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GEC GEC MAGAZINE REVISTA DIGITAL DE INTERÉS CULTURAL/ABRIL 2012/Nº 5 ENTREVISTA Visión Sonora Oxígeno El CARROMATO de la LIBERTAD De escapada a Bilbao ¿Dónde está nuestro “Jueves Negro”? la forja de un SUEÑO EXPOACTIVA DINOW A vueltas con el Cine mudo

GEC Magazine 5

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Revista digital de interés cultural

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GECMAGAZINE

REVISTA DIGITAL DE INTERÉS CULTURAL/ABRIL 2012/Nº 5

ENTREVISTAVisión SonoraOxígeno

El CARROMATO de la LIBERTAD

De escapada a Bilbao

¿Dónde está nuestro “Jueves Negro”?

la forja de un SUEÑOEXPOACTIVA

DINOWA vueltas con el Cine mudo

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GEC

Gec es una revista bimensual en formato digital. El contenido de las imágenes y artículos es responsabili-dad exclusiva de los autores y colaboradores. Los artículos escritos por colaboradores externos no represen-tan necesariamente el punto de vista de la editorial. Todos los derechos de imágenes son propiedad de sus autores y no pueden ser reproducidas sin permiso de ellos.

MAGAZINEEDITA

GECMAGAZINE

DIRECTOR/ EDITOR/ DISEÑADORCayetano Landero Quintero

COLABORADORESRosa Mª Gómez Santos

Tania González RedondoCarmen Ramos

Charo Morillo MarínJosé Manuel Blanco

Juan Luís MartínCarolina Rubio

Juan José SantanaGermán Torres

Almudena Gómez SierraJosé L. Torres moreno

aRTIsTaS iNvItAdOsMOISÉS FERNÁNDEZ ACOSTA

HEIDI GARCÍA JAZZ VILÁ

VÍCTOR PULIDOPATRICIA RECHEMANUEL DÍAZ

[email protected]

www.gecmagazine.eshttp://gecmagazine.blogspot.com/

Issn: 2174-8527

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GEC

índiceEN PORTADA/ VISIÓN SONORA

pág 6-7¿DÓNDE ESTÁ NUESTRO JUEVES NEGRO?

pág 8-9LECTURAS NO OBLIGATORIAS

LA FUERZA DE LA POESÍApág 12-13

EL CARROMATO DE LA LIBERTADpág 12-13

EXPOACTIVA pág 15-33

LA FORJA DE UN SUEÑOpág 34-39

DE ESCAPADA A BILBAOpág 40-41

LA CASA DE LA PORTERApág 43

LA MADRE NOCHE. CAPÍTULO IVpág 44-47

RECOMENDACIONES MUSICALESpág 48-49

LA BUTACA ROJApág 50-51

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El pasado día 27 de marzo, fue una jornada para conmemorar el día del teatro. Un día grande para recordar a tod@s aquellos que han dedicado su vida por entero al mundo de la escena.

El nacimiento de este género literario tuvo lugar en el mundo grecolatino du-rante el siglo V. Sus inicios estuvieron relacionados con la danza, pero poco a poco fue gestándose en la manera que ha llegado a nuestros días. No obstante, el teatro ha cambiado mucho desde entonces, ha cambiado la arquitectura escénica, los textos dramáticos y como no, los actores.

Lejos queda el recuerdo de quienes durante la II República, llevando los telones sobre sus hombros, fueron de pueblo en pueblo y lo dieron todo por desempolvar el viejo telón, y arrancar el aplauso del público en una nueva función. Hoy en día, como recuerdo de esa sabia barraca, perviven pequeños grupos de teatro aficionado, jóve-nes actores de instituto e universidades y profesores soñadores que siguen perpetuan-do el buen hacer de este género.

Tampoco podemos olvidarnos de las compañías independientes y la bohemia teatral llena de grandes actores, que luchando por sobrevivir al día a día, siguen ilu-sionando a un nuevo público con un teatro que abandona las tablas por acercarse a la calle, por irrumpir en nuestras vidas con nuevas sensaciones y nuevas historias, por hacernos pensar, por sacarnos una sonrisa, por evadirnos de la monotonía cotidiana del trabajo. Pero la realidad es muy turbia ante estos proyectos, donde surge la pro-blemática real del consumo cultural y la formación del público para este tipo de teatro, de lo que se deriva la ausencia de público en las pequeñas salas y espacios teatrales independientes.

Tampoco se libran de la estampida de público los grandes montajes escénicos, con actores y actrices de renombres, que aun siendo ayudados por subvenciones es-tatales, no logran acaparar la afluencia necesaria, quedando relegadas a las grandes ciudades y festivales.

En un mundo tan mediatizado por la imagen del cine y la televisión, por la crisis y el ahogo de la cultura, queda hacerse esta reflexión:

¿Cuántos latidos le quedarán a este longevo corazón?.

U N C O R A Z Ó N D E L A T I D O S F U E R T E SEL TEATRO

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EDITORIAL

5La fatídica rima, cortocircuito, los lados de un pentágono, el número Áureo, los dedos de una mano, y los mismos del pie, las puntas de una estrella de mar, el éter, los sentidos, el aire de los dioses, las líneas del penta-grama, “salto, cruz y brinco”...

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EN PORTADAVisión Sonora/Oxígeno

Oxigeno es el título del cuarto trabajo de estudio de Visión sonora, Gec Magazine ha tenido la posibilidad de encontrarnos con ellos en los conciertos previos a la presentación de este nuevo material y esto es lo que nos han contado.

¿Quienes son Visión Sonora y cuando ini-ciasteis vuestro periplo musical? Somos una banda de rock que empezó por afición aproximadamente hace 10 años. A día de hoy, presentando nuestro primer trabajo de difusión nacional, es más que una afición…

Oxigeno es el nombre de vuestro nuevo ál-bum ¿Qué se esconde tras ese título? En un tiempo de tanta asfixia a nivel global en cuanto a valores hu-manos, sociales y económicos nuestra única preten-sión es darnos un respiro de tanta impostura a todos los niveles y si alguien se siente aliviado escuchando nuestro disco, creemos que hemos conseguido el objetivo… Artísticamente el concepto es “ser flor en vertedero”, no sabemos si esto es un mensaje opti-mista o pesimista; es el eterno dilema del vaso medio lleno o medio vacío.

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¿En que se inspira o cuales son las influen-cias de Visión Sonora a la hora de componer? Todo lo que nos rodea, pero no empachándonos de tanta sobreinformación; una conversación con el pescade-ro, una noticia, un gesto , una buena o mala película , una gran canción….esta entrevista (risas). ¿Cómo entiende Visión Sonora el concepto de la música? y ¿qué quiere expresar con ella? La música como concepto es muy amplia....en Visión Sonora queremos ser pequeños artesanos de cancio-nes. Nuestra única función es poder contrastar con el oyente…y que éste empatice con la canción. ¿El por qué lo hacemos? Creemos que para Visión Sono-ra es una especie de terapia de grupo.

En estos tiempos duros para la música, ¿Qué opinión tiene Visión Sonora del panorama musical andaluz? Andalucía es el sustento cultural de este país. ¿Panorama Andaluz? Hablar de panorama An-daluz es hablar de panorama nacional. Sabemos que vuestro nuevo trabajo ha sido grabado en los estudios “La Mina” de Sevilla junto al productor Raúl Pérez, el cual también ha produ-cido trabajos de otras bandas como: Pony Bravo,

The Baltic Sea, Maika Makovski. ¿Cómo fue la expe-riencia de la grabación? Exquisita. Estuvimos 20 días disfrutando de la producción y grabación de Oxigeno además aprendiendo y trabajando codo a codo con el productor más prometedor de este país.

En la búsqueda incesante de nuevos soni-dos que venís realizando, ¿Qué sonidos podemos encontrar en Oxigeno? No hemos buscado fuegos de artificio. El disco no suena excesivamente alto, no hay reverberaciones artificiales, es un disco orgáni-co, dinámico y con el soplo de los antiguos vinilos…La gente puede cocinar y escuchar el disco sin que se le queme la comida.

¿Cuándo será la fecha de presentación del nuevo trabajo al público onubense? El 17 de mayo en el Gran Teatro de Huelva a las 21:00. A la entra-da o a la salida se podrá adquirir un ejemplar físico de Oxigeno. Desde aquí hacemos un llamamiento a nuestros vecinos y paisanos para que puedan parti-cipar del concierto, no solo escuchando nuestra mú-sica sino siendo actores principales del rodaje de un videoclip, además de ser espectadores de excepción de un espectáculo visual dirigido por Abraham López.

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La crisis que nos azota desde 2008, como consecuencia del colapso que ha sufrido la economía mundial a través del desmoronamiento de la cons-trucción, las llamadas “hipotecas basuras”, el aumen-to del paro, la incapacidad para la creación de nuevos empleos, el endeudamiento creciente de las familias, el recelo de la banca, la dependencia económica y financiera de los mercados como consecuencia de la globalización, etc.….nos lleva a escuchar continua-mente la palabra “rescate” y “paquete de medidas del gobierno aprobado por los 17 de la zona euro” para Europa o “prima de riesgo”. Pero ¿realmente somos conscientes de la magnitud de la crisis eco-nómica que nos azota? ¿Hemos entendido en qué consiste ésta? ¿Están preparados los gobiernos, de la zona euro, para salir de la misma? ¿España será capaz de aplicar, todas y cada una de las exigencias, de sus socios europeos cueste lo que cueste?

No soy especialista en Historia Económica, pero si se algo del Pensamiento Económico Contem-poráneo y, no puedo dejar de acordarme en estos momentos de Jonh M. Keynes y su teoría, el keyne-sianismo, que coincidió en el tiempo con el modelo político del New Deal desarrollado por el presidente estadounidense Franklin D. Roosvelt. Quizás aquellos que habéis empezado a leer estas líneas no sabéis de lo que estoy hablando, pero si os menciono “los felices veinte” o “el crack del 29” podemos hacer un poco de memoria y retrotraernos a una de las crisis más importantes que el liberalismo económico, de A. Smith y D. Ricardo, desde que se implantara, dejan-do a un lado la injerencia del Estado en los asuntos económicos de la nación y, popularizándose la frase “laissez faire, laissez passer”, ha sufrido.Por lo tanto, si tuviera que escoger hoy en día una fecha que a lo largo de la historia fuese importan-te para el momento en el cual estamos, sería el 24 de octubre de 1929 “el jueves negro” de Wall Street. Aquel día, la bolsa más importante del mundo se desplomaba llegando a mínimos históricos de las co-tizaciones de valores, llevando a la venta masiva de las mismas, favorecido por la especulación bursátil, ya que los beneficios potenciales no repercutían en las empresas, la “burbuja económica”, ¿cuántos pa-

ralelismos, no?. A partir de aquel momento, la ban-ca estadounidense sufrió un duro revés, ya que tuvo que hacer efectiva cantidades ingentes de dinero en metálico porque los pequeños inversores y ahorra-dores, retiraban sistemáticamente sus ahorros para salvaguárdalos y no podían recuperar los prestamos realizados, llevando a la quiebra a muchos de ellos. La recesión económica en la cual entró la “gran potencia mundial” del momento llevó a cifras de parados ele-vadísimas, al subconsumo y a la caída de los precios por el aumento de los stocks, tanto en la industria como en la agricultura. El gobierno de aquel momen-to de J. Edgar Hoover no supo en aquellos momentos reaccionar ante la misma, aún con su ingente obra: la Presa Hoover, obra faraónica que pretendía mitigar la situación de desempleo. La situación internacional, en aquellos momentos, facilitó que la crisis se exten-diese por la dependencia económica y financiera de EE.UU. Los estadounidenses tuvieron que esperar a la llegada al poder de Franklin D. Roosevelt y su políti-ca del “New Deal” para empezar a salir de la recesión y, cómo no, de los postulados de Keynes (frase suya “A largo plazo todos muertos” de ahí la importancia que dio al corto plazo en sus análisis), el cual, pro-pugna que el estado ha de intervenir para impulsar la actividad económica mediante un incremento del gasto público e impulsando la demanda. Éstas medi-das coadyuvaron a la que la economía norteamerica-na saliese de la recesión en la que había entrado.Posiblemente las similitudes y los paralelismos no puedan establecerse claramente entre una y otra, pero lo cierto es que ambas representan un antes y un después en nuestro sistema económico. Si bien, hemos superado los postulados liberales de Keynes, posicionándonos en el neoliberalismo actual, que sin duda, no deja de ser heredero de los principios libe-rales que “gobiernan” nuestra economía, el “laissez faire, laissez passer” en su máxima expresión. El Es-tado no controla los resortes ni mecanismos econó-micos: el mercado de valores, la privatización (oferta versus demanda), la banca….todo ello ha hecho que el poder económico, en nuestro tiempo, supere al poder político dejando a los estados a merced del mismo. Los gobiernos actuales, deciden que “reducir

