 3 Ullstein, 6 7 Bundesarchiv, 9 Bibliothek fur Zeitgeschichte, 11 Bibliothek 32 Francia: LOS planes están sellados fur ZeitgeschichteIBundesarchivIImpenal War Museum, 14 BundesarchivBibiiothek fur Zeitgeschichte, 17 Bibliothek fur Zeitgeschichte, 18 Sado Opera Mundi, 2021 Sado Opera Mundi, 25 Bibliothek fur Zeitgeschichte, 2627 Suddeutscher Verl~g, 36 Bibliothek fur Zeitgeschichte, 37 Bibliothek fur 50 Diversiones: El impulso hacia el Sur Zeitgeschichte, 39 Sudd Verlag, 40-41 IWM, 42 Ullstein, 44 Ullstem, 48 Bundesarchiv, 49 UllsteinBibliothek fur Zeitgeschichte, 50-51 Sado Opera Mundi, 55 UllstemISado Opera Mundi, 5657 Ullstem, 56 Sado Opera Mundi, 57 Ullstein, 5859 Ullstem, 6061 Sado Opera Mundi, 60 Sado Opera 62 Rusia: El esfuerzo de la decepción Mundi, 62-63 Ullstem, 66 Sado Opera Mundi, 68-69 Sado Opera Mundi, 71 Sado Opera Mundi; 72-73 Sado Opera MundilBibliothek fur Zeitgeschichte, 76 Sado Opera Mundi, 77 Bibliothek fur Zeitgesckuchte, 78 Novosti, 79 Novosti, 80-81 Ullstem, 84-85 Ullstem, 87 Sado Opera Mundi, 89 Sado Opera Mundi/Sudd. 80 El desierto: La fuerza acorazada bajo control Verlag, 90-91 Sado Opera Mundi, 92 UlistemlSudd Verlag, 94-95 Sado Opera Mundi; 98 VHü Praha, 100-101 Sado Opera Mundi, 100 Sado Opera Mundi, 101 Bibliothek fur ZeitgeschichteNovosti, 102-103 Sado Opera Mundi, 105 Sado Opera Mundi, 107 Sado Opera Mundi, 110 Sado Opera und di; 90 Stalingrado: Muerte de una elite 110-111 Uilstein, 114 Sudd. Verlag, 116117 Bibliothek fur Zeitgeschichte, 120-121 Sado Opera Mundi; 124 Sudd Verlag, 124-125 Sado Opera Mundi, 124 BundesarchiviBibliothek fur Zeitgeschichte, 125 Bibliothek fur ZeitgeschichtelSado Opera MundilSudd VerlagISado Opera und di, 127 Bibliothek fur 104 La nueva elite Zeitgeschichte, 131 Bundesarchiv, 132 Bibliothek fur Zeitgeschichte, 134 Bibliothek fur Zeitgeschichte, 136-137 IWM, 137 Sado Opera Mundi; 138 Bundesarchiv, 138139 IWM, 138 Sado Opera MundiBundesarchiv, 116 Sobreviene la descomposición 140-141 Bundesarchiv, 142-143 Bundesarchiv, 145 Sado Opera Mundi, 146 Sado Opera Mundi, 147 Sado Opera Mundi, 150 Sudd VerlaglBundesarchivISado Opera Mundi, 151 Bibliothek fur ZeitgeschichtelSado Opera MundilBundesarchiv, 152-153 Bibliothek fur Zeitgeschichte, 154155 Bibliothek fur Zeitgeschichte, 156 Bibliothek fur Zeitgeschichteiüllstein, 158 Sado Opera Mundi. 128 Apuntalando el mur0 occidental

142 La última reserva 1 154 La guerra de 10s Panzers

160 Bibliografía

I Traductor: Diorki. Primera edición publicada en Estados Unidos por Ballantine.

1 Copyright @ 1968 K. J. Macksey. Copyright en Lengua Española. LIBRERIA EDITORIAL SAN MARTIN. Piierta del Sol. 6. MADRID - 14.' Printed in Spain. Impreso en España por ALTAMIRA-ROTWRESS, S. A. Carretera Barcelona, Km. 11,200. Madrid - 22. DepGsito legal: M-19038/74. 1. S R. N, 84-7140-083-9.

Page 5: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

canizados que nos resulta difícil creer Mundial llevó a extraer diferentes con- que poco antes de aquellas fechas cier- clusiones. El carro de combate, recorda- tos comentaristas de probada capaci- ban los. alemanes, había contribuido de dad profetizaran que en ella desempeña- forma vital a su rendición en 1918; por ría el caballo un papel vital y posible- eso, veinte años más tarde disponían de mente hasta decisivo. una fuerza acorazada no igualada por

Una mirada retrospectiva nos hace ninguna; numericamente inferior a la de aiiá de sus posibilidades. Agotadas sus guerra acorazada, entre ellas una acerca ver asimismo lo absurdo de que los po- los Aliados, pero superior en gcnica, en 1 líneas de combustible y aprovisiona- de la historia de su regimiento. cos estrategas cuya imaginación y pre- doctrina, y mucho mejor dotada de mo- miento, y en constante peligro de que- En sus manos, las grandes batallas de visión los haría despues protagonistas ral. ,

dar aislados de las armas de apoyo, el Europa, Norte de Africa y Rusia cobran de la guerra acorazada fueran tan injus- Las divisiones Panzer estaban servi- mismo Hitler, asustado de su velocidad vida de nuevo, y los nombres de algunos tamente tratados; relegados unas veces das, en efecto, por hombres escogidos de penetración en territorio enemigo, de los más grandes soldados de la gue- con ascensos, o bien dados de lado, reti- por sus excepcionales cualidades físicas llegó a un punto en que les ordenó dete- rra llenan su páginas; hombres como rados, o simplemente ignorados. Una y temperamentales, instruidos hasta un nerse. Tenía el convencimiento de que Guderian, Manstein, Rundstedt y sobre multitud de nombre? ahora famosos fue- extremo de perfección e imbuidos de la estaban metiendose en una trampa. El todos el mismo «zorro del desierto,,, ron víctimas de tal ii,ptitud; de manera firme determinación de vengar la ver- 1 relato de cómo e ~ ~ l ~ ~ i ~ n a r ~ n 10s Pan- Rommel. Esos nombres ahora son parte notable el asesor de esta serie, capitán güenza de Versalles y restaurar el orgu- zers, cómo ocuparon su lugar en el gran de la Historia. Todos los lectores de este sir Basil Liddell Hart, así como los gene- 110 de la Patria. Constituían una elite de proyecto de Hitler y cómo fueron final- libro sabrán por qué. rales Fuller, Martel, Hobart, Broad, y luchadores de una excelencia sólo igua- mente reaccionando sus enemigos para Pile. También Charles de Gaulle, en lada por sus camaradas de la Luftwaffe. . el contraataque es uno de 10s más fasci- Francia, planeó una guerra de carros, y En este libro, escrito con la velocidad nantes de la Segunda Guerra Mundial. fue rechazado. y decisión de los mismos Panzer, el co- Sobre todo, es el relato de una de las

Page 6: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

Cuando 420 carros británicos surgieron muchas ocasiones la subsiguiente desor- de la temprana niebla que cubría la 1í- ganización de los ejercitas aliados con- nea del frente cerca de Amiens el 8 de firmaba su buen juicio. agosto de 1918 y atravesaron las defen- s:is enemigas, las repercusiones de la sorpresa que recibió el Ejercito alemán Ii~cbron mucho más profundas de lo que 1)odria deducirse de una simple penetra- (-1011 tlc las posiciones atrincheradas. i ~ ' r i c . , t l t * hecho, un golpe paralizador, de í.oil.ii prro significativa duración, sobre 1.1 Alto M~ndo alemán. No era, desde 1 1 II.~~I ), Iri ~>rirnera vez que un ataque con 1.111 IO~: iii;.<.I,:iba al equilibrio de las for- i i1111.11 IIII.~: t l c l infantería alemanas. El l 11. 1 1 ..I- iiiiI)i:i r~petido en el curso de la ,,i, 1 1 I \~! I I ~ 1 1 l i í i i l t ~ : i c3n Cambrai el último 1 1 4 l \ 11.1111 11 1- , Y V:II.I;IS veces, durante las t I l ~ ~ ~ , i t . ~ ~ i ~ - i ~ ~ . l v i i s 1:inzadas por el gene- I ( $ 1 I IIII~ IIIIIIIII I.II~I.(* marzo y juiio de IIIIII l .II III,. ii!iI)l:in roto el ataque $1, liI i ~ l i I 11 I III IIIII c%ontraataques que 8 + ~ , i ~ , , , I~, I I l1 1 1 1 . . IIII.!I~~:I:: (Ir sil infantería p $ o lml t 1 - , ~ ~ II!I:.I 11 I ~ I 1I11tt:i clr! cafiones. I e 1 1 . ~ . 1 1 i ~ ~ ( ~ ~ i . l l ~ ~ III:II.I:IIIII CIP agosto I II,I, II,I,~III I I ~ ~ I ~ I ~ I ~III+II~I~I~IO ll:r~orar la

,, , , ,I,. I,,,, , , 1 ~ lo!;. I)IIIIII~II~~~) su con- ~ ! c , I , . , , ILI I ~ ~ ! ~ ; . . ~ III, 111~1.111i~i'1:1 ('11 111gar ,I, ,,I,I 1 1 I , , ~ ~ , ~ , , 1111.1 h.:: :I:;:III.os c i t - in-

I ~ I I I . ~ l I I~I~III-I I 111 , 1111111.1':i~~1i11i; y rn

Ahora, sin embargo, el Ejercito ale- mán retrocedió y, por el amotinado comportamiento de sus soldados, quedó demostrado que no se podía depender de el para continuar la guerra. Refirien- dose al 8 de agosto como «el día nema del Ejercito alemán*, Ludendorff pr&e- dió impetuosamente a convencer al Kai- ser de que las hostilidades debían termi- nar; tres meses más tarde, el derrotado Ejercito volvía a una patria devastada por la revolución. Despues, el otrora gi- gante militar de Europa fue reducido por el Tratado de Versalles a una fuerza máxima de 100.000 hombres con la prohibición específica de poseer armas tales como bombarderos y carros de combate.

De esta forma, dos armas cuya prime- ra actuación en el campo de batalla da- taba de cinco años escasos aparecían mencionadas en claúsulas importantes del Tratado de Paz y, a su debido tiem- po, se convirtieron en una provocación dolorosa para la resentida nación ale- mana. El Tratado de Versalles constitu-

Page 7: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 8: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

de baja velocidad.

