REVISTA DIEZ, NÚMERO 96

Entrevista con:

Juan Carlos Rojas

Periodista - Identidad Política

Entrevistadora:

Patricia Espinosa V.

CASA DE CITAS

de Héctor Cortés Mandujano

―...cada sesión de La Cámara le

cuesta al país más de

veinticinco millones de

pesos…‖

ÓPERA BUFFA

Autor: Enrique Robles Solís

ARY

Chica de Diez

Juan Carlos y Jorge Rojas

DIEZ - REVISTA DIGITAL– La revista que habla de vos.

Contenido

3.– CHICA DE DIEZ: ARY

4- EDITORIAL:

El 7 en Comitán.

5.– ZAGUÁN:

ARENILLA: Agua pasa por mi casa.

7.– PATIO:

Galería: Fotos de la quincena.

14.– BALCONES:

Casa de Citas

Sangre, bilis y luz.

Autor: Héctor Cortés Mandujano.

23.– CORREDORES:

Ópera Buffa

Autor: Enrique Robles Solís.

26.– SITIO:

ENTREVISTA:

Con Carlos Rojas Irecta.

Periodista - Identidad Política.

Entrevistadora: Dora Patricia Espinosa V.

33.– ACTUALIDADES.

35.– MOJOL.

Sapito

37.– CHICA DE DIEZ: ARY

Revista catorcenal, hecha en la tierra de los cositías con

la bendición de Tata Lampo.

Editor responsable: Alejandro Benito Molinari Torres

Contacto: [email protected]

ARY


Comitán, ciudad que habla de vos

EL LUGAR IDEAL PARA DISFRUTAR LO MEJOR

DE LA VIDA

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LOS ROBLES CHUCUMALTIC

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Comitán, como todo México, acude al panteón el Día de Muertos; pero,

además, acude el 7 de octubre. En este día se conmemora el aniversario del fa-

llecimiento de dos figuras relevantes de la historia del pueblo: Belisario Domín-

guez (1913) y Mariano N. Ruiz (1945).

¿Para qué se conmemoran dichos aniversarios? Tal vez para decir al mun-

do que los actos heroicos y los actos sublimes son los que dignifican a la huma-

nidad. A Comitán le tocó la honra de cobijar a los espíritus de Belisario y de

Mariano y éstos simplemente cumplieron con su deber de ciudadanos. En espa-

cios que parecieran extremos: la política y la ciencia, el destino se encargó de

unirlos en el mismo destino. La coincidencia del fallecimiento en el mismo día

permite que el pueblo –al lado de sus autoridades o viceversa– acuda a honrar-

los y ―revive dos pájaros de una sola visita‖; porque los hombres que trascien-

den en vida ¡tienen alas!

A las aparentes antípodas las unió el azar y éste nos demuestra que ningún

oficio o profesión está desligado de otro, en el instante que lo importante es el

hombre y la patria. Ambos conceptos son tan etéreos, pero, a fin de cuentas, son

los que nos hablan de la importancia de estar en este mundo.


Mi casa tiene un patio con flores y

pájaros; siempre tiene la puerta

abierta; mucha gente se asoma y en-

tra.

Mi casa es un árbol. Agua lim-

pia pasa por mi casa, palabra de mi

corazón.

A mi casa llegan las aves más

bellas de Chiapas y comparten su

canto con todos los chiquitíos que en

el patio juegan.

A esta casa, de puertas y venta-

nas abiertas, llegó Héctor Cortés

Mandujano y desplegó su talento,

como el cenzontle se abre al canto o

el águila al vuelo.

¿Cómo se escribe un cuento? No

hay recetas; no obstante, Héctor

abrió un libro y, como si jugara ra-

yuela, nos enseñó que para llegar al

Cielo antes debemos brincar al casi-

llero uno y luego al dos y luego al

tres y así hasta aprender a contar

números o contar historias; porque

a final de cuentas el chiste de la vida

consiste en contar: los años que te-

nemos, los días que hemos vivido,

los amores que hemos tenido, las

caídas que hemos sufrido, los sueños

que hemos cincelado, los cuentos

que nunca hemos contado.

Mi casa tiene cielos y de ahí ba-

jan papalotes con lastres de nubes;

mi casa es la casa de todos y todos

llegan a compartir su luz para exor-

cizar las sombras.

