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REFLEXIONES Frecuencias Sagradas Solfeggio y el ADN H.C. ELIAS

Reflexiones 3 frecuencias sagradas solfeggio y el adn

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Este documento muestra la manera en la que se obtienen de forma natural las llamadas frecuencias sagradas solfeggio directamente de la matriz de 64 celdas de donde se obtienen los aminoácidos utilizando una llave o código secreto descubierto por el autor.

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REFLEXIONES

Frecuencias Sagradas Solfeggio y el ADN

H.C. ELIAS

FRECUENCIAS SAGRADAS SOLFEGGIO

Y EL ADN

H.C. ELÍAS

Extracto del libro: “En el Nombre de HVHI” ©H.C. Elías Registro Indautor 03-2014-12183114500-01

Las Frecuencias Sagradas Solfeggio son los tonos vocales utilizados por los monjes de la

antigüedad y servían para sanar a la gente, la cual se reunía en el templo para experimentar

grandes cambios espirituales, expansión de la conciencia, sanación emocional y mejora física.

Antiguamente las misas eran cantadas en latín con estos tonos y la gente las denominaba misas de sanación.

Las frecuencias sonoras que en la edad media obtuvieron el adjetivo de Frecuencias Sagradas Solfeggio tienen relación con la Geometría Sagrada, y los números que las representan están vinculados matemáticamente formando una secuencia, como otras, muy importantes por el papel que juegan dentro de la construcción de lo que hemos llamado realidad, por ejemplo la secuencia Fibonacci.

Las antiguas Frecuencias Sagradas Solfeggio, son frecuencias que ayudan a realizar procesos de elevación de estados vibratorios para lograr una gran paz y alegría interior. Estas frecuencias de sonido originales fueron aparentemente utilizadas en los antiguos cantos Gregorianos, tales como el gran himno a San Juan el Bautista, junto con otros que las autoridades eclesiásticas dieron como perdidos hace siglos.

Las Frecuencias Sagradas Solfeggio que se consideran fundamentales son: 174Hz -285Hz -396Hz -417Hz- 528Hz - 639 Hz - 741 Hz -852 Hz y- 963 Hz.

En los caminos de la investigación algunas veces se obtienen los mismos resultados bajo supuestos o aproximaciones diferentes, esto de ninguna manera demerita él, o los otros caminos a través de los cuales se realizan los hallazgos, por el contrario fortalecen el objeto de la investigación.

Estas frecuencias se conocen desde la antigüedad, luego el Dr. Joseph Puleo las redescubrió, pero ahora verán algo increíble que encontré y que viene a confirmar la existencia de dichas frecuencias y no solo eso, sino su estrecho vínculo con el ARNm y en consecuencia con el ADN.

Retomando el camino, decidí sustituir cada celda dentro de la tabla 1 de los 64 aminoácidos por el

valor reducido de la combinación de las tres letras HVI del Nombre revelado de Di-s HVHI. ¿Qué

encontraría al hacer esto?, en este punto debo admitir que no tenía la menor idea, sin embargo

algo me decía que lo hiciera, que buscara y seguramente encontraría, y fue justo en esta etapa de

la investigación que recordé el versículo 33:3 del libro del profeta Jeremías del Antiguo

Testamento en la Biblia, que dice: “Clama a mí y yo te responderé y te mostraré cosas grandes y

ocultas que tu no conoces”, y ¡vaya que me mostró!

En fin, sigamos adelante, lo primero que haremos será considerar las tablas de los aminoácidos en

términos tanto de los nucleótidos, como de las letras HVI, donde H representa tanto a U como A, V

a G e I a C.

