Egido, M. Innovación en conserv. de P.C. 2010

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    Patrimonio

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    Patrimonioeinnovacin

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    www.mcu.es

    www.060.es

    Edita: SECRETARA GENERAL TCNICA

    Subdireccin Generalde Publicaciones, Informacin y Documentacin

    De los textos y las fotografas: sus autores

    NIPO: 551-10-081-7ISSN: 1889-3104

    MINISTERIO DE CULTURA

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    ngeles Gonzlez-SindeMinistra de Cultura

    Mercedes E. del Palacio TascnSubsecretaria de Cultura

    ngeles AlbertDirectora General de Bellas Artes y Bienes Culturales

    MINISTERIODE CULTURA

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    Patrim

    onioCulturalde

    Espaa

    2010

    Sum

    ario

    REVISTA PATRIMONIO CULTURAL DE ESPAAREVISTA PATRIMONIO CULTURAL DE ESPAADIRECTOR

    Alfonso Muoz Cosme

    CONSEJO DE DIRECCIN

    Mara DomingoAntonio J. SnchezLorenzo Martn

    CONSEJO DE REDACCIN

    Isabel ArgerichIrene ArroyoRoco BruquetasSoledad DazGuillermo Enrquez de SalamancaAdolfo GarcaAlberto HumanesConcha MartnMara Jess SnchezAndrs SerranoMara Pa TimnPablo JimnezBlanca SantamarinaCelia Diego

    Paloma Ballesteros

    COMIT CIENTFICO

    Caterina Bon ValsassinaDirectora del Istituto Centrale per i l RestauroGiacomo ChiariDirector cientfico de The Getty Conservation InstituteRosa M EsbertCatedrtica de Petrologa de la Universidad de OviedoLuz de Lourdes HerbertCoordinadora Nacional de Conservacin del Patrimonio Cultural.INAH. MXICO DF.Alberto de TagleDirector del departamento de Investigacin del NetherlandsInstitute for Cultural Heritage

    PORTADA

    Detalle de un barrido con un equipo de fluorescenc ia de rayos Xen una escultura gnea policromadaFotografa: Toms Antelo

    CONTRAPORTADA

    Radiografa de una figura de la Arqueta de Banyoles, Girona. Espaa.Fotografa: Toms Antelo

    DISEO GRFICO ORIGINAL

    Leona

    MAQUETACIN

    Milk comunicacin

    DISTRIBUCIN Y VENTA

    Abdn Terradas, 7. 28015 MadridTel. 34 91 543 93 66. Fax 34 91 549 34 18

    INTERCAMBIO

    Biblioteca del IPCE.Calle Pintor El Greco, 4. Ciudad Universitaria. 28040 MadridTels. 91 550 44 36 y 91 550 44 39

    PVP

    28 euros, cada nmero, ms gastos de envo

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    Innovacin en conservacin de patrimonio culturalMarin del EgidoInstituto del Patrimonio Cultural de [email protected]

    Si buscas resultados dis tintos, no hagas siempre lo mismoAlbert Einstein

    Licenciada en Ciencias Fsicas por la Universidad Complutense de Madrid (1988-1993), funcionaria del Cuer-po Facultativo de Conservadores de Museos (1999), destinada en el Instituto del Patrimonio Cultural de Espaa.Su trayectoria profesional se ha circunscrito a las reas de conservacin de patrimonio cientfico y tcnico, enproyectos de investigacin en el Museo Nacional de Ciencia y Tecnologa, desde 1996 a 1999.Desde el ao 2000, se encuentra al frente del Departamento de Laboratorios del IPCE, desde donde ejerce lascompetencias de gestin, coordinacin y direccin de los proyectos, intervenciones y actuaciones llevadas a ca-bo por su equipo investigador dedicado a estudios cientficos aplicados a la conservacin de bienes culturales.

    Resumen:Este artculo reflexiona sobre la relacin entre innovacin y conservacin de patrimonio. La capacidad de innova-cin en esta rea se sustenta en el reconocimiento del patrimonio como un conjunto de valores tangibles e intan-

    gibles cuya preservacin e integridad deben mejorarse con nuevos enfoques, nuevas herramientas y nuevas me-todologas. La capacidad de transferencia de conocimientos y de impulsar propuestas sostenibles, son requeri-mientos bsicos. Sus posibles enfoques abarcan los desarrollos cientficos y tcnicos novedosos para la conser-vacin, una gestin modernizada y sostenible, y una nueva forma de difundir contenidos. Los caminos potencialespasan por el trabajo en red, la cooperacin en el marco de proyectos de investigacin nacionales e internacionalesy una interdisciplinariedad real basada en la cooperacin entre las especialidades implicadas en cada programa.

    Palabras clave:Innovacin, investigacin, conservacin, patrimonio cultural.