¿Dónde está nuestro

“jueves negro”?Por Rosa Mº Gómez Santos

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el déficit” frente a esa “prima de riesgo” que se esta-blece como pulsómetro económico (que depende de las valoraciones hechas por empresas privadas que otorgan “confianza” o no a los países en función de los intereses económicos de quienes las sustentan) es la solución para paliar y mitigar la espiral en la que nos vemos sumergidos. Recortes y más recortes en detrimento de la clase trabajadora para poder “sa-lir de la crisis y crear empleo”. De ahí el inicio de mi artículo, si el Estado no es capaz de favorecer la in-versión pública, ya vemos que la privada se mueve en otro nivel y que actualmente no están interesados en invertir si no en capitalizar y en no mover éstos, y no favorece el consumo para favorecer la deman-da, ¿cómo, a través de tanto recortes, las familias de este país van a salir adelante? El círculo vicioso no termina de cerrarse: subida de impuestos, bajada y congelación de los salarios, subida de precios de los productos, co-pago sanitario y educativo, reducción de las ayudas por prestación de desempleo y depen-dencia, abaratamiento en los despidos, salarios mise-rables y largas horas de trabajo….todo ello llevará al subconsumo, a la desaparición de la “clase media”, al hundimiento del “estado del bienestar”, a la econo-mía sumergida, al “estraperlo” o mercado negro…y ¿quién querrá rescatar un país en estas condiciones? O ¿quién querrá vivir en un país sin oportunidades?La necesidad de que el Estado español empiece a crear empresas públicas e invierta en las mismas y active mecanismos de control en los mercados finan-cieros y en la economía española parece un “salto en el tiempo y retrotraernos a postulados económicos y políticos ya superados”… pero se vislumbra como una posibilidad para paliarla , de ahí el inicio de mi artículo, de ahí el que se haya elegido ese momento…Quizás alguien pueda pensar que las soluciones de antaño no pueden aplicarse actualmente, que nada tiene que ver lo que pasó hace casi cien años con la realidad que estamos viviendo, pero ¿alguien puede decirme que las medidas que se están aplicando ac-tualmente están dando resultados? ¿Alguien puede, sin temor a equivocarse, afirmar que los mercados se autoregularan “solitos” sin necesidad de que los estados intervengan pues está demostrado, que el sistema capitalista tiene estos altibajos, y que el final de la crisis está cerca? Quizás sea así…pero a costa de qué y de quienes. Mi intención al escribir estas líneas es que pensemos que aunque nuestro país está inmerso en una Unión Económica Europea, que tenemos una moneda única y que vivimos en un neoliberalismo económico…es que miremos a nuestro vecino grie-go, que tras dos rescates europeos y un tercero en

puertas, se le “abre la puerta a la salida de la euro-zona” como posibilidad a que “no caiga el resto” y pueda salir “de la crisis”. La solidaridad europea so-bre la que se construyó la Comunidad Económica Eu-ropea en el Tratado de Roma de 1957, como unión política, apuntalado por el Tratado de Maastricht de 1992 ha dado paso a la “supervivencia” económica de los estados integrantes de la zona euro, exigiendo medidas de contención a los estados integrantes de la misma, para salvaguardar los intereses propios de cada país. Los rescates de los países de la zona euro han incrementado tanto o más su deuda exterior con sus “propios aliados” (la deuda griega está en ma-nos de inversores alemanes) que hace impensable que hablemos “de solidaridad europea” buscando la pervivencia de un sistema económico común que ha demostrado su inviabilidad para dar soluciones eco-nómicas a países tan divergentes y diferentes como los que lo integran. Si no miremos como Francia y Alemania “exigen” a España que aplique cuanto an-tes medidas restrictivas para no incrementar más su “prima de riesgo” y rebaje el “déficit”….nadie quiere los bonos españoles ni su deuda, el interés que paga-mos por los prestamos que recibimos son altísimos en comparación con los alemanes o franceses y, sin embargo, continuamente nos hablan de que “tene-mos que sacrificarnos en estos momentos” para que se cree empleo y salgamos lo antes posible de la cri-sis ¿cuánto más se puede sacrificar un pueblo que en breve no tendrá nada? Por ello, me reitero en la frase de Keynes “a largo plazo todos muertos”. Parece que nadie es capaz de ver fin a esta situación, lo cierto es que l@s español@s miramos hacia un futuro incierto y, pensamos en un pasado lejano que, en breve vivi-remos y del que sólo teníamos noticias a través de los libros, el cine o nuestr@s abuel@s.

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lecturas no obligatorias

Por Carmen Ramos

LA FUERZA DE LA POESÍA Tendría yo alrededor de los 16 años, cuan-do tuve la suerte de participar en el montaje de una obra de teatro que se lanzó a realizar la profesora de literatura. Con decorados hechos por el pintor Juan Carlos Castro y más voluntad que profesionalidad, era sorprendente ver como unas adolescentes éra-mos capaces de superar la edad, la vivencia y todo lo que hiciera falta para que los personajes de aquel texto quedasen prendidos para siempre en nuestro

corazón. La fuerza de la palabra se hizo carne en cada una de aquellas niñas y yo, desde mi posición entre bambalinas, tuve la suerte de disfrutar de ese mo-mento. Muchos años después han resonado en mis adentros las hermosas palabras declamadas en el es-cenario al evocar los mejores momentos de mi ado-lescencia.

En un escenario dominado por el negro y la

Momento dramático en la representación de

LA CASA DE BERNARDA ALBAde Miquel Ortega

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claustrofobia de unas muchachas, es una vieja llena de sabiduría la que rompe la imagen como un rayo que atravesara el cielo tormentoso. Es la poesía la que sale a flote de todo aquel sinsentido, poniendo quizás más sinsentido. La poesía que escapa, que no calla, que no obedece a ningún principio real.

Durante toda la obra se la intuye golpeando, como el caballo en la cuadra, ambos intentando es-capar. Vuelve a aparecer como una reina extraña en el último acto, disfrazada de imposible maternidad. En una nana totalmente descabellada María Josefa, la abuela loca y encerrada, es capaz de unir la ternura (yo te daré la teta y el pan) y la burla (Bernarda cara de leoparda, Magdalena cara de hiena) Son sus de-dos firmes los que arrebatan de las manos de la cria-da las llaves para escaparse. No hay imposibles para la poesía, que escapa, que se infiltra por las rendijas de los cubículos en los que nos escondemos cada día.

Para encontrar a María Josefa hay que hacer labor de desbrozado y apartar a los personajes principa-

les (Bernarda y sus hijas). Su primera aparición es disfrazada de novia en una casa llena de mujeres solas, amargadas y en-claustradas. Se ha escapado del encierro al que su hija la tiene sometida por temor a que las vecinas la vean. Y habla sin ver-güenza. Es la nota disonante y sin embargo la más cuerda en toda esa locura de normas, hi-pocresía y falsedad en la que se convierte la casa de Bernarda Alba.

Es quizás “La casa de Bernarda Alba” la obra de teatro escrita por Federico García Lorca que más veces he visto representa-da y la que más me gusta. Escri-ta poco antes de su muerte, hay versiones de todo tipo y para todos los gustos, adaptaciones al cine e incluso intentos de mo-dernización de la obra. He visto desde una Bernarda encarnada por un bailaor flamenco hasta la última adaptación arriesgada y hermosa de Pepa Gamboa, don-de el elenco lo forman mujeres que viven en el asentamiento

chabolista de El Vacie.

No ha sido fácil: llegar a esta línea y hablar de Federico sin caer en el tópico es como pasar cada día por una acera donde han abierto un agujero e inten-tar saltarlo. Es inevitable, y al final caemos dentro y terminamos hablando de lo que nos marcó el “Ro-mancero Gitano”, de lo que hemos disfrutado con su teatro, de lo que nos sorprendió “Poemas en Nueva York” y de todo el misterio que aún hay en torno a su vida y a su muerte, de todo lo que rodea a García Lorca como personaje y como mito y que nos hace olvidar que ante todo fue uno de los mayores crea-dores del siglo XX.

“…¿Me habéis oído? ¡Silencio, silencio he dicho! ¡Silencio!

Día viernes 19 de junio, 1936.

Telón rápido.

FIN”

Más información:

•“La casa de Bernarda Alba” – Federico García Lor-ca. Cátedra. 2005.•“Una casa para Bernarda Alba”. Documentos TV: http://www.rtve.es/alacarta/videos/documentos-tv/•“Vida, pasión y muerte de Federico García Lorca” – Ian Gibson. DeBolsillo. 2006.•Fundación Federico García Lorca: http://www.gar-cia-lorca.org•“El grupo poético del 27” – Ángel González. Visor Libros. 2005

Momento dramático en la representación de

LA CASA DE BERNARDA ALBAde Miquel Ortega

Ediciones En Huida

www.edicionesenhuida.es

Miles de versos en un solo Click!!

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Podría empezar hablando en este mi primer artículo, sobre directores de moda, de compañías na-cionales que hacen lo de siempre, de espacios con-temporáneos que son lo mas. Pero como buen ofi-ciante que soy, me gusta la artesanía pura, la que se hace con el ingenio de pocos recursos y da grandes resultados, la que busca llegar al máximo de público en espacios inventados, ese arte suicida que es difí-cil que sobreviva sin el apoyo de instituciones pero es valiente y sobrevive porqué llevamos siglos con el maldito dicho en nuestras espaldas de que “El teatro está en crisis.”

En crisis está nuestra sociedad actual, total-mente corrompida y desestabilizada por un reducido grupo de insensatos, y ahí es donde las cosas se com-plican, donde las subvenciones al teatro se han eva-porizado, para pequeñas compañías de teatro o me-dianas y la gente del cine y la música ven por primera vez peligrar su supervivencia. Momento en el que los ayuntamientos se han convertido en tesoreros oficia-les del teatro porqué los cómicos somos unos golfos derrochadores, no sabemos administrar nuestros di-nero y ellos se encargan de guardarnos nuestras ta-quillas. Por eso voy a hablar de cosas pequeñas, que son pequeñas en el mundo de los porcentajes pero grandes en el mundo del arte. En primer lugar les quiero hablar de la compa-ñía Teatro Galo Real, una compañía que se expone al público con el afán de llevar a la escena textos clási-cos, como la del ingles de Stratford, la brillante obra

de Guillén de Castro Las Mo-cedades del Cid, o una colabora-ción para llevar El Montaplatos de Harold Pinter y dirección de Ta-mzin Townsend a escena, y por último el estreno esta temporada con un Calderón para mi total-mente descono-

cido, pero que supe sería una delicatesen llamado La gran Zenobia.