¿Por qué son tan generosos los

que llegan a mi casa? Tal vez porque

mi casa también es la casa de

ellos.



Las cajitas de Molinari





¡Terminen de calentar,

porque ya el árbitro las

llamará para el inicio

del partido!



No lo sabía, es que no soy tan sabia como vos.



Ojalá el

Señor Gobernador

los apoye, también,

para un

cursito de

ortografía.



¡Ay, Tali, es que sos el pilar de mi existencia!



Y a la hora de contratar ¿podemos decir: Que Dios se los pague?


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por decir lo que no debía lo vuelven cie-

go y luego adivino…

Virginia Woolf usó la historia de Ti-

resias para escribir su Orlando (1928),

que muchos años después (1993) Sally

Potter llevó a la pantalla con el mismo

título. También Tiresias tiene su refor-

mulación en la película homónima de

Bertrand Bonello que, ya en la moderni-

dad (2003), hace de esta vieja referencia

humana-literaria un transexual.

(T. S. Eliot dice en La tierra baldía:

―Yo, Tiresias, aunque ciego, palpitando

entre dos vidas, anciano con arrugados

pechos femeninos‖.)

En la idea de la modificación de for-

mas, una de las que recuerdo con asom-

bro es la decisión de Buñuel de repre-

sentar a un mismo personaje (Conchita),

en la cinta Ese oscuro objeto del deseo

(1977), con dos actrices: una francesa

(Carole Bouquet) y otra española

(Ángela Molina). Como si los asuntos de

una persona, y la persona misma, fueran

intercambiables.

Más radical aún es Mi historia sin

mí (I’m Not There, 2007, dirigida por

Todd Haynes), una falsa crónica basada

en canciones y aspectos de la vida del

cantante y compositor Bob Dylan, donde

éste es representado por un niño negro,

Ovidio dedicó un volumen

(Metamorfosis, publicado originalmente

en la primera década de nuestra era) a

los cambios que hacen que un Dios o que

un humano se vuelvan otra cosa. Y están

allí las célebres trasformaciones de Zeus

(en toro, en cisne) para ayuntarse

sexualmente con Europa, con Leda; y

las de Filemón y Baucis que, para rena-

cer abrazados, se vuelven tilo y encina; y

la de Tiresias que de hombre se vuelve

mujer y, después, de nuevo hombre; y



una mujer y varios hombres de distintas

edades que coexisten, se supone, en todo

momento, con el único ser que les otorga

esta multiplicidad de identidades.

Oscar Wilde decía, cito de memoria,

que nunca se acuestan sólo dos en una

cama, aludiendo a que incluso en ese ac-

to íntimo estamos acompañados por las

ideas, mitos, traumas y reconvenciones

de nuestros padres (y después de nues-

tras sucesivas amantes); también dijo

Wilde: La mayoría de la gente es otra

gente. Nunca somos uno y eso responde

el diablo a Jesús (en los Evangelios) des-

de el cuerpo de un hombre poseído: Mi

nombre es Legión.

Virginia Woolf, en Las Olas

(Bruguera, 1980: 120) abunda: “Ya he

vivido mil vidas. Todos los días desentie-

rro. Cavo. Encuentro restos de mí mis-

mo en la arena hecha por mujeres hace

mil años, cuando oía canciones junto al

Nilo y la bestia encadenada pateaba‖;

insiste (p. 276): ―Y ahora pregunto:

‗¿Quién soy?‘ He hablado de Bernard,

Neville, Jimmy, Susan, Rhoda y Louis.

¿Seré acaso todos ellos a la vez? ¿Soy

uno y distinto? No lo sé. Aquí estamos

sentados, juntos. Pero Percival ha muer-

to, y Rhoda ha muerto; estamos dividi-

dos; no estamos aquí. Sin embargo, no

veo obstáculo alguno que nos separe. No

hay división entre ellos y yo. Mientras

hablaba, pensaba: ‗Soy tú‘ ‖.

Y como siempre que hablo de nues-

tra multitud interna, no olvido los ma-

gistrales versos de Pessoa (a través de su

heterónimo Álvaro de Campos) en ―El

paso de las horas‖, traducción de Mario

Bojórquez: ―Sentir todo de todas las ma-

neras,/ Vivir todo de todos los lados,/ Ser

la misma cosa de todos los modos posi-

bles al mismo tiempo,/ Realizar en mí



toda la humanidad de todos los momen-

tos.