Al principio, ninguno de estos vehícu- los de combate llevó una coraza supe- rior a los 30 mm, con lo que quedaban En último análisis, fueron las tripula- expuestos a la penetración de los cano- ciones de los carros las que hicieron de nes contracarro que empezaban a ser las fuerzas Panzer lo que eran. Por eso adoptados por la mayoría de los otros mismo es tanto más sorprendente la ejércitos. Los más entusiastas, sin em- poca atención que los escritores de la hago, consideraban que una masa de posguerra (especialmente los generales) carros moviéndose a velocidades de has- prestaron a la instrucción prodigada a ta 40 Km/h disfrutaría, por la confusión las mismas. Aun cuando los cuadros se creada y por su propia movilidad, de nutrieran principalmente de los 100.000 una protección inherente, ya que el ene- hombres de la Wehrmacht, la mayoría migo no tendría tiempo de concentrar de los alumnos que ingresaron en las es- su fuego sobre ella. cuelas de Panzer en lugares tales como

Wunstorf procedían de la vida civil. Más Una cosa es exponer las características aún, de los primeros, muchos se resis-

de un veNculo acorazado y otra conver- tian a las nuevas prácticas Y aptitud tirlo en un carro de combate al fuial de mental que se les pedía: dejar la silla de la cadena de una fábrica cuando el per- montar para ocupar el asiento de un sonal de ésta no ha hecho nunca nada conductor supuso Para algunos una semejante; incluso la fabricación Y mon- afrenta. Mas, desde un principio, la fa- taje de la coraza constituye un arte es- nhtica determinación de caudillos como pecial. La tecnología del carro es una Guderian Y Thoma arraigó en su ink- materia que cuesta muchos anos adqui- rior. Se les seleccionó por méritos y por rb y que florece con la experiencia, y en la calidad de sus aptitudes, sólo supera- 1933 eran muy pocos los alemanes con da por miembros de la Luftwaffe, con los experiencia sobre un tema que, por falta que, con el transcurso del tiempo, se de en la vida ciW, requería combinaron estrechamente. Se sentían el desarrollo de procesos situados en el Y actuaban como una elite; y se les dio iímite del conocimiento industrial: Ni si- un uniforme especial negro con una quiera existian fábricas capaces de pro- gran boina inclinada para distinguir su ducir centenares de carros. Por 10 tanto, aspecto. antes de poder dar a los soldados 10s nuevos carros, tenían que hacerse un Una medida ideal en la instrucción de gran esfuerzo de investigación y expan- la tripulación de un carro es hacer que sión industrial. Por ejemplo, el PzXw 111 cada miembro aprenda el trabajo de los apareció en tres versiones distintas, su- otros. Hay tres misiones principales: jeta cada una a modificaciones conside- conductor, tirador y radio; este último, rabies, anks de que una cuarta (D) en- en 10s CWos medios, actúa también trase en producción limitada. Después Como conductor o tirador frontal. Sobre sólo se fabricaron 55 «D» con un cañón todos ellos se encuentra el jefe del carro, de 37 mm mtes de ser reemplazados por que además debe dominar el trabajo y 10s «E,, con el cañón corto de 50 mm.; misiones de los demás. Cuesta tiempo y e incluso entonces se había pasado por es muy caro instruir a una tripulación alto una demanda de Hitler de instalar hasta el nivel ideal, por lo que a menudo uno largo de 50 mm. En los años sucesi- se enseña a cada hombre sólo dos de las vos, la carrera entre el cañón y la coraza tres misiones y, si el tiempo no lo permi- coincidió con otras incontables mejoras. te, únicamente una. La eficacia de los sí, dice mucho en favor del diseño ori- soldados de Panzer alemanes al estallar ginal el hecho de que el PzKw IV, en su la guerra en 1939 se debía, sin embargo, versión ulterior y mmás desarrollada, si- a que muchos habían aprendido dos o guiese todavía en servicio en 1945, tras más misiones y a que habían ganado seis anos de guerra. Por lo tanto, aun- además mucha experiencia en los ejerci- que se pueda criticar a los primeros di- cios y durante los incmentos ataques en

alemanes por su dilapidación la periferia de la Patria. Sólo la guerra de tiempo y de esfuerzos en multitud de podía poner la rúbrica final sobre aque- experimentos (que en consecuencia re- lla instrucción teórica.

Page 9: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 10: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 11: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 12: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 13: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 14: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 15: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 16: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

- - -- ---. - , - - - - .

m 6anzado casi en su total longitud: lnc nin-rii rln nhnnñnnnr Vnrcnvia A l int,en-

U.vv -^- -.------ "- --- ------ cuarto ~jercito-del general List, con la la ciudad, donde el espacio de manio 1 2.' División Panzer en vanguardia, gira- está restringido Y s61o existe una lfnea ..

aislado por el envolvimiento alemán, los aturdidos, el equipo destrozado y en Ila- Ri6rrit.n.c d e Pnznnn v Pnmorz vieron la mas sobre un terreno sometido a un

' cero, sin acompañamiento de carros (ex- gas sin perder un solo vehículo, tras una ' cepto los de una brigada Panzer inde- marcha nocturna de 80 kilbrnetros.~ 1 pendiente), se encontraba en apuros Con esto, Thoma subrayaba un nuevo

frente a las defensas polacas y no conse- principio: que unos cuantos carros en el guía el espectacular avance al que esta- lugar menos defendido valen lo que una i ba acostumbrado. mr-- 2- -"-- . ".

ncen- asalto total de divisiones en masa efi-

'Y"'..."" --U--./- -., ----------- 1 fin& iin frente niie nrnteeiese la mitad orien- 11

dba ue ellos en ei sino que parece estar nes se aejaban mas y mas nacia ei r, ~ i n r wiinrñnrin 1 Tal vez fuese mas cierto decir que I n Fnrriior r ~ n o ftloroo imnnrtnntn ~ o i i n , mL., - - --- -..-v. t i El Grupo de Ejercito Sur, bien dotado 12 de carros. v baio el mando del general F1 9 AQ cnntinmhvn mr-nnio T7 C r o n 1

guerra al lado de Polonia, y el 6 de s e p tiembre los polacos pudieron delinear el rumbo de los principales ataques enemi- gos. El Tercero y Cuarto Ejercitas ale- manes se acercabari a Varsovia a lo lar-

n enernion n i in n n ln rrefn nnsihln hn.. en, A n 1 0 nrillo Nnrtn A n l ' I T < n t i i l o . o1 V T P / 7 --- -- - - - --.

ii cimocuarto Ejercito, se ordenó ala 2.aDi- nía su ,,L,,A,,, ,,,, ., ,. , ,,, ,,Lw,LL,

visión Panzer de Thoma, a iniciativa de Panzer en un ataque al Este del río Bug, este, avanzar a traves de esx>eso arbola- detriic An l o @ nrinrinnlnr. linonc nnlnr>nc

do sobre un cerro en lugar de hacerlo dii por el camino lógico siguiendo el Paso Li,,.,.,. ,. ,,,, ,, ,,.,,,, ,,, ,, de Jablunka. El efecto psicológico de un Rundstedt, aproximándose hacia Varsg- golpe semejante lo describe el mismo via, alcanzó el río Bzura tras arrollar Thoma: «A1 descender al valle llegue a una sucesibn de lineas polacas de resis- un pueblo donde vi a la gente preparase tencia ninguna de las cuales habfa podi-

/ para acudir a la iglesia. asombra- do ser ocupada a tiempo por sus defen- dos quedaron al ver aparecer mis ca- sores, cuyo concepto del avance estaba :b rros! Habla pasado las defensas enemi- trastornado por la velocidad de los ata-

I r - ,, -8

Page 17: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

enojo que.10~ carros pemanecían en la minios de la organización y de la ins- orilla Norte porque la 20 División Moto- trucción; ni los estados mayores ni las rizada había desmantelado los puentes comunicaciones habían estado a la altu- durante la noche y los había llevado ra de la velocidad de las máquinas que aguas abajo para su propio uso. Fue se suponían debían controlar,tanto más sólo un error del estado mayor, pero re- cuanto que muchos de los que servían tardó 24 horas el avance Y resaltó una en ellos carecían de un conocimiento su-

ficiente de los problemas técnicos plan- teados por la mecanización.

r es el paso de los ríos. au- Ni aun en las mismas divisiones Pan- crian se consoló sin embargo, con una zer había ido todo perfectamente. Su he-

hazafia en la que' algunos de sus carros rramienta básica, 10s carros, se había destruyeron unos carros bien$ un 25 por

do desembarcaban en un ciento de fallos por causas mecánicas, pero al final de la campaña todas las máquinas necesitaban un completo re- paso. Las pérdidas se elevaban a 217, la Guderian llegó a Brest Litovsk el 14, mayoña por la acción de los cañones

yi: pero hasta el 17 no se rindió la ciudade- contracarro, que habfan dado cuenta de la. Para entonces, la antigua ciudad era también blanco de la tenaza alemana las W a s máquinas ligeras. Por supues-

$1; meridional cuando para mayor somre- to, las conclusiones que se sacaran de sa de alemanes y 'polacos, el Ejército esta primera prueba importante tenían

91 Rojo cruzó la frontera oriental polaca y que ser desestimadas a causa del pobre procedió a ocupar aquella mitad del equipo de la oposición. Por otra parte,

el sistema de entrada gradual en com- país. Varsovia siguió rime en una resis- bate facilitaba el largo programa de iris- tencia simbólica y desesperada que duró hasta el 27 de septiembre, mien- trucción, al enseñar a los soldados sus

misiones básicas a bdo costo. No se ha- .tras grupos polacos 'Om- bían producido enfrentamientos a muer-

i batían en Kock hasta el 6 de octubre; , pero, como los alemanes ya te de carros contra carros, con lo que las aprendido, los carros son un inconve- divisiones Panzer pudieron operar a la niente en una gran ciudad, por 10 que ITlarcha que deseasen. Los problemas sus divisiones Panzer no desempefiaron Surgieron cuando perdían contacto con un gran papel en este último acto de la SU infantería de Una y otra vez campafia. Habían constituido la base de 10s regimientos quedaban atrás Por la la victoria. Ahora a Ale- necesidad de mantener sus vehículos no manis para recuperarse y disponerse a acorazados a distancias de seguridad, contender con cualquier contraofensiva demasiado lejos para intervenir a tiem- francesa que pudiera tener lugar. po de apoyar a los carros cuando la ac-

ción inmediata de la infantería podría haber asegurado la continuación del

Entre tenía que avance. En cuanto a la Luftwaffe, su considerar las lecciones de cuatro sema- cooperación había prestado una ayuda nas de combate Y enderezar 10 que pal- indirecta esencial al barrer del espacio p pablemente había sido torcido. la aviación contraria, permitiendo así el

Por supuesto, mucho había ido bien. Las divisiones Panzer habían demostra- do ser realmente poderosas en manos de los hombres idóneos. El mando ejercido por los jefes desde la vanguardia de la batalla había demostrado que la inter- vención en el punto vital de alguien en posesión de todos los factores y cuya atención no se distrajera por la escena inmediata podia lubrificar esa especie de fricción en el campo de batalla sobre la cual había escrito Clausewitz. Sin em- bargo, bastante a menudo la fricción ha-

movimiento terrestre sin la interdicción aérea enemiga. Por otra parte, había contribuido en gran manera a desorga- nizar las defensas en profundidad antes de que las divisiones Panzer las alcanza- sen, había facilitado gran cantidad de información sobre las actividades tras las líneas del enemigo, y había servido de puesto de mando aéreo. No obstante, hubo deficiencias en el bombardeo en las líneas avanzadas de la zona de com- bate, y esto sólo podía ser corregido con el estudio y la instrucción.