U G A C

UUU UGU UAU UCU U

U UUG UGG UAG UCG G

UUA UGA UAA UCA A

UUC UGC UAC UCC C

GUU GGU GAU GCU U

G GUG GGG GAG GCG G

GUA GGA GAA GCA A

GUC GGC GAC GCC C

AUU AGU AAU ACU U

A AUG AGG AAG ACG G

AUA AGA AAA ACA A

AUC AGC AAC ACC C

CUU CGU CAU CCU U

CUG CGG CAG CCG G

C CUA CGA CAA CCA A

CUC CGC CAC CCC C

Tabla 1 H V H I

HHH HVH HHH HIH H

H HHV HVV HHV HIV V

HHH HVH HHH HIH H

HHI HVI HHI HII I

VHH VVH VHH VIH H

V VHV VVV VHV VIV V

VHH VVH VHH VIH H

VHI VVI VHI VII I

HHH HVH HHH HIH H

H HHV HVV HHV HIV V

HHH HVH HHH HIH H

HHI HVI HHI HII I

IHH IVH IHH IIH H

IHV IVV IHV IIV V

I IHH IVH IHH IIH H

IHI IVI IHI III I

Tabla 2

Bien ahora sustituiré, tal como lo mencioné anteriormente, cada celda de la tabla anterior por el

valor reducido de la triada del NOMBRE de DI-S HVHI correspondiente. Debemos considerar que a

H le corresponde el valor 5, a I el valor 10 y a V el valor 6. Por ejemplo, en la parte superior

izquierda tenemos las letras HHH, como cada H vale 5 el valor de la celda es 15 y por tanto su valor

reducido es 6, así la primera posición de la tabla tendría asignada un 6. Siguiendo esta misma idea

y realizándola en cada celda, se obtiene la siguiente tabla de valores reducidos asociados.

6 7 6 2

7 8 7 3

H 6 7 6 2

2 3 2 7

7 8 7 3

8 9 8 4

V 7 8 7 3

3 4 3 8

6 7 6 2

7 8 7 3

H 6 7 6 2

2 3 2 7

2 3 2 7

3 4 3 8

I 2 3 2 7

7 8 7 3

Tabla 3

Dado que la H se repite, vasta trabajar solo tres bloques, el primero “H”, el segundo “V” y el

cuarto “I”.

Ahora, y antes de iniciar el análisis de cada bloque definiré los criterios de simetría que me

servirán de guía para formar conjuntos de tres números ligados a cada bloque.

Primero. Números iguales que definan claramente una figura geométrica (primer número)

Segundo. Números iguales ligados a alguna arista de la figura geométrica mencionada en el primer

criterio (segundo número)

Tercero. Formar un conjunto de seis números integrado por los dos primeros criterios aplicados a

los tres bloques y designarlos como números prohibidos en la determinación del tercero.

Cuarto. Escoger como tercer número al que aparezca más frecuentemente como resultado de las

sumas posibles, esto es por renglón, por columna y por diagonal, además que no esté dentro del

conjunto de los prohibidos.

Primeramente realizare todas las sumas horizontales, es decir una correspondiente a cada

renglón, todas las verticales, análogamente una correspondiente a cada columna, y todas las

diagonales, tanto derechas como izquierdas. El resultado de la suma lo colocaré en la posición

correspondiente pero en valor reducido en cada bloque:

9 7 9 5 2

9

7

3

9

6 7 6 2

4 3

7 8 7 3

7

6 7 6 2

3

2 3 2 7

5

3 7 3 5

Bloque 1 (H)

4

1 2

7 5 4

1

6

2

7 8 7 3

6 7

8 9 8 4

2

7 8 7 3

7

3 4 3 8

9

7 2 7 9

Bloque 2 (V)

2 4 1

6 8 2

4

9

1

2 3 2 7

5 5

3 4 3 8

9

2 3 2 7

5

7 8 7 3

7

5 9 5 7

Bloque 3 (I)

Fig.1

Aplicando el primer criterio a cada bloque, obtenemos lo siguiente:

El bloque “H” arroja el número 6; el bloque ”V” el número 7; el bloque “I” el número 2.

De acuerdo al segundo criterio, el bloque “H” arroja el número 3, el bloque “V” el número 4; el

bloque “I”, el número 8.

Conforme al tercer criterio lo primero será definir el conjunto de seis números no permitidos,

[2,3,4,6,7,8].

