REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACION SUPERIOR

INSTITUTO UNIVERSITARIO DE TECNOLOGIA

AGRO-INDUSTRIAL REGION LOS ANDES

SAN CRISTOBAL – TACHIRA

TRAYECTO IV- PNF GEOCIENCIAS

INTEGRANTES:

T.S.U. Angarita Dulce C.I 18.256.290

T.S.U. Delgado Yolimar C.I 16.124.549

Michelena, Febrero 2014

La cubierta sedimentaria del sudoeste de los Andes de Venezuela ha sido el tema de la

exploración de hidrocarburos durante todo el siglo XX. La geología de superficie fue el

foco principal en los primeros 75 años para la producción de modelos útiles a la

exploración en las cuencas de Maracaibo y Barinas. Posteriormente, la industria petrolera

ha invertido mucho esfuerzo en los estudios sísmicos a lo largo de los flancos de la

montaña, con el fin de definir las perspectivas.

La integración de esta información sísmica con la geología de superficie y los datos

geoquímicos permite tener perspectivas para que se definan y clasifiquen con más

confianza su marco geológico, lo que reduce el riesgo exploratorio.

El intervalo más interesante desde un punto de vista geológico del petróleo es el

Cretácico y Paleógeno, y por lo tanto el itinerario se limita a esta parte de la columna

estratigráfica.

ZONA DE VEGA DE AZA

Esta localidad se encuentra a lo largo de la carretera de San Cristóbal a Santo Domingo,

en un afloramiento conocido de los conglomerados impregnados por el asfalto natural de

La Formación La Cope.

La geología aquí es particularmente ilustrativa de la sedimentación tectónica, estudiada

originalmente por Macellari (1982). Se hace hincapié aquí en los aspectos de la

sedimentación tectónica correspondiente al hábitat de hidrocarburos (I.6.2 y I.6.3).

Cerca de Vega de Aza, en las aldeas de Agua Dulce y La Copé, se exponen delgadas de

las Formaciones Navay y Colón, la última de la edad Mastrichtiano, bien establecidas por

la palinología (VELÁSQUEZ, 1992). En otra sección, los sedimentos arenosos bien

estratificados intercalados con limolitas descansan sobre lutitas carbonosas,

perteneciente al Grupo Orocue cuya fecha palinológica pertenece Paleoceno

(VELÁSQUEZ, 1992), aparentemente concordante sobre la Formación Colón. Estas tres

formaciones están en contacto erosional debajo de los conglomerados de la Formación La

Copé.

La zona es crítica, impidiendo la medición precisa de espesores. Sin embargo, la

ausencia de faunas y la presencia distal de flora marina (VELÁSQUEZ, 1992), sugieren la

posibilidad de que la sucesión aquí es anormalmente delgada, asociado a un paleoalto de

edad anterior a Navay. El alcance geográfico de esta paleoestructura es actualmente

desconocido, pero su existencia podría explicar los cambios abruptos en las facies

laterales en el Campaniano entre las Formaciones Navay y La Luna, por lo cual sólo 12

km al norte de esta zona, la Formación La Luna aflora en su facie típica del flanco Norte

Andino.

En esta área se encuentra una sección interesante de conglomerado conocido como El

Conglomerado de La Copé o Formación La Copé (Macellari, 1982). La fracción gruesa es

sub-redondeada en su mayoría presenta clastos de cuarzo de la Formación Navay, con

clastos subordinados compactos de rocas sedimentarias anteriores a Navay. La presencia

de clastos exclusivamente del Cretácico y pre-Cretácico en la formación sugiere dos

posibles edades:

1. Mioceno / Plioceno: Compuesto básicamente de conglomerados en los que se han

conservado sólo clastos del Cretácico y pre-Cretácico resistentes.

2. Paleógeno: Compuesto por Conglomerados cuya tectónica se deriva de la erosión de

amplios afloramientos silíceos pertenecientes a las Formaciones Navay y La Luna.

En el primer caso, el conglomerado de La Copé asocia a la molasa con el levantamiento

de los Andes, lo que equivalente al surgimiento de los conglomerados del Mioceno-

Plioceno en la Formación Betijoque (Macellari, 1982).

En el segundo caso, indicaría que la actividad tectónica de la estructura previa al Mioceno

dio origen al conglomerado, con interesantes implicaciones para la generación de

hidrocarburos y la migración de la zona.

Sin embargo, en cualquier caso, la presencia de una estructura cretácea debajo del

conglomerado parece posible, teniendo más en cuenta la relación entre la molasa y el

cretáceo en la adyacente zona del Río Uribante.