Les he visto de todas las maneras, en esce-narios, en el metro cargando las pesadas maletas con decorados y demás enseres para el espectáculo. Siempre con la ilusión de actuar como combustible.

Al mando de la nave dos locos del teatro, Gus-tavo Galindo e Iván Luis, cómicos, grandes actores, uno productor, actor, iluminador de la compañía, el otro director de escena, adaptador de textos, como lo hacían a la antigua usanza Moliere o Eduardo de Filippo que eran primer actor y ejercían el rol de di-rector, en fin, lo que se ha hecho en toda las compa-ñías de teatro, las que sobreviven lejos de los gran-des circuitos comerciales. Galindo, se compromete en cada montaje para llevarnos a escena las voces de otros siglos de una manera completamente con-temporánea, cuando digo contemporánea no quiero decir que no se entienda o que sea moderna, hablo de que consigue que nos olvidemos que hablan en verso, que los actores viajen de una manera actual llevando la esencia de Calderón. Que sus elementos escenográficos y de atrezo son pura imaginación, que pueden hacer La gran Zenobia, la reina de Palmira, cambiando multitud de localizaciones solo con la magia de las luces que Iván le aporta al espectáculo. Que por esta compañía, en diferentes montajes, han pasado un gran ejercito de actrices y actores, dignos de ser mencionados en el Olimpo.

El Carromato de laLibertad Por Gérman Torres

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Su historia empezó cuando Galindo hizo una adaptación de Otelo que se representó en la Comu-nidad valenciana. En el 2006 estrenaron El mercader de Venecia, espectáculo que sumó muchas represen-taciones en la capital y de la que algún crítico supo ver el nacimiento de una nueva forma de entender los clásicos. Después Iván Luis se atrevió en la di-rección, haciendo un viraje fuera de los clásico con Bonnie and Clyde, revisión de esta sanguinaria his-toria de amor que consiguió el premio a la mejor es-cenografía en el Certamen de teatro independiente Ciudad Lineal a escena, y quedó finalista como mejor montaje y mejor actriz en el mismo certamen.

Los pequeños también tuvieron la oportuni-dad de ver una fantástica adaptación de Cómo gus-téis de William Shakespeare, con el titulo de Peque-ño cuento de Shakespeare, obra que todavía siguen representando y que hizo las delicias tanto de peque-ños como de sus adultos acompañantes.

Pero para mi el giro de la compañía nace con Las mocedades del Cid de Guillén de Castro. Aquí Galindo hace una certera dirección de actores, to-dos muy comprometidos con la escena, todos ellos jóvenes, y talentosos. Iván Luis quien encarnaba efi-cazmente la atormentada mocedad del Cid, bajaba a los infiernos acompañado de una fantástica Jimena interpretada por Mirian Cano, y una estupenda Án-gela Boix que se desdoblaba en dos personajes, daba igual el sexo de este, porque la rabia y la masculinidad salían de su boca, al igual que la femineidad de Elvira, y remataba el reparto el mismo Galindo desdoblán-dose también en el Conde Lozano y Don Martín, y el personaje del coro en la voz del elenco. Cuatro ac-tores fueron capaces de contar la historia de forma certera sin mas elementos escenográficos que una

buena luz, la dirección ágil, y un deseo por expandir los textos clásicos. Ese para mi fue el espectáculo con el que la compañía empezó a tomar forma. Tuvieron innumerables funciones y participaron en el Off Al-magro de 2011. Todo un lujo.

Ahora la compañía acaba de estrenar La gran Zenobia. Este texto maravilloso de Pedro Calderón de la Barca, es interpretado de forma veraz y apasio-nada, dándole el punto trágico que requiere la rei-na de Palmira por una magnifica María García-Alix, actriz con buenas dotes para la tragedia, un Jesús Gago que le propicia a Decio el factor humano de las tentaciones, Gustavo representa al emperador Au-reliano, ser que transita el las cumbre del miedo y que se enfrenta con sus ejércitos al ejercito de una mujer, y Nadia y David dos actores que se desdoblan en personajes tan ricos en matices como en huma-nidad. En este montaje Iván Luis queda a cargo de la producción y de la iluminación. ¿Diferencia con res-pecto a los otros montajes? Esta compañía cada vez dice mejor el verso, sus puestas en escenas son mini-malistas pero efectivas, y están acertando en la línea de investigación que están haciendo con los clásicos. Espero que su proyecto sobreviva en el tiempo, como el de la compañía madrileña Grummelot. Compañía que junto con Galindo han participado en varios la-boratorios con miembros de la exitosa e innovadora compañía Cheek by Jowl dirigida por el gran Declan Donellan.

Ellos me evocan, aquella maravillosa escena de la película Moliere de Ariane Mnouchkine, cuan-do después de una representación en un carromato, este eleva el vuelo y soplado por el viento, corre por los prados como un símbolo de libertad. Así les veo, volando libres y sin amarras, todavía con una carrera por delante para surcar. Celebro que persistan, que luchen y busquen su espacio en estos tiempos difíci-les, pues precisamente en estos tiempos es cuando el público busca la catarsis para poder olvidar la co-tidianidad de este momento de crisis, y eso es algo que el teatro a hecho a lo largo de los siglos.

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GEC

Do it now!/Hazlo ahora!DINOW. Cuyos dogmas podrían simplificarse en una idea: “la organización del caos produce arte en estado puro”. Es una certeza matemática que ya se expande a través de un méto-do de interpretación y otras creaciones plásticas y escénicas, donde el conocimiento es la fuente de todo.

EXPOACTIVAMOISÉS FERNÁNDEZ ACOSTAHEIDI GARCÍAJAZZ VILÁVÍCTOR PULIDOPATRICIA RECHERMANUEL DÍAZ

DINOWDINOW

Jazz Villá

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er parte de esta creación te despierta, te transforma, te engulle, te hace sentir un artista del arte, un salvador del ingenio humano sin cadenas primigenias ni obligaciones con la mutilada libertad de las ideas, las formas y los pasos. Esos donde Narciso, que no soy yo, se entrega al engaño, al juego que es su afán genético de crecer (¿vivir acaso?) apuntalando su imagen en el mundo, al que llama así porque todos así le llaman.

Lo que ven es él, una flor germinada con pétalos oscuros que desprenden el cotidiano aroma de su civilización; la del encanto y las trincheras corporales desplegadas por el certero olfato de un bisturí, invicto en sus batallas contra el tiempo de las pieles.

S

FOTOGRAFO Y DIRECTOR DE ARTE: MOISÉS FERNÁNDEZ ACOSTA PINTORA: HEIDI GARCÍAMODELO/ACTOR Y TEXTO: JAZZ VILÁ

PÉTALOS DE UN NARCISO

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GEC 19

Imposibles

Solo quedan fragmentos de felicidad,pero son imposibles de hallar.

Tantos pasos invisibles,tantas carreras entre la felicidad y la muerte…

han borrado su rastro.

Curiosidad

¿Quién estuvo allí cuando los ángeles se desvanecieron?

¿Quién pinto el cielo para que el mar fuera azul?¿Dónde habita el alma si el cuerpo es un límite?

¿Quién guarda las palabras del silencio?¿Cuándo olvidamos el respeto por la tierra?

¿Si el tiempo se detiene, lo harán los hombres?Quizás la única respuesta,

sea no hacer tantas preguntas.

Pinta algo para mi

Estoy condenado, preso en el desierto de la incertidumbre,

esperando el segundo que tu mirada escape a los te-mores,

y se pose en mis pupilas buscando refugio.Mientras aguardo ese pétalo del tiempo,

me consuelo maquillando sueños con la música de tu pecho,

con el agua oscura y caprichosa de tus cabellos,con los miles de dibujos que ahora duermen

en alguna edad de tus manos,con la inmortal imagen de tu cuerpo vestido por el

viento.

Dieta

He nacido de la música y de la cera.Vivo vigilado por las armas y los peces sin aliento.Duermo con plumas afiladas para cortar sueños.

Y adelgazo observando cuadrosde pintores aún dormidos.

Rebelión

Cuando no me queden lágrimas en las venascomenzaré a escupir ingratitudes contra los bustos de la perfección.

A lapidar las imágenes idílicas, fabricadas por orugas eslavizadas

en talleres que trabajan horas de doce días.

Mirada

Has visto alguna vez la belleza de una flor cultivada en las manos de la inocencia.

Seguramente,pero has desorientado tus pupilas muy pronto,

justo cuando el salvaje brillo comenzaba a doblegar la aurora.

El saber

Yo pude ver aquello que nadie, pero desde entonces,

ni almas ni destinos se acercan a mi espejo.

Reflejos de un rostro

Apenas le reconocí.En aquella foto besada por las polillas

y teñida por el reloj infinito,desbordaba por su rostro la inocencia azul,

el olor muscular de la juventud,la vida eterna de los vivos.

Ahora parece el espejismo de un desiertoo el fósil de una marioneta sin alma.

[Algunos de estos poemas y pensamientos pertenecen al poemario “Lento Delirio” del pro-pio Jazz Vilá, pero han sido modificados o incluidos en este recopilatorio, para complemen-tar la serie fotográfica Pétalos de un Narciso

[

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La perfección de soñar

Quiero desaparecer, no importa donde, solo desaparecer,

descender por una escalera infinita, atravesar el mundo y caer en el vacío,

en un sueño inerte donde la llama de las velas arda, sin derretir la cera de mi cuerpo.

Canto frío

El silencio está aquí,junto a los espejismos,

gritando polvo,mirando las agujas descarnadas,

rojas, efímeras, dispares.

Dominando los enjambres preñados de un tulipán corrompido,

que teje espumaspara olvidar la fragilidad de su cuerpo.

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La mirada añeja

Inmóvil,Bajo un cielo gris y un manto rojo,

Me inquieto por oír, que no escuchar,La rápida sucesión de notas

que forman el cuerpo invisible de alguna canción frenética.

Quedo al descubierto, allí está ella… blanca.

Me observa… sin temor le regalo mis pupilas

y un trozo de memoria para que no se sienta sola.

Naturaleza muerta

Ya no quedan raíces en tus dos amaneceres.Los tallos finísimos de las abejas se amontonan.

Ya no queda cielo, ni agua, ni nubes.Solo frías gotas de la angustia y olvido.

Ya no queda armonía en tu figura.Un mapa decora incoherentemente tu cuerpo,

Tus uñas negras y tu sexo inverosímil.