Ahora aplicado el cuarto criterio al primer bloque “H” obtenemos como número más frecuente

resultado de sumas reducidas y además permitido, el 9.

De manera análoga, para el segundo bloque “V” el número que cumple con esta restricción,

considerando además que a los seis números no permitidos debemos agregar otro, el 9 obtenido

en el párrafo anterior, tenemos que el número buscado para este bloque es el 1.

Por último y siguiendo los mismos criterios, el tercer número para el bloque “I” es el 5, ya que no

solo es el más frecuente, sino que es el único permitido, pues ahora son ocho los no permitidos

[1,2,3,4,6,7,8,9].

En resumen, del bloque “H” se obtiene el número 639; del bloque “V”, el número 741 y del

bloque “I”, el número 285.

Tal como se ve en cada figura, al guiarnos por los criterios de simetría, implícitamente estuvimos

recorriendo el bloque en el sentido contrario a las manecillas del reloj como se muestra en la

figura 9.

Además no hay ninguna restricción que impida recorrer la ubicación de cada número dentro de su

bloque iniciando en cualquiera de ellos, siempre y cuando se respete el sentido.

Ahora recorriendo cada bloque en el sentido contrario al de las manecillas empezando en el

segundo y luego en el tercer número, obtenemos el siguiente conjunto de números, donde la

primera columna representa números asociadas al bloque “H”, la segunda los asociados al bloque

“V” y la tercera al bloque “I”.

639 741 285

396 417 852

963 174 528 H V I

Tabla 4

Y ¡SORPRESA!, sucede que coinciden exactamente con las enigmáticas Frecuencias Sagradas

Solfeggio. [174Hz -285Hz -396Hz -417Hz- 528Hz - 639 Hz - 741 Hz -852 Hz y- 963 Hz].

Imaginen mi asombro al encontrar que los números formados correspondían perfectamente con

las Frecuencias Sagradas Solfeggio y por tanto este resultado implicaba que los valores numéricos

de dichas frecuencias se encontraban codificados en el NOMBRE revelado de Di-s HVHI y

vinculadas a los ladrillos de la vida, esto es al ARNm y por lo mismo, y en última instancia al ADN.

De esta forma ha quedado demostrado y sustentado bajo un desarrollo formal el por qué estas

frecuencias provocan ciertos tipos de respuesta a nivel molecular y en particular en la molécula

del ADN.

Aquello que era practicado por nuestros ancestros y que consistía en sanar mediante el sonido, no

era folklore sino la más sublime aplicación de revelaciones ancestrales, tan antiguas como el

propio NOMBRE revelado de Di-s [HVHI].

Desde aquí y en lo que resta del capítulo me referiré al conjunto de números contenidos en la

tabla 4 como frecuencias, en virtud de que coinciden plenamente con las Frecuencias Sagradas

Solfeggio.

Ahora analicemos algunas de las propiedades de este conjunto de frecuencias. Si sumamos cada

permutación del bloque amarillo “H” por separado, obtenemos: 6+3+9=18=9 en valor reducido.

Hagamos lo mismo con los otros dos bloques. El verde “V”, es 7+4+1= 12=3. Por último para el

bloque morado “I” tenemos 2+5+8=15=6. Es curioso que “H” se caracterice por el valor reducido 9,

“V” por el 3 e “I” por el 6. Formando el conjunto de números {3,6,9}, el cual juega un papel

preponderante en la estructura de nuestro universo.

Solo como observación, este conjunto de números {3,6,9} en REFLEXIONES 2 aparece asociado con

la conformación de los aminoácidos, el 3 al conjunto de números que denominamos participantes,

el 6 asociado a los no participantes y el 9 al conjunto total o unión de ambos.

Si consideramos ambos resultados conjuntamente, sucede que el 3 está relacionado con el bloque

“V” y con el ADN codificante, el 6 con el bloque “I” y por lo mismo con el ADN no codificante y por

último la unión de ambos por el número 9 y en consecuencia con el bloque “H”.