    Abstract:This article thinks about the relation between innovation and conservation of heritage. Innovation capacity in thisarea is sustained in the recognition of the heritage as a set of tangible and intangible values which preservation andintegrity must get improved with new approaches, new tools and new methodologies. Capacity to transfer knowled-

    ge and to stimulate sustainable proposals, are basic requirements. Its possible approaches affect new scientificand technical developments devoted to conservation, a modernized and sustainable management, and a new wayof spreading contents. The potential ways happen for the network, the cooperation in the frame of national and in-ternational research projects, a real interdisciplinarity based in the cooperation between the specialities involvedin every program.

    Key Words:Innovation, research, conservation, cultural heritage.

    Qu y por quQu y por quNo resulta nada innovador afi rmar que poseemos un rico patrimonio cultural, de gran valor cultural e histri-

    co, pero de naturaleza frgil, que debe ser protegido y conservado con los mejores y ms sostenibles medios.Ni tampoco constatar que la conservacin de nuestro patrimonio histrico y cultural merece las mayores ga-rantas que puedan establecerse, tanto en el diseo de los contenidos de los proyectos, como en los grupos detrabajo intervinientes y los criterios y recursos tcnicos y cientfi cos.

    Aadir a esos objetivos la necesidad de enmarcar estas actuaciones en proyectos sostenibles que resulten mo-tor de desarrollo, responde a un enfoque ms actual y global. Si, asimismo, se argumenta que deben apoyar-se, adems de en la revalorizacin de los aspectos culturales y artsticos, en el intercambio cientfi co y tecno-lgico a nivel internacional y en contextos interdisciplinares, capaces de impulsar propuestas sostenibles, es-tamos hablando de innovacin, al menos en un gran nmero de pases, entre los que se encuentra Espaa.

    Todas las ramas del saber impulsan sus conocimientos, aplicabilidades, avances y mejoras mediante la inno-

    vacin. Tambin el futuro de la conservacin del patrimonio est en el impulso de la experimentacin y la in-

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    novacin. Cada profesional de la conservacin, en su especialidad, debe contribuir a la renovacin en todoslos aspectos que afectan al patrimonio. Y esto porque ese futuro no puede basarse en la repeticin de modelosy mtodos en un mundo cambiante. La innovacin impulsa la exploracin en campos nuevos en los que ape-nas han comenzado a obtenerse resultados aplicables y el inicio del trnsito por otros todava no explorados.

    Adems de promover y salvaguardar los mtodos tradicionales, es esencial potenciar e impulsar solucionesinnovadoras, investigacin que conjugue desarrollos cientfi cos y tcnicos con criterios actuales de respeto ala integridad de los bienes, estmulo de consideraciones globales de los distintos valores del patrimonio, difu-

    sin y apropiacin social.

    La innovacin contempla, por tanto, nuevas herramientas, nuevos enfoques y nuevas metodologas para laconservacin. Pero tambin requiere exigencia, ambicin y coraje.

    En los ltimos aos, se ha visto crecer el nmero de investigaciones que relacionan conservacin de patrimo-nio con crecimiento y desarrollo social y econmico a nivel internacional. Todas estas investigaciones demues-tran la intensa relacin entre el patrimonio y la mejora de la calidad de vida, de la conservacin del medio am-biente (CAMUFFO, 1998), y del desarrollo econmico y social (GREFFE, 2009).

    Desde un punto de vista estrictamente econmico, la conservacin del patrimonio es igual a creacin de riquezaen nuestro pas. Y no slo porque numerosas pequeas y medianas empresas trabajan en este sector, creando em-pleo y siendo motor de desarrollo econmico, sino porque nuestro pas cuenta con un inmenso campo de trabajocon variedad y calidad, ligado, adems, a una de las principales fuentes de recursos de nuestro PIB, como es el tu-rismo. La Fundacin Caja Madrid ha liderado los estudios sobre rentabilidad de la conservacin del patrimonio enEspaa, y concluye que, en 2004, la conservacin del patrimonio gener, a travs del turismo, unos ingresos de2.500 millones de euros, mientras que el gasto asociado no alcanz los 1.900 millones de euros (ALONSO, 2008).

    Arriba. Imagen por fluorescencia de U.V. de la Imposicin de la casulla a San Ildefonso, escultura policromada procedentede la Catedral de Toledo. Fotografa: Toms Antelo.

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    Cierto es que son escasos los estudios publicados sobre la importancia de la conservacin del patrimonio co-mo motor econmico en Espaa, pero los existentes apuntan a una relevancia notable y a una interesante vin-culacin con la creacin de empleo directo. Las empresas, instituciones y profesionales dedicados a estos tra-bajos juegan un papel estratgico en los sectores pblico y privado para estimular la investigacin y la transfe-rencia tecnolgica para la conservacin y difusin del patrimonio cultural. Ni siquiera en pocas de crisis co-mo la actual, debera aceptarse que la disminucin de la inversin en conservacin sea presentada como unamedida de ahorro, sino ms bien, como un inhibidor de creacin de empleo y riqueza.