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FOTÓGRAFO Y DIRECTOR DE ARTE: MOISÉS FERNÁNDEZ ACOSTA PINTOR: VÍCTOR PULIDO MODELO/ACTRIZ: PATRICIA RECHER TEXTO: MANUEL DÍAZ

DOBLEESPIRAL

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IUna brisa en mis pies destapadosAbrí los ojos y alguien murmuró“Soy Melkart. Sal a conocer a mi vástaga”

Me precipité hacia el estudioLas hojas secas se cercenaban al airecon la peor de las violencias: la implícita

Había allí un enorme lienzoTodo estaba cubierto por pláticosHabía cámaras y focos por todas partes

Habia un renombrado pintorDe enérgico apretón de manosy un fotógrafo de mirada penitente

Y, entonces, conocí a LouchetteLa musa que volvió a la adolescenciamontada a lomos de mi Hijo de self service

IILa imaginería de su espaldaMe hizo filtrar lagrimas a raudalesPor la pureza de una tierra ya perdida

El sujetador quedó encalladoSobre el respaldo de aquella sillaOjalá hubieras llevado un collar de perlas

El fotógrafo media la luzEl pintor mezclaba los óleosy todos fumábamos muchos Marlboro

Las enaguas se evaporaron¿Ah!¡La mística del desnudo!¡Divino obsequio de la represión católica!

Su sexo era ralo y estrecho“Voy a hacer estiramientos”-dijo.y nos observó a través de sus piernas

IIIMis manos hacían palabrasLas letras saltaban del cuadernoY Madonna las modulaba en el estéreo

Quintando su imagen a la cámaraSe embadurnó la piel de pinturaY, entonces, por fin menguó el deseo

La pintura tiene ese hálito puerilMe evoca escenas de la guardería¡Ah, Louchette! Ya sólo el lujo me excita

Su hendidura resplandeciaPor el honor-decia-de servira los tres cachorros de entre los ríos

Nuestras frentes brillabanDescorchamos un MOët ChandonOjalá tus párpados hubieran sido negros

IVAhora sonaban The BirdsEl estudio era un caleidoscopioTodos empezábamos a estar colocados

La Viuda Blanca reflotabaSe espiralizaba con los coloresy los colores abrían el gozne de la mente

Mis pupilas eran azabachesy de ellas brotaron enredaderasQue comenzaron a rebautizarlo todo

Aquella factoría ase transformóEn un fértil valle de pimientos rojosIluminados con furia por los cuarzos de Ra

De su entrepierna emanabanSabios aforismos sobre la vida;Dictados por el misterio de la totalidad

Louchette [a Patricia Recher]

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V

Ahora sonaba “This is The End”De Jimbo, el Amo de las puertasy como un holocausto lo vivimos todos

Las burbujas se desparramabanPor nuestras gargantas y cuellosOjalá hubieras vestido lentejuelas

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Aquella brisa inefable regresóPara despojarnos de las clámidesMe puse a danzar y hacer libaciones

Alzamos la vista al cielo-Aunque no había cielo sino techo-Y un alegre diluvio manó de nuestro ojos

¡Gracias Melkart por transformarCigarrillos en vergeles de hierbaY latas de cerveza en ríos de champán!

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MAKING OFF

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Aún puedo sentirlo, ese instante único en el que el árbitro levantaba su mano a mi favor, ese pre-cioso instante en que me proclamaba campeona de España infantil. Aún puedo ver cómo salía corriendo del tatami y me abrazaba a Luis, mi antes entrenador, cómo mis abuelos me felicitaban con lágrimas en los ojos, las palabras de las personas que se dirigían a mí…en cierta manera, aún después de los años, me resulta fácil y bonito recordarlo, son esos momentos claves de una vida que aún apenas está escrita, esos días que permanecen inalterables en la memoria sin marchitarse por el paso del tiempo. Como si de una tira de imágenes se tratara, también puedo recordar otros muchos momentos de mi vida, aunque quizás no tan perfectos ni claros, tal vez debido a la inten-sidad o el cariño de éste que describo. Han pasado días desde ese 14 de mayo de 2005. He caído, me he levantado, he llorado, he reído, he aprendido, he so-ñado, pero por encima de todo, he elegido una forma de vida y un camino, he sentido y me he enamora-do fervientemente de un sueño. Puedo decir que he llegado a comprender el trasfondo de todo: en esta vida, las cosas que realmente merecen la pena cues-tan trabajo conseguirlas, y es necesario lucharlas hasta el final, poniendo en ello el corazón, el alma, y todo lo que tengamos dentro. Recuerdo las palabras de una campeona de Europa cadete que decía “no importaba el resultado, porque yo sabía que había puesto todo en el tatami cada día”.

He querido rescatar este momento en el tiempo y partir desde aquí porque pienso que real-mente ha sido el que ha encauzado mi camino, son esas pequeñas cosas que hacen que cambie toda una vida, que se elija uno u otro camino, por muy poca diferencia que haya entre ellos, pero que al final del recorrido poseen destinos totalmente opuestos. A partir de ese día, muchas cosas cambiaron en mí. Entré a formar parte del equipo nacional de Judo y, consecuentemente, viajé, conocí y aprendí. Hasta ese momento, fueron los años más intensos de mi vida, me abría a un mundo hasta entonces descono-cido para mí. Los hechos sucedían y yo solo disfru-taba, aunque también lo pasaba mal, al fin y al cabo era solo una niña. Estos años me hicieron madurar primero deportivamente, pero también y de forma muy tajante me hicieron madurar en lo personal. No obstante, yo, anteriormente, tan solo hacía Judo por diversión, aunque bien es cierto que siempre hubo algo diferente en mí respecto a todos mis compañe-ros. Los años fueron desfilando y la obra resultaba no ser tan bonita como dictaba el guión. Cada vez había que entrenar más tiempo y con más intensi-dad, se empezaban a rechazar cosas para asistir a to-dos los entrenamientos, había que empezar con la temida preparación física, aparecía el problema del peso, y como en la mayoría de estas historias, los resultados dejaron de acompañar… en fin, una serie de prioridades que llegadas a un punto me hicieron

decidir a la fuerza. La cuestión era seguir o no seguir, con todas sus consecuencias, ya que, pese a mi edad, lo que tenía clarísimo es que no iba a hacer nada a medias. O todo o nada. Si me tiraba a la pis-cina, iba a ser apostando con todo y haciéndolo como nadie jamás lo hubiera hecho. Normalmente, la gente se hubiera decantado por la opción fácil. Yo no quería ser una más. Puedo decir que esa decisión no me la hizo tomar ni mi familia, ni mis amigos, ni mis personas más allegadas. La fuerza que me empu-jaba, indescriptible para mí, puedo asegurar que estaba en todo eso

LA FORJA DE UN SUEÑOPor Almudena Gómez Sierra

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que yo sentía y sigo sintiendo en mi interior y que me cuesta tanto explicar a veces, porque realmente yo sabía que había algo muy fuerte dentro de mí, era algo que no se borra con el paso de los años, nunca se marchita, nunca se apaga, porque yo lo sentía de verdad, sabía que estaba ahí: yo tenía un Sueño. Lo pongo en mayúsculas porque es el Sueño, el Sueño de mi vida. Creo que es lo más valioso que tengo, aunque no se pueda ver ni tocar, pero se puede sen-tir, y es el culpable de mi forma de ser, de que yo no fume, de que mi vida se rija atendiendo a unos prin-cipios, de mi disciplina, de la intensidad de mi perso-na, de mi felicidad…de que yo no sea una más aquí. A veces he cometido errores que me han hecho ale-jarme de esa meta, pero siempre y cada una de mis noches he dormido pensando en él, todos y cada uno de mis actos han sido realizados con ese sueño en mi cabeza, porque desde el día en que me di cuenta de lo que mi corazón decía yo he ido de su mano, nunca lo he soltado y me he prometido agarrarlo cada día con más fuerza. No se trata de decidir tener un sueño y así ser una persona muy afortunada que tiene algo importante por lo que luchar, ni una forma de bus-carle un sentido a tu vida. Realmente esto hay que sentirlo de verdad, no se busca, se tiene. Desconozco el momento exacto en que me di cuenta de lo que ocurría, pero sí que me recuerdo de pequeña, y ya lloraba cuando veía los momentos de las Olimpiadas, o cuando veía la celebración de algún deportista, o cuando observaba como alguien entrenaba y llegaba a sus límites. Supongo que ahí es cuando comienza la forja de un sueño, cuando empiezas a sentir cosas como esas. Lo de sufrir en los entrenamientos y cui-darse mucho viene después, primero han de existir estas sensaciones, pues serán necesarias y tu mayor arma para cuando los momentos duros acechen, re-cordar por lo que luchas y porqué lo haces así. Hay que sentir muy fuerte para poder llegar lejos, ya que son tantos los obstáculos del camino que si solamen-te fuera una ilusión, no habría manera de aguantarlo. Pienso que esta situación, tarde o temprano, siempre se presenta en la vida de cada soñador: ¿qué quieres y, cuánto estás dispuesto a dar a cambio? Se trate de lo que se trate. Una vez decidido, no es más que establecer prioridades y ponerse a trabajar. Aunque no es tan fácil como parece…recuerdo haber pensa-do muchas veces: estoy tan centrada en esto que me olvido de otras cosas fundamentales en mi vida. Pero funciona así, significa entregarse en cuerpo y alma a un objetivo, y sin garantías de éxito…es esa la magia que acompaña y rodea a todo este proyecto, por eso hay que saber disfrutar del día a día y del camino, perseguir la cima sin dejar de mirarla, pero centrán-

donos en subirla lo mejor posible y apreciando el pai-saje. Nadie puede dudar que esto es una forma de vida y una manera de enriquecer tu espíritu, es una puerta al mundo, a la formación, a nuestro desarrollo como personas; es lo más bonito a lo que se puede aspirar, porque no todo el mundo tiene algo de gran valor por lo que luchar, consecuentemente no tiene nada por lo que trabajar y esforzarse cada día, ni ilu-sión ni ambición por un destino, simplemente vive al día, sin saber que pasará al siguiente, sin la intensi-dad de esta vida que elegí: la senda del guerrero es un camino de acción.

Si mis padres me hubieran apuntado a na-tación, atletismo o gimnasia, la misma historia se hubiera repetido, porque no importa el nombre de la disciplina o la ocupación, lo realmente importante está más allá de las palabras. Son los valores que se esconden tras esos deportes los que realmente per-manecen para siempre. Si en vez de crecer sobre ta-tamis lo hubiera hecho sobre pistas de atletismo, me habría implicado igual. Mis ganas serían las mismas, me habría ilusionado con cada nuevos zapatos, ha-bría esperado ese día con la misma emoción, habría encontrado esa motivación que hace falta, y me ha-bría ido a la cama soñando una y otra vez que ganaba esa carrera que tanto deseaba. Si hablamos de estu-diar arquitectura o interpretación, estaríamos ante el mismo caso. Todo es tan simple como obedecer las normas que te dictan tus principios, y lo importante es tener la determinación y el valor de apostar con todo, ser capaz de vivir como un Campeón, con todo lo que ello conlleva. Yo puedo asegurar que no hay nada que más me emocione que observar cómo las personas pueden llegar a entregarse cuando están ante algo que les apasiona, es increíble la fuerza inte-rior que podemos llegar a desplegar si nos lo propo-nemos, y si encima tenemos el Sueño…la parte difícil ya está hecha, pero, no obstante, son pocos aquellos que aún con unos años a sus espaldas conservan al-guna ilusión de pequeño; es triste saber que en po-cas ocasiones las personas sienten esa magia y ese cosquilleo del que hace algo que realmente le gusta y le hace feliz; es verdad que la puerta entre la rea-lidad y los sueños permanece cerrada por siempre para muchas personas, demasiadas.

