10 Claves de La Educación

5/24/2018 10 Claves de La Educacin

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10 claves de la educacin

ndice

1. El misterio de la condicin humana

2. Los sentimientos

3. La familia

4. La autoridad

5. El arte de escuchar

6. La conciencia moral

7. Los medios de comunicacin

8. La gestin del placer9. El esfuerzo necesario

10. Sentido comn y buen humor

Este libro responde a una pregunta en la que nos jugamos todo, o casi todo: Qu es educar?

Nace de una conferencia que suelo repetir en Espaa y Amrica. Tal vez sea el libro que una

madre preocupada y un profesor desanimado podran ofrecer a un hijo o a un alumno, con

esta serena propuesta: Creo que esto es educar, y es lo que me gustara hacer por ti.

Tambin puede ser ledo por jvenes, pues ellos son los protagonistas de estos captulos que

abordan 10 puntos esenciales de su educacin.Sinopsis:

Un libro que aborda, de modo sencillo y ofreciendo soluciones prcticas, la respuesta a una

pregunta en la que nos jugamos todo, o casi todo: Qu es educar? Este libro nace deunas conferencias de gran xito que el autor imparte en Espaa y Amrica. Es el libro que

una madre preocupada y un profesor desanimado podran ofrecer a un hijo o a un alumno,

con esta serena propuesta: "Creo que esto es educar, y es lo que me gustara hacer por ti".
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Un texto sencillo, para padres y profesores que buscan soluciones prcticas. Para lectores

con poco tiempo. Y tambin para jvenes, pues son protagonistas de estos captulos queabordan 10 puntos esenciales en toda educacin: 1. La condicin humana 2. Los

sentimientos 3. La familia 4. La autoridad 5. El arte de escuchar 6. La conciencia moral 7.

Los medios de comunicacin 8. La gestin del placer 9. El esfuerzo necesario 10. El

sentido comn y el buen humor Jos Ramn Aylln -www.jrayllon.es- escribe libros de

texto y ensayos de tica y filosofa, es autor de varias novelas juveniles y pronuncia

conferencias sobre el arte de educar.

10 CLAVES DE LA EDUCACIN

LUNES 13 DE ABRIL DE 2009

10 claves de la educacin

La educacin ha sido siempre problemtica, y quiz hoy ms que nunca. Jos Ramn Aylln nos

proponee 10 claves que pretenden aportar un poco de luz y algunas soluciones, desde la

experiencia de un profesor que puede decir el siguiente axioma: "El que no haya sufrido como yo,

que no me d consejos".

1. El misterio de la condicin humana

Lo primero que nos plantea la educacin es una gran interrogacin sobre s misma: qu es

educar? Sabemos que se trata de una accin compleja que se ejerce sobre el ser humano

para ayudarle precisamente a ser humano. Pero eso exige que seamos capaces de

responder a la gran pregunta previa: quin es el hombre? La permanente dificultad de la

tarea educativa deriva, en primer lugar, del desconocimiento que tenemos de nosotros

mismos.

La disparidad de visiones de la vida y de modelos educativos es un hecho, pero tambin es

un hecho la naturaleza humana, y su lectura correcta ser la garanta de que dichos

modelos son autnticos. El ser humano es un peculiar animal de naturaleza racional, social,

moral y sentimental. En consecuencia, su educacin ser el desarrollo lgico de esos

rasgos constitutivos.

2. Los sentimientos

El arte de educar requiere amor por parte de los padres y afecto por parte de los profesores.

Sin embargo, por un olvido histrico de esta dimensin sentimental, la educacin -en lafamilia y en la escuela- ha pecado de severidad y autoritarismo.

Los romanos recordaban su paso por las aulas como unos aos perdidos en reiteraciones y


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torpes balbuceos, puntualizados por crueles castigos. Griegos y romanos no ignoraron el

laberinto sentimental que nos constituye, pero lo redujeron a un problema de dominio de s,segn el ideal estoico. Hoy sabemos que la excelencia educativa es imposible sin atencin a

los sentimientos. Una atencin que -ms all de la disciplina estoica- podramos resumir en

"exigir con afecto".