    La realidadLa realidadLa situacin de los centros e institutos de conservacin, museos, archivos y bibliotecas, como responsables ma-yoritarios de la conservacin del patrimonio cultural, en pases como el nuestro, se enfrentan a la innovacinen franca desventaja. La innovacin supone el liderazgo en el cambio con la puesta en prctica de otras posibi-lidades resultado de la investigacin. Esta inquietud intelectual que impulsa hacia lo novedoso debe conjugar-se con las exigencias del da a da, dedicado mayoritariamente a tareas que reclaman respuestas inmediatas,importantes, pero con un objetivo muy a corto plazo. Las funciones tradicionales de catalogacin, exposicin,organizacin documental se ven sumadas a nuevas funciones ms didcticas y de difusin, y a la obligacinconstante de la actualizacin de fondos, instalaciones y servicios. Una dispersin que atrapa a los profesiona-les e impide que lo importante se site, al menos, en el mismo nivel de dedicacin que lo urgente. Cmo con-jugar todas estas funciones para situar a la innovacin y a la experimentacin en este marco?.

    Cierto es que toda metodologa, tcnica o enfoque novedoso suscita puntualmente desconfi anza o cierto recha-zo, y que necesita una fase laboriosa de implantacin y adaptacin. Sin embargo, la tnica general no es esa.La falta de posibilidad de proyeccin futura en la dedicacin a las exigencias cotidianas no responde a una in-capacidad del personal tcnico para la innovacin, la experimentacin o la investigacin. De hecho, en el co-razn de cada propuesta innovadora, de cada contenido de investigacin en patrimonio, aplicable, coherentey de calidad, se encuentran los profesionales de la conservacin, cualquiera que sea su especialidad.

    Los obstculos son de organizacin, reforzados por la naturaleza administrativa de los centros (DOULAIN,2005). Los museos espaoles tienen funciones de investigacin pero no estn reconocidos como organismos

    Arriba. Desinsectacin de la Arqueta de Banyoles del Monasterio de Sant Esteve de Banyoles (Gerona). Fotografa: Nieves Valentn.

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    pblicos de investigacin, salvo pocas excepciones. El tiempo que se dedica a investigar viene determinadopor la especial sensibilidad, formacin, profesionalidad, creatividad, incluso carisma, de los responsables delos centros y, en ltimo trmino, de los dirigentes que establecen los caminos de la conservacin del patrimo-nio de un pas o una comunidad autnoma.

    Pero la investigacin no da resultados si no es con esfuerzo continuado, con dedicacin, con constancia y convocacin. Los esfuerzos aislados de algunos profesionales se tornan titnicos ante la falta de reconocimientoadministrativo y la falta de capacidad de liderazgo de la mayora de estos centros para gestionar proyectos de

    investigacin, nacionales e internacionales. En consecuencia, la innovacin es una realidad difcil de insertaren el mecanismo actual de funcionamiento de los centros de conservacin.

    La necesidadLa necesidadSin embargo, no podemos olvidar que estamos hablando de la conservacin de nuestro patrimonio cultural.Sin nimo ni capacidad para entrar en debates fi losfi cos sobre el concepto de cultura, s conviene recordaruna afi rmacin de la UNESCO:() la cultura da al hombre la capacidad de refl exionar sobre s mismo () A travs de ella el hombre se ex-presa, toma conciencia de s mismo, se reconoce como un proyecto inacabado, pone en cuestin sus propiasrealizaciones, busca incansablemente nuevas signifi caciones, y crea obras que lo trascienden.(UNESCO, 1982: Declaracin de Mxico)

    La capacidad de innovacin, por tanto, es intrnseca a la cultura. Si se trata, adems, de la conservacin de tes-timonios culturales pasados o presentes, pilares y motor de las manifestaciones culturales futuras, la innova-cin deja de ser una opcin y debe reconocerse como una necesidad.

    Por tanto, la innovacin en la conservacin de patrimonio cultural es una obligacin de las administracionesy un derecho de los ciudadanos, como vehculo capaz de hacer realidad las necesidades de conservacin denuestro patrimonio cultural.

    Arriba. Imagen SEM-SE de detalle del chapado interior de una reparacin histrica realizada sobre una cuenta de oro de un collarde poca islmica. Fotografa: Jos V. Navarro.

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    Las oportunidades que nos ofrece la innovacin en el mbito de la conservacin son enormes, esperadas y, se-guramente tambin, imprevisibles en algunos casos. La globalizacin determina tendencias generalizadas enla investigacin cientfi ca y tcnica y tambin en la refl exin sobre mtodos y criterios en conservacin de pa-trimonio. Otros caminos, ms desconocidos y fruto de la diversidad cultural, estn por trazarse.

    Caminos posiblesCaminos posiblesComo todos sabemos, los problemas no se resuelven con soluciones milagro. Se trata de identifi car posibilida-

    des para el cambio, en nosotros mismos y en nuestro entorno.

    Las necesidades especfi cas de innovacin necesitan ser identifi cadas y redirigidas a equipos de trabajo espe-cializados e interdisciplinares. Las necesidades cientfi cas y tecnolgicas, los enfoques hacia el diagnstico noinvasivo, los nuevos materiales, las posibilidades digitales y la conservacin preventiva sostenible, son objeti-vos propios de los grupos de investigacin y de trabajo dedicados a la conservacin del patrimonio en los l-timos aos. La constitucin de estos grupos debe ser estimulada por la creacin y el mantenimiento de lneasde temticas prioritarias e iniciativas diversas en conservacin, tanto en convocatorias pblicas como en laslneas programticas de los centros de conservacin, sin olvidar el compromiso que el sector privado mantie-ne, aunque, en pases como el nuestro, todava muy tmidamente.