Ahora bien, ésta, mi historia, no sería la que describo sin la aportación de ciertas personas que me guían y acompañan de la mano, superando jun-tos los obstáculos y haciendo grande este Sueño. Mi vida siempre ha estado llena de personas. Y no, no hablo de cantidad, sino de calidad. Las puedo contar

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con los dedos de una mano, pero todas y cada una de ellas han sido decisivas e increíblemente influen-ciables para mí. Me han allanado el camino y sin ellas puedo decir que hoy no sería la persona que escribe estas palabras. Cada una me ha guiado y aportado de manera distinta, pero sin cada una de esas partes mi puzzle personal hubiera sido imposible de realizar. Hablo de personas que cambian vidas, de personas que marcan un antes y un después, de personas que yo he tenido la oportunidad de cruzarlas en mi cami-no. No sé si se tratará de suerte, destino u oportuni-dades que te brinda la vida, pero sin duda me siento afortunada de poder vivir experiencias tan intensas y acompañadas de la sabiduría y recorrido de éstas. Prefiero no decir nombres, ya que es innecesario, esas personas saben que son ellas a las que me refie-ro.

Uno me aportó el Sueño, el conocimiento, la ilusión y el comprender que la lucha más voraz se hace con el corazón, en definitiva, me enseñó a vi-vir, basándome en una filosofía y creyendo en unos principios cuya base era ganar la batalla que cada día

nos brinda la vida. Casi sin darme cuenta y de forma progresiva, se convirtió en mi inspiración, en mi más absoluto apoyo, era mi confidente, mi amigo, la voz de mi conciencia. En realidad, lo que hizo fue desper-tar algo en mí que ya existía, pero lo hizo de la ma-nera más perfecta que se podía hacer, avivando una llama y despertando un Sueño que ya vivía dentro de mí. Nunca había conocido a alguien así, ni creo que lo haga a pesar de mi edad, pues me cuesta creer en alguien con esa fortaleza mental, esa determinación, esa fuerza de voluntad y esa pasión y derroche de amor por un deporte. Podría decir que me enseñó a luchar con el corazón y el alma, con la ternura del amor por encima de todo. Me hizo madurar de forma acelerada, me hizo pensar como mujer, me enseñó de la vida y sus azotes, y por qué no, también de sus cosas más bonitas y sinceras. Puedo decir que jamás había conocido a alguien tan semejante a mí, sentía-mos de la misma forma, y cuando estábamos juntos el tiempo se paraba, no existía mañana, simplemen-te disfrutábamos. La conexión era tal que con solo mirarnos a los ojos sabíamos lo que queríamos decir, era como si nos hubiéramos conocido desde siem-

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pre, como si siempre hubiéramos estado unidos. No hablo en pasado, porque esto jamás comenzó ni ja-más acabará, simplemente existe, es algo atemporal; es esa sensación de estar tan unidos que parece for-mar un solo ser. Ambos sabemos que en el fondo so-mos almas gemelas y a pesar de los pesares esto no podrá cambiar jamás. Gracias. Otro me ofreció su entrega, su dedicación, el comprender que el día a día es lo que nos llena, el sentir la verdadera pasión y el entregarse en cuerpo y alma a una meta. Sin duda, cada hora, cada minuto, cada segundo del día me hace creer y me demuestra

que el camino, si se hace acompañado y en equipo es mucho más fácil e infinitamente más bonito. Es la parte que faltaba en mi vida, el toque de tranquilidad y serenidad a mi particular locura, la experiencia, el saber hacer y la organización y disciplina que me ha-cen crecer cada día. Junto a él siento que todo está en su sitio, me siento tranquila, protegida, en calma. Es mi guía, mi mentor, mi maestro, mi amigo, mi apoyo incondicional, mi amor, mi ilusión, mi compañero de fatigas en todas y cada una de las facetas de mi vida. No sabría que más decir para describir lo que siento, pues creo que con simples palabras no es suficiente.

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Al que siempre está ahí y nunca falla: te quiero.

Y una vez llegados a este punto, cuando ya me he declarado una soñadora y una loca en el sentido más bonito de la palabra, cuando ya me he vaciado y he expuesto con total sinceridad todas y cada una de las sensaciones que experimento en mi lucha diaria… solo me queda preguntarme: ¿dónde estoy?, ¿qué final tiene esta historia?, ¿es real, es una ilusión?, ¿qué pasa si no llego?… Estoy aquí, ahora, sólo existe este momento, y es el más bonito y perfecto dentro de todas las posibilidades que se hayan podido llegar a dar, porque así lo quiero yo. El hombre, en última instancia, es el máximo responsable de su realidad y, como decía un gran maestro, dótame de la serenidad suficiente para admitir que hay cosas que no puedo cambiar, de la valentía necesaria para cambiar las que son posibles, y de la sabiduría justa para saber dife-renciarlas. Estoy aquí de nuevo, en esa brecha entre el pasado y el presente, luchando como nunca y so-ñando como jamás habría podido imaginar. ¿Puedo pedir algo más? Yo he llegado a comprender, a base de mucho, que la Meta Única, el Último Objetivo, no es más que la felicidad absoluta que se esconde dentro de cada uno de nosotros. Yo soy muy feliz lu-chando así, y eso nada ni nadie puede quitármelo, disfruto cada día como una niña pequeña cuando no para de descubrir cosas nuevas. ¿Quién podría negarme o arrebatarme ese disfrute diario? Escapa bajo todo control. Yo sonrío con un kimono sobre mis hombros, tal vez también lo hiciera sobre dos ruedas, o tal vez bajo un casco de astronauta, pero éste ha sido mi Camino elegido, mi Senda, y para mí es per-fecto e inmejorable. No puedo negar que a veces me aterroriza imaginar que no cumplo muchas de mis metas, me aterra pensar que no llegaré, pero, ¿por qué perder el tiempo así? La vida es un misterio, es el gran misterio, pero no podemos perder el tiempo en descubrirlo. Yo solamente vivo mi día a día, siento mi rutina diaria como si fuera la última vez que fuera a vivirla, chillo más fuerte que nunca, lloro con todas mis fuerzas, sonrío como nadie, sufro como muchos, siento como pocos…¡vivo! En el sentido más literal de la palabra, ¡yo vivo!

Sería bonito y de lo más especial terminar esta historia real con un final imaginario y fantásti-co, pero ¿por qué mezclar realidad e ilusión? Lo más bonito de esta historia precisamente es eso, que no está escrita, que no está acabada, más bien acaba de empezar, acaba de nacer, como mi joven Sueño de tan solo 19 años, aunque para mí lleva toda una vida existiendo en mi corazón con la misma fuerza. Este

Sueño es joven pero también fugaz respecto a otras perspectivas de la vida, por lo que ya ha empezado a madurar, a establecerse firmemente, como ese fru-to que se ha cuidado durante tanto tiempo y ahora comienza a alegrar la vista con sus intensos colores. Es así que me siento en mi momento más tierno e intenso de todos los que he tenido oportunidad de vivir, porque es ahora cuando esto comienza a tomar forma seriamente, cuando se disfruta de verdad del gran reto que se ha decidido llevar a cabo, cuando la forja de un Sueño comienza a dar sus primeros fru-tos…es ahora cuando puedo decir que estoy viviendo mi Sueño, haciendo equilibrio constantemente como si de un artista se tratara entre la línea de lo impo-sible y lo posible, entre la realidad y lo imaginario, entre todos y cada uno de los límites de mi ser; este Camino es así, lleno de intensidad y de acción. Es en este momento cuando se empieza a tomar conscien-cia de todo lo transitado, de todo lo luchado, cuando se abren nuevas posibilidades que nos permiten se-guir avanzando…estamos a punto de salir a combatir frente a los mejores, recibiendo ayudas y apoyo de diferentes puntos, pero, por encima de todo, esta-mos creyendo como jamás lo habíamos hecho. Sería una blasfemia no disfrutar de este momento, aún sa-biendo que han de venir mejores, pero ¿qué es más puro y bonito que el momento presente? Al fin y al cabo, es lo único que tenemos y de la única cosa que podemos estar seguros 100%. A mí solo me queda seguir luchando y dis-frutando, e invitar a todo el mundo a entregarse por aquello que aman, y rodearse de todas las cosas que le hagan ser felices, y vivir como si fuera el último día sin temer a la muerte porque…lo realmente temible no es ella, sino no haber vivido como verdaderamen-te habíamos deseado. Luchad sin más herramientas que vuestra ambición, superad las barreras que os cohíben, y romped con los límites que atan vuestra felicidad. Reírse de la vida y de todo lo que le rodea, porque también eso es ilusión y misterio, reírse del mundo y de sus dificultades que la mayor parte de las veces creamos nosotros mismos, reírse sin más y por ningún motivo, y ante todo, no os pongáis tra-bas ni piedras en el camino, que de eso ya se encar-garán otros. No dejéis que la mediocridad anide en vuestras vidas, ni dejéis de buscar la perfección y la sencillez en vuestros propósitos, alejándoos de las irritables y fracasadas opiniones de aquellas perso-nas que se limitarán a tacharos de locos, pues a ellos les gustarían estar tan locos como vosotros, pero el miedo y la cobardía les hace mantenerse cuerdos. Perseguid la armonía y la esencia de cada acción que llevéis a cabo, ignorando a los pobres infelices que ya

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están vencidos antes de salir a la batalla, pues los que carecen de coraje y valentía siempre encuentran una filosofía en la que basarse. Sed felices en el estado más puro de la palabra, y no intentéis buscarla sin cese, porque la felicidad no se trata de un Fin o una Meta, simplemente está ahí, es un estado de ánimo. Yo, personalmente, juro seguir trabajando por ser al-guien en este mundo desconocido, desobedeciendo una y otra vez las conformistas y pesimistas directri-ces que la vida nos plantea, y soñando con tener un lugar en la época que me tocó vivir, porque somos un suspiro en relación a la duración de nuestra historia, pero no por eso podemos dejar que el tiempo nos su-pere y los años desfilen por nuestra persona sin dejar secuelas, recordando que tiene más valor la vida de los años que los años de la vida.

Y, por último, de nuevo, gracias a ti también, mi Sueño, al cual debo mi persona y toda esta mezcla de felicidad e ilusión que cada día me empujan hacia

la Meta sin pensar en el destino.

Un día, pasados los años, recordaré y volveré a leer estas líneas, las cuales siempre habían existido en mi cabeza y no había materializado hasta que al-guien o algo, quizás un concurso, me había invitado y motivado a escribirlas, haciendo participe a aquél que las lea de mi Sueño y del comienzo de mi histo-ria, porque como ya he dicho, esto acaba de empe-zar, es el principio, el nacimiento de un Sueño que perseguiré hasta el final.

“Dos caminos se bifurcaban en el bosque, y yo, yo tomé el menos transitado. Y eso lo cambió todo”. Robert Frost, poeta estadounidense, 1874.

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Podéis pensar, ojú que eso está muy arriba... Nada más lejos de la realidad. Tenéis 2 opciones, o doblar el mapa de España por la mitad y ya lo tenéis al lado; o plantarte allí en poco más de una hora en avión desde Sevilla (con opción low cost). Bilbao es una ciudad rodeada de un monte siem-pre verde, coqueta, amable, tranquila y muy fácil y cómo-da de visitar. En un fin de semana bien aprovechaíto, o algún puentecito, puedes sacarle todo el jugo. Y no sólo a Bilbao, también puedes aprovechar y acercarte en metro (por cierto muy moderno y premiado) hasta Las Arenas para ver el famoso Puente Colgante (patrimonio de la hu-manidad), y admirar las numerosas casas y palacetes se-ñoriales de lo que en su época fue la clase burguesa.