―[…] Cometí todos los crímenes,/

Viví dentro de todos los crímenes/ (Yo

mismo fui, ni uno ni otro en el vicio,/ Si-

no el propio vicio en persona practicado

entre ellos,/ Y esas son las horas más Ar-

co del Triunfo de mi vida).

―Me multipliqué para sentirme,/

Para sentirme, necesité sentir todo,/ Me

transbordé, no hice sino extravasarme,/

Me desnudé, me entregué,/ Y hay en ca-

da rincón de mi alma un altar a un Dios

diferente.

―[…] En mi boca fueron dados los

besos de todos los encuentros,/ Se agita-

ron en mi corazón los pañuelos de todas

las despedidas,/ Todas las señas obscenas

de gestos y miradas/ Me golpean de lle-

no en todo el cuerpo, especialmente en

los centros sexuales.

―Fui todos los ascetas, todos los

marginados, todos los como que olvida-

dos,/ Y todos los pederastas —

absolutamente todos (no faltó ningu-

no).‖

En El libro del desasosiego (Emecé

editores, 2000: 379), de nuevo Pessoa, es-

ta vez con el heterónimo de Bernardo

Soares, dice: ―Cada uno de nosotros es

una sociedad entera, un barrio íntegro

del Misterio; conviene por eso que al

menos hagamos, de la vida de ese ba-

rrio, algo elegante y distinguido […] En

torno a nosotros podrán otras almas al-

zar sus barros tristes y míseros; delimi-

temos nítidamente dónde acaba el nues-

tro‖.

***

En el ensayo ―Ver dos veces: el entusias-



mo y la duda en Árbol adentro‖, de

Víctor Manuel Mendiola, contenido en

Festejo: 80 años de Octavio Paz (Tucán

de Virginia, 1994), habla de la concep-

ción del tiempo en Paz (p. 70):

―comprende que la idea seductora de un

pasado perfecto es apasionante, pero im-

posible. Todo lo vivimos en el presente.

Pero ese presente no es una historia, sino

muchas historias, no un espacio, sino

muchos espacios, no una luz, sino mu-

chas luces. La simultaneidad de las co-

sas no es una idea, sino nuestra forma

de ser‖.

Danubio Torres Fierro, en

―Itinerario de Octavio Paz‖, en el mis-

mo volumen, cita que en una entrevista

que le concedió (p. 106) ―Paz reconocía

que él ha sido ‗un escritor incómodo pa-

ra buena parte de la clase intelectual

mexicana‘. Y añadía que ‗la verdad es

que no me desagrada, lo confieso, ser in-

cómodo. Un escritor debe serlo siempre,

sobre todo frente a sí mismo y su obra.

Casi todas las obras que cuentan han si-

do hechas frente e incluso contra la ma-

yoría de los gustos, la moral y las opinio-

nes del público‘ ‖.

Dice el gran Guillermo Cabrera In-

fante sobre Paz en la entrevista de Ned-

da G. de Anhalt le hace en Rojo y naran-

ja sobre rojo (Editorial Vuelta, 1991: 28):

―Es el único mantenedor de la literatura

humanista, no sólo en México sino en to-

das partes. No conozco otro caso igual.

[…] Él solo, ahora, justifica la literatura

de México‖.

***

En 1964, el Fondo de Cultura Económi-

ca publicó un volumen que llamó Tres

libros de Julio Torri (“Ensayos y poe-

mas‖, ―De fusilamientos‖ y ―Prosas dis-

persas‖) que en 180 páginas compilan la

breve obra del maestro nacido en Salti-

llo, Coahuila, que vivió de 1889 a 1970.

Hay muchas brevedades, casi aforis-

mos, sobre las cuales detenerse, insertas

en sus textos regularmente reflexivos (p.



82): “Un paisaje del cual se sale, en que

todo se empequeñece y se pierde. Eso es

la vida‖.

―Nada tan difícil como destruir una

falsa opinión ajena sobre nosotros. (…)

Ante la maledicencia estamos totalmente

indefensos‖ (p. 87).