    En el marco de estos programas se han desarrollado lneas innovadoras de conservacin con aportacionescientfi cas y tcnicas dirigidas a prevenir la degradacin de objetos o monumentos singulares, cuyo estado esconsecuencia de un delicado equilibrio entre sus materiales constitutivos, el envejecimiento provocado por elpaso del tiempo y las condiciones del entorno a las que se han visto sometidos, situaciones de riesgo impre-vistas, e intervenciones posteriores con materiales agregados.

    Por ejemplo, la nanotecnologa se ha introducido con gran fuerza en la ciencia de los materiales y tiene no-vedosas aplicaciones, muchas de ellas an por explorar, en el campo de la conservacin. El desarrollo conti-nuo de esta especializacin, con la investigacin sobre los procesos fsicos y qumicos a escala nano, ha pro-visto de nuevos acercamientos a los tratamientos de conservacin de bienes culturales que buscan rever-tir los procesos de degradacin. Este desarrollo ha avanzado de la mano de criterios modernos de interven-cin, como es la compatibilidad de los materiales y el mayor grado de reversibilidad posible, requisitos muydeseables para la buena evolucin del tratamiento utilizado. Con estas premisas, las nanopartculas utiliza-das en tratamientos de conservacin se aplican en forma de microemulsiones o de mezclas con agua, pa-

    ra la eliminacin de contaminantes o de polmeros utilizados en anteriores restauraciones. Tambin de for-ma muy extendida, se aplican nanopartculas de hidrxido de calcio como consolidante en soportes ptreos(GIORGI, 2010).

    La conservacin se benefi cia, de este modo, de nuevos enfoques cientfi cos y de una metodologa moderna encuanto a criterios de conservacin. La combinacin del uso de estas microemulsiones y nanopartculas pro-vee al restaurador, en cada paso de su proyecto, de herramientas respetuosas con los materiales constituyen-tes de las obras, desde el punto de vista fsico qumico, y compatibles con su previsible evolucin en el tiempo.

    Las posibilidades que la nanotecnologa ofrece aparecen cada vez ms referenciadas en la bibliografa, connuevas aportaciones de nanomateriales que enriquecen y renuevan los tipos de tratamientos para que los res-tauradores y conservadores del patrimonio hagan frente a su trabajo. Tambin permite un mejor conocimien-

    to de los procesos de degradacin a escala nano que impulsa, a su vez, la aparicin de otras metodologas ex-perimentales y posibilidades de materiales para prevenir la degradacin.

    Tambin es de especial importancia el estudio de los materiales utilizados en conservacin y restauracin, in-vestigando sus propiedades qumicas y fsicas relacionadas con su estabilidad, buen comportamiento mec-nico y mnimas modifi caciones de color. La industria de los polmeros sintticos ha producido, a lo largo delas ltimas dcadas, muchos materiales que han resultado de aplicacin en conservacin. Su buen comporta-miento generalizado, sin embargo, no siempre ha ido de la mano de una informacin precisa sobre su com-posicin y una investigacin sobre su evolucin a medio y largo plazo, aspecto ste de gran importancia enmateriales destinados a la conservacin. Con el objetivo de precisar las caractersticas y adecuacin de estosmateriales para su uso en este mbito existe un proyecto de investigacin, codirigido por Margarita San An-drs, de la Universidad Complutense de Madrid, y Marisa Gmez, del Instituto del Patrimonio Cultural de Es-

    paa (CHRCOLES, 2009).

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    A partir de la dcada de 1970, la tcnica de refl ectografa infrarroja, basada en la investigacin de la tcnicapictrica por medio de la imagen recibida en el infrarrojo, se une a la radiografa, iniciada a principios de siglo,y que desde sus inicios se aplic a la investigacin de estructura y morfologa de obras de arte y arqueologa,adems de las imgenes fotogrfi cas en el rango visible que llevaban documentando bienes culturales desdemediados del siglo XIX (GABALDN, 2006). El creciente desarrollo de los sistemas informticos y los avancesen los algoritmos de tratamiento de imgenes y visin artifi cial no slo proveen de nuevos instrumentos deanlisis en el entorno del patrimonio cultural, sino que permite la mejora de los ya existentes (ANTELO, 2006).Estas mejoras implican una reduccin de costes haciendo la tecnologa accesible a un mayor nmero de res-

    tauradores, conservadores, historiadores de arte e investigadores en general (TORRES, 2008). Adems, estastcnicas de investigacin mediante la imagen no modifi can las propiedades fsicas o qumicas de las obras, nirequieren preparacin ni toma de muestras, por lo que constituyen un campo lleno de posibilidades en el m-bito de la innovacin en conservacin.