Bilbao es una mezcla de tradición y modernidad. A la zona del casco viejo y los grandiosos edificios de la Gran Vía (arteria principal), se une la modernidad de la zona del ensanche y Uribitarte; compuesto por moder-nos edificios y estructuras como las torres de Isozaki, el Puente de Calatrava, el Puente de la Salve, el Museo Gu-ggenheim, la Universidad de Deusto, la recién inagurada Torre Iberdrola (sede de la eléctrica),hasta llegar al Palacio Euskalduna (palacio de congresos y de la música). Todo ello conectado por un agradable y bonito paseo junto a la

ría; con la ventaja que todos van sucediéndose uno tras otro (en un paseo de 1 km encuentras todos). Merece la pena que déis también una vuelta por el Parque de Doña Casilda, junto a la Gran Vía.

En otro recorrido por la Gran Vía, y partiendo de la plaza Circular, podéis entrar un momento en la estación de tren de Abando y contemplar la inmensa vidriera que preside el hall superior. Siguiendo, vais encontrando los impresionantes edificios sede de los principales bancos, el Palacio de la Diputación Foral, hasta llegar a la Plaza Mo-yúa, auténtico centro de la ciudad. Aquí tenéis el edificio del Hotel Carlton y el palacete el que se se ubica la subde-legación de Gobierno. A escasos metros está el edificio de Sota, muy bonito también;y al final de la gran vía se en-cuentra la glorieta del Sagrado Corazón (principal entrada a la ciudad) con su imponente escultura. Para los futbole-ros, el estadio de San Mamés, La Catedral, se encuentra a escasos 200 metros de aquí.

Antes de adentraros en el casco viejo, podéis ver de pasada el edificio del ayuntamiento y la escultura de Jorge Oteiza que lo custodia. Llegando al casco viejo, po-déis pasear por el Arenal, y no dejar de ver la fachada de la Estación de Santander y el Teatro Arriaga (donde hay una oficina de turismo para informaros). A partir de ahí,

De escapada aBilbaoPor José L. Torres Moreno

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perderos por las innumerables calles y callejuelas del cas-co viejo, con sus muchos comercios y locales de hostele-ría. Para ver, la Catedral de Santiago, la Plaza Nueva y el Mercado de la Ribera. En cuanto al Alojamiento, es muy variado (desde pensiones hasta los 5*) y todos de calidad, con un amplio abanico de precios bastante ajustados desde hace algu-nos años. Además, están muy distribuidos por toda la ciu-dad. El Tryp Arenal, Petit Palace, Barceló Nervión pueden ser buenas opciones y muy céntricas. Qué deciros de su famosa gastronomía, ya sea por restaurantes como por sus famosos pinchos. En el Casco Viejo creo que es donde mejor podréis saborear la gran variedad de platos típicos que hay en los muchos restau-rantes que pueblan sus calles (y bastante bien de precio). O bien podéis optar por comer a base de pinchos (gene-rosos, innovadores ¡y todos buenísimos!, doy fe) regados con un vinito o un vermút (esta opción igual os puede salir un poco más cara). Y para tomar una copita, hay también varias zonas muy diversas, aunque sí os recomiendo em-pezar tomando unas cervezas o vinos por la zona de Po-zas/Campuzano. Sí os recomiendo que si os queréis mover en bus,

metro o tranvía; compréis una tarjeta de transporte “Cre-ditrans” (en cualquier estanco o kiosko de prensa hay), os sirve para todos los medios de transporte, el billete es mucho más barato (hasta 50%) y podéis usar una sola tar-jeta para varios (hay de 5, 10, 15 €, y te va descontando el saldo). Pues ya veis todo lo que puede dar de sí esta ciu-dad, y no os asustéis por todo lo que hay para ver, que todo está muy cerca y se puede hacer cómodamente an-dando. Si me permitís un recorrido (que hago yo cuando tengo visitas), podéis empezar en San Mamés o Sagrado Corazón- Palacio Euskalduna- Parque de Dña Casilda- To-rre Iberdrola- Puente y Universidad de Deusto- Museo Gu-ggenheim- Puente de Calatrava/Torres de Isozaki- Ayunta-miento- Zona del Arenal- Casco Viejo (todo este recorrido lo podéis hacer en 3 horas tranquilamente y viendo todo bien, para llegar al caso viejo sobre la 1 y tomar algo antes de comer)-(Comida en casco viejo) y por la tarde dar un paseo por toda la Gran Vía, y luego coger el metro hasta las Arenas y ver el Puente Colgante y los palacetes.

Bueno, pues espero que os animéis. En todo caso, aquí tenéis una opción más para pasar un fin de semana o un puente distinto.

Bilbao

Foto: Cayetano Landero

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Escribió un tal Machado que su infancia eran recuerdos de un patio de Sevilla...los míos se queda-ron un poco más al sur, bajo el cobijo de la sempi-terna luna de Gibrajoyón. Dicen que la distancia es el olvido, por eso, de vez en cuando, no está de más anclar esos recuerdos en el fondo de un papel para que, nuestra frágil memoria no se sienta huérfana en esos esfuerzos por recordar de dónde venimos.

Mis recuerdos se activaron demasiado brus-camente aquel traicionero Enero del 84; mamá se fue y el destino me llevó durante muchos años le-jos de Gibraleón. He ido alternando largas ausencias con pequeñas escapadas, que me han servido para recargar pilas y no olvidar mi origen; para recordar vivencias que siempre han estado alojadas en algún rinconcito. Siempre han estado ahí el colegio Belén (me lo recuerda mi cicatriz en la ceja), el Cervantes, el Ramón y Cajal, el parque, los interminables juegos estivales en el paseo, el ir a coger renacuajos a la lo-bera, la leche donde Socorro, aquel desfile de moda en la Crisdy, el cine de verano al aire libre, las salidas de la Hermandad al Rocío....o ya en tiempos más mo-zos, el Mataero, el Liborio, el Ámbito Sur, Avíate,... Compañeros de clase con los que tan bue-nos momentos compartí; aquellos Manolo Docio, Manolo de la Rosa, Juan de Dios, Manolo Giménez, Antonio el pollo, Antoñito el chico, Manolo Romero, Miguel , Gustavo, Rocío Miguel, Ana Barroso, Rocío Gómez, Inma Cordero, Ana Parralo, Juani Morón, Mariola, aquellos que nos dieron el conocimiento; Pi-lar, Pepi, Toñi Mª Carmen, José Ramón, Juan Angona, el dire Vicente Barrera, Agustín el conserje, y otros much@s... Pepe, Paqui, José Carlos, Rocío, Marina, Paco, Javier; con los que siempre estaré en deuda. Dando sentido al título de estas letras, no hace mucho, la casualidad de las nuevas tecnologías me ha permitido volver a contactar con alguno de ellos (más bien ellas, que con ellos afortunadamente he podido compartir más recientemente algún San Roque o fiestas veraniegas), volver a vernos después de casi 30 años en algunos casos; y creedme si os digo que la cercanía y el cariño que me mostraron me hizo sentir que no hubiera pasado más de 1 mes desde la última vez que nos vimos. Este encuentro me devolvió recuerdos algo difuminados en el tiem-

po en cuanto a la forma (que no la esencia), y me hizo ver cuánto bueno tiene nuestro querido pueblo. Por todo ello,ya sean casuales o no, tened siempre en la retina los recuerdos y vivencias de nuestro pue-blo; para disfrutarlas día a día si estáis ahí, o para los que estamos algo más lejos mantengan vivo nuestro cariño a la tierra que nos vio nacer.

Quisiera aprovechar, terminando ya, para daros a to-dos las gracias por el recuerdo constante y las siem-pre amables palabras que para con mi madre tenéis; cada uno la recordará a su manera, Aurora, Aurora Moreno, o doña Aurora; pero todos habéis tenido siempre palabras de afecto y admiración hacia ella. Me emocionó profundamente saber que, a pesar de haber pasado tantos años ya, hay gente (para más señas ex-alumnas de mi madre) que aún van al ce-menterio a cuidar su descanso. No sé quiénes son, pero vayan desde estas palabras mi más profunda gratitud.

“Dicen que la distancia es el olvido, pero yo no quiero olvidar porque en Gibraleón empecé a vivir, y en

Gibraleón aprendí a soñar”.

Por José L. Torres Moreno, Panturrano.

Recuerdos Casuales

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Suelen decir que el hombre y la mujer ante la adversidad se crecen, y eso mismo ha debido suceder en el nº 24 de la C/Abades de Madrid. Este mes de Marzo se inauguraba un nuevo espacio escénico en Madrid, una novedosa y arriesgada experiencia que rompe con el tradicional espacio teatral. En La Casa de la Portera debieron reunirse Alberto Puraenvidia y José Matret para crear este espacio y una asocia-ción que lleva el mismo nombre, con la intención de reunir a todos los trabajadores de la escena dra-mática: actores, músicos, escenógrafos, directores, y un largo etcétera, para mostrar sus obras, sus nuevos proyectos y creaciones.

Este proyecto cultural tiene la originalidad y objetivo común de sorprender al espectador con la cercanía, o mejor dicho, con la sensación de vivir la experiencia teatral o artística desde dentro, es decir, sintiendo la respiración del actor, de su presencia, oír los diálogos a tu alrededor, sin la necesidad de llevar puestas unas horribles gafas de 3D.

La andadura de la Casa de la Portera se ini-cia con la puesta en escena de IVAN-OFF, dirigida por José Matret, una versión actualizada de Ivanov de Antón Chejov. Con un total de nueve actores que darán vida a la revisión de esta gran obra dentro de la propia portería y de sus habitaciones, unas habita-ciones que han sido totalmente diseñadas y ambien-tadas para recrear los mejores momentos escénicos. Con IVAN-OFF, en palabras de su director, queremos revindicar la importancia y grandiosidad de esta obra dentro de la producción literaria de Chejov, y don-de se obliga al espectador a razonar sobre aspectos como: “Madurar, superar al niño que fuimos y hacer frente a la vida adulta, con todas sus consecuencias, es un trámite difícil, doloroso e incluso, para algu-nas personas, insuperable”.

El único inconveniente que podemos encon-trarnos en la Casa de la Portera, no es otro que el reducido aforo de este espacio, tan sólo 22 perso-nas, tienen la posibilidad de deleitarse con cada re-presentación de esta obra. No obstante, ha sido tan apabullante el éxito de este proyecto, que son ya incontables las reservas que hay para ver IVAN-OFF, por lo que conviene informarse y reservar con mucha antelación para no perderte esta firme apuesta por el teatro en estado puro.

“Teatro en casa”por Cayetano Landero

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LA MADRE NOCHECAPÍTULO IV

“Los habitantes de los túneles” Bajamos las estrechas escaleritas de me-tal. Yo iba delante y sujetaba su manita, mientras esperaba que la niña descendiera. Con la otra mano, ella se agarraba a la pequeña y mugrienta barandilla cubierta de polvo que corría paralela a las escaleras. A través de su piel yo podía percibir sus sensaciones, una mezcla de miedo y repugnancia hacia lo que tocaba. Al terminar, miré hacia delante para obser-var el nuevo mundo que se mostraba frente a mí: las cavidades internas de la bella ciudad exterior, una bella ciudad que poco o nada tenía que ver con el panorama que ahora se ofrecía a nuestros ojos. Aunque bien mirado, tenía un cierto romanticismo de terreno inexplorado, abandonado de la mano del hombre y quizás también de la de Dios. Lo descono-cido se abría ante nuestra mirada. Un túnel de pa-redes teñidas de negro por la densa humedad que emanaba de ellas. Una hilera infinita de luces, todas situadas a la misma altura, marcaba la línea sinuosa o recta que iba adquiriendo aquella madriguera, según nos adentrábamos más en ella.