b ía~ar t ido de los propios estados mayo- En términos generales, las divisiones 1 res, y la razón se encontraba en los do- Panzer habían demostrado que el pla-

Page 18: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 19: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 20: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 21: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

de la Guerra. Bastante antes d

ofensiva, Guderian arde para ser ejecuta

Page 22: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 23: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

? cia, ordenó una detención temporal. Ar- por los Panzer en toda la anchura de su 4 guyendo calurosamente para que se le paso conforme el avance progresaba en 1 permitiese continuar, Guderian consigió la oscuridad. Creyendo que un fuego de 1 permiso de Kleist para avanzar hacia el detención a ciegas, aun sin causar nu- ,I Oeste durante otras 24 horas, concesión merosas bajas, eliminaría cualquier re-

de la que hizo buen uso haciendo más sistencia enemiga, Rommel avanzó dis- 4 de 60 kilómetros para alcanzar Marle y parando Con todos los cañones de su re- i Dercy, mientras Reinhardt casi le alcan- gimiento en loca embestida a través de l'l ri zaba al entrar en Hirson. Pero fue Rom- los pueblos en llamas, hasta llegar a

me1 de nuevo quien les ganó por la Avesnes. mano adelantándose con su regimiento Panzer hasta Clairfayts (sin dejar de de- ~1 avance continuó durante toda la

1 nostar a los Regimientos de Fusiles Por noche, mientras el ejército francés que quedarse atrás con sus blandos VeMcU- seguía resistiendo se rendía desconcer-

j los), donde tropezó con los rudimenta- tado. A las 07.30 horas del día 17, Rom- I rios fortines de hormigón que represen- me1 había alcanzado los arrabales de Le l' taban la llamada Extensión de la Línea Cateau; su división se extendía a lo lar-

Maginot. Antes del anochecer, los prin- go de un pasillo de 80 kilómetros entre cipales puntos de resistencia habían las unidades de confundidos franceses, sido reducidos mediante una combina- algunos trataban de escapar, otros de ción del fuego de la artillería Y de 10s Ca- rendirse, y sólo unos cuantos, de seguir rros, con el complemento de 1% cargas el combate. Por constituir la protección de zapadores introducidas por las aspi- del flanco de los ataques principales de lleras; previamente se había abierto bre- Reinhardt y Guderian, su progresión ' cha en los obstáculos anticarro y en las captó menos la atención de sus superio- ' alambradas. Las casas francesas y bel- res. pero en la mañana del 17, Guderian, 1 gas en llamas iluminaban la escena; cuya 1.a División Panzer había alcanza-

! esos tristes faros nocturnos iban gra- do el río Oise, recibió una nueva orden f bando las diferentes líneas alcanzadas de detenerse; una orden perentoria que ' 42

,I

Page 24: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

1 I I 8 do una linea que se extendía desde Ar- estas columnas de vulnerable infantería 1 leux. sobre el río Sensée. hasta Peronne, con las que los 70 carros pesados britá- 1 en el somme, y el XVI Panzer (relevado nicos tropezaron en su avance, y en el- ' de su primera misión en Bélgica) se enfrentamiento pudieron comprobar / abria paso en retaguardia entre la lenta que su gruesa coraza les permitía derm- 4 masa de infanteria que empezaba a lle- tar fácilmente a los cañones contracarro 4 nar la brecha entre las Ardenas y la ca- alemanes y llevar adelante la misión de 1 beza del avance. En la noche del 20 de destruir la indefensa infantería. Sólo 8 mayo, la 2.a División Panzer podia avis- despues de haber sufrido cuantiosas ba- 11 tar el Canal de la Mancha desde sus po- jas, fue detenido el ataque británico, h i c i o n e s en Abbeville, la 1.a retenfa frente a las posiciones de retaguardia de

\ Amiens, y la 6.8 y 8.8 se encontraban en- la artillería de campaña alemana, por tre Le Boisle y Le Basse. La 7.a de Rom- unos cuantos cañones antiaereos de 88 mel, tras una serie de aventuras en las rnm que se habían desplegado cerca del que su jefe estuvo al borde de un desas- frente. Asi, por primera vez, el <<88», que tre personal y en las que su carro se ha- más tarde se haría famoso como des-

!, 11ó siempre demasiado en vanguardia de tructor de carros, inclinó la balanza a fa- 8 su infantería, estaba en las afueras de vor de Rommel. Sus propios carros de-

Arras, con la 5.a bastante más atrás al sempeñaron un papel tnuy poco prove- otro lado de Cambrai. Los carros alema- choso en la batalla. Al regresar, cuando

1 nes ganaban victorias donde los británi- ya era demasiado tarde para salvar a la cos habían marcado el camino en la desgraciada infanteria, el 25 Regimiento

' guerra anterior. Panzer se encontró con una barrera de cañones contracarro británicos y perdió ! La explotación del éxito de b S Panzer más de 20 vehículos; entre tanto, la 5."

e desde Sedan había constituido Una aC0- División Panzer, llegaba apresurada- i metida temeraria. LOS m o ~ m i e n t o ~ tác- mente desde Cal&, apenas tuvo que ' ticos de flanco habían sido locales y de barrer a 10s supervivientes de la infante- ; amplitud limitada. Pero ahora que el ría británica.

ejercito alemán habia penetrado con su 1 escalón de ataque principal en territorio De esta indecisa batalla de carros en

directamente a traves de las co- Amas brotó la cadena de acontecirnien- i municaciones aliadas, se presentaba la tos que llevó a Hitler Y al Alto Mando

oportunidad de completar un mayor en- alemán a frenar Y finalniente detener e1 1 volvimiento de todo el ejército aliado en a-vance de 10s Panzer para limpiar los el Norte de Francia y Belgica. Si 10s Puertos dei Canal en la retaguardia de

i Pan~er lograban maniobrar rápidamen- 10s ejercit0~ aliados. La Sorpresa causa- / te desde Abbeville y capturar los puer- da Por un defectuoso, pero decidido ata- i tos desde Boulogne a Dunkeque, todo que local británico sumó un temor más P el grupo de ejercito franco - británico a 10s que Ya acosaban a los generales 1 quedaría aislado y obligado a rendir las a l m ~ ~ ~ e s . Presentfan otro ataque de '1 armas. AdemÉis, el 21 de mayo los alia- mayores dimensiones por la misma ' dos no tenían fuerzas lo bastante cerca Zona, que podría aislar a toda la fuerza

de la costa para detener a 10s Panzer. La Panzer; comprendieron además que las ! única esperanza de desviarlos estaba en perdidas de efectivos ~ a ~ ~ a d a s por h un contraataaue contra el flanco v la re- batalla Y Por las ~ ~ e r í a s amenazaban

: taguardia de fa punta avanzada, pero no 1 se disponía de las fuerzas necesarias

para un ataque de tal profundidad. En su lugar, los británicos, con dos batallo-

1 nes de carros pesados y dos batallones de infantería, lanzaron un pequeño ata- que de tanteo contra Rommel en el mo- mento en que este iniciaba una corta evolución hacia Lille alrededor de Arras.

Una vez más, Romniel había lanzado 1 su 25 Regimiento Panzer muy a la van- 1 guardia de los dos regimientos de fusi- / les, mientras estos seguían en sus ca- i miones, protegidos por una barrera de i cañones contracarro de 37 mm. Fue con

con agotar la fuerza por debajo del nivel de seguridad y disminuir sus posibilida- des de completar la conquista del resto de Francia; y pensaron que lanzando a los Panzer por los canales y zonas urba- nizadas de Bélgica les exponían a perdi- das aún mayores. En consecuencia, mientras los ejercitas aliados se retira- ban hacia Dunkerque, los alemanes or- denaron a las divisiones Panzer que ocuparan Boulogne y Calais en una se- rie de cautos asaltos y avanzando el de- bilitado resto de sus fuerzas, en una ope- ración de tanteo, contra el flanco Sur que protegía las rutas aliadas de retira- da hacia Dunkerque.

iderando que los carros (co

ban en medio de las inundaciones y cualquier intento de tomarlas por este procedimiento hubo de ser abadonado. El 28 de mayo, el XIX y el grueso de los otros cuerpos de ejército Panzer fueron retirados de la batalla para descansar y ponerse en forma en previsión de su pró- xima misi6n.

que, lo mejor de e1 pudo escapar y reor- Los efectivos alemanes de carros se re- ganizarse para futuras batallas. Fue la novaron hasta alcanzar un nivel pareci- primera organización militar que se eva- do al primitivo, antes de lanzarse al pri- di6 de los Panzer y tuvo la oportunidad mer ataque contra Francia el 5 de junio. de estudiar las lecciones aprendidas Se reagruparon asimismo las divisiones, para emplearlas contra sus preceptores organizándose cinco cuerpos de ejercito alemanes. Entre tanto, su l.a División Panzer, con la 5.a y 7.a divisiones Pan- Acorazada fue embarcada hasta la parte zer, estaba emplazado próximo a la cos- de Francia no ocupada tambien para ta cerca de Abbeville; el XIX Cuerpo ayudar a los debilitados restos del Ejér- Panzer con la 9.a y 10a Panzer, cerca de cito francés a defender la Enea del Som- Amiens, con el XVI Cuer~o Panzer y sus

Page 25: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

-. .I -- --- ---- - mos se hallaban en el ~ r u p o Panzer de Kleist. Al Norte de Rethel, un nuevo Grupo Panzer, bajo el mando de Gude- rian, se disponía a atacar el 9 de junio empleando el XXXIX y XLI cuerpo Panzer, con la 1.a y 2.a, y la 6.a y 8.a divi- siones Panzer respectivamente.

El XV Cuerpo Panzer de Hoth empezó la ofensiva del día 5 con resonante éxi- to: dio cuenta de los intentos franceses de cubrir los puntos de paso del Somme (que habían sido establecidos la semana anterior) , transbordó los carros a través del río a gran velocidad (señal del exce- lente estado de instrucción, que se ha- bía agudizado con la práctica real) y se lanzó en una profunda penetración, aná- loga a la que le había permitido ganar el primer round de la campaña de Bélgi- ca. El 8 de junio, la 5.a y 7.a divisiones Panzer se encontraban en las afueras de Ruan y en vías de cubrir sus flancos con las divisiones de infantería que les se- guían a buena marcha por las brechas abiertas en las defensas francesas al Oeste de Amiens.

