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Julio 27/ 2014 Mensaje Dominical Pst. Parrish Jácome Hernández El Gran Panorama Texto: 2 Timoteo 4:1-2 www.iglesiabautistaisrael.com [email protected] Ante el inminente cambio de los tiempos con sus consecuencias en las actitudes, conductas y creencias de los hombres, existe una demanda de Dios que no cesa, se afirma y fortalece para todos sus hijos, considerarla permitirá mantenerse centrado, enfocado, evitando las distracciones que van secando la vida. Predica la Palabra, no pierdas oportunidad, no desperdicies la ocasión, no califiques el tiempo, cumple tan sólo el encargo con celeridad y profunda devoción, recordando el consejo y exhortación de la Palabra que sigue vigente. La mayor alegría de un creyente se produce cuando es usado por el Señor para que otro persona venga a Cristo, no existe experiencia en el caminar de fe que pueda igualarse. Compartir de nuestra fe en Jesucristo debe ser expontaneo, natural, presentado el testimonio de la persona y obra del Señor con tal claridad que quienes aún no le conocen sean animados a buscarlo. Desechar los temores es fundamental, entendiendo que al hablar de Jesucristo será el mismo Espíritu Santo quien nos de las palabras y la fortaleza para hablar en todo tiempo y en toda circunstancia. El dar testimonio de la fe es una marca característica de la vida cristiana. ¿En tu caminar cotidiano esta huella es posible observarla? ¿Qué te ha impedido para que así sea? Los temores o la vergüenza impiden que el testimonio de la fe fluya de forma natural; ¿Qué se necesita recordar y afirmar para superarlos y dejarlos atrás? Testificar de Jesús debe ser una experiencia espontánea, donde compartir la fe no es algo elaborado o aprendido; ¿Estás aprovechando las oportunidades para hacerlo¿ De qué forma? La relación que tenemos con el Señor en oración y con su palabra fortalece nuestro caminar y presentan desafíos; ¿Testificar de Jesús está siendo un desafío? ¿Cómo lo estás desarrollando para ser más efectivo? El testificar de Jesús implica también paciencia y doctrina. ¿Tienes un plan para crecer en tus virtudes cristianas y en el conocimiento del Señor? ¿Puedes compartirlo? La demanda que la palabra nos realiza cuando nos habla es imposible de pasarla por alto; ¿Cuál es tu compromiso al entender que debes siempre dar testimonio de Jesucristo? Ƥ × Testifica de Jesucristo, comparte sin temor. Pablo, apóstol de Jesucristo. Destaca en la relación desarrollada con “su hijo amado Timoteo” las huellas que todos los creyentes deben dejar en las personas con quienes se vinculan, afectando e influyendo su vida al punto de que su presencia sea un motivo de estímulo para continuar en la ardua carrera. “Siempre te recuerdo en mis oraciones, de día y de noche doy gracias a Dios por ti. Al igual que mis antepasados sirvo a Dios con conciencia limpia. Cuando recuerdo tus lágrimas por mí, quisiera verte. ¡Qué feliz me haría!” La conciencia limpia que Pablo muestra en sus acciones persuade a Timoteo a seguir sus huellas, al punto de comprometerlo a tomar una postura clara y determinante frente al evangelio que le ha sido anunciado. “De manera que no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor. Tampoco te avergüences de mí, prisionero por servir a su causa. Más bien, comparte conmigo el sufrimiento por la buena noticia de salvación con el poder que Dios nos da para soportarlo. DIOS NOS SALVÓ Y NOS LLAMÓ A SER SU PUEBLO SANTO. No lo hizo por lo bueno que habíamos hecho, sino porque así lo quiso por su generoso amor. Ese amor nos lo dio antes del inicio del tiempo mediante Jesucristo” Este llamamiento responde a la obra de amor de Jesús expresado en el calvario, D¿UPDGR HQ HO FXPSOLPLHQWR GHO SURSyVLWR GH 'LRV SHUVRQDO H LQHTXtYRFR D ¿Q GH TXH HO evangelio continúe reproduciéndose. Pablo lo entrega en posta a su discípulo Timoteo, él debe de hacerlo con otros, respondiendo a su llamado con la integridad y compromiso que el Salvador espera de sus seguidores. ³+DV HVFXFKDGR PLV HQVHxDQ]DV FRQ¿UPDGDV SRU PXFKRV $KRUD HQVpxDVHODV D SHUVRQDV GLJQDV GH FRQ¿DQ]D TXH D VX YH] SXHGDQ HQVHxiUVHODV D RWURV´ la Palabra, Persiste en hacerlo