3. La familia

Entre los rasgos esenciales de la familia figuran la comunidad de vida, los lazos de sangre,

una unin basada en el amor, con tres fines fundamentales y de mxima importancia:

proporcionar a sus miembros bienes necesarios para su vida, criar y educar a los hijos, y

ser "clula-madre" de la sociedad.

Sin familia, la especie humana no es viable, ni siquiera biolgicamente. Un nio, una

anciana, un hombre enfermo, no se valen por s mismos y necesitan un hogar donde poder

vivir, amar y ser amados, alimentados, cuidados. El hombre es un ser social y, por

consiguiente, familiar; precisamente porque nace, crece y muere necesitado. Adems, todo

hombre es siempre hijo, y esa condicin es tan radical e irrefutable como el hecho de ser

varn o mujer.

4. La autoridad

Decir que toda educacin requiere autoridad es casi una afirmacin de perogrullo, aunque

conviene matizar que autoridad no es el autoritarismo de la violencia fsica o la humillacin,

sino el prestigio capaz de garantizar un orden bsico. Para lograr una buena formacin

humana se precisa fundamentalmente y en primer lugar una informacin moral sobre lo que

est bien y lo que est mal, para que la norma de conducta no sea la ausencia de toda

norma, el todo vale.

En el magnfico ensayo Los lmites de la educacin, Mercedes Ruiz Paz explica que la

autoridad supone transmitir la obligatoriedad de unas pautas y valores fundamentales, de

unos criterios que ayudarn a construir personalidades equilibradas, capaces de obrar con

libertad responsable. De lo contrario, nos daramos de bruces con el incmodo panorama

que la misma autora describe: "La moderna pedagoga nos ha enseado, con una didctica

demoledora, cmo la tolerancia ilimitada, la permisividad extrema y, en definitiva, la

educacin sin lmites garantizan la educacin en y para la impunidad".

5. el arte de escuchar


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Para educar hay que escuchar. A quines? A los que van a ser educados. Por qu?Porque no son muebles, sino seres humanos, inteligentes y libres, protagonistas de su

propia educacin.

Escuchar es un arte porque a veces no es sencillo saber cundo y de qu manera debemos

hacerlo, ni cmo hemos de proceder a continuacin. Como criterio general, podemos

admitir que el dilogo educativo ha de presuponer buscar y aceptar siempre la verdad. De

ah que la necesidad de escuchar no equivalga a una educacin por consenso, pues el

mutuo acuerdo no crea el bien ni la verdad.

Hay cuestiones que no se pueden discutir y pactar, es decir, no son negociables. Un

profesor ha de escuchar a sus alumnos, pero el contenido de su asignatura no lo deciden

entre todos. Un mdico debe escuchar a sus pacientes, pero su diagnstico no lo pacta con

ellos, como tampoco el juez pacta su sentencia con el acusado.

6. La conciencia moral

La educacin de la conciencia es ingrediente fundamental de la buena educacin, pues

educar es -en esencia- ensear a distinguir el bien y el mal. Los animales no tienen

conciencia, pero el ser humano es animal racional, y esta caracterstica le permite poseer la

capacidad de emitir juicios tcnicos, estticos, morales... La conciencia moral es

precisamente la que juzga la bondad de los actos propios o ajenos: no el bien o el mal que

nos permite afirmar que eres buen dibujante o mal tenista, sino buena persona o mala

persona.

Nuestras propias acciones nos afectan de muy distinta forma: lavarse la cara slo afecta a la

exterioridad de la cara, pero robar, matar o mentir nos afecta en profundidad. Esas acciones

que afectan al ncleo de la persona son las que sopesa la conciencia. Si la razn no impone

su ley, se impone la ley de la selva, la sinrazn. Y entonces no vivimos como seres

humanos, sino como monos con pantalones. sa parece la alternativa: conciencia o selva.

7. Los medios de comunicacin

Con sus cuatro ramificaciones en forma de prensa, radio, televisin e internet, los medios de

comunicacin producen una catarata constante de noticias que se transmiten por todo el mundocon velocidad de vrtigo. Por eso, las empresas informativas son mucho ms que un servicio

pblico o un buen negocio, pues nos sumergen en su marea de noticias hasta llenar cada poro y

cada fisura de nuestra conciencia.