En cambio, el Grupo Panzer de Kleist quedó lejos de conseguir su objetivo cuando traM de avanzar desde las cabe- zas de puente en Amiens y Peronne, porque aquí el ejercito frands recobró su antigua determinación y luchó con desesperado vigor. La nueva defensa en profundidad demostró ser difícil de pe- netrar, pues apenas encontraban los ca- rros e infantería alemanes lo que creían ser una brecha cuando descubrían que, muy a menudo, habían caído en una trampa: un campo de tiro de mortdfera artillería. En las ocasiones en que los ca- rros franceses se enzarzaron en lucha frontal con los alemanes, su coraza más m e s a les proporcionó una ventajosa protección En el aire, por el contrario, la Luftwaffe era dueña y señora, y bom- bardeó impunemente los puntos de re- sistencia, hasta que gradualmente la de- fensa francesa se derrumbó; la ruptura de Hoth hasta Ruan, que fue el primer avance de importancia, y el ataque de Guderian con sus dos cuerpos de ejérci- to Panzer a ambos lados de Rethel el 9 de junio abrieron un nuevo frente que constituyó una amenaza fatal para la re- taguardia de la todavía inviolable Línea Maginot.

Al principio, el Grupo Panzer de Gu- derian encontró y fue detenido por una resistencia como la que había frenado a

46

Page 26: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 27: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

el catastrófico colapso de una de las más apropiada, adoptaron febrilmente una blasonadas potencias militares de Euro- organización acorazada (derivada del a se había debido a su inferioridad ma- Arma de Caballería) que en muchos a s

!erial en aviación, carros y cañones con- pectos imitaba la alemana, y aplicaron , tracarro, todo ello mal dirigido Por un su industria a fabricar miles de vehículos

mando inadecuado. En adelante, sólo los de combate en cantidades que los ale- británicos estorbaban el paso de Nitler manes no podrían igualar. y nadie esperaba que durasen mucho una vez que los alemanes transportaran sus En Alemania se aceptaba enfática- divisiones Panzer en una flota de inva- mente el papel que los Panzer habfan sión a traves del Canal de la Mancha. desempefiado en Francia, y con ello un Dándose cuenta de que la ambición de deseo de multiplicar el número de las Hitler no tenla fronteras, otras naciones formaciones acorazadas. Desgraciada- se apresuraron a copiar la organización mente, la exigencia de Hitler de dupli- militar alemana, buscando más aviones, car el número de divisiones Panzer que más cañones contracarro y, sobre todo, habían luchado en Francia sólo pudo más carros. En la primera línea del fren- llevarse a efecto reduciendo a la mitad te (en Gran Bretana) se dicidió formar de sus efectivos cada una de ellas. Aún diez divisiones acorazadas cuando tras así, esta nueva división Panzer necesita- la cafda de Francia ni siquiera una esta- ba casi tantos medios de transporte ba completa, a no ser sobre el papel. En como la original para mantener la movi-

Page 28: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 29: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 30: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 31: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

, do. Lo hubo en parte en Orecia, pero de un tipo anticuado, aisIado y particular- mente inseguro. De los 52 carros de un

iegos defendiesen las montañas rnel. Le hablan vencido en Arras en 1940

Page 32: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 33: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 34: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 35: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

cuentros de carros con confusas situaciones q

era seco y firme, los carros avanzaban a miles; pero un poco máa allá segian sin pausa y los camiones de suministro esperando. Cerca de 30 divisiones rusas segfan fácilmente para continuar el im- fueron copadas por la tenaza del Grupo

de Ejercito Centro en Minsk, con enor- mes cantidades de material; pero mu-

El notabilisimo avance hacia Dvinsk chísimos de sus hombres consiguieran

Page 36: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 37: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 38: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 39: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

bre la campaña de Napoleón en 1812. en cualquier caso tuvieron que dedicar I Pero casi tods los problemas de Napo- casi el mismo tiempo a tratar de sobre-

1 león eran de carne y hueso; en 1941, los vivir en las heladas ventiscas que al alemanes tuvieron que enfrentarse tam- combate real.

i bien con las infinitas complejidades de la mecanización cuando el estado de su Desde los bosques vecinos a Moscú, la ejercito (sobre todo, de sus carros) em- 2.a División Panzer tuvo una efímera vi- pezaba a declinar. sión del Kremlin en la distancia; algu-

nos infantes consiguieron incluso pene- Habiendo decidido sustituir los Servi- trar en los suburbios, donde fueron r e

cios centrales en Alemania por un siste- chazados por los obreros que salían a ma descentralizado en Rusia, intenta- defender sus fábricas. Pero el 5 de di- ron enviar al frente grandes cargas de ciembre, toda ofensiva alemana hubo de repuestos. Desgraciadamente, los esta- ser detenida: ese día, los rusos lanzaron dos mayores no estaban familiarizados su primera gran contraofensiva de in- con un problema que, hasta hacía poco, vierno. habia sido de responsabilidad indus- trial, y los repuestos se fueron a la deri- La llegada de ~uhds ted t al Don Por va. Por ejemplo, el Grupo de Ejercito Rostov habia sido ya la señal de un vic- Sur recibió varias cargas de piezas para torioso contraataque a cargo del Trein- carros cuyo modelo no poseía, mientras ta y Siete Ejercito ruso. LOS alemanes el Grupo de Ejercito Norte solicitaba habían ocupado Rostov el 21 de noviem- con toda urgencia aquellas mismas pie- bre, pero fueron rechazados el 30 y obli-

Cañón contracarro Pak38 de 50 mm. zas. El campo quedó materialmente gados a retroceder. Por primera vez, las

Introducido en 1941 para reemplazar al de 37 mm., llegQ a ser la base de la defensa contracarro alemana cuando operaba junto al cañón más poderoso de 88 mm. de doble empleo. En la División Panzer proparcionaba el eje de maniobra como defensa del flanco. Empleando proyectiles perforantes, alcanzaba una velocidad inicial de 1.200

I metros por segundo, lo que significa que podia penetrar una coraza de 56 mm. can un , ángulo de 30" a una distancia de unos 1.000 metros.

Para Hitler fue una sorpresa que en nas de kilómetros, pero en el frente de octubre se detuviera todo el avance. Moscú la situación era más desespera- Sencillamente, no había advertido el es- da. Alli los rusos buscaron la forma de tado de dilapidación de sus fuerzas en envolver el Grupo de Ejercito Centro en las profundidades de la madre patria. Si una maniobra de gran estilo: una tenaza a finales de septiembre la ofensiva Pare- de doble ofensiva por ambos flancos en cfa una jugada aventurada, su reanuda- dirección a Vyazma. ción para cercar Moscú a finales de no- viembre podía calificarse de suicidido Cogidos en terrible apuro, a los alema- militar. Los efectivos de carros eran d e nes sólo les quedó la alternativa de reti- sesperadamente bajos, el espíritu com- rarse, aunque la orden de Hitler de «re- bativo de los hombres estaba embotado sistir y luchar* evitó al menos que so- por el frío, los vehículos se congelaban breviniese el pánico entre ellos y fortale- con los bloques de cilindros rajados; el ció la resistencia. Sin una preparación ejercito entero se derrumbaba y gemía, estudiada, tuvieron que aprender ahora al no haberse realizado ningún prepara- el arte de la retirada despues de dos tivo especial para la campafía invernal. años de avance continuo. Aun así, cier-

avance: los hombres se vieron acosados dos debían ser evacuados. Tambien los por multitud de fatigosos y reiterados carros habian de ser recobrados, porque contraataques en todas direcciones, y no eran menos preciosos, y en los casos

Page 40: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 41: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

más potentes,"p<ro los trabajos se ha- k bían dilatado Y a mediados de 1941 ape- más gruesa. Estas medidas contribuye-

nas habían alcanzado la fase de prototi- ron en buena parte a inclinar de nuevo l Po. Para entonces, incluso 10s prototi- la balanza en favor de los alemanes. p pos estaban anticuados Y Ya no se trata- Además, se prestó nueva y redoblada

1 ba de igualar al T - 34; los próximos ca- atención a los vehículos de asalto y caza- rros alemanes debian ir Un Paso Por de- carro dotados de cañones anticarro más

, ' lante de Su inmediato rival para Ser al potentes montados sobre chasis anti- menos tan buenos como la siguiente ge- cuados, porque era más fácil disponer

, ' neración de carros rusos que probable- de un nuevo cañón que del correspon- mente sustituirían a 10s T - 34. De este diente carro que lo iba a llevar en su to- modo se apresuraron mos diseños revi- rreta. En cualquier caso, los veñículos sados de un nuevo carro medio Y otro de asalto eran más fáciles y baratos de 1 pesado en una atmósfera próxima a la fabricar y aunque la falta de flexibilidad

I de pánico. de su cañón imponía desventaias en el

Entre tanto hubo que acudir a algu- nos subterfugios. Afortunadamente, se encontraban bastante adelantadas las pruebas para dotar a los PzKw 111 y IV de un cañón más potente, puesto que desde los primeros días tanto Guderian como Hitler habían mostrado su deseo de montar uno de 50 mm en el PzKw 111. Ese deseo se safisfizo ahora con rapidez.

ataque, llenabañ intervalos en ia defen- sa contracarro de la infantería, no sien- do ya imprescindible la ayuda de las di- visiones Panzer. De este modo, aunque los vehículos de asalto no habían sido asignados todavía a estas divisiones Panzer, les eran complementarios, aun- que tambien competían en la necesidad de piezas de repuesto.

a la par que se dotaba al PzKw i~ de Pero la poca seguridad ofrecida por un cañón largo de 75 mm y se adaptaba los carros alemanes en el frente persis- a ambas máquinas una coraza frontal tía. Los servicios descentralizados em-

,l Desalojo de un carro incendiado.

pezaron a abrirse camino en el montón los derivados del montaje de nuevas ca- de pedidos sin cumplimentar, pero la es- denas de producción para los recientes cases de repuestos evitaba que los Ta- modelos en sustitución de las viejas, au- lleres de Campaña trabajasen a plena mentaron tanto más la desorganización.