Predica la Palabra, persiste en hacerlo

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Compartir de nuestra fe en Jesucristo debe ser expontaneo, natural, presentado el testimonio de la persona y obra del Señor con tal claridad que quienes aún no le conocen sean animados a buscarlo. Pst. Parrish Jácome H. Iglesia Bautista Israel www.iglesiabautistaisrael.com

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Julio 27/ 2014Mensaje Dominical

Pst. Parrish Jácome Hernández

El Gran PanoramaTexto: 2 Timoteo 4:1-2

[email protected]

Ante el inminente cambio de los tiempos con sus consecuencias en las actitudes, conductas y creencias de los hombres, existe una demanda de Dios que no cesa, se afirma y fortalece para todos sus hijos, considerarla permitirá mantenerse centrado, enfocado, evitando las distracciones que van secando la vida.

Predica la Palabra, no pierdas oportunidad, no desperdicies la ocasión, no califiques el tiempo, cumple tan sólo el encargo con celeridad y profunda devoción, recordando el consejo y exhortación de la Palabra que sigue vigente. La mayor alegría de un creyente se produce cuando es usado por el Señor para que otro persona venga a Cristo, no existe experiencia en el caminar de fe que pueda igualarse.

Compartir de nuestra fe en Jesucristo debe ser expontaneo, natural, presentado el testimonio de la persona y obra del Señor con tal claridad que quienes aún no le conocen sean animados a buscarlo. Desechar los temores es fundamental, entendiendo que al hablar de Jesucristo será el mismo Espíritu Santo quien nos de las palabras y la fortaleza para hablar en todo tiempo y en toda circunstancia.

El dar testimonio de la fe es una marca característica de la vida cristiana. ¿En tu caminar cotidiano esta huella es posible observarla? ¿Qué te ha impedido para que así sea?

Los temores o la vergüenza impiden que el testimonio de la fe fluya de forma natural; ¿Qué se necesita recordar y afirmar para superarlos y dejarlos atrás?

Testificar de Jesús debe ser una experiencia espontánea, donde compartir la fe no es algo elaborado o aprendido; ¿Estás aprovechando las oportunidades para hacerlo¿ De qué forma?

La relación que tenemos con el Señor en oración y con su palabra fortalece nuestro caminar y presentan desafíos; ¿Testificar de Jesús está siendo un desafío? ¿Cómo lo estás desarrollando para ser más efectivo?

El testificar de Jesús implica también paciencia y doctrina. ¿Tienes un plan para crecer en tus virtudes cristianas y en el conocimiento del Señor? ¿Puedes compartirlo?

La demanda que la palabra nos realiza cuando nos habla es imposible de pasarla por alto; ¿Cuál es tu compromiso al entender que debes siempre dar testimonio de Jesucristo?

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Testifica de Jesucristo, comparte sin temor.

Pablo, apóstol de Jesucristo. Destaca en la relación desarrollada con “su hijo amado Timoteo” las huellas que todos los creyentes deben dejar en las personas con quienes se vinculan, afectando e influyendo su vida al punto de que su presencia sea un motivo de estímulo para continuar en la ardua carrera.

“Siempre te recuerdo en mis oraciones, de día y de noche doy gracias a Dios por

ti. Al igual que mis antepasados sirvo a Dios con conciencia limpia. Cuando

recuerdo tus lágrimas por mí, quisiera verte. ¡Qué feliz me haría!”

La conciencia limpia que Pablo muestra en sus acciones persuade a Timoteo a seguir sus huellas, al punto de comprometerlo a tomar una postura clara y determinante frente al evangelio que le ha sido anunciado.

“De manera que no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor.