Sobre algunas de estas lamparitas, la vida ve-getal en forma de musgo, había conquistado algún terreno y se había adaptado a vivir en aquella noche eterna al amparo del calor del frío neón.Un poco más arriba de ellas, varias filas de cables dis-puestos en ramilletes se prolongaban a lo largo de las paredes y techo del túnel, a los que estaban sujetos por una sucesión interminable de alargados ganchos, que en forma de “L” sobresalían y se disponían sobre la misma horizontal, de modo que dibujaban tanto a lo largo como a lo ancho, un juego infinito de suce-sión reglada.

Sin embargo, no acababa ahí la decoración de los túneles, ya que sobre estos muros también había representados todo tipo de indicaciones viales como alargadas y anchas líneas rojas acabadas en punta de flecha, algún que otro semáforo, señales circulares similares a las de dirección prohibida, etc... y junto a todo ello, toda una extensa variedad de graffittis

que dotaban a aquel sombrío y lúgubre lugar de cierto colorido, y le transmitía en definiti-va, las tonalidades de las que estaba hecho el mundo exterior de la luz; unos colores de los que este mundo subte-rráneo adolecía casi por completo, una vez que la oscuridad se los había tragado al igual que a nosotras dos.

Entre las vías y la pared quedaba un exi-guo pasillito por el que la labor de caminar no se juzgaba muy cómoda debido a las abruptas piedras que inundaban

Por Tania González

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todo aquel suelo de extremo a extremo. Pero aún así, mi niña no pronunció ni una sola palabra de queja o desaliento durante al menos la primera hora (según mis cálculos) de camino sin descanso en medio de una oscuridad que parecía no tener fin.

La casi ausencia total de luz y el silencio se convirtieron durante este tiempo en nuestros com-pañeros de viaje. El leve sonido cimbreante que nos había llevado a introducirnos en aquel agujero, se-guía oyéndose lejano, y esto era algo que me des-concertaba y preocupaba al mismo tiempo porque arrojaba a mi mente serias cuestiones relacionadas con la pertinencia de haber iniciado aquella bajada a un húmedo infierno de tenue luz artificial.

De pronto, la luz de una esperanza iluminó nuestro camino y mi alma, al distinguir excavado en la pared un pasillo alumbrado tras el que parecía ha-ber unas escaleras ascendentes. Mi querida acom-pañante apretó mi mano con la suya, y con la otra señaló el lugar diciendo: - Mira mami, a lo mejor es la salida y nos vamos ya de aquí... que ya me estoy cansando.-“Pobrecita”- pensé.-“Lanza su queja cuando cree que ya se acerca el final. Seguro que no lo hizo antes para no preocuparme”-.-Sí, cariño, yo también estoy harta de esto. Espere-mos que eso sea una salida.-Le respondí en tono cal-mado y un poco fatigado.

Al llegar al lugar donde se encontraban las citadas escaleras, pudimos observar que al final de los 9 o 10 escalones que había, se encontraba una pequeña puerta de metal pintada de un blanco car-comido por la negra humedad de los túneles... pero estaba cerrada. Junto a ella había algo que nos so-brecogió a las dos con sólo percatarnos de aquella presencia que constituía un verdadero espectáculo dantesco: las miserables condiciones en las que se hallaba un anciano hombre que yacía sobre el sue-lo, en el rellano que la escalerita formaba junto a la puerta. Debido a su lamentable aspecto, supuse que se trataba de un mendigo. Mi niña, al ver aquello apretó fuerte mi mano, y se situó detrás de mí me-tiendo su cabecita bajo mi brazo para protegerse y no perder detalle de lo que sucediera.

Durante unos instantes miré al anciano hom-bre sin saber qué decir, pues su hallazgo me había co-gido por sorpresa. Él, aunque tumbado, no dormía. Su miserable presencia, más que sucio, mugriento; y el hedor que desprendía pese a la distancia a la que

nos encontrábamos de él, me habían dejado sor-prendida al descubrir hasta qué punto de deprava-ción puede llegar el ser humano cuando se llega a los extremos. No quise aplicar mis razonamientos filosó-ficos y sociológicos de si aquel límite era resultado de la locura y la corrupción del alma del hombre, o una vez más, como la respuesta que se da a muchas de nuestras preguntas, un producto más de nuestra sociedad masificada en la que los hombres pueden llegar a sentirse tan oprimidos, que buscan las salidas más fáciles y menos acertadas a los estados anímicos del alma.

Pero volviendo a la descripción de su aspec-to diré que vestía lo que parecía ser, o haber sido, un jersey, pues estaba hecho jirones. El color era un tanto indefinible, pues la cantidad de manchas que había en él, hacían imposible el poder discernir cuan-do de se trataba de una de ellas o del propio tejido. Sobre el pecho y la enorme e inflada barriga, lo que parecían manchas de líquidos derramados una y otra vez, unas sobre otras, que daban a esta zona un ex-traño color aún más oscuro que el del resto de la ropa, toda marcada por negros roces. Sobre las pier-nas, tenía colocada una fina y sucísima mantita que no llegaba a cubrir sus descalzos y desnudos pies de largas uñas toscas a las que las miserias de sus corre-rías parecía haberse aferrado con fuerza.El viejo, nos miró con su rostro barbudo y nos dijo con una voz escarnecida por la mala vida, y rota, como su labio, por el alcohol

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-¿Quiénes sois? Uno ya no sabe dónde ir para que lo dejen dormir. Cuando no es ese ruido que no deja de dar golpes dentro de mi cabeza, tiene que ser una joven con cara de estúpida y el mismísimo diablo vestido de ángel.

Cuando mi niña, oyó estas horribles palabras surgidas de la negrura de una boca más oscura que la del metro y que rugía mucho más que éste cuando emprende su viaje por los túneles, se pegó mucho más a mi cuerpo de lo que ya lo estaba. Yo podía sen-tir como el miedo había penetrado en ella.

-No tengas miedo, hija. Estás conmigo y ese pobre hombre no puede hacerte nada...-Le dije vol-viendo mi rostro al suyo escondido tras mi brazo.

-Nos hemos perdido entre los túneles y esta-mos buscando una forma de salir de aquí. A lo mejor usted sabe si esto es posible a través de los conduc-tos de la ventilación... o a lo mejor sabe a dónde con-duce esa puerta,... déjenos pasar, por favor.-Expliqué al mendigo, que me miró un poco desconcertado:

- Si se han perdido es porque han querido. Yo diría que el camino más corto es volver a la estación y salir por allí. Yo no me pienso mover de aquí, ni hacer nada. Lo que sí le digo es que la niña no va salir de aquí. Pregúntele a ella el camino.

-Oiga, ¿por qué la ha tomado con ella? No ve que la está asustando y es una niña pequeña.- Dicien-do esto, me llené de coraje, la cogí entre mis brazos y comencé a subir las escaleras en dirección a la puer-ta, y cómo no, al mugriento personaje.

-De todos modos vamos a salir de aquí,... vaya pesadilla que me ha tocado vivir hoy.- Iba subiendo los escalones al tiempo que decía esto, y de mis pro-pias palabras se desprendió un pensamiento en mi mente: ¿Era posible que todo aquello no fuera más que un sueño y que cuando despertara en un asiento del metro, sólo me habría pasado mi parada? Pero el suave cuerpecito de mi niña y su cálida y asustada respiración cerca de mi oído, me demostraban lo real de toda aquella extraña experiencia.

Al pasar junto al mendigo, percibimos más in-tensamente y con mayor desagrado el inmundo olor que se desprendía de su cuerpo. Haciendo malaba-res para no pisarlo y poder pasar por aquel estrecho pasillito de escaleras con mi niña en los brazos, logré llegar hasta la pequeña puerta, que como era de es-

perar, se encontraba... cerrada. Cuando intenté abrir-la, el malévolo viejo soltó una sonora carcajada que retumbó entre aquellas apretadas paredes.-Pero, ¿es que creía que la puerta estaría abierta para usted?-¿Por qué no nos lo dijo antes de que subiéramos?-No me lo preguntó.-Es usted muy sarcástico, ¿no cree?-Muy ¿qué?. Sea lo que sea, usted tampoco es la Ma-dre Teresa;... no se compadece de este pobre viejo. Ya podría dejarme algo... -Diciendo esto me miraba directamente a los ojos como intentando intimidar-me y buscar un rescoldo de compasión en mi severo gesto de madre ofendida.

-“El chantaje de un viejo mendigo borracho era lo último que me quedaba por ver”-. Eso era lo que pensé en aquel instante, aunque en realidad, cosas más extrañas vería en lo que me quedaba de experiencia subterránea. Sin embargo, sucumbí a la coacción y busqué entre mis bolsillos unas monedas para pagar la información que necesitábamos para salir del laberinto de túneles en que nos hallábamos circunscritas, debido a la acción de algún ente supe-rior que ahora se regía en hado de nuestros destinos. ¡Maldito hado, aquel que se burlaba de nosotras y nos ponía en el camino a un viejo repugnante y sucio, de mala conciencia que exigía el pago de los insultos que nos profería!

Finalmente encontré dos monedas, las úni-cas que llevaba encima, y las puse junto a los pies del mendigo, mientras dirigía mi vista hacia otro lado evitando inhalar el inmundo hedor que desprendían sus extremidades inferiores. Al ver el dinero, el viejo cambió de cara y su gesto se volvió más agradable.-Como a pesar de todo no soy mala persona, le diré que por el precio que acaba de pagar sólo podrá sa-lir de aquí una de las dos: usted misma, porque no creo que pueda hacerlo ese diablillo. Si quieren salir las dos, debería pagar más... el doble exactamente.- Mientras decía esto con su demostrada insolencia, mi semblante irradiaba el desprecio que sólo alguien que se dirigía de esa manera, podía provocarme, so-bre todo cuando la mayoría de sus improperios iban dirigidos a una inocente niña, que daba la casualidad, que era mi hija.

-De todas maneras, podéis intentar salir por las puertas-respiraderos, que aunque están cerradas, tienen grandes huecos por los que podríais colaros... Bueno, aunque no sé si lo conseguiríais las dos.El fétido aroma que desprendía aquel despreciable

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hombre viciaba de sobremanera el aire y estaba em-pezando a producirme arcadas, de modo que evité hablar más para no tener que respirar. Bajé lo más rápido que pude las escaleras, de nuevo con mi niña entre los brazos, apretándola fuertemente contra mi pecho. Sin casi darme cuen-ta, pisé uno de los mugrientos dedos del anciano. El hombre se lamentó ultrajándonos una vez más.

-Vete ya de aquí, so puta,... y no te separes de tu pequeño demonio, con él nunca saldrás de aquí. Sólo sabéis venir a molestar y dar por culo a un pobre viejo que sólo quiere dormir tranquilo. Que la mala sombra os acompañe, que no tenéis compasión de un desgraciado como yo.

Aunque ya no lo veía, en mente la imagen de su boca rota seguía repitiéndose con cada palabra que le escuchaba decir. Mientras el viejo continuaba lanzando sus maldiciones hacia nosotras, nos fuimos alejando lo más rápido que pudimos, reanudando el camino por el estrecho terreno de piedras acotado entre la pared y las vías y por el que la tarea de cami-nar se hacía difícil, sobre todo acompañada de una niña pequeña como la mía.

A pesar de lo desagradable que había sido el encuentro con el mendigo y de lo horrenda que resultó su visión, tenía que admitir que había sido, hasta el momento, la única presencia humana que habíamos percibido desde que nos bajamos del tren, y que aquello ya era digno de valoración y de espe-ranza de que podía hallarse una explicación y una sa-lida a aquella situación.