111 Entre tanto los montadores se veían

obligados a extremos de improvisación, haciendose tan evidente la expoliación del equipo gastado en tránsito desde el ' frente para ser retocado en Alemania que muy a menudo sólo el armazón, des- pojado de todos sus componentes, llega- ba a la fábrica base. El invierno contem- pló lo peor, pero la primavera llegó pronto. Lo Que ocurriese en adelante es- taba en la manos de Hitler, del tiempo atmosferico y de la inicipiente recupera- ción rusa, aunque en cierta medida tam-

dir un retraso en la producción de ca- rros para poder facilitar más piezas. De cualquier forma, tanto las unidades del frente como las que estaban en período de formación adolecían de gran escasez de efectivos, con las inevitables conse- cuencias tácticas, y los frecuentes cam- bios en la política industrial, sobre todo

Page 42: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 43: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

e. Los combates de fuego tuvieron lu- dos y sus abastecimientos exhaustos; Go~cados sobre Africa desde Estados gar al mayor alcance uue permitía la en- 1 8610 mediante un combate de retirada a Unidos. v a menos de conseeub una vic-

ovimiento) dieron cierta sup<emacia a entrada de Estados Unidos en la guerra 1'942, cada batalia del Eje en Africa ha- ! os carros alemanes. Aun así, las ba- al lado de los aliados rio pareció debili- bja sido de naturaleza defensiva o des-

las producidas Dor daños en el combate

---- --""-- . --- -- --- ---w--.-""-

1 hacer una salida desde ~ g i p - combate sembraban el desierto. En con- su retirada se prepararon Para el con- que Tobruk cayese, había que detener to para ayudar a los aliados. Su desplie- secuencia, la ocupación, Por parte de 10s traataque, lanzándose hacia el Este, una la ofensiva para efectuar una invasión gue era, por tanto, admirablemente destacamentos de K!paración, de los ce- vez más, a mediados.de enero con una de Malta que impidiese a la isla domi-

1 apropiado a la batalla, y la simple pre- menterios de carros podía proclamarse ofensiva en la que los carros y cañones nar las comunicaciones por el mar. sencia de los cañones contracarro largos como una victoria; Y al contrario, el contracarro colaboraron en el ataque Rommel lanzó su ataque 26 de de 5n mm con montsie de ramnaña í n ~ i e abandono de una zona que se sabía Ile- como nunca lo habían hecho.

lizadas servían para'hatizar las conse- rnanas en los accesos a Tobruk (y fue Para Rommel, la guerra del desierto propios cañones contra^carro de 50 mm. 1 / ! cuencias de la guerra entre fuerzas aco- iluminada w r los repetidos exitos loca- 1 no oodfa continuar mucho tiemm de Por úItimo. sobrevino una tremenda

Page 44: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 45: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 46: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 47: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 48: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

---I1.̂ ----- &------.----, -.,u \.---U'

/ nas, en otras, 'especialmente en los VOS de combate empezaron a amenp.-* meandros del río, se rebasaron bolsas y cuando m á s se necesitaba toda sil frier- 11

--YP"\.UYV -Y-- "Y Y J I l V l V Y -1

ría zer hubo de regresar.

l b de Kleist continuó avanzando en busca del enemigo emb~lsado en DOn-y re- del petróleo, aunque los rusos ya habían 1 basado por 10s Panzer. rorendido fueao a los camoos de Maikon ."., .-. -. ..rv ,, ,.,,,,.,, -- no mucho antes-de su llegad;. En realidad,

,,.;A.i, ,,1 Miamn dvitn c,, CP hohia rlorriimhorln on P C ~ P f r e n f ~ ra.

la, ninc rlo Inc cnldodne Ponnor In~rontondn

=U'- U ' U.*UUVU*' "...U* uiii riir.y.,ui~ii~ii".r rir

,A,-, lhmetro tras kilhmetso. 1111

" " - - - - - - - a. - . -. . . . - - - -.-- - la salud mecánicavde los carros. «Los ca- 1 pra 1s C ~ P der&t.ar 6 las f&rizas rusas aue d e Ins riiisnc NIIP nn n i~d ie rnn dpfpnrlorqo j Fdan~er había enbrpeciao aún mas las r r n ~ ~ l ~ m ~ n ~ c nn pntrohan en aorihn sin 11 1

I r"^v -^^- -"- -- -- ------ - -- - - - - u-- --^- ---- -pl---- ^ ---- --- -" "V..." y-u--u", uuii i- . ... .- . ̂u"...> vs principal, El Cuarto Ejercito ~ a ñ z e r Polonia: hasta ese extremo había de Stalingrado. La resistencia se endu- una inclinación natural de sobrevivir salió en cabeza. Se habrá notado que el do el colapso ruso y el dominio ale reció y alcanzó formidables P ~ O P O ~ C ~ O - para disfrutar de la promesa de paz QG-

t6rminn nmnrfn rln ,,mninn,, Panzor ha- Tncranrlo 01 fronn I ~ c onrrirfoc do nes antes incluso de aue la ciudad del i ; ~ 1- c r i n a r f i n i o . ln nn.introrir\ 6-1 onr

11 1 I - - -- L A 2- 1- L - 2- 7 - - - I avtliarlnn nania rDmninnnnnrcnmniein. - - . 11 1

a ningún .Ejercito». De hecho, el Sexta lanzaron hacia Voronezh. Era lógico SU- ~1 envio del Cuarto Ejercito pwer a WI 99 aP, no.natn YTIT Piiernn ñ p i - . . - - . . - - - -

Page 49: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

En las orillas del V charon a muerte sin tencia en el sector ori dos consumieron allí

toda costa hasta el presente. Pedazo

lingrado en una prueba personal co

lugar, no cabia en la estrategia alemana, exito en profundidad en territorio ale- y en segundo, era mBs propia de la in- mán con una energía y minucioskiad

si fuera poco, empezó a tomar cuerpo una creciente amenaza rusa desde los flancos sin protección y contra la descu- bierta retaguardia del Sexto Ejercito y del Cuarto Panzer en Stalingrado cuan- prevaleceria. Las agotadas divisiones se estaba formando en el Este. Recibidas do, por primera vez, los rusos tuvieron del Cuarto Ejercito Panzer no consiguie- las órdenes de atacar, un gmpo táctico a su enemigos sujetos en una posición ron contraatacar el doble envolvimiento compuesto por dos compañías de carros,

Diametralmente opuesto al empleo que invitaba a la clase de contraataque de Stalingrado cuando las fuerzas que una de infantería sobre carriers blinda- que hizo Kleist de las divisiones Panzer móvil en el que los mismos alemanes so- estaban al Sur de la ciudad fueron des- dos, y dos secciones de reconocimiento fue el de Paulus en Stalingrado. Preso bresalian. Despues, el barro otoñal vino truidas o rechazadas y las más próxi- apoyadas por una batería de obuses de del egofsmo de Hitler, no tenia otra al- a paralizar todo movimiento, y más tar- mas a sus límites se vieron impedidas, 105 mm autopropulsados avanzó 11 ki-

-

Page 50: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

. .

La artillerla autopmpul~ada que emplearon las Divisiones Panzer en la ifltirna parte 1 de la guerra sustituyó a ia anterior remolcada y sin blindaje que no había podido so- portar el esfuerzo de las fuerzas acorazadas. El chasis es el del PzKw II. Peso: 12 I

toneladas. Velocidad: 40 km/h. Tripulación: cinco. Armamento: un obús de campaña de 105 rnm. con un giro lateral de 10' a cada lado.

lómetros sin oposición sobre la ancha rias unidades del Cuarto Ejército ruma- estepa abierta. Descubrió algunos ele- no, estaba reunida cerca de Kotelniko- mentos de infanterfa poco antes del. vo, a unos 130 kilómetros del punto más anochecer y los derrotó, pero más tarde cercano al perímetro del Sexto Ejérci'í. , 1 recibió información de la existencia de Se había esperado hacerlo una semana fuerzas enemigas más al Este. A la maña- antes, pero al LVII Cuerpo de Ejército na siguiente prosiguió el avance, con las Panzer le había costado ese tiempo tras-

P compai'iias de carros a la derecha y la in- ladarse desde el Caúcaso. Por ambos fantería a la izquierda. Casi inmediata- flancos de la fuerza de liberación, los ru- ' mente el enemigo atacó desde el frente, sos intentaban extender su penetración 1 llamando la atención de todos los jefes de hacia el Sudoeste para aplastar a aqué- 1 carro en esa dirección, con lo que la re- lla antes de que se pusieran en marcha. 1 pentina e inesperada aparición de 15 ca- Enconadas batallas de carros se desa- 1 rros rusos desde un espacio muerto para rrollaron detrás del Chir, defendido por 1 disparar sobre el flanco pasó inadvertida la infanterla alemana, cuando los carros

I I y les costó varias bajas. Al no continuar rusos se abrieron paso y los infantes de- , el ataque, los rusos perdieron, sin em- jaron que su penetración fuese contraa- ( bargo, la ventaja inicial conseguida. Con tacada en profundidad por la 11 Divi- esto demostraron, en pequeña escala, sión Panzer, operando detrás de su pro- una parcial comprensión del metodo pio frente infantería. En la tensión de alemán Y una ejecución limitada a los esta situación, lo mejor que pudo hacer más bajos niveles. Pero en mucha ma- realmente la infantería fue mantener las yor escala, conforme reunieron mayores posiciones existentes, cerrar las brechas , ejércitos y los dirigieron al principal por las que hablan pasado los rusos y , campo de batalla, la sopresa experimen- esperar que las divisiones Panzer des- I

tada por la 3.8 División Panzer fue senti- truyesen la incursi6n enemiga. Esta vez, da por todo e: Grupo de Ejerci+a del en el Chir, la 11 División Panzer, con su Don, táctica superior, obro el milagro.

El 12 de diciembre, una fuerza de libe- Cerca de Kotelnikovo, el intento de li- I ración de tres divisiones Panzer, con va- beración de Manstein desbordó a las

avanzaron indiferentes a las perdidas para cerrar el pasillo que Manstein man- tenía abierto al Este de Rostov y a tra- ves del cual el Primer Ejército Panzer se apresuraba a escapar del Cáucaso. Una vasta colisión estratégica suponía

nivel de unidad, desde el Grupo de.Ejér- l cito hasta el pelotón, extendiendose de uno a otro extremo del frente. Como ambos bandos empleaban ahora una táctica casi idéntica (aun cuando los ru- sos manejaban números mucho mayo- res), el juego de ataque y contraataque asumía un aspecto casi estereotipado, que tomaba algún respiro en aquellos puntos en que las compañías y tripula- ciones alemanas mejor instruidas ileva- ban la mejor parte en el encuentro. Un torrente de carros rusos irrumpía gene-

das alemanas y rusas se hizo cada día más violenta. Hordas de carros rusos, En febrero de 1943, despues de que el bien dirigidos en los niveles superiores Sexto Ejercito ruso lograra formar un de mando pero deficientemente condu- amplío saliente al Sur de Jarkof hacia cidos en los escalones subordinados, Dniepropietrovsk, pareció que sus cabe-

Page 51: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 52: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 53: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 54: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 55: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 56: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

aantes ~ r o ~ e c t o s tenían Bocas ~osibili-

Entre sus favoritos, HitIer congregó a ganismo aparte cuyas necesidades te- diseñadores e ingenieros cuyos extrava- nfan prioridad sobre los demás.