    La innovacin en la combinacin de todas estas imgenes, obtenidas tras su exposicin en diferentes rangosdel espectro, irrumpe con fuerza en la bibliografa de la ltima dcada con la aplicacin de la visin multies-pectral en el rango no visible al estudio de obras de arte, fundamentalmente pictricas. Desde un punto de vis-ta tecnolgico, a la aparicin de cmaras dotadas de sensores InGaAs se han unido las lentes multiespectra-les, que permiten el manejo de imgenes producidas en distintas longitudes de onda de una misma superfi cie,con resoluciones espectrales de dcimas de micra. Esto hace que algunos detalles de la obra aparezcan aisla-dos en la imagen porque su respuesta espectral depende del pigmento utilizado as como del grosor de la ca-pa pictrica. Dichos detalles, en una imagen de banda ancha, pueden pasar desapercibidos por estar enmas-carados con informacin de otra banda distinta.

    Esta apuesta innovadora es objeto de investigacin en un proyecto codirigido por Jos Manuel Menndez, delGrupo de Aplicacin de Telecomunicaciones Visuales (GATV) de la Universidad Politcnica de Madrid, y Arace-li Gabaldn y Toms Antelo, del Instituto del Patrimonio Cultural de Espaa.

    Otra lnea se dirige a la digitalizacin y la realidad virtual, que han revolucionado nuestra vida cotidiana y, enconsecuencia, son una tendencia generalizada que produce cada vez ms resultados aplicables al patrimonio.Las recomendaciones de la Unin Europea al respecto han sido claras, al manifestar que debe fomentarse ladigitalizacin del material de bibliotecas, archivos y museos. La accesibilidad en lnea de ese material permi-

    Arriba. Sistema para la captacin de imgenes en obras de gran formato. Actuacin en la iglesia de san Lorenzo de Toro (Zamora).Examen de reflectografa infrarroja. Fotografa: Toms Antelo.

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    tir que los ciudadanos de toda Europa accedan a l y lo utilicen para su ocio, sus estudios o su trabajo (UE,2006). Son muy numerosos los proyectos de digitalizacin de fondos documentales, fruto de iniciativas nacio-nales e internacionales, que permiten su consulta e investigacin con mayor facilidad y a ms personas inte-resadas, al mismo tiempo que se contribuye a una mejor preservacin de los originales. Por citar un proyec-to dedicado a la digitalizacin del patrimonio cultural, destaca, a nivel europeo, el conocido y muy consolida-do proyecto MINERVA (Ministerial Network for valorising activities in digitisation) (http://www.minervaeurope.org/), que emana de la iniciativa Europe de 1999 de la Comisin de la Unin Europea y ha sido fi nanciado des-de 2002 por el 5 y el 6 Programa Marco para la investigacin y el desarrollo. En otros tipos de colecciones,

    las reproducciones 3D de objetos deteriorados, que permiten la recreacin de los elementos que faltan, o lareproduccin fi el de obras, que permiten su difusin sin exponer al original a condiciones ambientales degra-dantes producidas por visitas masivas, son lneas de trabajo iniciadas hace dcadas. Hasta ahora, estos siste-mas estn ms dirigidos a proyectos de difusin social de los bienes culturales. En estos momentos, la innova-cin se basa en la mejora de la precisin, y por tanto, en la calidad de los resultados, as como en una mayoraccesibilidad y mejor almacenamiento de los mismos.

    No toda la innovacin tiene que venir por las posibilidades que los objetivos de la investigacin cientfi ca nosofrecen. Las herramientas que permiten su desarrollo e impulsan su continuidad son de gran importancia. LosPlanes Nacionales de I+D+i del Ministerio de Ciencia e Innovacin o de las correspondientes Consejeras delas Comunidades Autnomas, por ejemplo, propician el conocimiento mutuo de lneas prioritarias existentesy preguntas que buscan respuesta. No es slo un mecanismo de fi nanciacin de la investigacin, es, sobre to-do, un mecanismo de coordinacin, impulso y transferencia de conocimientos. Los grupos que se forman ba-jo esta iniciativa son conocidos por el resto de la comunidad cientfi ca, lo que propicia la optimizacin de re-cursos y sinergias.

    En esta lnea todava queda mucho trabajo por hacer. En ningn Plan de los mencionados aparecen el Patri-monio y su conservacin como lneas prioritarias. Aparece parcialmente como subprogramas en pocos casos,vinculado a arquitectura o a medio ambiente, pero sin reconocimiento unitario y sin que el verdadero objetivo

    Arriba. Tratamiento de imgenes radiogrficas en los laboratorios del IPCE. Fotografa: Jess Herrero.

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    vaya encaminado a la conservacin del patrimonio. Esta descoordinacin incide notablemente en los resulta-dos en nuestro pas, donde en comparacin con el valor de nuestro patrimonio histrico, el nmero de gruposde investigacin en su conservacin es muy escaso. No se trata de grupos que puntualmente desarrollan algnproyecto sobre el tema. Se trata de que estn consolidados, gocen de una trayectoria reconocida y estable, ycon presencia internacional. Y cuando as es, se debe ms al empeo y empuje de investigadores o profesio-nales de la conservacin, que no cejan en su convencimiento sobre la importancia de este trabajo, a pesar dela falta de motivacin que encuentran las estructuras de gestin a las que pertenecen.