Aquí habla de una mujer mayor, de

―decadente encanto‖ pero muy bien ves-

tida (p. 106): ―Era una ruina hermosa-

mente conservada como esas piedras ve-

tustas que la solicitud municipal rodea

de amenos prados‖.

Yo he repetido, porque así me lo

habían contado, que lo que sigue era au-

toría de un historiador famoso. Aquí me

aclaro (p. 117): ―El notable periodista

don Luis Lara Pardo solía decir que las

mujeres ganan las discusiones con tres

argumentos únicamente: sí porque sí; no

porque no; y sí pero no‖.

―Bajo cualquier moda se descubre

al hombre de genio‖ (p. 122).

Dos consejos que, por lo menos a mí,

me vienen bien (p. 126): ―No pierdas de

vista tus ideas fijas. Mantente alerta

porque son la puerta que da a la locura‖

y ―El escritor ha de tener a su servicio

una firme voluntad; siempre ha de estar

dispuesto a escribir‖.

Cita algunos pensamientos de Car-

los Díaz Dufoo, hijo (p. 161): ―De los li-

bros valen los escritos con sangre, los es-

critos con bilis y los escritos con luz‖.

Sobre Alfonso Reyes cuenta una

anécdota (p. 163): ―De sobremesa, cierta

vez Alfonso me aconsejó que escribiera

mis memorias; y añadió: ‗Yo llevo ya es-

critos dos tomos de las mías, y todavía

no nazco‘ ‖.

***


Leí hace mucho la novela El callejón de

los milagros (1966), del Premio Nobel de

Literatura 1988, Naguib Mahfouz; vi la

cinta homónima (1994), dirigida por

Jorge Fons; y ahora leo el guión cinema-

tográfico (Ediciones El Milagro, 1997)

escrito por Vicente Leñero.

Me llamaron la atención varias co-

sas. La primera, una especie de guiño a

La ópera de cuatro cuartos, de Brecht, en

la escuela de limosneros que dirigen y

explotan Zacarías y el Doc Beltrán. Un

anciano dice, mientras paga (p. 106):

―ANCIANO: Los días están muy

malos, patrón.

―ZACARÍAS: Pues a ver qué inven-

ta pa‘ dar lástima, abuelo. Hágase una

cicatriz o sáquese un ojo.‖

Una amiga me hizo una mención so-

bre la ―señora Santa Ana‖. Ante mi du-

da, me dijo que era algo así como la

abuelita de Jesucristo. Encuentro aquí

lo que ella me explicó (p. 139): ―Doña

Cata ha terminado de preparar una

pócima para Susanita, que la mira con

recelo:

―DOÑA CATA: No falla… Dicen

que con esta pócima se embarazó nues-

tra señora Santa Ana, cuando ya era

muy viejita.

―SUSANITA: ¿Quién?

―DOÑA CATA: Nuestra señora San-

ta Ana… La mamá de la Virgen santísi-

ma.‖

Lo otro llamativo en todo el guión es

su insistencia en ridiculizar a los poetas

y a los poemas. Tres botones de muestra.

Uno. En la cantina de don Ru, Ubaldo

dice un poema mientras juegan dominó

(p. 19):

―DON FIDEL: Déjate de pendeja-

das y fíjate, Ubaldo, carajo.

―UBALDO: No son pendejadas, es

Amado Nervo.

―ZACARÍAS: (Riendo socarrón.)

Amado Nervio el mío, cabrones.‖

Dos. De nuevo Ubaldo dice un poe-

ma, mientras pone la mula (p. 67):

―UBALDO: Si tu me dices ven, lo

dejo todo.

―No volveré siquiera la mi-

rada

―para mirar a la mujer

amada.

―Pero dímelo fuerte, de tal

modo…

―ZACARÍAS: (Interrumpe lépero.)

¡Que te meta la espada!‖

Tres. Ubaldo recita a Amado Nervo

y concluye (p. 84): ―Oh padre de los vi-

vos, ¿a dónde van los muertos? ¿A

dónde van los muertos, Señor, a dónde

van?

―ZACARÍAS: A la chingada, a

dónde ha de ser.‖





http://issuu.com/revista10/docs/yo_tambi_n_me_llamo_vincent_-_novela__breve.