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Esa urgencia informativa, adems de marear a la sufrida audiencia, relativiza cualquier importanciaobjetiva porque concede el mismo tiempo a lo grave y a lo trivial: al magnicidio y al parto de

cuatrillizos, a los saltos de la ciencia y a los del atleta, al Apocalipsis y al dolor de cabeza. Ensear

a cribar y a poner en su sitio esa avalancha de noticias es uno de los cometidos de toda educacin

de calidad.

8. La gestin del placer

Por ser animal racional, el ser humano tiende por naturaleza al placer: un resorte con tal

protagonismo en nuestra conducta, que ya los griegos pensaron que la buena educacin poda

resumirse en ensear al nio y al joven qu hacer frente a l. En concreto, explicarles qu placeres

son positivos y en qu medida, qu placeres son peligrosos y deben evitarse, y al mismo tiempo

educar su voluntad para llevar las riendas de la propia vida sin dejarse arrastrar por el hedonismo.

Esa enseanza apunta a una virtud absolutamente necesaria para el crecimiento educativo: el

dominio de s. Pero al sistema capitalista le interesa que estemos abducidos por el consumo, por

un estilo de vida permisivo e indulgente que impide la madurez personal y suele generar una de las

mayores hipotecas vitales que se pueden padecer.

Sabemos perfectamente que el gran peligro de algunos placeres estriba en su posibilidad real de

crear adiccin, hasta el punto de dar origen a dos de los tres negocios ms lucrativos del mundo: la

explotacin comercial de la droga y del sexo. Una posibilidad cada vez ms cercana y asequible al

mundo de los jvenes.

9. El esfuerzo necesario

La necesidad de esforzarse no perdona a nadie. Shakespeare nos dice que lloramos al nacer por

la tristeza de emprender la estpida comedia de la vida. Para Jos Antonio Marina, la cara

enfurruada de un recin nacido pone de manifiesto su extraeza por encontrarse de repente en el

mundo. Ha sido expulsado de una burbuja confortable, del pequeo y clido mar donde ha flotado

nueve meses, y ahora tiene que hacerse cargo de un mundo duro y sin filtros protectores.

Para manejarse en la vida real, ese ser hermosamente torpe necesitar el esfuerzo constante del

aprendizaje: muchos meses para echar a andar, aprender a vestirse, atarse los zapatos y coger al

vuelo una pelota. Por fortuna, sus imprecisos ensayos y tanteos quedarn grabados en sumemoria muscular, y cada nuevo movimiento ser corregido y afinado desde la ltima posicin

ganada. Diez aos ms tarde, esa patosa criatura podr dominar varios idiomas y ganar -si es

nia- una medalla olmpica en gimnasia rtmica.


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Ningn profesional de la enseanza desconoce la incidencia educativa de los hbitos. Al igual queuna golondrina no hace verano, un acto aislado no constituye un modo de ser. Pero su repeticin

bien puede lograrlo. Por eso se ha dicho que quien siembra actos recoge hbitos, y quien siembra

hbitos cosecha su propio carcter.

10. El sentido comn

El sentido comn viene a ser un tipo de sabidura prctica, capaz de englobar e integrar las nueve

claves que hemos desarrollado desde el inicio de este artculo. Sera imposible recoger por escrito

las innumerables soluciones educativas del buen sentido, pero un buen da encontr su resumen

perfecto en la red, como un tesoro a la deriva informtica. Lo firmaba Teresa de Calcuta, y deca lo

que sigue:

10 claves de la educacin23 abril 2009Moral y LucesDeja un comentarioGo to comments

jueves, 23 de abril de 2009Jos Ramn Aylln

SerYPersona.blogspot.com

La educacin ha sido siempre problemtica, y quiz hoy ms que nunca.Jos Ramn

Ayllnnos propone 10 claves que pretenden aportar un poco de luz y algunas

soluciones, desde la experiencia de un profesor que puede decir el siguiente axioma: El

que no haya sufrido como yo, que no me d consejos.1. El misterio de la condicin humana

Lo primero que nos plantea la educacin es una gran interrogacin sobre s misma: qu eseducar? Sabemos que se trata de una accin compleja que se ejerce sobre el ser humano paraayudarle precisamente a ser humano. Pero eso exige que seamos capaces de responder a lagran pregunta previa: quin es el hombre? La permanente dificultad de la tarea educativaderiva, en primer lugar, del desconocimiento que tenemos de nosotros mismos.