El túnel seguía tan oscuro como al principio y todavía no se distinguía ninguna estación al final de él. De pronto, se pudo escucha un fuerte chirriar me-tálico y un estruendo continuado comenzó a hacer temblar aquellas negras paredes.

A lo lejos, detrás nuestra, sobre las vías junto

a las que caminábamos, comenzó a distinguirse una luz que se acercaba rauda, y un penetrante olor a hierro quemado se dejaba sentir. Sin duda, un tren se acercaba y debíamos tener cuidado.-¡Cariño!-Dije gritando.- ¡Pégate como un cromo a la pared y no te separes hasta que no haya pasado el tren..! ¡Coge mi mano!

El tren pasó velozmente a nuestro lado. Nues-tras manos vigorosamente atadas no se soltaron ni un instante. El fuerte rebufo del aire nos empujaba hacia atrás y parecía que tiraba de nuestros cabellos y nuestra piel.

No puedo asegurarlo con certeza, debido a la veloci-dad con la que pasó, pero no me pareció ver a nadie en la cabina del conductor, hecho que se revelaba ex-traño, pues hasta la fecha, todos los trenes, excepto los de la línea 14, tienen conductor. Tampoco vi pa-sajeros en los vagones... me pareció que todos iban vacíos. Sólo en el último, pude ver claramente que alguien tenía su rostro pegado contra el cristal y mi-raba hacia el exterior de la cabina, hacia donde nos encontrábamos nosotras. Fue tan sólo un segundo, o quizás menos, pero esa mirada tan penetrante, tan vacía..., fue lo único que pude apreciar, y se impreg-nó en mi alma dejándome una extraña sensación. Sin embargo, nada puedo decir acerca del aspecto de aquella persona debido a la rapidez con la que pasó todo. Su cara, su gesto, su cuerpo fueron como trans-parentes para mí. Tan sólo su mirada, tan sólo eso, fue lo único que llegué a captar con claridad, traspa-sando incluso los límites de lo sensorial para ser algo más que eso, casi como una premonición; aunque no sabría concretar muy bien de qué.

Cuando el tren hubo acabado de pasar, noso-tras continuamos nuestro camino y yo no quise hacer ningún comentario sobre lo que acababa de suceder, y por supuesto deseaba que ella no hiciera ninguna de esas difíciles preguntas a las que me tenía acos-tumbrada.

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Recomendaciones musicales

Melody Gardot

THE BLACK KEYS: “Tighten Up” SHE WANTS REVENGE: “Take the world” BROKEN BELLS: “Vaporize” MIDNIGHT MAGIC: “Beam me up” AWOLNATION: “Sail” BEACH HOUSE: “Silver soul”

Elabora tu propia lista de temazos destacados y envianosla a: [email protected]

TEMAZOS DESTACADOS

por Juan Manuel Blanco

Melody Gardot va camino de ser la próxima gran diva del jazz. Su voz exquisita y la finu-ra con la que se acompaña al piano y la guitarra la sitúan muy por encima de otras revelaciones recien-tes. Sus dos primeros discos, Worrisome Heart y My One and Only Thrill, han permitido descubrir a una artista única, que acaricia al público con sus fantásti-cas versiones de los clásicos imperecederos del jazz y el blues y con sus acertadas composiciones. Gardot estudió música de niña y empezó a tocar el piano en locales de Filadelfia cuando tenía 16 años. Un grave accidente que sufrió cuanto tenía 19 la volcó definitivamente en la música. Fue atro-pellada por un coche cuando iba en bicicleta y eso le provocó unas lesiones muy graves que la obligaron a estar hospitalizada un año. Gracias a la música, pudo superar esas secuelas y desde entonces ella es una ferviente defensora de la musicoterapia.

En plena juventud (nació en 1985), Melody Gardot ha demostrado un talento instintivo para dar un toque personal e inimitable a las obras maestras vocales del jazz y el blues. El cariño que siente ade-más hacia la música brasileña le ayuda a añadir una nota distintiva a los grandes standards; por ejemplo, son muchas las cantantes que han interpretado Over the Rainbow, la de El mago de Oz, pero ninguna le ha dado, como Gardot, ese matiz latino. Este verano visitará España y estará presente en algunos de los Festivales de Jazz mas prestigiosos de nuestro país, entre ellos el Festival de Jazz de San Sebastian. Desde la revista GEC recomendamos sus discos grabados hasta la fecha y si es posible que os acerquéis por donde actuara con su banda de músi-cos excelentes, para que veáis y oigáis en directo esta maravillosa y espectacular artista.

EL COLUMPIO ASESINO: “Toro” GOTYE & KIMBRA: “Somebody that I used to know” HIGH PLACES: “Sonora” X-WIFE: “PingTHE STRANGE BOYS: “Be brave” M83: Midnight city”AYO:” Down on my knees” Por Carolina Rubio

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ENVÍA TUS PROPUESTAS, TRABAJOS, IDEAS, ARTÍCULOS FOTOGRAFÍAS, RELATOS, PUBLICIDAD ,ETC. A [email protected].

OF MONSTERS AND MENMY HEAD IS AN ANIMAL

GECMAGAZINE

Tras ganar el Músiktilraunir, un concurso de bandas de su ciudad, este grupo islandés pre-senta su primer trabajo que lleva por título: “my head is an animal”, un álbum lleno de sonidos folk, de melodías alegres y modernas a la que la revista Rolling Stone denomina como los nuevos Arcade Fire, en un intento por encasillar a una banda que está pasando por casi todos los festivales interna-cionales como el Lollapalooza de Chicago con bue-na nota.

Su primer sencillo lleva por título: “Little talks, una buena muestra de folk al más puro estilo Edward Shape & Magnetic Zeros. Hasta el momen-to no hay fechas confirmadas en España. Mientras tanto, seguiremos disfrutando de este nuevo lan-zamiento.

SE BUSCAN COLABORADORES

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LABUTACA ROJA

Hace una par de semanas he visto “THE AR-TIST”, la gran triunfadora de los pasados oscars, una peli donde se homenajea el cine de antaño, ese cine de miradas, de gestos y de excesos de imposturas. La película es un buen ejercicio para recordar otro tipo de cine y que las historias se pueden contar de muchas formas, algunas sin diálogos.

No hace mucho, también, he vuelto a ver “LA MADRE” una adaptación rusa de la obra de Gorki, por uno de los más grandes renovadores del cine, Pudovkin, creador junto a Eisenstein del denomina-do “Cine realista socialista ruso”. Traigo a colación esta peli, porque es curioso el éxito que ha obtenido “THE ARTIST” y lo poco que nos acordamos de que prácticamente todo el cine actual ya nos lo enseña-ron hacen más de 80 años y que los adelantos de la técnica solo sirven para meter efectos especiales a granel y contar historias vacías.

“THE ARTIST”, es un certero homenaje al cine mudo, no entiendo porque su director, un francés, centra su historia en el Hollywood del cambio al so-noro, cuando bien podría haberlo hecho en la Fran-cia de aquella época, donde el glamour de la “Belle

Epoque” hacía estragos a todos los niveles cultura-les. No obstante, cuenta una hermosa historia donde un actor de éxito en el mudo, no ve claro su cam-bio al sonoro, eso es algo que ya nos lo han contado en bastantes ocasiones, sobretodo en la magnifica “CANTANDO BAJO LA LLUVIA” y en la obra maestra absoluta “EL CREPUSCULO DE LOS DIOSES”, donde una increíble Gloria Swanson recordaba su paso por el mudo de manera grotesca, narrado con la maes-tría del maestro Wilder.

No quería hablar del cine actual, que como bien saben todos/as no es más que un apaño de cho-rradas vacías, que se basan en juegos de azar….aún estoy sorprendido de cómo se puede hacer una pelí-cula basada en el juego de mesa “HUNDIR LA FLOTA”, hay que tener valor.

No, yo quiero reivindicar el cine mudo, me fastidia bastante que no sepamos nada de cine mudo y aplaudamos la peli “THE ARTIST” como lo más gran-de que se ha hecho en los últimos años, no seré yo quien no le reconozca la valentía de rodar una obra muda, pero tampoco era la primera vez, de hecho, en los años 70 el bueno de Mel Brooks rodó “LA ÚL-TIMA LOCURA”, una peli muda, donde curiosamente

A vueltas con el cine mudo

Por Juan José Santana Hernández

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el único actor que hablaba era “Marcel Marceu” que es uno de los mimos más grandes de la historia. Por eso quiero recomendar, o al menos intentar crear cu-riosidad entre quien lee este articulo (que hasta mis últimas informaciones lo hacen, mi novia, un amigo y mi abuela) las diez imprescindibles pelis del cine mudo que nadie debería perderse.1. AVARICIA de Erich Von Stroheim. Una obra inabarcable, con una historia donde el ser humano no es más que un muñeco del destino y donde los personajes son fiel reflejos de una sociedad que aca-baría en el Crack del 29. Una obra maestra impres-cindible.2. AMANECER de Murnau. Posiblemente una de las tres mejores películas de la historia del cine. El amor, la duda, el engaño, la ambición, todo en una peli que Murnau rodó con veinte años de adelanto técnicamente a su época.3. EL ACORAZADO POTEMKIN de Eisenstein. La mejor película de propaganda jamás rodada. He-cha para ensalzar los valores de la revolución rusa, pero con unos adelantos narrativos totalmente inno-vadores para la época.4. EL MODERNO SHERLOCK HOLMES de Bus-ter Keaton. Imprescindible obra, para entender el cine de comedia actual. Llena de Gags recurrentes y llena de riqueza narrativa.5. EL GABINETE DEL DOCTOR CALIGARI de Wiene. Obra cumbre de expresionismo alemán, obra que explica la sociedad germana de los 20 y el futuro que les espera.6. TIEMPOS MODERNOS de Chaplin. La mejor película para contar los abusos del capital. 7. NAPOLEON de Abel Gance. Película francesa que narrar con todo tipo de detalles y gran esfuerzo económico para la época, la obra de Napoleón. Au-tentico esfuerzo narrativo y ejemplar puesta en es-cena.8. INTOLERANCIA de David W Griffith. Obra maestra y originalísima peli que narra tres historias entrelaza-das de manera prodigiosa.9. NOSFERATU de Murnau. Aunque es posterior al “GABINETE DEL DOCTOR CALIGARI”, es una pelí-cula absolutamente imprescindible para entender el cine como un arte y para entender el amor al cine de cualquier cinéfilo.10. EL CABALLO DE HIERRO del más grande di-rector de la historia del cine JOHN FORD. Vale, no soy nada original, y existen muchas pelis mejores que ésta, pero como es mi sección, soy un Fordiano em-pedernido y encima es una obra maestra, esta es la número 10 de las grandes pelis del cine mudo!!.

Evidentemente que tendrán más y mejores, a mí me viene a la cabeza “METROPOLIS” de Fritz Lang, o “LA GRAN PARADA” de King Vidor, y así has-ta el infinito, pero, no se dejen engañar, las mencio-nadas podrían estar en cualquier lista de la historia del cine. Si les ha gustado “THE ARTIST”, vean éstas y comparen.

Cartel de la película de Wiene, símbolo del cine expresionista. 1920.

Webs de consulta:www.imdb.comwww.filmaffinity.com

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El lugar donde las imágenes Adquieren otro valor

fotografía, creatividad, publicidad, y mucho más...