Jack Nakash, es hijo de inmigrantes árabe-judíos y nació en 1941 en el barrio

de La Lagunilla, en el Distrito Federal, es un fecundo promotor de la gastro-

nomía mexicana y un exitoso empresario en el ámbito restaurantero como pro-

pietario de dos excelentes restaurantes: ―Villa María‖ y ―Giacovanni‖, que

cuentan con un número importante de sucursales, diseminadas en todo el Dis-

trito Federal. Precisamente este personaje, publicó un libro (Alco Editorial),

denominado: ―Una sonrisa por favor…‖, en el que concentra chistes, formas

de expresarse y refranes de los mexicanos, en diferentes tópicos y en la página

190 se lee un refrán de los mexicanos que dice: “¿Lo contrario de progreso?...

El Congreso.‖

María Amparo Casar Pérez, publicó recientemente una investigación por

demás interesante y reveladora a la que denominó: ―¿Cómo y cuánto gasta la

Cámara de Diputados?‖, en la que, entre otras cosas, nos hace saber

que los 500 diputados que integran la Cámara de Diputados del

País, ganan aproximadamente 218 mil pesos

mensuales y no pagan impuestos y que ca-

da sesión de la Cámara, le cuesta al

país más de 25 millones de pesos.

Sí es correcto, ¡son veinticinco

millones de pesos y es por cada

sesión ¡

La Constitución General de la

República, misma a la que los di-

putados le deben respeto, les guste

o no, determina que un año antes

del periodo electoral, el Instituto

Federal Electoral debe estar debi-

damente integrado, de donde re-

sulta que desde el mes de octubre

del año 2010, los diputados debie-

ron haber elegido a 3 integrantes

del Instituto para que funcio-

ne debidamente ante el pro-

ceso electoral que se aveci-


na, que sin duda, definirá el rumbo el país. En la reciente sesión del 7 de octubre de

este año, los diputados debieron haber elegido a los 3 integrantes electorales que fal-

tan, lo que no sucedió porque, evidentemente, los diputados no se pusieron de

acuerdo y el famoso Instituto quedó de nuevo incompleto a pesar que, precisamente

los diputados, son los responsables por mandato supremo, que ese Instituto esté de-

bidamente integrado.

Los diputados, a pesar de ser su obligación, no se pusieron de acuerdo porque,

desde luego, no tienen convicción por las causas del país, no tienen compromiso por

México, no tienen interés en la sociedad, ellos se preocupan por el posicionamiento

en el poder de su partido y por sus intereses personales y nada más. El país no im-

porta, total ¡lo soporta todo!

La Ópera Buffa conocida también como ―Dramma giocoso per música‖, es

una ópera con un tema cómico, se desarrolló en Nápoles en la primera mitad del si-

glo XVIII y su contraparte estilística es la ópera seria. Algunas de las característi-

cas de este género son: recitativos (partes habladas) más extensos y para hacerlos

más inteligibles, escritos en la lengua del pueblo, temas cotidianos o superficiales, y

en algunos casos, uso de personajes muy conocidos, como lo de la comedia del arte

italiana.

Esta ópera ha caído en desuso después del siglo XIX, quedando en el recuerdo

―El Barbero de Sevilla‖ de Rossini y las ―Bodas de Fígaro‖ de Mozart, como las

más representativas.

El día 7 del presente mes, se celebró en el seno de la cámara de

diputados, una sesión de veinticinco millones de pesos de costo, que

serviría para designar a los consejeros faltantes. Los diputados de

todos los partidos políticos, unos contra otros, se dijeron de todo. Se

ofendieron, se retaron, se agredieron verbalmente, usaron lenguaje

común, lejos muy lejos de la elocuencia parlamentaria que de-

ben de tener, demostraron su interés personal y el de su

partido y finalmente no designaron a los consejeros

que aún no integran el Instituto Federal Electoral, ese

día, a un costo altísimo para el País y para todos los

mexicanos, se desarrolló una ópera bufa con todas sus

características, una ópera que, acorde con el lenguaje

primigenio de este género, se denomina ―La Vergoña‖.