dlades de encontrar aceptación en las una anarsura de esta clase no podia mentes conservadoras de los prácticos durar indefinidamente. Por suerte, en ingenieros militares. Estaba el Millante A1bei-t Speer, su ministro de &mamen- Dr. Porsche, cuyos proyectos compren- to del Reich, tenía Hitler la lealtad de dfan desde el diseño de un blindado un favol%0 que administraría el compie- para competir con el carro pesado Tiger j0 industrial akmán Con una sagaz mez- hasta otra máquina gigantesca de 180 cla de buen sentido, sana descentraliza- toneladas. Había asimismo una pro- ción Y éxito asombroso despues de 10s puesta de dos ingenieros, Grote y Nac- problemas de centraiieación excesiva ker, para construir un carro de más de creados Por SU megalomania. En 1943 1.000 toneladas. Hombres como Porsche sitler buscó, Pues, su apoyo para poner podían entusiasmar a Hitler (muy preo- arden en la situación. cupado siempre por 10s detalles %cd- Antes de que la hecatombe de Stalin- COS) con lo extravagente y, al hacerlo acaparaban ]a investigación grado despojase a la fuerza Panzer de mente limitada, el desarrollo y los servi- gran de sus Speer cios de fabncaci6n en detrimento de llevado adelante su intento de desviar el proyect,os fundamentales más urgentes. control industrial de los demás ministe-

rios haciendo que las peticiones de equi- ~ i t l e r , convencido de que gracias a él po pasasen a traves tile1 suyo por medio había podido detenerse la descomposi- de ,a serie de omisiones Mayores @as dado pesado SdKfz 234 con cañón de 75

i ción en Rusia durante el pánico Fver- ~ r inc i~a le s controlaban imaortantes a- nal de 1941, tomó un malsano Y cada vez ticuloi específicos) mientrai los Círculos Los &tos blindados constituyeron una par1 1 cllnient~ /Ie las Divisiones Pi . . - ,allado interes por la formación . - Mayores controlaban los materiales:

va para éI y sólo él, con lo que en un 1 ; tiempo en que Nemnia sufría de falta de ca~acidad v escasez de muchos arti-

do, Ifitler pareció, de momento, haber perdido la fe en su propio juicio militar; este cambio se refleió en Xa libertad dis- 1

I l Por supuesto, l a industria del carro en conjunto no figuró nunca entre las afec- tadas por esta infrautiiización, pero iie- vó su Barte de mala dirección. Por ejem-

derian, total volte face de HiLIer (que no olvidaba fácilmente), ya que Guderian había caído en desgracia a finales del 1941 y en 1942 había padecido una enfer-

I plo, hbbo confusiones en el ~uministi-O medid cardíaca. En febrero de 1943, Hitr los cañones de asalto S ~ ~ U A G U G I I acyaa- de repuestos para las viejas marcas de ler le nombró Inspector General de las dos de la fuerza Panzer, i m n i d i 4 n A n l ~ carros en el momento en que los nuevos Fuerzas Acorazadas por un decreto re- , controlar su en un momenzo depenala la estuvieron en plena producción. Se ad- dactado por el mismo Guderian, cuyo en que de las f&bricas s a a n m e c n r m n c m-...;n. +.-.mi,

I virtió asimismo una orisa febril oor la objetivo era reconstruir la fuerza Panzer i r. .... -... ..-,.. T.*.. ni.

b o n s t r u c c i ó n c?le cañones de asaito en detrimento de los carros. Por falta de una dirección central efectiva, la más es~antosa confusión se r~roduio en 1942,

q<e el mismo Fiahrer había estado a punto de arruinar. Guderian recibia el total control sobre la organización e ins- trucción de las fuerzas blindadas. inclui- yur. b u v í a u u i i u v iiuuirr ruv

porque mientras la vnihrmacht pedía das las de la WaEen - S8 y las formacio- todo control racional: en ci-- "- --e--- , -- I i blindados v caiiones de asalto (y a me- nes acorazadas aue Goering habla con- 1 ri.,.i,.,iA, d. ,.;,,, d. ..O i+, T D n m nudo encÜntraba que sus pedidos ha- bían sido modificados o anulados por Hitler) la industria sólo podía seguir cie- gamente las instrucciones contrarias,

vertido en un Gjército particular con personal tomado de la Luftwaffe. Tenía también facultades para proyectar con S ~ e e r los desarrollos tecnicos v los d a -

I Babida cuenta de que la SS era un Or- nes de fabricación de las armas. De esta esperado a su montaje en un carro m8s atraían porque eran baratas, de fácil fa- complejo. El cañón de asalto era sobre bricación y capaces de penetrar las co- 1 l

Page 57: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 58: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 59: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 60: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 61: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

ros, pero la fuerza Panzer habfa sido de- una posición oculta a otra, tanto más tenida y empobrecida en su mejor mate- cuanto que la aviación rusa efectuaba riai. ataques individuales contra carros ais-

lados, aunque sin resultados aprecia- Esta vez, además, no se le concedió la bles.

menor oportunidad de recuperarse, por- que en el ápice del esfuerzo aleman los Había aún otra razdn que inducía a las

iannarnn fll re---:--- 2- --erano y divisíones Panzer a seguir moviendose: . e1 frente ern rnña ve7 mnvnr rnmn rnn-

,, ..-,,.. . .n;uyerair dar-~ui, ucu- . . . , tnAn 1110ar amnna'ladn cin nnAor n ~ t a r

,=enVd -- --...-a -... "---"-"--*. -- -..-A*-

,.. -,,.-.,,. riiilit;iibauv Con Un Siado~ puntos vitales en desesperados /p-

."."..=.., enemigo cuatro veces su~erior aue lan- ~~f i ie rzos Por conservar una esencial re-

- - - - - - - ~ . V L ' . ' " V Y U., I Y I I I I U I Y U . .- W - Y - Y - p - Y Y U.,

de Eu- agosto se había perdido Siciiia, Italia 1 enviar había sido invadida v un mes desmes ni cuando desertaba de ~ l e m a n h ; así, los ejereitos

los terrenos montajínsos. tanto de Italia anmin - nnrtna meriranns fe n r ~ r r n h n n n 1 11

I -1I--. ---- ------ - ---, -&--------

: d~ «no ohnro iinn oiiidnd frac ntrn ~r en nrtiihrn fd

similar. Los Tiger f ~ a n t h e r abrían fue- "uaU'

Page 62: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 63: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

I dían causar daños s~ficientes Para in- vadearlos sin apenas ser observados. De movilizar un carro, reforzando la tensión esta forma, la batalla que los alemanes más sobre los ya sobrecargados equipos habían intentado librar cerca de la orilla de reparación. se les fue de la mano sin conseguir flan-

En consecuencia, en 1943 la fuerza Panzer recibió su primera remesa de ca- rros especiales antiaéreos en un intento de dar a las formaciones blindadas cier- ta protección próxima contra los avio- nes en vuelo rasante, a falta del apoyo de los cañones antiaéreos más pesados y de la Luftwaffe. En todo' caso, la cre- ciente amenaza aerea, aue nunca fue

quear los ataques de los c a r r o ~ , ~ u e pro- dujeron la acostumbrada desorganiza- ción móvil en la orilla Oeste a mediados de octubre. Las divisiones Panzer se vie- ron impotentes para eliminar docenas de cabezas de puente que se ensancha- ban y enlazaban hasta que práctica- mente toda la línea del río habia caído en manos rusas.

peligrosa en el Este como en Oes- Los problemas con que se enfrentaron proda0 com~l i cac~o~es en la guerra 1,s divisiones panzer presentaban nue- carros, Pero no Consiguió detenerlos. vas y mayores dimensiones. Como los Como resul'cado de la deliberada poli- rusos habían progresado mucho con sus

// tica de destrucción total llevada a cabo efectivos, avanzando en profundidad y

1 por el ejercito alemán durante su retira- en una línea extensa, era muy difícil lo- da a traves de Rusia, las batallas de calizar el verdadero flanco del enemigo 1943 y 1944 tuvieron lugar en campo contra el que Proyectar una maniobra raso y yelmo, aunque no presentó los envolvente. Aislar las cabezas de ataque mismos problemas con que se enfrentó irrumpiendo en las líneas de suministro Rommel en la campaña del desierto. pocas veces dio fruto; un jefe de división

1 Este nunca tuvo que preocuparse por el Panzer muy e~periment~ado, el general

/ paso de ríos. En Rusia, durante la inva- VOn Manteuffel, comentó que a menudo sión alemana, los ríos habfan constitui- había llevado a cabo incursiones de este do detenciones meramente simbólicas, tipo Y que lo único que encontró en la 1 ya que el enemigo rara vez era capaz de cubrir todos los pasos potenciales a b

1 vez, pero durante la retirada las divisio- nes Pmzer los miraron como una bendi- ción mixta. Aunque el Alto Mando tra- taba los cursos de agua como fuertes ba- rreras defensivas, los hombres de las di- visiones Panzer adivinaban (general- mente con acierto) quiénes serían los encargados d defender los lugares de paso mientras el resto del ejercito lucha- ba por cruzarlos, sabiendo que ellos se- rían los últimos en hacerlo con el enemi- go en-los talones y la esperanza de que el puente no les volara en la cara. cuando algún objetivo

detectado. Las emboscadas de carros estaban a la orden del día. Por supues- to, esta táctica rendía los mejores resul- - tados cuando se llevaba a cabo en terri- - torios donde la población civil se mos- traba propicia y, aunque existían mu- chos rusos disidentes, esta tendencia distaba de ser general.

sión Panzer y otra de granideros Panzer (nuevo nombre impuesto a las antiguas divisiones motorizadas de infantería), persistieron en sus posiciones. Por lo tanto, el Dnieper nunca constituyó una barrera duradera, aun con sus 400 me- tros de ancho, y los rusos mostraron una especial habilidad en tender puentes bajo el agua para permitir a los hombres

Avanzado el otoño, cuando el barro dificultaba de nuevo los movimientos, el frente se estableció temporalmente de- jando grandes espacios entre los belige- rantes. Kiev habia caído tan pronto como se cruzó el Dnieper, aunque una cruda batalla de Panzer al Oeste, en las proximidades de Zhitomir, había su- puesto un duro castigo para los rusos y

I Con una completa variedad de modelos, el PzKw IV permaneció en servicio en las Divisiones Panzer diirantr. tnrla la auerra. meiorándose en varias ocasiones su arma-

1 bían oponerse a las 1.400 máq~inas rU- ias condiciones del terreno hacían impo-

Page 64: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 65: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

II 1 1944, lo que quiere decir aiie las divisio- bien con unos cuantos obuses auto~ro- II nes Panzer estuvieron cl

- - - --- - - - - onstantemente pulsados orgánicos del regimikto,

1 al límite de sus fuerzas. Hacían, además, mientras la aftillería era mitad autopro- gran consumo de combustible en un pulsada Y mitad motorizada, con no me-

¡ momento en que las existencias de pe- nos de 18 cañones medios de 150 mm de tróleo de Alemania sufrían incesantes calibre (adquisición importante en sus- ataques aereos y bajaban constante- titución del reducido apoyo aereo). La mente de volumen. En Italia, una torva mitad de los cañones contracarro eran

i batalla en la que los blindados tenían autopropulsados y la otra mitad motori- menor importancia que la infantería y la zados, y algunas divisiones disponían de artillería, entre montañas escabrosas y una compañía adicional de cañones de

i rápidos ríos, relegaba los efectivos Pan- asalto, aunque Gliderian había conse- 1 zer a una o dos divisiones de reserva. guido dotar de nuevo a los regimientos 1 Pero todos los ojos emepezaban a vol- Panzer casi exclusivamente con carros.