Tampoco te avergüences de mí, prisionero por servir a su causa. Más bien,

comparte conmigo el sufrimiento por la buena noticia de salvación con el poder

que Dios nos da para soportarlo. DIOS NOS SALVÓ Y NOS LLAMÓ A SER SU

PUEBLO SANTO. No lo hizo por lo bueno que habíamos hecho, sino porque así

lo quiso por su generoso amor. Ese amor nos lo dio antes del inicio del tiempo

mediante Jesucristo”

Este llamamiento responde a la obra de amor de Jesús expresado en el calvario, D¿UPDGR�HQ�HO�FXPSOLPLHQWR�GHO�SURSyVLWR�GH�'LRV�SHUVRQDO�H�LQHTXtYRFR��D�¿Q�GH�TXH�HO�evangelio continúe reproduciéndose. Pablo lo entrega en posta a su discípulo Timoteo, él debe de hacerlo con otros, respondiendo a su llamado con la integridad y compromiso que el Salvador espera de sus seguidores.

³+DV�HVFXFKDGR�PLV�HQVHxDQ]DV�FRQ¿UPDGDV�SRU�PXFKRV��$KRUD�HQVpxDVHODV�D�SHUVRQDV�GLJQDV�GH�FRQ¿DQ]D��TXH�D�VX�YH]�SXHGDQ�HQVHxiUVHODV�D�RWURV´

��������la Palabra,Persiste en hacerlo

Descubrir la humanidad de un siervo de Dios utilizado para alcanzar naciones es posible al escudriñar los pensamientos de Pablo en esta carta dirigida a su “amado hijo” Timoteo. La proximidad de su muerte al estar bajo presión lo lleva al apóstol a fortalecer las convicciones de uno de sus más íntimos colaboradores en la extensión del reino de los cielos.La tarea pastoral no termina independiente de cuáles sean las circunstancias que rodean al ministro; Soledad, traición, incomprensión, olvido, evidencian un cúmulo de emociones que a esta hora son parte de la vida del apóstol a los gentiles quien sobreponiéndose a todas ellas, no desperdicia la ocasión para asir a Timoteo de esa misma responsabilidad y pasión que lo lleva a cumplir con el encargo recibido.Instruir es una tarea en el ministerio que Pablo realiza con profunda sabiduría, dejando FODURV�PDQGDWRV�HQ�ORV�FXDOHV�7LPRWHR�GHEH�IRUPDU�VX�FDUiFWHU�D�¿Q�GH�SUHVHUYDVH�GH�OD�impiedad reinante en los corazones de los hombres de los últimos días. La forma de mantenerse alejado de estas cosas es compartida, al recordarle que sólo la Escritura es capaz de producir la sabiduría de lo alto, imprescindible para salvación. Por lo cual no debe cesar de anunciarla.

“Toda la Escritura es un mensaje enviado por Dios, y es útil para enseñar,

reprender, corregir y mostrar a la gente cómo vivir de la manera que Dios manda,

para que el siervo de Dios esté listo y completamente capacitado

para toda buena obra.” 2da Timoteo 3:16-17 (PDT)En presencia de Dios y de Cristo Jesús. Pablo desea obtener de Timoteo una determinación permanente de continuar con la extensión del Reino, lo cual no es opcional para su discípulo; es imperativo, sin circunstancias, ni argumentos valederos para dejar de asumir el encargo. La Escritura está llena de estas figuras mediante la cual se preserva y perenniza la enseñanza, instrucción que debe mantenerse de generación en generación. Moisés lo hace con Josué, Ellas con Eliseo, David con Salomón, Jesús con los doce, Pablo con Timoteo. La formación de un discípulo demanda una gran inversión de tiempo, energía, dedicación, entrega. Pablo lo conoce, su ministerio se caracteriza por volcarse por entero en la vida de aquellos que le han sido confiados por el buen pastor para su edificación.

Redarguye, reprende, exhorta. Ahora es el tumo de continuar la labor pastoral, la juventud de Timoteo no debe ser vista como un impedimento para cumplir el encargo, por cuanto formar discípulos implica trabajar arduamente en desarrollar a Cristo en sus vidas. De inmediato el consejo de su mentor llega, no lo hagas con un ímpetu humano que pretenda a la fuerza colocar la verdad, hazlo con paciencia e instrucción. La responsabilidad no se cumple a menos de que se esté envuelto con cada discípulo en esta tarea, amonestando, advirtiendo, confrontando, animando, consolando.