Sigamos con nuestra búsqueda y veamos que misterios se nos van develando a cada paso que

damos. Para ello nuevamente recurriré a los nueve números identificados con las Frecuencias

Sagradas Solfeggio obtenidos en la tabla 4, pero ahora agregaré su suma horizontal, vertical y

diagonal.

528

555 1584

1665

639 741 285

1665 555

396 417 852

1665 555

963 174 528

1665 555

1998 1332 1665

666 444 555

Tabla 5

Los números que están abajo, arriba y a un lado de las sumas verticales, diagonales y horizontales

representan el valor promedio de la sumas, es decir, el resultado de la suma divido entre 3.

Antes de continuar vale la pena notar algo interesante, de acuerdo a lo comentado en párrafos

anteriores, la columna morada está asociada al ADN no codificante, la verde al ADN codificante y

la amarilla al vínculo entre ambas, bajo esta perspectiva es fácil notar que el valor 555 que

representa al ADN no codificante es el que más se repite en la tabla..

Lo anterior indica que la frecuencia 741 asociada con el ADN codificante está relacionada con la

frecuencia 285 del ADN no codificante y con la frecuencia 639 que los vincula. Algo similar ocurre

con las frecuencias 174, 528 y 963. En el caso de la frecuencia 417 del ADN codificante está

asociada a dos frecuencias del ADN no codificante 285 y 852 y a dos de las frecuencias que los

relacionan, 963 y 396. Nuevamente esta tabla pone de manifiesto que detrás del aspecto revelado

del ADN, es decir, su fase codificante, hay otra “oculta” el ADN no codificante pero ambas

comparten la misma esencia como dos caras de la misma moneda.

Ahora volveré a usar la misma tabla 4 pero colocando los valores reducidos de los promedios

correspondiente a cada suma.

6

6

639 741 285

6

396 417 852

6

963 174 528

6

9 3 6

Tabla 6

Lo primero que observamos es que en valor reducido el número 528 no rompe la simetría como

podría pensarse a simple vista si solo viésemos la tabla anterior, por el contrario la confirma.

Además recordando que el bloque morado se identifica directamente con el ADN no codificante,

de acuerdo a la tabla 6, es claro que este abarca el mayor porcentaje dentro del ADN, pues vemos

que tiene el mayor número de repeticiones (#6), resultado de las diferentes sumas internas. Esto

significa que el ADN no codificante es más vasto que el codificante y a diferencia de lo que pudiera

pensarse al observar la tabla 5, si está vinculado en su totalidad al ADN codificante.

Lo siguiente fue marcar en cada bloque las celdas que se asociaban a la generación de cada

número de la triada correspondiente a su frecuencia.

Así por ejemplo, en el bloque amarillo “H” marque de ese color los cuatro 6, los dos 3 y todos los

números o ubicaciones que al sumarlos daban por resultado 9. Lo análogo hice con los otros dos

bloques obteniendo lo siguiente.

6 7 6 2

7 8 7 3

6 7 6 2

2 3 2 7

7 8 7 3

8 9 8 4

7 8 7 3

3 4 3 8

6 7 6 2

7 8 7 3

6 7 6 2

2 3 2 7

2 3 2 7

3 4 3 8

2 3 2 7

7 8 7 3

Tabla 7

Luego hice algo equivalente a colocar cada bloque con sus respectivas celdas representadas en la

tabla 7 sobre la tabla 1, de esta forma pude vincular algunas triadas de nucleótidos pertenecientes

a cada aminoácido con su correspondiente color y por tanto grupo de tres frecuencias.