verse hacia Francia y Holanda, de don- Una división reforzada de la Wehrma- de se esperaba el próximo golpe aliado. cht, la ~Gross Deutschland» de Man- Guderian parecía más empeñado que teuffel, tenía no menos de 360 carros (en- nunca en aprovechar todos los medios tre ellos, 200 Panther y algunos Tiger) y para elevar los efectivos blindados en el 30 cañones de asalto. Oeste. Con gran razón desconfiaba de la No hace falta decir que las divisiones llamada invulnerabilidad del Muro del panzer de la SS estaban mejor dotadas Atlántico, sabiendo que, una vez que los que las del ejercito y más cerczl de sus aliados consiguieran desembarcar, la efectivos; disponían además de unida- batalla de carros sería inmediata y la des suplementarias, tales como una clave del resultado final. Pero ¿dónde compañia Tiger permanentemente agre- encontrar los hombres y el material ne- gada, en lugar de asignada, como ocu- cesarios cuando los rusos seguían ata- rn'a en el Ejército. Por la misma razón, cando en el Este, arrojaban a los alema- la artillería era a la vez más numerosa nes de Crimea y penetraban en Polonia y de mayor calibre; sus cañones de 170 hasta cerca de Brest Litovsk? mm parecían un poco fuera de lugar en ' Este es el momento de valorar el esta- una formación de gran movilidad. Más do de las divisiones Panzer cuando se aÚIl: al escoger el potencial humano db- preparaban para afrontar sus más duras ponible, la SS se quedó con la vieja elite pruebas. Desde un principio, la erosión de las divisiones Panzer Y con 10 Poco gradual de 10s efectivos de carros había de bueno que las Últimas recibían toda- sido continua y ahora que sólo había vía, mientras al Ejercito se le dejaba 103 en una división Panzer de la Wehr- Poco 0 nada después de que las unida- macht, el proceso llegaba a su punto des de Paracaidistas tomaron tambien más bajo. No obstante, se habían produ- 10 SUYO. El resultado final sólo podía Ser cid0 incrementos compensadores, no el drástico declive en la calidad de las &lo por la mayor potencia combativa formaciones básicas de infantería. cuyas de 10s carros más modernos, sino tam- terribles bajas se redoblaban por falta bien por el aumento de movilidad inhe- de aptitud y de mandos adecuados. DU- rente a los vehículos blindados adicio- 'ante la retirada de Smolensko, la infan- nales que, con su mejor comportamien- tería perdió el equivalente a un batallón to todo terreno, se multiplicaban en casi diario; semejante gasto desangró los todas las unidades (excepto el regimien- frentes Y no pudo ser recuperado con to Panzer) de la división. ~1 ]Batallón de alemanes, con lo que estas divisiones de Reconocimiento se había desprendido infantería asimilaron cada Vez más ex- de casi todas sus motocicletas y había tranjeros Y hombres de baja calidad Y, sido dotado de armas más pesadas, ta- en consecuencia, perdieron eficiencia, les como cañones de asalto blindados, de manera que SU misión fue confiada a que le ayudaron a combatir para conse- las divisiones Panzer. Asi, la creación de guir información; en ultima instancia, varios corps d'élite competitivos privó esta unidad defendía la ünea cuando no al resto del ejercito de SU esencial CUa- se podía prescindir de ninguna otra. LOS dro de mandos y hombres clave, con el dos regimientos de granaderos Panzer resultado adverso que era de esperar. transportaban ahora la mitad de sus En realidad, no sólo entraron extranje- efectivos en semi - orugas blindados y el ros en la fuerza Panzer, sino también en resto en camiones (que les permitían en- algunas formaciones de la ~ a f f e n - SS. trar en el punto álgido). Contaban tam- La producción de carros continuó me-

Page 66: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

1 11 en la parte que cubna la costa desde enemigo, Rommel deseaba colocarlas

!MmMM creencia aue la guerra estaba i~erdida y lo largo de las defensas de cara al mar.

I dispuesta para su empleo concentrado consiguiese hacerse fÜeite en ningún contra cada desembarco aliado), en con- wunto de desembarco. Con este wensa-

I ! 1 sue teda en la potencia intrinseca de pleo final de la divisiones Panzer: las formaciones acorazadas cuando se Rundstedt cedió su reserva central, per-

Page 67: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 68: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

l

mandfa fuera un simulacro y el esfuekzo aparecieron en el frente tras los ataques carga hueca, cobraron un alto precio en principales bataiiias de unidades acora- principal se produjera en otra parte. Las aliados. El contraataque alemán fue blindados por ambos bandos. Tambien zadas debfan tener lugar en el espacio Órdenes posteriores para enviar refuer- confiado al Grupo Panzer del Oeste; su los cañones de asalto contribuyeron a la abierto al Sur de Caen, y puesto que zos fueron tardías, ya que el movimiento jefe, el general Geyr von Schweppen- defensa con la misma eficacia que lo hi- esos principios hacían preceptivo el que sólo podía hacerse durante las cortas burg, había adquirido su experiencia en cieran cerca de Smolensko y Leningra- los jefes de las divisiones Panzer previ- noches de verano, y en forma de tortuo- el frente ruso, donde la potencia at2rea do, y las minas dificultaron igualmente nieran y plantearan todo contra toda sa procesión por los miles de rodeos im- desempeñaba un papel importante, las operaciones durante casi dos meses eventualidad, los alemanes previnieron puestos por la destrucción de puentes y pero no dominante. Así, no sólo no en- de salvajes combates a corta distancia. Y ensayaron las contramedidas adecua- el bloqueo de las carreteras. mascaró su cuartel general sino que C1 y En este período los aliados consiguieron das Para el caso de un ataque aliado ha-

su estado mayor salieron frecuentemen- aumentar sus fuerzas más rápidamente tia Falaise. Asi, cuando los británicos Pero volvamos a los días que sigule- te con sus resplandecientes uniformes a que los alemanes, pero en el boscaje, lanzaron un golpe contra Caen el 18 de

ron al 6 de junio. La 21 Divlsión Panzer observar cómo efectuaban sus misiones donde la concentración de los contrin- julio un terrorífico bombardeo aereo, la se vio inmediatamente envuelta en un los bombarderos aliados; bien pronto cantes rara vez presentaba un frente única sorpresa que sufrieron los dema- combate ofensivo, ya que eran las úni- descubrieron que el blanco era ellos vulnerable, los ataques eran frontales, la nes fue la de la escala a que se ejecutó. cas tropas capaces de salvar Caen. Gran mismos. Los siguientes ataques casi defensa se mantenía firme y la mayor Como sostuvieron la línea, el ataque parte de su infantería había sido des- destruyeron el cuartel general. Y lo que potencia de fuego y superior blindaje de preliminar se malgastó en gran parte en truida en la costa, y los refuerzos sólo es peor, quitaron toda su efervescencia sus vehiculos acorazados daban a los un terreno vacío. Despues, cuando tres podnan llegar a traves del Sena desde a la contraofensiva de Rommel. alemanes cierta ventaja en sus encuen- divisiones acorazadas británicas se lan- el Paso de Caiais. La 12 División de la tros. Los carros Sherman aliados, aun zaron hacia Falaise a traves de la zona SS (Hitler Jugend) acudió rápidamente, Despues, las divisiones Panzer llega- con el cañón norteamericano de 76 mm bombardeada, fue para encontrarse ba- pero se quedó sin combustible, en tanto ron a Nosmandía una a una y pauiatina- de que iban dotados, no podían enfren- tidas a larga distancia por los cañones que la Panzer Lehr (una división muy mente desde todos los rincones de Euro- tarse con los Panther y Tiger. Sólo el de tres divisiones Panzer reforzadas con reforzada, formada por unidades de ins- pa; y una a una tuvieron que intervenir Sherman británico modificado con un una mezcla de Tiger y cañones de asalto truccidn trasladadas de Alemania, con para defender la línea, incluso entre la cañón de 17 libras se aproximaba a la que habían avanzado tranquilamente casi todos sus granaderos transportados espesura del temido boscaje, donde Un 4 potencia de perforación de los cañones hasta posiciones de desenfilada previs- er, semi - orugas blindados) no llegó has- arma contracarro de corto alcance po- alemanes de 75 y 88 mm. Los alíados tas en las elevaciones del Sur. El núme- ta el día 9. Hasta el 10 no pudo concen- día abatir un blindado con la mima fa- sólo eran superiores en número, aunque ro de carros británicos destruidos pasó trarse un adecuado escalón de ataque al cilidad que un cañón de largo alcance y en valor y destreza poca era la diferen- de los 200; el de los Panzer perdidos fue Sur de Caen; y aun entonces hubo que alta velocidad. Las pequeñas armas cia entre los dos tenaces oponentes. escaso en una batalla en la que comba- enviar constantemente elementos des- contracarro de infantería de tipo bazoo- tieron a larga distancia sin exponerse al tacados para reforzar las mietas que ka, cargadas con cabezas de combate de Según los 'principales tácticos, las fuego enemigo.

Page 69: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

A pesar de su superioridad tecnica, los alemanes envidiaban la ventaja numéri- ca de los aliados y veían con disgusto que, mientras ellos sólo podían aportar cañones de asalto para apoyar su infan- tería, los aliados se permitlan el empleo de carros en su plena capacidad ofensi- va. Mucho se ha hablado por los erudi- tos sobre la prodigalidad con que tanto los norteamericanos como los británicos tendían a emplear los carros en apoyo de la infantería y en la explotación; en realidad, los alemanes, de quienes se dice que rehuyeron este sistema, lo lle- varon a cabo en forma de un apoyo de cañones de asalto, y por eso mismo de forma ineficaz.

La estretegia aliada de los generales Eisenhower y Montogomery buscaba engañar a los blindados alemanes y mantenerlos en la vecindad de Caen mientras los norteamericanos irrumpían por la parte Oeste de la cabeza de playa desde St. Ló. Pero como ya hemos visto, las divisiones Panzer deseaban estar cerca de Caen; sólo se vieron compro- metidas en el boscaje en el frente nor- teamericano cuando, al ser desgastadas en el choque las formaciones de infante- ría, tuvieron que ocupar su lugar en la

línea. Por eso, cuando los norteamerica- nos irrumpieron el 25 de julio fue para enfrentar a unas cuantas divisiones de infantería medio destruidas y un par de divisiones Panzer faltas de efectivos que combatían en un terreno contrario al re- auerido.