Vivimos en una sociedad de constante mo-

vimiento y todo lo que se mueve genera

opinión, comentario, crítica. Don Carlos

Rojas es un hombre con gran experiencia

en la redacción de artículos de opinión; ac-

tualmente colabora en “Nuestro Diario” y

“Chiapas Hoy”, además de estar muy com-

prometido con el periodismo digital a

través de su blog. Con una sonrisa y gran

humildad respondió las siguientes pregun-

tas:

¿Desde cuándo y por qué se dedica al pe-

riodismo?

Fue a raíz del 94; Chiapas estaba

muy convulsionado, muy efervescente

con el levantamiento armado. Yo creo

que a todos nos envolvió ese movimiento

porque de alguna forma tenias que estar

de un lado cuando menos. Había la ne-

cesidad de crear medios de difusión por-

que el gobierno no permitía que las or-

ganizaciones sociales se manifestaran en

todo su esplendor, había mucho veto,

estábamos muy censurados. Yo comencé

hacer algunos panfletos tratando de di-

fundir las actividades que se estaban

realizando. Era tanta la pasión por es-

cribir en esos momentos que se necesitó

también gente que reporteara aquí en la

región y pues ahí yo tome el espacio, en

ese momento empecé a escribir en el

Cuarto Poder y cuando vine a ver ya es-

taba inmerso en este oficio.

¿Antes del levantamiento del 94 ya tenía el

gusto por escribir?

Nunca pensé ejercer el periodismo.

Yo me enfoqué en una actividad comer-

cial. Muchos años antes ya se me había

dado por escribir algunos artículos. Du-

rante los ochentas y noventas escribía-


mos algo con Raúl Trujillo, le llamába-

mos la tijera porque tijereteábamos a to-

do mundo. En ese tiempo teníamos que

pegar las letras en una hoja y luego sa-

carle copias. Era muy difícil hacer el pe-

riodismo en ese tiempo porque aquí no

existían máquinas, todo tenía que hacer-

se de manera muy artesanal.

¿Identidad política es lo mismo que políti-

co con identidad?

Le puse Identidad Política por la

identidad que tenemos como sociedad,

tenemos un toque de lo que somos, de lo

que hacemos; en ese sentido la identidad

también se refleja en la política de la so-

ciedad en la que nos estamos desenvol-

viendo; la política tiene muchas aristas

y nuestra región tiene una identidad

política que es la que yo trato de expo-

ner y de dar a conocer.

¿Qué le falta al periodismo comiteco?

Le falta mucho profesionalismo y

ética. Al ir caminando en el ejercicio del

periodismo te das cuenta de que aquí y

en China el Estado impone, controla; el

Estado manipula, hace lo que quiere con

el periodismo. Hemos tenido algunas

discusiones con algunos compañeros

porque dicen ser periodistas puros, éti-

cos, y pues yo creo que en este mundo,

todos tenemos un poco de cada ingre-

diente; como en las tiendas que tiene

que haber de chile, de mole y de mante-

ca. De alguna forma hemos tratado de ir

sobrellevando el ejercicio hacia la pobla-

ción de una manera lo mas ética posible

porque a veces si escribes a favor de un

personaje se incomodan los otros y

cuando escribes a favor de los otros se

incomodan los otros.

¿Qué función cumplen las redes sociales

en Comitán?

En Comitán al igual que otros pun-

tos del planeta las Redes Sociales están

absorbiendo todos los ámbitos sociales.

Por ahí alguien decía que hay mucho fu-

turo para el periodismo pero no para los

periódicos porque las redes sociales

están avanzando; salvo contadas excep-

ciones, los jóvenes ya no leen los periódi-

cos, la mayoría está pegada a las redes.

En los teléfonos móviles de ahorita pue-

des ver videos, entrevistas, puedes che-

car los medios de todo el mundo; enton-

ces creo que por ahí las redes sociales en

Comitán están empezando a ser un refe-

rente de todo lo que se mueve porque en

las redes sociales no sólo hay periodismo

hay cuestiones comerciales, sociales, cul-

turales, deportes. Vienen arrastrando un

cambio dinámico nos están transfor-

mando como sociedad pero también vie-

ne el ingrediente negro y al final tú deci-

des que es bueno y es malo.

¿Durante sus años de labor periodística sus

publicaciones le han generado problemas?