ALA

GCU GCG GCA GCC ARG CGC CGA CGG CGU AGA AGG

ASN

AAU AAC ASP

GAU GAC

CYS

UGU UGC LYS

AAA AAG

MET

AUG PHE

UUU UUC

PRO

CCU CCG CCA CCC GLN

CAG CAA

GLU

GAA GAG GLY

GGC GGA GGG GGU

HIS

CAU CAC ILE

AUU AUA AUC

LEU UUG UUA CUU CUG CUA CUC

SER

UCU UCG UCA UCC AGU AGC

THR

ACU ACG ACA ACC TRP

UGG

TYR

UAU UAC VAL

GUU GUG GUA GUC

INICIO MET

AUG STOP UAG UAA UGA Tabla 8

Debido a la coincidencia entre los valores numéricos y las Frecuencias Sagradas Solfeggio, la

colorida imagen de esta tabla indica qué triada de nucleótidos perteneciente a qué aminoácido

esperaríamos que fuera sensible a la frecuencia asociada a su color. Por ejemplo, la Lisina (LYS)

estaría asociada a las frecuencias 639 / 396 / 963 a través de sus dos codones, AAA y AAG. En

cambio la Alanina (ALA) se vincularía con las frecuencias 741 / 417 / 174 a través de sus codones

GCG y GCA. Esto significa que sus otros dos codones GCU GCC no son sensibles a ninguna de las

Frecuencias Sagradas Solfeggio.

Al contar cuantos aminoácidos había de “cada color”, observé que uno no tenía color, dos

compartían amarillo y morado, tres eran morados, cinco verdes y 9 amarillos, sin contar las

secuencias de “stop”. Luego uniendo las veces que cada tipo aparecía en una serie obtuve,

1,2,3,5,9. Vemos que se asemeja a la serie de Fibonacci, la cual en sus primeros números es,

0,1,1,2,3,5,8,…

Esta pequeña desviación de la serie de Fibonacci, me recuerda una hermosa frase de Pascal que

dice “La naturaleza tiene perfecciones para demostrar que es imagen de Di-s, e imperfecciones

para probar que solo es una imagen”.

A continuación asocié a cada codón coloreado él, o los valores reducidos que le correspondían

conforme a la superposición de la tabla 7 a la tabla 1. Esta asociación no solo se hizo por ubicación

de cada celda sino también se incluyó el número reducido al final de la diagonal en donde

estuviere ubicado

ALA

GCU GCG GCA GCC

4 31

35 8

ARG CGC CGA CGG CGU AGA AGG

8 5 5 9 9 36 9

ASN

AAU AAC

69

6

ASP

GAU GAC

7 1

8

CYS

UGU UGC

39

12 3

LYS

AAA AAG

63 9

18 9

MET

AUG PHE

UUU UUC

69 9

78 6

PRO

CCU CCG CCA CCC

5 8 5

18 9

GLN

CAG CAA

5 25

30 3

GLU

GAA GAG

7 1 1

9

GLY

GGC GGA GGG GGU

4 1 1

6

HIS

CAU CAC

25 5

6

ILE

AUU AUA AUC

69 69 9

147 3

LEU UUG UUA CUU CUG CUA CUC

69 25 5 25 5 129 3

SER

UCU UCG UCA UCC AGU AGC

9 39 9 39

96 6

THR

ACU ACG ACA ACC

9 39 9

57 3

TRP

UGG

9

9

TYR

UAU UAC

69

6

VAL

GUU GUG GUA GUC

7 1 7

15 6

MET

AUG UAG UAA UGA

9 69 9

87 6

Tabla 9

La penúltima columna de la derecha representa la suma de todos los valores del renglón

correspondiente y la última columna el valor reducido. Si observamos con atención todos suman

3, 6, o 9 excepto 2 que suman 8, y que son el aminoácido ALA y el ASP, los que además

corresponden al mismo bloque, en este caso el verde.

Dada la importancia del conjunto de valores {3,6,9} y su relación con el fundamento del universo,

hace pensar nuevamente en un diseño inteligente detrás de los 20 aminoácidos, ya que las

posibilidades de que cada aminoácido se formara justamente por aquellos codones cuya suma

reducida bajo el marco de las letras HVHI fuera 3,6 o 9 son en extremo pocas.

La sustitución U-H, G-V, A-H y C-I a diferencia de cualquier otra, es la única que arroja un resultado

muy “estable” o cercano a la “perfección representada por la serie de Fibonacci”. (Cualquier otra

contiene meno valores 3,6 y 9 para la tabla 9).