La disparidad de visiones de la vida y de modelos educativos es un hecho, pero tambin es unhecho la naturaleza humana, y su lectura correcta ser la garanta de que dichos modelos sonautnticos. El ser humano es un peculiar animal de naturaleza racional, social, moral ysentimental. En consecuencia, su educacin ser el desarrollo lgico de esos rasgosconstitutivos.

2. Los sentimientosEl arte de educar requiere amor por parte de los padres y afecto por parte de los profesores. Sinembargo, por un olvido histrico de esta dimensin sentimental, la educacin -en la familia y en

la escuela- ha pecado de severidad y autoritarismo.Los romanos recordaban su paso por las aulas como unos aos perdidos en reiteraciones ytorpes balbuceos, puntualizados por crueles castigos. Griegos y romanos no ignoraron ellaberinto sentimental que nos constituye, pero lo redujeron a un problema de dominio de s,segn el ideal estoico. Hoy sabemos que la excelencia educativa es imposible sin atencin a los
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sentimientos. Una atencin que -ms all de la disciplina estoica- podramos resumir en exigircon afecto.

3. La familiaEntre los rasgos esenciales de la familia figuran la comunidad de vida, los lazos de sangre, unaunin basada en el amor, con tres fines fundamentales y de mxima importancia: proporcionar asus miembros bienes necesarios para su vida, criar y educar a los hijos, y ser clula-madre dela sociedad.

Sin familia, la especie humana no es viable, ni siquiera biolgicamente. Un nio, una anciana, unhombre enfermo, no se valen por s mismos y necesitan un hogar donde poder vivir, amar y seramados, alimentados, cuidados. El hombre es un ser social y, por consiguiente, familiar;precisamente porque nace, crece y muere necesitado. Adems, todo hombre es siempre hijo, yesa condicin es tan radical e irrefutable como el hecho de ser varn o mujer.

4. La autoridadDecir que toda educacin requiere autoridad es casi una afirmacin de perogrullo, aunque

conviene matizar que autoridad no es el autoritarismo de la violencia fsica o la humillacin, sinoel prestigio capaz de garantizar un orden bsico. Para lograr una buena formacin humana seprecisa fundamentalmente y en primer lugar una informacin moral sobre lo que est bien y loque est mal, para que la norma de conducta no sea la ausencia de toda norma, el todo vale.

En el magnfico ensayo Los lmites de la educacin, Mercedes Ruiz Paz explica que la autoridadsupone transmitir la obligatoriedad de unas pautas y valores fundamentales, de unos criteriosque ayudarn a construir personalidades equilibradas, capaces de obrar con libertadresponsable. De lo contrario, nos daramos de bruces con el incmodo panorama que la mismaautora describe: La moderna pedagoga nos ha enseado, con una didctica demoledora, cmo

la tolerancia ilimitada, la permisividad extrema y, en definitiva, la educacin sin lmitesgarantizan la educacin en y para la impunidad.5. El arte de escucharPara educar hay que escuchar. A quines? A los que van a ser educados. Por qu? Porque noson muebles, sino seres humanos, inteligentes y libres, protagonistas de su propia educacin.

Escuchar es un arte porque a veces no es sencillo saber cundo y de qu manera debemoshacerlo, ni cmo hemos de proceder a continuacin. Como criterio general, podemos admitir queel dilogo educativo ha de presuponer buscar y aceptar siempre la verdad. De ah que lanecesidad de escuchar no equivalga a una educacin por consenso, pues el mutuo acuerdo nocrea el bien ni la verdad.

Hay cuestiones que no se pueden discutir y pactar, es decir, no son negociables. Un profesor hade escuchar a sus alumnos, pero el contenido de su asignatura no lo deciden entre todos. Unmdico debe escuchar a sus pacientes, pero su diagnstico no lo pacta con ellos, como tampocoel juez pacta su sentencia con el acusado.