Bastantes. En dos o tres ocasiones

recibí amenazas. Yo no sabía qué mag-

nitud, qué alcances tendría hablar con

cierta verdad algunas cosas y cuando

empecé a escribir con valor vi que las

cosas eran difíciles; no me amedrentó

¡seguí trabajando! Te soy sincero nunca

me ha gustado meterme en las cuestio-

nes personales es decir, con la familia;

eso tiene su límite, es una cosa muy pri-

vada y yo lo respeto. Somos periodistas,

pero también somos gente común, ciu-

dadanos que tenemos que respetar las

leyes y conducirnos con cabalidad.

Don Carlos asegura que en sus años de la-

bor periodística el mayor logro ha sido el

reconocimiento que le hacen sus lectores,

esta es su mayor satisfacción y agregó:

hay que seguir trabajando fuerte y bastante

en este oficio. Hay generaciones que vie-

nen agarrándonos a patadas -apúrate, por-

que ahí vamos nosotros- y son los que en

un momento dado van a ocupar estos espa-

cios, son la generación que nos va a rele-

var y deben prepararse porque les tocará

vivir un futuro muy intenso.



Estamos llenos de cultura.

¿Cuándo venís a Comitán a llenarte de luz?


Honorable Ayuntamiento

de Comitán

y

Universidad

Mariano N. Ruiz

¿Te gusta escribir? El Centro Comiteco de Creación Literaria es

¡para vos! Ser parte del Centro no tiene algún costo económico. Lo

auspicia el Honorable Ayuntamiento de Comitán 2011-2012.

Sesionamos los miércoles en la sede del Centro, frente al Santuario del

Niñito Fundador.



Programa del martes 11 de octubre de 2011.

Asistieron la maestra Dely Zepeda, doña Tony Carboney, la poeta Mirtha Luz

Pérez Robledo y María Elena Jiménez Guillén (Coordinadora del Consejo

Ciudadano de Cultura) para platicar acerca del contenido de los libros 3 y 4, de la

Colección Editorial ―La lectura más cerca de ti‖, que impulsa el H. Ayuntamiento

de Comitán 2011-2012.

La maestra Dely y doña Tony dieron sus testimonios de vida para conformar el

libro: Evocaciones. Mirtha Luz publica el poemario: Música para una infancia.

La presentación de los libros se realizó el viernes 14 de octubre en el Salón de

Actos del Centro Cultural Rosario Castellanos.

En la foto: María Elena y Mario Milton Domínguez

Doña Tony, la maestra Dely, Paty y Mirtha.



Con la presencia de autoridades de la Secretaría de Educación, Universidad de

Ciencias y Artes de Chiapas, Colegio Mexicano de Doctores y Maestros en

Educación, así como de la Universidad del Sur, se dio a conocer el programa del

Primer Encuentro Mundial por la Educación Superior del Siglo XXI.

El acto se celebró en el auditorio de la UNICACH. El Encuentro se realizará los

días 21 y 22 de octubre en el Polyforum Mesoamericano, de Tuxtla Gutiérrez.


Un sapo apareció en la puerta de la

sede del Centro Comiteco de Crea-

ción Literaria. ―Es por la hume-

dad‖, dijo Pedro. ―¿Y que tal que

es un príncipe?‖, dijo Paty. ―A ver,

¿por qué no lo besas?‖, dijo Jairo.

Todos rieron. El animal, motivo del

jolgorio, seguía sin hacerse a un la-

do. Samy tomó una vara y, con cui-

dado, lo azuzó. El sapo brincó y

bajó un escalón. Siguió brincando

y desapareció. El coordinador del

Centro sacó las llaves y abrió la

puerta. Todo mundo entró. Itzel

llegó cinco minutos tarde, se dis-

culpó, preguntó si podía leer su texto y todos rieron, dijeron que sí, que leyera.

Itzel sacó su texto y dijo que se llamaba: ―El sapito que se extravió‖. Todo

mundo hizo silencio.



Entrada libre



Desde ahora

preparamos el número

100

de la DIEZ.

Será un número en

homenaje a don

Ramiro Ruiz Alfonzo,

propietario de la

Proveedora Cultural

ARY

Chica de Diez

¿Comitán tiene

problemas

emocionales?

En el número 97:

entrevista con la

psicóloga

Martha Karina

Velázquez Hernández.

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REVISTA DIEZ, NÚMERO 96