Desgraciadamente, por todos los ele- mentos de las Fuerzas Armadas alema- nas, la atmósfera que empezaba a crear- se alrededor de sus altos mandos soca- vaba todo vestigio de confianza. El 20 de julio fracasó un intentó de asesinar a Hitler -el célebre .complot de la bomba.-. La Batalla de Normandía lle- gó a su clímax contra el fondo de una persecución que minaba el criterio de todos los miembros del Estado Mayor alemán, estuvieran envueltos o no en el complot. Rommel lo había estado, pero fue gravemente herido por un ataque aereo el 17 de julio y eliminado de la es- tructura del mando en un momento crí- tico en todos conceptos. Desde el 20 de julio, ningún jefe, ni siquiera los favori- tos de la SS, se atrevieron a resistir la voluntad de Hitler, ya que al hacerlo se exponían a una mala interpretación y a su consecutiva y rápida desaparición. No obstantq, la jefatura en el Oeste ya

había sufrido un cambio. Destituido Rundstedt y herido Rommel antes del complot, el mariscal de campo von Klu- ge desempeñaba ambas vacantes. Pero su asociación con los conspiradores le dejaba expuesto al castigo de Hitler, for- zándole a afrontar la crisis del campo de batalla con un sentido de condena per- sonal que afectaba a todas sus decisio- nes.

Como era de esperar, los norteameri- canos atacaron cerca de St. Ló tras una pulverizadora alfombra de bombas. Des- graciadamente para la Panzer Lehr, que defendía esa parte del frente, el terreno

l bombardeado coincidía prácticamente con sus límites divisionarios, por lo que lo poco de la división que pudo escapar al impacto no sobrevivió en condiciones de enfrentarse con el implacable avance que siguió. El combate se hizo encarni- zado en la cabeza de playa. Cuando los canadienses intentaron un ataque recí-

? proco hacia Falaise fueron rechazados con la misma eficacia con que lo habían sido los británicos una semana antes en ese mismo terreno; de esta forma, varias divisiones Panzer pudieron ser traslada- das para actuar contra el avance norte- americano al Oeste. El 30 de julio el lento

progreso norteamericano se aceleró al - aproximarse a Avranches, desde donde

podían girar hacia el Oeste, a Bretaña, o hacia el Este, al interior de Francia. Los contraataques de dos divisiones Panzer contra sus flancos habían sido rechazados sin problemas por la senci- lla razón de que los golpes habían cons- tituido una obvia contramedida aplica- da a un enemigo que estaba preparado y nada diluido. De esta forma, la pri- mera acción falló por prematura. El 30, el centro de gravedad de la batalla avanzó un paso más hacia el Oeste cuando la infantería y blindados britá- nicos se armonizaron con el flanco iz- quierdo norteamericano atacando cerca de Caumont en dirección a Vire; su ac- ción coincidió con el movimiento de tres divisiones Panzer de Kluge (la 9.a y 10.a de la SS y la 21 Panzer) al Ocste de Caen para, con un gran esfuerzo, am- putar el brazo norteamericano antes de que se alargase desde Avranches.

Vire era un centro de comunicaciones y el punto de reunión del trío de divisio- nes Panzer. Pero tanto británicos como norteamericanos progresaron con tal ra- pidez hacia el que se interpusieron entre el ataque alemán y su objetivo. De esta

Page 70: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

l I l

forma, al ampliarse el frente, las tres di- explosiones cercanas eran más que la retirada continuó más allá de Roma, vaba todas las cartas en la mano. La visiones Panzer tuvieron que ser desvia- suficiente para destruir el transporte li- y en Rusia habían acaecido gigantescas Wehrmarcht dejó de esgrimir el poder y

N das para recomponer una línea desmo- gero, y el severo precio de camiones in- calamidades. Los rusos, tras cancelar su su jefe de Estado Mayor apenas hacía ronada en lugar de ejecutar un sangrien- cendiados que bloqueaban cada 1 ofensiva de verano hasta el 22 de julio, otra cosa que dirigir el frente ruso, fre- to contragolpe. 1 habían lanzado un vasto ataque irrum- nado por el veto de Hitier. Los generales impon(a serias restricciones en de& piendo en las defensas alemanas desde de la SS adquirieron aún mayor poder; A partir del 1 de agosto, el avance nor- pliegue de los gnipos tácticos. El 7 de

i 1 teamericano más alla de Avranches no agosto, el contraataque se había deteni- Mozbir y Vitebsk hasta los pantanos del y por cierto que probaron su valía, por-

1 tuvo limitaciones cuando giró hacia el do al límite de sus posibilidades. Pripet, avanzando hacia Varsovia. Al que ellos mejor que nadie combinaban 1 hacerlo, agrandaron la brecha hasta tal la pericia con la confianza de Wltier y I Oeste, entró en Bretaña, al Sur del Loira Los alemanes C~mbatieron con todas 1 punto que, al parecer, nada podría blo. evadir con más facuidad más , y. con gran peligro para los alemanes, sus fuerzas entre Caen Y Falaise, Y la fa- I

rodeó caen dirigiendose hacia Le Mans. nática y magistral resistencia de los jó- quear sus interminables oleadas. Inevi- heterodoxas órdenes. De esta forma, los

1 ~l 2 de agosto nada pudo ayudar al in- venes muchachos de la 12 División Pan- tablemente tambien, las perdidas ale- días en que a un jefe como el del 1 Cuer-

, , tento alem&n de abrirse paso hasta zer de la SS en aquel sector durante la manas fueron muy grandes, especial- po de Ejercito Panzer de la SS (Sepp Avranches; la ruptura norteamericana primera quincena de agosto fue legen- mente entre las formaciones que queda- Dietrich) se le podia negar el mando de

$ había alcanzado tal extensión que ame- daria. Pero nada pudieron hacer para ron detrás de la acometida. Tambien una importante operación (Rundstedt y

centración. De las ocho divisiones Pan- zer escogidas al principio, sólo cuatro entraron en acción, consiguieron una penetración inicial cerca de Mortain y fueron detenidas por continuos ataques aereos y por la tenaz defensa de los sol- dados norteamericanos, que combatían en posiciones defensivas naturales. Cualquier movimiento durante el día atraía a la aviación: se hizo un empleo masivo de cohetes lanzados por los avio- nes británicos, que a los soldados ale- manes no les gustaron al principio, pero que con el tiempo aprendieron a desde- ñar, al comprobar que apenas conse- guían un impacto directo. Con todo, las

detener la riada de blindados norteame- ricanos que amenazaban su flanco meri- dional presionados por el general Pat- ton. El 8 de agosto las divisiones Panzer estaban impotentes y expuestas en Mor- tain. El sentido común exigía retirarlas de Normandía para efectuar una acción retardatriz hacia el Sena y, si era preci- so, hacia el Somme. Pero Hitler dijo «no>> de manera irrevocable, y dejó que se pusieran a cubierto entre el boscaje para esperar su inevitable destrucción.

Desastres de terrible magnitud se equfparaban por todas partes al de- rrumbamiento de Normandía. En Italia

aquí los efectos del complot de la bom- "a afectaron a las decisiones estratégi-

cas y tácticas. La inflexible prohibición de retirarse hizo que cada vez quedasen más presas alemanas para alimentar al enemigo. Y como consecuencia de los relevos en el mando que siguieron a los acontecimientos del 20 de julio, el gene-

; ral Guderian se encontró elevado al puesto de jede del Estado Mayor: un apropiado climax, sobre el papel, para el hombre a quien tanto debía la fuerza Panzer.

Pero el título de Guderian no conser- vaba su gloria anterior. Hitler se reser-

Rommel preñrieron emplear el Cuartel General del Grupo Panzer Oeste de

1 Schweppenburg el 10 de junio en Nor- mandía) habían pasado para siempre. Hombres toscos y duros sustituyeron a los de la vieja escuela más refinados, y la presencia del brillante y emprendedor mariscal de campo Model (uno de los fa- voritos de Hitler) para reeemplazar al desacreditado KIuge en Francia actuó como una especie de contrapeso del nombramiento del ceñudo y orgulloso Guderian en Rusia.

Pero aunque ambos, en cierto modo, obraron milagros y sacaron partido a to-

Page 71: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 72: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

tración de nuevas reservas , ya que las zonas de deseens

ron con las de reunión para taque alemán hacia el Ruhr.

Las tropas aerotransportadas S muy vulnerables mientras toman tierr

Page 73: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 74: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 75: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 76: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 77: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

principios polfticos, ponía de manifiesto el error de su plan inicial.

El resultado no se hizo esperar. Die- trichsiguió atascado y Manteuffel no al- canzó el Mosa a causa de la escasez de+ abastecimientos, agravada por el blo- queo de su vía principal de suministro en Sastogne, donde los norteamerica- nos se negaban a rendirse. Los estrechos caminos ae las Ardenas estrangulaban el suministro de combustible de las di- visiones Panzer y circunscribian la li- bertad de maniobra. El 18 de dickm- bre, cuando se detuvo Dietrieh, tanto Rundstedt como Model se dieron cuen- ta que la ofensiva habia fracasado y po- co despues pidieron a Hitler que au- torizase la retirada al punto de partida mientras la sagrada reserva central per-

151

Page 78: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer

manecfa intacta. Pero Hitler -como era pero no para defender la capital o con- wald. Más al Sur los norteamericanos una ironía del destino, los últimos ata- de esperar- se negó a devolver lo que traatacar las principales cabezas de ata- cortaron lo que quedaba del Saliente de ques Panzer pasaron casi inadvertidas habla conquistado. Si no era posible que rusas que se acercaban a la línea las Ardenas y se prepararon para unirse nnrn 8 1 1 ~ nnnnentoc

avanzar tampoco, habría retroceso. Su del Oder, sino para enviarlo a Hungría 1 con los brithnicos y aplastar a quienes De esta forma agonizaron en el Oeste petulancia era la de un padre que, ha- como parte de un incongruente plan de 1 habían recibido órdenes de defender las divisic -

I biendo faiiado en formar a su hijo se- liberar Budapest e intentar apoderarse , giin su propia imagen, se goza en inflin- de unos cuantos campos petroiíferos de

cada pslmo de 'lernán al Oeste limpia la orilla occidental del Rhin, 10s 1 , 1 del Rhin. Una profunda avenida a lo lar- norteamericanos avar / , gir un cast~go. menor im~ortancia. Así, mientras la re- no del frente cerca de Roermond i m ~ i - ,--- A-._., . .

y nes muy superiores a sus fuerzas. n rinales ae enero ue i u r a ru urla v t +A-^ A^ AXI.ilr\n Air.ioirrr\nn Dn-"0,. "G

un; allá., en las Ardenas, la okensiva se las señales diarias de una gran ofensiva mas reservas habían sido trasladadas al bia terminado. había convertido en defensiva, sólo sal- se vieron confirmadas el 8 de febrero por Norte, dejándose así un vacío en el que picada con es~orádicos intentos de ~ e - un ataaue británico sobre la Línea Sig- ~enetraron los norteamericanos ciiando .--. .. -4- - - - - - - -- - .-- -. - queñas operadones en Alsacia y ~ o l h - frido que se inició -al Oeste de Cleve k avanzaron para unirse a los británicos; da. Ese día Hitler decidió trasladar al presionó en el suroeste del suelo empa- ninguna fuerza móvil de contraataque Este el Sexto Ejercito Pamzer de la SS, pado y los densos árboles del Reichs- significativa quedó para detenerlos. Por . .

Page 79: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 80: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 81: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 82: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer
Page 83: San Martin Libro Armas 16 Division Panzer