6. La conciencia moralLa educacin de la conciencia es ingrediente fundamental de la buena educacin, pues educar es-en esencia- ensear a distinguir el bien y el mal. Los animales no tienen conciencia, pero el ser

humano es animal racional, y esta caracterstica le permite poseer la capacidad de emitir juiciostcnicos, estticos, morales La conciencia moral es precisamente la que juzga la bondad de los

actos propios o ajenos: no el bien o el mal que nos permite afirmar que eres buen dibujante omal tenista, sino buena persona o mala persona.


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Nuestras propias acciones nos afectan de muy distinta forma: lavarse la cara slo afecta a laexterioridad de la cara, pero robar, matar o mentir nos afecta en profundidad. Esas acciones que

afectan al ncleo de la persona son las que sopesa la conciencia. Si la razn no impone su ley,se impone la ley de la selva, la sinrazn. Y entonces no vivimos como seres humanos, sino comomonos con pantalones. sa parece la alternativa: conciencia o selva.

7. Los medios de comunicacinCon sus cuatro ramificaciones en forma de prensa, radio, televisin e internet, los medios decomunicacin producen una catarata constante de noticias que se transmiten por todo el mundocon velocidad de vrtigo. Por eso, las empresas informativas son mucho ms que un serviciopblico o un buen negocio, pues nos sumergen en su marea de noticias hasta llenar cada poro ycada fisura de nuestra conciencia.

Esa urgencia informativa, adems de marear a la sufrida audiencia, relativiza cualquierimportancia objetiva porque concede el mismo tiempo a lo grave y a lo trivial: al magnicidio y alparto de cuatrillizos, a los saltos de la ciencia y a los del atleta, al Apocalipsis y al dolor decabeza. Ensear a cribar y a poner en su sitio esa avalancha de noticias es uno de los cometidos

de toda educacin de calidad.

8. La gestin del placerPor ser animal racional, el ser humano tiende por naturaleza al placer: un resorte con talprotagonismo en nuestra conducta, que ya los griegos pensaron que la buena educacin podaresumirse en ensear al nio y al joven qu hacer frente a l. En concreto, explicarles quplaceres son positivos y en qu medida, qu placeres son peligrosos y deben evitarse, y almismo tiempo educar su voluntad para llevar las riendas de la propia vida sin dejarse arrastrarpor el hedonismo.

Esa enseanza apunta a una virtud absolutamente necesaria para el crecimiento educativo: eldominio de s. Pero al sistema capitalista le interesa que estemos abducidos por el consumo, porun estilo de vida permisivo e indulgente que impide la madurez personal y suele generar una delas mayores hipotecas vitales que se pueden padecer.

Sabemos perfectamente que el gran peligro de algunos placeres estriba en su posibilidad real decrear adiccin, hasta el punto de dar origen a dos de los tres negocios ms lucrativos delmundo: la explotacin comercial de la droga y del sexo. Una posibilidad cada vez ms cercana yasequible al mundo de los jvenes.

9. El esfuerzo necesarioLa necesidad de esforzarse no perdona a nadie. Shakespeare nos dice que lloramos al nacer porla tristeza de emprender la estpida comedia de la vida. Para Jos Antonio Marina, la caraenfurruada de un recin nacido pone de manifiesto su extraeza por encontrarse de repente enel mundo. Ha sido expulsado de una burbuja confortable, del pequeo y clido mar donde haflotado nueve meses, y ahora tiene que hacerse cargo de un mundo duro y sin filtrosprotectores.

Para manejarse en la vida real, ese ser hermosamente torpe necesitar el esfuerzo constante delaprendizaje: muchos meses para echar a andar, aprender a vestirse, atarse los zapatos y coger

al vuelo una pelota. Por fortuna, sus imprecisos ensayos y tanteos quedarn grabados en sumemoria muscular, y cada nuevo movimiento ser corregido y afinado desde la ltima posicinganada. Diez aos ms tarde, esa patosa criatura podr dominar varios idiomas y ganar -si esnia- una medalla olmpica en gimnasia rtmica.


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Ningn profesional de la enseanza desconoce la incidencia educativa de los hbitos. Al igualque una golondrina no hace verano, un acto aislado no constituye un modo de ser. Pero su

repeticin bien puede lograrlo. Por eso se ha dicho que quien siembra actos recoge hbitos, yquien siembra hbitos cosecha su propio carcter.