“Por eso ahora estoy sufriendo a causa de esa buena noticia, pero no me

avergüenzo. Sé muy bien en quién he confiado y estoy seguro de que él puede

guardar hasta ese día todo lo que ha puesto en mis manos. Sigue la enseñanza

que te di como ejemplo, pues conduce a una vida recta; mantenla con la fe y el

amor que tenemos como seguidores de Jesucristo. Esa enseñanza es un tesoro

que se te ha confiado, así que guárdalo con la ayuda del Espíritu Santo

que vive en nosotros.” 2da Timoteo 1: 12-14 (PDT)

La necesidad de predicar, de cumplir la tarea fielmente de inmediato es presentada, al advertir Pablo la llegada de tiempos en los cuales la sabia instrucción proveniente de la

El Texto No es un Pretextopalabra se pretenderá desplazar, dando cabida a fábulas, enseñanzas de hombres que alimentan la percepción de un mundo del hombre para el hombre donde el deleite y apetitivo por sus propios placeres se evidencia. El verdadero discipulado es el único antídoto para contrarrestar toda corriente engañosa y perversa, que mediante un evangelio sin demandas pretende levantar seguidores que llenan los templos sin que sus vidas muestren dignos de arrepentimiento, en su conducta y en su carácter. La exhortación e instrucción deben ser acompañadas con un espacio de servicio, mediante el cual se expresa el compromiso de amor al devolver por gracia en la vida de otros, lo que por gracia fue depositado.Timoteo es desafiado a entender el carácter del hombre de los postreros (últimos tiempos), características que comenzaron a levantarse desde aquella época, como una señal indiscutible de lo que se desencadenaría. Fábulas, cuentos, novelerías, atrapan más y más a los hombres, quienes anhelantes por descubrir una nueva verdad, dejan de lado la suprema e irrefutable VERDAD, proclamada desde el principio mismo de la Creación y dada a conocer en la manifestación encarnada del Verbo, de la Palabra, es decir de Jesucristo, Dios único y verdadero. Ante lo inevitable hay que prepararse de buena forma, sustentando una fe no fingida, capaz de producir lo que todo hombre necesita en su caminar espiritual, marcas imborrables que sostengan y afirmen su fe.

“La gente se volverá egoísta, amante del dinero, fanfarrona y orgullosa.

Se insultarán unos a otros, no obedecerán a sus padres, no darán ni las gracias

y serán mundanos. No sentirán afecto por los demás ni estarán dispuestos a

perdonarlos. Hablarán con maldad, estarán fuera de control, serán crueles

y odiarán el bien. En esos mismos días, la gente traicionará a sus amigos,

actuará sin pensar, se enorgullecerá de lo que sabe y en vez de amar a Dios,

amará los placeres. Parecerán ser muy religiosos, pero con su manera de vivir

demostrarán que en realidad rechazan servir a Dios; no te metas con esa gente.” 2da Timoteo 3:2-5 (PDT)

No existe un mejor consejo que el cocido a fuego lento de la propia es allí donde la humildad de un siervo se presenta para evitar la caída de los que vienen en el camino, donde el formar vidas está por encima de cualquier rédito humano que se pueda alcanzar, logrando entender que sin vidas a ministrar, sin discípulos a reproducir, el ministerio carece de sazón. La instrucción que realiza con toda autoridad a su amado hijo Timoteo, ahora es acompañada con la exhortación, aquella palabra de ánimo, afirmación, desafío necesario para llevar adelante cada mandato, que debe poner por obra en su desarrollo ministerial con los creyentes de la iglesia de Éfeso en la cual sirve al Señor Jesucristo.Sé sobrio en todo. La prudencia es necesaria para modelar la vida de un discípulo, la vehemencia desbordante por alcanzar resultados, sin respetar y valorar el costo necesario en la reproducción, matizado por los sufrimientos que al experimentarse con el discípulo dejan huellas, producen convencidos en verdad, pero no convertidos en cuerpo y alma al evangelio de Jesucristo. La demanda se inserta desde el principio de estas frases de Pablo a su amado Timoteo, cumple el encargo, responde por el ministerio, cuida lo encomendado, sólo así la vida del siervo de Dios alcanza plena satisfacción, realizándose por entero al colocar sobre las vidas entregadas por el buen pastor para su edificación, la marca de un ministerio que sufrió, peleó pero se sostuvo enfocado en la meta.

“Se acerca el momento de mi muerte; mi vida ya se está ofreciendo

como un sacrificio a Dios. Me fue bien en la competencia: he peleado bien,

he terminado la carrera y no he perdido la fe.” 2da Timoteo 4:6-7 (PDT)

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