    Un camino esperanzador es el emprendido en el Programa Campus de Excelencia Internacional (CEI), que esun eje principal de la EU2015, iniciativa del Gobierno de Espaa encaminada a la modernizacin de las univer-sidades espaolas. La reciente declaracin de CEI de La Moncloa en Madrid (http://www.ceicampusmoncloa.com), en la convocatoria de 2009, en el que una de las cinco reas de investigacin identifi cadas sea Patrimo-nio, es un hito importante. Supone una oportunidad que se debe aprovechar para alcanzar un mayor grado decolaboracin conjunta entre las universidades, los centros de investigacin, los museos e institutos de conser-vacin que lo integran, mejorando la competitividad y la presencia internacional de sus programas.

    Los pases de nuestro entorno, con las mismas inquietudes, buscan tambin soluciones, adaptadas en cadacaso a las posibilidades que su estructura administrativa les proporciona. Esta sinergia, cuyo resultado siem-pre es mejor que la suma de las partes, es un dinamizador de proyectos, posibilidades, novedades, en suma,innovacin en la conservacin, que en Espaa aprovechamos escasamente. Aunque no son muy numerosas,hay iniciativas europeas que impulsan la investigacin y la formacin especializada, en las que el papel de lainnovacin est al servicio del patrimonio y su conservacin. La colaboracin internacional permite el inter-cambio de novedosos mtodos y tcnicas para establecer buenas prcticas basadas en evidencias tecnolgi-cas y cientfi cas adecuadas.

    Algunos de los grupos que trabajan en conservacin de patrimonio apoyan sus proyectos en los programas plu-rianuales que la Unin Europea dedica a la investigacin, denominados Programas Marco de investigacin y de-sarrollo tecnolgico, que cofi nancian estas iniciativas. La contaminacin atmosfrica conjugada con la conser-vacin del medio ambiente, la gestin de riegos naturales como inundaciones e incendios, el turismo, son as-pectos relevantes en la conservacin que no tienen fronteras. Por ello, hay lneas especfi cas en los programaseuropeos que tratan estos temas y promueven que los estados miembros combinen sus esfuerzos y recursospara desarrollar estrategias comunes para la proteccin de sus bienes culturales. Por ejemplo, actualmente, seencuentra en vigor el 7 Programa Marco (http://cordis.europa.eu/fp7/home_es.html), que aunque sin contem-

    plar el patrimonio como tema especfi co, aparece mencionado en subapartados de Medio Ambiente y Clima.Tambin en el marco de la plataforma tecnolgica europea de la construccin, que tiene un apartado espec-fi co dedicado a la conservacin del patrimonio (http://www.ectp.org). Y programas como EUROMED HERITA-GE, actualmente en su cuarta edicin (2008 - 2012), inciden en la conservacin del patrimonio y su apropia-cin social, como una va de dilogo intercultural (http://www.euromedheritage.net/).

    Una slida esperanza para una mejor consideracin del patrimonio en los futuros programas marco es el re-ciente lanzamiento de la ERA-NET: NET-HERITAGE, European Network on Research Programme Applied to the Pro-tection of Tangible Cultural Heritage (http://www.netheritage.eu/), de la Comisin Europea, en la que participaEspaa. Sus objetivos son identifi car necesidades y carencias en la investigacin en conservacin de patrimo-nio, coordinar los programas de investigacin y desarrollo de los pases europeos y para el apoyo especfi co dela investigacin sobre la proteccin del patrimonio cultural, favorecer la cooperacin entre instituciones y pro-

    fesionales de la conservacin, crear una plataforma de difusin e intercambio de conocimientos y, en el futuro,lanzar una convocatoria europea de proyectos de investigacin en conservacin de patrimonio. La plataforma,denominada NET HERITGE OBSERVATORY(http://www.heritageportal.eu/index.php), ya est en funcionamien-to y permite que todos los profesionales o instituciones dedicados a la conservacin del patrimonio intercam-bien noticias, informacin, temas de inters y de investigacin, etc. Las reas temticas que cubre NET-HERITA-GE afectan tambin al desarrollo de programas nacionales futuros dedicados a la investigacin en Patrimonio.

    Continuando con las posibilidades de investigacin sobre innovacin en patrimonio desde la Unin Europea,su Consejo de Competitividad ha impulsado, durante el pasado ao 2009, el lanzamiento de una iniciativa deprogramacin conjunta, denominada Joint Programming Initiative (JPI), bajo el ttulo Cultural Heritage andGlobal Change: a new challenge for Europe. Este lanzamiento se deriva de la necesidad de un mayor recono-cimiento de este tema como una de las reas prioritarias que deben aparecer en los prximos programas de

    investigacin en Europa.