10. El sentido comnEl sentido comn viene a ser un tipo de sabidura prctica, capaz de englobar e integrar lasnueve claves que hemos desarrollado desde el inicio de este artculo. Sera imposible recoger porescrito las innumerables soluciones educativas del buen sentido, pero un buen da encontr suresumen perfecto en la red, como un tesoro a la deriva informtica. Lo firmaba Teresa deCalcuta, y deca lo que sigue:

El da ms bello: hoy.La cosa ms fcil: equivocarse.El obstculo ms grande: el miedo.La raz de todos los males: el egosmo.La distraccin ms bella: el trabajo.

La peor derrota: el desaliento.Los mejores maestros: los nios.La primera necesidad: comunicarse.La mayor felicidad: ser til a los dems.El regalo ms bello: el perdn.Lo ms imprescindible: el hogar.El arma ms eficaz: la sonrisa.El mejor remedio: el optimismo.La fuerza ms poderosa: la fe.Los seres ms necesitados: los padres.Lo ms hermoso de todo: el amor.

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10 claves para una educacin de calidad

La educacin es un proceso con mltiples direcciones e influencias constantes mediante el

cual las personas construyen aprendizajes globales sobre valores, conductas, conocimientos,

saberes, etc. Este es un proceso permanente que comienza en el nacimiento, se desarrolla en

los primeros aos y se contina a lo largo de toda la vida sobre estas primeras bases.

El objetivo es el desarrollo global e integral de la persona. Es por ello que la educacin va a

determinar el tipo de persona en que se convertirn los pequeos y va a contribuir a su

felicidad futura.

Nuestro papel como educadores es muy importante para el desarrollo sano y feliz de los

pequeos. Es normal que ante esta responsabilidad los adultos, nos encontremos en

ocasiones con mltiples interrogantes sobre cul es la mejor manera de educar a los nios y

nias, debemos reirles, permitirles, mimarles, ser estrictos? Queremos que sean personas

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felices, seguras de s mismas, con autoestima y confianza, capaces de conseguir sus metas y

afrontar sus problemas, pero no sabemos cul es la frmula para lograrlo.

Educacin efectiva

No existe ninguna frmula mgica, y la educacin supone una relacin entre personas, por lo

tanto este proceso siempre va a ser variable, dependiendo del tipo de persona se creara un

tipo u otro de relacin con diferentes problemticas e implicaciones. Es fundamental conocer

unas pautas generales, mantener la calma y sobre todo siempre ofrecer un clima de cario,

confianza y seguridad para que la educacin sea efectiva.

MITOS SOBRE LA EDUCACIN

Existen muchos mitos, sin fundamentacin pedaggica sobre cmo debemos educar a

nuestros pequeos, veamos los ms comunes.

Se debe castigar en todo momento y dar un cachete a tiempo. Esta idea es muy comn,

debemos tener en cuenta diferentes pautas para que el castigo sea efectivo y no aplicarlo

en todo momento. Ms que castigo debemos hablar de consecuencia negativa a una

accin determinada, pero nunca debemos emplearlo para hacer sentir mal al pequeo y

nunca nunca debemos emplear violencia fsica o psicolgica. Esto puede afectar a la

autoestima del nio y no le hacemos entender el porqu debe actuar de determinada

manera.

Si el nio tiene su carcter poco podemos hacer para cambiarlo seguir comportndose

de determinada forma. Es cierto que cada persona tiene su propio carcter y su propio

repertorio de conductas. Pero en primer lugar el carcter es una cosa y las conductas se

aprenden, por lo tanto si podemos cambiar el comportamiento y en cuanto al carcter

podemos comprenderlo y hacer que los pequeos que se conozcan y se comprendan.

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Cualquier conflicto con los nios es malo. Esta es otra idea muy extendida, pero tambin

es errnea. Los conflictos son una oportunidad para el desarrollo y el aprendizaje. El

truco es ver el conflicto de esta forma y no de manera negativa. Podemos transformar el

conflicto en una experiencia positiva de la que todos aprendemos.