Por último, el Cretácico y Paleógeno relaciones estratigráficas sugieren la existencia de

estructuras pre-andinos en el área de La Copé-Vega de Aza y, posiblemente, hacia la

zona de Santo Domingo, enmascarado por el más joven, tectonismo más violento. Sin

embargo, ni estas estructuras ni las ocasionadas por el empuje del occidente niegan el

modelo propuesto, en el que un esfuerzo principal horizontal produce un marco estructural

del norte al borde de empujes, en algunos casos afectados por ajustes posteriores al

emplazamiento o colapso.

ROCAS MARINAS GENERADORAS

L Formación La Luna conserva su condición de roca fuente principal generadora de

hidrocarburos, debido a su rico intervalo orgánico. Este intervalo se adelgaza desde la

Zona de Maracaibo (400 pies) hasta el suroeste de Los Andes (mínimo 100 pies de San

Pedro del Río). Más al sur, cerca de Vega de Aza, las facies de la Formación La Luna

cambian y pierden su fuente potencial.

A pesar de estas importantes variaciones en el potencial de generación, la Formación La

Luna sigue siendo la mejor roca de origen, incluso en zonas como la Depresión del

Táchira, donde exhibe su potencial más pobre. Por tanto, a La Luna se considera la

formación que dio origen a todos los crudos de tipo II en el área de estudio.

CLASES DE ACEITE:

El análisis de las muestras que se filtran por el Flanco Norte Andino, La Alquitrana y La

Copé permitió que los crudos se clasificaran en tres categorías:

Los crudos derivados de tipo II rocas fuente marina.

Los crudos derivados de tipo III rocas de origen terrestre.

Los crudos de origen mixto.

Las filtraciones de la última categoría se limitan a impregnaciones en los conglomerados

de La Cope. El cronomatograma correspondiente es difícil de interpretar debido a la

biodegradación natural, por lo que sugiere un origen mixto. Los crudos de los campos de

Tarra y Los Manueles pertenecen a esta categoría (Talukdar et al., 1985).

Como posibilidad alternativa, la similitud entre los cronomatogramas de la muestra La

Copé y el centro de la Formación La Luna conduce a una interesante hipótesis alternativa

para el origen de los crudos de La Cope y La Alquitrana.

ITINERARIO

RUTA.- (Carretera San Cristóbal – Santo Domingo)

Parada No 1: Observación de la Mina de Asfalto El Palmar, Sur de la Molasa

Andina.

Parada N° 2: Camino hacia Mina La Gotera, Quebrada La Chaucha.

Parada N° 3: Quebrada El Encanto.

Parada N° 4: En el paisaje, contacto entre las Formaciones Colón y La Cope.

MAPA GEOLÓGICO DE SUPERFICIE DE LA ZONA VISITADA

ANEXOS

CONCLUSIONES

1. En el Suroeste de los Andes las formaciones del Cretácico son ligeramente diacrónicas y

en el Paleógeno lo son aún más.

2. Las rocas fuente del Cretácico, se desarrollaron preferentemente en el flanco norte de la

montaña, estas se asocian con superficies de inundación marinas máximas.

3. La Formación La Luna en el extremo sur de la zona y su equivalente, la Formación Navay,

tienen concentraciones bajas de materia orgánica.

4. El petróleo crudo que se filtra a la Formación La Copé y a la estructura presente en la La

Alquitrana se deriva posiblemente de la Formación La Luna.

5. El conglomerado de la Formación La Copé descansa discordantemente sobre rocas del

Cretácico y Paleoceno.

BIBLIOGRAFÍA

Macellari, CE (1982a) El Mio-Plioceno de la Depresión de Táchira (Andes

venezolanos): Distribución paleogeográfica e implicaciones

tectónicas. Geos, Universidad Central de Venezuela, Caracas, v 27, p. 3-

14.

Velásquez, M. (1992) Análisis palinológico de Muestras de la Sección Vega

de Aza, Estado Táchira. Inédito informe interno, Maraven SA, Caracas.

Talukdar, S., Gallango, O. y Chin-A-Lien, M. (1985) La generación y

migración de los hidrocarburos en la Cuenca de Maracaibo. Venezuela. En:

Exploración Petrolera en las Cuencas Subandinas. II Simposio Bolivariano,

Bogotá, 43 p.

SEDIMENTACION CRETÁCICO Y Paleógeno en los Andes venezolanos,

SUROESTE SOCIEDAD VENEZOLANA DE Geólogos, Viaje de estudios N

° 4, VÍCTOR CAMPOS Y Tito Boesi, 14 a 17 marzo, 1993. Código

Geológico de Venezuela, PDVSA – Intevep, 1997.