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    Esta misma iniciativa JPI ha ido acompaada de una Recomendacin de la Comisin Europea (Recomendacin2010/238/UE de la Comisin, de 26 de abril de 2010) Sobre la iniciativa de programacin conjunta de inves-tigacin Patrimonio cultural y cambio mundial: un nuevo desafo para Europa (DOUE L 106/18, 28.4.2010),publicada en el Diario Ofi cial de la Unin Europea de 28/04/2010, en la que se invita a los Estados Miembrosa incorporar diez medidas como parte de los programas estratgicos de investigacin, tres de las cuales reco-gen especfi camente la necesidad de innovacin:

    g) puesta en comn, cuando proceda, de las infraestructuras de investigacin existentes, creacin de nue-

    vos recursos, tales como bancos de datos coordinados, o desarrollo de modelos para el estudio de los pro-cesos de deterioro;h) fomento de una mejor colaboracin entre los sectores pblico y privado, as como de la innovacin abier-

    ta entre diversas actividades de investigacin y sectores empresariales relacionados con el patrimonio cul-tural; incluidos el turismo, el mantenimiento y la construccin o reconstruccin sostenibles de yacimien-tos, edifi cios o paisajes, y los servicios empresariales conexos;

    i) exportacin y difusin de conocimientos, innovacin y enfoques metodolgicos interdisciplinarios (UE,2010)

    La creacin de Redes y Asociaciones temticas es otra de las posibilidades que fomentan la cooperacin entrecentros de conservacin, universidades, centros de investigacin y empresas. Estas organizaciones facilitan elcontacto entre instituciones e investigadores, que fi nalmente incrementarn iniciativas conjuntas, el estable-cimiento de convenios de colaboracin, la coparticipacin en proyectos de investigacin nacionales e interna-cionales y el uso compartido de infraestructuras.

    En Espaa, destaca en este modelo la creacin de la Red Temtica de Patrimonio del CSIC (http://www.rtphc.csic.es/) que, en sus ya diez aos de andadura, ha sido capaz de aglutinar la actividad de diferentes grupos contrabajos en este campo y dar a conocer en sucesivas reuniones sus proyectos y resultados.

    Actualmente, est viviendo un proceso de reestructuracin, que obedece a una lnea ms actual y novedosa,en la que se da cabida a otros grupos que no pertenecen al CSIC, como museos, departamentos universitarios,Ministerio y Consejeras de Cultura, institutos de conservacin del patrimonio y empresas. Esta es su principalfortaleza, como aglutinador de la mayora de grupos de investigacin en conservacin de patrimonio en Espa-a, contribuyendo al intercambio y la transferencia de conocimientos entre los grupos y las empresas del sec-tor. Esta diversidad de entidades de distinto tipo es imprescindible para afrontar de manera adecuada un asun-

    to claramente interdisciplinar como es la conservacin del patrimonio cultural; pero adems, dada la distintanaturaleza jurdica y administrativa de todas estas instituciones, resulta importante que aumenten instrumen-tos de este tipo que ayuden a interconectar sus proyectos, recursos e intereses.

    Otra red profesional que goza de reconocimiento entre todos los profesionales de la conservacin es el GrupoEspaol del IIC (http://ge-iic.com/). Este grupo, creado en 1996, es una asociacin sin nimo de lucro que po-tencia la presencia y relacin del International Institute For Conservation Of Historic And Artistic Works (IIC) deLondres y los profesionales espaoles. Su compromiso con la formacin, la investigacin y la difusin resultanen la constante organizacin de congresos, reuniones, jornadas y preparacin de publicaciones profesionalessobre conservacin del patrimonio cultural.

    Precisamente sta es otra va que potencia la investigacin y la innovacin. La organizacin de actividades de

    encuentro e intercambio de intereses y potencialidades y el provecho que todos los mecanismos que la socie-dad de la informacin proporciona para potenciar el conocimiento mutuo. Estas posibilidades estn muchoms extendidas, lo que no siempre signifi ca un aumento de la calidad de los resultados. El exceso de informa-cin difundido en todas estas actividades es grande y difi culta la seleccin de lo ms relevante. La dispersinde las vas de comunicacin y publicacin de resultados es una constante. Artculos de inters sobre nuevosmateriales para la restauracin, por ejemplo, pueden encontrarse en numerosas revistas de diferentes ramasde la fsica, la qumica o la geologa, la mayora de ellas nunca consultadas por conservadores y restauradores.Sin embargo, aquellas que se dedican de forma especializada a la conservacin gozan de menos predicamen-to entre los investigadores, generalmente por su menor ndice de impacto. Las polmicas suscitadas por la la-bor de los revisores de los textos entregados para su publicacin, y la escasa inmediatez de la publicacin, sonproblemas que han propiciado respuestas innovadoras como las revistas electrnicas. Cada vez con ms fuer-za, y sometidas a la democrtica ley de control de calidad por la mayor cantidad de accesos recabados, van

    abrindose hueco entre las publicaciones cientfi cas de calidad.

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    Un camino de innovacin que no debe olvidarse transita en el rea de la gestin. A la gestin corresponde eluso de herramientas para la puesta en prctica de las lneas impulsadas por la direccin de un centro, basadaen los recursos humanos y sus capacidades (Tono, 2007).