Es mejor evitarles problemas y sufrimientos a los nios. No se trata de procurarles

problemas, pero para que crezcan sanos han de aprender a solucionar y afrontar

problemas de forma constructiva. Evitando los problemas los nios crecen en una ilusin

y cuando tengan que buscar soluciones no sabrn hacerlo, teniendo repercusiones

emocionales importantes.

10 CLAVES PARA UNA EDUCACIN EFECTIVA

1. Cario y comprensin. En todo momento ofrece un ambiente de cario y comprensin.

Crea un clima donde predominen los afectos y no se sientan juzgados. Mustrales tu

aprecio en todo momento, los gestos de cario y afecto son fundamentales para el

desarrollo afectivo de los pequeos. Se sentirn queridos y comprendidos, esto

fortalecer su autoestima y su confianza.

2. Disciplina. Los pequeos estn aprendiendo a comportarse y formando su personalidad,

es comn que pongan a prueba y experimenten lo que pueden hacer. Es fundamental

ponerles unas normas, les aporta seguridad y un conocimiento sobre lo que pueden y no

pueden hacer.

3. Coherencia. Lo importante de las pautas educativas que sigamos y las normas que

establezcamos, es que sean coherentes. Debemos mantener una coherencia entre lo que

se dice y lo que se hace, entre lo que hacen y dicen los diferentes educadores (todos han

de seguir las mismas normas y pautas) y por ultimo esta coherencia debe ser vlida para

todos los das y momentos.

4. Constancia. La constancia nos va a servir para consolidar los aprendizajes. Se trata de

repetir con paciencia y firmeza. La constancia les aporta tranquilidad, se mostraran ms

receptivos y disciplinados.

5. Ejemplo. Como padres y educadores, los adultos servimos de modelo para los ms

pequeos, debemos tener esto en cuenta y actuar con el ejemplo.

6. Educacin emocional. No descuides la educacin emocional, es imprescindible para el

desarrollo sano de los nios y nias. Presta atencin al desarrollo de sus habilidades

sociales y personales como autoestima, autocontrol, empata, asertividad, etc.

7. Confianza. Aprtale confianza en si mismo. Debemos dejar que los pequeos se

enfrenten a las dificultades y las superen por si mismo. Es fundamental que perciban que

creemos en ellos, si nosotros confiamos en ellos, ellos confiarn en si mismos.

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8. Comunicacin, escucha y dialogo. La comunicacin efectiva va estrechamente unida a la

educacin. Para educar debemos conocer a las personas que educamos y la mejor

manera de conocer es comunicarnos. Fomenta los dilogos y escucha lo que los

pequeos nos dicen y comunican.

9. Tiempo y juego. Dedcales tiempo, han de sentirse atendidos y saber que tienes tiempo

para ellos. Busca parte de ese tiempo para jugar con ellos; el juego es fundamental en la

infancia y tiene importantes beneficios en todas las edades. A travs del juego nos

distendimos y estrechamos vnculos afectivos, adems de suponer una oportunidad

excelente para el aprendizaje y desarrollo.

10. Limites. Establece lmites claros y consensuados. Los nios y nias deben aprender que

no todo vale. Es nuestra funcin ponerles los lmites.

DIEZ CLAVES DE LA EDUCACION(EN PAPEL)JOSE RAMON AYLLON VEGA, STYRIA, 2005ISBN 9788493469108DATOS DEL LIBRO

N de pginas:225 pgs.

Encuadernacin:Tapa blanda

Editoral:STYRIA

Lengua:CASTELLANO

ISBN:9788493469108

1402libros de Historia y filosofa de la educacin

RESUMEN DEL LIBRO

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Tal vez ste sea el libro que una madre preocupada y un profesor desbordado podran ofrecer a unhijo o a un alumno, con esta serena propuesta: "Creo que esto es educar, y es lo que me gustara

hacer por ti".He procurado un texto sencillo, para padres y profesores que buscan solucionesprcticas. Para lectores con poco tiem po. Y tambin para jvenes, pues son protagonistas deestos captulos que abordan diez puntos esenciales en toda educacin:La condicin humanaLossentimientosEl arte de escucharEl esfuerzo necesarioLa conciencia moralEl sentido comn y elbuen humorLa familiaLos medios de comunicacinLa autoridadLa gestin del placer
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10 Claves de La Educación