    La identifi cacin acertada de los recursos existentes, humanos y tcnicos, es una labor primordial en la ges-tin. El modo en que esos recursos se utilizan permite una mejor adaptacin de los medios existentes a los fi -nes buscados, y es en este punto en el que la gestin puede ser una fuente de innovacin.

    En los ltimos aos, se estn produciendo, a escala internacional, importantes novedades en la estructura admi-nistrativa y organizativa de los centros dedicados a la conservacin del patrimonio. La pervivencia de las propiasinstituciones ha exigido una revisin crtica de su personalidad jurdica y funciones. En la actualidad, los grandesmuseos europeos estn vindose transformados en su gestin, as como centros de conservacin como el IRPAy el ISCR, los dos grandes modelos europeos que dieron pie al nacimiento de muchos de nuestros centros nacio-nales de conservacin. La direccin tomada apunta a una mayor autonoma y fl exibilidad administrativas, ma-yor excelencia profesional, reunifi cacin de centros, en todos los casos, con vista a la optimizacin de recursos ymejora de la competitividad. Se pretende con esto que la innovacin, la investigacin y los incentivos profesio-nales contribuyan a aumentar el prestigio de los centros y, con ello tambin, a fuentes de fi nanciacin diversas.

    Tambin en los centros e institutos de conservacin espaoles se estn produciendo cambios en la gestin pa-ra la consecucin de los objetivos pretendidos. Una actitud proactiva de las direcciones de los centros impul-sa iniciativas innovadoras.

    Arriba. Colocacin del equipo de fluorescencia de rayos X para la identificacin de los pigmentos empleados en una pintura sobre tela.Fotografa: Miriam Bueso.

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    Un ejemplo claro es la elaboracin de los Planes Nacionales, presentados y aprobados por el Consejo de Patri-monio, en el que estn presentes Gobierno Central y Comunidades Autnomas. Estos Planes se enmarcan endocumentos formales, consensuados por el Consejo de Patrimonio, que otorgan estabilidad a los desarrollosde los proyectos amparados en ellos y proyeccin profesional de los recursos humanos dedicados. Se convier-ten, por tanto, en herramientas tcnicamente consistentes, avaladas por los profesionales de los centros y sos-tenidas por un marco administrativo plurianual que asegura su continuidad. Uno de los Planes ms antiguos,con algo ms de diez aos de andadura, el Plan Nacional de Catedrales, ha demostrado sobradamente su ca-pacidad de impulso, coordinacin y fomento de la inversin. Otros le han ido siguiendo durante la ltima d-

    cada, como el de Patrimonio Industrial, Paisajes Culturales, Arquitectura Defensiva y el ms reciente de pro-teccin del Patrimonio Subacutico. El Consejo de Patrimonio sigue una intensa actividad en esta lnea, con laformacin de grupos de trabajo para impulsar y renovar los Planes existentes y defender otros nuevos Planesque amplen los benefi cios que la conservacin puede cosechar de esta frmula de gestin.

    Otros caminos dedicados a los medios de difusin pueden ser fuente de innovacin. El compromiso con lasociedad impulsa proyectos novedosos de mejora de la accesibilidad y eliminacin de barreras. La interacti-vidad con el ciudadano mediante herramientas electrnicas, propician una relacin ms directa entre el cen-tro de conservacin y la sociedad. La cercana, la existencia de un alguien que contesta al otro lado, huma-niza las instituciones y contribuyen a que el ciudadano se sienta ms copartcipe del patrimonio cultural co-mn. Esto es especialmente relevante en centros que no son de visita pblica, como los institutos de conser-vacin. Conscientes de esta situacin, han proliferado los videos colgados en la red, que permiten visualizar eltrabajo que se desarrolla en los centros y la participacin en redes sociales que, al mismo tiempo que mejoranlos canales de comunicacin sobre lneas prioritarias y en desarrollo, permiten un contacto directo e instant-neo de los ciudadanos con estos centros. Su presencia se convierte en ms real, conocida, cercana y accesible.

    ConclusinConclusinContamos con grandes posibilidades cientfi cas, tcnicas, de cooperacin y de gestin, para promover respues-tas novedosas, sostenibles y de calidad a los retos que la conservacin del patrimonio cultural nos presenta.El progreso y la innovacin pueden estimular el desarrollo de herramientas adecuadas para ofrecer a la socie-dad cauces sostenibles para la conservacin del patrimonio cultural. Tambin las difi cultades y carencias es-tn identifi cadas, as como herramientas para solventarlas. Tenemos un gran reto profesional y social, que re-quiere y requerir de mucho trabajo e imaginacin para asegurar que las generaciones futuras puedan disfru-tar y apasionarse por la conservacin y por el patrimonio cultural.

    Arriba. Toma de muestras en uno de los leones de la fuente de La Alhambra para el diagnstico de un posible biodeterioro.Fotografa: Carmen Tienza.

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    Arriba.Imagen SEM-SE de las eflorescencias de singenita desarrolladas sobre latn en el Mausoleo de Gayarre (El Roncal, Navarra).Fotografa: Jos V. Navarro.